Boletín MG Septiembre 2011

Misioneros de Guadalupe

Retos misioneros hoy, Cuba (pág. 2)Un día en la escuelaJuan Pablo ii (pág. 9)Culmen de una vocación(pág. 11)

Año 14. Número 155. Septiembre 2011

Consejo General

P. Juan José Á. Luna E., mgSuperior General

P. Raúl Ibarra H., mgVicario General

P. Fernando Montes L., mgSegundo Consejero

P. Raúl Nava T., mgTercer Consejero

P. Salvador Rojas V., mgCuarto Consejero

EdiciónAlmas y Diseño Gráfico

CoordinaciónAntonia Hidalgo López

Revisión y corrección de textosAlmas y Diseño Gráfico

Diseño EditorialAlmas y Diseño Gráfico

Impresión

Procesos Mecánicos

Boletín Informativo mg

Publicación mensual deMisioneros de Guadalupe

Año 14. Núm. 155. Septiembre de 2011

Cantera 29, Col. Tlalpan,Del. Tlalpan, cp 14000, México, df

Tel. (01 55) 5573 2500

www.mg.org.mx www.comunicacion.mg.org.mx

[email protected]@gmail.com

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AgendaSeptiembre

EditorialRetos misioneros hoy, CubaPadres Carlos M. Jiménez F. y Jorge Cruz Á., mg

Discípulos Misioneros desde AparecidaConfigurados con Jesucristo como discípulos misionerosP. Daniel Panduro F., mg

Comisión de Formación PermanenteDos más dos no es igual que cuatro, mi experienciainterreligiosa en CubaP. Óscar Mario Romero B., mg

Misioneros Laicos AsociadosUn día en la escuela Juan Pablo iiAlma Marisa Varela P., mla

Desde MéxicoCulmen de una vocación P. Juan Antonio Muñoz H., mg

Desde las MisionesCorea: Noticias de agosto P. Juan José Márquez E., mgMozambique: Tata muzungu María Dolores Martínez M., mla

Centro de Orientación VocacionalLa vocación en vasijas de barro P. Óscar Mario Romero B., mg

Dirección de EducaciónColegio Alonso Manuel Escalante y Escalante Lic. Francisco J. Jiménez L., camee

Club de NiñosFestejando a la infancia misionera en Guatemala Diana E. Reyes H., auxiliar del Club de Niños mg México

Volverá la pazApostolado de la oración

Índice

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Septiembre 2011

AgendaEventos Actividadesxxxi aniversario de la Fundación de la Misión de PerúJueves 15

cci aniversario de la IndependenciaViernes 16

xxvi aniversario del fallecimiento del P. Javier Chávez Urbina, mgLunes 19

Reunión del Consejo GeneralMartes 6

Reunión de la Dirección de PromociónMartes 13

Reunión de la Dirección de EvangelizaciónJueves 15

Ejercicios EspiritualesDel lunes 19 al viernes 23

Reunión ordinaria dpv (México)Del lunes 26 al martes 27

Boletín Informativo

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Retos misioneros hoy, Cuba Padres mg Carlos Manuel Jiménez Fernández y Jorge Cruz Ávila

Desde hace trece meses Cuba está de fiesta con la peregrinación de la sagrada imagen de la Virgen de la Caridad por todo el país, preparando la celebración del cuar-to centenario de su feliz hallazgo en el mar.

Del 27 al 30 de noviembre del 2010 Cam-pechuela, parroquia en donde trabaja el P. Agustín Luna C. mg, se vistió de gala: la Madre del Amor Hermoso la visitaba. Fue el primer Misionero de Guadalupe en reci-birla, él trabaja en el oriente del país, des-de donde comenzó su peregrinar. ¡Banda, coro, mariachi y de todo!.

Por el año 1612, en la banda norte de la Isla de Cuba, en la Bahía de Nipe, tres jovencitos: Juan Moreno, esclavo negro y los hermanos Rodrigo y Juan de Hoyos, indios naturales, se embarcaron en una canoa antes de salir

el sol para ir a buscar sal. Estando en el mar vieron una cosa blanca sobre la espuma del agua, no distinguían lo que podía ser y, acer-cándose más, les pareció un pájaro y ramas secas. Los niños dijeron: parece una niña, y en estos discursos, llegados, reconocieron y vieron la imagen de nuestra Señora la Virgen Santísima, con el niño Jesús en los brazos, sobre una tablilla pequeña, y en dicha tablilla unas letras grandes las cuales leyó Rodrigo de Hoyos: “YO SOY LA VIRGEN DE LA CARIDAD” y siendo sus vestiduras de ropa-je se admiraron que no estaban mojadas.

El 24 de septiembre de 1915, los veteranos de la independencia de Cuba enviaron una carta al Papa Benedicto xv, pidiéndole que declare Patrona de Cuba a la Virgen de la Ca-ridad. Su Santidad accede. Y desde ese mo-mento es la Madre de todos los cubanos.

Editorial

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Septiembre 2011

Septiembre del 2011 gozoso abrió las puertas de la Arquidiócesis de la Habana a la imagen de la Virgen “Mambisa” (que conduce hacia la libertad). Del 5 al 9 vi-sitó las parroquias de Nueva Paz y de San Nicolás de Bari, donde trabajan los Padres Juan Rivera T., mg, y Pablo Bejarano M., mg. La muchedumbre recibió a la Virgen del Amor Hermoso y la devoción desbordó toda expectativa. Plazas y jardines públicos se llenaron de fieles que, movidos por la fe, recibían a la Madre. No importó la fuerte lluvia en algunos lugares. ¡Bendita, Madre, por darnos a tu Hijo Redentor!.

El día 11 de septiembre la sagrada imagen visitó las parroquias de San Pablo de Cara-ballo y San Antonio de Padua, atendidas por el P. Carlos M. Jiménez F., mg. Aquí, como en las anteriores, fue recibida con banda de música, acompañada en andas, venerada con ofrendas de flores y luces de velas. La fe humilde del pueblo se fortaleció con ben-diciones de parejas de matrimonios, niños, embarazadas, ancianos y enfermos, que con

alegría recibían sobre ellos el agua bendita, recordando la gracia fecunda recibida en el bautismo. “Madre de la esperanza, eres una flor blanca y preciosa, llena de amor…”; “Virgen Mambisa, ¡que seamos hermanos!” cantaban con entusiasmo las comunidades.

La fiesta para los mg todavía no termina, pues los días 2 y 3 de diciembre el P. Jorge Cruz A., mg, recibirá la visita de la sagrada imagen en la parroquia de Cristo Rey, en la ciudad de la Habana, zona que comprende la Plaza de la Revolución con los principa-les ministerios gubernamentales, entre los cuales está la sede nacional del Partido Co-munista de Cuba y del Gobierno; Defensa e Interior, entre otros. En la organización del P. Jorge para esos días está la consagra-ción de la Patria a María de la Cari-dad, en el sitio donde celebró la Eucaristía Juan Pablo ii en la Plaza de Revolución, en su inolvidable visita a la Isla.

¡A Jesús, por María. La caridad nos une! es el lema de toda nuestra peregrinación.

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Boletín InformativoBoletín Informativo

Configurados con Jesucristo comodiscípulos misioneros

P. Daniel Panduro Fregoso, mg

a) Haciéndonos prójimos de todos, especialmente del que sufreEn tiempos de Jesús, como ahora, había mucha gente marginada. Nosotros hemos de asumir el ejemplo de Jesús y del Buen Samaritano: “La respuesta a su llamada exi-ge entrar en la dinámica del Buen Samari-tano (cf. Lc 10, 29-37), que nos da el impe-rativo de hacernos prójimos, especialmen-te con el que sufre, y generar una sociedad sin excluidos siguiendo la práctica de Jesús que come con publicanos y pecadores (cf. Lc 5, 29-32), que acoge a los pequeños y a los niños (cf. Mc 10, 13-16), que sana a los leprosos (cf. Mc 1, 40-45), que perdona y libera a la mujer pecadora (cf. Lc 7, 36-49; Jn 8, 1-11), que habla con la Samaritana (cf. Jn 4, 1-26)” (da, núm. 135).

b) Configurados por la acción del Espíritu Santo“El Espíritu Santo que el Padre nos regala nos identifica con Jesús-Camino, abrién-donos a su misterio de salvación para que seamos hijos suyos y hermanos unos de otros; nos identifica con Jesús-Verdad, en-señándonos a renunciar a nuestras menti-ras y propias ambiciones, y nos identifica con Jesús-Vida, permitiéndonos abrazar su

plan de amor y entregarnos para que otros ‘tengan vida en Él’” (da, núm. 137).

c) Teniendo como principal distinti-vo el amor mutuo“‘Ámense los unos a los otros, como yo los he amado’ (Jn 15, 12). Este amor, con la medida de Jesús, de total don de sí, ade-más de ser el distintivo de cada cristiano no puede dejar de ser la característica de su Iglesia, comunidad discípula de Cristo, cuyo testimonio de caridad fraterna será el primero y principal anuncio, ‘reconocerán todos que son discípulos míos’ (Jn 13, 35)” (da, núm. 138).

d) Practicando las bienaventuranzas del Reino“En el seguimiento de Jesucristo, aprende-mos y practicamos las bienaventuranzas del Reino […] Hoy contemplamos a Jesucris-to tal como nos lo trasmiten los Evangelios para conocer lo que Él hizo y para discernir lo que nosotros debemos hacer en las ac-tuales circunstancias” (da, núm. 139).

e) Compartiendo su estilo“El cristiano corre la misma suerte del Se-ñor, incluso hasta la cruz: ‘Si alguno quiere

Discípulos Misioneros desde Aparecida

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Enero 2011Septiembre 2011

venir detrás de mí, que renuncie a sí mis-mo, que cargue con su cruz y que me siga’ (Mc 8, 34). Nos alienta el testimonio de tantos misioneros mártires de ayer y de hoy en nuestros pueblos que han llegado a compartir la cruz de Cristo hasta la entrega de su vida” (da, núm. 140).

f) A ejemplo de María, modelo e ins-piración de todo discípulo misionero“Imagen espléndida de configuración al

proyecto trinitario que se cumple en Cris-to, es la Virgen María. Desde su Concep-ción Inmaculada hasta su Asunción nos re-cuerda que la belleza del ser humano está toda en el vínculo de amor con la Trinidad, y que la plenitud de nuestra libertad está en la respuesta positiva que le damos” (da, núm. 141).

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Dos más dos no es igual que cuatro, mi experiencia interreligiosa en Cuba

P. Óscar Mario Romero Becerra, mg

Recién llegados a la parroquia de Palma Soriano, el P. Daniel Panduro F., mg, y un servidor nos dispusimos a poner un poco de orden en las instalaciones parroquiales, que estaban muy deterioradas.

Estábamos haciendo algunos arreglos en el campanario y la azotea del templo pa-rroquial cuando vinieron en nuestra ayuda dos jóvenes hermanos. Ya entrados en el

Comisión de Formación Permanente

trabajo y la conversación uno de ellos, de nombre Franklin, me dijo: “Padre, ustedes son una bendición para este pueblo” me sorprendieron sus palabras pero más me asombró saber después que Franklin era evangélico pentecostal. Sin ser católico se había acomedido a ayudarnos sin esperar nada a cambio y además nos decía que éra-mos una bendición.

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A partir de ahí me di cuenta de que las co-sas entre México y Cuba son muy distintas: “dos más dos, no eran igual a cuatro” aún en asuntos de religiones.

Con el tiempo comencé a visitar su casa. La abuela, al igual que la única hermana de Franklin, pertenecía a la iglesia bautista; su mamá y su hermano eran católicos. Hice amistad con ellos y con el tiempo la abuela (bautista) reclamaba cuando pasaban va-rios días sin que fuera a visitarlos. Aunque se debatía el tema religioso, siempre reinaba la tolerancia y la cordura. Tenía la sensación que esos “debates” no eran para destruir o para atacar al otro sino para construir, para profundizar en la Verdad Divina.

Cada uno profesábamos “nuestra ver-dad” y entre todos podríamos hacer un acercamiento a la única Verdad. Para mí era comenzar a ver a nuestros “hermanos separados” con otros ojos. No todos eran aferrados a sus ideas, había aceptación por el otro a partir de su misma persona y no a causa de sus creencias religiosas.

Curiosamente me di cuenta que la abuela Mina coleccionaba desde hacía 40 años la hojita semanal de “Vida cristiana” que edi-tan los padres jesuitas en la isla y me llegó a expresar: “Padre, de verdad que esas hojitas no tienen un renglón desperdiciado”.

Tiempo después los sobrinos de Franklin comenzaron a ir a la catequesis católica para prepararse para el bautismo y la comunión.

Meses después fui invitado por el Gran Maestre de la logia masónica José Martí, ubicada en la calle principal de la ciudad, a dar una charla humanista a un grupo de masones. El Gran Maestre era miembro activo de la comunidad católica y parti-cipante de una de sus pastorales. Fue una experiencia única entrar en ese ambiente desconocido. El templo masón, un edificio que parecía impenetrable para quien no tenía membresía, fue abierto para mí. De grandes proporciones, construido con ma-dera a principios del siglo pasado, era por dentro casi oscuro, lleno de símbolos que yo no entendía y la sillería estaba acomo-dada en diversas gradas como si fuese un tribunal supremo.

Me sentí sorprendido de estar ahí de pie en un estrado masón, ante un grupo de unos 70 miembros de esa logia. Lo primero que les dije fue que si platicaba esto en México seguramente muchos no me lo creerían. Entre los masones encontré católicos prac-ticantes y no practicantes, protestantes de diversas denominaciones y algunos otros que, sin profesar una religión explícita, se decían creyentes en un ser trascendente y todopoderoso que ellos denominan como el “Gran Arquitecto del Universo”. Entre otros signos encontré en una mesa una Biblia que, según me explicaron después, leen, estudian e interpretan a su manera. Se autodenominan una fraternidad humanista y entre ellos, por motivos más humanos que divinos, viven una auténtica fraterni-dad. Quede esto para nuestra reflexión.

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Los encuentros con estas personas y mu-chísimas más me hicieron fijar la atención en el encuentro de Jesús con la samaritana, como el ejemplo máximo de diálogo inter-cultural e interreligioso (Jn 4, 1-42). Es Jesús quien toma la iniciativa y se acerca al pue-blo de Sicar, pueblo considerado pagano y distante en mentalidad de sus hermanos ju-díos. Jesús provoca el diálogo primero con la samaritana y después con sus paisanos. El diálogo parte de la grandeza del corazón de Jesús que desea el encuentro con las personas erradicando prejuicios y evitando desacreditaciones estériles. Actúa por enci-ma de todo prejuicio racial, social, cultural, religioso y va al encuentro de un pueblo a través del diálogo de corazón a corazón con una mujer samaritana. Se fija en la persona, en sus necesidades vitales.

No podía ser de otra manera, ya que Jesús vive volcado fuera de sí, es don gratuito para los demás, es don de Dios: “Si cono-cieras el don de Dios, y quién es el que te dice: ‘Dame de beber’, tú le habrías pedido a Él, y Él te habría dado agua viva” (Jn 4,10). Jesús se descubre entonces como el “agua viva” para todos, fuente común de vida eter-na que llama a participar de la comunión con Él.

Para nuestra reflexión: ¿Qué tan grande es nuestro corazón para aceptar a los demás tal como son por encima de prejuicios personales, culturales, raciales o religiosos? ¿Somos don gratuito para los demás de tal forma que les ayudemos en su crecimiento como personas?

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Un día en la escuela Juan Pablo ii Alma Marisa Varela Palma, mla

Nace un nuevo día, el sol se asoma lenta-mente, sus rayos comienzan a calentar, son las 6:45 de la mañana. La quietud se rompe con un desfile de risas y voces hablando en lengua local: chimanica, sabrá Dios lo que están diciendo, es muy poco lo que alcanzo a comprender. A lo lejos se ven pequeños grupos de adolescentes camino a la escue-la, muchos otros en bicicletas, unos se ven más cansados que otros, hay quienes bajan de las montañas sin desayunar o sólo con un chá (té) y un pedazo de batata (camote) en el estómago. En épocas de lluvias llegan empapados con los zapatos en los hombros y con sus cuadernos mojados, algunos tie-nen la suerte de tener una bolsa para prote-gerlos, es una gran lección para quienes lo tienen todo y no lo aprovechan.

A las 7:00 de la mañana suena la campana de entrada (en realidad un pedazo de riel), corren todos para concentrarse en el patio y cantar el Himno Nacional de Mozambique, minutos después rompen filas para pasar a sus respectivos salones entre gritos y carca-jadas. Me invade la alegría al escucharlos sa-ludar: ¡Bon día mana! (portugués: buenos días mana) o en su defecto ¡Mangwanani yaya! (chimanica: buenos días mana) lo que me da fuerza para seguir adelante…ver

Misioneros Laicos Asociados

en esos ojos negros la satisfacción de asistir a la escuela de las “Manas” no tiene precio.

El ambiente se aquieta, signo de que están en clase con sus profesores. En mi mente revolotean miles de ideas para trabajar en la escuela, me gustaría hacer esto, aquello o lo otro, sueños que van y vienen pero la reali-dad ahí está, parece estática, no cambia ni se mueve, lo cierto es que son dos años de haber iniciado juntos el camino.

No ha sido fácil consolidar el objetivo de desarrollar en los alumnos habilidades de pensamiento para ayudarlos a formar há-bitos y valores sin violentar su cultura…si, existen rasgos culturales que impiden caminar a la par; las estructuras sociales y


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familiares tienen bien definidos los roles que desempeña cada miembro de la familia de acuerdo a su sexo, lo cual impide desen-volver nuevas maneras de relacionarse con los otros y de asumir nuevos roles familia-res y sociales. Las labores de barrer y limpiar el salón de clases es considerado sólo para mujeres porque así lo han aprendido en casa y así lo han aprendido de sus antepasa-dos. Muchos alumnos sólo hablan chima-nica aun cuando el portugués es la lengua nacional, lo que hace que el aprendizaje sea más lento. Suena la campana, es hora de la salida, el ruido se hace cada vez más notable, están contentos de volver a casa. Al mirar desde la ventanilla el espectáculo de vida que se ofrece fuera de los salones me da la oportunidad de observar la realidad, son tantas las necesidades que se van descu-briendo en el diario convivir con alumnos y profesores, pero también son tantos los va-

lores culturales que vale la pena rescatar y depurar a la luz del Evangelio. Son muchos los desafíos que encontramos en nuestro caminar y que procuramos responder en la medida de nuestras posibilidades y con un gesto generoso de servicio.

El sol se oculta y junto con él las labores del día, gracias Dios por esta bendición, por esta oportunidad y privilegio de sembrar en una mies nueva. Señor dame sabiduría para descubrir y hacer lo que Tu quieres que haga en esta tierra… son muchas las necesidades y limitaciones que encuentro, enséñame a trabajar con lo que tengo, ensé-ñame a aceptar que los cambios son lentos y nunca permitas que mis sueños se mar-chiten ante las dificultades, déjame soñar y hacer lo que está en mis manos para cons-truir un mundo mejor.

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Cuando el jovencito Gabriel Casillas ingresó al Seminario de Misiones en 1960 tenía muy clara la idea del llamado que de Dios había recibido. Confiado, inteligente y entusiasta supo, desde temprana edad, que habría de ser sacerdote.

Culmen de una vocación P. Juan Antonio Muñoz Hernández, mg

Empezó por ser acólito en la parroquia de su pueblo natal y, posteriormente, aceptó hacerse cargo de la sacristía, donde llega-ba la revista Almas y por medio de la cual optó, sin dudar, por la vida misionera. Ini-ció entonces ciertas actividades de apoyo a

Desde México

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la catequesis con las que atraería a niños y adultos, aprovechando para hablarles sobre tierras lejanas en las que no habían oído ha-blar de Jesucristo. Apenas tenía quince años cuando se fue al seminario. Al poco tiempo, por ser de madurez precoz, entendió que debía salir a trabajar con sus propias manos y conseguir fondos para costear su estancia. Cuando obtuvo la cantidad necesaria volvió, plena-mente convencido de que su vocación era un don de Dios y, por ello, no debía enor-gullecerse de ser misionero como éxito personal. Así, con humildad y perseverancia, respon-día al llamado de Dios y solicitaba ser envia-do a la Misión de Corea, en 1969, para su

última etapa de formación. Fue ordenado sacerdote en 1974. Trabajó varios años en Corea, distinguiéndose por su cercanía con la gente, su alegría, su acción evangelizado-ra y su oración de agradecimiento al Todo-poderoso que le había permitido dar la vida al servicio de la Iglesia, más allá de nuestras fronteras. En mayo del 2010 regresó a México para ha-cerse cargo de la relación con los padrinos y madrinas de los Misioneros de Guadalupe pero cayó enfermo de cáncer, por lo que tuvo que desistir de dicha encomienda. El sufrimiento que el padre Gabriel tuvo que enfrentar fue inimaginable para noso-tros, ya que el tumor que lo llevó a la muerte estaba en la cabeza, mas él no se quejó a lo

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Septiembre 2011

largo de los meses que hubo de pasar re-cluido en su cuarto. Aquellos sufrimientos físicos con los que iba perdiendo facultades paulatinamente y por los que tenía que de-pender de otras personas, hicieron que cre-ciera espiritualmente. El padre Gabriel no cedió ante la enferme-dad porque era consciente de que su voca-ción bien podía ser ofrenda a favor de los

no cristianos, especialmente en circunstan-cias tan difíciles por las que pasaba. Es posible que la muerte del padre Gabriel, acaecida el 5 de agosto 2011, para algunos haya pasado desapercibida. Sin embargo, fue culmen de una vocación: la de un sa-cerdote misionero estimado y querido por cuantos llegaron a encontrarse con él.

P. Gabriel Casillas Horta MG24 noviembre 1944 – 5 agosto 2011

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Noticias de agosto P. Juan José Márquez Echeverría, mg

Iniciamos el mes con la noticia de que el P. Gabriel Casillas H., mg, miembro de esta Misión, había fallecido después de una penosa enfermedad. Oramos por su eter-no descanso, que el Señor le recompense todos sus trabajos a favor de la Misión, le recordaremos como un buen amigo y mi-sionero.

Sábado 6: Se celebró una Misa solemne en la casa regional por el eterno descanso del P. Gabriel Casillas.

Desde las Misiones

Domingo 7: Se celebró una Misa solemne de funeral por el P. Gabriel Casillas en la parroquia de Chayangdong donde él fuera párroco antes de salir para México a su nue-vo y último nombramiento como Director de Desarrollo.

Lunes 15: Celebramos en todo Corea la fiesta de la Asunción. Este día también se celebra el día de la liberación de Corea de la opresión japonesa, es un día de fiesta tanto nacional como religioso.

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Del lunes 22 al viernes 26: Nos dimos cita en la ciudad de Narita, Japón, para llevar a cabo la Semana de Estudio junto con los miembros mg de las Misiones de Hong Kong y Japón. La semana fue dirigida por el P. Benjamín Bravo con el tema “La forma-ción de agentes de evangelización al estilo guadalupano en la parroquia”. Nos acom-pañó el P. Raúl Ibarra H., mg, de parte del Consejo General, quien se encuentra en Japón haciendo la Visita Oficial mg.

Viernes 26: Regresamos a los respectivos lugares de Misión.

En este mes celebramos el aniversario de ordenación sacerdotal de los Padres Rami-ro Zúñiga G., (jueves 11), José Navarro N., (viernes 12), Jaime Palma C., (sábado 13), Antonio Moreno L., (domingo 14), y Juan Pablo Álvarez C., Corazón López S., y Héc-tor Díaz F., (lunes 15). También celebra-mos el cumpleaños del P. Ramiro Zúñiga G., (lunes 15).

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Tata muzungu María Dolores Martínez Martínez, mg

Muzungu en lengua local significa blan-co. Es así como somos llamados los extran-jeros en estas tierras de África y tata es un saludo, su equivalente en español sería: Hola.

Cuando llegamos a Machipanda, lugar ma-ravilloso rodeado de montañas, comenza-

Desde las Misiones

mos a vivir aquí donde finalmente hicimos nuestra casa, la gente nos miraba con extra-ñeza, otros con curiosidad, algunos otros con asombro y otros más con cierto recelo. Posiblemente debido a las circunstancias del colonialismo portugués que aún vive en la memoria de los más ancianos. Cuan-do la gente se acostumbró a vernos transitar

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por la calle nos decía muzungos, que por el tono como lo pronunciaban sonaba más o menos como extranjero o extraño, es decir, alguien que aún no es bienvenido.

Esta diferencia o indiferencia me hacía sen-tir incómoda y en más de una ocasión me dieron ganas de llorar. Sin embargo, un buen día, al regresar de Jecua, otra comunidad a cargo de mg, por el camino un niño pe-queño de escasos 2 o 3 años salió a nuestro encuentro corriendo, sonriendo y gritando ¡tata muzungu, tata muzungu! mientras agi-taba su manita de un lado a otro con tanto

cariño que se podía sentir en los gritos, éstas fueron las palabras más significativas que he escuchado. Fue la primera vez que me sentí en casa, me sentí aceptada como miembro de la comunidad. El niño, con su inocencia y la forma de pronunciar las palabras que sonaron como una dulce melodía que aun resuena en mi memoria y en mi corazón, me dio la bienvenida a esta tierra africana.

Cada vez que me siento triste o nostálgica recuerdo ese momento y mi corazón se llena de sosiego y me vuelvo a decir tata muzungu.

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Centro de Orientación VocacionalLa vocación en vasijas de barro

P. Óscar Mario Romero Becerra, mg

Siempre me ha llamado la atención la persona de Pedro, discípulo del Señor, y su vocación. Me llaman la atención su perso-na y su itinerario espiritual. Me he pregun-tado ¿porqué el Señor lo habría llamado a encabezar al grupo de los discípulos y des-pués su Iglesia, sabiendo sus limitaciones humanas?.

Sabemos que la palabra Pedro significa piedra. Piedra sí, que en los primeros años de seguimiento de Jesús se muestra frágil, quebradiza. Sin embargo, es en Pedro en quien más se manifiesta la obra de Dios y quien muestra los mayores cambios en su personalidad.

Su encuentro con el Señor fue a través de su hermano Andrés, juntos descubrieron en Jesús al liberador de Israel. La respuesta de Pedro es impetuosa, lo que va revelando su temperamento: “Y dejándolo todo, lo si-guieron” (cf. Mt 4, 18-22).

Desde el punto de vista humano Pedro podría decir de sí mismo: “soy pescador de oficio y tengo un temperamento explo-sivo, a veces impulsivo, pero creo y anhelo el cumplimiento de las profecías que dicen que es en Israel donde se manifestará el

Mesías, el Salvador, el liberador”. Se pre-senta a sí mismo con un temperamento difícil de tratar, pero como un hombre de convicciones profundas y con una gran esperanza.

En Jesús descubrirá la presencia del Mesías, fe que sin embargo, tuvo que ir in crescendo. Será Pedro quien acompañe de cerca al Señor en los momentos importantes de su vida pública y es constantemente requerido por él. Tendrá su primera prueba de fuego cuando es invitado a caminar en las aguas (cf. Mt 14, 29-31). Primero hay vacilación y duda, pero después sale a flote su fe y es fortalecido por la compañía de su Señor. Pedro, en la última cena, se niega a que Je-sús le lave los pies, pero después accede con nobleza a la petición de Jesús “entonces no solo lávame los pies, sino también las ma-nos y la cabeza”. Las tres negaciones en el

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momento de la pasión debieron haber pe-sado profundamente en su corazón, ya que descubre su falta de valor, su falta de lealtad en el momento en que más se le requería, al recordar que el mismo Jesús le había antici-pado todas estas cosas y que él mismo le ha-bría dicho: “aunque todos te abandonen, yo nunca te abandonaré” (cf. Mc 14, 29-30).

Pedro tendrá que dejar a un lado su orgu-llo para descubrir, con profunda humildad, de qué está hecho: de fragilidad y miseria.

Como decimos ahora, tocó fondo y se da cuenta de que sin el conocimiento y reco-nocimiento de sí mismo es difícil conocer a su Señor y seguirlo de verdad.

Jesús lo sabe todo, supo de la fragilidad de Pedro y sin embargo lo amó, lo llamó, lo volvió a llamar, lo eligió para encabezar su Iglesia. Pero antes lo confirma en la fe y en el amor: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas? él le contestó: ‘Señor tú lo sabes todo, tú sabes que te quiero’” (cf. Jn 21, 17).

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Colegio Alonso Manuel Escalantey Escalante

Lic. Francisco Javier Jiménez Landeros, Director del camee

El pasado 15 de agosto de 2011 inicia-mos un ciclo escolar muy especial en el Colegio Alonso Manuel Escalante y Esca-lante, debido a que se ha planeado seguir consolidando nuestros proyectos de for-mación, los cuales nos han caracterizado en el medio como un colegio de alto nivel aca-démico, y por otro lado, nos han ayudado a alcanzar un crecimiento óptimo que nos permite posicionarnos como una opción preferencial para las familias de la zona me-tropolitana de Guadalajara.

Para ello nos hemos planteado fortalecer la promoción de nuestra Filosofía Insti-tucional haciéndola realmente manifiesta en el esquema de nuestras actividades for-mativas, profesionales y de desarrollo de la comunidad escolar. Nuestra Filosofía tiene como elementos orientadores tres Ejes Rectores: Excelencia Académica, For-mación Humana y Cristiana en Valores, y Compromiso Social.

Los Ejes Rectores se continuarán promo-viendo a través de actividades concretas en las seis áreas de trabajo docente, a saber: el Área Académica y Desarrollo de la Investi-

gación, Cultura y Promoción de las Artes, Cívica y Desarrollo Humano, Deporte y Salud, Pastoral y Protección Civil Escolar.

Áreas que están integradas por docentes comprometidos en la organización, pro-moción y ejecución de actividades que promueven la formación en la convivencia, la competencia deportiva, el desarrollo y crecimiento humano, así como la investiga-ción académica y científica, entre otras.

Por otro lado, en este ciclo escolar se ha logrado completar uno de los grandes pro-

Dirección de Educación

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yectos educativos en el camee: La Secun-daria General. En junio de 2009 se conclu-yó el ciclo escolar con 70 alumnos de ba-chillerato. En agosto de ese mismo año se inauguró el nivel secundaria con un primer grupo. Si bien era un grupo pequeño, se logró fortalecer los esquemas de organiza-ción que exige la Secretaría de Educación Jalisco y adecuar los perfiles profesionales de los docentes a los parámetros concretos que se deben cubrir. Ahora, en agosto de 2011, ya son 144 alumnos inscritos, por lo que nos sentimos muy orgullosos de haber duplicado la matrícula escolar a dos años de iniciada la Secundaria.

La secundaria nos permite ampliar nuestros proyectos de formación y consideramos que nuestro mayor reto es lograr un perfil de egreso en nuestros estudiantes con una mayor preparación académica, evitando las deficiencias y problemáticas en todos los ámbitos de desarrollo.

El camee ha logrado aspectos muy impor-tantes al definir un perfil de excelencia de nuestros docentes, ya que un alto porcen-taje de ellos cuenta con el grado acadé-mico de maestría en distintas áreas profe-sionales y esto nos marca con un sentido de mayor compromiso y excelencia. Son docentes jóvenes, pero con mucho entu-siasmo, exigentes y comprometidos con nuestra Institución.

Un logro académico es que se ha consegui-do reducir en gran medida los porcentajes de reprobación y deserción gracias a que

nos hemos planteado como meta lograr el “Nivel Cero Reprobación”, mediante el acompañamiento de nuestros alumnos y la vigilancia continua en el avance, desempe-ño y evaluación.

Es importante señalar que la Coordinación Académica y Psicopedagógica ha desplega-do diversas acciones y estrategias que, junto con el esfuerzo de los docentes, ha permiti-do captar de inmediato cualquier situación o problemática que sea considerada como factor de riesgo para la reprobación, im-plementando para ello un Plan de Mejora Continua.

Por otra parte, en este ciclo escolar tam-bién se iniciarán los proyectos de “Escuela con Valores” y “Escuela Segura”, los cuales tienen como objetivo lograr un nivel de formación cívica y ética que asegure las condiciones humanas para la convivencia, el respeto ante las diferencias, la tolerancia y la búsqueda de soluciones para la autosegu-ridad y protección ante riesgos sociales que puedan afectar al individuo y le dificulten la búsqueda de sus proyectos.

Al mismo tiempo se deberá considerar que, a partir de este inicio escolar, la currícula del bachillerato será totalmente por competen-cias. Lo anterior significa que el esquema de enseñanza-aprendizaje debe ser claro y preciso, dando como efecto un enfoque de mayor aprovechamiento y resultados posi-tivos en la evaluación continua. También obligará a los docentes a incursionar en nuevas estrategias y tecnologías dirigidas a

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la consolidación del alumno como un ser capaz de construir nuevos conocimientos y asimilarlos como significativos.

Como ya es tradición en nuestra institu-ción, seguiremos promoviendo eventos académicos formativos, como son: En-cuentros de Ciencias y de Valores, Jornadas de Nutrición, Expo Universidades, Expo Empresarial, entre otras.

En cuanto a las instalaciones se han realiza-do adecuaciones de acuerdo a las tenden-cias tecnológicas, ya que todas nuestras aulas tienen acceso a Internet y cuentan con sistemas de proyección audiovisual, permitiendo que las clases tengan mayo-res recursos didácticos que promuevan un aprendizaje significativo.

Conscientes de que este es un trabajo cons-tante y de que en el ciclo escolar pasado fueron renovadas las butacas con el objeto de que nuestros alumnos tuvieran mayor comodidad para mejorar la concentración y mejorar su desempeño en cada clase, en este ciclo seguiremos fortaleciendo nuestra infraestructura en aulas, mobiliario, recur-sos didácticos y tecnológicos.

De igual forma se ha promovido el uso del uniforme escolar y deportivo de calidad para nuestros alumnos.

En general este es el contexto en que arran-camos el ciclo escolar 2011-2012, durante el cual seguiremos colaborando con el Ins-tituto para fortalecer nuestros principios.

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Septiembre 2011

Festejando a la infancia misioneraen Guatemala

Diana Elisa Reyes Hernández, auxiliar del Club de Niños mg México

En 1975 la onu estableció el 1º de octu-bre para celebrar el día del niño en este país de América central llamado Guatemala.

En este día se prepara una kermés en los diferentes establecimientos educativos o pequeñas convivencias donde se comparte entre los compañeros de clase, también se realizan caminatas por la mañana con la par-ticipación de niños de diferentes institucio-nes acompañados de personajes infantiles.

Sin embargo la realidad diaria en Guate-mala es diferente, la miseria en la que vive la infancia en este país es cruel. Alrededor de 5000 niños y niñas viven en las calles. La mayoría tienen entre 7 y 14 años, provienen de barrios pobres o marginados. Esta reali-dad es causada por el maltrato psicológico y las condiciones económicas por las que atraviesa la familia, que los obliga a irse de casa para vivir en las calles. Estos niños pa-san los días en los lugares más concurridos por la gente, mercados, estaciones de au-tobuses, parques, corredores, etcétera. Por vivir en estas condiciones están expuestos

Club de Niños mg

a enfermedades, drogas, o se ven forzados a delinquir para poder sobrevivir.

La unicef, en cooperación con organi-zaciones nacionales y el gobierno1, creó programas para reducir el retraso en el cre-cimiento de los menores de tres años, ayu-dar a que los niños que sufren desnutrición aguda se recuperen y ayudar a las mujeres embarazadas.

Estas medidas en Guatemala han logrado progresos en la reducción del número de

1 Plan Nacional para la Erradicación de la Desnutrición Crónica

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niños y niñas menores de cinco años con un peso inferior al normal. Aun así la tasa de desnutrición es alarmante, ya que el 23% presenta bajo peso y uno de cada dos pre-senta retraso en el crecimiento, es la mayor tasa de la región y una de las más elevadas del mundo.

Este día quiere centrar la atención pública sobre las vidas de los niños y niñas de Gua-temala, haciendo especial énfasis en la pro-tección de sus derechos. Las cifras son muy lamentables, por la falta de oportunidades, la desigualdad social, la desnutrición, et-cétera, los niños son los más vulnerables y sufren las consecuencias. Se necesita ma-yor acción y preocupación estatal por estos problemas que enfrentan a diario.

Los niños se hallan más cerca de Dios, no conocen aún el mal, lo único que conocen

es la fe y la confianza, que deberán reafirmar los padres de familia para que puedan cami-nar mejor, libres de todos esos problemas que existen, logrando en el futuro cambiar a este país que necesita estabilidad social.

Guatemala abrió sus puertas desde 1987 a los Misioneros Laicos Asociados, mla, quienes están comprometidos a ayudar en la reconstrucción de la sociedad, enseñan-do valores cristianos que son instrumentos de reconciliación, paz y verdad, sembrando así la semillita en los pequeños que apren-den a ver a los demás como hermanos, que festejan este día como una celebración que los hace vivir su infancia con alegría, gozo y orgullo.

Todos misioneros1

Aunque se repita mucho que todo cris-tiano es un misionero, parece que no termi-namos de creérnoslo. Se sigue pensando en «las misiones» y sus misioneros por un lado y, por otro, en los cristianos en general que ayudan económicamente y aplauden, como en el estadio.

Sin embargo, el envío misionero que hizo Jesús de los 72 discípulos –72 es un nú-mero simbólico que designa a todas las naciones (Gn 10)– señala en el Evangelio el comienzo de la gran fiebre que caracte-rizaría a la Iglesia primitiva: ser toda ella misionera.

Vivir en una dichosa tensión entre atender a los de dentro de la comunidad y abrirse a los que todavía no lo están.

Este relato de los 72 no puede instalarnos en las gradas del estadio, sino hacernos ba-jar al terreno de juego.

Volverá la paz

1 Transcripción del libro: Volverá la paz, Mensajes vocacionales y misioneros, Cali, pág. 14

Para que los docentes sepan transmitir el amor a la verdad y eduquen según los auténticos valores morales y espirituales.

Para que las comunidades cristianas dispersas en el continente asiático proclamen el Evangelio con fervor, dando testimonio de su belleza con la alegría de la fe.

Boletín MG Septiembre 2011

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