Carta solicitando al Papa León XIII el nombramiento episcopal del P. Salvaire. Firmas de los obispos peticionantes.

Todo este inmenso esfuerzo dedicado a exaltar la devoción a la Virgen de Luján recibió un duro revés con el fallecimiento inesperado del P. Salvaire, el 4 de febrero de 1899.

➢ El agotador ritmo de trabajo debilitó progresivamente su corazón, al punto de sufrir dos ataques cardiacos, el último fatal. Sus últimas palabras fueron: “Creo en Dios. Amo a Dios. Espero en tí Madre mía de Luján”. Contaba con solo 52 años de edad.

➢ Las muestras de pesar por su partida se multiplicaron a nivel nacional y de los países vecinos (Uruguay, Paraguay y Chile), expresándose en telegramas, cartas, artículos, noticias necrológicas, homenajes póstumos y funerales.

Última foto del Padre Salvaire.

Fines de 1898.

Los funerales fueron solemnes con afluencia masiva de amigos y fieles, que le dieron en Luján la última despedida.

➢ Sus restos fueron depositados en una tumba en el centro de la Basílica en construcción, donde se iba a levantar el futuro presbiterio y el altar mayor.

➢En 1904, al iniciarse la construcción de los mismos, fueron trasladados al crucero derecho, al Altar de la Milagrosa, donde reposan hasta el día de hoy.

Primera sepultura del P. Salvaire en el lugar que ocuparía el altar mayor de la Basílica.

La tumba que guardó sus restos.

Altar de la medalla Milagrosa.

Lugar donde fueron trasladados los restos

en el año 1904.

Sepultura definitiva del P. Salvaire.

➢ Su desaparición produjo un inmenso vacío que fue muy difícil de llenar. Sin embargo, la construcción de la Basílica como gran ofrenda del pueblo argentino a su Santa Patrona prosiguió año tras año, hasta que pudo ser inaugurada el 6 de octubre de 1930, alconmemorarse los 300 años de ocurrido el milagro de la detención de la carreta.

➢ Tres grandes párrocos lazaristas, sucesores de Salvaire, se encargaron de dirigir los trabajos hasta su finalización: Vicente Dávani, José Gilamac y Felipe Prat.

La Basílica al momento del fallecimiento del Padre Salvaire. Año 1899.

Ábside exterior de la Basílica. Año 1900.

Crucero oeste y ábside. Año 1904.

Frente de la Basílica. Año 1909.

Frente de la Basílica. Año 1920.

Frente de la Basílica. Año 1926.

Frente de la Basílica. Año 1929.

➢Venía así a cumplirse con el correr de los años los tres componentes del voto formulado por el Padre Salvaire, allá por 1875, cuando visitó las tolderías del cacique Manuel Namuncurá en Salinas Grandes.

➢ El pintor Pedro Bucetich plasmó en un cuadro las tres grandes obras salverianas dedicadas a Ntra. Sra. de Luján la:

• “Historia de la Virgen de Luján”

• Coronación pontificia

• Construcción de su gran Basílica.

Desde la inauguración de la Basílica, en 1930, las personas que visitan Luján contemplan azoradas el sueño del Padre Salvaire hecho realidad: la Virgen de Luján, “La Perla del Plata”, tiene ahora su nuevo y espléndido relicario gótico, la Basílica Nacional, que es motivo de asombro para argentinos y extranjeros. Y él desde uno de sus costados contempla satisfecho el magno emprendimiento.

Vista área de la Basílica concluida. Año 1940.

Monumento en memoria del P. Salvaire,

inaugurado el 30 de junio de 1935.

Obra del escultor Nicolás Gulli.