Una ley injusta y desigual La Ley de Violencia contra la Mujer es injusta y desigual.; ni protege a las mujeres verdaderamente maltratadas ni da soluciones a los hombres, culpables por el único motivo de nuestro sexo. Es evidente que esta Ley va contra los Derechos Humanos y es anticonstitucional.

Somos muchos los que nos hemos encontrado desasistidos por la Justica, no vale conque al final salgas absuelto, quien lo consigue afortunadamente. Aunque la absolución sea una solución parcial, para quien ha sido denunciado impunemente, siempre tiene la espada de Damocles sobre su cabeza, si a la ex pareja femenina se le ocurre volver a denunciar aunque de nuevo sea denuncia falsa.

El problema es que la orden de alejamiento ya es en sí una condena y, muchas veces, con consecuencias graves. Primero es la ruina económica del denunciado, quien entra a formar parte de un listado de “presuntos maltratadores” del que no es sencillo salir, sí entrar, desde el minuto uno. Dicho listado está al acceso de quien pida referencias y es muy normal que una empresa no dé trabajo a quien está allí apuntado, sea o no inocente.

Incluso continúas en el mismo hasta que dediques varios días a ir a comisaría, rellenar unos documentos, enviarlos a Madrid, esperar un tiempo, el que ellos quieran. Luego viene el tema del “por qué”. No entiendes las causas cuando tú no has hecho nada, pero sí ha caído sobre ti el poder de la Justicia.

¿Por qué hemos de ser culpables por el simple hecho de ser hombres?. (Paco Roldán)

Pag.

1

Número 1 Junio 2016

Asociación por la Dignidad, Justicia e Igualdad Teléfono: 658 50 73 21. Mail: asodijusticiaeigualdad@gmail.com

El rincón de Esperanza

A día de hoy, y viendo lo visto, hablemos de la Custodia

Compartida, mal llamada ya que desde el nacimiento del niño la custodia pertenece a ambos cónyuges sin que se

genere ninguna polémica.

Dicho esto surge la segunda parte del problema que es cuando se aplica la custodia compartida, por el cual ellos ya no tienen que pasar una pensión dado que el tiempo es igual para ambas partes, y surge el tan famoso “si estás trabajando para que se lo quede tu madre me lo quedo yo”, y yo pregunto ¿queri-da si tu trabajas con quién se que-da? ¿quién le asiste si esta enfer-mo? ¿quién asiste a las reuniones del colegio? ........... Así nos podríamos hacer infinidad de preguntas pero visto lo visto y

El menor tiene derech-os

¿Cuándo empieza a generar-se tal polémica? Cuando em-pieza a deshacerse el vinculo de la pareja, olvidando que en tales trámites no interviene el menor, que a efectos legales sigue teniendo los mismos derechos que tenía, sin que por ello se deba cuestionar su custodia. La custodia exclusi-va se le da a la madre, rele-gando al padre a un segundo plano. La educación del niño debe ser de ambos.

Pag.

2

desde mi humilde opinión la cus-todia compartida es un derecho que asiste al menor desde su nacimiento, y en la que jueces, abogados, educadores, sicólo-gos, etc…, tenían que ponerse en firme para no desasistir en ningún momento al menor de ninguno de sus progenitores.

“Y siendo honestos dejemos de usar al menor como un

cheque en blanco sin que su opinión sirva para nada,

creando verdaderos problemas de identidad en

ellos”.

.

Los argumentos de Óscar Aparicio Ya  de  antiguo,  conocemos  a   la  familia  como  modelo  de  organización  social  en  nuestra  especie   humana,   incluso   los   primates   se   organizan   en   torno   a   la   familia   paternalista,  pero   no   exclusivamente   paternalista,   pues   hay   excelentes   hembras   que   ejercen   una  fuerte  influencia  en  el  grupo…  mas  no  es  este  nuestro  objetivo  hoy.                           Siguiendo   la   huella   del   ser   humano   sobre   la   faz   de   la   tierra,   rápidamente   nos  encontramos  con  una  serie  de  sociedades  que  abandonan  el  aislamiento  de  la  caverna  y   se   relacionan   en   grupos   cada   vez  más  grandes   y   con   grupos   vecinos   a   los   que   se  encuentran  cuando  salen  a  cazar  o,  prioritariamente  las  mujeres,  cuando  avanzan  para  recolectar  alimentos   frescos  más  duraderos  …  en  ese  momento,  a   falta  de  una  Norma  común  que  les  guiara,  poco  a  poco  empiezan  a  surgir  creencias,  primero  en  la  Naturale-­za,  la  Madre  Tierra  o  la  Matrona,  fijando  el  grupo  una  serie  de  normas  básicas  de  com-­portamiento  muy  enraizadas  en  el  respeto  a  la  naturaleza  y  al  entorno  más  próximo  que  les  alimenta  a  diario.                          Aún  después  de  extendida  la  primera  gran  religión  que  excede  el  propio  ser  hu-­mano  como  punto  de  referencia  (la  Madre,  la  Madre  Tierra,  la  Naturaleza)  para  designar  algo  espectacular  pero   lejos  del  contacto  directo,  del  alcance  físico  y,  por   tanto,  de  un  posible  control  por  parte  del   ser  humano,   tal   cual  es  el  astro  solar,  en   la  mítica  de   los  grupos  humanos  viene  triunfando  un  sistema  de  organización  estratificada  y   funcional,  fuertemente  orientada  a  la  conservación  de  las  buenas  relaciones  con  los  grupos  huma-­nos  vecinos  y  al  intercambio  “comercial”  que  acabará  abandonando  el  sistema  de  true-­que  por  otros  métodos  más  “internacionales”.                           De   este   comportamiento   pacífico   y   “familiar”   instintivo   que   se   institucionaliza,  llegan  las  primeras  manifestaciones  del  Derecho  de  Gentes  en  la  Grecia  pre-­cristiana  y  el  antiguo  Egipto,  por  citar  dos  ejemplos,  donde  la  familia  se  institucionaliza  y  es  la  que  promueve,   conserva  y  garantiza   las  relaciones  humanas,   incluso  entre  aldeas  o  nacio-­nes…  pero  ¿qué  suerte  de  “familia”  se  institucionaliza?.                          Curiosamente  en  el  antiguo  Reino  de  León,  en  la  Península  Ibérica,  prevalece  una  sociedad   completamente   a-­típica  para   un   entorno   bélico   y   de   constantes   luchas   entre  tribus  vecinas,  una  sociedad  decididamente  matriarcal  donde  la  fémina  es  la  que  define  las  estrategias  del  grupo…  de  ese  tipo  es  en  la  actualidad  el  esquema  todavía  observa-­ble   entre   el   pueblo   israelí,   donde,   curiosamente,  es   la  mujer   la   que   transmite   el   linaje  (incluso  el  apellido)  a  la  descendencia  (jamás  el  varón)…  pero  volvamos  a  nuestra  Pe-­nínsula  Ibérica.                          Al  esquema  básicamente  tribal  y  “separatista”  de  la  Hispania  pre-­romana,  sucede  una  normalización  brutal  a   todos   los  niveles,   llegando  nuestra  Ley  de   las  Doce  Tablas  (de  Diocleciano),    pero  también  toda  una  tradición  y  hasta  una  lengua  que  adoptamos  al  igual  que  el  resto  del  Imperio.                      En  este  momento,  en  una  sociedad  fuertemente  orientada  hacia  el  comercio  y,  por  tanto,  militarizada,  el  varón  detenta  la  capacidad  decisoria  de  la  unidad  familiar  pero  también  “decreta”  el  grado  máximo  de  protección  para   lo  que  constituye  el  máximo  "te-­soro  del  Imperio":  los  "futuros"  ciudadanos…  De  este  modo,  se  desarrollan  todavía  más  los  mecanismos  de  protección  de   la   infancia  y  más  concretamente  de   la  mujer  o  de   la  niña-­futura  mujer  que  ya  venían  definidos  desde  la  Antigua  Grecia.                           Esta   situación   ya  desarrollada  del  Derecho  de  Gentes,   se   sigue   desarrollando  progresivamente  y  sin  interrupción  hasta  más  acá  de  los  años  setenta  cuando  la  familia  ya  es  una  institución  fuerte,  perdurable  e  inviolable,  de  modo  que  únicamente  y  en  caso  de  delito  flagrante  de  extrema  gravedad  y  únicamente  la  Autoridad  Judicial  puede  inter-­venir,  ocasionalmente  con  la  competencia  de  la  Fiscalía  (que  se  encargará  de  proteger  en  todo  momento  los  derechos  de  las  posibles  víctimas:  además,  a  ultranza).                          Pero  el  Estado  de  Derecho  cambia,  y   las   leyes  y   las  normas  también  cambian:  con   que   llegamos   al   presente   Milenio,   a   los   años   dos   mil   cuatro-­dos   mil   siete/ocho  cuando  finalmente  SE  DEROGA  EL  CÓDIGO  PENAL  ESPAÑOL  surgido  de  la  tradición  greco-­latina   española   y   Rodríguez   Zapatero   PROMULGA   EL   ACTUAL   CÓDIGO   PE-­NAL,  ese  mismo  Código  que  comienza  costándonos   la   friolera  de  haber   impedido   (se-­gún  la  letra  de  este  “nuevo”  Código  Penal)  al  Estado,  concretamente  a   la  Justicia,  HA-­BER  IMPEDIDO  DICTAR  Y  APLICAR  CONDENA  CONTRA  CUALESQUIERA  DELITOS  CRIMINALES,   incluso   en  casos   donde   las  pruebas   físicas   son   abrumadoras   (por   citar  aquí   tan   solo   un   ejemplo,   un  ciudadano,   en  Sede   Judicial   y   grabando   las   cámaras  de  seguridad,   ataca   sorpresivamente   a   un   agente,   consigue   el   ciudadano   sustraerle   el  arma  reglamentaria,  y  logra  efectuar  varios  disparos  antes  de  ser  neutralizado:  el  agen-­te,  por   supuesto  es   la  primera  víctima,   y   la  única  víctima  mortal  del   incidente…  el   res-­ponsable,   identificado  y  acusado  con  todo  el  peso  de  la  Ley,  jamás  pagará  ni  por  este  delito,  ni  por  otros  que  cometió  en  aquellos  días),  ¡¡durante  nada  menos  que  algo  más  de  un  año!!!      

Pag.

3

   “Regresemos  ahora  pues  a  la  más  rabiosa  actualidad  de  nuestros  días,  cuando  ya  la  fami-­lia  no  está  ni  tan  siquie-­ra  en  crisis,  sino  que  es  “especie  en  muy  grave  riesgo  de  extinción”

“La violencia de género no es un problema que afecte al

ámbito privado. Al contrario, se manifiesta como el símbolo

más brutal de la desigualdad existente en nuestra sociedad.

Se trata de una violencia que se dirige sobre las mujeres por

el hecho mismo de serlo, por ser consideradas, por sus agresores, carentes de los

derechos mínimos de libertad, respeto y capacidad de

decisión”.

Para el PSOE no existe la violencia de la mujer hacia el hombre

Plantea un "gran acuerdo social para la erradicación de la violencia contra las mujeres" entre el Gobierno, comunidades autónomas, entidades locales y agentes políticos, económicos y so-ciales; una "ventanilla única" en materia de violencia de género; y el refuerzo de las redes de centros de acogida y la movilidad de las vícti-mas.

Para el PP no existe la violencia de la mujer hacia el hombre

Modificación de la LVG para que "se conciba a las mujeres como sujetos activos y no como víctimas" incluir todas las formas de violencia machista que recoge el Convenio de Estambul. Garantía de una "alternativa habitacional inmediata para las víctimas y acceso prioritario para prestaciones sin necesidad de  denuncia  previa".  

Para Podemos no existe la violencia de la mujer hacia el hombre

Pag.

4

“Somos un colectivo dejado de la mano de los políticos. Desde aquí hago un llamamiento a todos, hombres y mujeres, para unir nuestras fuerzas bajo un mismo sello”

Estamos en crisis. En eso estamos todos de acuerdo. Pero ahora no me voy a referir a la económica, quiero hablar de la política; tuvieron oportunidad de ponerse de acuerdo y no lo hicieron, desoyendo el mandato del pueblo, de todos nosotros. ¿Lo harán después del 26J?, la experiencia dice que será difícil si los resultados son similares a los anteriores comicios.

Me han desilusionado, ninguno de ellos ha hablado de soluciones a las necesidades e inquietudes ciudadanas; sólo saben hablar de ellos y mal hablar de los otros. Si hablamos de

dignidad, justicia e igualdad el asunto flojea por todas partes. Si nos referimos a denuncias falsas, custodia compartida, maltrato de género y demás. Ya no flojea, sencillamente no existe.

Somos una colectivo dejado de la mano de los políticos, a quienes sólo les interesa ayudar a grupos con intereses oscuros, siempre económicos, que suponen votos; estómagos agradecidos a los que tienen que alimentar. Desde aquí hago un llamamiento a todos los afectados por la Ley de Violencia Contra la Mujer, hombres y mujeres, para unirnos bajo un solo sello. Paco Roldán (Presidente de ASODI)