capitulo 3 mankiw

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18 Cuadernos de Coyuntura SOCIEDAD y desigualdad desigual. Pero tanto su radicalidad como las razones que explican el origen de este fenómeno no resultan ser siempre las mismas. En ese sentido, más que reducir la discusión a la constatación del fenómeno y las correspondientes formas de medirlo, vale la pena profundizar respecto a la especificidad actual que la desigualdad social adquiere en el neoliberalismo criollo. Sobre todo si se considera que el nuevo gobierno ha anunciado políticas públicas que suponen una significativa disminución de este problema. A continuación se precisan elementos generales para abordar el problema de la desigualdad, algunas cuestiones relativas al concepto, la especificidad que este fenómeno alcanza en Chile, las distintas posiciones que tienen –y tuvieron- las diferentes fuerzas políticas y empresariales, así como también el tipo de política pública que se intenta impulsar. 1. ¿DE QUÉ HABLAMOS CUANDO HABLAMOS DE DESIGUALDAD? La discusión sobre la desigualdad social tiene inevitablemente distintas dimensiones, hay una dimensión ética involucrada, otra que comprende aspectos históricos, una dimensión que es estrictamente económica, y entre otras, una a la que podríamos denominar, sólo a falta de DESIGUALDAD SOCIAL EN CHILE HOY: ENTRE LA REALI- DAD Y LOS DISCURSOS RESUMEN Se analizan los rasgos fundamentales de la desigualdad actual en la sociedad chilena en relación a sus distintas dimensiones. Asimismo, se revisan las diversas posiciones que tienen –y tuvieron- las fuerzas políticas y algunos de los poderes fácticos, así como también el tipo de política pública que intenta impulsar el gobierno de Michelle Bachelet para disminuir este problema. Finalmente se plantean interrogantes respecto a la posibilidad real de que este tipo de medidas resuelvan en forma sustantiva la desigualdad en Chile. Palabras clave › Desigualdad, mercantilización, extrema riqueza, Estado subsidiario. Autor: Rodrigo Retamal. La desigualdad, tanto como otrora lo fuera en el gobierno de Lagos, se ha instalado como uno de los pilares que fundamentan y articulan el programa de gobierno de Bachelet. Aquel entonces, con una estrategia de propaganda política basada en el “crecimiento con equidad” se le trataba de imprimir un sello “socialdemócrata” al que fuera uno de los más duros proyectos pro empresariado en la era concertacionista. Ahora, a diferencia de ese período, resurge renovado el interés por la desigualdad y sus consecuencias, producto de que la protesta encabezada por distintas fuerzas sociales, lo ha transformado en un problema político nacional. En la actualidad, las diferencias que genera un sistema educacional altamente segmentado, las brechas en la distribución de recursos y oportunidades entre las distintas regiones del país o el padecimiento diferenciado de las consecuencias que generan los efectos medioambientales del desarrollo en la población, sin dejar de mencionar las diferencias polarizadas en la distribución del ingreso, se han instalado hoy como una fuente importante de malestar y conflicto social. Más aún, en el último tiempo los terremotos en el norte del país y el incendio en la ciudad de Valparaíso, le han recordado a nuestro país que una franja considerable de su población experimenta cotidianamente la incertidumbre de perderlo todo en cualquier momento. Ahora bien, la sociedad chilena históricamente ha sido Cuaderno de Coyuntura Número 3. Edición Invierno. Junio 2014

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Capitulo 3 del libro de economia de mankiw

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    Cuadernos de Coyuntura

    SOCIEDADy desigualdad

    desigual. Pero tanto su radicalidad como las razones que explican el origen de este fenmeno no resultan ser siempre las mismas. En ese sentido, ms que reducir la discusin a la constatacin del fenmeno y las correspondientes formas de medirlo, vale la pena profundizar respecto a la especificidad actual que la desigualdad social adquiere en el neoliberalismo criollo. Sobre todo si se considera que el nuevo gobierno ha anunciado polticas pblicas que suponen una significativa disminucin de este problema.

    A continuacin se precisan elementos generales para abordar el problema de la desigualdad, algunas cuestiones relativas al concepto, la especificidad que este fenmeno alcanza en Chile, las distintas posiciones que tienen y tuvieron- las diferentes fuerzas polticas y empresariales, as como tambin el tipo de poltica pblica que se intenta impulsar.

    1. DE QU HABLAMOS CUANDO HABLAMOS DE DESIGUALDAD?

    La discusin sobre la desigualdad social tiene inevitablemente distintas dimensiones, hay una dimensin tica involucrada, otra que comprende aspectos histricos, una dimensin que es estrictamente econmica, y entre otras, una a la que podramos denominar, slo a falta de

    DESIGUALDAD SOCIAL EN CHILE HOY: ENTRE LA REALI-DAD Y LOS DISCURSOSRESUMENSe analizan los rasgos fundamentales de la desigualdad actual en la sociedad chilena en relacin a sus distintas dimensiones. Asimismo, se revisan las diversas posiciones que tienen y tuvieron- las fuerzas polticas y algunos de los poderes fcticos, as como tambin el tipo de poltica pblica que intenta impulsar el gobierno de Michelle Bachelet para disminuir este problema. Finalmente se plantean interrogantes respecto a la posibilidad real de que este tipo de medidas resuelvan en forma sustantiva la desigualdad en Chile.

    Palabras clave Desigualdad, mercantilizacin, extrema riqueza, Estado subsidiario.

    Autor: Rodrigo Retamal.

    La desigualdad, tanto como otrora lo fuera en el gobierno de Lagos, se ha instalado como uno de los pilares que fundamentan y articulan el programa de gobierno de Bachelet. Aquel entonces, con una estrategia de propaganda poltica basada en el crecimiento con equidad se le trataba de imprimir un sello socialdemcrata al que fuera uno de los ms duros proyectos pro empresariado en la era concertacionista. Ahora, a diferencia de ese perodo, resurge renovado el inters por la desigualdad y sus consecuencias, producto de que la protesta encabezada por distintas fuerzas sociales, lo ha transformado en un problema poltico nacional.

    En la actualidad, las diferencias que genera un sistema educacional altamente segmentado, las brechas en la distribucin de recursos y oportunidades entre las distintas regiones del pas o el padecimiento diferenciado de las consecuencias que generan los efectos medioambientales del desarrollo en la poblacin, sin dejar de mencionar las diferencias polarizadas en la distribucin del ingreso, se han instalado hoy como una fuente importante de malestar y conflicto social. Ms an, en el ltimo tiempo los terremotos en el norte del pas y el incendio en la ciudad de Valparaso, le han recordado a nuestro pas que una franja considerable de su poblacin experimenta cotidianamente la incertidumbre de perderlo todo en cualquier momento. Ahora bien, la sociedad chilena histricamente ha sido

    Cuaderno de Coyuntura Nmero 3. Edicin Invierno. Junio 2014

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    Fundacin Nodo XXI

    un mejor trmino, desigualdades sectoriales, dado que apuntan a aquellas relacionadas con mbitos especficos de las sociedad, tales como educacin, salud, territorialidad, entre otras. Todas ellas se manifiestan complementaria y complejamente unidas en el debate, por eso es bueno, al menos, hacer una muy breve distincin.

    _La dimensin tica de la desigualdad

    La dimensin tica de la desigualdad se topa inevitablemente con los valores que han conformado a las sociedades modernas desde el punto de vista poltico, la igualdad por un lado, y la libertad por otro, han sido dos de los valores polticos ms relevantes para la constitucin de las democracias modernas; especialmente para la conformacin de las naciones de Amrica Latina que nacen bajo el sello del pensamiento liberal de fines del siglo XIX.

    En este sentido, el valor de la igualdad, al que alude el problema de la desigualdad en su dimensin tica, refiere a la nocin de justicia, y especialmente a la justicia social. Brevemente, se dice que algo es justo en tanto que respete una relacin de igualdad entre las personas, por lo que la igualdad tiene sentido como valor social y poltico slo en tanto que comprende una relacin de justicia. La justicia social entonces, que apela a la distribucin de los recursos, las oportunidades y la riqueza social, no es otra cosa que la distribucin de esos recursos considerando a las personas como iguales. Aprobamos o desaprobamos las condiciones de justicia social en tanto se expresen formas igualitarias de distribucin de los recursos que la sociedad genera.1

    _La dimensin histrica de la desigualdad

    La desigualdad en su dimensin histrica, por otro lado, se relaciona con el conjunto de procesos que han definido la conformacin especfica de la estructura social chilena desde la colonia hasta la instalacin del neoliberalismo actual. En este sentido, los aspectos histricos de la desigualdad tienen relacin con los elementos ms determinantes que en las distintas pocas de nuestro desarrollo han establecido las bases de un modelo basado en las diferencias sociales.

    En este mbito, podemos mencionar a modo de ejemplo que, en Chile, as como en el resto de Amrica Latina, parte de los rasgos especficos de la desigualdad son posibles de rastrear desde la temprana distribucin de la tierra en la colonia, y la consecuente estructura patrimonial que de ello se desprende.

    El sistema hacendal que se conforma en la poca colonial y su posterior desarrollo republicano, descansa en las bases de aquella distribucin original y en los mecanismo institucionales que le dan perdurabilidad (encomiendas, mayorazgos, etc.); en este sentido, la Hacienda, al mismo tiempo que permite establecer las bases de la distribucin de la riqueza para un perodo significativo de la historia nacional, define las caractersticas especficas del orden poltico conducido por una oligarqua terrateniente.

    1 Ms detalles pueden ser revisados en Bobbio, N.: Igualdad y Libertad. Barcelona: Editorial Paids, 1993.

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    Cuadernos de Coyuntura

    Los proyectos nacional-populares que se inician en el perodo posterior a la cuestin social, si bien expresan procesos inclusivos y la emergencia de una clase media -principalmente asociada a la conformacin de una burocracia estatal-, redefinen las desigualdades en el mbito de los derechos y del poder poltico, logrndose, como expresin de las luchas sociales del perodo, un avance en lo que refiere a la conformacin del espacio relacionado con la ciudadana poltica y con las caractersticas de la constitucin del Estado, fruto de lo cual, las desigualdades de la estructura hacendal se modifican.

    _La dimensin econmica de la desigualdad

    La desigualdad en su dimensin econmica refiere al tamao o magnitud de las diferencias sociales en la distribucin de la renta o ingreso, las disparidades existentes en el mercado del trabajo, la precariedad y vulnerabilidades asociadas al empleo, y las brechas existentes en la distribucin del patrimonio de las personas y la consecuente distribucin de la propiedad.

    En el caso de Chile, son estas las desigualdades que resultan ms conocidas y tambin ms evidentemente agresivas. Generalmente, los datos usados para establecer las diferencias en el plano econmico provienen desde los ingresos registrados en la encuesta que bianualmente aplica Ministerio de Desarrollo Social. En efecto, la informacin de ingresos monetarios de los hogares se basan en la serie de encuestas de caracterizacin socioeconmica CASEN, asesorada por Cepal y en lnea (ajustada) con cuentas nacionales, disponibles desde 1987.

    Segn los datos de esta encuesta podemos ver que el ndice ms utilizado para la medicin de la desigualdad, Gini, muestra una tendencia con una disminucin mnima en el orden de 0,03 y 0,04 puntos entre 1990 y 2011 tanto para ingresos autnomos (provenientes del trabajo) y monetarios (incluye transferencias y subsidios del Estado); y que el efecto que tiene la incorporacin de transferencias y subsidios en la medicin de la desigualdad a travs del ingreso monetario no supera los 0,02 puntos en los aos de la serie.

    Grfico 1: ndice de Gini, Chile, 1990-2011.

    Fuente: Casen, Ministerio de Desarrollo Social.

    0,57 0,57 0,57 0,57

    0,57

    0,58 0,58

    0,58

    0,54 0,54

    0,53 0,530,52

    0,56

    0,56

    0,56 0,560,560,56

    0,550,540,530,520,51

    0,51990 1992 1994 1996 1998 2000 2003

    Gini (Ingresos Monetarios)Gini (Ingresos Autnomos)

    2006 2009 2011

    0,590,580,57

    0,55

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    Otro de los ndices utilizados para establecer comparaciones entre grupos, es el ndice 10/10, que basado en el ordenamiento de la poblacin en percentiles de ingresos, establece una comparacin entre el 10% ms pobre con el 10% ms rico de la distribucin de ingresos.

    Como se observa en el grfico 2, la tendencia del ingreso monetario (que incluye transferencias y subsidios del Estado) es de una muy dbil disminucin entre 2000 y 2003, para mantenerse relativamente estable a partir de ese ao, con una leve alza el 2009 motivada por la crisis econmica internacional; misma tendencia que se observa con los ingresos autnomos, salvo por la llamativa alza en el ao 2009, lo que expresa el efecto agresivo que tienen las crisis econmicas en los sectores ms empobrecidos de la sociedad, y junto con ello, la incidencia que se obtiene a partir de accin del Estado en el ingreso de los hogares despus de las transferencias, como vemos de un ratio 10/10 de 46 veces por ingresos autnomos, disminuye a 25,9 en ingresos monetarios.

    Grfico 2: ndice 10/10 Chile, 2000-2011.

    Fuente: Casen, Ministerio de Desarrollo Social.

    Para el ao 2011, la relacin entre el ingreso promedio del decil ms rico y el ms pobre es de 35 y 22 veces segn ingresos autnomos y monetarios respectivamente. Ilustrativo resulta, en este sentido, destacar el ingreso mximo observado en cada uno de los tipos de ingresos que utiliza la Casen (autnomos, monetarios y totales). Como vemos en el cuadro 1, el ingreso mximo registrado en la encuesta, considerando los tres tipos de ingresos mencionados, se encuentra en el orden de los $70.500.000 aproximado. Cifra que se reduce ostensiblemente si slo consideramos hasta el percentil 992 (es decir se excluye al 1% ms rico de la poblacin), en el que el ingreso mayor es de $6.500.000; ingreso que se distancia todava ms de la primera si slo se considera en la distribucin hasta el percentil 95, donde el ingreso ms alto observado es de $2.590.0000.

    2 Lainformacindelingresomximosegnpercentildebeconsiderarsesloparafinesilustrativos.Essabidoque la encuesta Casen no registra necesariamente las mayores fortunas, ergo, los ingresos mximos pueden ser an mayores y, con ello, tambin la desigualdad.

    34,234,4 31,3

    46

    35,6

    22,625,923,927,329,5

    50

    40

    30

    20

    10

    02000 2003 2006 2009 2011

    Ratio 10/10 Ingresos Autnomos Ratio 10/10 Ingresos Monetarios

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    Cuadernos de Coyuntura

    Cuadro 1: Ingreso mximo del hogar hasta percentil 100, 99 y 95, 2011.

    Fuente: Elaboracin propia en base a Encuesta Casen 2011.

    De este modo, siendo la desigualdad de ingreso uno de los aspectos ms graves de las diferencias sociales en Chile, es posible detectar en un nivel ms especfico de anlisis, que el aspecto tal vez ms llamativo del mismo empero no necesariamente ms importante-, es la escandalosa concentracin patrimonial que se observa a partir del 1% ms adinerado del pas. Como vemos en el grfico, es a partir del percentil 99 que la curva se eleva verticalmente distancindose hasta llegar a las cifras anteriormente sealadas en el cuadro.

    Grfico 3: Curva de distribucin del ingreso monetario de los hogares en Chile, 2011.

    Fuente: Elaboracin propia en base a Encuesta Casen 2011.

    De este modo, estas ilustraciones relativamente simples, representan una idea un tanto ms compleja que se ha comenzado a estudiar en Chile siguiendo la tendencia

    6.000.000

    74.000.000

    20.000.000

    0 20 40 60 80 100

    10.000.000

    30.000.000

    40.000.000

    50.000.000

    60.000.000

    70.000.000

    2.000.0000

    Lnea base percentil 99

    Ingr

    eso

    Mon

    etar

    io, h

    ogar

    ymonetil

    Tipo de

    Ingreso del

    Hogar

    Ingreso Total del Hogar

    Ingreso Mximo

    Ingreso Mximo

    Ingreso MximoMedia Media Media

    70.491.258 6.593.088 3.612.800 699.585 551.922

    517.813

    496.980

    662.306

    642.584

    2.589.831

    2.589.831

    6.010.195

    6.010.195

    914.754,45 582.940 828.417 578.270

    543.073

    520.260

    788.010

    768.930

    547.000

    528.314

    872.514,17

    872.514,59

    16.926.085 16.757.192 (1% 168.893) 16.080.775 (5% 845.310)

    70.374.008

    70.374.008

    Mediana Mediana Mediana

    Ingreso Monetario del Hogar

    Ingreso Autnomo del Hogar

    Poblacin segn Casen

    Distribucin hasta Percentil 100 Distribucin hasta Percentil 99 Distribucin hasta Percentil 95

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    Fundacin Nodo XXI

    de las investigaciones sobre desigualdad de los ltimos aos en Europa. Se trata de la importancia, para la desigualdad en el neoliberalismo, de la concentracin de la riqueza en manos del 1%, 0,1% y 00,1% de la poblacin. Es en este grupo muy especfico que se concentra el poder del dinero, el patrimonio y que por tanto ejerce su fuerza para la conservacin de las condiciones de rentabilidad y enriquecimiento que hasta ahora el Estado, sin intervencin, le ha otorgado, permitindoles experimentar los frutos del modelo de un modo incomparable e incontrarrestable respecto del resto de los estratos de la poblacin.

    En un estudio realizado por la Facultad de Economa de la Universidad de Chile3 publicado en marzo del 2013, se da inicio a una serie innovadora de investigacin en la direccin antes mencionada. Tomando como base la informacin de ingresos declarados ante el Servicio de Impuestos internos (SII), el trabajo tiene la ventaja de disminuir el sesgo por sub declaracin -aspecto tpicamente criticado a la Casen-; e incorporar la informacin de utilidades no distribuidas y las ganancias de capital en los ingresos finales de las personas. Los resultados son realmente de inters y slo vienen a confirmar la informacin socialmente percibida y la aproximacin que la Casen ha entregado durante los ltimos aos. Como se observa en el cuadro 2, dato que destacan los autores, para el ao 2010 el ingreso promedio del 0,01% alcanza los US 900.000 mensuales (11 millones de dlares aprox. al ao), mientras que para el 0,1% es de US 160.000 (algo as como 2 millones de dlares al ao).

    Cuadro 2: Ingreso per cpita promedio de distintos fractiles del ingreso del pas incluyendo las ganancias

    de capital (pero excluyendo las utilidades), 2005-2010.

    Fuente: Lpez, Figueros y Gutierrez (2013)

    De acuerdo a los resultados de este trabajo la participacin del 1% ms rico en el ingreso total del pas alcanza al 29% para el ao 2010, el 0,1% registra una participacin en el mismo ao de 16%, y el 0,01% de 8,9%, con un promedio en el quinquenio 2005-2010 de 30,5%, 17,6% y 10,1% respectivamente. Expresadas estas cifras en trminos comparados con la situacin de otras economas relevantes del mundo, no podemos sino reafirmar la condicin excepcionalmente favorable de la que han gozado en las ltimas dcadas el grupo de los ms poderosos en Chile.

    3 VerLpez,R.,Figueros,E.yGutierrez,P.:Lapartedellen:nuevasestimacionesdelaparticipacindelossperricosenelingresodeChile.EnDocumentosdeTrabajoFacultaddeEconomayNegocios,Universidadde Chile (Marzo, 2013).

    Percentil; (Fractil)Ingreso per cpita mensual promedio

    USD/per cpita/mensuales % ; (p)99 ; (p1-p99)1 ; (p99)

    ; (p99,9) ; (p99,99)

    Ao2005 2006 2007 2008 2009 2010

    476 489 573 639 692 71919.877 20.570 24.558 30.975 33.265 29.010

    109.637 115.172 140.814 193.240 195.689 160.743604.729 644.849 807.421 1.205.530 1.151.203 890.678

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    Cuadernos de Coyuntura

    Pas

    Chile

    EstadosUnidos

    Canad

    Alemania

    Japn

    Espaa

    Suecia

    Promedio

    30,5

    21

    14,7

    12,1

    10,9

    10,4

    9,1

    15,8

    17,6

    10,5

    5,8

    5

    3,5

    3,9

    3,4

    7,2

    10,1

    5,1

    2

    2,3

    1,3

    1,5

    1,4

    3,5

    1% Ms Rico

    %

    0,1% Ms Rico

    0,01% Ms Rico

    Participacinenelingresototaldelpasdel

    Cuadro 3: Comparacin Chile y otros pases en participacin del 1%, 0,1% y 0,01% ms rico en el ingreso

    total del pas incluyendo ganancias de capital (sin incluir utilidades retenidas), 2015-2010.

    Fuente: Lpez, Figueros y Gutirrez (2013).

    Por ltimo, el estudio entrega informacin comparada sobre el ndice de Gini que elabora el Ministerio de Desarrollo Social, con uno ajustado con criterios metodolgicos acordes con los datos obtenidos del SII, especialmente las ganancias de capital. Como vemos, la desigualdad en base a los datos de ingresos del SII, incluyendo las ganancias de capital y considerando la sub declaracin por evasin de impuestos segn estimaciones de SII, muestran un incremento de un punto aproximado en la desigualdad en Chile en toda la serie.

    Grfico 4: Coeficientes de Gini Casen/SII.

    Fuente: Lpez, Figueros y Gutierrez (2013).

    2. LA ESPECIFICIDAD DE LA DESIGUALDAD EN CHILE

    La desigualdad en el ciclo actual, est marcada por los rasgos que se imponen a partir de 1975 con la instalacin del modelo neoliberal en Chile. De este modo, desde una mirada de largo plazo, los factores desigualitarios del ciclo actual constituyen tanto la acumulacin de procesos que se desarrollan desde la formacin de Chile como nacin hasta 1973, es decir, rasgos que se arrastran y que definen en una medida importante la conformacin de la estructura social chilena; as como, los procesos especficos que se suman a partir de 1973 con la dictadura y que definen las bases econmicas, polticas e institucionales para una profunda revolucin capitalista neoliberal.

    2005

    0,570,55 0,55 0,55 0,55

    0,55

    0,630,630,62 0,62

    0,640,62

    2006 2007 2008 2009 2010

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    Fundacin Nodo XXI

    A partir de 1975 se establece un escenario en el que la retirada y jibarizacin del Estado es acompaada de la liberalizacin de la actividad econmica, la privatizacin de las empresas y recursos pblicas y/o nacionales, tanto como la transferencia de montos frescos de dineros estatales a privados para permitir la formacin, desarrollo, expansin y/o explotacin de negocios o de nichos de inters, especialmente vinculados a commodities transables en los mercados internacionales.

    Lo relevante de esta estrategia de acumulacin original, es que se trat de una intervencin privatizadora pro-empresariado, empero no necesariamente pro-mercado. Es decir, no se trat de una poltica orientada a la generacin de espacios de confluencia de capitales para que compitieran en un mercado libre y de manera transparente; se constituyeron y ampliaron mercados, s, pero bajo el signo de las condiciones definidas por aquellos grandes capitales, empresarios y/o funcionarios pblicos y militares convertidos a emprendedores, que con el apoyo estatal, definieron las condiciones de funcionamiento de los mismos.

    La estrategia de desarrollo a partir del primer ciclo neoliberal en los setenta y post crisis de los ochenta, trata precisamente de un esfuerzo dirigido a la generacin de espacios econmicos bajo la impronta de la concentracin del capital, y con ello la formacin de grupos econmicos locales, muchas veces en alianza con capitales extranjeros, constituyendo mercados altamente monopolizados y/o oligopolizados favorecidos por el Estado, eliminando toda posible competencia y definiendo las condiciones de funcionamiento de los sectores e industrias. En suma, la gran transformacin neoliberal en Chile, no se orient a la formacin de espacios de mercado en base a la libre competencia, el nfasis no estuvo en los mercados, como estuvo en el estmulo a la formacin y expansin de los grupos econmicos que intervienen en l.

    Junto con lo anterior, resulta determinante tambin, la privatizacin y mercantilizacin de espacios que en los perodo histricos previos estuvieron regulados por el Estado y concebidos bajo la ptica de los derechos, como la educacin, la salud y la previsin, para conformar sectores controlados por capitales que definen sus condiciones, calidad y mecanismos de acceso y exclusin. Este sello de la estrategia neoliberal, es uno de los factores ms significativos para entender las transformaciones que se han experimentado en los ltimos cuarenta aos.

    A partir de 1990 con el fin de la Dictadura, la Concertacin, a pesar del aumento en la inversin pblica en poltica social y en infraestructura, no har otra cosa que mantener y, en algunos casos, profundizar los lineamientos centrales impulsados por el neoliberalismo dictatorial. No obstante, es preciso resaltar que en trminos agregados, ha sido un estilo de desarrollo que ha logrado sus frutos, principalmente observados en el incremento del PIB, y en la colocacin de la economa chilena, desde el punto de vista capitalista, entre las ms estables de la regin.

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    Cuadernos de Coyuntura

    Grfico 5: Variacin PIB 1990-2012.

    Fuente: Elaboracin propia, datos Banco Mundial.

    Del mismo modo, no es extrao distinguir que la transformacin estructural haya tenido como consecuencia la formacin de un pas con una alta concentracin de la riqueza y el poder econmico, una distribucin del ingreso de las peores del mundo, con una brutal segregacin territorial y educativa, y con un acceso a la salud de calidad y a los medicamentos para tratamientos complejos en dependencia de la cuanta del dinero y el patrimonio familiar. Muestra de ello es que, la desigualdad, pese a disminuir parcialmente en los ltimos aos, no lo ha hecho al ritmo del crecimiento econmico ni tampoco a la par de la disminucin de la pobreza. Chile hoy registra niveles de desigualdad segn Gini de los ms elevados de Amrica Latina y el ms alto de los pases de la OCDE.

    Grfico 6: ndice de Gini Pases OCDE (despus de impuestos y transferencias).

    Fuente: Elaboracin propia en base a OCDE.

    Resulta una constatacin brutal, sealar que la retirada del Estado de su intervencin en la esfera de los derechos sociales para concentrarse en su accin focalizada no ha tenido ms efecto que una sostenida e inmodificable desigualdad. En la medida que el estado subsidiario incide en forma focalizada en una poblacin cada vez menor aquella que todava se rotula bajo la etiqueta de pobre con criterios de 1987- escasamente logra incidir en los patrones que definen a la desigualdad social.

    Islan

    dia

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    Sur

    PromedioOCDE

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    Variacin PIB Variacin PIB per capita (PPA)

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    De este modo, la especificidad de la desigualdad en el neoliberalismo chileno radica en que al mismo tiempo que el Estado abandona su papel garante del bienestar colectivo, favorece la conformacin de mercados en torno a los aspectos medulares que definen las condiciones bsicas de vida de la poblacin (educacin, salud, pensiones). En la medida que la relacin, el acceso y la participacin a dichos mercados depende nicamente de la capacidad de pago de los individuos, el ingreso y/o patrimonio se convierte en el nico factor que define el bienestar, as como las condiciones de libertad personal para la realizacin de los proyectos de vida. Luego, considerables franjas de la sociedad pierden capacidad de poder determinar sus condiciones de vida ms all de lo que puedan costear en el mercado.

    Disminuir entonces la desigualdad en el caso chileno remite particularmente a resolver el acceso democrtico de las personas a aquellos servicios y condiciones fundamentales que le permitan alcanzar una calidad de vida digna y no mnima-, sin depender del tamao de su ingreso o de cualquier otro tipo de patrimonio material. Ah radica el espacio igualitario que define y resuelve, en lo bsico, las condiciones del bienestar social en una sociedad democrtica. Mientras esos espacios fundamentales de las condiciones de reproduccin de cada sujeto sigan estando configurados por relaciones mercantilizadas, esto es privativas en relacin a la capacidad de pago de cada uno, la desigualdad seguir siendo un factor decisivo para comprender la actual conflictividad social pero tambin dibujar la direccin en que deben empujarse las reformas que quieran, ms all de las buenas intenciones, mejorar las condiciones de vida para la poblacin, sin excepciones.

    3. LOS DISCURSOS DE LAS FUERZAS POLTICAS EN RELACIN A LA DESIGUALDAD

    Entendido as el problema, y puesta la desigualdad en el centro del debate por diversas fuerzas sociales que se han movilizado, se ha instalado el segundo gobierno de Bachelet con el compromiso de resarcir los errores cometidos por las gestiones anteriores en una lnea alternativa a la impulsada, a saber, la neoliberal. Se posicionan as diversas fuerzas polticas que apuntan a precisar cul sera el problema, y cmo solucionarlo. En esa direccin en el actual debate se distinguen al menos tres posiciones que deben ser revisadas a la luz de lo ya expuesto: la que enfatiza en el debate sobre la pobreza, aquella que se preocupa por el conflicto y el riesgo que supone para la gobernabilidad, y una que cree resolver efectivamente la desigualdad mediante la regulacin de mercados.

    _La pobreza es primero

    Una posicin ampliamente aceptada desde la dcada de los ochenta y noventa, tanto por defensores como detractores de la dictadura, ha sido que el principal problema social a resolver en Chile es la pobreza. Al punto que no tendra sentido preocuparse de las diferencias econmicas y sociales entre unos que tienen mucho respecto de los otros que tienen menos si an no se ha resuelto el problema de la pobreza extrema. Introducir mejoras distributivas en pos de la desigualdad no har otra cosa, segn este punto de vista, que afectar el crecimiento y generar las condiciones para aumentar el desempleo, coartando las capacidades de emprendimiento de la pujante y cada vez ms extendida clase media chilena. Esto, en ltima instancia, se sostiene, profundizar la desigualdad.

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    Cuadernos de Coyuntura

    Desde esta perspectiva, no debera importarnos la brecha de riqueza mientras la mayora de la poblacin tenga el ingreso y el acceso al crdito suficiente para vivir cmoda y satisfactoriamente: Qu importa que algunos poderosos vivan con varias decenas de millones mensualmente si finalmente el ingreso promedio per cpita de cada ciudadano medio es lo suficientemente bueno para tener una buena vida!

    Este ha sido el discurso defendido histricamente por la autodenominada derecha social, encabezada por la UDI, pero tambin en los ltimos aos ha estado presente en el pierismo y Evpoli. Ahora bien, la preocupacin por la pobreza es primero se constituy tambin en el relato de la Concertacin en los noventa, y si bien no abandon discursivamente la cuestin de la desigualdad se habl de equidad-, en la prctica su poltica social y econmica termin contribuyendo a profundizar este problema.

    El argumento de la pobreza es primero se equivoca en el fundamento que separa la pobreza de la desigualdad. Ambos fenmenos si bien son posibles de distinguir dado que uno representa un estado4 mientras que el otro refiere a una relacin, en la prctica se encuentran estrechamente unidos.

    La pobreza da cuenta de un estado de carencia y privaciones bsicas que experimentan grupos de personas; la desigualdad, expresa la relacin de diferencias o brechas de recursos y riqueza entre unos y otros miembros de la poblacin. Desde un punto de vista tico, siendo la justicia una relacin de igualdad, la injusticia social, aquella que repara en la distribucin de la riqueza, se expresa principalmente en la pobreza y la desigualdad.

    En segundo lugar, se ha documentado que la desigualdad significa ms pobreza en un momento determinado del desarrollo econmico, en tanto que ste ejercer un menor efecto dinmico sobre la pobreza, es decir, una alta desigualdad incide negativamente en el efecto econmico que el crecimiento tiene sobre la pobreza, a menos que se implementen polticas especficas de redistribucin constante y significativas

    En un estudio del Banco Mundial, se calcul el efecto diferenciado del crecimiento en la reduccin de la pobreza en Brasil, elasticidad de la reduccin de la pobreza, ante diferentes niveles de desigualdad. De este modo, se estima, a modo de ejemplo, que Brasil podra reducir la pobreza a la mitad en 10 aos, con un crecimiento del 3% y mejorando en 5% el coeficiente Gini. Sin embargo, tardara 30 aos en alcanzar el mismo objetivo con un crecimiento de 3% de crecimiento y sin mejorar la distribucin del ingreso5.

    _La desigualdad como amenaza para la gobernabilidad

    Este argumento apunta a que la desigualdad genera conflictividad, o ms exactamente, es un factor social relevante, terreno frtil, para el conflicto y la alteracin de la paz social. Una posicin que ha sido sustentada histricamente por el eje concertacionista DC-PS

    4 Basndonosenelenfoqueabsolutodelapobrezaesposiblesudenominacincomoestado;teniendocomoreferenciaelenfoquerelativo,quetrataprecisamentesobredesigualdad,resultamenosseparabletodavapobreza y desigualdad. 5 MsdetallesverFerrantiD.,et.al.:DesigualdadenAmricaLatina.rupturaconlahistoria?EnBancoMundial,2003.

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    liderado por Boeninger (DC) y Lagos (PS), entre otros (le siguen Foxley, Correa, Velasco, Escalona, Andrade, entre otros), y que hoy suma a fracciones del empresariado menos vinculadas al pinochetismo y a las formas rentistas exacerbadas de acumulacin- como son los Luksic, los Saieh o Awad, o entidades como la Sofofa.

    En consecuencia, este sector observa positivamente medidas polticas que permitan reducir la temperatura social, mantener la estabilidad y la integracin sistmica necesaria para la produccin y la ganancia. Este sector del empresariado sabe que debe adaptarse, pagar ciertos costos coyunturales que le permitan conservar las bases del poder hasta ahora acumulado; no es que le preocupe especialmente la igualdad social, ni la disminucin de los indicadores de desigualdad, ms bien sabe que debe abrirse a reformas de mediano plazo para que en el largo se optimicen las condiciones y los factores que producen la riqueza; el factor humano, lo saben, es entre otros, uno de los ms determinantes para alcanzar el potencial de crecimiento, por lo que apoya la reforma educacional a sabiendas que eso implica, a largo plazo, un reordenamiento de las condiciones de acumulacin empresarial para quienes se encuentran rentabilizando en ese sector.

    _La neo Concertacin frente a la desigualdad

    El gobierno de Bachelet ha anunciado un programa de reformas que apunta a disminuir la desigualdad. Al punto que se ha sealado que el segundo gobierno de la mandataria iniciara un giro socialdemcrata en el pas que acabar con el libertarismo neoliberal y, con ello, establecer las nuevas bases del reconocimiento pblico de los derechos sociales para todos los ciudadanos. Se seala que, por fin, la nueva Concertacin hacindose eco de la demanda ciudadana, ha instalado en sus filas la prioridad de la desigualdad, y podr dejar atrs los amarres dictatoriales y las trabas de los autocomplacientes de la antigua Concertacin. Sin embargo, construir un proyecto que enfrente el problema de la desigualdad debera al menos cuestionar las bases que le han dado sustentabilidad al camino trazado por la ortodoxia neoliberal.

    Es efectivamente as?, se produjo un debate genuino en esta direccin? Y por ende el programa propuesto por el nuevo gobierno se hace cargo de la especificidad que alcanza hoy la desigualdad?

    Una caracterstica de la nueva Concertacin es la adhesin, cuasi religiosa, al programa de gobierno. No hay dirigente partidario que no la use cual muletilla del momento, en sus cuas y oratorias comunicacionales, y en lnea con la Presidenta, las actuales burocracias partidarias en las que no aparece dirigente histrico alguno- no han hecho, hasta el momento, otra cosa que repetir lo que la desde la Moneda se anuncia. La verdad sea dicha, desde los partidos de la Concertacin no se observan ideas ni debates renovadores significativos, como tampoco una lnea que busque indagar en los basamentos que definen a la desigualdad del ciclo actual. Lo que se aprecia hoy, es la ausencia de debate programtico que suponga, por ejemplo, orientaciones y lineamientos sobre el desarrollo a mediano y largo plazo, cuestin central en el debate sobre la igualdad en los Estados de Bienestar europeos que tanto se invocan. Se apela ms que a la discusin y al debate, a las mayoras matemticas en el Parlamento y a la iniciativa irrestricta del Gobierno. Lo que ha primado hasta ahora es la retrica y la propaganda. De tal suerte, resulta difcil pensar que estas reformas puedan ir en la direccin anunciada.

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    Cuadernos de Coyuntura

    4. ALCANCES DE LAS REFORMAS PROPUESTAS POR BACHELET

    Asistimos, muy tempranamente an, a conocer en detalle las forma especfica de las reformas anunciadas, por lo tanto, resulta muy pronto para definir los efectos distributivos e igualitarios efectivos de las mismas. Atendido el reclamo histrico de la derecha ms desembozada, todo parecer indicar que algn efecto causarn; sin embargo, al mismo tiempo, al observar la arquitectura que hasta ahora se ha mostrado de las propuestas, se sugiere que el camino adoptado descansa en los siguientes presupuestos:

    a. Reformar los mecanismos tributarios, eliminando algunos beneficios y condiciones especiales para el empresariado, propias del modelo dictadura-concertacin, que han favorecido el no pago de los impuestos a las utilidades. Apunta a la elusin, no al capital.

    b. Redefinir y regular el mercado de la educacin, sin necesariamente modificar su condicin de bien mercantil.

    c. Redefinir y regular el mercado de las pensiones insertando un agente que modifique las condiciones de la competencia en la industria (AFP estatal).

    d. Reformar el sistema electoral, eliminando el binominalismo.

    Puestas en perspectiva, las reformas resultan indiscutiblemente beneficiosas desde el punto de vista de los accesos y del efectismo redistributivo: nadie puede discutir que quitarles a los ms ricos algunos beneficios puntuales, en un escenario de total acaparamiento, y con eso financiar polticas sociales relevantes es positivo; nadie puede discutir que si en los prximos tres aos el 70% de los jvenes de los sectores ms vulnerables6 estudien gratis la educacin superior sea beneficioso; o que en la industria de las pensiones caigan los gastos de administracin producto de que entre a operar al mercado un nuevo agente. El punto es, que esos mbitos fundamentales para la vida de las personas, siguen estando en condiciones mercantilizadas, siguen operando a travs de mercados bajo orientacin neoliberal.

    Todo parece indicar que en el plano econmico Michelle Bachelet persistir en la senda iniciada por Piera, esto es, dar paso a la accin del Estado con ms mercado, ms intervencin pblica orientada a establecer nuevas reglas que regulen a los grupos econmicos de las diferentes industrias y sectores. Y que dichas reglas, al mismo tiempo, logren resguardar que el capital se recupere e incremente, de manera que hacia el final de su gobierno, logre mostrar que Chile ha iniciado un nuevo ciclo expansivo de crecimiento. Uno que permita fortalecer, en lo poltico, su propuesta de un neoliberalismo reformado, ms social, ms parecido a los neoliberalismos de Clinton y Blair que a los estados socialdemcratas europeos, con los que tan persistentemente, a juzgar por su discurso, se quiere parecer. De todos modos, habr que seguir observando estas tendencias.

    6 Expresinutilizadaenelmensajepresidencialdel21demayo.