CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E...

29
CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E HISTORIADOR DE LA MEDICINA* Por el Dr. Gregorio Delgado García INTRODUCCION La Sociedad Cubana de Historia de la Medicina al celebrar su 2da sesión extraordinaria, después del reinicio de sus actividades el 3 de junio de 1974, ha querido rendir con ella merecido homenaje de recordación a su miembro titular fallecido y primer secretario, Académico César Rodríguez Expósito, eminente historiador de la medicina cubana, quien fuera uno de los primeros en concebir la idea de su fundación y de hacerla realidad en un medio completamente indiferente, cuando no hostil a toda empresa cultural, como lo era nuestro país en 1955. Nadie como él es merecedor de este homenaje póstumo, porque a su espíritu creador y a su entusiasmo, nunca decaído por las investigaciones históricas en el campo de nuestra medicina, debemos la existencia de esta institución en su primera etapa durante 6 años, y la supervivencia de su revista aun con incontables sacrificios y penalidades. Desde su cargo de secretario fue el promulgador de la Sociedad en el ámbito internacional, apoyándose para ello, en la mayoría de las veces, en sus relaciones personales con grandes figuras de la historiografía médica mundial. Su prestigio indiscutido de hombre de letras que le ganó reconocimiento académico dentro y fuera de Cuba y por sobre todo su exquisita modestia tan rara en estos casos, y su extraordinaria hombría de bien y limpia vida le hicieron factor aglutinante dentro de la corporación, cosa ésta indispensable para el desarrollo exitoso de cualquier institución cultural. Y no pudo ser mejor elegido el momento para el homenaje que en este año 1977, en que se cumple un 4to de siglo de la fundación de su obra más grandiosa y querida: los Cuadernos de Historia de la Salud Pública. *Trabajo leído en la sesión extraordinaria de la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina el 18 de febrero de 1977.

Transcript of CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E...

Page 1: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E HISTORIADOR DE LA MEDICINA*

Por el Dr. Gregorio Delgado García

INTRODUCCION

La Sociedad Cubana de Historia de la Medicina al celebrar su 2da sesión extraordinaria, después del reinicio de sus actividades el 3 de junio de 1974, ha querido rendir con ella merecido homenaje de recordación a su miembro titular fallecido y primer secretario, Académico César Rodríguez Expósito, eminente historiador de la medicina cubana, quien fuera uno de los primeros en concebir la idea de su fundación y de hacerla realidad en un medio completamente indiferente, cuando no hostil a toda empresa cultural, como lo era nuestro país en 1955.

Nadie como él es merecedor de este homenaje póstumo, porque a su espíritu creador y a su entusiasmo, nunca decaído por las investigaciones históricas en el campo de nuestra medicina, debemos la existencia de esta institución en su primera etapa durante 6 años, y la supervivencia de su revista aun con incontables sacrificios y penalidades.

Desde su cargo de secretario fue el promulgador de la Sociedad en el ámbito internacional, apoyándose para ello, en la mayoría de las veces, en sus relaciones personales con grandes figuras de la historiografía médica mundial.

Su prestigio indiscutido de hombre de letras que le ganó reconocimiento académico dentro y fuera de Cuba y por sobre todo su exquisita modestia tan rara en estos casos, y su extraordinaria hombría de bien y limpia vida le hicieron factor aglutinante dentro de la corporación, cosa ésta indispensable para el desarrollo exitoso de cualquier institución cultural.

Y no pudo ser mejor elegido el momento para el homenaje que en este año 1977, en que se cumple un 4to de siglo de la fundación de su obra más grandiosa y querida: los Cuadernos de Historia de la Salud Pública. *Trabajo leído en la sesión extraordinaria de la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina el 18 de febrero de 1977.

Page 2: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 7

Esta publicación que alcanza ya 60 volúmenes y que lamentablemente no

mantiene en la actualidad la frecuencia de aparición que había alcanzado con el triunfo de nuestra Revolución, está considerada por su calidad y seriedad como una de las publicaciones cubanas de más prestigio internacional.

Es ella, sin lugar a dudas, el aporte más sostenido y calificado que ha recibido nuestra bibliografía histórico médica en todos los tiempos, y si su obra personal en este campo y en el de las letras en general no fuera tan considerable, nos atreveríamos a decir que ella sola bastaría para hacer a César Rodríguez Expósito inolvidable en la historia de nuestra cultura.

Sin embargo, no es esto enteramente exacto: su obra como periodista, dramaturgo, crítico literario e historiador en general es de tal envergadura que no puede ser eclipsada por ninguna otra de sus actividades, por importantes que éstas sean.

En las páginas siguientes trataremos de dar una idea de la magnitud de esta labor de creación, de su importancia en nuestras letras y de cómo ha sido reconocida y premiada en Cuba y en el extranjero.

* En estos momentos ya alcanza el número de 69 y mantienen nuevamente el

ritmo de apariencias deseado.

Page 3: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

8 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

APRENDIZAJE DIRIGIDO Y AUTODIDACTISMO CULTURAL

En el pueblo de Rodas actual provincia de Cienfuegos nace César Rodríguez Expósito el 10 de julio de 1904. Poco tiempo sin embargo vivirá en este lugar, pues a los 40 días de su nacimiento la familia se traslada para La Habana y es en esta ciudad donde transcurrirá toda su existencia.

Durante su niñez tiene la oportunidad de asistir a reputados colegios privados de la capital algunos de carácter religioso como la Escuela de los Hermanos Cristianos, los colegios de Belén, Hermanos de La Salle, y de los P. P. Agustinos y otros de carácter laico como la escuela del Centro Asturiano y la de la Asociación de Dependientes del Comercio de La Habana.

Llama poderosamente la atención la diversidad de centros educacionales a los que concurre por lo que un pedagogo de tanta experiencia, que por añadidura impartió conocimientos en 2 de esos colegios, el historiador y profesor Manuel I. Mesa Rodríguez deja escrito al contestar su discurso de ingreso como académico de número en la Academia de la Historia de Cuba, lo siguiente: «El antecedente sería muy interesante para hacer un estudio psicológico de César Rodríguez, pues los que hemos ejercido el magisterio en Cuba durante cerca de 40 años, como yo, sabemos los métodos y procedimientos de cada uno de estos centros de aprendizaje, especialmente en la época en que a él le tocó ser alumno. Habría que basarse, desde luego, en 2 principios: o César era muy majadero como alumno y había que cambiarlo de escuela o no se sentía bien en cada una de ellas y en el desajuste entre el sujeto y el aprendizaje o la forma de recibirlo, le era necesario el cambio».

Por cualquier causa que fuera, es indiscutible el desagrado del niño y adolescente Rodríguez Expósito por el aprendizaje dirigido y esto ocurre con alguna frecuencia, en quienes poseedores de una gran inteligencia se abstraen profundamente en sus propios pensamientos y al poner poca atención a las palabras de sus maestros pasan por escolares problemáticos y de bajo rendimiento académico. Es por esto que no han sido pocos los grandes hombres de letras que abandonaron el aprendizaje formal para autodisciplinarse en el estudio y alcanzar ventajas extraordinarias en el saber y en la escritura.

En Cuba los ejemplos abundan y de estatura egregia: Enrique José Varona desecha tempranamente la enseñanza dirigida y llega a obtener categoría de sabio; Domingo Figarola-Caneda, Carlos M. Trelles, Gerardo Castellanos y Joaquín Lloverías, logran erudición

Page 4: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 9

a espaldas de las universidades; y Manuel Márquez Stérling, Nicolás Guillén y Alejo Carpentier alcanzan renombre internacional en el periodismo, la poesía y la novela tras abandonar sus carreras universitarias.

César Rodríguez desde niño quiso ser escritor y a muy corta edad se convierte en un lector insaciable de cuanto caía en sus manos. Así, después de trabajar por muy corto tiempo en un almacén de comercio de nuestra capital se inicia en el periodismo a los 17 años. Es éste el mejor camino para el aprendizaje de un escritor pero todavía al sentirse incompleto en su formación cultural se matricula por la enseñanza libre en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana. No quiere quedarse de manera alguna como un redactor de noticias; quiere llegar a ser y lo logrará con creces, un divulgador de la cultura desde las páginas de los diarios.

De sus días de estudiante secundario recordaría siempre una anécdota que contará muchas veces con regocijo. La historia fue pasión arraigada en él desde muy joven, por lo que la estudió con verdadero placer y aprovechamiento. El día del examen de Historia Universal concurrió a él con la seguridad del que ha estudiado a conciencia una materia que le es de su agrado. Unos momentos antes de dar comienzo la prueba comenta con un condiscípulo la certeza que tenía de alcanzar el ansiado sobresaliente por sus conocimientos de la disciplina y cuál no sería su sorpresa al escuchar a sus espaldas, la voz del temido profesor titular de la asignatura que le decía: «jovencito, eso lo veremos dentro de un momento». Y efectivamente, un rato después, el futuro brillante historiador era sometido a un meticuloso examen oral, donde fue- roa explorados detenidamente todos sus conocimientos. Al final del ejercicio docente el profesor le dirigió las siguientes palabras; «joven, en efecto, usted ha estudiado muy bien y con extraordinario aprovechamiento, por lo que le doy la nota de sobresaliente».

Este profesor, maestro de historiadores cubanos, doctor Tomás de Jústiz y del Valle, guardó por su alumno, desde entonces, la mayor consideración y aprecio y años después lo propone como académico correspondiente de la Academia de la Historia de Cuba, en la que él figuraba como académico de honor.

Al obtener su título de Bachiller en Ciencias y Letras determina abrazar únicamente la profesión de escritor y no seguir ninguna carrera universitaria, que por otra parte, al tener que dedicarse a ella, en muchas ocasiones le traería serios obstáculos al mejor desarrollo del futuro creador literario.

Y aquí comienza su autodidactismo que no se detuvo nunca. Lee incansablemente desde los clásicos a los modernos del teatro,

Page 5: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

10 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

la novela y el cuento y bebe en las fuentes primarias de la historiografía hasta alcanzar esa cultura extraordinariamente exquisita y balanceada que todos le conocimos. Como verdadero intelectual amó entrañablemente al libro y como jardinero de

la cultura cultivó su biblioteca y archivo, que fueron talleres de creación y remanso de meditación que lo acercaron a los hombres y nunca torre de marfil para alejarlo del mundo.

EL PERIODISMO

En 1921, cuando contaba solamente 17 años se, inicia César Rodríguez Expósito en el periodismo, como reportero de los diarios «Cuba», «Libertad» y «El Día». Al siguiente año abandona estos periódicos para laborar en «La Lucha», «La Noche» y «El Imparcial».

Lo mismo que habíamos visto en su etapa de estudiante primario lo seguimos observando en estos primeros tiempos en la letra impresa, su ansia de mejorar lo lleva al cambio constante, a no resignarse a estar donde se siente incómodo o sin perspectivas de superación.

Page 6: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

Figura 3. Recibiendo uno de los numerosos premios periodísticos que se le otorgaron en

su brillante carrera en la prensa cubana.

Page 7: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

En 1923 inicia su colaboración en el famoso «Heraldo de Cuba», periódico fundado por don Manuel Márquez Stérling y en él permanece hasta 1926 en que pasa al «Diario de la Marina», donde además de reportero pasará a ser jefe sustituto de Redacción con sólo 22 años de edad.

Pero tan sólo un año permanecerá en el tristemente célebre vocero de la reacción anticubana, como le llamara el historiador Emilio Roig de Leuchsenring. En 1927 se incorpora a «Excelsior» hasta 1930, fecha en que ingresa en el «País» y donde estará hasta 1933. Un nuevo cambio lo lleva a trabajar en «información». En este periódico lo sorprende 1935, año que marca su etapa de madurez en el periodismo.

Tres lustros de duro aprendizaje en 11 diarios lo han forjado como brillante reportero y le han hecho ganar abundante experiencia en todos los detalles de la letra tipográfica. Su espíritu emprendedor se ve entonces altamente halagado al ser llamado por el doctor Oscar de Zayas para que lo ayude en la fundación de un nuevo periódico, que llevaba por nombre el de una revista desaparecida pocos años antes y que había sido el órgano de la vanguardia de la Juventud intelectual cubana.

«Avance», va a ser el periódico de César Rodríguez Expósito. Estará en él desde su primera a su última tirada. Veintisiete años que lo sentirá como cosa propia. En él ensayará formas nuevas en el periodismo y desde el cual llevará a cabo sus grandes campañas en favor del libro cubano y de Carlos i. Finlay.

Por muchos años ocupa en éste, como en anteriores diarios los frentes informativos de los Ministerios de Salubridad y Educación, pero además implanta y era la primera vez que se hacía en un órgano de divulgación periodística, una sección fija de crítica e información bibliográfica, en la que daba cuenta de cuánto libro, nacional o extranjero, llegaba a sus manos y lo comentaba después de haberlo estudiado. Y por ella también va a recibir el reconocimiento a sus grandes méritos en la profesión que había abrazado.

Pocos en su gremio han alcanzado tal número de galardones como César Rodríguez Expósito. En 1945 es honrado con los premios Varona del Ministerio de Defensa y Feria Nacional del libro de la Dirección Nacional de Cultura, por sus artículos: «Los guerrilleros de las Filipinas» y «II Feria Nacional del Libro», respectivamente.

Al siguiente año obtiene un 3eh lugar en el concurso Feria del Libro con su trabajo «IV Feria del Libro». El año 1948 le trae 2 nuevos e importantes galardones, el Álvaro Reynoso del Ministerio de Agricultura y el médico-periodístico Guillermo Martínez Márquez del

Page 8: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 13

Colegio Médico Nacional, por sus escritos: «Libros de la enseñanza agrícola» y «El médico ni hechicero ni santo».

En 1950 y 1956 logra respectivamente el José I. Rivero del Conjunto de Calles y Asociaciones Comerciales de La Habana y el Hortensia Pérez Llerena del Colegio Nacional de Enfermeras por sus artículos: «Finlay» y «Día de las Enfermeras».

Todos estos brillantes trabajos periodísticos, modelos de su clase ven la luz en su querido diario «Avance». Solamente un premio el Juan Gualberto Gómez lo obtiene en otra publicación, «Bohemia», con su hermoso y justo trabajo: «Fue Finlay y no Beauperthuy quien descubrió el agente de transmisión de la fiebre amarilla», recogido más tarde en folleto.

Pero si notable es su labor desde las páginas del periódico no menos lo es la llevada a cabo como dirigente de su gremio. Siendo reportero del «Heraldo de Cuba» en 1925, es electo vocal del directorio de la Asociación de Reporteros en 1927, vicepresidente y casi ininterrumpidamente su presidente de 1929 a 1937. Después continuará como vocal y presidente de la Comisión de Cultura hasta 1959.

El 22 de noviembre de 1943 ingresa como fundador de la Junta de Gobierno Provisional del Colegio Nacional de Periodistas, con el carácter de diputado, cargo que mantuvo hasta 1950. Desde él presenta el decreto-ley que establecen el descanso dominical y el sueldo mínimo de los periodistas, así como con el doctor Rafael María Angulo el decreto-ley que establece el retiro periodístico.

Como miembro destacado participa en todas las asambleas nacionales de ese Colegio desde su fundación, y su presencia se sentirá muy afirmativamente en congresos nacionales e internacionales de prensa, como el VII Congreso de la Prensa Latino-Americana, La Habana, 1928; Congreso de la Prensa Mundial, México, 1931; Primer Congreso Nacional de Periodistas, La Habana, 1941; II Con-greso Nacional de Periodistas, Santiago de Cuba, 1944 y III Congreso Nacional de Periodistas, Pinar del Río, 1947.

No habrá lucha por alcanzar alguna mejora para su profesión en la que no esté presente César Rodríguez Expósito. Cuando la idea de crear una Escuela Nacional de Periodismo era sólo un sueño, pone en ella toda su energía y dinamismo hasta verla hecha realidad y es el primer secretario de su patronato.

Por todo ello no cabe la menor duda de que César Rodríguez Expósito es una de las personalidades más brillantes del periodismo de su tiempo en Cuba y su nombre debe figurar al lado del de los grandes maestros de esa difícil profesión en nuestro país.

Page 9: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

14 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

EL TEATRO El deseo de alcanzar su plenitud como escritor lo llevará al teatro. Este género le

dará a su obra en general una profunda dimensión humana. Los tiempos son de cambios profundos. La república estrangulada al nacer por

el intervencionismo norteamericano entra en crisis institucional profunda. La dictadura machadita sienta pautas al tiranicidio en América. La cultura en términos absolutos alcanza limitaciones que alarman aun a los más indiferentes. El teatro es el único género literario que da algunas, aunque pobres, señales de vida. César Rodríguez Expósito siente la necesidad de lanzar su mensaje y prefiere acusar moralizando. Surge entonces su teatro humanista-ético-social.

Su primera obra «Huyendo de la verdad», comedia en 3 actos, que estrena el 5 de enero de 1932, por la Compañía Soriano-Biosca-Cuillermo de Mancha, lo incorpora a la literatura dramática cubana de su tiempo.

Un triunfo temprano viene a coronar su frente de joven autor, la eximia actriz española doña María Guerrero de Mendoza, quien ha sentado escuela en el teatro español contemporáneo, escoge para su representación en la función de gala del Teatro Princioal de la Comedia de La Habana, el 7 de abril de 1933, la comedia «Humano antes que moral» que acababa de terminar César Rodríguez Expósito en noviembre del año anterior. En ella critica duramente la frivolidad y simulación en las relaciones personales entre la alta sociedad. El público la aplaude y la crítica le dedica buenos elogios.

La revista «Orto», de indiscutible trascendencia en la cultura cubana, resume en sus páginas ese sentimiento al publicar: «Humano antes que moral» es algo novísimo en nuestro paupérrimo teatro cubano; no recordamos nada que se anticipe en tan hondo sentido humano». De España sin embargo, le llega la consagración definitiva en las palabras que le escribe don Jacinto Benavente: «Es obra de trascendencia y perfectamente realizada, con difícil asiento que se le sale de lo corriente en el teatro al gusto del público».

En 1934, a pesar de la difícil situación política que vive el país, se llevan a escena 2 de sus obras: «El poder del sexo» comedia en 3 actos, que trata sobre la politiquería y la inmoralidad en las esferas oficiales cubanas, estrenada el 7 de septiembre del mismo año por la Compañía de Eugenia Zoffoli y «Los muertos viven» comedia también en 3 actos de profundo sentido metafísico, llevada a escena el 7 de noviembre, 2 meses después, por la misma compañía.

Page 10: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

Figura 4. César Rodríguez Expósito en su etapa de autor teatral.

Page 11: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

16 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

Ese año recoge en volumen sus obras «Humano antes que moral« y «El poder del sexo» que da a la publicidad la editorial «El Fígaro».

Pero el teatro también decae, no son estos los momentos para disfrutar del arte, aunque éste nos traiga un profundo mensaje. A pesar de sus triunfos su próxima puesta en escena no ocurre hasta el 13 de junio de 1937 en que se estrena «Los que tienen la culpa», comedia en 3 actos, que escoge para su función de gala la notable actriz cubana Socorrito González.

Ese mismo año publica en volumen su obra de teatro para leer: «La superproducción humana», exaltada defensa de la paz mundial. De ella escribiría, quejoso de nuestro medio intelectual de la época, el notable dramaturgo cubano José Antonio Ramos: «César Rodríguez, nuestro dramaturgo de pura cepa a quien nadie le hace sombra». Y añadirá «La superproducción humana apasionará al público en New York, París, Moscú. En Cuba se dedicarán a halagar al autor cuando esté presente y a criticarlo en ausencia».

Ninguna obra suya volverá a la escena, pero no por eso deja de recibir triunfos. En 1938 la Dirección de Cultura del Ministerio de Educación, en su Concurso Nacional de Literatura, le concede Mención Honorífica a su comedia «Adulterio ocasional» y en 1943 repite el mismo galardón a la que titula «Violación».

Nuevos estudios, esta vez los que serán definitivos en él y le darán mayor importancia a su gran obra irán dejando a un lado el teatro, no obstante lo cual escribe una serie de monodramas de indudable calidad como: «Luz en la sombra», «La querida», «Yo la maté» y «Fusilamiento» y cierra esta importante etapa de su vida literaria en 1944, con la comedia en 3 actos «Multitud».

Una breve incursión por la narrativa hará algunos años después, al publicar en el periódico «Avance» una serie de cuentos cortos que tendrán como virtud el poder de síntesis. Serán leves pinceladas para mostrar rasgos psicológicos que parecen apuntes para obras mayores. De ellos los principales son: «Una mujer», «Sor Lucía», « ¿Inocente o culpable?», «La tacita de café», «Venganza», «Un hijo», «El jardinero» y «Gratitud».

La labor en conjunto de César Rodríguez Expósito en el teatro ha sido calificada por Alfonso Hernández Cató, figura mayor de nuestras letras, de la siguiente manera: «En todas sus comedias, desde la primera, nuestro joven autor muestra el instinto certero del dramaturgo, que tiene que dar en una situación sintética, en un recortado diálogo, lo que en otros géneros se confía a medios de elocución más lentos. César Rodríguez concibe, planea y halla sin aparente esfuerzo, el modo de hacer expresar a sus personajes, sin violentarles el carácter ni el modo de hablar».

Page 12: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 17

Su principal panegirista, el culto musicólogo y académico profesor José Luis Vidaurreta. Opinó de su teatro: «Valiosa y meritoria el alto grado fue la contribución de César Rodríguez a la literatura dramática cubana, al producir obras nada ligeras ni superficiales, sino de vigorosa tesis social».

Y en esas obras, muy principalmente, es que se basa, años después, su elección para miembro de número de la Academia Cubana de la lengua, filial de la Real Academia Española.

Como trabajo de ingreso en esta ilustre Corporación, en 1971, llevará un medular ensayo titulado: «El doctor Juan M. Dihigo y Mestre: un gran filólogo y lingüista cubano». A lo largo de sus 31 páginas nos da un acertado y no poco minucioso juicio sobre la más extensa y profunda obra producida en Cuba, en los campos de la filología y la lingüística.

Al morir trabajaba en un ensayo, para ser leído en dicha institución, sobre la novela «Leonela» del narrador y profesor cubano Nicolás Heredia.

Page 13: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

18 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

LA CRITICA LITERARIA

Más que crítico literario es César Rodríguez Expósito un bibliógrafo y un bibliófilo. No ha habido en toda la historia de nuestra cultura un defensor más tenaz del libro cubano que él.

A partir de 1935 no ve la luz una publicación en nuestro medio ya en folleto o libro que no reciba un estímulo desde su columna de «Avance». Llega a crear una sección especial para darlos a conocer con el nombre de «Entre libros», pero no conforme con ello los va recogiendo en volumen con lo que lleva su conocimiento a traspasar nuestras fronteras.

Así en 1943 ai dar a la estampa «Granos de arena» recoge en este tomo de ensayos 16 comentarios sobre libros cubanos. Un año después publica con el nombre de su sección «Entre Libros», un volumen con 138 crónicas de este tipo que son recibidas con mucho entusiasmo desde el extranjero.

El erudito Félix Palavicini, de México, le escribe: «Entre libros» tiene para mí una gran utilidad, pues de muchos de los libros a que usted se refiere, no tenía noticia alguna. La gran dificultad que hay para la fraternidad americana, obedece al desconocimiento en que vivimos los unos de los otros. No solamente ha prestado usted un gran servicio a la literatura, sino también a la solidaridad americana, al coleccionar y editar esos rápidos apuntes bibliográficos».

Desde la patria de Sarmiento el profesor Diego Pío de la Universidad Nacional del Cuyo, Mendoza, le comunica: «Entre libros» lo leí con mucho interés y provecho, poniéndome al tanto del movimiento bibliográfico de Cuba. De este libro extraeré información para los ficheros del Instituto, en la parte de Sociología».

Y el presidente de la Cámara Argentina del Libro, Guillermo Kraft, publicará en la prensa: «Entre libros», selección de crónicas bibliográficas pone de relieve la ecuanimidad de criterio y sutileza analítica con que el que la firma transita por los difíciles caminos de la crítica literaria».

El éxito que reportan estas publicaciones para la divulgación de la cultura cubana le hacen entregar a la estampa cultural en 1947 un nuevo volumen: «Apuntes bibliográficos», con 127 de sus artículos, que al igual que el anterior lo saludan con entusiasmo figuras de tanta jerarquía en las letras hispanoamericanas como: Alfonso Reyes, José Vasconcelos, Enrique de Gandía y Gabriela Mistral, y en Cuba: Juan M. Dihigo Mestre, Esteban Rodríguez Herrera, José M. Chacón y Calvo y Elias Entralgo, por citar sólo a los más ilustres.

Page 14: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 19

Para hacer más variada su sección periodística y que la opinión de otros

eruditos lo ayudara en su hermosa tarea, crea dentro de ella una subsunción con el título de «Los veinte y cinco mejores libros cubanos».

Para ello solicita a lo más connotado de nuestros intelectuales que le envíen relaciones de los 25 libros que consideren fundamentales para el mejor conocimiento de la cultura, la historia y el pensamiento cubanos y así por votación escoger los mejores. Estas selecciones se hicieron muy populares y se llegaron a publicar en folletos.

Pero no sólo con la pluma presta servicios al libro cubano. Todo su entusiasmo lo dedica durante muchos años en ayudar a organizar, mantener y divulgar las Ferias Nacionales del Libro, en medio de la peor apatía oficial y es este mismo desvelo el que le hace lanzar en abril de 1945 la idea de la creación del Día del Libro Cubano que lo convierte en el fundador de esta conmemoración en nuestro país, por lo que se escoge para ello la fecha del 7 de junio, día del nacimiento de don Antonio Bachiller y Morales, padre de la ciencia bibliográfica en Cuba.

Al comenzarse en 1958 la publicación de la Revista de la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina abre en la misma una sección bibliográfica que mantiene mientras dura la revista y donde publica 69 notas críticas.

Al desaparecer esta publicación continúa su sección en 1963 en la revista «Finlay», hasta el año 1967, en que ve la luz su último número. Los comentarios que llevaron su firma alcanzaron a 71 libros, a pesar de que desde 1962 se había retirado oficialmente del periodismo.

No obstante la opinión tan favorable de eminentes literatos sobre su labor como crítico, César Rodríguez Expósito no trató con .sus artículos de sentar cátedra en esta difícil e importante especialidad literaria. Quiso, y lo logró con creces, ayudar a la divulgación de la bibliografía cubana, a la vez que estimulaba su producción literaria con el halago siempre generoso a sus autores.

Page 15: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

Figura 5. Ante la casa en que murió don Antonio Bachiller y Morales, al instaurarse el Dia del Libro Cubano. Entre otros, el profesor Raimundo de Castro Bachiller y los historiadores Emilio Roig de Leuchsenring y Manuel I. Mesa Rodríguez.

Page 16: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 21

LA HISTORIA

Si el periodismo es su vocación, el teatro su pasión y la crítica su satisfacción, es en la historiografía, a la que llega con una mezcla de todos estos sentimientos, donde alcanza la plenitud mayor de su obra.

Con un tema arrancado a la leyenda misma traspasa en 1944 los dominios de Herodoto. Hatuey era entre nosotros, antes de su libro de igual título, una serie de vagas referencias en obras clásicas a la historiografía americana de la conquista. Historiadores hubo, entre ellos el doctor Tomás de Jústiz y del Valle, que afirma-ron que el personaje no era más que un mito. Sin embrago un año después de la aparición de esta obra el mismo autor en su «Historia documentada de la Isla de Cuba» habló de la muerte de Hatuey en la hoguera por su resistencia a no aceptar las cadenas de la esclavitud.

Con la demostración de un completo dominio de la heurística César Rodríguez Expósito logra escribir un libro exquisitamente bello y profundamente histórico. Si es cierto que la imaginación llena lagunas inevitables, ésta es siempre producto de rigurosa lógica desprendida del dato.

En el prólogo el eminente historiador y profesor universitario doctor Elias Entralgo Vallina deja escrito un juicio definitivo: «Trabajo de reconstrucción y de interpretación historiográficas en el que se mezclan escombros entresacados de las ruinas investigativas con nuevos materiales de visión personalísima. De ambos esfuerzos habían de quedar algunas argamasas: del primero, para nuestra general cultura histórica, muchos datos sobre la actuación del caudillo en su isla natal, por lo común desconocidos entre nosotros; del segundo, el acertado enfoque del guerrillero».

A partir de esta obra comienzan a aparecer sus libros sobre historia de la medicina. A muchos ha asombrado siempre esta dedicación al ser como lo era ya una figura destacada de las letras, no profesional de la medicina, por lo que se piensa en un brusco e improvisado cambio.

Y nada más lejos de la realidad, los temas médicos no le eran desconocidos pues llevaba muchos años en contacto íntimo con ellos. Desde sus inicios en el periodismo trabajó como reportero de varios diarios en la antigua Secretaría de Sanidad y Beneficencia y allí traba conocimiento personal con figuras tan destacadas de la medicina cubana como los doctores Diego Tamayo, Arístides Agrámonte,

Page 17: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

22 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

Mario García Lebredo, Jorge LeRoy, Emilio Martínez, Enrique B. Barnet, José A. López del Valle y muchos más. Tan estrechas son sus relaciones con la sanidad pública cubana y tanto se

aprecia en ella su talento y capacidad organizativa que en 1926 ingresa en nuestro futuro Ministerio de Salud Pública con el cargo de jefe del Archivo de la Secretaría de Sanidad y Beneficencia.

Desde este departamento que no existía prácticamente, comienza César Rodríguez Expósito la obra que culminaría más adelante: la creación de la sección de asuntos científicos-médicos de dicho organismo.

En la propia Secretaría desempeña los cargos de: jefe de Multas de la Jefatura Local de La Habana, jefe de Biblioteca y Prensa y luego jefe de Bienes y Cuentas, hasta 1951, en que se crea especialmente para él el cargo de Historiador de la Salud Pública que desempeña hasta su muerte en 1972.

Por lo tanto, si no era un profesional de la medicina el que se dedicaba a su historia, sí era un viejo funcionario de la sanidad pública, avezado en el manejo de la documentación sanitaria y conocedor de todos los vericuetos de la organización de la administración de salud en nuestro país.

En 1947 publica su primera biografía médica. La figura que escoge es el doctor Juan Guiteras Gener, eminente clínico y tropicalita de fama mundial a la vez abnegado patriota. En ella agota investigaciones sobre el personaje y adopta una línea direccional cronológica que permite saber en cada tiempo lo realizado por el biografiado. El libro está escrito en un estilo que recuerda al reportaje en cada capítulo, pero mantiene una rigurosa unidad en toda la obra.

Dos años después ve la luz su libro más importante, su biografía más lograda, «Finlay», con la que obtiene los premios: Finlay Delgado de la Asociación de Dependientes del Comercio de La Habana, Doctor Juan Guiteras y Antonio Bachiller Morales.

Esta biografía es lo más caracterizado de su obra histórica y literaria, por ella se le conoce en todas partes. Su estilo depurado la acredita como la más bella y acabada de las biografías escrita sobre Finlay, la que todos deberían leer con sumo placer, incluyendo a todos los médicos cubanos.

A partir de 1942 comienzan a celebrarse los congresos nacionales de historia organizados por el infatigable historiador de la ciu-

Page 18: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 23

dad de La Habana doctor Emilio Roig de Leuchsenring. César Rodríguez Expósito participa con trabajos propios en 13 de estos eventos que se llevan a cabo y en los que son muy comentados sus estudios. «Hatuey: primer libertador de Cuba », Doctor Juan Guiteras Gener: resumen de un estudio histórico» y Finlay: polémica permanente».

La Academia de la Historia de Cuba conocedora de esta labor lo propone como académico correspondiente, en Marianao* Eleva esta proposición su antiguo maestro el doctor Tomás de Jústiz y del Valle y los académicos Emeterio Santovenia, Cosme de la Torriente, José M. Peréz Cabrera, Manuel I. Mesa Rodríguez, Juan J. Remos y Gonzalo de Quesada y Miranda.

Ya aprobada su elección hace su ingreso en la sesión pública del día 22 de agosto de 1950 con su trabajo «Finlay ante la historia», en el que expone la trascendencia de la obra científica de Finlay en la historia de la medicina y en la historia de Cuba.

Diez años después es elevado a la categoría de Académico de Número para lo cual presenta el 20 de diciembre de 1960 su estudio: «Doctor Ramón L. Miranda: Médico de Martí», hermosa biografía de este destacado hombre de ciencias e incansable patriota, que tuvo la suerte de ser médico, amigo y colaborador del Apóstol de nuestras luchas libertadoras contra España.

Como miembro de esta corporación tiene el placer de leer el discurso de contestación al de ingreso, como Académico de Número, de su amigo el profesor universitario doctor Julio Morales Coello, fundador de nuestra primera marina de guerra nacional y su historiador.

En 1970 se le otorga un nuevo sillón académico, esta vez en la sección de historia de la Academia Cubana de Altos Estudios Masónicos. Ante esta entidad presenta como trabajo de ingreso un interesante estudio sobre el famoso descubridor de la penicilina sir A/exander Fleming en el que además de exaltar la trascendencia histórico-científica del hombre que dio inicio a la era de los antibióticos, revela datos muy poco conocidos del sabio inglés, como su filiación durante 45 años a la fraternidad masónica.

Y no podría dejar de citar entre sus mejores trabajos históricos su ensayo escrito con motivos del 140 aniversario del nacimiento del ingeniero Francisco de Albear, publicado en la revista «Finlay», en el número correspondiente a julio-diciembre de 1966. Con el título de «El ingeniero Francisco de Albear: artífice del Canal de Vento» nos brinda el más acabado estudio sobre este famoso hombre de ciencias cubano, que hoy es fuente obligada para todo el que indague en la historia de la ingeniería sanitaria en nuestro país.

Page 19: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

24 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

HISTORIADOR DEL MINISTERIO DE SALUD PUBLICA Los cargos de historiadores provinciales y municipales no han sido pocos en

Cuba. El doctor Alfredo Zayas, ex-presidente de la república, llega a ostentar el muy rimbombante de historiador nacional, con elevado sueldo, por escribir una historia de Cuba que nunca llegó a terminar.

El doctor Manuel Pérez Beato médico y erudito historiador, uno de los fundadores de la Academia de la Historia de Cuba, ocupa durante años el de historiador provincial de La Habana y no pocos médicos lo sería en muchos municipios.

Pero la culminación, como obra realizada desde uno de esos cargos, la constituye el doctor Emilio Roig de Leuchsenring, historiador de la ciudad de La Habana, de cuya labor de 20 años son necesarios 5 amplios tomos para ser solamente comentada.

Semejante ejemplo es lo que hace que 3 congresos históricos municipales interamericanos, el de La Habana (1942), New Orleans (1947) y San Juan de Puerto Rico (1948) propongan la creación obligatoria de cargos semejantes en todos los municipios de América.

El entonces Ministerio de Salubridad y Asistencia Social, es el primer ministerio en Cuba que se siente quizás estimulado por aquella iniciativa municipal interamericana y crea un cargo de historiador oficial con su oficina, en 1951.

Por su vinculación a este organismo y su ya larga trayectoria en la historiografía médica nacional, César Rodríguez Expósito, es el escogido para desempeñarlo. Resultan interesantes las circunstancias de su nombramiento, conocidas de su propio testimonio. Por su alto rango el mismo requería la sanción presidencial, el escritor le comunica al ministro que le hacía el alto honor de designarlo, pero que él tenía una mala opinión de la gestión gubernativa del primer mandatario pues había criticado en la prensa en muchas ocasiones su gobierno. El presidente conocida esta opinión le hace saber: «a pesar de sus reparos firmo el Decreto que crea el cargo y lo nombro a usted para desempeñarlo; primero por su capacidad y competencia indiscutida y segundo porque no siendo de los nuestros lo proclama sin reservas en prenda de lealtad a sus convicciones independientes».

Y así comienza su labor de 21 años como historiador oficial de la salud pública cubana. Resulta imposible, por la falta de documentación apropiada, dar la medida de lo que fue ésta en el aspecto de asesoramiento brindado a investigadores de todas las categorías que concurrieron a él, pero sí podemos decir, por pro-

Page 20: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 25

pia experiencia, que ninguno dejó de sentir el mayor interés del viejo historiador en evacuar sus dudas, ni de recibir la más completa información y orientación sobre el tema motivo de la investigación.

Pero su obra cumbre desde este cargo es la colección de Cuadernos de Historia de la Salud Pública, que este año llega al veinticinco aniversario de su fundación. Es justo detenernos en ella, pues constituye el esfuerzo más sostenido y valioso llevado a cabo en el campo de las publicaciones histórico-médicas cubanas hasta el presente.

Para comprender todo su alcance es preciso estudiarla dividida en varios grupos: el primero que comprende 10 cuadernos dedicados a divulgar y defender la vida y la obra de Carlos J. Finlay, incluyéndose entre ellos la famosa biografía escrita por César Rodríguez Expósito y los 4 trabajos presentados en congresos internacionales de historia de la medicina, para defender la obra de nuestro genial compatriota; el segundo grupo que abarca 29 cuadernos que contienen biografías y trabajos de grandes figuras de la medicina cubana; el tercero que comprende 16 publicaciones que tratan aspectos diversos de nuestra medicina, desde historias de enfermedades o grupos de ellas, hasta ramas o especialidades médicas estudiadas directamente o a través de sus principales hombres, y un cuarto grupo destinado a los médicos en las luchas independentistas en el siglo pasado y en el presente, que consta de 5 importantes volúmenes.

En su conjunto, sin pretender constituir una historia formal de la medicina en Cuba, nos da la más cuidadosa, seria y valiosa información sobre esta materia recopilada en una publicación cubana hasta el presente. Su formidable aceptación dentro y fuera del país, le permite sea considerada en los altos medios científicos y culturales del extranjero, una de las publicaciones nacionales de mayor calidad.

En esta obra más de su quinta parte sale directamente de la pluma de César Rodríguez Expósito y algo más de la mitad del resto recopilada, ordenada y prologada por él, pues logra atraer para los cuadernos la colaboración de muchas de las principales figuras de la historiografía general y médica de su época y en este titánico esfuerzo que comprende también la copia de libros revisión de pruebas de imprenta, empaquetamiento, distribución, etcétera, cuenta casi exclusivamente con la ayuda de su valiosa secretaria y esposa, compañera Violeta Abad, cuya extraordinaria colaboración, por amor al recuerdo y a la obra de su esposo, ha sobrevivido a éste.

Page 21: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

26 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

En los cuadernos da a la estampa Rodríguez Expósito, 8 de sus libros de historia más notables: «Índice de Médicos, Farmacéuticos, Dentistas y Estudiantes en la Guerra de los Diez Años», con el que arranca del olvido a muchas figuras del martirologio cubano en sus luchas independentistas, constituye una de las fuentes más consultadas de nuestra bibliografía histórico-médica; «La primera secretaría de sanidad del mundo se creó en Cuba», su trabajo original de ingreso como miembro titular fundador en la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina, ampliado en volumen, resulta su homenaje de cariño al organismo estatal en el que labora ininterrumpidamente durante cuatro y media décadas y que todavía en la actualidad es la única historia publicada del nivel central de la organización de salud en nuestro país, «Médicos en la vida de Martí» original contribución a los estudios martianos; las biografías: «Doctor Ramón L. Miranda: Médico de Martí», «Doctor Juan N. Dávalos: el sabio que sueña con las bacterias», «Doctor Enrique Nuñez y Palomino» Doctor Oscar Amoedo y Vqldés: una figura de la odontología universal», todas modelos en su clase por la corrección del estilo y por lo minucioso de la investigación: y su último libro, su voluminosa obra postuma que la constituyen la biografía del doctor Félix Figueredo Díaz y el tomo de papeles de este personaje.

Con ella César Rodríguez Expósito cierra su obra historiográfica de manera brillante. En un lenguaje directo y sumamente claro aborda la vida de este hombre tan discutido de la Guerra Grande y logra, con acopio de datos más que suficientes, poner en claro situaciones oscuras de uno de los períodos de mayor importancia en nuestra historia.

Page 22: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

Figura 6. Leyendo una de sus múltiples conferencias sobre Finlay, en escuelas de enseñanza primaria y secundaria de Cuba.

Page 23: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

28 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

LABOR FINLAISTA

Dentro de su obra historiográfica, Hay una nota dominante que le da razón y carácter, su labor finalista. Muchas veces nos ha asaltado la idea de que a César Rodríguez Expósito lo lleva a la historia de la medicina su admiración por Finlay y el deber justiciero de defender su gloria y que lo demás llega por añadidura.

Nadie en nuestro medio ha sido nunca tan fiel a una causa puramente intelectual y científica como él, nadie ha utilizado para ello armas más limpias y hermosas que las suyas.

La defensa del genial cubano que ha jugado un papel tan importante en la consolidación de nuestra nacionalidad tiene en César Rodríguez Expósito encarnación suprema.

En la década de los años 20 comienzan a aparecer en la prensa sus artículos sobre el sabio. Al principio son trabajos de pura exaltación patriótica, pero la seriedad que pone en todo cuanto emprende lo lleva a profundizar cada vez más en el estudio de la obra científica de Finlay que llega a dominar como si fuera un profesional especializado de la medicina. Artículos posteriores le ganarán premios periodísticos.

Junto a esta labor en los diarios publica folletos de divulgación como: «Carlos J. Finlay: Síntesis biográfica» editado por el Ministerio de Salud Pública y «Carlos J. Finlay: notas biográficas» dado a la publicación por el Movimiento por la Paz y la Soberanía de los Pueblos y brinda conferencias de tanta importancia como «Finlay, sanador del trópico» en la Universidad del Aire de la radioemisora C.M.Q., además de otras que imparte en tan variados lugares como los clubes Rotarios de La Habana, Marianao, Guanabacoa y Guanajay, Logias Masónicas de La Habana y de todo el país, Ministerio de Salud Pública, Palacio de Bellas Artes, Instituto Nacional de Ahorro y Viviendas, Ateneo de La Habana, Clínica Antonetti, Fragua Martiana, Parque Finlay, Parque Lazear, Instituto Finlay, y otros donde desarrolla el tema de infinitas maneras.

En 1949 publica su ya clásica biografía «Finlay» con la que traslada el conocimiento del sabio fuera de nuestra patria. En la Academia de la Historia de Cuba presenta su trabajo «Finlay ante la Historia», en el XIII Congreso Nacional de Historia lee su ponencia «Finlay: polémica permanente» y dedica 10 Cuadernos de Historia de la Salud Pública al mismo tema.

Pero sus grandes triunfos en esta faena los cosecha al lograr con sus trabajos en colaboración, el reconocimiento de la gloria del sabio en los Congresos Internacionales de Historia de la Medicina

Page 24: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 29

celebrados en Roma-Salerno, Madrid-Alcalá de Henares y Bucarest, que son recogidos luego en su libro «Finlay por cuarta vez ante el Congreso Internacional de Historia de la Medicina» y obtener la aceptación de los términos «finlaísmo» y «finlaísta» por la Real Academia Española de la Lengua, tras una proposición suya aceptada por la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina y enviada a aquel máximo centro del idioma, la misma es calorizada también por la Academia Cubana de la Lengua, la Sociedad Española de Historia de la Medicina, las Academias Chilena y Boliviana de la Lengua y las Sociedades de Historia de la Medicina de esos dos países sudamericanos.

Pero faltaba algo fundamental para culminar la tarea desde tantos años atrás emprendida y era la recopilación de las obras completas de Finlay. Pacientemente y durante muchos años trabaja él solo en esta empresa que ve finalizada al publicar nuestra moderna Academia de Ciencias de Cuba, en 1963, el 1er tomo y que en la actualidad está al publicarse el 6to.

Esta obra monumental permitirá conocer no sólo la labor científica del sabio sino también su interpretación y los pormenores de su vida, pues incluye, además de toda su bibliografía activa, un formidable ensayo analítico del doctor José López Sánchez, donde enmarca históricamente la obra y el personaje, el ensayo biográfico que escribiera el doctor Juan Guiteras y la biografía escrita por César Rodríguez Expósito, estos dos últimos en inglés v en español, y el índice bibliográfico compuesto por el doctor Jorge LeRoy y Cassá.

Queda como proyecto para el futuro un posible tomo 7mo planeado y casi terminado por él, que comprende la iconografía y bibliografía pasiva de Finlay.

Page 25: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su
monica talavera
Texto escrito a máquina
Figura 7. Junto al profesor F. A. Soudervest, eminente historiador de la medicina en el XIV Congreso Internacional de Historia de la Medicina, Roma Salerno Italia, 1954.
Page 26: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 31

LA SOCIEDAD CUBANA DE HISTORIA DE LA MEDICINA Y EL MUSEO FINLAY

La idea de la fundación de una sociedad de historia de la medicina en Cuba fue un viejo anhelo de César Rodríguez Expósito.

Después del XIV Congreso Internacional de Historia de la Medicina que se celebró en Roma-Salerno, durante el mes de septiembre de 1954, la delegación cubana, integrada por César Rodríguez Expósito, Horacio Abascal Vera y Félix Hurtado Galtés, que había logrado que dicho Congreso aprobara en sesión plenaria y por acuerdo unánime «que sólo a Carlos 1. Finlay y sólo a él corres-pondía el descubrimiento del agente transmisor de la fiebre amarilla y a la aplicación de su doctrina el saneamiento del trópico», es invitada a la Reunión General del Comité Permanente de la Sociedad Internacional de Historia de la Medicina, también celebrada en dicho mes de septiembre en la ciudad universitaria de Roma, para participar en ella, indicándosele en la misma la conveniencia de que en nuestro país se fundara una sociedad de historia de la medicina, filial de la Internacional.

Desde ese momento un grupo de médicos y no médicos cubanos estudiosos de esta especialidad, lidereados entre otros por César Rodríguez Expósito, se dan a la ardua tarea de crear la corporación, celebrándose su primera junta el día 26 de octubre de 1954, así como la de su establecimiento el día 15 de febrero de 1955, exactamente hace 22 años.

El 30 de marzo de 1956 celebraba su primera sesión en la que se hacían entrega de sus títulos a sus presidentes de honor los doctores José A. Martínez Fortún, Clemente Inclán y Octavio Montoro, fallecidos ya, y a partir de julio de ese año comienzan las sesiones ordinarias con las presentaciones de trabajos de ingreso por parte de sus miembros titulares, que eran a la vez fundadores.

Toda la obra escrita producida por la institución en su primera etapa es recogida en su órgano de publicidad la «Revista de la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina» que alcanzaría 6 volúmenes, de 1958 a 1963, y que sería la primera publicación periódica, a excepción de los Cuadernos de Historia de la Salud Pública destinada exclusivamente a esta materia.

Y esa publicación es obra de César Rodríguez Expósito; redacta en su totalidad la sección de noticias y casi completamente la de comentarios bibliográficos, escribe editoriales, selecciona y organiza materiales, hace de corrector de estilo, revisa pruebas de imprenta y logra milagros económicos para mantenerla el tiempo que duraría.

Page 27: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

32 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

Con el triunfo de nuestra Revolución entra la Sociedad en un período de languidez, dado en parte por la actitud de muchos de sus miembros incompatible con la realidad histórica del país, que se agudizaría cada vez más, a pesar del esfuerzo realizado por los mejores de sus fundadores, hasta caer en el largo período de inactividad que se cierra el 3 de junio de 1974, cuando el espíritu creador del doctor José López Sánchez y sus colaboradores, logra hacerla renacer con estos bríos que todos hoy contemplamos.

La muerte no le permitiría a César Rodríguez Expósito poner su pluma y talento de nuevo al servicio de la institución que tanto amó, pero de haber vivido aún seguro que hubiera ocupado nuevamente su viejo puesto de secretario indiscutiblemente perpetuo.

Al declararse extinguida la antigua Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de la Habana por Resolución número 4, de 27 de abril de 1962, dada por la Comisión Nacional de la Academia de Ciencias de la República de Cuba, se crea poco después por Resolución número 8, de Junio 13 del propio año y por la misma Comisión, el Museo Histórico de las Ciencias Médicas Carlos i. Finlay.

En la dirección del mismo son designadas 2 figuras de reconocido prestigio en el campo de la historia de la Medicina: José López Sánchez como director y César Rodríguez Expósito como subdirector. A ellos se les encomendaría la tarea de desarrollar esta institución, hoy orgullo de todos, y que ayudados por sus pocos colaboradores, en su mayoría activos todavía en sus puestos, lo lograrían con creces.

Aquí laboraría César Rodríguez Expósito diariamente hasta su muerte.- |Con cuánto orgullo y placer lo mostraría siempre a visitantes nacionales y foráneos! |Qué labor de enseñanza, no menos importante por más callada la suya, al iniciar a tantos niños de escuelas primarias y secundarias que visitaban el Museo en el conocimiento de las grandes figuras y hechos de la medicina cubanal

Por eso en el 1er aniversario de su muerte el doctor José López Sánchez conocedor de sus extraordinarios méritos intelectuales, que tanta gloria han dado a Cuba y de su notable labor en el Museo quiso rendir tributo de homenaje en esta institución a César Rodríguez Expósito y yo tuve el alto honor de pronunciar su panegírico en aquella oportunidad en nombre de la Oficina de Historia del Ministerio de Salud Pública, muchas de cuyas ideas centrales he repetido en el presente ensayo.

Page 28: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

ACAD. CÉSAR RODRIGUEZ EXPÓSITO 33

VALOR Y RECONOCIMIENTO DE SU OBRA

César Rodríguez Expósito tuvo la suerte, negada a tantos escritores, de recibir en vida la valoración favorable y el reconocimiento más alto a su labor intelectual, por parte de sus contemporáneos nacionales y extranjeros.

En Cuba lo exaltaron a la dignidad académica, la Academia de la Historia, la de la Lengua y la de Altos Estudios Masónicos y lo recibieron en su seno instituciones culturales de la calidad del Ateneo de la Habana, la Sociedad Geográfica, la Fragua Martiana, la Sociedad de Historia de la Medicina, la de Estudios Históricos Internacionales y otras más.

En el extranjero la Real Academia Española de la Lengua; el Instituto Brasileño de Historia de la Medicina; la Sociedad de Artes y Letras de Buenos Aires, Argentina; la Academia de Historia de la Medicina de México; la Academia de Ciencias de New Jersey, EE.UU.; la Sociedad Francesa de Historia de la Medicina; el Comité Permanente de la Sociedad Internacional de Historia de la Medicina con sede en Londres, Inglaterra, por no citar sino las que más se relacionaron estrechamente con su obra historiográfica.

En su pecho de hombre modestísimo pudo ostentar: la Orden Nacional del Mérito Carlos J. Finlay, en el grado de Gran Oficial; la Orden Nacional de Mérito Carlos M. de Céspedes, con el grado de Oficial; Orden de Mérito de la Cruz Roja Nacional; Medalla de Oro «Guiteras» del Colegio Médico de la Habana, por su libro sobre el doctor Guiteras; Medalla de la Fundación Internacional Eloy Alfar o, de Panamá; Medalla al Mérito Sanitario del Instituto Humanité de París, en el grado de Gran Oficial; Orden Médica Hospitalaria de San Cosme y San Damián, de Francia, Caballero de la Cruz de Lorena, Francia y muchas otras nacionales de menor importancia.

A la Revolución llegaría César Rodríguez Expósito cargado de obras, de reconocimientos y del respeto de su pueblo. Con entusiasmo le brindaría su faena intelectual y su prestigio hasta su muerte acaecida en La Habana el 12 de junio de 1972.

Rechazaría ofrecimientos que le llegaron del extranjero de instituciones de renombre científico y permanecería leal a su acendrado patriotismo y a su profundo sentido de justicia social.

No adoptaría posiciones oportunistas, ni renunciaría a viejas filiaciones fraternales que le hubieran mutilado el carácter y la dignidad, para ser útil a su patria, a la que serviría en momentos

Page 29: CESAR RODRIGUEZ EXPOSITO. PERIODISTA, LITERATO E ...files.sld.cu/digitalizacion-bmn/files/2018/05/0045-9178.1985.0070.0001.pdf12 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD En 1923 inicia su

34 CUADERNOS DE HISTORIA DE LA SALUD

de peligro y grandeza de su presente revolucionario, como pedía Martí sencilla y naturalmente.

Por eso y por su aporte extraordinario al patrimonio de nuestra cultura nacional, Cuba le debía este homenaje de recordación y de justicia y la Sociedad Cubana de Historia de la Medicina, a la que tanto amó, en su sesión extraordinaria de este año se lo acaba de ofrecer.