Arquitectura Historia Moderna Del Arte Renacimiento

7/27/2019 Arquitectura Historia Moderna Del Arte Renacimiento

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Historia del ArteModerno.

Renacimiento

Jos Enrique Garca Melero - Antonio Urquzar Herrera

Grado en Historia del Arte.


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Historia del Arte Moderno: Renacimiento

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CAPTULO 1. LA EDAD DEL

HUMANISMO

Introduccin: la mirada esttica

1. Renacimiento. El origen del trmino y su definicin clsica

2. Modelos de Renacimiento y vas de expansin

3. La imprenta y la difusin del Renacimiento

4. Clasicismo y Manierismo

5. (Re)escribiendo el Renacimiento

6. El ciclo humanista

Introduccin: la mirada esttica

La idea de arte no es una categora universal y por encima del tiempo. Por ello tanto estanocin como el propio relato de la Historia del Arte han sufrido una importante revisin en losltimos aos.

Sin embargo la propia presencia de la Historia del Arte ha construido el modo particular derelacin con la arquitectura, la pintura y la escultura del pasado que tiene la mayor parte de lasociedad contempornea en nuestro contexto cultural.

Hay que reconocer que las bases tericas que han alimentado esta mirada esttica denuestro mundo se han desarrollado a partir de la teora artstica que se formul en elRenacimiento como pensamiento de vanguardia. Adems el translado de los objetosartsticos al museo ha motivado que tal mirada esttica se convierta en su modo habitual delectura.

La produccin artstica de los siglos XV y XVI, su teorizacin coetnea, su categorizacincomo arte y la construccin intelectual en torno a ellas han influido e influyen hoy en danuestra conciencia moderna occidental, lo que hace necesario el conocimiento profundo dela misma.


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1. Renacimiento. El origen del trmino y su definicin clsica

El trmino Renacimiento tiene una larga trayectoria en la historia de la cultura, y dentro de lahistoria del arte ha sido uno de los conceptos ms aceptados y utilizados. Y como cualquierconcepto, este trmino ha configurado una tradicin que acta de forma decidida sobre laaudiencia que se enfrenta a obras de arte as etiquetadas, creando unas expectativas distintasde las que tuvieron los receptores originarios.

Esta antigedad, la aparicin de otros conceptos relacionados como el de Manierismo, y eluso que se hace de ellos en otras parcelas de la historia general, la literatura etc. hacennecesaria una clarificacin sobre el trmino

Tradicionalmente se ha sealado el origen del trmino en 1829, de la mano del francsBalzac. En 1855 Michelet lo consagrara cuando lo utiliz como concepto al dedicar el captuloVII de su historia de Francia a La Renaissance. Segn Panofsky, con ello el significado de estevocablo pas de lo limitado pero inconcreto (renovacin de algo en cualquier momento dado) a

lo concreto pero global (renovacin de todo en el perodo particular al que se considerabaintroductor de la Edad Moderna).

A partir de entonces por Renacimiento se alude al perodo histrico que sucedi a la EdadMedia occidental, caracterizado por la recuperacin de los valores clsicos del mundogrecolatino.

Burckhardt en su Die Kultur der Reinassance in Italien (1860) universaliz el concepto y ledot de los contenidos especficos que cristalizaron en un clsico historiogrfico, postulandoque el fenmeno haba obedecido a la existencia de unos cambios culturales profundos quedebieron dar pie a una sociedad nueva y por ende a un arte nuevo.

Burckhardt defini la cultura del Renacimiento a partir de seis lneas explicativas:

- el nacimiento del Estado- el desarrollo del individuo

- el resurgir de la antigedad clsica

- el descubrimiento del mundo y del hombre- la sociedad y las fiestas- la religin y la moral

Este esquema se fundamentaba en dos elementos bsicos: la ruptura con la Edad Media y laconfluencia de las transformaciones sociales, econmicas, polticas, religiosas y culturales.As, el Renacimiento pas fue interpretado como el momento en el que los grandes artistasrompieron con el pasado para formular un arte nuevo basado en las referencias al mundo

clsico, a la naturaleza y al hombre.

Sobre estos contenidos ideolgicos, el primer desarrollo de la Historia del Arte comodisciplina tom una serie de determinantes estticos, identificando el Renacimiento con lasimetra, el equilibrio, la bsqueda de la belleza y la claridad compositiva y expositiva.

Pero habremos de ver cmo estos supuestos no siempre se ajustan a la variedad de artedesarrollada en los siglos XV y XVI.

2. Modelos de Renacimiento y vas de expansin

Por muchos aos, el concepto de Renacimiento establecido por Burckhardt fue asumido singrandes problemas.


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No fue hasta que surgieron los escritos de la escuela de Aby Warburg y los trabajos demedievalistas como Huizinga, cuando se comenz a reconocer que entre la Edad Media y elRenacimiento no hubo una cesura tan sealada, que el arte no se convirti en un trabajoindividualista y que, por ejemplo, el arte religioso (el mayoritario) sigui funciones y modelosmedievales.

Con todo, hoy en da se acepta el concepto si se le corrigen los matices expuestos antes ylos distintos paradigmas de la nueva Historia del Arte parten de un Renacimiento comoproceso cultural y social.

Lo que se promueve hoy en da es el estudio del Renacimiento no slo desde lo formal (esdecir, lo estrictamente esttico), sino el saber qu relaciones culturales y sociales existieronentre artistas, patronos y el pblico de las obras.

Una consecuencia de esta visin hace que se deba valorar hasta qu punto el concepto,acuado para la Italia del siglo XV, es vlido en otros espacios y tiempos. Durante muchotiempo se pens en un simple proceso de difusin, lento pero firme, de la mano de la llegadade artistas y escritos italianos a otros pases.

Pero el proceso no debi ser tan sencillo: muchos de los nuevos valores culturales yartsticos surgidos en Italia eran completamente ajenos a la mentalidad del resto de pases.Burke lo ha descrito as: la Italia que los no italianos imitaban era hasta cierto punto unacreacin suya, hecha a la medida de sus necesidades y deseos, como lo era la Antigedad quetanto ellos como los italianos aspiraban a imitar.

Hay que recordar adems que Europa tuvo tambin el referente de los Pases Bajos y delos estados alemanes. Erasmo, Van der Weyden o Durero eran muy seguidos en el resto deEuropa, donde muchas veces se miraba ms hacia ellos que hacia Italia, e incluso en la propiaItalia se adoptaban elementos del norte.

3. La imprenta y la difusin del Renacimiento

La expansin de las ideas y formas del Renacimiento por Europa tuvo lugar a travs dediferentes vas.

El mecanismo ms importante desde lo cualitativo fueron los propios desplazamientos deartistas y patronos. Igualmente la educacin humanista favoreci la asimilacin del nuevoarte, pero no hay que olvidar la importancia clave que tuvieron los libros y estampas quecomenzaron a circular por toda Europa tras la invencin de la imprenta.

De hecho, se ha sealado que el libro impreso fue el elemento clave que determin la

evolucin de la arquitectura europea del siglo XVI, no slo porque permiti que las ideascircularan velozmente, sino porque estandariz las propias imgenes.

Antes de la imprenta, los manuscritos sobre arquitectura contaban con escasas imgenes, yque adems variaban entre s. Es por ello que el primer Renacimiento italiano, el del siglo XV,lleg muy deficitariamente al resto de Europa.

No fue hasta que aparecieron nuevos tratados impresos, con multitud de grabados ylminas, que se ofrecieron a los arquitectos europeos un catlogo de modelos listos para sucopia y construccin. El propio Serlio lo reconoca en su libro IV: era un mtodo al alcance decualquier arquitecto.

Por otra parte, el anlisis de la relacin entre la imprenta y las artes visuales nos muestra

que la difusin de la pintura y la escultura mantuvo la importancia del medio impreso y ladescoordinacin entre ideas y formas. Aunque en los tratados no proliferasen los dibujos, la


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propia imprenta facilit la existencia de estampas y repertorios iconogrficos ilustrados queexplican la expansin por toda Europa de los modelos compositivos, iconogrficos, e inclusolos mismos tipos fsicos que fijaban los artistas italianos y flamencos.

El hecho de que esta homogeneidad se extendiese ms all del siglo XVI hace cuestionar lasetiquetas tradicionales atribuidas al Renacimiento: el Barrocode los siglos XVII y XVIII sigui

reproduciendo ampliamente las composiciones renacentistas de las estampas del siglo XVI. Yes que el recurso a la estampa no slo facilitaba el trabajo, sino que otras veces era unaexigencia contractual del comitente o un valor seguro de xito.

Es por ello que la falta de coordinacin en la difusin de las ideas (lo que significaba cadapintura copiada) y las formas (el cmo estaba trazada) fuera una constante. Se podan copiarposturas y figuras de un cuadro mitolgico en cualquier otra composicin que no tuviera nadaque ver con el original.

4. Clasicismo y Manierismo

El Renacimiento se vincula habitualmente con la nocin de Clasicismo, por lo que convienecomenzar aclarando este trmino, que tantas interpretaciones tiene en la Historia del Arte.

En principio, designaba al arte de la antigedad griega y romana, en un sentido cualitativoque implicaba el reconocimiento de una norma de perfeccin que asuma su identificacin conel periodo en el que fue creada (sentido histrico) y que parta de su caracterizacin como unaexpresin ordenada y no emotiva (sentido esttico).

As, se entiende al Renacimiento como clsico tanto por su recuperacin de los presuntosideales de la antigedad como por su valor como norma para el arte posterior. Es as quepodemos considerar a la Madonna Granduca de Rafael como una obra clsica, en el sentido deque ha sido canon de perfeccin para incontables generaciones.

Por otro lado, la propia evolucin del arte italiano de los siglos XV y XVI y la diversidad queprodujo su expansin territorial, condujeron a una notable variedad de modelos dentro deeste marco general del clasicismo.

Ya el propio Vasari detect de hasta tres manieras (estilos), aunque en general se haasumido que de forma general el Renacimiento, a pesar de su tendencia al naturalismo, era unarte clsico.

Esta caracterizacin hizo que a partir de la Ilustracin se considerase como degradacin elarte posterior a Rafael y Miguel ngel, pues ellos habran llegado a la perfeccin, de la que sehaban aportado sus sucesores. El trmino Manierismo, que haca referencia peyorativa a estosartistas, se rescat a comienzos del siglo XX en el proceso de revalorizacin del anticlasicismo

pictrico, escultrico y arquitectnico.De esta forma, el Manierismo acoga a los artistas italianos del siglo XVI que siguieron la

maniera, es decir, el estilo refinado que haban fijado los grandes maestros de comienzos deese siglo, especialmente Rafael.

En cualquier caso, hoy en da se ofrecen interpretaciones que tienden a restringir elmovimiento a determinados artistas italianos y a obras entre 1520 y 1590, tendiendo a romperla idea de que cualquier obra que no encajase con los criterios ideales renacentistas se debaadscribir indefectiblemente al Manierismo.

Siguiendo la definicin de Shearman, el trmino Manierismo slo se debe aplicar a losartistas que, conociendo profundamente la norma clsica, la quebraron por

experimentacin y de forma consciente. Esta definicin slo abarca a ciertos artistasitalianos posteriores a 1520 y deja como pseudomanieristas a aquellos extranjeros que se


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apartaron de la norma clsica por desconocimiento, o por simple copia de los manieristasitalianos.

5. (Re)escribiendo el Renacimiento

Desde Vasari y hasta mediados del siglo XX, el Renacimiento hasta estado en el centro de lahistoriografa artstica. En ese tiempo, ha sido un campo de estudio fundamental para eldiseo, experimentacin y superacin de los grandes sistemas metodolgicos.

Sin embargo, en los ltimos aos parece que la historiografa sobre el Renacimiento hasido bastante refractaria a la reflexin crtica de vanguardia: ha dejado de ser unapreocupacin fundamental de los centros de innovacin de la disciplina.

Pero como el mismo Renacimiento es la base del arte posterior, era necesaria la revisin desu misma idea, que parece haber sido emprendida desde fuera del ncleo tradicional de ladisciplina, como por ejemplo de los estudios de gnero o los poscoloniales.

Aunque de momento estas revisiones no han sido muy afortunadas, tienen un xitocreciente que no podemos dejar de lado en esta introduccin, pues no slo es el Renacimientoquien est en cuestin, sino la propia Historia del Arte. Y las mencionamos porque aunque essustancialmente ahistrico interpretar una obra renacentista desde la ideologa de gnero,tambin lo es hacerlo desde la narracin estilstica que ofrece el museo donde se hayaexpuesta.

Hoy en da, se tiende a reflexionar sobre el hecho de que la apreciacin esttica quefomentaba la teora del arte, conviva en su momento con una clara apreciacin material de laobra, que no la haca muy diferente de cualquier otro objeto del ajuar domstico o religioso.

Aunque hoy en da destaquemos a pinturas y escultura, sus propietarios valoraban en la

misma medida esttica o artstica, o incluso aun ms en lo econmico a otras piezas como lasjoyas en metales nobles.

No podemos destacar a pinturas y esculturas del resto de la cultura material que lesrodeaba y de la que formaban parte. En este sentido, entre las vas de investigacin actualesfiguran las incursiones en los campos de la historia social y la cultural e intelectual, lo quesupone la lenta superacin de la idea burckhardtiana del Renacimiento y de su interpretacindesde el proyecto moderno.

Pero, por supuesto no debemos olvidar que todo proceso hermenutico est marcadoindefectiblemente por las preguntas e intereses del presente.

6. El ciclo humanista

A pesar de las tendencias de compartimentar de la historiografa, la Historia del Arteoccidental presenta una notable unidad en el espacio temporal que media entre la invencinde la imprenta y de la mquina de vapor.

Uno de los legados fundamentales del Renacimiento fue la definicin de un modeloartstico, esttico y conceptual que ofreci cdigos de produccin y lectura quemantuvieron su validez varios siglos: las diferencias entre un retrato de Botticelli y otro deHogarth son minucias si los comparamos a su vez con un icono bizantino o un Kandinsky.

En la arquitectura, el punto de partida fundamental fue la recuperacin del modelo clsico,a travs de la observacin de los restos y del estudio de Vitruvio. Este hecho fue comn ysobrepas a las tensiones existentes entre las orientaciones formales clsicas y anticlsicas.


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Las rupturas que se atribuyen al Barroco pueden ser interpretadas como relecturas del mundoclsico.

En cuanto a la pintura y la escultura, la articulacin bsica que los rdenes ofrecan a laarquitectura, fue servida en este caso por la mmesis de la realidad como objetivo bsico delas artes visuales, que deba permitir a su vez que la narracin fuese el fin bsico de las artes

visuales en la doctrina humanista.

En este contexto, uno de los elementos fundamentales del ciclo humanista fue su nocinde obra de arte. La arquitectura y las artes visuales quedaron configuradas como un dobleproducto compuesto de ideas y formas, en un proceso que aunque tuvo lugar en la Italia delsiglo XV, incorpor los horizontes del arte nrdico, el otro gran motor artstico del momento.

El protagonismo que el humanismo concedi a la idea ha fundamentado el peso conceptualdel arte contemporneo, as como la misma disolucin actual de la nocin tradicional de arte ysu diferenciacin del resto de prcticas humanas. Por encima de las tradicionales divisionesestilsticas, el arte de la Edad Moderna puede entenderse como el proceso de asentamientode esos nuevos cdigos de produccin y recepcin de la obra de arte que puso en marcha el

humanismo durante el Renacimiento.


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CAPTULO 2. ARQUITECTURA YURBANISMO DEL QUATTROCENTO

EN ITALIA

Introduccin: la formacin de un nuevo cdigo clsico renovado

1. La arquitectura escrita

2. Florencia como nueva Roma

3. La arquitectura religiosa

3.1. Construccin de la nueva catedral de Santa Mara de las Flores

3.2. Arquitectura religiosa de Brunelleschi

3.3. Michelozzo: la tradicin arquitectnica conventual

3.4. Len Battista Alberti y las fachadas-teln de iglesias

4. El palacio en los estados italianos durante la segunda mitad del siglo XV

4.1. El palacio florentino

4.2. El palacio en Roma

4.3. El palacio veneciano

4.4. La villa suburbana

5. La tipologa hospitalaria

6. La ciudad italiana en la poca del Humanismo

6.1 Las plazas: Pienza y Vigevano

6.2 La ciudad palaciega de Urbino y la ampliacin de Ferrara

6.3 Las reformas de Roma durante los pontificados de Nicols V (1447-1455) y Sixto IV (1471-1484)

6.4 La ciudad regular y unitaria en el tratado de Alberti

6.5 Sforzinda, la ciudad ideal de Il Filarete


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Introduccin: la formacin de un nuevo cdigo clsico renovado

La arquitectura del llamado primer Renacimiento o arte del Humanismo, la delQuattrocento, fue definindose en Italia de una forma progresiva en la primera mitad delsiglo XV, tras mltiples experimentos con avances y retrocesos.

La emulacin de la Antigedad nunca se haba perdido en realidad en Italia, donde seadaptaron los estilos o lenguajes llegados debido a la intromisin permanente querepresentaba el rico legado clsico con que se contaba en toda la pennsula.

De todas formas, lo que faltaba era una autntica concepcin histrica, y hasta esttica, derecuperacin de ese legado, que no apareci hasta el siglo XV y que busc su adaptacin a losnuevos tiempos y al lenguaje artstico del momento.

Esta labor sera asumida por los humanistas, entre los cuales despunt algn arquitectocomo Alberti, quienes se dedicaron a estudiar los monumentos clsicos y a establecer nuevospostulados arquitectnicos a partir de ellos.

De cita arqueolgica fragmentaria, se pas en la prctica arquitectnica finalmente a crearun cdigo clsico renovado racional y funcional y numerosas variables suyas. Es por ello quems que una emulacin, que propiamente de copia e imitacin, del estudio de los edificiosclsicos y de la propia naturaleza, se extrajo una serie de principios tericos para ser aplicadosa la prctica arquitectnica.

De este modo se cre una nueva relacin entre el cuerpo humano y la arquitectura, y sesometi a sta a las reglas de armona, proporcin y simetra, as como a los principios de laperspectiva, usando con maestra la geometra, la ptica y las matemticas.

La arquitectura del siglo XV proporcion una nueva imagen a las ciudades italianas, en un

principio a Florencia, para despus irradiar al resto de la pennsula. Las iglesias seenmascararon pareciendo templos paganos, se construyeron numerosos palacios que dabanun aspecto ms civil que los antiguos castillos medievales, se realizaron plazas queorganizaban el espacio y realzaban a los nuevos palacios.

La nueva urbe aspiraba al racionalismo y a la funcionalidad, pero las reformas fueron, en unprincipio, ms fragmentarias que sistemticas.

Un aspecto de inters todava discutido es el investigar hasta qu punto la prcticaconstructiva del Quattrocento se mostr como una recuperacin, no de los restosarqueolgicos grecorromanos sino de la arquitectura del primer perodo cristiano y hasta unretorno al romnico italiano y por qu no, la incidencia del arte bizantino detectada en el

empleo de la policroma, generalmente en los efectos bicromticos.

1. La arquitectura escrita

La prctica artstica de algunos arquitectos del Quattrocento como Alberti, Il Filarete oFrancesco del Giorgio tuvo una correspondencia estrecha con sus escritos tericos. Si losedificios que disearon fueron elocuentes modelos en la difusin del primer Renacimiento, susmanuscritos fueron complementos indispensables para entenderlos, pues daban a conocer lanormativa cientfica que los haba concebido y hacan posible la concepcin del arquitectohumanista: a la vez capaz de teorizar y de poner en prctica sus ideas.

Adems estos tratados buscaban la liberalidadde la arquitectura, tendiendo un nexo con laAritmtica y la Geometra del quadrivium, el sistema jerrquico medieval de las artes liberales.


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Por ello el artista renacentista buscar demostrar la condicin cientfica de su actividad entales tratados.

Este nuevo concepto se fue extendiendo ya en la Italia del siglo XVI, cuando fructificara enla redaccin de tratados tales como la Regla de los cinco rdenes de arquitectura de Iacome diVignola; Los cuatro libros de arquitectura de Andrea Palladio o el Tratado de arquitectura de

Sebastin Serlio. De todas formas la redaccin de estas obras hacan diversificar los cdigosdel clasicismo, ms que el pretenderlo nico.

El tratado serva de instrumento para conseguir la deseada formacin integral delarquitecto y constaba de dos partes complementarias: la terica escrita y la prctica a base dedibujos. Se posibilitaba as una triple funcindidctica, terica y prctica.

El modelo de estos tratados trifuncionales no eraotro que el famoso De re architectura de Vitruvio,a pesar de que la obra no fue impresa hasta finalesde siglo y los manuscritos que circulaban variaban

notablemente entre s y era difcil diferenciar looriginal de lo aadido por los comentaristasposteriormente. La primera edicin conilustraciones data de 1511, hecha por el venecianoCesare Cesariano, y que facilit la comprensin ydifusin del texto por Europa.

El tratado consta de diez libros en los que se pasapor la definicin de la arquitectura a travs devarios conceptos bsicos, por detallar la mejorubicacin de una ciudad, los diversos materialesconstructivos, las tipologas de edificios, losrdenes arquitectnicos, la hidrulica, losinteriores, etc.

Es a Alberti a quien se puede considerar como el prototipo del intelectual humanista delQuattrocento, pues adems de reflexionar sobre el arte y ser un entendido de diversasmaterias, realiz una prctica arquitectnica muy significativa para su poca.

Entre su produccin escrita destaca el De re aedificatoria, al que, siguiendo a Vitruvio, dividien diez libros. No es sin embargo una simple copia del romano, sino que trata de superarlo(gracias a sus amplios conocimientos obtenidos de sus observaciones en Roma) e inclusocuestionarlo; aunque s toma ideas claves como la de la proporcin como fuente de belleza, lasimetra y la analoga entre figura humana y arquitectura, adems de los principios de belleza,

utilidad y firmeza.Llam a la armona arquitectnica concinnitas y la consider como un reflejo de la

csmica. A su juicio el crculo y el cuadrado eran las formas geomtricas ms perfectas.

Pero si Alberti fue el gran terico del siglo XV, no podemos dejar de recordar la obra literariay prctica de Antonio di Pietro Averlino: Il Filarete, quien trabaj sobre todo en el Miln deFrancesco I Sforza. Il Filarete escribi su Trattato d`Architettura en italiano, formado porveinticinco libros en tres grandes partes y donde se ocup en forma de dilogo de describir ala ciudad humanstica ideal: Sforzinda, de cuidadas proporciones.

El artista siens Francesco di Giorgio Martini, siguiendo a Vitruvio y reflexionando sobre las

ruinas clsicas redact su Tratado de arquitectura civil y militar, compuesto de siete libros en lacorte de Urbino.


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Defendi el carcter antropomrfico de la arquitectura, resaltando a su vez la relacin entrehombre y Dios, ideas que quedaron reflejadas en la planta de la iglesia de Santa Maria delleGrazie in Calcinaio. De todas formas gran parte de la importancia de su obra radic en suaportacin a la ingeniera militar.

2. Florencia como nueva Roma

Florencia se convirti durante el siglo XV en la nueva Romarefinada y neoplatnica entorno al predominio poltico de la familia burguesa de los Medici y tambin bajo el patrociniode otras ricas familias.

La recreacin del arte de laAntigedad de un modoexperimental irradi desdeesta urbe hacia el resto deItalia, aunque desde 1494

perdiera su papel como centrocultural predominante a favorde la propia Roma.

Y es que aunque se hasealado para Florencia comosu edad cultural dorada eltrnsito entre el Duocento y el

Trecento, su importancia reside en el renacer del humanismo y el neoplatonismo de MarsilioFicino y en la recuperacin de la Antigedad durante el Quattrocento.

El mecenazgo de los Medici comenz en 1434 a partir del acceso de Cosme el Viejo al poder

definitivo como tirano de facto. Como comitente encarg a Michelozzo la obra del conventode San Marco, adems de la construccin de su propio palacio. Durante su gobierno se esforzpor difundir los nuevos ideales humanistas y el arte asumi un carcter cientfico al vincularsecon la perspectiva a travs de la geometra y las matemticas. Cosme adems protegi ainnumerables artistas como Ghiberti, Brunelleschi, Donatello, Fra Filippo Lippi, Botticelli yGozzoli.

Su hijo Pedro Cosme de Medici, Piero il Gottoso, fue un gran coleccionista de obras de arte, aquien sucedi Lorenzo el Magnfico en 1469, siendo el periodo ms fructfero para las artes,que se cierra en 1494 con la cada de la familia Medici y el ascenso de Savonarola, pasando lainfluencia cultural a Roma, aunque tambin bajo la influencia de miembros de esta dinasta.

De hecho Lorenzo protegi a humanistas como Marsilio Ficino y los neoplatnicos, Landino(comentarista de Dante), arquitectos como Rucellai y al filsofo Pico della Mirandola.

Es por ello que la recuperacin de la Antigedad fue en principio un fenmeno elitista: elhumanismo florentino fue esencialmente burgus. As, los arquitectos crearon un nuevopaisaje urbano en Florencia en consonancia con esa burguesa refinada y culta.

3. La arquitectura religiosa

Quiz podamos afirmar que es en la arquitectura religiosa donde mejor se ve el contraste

entre el gtico en que se construa a principios del siglo XV y cmo, poco a poco a lo largo delsiglo, se fueron aadiendo e imponiendo novedades formales aportadas desde el estudio


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creativo de lo antiguo. Si algo define a este arte en el transcurso de este primer Renacimientoes su indudable racionalismo geomtrico y matemtico que condujo a:

- La aplicacin de mdulos constructivos- El empleo de una perspectiva central en los edificios- El estudio de las proporciones existentes entre la totalidad de la obra y sus diferentes

partes- La estricta simetra de carcter central- La relacin que de nuevo se impuso entre la arquitectura y la figura humana como

medida

Sera Brunelleschi quien inici este proceso de cambio del lenguaje arquitectnico gticovigente, aunque ya contaminado de citas clasicistas, hacia un nuevo sistema ms basado en loantiguo. Pero si Brunelleschi trabaj en el lado prctico, Alberti logr hacerlo al doble nivelprctico y terico, pues adems de un tratado proyect varios edificios que sin embargo otrosconstruiran siguiendo sus diseos.

Florencia fue el principal centro de experimentacin de la nueva arquitectura religiosa,

desde la que se irradi su influencia gracias a sus arquitectos, quienes haban visitado en sumayor parte las antiguas ruinas de Roma.

Sin embargo cada arquitecto asumi con matices las nuevas directrices y de hecho seprodujeron ciertos contrasentidos al proporcionar a las iglesias cristianas el aspecto detemplos paganos, lo que concordaba con una nueva forma ms vital y pagana de concebir lavida. De esta forma el empleo de fachadas a modo de teln ocultaban iglesias ya construidasen estilo gtico, dando ms severidad a la imagen de la ciudad.

Sobre todo, debemos hablar de dos modelos diferentes de plantas de iglesias italianasdel Quattrocento: las que buscaban retornar al modelo imperial de planta basilical y las quepretendan emular al modo antiguo la planta centralizada, bien circular, hexagonal ocuadrada.

En uno y otro modelo se haca referencia al Imperio romano, aunque en el segundo modelohaba una referencia ms prxima al mismo, pues se estaba citando de alguna forma el propioPanten de Roma. El primer modelo, cuyos ejemplares ms sealados son las iglesiasflorentinas de San Lorenzo y del Santo Espritu de Brunelleschi, cita la baslica del Cristianismoprimitivo y el segundo los martyria y los baptisterios medievales, con buenos ejemplos en elOratorio de Santa Mara de los ngeles y la capilla Pazzi de la iglesia de la Santa Croce deBrunelleschi o San Sebastin en Mantua de Alberti.

Ejemplos de la ocultacin de interiores gticos relevantes son la iglesia dominica de SantaMara Novella y San Francesco en Rmini, proyectadas tambin por Alberti. En las iglesias de

modelo central con cpula se ha querido ver un significado simblico, al adoptarse muchasveces las formas circulares, hallarse exentas (esto es, totalmente visibles) e identificarse lacpula con el reflejo de la bveda celeste.

Esta arquitectura religiosa recuper directamente tambin elementos grecorromanoscomo el uso de los rdenes clsicos, como as hicieron Brunelleschi (capilla Pazzi y SanLorenzo) o Alberti en San Francesco. As mismo se recuper el arco de medio puntoreemplazando al ojival y los techos planos o las bvedas de can a las bvedas de crucera.

3.1. Construccin de la nueva catedral de Santa Mara de las Flores

La historiografa contempla convencionalmente 1418 y el concurso para levantar la cpuladel duomo florentino como fecha que seala el cambio de la mentalidad medieval a la


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renacentista; pero lo cierto es que hay que tener en cuenta ciertos precedentes que yaapuntaban en esta direccin como la loggia dei Lanzi, erigida entre 1376 y 1381 donde yaaparecen capiteles corintios y arcos de medio punto.

Fue Arnolfo di Cambio quien en 1296 comenz a levantar la nueva catedral de Florencia,aunque tras su muerte el proyecto fue modificado por Andrea Pisano y otros arquitectos

encargados de la obra, pero la cpula octogonalplanteada originalmente fue finalmente construida.

La labor arranc en 1368 (las complicadascaractersticas tcnicas haban hecho que no se hubieraintentado antes) y slo en 1418 se encarg el cierre dela misma a los escultores Ghiberti y Brunelleschi, que apartir de 1423 dirigira en solitario la obra.

Brunelleschi debi idear la construccin de una doblecpula, con un aparejo construido a la romana en formade espina de pez y ayudarse por un espectacular

armazn mvil, adquiriendo finalmente una formasemiesfrica en el interior y de perfil ovoide y apuntadou ojival en el exterior, jugando adems con el coloridousando efectos bicromticos.

Esta espectacular obra se convirti en smbolo de laciudad, siendo considerada adems como manifiestoinicial y paradigma de la nueva arquitectura por venir,aun a pesar de mantener un esquema general gtico eincluso orientalizante.

3.2. Arquitectura religiosa de Brunelleschi

Brunelleschi, hombre polifactico representante del Humanismo renacentista, un divinogenio, haba viajado a Roma tras abandonar la escultura, donde pudo analizar la arquitecturaclsica romana y adquirir un marcado sentido por la perspectiva central.

Segn l, la arquitectura sera la representacin racional del espacio, aunque no dej obraterica escrita, pero lo que se tradujo en una preocupacin por integrar la tradicingrecorromana y del romnico toscano en la nueva arquitectura por medio de un tratamientopersonal y cientfico.

Un ejemplo de su obra es la iglesia de San Lorenzo en Florencia, donde bajo encargo de los

Medici quiso crear un edificio comparable a los de la Antigedad y recuperar el modelo de lasantiguas baslicas cristianas. Su planta es de cruz latina con tres naves y capillas laterales, casibasilical y con un crucero de escaso desarrollo, quedando el modelo geomtricamentemodulado por la inscripcin de un crculo en un cuadrado.

Elementos como el artesonado con casetones, el entablamento corrido o los ricos capitelescorintios enlazan con el mundo clsico; pero no olvid lograr el bicromatismo propio de laarquitectura tpica florentina.

En esta iglesia destaca la sacrista vieja, calificada como el primer espacio de planta centraldel Renacimiento por la historiografa. Decorada por Donatello entre 1420 y 1429, sediferencia de la nueva, diseada por Miguel ngel. Se considera como muy expresiva de la

concepcin arquitectnica de Brunelleschi, pues es un espacio cbico cubierto por una cpula


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nervada sobre pechinas, al cual se une al fondo otro espacio similar a modo de bside.Verticalmente, la sacrista queda dividida por tres zonas de idntico tamao.

La iglesia del Santo Espritu de Florencia (1434-1484) se puede considerar como la obra mscompleta de Brunelleschi y que mejor demuestra su arquitectura, aunque fue finalmenteconstruida por Manetti tras su muerte al poco de iniciarse las obras.

Siguiendo el modelo de San Lorenzo, tiene planta de cruz latina de tres naves y capillaslaterales, crucero y cabecera de planta central. El tramo o seccin abovedada entre cuatrocolumnas fue concebido por Brunelleschi como medida para determinar las proporciones de laiglesia: as el crucero es dos veces mayor por cada lado de la cruz que cada tramo y la navemayor tiene la anchura de dos. Cuenta tambin con una sacrista a imitacin de la vieja de SanLorenzo, aunque diseada por Giuliano da Sangallo.

La pequea capilla del oratorio de Santa Mara de losngeles en Florencia fue construida por Brunelleschi para loshermanos camuldulenses. Tiene un diseo de planta centraloctogonal con cpula y es considerada como origen de las

iglesias de planta central del Renacimiento y el Barroco.

La capilla de Andrea Pazzi en la iglesia franciscana de laSanta Croce se encarg tambin a Brunelleschi en 1429. Es unedificio de pequeas dimensiones y con un prtico cubierto porbveda de can y en l se reflejan de nuevo la preocupacindel arquitecto por las proporciones, la armona y laincorporacin de elementos clsicos.

La fachada est formada por un prtico de cinco tramos concolumnas de orden compuesto y sobre el que se alza un ticodecorado con pilastras corintias, seccionado por el gran arco del

centro, y coronado a su vez por una cornisa muy ornamentada.Aunque se inspira en la sacrista vieja de San Lorenzo, su solucin fue ms compleja, pueshubo de compaginar con xito una planta rectangular con una cpula.

3.3. Michelozzo: la tradicin arquitectnica conventual

Michelozzo di Bartolomeo, formado en el taller de Ghiberti y Donatello, sucedi aBrunelleschi como maestro principal del duomo florentino en 1446. Adems de realizar pororden de Cosme el Viejo el palacio Medici, ste le encarg la remodelacin del convento deSan Marcos de Florencia, en el que destacan los frescos de Fra Angelico y la biblioteca

diseada con una aplicacin del modelo basilical alargado con tres naves separadas por arcosde medio punto, fustes lisos y capiteles de orden jnico.

Adems de estas intervenciones, es conocido por haber realizado la biblioteca de SanGiorgio en Venecia y la pequea capilla de laSantissima Annunziata en Florencia.

3.4. Len Battista Alberti y las fachadas-teln de iglesias

Alberti es considerado como la encarnacin perfecta del arquitecto humanista delQuattrocento, pues adems de llevar a cabo una intensa labor prctica realiz una reflexinterica sobre arte. Estuvo en contacto con los principales centros culturales tanto de Italia

como del resto de Europa y a su vez asesor a prncipes, nobles y papas.


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Tras haber estudiado en diversos centros italianos, pas por Florencia en 1428, donde tomcontacto con Brunelleschi, Ghiberti, Donatello, Massacio y Luca della Robbia entre otros. Mstarde estuvo en Roma, donde pudo admirar las ruinas de la Antigedad y se ocup de diversosasuntos sociales en sus obras y reflexiones.

Ms nos interesa en nuestro estudio las nuevas fachadas a modo de templos clsicos que,

citando a veces los arcos de triunfo romanos, dise para varias iglesias gticas. Proporcionas una nueva aunque paradjicamente ya vieja imagen a edificios existentes, basndose en elestudio de la perspectiva, la aplicacin de reglas de proporcin, la recurrencia de los rdenesclsicos o la dotacin de cierta policroma a sus obras. Hay as una concurrencia entre teoraarquitectnica y prctica constructiva, que resultan interdependientes.

Alberti proyect la remodelacin de la fachada de Santa Mara Novella (1456-1470) porencargo de Rucellai, a modo de teln construido en un nuevo lenguaje eclctico que ocultabao completaba el interior de esta iglesia gtica de la segunda mitad del siglo XIII.

Partiendo del propio basamentoexistente y respetando las

portadas y el rosetn gticoexistentes, utiliz el cuadradocomo mdulo geomtrico y bajo eluso cromtico del mrmol blancode Carrara y el verde de Prato,dibuj cuadrados y rectngulos portoda la fachada.

Para salvar la diferencia entre lasdiferentes alturas de las naves,aplic dos volutas laterales, y en suparte superior coron la fachada

con un frontn triangular, haciendo como vemos un difuso uso de las formas geomtricas.

Tambin se le encarg la remodelacin del Templo Malatestianode San Francesco enRmini entre 1450 y 1466, para el que revisti el interior con fachadas de mrmol, dotndolode una nueva modernidad y solemnidad al edificio. La obra se paraliz en 1466 al morir elseor de Rmini Segismundo Pandolfo Malatesta, impidiendo la construccin de unaproyectada cpula central que emulara al Panten y que habra de cobijar a la familia delfinado y a los humanistas a los que haba favorecido.

Lo que s hizo fue disear de nuevo la fachada principal occidental, a modo de arco detriunfo, aunque mucho ms severa que la de Santa Mara Novella y donde no jug con loscolores sino con los elementos clsicos y el fuerte contraste de luz y sombra. Sin embargo la

fachada no qued finalizada, pues el segundo piso nunca lleg a ser construido.Alberti, cuando estuvo al servicio de Ludovico II Gonzaga en Mantua realiz la iglesia de

San Sebastin, un templo de planta central cuadrada con tres bsides y capillas laterales yque algunos historiadores del arte relacionan con el Mausoleo de Teodorico.

Esta iglesia de hecho refleja los principios expuestos por Alberti en su De re aedificatoria,donde adems de propugnar la planta central, se buscaban los muros internos faltos defrescos, blancos(aunque se aceptaban pinturas y sobre todo esculturas), y el abovedamientode los techos.

El proyecto original contemplaba la realizacin de dos pisos, del cual el segundo s contaracon cpula y exteriormente su asentamiento sobre un alto zcalo, la presencia de dos

escaleras laterales para flanquear los tres arcos de entrada a la parte inferior y sobre el friso,un frontn triangular.


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En el caso de San Andrs de Mantua, Albertiproyect entre 1470 y 1476 una iglesia cuyafachada se ha considerado como el resultado dela combinacin de dos tipologas diferentes: el

pronaos de un templo clsico y el arco de triunfo.

De nuevo el arquitecto hizo uso del estudio de lasproporciones y de la armona entre el todo y cadauna de sus partes.

La planta sera de cruz latina con una sola navecubierta por una bveda de can, con capillaslaterales y transepto, pero no se acab hasta elsiglo XVIII.

4. El palacio en los estados italianosdurante la segunda mitad del sigloXV

Quiz se pueda considerar al palacio como la tipologa arquitectnica que reflej mejor lanueva arquitectura de la segunda mitad del siglo XV, de ese primer humanismo todavapredominantemente civil en lo arquitectnico.

El palacio era pues fruto de la imagen novedosa que quera dar el comitente (a la vez seormilitar, comerciante, banquero y culto humanista) ante sus ciudadanos.

Dentro de Italia los modelos varan segn regiones, pero tambin al interno de una mismaregin debido a los gustos personales del mecenas y la formacin y tendencias del arquitecto.

De todas formas es indudable que hay dos grandes familias de palacios italianos que guardancierta relacin entre s: el florentino y el veneciano. A su vez, el florentino tendra dosvariantes representadas respectivamente por el palacio Medici-Riccardi de la Va Larga (deMichelozzo, quiz el ejemplo ms seguido por los arquitectos italianos) y el Rucellai ideadopor Alberti.

A estas tipologas habra que aadir la de la villa suburbana, que por sus propiascaractersticas debe ser considerada aparte.

4.1. El palacio florentino

Las caractersticas comunes (similares en lo general a los ejemplos venecianos) son las deser:

- Un edificio cuadrangular, un bloque compacto y encerrado: una pequea ciudad dentro dela gran ciudad.

- Disposicin del espacio en torno a un cortile de cuatro crujas y con arqueras en el pisoinferior, a semejanza como dijo Alberti de lo que la plaza representa para una urbe.

- A pesar de que la imagen que ahora el palacio daba ya no era esencialmente militar, la ideano se lleg a perder, pues el almohadillado de sus bloques de piedra exterior daba una reciaimagen de fortaleza.

- Por normal general tena tres plantas, diferenciadas por las molduras empleadas yrematadas por una gran cornisa con tejado saliente.

- Los huecos de las plantas superiores se diferencian de la inferior por el uso de las ventanasajimezadas o venecianas, lo que pone en relacin a los palacios florentinos con los venecianos.


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- Su proyecto est sometido a la racionalidad y al funcionalismo, con una profundapreocupacin por la perspectiva y la simetra. Por ello predominan las figuras cuadradas,triangulares y semicirculares

- Se prefiere el uso de la pilastra frente a la columna y, desde luego, la referencia de laAntigedad no se pierde, pues se usan los rdenes arquitectnicos dispuestos

jerrquicamente en altura, desde el ms simple drico al ms lujoso corintio, al parecer de lahistoriografa siguiendo el ejemplo del teatro Marcello de Roma.

Este modelo se divulg con rapidez por Italia, aunque con distintas notas especficas decada regin; as sucedi en la Roma de Pablo II y su sucesor Sixto IV, donde se mantuvieronciertas notas medievales.

Alberti consider en su De re aedificatoria al palacio como la cabaa primitiva de Vitruvio: unprototipo a partir del que surgan otras tipologas arquitectnicas; y estableci una relacincon la ciudad, al considerar al palacio como una pequea ciudad que por tanto deba contarcon oportunidades y diversas comodidades.

Es el palacio Mdici-Riccardi, construido por Michelozzo (discpulo de Brunelleschi) entre

1444 y 1464 el modelo ms seguido de la tipologa palaciega del siglo XV. Es de plantacuadrada y configuracin cbica y slo su condicin maciza y almohadillada recuerdan a losviejos palacios-fortaleza medievales. El patio adems de iluminar y ventilar el edificio, loarticula.

Su exterior, organizado en tres plantas que van disminuyendo en altura, muestra una clarahorizontalidad gracias al uso de la simetra y la proporcin. No hay referencias a los rdenesclsicos, pues en los dos pisos superiores se emplea la tpica ventana ajimezada o veneciana.

El palacio Rucellai, es sin duda el otro gran modelo de palacio seorial. Diseado porAlberti, se construy entre 1447 y 1460 bajo la supervisin de su discpulo Rossellino. Denuevo se emplea el cuadrado como mdulo geomtrico para regular las proporciones y los

espacios de la fachada, usando entablamentos geomtricos para separar las tres plantas,aunque las pilastras matizan esa horizontalidad.

Como en el Coliseo, de donde se cita que Alberti tom la idea para la fachada, sesuperponen los rdenes clsicos: drico en la planta baja, jnico en la intermedia y corintio enla superior, aunque no faltan las ventanas ajimezadas en los dos pisos superiores como en elpalacio Mdici-Riccardi. Sin embargo, el almohadillado es ms pictrico y no tan escultricocomo en este ltimo, dndole un aspecto ms suave y menos rstico-militar. Enfrente delpalacio se construy hacia 1460, bajo diseo de tambin Alberti y direccin de Rossellino, unaloggia con objeto de servir de sala de recepcin.

El palacio Antinori, hoy llamado Boni, fue construido por Giuliano da Maiano en la dcadade los sesenta con una forma sencilla y volumen cbico, con tambin tres plantas y una ciertarusticidad en su fachada.

El modelo creado por el palacio Rucellai se reproduce, aunque con un patio interiormejorado en el palacio Piccolomini de Pienza, atribuido a Rossellino e ideado con objeto demejorar la residencia estival que el papa tena en su ciudad natal.

De todas formas, el gran inters que nos suscita este palacio reside en que su construccindio lugar a la creacin de una plaza trapezoidal que se describe ms adelante y en la propiacatedral, que construida tambin bajo el reflejo del pensamiento de Alberti, muestra un graneclecticismo, pues cuenta con una fachada a modo de triple arco del triunfo y un interior enclaro estilo gtico italiano. La fachada posterior, que da a una pendiente desde la que sedomina el campo, se configura a modo de loggia, con incluso un jardn colgante.


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Otro palacio florentinoes el llamado Pitti, deapariencia tan rstica yatribuido a Luca Fancelli(seguramente bajo

diseo previo deBrunelleschi) e iniciadoen 1457 y ms tardeampliado y terminadopor los Medici, cuandolos Pitti se arruinaron en1549.

En 1558 Ammannantitraz alas ortogonales para delimitar el nuevo cortile, que quedaba abierto a los jardines deBoboli, donde Sangallo haba proyectado previamente la fortaleza del Belvedere. De todasformas, aunque de orgenes quattrocentescos por sus tres plantas, cornisa clsica y

almohadillado, el edificio no se acab hasta 1783 tras diversas actuaciones.

Benedetto da Maiano y a su muerte Simone del Pollaiolorealizaron el Palazzo Strozzi entre 1489 y 1507. De unaimponente mole, sus trazas siguen fielmente el modeloestablecido por Michelozzo en el palacio Mdici-Riccardi, puestiene forma cbica, tres plantas con fachada almohadillada,ventanas ajimezadas en las superiores y rectangulares en lainferior, adems de una gran cornisa y un bello patiorectangular.

4.2. El palacio en Roma

El palacio romano del Quattrocento se muestra deudor a lapar del florentino y de la tradicin medieval. Este hecho semuestra ya en palacio Venecia, aunque es en el de laCancillera donde est ms marcado.

El palacio Venecia, comenzado en 1455, se llama as porhaber sido sede de la embajada veneciana desde 1564 hasta1797, pero fue ideado con objeto de servir como residenciacardenalicia. Estilsticamente muestra elementos medievales como las almenas y una torre

(caracterstica tan romana); sin embargo su volumen armonioso, sus tres plantas, el patiointerno y la superposicin de rdenes arquitectnicos lo relacionan al modelo florentino delpalacio de los Mdici.

Como en el caso anterior, tampoco conocemos quien proyect el palacio romano de laCancillera papal, que se aproxima al modelo establecido por Alberti en el palacio Rucellai.Comenzado a construir hacia 1483 o 1486, se lo considera como el primer palacio romanorealizado bajo la normativa renacentista.

Su fachada es bastante alargada y comprende tres plantas, de la cual la baja tiene un ligeroalmohadillado y la principal ventanas que recuerdan a las ajimezadas. El edificio se remata conun alero y el mrmol blanco de travertino de su fachada parece ser que fue obtenido del teatroPompeyo, lo que le otorga cierta luminosidad y blancura.


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4.3. El palacio veneciano

La asimilacin de la nueva arquitectura del Quattrocento no aparece tan clara en lospalacios venecianos como en los florentinos, aunque los principios de Alberti fueran llegandopoco a poco a la ciudad de los canales. En realidad es otra forma de percibir el Renacimiento

de lo clsico, que mezcla una arquitectura tradicional (gtica, romnica e incluso bizantina)adaptada a las exigencias de Venecia con los aspectos novedosos.

Los palacios venecianos, ms modestos que los florentinos se llaman Ca`, la abreviatura decasa, pues slo se le otorg la categora palacial a la residencia del Dux, aunque en nmeroson superiores a la misma Florencia o Roma.

La especificad de Venecia haca que estos palacios tuvieran dos entradas interrelacionadasal canal y a tierra, dispuestas en los lados menores de los edificios. Construidos cimentadossobre postes o pilares, carecan de stanos. Una clara sea de identidad es el carcterescenogrfico de sus fachadas, pues su apertura al canal determinaba la acentuacin delefecto teatral mediante la profusin de elementos decorativos y policromticos.

Estas fachadas tenan muchos vanos conseguidos a travs del uso de las ventanasajimezadas, creando logias o galeras abiertas. La profusin de columnas es significativarespecto a los palacios florentinos; la planta principal era la primera, con funciones nobles,mientras que en ocasiones existan entreplantas o mezzanine, de pequea altura y destinadasa la servidumbre, a almacn u oficinas. Por ltimo son muy caractersticas las chimeneas enforma de embudo.

Uno de los palacios ms representativos es el Ca`Dario, proyectado por Pietro Lombardo en1487 y situado en el Gran Canal. La fachada, asimtrica (rasgo medieval) y colorida, estestructurada en tres pisos con ventanas ajimezadas. Es por ello que los rasgos renacentistas semuestran ms en el interior que en el goticismo exterior.

Ca`Loredan Vendramin Calergi, ubicado tambin en el Gran Canal, fue diseado por MauroCodussi entre 1481 y 1509 y construido directamente sobre el agua. Estructurado en tresplantas y con ventanas ajimezadas, encontramos ya los tres rdenes clsicos, lo que denota lainfluencia del racionalismo constructivo de Alberti.

4.4. La villa suburbana

Es una variante de la tipologa palaciega con caractersticas propias por su ubicacin enun medio rural (aunque no lejos de la ciudad) y por su finalidad de residencia para el descansoplacentero. La historiografa ha querido relacionar a este subtipo arquitectnico de palacio

con las villas romanas descritas por Plinio el Joven o Vitruvio.La villa quattrocentesca

emulaba la Antigedad pormedio del empleo de losrdenes arquitectnicos y deprticos con frontones,adems de por tener patios ysalones. En sus ordenados

jardines sola contar con logiaso galeras corridas quepermitiesen su disfrute y el del

propio paisaje circundante.Se ha destacado tambin el


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papel cultural de estas edificaciones, como ocurra con la villa florentina de Carreggi (sede dela academia neoplatnico de Ficino) o la del Belvedere, donde Inocencio VIII coleccionantigedades. A pesar de ello, esto no obviaba que en ocasiones tuvieran toques militares,como la ltima citada.

El modelo principal de villa florentina del Quattrocento lo marca la villa Mdici de Poggio a

Caiano, proyectada por Giuliano da Sangallo, que incluso se cita como precedente de las dePalladio, ya en el siglo XVI.

5. La tipologa hospitalaria

En el Quattrocento se cre un modelo novedoso de tipologa hospitalaria de gran difusinen Europa, el hospital de planta de cruz griega, ideado por Il Filarete y que subsisti hasta elsiglo XVIII.

Un ejemplo pionero es el Ospedale degli Innocenti florentino, proyectado por Brunelleschi

primero entre 1419 y 1427, y despus Francesco della Luna. Aunque se muestra todava comoun espacio centralizado (es decir, medieval), su novedad reside en su clara horizontalidad ysobre todo en elprtico de la fachada de tipo logia al exterior, que introduce un nuevo sentidoclsico de la proporcin y del ritmo.

En realidad Brunelleschi no hizosino desarrollar novedosamente elsistema medieval, citando a laAntigedad a travs de lasproporciones y los elementosformales. Quien s cre ya la nuevatipologa hospitalaria fue Averlino Il

Filarete, que plasm en la prctica(adems de en la teora) en elHospital Mayor para la beneficencia deMiln, construyendo dos edificios enforma de cruz griega unidos entre spor medio de un patio cuadradocentral presidido por una iglesiatambin de planta central.

Este modelo fue seguido ms tarde, aunque simplificado en Espaa, en el Hospital de laSanta Cruz de Toledo, adems de en el de Santiago de Compostela y Granada, puespropiciaba una cmoda clasificacin de los enfermos.

6. La ciudad italiana en la poca del Humanismo

Desde luego hay una correspondencia entre el arte de la arquitectura, quizs el ms tcnicoy cientfico de todos, y el urbanismo, y por ello no debemos dejar de sealar que en elQuattrocento se llevaron a cabo intervenciones ms o menos puntuales que trataron deracionalizar la estructura urbana medieval.

Las ms de las veces eran procesos ligados a la construccin puntual de nuevos edificios queobligaron a la configuracin de un nuevo espacio en torno suyo y en consonancia con l. A

pesar de ello no faltaron los proyectos de creacin de urbes de nueva planta, ideados sobre elpapel por arquitectos que buscaban la construccin de una ciudad italiana ideal.


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6.1 Las plazas: Pienza y Vigevano

La plaza, evolucin del antiguo foro romano, quiz sea el espacio urbanstico msrepresentativo de la ciudad de la centuria del Humanismo: frente a la irregularidad y

espontaneidad medieval, el Quattrocento tratar de regularla geomtricamente y uniformarestilsticamente sus edificios. Vino a ser la incidencia de los tratados de Vitruvio y Alberti sobrela configuracin de la urbe.

Una de las ms representativas es la de Pienza, realizada en el tercer cuarto del siglo XV porBernardo Rossellino bajo deseos del pontfice Po II (cardenal Piccolomini). De figuratrapezoidal, logra as encajar los edificios segn sus distintos tamaos (Duomo, palazzocomunale y palacios del cardenal y de Rodrigo Borja, futuro Alejandro VI) y someterlos a unsistema de perspectiva. Por uno de sus lados cruza la principal va longitudinal de Pienza, queadems conecta la plaza con una segunda, dedicada a mercado, organizando as un eje viarioclave para la ciudad.

Entre 1492 y 1494 se construy la Piazza Ducale de Vigevano, Lombarda, circundada porlogias uniformes al modo de los foros romanos, diseo actualizado tambin por el propioAlberti. El proyecto, atribuido tanto a Bramante como sobre todo a Leonardo, y bajo deseo deLudovico el Moro, hubo de demoler previamente el antiguo mercado y el palacio comunal.

Tiene planta cerrada, pues las calles parten de las mismas arcadas y cuenta con una estrecharelacin con el cercano Castello Sforzesco, hasta el punto de que representa simblicamente lasumisin de la ciudad al propio Ludovico, pues de hecho la propia familia Visconti morocasionalmente en la ciudad.

6.2 La ciudad palaciega de Urbino y la ampliacin de Ferrara

Federico de Montefeltro, comenz a construir el Palacio Ducal de Urbino hacia el ao 1447,hasta el punto de que fue creciendo con el tiempo hasta constituir una autntica ciudadpalaciega, reformando de paso toda la fisonoma urbana de Urbino.

El duque Ercole I d`Este promovi la llamadaAddizione Erculea, la ampliacin de Ferrara, en1492, con objeto de solucionar el aumento de poblacin y la construccin de una nueva cintamuraria para mejorar el sistema defensivo, haciendo de paso que el castillo fortificado de losd`Este quedase en el centro de la propia ciudad. Este proyecto es uno de los principalesproyectos urbansticos del Quattrocento y seguramente el ms ambicioso, aunque no el msrepresentativo por tener sus propias

caractersticas.El proyecto haba sido ya precedido por la

Addizione di Borso hecha en 1451 desecando eldelta de San Antonio del ro Po y urbanizndolo,y fue acompaado de otras transformacionesparalelas, como la construccin de una nuevaplaza en la zona vieja.

El ensanche, llevado a cabo por BiagioRossetti, tuvo una de sus principales novedadesen el trazado viario, con calles de trficodiferenciado para peatones y carros, y logr una

perfecta articulacin entre la parte antigua y lanueva. Aunque el patrn de la nueva retcula era


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regular, se permitieron sin embargo pequeas irregularidades para no estorbar edificios opropiedades de inters.

6.3 Las reformas de Roma durante los pontificados de Nicols V (1447-1455) y

Sixto IV (1471-1484)

Roma fue una ciudad configurada en torno a sus dos caractersticas principales: lugar deencuentro con la Antigedad y sede de la Corte pontificia (como centro del Cristianismo ycomo capital de un Estado), pues fue sobre todo en este siglo que el Papado logr asentar sucapacidad ecumnica y su condicin de Estado.

Aunque el periodo ms significativo del Quattrocento fue bajo los pontificados de Nicols Vy Sixto IV, ya bajo Martn V (1417-1431) se inici la labor restauradora de la urbe, aunque sinuna visin humanista, que llev a usar como cantera antiguos edificios para reconstruiriglesias. Adems reform la muralla, reorganiz el Capitolio, consolid el puente Milvio yrestableci el oficio de magistri viarium.

Bajo Nicols V, el papa humanista que protegi al arquitecto Alberti (aunque no se sepacunto ste influy en l), Roma se convirti en la ciudad de la nueva seora o Estado papal yen la nueva Jerusaln; esto es, una capitalidad doble, espiritual y terrenal. Es por ello que bajoNicols V se llev a cabo una fuerte poltica hidrulica, se ampli San Pedro, reconstruy elCastel Sant`Angelo, reestructur el Borgo Leonino y la plaza Ponte y en fin, se convirti alVaticano en una ciudad-palacio, una ciudad santa dentro de una antigua gran ciudad, ensintona con la doble condicin de Roma.

Sin embargo este espritu emprendedor en lo urbanstico y arquitectnico no hizo que sedejase de usar el foro, el Coliseo o la colina Aventina como fuente de materiales constructivos.Quien s tuvo una concepcin urbanstica ms funcional y tcnica y menos emblemtica, ms

en sintona a la llevada a cabo en Florencia fue Sixto IV, pues trajo a Roma a varios de losarquitectos que haban trabajado en Urbino para restaurar el Hospital del Santo Espritu yconstruir, entre otros, la Capilla Sixtina, el palacio Della Rovere, varias grandes iglesias y elpuente que lleva su nombre.

6.4 La ciudad regular y unitaria en el tratado de Alberti

Alberti diluye su concepcin sobre la ciudad, siempre desdeuna reflexin histrica sobre los modelos urbansticos delpasado, a lo largo de todo su tratado, identificando de cierta

forma arquitectura y ciudad y concibindola como unaestructura circular, y dando gran importancia a su funcinmilitar (desde una concepcin todava muy medieval),desarrollando todo un sistema defensivo terico que bajo laforma de dos murallas, deba hacer inexpugnable la ciudad.

Adems, se ocup de analizar el entorno ms favorablesobre el que se deba asentar una ciudad y la concibi comoun ente donde se deban diferenciar jerrquicamente distintasreas o barrios segn el edificio ms representativo quetuviera cabida en ellos.

Alberti dio gran importancia a la plaza porticada, que debaser siempre rectangular a partir de la unin de dos cuadradosy estar asociada al mercado. Los edificios que la rodearan


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deban guardar unas proporciones tales que no estorbasen el estilo de la plaza, y bajo ellos atravs de arcos de tres vanos semicirculares deba situarse la entrada de las calles,concedindoles la condicin depuerta siempre abierta.

6.5 Sforzinda, la ciudad ideal de Il Filarete

La planta de la ciudad ideal de Sforzinda, deba encontrarse en un valle entre colinas junto aun ro y ser estrellada rectangular y octogonal, rodeada de un foso circular, lo que la convertiraen el prototipo de una autntica urbe fortificada del Renacimiento.

Sus diecisis calles principales sedesarrollaran de forma radial,confluyendo en la gran plaza central,en torno a la cual se ubicaran losprincipales edificios de la ciudad:catedral, palacio del prncipe, casa de

moneda, palacio de justicia, crcel,aduana y por supuesto el palaciocomunal.

Adems, y para articular el resto delespacio, se creara una segunda granplaza dedicada al comercio y otrasdiecisis plazas menores de las queocho contaran con una iglesia. El teatro y el hospital quedaran en la periferia.


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CAPTULO 3. ARQUITECTURA Y

URBANISMO DURANTE EL REINADO

DE LOS REYES CATLICOS

Introduccin: la modernidad de la arquitectura y el doble modelo: gtico renovado y la

recuperacin del antiguo

1. El modelo de iglesia: San Juan de los Reyes en Toledo

2. El programa hospitalario

3. El mecenazgo de los Mendoza y la implantacin del arte renacentista en Espaa

4. Renovacin del palacio gtico

Introduccin: la modernidad de la arquitectura y el doble modelo:gtico renovado y la recuperacin del antiguo

La arquitectura del reinado de los RR.CC es, en palabras de M Luisa Caturla, una pocadubitativa e incierta, durante la cual se codific una forma nueva de entender el gtico final

al modo espaol y surgieron los primeros intentos de acercamiento a la arquitectura delQuattrocento italiano a manera de cita.

Por ello hubo una doble prctica, incluso artificialmente buscada: un gtico casi mayoritarioy la recuperacin recreada en Italia del clasicismo grecorromano, lo que dara lugar a unacierta sntesis, un eclecticismo manifiesto en tipologas venidas de la pennsula itlica comolos hospitales y palacios, a los que se siguen aplicando elementos gticos.

Las razones de este eclecticismo son varias y no es la ltima la que hace pensar que, comoen el siglo XIX, se pens que el gtico era ms adecuado para la arquitectura religiosa y elclasicismo en lo civil.

De todas formas, Italia siempre haba ejercido fascinacin en los reinos hispnicos, tanto

por albergar la sede papal como por ser cuna de la latinidad; pero adems y ahora los unidosCastilla y Aragn tenan intereses polticos y econmicos en la pennsula mediterrnea.


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Las intervenciones militares en poca de los RR.CC favorecieron sin duda alguna la difusindel Humanismo, en la figura de personas como el cardenal Pedro Gonzlez de Mendoza, elfranciscano Francisco Jimnez de Cisneros, Juan Luis Vives o el fillogo Antonio de Lebrija;pero adems en la figura de preceptores italianos y de los papas espaoles Calixto III (1455-1458) y Alejandro VI.

No por ltimo, tuvieron gran incidencia el viaje de aprendizaje de artistas espaoles a Italia,la llegada de artistas italianos a Espaa, el gusto de los comitentes por las obras delQuattrocento y la llegada de libros impresos.

Y es que de hecho en la Espaa de finales del siglo XV concurran mltiples influenciasartsticas, algunas ya tradicionales y otras forneas e innovadoras, entre las que figuraban:

- El modernoestilo gtico- Los influjos del arte hispanomusulmn, que dio lugar a una primera sntesis gtico-

mudjar- Elementos del gtico centroeuropeo, francs, flamenco y alemn- Las renovaciones aportadas por el arte humanstico italiano

Es por ello que el arte de este momento se denomina incierto, pues a la base del gtico finalse aadieron diversos elementos del abanico de influencias. Ello ha motivado serias dudas porparte de la historiografa, obsesionada por clasificar y compartimentar estilsticamente losdistintos periodos para su anlisis, lo que ha dado a hablar de un estilo isabelino, estiloCisneros, protorrenacimiento, plateresco para definir el arte que hubo entre 1480 y 1530.

Por tanto no es forzado decir que a Espaa el Renacimiento acab llegando un tantodiacrnicamente y ya amanerado, sin que apenas se percibiera su momento ms clsico.

1. El modelo de iglesia: San Juan de los Reyes en Toledo

Por arte isabelino la historiografa entiende la tendencia arquitectnica que una eclctica ehistricamente el gtico decorativo final centroeuropeo, el flamgero o gtico florido y elmudjar. Esta tendencia vino a ser en gran parte fruto de la colaboracin entre dos artistasextranjeros: Egas Cueman (Bruselas) y Juan Guas (Francia), ste ltimo maestro mayor deobras de los RR.CC.

Parece que ambos trabajaron ya desde 1477 enla construccin de la iglesia conventualfranciscana de San Juan de los Reyes en Toledo,con su magnfico claustro de planta cuadrada ydos pisos. Su iglesia es de una sola nave cubiertacon bveda de crucera gtica al modo alemn.Con cuatro capillas laterales alineadas entre loscontrafuertes y un transepto muy alineado ydecorado, cuenta con un crucero muy luminosocubierto por un cimborrio octogonal sobretrompas atribuido a Simn de Colonia.

La nave est dividida en cuatro tramos con doscuerpos de altura, el inferior con un arcoapuntado y el superior con la presencia deventanales. No falta la presencia de escudosherldicos de los reyes (se pens en principio

usarla como panten real), lo que algunos relacionan con el estilo manuelino portugus.


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Este mismo modelo de iglesia cortesana, muy funcional y conservador, con una sola nave,capillas entre los contrafuertes y cabecera poligonal aparece igualmente en el monasteriosegoviano del Parral, construido al parecer bajo intervencin de Juan Guas.

El origen ms inmediato en el tiempo de este tipo de iglesia conventual de una sola navecuyo ejemplo ms elocuente es San Juan de los Reyes, se ha percibido en la planta del templo

de la Cartuja de Santa Mara de Miraflores, aunque solo tiene capillas laterales en uno de suslados. La obra se inici a finales del reinado de Juan II, con idea de servirle de panten real.

La iglesia est dividida en varios espacios o tramos bien diferenciados, al estilo cartujano,para seglares, legos y monjes. En el fondo est el presbiterio, donde se encuentran lossepulcros de Juan II e Isabel de Portugal, as como del infante Alonso, obras de Gil de Silo,autor tambin del magnfico retablo mayor de madera policromada.

Hay que incluir entre este tipo de iglesias a lapequea Capilla Real de Granada, aunque lascapillas laterales sean poco profundas. La sacristarectangular sobresale de la lnea general del

edificio y el cimborrio qued finalmente sinconstruir. Fue fundada por Isabel la Catlica en1504 con idea de convertirla en panten real ensustitucin de San Juan de los Reyes y se ubicsobre los restos de la antigua mezquita mayor yquedara ms tarde adosada a uno de los costadosde la renacentista catedral. En general la razn deser de este edificio obedece a los deseostestamentarios de la reina de ser enterrada en unlugar austero.

Quedan por mencionar otras iglesias quetambin siguen este modelo, como la del conventode Santo Toms de vila, promovida por eldominico Toms de Torquemada (primerinquisidor general de Castilla y Aragn), quien asimismo mand construir el convento deSanta Cruz la Real de Segovia.

2. El programa hospitalario

Los RR.CC. llevaron a cabo una importante poltica de beneficencia tanto en la cura de los

enfermos como en la asistencia a la mendicidad, buscando as una nueva imagen prestigiosa ypaternalista de la nueva monarqua-estado, aunque en ocasiones las labores fueranimpulsadas por importantes nobles, como el cardenal Pedro Gonzlez de Mendoza y elhospital de la Santa Cruz de Toledo.

La tipologa hospitalaria medieval mostraba tanto la forma claustral como la basilical detres naves, o aun las ms de las veces la indeterminada o irregular, aunque siemprepermitiendo que las camas estuvieran en relacin directa con el altar.

Estos modelos se fueron abandonando durante el reinado de los RR.CC para adoptarse laplanta en forma de cruz griega inscrita en un cuadrado (que poda ampliarse a voluntadmediante la adicin de mdulos al esquema), divulgada aunque no creada por Il Filarete.

Este diseo ya permita una cierta clasificacin de los enfermos y mendigos en funcin de susexo, edad, dolencia y grado de contagiosidad, todo un exponente del racionalismo que


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comenzaba a imponer sus ideas. Las cuatro crujas de cierre que configuraban el cuadrado orectngulo se destinaban a los servicios y en el punto de interseccin de los brazos se situabala capilla con el altar, aunque con diferencias en el modelo general.

Los hospitales realizados en esta poca en Espaa muestran ciertas peculiaridades, puesaunque siguen el modelo de Il Filarete y del clsico hospital del Santo Spirito de Sassia en

Roma, estn hechos en estilo gtico con cubiertas mudjares. Son por tanto un ejemploindudable de eclecticismo entre lo moderno y lo antiguo que tuvieron como arquitecto aEnrique Egas (hijo de Egas Cueman).

El hospital real de Santiago de Compostela(1501-1511 ) fue la primera obra hospitalariaimportante del reinado, con planta con tres de loscuadros brazos de la cruz griega, dos patios, unacapilla en el medio y una fachada del tipo fachada-retablo. En el siglo XVIII se aadira el cuarto brazo ylos otros dos patios.

Otra real cdula dada en 1504 determinaba lacreacin del hospital real de Granada (1511-1526),aunque su construccin se demor hasta que seencontr el lugar apropiado a las afueras de laciudad, de acuerdo a las nuevas ideas de salubridad.La arquitectura es ya propiamente renacentista,aunque la rica decoracin pertenece al estilohispanomusulmn. Su planta es de cruz griegainscrita en un cuadrado, con cuatro patios aunque lacapilla no se situ en el crucero, de dos pisos.

La obra del hospital de Santa Cruz de Toledo,

aunque proyectada por Enrique Egas, cont con la participacin de Alonso de Covarrubias, aquien se debe adems el patio con dos pisos de galeras y columna nica, que aunque gtico,anuncia la arquitectura italiana del siglo XV, eclecticismo percibido tambin en la portada,realizada por l mismo entre 1516 y 1526.

3. El mecenazgo de los Mendoza y la implantacin del arterenacentista en Espaa

Es un hecho repetido el atribuir al cardenal Pedro Gonzlez de Mendoza (1428-1494) la

introduccin del arte renacentista en Espaa, como elemento decorativo y de prestigio, en lafecha convencional de 1488.

Fue entonces cuando, y para diferenciar al colegio de Santa Cruz del tambin enconstruccin en Valladolid colegio de San Gregorio, interrumpi las obras y mand realizaruna portada a la antigua, para asegurarse el prestigio de seguir al da las ltimas corrientesitalianas. Pero a pesar de que Lorenzo Vzquez aplicase en esta portada el almohadilladoquattrocentista y el grutesco en su puerta semicircular entre pilastras, el edificio muestra ensu estructura las caractersticas del gtico.

Pero en el seno de esta potente familia noble se ordenaron construir muchos otros edificioscomo el hospital de Santa Cruz toledano, por orden del propio cardenal y otros por orden deotros miembros de la familia como el palacio del Infantado en Guadalajara, el palacio de

Cogolludo, el castillo de la Calahorra (Granada), etc.


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4. Renovacin del palacio gtico

Es as que fue en la tipologa palaciega donde primero aparecieron las novedades del

Quattrocento, en un principio conviviendo como en lo religioso con el gtico y el mudjar,pero los ejemplos ms significativos del acercamiento a lo italiano los tenemos siempre enesos palacios urbanos exentos, ostentosos y sin tintes militares que la nobleza comenz aerigir.

El hecho de que los RR.CC. todava no contasen con una capital fija hizo que no se produjerael crecimiento espectacular de slo una urbe, sino el desarrollo de varias, as como tampoco seconstruy un nuevo palacio para ellos, sino que siguieron usando algunos monasteriosreformados o los alczares hispanomusulmanes, que cumplan el papel polifuncional detemplo, palacio e incluso panten.

El arquitecto Juan Guas y el escultor Egas Cueman trabajaron juntos de nuevo en laconstruccin del palacio del Duque del Infantado en Guadalajara, encargado por igo Lpezde Mendoza en 1480 y donde se aprecia la renovacin del estilo gtico flamgero por mmesiscon el modelo palaciego italiano.

Son relevantes en este edificio el patio central de dos plantas y la fachada principal, sinreferencias defensivas y decorada a base de clavos con una portada descentrada a la izquierdaentre dos gruesas columnas cilndricas y con arco conopial mixtilneo rebajado y una bellacorona ducal encima.

Hemos de mencionar el palacio de Cogulludo (Guadalajara), construido en los aos ochentapor Luis de la Cerda y Mendoza, primer duque de Medinaceli, y que se considera el primerpalacio espaol con un influjo pleno del renacimientoitaliano, a pesar de que mantenga elementos

medievales. Tiene planta rectangular con patio centralde arcos rebajados y una fachada totalmentealmohadillada con una portada adinteladasimtricamente central.

El palacio de Antonio de Mendoza en Guadalajara,terminado hacia 1506 y atribuido a Lorenzo Vzquez esotro ejemplo de acercamiento a lo italiano. Con unamodesta fachada y portada con arco ya de medio punto(y frontn triangular sobre la misma, hoy desaparecido),su patio interior es cuadrado y destaca por el uso dearquitrabes de madera y zapatas sobre los capiteles, loque otorga ms altura a las columnas.

Existen dos palacios suburbanos exteriormentefortificados y sobre sendos promontorios, los de LaCalahorra (Granada) y Vlez Blanco (Almera), en cuyarealizacin participaron artistas del norte y centro deItalia, lo que les otorga un cierto eclecticismo.

Por ejemplo el primero, supuestamente diseado por Lorenzo Vzquez pero ejecutado ensu mayor parte por el genovs Michele Carlone, cuenta al estilo medieval con cuatro torres ensus extremos pero tambin un bello patio central a modo de cortile con cinco arcadas en cadapanda y cuyos materiales constructivos fueron importados desde Italia.


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CAPTULO 4. LA ARQUITECTURA Y

URBANISMO DEL SIGLO XVI EN

ITALIA

Introduccin: el pleno clasicismo renacentista y el Manierismo

1. El clasicismo como estilo nico: Donato Bramante (c. 1444-1514)

2. Miguel ngel: la arquitectura como representacin

3. Rafael (1483-1520) como arquitecto y sus discpulos

4. Proyeccin de San Pedro del Vaticano en la arquitectura religiosa

5. El palacio del Cinquecento

6. Plasticidad de la arquitectura veneciana. Sansovino

7. La Compaa de Jess (1534 y 1540), el Concilio de Trento (1545-1563) y la arquitectura de la

segunda mitad del siglo XVI

8. Vignola (1507-1573) como terico de la arquitectura y creador del prototipo de iglesia

contrarreformista

9. Arquitectura y escenografa en Venecia: Andrea Palladio

Introduccin: el pleno clasicismo renacentista y el Manierismo

El siglo XVI, la centuria de los clasicismos renacentistas, se muestra en la arquitecturaitaliana como un complejo perodo muy creativo, pero de difcil definicin estilstica, que legedificios transcendentales para la Historia del Arte, realizados por artistas emblemticos quedominaban todas las artes, tal y como obligaban las reglas del Humanismo.

La historiografa divide de forma simplista (pero pedaggica) la centuria en dos etapas,diferenciadas entre s slo por pequeos matices a la hora de entender el clasicismo: el pleno


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Clasicismo renacentista (1480-1527, fecha del Sacco de Roma) y el intelectual y liberalManierismo.

Y decimos pequeos matices porque ambos llegaron a coincidir en el tiempo e inclusorasgos del segundo se detectan en arquitectos previos antes de que adoptaran las formas delprimero, caso de Bramante o Miguel ngel. Adems y a pesar de la contaminacin de la

arquitectura por la diversidad subjetiva en el Manierismo, hubo quien intent volver alClasicismo ms depurado y ortodoxo de la primera mitad de siglo.

En realidad ambos perodos obedecen a dos maneras distintas de entender el artegrecorromano: la primera buscaba establecer un canon objetivo, uniforme, racional, cientficoy universal; mientras que la segunda realiz libremente distintas interpretaciones individualesde ese clasicismo, llegando subjetivamente a deducciones diferentes pero sin prescindir de l.

Esta realidad obedece tanto a los gustos cambiantes de la poca como al hecho de que elarte grecorromano no fue unitario ni en el espacio ni en el tiempo, lo que permita hacerdiferentes lecturas del mismo.

Tampoco est fuera de lugar decir que la arquitectura del primer perodo se fue amanerando

porque asumi ciertos matices pictricos y escultricos, en el intento por integrar todas lasartes entre s de los artistas polifacticos de la poca.

Otro aspecto importante que ayuda a definir ese trnsito entre ambos perodos est en lamisma teora arquitectnica del siglo XVI, pues poco a poco se fueron divulgando diversostratados en los que cada autor expona sus diferentes ideas y gustos a la hora de aplicar losrdenes clsicos y las tipologas.

Se ha visto al Manierismo (que ms que un estilo es una actitud mental subjetiva y librehacia el Clasicismo riguroso) como una tendencia artstica intermedia entre Renacimiento yBarroco, que llev a:

- Resaltar lo decorativo sobre lo estructural

- Romper con los principios de proporcin y armona, pensando los edificios para ser vistosdesde mltiples puntos de vista

- Plasmar ciertos efectos de claroscuro en las fachadas, al mismo tiempo que dinmicos

- Manipular los espacios para engaar a la vista

En fin, la arquitectura se fue haciendo poco a poco escenogrfica, introduciendo adems ellujo y la magnificencia, mientras que los edificios quedaron integrados en un paisaje urbano onatural (jardines); esto es, se perciben ya los cambios que despus promovera la irrupcin delBarroco.

Pero no hemos de olvidar que el Manierismo no rechaz el orden clsico, por lo quedebemos hablar de los distintos clasicismos del siglo XVI.

Los arquitectos del XVI siguieron obsesionados por la arquitectura religiosa de plan central,aunque los jesuitas propugnasen a partir de su creacin en 1534 la vuelta a la planta basilical.El palacio sigui entre las tipologas principales tanto por calidad como cantidad y ya fueradentro de la ciudad o como villa.

1. El clasicismo como estilo nico: Donato Bramante (c. 1444-1514)

Se considera a Bramante como el arquitecto que mejor supo plasmar el clasicismo delalto Renacimiento italiano, llevando su arquitectura a su momento culminante. Su

formacin como pintor le dio el dominio de ambas perspectivas, creando a travs de la


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aplicacin de la pintura a la arquitectura espacios ilusorios desde un nico punto de vistacentral, tal como hizo en el presbiterio de Santa Mara presso San Satirode Miln.

Sus actuaciones en el presbiterio de Santa Mara delle Grazie y en Santa Maria deAbbiategrasso completaran una forma de construir decorativa y escenogrfica, un tantopictrica e ilusoria, durante su etapa milanesa.

Al llegar a Roma en 1500, Bramante entr en contacto con la antigua arquitectura romana ysu arquitectura sufri un cambio perceptible, perdiendo el carcter pictrico y dedicndose aaplicar los principios de lo clsico, hasta el punto de que codific una autntica normativa delas proporciones, de construcciones a la medida del hombre.

Partiendo del concepto arquitectnico de Alberti, hemos de sealar en primer lugar eltemplete, tempietto, perptero de orden drico toscano del convento franciscano de San Pedroen Montorio (1503), donde se alcanz la ms perfecta expresin de la llamada estructuracentralizada, la gran obsesin de los arquitectos del Humanismo.

El templete, ubicado donde la tradicin dice que San Pedro fue crucificado, sigue laarquitectura conmemorativa de los martyria, y desde luego est pensado para ser

contemplado desde fuera, pues dentro slo existe una pequea cella, de altura doble a suanchura. De diseo circular, sus dos pisos estn coronados por una cpula semiesfrica conlinterna sobre tambor, expresando de forma simblica la idea de perfeccin csmica querepresenta desde tiempos de Platn el crculo.

Otra obra importante es el prtico del Belvedere (1506), la villa estival de los papas, y quedise con objeto de unir, a travs de un conjunto de perspectiva monofocal y en tresterrazas, el palacio de Nicols V con el propio Belvedere.

Ya desde tiempos de Nicols V (1447-1455) se haba pensado reformar la baslica de SanPedro erigida en tiempos de Constantino, pero con Julio II se decidi directamente en 1511 laereccin de un nuevo templo. El proyecto inicial, del propio Bramante contemplara una

planta de cruz griega y una vasta cpula, que convirtiese San Pedro en una iglesiaconmemorativa de la doble gloria religiosa y temporal papal, adems de para la propia gloriade Julio II, quien quiso enterrarse en el crucero.

Sin embargo, a la muerte de Julio II en 1513 y un ao despus de Bramante, slo se habanconstruido los cuatro gruesos pilares del crucero, y la obra habra de alargarse por otros cientoveinte aos. Las obras saldran adelante lentamente con el trabajo y los diversos proyectos deRafael, Antonio da Sangallo y Miguel ngel ya en 1546.

2. Miguel ngel: la arquitectura como representacin

El arquetipo delHumanismo renacentistadel siglo XVI (1475-1564),hombre polifactico yuniversal formado en eltaller de Ghirlandaio,llevara a cabo importantesobras arquitectnicas enFlorencia y en Roma.

En la primera trabaj enla iglesia de San Lorenzo,donde aparte de proyectaruna fachada que no se


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construy, realiz el mausoleo que debaalbergar a los Medici, en una segunda sacristadel templo (la primera ya haba sido levantadapor Brunelleschi).

El gran inters de esta obra es que Miguel

ngel Buonarroti intervino en ella comomaestro en las tres Bellas Artes (aunque sumarcha a Roma en 1534 interrumpira sutrabajo, que continuaran Ammannati y Vasari),pues adems de construirla (lo que debi seruna novedad para l), se ocup de las esculturasy los frescos de las paredes.

En el diseo arquitectnico Miguel ngelsigui el modelo de la sacrista antigua, aunquecon significativas novedades:

- Aadi altura a la sala- Dispuso dos ventanas ligeramente

trapezoidales en cada ngulo para aumentar lasensacin de perspectiva

- Jug con la policroma para adecuarla a laperspectiva y aumentar as artificialmente elespacio

La Biblioteca Laurenziana, ubicada en el monasterio de San Lorenzo, le fue encargada en1523 y es reconocida por la historiografa como uno de los orgenes de la arquitecturamanierista e incluso como una de sus principales manifestaciones.

La sala de lectura forma un conjunto, a dos niveles, con el vestbulo (ricetto) y la escalera

que los conecta, hecha por Ammannati segn su diseo, al haber fallecido ya Miguel ngel.Los rasgos manieristas de la sala residen en el juego que se logra con las funcionesdesempeadas por los distintos elementos arquitectnicos: el muro, que como funcinprioritaria tiene el sustento aqu es liviano y sus partes internas imitan a las externas, sobretodo con funcin decorativa, que se logra adems por el contraste bicromtico.

El vestbulo es casi ocupado por la escalera, por lo que se juega de forma ilusionista con elespacio disponible y se dota al mbito de una gran monumentalidad adems del hecho de queaqu tambin se usa la ambigedad de funciones arquitectnicas.

Y es que estamos ante un artista que parece pintar y esculpir la arquitectura, al mismotiempo que concedi una expresiva, pero dudosa por ambigua, elocuencia al arte clsico.

La realizacin de extensos programas pictricos como los del Juicio Final de la CapillaSixtina no impidi a Miguel ngel realizar importantes obras arquitectnicas en el periodoentre 1534 y 1564 tales como la reforma de la piazza del Campidoglio, aplicando unaconcepcin manierista del urbanismo.

Y as fue porque se corrigi de forma cientfica la figura de una plaza trapezoidal para que alespectador le pareciera otra ms regular y obvia : rectangular. Se estaba buscando unarealidad asombrosa desde una consideracin pictrica, jugando con la estatua de MarcoAntonio como punto focal (eje visual) y con la forma oval de su pavimento, que hace parecerprecisamente a la plaza rectangular. Tal programa escenogrfico tena, tal vez, unpensamiento poltico complejo que recordaba el poder papal sobre el municipal y la herenciaprestigiosa de la ciudad.


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En 1546 Miguel ngel se encarg de la direccin de la fbrica de San Pedro del Vaticano,retomando la idea inicial de Bramante de una planta en cruz griega y gran cpula (42 metros),aunque simplificndola.

Aunque a su muerte el proyecto se modificara de nuevo (acab adquiriendo planta de cruzlatina), la cpula se levant monumentalmente (aunque algo ms ojival de lo pensado por

Miguel ngel), hasta el punto de que parece una rplica de la de Florencia, pues est formadaen realidad por dos cpulas superpuestas. En su concepcin, que resulta muy manierista, hayuna influencia de la escultura en la arquitectura.

3. Rafael (1483-1520) como arquitecto y sus discpulos

Rafael de Sanzio lleg a Roma en 1509 y fue entre 1514 y 1520 el arquitecto jefe de las obrasde San Pedro, adem

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