ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

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1 UNIVERSIDAD ROVIRA Y VIRGILI Cuaternario y Prehistoria MASTER OFICIAL EN ARQUEOLOGÍA DEL CUATERNARIO Y EVOLUCIÓN HUMANA ESTUDIO DE LOS PROCESOS POSTDEPOSICIONALES EN HOGARES Una propuesta experimental en fuegos simples al aire libre y en abrigo Joaquín Fernández Ruiz Tutor: Josep Maria Vergès Tarragona, a 10 de septiembre 2008

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UNIVERSIDAD ROVIRA Y VIRGILI Cuaternario y Prehistoria MASTER OFICIAL EN ARQUEOLOGÍA DEL CUATERNARIO Y EVOLUCIÓN HUMANA

ESTUDIO DE LOS PROCESOS POSTDEPOSICIONALES EN HOGARES

Una propuesta experimental en fuegos simples al aire libre y en abrigo

Joaquín Fernández Ruiz Tutor: Josep Maria Vergès Tarragona, a 10 de septiembre 2008

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Tesina presentada por Joaquín Fernández Ruiz bajo la dirección del Doctor Josep Maria

Vergès y el Doctor Robert Sala de la Universidad Rovira i Virgili

A Yolanda y a nuestro hijo Álvaro A mis padres, a Silvia y Guillermo

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CUENTOS ABORÍGENES AUSTRALIANOS “Cuando el fuego se escapó”

Tribu Loritja. Australia Central

Hace muchos años, bajo del cielo un grupo de seres de tiempos remotos, medio

humanos y medio animales, bajaron a la tierra desde las ramas de eucaliptos muy altos,

para encontrarse con los espíritus de la noche, quienes durante el día permanecen en

objetos inanimados.

Estos seres traían brasas consigo y, cuando llegaron a la tierra, encendieron un fuego

con el que asaron las larvas que habían encontrado en los árboles al bajar. Mientras

saboreaban su comida, fueron llamados por los espíritus y llevados hasta una cueva.

Cuando acudieron, el fuego al que ya nadie vigilaba, decidió ir por su camino.

Estaba de buen humor y sólo tenía en mente hacer travesuras, así que prendió un

enorme fuego que quemó la totalidad del bosque y calcinó todos los eucaliptos.

Los seres de los tiempos pretéritos se dieron cuenta demasiado tarde y le dijeron

demasiado tarde al fuego que regresara.

Los seres humanos, que antes no conocían el fuego, fueron allí a toda prisa para coger

brasas y llevarlas a sus campamentos, donde con esmero mantuvieron al fuego con vida

con la ayuda de hierbas secas y ramas.

Los espíritus de la noche y sus visitantes estaban muy furiosos por todo lo sucedido.

A partir de ese momento, ya nunca dejaron de vigilar el fuego, para que no se pudiera

escapar y hacer otras tonterías. Los seres de la prehistoria tuvieron que permanecer

mucho tiempo en la tierra, hasta que los árboles crecieron lo suficiente para que

pudieran volver a subir al cielo. Y los seres humanos, desde el día del gran incendio,

siempre han cuidado y honrado sus fuegos.

Anneliese Löffler. Cuentos de los Aborígenes Australianos. Mitos y leyendas

tradicionales del país del ensueño. Editorial Océano, 2001

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ÍNDICE

Abstract………………………………………………………………………………….……...7

Capítulo I. Introducción.

I. 1.- Introducción………………………………………………………………………………..8

I. 1.1.- Tema de la investigación………………………………………………………………...8

I. 1.2.- Estructura del trabajo……………………………………………………………………9

I. 1.3.- Problemática general objeto de estudio…………………………………………………9

I. 1.3.1- Objetivos específicos………………………………………………………………....11

I. 2.- Antecedentes…………………………………………………………………………..….11

Capítulo II. Metodología.

II. 3.- Metodología……………………………………………………………………………...15

II. 3.1- Introducción…………………………………………………………………………….15

II. 3.2- Procedimiento de trabajo……………………………………………………………….17

II. 3.3.- Procesado de datos…………………………………………………………………….19

II. 3.3.1- Observaciones periódicas…………………………………………………………….19

II. 3.3.2- Muestreo y análisis de dispersión…………………………………………………….20

II. 3.4.- Localización de los hogares y estaciones meteorológicas……………………………..21

II. 3.5- Elección de las variables……………………………………………………………….24

II. 3.6- Variables independientes……………………………………………………………….24

II. 3.7- Variables del proceso de combustión…………………………………………………..26

II. 3.8- Variables relacionadas con los procesos postdeposicionales…………………………..27

Capítulo III. Presentación de datos.

III. 4.- Experimentaciones al aire libre

III. 4.1 - EXP- Fuego 1- Molí dels Capellans -07-(Alcover- Tarragona)……………………....27

III. 4.1.1 - Combustión y primer control (29-1-2007)…………………………………………28

III. 4.1.2 - Control 2 (7-3-2007)………………………………………………………………..31

III. 4.1.3 - Control 3 (11-7-2007)………………………………………………………………33

III. 4.1.4 - Control 4 (15-10-2007)……………………………………………………………..36

III.4.1.5 - Control 5 (25-2-2008)…………………………………………………………….....37

III. 4.1.6 - Recogida de muestras (25/2/2008)………………………………………................39

III. 4.1.7 - Datos y análisis de las muestras

de EXP- Molí dels Capellans 1 – 2007…….……………………………….………40

III. 4.1.8 - Variables climáticas (Pluviometría y viento)

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EXP- Molí dels Capellans 1 – 2007…………………………………….………...51

III. 4.1.8.1- Estaciones meteorológicas

de Vila-Rodona, Prades y Alcover (Alt Camp)………………………………….52

III. 4.1.9 - Discusión y resultados de

EXP- Fuego 1- Molí dels Capellans -07…………………………………..……...54

III. 4.1.9.1- El proceso de combustión…………………………………………………..……54

III. 4.1.9.2 – Los procesos postdeposicionales

en el hogar EXP 1- Molí dels Capellans- 2007…………………………….…...55

III. 4.2 - EXP - Fuego 2- Can Sisó -07 (Mosqueroles- Fogars de Monclùs)………….…….63

III. 4.2.1 - Proceso de combustión y control 1 (3-3-2007)…………………………….……...64

III. 4.2.2- Control 2 (30/3/2007)………………………………………………………………67

III. 4.2.3 - Control 3 (13/5/2007)………………….……………………………………..........68

III. 4.2.4 - Control 4 (13/7/2007)………………………………………………………..…….70

III. 4.2.5 - Control 5 (21/9/2007)……………………………………………………………...71

III. 4.2.6 - Control 6 (14/11/2007)……………………………………………………….…....72

III. 4.2.7 - Control 7 (16/2/2008)………………………………………………………….......72

III. 4.2.8 - Recogida de muestras (16/2/2008)………………………………………………...74

III. 4.2.9 - Datos y análisis de las muestras de EXP- Can Sisó 1- 2007……………………....74

III. 4.2.10 - Variables climáticas (Pluviometría y viento)…………………………………….82

III. 4.2.10.1- Estación Meteorológica de Tagamanent-Montseny…………………………….82

III. 4.2.11 – Discusión y resultados de EXP- Fuego 2- Can Sisó -07…………………83

III. 4.2.11.1- El proceso de combustión………………………………………………….……83

III. 4.2.11.2 - Los procesos postdeposicionales

en el hogar EXP 2- Can Sisó – 2007…………………………………….……..84

III. 4.3- EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B

(Mosqueroles- Fogars de Montclús)………………………………………………....91

III. 4.3.1 - Combustión y control 1 (15-3-07)…………………………………………….…..91

III. 4.3.2 - Control 2 (30- 3- 07)…………………………………………………………..…..95

III. 4.3.3 - Control 3 (13-5-07)………………………………………………………….…….96

III. 4.3.4 - Control 4 (13-7-2007)……………………………………………………….…….98

III. 4.3.5 - Control 5 (21-11-2007)……………………………………………………….….100

III. 4.3.6 - Control 6 (24-2-2008)………………………………………………………….…101

III. 4.3.7 - Recogida de muestras (24/2/2008)…………………………………………….…102

III. 4.3.8 - Datos y análisis de las muestras de

EXP- Fuego 3- Can Sisó ·3-A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4- B………………...103

III. 4.3.8.1 - EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A……………………………………………….…..104

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III. 4.3.8.2 - EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B……………………………………………………112

III. 4.3.9 - Variables climáticas (Pluviometría y viento)………………………………….…..121

III. 4.3.10 - Discusión de EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A

y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B……………………………………………….…121

III. 4.3.10.1 - El proceso de combustión……………………………………………………....121

III. 4.3.10.2 - Los procesos postdeposicionales

en EXP - Fuego 3- Can Sisó 3A -2007 y EXP - Fuego 4- Can Sisó 4B -2007………....123

III. 4.4 - Experimentación en abrigo…………………………………………………………..134

III. 4.4.1– EXP- Fuego 5- Cova Manena- 2007 (El Catllar – Tarragona)………………….…134

III. 4.4.2 – Proceso de combustión y control 1 (27-2-2007)……………………………..…....135

III. 4.4.3- Control 2 (26/3/2007)………………………………………………………..……..138

III. 4.4.4- Control 3 (11/7/2007)……………………………………………………………....142

III. 4.4.5- Control 4 (9/10/2007)……………………………………………………………...145

III. 4.4.6- Control 5 (27/3/2008)……………………………………………………………...147

III. 4.4.7 - Recogida de muestras (27/3/2008)………………………………………………...149

III. 4.4.8 - Datos y análisis de las muestras

de EXP- Fuego 5- Cova Manena – 2007…………………………………………..150

III. 4.4.9 – Variables climáticas (viento)……………………………………………………...159

III. 4.4.9.1 – - Estación Meteorológica de Torredembarra……………………………………159

III. 4.4.10 – Discusión y resultados de EXP – Fuego 5 - Cova Manena -07………………….160

III. 4.4.10.1- El proceso de combustión……………………………………………………….160

III. 4.4.10.2 – Los procesos postdeposicionales

en EXP – Fuego 5 - Cova Manena -07…………………………………………163

Capítulo IV.

IV. 4.5 – Conclusiones………………………………………………………………………...168

IV. 4.6 – Perspectivas………………………………………………………………………….176

Bibliografía……………………………………………………………………………………177

Anexo I.......................................................................................................................................184

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Abstract

This paper seeks to contribute to a better understanding and knowledge of

households, as well as understand the dynamics of formation of archaeological record,

through processing and analysis of data provided by various instruments of exploration.

The main problem is addressed in this experimental work focuses on the changes

Postdeposicional of households and simple conservation differential of waste burning in

two contexts; outdoors and a coat. In the case of households there are no experiments to

measure the incidence of Postdeposicional agents that have affected them.

Trying to isolate the agents responsible for these processes is especially

interested in two basic questions. The first, by the very information that the discovery of

such agents brings about the history Taphonomic of households and its subsequent

application in archaeological sites. The second, because it highlights the need to

establish an experimental methodology capable of responding to unresolved issues with

homes. How is the dispersion of coal from the hotbed of production that involves an

area of combustion (AC) is a little studied therefore interesting to address how it is

produced and under what conditions. To answer these questions has been carried out a

pilot programme in order to obtain recognition criteria of the various phenomena that

occur after its abandonment and to determine the many variables involved. This series

of questions we have tried to resolve through a pilot program of routine.

The comments that have been carried out over an entire year have enabled us to

conclude that households in the open wind, rain and animals were the agents changed

over time its initial state of neglect, while animals action exerted a decisive role in

changing the home in shelter. In both cases we have seen have been altered as the

primary original conditions of households in these two contexts. Also variables that

have been studied have enabled us to extract experimental data useful for understanding

the processes Postdeposicional of households.

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I. 1- Introducción.

I. 1. 1- Tema de la investigación.

La Arqueología Experimental pretende recrear empíricamente los sucesos,

procesos o técnicas y abarca diversas prácticas, desde la inferencia a la simulación

empírica, pasando por el experimento directo (Gutiérrez, 1997). Existen

experimentaciones relativas a la simulación de condiciones de abandono y

sedimentación de diversos tipos de estructuras, que permiten analizar los procesos de

formación y transformación de los yacimientos arqueológicos hasta el momento de su

observación. Pero en el estudio de hogares no se han realizado experimentaciones hasta

el momento que aborden dichas cuestiones.

Es por ello que en este trabajo experimental se han llevado a cabo diversas

experimentaciones con hogares simples, con el fin de documentar los procesos

postdeposicionales que sufren tras su abandono en dos contextos diferenciados: al aire

libre y en abrigo.

La presente investigación recoge las observaciones experimentales, el análisis

de los datos recopilados y la exposición de los resultados obtenidos en un periodo de

tiempo que abarca desde febrero de 2007 hasta marzo de 2008. Cabe indicar que nos

encontramos en una primera parte del proyecto y que éste tiene continuidad en el

tiempo.

En la presente investigación se han realizado cuatro experimentaciones al aire

libre y una en abrigo. El programa descrito analiza estos cinco hogares simples y estudia

un número de variables comparables todas ellas, con el apoyo de los datos

meteorológicos proporcionados por la Red de Estaciones Meteorológicas Automáticas

(EMA) de la Red de Equipamientos Meteorológicos de la Generalitat de Cataluña

(Xemec). Asimismo, este estudio experimental integra los procesos naturales pedo-

sedimentarios producidos por agentes dinámicos externos. Estos procesos sedimentarios

son los fenómenos de alteración, de erosión y de transporte producidos por diversos

agentes (viento, agua, gravedad, animales, etc.).

Nuestro objetivo es obtener datos experimentales que nos permitan entender la

dinámica de formación del registro arqueológico con hogares y para ello que se ha

desarrollado una metodología experimental con diversas variables con el fin de obtener

información de los procesos postdeposicionales que han sufrido los diversos hogares.

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I. 1.2. Estructura del trabajo.

La estructura del presente trabajo ofrece los resultados obtenidos en las diversas

observaciones que se han realizado a lo largo de un año en los hogares y la

caracterización de los diversos agentes que han actuado en los procesos

postdeposionales a través de un marco experimental.

En el Capítulo I se presenta la problemática principal que se trata en este

trabajo, los diversos objetivos marcados y los trabajos que de una manera han abordado

cuestiones relacionadas con dicha problemática y sus diversas aportaciones.

En el Capítulo II se indica cómo se ha desarrollado este trabajo experimental,

la metodología empleada, las diversas variables experimentales que se han utilizado

para la elaboración de un protocolo de trabajo capaz de responder a los objetivos

marcados. En este apartado se recoge básicamente la metodología experimental aplicada

al estudio, cómo se han realizado las observaciones y el análisis del muestreo realizado

en las diversas combustiones que se han realizado.

En el Capítulo III se especifican los resultados de las experimentaciones y se

incluye una discusión final en cada una de ellas en sendos apartados relacionados con el

proceso de combustión y los procesos postdeposicionales.

En el Capítulo IV se reúnen de forma conjunta las cuestiones más relevantes

de este trabajo y se responde a la problemática y objetivos que nos habíamos planteado

al inicio de la investigación.

I. 1. 3) Problemática general objeto de estudio.

El presente trabajo trata de mejorar la comprensión y el conocimiento de los

hogares, así como entender la dinámica de formación del registro arqueológico,

mediante el tratamiento y el análisis de los datos proporcionados por diversos

instrumentos de exploración. Generalmente, las AC (Áreas de combustión) vendrán

indicadas por asociaciones significativas de elementos de combustión, con ciertas

categorías de restos termoalterados, los elementos minerales termoalterados, el

sedimento termoalterado y sobre todo los residuos de combustión, cenizas y carbones.

Son lo que denominaremos asociaciones de elementos de combustión (AEC) (Wünsch,

1991)

En principio, la mayoría de investigadores/as coinciden en señalar que las

áreas de combustión arqueológicas (ACA) se encuentran en un estado de abandono que

no necesariamente tiene que coincidir con su estado de funcionamiento, ya que se han

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incorporado a los procesos de diagénesis después de ser abandonadas. Los factores

postdeposicionales naturales (acción del viento, del agua, etc.) afectarán globalmente a

la conservación de los diferentes testimonios de combustión (Piqué, 1999: 49). Intentar

aislar los agentes responsables de estos procesos postdeposicionales resulta de especial

interés por dos cuestiones básicas. La primera de ellas, por la propia información que

nos proporcionan los agentes y su incidencia en los hogares y su posterior aplicación en

los yacimientos arqueológicos. La segunda, porque pone en evidencia la necesidad de

establecer una metodología experimental, capaz de responder a cuestiones no resueltas

con hogares.

Aunque estudios experimentales han permitido detectar evidencias dejadas

por estos agentes sobre algunos de los restos (patina, meteorización, trazas, etc.), en el

caso de los carbones no existen experiencias para medir la incidencia de los agentes

postdeposicionales que les han afectado. De hecho, pocos estudios se han centrado en

analizar el alcance de esta problemática en el caso de los carbones (Piqué, 1999: 58)

Dicha problemática será tratada en la presente investigación a través de un marco

experimental y es por ello que resulta de especial interés saber cuál ha sido el proceso

de formación del registro antracológico.

La problemática principal que se aborda, por tanto, se centra en las

modificaciones postdeposicionales de los hogares simples y en la conservación

diferencial de los residuos de combustión. Trataremos principalmente de generar un

modelo sobre la génesis de la formación, abandono y cambios postdeposicionales de los

hogares en estos dos contextos. En qué condiciones y cómo se produce la dispersión de

carbones a partir de un área de combustión (AC) es un proceso poco estudiado, por lo

tanto, interesante de abordar.

Asimismo, el presente estudio pretende dar continuidad y contribuir con sus

aportaciones a los estudios experimentales que se han realizado en relación con el tema

de los fuegos prehistóricos.

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I. 1.3.1 Objetivos específicos.

A partir del estudio de los hogares, trato de abordar una serie de objetivos y

elaborar una metodología de base capaz de responder a varias cuestiones que

constituyen la base del programa experimental:

- ¿Qué sucede a los hogares al aire libre y en abrigo tras su abandono durante un

periodo de un año?

- ¿Qué agentes influyen en su conservación y modificación?

- ¿Qué información proporcionan las variables experimentales utilizadas?

- ¿Cómo se produce la dispersión de carbones a partir del foco de producción que

supone un área de combustión (AC)?

- ¿Cómo se puede aplicar a los registros arqueológicos?

I. 2) Antecedentes.

Desde los primeros trabajos experimentales con fuegos (Hough, 1926), el

desarrollo de la disciplina experimental con hogares ha recorrido un largo camino.

Desde que Leroi-Gourhan (1972, 1973) estableciera los criterios de ordenación para la

interpretación de los restos de combustión a partir de la excavación de Pincevent, no ha

sido hasta los últimos 20 años cuando se han desarrollado experimentaciones con el fin

de establecer criterios objetivos de clasificación para los restos relacionados con la

combustión.

El fuego como objeto de estudio ha proporcionado diversas líneas de

investigación con un conocimiento parcial en cada una de las partes del proceso (Allué,

et al. 2007: 297): En la investigación de las primeros restos de fuego de origen

antrópico (Bellomo, 1993, 1994; James, 1989), en el estudio de las estructuras de

combustión (March, 1996; Julien, 1984, Wattez, 1988, 1996, Wünsch, 1991, 1996), en

las técnicas de producción (Perlès, 1977; Collina - Girard, 1989), en los procesos de

combustión y análisis de los residuos (Chabal et al. 1999; Théry-Parisot, 2001); y a

través de la clasificación de hogares (Laloy, 1981; Gascó, 1985; Beeching et al. 1987).

La mayoría de estas investigaciones han utilizado la experimentación arqueológica

como instrumento necesario para entender todas las fases del proceso (Allué et al. 2007:

91)

Partiendo de lo que se ha establecido en la bibliografía hasta el momento, con

el paso del tiempo se producen procesos postdeposicionales que influyen en la

conservación de los hogares (Wattez, 1996; March, 1996; Butzer, 1989). En este sentido

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los procesos naturales de formación del registro exhiben patrones recurrentes, por lo que

las distorsiones pueden ser solucionadas usando instrumentos analíticos e inferenciales

que complementen nuestro conocimiento de las leyes que gobiernan tales procesos; la

tafonomía, la geoarqueología, la etnoarqueología y la arqueología experimental son los

elementos fundamentales en la búsqueda del conocimiento de estos procesos de

formación. A través de distintos medios analíticos e inferenciales, fundamentalmente

actualistas, se generará un conocimiento de la historia tafonómica del yacimiento que

permitirá así reconstruir los agentes que intervinieron en el mismo y el grado de

resolución y capacidad informativa que se puede extraer de ese registro concreto (Torres

Sáinz, 2001; 16).

Ha sido la arqueología conductual (Schiffer, 1976, 1991) la que ha desarrollado

este tema a partir de los conceptos de contexto sistémico, donde los materiales son una

parte de las actividades dentro de un sistema adaptativo, y contexto arqueológico

cuando los materiales han sido depositados y no están inmersos en actividades. La

relación entre contextos a partir de las conductas de rechazo de la cultura material y el

posterior desarrollo del registro arqueológico por procesos culturales y naturales afecta

a la naturaleza del registro arqueológico (Rodríguez Ariza, 1993; 372)

Las distintas génesis de los sedimentos arqueológicos han sido estudiadas

principalmente por la arqueosedimentología. Autores como Schiffer (1976) han

teorizado sobre los procesos de formación del registro diferenciando los procesos

deposicionales, es decir, de formación, tanto antrópicos como no antrópicos, y los

postdeposicionales, transformaciones que se producen una vez finalizados los procesos

de formación, que actúan sobre los restos (Pique, 1999: 41). Para Schiffer hay dos

factores u órdenes de variables que pueden afectar a los contextos arqueológicos,

modificando sus propiedades: los factores culturales (C. Transforms) y los naturales (N.

Transforms) (Schiffer, 1976, 1991). En términos generales, los factores culturales y

naturales que afectan a los contextos arqueológicos inciden sobre éstos generando

transformaciones:

a) en las propiedades físicas y químicas y biológicas de sus componentes.

b) en la distribución espacial relativa de sus componentes, lo que modifica sus

composición contextual.

Las transformaciones que nos interesan, llamadas “transformaciones N” (no

culturales) por Schiffer, forman un conjunto de leyes experimentales que explican y

predicen interacciones entre los materiales depositados culturalmente y las variables

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medioambientales. Dentro de los procesos naturales hay cuatro categorías básicas que

resultan de especial interés en este trabajo; naturaleza, duración, efectos y escalas. Una

vez que los procesos de formación han actuado, el yacimiento arqueológico se verá

sujeto a las modificaciones medioambientales y antrópicas. Toda una serie de procesos

como la dispersión, perturbaciones físicas, químicas y biológicas actúan sobre los restos

culturales a través de la erosión o el sepultamiento, la destrucción o la preservación

selectiva y la alteración vertical y horizontal (Rodríguez Ariza, 1993; 373)

Como señalan Nasch y Petraglia (1987) muy a menudo se tiende a usar una

escala bipolar, considerando bien que los yacimientos están totalmente intactos

(depósitos primarios), o bien se encuentran totalmente removidos (depósitos

secundarios). Sin embargo, en la mayoría de los casos nos encontramos ante un término

intermedio, y hay que entender que en todos ellos hubo alteraciones en mayor o en

menor grado “disturbance processes must be reviewed in context with the overall

formation of the archaeological record and in terms of degrees of, rather than a

presence/ absence basis. It should be understood that every site is disturbed to some

degree” (Nash & Petraglia, 1987: 183).

Como se ha propuesto, los procesos de formación de los yacimientos se deben

a agentes biológicos y físicos. Con respecto a los primeros, se plantean diversas

cuestiones todavía no resueltas. No ocurre igual con los agentes físicos, que el

uniformitarismo geológico considera como estables; es decir, que debieron actuar en el

pasado de similar forma a la actual. Asumiendo este principio, se ha considerado que se

pueden realizar experimentos que intenten simular los procesos que afectaron al registro

arqueológico y aplicar luego los resultados experimentales a los yacimientos (Torre

Sáinz, 2001: 16-17)

Además, se han tenido en cuenta los procesos de pedoturbación o mezclado

de suelo que intervienen en la matriz sedimentaria, propuestos por Wood y Johnson

(1978). Dado que la pedoturbación puede presentarse como biológica, mecánica o

física, tomamos de estos autores los procesos de litogénesis o su equivalente

pedogénesis de: faunaturbación, floraturbación, cristaloturbación, arcilloturbación,

aeroturbación e hidroturbación.

El conocimiento de dichos fenómenos a través de la Arqueología Experimental

nos permite acercarnos a una realidad que desconocemos, ya que hace referencia a los

experimentos que simulan o reproducen artefactos arqueológicos, con el objeto de

lograr información útil (Nami, 1982). El pilar en el que se basa este campo es la

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“analogía experimental”, entendida como un proceso de inferencia de aspectos

relevantes de comportamientos no observados, a partir de la experimentación

(Yacobaccio y Borrero, 1978; citados por Nami, 1982). Este trabajo se enmarca dentro

de esta línea de investigación y por ello la experimentación se ha planteado con el fin de

valorar todos los fenómenos o mecanismos postdeposicionales.

Se ha considerado que una de las prácticas más comunes en la investigación

científica es la de experimentar, práctica que Hacking (1996) considera como un tipo de

actividad diferente de la simple enunciación con palabras. Es por ello que se considera

que la experimentación es la columna vertebral del proceso científico y procede todo

contexto de aplicación (Carbonell & Hortolà, 2006: 85-86)

El concepto de experimento y su función como instrumento de la ciencia

permite la verificación de una hipótesis bajo condiciones de control. Sobre esta base, el

experimento puede ser utilizado en todos los eslabones de la cadena arqueológica

(Malina, 1983: 71)

Existen experimentaciones relativas a la simulación de condiciones de

abandono y sedimentación de diversos tipos de estructuras, que permiten analizar los

procesos de formación y transformación de los yacimientos arqueológicos hasta el

momento de su observación: procesos deposicionales y postdeposicionales (Butzer,

1989), (Ollich et al. 1993), (Molinos et al. 1996). Pero hasta el momento no hay

experimentaciones relativas a estos aspectos anteriormente mencionados con restos de

combustiones, por ello este trabajo de investigación de alguna manera abre una nueva

línea de investigación que pretende contribuir a un mayor conocimiento del objeto de

estudio, que son los fuegos prehistóricos.

Los procesos de transformación de los contextos arqueológicos, considerados

procesos postdeposicionales, constituyen uno de los problemas cuya interpretación se

hace necesario abordar. En este sentido, no hay trabajos experimentales relacionados

con los procesos postdeposicionales que nos sirvan de apoyo. La falta de trabajos

afrontados desde este punto de vista se debe a que el desarrollo de la disciplina se ha

dirigido hacia la resolución de aspectos relacionados con las secuencias paleoecológicas

o problemas paleoetnobotánicos, siempre desde una perspectiva taxonómica o

metodológica, y dejando de lado otros temas que en un principio no parecen

indispensables para entender el registro (Allué, 2002: 108).

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II. 3- METODOLOGÍA

II. 3.1 Introducción

El estudio sobre los procesos postdeposicionales, en nuestro caso de los

hogares, debe ser abordado en varias fases. A grandes rasgos, la primera ha de

responder a cómo se ha originado el hogar y reconocer todos aquellos elementos que,

directamente o indirectamente, están relacionados con el desarrollo del proceso de

combustión y los procesos que han originado dicho objeto de estudio. En una segunda

fase se deben resolver cuáles son los procesos postdeposicionales que influyen en los

hogares al aire libre y en abrigo. Por último, una fase interpretativa debería responder a

por qué se dan estas diferencias, si las hay, en los hogares al aire libre o en abrigo.

Por tanto, en este apartado y en el siguiente haré referencia a los pasos y

secuencias que se han seguido para obtener toda aquella información pertinente a las

actividades realizadas, que constituyen los datos observables hasta que se traducen en la

información empírica a la cual tenemos acceso.

Se ha realizado un trabajo de campo que ha consistido en una serie de

actividades cuya sistematización se ha caracterizado por aplicar un conjunto de técnicas

y operaciones que han permitido la observación y la obtención de datos, cuyo registro

permitirá la producción de información básica de la cual arrancan los diversos procesos

de inferencias.

Para el estudio de los procesos postdeposicionales que suceden tras abandonar

los hogares he intentado desarrollar una dinámica operativa propia, si bien he tenido en

cuenta la metodología aplicada en los trabajos experimentales (Reynolds, 1988; LAUT,

1992; Bellomo, 1993; March, et al., 1989; March et al., 1993; Ollich et al., 1993; Coles,

1979; Théry-Parisot, 2001; Théry-Parisot, 2002; Soler, 2001; Soler, 2003; Allué et al,

2007). Este trabajo trata de ir un poco más allá, al intentar comprender las

transformaciones que suceden por los agentes naturales, biológicos o no, que

distorsionan los hogares en el tiempo.

Dado que el objetivo de esta experimentación arqueológica es principalmente

generar las condiciones para la observación de un fenómeno y la obtención de datos que

permitan la elaboración de información, es necesario partir del supuesto de que, si se

trata de la producción sistemática de información arqueológica, ésta se inicia con la

formulación de un proyecto o protocolo de trabajo. La elaboración de un protocolo de

trabajo ha sido necesaria para el reconocimiento de los fenómenos postdeposicionales

Page 16: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

16

que han incidido en los hogares simples y se ha concretado en el trabajo de campo que

se dividió en tres fases diferenciadas;

1) En primer lugar, crear varios fuegos, asumiendo diversas variables.

2) Llevar a cabo un proceso de observación de los diversos hogares y el

análisis de las diversas variables tras ser abandonadas las combustiones.

3) Muestreo.

Se ha utilizado la metodología aplicada por (Soler, 2001; 247-248), (Soler, 2003), que

descompone el proceso experimental en tres fases diferenciadas:

A) Antes de la experiencia;

- Especificar el desarrollo del proceso de investigación: cuál es el motivo de la

experimentación.

- Justificar la elección de las variables que tenemos que considerar durante la

experimentación.

B) Durante la experimentación;

- Control absoluto de la combustión.

C) Después de la experimentación;

- El registro del hogar;

- Dimensión del área que contiene restos de combustión.

- Descripción de la termoalteración del sedimento.

- Topografía del terreno.

- Dispersión de los carbones.

- Análisis;

- Procesos Postdeposicionales.

- Variables.

- Muestreo

Este carácter experimental es la principal virtud del trabajo que se expone y, a su

vez, la mayor limitación. La exploración de un sistema abierto, con trabajos de campo,

conlleva grandes dificultades: encontrar el área experimental, diseñar la campaña

experimental, instrumentarla con el mejor material posible según los recursos

disponibles, recoger la mayor información posible y procesar los datos obtenidos es una

labor difícil y no siempre recompensada desde el punto de vista científico.

Page 17: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

17

II. 3.2 Procedimiento de trabajo.

En estas experimentaciones se ha tratado de elaborar una metodología capaz

de responder a una problemática concreta que está relacionada con la conservación de

los hogares en dos contextos diferenciados. Es por ello que he trabajado en dos

direcciones: en primer lugar, sistematizando el objeto de estudio, el “hogar”, a través de

la experimentación arqueológica y, posteriormente, llevando a cabo la observación de

los diversos fenómenos que sucedieron tras ser abandonados los hogares.

El análisis experimental de las variables relacionadas con el proceso de

combustión implicó asumir y concretar diversas variables operativas (madera, forma del

hogar, temperatura, etc.). Era necesario el estudio de cada una de las variables por

separado, ya que ofrece una información detallada que permite aislar criterios y analizar

fenómenos individualmente. En este sentido, se llevó a cabo un control absoluto de las

diversas combustiones.

Una vez realizadas las combustiones se procedió en cada una de ellas de la

siguiente manera: en primer lugar, se delimitó el perímetro del hogar con restos de

combustión desde dos puntos (A y B separados entre sí por un metro de distancia)

colocados a poca distancia del hogar. Los puntos de referencia (A y B) servirían para

posteriores observaciones del perímetro del hogar y su modificación a lo largo de todo

el proceso experimental. Esto permitió llevar a cabo diversos levantamientos

planimétricos con las modificaciones que se produjeron en el perímetro del hogar a lo

largo del tiempo. Estas plantas se realizaron primero en un dibujo a escala 1/20 para

pasarlas posteriormente a un formato digital y ser tratadas en diversos programas

informáticos (Autocad y Corel Draw).

Para registrar los fenómenos que sucedían en los hogares tras ser

abandonados, se realizaron diversos controles a lo largo de todo el proceso

experimental, éstos se llevaron a cabo cada dos meses aproximadamente y se registraron

los diversos fenómenos que sucedían a lo largo de todo un año. En primer lugar, se

tomaron fotografías que han permitido crear una secuencia en imágenes de la evolución

de cada uno de los hogares. Asimismo, se anotaban en una ficha de campo las

alteraciones observadas dentro de la cuadrícula, en el hogar, y se delimitaba el

perímetro del fuego para poder realizar la planta correspondiente. Todos estos controles

se realizaron hasta que se dio por acabada cada experimentación, ya que finalizada ésta

se procedió a realizar el estudio de dispersión de los carbones a través de un muestreo

en el área de estudio de cada hogar. Para determinar un área de estudio en cada hogar y

Page 18: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

18

observar la orientación espacial de los carbones, se han realizado las correspondientes

representaciones gráficas de las proyecciones horizontales o plantas. Para ello se realizó

una cuadricula (3 x 3 metros) en cada hogar (los puntos A y B nos sirvieron para tal

propósito, así como para numerar los diferentes cuadros de dicha cuadricula). Una vez

realizada esta operación, se procedió a determinar el Norte magnético con una brújula, a

través de la línea creada (entre los puntos A y B) y los puntos cardinales que permitirían

observar la dirección de la dispersión de carbones.

Una vez realizada la cuadricula se procedió a obtener las “cotas de nivel” o “z”

del espacio objeto de estudio, utilizando un “nivel de agua” que se fabricó para tal

propósito. Desde un “punto 0” relativo en el espacio y colocado el nivel se tomaron en

cada punto de intersección de cada cuadro las cotas de la cuadricula para determinar las

características topográficas del terreno y que de alguna manera pudieran influir en la

dispersión de los carbones. Con las cotas obtenidas, se procedió a realizar un dibujo de

la planta a escala 1/20 para controlar las variables relacionadas con la superficie y que

de alguna manera influyeran en la dispersión de los carbones.

Las experimentaciones al aire libre se localizaron en zonas para operativizarlas

en condiciones similares; es decir, sometiendo a los hogares a los agentes externos

naturales de forma general para un posterior análisis de los procesos postdeposicionales

sufridos por los hogares al aire libre. Mientras que con la combustión realizada en

abrigo se trataba de crear las condiciones de abandono similares a las que se dieron en la

prehistoria,; es decir, en pequeños abrigos o cuevas “exógenas” que estuvieran

protegidas de los agentes naturales externos, principalmente de la lluvia y el viento. Se

trataba de crear dos contextos diferenciados para operativizar las experimentaciones y

extraer conclusiones sobre su evolución. Fue necesario que los contextos para realizar

las experimentaciones se localizaran en zonas que estuvieran lo más aisladas posibles de

agentes ajenos a la experimentación que pudieran alterar las condiciones

experimentales. Una vez finalizadas las experimentaciones se realizó un muestreo de la

superficie, para lo que se creó en cada hogar una “rosa de vientos” con diversas líneas

principales orientadas a los puntos cardinales, y se llevó a cabo un estudio posterior

sobre la dispersión de los carbones sobre la superficie. En el muestreo realizado, las

variables que se han tenido en cuenta son la cantidad de número de carbones, su peso,

tamaño y volumen. El análisis microespacial que se ha puesto en práctica trata de

determinar las relaciones espaciales, verticales y horizontales de los restos de

Page 19: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

19

combustión, para definir los diferentes procesos que se produjeron en los espacios

donde se ubicaban los hogares tras su abandono.

II. 3.3- Procesado de los datos.

La metodología de obtención de datos ha sido diseñada en función de los

objetivos marcados para el estudio experimental. Se llevó a cabo un trabajo de campo,

en primer lugar, que dividiremos en sendos apartados:

II. 3.3.1- Observaciones periódicas.

Se realizaron observaciones periódicas de los hogares cada dos meses, en las que se

registraron los procesos postdeposicionales desde febrero de 2007 a marzo de 2008

Se tomaron los siguientes datos en cada uno de los hogares:

- Estado de conservación del hogar (cenizas, carbones, etc.).

- Perímetro del hogar.

- Alteraciones registradas dentro de la cuadricula.

- Alteraciones del sedimento. Rubefacciones

- Orientación de la dispersión de carbones. Brújula de campo

- Fotografías.

Esta recopilación de datos se realizó de una manera meramente descriptiva y

de análisis, así pues, no debe entenderse esta parte como un trabajo completo en sí, sino

como una referencia más a tener en cuenta de cara al desarrollo de futuros trabajos, ya

que nos ofrece una primera aproximación sobre cuáles son los factores que intervienen a

nivel tafonómico tras ser abandonados los hogares. Para tal fin, se creó una base de

datos para registrar la información relativa a las variables del proceso de combustión

(temperatura, tiempo de combustión, etc.) y en ella, además, se recogieron los datos

proporcionados por las estaciones meteorológicas del sistema (Xemec) de Cataluña,

relativas a las variables objeto de estudio. Este proceso se concretó en dos niveles;

a) Acopio de la información.

b) Ordenación de la información.

Page 20: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

20

II. 3.3.2- Muestreo y análisis de dispersión de los carbones.

La extracción de las muestras antracológicas en los yacimientos se realiza en

función de su distribución en el yacimiento; es decir, según aparezcan esparcidos o

asociados a estructuras de combustión (Grau, 1995: 20). Teniendo en cuenta esta

consideración, se consideró hacer un muestreo que nos permitiera extraer la información

en nuestra zona de estudio a nivel espacial, tomando como unidad de medida de

muestreo el fragmento de carbón (Chabal, 1982). Nosotros elegimos como unidad de

medida el fragmento de carbón, debido a la comodidad para un gran número de

muestras.

Una vez extraídas las muestras del sedimento se recuperaron los carbones por

flotación manual. El método de tamizado por flotación se revela como el más rentable

para la recuperación de carbones de un yacimiento arqueológico (Chabal, 1988;

Rodríguez Ariza, 1993). El sedimento de cada muestra se introducía en una cubeta llena

de agua. Una vez el sedimento se iba deshaciendo, los carbones se recuperaban

vertiendo el agua sobre un tamiz de (0,5 mm.), que posteriormente se ponían a secar con

su etiqueta correspondiente al aire libre. Una vez secados los carbones y parte de los

residuos se volvían a introducir en su bolsa correspondiente.

Una vez realizado este proceso procedimos al recuento de los carbones de cada

experimentación, teniendo en cuenta que la unidad de medida en Antracología puede ser

bien el número de fragmentos de carbón, bien la masa o peso de éstos. En general, el

estudio cuantitativo que se ha realizado se basa en el número de fragmentos de carbón

analizados, constituyendo cada uno de ellos una unidad de medida, sea cual sea su talla.

Teniendo en cuenta estas cuestiones, se consideraron las siguientes variables; las

fracciones (fracción > 4, fracción > 2, fracción > 1), volumen (ml) total de carbones,

peso (gr.) de cada fracción y número de carbones.

El procedimiento de trabajo fue el siguiente; para separar las diversas

fracciones de carbones se utilizaron tamices de malla de (4 mm., 2 mm., 1 mm.), con

unas pinzas se separaban los residuos y se contaban individualmente los carbones de

cada fracción. Los carbones de cada fracción eran separados y pesados en su conjunto

con una báscula de precisión. Posteriormente, todas las fracciones de cada muestra eran

introducidas en un recipiente para calcular el volumen (ml) total de carbones. Todos

estos datos fueron introducidos en una base de datos para tratar las diversas variables de

cada muestra. El número total de carbones recuperados y contabilizados en las cinco

experimentaciones asciende a 9032. Anexo I

Page 21: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

21

II. 3.4 - Localización de los hogares y estaciones meteorológicas.

La primera experimentación al aire libre se realizó en la población de Alcover

(Tarragona), se trata de la combustión de la Masia Molí dels Capellans, las otras tres

combustiones al aire libre se realizaron en la Masia de Can Sisó, cerca de la población

de Mosqueroles en el Término de Fogars de Montclús, muy próxima al Parque Nacional

del Montseny. La única experimentación en abrigo se llevó a cabo en la Cova Manena

(La Cativera) cerca de la población de El Catllar (Tarragona).

La nomenclatura que se ha propuesto en cada una de ellas responde a la

abreviatura (EXP) de forma correlativa, según el orden de las combustiones realizadas y

el lugar donde se realizó, junto con el año. En las imágenes siguientes se indica el

posicionamiento de las Estaciones Meteorológicas y la distancia con respecto a los

hogares (Imágenes, 1, 2, 3, 4).

Imagen 1. Localización de la Estación Meteorológica de Tagamanent- Montseny y los hogares

al aire libre de Can Sisó (Mosqueroles- Montseny)

Page 22: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

22

Imagen 2. Distancia aproximada en línea recta entre la Estación Meteorológica Tagamanent-

Montseny y Can Sisó 14 Km.

Imagen 3. Localización del hogar al aire libre del Molí dels Capellans y las estaciones

meteorológicas de Prades y Vila-Rodona utilizadas para su control y situación del hogar en

abrigo de Cova Manena (La Cativera- El Catllar) y la Estación Meteorológica de

Torredembarra.

Page 23: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

23

Imagen 4. Distancias aproximadas entre las estaciones meteorológicas y los hogares: Prades-

Molí dels Capellans 12 Km.; Vila-Rodona- Molí dels Capellans 17 Km. y Torredembarra –

Cova Manena 9 Km.

Para el análisis microclimatológico se ha dispuesto de los datos en formato

“csv” compatible con “excel”, con el registro diario de los periodos requeridos de las

variables climáticas de estudio de cuatro estaciones meteorológicas automáticas (EMA)

del Servicio Meteorológico de Cataluña y los de la Estación Meteorológica de Alcover,

que forma parte del centro Meteorológico del Alt Camp. Los datos proporcionados por

las Estaciones Meteorológicas se han utilizado como apoyo general, ya que

operativamente no son válidas para nuestro objeto de estudio por encontrarse muy

alejadas de las zonas experimentales.

Comarca Código de

la estación

Estación Municipio X UTM Y UTM Altitud Tipo datos

periodo

Alt Camp DQ Vila-Rodona Vila-Rodona 363213 4574544 290 SH

Tarragonés DK Torredembarra Torredembarra 367380 4556443 2 SH

Baix Camp U5 Prades Prades 332480 4575750 975 HO

Vallés

Oriental

VX Tagamanent -

PN del

Montseny

Tagamanent 442128 4622198 990 HO

Alt Camp Sin datos Alcover Alcover 346 4569 243 Sin datos

HO - Horarias

SH - Semihorarias

Page 24: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

24

Por tanto, se trata de una herramienta más que se ha utilizado de forma

genérica y global. Sería necesario para ello colocar Estaciones Meteorológicas Portátiles

en el mismo lugar de las experimentaciones y esto no ha sido posible en este trabajo. Se

trata de una referencia sobre el clima local que está condicionada por la orografía de la

zona y el comportamiento de las variables relacionadas con la climatología.

II. 3. 5 - Elección de las variables.

En esta investigación las variables que se han escogido y el programa

experimental se han planificado de acuerdo a los interrogantes que pretendemos

contestar. Hay que decir que no se pretende direccionar los resultados hacia nuestros

propios intereses. El objetivo es entender la dinámica postdeposicional de los hogares

simples durante un periodo de tiempo determinado y poder contrastar o entender la

formación y conservación de los restos producidos en un fuego, en los registros

arqueológicos, desde la observación de un fenómeno que de por sí no deja de ser

complejo.

Siguiendo un orden lógico, la experimentación debe consistir en combinar de

manera sistemática las variables independientes, de forma que cada experimento sea el

resultado de una conjunción única de variables. A esto le llamamos programa

experimental. Por tanto es necesario que las relaciones entre ambos tipos de variables se

expliciten claramente para su identificación analítica. Se trataría de las condiciones que

el experimentador manipula para producir un fenómeno y observar sus consecuencias.

Estos factores, en el método experimental, se denominan variables independientes. Los

procesos resultantes son las variables dependientes; es decir, los fenómenos de

observación (Gutiérrez Sáez, 1994; 117). El reconocimiento de cada uno de los

elementos que se relaciona con los diferentes procesos postdeposicionales es la clave

del estudio.

II. 3. 6 - Variables independientes.

Uno de los problemas más importantes que plantea la experimentación de

campo es el control de las variables que intervienen en una combustión. Conociendo la

imposibilidad de asumir plenamente este control en la mayoría de los casos, es

recomendable hacer una selección de aquéllas que realmente sean indispensables para

responder a las preguntas iniciales (Soler, 2001: 247). Decidí realizar una selección de

aquéllas que no habían sido tratadas en otras investigaciones y que podían proporcionar

Page 25: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

25

información sobre los procesos postdeposicionales para tratar de determinar qué

variables afectan a los hogares tras su abandono. Es por ello que la selección de las

variables que no habían sido tratadas de forma sistemática en otras investigaciones ha

sido objeto de estudio en este trabajo y sobre todo que estuvieran enmarcadas en el paso

del tiempo. Entre éstas hay que destacar un tipo de variable que dada su importancia se

considera de especial relevancia controlar en esta investigación. Son variables

imponderables que no han sido tratadas de forma exhaustiva en otras investigaciones:

las condiciones climáticas o atmosféricas.

En este sentido las más variables más significativas por reiteradas son las

atmosféricas, ya que pueden ejercer una influencia como factores que contribuyen a la

dispersión durante largos periodos de años. El resto de variables quedan enmarcadas

también en la comprensión de los fenómenos postdeposicionales. En este trabajo

experimental con hogares simples se tuvieron en cuenta las siguientes variables

independientes:

Page 26: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

26

II. 4.11- Variables del proceso de combustión.

Variables

EXP- Fuego 1-

Molí dels

Capellans- 2007

EXP- Fuego 2

Can Sisó- 2007

EXP- Fuego 3 -

Can Sisó 3A 2007

EXP- Fuego 4 -

Can Sisó 4B -

2007

EXP- Fuego 5 -

Cova Manena-2007

Tiempo de

combustión

2h 20´

2h 30´

3 h

3 h

3 h 5´

Diámetro

madera

4-6 cm.

6-7 cm.

5-6 cm.

5-6 cm

5-6 cm

Madera

Pino blanco

(Pinus halepensis)

Pino blanco

(Pinus

halepensis)

Pino blanco

(Pinus halepensis)

Pino blanco

(Pinus

halepensis)

Pino blanco

(Pinus halepensis)

Madera

utilizada

para el

encendido

Zarzaparrilla

(Smilax aspera)

Brezo

(Erica arborea)

Brezo

(Erica arborea)

Brezo

(Erica arborea)

Zarzaparrilla

(Smilax aspera)

Peso total

madera

utilizada

21 Kg.

24 Kg.

25 Kg.

10 Kg.

17 Kg.

Peso total

madera para

el encendido

3 Kg.

1,5 Kg.

1 Kg.

0,7 Kg.

2 Kg.

Estado de la

madera

Seco

Seco

Húmedo

Húmedo

Seco

Tipo de

fuego

Plano

Plano

Plano

Plano

Plano

Localización

Aire libre

Aire libre

Aire libre

Aire libre

Abrigo

Page 27: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

27

II.3.7 - Variables relacionadas con los procesos postdeposicionales.

Variables

Localización

hogares

Topografía del

terreno

Fenómenos

atmosféricos

Tiempo de

abandono

Tipo de suelo

EXP- Fuego 1 -Molí

dels Capellans- 2007

Aire libre

Pendiente 4% en

dirección NE

- Dirección del viento

-Velocidad del viento

- Pluviometría

1 año

Arenoso con

herbáceas

EXP- Fuego 2 -Can

Sisó- 2007

Aire libre

Pendiente 6,6 %

en dirección S

- Dirección del viento

-Velocidad del viento

- Pluviometría

1 año

Arenoso con

herbáceas

EXP- Fuego 3A--Can

Sisó-2007

Aire libre

Pendiente 17%

en dirección SE

- Dirección del viento

-Velocidad del viento

- Pluviometría

1 año

Arenoso con

herbáceas

EXP- Fuego 4 B-Can

Sisó-2007

Aire libre

Pendiente 17%

en dirección SE

- Dirección del viento

-Velocidad del viento

- Pluviometría

1 año

Arenoso con

herbáceas

EXP- Fuego 5 -Cova

Manena-2007

Abrigo

Pendiente 23,3

%

en dirección SO

- Dirección del viento

-Velocidad del viento

1 año

Limoso

III. 4) Experimentaciones al aire libre.

III. 4.1 – EXP 1- Fuego 1- Molí dels Capellans -07-(Alcover- Tarragona)

Localización

El Molí dels Capellans se halla situado en el margen derecho del valle del río

Glorieta, afluente del Francolí, a una altura de 276 metros s.n.m. Sus coordenadas

geográficas son 41º 16’ 0,2’’ N 1º 8’ 51’’ E. Concretamente, el punto donde se llevó a

Page 28: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

28

cabo el experimento se halla en un pequeño rellano de superficie con una inclinación del

4% y a unos 12 metros del lecho del río Glorieta, en la base de una vertiente orientada al

NE, con una cota máxima de 655 m s.n.m. (Plans de Vassà), que en su tramo inferior

presenta un desnivel medio de más del 50%. El entorno inmediato del punto donde se

hallan los restos de la combustión, especialmente al O, SO y S, está cubierto por una

densa vegetación de tipo boscoso con árboles (robles, encinas y pinos) que superan los

10 m de altura. Así mismo, a escasos metros al SO, S y SE se encuentran edificios de

unos 8 m. de altura. La orografía de la zona y las particularidades del lugar hacen que

éste se halle relativamente protegido de los vientos de componente S, y expuesto a los

que corren canalizados por el valle fluvial. Imagen 5

Imagen 5. Localización orográfica del hogar al aire libre del Molí dels Capellans.

III. 4. 1.1 - Combustión y primer control (29-1-2007)

Se realizó un fuego plano (aproximadamente de unos 80 cm. de diámetro) sin

ningún tipo de estructuración en un terreno bastante horizontal con una inclinación del

4% en dirección NE. Se llevó a cabo a finales de enero (29-1-07) y posteriormente se

realizaron cuatro controles aproximadamente cada tres meses: (7-3-07), (11-7-07), (15-

10-07) y el día (25-2-08) cuando se dio por finalizada la experimentación. En el proceso

de combustión se utilizaron 3 Kg. de zarzaparrilla (Smilax aspera) para el encendido del

fuego y 21 Kg. de leña de pino blanco (Pinus halepensis) en estado seco. Los troncos de

madera utilizados tenían un diámetro aproximado entre (4-6 cm.) y no se llevó a cabo

una disposición especial de la madera. Primero se colocaron las ramas de zarzaparrilla

Page 29: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

29

(Smilax aspera) para el encendido e inmediatamente se colocó la madera de pino blanco

(Pinus halepensis). El control de las temperaturas de la combustión se efectuó mediante

cuatro termocúpulas (T1, T2, T3, T4), que se colocaron en superficie y en determinadas

posiciones que fueron registradas desde los puntos de referencia principales (A-B). Las

temperaturas alcanzadas y la disposición de las termocúpulas quedan reflejadas según se

indica en el Gráfico 1. El tiempo total de la combustión fue de 2 h 20´ y la temperatura

se tomó cada 10 minutos.

Gráfico 1. Temperaturas alcanzadas durante la combustión del Molí dels Capellans y la

posición de las termocúpulas. (Exp- Fuego 1- Molí dels Capellans -07)

Si observamos el gráfico de temperaturas vemos como la (T3) colocada en el

perímetro del hogar es la que alcanzó los valores más elevados durante toda la

combustión (631º C). En relación a la (T2) que estaba colocada en superficie en el

centro del hogar, cabe señalar que dejó de funcionar correctamente a los 10´

aproximadamente, por lo que sus datos no se tendrán en cuenta. La (T1) se introdujo a

(2 cm.) aproximadamente dentro del suelo en el centro y la (T4) se introdujo a (2 cm.)

dentro del suelo en la zona exterior del perímetro. Se colocaron de esta manera con el

objetivo de obtener las temperaturas externas en superficie y las internas del sedimento

donde se ubicaba la combustión. El proceso de combustión refleja cómo la (T3) situada

en el perímetro externo y en superficie alcanzó aproximadamente a los 30 minutos la

máxima temperatura y cómo mantuvo temperaturas por encima de los 500 º C unos 40

minutos, y posteriormente bajó progresivamente de temperatura tras una hora de

encendido. Las termocúpulas situadas a (2 cm.) de profundidad dentro del suelo (T1-T4)

0

100

200

300

400

500

600

700

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15

Tiempo en minutos

Gra

dos

cent

ígra

dos

TERMOCÚPULA 1 (2 cmprofundidad-centro)

TERMOCÚPULA 2(centro superficie)

TERMOCÚPULA 3 (perímetro superfice)

TERMOCÚPULA 4 (perímetro 2 cmprofundidad)

Page 30: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

30

fueron indicando progresivamente un aumento de la temperatura a partir de los 30

minutos. La (T1) situada en el centro del hogar a (2 cm.) de profundidad indicó valores

de 50º C de temperatura y no superó en ningún momento los 100º C. Prácticamente

coincide con la evolución de la temperatura y el impacto calorífico sobre el sedimento

de la (T3), ya que las temperaturas máximas de dicha termocúpula comenzaron a indicar

valores altos a partir de los 30 minutos, como hemos especificado anteriormente,

cuando la (T1) mantuvo valores de forma constante en torno a los 40º C. La (T4)

situada a (2 cm.) de profundidad dentro del suelo y en el perímetro del hogar al igual

que la (T1) indicaron un progresivo aumento de la temperatura, sobre todo transcurridos

unos 30 minutos, que es cuando comienza de forma progresiva a indicar valores por

encima de los 100º C. Al finalizar el proceso de combustión las termocúpulas (T1-T4)

comenzaron a indicar valores inferiores en la temperatura.

Fotografía 1. Control 1 el día 29-1-2007. Molí dels Capellans. En la imagen se observa

cómo quedó el hogar tras la combustión.

De forma general, se puede observar cómo que cuando va descendiendo la

temperatura en la parte externa de la superficie se produce un incremento paulatino de la

temperatura en el interior del sedimento a medida que las brasas generadas inciden en la

superficie por la capacidad del sedimento de retener el calor. Hay que decir que la (T3)

aproximadamente durante una 1 h y 20´ mantuvo unas temperaturas altas y se trata de la

referencia principal sobre las temperaturas de la superficie externa donde se ubico el

hogar, tal como se ha especificado anteriormente.

Page 31: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

31

Finalizada la combustión, se procedió a documentar los restos de la

combustión y las posiciones de las termocúpulas mediante un levantamiento

planimetrico, acompañado de fotografías. A partir de este momento los restos del hogar

fueron abandonados y se inició el estudio postdeposicional de los restos. Fotografía 1

Figura 1. Control 1 el día 29-1-07. Planta del hogar del Molí dels Capellans tras la

combustión.

Como referencia para realizar la topografía del terreno donde se ubicaba el hogar

se realizó una cuadricula de (0,5 x 1 x 0,5) metros que posteriormente se amplió a (3 x

3) y se obtuvieron las cotas del terreno desde un punto “0” relativo. Figura 1.

III. 4.1.2 - Control 2 (7-3-2007)

Es interesante destacar que tras realizar la combustión del Molí dels Capellans

a finales de enero (29-1-2007) y realizar el segundo control el día (7 de marzo de 2007),

es decir transcurrido casi un mes y unos pocos días, las cenizas de la combustión habían

desaparecido por completo. Este hecho ha sido documentado en otras

experimentaciones donde tras algunas lluvias intermitentes y dos semanas de abandono

de un hogar ya no quedaban restos de cenizas, sólo carbones de un tamaño considerable

(Soler, 2003). Asimismo, se observó que el hogar presentaba ciertos lavados que habían

desplazado los carbones hacia el perímetro externo del hogar y dejado al descubierto las

Page 32: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

32

rubefacciones del sedimento. La dispersión de carbones a una distancia aproximada de

(60 cm.) del hogar se encontraba orientada en la superficie en dirección (N-NO-SO).

Fotografía 2

Fotografía 2. Segundo control el día 7 de marzo de 2007. Rubefacciones sobre el

sedimento, lavados sobre el hogar y desplazamiento de carbones en dirección (N-NO-

SO). Se puede observar cómo las cenizas tras un mes prácticamente de abandono han

desaparecido.

Los lavados sobre el hogar y la dispersión de los carbones habían dejado al

descubierto la microestratigrafía del hogar, ya que se podía observar una mancha sobre

el sedimento de color oscuro (PANTONE 437 U) y por encima otra con tonalidades

anaranjadas (PANTONE 473 U), cubierta por los carbones. La distribución de las

herbáceas (Dicotiledóneas-Monocotiledóneas) en la superficie de estudio se distribuían en

las zonas más próximas al hogar, sobre todo en dirección NE-E-S. Una vez realizadas

las observaciones pertinentes, se procedió a documentar la topografía del terreno. A

través de la cuadricula que se realizó, se obtuvieron las cotas del terreno desde un punto

“0” relativo, para ello se utilizó un nivel de agua que se construyó para tal fin

posicionándolo en todas las intersecciones de la cuadricula. Fotografía 3

Las cotas obtenidas fueron tratadas posteriormente en las tres dimensiones

arqueológicas (x, y, z) en un dibujo a escala 1/20. Esta primera imagen topográfica del

terreno se trató en un programa de Autocad con el fin de obtener una imagen en tres

dimensiones. Posteriormente se calculó la pendiente del terreno, calculando la tangente

Page 33: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

33

de la superficie. El cálculo que se realizó indicaba una pendiente del 4% en dirección

(NE). Figura 2

Figura 2. Imagen topográfica del terreno del hogar del Molí dels Capellans una vez obtenidas

las cotas. Se puede observar una ligera pendiente del 4 % en dirección NE.

Fotografía 3. Segundo control el 7 de marzo de 2007. En esta fotografía se observa la

cuadrícula realizada para obtener la topografía del terreno.

III. 4.1.3 - Control 3 (11-7-2007)

El día 11-07-2007 se llevó a cabo el tercer control del hogar del Molí dels

Capellans. Han transcurrido casi 5 meses desde que se realizó la combustión y durante

todo este tiempo de abandono el hogar no ha sufrido aparentes alteraciones. Al igual

que en anteriores controles se procedió a determinar la modificación del perímetro del

hogar desde los puntos de referencia principales (A-B). Figura 3

Page 34: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

34

Figura 3. Control 3 el día 11-7-2007. Planta del hogar del Molí dels Capellans tras cinco

meses de abandono.

Se observó que las rubefacciones descritas en el anterior control en este

momento presentaban tonalidades más claras y no tan anaranjadas (PANTONE 475 U),

sobre todo en la zona del perímetro externo. En este sentido, una capa de sedimento

ceniciento por debajo de los carbones había quedado expuesta al aire libre en buena

parte del hogar, fenómeno que no fue observado en el anterior control. Fotografía 4

Fotografía 4. Capa de sedimento ceniciento de la microestratigrafía del hogar al

descubierto por debajo de los carbones.

Page 35: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

35

Asimismo se constató que de forma general la cubierta vegetal presentaba un

estado más seco, algunas plantas habían crecido muy próximas al perímetro del hogar y

las herbáceas se extendían en dirección (S-E). Con respecto a la dispersión de carbones,

éstos tienen una orientación (N-SO-SE) y con una tendencia a desplazarse sobre la

superficie en las zonas con menor cobertura vegetal. Los carbones que en el anterior

control se observó que se habían desplazado hacia el exterior del perímetro del hogar de

un tamaño (10-5 mm.), ahora parece que tienen un tamaño inferior aunque se trata de

una observación.

Hay que indicar que las herbáceas que estaban creciendo alrededor del hogar

del Molí dels Capellans debían estar provocando perturbaciones (Floraturbación) en la

microestratigrafía del hogar. Asimismo, las zonas externas del perímetro del hogar

estaban sufriendo una mayor alteración o destrucción que la zona central del hogar, que

parecía más compacta. Fotografía 5

Fotografía 5. Control 3 el día 11-7-2007. Imagen general del hogar y la indicación de la

dirección de la dispersión de carbones (N-NO-SE)

Hay que destacar la presencia de coprolitos en el mismo hogar y en la zona

externa no muy lejos de los restos de la combustión, hecho que fue documentado y

posicionado (Figura 3). Se trata de la presencia de un animal, posiblemente un perro

(Canis lupus familiares). No se han realizado análisis sobre dichos restos de coprolitos

y no podemos indicar a ciencia cierta qué tipo de animal fue, pero sí que hizo acto de

presencia. En el análisis del hogar que se llevó a cabo no se constató ninguna alteración

o destrucción de relevancia, ni tampoco huellas en superficie. Fotografía 6

Page 36: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

36

Fotografía 6. Control 3 el día 11-7-2007. Situación de los coprolitos en el hogar.

III. 4.1.4 - Control 4 (15-10-2007)

El cuarto control del hogar del Molí dels Capellans se realizó el día 15-10-07 y

han transcurrido prácticamente nueve meses desde el abandono del hogar. Las primeras

observaciones indicaron la presencia de otro animal (Sus scrofa), ya que la zona

próxima al hogar fuera de la zona de estudio presentaba indicios de que el suelo había

sido removido y alterado. Esta zona era bastante amplia (3 x 2 metros

aproximadamente) y se encontraba orientada en dirección (E)

Una parte del hogar también fue alterada y mostraba signos evidentes de que

el suelo fue removido, la tierra presentaba ciertos surcos o socavones que afectaban

claramente sobre todo en las cuadriculas (H8, I8, J8 y H7, H8). Esta zona afectada tenía

una orientación (SO-O) y presentaba carbones desplazados en estas direcciones

mezclados con la tierra. Podemos decir que los restos de la combustión se encontraban

bastante compactados, sobre todo en la zona que no estaba afectada por la perturbación

anteriormente descrita. Se podía ver que las herbáceas habían cubierto buena parte de

los retos de la combustión y se extendían por toda la superficie del área de estudio.

Estas herbáceas que habían crecido por encima del hogar han debido favorecer la

estabilización de los restos del hogar y protegerlos de las inclemencias climatológicas

de la zona. Asimismo resultaba difícil distinguir sobre la superficie si se había

producido una dispersión de carbones en determinadas direcciones, ya que se observó

que los carbones estaban prácticamente cubiertos por las herbáceas. Fotografía 7

Page 37: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

37

Fotografía 7. Control 4 el día 15-10-07. Imagen general con las alteraciones en el

mismo hogar y en la zona externa.

Figura 4. Control 4 el día 15-10-2007. Planta del hogar del Molí dels Capellans tras nueve meses de

abandono. Se indican los restos de coprolitos en el interior del hogar y en la zona externa.

Hay que indicar que se observaron nuevamente coprolitos por encima de los

restos del hogar, lo que indica que nuevamente el animal (posiblemente Canis lupus

familiaris) había regresado al lugar. Desde los puntos de referencia principales (A-B) se

procedió a obtener el perímetro del hogar. Figura 4

III. 4.1.5 - Control 5 (25-2-2008)

Page 38: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

38

En el mes de febrero de 2008 se realizó el último control del hogar y se llevó a

cabo la recogida de muestras para realizar el estudio sobre la dispersión de carbones. En

este momento, el hogar había sido cubierto por herbáceas prácticamente en su totalidad,

que se extendían por todo el área de estudio y era imposible distinguir cualquier proceso

postdeposicional en superficie.

Tras un año de abandono del hogar Molí dels Capellans al aire se dio por

concluida la experimentación (Fotografía 8). Los restos de la combustión conservados

se encontraban estabilizados y se podía observar por debajo de las herbáceas que habían

crecido de forma homogénea en el área de estudio. Desde los puntos de referencia

principales (A-B) se procedió a documentar el perímetro del hogar. Figura 5

Fotografía 8. Control 5 el día 25-2-08. El hogar del Molí dels Capellans se encuentra

cubierto por herbáceas tras un año de abandono.

Figura 5. Control 5 el día 25-2-2008. Planta del hogar del Molí dels Capellans tras un año de abandono al

aire libre.

Page 39: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

39

III. 4.1.6 - Recogida de muestras (25/2/2008)

Para muestrear la superficie de estudio se ha tenido en cuenta la cuestión

espacial; es decir, se utilizaron intervalos de muestreo a través de una rosa de vientos

creada para tal fin desde el centro del hogar y que abarcaba la totalidad de la cuadricula

de (3 x 3 m). Para ello fue necesario hallar el centro del hogar desde los puntos (A-B) y

crear una línea horizontal con respecto a estos dos puntos, y otra vertical en superficie

pasando por el centro coincidiendo con el norte magnético. Se dividió el espacio en

cuatro partes de 90º cada una. Una vez realizado este proceso, se creo un cuadro de (1 x

1 m) desde el centro del hogar, que serviría para dividir estas cuatro partes en ocho

partes de 45º cada una, formando cuatro líneas desde el centro hacia los cuatro vértices

del cuadro. Fotografía 9

Fotografía 9. Proceso de muestreo el día 25/2/2008. “Rosa de vientos” creada para

extraer muestras del sedimento y llevar a cabo el estudio de dispersión de carbones.

De esta manera se creó una rosa de vientos con ocho líneas principales que se

utilizaron para realizar el muestreo y que partían desde el centro del hogar que cubría

toda el área de estudio de (3 x 3 m). A cada línea que partía del centro del hogar “punto

0” se le asignó una letra correlativa, comenzando por la línea “A” y a continuación las

líneas (B, C, D, E, F, G, H), siguiendo la dirección de las manecillas de un reloj. Cada

línea fue numerada partiendo del “0”, es decir, desde el centro del hogar, de forma

correlativa en toda su extensión, y en los puntos donde se extraerían las muestras (0,

A1, A2, A3, A4, A5, 0, B1, B2, B3, B4, B5, etc.). La línea “A” estaría posicionada en

Page 40: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

40

relación al norte magnético y sería la referencia principal a la hora de tratar la dispersión

de los carbones. Figura 6

Figura 6. Proceso de muestreo el día 25/2/2008. Imagen de la Rosa de vientos y la numeración

seguida para extraer las muestras.

Una vez realizada la rosa de vientos en la superficie se procedió a extraer las

muestras de cada punto de las líneas principales a una distancia de (30 cm.) desde el

punto “0” y hacia el exterior, abarcando todo el espacio de la cuadricula. Para extraer

las muestras en cada punto se utilizó un “tubo de metal” (de un diámetro de 40 mm. x

160 mm. de largo) que fue introducido en el sedimento picando con un martillo de

goma dura. Una vez introducido en el sedimento se extraía y se sacaba la muestra

introducida en el interior del tubo presionando el sedimento hacia el exterior. Cada

muestra era introducida en una bolsa de plástico que era etiquetada y numerada. En total

se extrajeron 52 muestras para su posterior análisis, contando las que se extrajeron al

final del proceso situadas a 15 cm. (punto 0,5 de las líneas de referencia) del centro del

hogar (punto “0”)

III. 4.1.7 - Datos y análisis de las muestras de EXP- Fuego 1- Molí dels Capellans – 2007

En este apartado se analizan un total de 52 muestras de sedimentos con un

volumen total en cada una de ellas de 200 ml. y la relación existente entre las variables

peso, volumen y número de fragmentos de los carbones de dichas muestras con el

objetivo de ver su representación espacial, como anteriormente se ha especificado

(Anexo I). El análisis se basa en la variación de las frecuencias relativas de estas tres

variables, teniendo como unidad base el fragmento de carbón (Chabal, 1988, 1982)

recuperado en dichas muestras en fracciones (de > 4 mm., > 2 mm., > 1 mm.) a nivel

Page 41: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

41

cuantitativo y cualitativo. El estudio cuantitativo se basa en el recuento de los

fragmentos de carbón que constituyen cada uno de ellos una unidad de medida. El

número total de carbones contabilizados asciende a 4260. La relación basada en

información cuantitativa pone de manifiesto algunos de los posibles tipos de

interdependencia, mientras que la relación basada en información cualitativa da lugar a

una estructuración establecida por medio de relaciones de orden y de distribución

espacial. Los datos de las tablas muestran los carbones recuperados tras haber aplicado

las técnicas de recogida de muestras, flotación, cribado y recuento de los carbones

(Anexo I).

Los siguientes gráficos muestran los resultados del recuento de las variables

(número de fragmentos, peso de cada fracción y volumen total de carbones) y la

frecuencia de la distribución en las líneas de referencia principales de la “rosa de

viento” que se creó para determinar la dispersión de los carbones (en la EXP- Fuego 1

Molí dels Capellans- 2007). Para contrastar si existe una orientación determinada de los

carbones, en primer lugar hay que establecer si hay una representación diferencial en las

líneas de referencia, tanto cualitativa (presencia, ausencia), como cuantitativamente,

teniendo en cuenta las unidades de medidas utilizadas, número de fragmentos, peso y

volumen. Esto nos permitirá caracterizar los diversos fenómenos postdeposicionales en

la dispersión de los carbones y su incidencia.

Gráfico 2. Número de carbones línea A en Gráfico 3. Número de carbones línea B en

dirección Norte. dirección Nordeste.

0

20

40

60

80

100

120

A 0,5 A 1 A 2 A 3 A 4 A 5 A 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea A- Norte

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

20

40

60

80

100

120

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6

núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea B- Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 42: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

42

EXP- Fuego 1- Molí dels Capellans

Gráfico 4. Número de carbones línea C en Gráfico 5. Número de carbones línea D en

dirección Este. dirección Sudeste.

Gráfico 6. Número de carbones línea E en Gráfico 7. Número de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

Gráfico 8. Número de carbones línea G en Gráfico 9. Número de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

0

20

40

60

80

100

120

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5 C 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea C- Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

20

40

60

80

100

120

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5

Núm

ero

carb

onea

s

Fracciones

Línea D- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

20

40

60

80

100

120

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea F- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

020406080

100120140160180

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea G- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

20

40

60

80

100

120

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4

Nüm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea H- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

20

40

60

80

100

120

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea E- Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 43: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

43

Gráfico 10. Número de carbones punto 0

Para caracterizar numéricamente la distribución y su representación gráfica se

ha determinado la mayor frecuencia relativa de cada fracción de carbones. Se han

utilizado los recuentos absolutos de los restos de carbones, expresados gráficamente en

proporciones para comparar muestras de diferente tamaño. El número de carbones en

las líneas de referencia principales orientadas a los puntos cardinales indican una clara

tendencia de concentración de carbones de las tres fracciones analizadas en la zona más

próxima al centro del hogar (gráficos número de carbones) y una frecuencia relativa

mayor hacia las zonas externas de las tres fracciones de carbones, sobre todo en las

líneas de orientación;

- Línea B dirección Nordeste. - Línea E dirección Sur.

- Línea C dirección Este. - Línea H dirección Nordoeste.

- Línea D dirección Sudeste.

De forma general hay una dispersión que abarca desde NE-S y también

en dirección NO. Las líneas de orientación A-F-G en dirección N-SO-O presentan

un número de carbones menor hacia las zonas externas. En general, podemos

observar que las tres fracciones de carbones se encuentran distribuidas en todas las

direcciones y que en determinadas orientaciones las frecuencias aumentan de forma

significativa en determinados puntos por el número de carbones de determinadas

fracciones (especialmente de las fracciones > 2 > 1), que presentan una mayor

representación sobre todo en los puntos más cercanos al centro del hogar y de forma

general en las líneas de orientación. Las gráficas de dispersión nos permiten

distinguir dos tendencias; una caracterizada por valores altos en el número de

carbones, sobre todo en los puntos más cercanos al centro del hogar, y una tendencia

0

20

40

60

80

100

120

Fracciones 4 Fracciones 2 Fracciones 1N

úmer

o ca

rbon

esFracciones

Punto 0

Fracciones 4

Fracciones 2

Fracciones 1

Page 44: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

44

de dispersión en determinadas direcciones por el aumento del número de carbones

alejados del punto central del hogar por efecto de factores postdeposicionales.

Las muestras que proporcionaron un mayor número de carbones son las más

próximas al punto “0”, es decir los puntos de referencia (A 0,5), (D 0,5), (E 0,5), (F

0,5), (G 0,5), (H 0,5) situados a 15 cm. del centro del hogar, donde la fracción > 2 > 1

presenta una frecuencia alta, excepto en (B 0,5), (C 0,5), que tienen una frecuencia de

carbones menor de las tres fracciones. La fracción > 4 presenta unas frecuencias

relativamente superiores hacia la zona central del hogar, pero matizada en determinadas

líneas de orientación, ya que hacia las zonas externas hay una frecuencia también alta

del número de carbones, tal como sucede en la línea (D). Podemos decir que la fracción

> 4 se encuentra presente en las zonas más externas de forma general, pero su

frecuencia es inferior con respecto a las otras dos fracciones que presentan una mayor

frecuencia relativa. Los puntos situados a 30 cm. del centro del hogar (A 1, B 1, C 1, D

1, E 1, F 1, G 1, H 1) presentan a continuación una frecuencia también alta del número

de carbones, especialmente de la (fracción > 2 > 1) que predominan sobre la (fracción >

4) de forma general. A partir de esta distancia se observa una disminución de forma más

acusada del número de carbones en todas las líneas de orientación y una distribución de

forma irregular de las distintas fracciones por efecto de la dispersión que se ha

producido hacia las zonas más externas. Esta distribución de carbones hacia las zonas

externas presentan ciertas características; en primer, lugar hay una tendencia general de

dispersión de carbones de las (fracciones > 2 >1) hacia las zonas externas de forma

general y especialmente en las líneas de orientación siguientes que presentan una

frecuencia relativa mayor de estas dos fracciones:

- Línea E dirección Sur.

- Línea H dirección Nordoeste.

En segundo lugar, la presencia de carbones de la (fracción > 4) alejados del punto

central resulta llamativa, tal como sucede en los puntos de las líneas de orientación (B y

C), que presentan una frecuencia mayor de la (fracción > 4) en los puntos más externos

en dirección (NE-E), y que indican que se han producido fuerzas de arrastre que han

dispersado los carbones de mayor tamaño hacia las zonas más externas sobre todo en

estas dos direcciones. En general podemos decir que se ha producido una dispersión

Page 45: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

45

desde el centro del hogar hacia las zonas externas, con el dominio de las (fracciones > 2

> 1) y que en determinadas direcciones han existido fuerzas de arrastre de más

intensidad que han provocado el movimiento de las (fracciones > 4) hacia las zonas

externas. Anexo I

Los siguientes gráficos corresponden al peso de los carbones de las tres

fracciones en las líneas de orientación a los puntos cardinales y la frecuencia relativa en

cada una de ellas. Si la correlación es fuerte, permitirá considerar que la variable peso

depende en gran medida del número de fragmentos de cada punto de las muestras como

indicador de orientación.

Gráfico 11. Peso de carbones línea A en Gráfico 12. Peso de carbones línea B en

dirección Norte. dirección Nordeste.

Gráfico 13. Peso de carbones línea C en Gráfico 14. Peso de carbones línea D en

dirección Este. dirección Sudeste.

0123456789

10

A 0,5 A 1 A 2 A 3 A 4 A 5 A 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea A- Norte

Fracciones > 4

fracciones > 2

Fracciones > 1

0123456789

10

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea B- Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5 C 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea C-Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

2

4

6

8

10

12

D 0,5 D 1 D 2 D3 D 4 D 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea D- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 46: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

46

Gráfico 15. Peso de carbones línea E en Gráfico 16. Peso de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

Gráfico 17. Peso de carbones línea G en Gráfico 18. Peso de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

Gráfico 19. Peso carbones en punto 0

Los gráficos del peso de los carbones indican que la fracción más

representativa es la fracción > 4 de forma general por su peso absoluto, mientras que las

0123456789

10

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea G- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0123456789

10

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea H- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0123456789

10

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea E- Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0123456789

10

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea F- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

Fracciones 4 Fracciones 2 Fracciones 1

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones punto 0

Fracciones 4

Fracciones 2

Fracciones 1

Page 47: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

47

fracciones > 2 > 1 se encuentran representadas prácticamente en todas las líneas de

orientación, pero presentan unos índices menores en cuanto a su peso, aunque en

determinados puntos son indicativas de cierta dispersión.

Se puede observar que los puntos con más peso absoluto se encuentran

situados en la zona más próxima del centro del hogar. Los puntos de las muestras

situados a 15 cm. indican un peso absoluto que varía en las diversas orientaciones y que

en términos generales tiene unos valores inferiores que los puntos situados a 30 cm.,

que muestran un peso absoluto mayor, sobre todo de la fracción > 4. Así, las muestras

situadas en (B 0,5), (C 0,5), (D 0,5) presentan unos índices de peso menores que los

siguientes puntos a 30 cm. de las tres fracciones en dirección NE-E-SE, excepto en la

(fracción > 2) en (D 0,5), que es mayor que (D1). El resto de puntos de forma general

indican un mayor peso hacia la zona central del hogar de las tres fracciones, es decir en

(A 0,5), (E 0,5), (F 0,5), (G 0,5), (H 0,5), que presentan unos valores superiores. En

determinados puntos situados a 30 cm. hay un mayor peso absoluto de las tres

fracciones, tal como sucede en (B 1, C 1, D 1) en dirección (NE-E-SE). En este sentido

podemos ver que hay cierta coincidencia con los puntos anteriormente comentados en

estas direcciones. Desde estos puntos mencionados y más cercanos al centro del hogar

se observa una progresiva disminución del peso de los carbones hacia las zonas

externas.

La distribución de los carbones hacia las zonas más externas de la “rosa de

vientos” muestra que hay una distribución general en todas las direcciones de las

fracciones (> 2, > 1), pero por su peso absoluto no son representativas, tan sólo en las

líneas (B, C, E) es donde la fracción > 2 tiene cierta representación hacia las zonas más

externas. En conjunto, estas dos fracciones tienen un mayor peso absoluto hacia la zona

central, tal como queda reflejado en los gráficos del peso de carbones. Mientras que la

fracción > 4, a partir de los puntos más centrales y hacia las partes más externas del

centro del hogar, presenta cierta representación por su peso absoluto en determinadas

líneas de orientación. Las líneas de orientación que presentan un mayor peso absoluto

hacia las partes más externas del hogar de las tres fracciones son las siguientes:

- Línea B dirección Nordeste.

- Línea C dirección Este.

- Línea D dirección Sudeste.

Page 48: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

48

- Línea E dirección Sur.

- Línea G dirección Oeste.

De forma general hay una dispersión que abarca desde NE-S y también en

dirección O. Las líneas de orientación A-H en dirección N-NO presentan un peso

absoluto poco significativo hacia el exterior. La presencia de carbones de la fracción > 4

alejados del punto central del hogar indican que se ha producido un movimiento

superficial por transporte o fuerzas de arrastre hacia las zonas externas que ha

desplazado los carbones de más peso. Los puntos más externos con la presencia de la

fracción > 4 que resultan representativas por su peso corresponden a las líneas de

orientación siguientes:

- Línea B dirección Nordeste: 0,675 gramos (B 6)

- Línea C dirección Este: 1,404 gramos (C 6)

- Línea G dirección Oeste: 2, 327 gramos (G 5)

Los siguientes gráficos muestran el volumen (ml) total de los carbones de cada

fracción en cada punto de referencia de las líneas principales de la “rosa de vientos”

orientadas a los puntos cardinales. Esta variable está relacionada con el número de

fragmentos identificados en cada muestra extraída y por tanto puede ser un indicador de

la distribución espacial en este estudio.

Gráfico 20. Volumen de carbones línea A en Gráfico 21. Volumen de carbones línea B en

dirección Norte. dirección Nordeste.

0

5

10

15

20

25

30

35

A 0,5 A 1 A 2 A 3 A 4 A 5 A 6

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones linea A - Norte

Volumen carbones

0

5

10

15

20

25

30

35

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea B- Nordeste

volumen de carbones

Page 49: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

49

Gráfico 22. Volumen de carbones línea C en Gráfico 23. Volumen de carbones línea D en

dirección Este. dirección Sudeste.

Gráfico 24. Volumen de carbones línea E en Gráfico 25. Volumen de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

Gráfico 26. Volumen de carbones línea G en Gráfico 27. Volumen de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

0

5

10

15

20

25

30

35

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea D- Sudeste

Volumen de carbones

0

5

10

15

20

25

30

35

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea E- Sur

Volumen …

0

5

10

15

20

25

30

35

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea F- Sudoeste

Volumen de carbones

0

5

10

15

20

25

30

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea G- Oeste

Volumen de carbones

0

5

10

15

20

25

30

35

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea H- Nordoeste

Volumen …

Volumen de carbones línea C- Este

05

1015202530

C 0,5 C 2 C 4 C 6

Muestras

Volu

men

(ml)

Volumen decarbones

Page 50: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

50

El análisis del volumen total de los carbones en las líneas de referencia

principales orientadas a los puntos cardinales nos indica un mayor volumen de carbones

hacia el centro del hogar de forma general, aunque en determinados puntos más

centrales en determinadas líneas de orientación el volumen de carbones es más débil, tal

como sucede en la línea de orientación (F) en dirección Sudoeste. Anexo I

Gráfico 28. Volumen de carbones en punto 0

Asimismo, se puede observar que hay una tendencia general de dispersión

hacia las zonas más externas del centro del hogar en todas las direcciones, pero en

algunas direcciones el volumen total de carbones en determinados puntos resulta más

representativo. Las líneas de orientación con una tendencia mayor de volumen de

carbones hacia el exterior del hogar son;

- Línea B dirección Nordeste.

- Línea C dirección Este.

- Línea D dirección Sudeste.

- Línea E dirección Sur.

- Línea G dirección Oeste.

De forma general hay una dispersión que abarca desde NE-S y también en

dirección O. Las líneas de orientación A-H en dirección N-NO presentan un volumen de

carbones poco significativo hacia el exterior. Las líneas de orientación que de forma

individual presentan un volumen mayor de carbones hacia las zonas más externas son

(E 4 y G 5), a una distancia del centro del hogar (entre 1-1,5 metros) en dirección S y O.

0

5

10

15

20

25

30

35

1 2

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones punto 0

Volumen de carbones

Page 51: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

51

Este dato tan sólo es representativo en cuanto a esta variable por el desplazamiento de

carbones hacia el exterior.

Los gráficos de dispersión de las líneas de orientación a los puntos cardinales

nos permite detectar que las muestras extraídas hacia la zona central del hogar se

caracterizan porque en general son las que han proporcionado más volumen total de

carbones, especialmente en los puntos situados a 30 cm. del centro del hogar (60 cm. de

perímetro) que presentan de forma general un mayor volumen que los situados a 15 cm.

del centro del hogar, a excepción de las líneas de orientación (A, E, G) en dirección N-

S-O, con una frecuencia mayor hacia el centro del hogar.

Desde las muestras situadas a 30 cm. se observa que el volumen disminuye

hasta la siguiente distancia a (60 cm.) de forma general, es decir en los puntos (A2, B2,

C2, F2, G2, H2) que corresponden a un perímetro total de (1,20 cm.), excepto (D2-E2)

en dirección (SE-S). A partir de estos puntos vemos que se produce un aumento

paulatino del volumen de carbones hacia las zonas más externas, menos en dirección

(N) y (NO), tal como se ha comentado al principio. Se puede observar, asimismo, cierta

coincidencia entre los puntos de las muestras en (E3-D3) en dirección (E-SE). Hay que

destacar también el volumen de carbones desplazados hacia el exterior en dirección (S)

en la línea E y en dirección (O) en la línea G, ya que supera o se aproxima al volumen

de carbones en la zona más próxima al centro del hogar en estas direcciones. Podemos

decir para finalizar este apartado que han existido fuerzas de arrastre o transporte que

han dispersado los carbones hacia las zonas externas con mayor o menos intensidad a

causa de diversos fenómenos o agentes postdeposicionales.

III. 4.1.8 - Variables climáticas (Pluviometría y viento)

Para una información más detallada de los datos proporcionados por las

Estaciones Meteorológicas de Vila-Rodona y Prades (Anexo I), en este apartado se

especifican los datos más relevantes en referencia a las variables climáticas a lo largo de

todo el tiempo de estudio desde el mes de febrero de 2007 a febrero de 2008 sobre el

clima local. Gráfico 29-30-31

Page 52: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

52

III. 4.1.8.1 - Estaciones Meteorológicas de Vila-Rodona, Prades y Alcover (Alt

Camp)

Estación

Meteorológica

de Vila-Rodona

Situ

ació

n

sinó

ptic

a de

l

mes

Prec

ipita

ción

máx

ima

(litr

os m

2)

Dir

ecci

ón d

el

vien

to

Com

pone

nte

dom

inan

te

del v

ient

o

Vel

ocid

ad

máx

ima

del

vien

to m

/s

Esc

ala

de

Bea

ufor

t

(vie

nto)

Febrero 2007 Seco 8, 2 NO-

SE

Sin datos 7 m/s Viento

moderado

Marzo Seco 6, 8 NE-

SO

Sin datos 7, 2 m/s Viento

moderado

Abril Lluvioso 19 S-SO Sin datos 6, 2 m/s Viento

moderado

Mayo Seco 14 NO-

NE-S

O- NO 8, 2 m/s Brisa

Junio Muy seco 2, 4 S-SO-

O-NE

S 18, 2 m/s Temporal

Julio Muy seco 2, 6 E-S-

SO

S- SO 4, 5 m/s Viento

flojo

Agosto Seco 15, 5 SO-S-

E

S 4, 1 m/s Viento

flojo

Septiembre Muy seco 12, 5 S-NE S 3, 4 m/s Viento

flojo

Octubre Lluvioso 26, 6 NO-

SE-O

N 4 m/s Viento

flojo

Noviembre Seco/

Muy seco

4, 6 NE-

SE-W

N 4, 6 m/s Viento

flojo

Diciembre Lluvioso 26 E-W N- NO 7, 1 m/s Viento

moderado

Enero Seco 7, 8 S-NE N-NO 5, 8 m/s Viento

moderado

Febrero 2008 Seco 7, 8 NE-

W

NE 4, 1 m/s Viento

FLOJO

Gráfico 29. Datos climáticos más relevantes proporcionados por la Estación Meteorológica de

Vila-Rodona en el periodo comprendido entre febrero de 2007 y febrero de 2008. El componente

dominante del viento según los Boletines mensuales del Servicio Meteorológico de Cataluña.

Page 53: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

53

Estación

Meteorológica

de Prades

Situ

ació

n

sinó

ptic

a de

l

mes

Prec

ipita

ción

máx

ima

(litr

os

m2)

Dir

ecci

ón

del

vien

to

Vel

ocid

ad

máx

ima

del

vien

to m

/s

Esc

ala

de

Bea

ufor

t

(vie

nto)

Febrero 2007 Seco 9,2 NO-SE 4 m/s Viento flojo

Marzo Seco 15,4 NE- SO 2, 9 m/s Viento muy

débil

Abril Lluvioso 69, 8 NE-SO 3 m/s Viento muy

débil

Mayo Seco 9, 2 NO-NE-S 2, 5 m/s Viento muy

débil

Junio Muy seco 4 SO-SE 2, 5 m/s Viento muy

débil

Julio Muy seco 7 NE-E-O 9 m/s Viento

moderado

Agosto Seco 8 SO-S-NE-

NO

9 m/s Viento

moderado

Septiembre Muy seco 15, 9 S-NO-NE 9 m/s Viento

moderado

Octubre Lluvioso 26, 9 O-E 9 m/s Viento

moderado

Noviembre Seco/ muy

seco

12 SE-NE-W 9 m/s Viento

moderado

Diciembre Lluvioso 39, 2 E-NO 3, 6 m/s Viento flojo

Enero Seco 5, 6 S-NE 2, 5 m/s Viento muy

débil

Febrero 2008 Seco 8 NE-W 2, 5 m/s Viento muy

débil

Gráfico 30. Datos climáticos más relevantes proporcionados por la Estación Meteorológica de

Prades en el periodo comprendido entre febrero de 2007 y febrero de 2008

Los datos meteorológicos de la población de Alcover hacen referencia a la pluviometría

registrada a lo largo del año 2007. No hay datos relativos a la dirección del viento y

velocidad del viento. Gráfico 31

Page 54: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

54

Gráfico 31. Estación Meteorológica de Alcover. Pluviometría registrada a lo largo del

año 2007 III. 4.1.9 – Discusión y resultados de EXP- Fuego 1- Molí dels Capellans -07

III. 4.1.9.1 - El proceso de combustión.

Podemos decir que el análisis térmico es la medida de los cambios físicos y

químicos que ocurren en una sustancia en función de la temperatura mientras la muestra

se calienta (o se enfría) con un programa de temperaturas controlado. En el proceso de

combustión se utilizó madera de pino blanco “Pinus halepensis” y madera de

zarzaparrilla “Smilax aspera” para el encendido inicial que influyeron de forma directa

en el rendimiento calorífico y en la creación de residuos formados básicamente por

carbones y cenizas. Las temperaturas que en un primer momento se alcanzaron

podemos decir que influyeron en la zona externa del hogar alcanzando un valor máximo

de 631º C en la termocúpula (T3). A medida que la madera se fue consumiendo, se

crearon brasas que provocaron un aumento paulatino de la temperatura del sedimento

alcanzando aproximadamente los 50º C en la termocúpula (T1) y superando los 100º C

en la termocúpula (T4) prácticamente durante toda la combustión. Toda esta serie de

consideraciones referentes al mismo proceso de combustión indican que la cantidad de

madera utilizada (24 Kg.) y su estado seco generaron aproximadamente durante 2h 20

Page 55: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

55

minutos una “cinética de combustión de la madera” que incidió directamente sobre la

superficie.

La madera de pino blanco (Pinus halepensis) utilizada en la combustión se

quemó rápidamente generando unas temperaturas altas que se prolongaron durante 80

minutos en la parte externa del hogar a partir de los 30 minutos del encendido. A

medida que la madera se fue consumiendo, el impacto calorífico se fue trasladando al

sedimento a través de las brasas, prolongándose más allá de las 2h 20 minutos. Una vez

finalizado el proceso de combustión del hogar del Molí dels Capellans (EXP 1- Molí

dels Capellans- 2007), se obtuvo un hogar plano de un diámetro aproximado de 90 cm.,

con un producto final formado por residuos de carbones y cenizas blancas. Según

(Wattez, 1988: 365), las cenizas blancas corresponderían a un fuego bien alimentado e

intenso, hecho que se pudo comprobar durante la experimentación realizada, así como la

generación de este tipo de cenizas.

III. 4.1.9.2 – Los procesos postdeposicionales en el hogar EXP- Fuego 1- Molí dels

Capellans- 2007

Una vez abandonados los restos de la combustión del hogar del Molí dels

Capellans a finales del mes de febrero de 2007, se produjeron una serie de procesos que

modificaron el estado original del hogar como veremos a continuación. La incidencia de

estos procesos en el hogar del Molí dels Capellans ha generado diferentes agentes

energéticos que configuran procesos superficiales de movimiento de los restos de la

combustión de forma horizontal y vertical. Cada una de las variables estudiadas ha

permitido ver cómo se ha comportado sobre los restos del hogar y determinar sus

efectos e intensidad. De entre estos fenómenos, el transporte o el desplazamiento es el

más importante. Su actuación se refiere tanto a los procesos de dispersión de los

carbones que se produjeron en el hogar a nivel espacial, como a los fenómenos

definidos como principios de sedimentación: transporte, destrucción, preservación y la

alteración postdeposicional.

Como se ha podido comprobar, el desplazamiento postdeposicional de los

carbones puede realizarse a distancias cortas o grandes, dependiendo de la intensidad

del tipo de agente o variable que ha actuado. Los agentes que han actuado sobre los

Page 56: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

56

restos de la combustión del hogar del Molí dels Capellans y que han modificado su

estado original son los siguientes (Tabla 1):

ALTERACIONES POSTDEPOSICIONALES EN EL HOGAR AL AIRE LIBRE DEL MOLÍ

DELS CAPELLANS

AGENTES

MECANISMOS

FENÓMENO

OBSERVACIONES

EXPERIMENTALES

Naturales

Viento

Aeroturbación

Desaparición de las cenizas,

dispersión de carbones.

Naturales

Lluvia

Aguaturbación

Lavados sobre el hogar, dispersión

de carbones, alteración de las

rubefacciones.

Naturales

Animales

Faunaturbación

Coprolitos sobre el hogar,

alteraciones en los restos del hogar,

y dispersión de carbones

Naturales

Vegetación

Floraturbación

Incidencia en la dispersión de

carbones, estabilización de los

restos de combustión.

Naturales

Factor tiempo

Modificación/

Conservación

Dispersión, fragmentación de

carbones, transporte, enterramiento

de los restos del hogar.

Tabla 1. Alteraciones y modificaciones postdeposicionales documentadas en EXP- Fuego 1- Molí dels

Capellans- 2007

Las diversas observaciones que se realizaron a lo largo de un año constatan

que dichos agentes tuvieron una incidencia en mayor o menor grado durante todo el

tiempo de abandono del hogar provocando una alteración de los restos del hogar en su

conjunto. El segundo control realizado el día 7/3/2007 constató un hecho importante

que es la desaparición en poco tiempo de las cenizas del hogar aproximadamente tras un

mes de abandono. Durante este periodo de tiempo no se registraron precipitaciones

significativas en los meses de febrero y marzo de 2007 (ver gráficos Nº 29 y 30), lo que

hace que atribuyamos la responsabilidad de la desaparición de las cenizas al efecto del

viento (Fotografía 2)

Page 57: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

57

No podemos indicar exactamente la dirección del viento que sopló en el lugar

donde se ubicaba el hogar al no ser operativas las Estaciones Meteorológicas con

respecto a esta variable por la distancia en que se encuentran. Hay que tener en cuenta,

además, que el hogar del Molí dels Capellans se encuentra en un pequeño valle y que

por las condiciones orográficas de la zona está expuesto a los vientos que se canalizan

por el valle, especialmente en dirección NO-SE, y relativamente protegido de los

vientos de componente S. Este factor condiciona la interpretación que podamos dar al

respecto en relación al comportamiento que pudo tener el viento, pero se ha podido

comprobar que dicho fenómeno alteró las condiciones originales del hogar en un primer

momento y especialmente con las cenizas del hogar. Hay que destacar también que

hubo un viento moderado en la zona (ver grafico Nº 29), (ver gráficos viento de los

meses de febrero y marzo de las Estaciones Meteorológicas de Vila-Rodona y Prades en

Anexo I) que pudo tener cierta influencia en la desaparición de las cenizas del hogar

comentada anteriormente y que sea el responsable de la dispersión de carbones en

dirección (N-NO-SO). Este desplazamiento de carbones a nivel superficial se produjo

hacia las zonas con menor cobertura vegetal.

Los breves episodios de precipitaciones que se registraron en los meses de febrero

y marzo de 2007 provocaron lavados sobre el hogar. Este hecho pensamos que desplazó

sobre todo los carbones hacia el perímetro externo. A consecuencia de estos lavados

producidos por la lluvia quedó al descubierto parte de la microestratigrafía del hogar, de

modo que se podían observar parte de las rubefacciones producidas por la combustión.

Podemos considerar que por efecto del viento y la lluvia en la zona de la

experimentación se produjo una modificación importante de los restos de la combustión

en muy poco tiempo por su exposición al aire libre. Asimismo, se considera que las

herbáceas presentes fueron un freno para el transporte superficial de carbones sobre

todo en dirección (NE-E-S) y que las zonas con una densidad baja favorecieron un

mayor desplazamiento de carbones.

A medida que transcurrían los meses y a través de las distintas observaciones

que se realizaron se pudo comprobar que el estado de la superficie donde se ubicaba el

hogar sufría cambios sobre todo en relación a la distribución de las herbáceas y a su

estado. Este hecho quedó atestiguado en el tercer control realizado en el mes de julio

Page 58: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

58

(11-7-2007), tal como queda reflejado en los gráficos de pluviometría de los meses de

junio y julio de las Estaciones Meteorológicas de Vila-Rodona y Prades (Anexo I),

(Gráficos 29-30-31). Los meses de mayo, junio y julio fueron especialmente secos y el

estado de las herbáceas de la zona experimental era seco mayoritariamente. Este hecho

dejó al descubierto nuevas zonas próximas al hogar con densidad baja de herbáceas y

zonas donde el sedimento prácticamente estaba al descubierto. Asimismo se pudo

comprobar que en determinadas partes y de forma aislada habían crecido plantas muy

próximas al perímetro del hogar que estaban estabilizando los restos. Estas condiciones

cambiantes de la cobertura vegetal favorecieron una nueva dispersión de carbones en

dirección (N-SO-SE); es decir, hacia las zonas donde había menos herbáceas. Este

hecho consideramos que se produjo por la acción del viento, dado que hubo cierta

intensidad en la velocidad del viento tal como queda reflejado en los gráficos Nº 29 y 30

de las estaciones Meteorológicas de Vila-Rodona y Prades, que indican episodios de

temporal y viento moderado en los meses de junio y julio. Esta nueva dispersión no la

atribuimos a las precipitaciones ya que los meses de mayo, junio y julio fueron secos o

muy secos (ver precipitaciones de los meses de mayo, junio y julio de las Estaciones

Meteorológicas de Vila-Rodona y Prades del Anexo I), (gráficos 29-30-31).

A consecuencia de los fenómenos atmosféricos que sucedieron en este periodo

de tiempo se produjeron diversas alteraciones en la secuencia microestratigráfica por su

exposición al aire libre, sobre todo cambios en las tonalidades de las rubefacciones y

cierta fracturación de los carbones. Además, el hogar en su perímetro externo estaba

sufriendo una progresiva pérdida de carbones, mientras que su parte central conservaba

parte de su secuencia microestratigráfica.

En este tercer control se constató un nuevo fenómeno (Faunaturbación) por la

presencia de coprolitos sobre el hogar y en las proximidades, posiblemente de un perro

(Canis lupus familiaris) que hizo acto de presencia en el lugar, como se puede observar

en la Fotografía 6. Este hecho puede tener alguna relación con el marcaje del territorio

por parte de los animales. Asimismo en el mes de octubre (15/10/2007) se constataron

alteraciones producidas por un jabalí (Sus scrofa) en la superficie próxima al hogar y en

los mismos restos de la combustión, como veremos más adelante. Estos hechos son de

especial interés ya que no se han descrito en otras experimentaciones con hogares.

Page 59: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

59

Desde el tercer control realizado en el mes de julio (11/7/2007) hasta la

finalización de la experimentación, en febrero de 2008, las condiciones climáticas en la

zona fueron cambiando, especialmente en relación a la pluviometría. Los datos

proporcionados por las Estaciones Meteorológicas indican que se produjo un aumento

paulatino de las lluvias, especialmente durante los meses de octubre y diciembre de

2007, mientras que el resto de meses se pueden considerar especialmente secos y con

escasos días de precipitaciones, sobre todo noviembre de 2007 (ver pluviometría

gráficos 29-30-31)

Hay que tener en cuenta que el cuarto control realizado en el mes de octubre

(15/10/2007) en el hogar del Molí dels Capellans se constató que las herbáceas habían

crecido y que cubrían buena parte de los restos de la combustión. Por tanto, parece

haber cierta influencia de la pluviometría registrada en los meses de septiembre y

octubre de 2007 y del crecimiento de las herbáceas en la zona de la experimentación,

teniendo en cuenta que en el mes de julio de 2007 se encontraban en un estado más seco

por la estación en la que nos encontrábamos y que se produjeron escasas precipitaciones

desde el mes de mayo de 2007. En el mes de diciembre hubo también importantes

precipitaciones registradas en las tres Estaciones Meteorológicas, para pasar a dos

meses especialmente secos (enero y febrero de 2008). Podemos decir que las

observaciones realizadas a lo largo de todo este periodo indican que a medida que

crecían las herbáceas fueron cubriendo los restos del hogar y estabilizando

progresivamente el hogar del Molí dels Capellans hasta el final de la experimentación,

en febrero de 2008. Este hecho evitó la dispersión de carbones y la acción del viento y

de la lluvia a medida que las herbáceas iban cubriendo el hogar.

En el cuarto control realizado en el hogar del Molí dels Capellans en octubre

de 2007 (15/10/2007), no se pudo distinguir una dispersión clara de carbones sobre la

superficie. Por ello no podemos determinar la influencia que pudo tener el viento en la

dispersión de carbones, aunque hemos visto que a medida que iba pasando el tiempo los

restos del hogar estaban siendo estabilizados al ser cubiertos por las herbáceas desde el

último control realizado en el mes de julio de 2007.

Las alteraciones que se observaron en este cuarto control fueron producidas

básicamente por la acción de un jabalí (Sus scrofa) que afectó parcialmente el perímetro

del hogar en dirección (SO-O) y diversas cuadrículas (H8, I8, J8 y H7, H8) del área de

estudio orientadas en estas direcciones (Fotografía 7). El animal provocó surcos que

removieron el sedimento y los restos de la combustión, provocando una modificación

Page 60: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

60

del estado del hogar cuando se encontraba estabilizado. Al no observarse un pisoteo por

parte del animal, pensamos que la introducción del morro del jabalí en el sedimento fue

el causante de dicha alteración. Asimismo, en las proximidades del hogar pero fuera del

área de estudio y en dirección E se constató también que el sedimento había sido

removido por el jabalí (Sus scrofa). Por ello, pensamos que estas perturbaciones

ocasionadas por el animal generaron un movimiento tanto horizontal como vertical de

los restos de la combustión, influyendo en la distribución de carbones en la zona

anteriormente mencionada. A estos fenómenos de alteración se sumó nuevamente la

presencia de coprolitos (Canis lupus familiaris), indicando fenómenos de marcaje del

territorio por parte de animales. La presencia de esta animal no provocó ninguna

alteración de los restos del hogar por pisoteo. Podemos decir que los fenómenos de

“Faunaturbación” causados por la presencia de animales, especialmente por un jabalí

(Sus scrofa), alteraron el perímetro del hogar de forma importante en dirección SO,

como se puede observar en la figura 4. La acción provocada por los diversos agentes

que se han especificado a lo largo del tiempo afectó el perímetro externo del hogar, que

se fue reduciendo de forma general y conservando parte de la zona central intacta tras

un año de abandono (figura 5)

A estos hechos se añadió progresivamente la cobertura vegetal

(Floraturbación) que fue cubriendo en su totalidad los restos del hogar tras un año de

abandono. Este hecho quedó constatado en último control realizado en el mes de febrero

de 2008, ya que las herbáceas lo habían cubierto en su totalidad y por ello pensamos que

la incidencia de las precipitaciones que de forma regular (ver precipitaciones desde el

mes de octubre de las Estaciones Meteorológicas de Vila-Rodona y Prades en Anexo I),

(gráficos 29-30-31) se fueron sucediendo desde octubre de 2007 y hasta finalizada la

experimentación en el mes de febrero de 2008 continuaron favoreciendo la

estabilización de los restos del hogar y un progresivo enterramiento (Fotografía 8)

El muestreo realizado y el posterior análisis de las variables relacionadas con

el número de fragmentos, peso y volumen de carbones tenia como objetivo específico

determinar con más exactitud los movimientos que se produjeron a lo largo de todo el

periodo de abandono del hogar a nivel espacial y extraer información pertinente

relacionada con el comportamiento de las diversas fracciones de carbones que se

estudiaron. En este sentido podemos decir que existieron movimientos superficiales de

los carbones por fuerzas de arrastres producidas por el viento, el agua y animales. La

dispersión de carbones que se produjo está relacionada con estos agentes que hemos

Page 61: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

61

especificado y cada uno de ellos en mayor o en menor grado tuvo una implicación en

dichos movimientos.

Consideramos que el viento fue el responsable del desplazamiento de

carbones hacia las zonas más externas del centro del hogar en las líneas de orientación

principales, ya que hay cierta correspondencia con los datos de las tres variables que se

estudiaron, que indican que se produjo una dispersión que de forma general abarcaba

desde el NE al S. En este sentido creemos que los vientos procedentes del NO

canalizados por el valle incidieron en la dispersión de carbones sobre todo en dirección

E-SE-S, aunque en dirección S no la desvinculamos de la acción del jabalí. Mientras

que el desplazamiento de carbones en dirección NE, (no desvinculada del todo de este

desplazamiento general de carbones por incidencia del viento procedente del NO),

parece estar relacionado también con la pendiente del terreno orientada en dirección

NE.

Creemos que la poca cubierta vegetal en los primeros meses de abandono favoreció

el desplazamiento de carbones a cierta distancia del hogar a causa del viento, pero a

medida que sucedían los meses la dispersión de carbones estuvo condicionada por las

condiciones cambiantes de la cubierta vegetal, constituyendo un freno para el

desplazamiento de carbones. A medida que el hogar fue cubriéndose, la acción del

viento dejó de tener influencia en el desplazamiento de carbones aunque, como se ha

especificado, los meses de mayo, junio y julio fueron especialmente secos y provocaron

un cambio en el estado de las herbáceas que permitió un nuevo desplazamiento de

carbones por la superficie, sobre todo hacia las zonas con menos densidad de herbáceas.

En este sentido, parece existir cierta correspondencia con los datos proporcionados por

el muestreo y las observaciones de campo realizadas.

En relación a la influencia del viento sobre los carbones, las fracciones que

sufrieron un mayor movimiento sobre la superficie correspondieron a las fracciones > 2

> 1, tal como indican los gráficos relacionados con el número de carbones (ver gráficos

número de carbones). Aunque no resultan significativas por su peso, sí que fueron las

fracciones más representativas en dicho desplazamiento por su menor peso. En relación

al desplazamiento de las fracciones > 4 hacia las zonas más externas del centro del

hogar pensamos que se debe a una “tasa de movimiento” específica determinada por la

velocidad del viento que desplazó los carbones de mayor tamaño y de forma general a

las fracciones > 2 > 1. Las muestras extraídas a 160 mm. de profundidad en las zonas

más externas de las líneas de orientación presentaban carbones de forma general, como

Page 62: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

62

se puede ver en las tablas relacionadas con el muestreo realizado en el hogar del Molí

dels Capellans (Anexo I). Este hecho pensamos que está relacionado con movimientos

verticales de los carbones en el suelo a causa de la cubierta vegetal (Floraturbación) al

cubrir progresivamente los carbones, así como a la acción del animal (Sus scrofa), que

removió parte del perímetro externo del hogar tal como se ha descrito anteriormente.

En relación a ello, el desplazamiento de carbones en dirección O se produjo

por la acción del jabalí (Sus scrofa), al constatar una presencia alta de carbones en esta

dirección, como muestran los gráficos del número de carbones, peso y volumen. Este

agente fue el causante, también, de que en dirección SO hubiera una frecuencia baja de

carbones y posiblemente desplazara los carbones en dirección S (líneas de orientación E

en dirección Sur y F en dirección Sudoeste)

Con respecto a la incidencia de la pluviometría sobre los restos del hogar, hay

que indicar que los lavados que se produjeron en los primeros meses de abandono

desplazaron los carbones desde el centro del hogar hacia la parte externa del perímetro,

sobre todo en direcciones NE-E-SE, provocando un aumento de las frecuencias a una

distancia de 30 cm. del centro del hogar en estas direcciones, como indican los gráficos

(ver gráficos volumen de carbones 21-22-23)

Page 63: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

63

III. 4.2 – EXP – Fuego 2- Can Sisó - 07 (Fogars de Monclús- Mosqueroles-

Montseny)

– Localización.

La Masía de Can Sisó se encuentra en la parte sur del Macizo del Montseny,

entre el río de La Tordera y la riera de Pertegàs, en su margen izquierdo a una altura de

356 metros s.n.m muy próxima a la población de Mosqueroles (Fogars de Montclús).

Sus coordenadas geográficas son 41º 43´15. 22” N – 2º 26´24. 36” E. El punto donde se

llevó a cabo la experimentación se ubica en un rellano de superficie prácticamente

horizontal con una inclinación del 6, 6 % en dirección S. Este término presenta un gran

desnivel, yendo de los 200 m. de altitud en la demarcación del Pertegàs hasta los 1712

m. en el “Turó de l’Home”, que es la cima más alta del macizo del Montseny. En el

entorno más próximo a la zona donde se hallan los restos de la combustión, se encuentra

un edificio que corresponde a la Masía de Can Sisó, con una altura aproximada de 6

metros y unos 15 metros de largo, orientada en dirección (E-O), a escasos metros del

hogar (4 metros aproximadamente) y que lo protege especialmente de los vientos

procedentes del S.

Imagen 6. Localización orográfica del hogar al aire libre EXP-Fuego 2- Can Sisó-2007

Page 64: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

64

Asimismo, en dirección O y a unos diez metros, se encuentra un pequeña

construcción que no supera los 2 metros de altura. En dirección N hay un cultivo de

viñas que no superan el metro de altura y están separadas entre ellas aproximadamente

por dos metros. La zona no presenta una vegetación densa en dirección N y sólo hay

unos árboles dispersos en dirección E que no superan los dos metros de altura. La

orografía de la zona y las particularidades montañosas del lugar hacen que se halle

protegido relativamente de los vientos de componente N por la presencia del macizo del

Montseny, que se encuentra relativamente alejado, y del S por la Masia de Can Sisó y

expuesto a los de componente (E-O). Imagen 6

III. 4. 2. 1 – Proceso de combustión y control 1 (3-3-2007)

La experimentación (EXP- Can Sisó 2) se llevó a cabo a principios de marzo

(3-3-07) y se realizaron diversos controles a lo largo del tiempo para ver las

modificaciones tafonómicas que había sufrido la combustión. Estos controles se

llevaron a cabo los días (3-3-07), (30-3-07), (13-5-07), (13-7-07), (21-9-07),

(14/11/2007) y el día (16-2-08), cuando se dio por finalizada la experimentación y se

recogieron las muestras para el posterior análisis de dispersión de carbones. Para

realizar la combustión se utilizaron 1,5 Kg. de brezo (Erica arborea) para el encendido

del fuego y 24 Kg. de madera de pino blanco (Pinus halepensis) en estado seco en un

fuego plano de pequeñas dimensiones (90 cm. de diámetro aproximadamente) sin

ningún tipo de estructuración en un terreno bastante horizontal con una inclinación del

6,6 en dirección S y con presencia de herbáceas. Los troncos de madera utilizados

tenían un diámetro aproximado de 5-6 cm. y no se llevó a cabo ninguna disposición

especial de la madera. Primero se colocaron las ramas de brezo (Erica arborea) para el

encendido del fuego y a continuación, los troncos de madera de pino blanco (Pinus

halepensis)

Al igual que en la anterior experiencia, el análisis de las variables

relacionadas con el proceso de combustión implicó el empleo de instrumental para

controlar las temperaturas. Se utilizaron cuatro termocúpulas (T1, T2, T3, T4), que se

colocaron en superficie y en determinadas posiciones que fueron registras desde los

puntos de referencia principales (A-B). Las temperaturas alcanzadas y la disposición de

las termocúpulas quedan reflejadas según se indica en el Gráfico 33. El tiempo total de

la combustión fue de 2 h 30´ y la temperatura se controló cada 10 minutos.

Page 65: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

65

Gráfico 33. Temperaturas alcanzadas durante la combustión de Can Sisó. (Exp- Fuego 2 - Can

Sisó – 07). Hogar plano simple. Combustible: 1,5 Kg. de brezo (Erica arborea) y 24 Kg. de

pino blanco (Pinus halepensis). Tiempo de encendido 2 h 30´

El valor máximo alcanzado fue de 656º C en los primeros 10 minutos en la

(T3) situada en la superficie y en el centro. La (T1) situada en la superficie y en el

exterior alcanzó también una temperatura alta de 576º C a los 30 minutos. Transcurridos

estos primeros momentos, ambas termocúpulas empezaron progresivamente a indicar

valores inferiores, con temperaturas por encima de los 400º C, transcurridos 90 minutos.

A partir de este momento, las temperaturas empezaron a disminuir de forma progresiva

hasta las 2h 30 minutos, sobre todo la (T1) que se encontraba situada en superficie en la

parte externa, mientras que la (T3), situada en el centro y en superficie, mantenía

temperaturas por encima de los 200º transcurrido este tiempo. Esto indicaría que en la

parte externa del hogar se había consumido buena parte de la madera y que la zona

central mantenía a las (2h 30´) un mayor poder térmico por las brasas. Si observamos el

grafico podemos observar que las temperaturas de la (T2), colocada en el centro a (2

cm. de profundidad) aproximadamente dentro del suelo, no comenzó a indicar valores

significativos hasta los 40 minutos (24º), mientras que la (T4), colocada en el exterior a

(2 cm. de profundidad) dentro del suelo, indicaba desde el principio de la combustión

una temperatura de 14º. Ambas empezaron a aumentar de temperatura transcurridos 30

minutos de forma constante por encima de los 20º C prácticamente toda la combustión

sin superar los 60º C (la T4 alcanzó 56º C); es decir, más o menos cuando las

termocúpulas externas y de superficie habían alcanzado las temperaturas más altas y

comenzaban a indicar valores inferiores. Las dos termocúpulas introducidas dentro del

0

100

200

300

400

500

600

700

Gra

dos

Tiempo

TERMOCÚPULA 1 (exterior superficie)

TERMOCÚPULA 2 (centro 2cm profundidad centro)

TERMOCÚPULA 3 ( superfice centro)

TERMOCÚPULA 4 (exterior 2 cm profundidad)

Page 66: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

66

suelo comenzaron a indicar valores inferiores al final de la combustión; la (T4) a las 2

horas comenzó a reducir la temperatura (25º C), mientras que la (T2) lo hizo más

lentamente con temperaturas en torno a los (40º-30º C) al final de la combustión. Hay

que indicar que la temperatura ambiente antes de llevar a cabo la combustión era de 14º

C y que a 60 cm. del hogar transcurrida 1h 10´ era de 20º C. La dirección del viento era

(O-E) y a los 70´ minutos de combustión aumentó de fuerza en esa dirección. La

combustión no produjo grandes llamas, posiblemente a consecuencia del viento y se

observó una combustión rápida de la madera y en determinados momentos bastante

humo. Las temperaturas fueron controladas hasta las 2h 30´ minutos cuando se dio por

acabada la combustión. Una vez finalizada, se observó la presencia de cenizas que

presentaban una tonalidad grisácea (PANTONE 427 C) de carácter pulvurento que

cubrían los carbones y algunas brasas. Fotografía 10

Fotografía 10. Control 1 el día 3-3-2007. Imagen general del hogar con un diámetro

aproximado de (1 m.)

Para tener una referencia principal se establecieron dos puntos (A-B)

separados entre ellos por un metro de distancia en las proximidades del hogar para ver

la modificación del perímetro del hogar. Finalizada la combustión y tras obtener los

restos de cenizas y carbones, se procedió a documentar las posiciones de las

termocúpulas mediante un levantamiento planimétrico, acompañado de fotografías. A

partir de este momento, los restos del hogar fueron abandonados y se inició el estudio

postdeposicional de los restos. Figura 7

Page 67: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

67

Figura 7. Planta del hogar de EXP- Fuego 2- Can Sisó 2007, una vez finalizada la

combustión el día (3-3-07)

III. 4.2.2 - Control 2 (30/3/2007)

La segunda observación realizada el día 30-3-07 constató que tras un mes de

abandono del hogar, éste había sufrido importantes modificaciones; las cenizas habían

desaparecido completamente y se había quedado al descubierto parte del sedimento

termoalterado con unas manchas con tonalidades grisáceas (PANTONE Cool Gray 3C)

y oscuras (PANTONE 437 U), a consecuencia de los lavados producidos en una parte

del hogar, y otras rubefacciones con una tonalidad naranja (PANTONE 715 U),

consecuencia de la combustión que estaban expuestas al aire libre. Fotografía 11

Fotografía 11. Control 2 del hogar de Can Sisó 1, realizado el día 30/3/2007, tras un

mes de abandono: se observan alteraciones térmicas sobre el sedimento, lavado del

hogar y dispersión de carbones. Las cenizas han desaparecido completamente.

Page 68: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

68

Una parte importante de carbones se dispersó sobre todo en dirección (N-NO)

y algunos de un tamaño aproximado de 8 mm. se encontraban a una distancia de dos

metros en esa dirección. Asimismo, se podía observar que una parte de carbones de un

tamaño aproximado de 50- 40 mm. se hallaban en la parte externa del perímetro del

hogar y que la parte central del hogar mantenía la cobertura de carbones compactada.

Podemos decir que la parte más externa del hogar era la más afectada en su conjunto. El

hogar había perdido una parte importante de carbones y muchos estaban dispersos

alrededor del hogar, lo que permitía ver las alteraciones térmicas del sedimento. Para

determinar el perímetro de la rubefacción y del hogar se utilizaron los puntos de

referencia principales (A-B). Figura 8

Figura 8. Planta del hogar de EXP- Fuego 2- Can Sisó 2007 tras un mes de abandono al aire libre (30-3-

2007). En la imagen se observa el perímetro de la rubefacción y los restos del hogar conservados.

La cubierta vegetal formada básicamente por herbáceas (Dicotiledóneas-

Monocotiledóneas) se extendía por toda el área de estudio. Alrededor del hogar se podían

observar carbones que habían sido desplazados y se encontraban por encima y

parcialmente cubiertos por las herbáceas.

III. 4.2.3 - Control 3 (13/5/2007)

En el mes de mayo se realizó el tercer control del hogar, tras prácticamente dos

meses y unos días de abandono. En este control se formó una cuadricula de (3 x 3

metros) para documentar la topografía del terreno. Desde un punto “0” relativo se

obtuvieron las cotas del terreno (Fotografía 12). Utilizando un nivel de agua y

Page 69: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

69

posicionándolo posteriormente en todas las intersecciones de cada cuadro de la

cuadrícula se fueron anotando las (Z) del terreno en un papel milimetrado, para el

posterior tratamiento de las tres dimensiones arqueológicas (x, y, z) en un dibujo a

escala 1/20 y en un programa de Autocad, con el fin de obtener una imagen en tres

dimensiones. Figura 9

Fotografía 12. Control 3 el día 13/5/2007. Cuadrícula realizada de (3 x 3 metros.) como área

de estudio y para obtener la topografía del terreno.

Los cálculos que se realizaron para determinar la pendiente del terreno

indicaron una inclinación del 6, 6 % en dirección S.

Figura 9. Imagen topográfica del terreno de EXP- Fuego 2- Can Sisó – 2007 con una pendiente dirección

(S) del 6,6 %

El análisis que se realizó del hogar indicaba que la parte central mantenía

parte de los carbones como en el anterior control, mientras que la zona del perímetro

externo era la que había sufrido más alteraciones. Buena parte de los carbones que se

encontraban en la periferia del perímetro en el anterior control habían desaparecido.

Aunque algunos continuaban posicionados en el mismo lugar, no se observó la misma

Page 70: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

70

densidad de carbones de un tamaño de (40-50 mm.) en el perímetro externo. Ahora se

hacía más difícil distinguir la presencia de carbones en la superficie, ya que las

herbáceas habían crecido y no se podía determinar una dirección clara en la dispersión

de los carbones. Hay que mencionar que los cuadros (L8 y M8) sufrieron una alteración

parcial ya que el terreno circundante fue cultivado y afectó parcialmente a estos cuadros

de forma accidental. Los cambios más significativos se produjeron en las rubefacciones

del sedimento, ya que presentaban unas tonalidades oscuras de color marronoso más

claras (PANTONE 471 U) y de color anaranjado menos intensas que las descritas en el

anterior control (PANTONE 474 U). La parte desprovista de carbones en el interior del

perímetro presentaba claros síntomas de rubefacción, aunque como se ha comentado

anteriormente se habían producido cambios en su estado.

III. 4.2.4 - Control 4 (13/7/2007) El hogar seguía manteniendo la zona central con carbones pero había reducido su

perímetro con respecto al anterior control y el grado de compactación entre carbones era

menor en la zona conservada. Las termoalteraciones sobre el sedimento ya no eran tan

evidentes en la zona donde se ubicaba el hogar; es decir, las rubefacciones presentaban

tonalidades que coincidían con las del tipo de suelo, sobre todo la parte externa del

perímetro del hogar donde no había carbones. Esta consideración necesitaría criterios de

reconocimiento más objetivos que no se han puesto en práctica en este trabajo. Desde

los puntos de referencia principales (A-B) se procedió a obtener el perímetro del hogar.

Figura 10

Figura 10. Control 4 el día 13/7/2007. Planta del hogar de EXP- Fuego 2- Can Sisó-

2007 tras casi cinco meses de abandono.

Page 71: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

71

Fotografía 13. Control 4 el día 13/7/2207. Imagen general del hogar donde se puede

observar cómo los impactos térmicos en el sedimento y las rubefacciones presentan

tonalidades más claras.

Algunos de los carbones que en el anterior control se encontraban en el

perímetro externo con un tamaño (50-40 mm.) estaban cubiertos por herbáceas y

algunos habían desaparecido y fracturado. Determinadas zonas próximas al hogar

quedaron al descubierto de cobertura vegetal y las herbáceas presentaban un estado más

seco en términos generales. Este hecho permitía ver cierta dispersión de carbones a una

distancia aproximada del hogar de (1,5 metros) en dirección (SE) y carbones dispersos

en dirección (N-E). Las zonas con mayor cobertura vegetal estaban en dirección (NE-S).

Fotografía 13

III. 4.2.5 - Control 5 (21/9/2007)

Fotografía 14. Control 5 el día 21/9/2007. Imagen general del hogar tras siete meses de

abandono. Las herbáceas cubren prácticamente el hogar.

Page 72: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

72

En este control, realizado en septiembre tras siete meses de abandono, se

observó que el hogar se encontraba cubierto prácticamente por herbáceas y resultaba

difícil determinar los diversos fenómenos, sobre todo de dispersión de carbones.

Podemos decir que el hogar no presenta alteraciones significativas y mantiene la parte

central conservada como en el anterior control. Fotografía 14

III. 4.2.6 - Control 6 (14/11/2007)

En el mes de noviembre se llevó a cabo un nuevo control del hogar y ahora

prácticamente estaba rodeado de herbáceas que habían crecido (15cm

aproximadamente), quedando al descubierto la zona de la combustión que no había sido

cubierta por la vegetación en su totalidad. No se apreciaron alteraciones significativas

de los restos conservados del hogar y seguía manteniendo la parte central intacta como

en el anterior control y se insinuaba el impacto térmico sobre el sedimento por debajo

de los carbones. Hay que decir que se desconoce el motivo por el cual la zona del hogar

no fue cubierta en su totalidad por la vegetación. Asimismo los carbones conservados

del hogar presentaban fisuras dejando intuir cierta fragmentación y no se observó

ninguna dispersión de carbones en la zona de estudio por la colonización de vegetación

en toda la zona. Fotografía 15

Fotografía 15. Control 6 el día 14/11/2007. Han transcurrido prácticamente nueve

meses de abandono del hogar. Se observan herbáceas alrededor de los restos de

combustión.

III. 4.2.7 - Control 7 (16/2/2008)

Page 73: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

73

En febrero de 2008 se realizó el último control del hogar y se recogieron las

muestras para realizar el estudio sobre la dispersión de carbones. En este momento, el

hogar había sido cubierto en su totalidad por herbáceas que se extendían por toda el área

de estudio y era imposible distinguir cualquier alteración en superficie. En este

momento se dio por acabada la EXP- Fuego 2- Can Sisó – 2007. Fotografía 16

Fotografía 16. Control 7 el día 16/2/2008. Imagen del hogar tras prácticamente doce

meses de abandono cubierto por herbáceas.

Figura 11. Control 7 el día 16/2/2008. Planta del hogar de EXP- Fuego 2- Can Sisó- 2007 tras casi doce

meses desde su abandono.

Page 74: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

74

Desde los puntos de referencia principales (A-B) se procedió a documentar el perímetro

del hogar. Figura 11

III. 4.2.8 - Recogida de muestras (16/2/2008)

Para muestrear la superficie de estudio se ha tenido en cuenta la cuestión

espacial, es decir, se utilizaron intervalos de muestreo a través de una “rosa de vientos”

creada para tal fin desde el centro del hogar y que abarcaba la totalidad de la cuadricula

de (3 x 3 m) siguiendo la misma metodología que en la anterior experimentación (ver

apartado III. 4.1.6). En total se extrajeron 57 muestras (en las líneas B, D, F, H se

extrajeron 8 muestras en total para abarcar todo el espacio de la cuadrícula) para su

posterior análisis, contando las que se extrajeron al final del proceso situadas a 15 cm.

(punto 0,5 de las líneas de referencia) desde el punto “0” en el centro del hogar (Anexo

I).

III. 4.2.9 - Datos y análisis de las muestras de EXP- Fuego 2- Can Sisó - 2007

En este apartado se analizan un total de 57 muestras de sedimentos con un

volumen total en cada una de ellas de 200 ml, así como la relación existente entre las

variables peso, volumen y número de fragmentos de los carbones de dichas muestras

(Anexo I) con el objetivo de ver su representación espacial, como anteriormente se ha

especificado. El número total de carbones recuperados en las muestras ascendió a 1346

Gráfico 34. Número de carbones línea A en Gráfico 35. Número de carbones línea B en dirección

dirección Norte. Nordeste.

0

10

20

30

40

50

60

A 0,5 A1 A2 A3 A4 A5

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea A- Norte

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6 B 7

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea B- Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 75: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

75

Gráfico 36. Número de carbones línea C en Gráfico 37. Número de carbones línea D en dirección

dirección Este. Sudeste.

Gráfico 38. Número de carbones línea E en Gráfico 39. Número de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

Gráfico 40. Número de carbones línea G en Gráfico 41. Número de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

0

10

20

30

40

50

60

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones (mm)

Línea C- Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

D 0,5

D 1 D 2 D 3 D 4 D 5 D 6 D 7

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones (mm)

Línea D- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones (mm)

Línea E- Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6 F 7

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones (mm)

Línea F - Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

H 0,5

H 1 H 2 H 3 H 4 H 5 H 6 H 7

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones (mm)

Línea H- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5

Núm

ero

de c

arbo

nes

fracciones (mm)

Línea G- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 76: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

76

Gráfico 42. Número de carbones punto 0

En los gráficos sobre el número de carbones se puede observar cómo las

muestras con una presencia mayor de carbones de las tres fracciones corresponden a los

puntos situados en las zonas más próximas del centro del hogar (A 0,5, B 0,5, D 0,5, E

0,5, F 0,5, G 0,5, H 0,5) situados a 15 cm., y el punto de la muestra (0), que presenta

una frecuencia también alta de carbones, mientras que en (C 0,5) en dirección (E) es

baja. A continuación en las muestras situadas a 30 cm. se observa también una

frecuencia alta en (A1, B1, D1, F1), excepto en (C1, G1, H1) en dirección (E-O-NO). A

partir de estos puntos, hay una disminución en el número de carbones de forma general

y presencia de alguna de las tres fracciones de carbones. Se puede observar que las

fracciones con una mayor presencia hacia las zonas externas corresponden a las

(fracciones >2 > 1) y que la (fracción > 4) tiene una menor frecuencia a nivel espacial.

Las líneas de orientación con una mayor frecuencia de carbones hacia las zonas más

externas del centro del hogar corresponden a las siguientes:

- Línea A dirección Norte. - Línea F dirección Sudoeste.

- Línea B dirección Nordeste. - Línea G dirección Oeste.

- Línea E dirección Sur. - Línea H dirección Nordoeste.

0

20

40

60

80

100

120

140

Fracciones 4 Fracciones 2 Fracciones 1

Núm

ero

de c

arbo

nes

0

Fracciones 4

Fracciones 2

Fracciones 1

Page 77: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

77

De forma general se observa una dispersión en dirección (N-NO-NE), (S-SO), y

(O). La presencia de carbones de las (fracciones > 4) en las muestras más alejadas del

punto central son significativas, dado el desplazamiento por transporte que han sufrido

los carbones de dicho tamaño por fuerzas de arrastre, sobre todo en las líneas de

orientación siguientes: línea A en dirección (N), línea G en dirección (O) y línea D en

dirección (SE). Los siguientes gráficos muestran las distribuciones de las fracciones de

carbones (> 4, > 2, > 1) por peso y sus frecuencias relativas. Si la correlación es fuerte,

permitirá considerar que la variable peso depende en gran medida del número de

fragmentos de cada punto de las muestras como indicador de orientación.

Gráfico 43. Peso de carbones línea A en Gráfico 44. Peso de carbones línea B en

dirección Norte. dirección Nordeste.

Gráfico 45. Peso de carbones línea C en Gráfico 46. Peso de carbones línea D en

dirección Este. dirección Sudeste.

0

1

2

3

4

5

6

7

8

A 0,5 A1 A2 A3 A4 A5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea A - dirección Norte

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6 B 7

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea B -dirección Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones linea C - dirección Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5 D 6 D 7

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso de carbones línea D -dirección Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 78: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

78

Gráfico 47. Peso de carbones línea E en Gráfico 48. Peso de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

Gráfico 49. Peso de carbones línea G en Gráfico 50. Peso de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

Gráfico 51. Peso de carbones línea en punto 0

El análisis de los datos del peso en gramos de las fracciones de los carbones

muestra cómo el mayor peso absoluto se encuentra hacia el centro del hogar de forma

general en todas las líneas, excepto en la línea de orientación (C) en dirección (E), y

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

Fracciones 4 fracciones 2 fracciones 1

Peso

en

gram

os

Fracciones

Peso carbones en punto 0

Fracciones 4-2-1

0

1

2

3

4

5

6

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea G -dirección Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea E -dirección Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

8

9

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6 F 7

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea F- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4 H 5 H 6 H 7

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea H -dirección Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 79: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

79

prácticamente está representado por las tres fracciones (> 4, > 2, > 1), aunque destaca

principalmente la (fracción > 4) por su peso absoluto en comparación con las otras dos

fracciones. Asimismo, se puede observar que hay una dispersión general de carbones de

la (fracción > 2 >1) hacia las zonas externas, pero por su peso no resultan significativas,

excepto en las zonas más centrales del hogar. Mientras que la (fracción > 4) es

indicativa de cierta dispersión de carbones de este tamaño hacia las zonas externas del

hogar:

- Línea A dirección Norte.

- Línea B dirección Nordeste.

- Línea D dirección Sudeste.

- Línea G dirección Oeste.

Los carbones de la (fracción > 4) indican una dispersión en dirección (N-NO),

(SE) y (O). Los siguientes gráficos muestran el volumen (ml.) total de los carbones en

cada punto de referencia de las muestras de las líneas principales de la “rosa de vientos”

orientadas a los puntos cardinales. Esta variable está relacionada con el número de

fragmentos identificados en cada muestra extraída y por tanto puede ser un indicador de

la distribución espacial en este estudio.

Gráfico 52. Volumen de carbones línea A en Gráfico 53. Volumen de carbones línea B en

dirección Norte. dirección Nordeste.

0

2

4

6

8

10

12

14

16

A 0,5 A1 A2 A3 A4 A5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea A- Norte

Volumen de carbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6 B 7

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea B- Nordeste

Volumen de carbones

Page 80: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

80

Gráfico 54. Volumen de carbones línea C en Gráfico 55. Volumen de carbones línea D en

dirección Este. dirección Sudeste.

Gráfico 56. Volumen de carbones línea E en Gráfico 57. Volumen de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

Gráfico 58. Volumen de carbones línea G en Gráfico 59. Volumen de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

0

2

4

6

8

10

12

14

16

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea C- Este

Volumen de carbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5 D 6 D 7

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea D- Sudeste

Volumen de carbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea E- Sur

Volumen de carbones

0

5

10

15

20

25

30

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6 F 7

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea F- Sudoeste

Volumen de carbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea G- Oeste

Volumen carbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4 H 5 H 6 H 7

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea H- Nordoeste

Volumen carbones

Page 81: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

81

Grafico 60. Volumen de carbones punto “0” .

Las diferencias del volumen total de carbones en los distintos puntos donde se

realizó el muestreo muestran una frecuencia absoluta de carbones y, por tanto, pueden

ser indicativas de la distribución espacial que se produjo y en qué dirección. El análisis

de los datos relacionados con el volumen total de los carbones en las líneas de

referencia principales orientadas a los puntos cardinales muestra un volumen mayor

hacia el centro del hogar de forma clara, excepto en la línea “C”, que presenta un

volumen menor en la zona más próxima del hogar (gráfico Nº 54)

Se puede observar cómo en los diferentes gráficos hay una tendencia general

de distribución hacia las zonas más externas del centro del hogar en todas las

direcciones, pero en algunas direcciones el volumen total en determinados puntos

resulta más representativo. Las líneas de orientación con una tendencia mayor de

volumen de carbones hacia el exterior del hogar son;

- Línea A en dirección Norte. - Línea G en dirección Oeste.

- Línea B en dirección Nordeste. - Línea H en dirección Nordoeste.

- Línea D en dirección Sudeste.

Los gráficos de dispersión de las líneas de orientación a los puntos cardinales

nos permite detectar que las muestras extraídas hacia la zona central del hogar se

caracterizan porque, en general, son las que han proporcionado más volumen total de

carbones. Las muestras con un volumen de carbones situados en las partes más externas

indican que se ha producido un desplazamiento de carbones por fuerzas de arrastre o

transporte, desde el centro del hogar hacia el exterior. De forma general, el volumen de

carbones indica una dispersión general que abarcaría desde (O-N-NO-NE) y en

dirección (SE)

0

2

4

6

8

10

12

14

1 2

Volu

men

(ml)

Muestra centro del hogar

Volumen de carbones punto 0

Volumen de carbones

Page 82: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

82

III. 4.2.10 – Variables climáticas (Pluviometría y viento)

En este apartado se especifican los datos más relevantes en referencia a las

variables climáticas en la zona, a lo largo de todo el tiempo de estudio, desde el mes de

marzo de 2007 a febrero de 2008. Para una información más detallada de los datos

proporcionados por la Estación Meteorológica de Tagamanent-Montseny se puede

consultar el Anexo I.

III. 4.2.10.1 – Estación meteorológica de Tagamanent- Montseny. Estación

Meteorológica

de

Tagamanent-

Montseny Situ

ació

n

sinó

ptic

a de

l mes

Prec

ipita

ción

máx

ima

(litr

os

m2)

Dir

ecci

ón

del

vien

to

Vel

ocid

ad

máx

ima

del

vien

to m

/s

Rac

has

máx

imas

de v

ient

o

Esc

ala

de

Bea

ufor

t (vi

ento

)

Marzo 2007

Seco

13,3

NE-SO

1,5 m/s

10, 7 m/s

Ventolina

Abril

Lluvioso

62

O-S-NE

3 m/s

14, 2 m/s

Brisa débil

Mayo

Seco

27, 6

NE-SE-NO

2,3 m/s

14, 2 m/s

Brisa débil

Junio

Muy seco

1,6

S-O-E

1, 5 m/s

11,3 m/s

Ventolina

Julio

Muy seco

5,6

NE-O-SE

1,9 m/s

8,6 m/s

Brisa débil

Agosto

Seco/ muy

seco

32

S-NO-E

1,6 m/s

9,3 m/s

Ventolina

Septiembre

Muy seco/

muy seco

9,6

S-NO-NE

1,3 m/s

11,9 m/s

Ventolina

Octubre

Seco/lluvio

so

23

NE-SO

1,5 m/s

14,2 m/s

Ventolina

Noviembre

Seco/ muy

seco

0,8

S

3,2 m/s

9,6 m/s

Brisa débil

Diciembre

Seco

4

E-N-O

1,5 m/s

11,8 m/s

Ventolina

Enero

Seco/muy

seco

15,4

S-SE-N

1,9 m/s

12,5 m/s

Brisa débil

Febrero 2008

Seco

9,8

NE- O

2,5 m/s

Sin

datos

Brisa débil

Grafico 61. Datos climáticos más relevantes proporcionados por la Estación Meteorológica de

Tagamanent-Montseny, en el periodo comprendido entre marzo de 2007 y febrero de 2008

Page 83: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

83

III. 4.2.11 – Discusión y resultados de EXP- Fuego 2- Can Sisó -07

III. 4.2.11.1- El proceso de combustión.

En el proceso de combustión se utilizó madera de pino blanco “Pinus

halepensis” y madera de brezo “Erica arborea” para el encendido. Estas dos maderas

influyeron en el rendimiento calorífico y se obtuvieron residuos de combustión

formados por carbones y cenizas en un hogar de 90 cm. de diámetro. La madera de pino

utilizada generó unos valores altos en los primeros momentos de la combustión; la (T3)

colocada en el centro y en superficie alcanzó los 656º C en los primeros 10 minutos.

Una vez que la madera central del hogar se fue consumiendo y aproximadamente a los

30 minutos, la (T1) colocada en la parte externa en superficie alcanzó los 576º C,

cuando la madera de la zona externa comenzó a arder. Las termocúpulas externas

mantuvieron temperaturas altas y de forma constante, por encima de los 400º C durante

aproximadamente 90 minutos. A partir de este momento, las temperaturas de las

termocúpulas externas empezaron a indicar valores inferiores de forma constante hasta

que finalizó la combustión a las 2h 30 minutos (Anexo I)

Las termocúpulas colocadas a 2cm. de profundidad dentro del suelo (T2-T4),

tanto en la parte externa como en la central, indicaron unas temperaturas que no

superaron los 60º C en todo el proceso de combustión (la T4 alcanzó 56º C). Las

temperaturas que se registraron en el sedimento estuvieron relacionadas con el impacto

calorífico recibido desde el exterior y por ello hasta aproximadamente los 30 minutos no

comenzaron a indicar valores altos por encima de los 30º, cuando se habían alcanzado

las máximas temperaturas en las termocúpulas externas y se comenzaban a generar

brasas en el hogar. Las brasas generadas por la combustión fueron progresivamente

incidiendo sobre la superficie, lo que provocó un aumento paulatino de la temperatura

en sedimento a medida que la madera se fue consumiendo en el exterior. La (T4) indicó

valores por encima de los 40 º C a los 40 minutos del inicio de la combustión durante

aproximadamente 1 hora 10 minutos, mientras que la (T2) no indicó valores por encima

de los 40º C tras una hora del inicio de la combustión manteniendo esta temperatura 2

horas y 10 minutos. Ambas termocúpulas comenzaron a indicar valores inferiores al

final de la combustión. A medida que la madera se fue consumiendo el impacto

calorífico se fue trasladando al sedimento a través de las brasas, prolongándose más allá

de las 2h 30 minutos, pero con una menor temperatura a medida que el hogar se iba

enfriando.

Page 84: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

84

La cantidad total de madera seca utilizada en el proceso de combustión (25

Kg.) quemó rápidamente generando unas temperaturas con valores altos en los primeros

momentos de la combustión, que progresivamente incidieron sobre el sedimento a

medida que se fueron generando las brasas del hogar y alcanzaron temperaturas por

encima de los 40º

III. 4.2.11.2 – Los procesos postdeposicionales en EXP 2- Fuego 2- Can Sisó -07

Como se ha podido comprobar, el desplazamiento postdeposicional de los

carbones puede realizarse a distancias cortas o grandes, dependiendo de la intensidad

del tipo de agente o variable que ha intervenido. Los agentes que han actuado sobre los

restos de la combustión del hogar EXP- fuego 2- Can Sisó-2007 y que han modificado

su estado original son los siguientes (Tabla 2):

ALTERACIONES POSTDEPOSICIONALES EN EXP- FUEGO 2-CAN SISÓ-

2007

AGENTES

MECANISMOS

FENÓMENO

OBSERVACIONES

EXPERIMENTALES

Naturales

Viento

Aeroturbación

Desaparición de las

cenizas, dispersión de

carbones.

Naturales

Lluvia

Aguaturbación

Lavados sobre el hogar,

dispersión de carbones,

alteración de las

rubefacciones.

Naturales

Vegetación

Floraturbación

Incidencia en la dispersión

de carbones, barreras

naturales, estabilización

de los restos de

combustión.

Naturales

Factor tiempo

Modificación/

Conservación

Dispersión,

fragmentación, transporte,

enterramiento de los restos

del hogar

Tabla 2. Alteraciones y modificaciones postdeposicionales documentadas en EXP- Fuego 2- Can

Sisó 2007

Page 85: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

85

Las diversas observaciones que se realizaron a lo largo de un año constatan

que dichos agentes tuvieron una incidencia en mayor o menor grado durante todo el

tiempo de abandono del hogar provocando una alteración de los restos del hogar en su

conjunto. El segundo control realizado el día 30/3/2007 constató un hecho importante y

es la desaparición en poco tiempo de las cenizas del hogar aproximadamente tras

prácticamente un mes de abandono. Durante este periodo de tiempo no se registraron

precipitaciones significativas en el mes de marzo de 2007 (ver gráfico Nº 61 y Anexo I),

lo que hace que atribuyamos la responsabilidad de la desaparición de las cenizas al

efecto del viento, como se puede observar en la Fotografía 11. Asimismo, este agente

natural provocó una dispersión de carbones en dirección N-NO a una distancia

aproximada de dos metros. Dado el desplazamiento que se produjo, consideramos el

viento como responsable del transporte de los carbones y de la desaparición de las

cenizas en la zona experimental durante este primer mes de abandono del hogar. Hay

que tener en cuenta que se produjeron rachas de viento en determinados días de 10, 7

m/s y que pudo tener cierta influencia en dicha dispersión (Anexo I)

Pensamos que la “tasa de movimiento” de carbones impulsada por el viento en

un tipo de superficie y según el grado del tamaño de los carbones depende de la

velocidad del viento. Este hecho condicionaría el desplazamiento de los carbones de

diferente tamaño dependiendo de la fuerza de arrastre sobre tal superficie, en nuestro

caso condicionado el movimiento superficial por la presencia de herbáceas.

No podemos indicar exactamente la dirección del viento que sopló en el

mismo lugar donde se ubicaba el hogar al no ser operativa la Estación Meteorológica de

Tagamanent-Montseny con respecto a esta variable, teniendo en cuenta que se encuentra

situada a 14 Km. de distancia. Hay que tener en cuenta, además, que el hogar de Can

Sisó se encuentra en una cerca de la cadena montañosa del Montseny que lo protege de

los vientos de componente (N) y por la Masia de Can Sisó, que lo resguarda de los

vientos procedentes del (S). Este factor condiciona la interpretación que podamos dar en

relación al comportamiento que pudo tener el viento en el mismo lugar de la

experimentación, pero se ha podido comprobar que dicho fenómeno alteró las

condiciones originales del hogar en un primer momento y especialmente con la

desaparición de las cenizas del hogar. Las precipitaciones que se registraron en el mes

de marzo de 2007 (ver gráfico Nº 61 en Anexo I) son las responsables de los lavados

que se produjeron en el hogar y del desplazamiento de los carbones de mayor tamaño

hacia el exterior del perímetro del hogar, tal y como se puede ver en la Fotografía 11. A

Page 86: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

86

consecuencia de la acción de la lluvia y del viento quedó al descubierto parte de la

microestratigrafía del hogar; es decir, se podía observar parte de las rubefacciones

producidas por la combustión. Consideramos que la lluvia no fue la causante del

desplazamiento de carbones hacia el exterior del hogar a 2 metros de distancia, al no

constatarse fenómenos de origen hidráulico y por la presencia de herbáceas que

imposibilitarían dicho movimiento.

Como se pudo comprobar en este primer mes de abandono, se produjeron

modificaciones importantes de los restos del hogar en muy poco tiempo por su

exposición al aire libre. A estos factores hay que añadir que las herbáceas que se

extendían por toda la superficie evitaron una mayor dispersión de carbones, ya que

actuaron como barreras naturales y de freno para la migración superficial de los

mismos. Aunque, como se pudo comprobar, hubo un desplazamiento de carbones a

cierta distancia. A medida que transcurrían los meses y a través de las distintas

observaciones que se realizaron se pudo observar que la superficie donde se ubicaba el

hogar sufría cambios, sobre todo en relación al estado de las herbáceas. Este hecho

quedó probado en el tercer control realizado en el mes de mayo (13-5-2007), ya que el

mes de abril de 2007 registró importantes precipitaciones (ver gráfico Nº 61 y Nº 63 de

Anexo I) que favorecieron el crecimiento de las herbáceas en la zona de estudio.

Las alteraciones que se observaron en el hogar están relacionadas sobre todo

con las precipitaciones que se registraron en el mes de abril, ya que atribuimos a este

fenómeno el cambio que se produjo en las rubefacciones, que alteró las condiciones del

suelo, provocando un cambio de las tonalidades del sedimento. En relación a la

influencia que pudo tener el viento, hay que destacar las rachas de viento que se

registraron en este mes, alcanzando 14, 2 m/s, aunque no podemos determinar hasta qué

punto esta variable influyó en la dispersión de carbones, dada la presencia de herbáceas.

Las condiciones climatológicas que se sucedieron hasta el siguiente control en julio

(13/7/07), tal y como queda reflejado por los datos proporcionados por la Estación

Meteorológica de Tagamanent-Montseny en relación a la pluviometría, indican que se

sucedieron meses secos o muy secos hasta septiembre de 2007 (ver gráfico Nº 61 y

Anexo I). Esta situación se prolongó prácticamente hasta finalizada la experimentación,

pero con algunas matizaciones, como veremos más adelante.

En general, los meses de junio y julio de 2007 fueron especialmente secos

(gráficos Nº 67 y Nº 69 Anexo I), hecho que provocó un cambio en el estado de las

Page 87: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

87

herbáceas, ya que se encontraban mayoritariamente secas. Este cambio de la cobertura

vegetal dejó al descubierto nuevas zonas próximas al hogar con densidad baja de

herbáceas y zonas donde el sedimento prácticamente estaba al descubierto. Asimismo,

se pudo comprobar que en determinadas partes y de forma aislada habían crecido

plantas muy próximas al perímetro del hogar que estabilizaban los restos de la

combustión y zonas con herbáceas en dirección (NE-S). Podemos decir que estas

condiciones cambiantes de la cobertura vegetal favorecieron una nueva dispersión de

carbones en dirección (N-SE-E); es decir, hacia las zonas con menor cobertura vegetal.

Consideramos que este hecho se produjo por la acción del viento, dado que no se

registraron precipitaciones en los meses de junio y julio como hemos visto

anteriormente. De igual modo, la presencia la presencia de carbones a una distancia de

1,5 metros del hogar en estas direcciones estaría relacionada con fuerzas de arrastre de

origen eólico.

A consecuencia de los fenómenos atmosféricos que se han especificado se

produjeron diversas alteraciones en la secuencia microestratigráfica por su exposición al

aire libre, sobre todo cambios en las tonalidades de las rubefacciones y cierta

fracturación de los carbones. Además, el hogar en su perímetro externo estaba sufriendo

una progresiva pérdida de carbones, mientras que su parte central conservaba parte de

su secuencia microestratigráfica y su perímetro se había reducido de forma general.

Pensamos que la modificación del perímetro del hogar y la desaparición de carbones de

un mayor tamaño situados en el perímetro externo estuvieron relacionadas con la acción

del viento.

Desde el mes de agosto hasta el mes de octubre de 2007, hubo ciertas

precipitaciones (ver gráfico Nº 61), hecho que favoreció el crecimiento de las herbáceas

en la zona experimental, como se pudo comprobar en el control del mes de octubre (21-

9-2007), ya que el hogar se encontraba parcialmente cubierto por las herbáceas (ver

Fotografía 14). Este fenómeno favoreció la estabilización de los restos del hogar, tras

siete meses de abandono al aire libre. Por tanto, los fenómenos de “Floraturbación”

evitaron alteraciones en el hogar relacionadas con la dispersión de carbones producidas

por el viento y la lluvia.

De forma general, la cobertura vegetal fue cubriendo los restos del hogar hasta

finalizada la experimentación, en febrero de 2008, provocando una estabilización de los

Page 88: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

88

restos de la combustión, especialmente de la parte central del hogar. Los siguientes

controles que se realizaron hasta finalizada la experimentación fueron constatando esta

situación, ya que los restos fueron cubiertos en su totalidad por la vegetación (ver

Fotografía 16). Como se puede apreciar en el gráfico Nº 61 y Anexo I, los meses que

siguieron desde noviembre hasta febrero de 2008 fueron secos o muy secos, pero con

ciertas precipitaciones. Este hecho pudo favorecer la estabilización final del hogar y

detuvo los procesos mecánicos de transporte de carbones de forma horizontal por la

superficie.

El muestreo que se realizó en EXP- Fuego 2 -Can Sisó- 2007 y el posterior

análisis de las variables relacionadas con el número de fragmentos, peso, y volumen de

carbones tenía como objetivo específico determinar con mayor exactitud los

movimientos que se produjeron a lo largo de todo el periodo de abandono del hogar a

nivel espacial y extraer información pertinente relacionada con el comportamiento de

las diversas fracciones de carbones que se estudiaron. Este estudio indica que se produjo

una modificación importante del perímetro del hogar, ya que se redujo en términos

generales, dado que las muestras mas cercanas al punto “0”, especialmente las situadas

a (30 cm.), presentaban unas frecuencias bajas en relación a las tres variables, como se

puede ver en los gráficos número carbones, peso y volumen y una frecuencia alta en los

puntos más cercanos situados a 15 cm. Ello indicaría que el hogar pasó de un diámetro

de 1 metro aproximadamente al inicio de la experimentación a otro de 30 cm., una vez

finalizada la experimentación. Hay que destacar que la línea de orientación C en

dirección (E) presentaba una frecuencia muy baja de carbones, sobre todo en los puntos

más cercanos del hogar y en esta dirección el hogar perdió una importante parte de los

carbones, como queda reflejado en los gráficos Nº 36, 45 y 54

En este sentido, podemos decir que existieron movimientos superficiales de

los carbones por fuerzas de arrastres producidas por el viento y la lluvia,

principalmente, y ambas actuarían a lo largo del tiempo. El viento lo hizo desplazando

los carbones hacia las zonas externas con una tasa de movimiento específica relacionada

con la velocidad del viento, mientras que la lluvia incidió alterando las posiciones

originales de los carbones en el mismo hogar por los lavados producidos. Este hecho

favorecería posteriormente que el viento actuara sobre los carbones y los desplazara a

distintas posiciones de las originales en la superficie. Como se puede ver, ambos

agentes interactuaron en la dispersión una vez abandonado el hogar y cada uno de ellos

en mayor o menor grado tuvo una implicación en dichos movimientos, incidiendo en

Page 89: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

89

una redistribución espacial más o menos severa. El viento fue el responsable del

desplazamiento de los carbones hacia las zonas más externas del centro del hogar en las

líneas de orientación principales, con cierta correspondencia entre las tres variables que

se estudiaron, que indican que se produjo una dispersión que abarcaba desde (O- NO-N-

NE) y en dirección (SE)

Parece haber cierta correspondencia también con las observaciones que

realizaron sobre la dispersión de carbones antes de que el hogar se estabilizara al ser

cubierto por las herbáceas. Es decir, las zonas con una menor densidad permitieron

cierto desplazamiento de carbones en esas direcciones y, por el contrario, las zonas con

mayor densidad evitaron una dispersión de carbones en determinadas direcciones, sobre

todo en dirección (NE-S). Aunque en los dos primeros controles se constató una

dispersión de carbones en una superficie que estaba prácticamente cubierta por

herbáceas, dicha dispersión no estuvo condicionada por la presencia de herbáceas

debido a la acción del viento. Por tanto, pensamos que la velocidad del viento puede

mover carbones a cierta distancia dependiendo de si estas herbáceas son altas o bajas. A

medida que se produce el cambio de un estado a otro el viento incide menos en dicha

dispersión.

En relación a la influencia del viento sobre los carbones, las fracciones que

sufrieron un mayor movimiento sobre la superficie correspondieron a las fracciones > 2

> 1, tal como indican los gráficos relacionados con el número de carbones. Aunque no

resultan significativas por su peso, sí fueron las fracciones más representativas en dicho

desplazamiento. En relación al desplazamiento de las fracciones > 4 hacia las zonas más

externas del centro del hogar, pensamos que éste se debe a una tasa de movimiento

específica determinada por la velocidad del viento que desplazó los carbones de mayor

tamaño por fuerzas de arrastre de cierta intensidad. En términos generales, pensamos

que la velocidad del viento provocó una tasa específica de movimiento de las diversas

fracciones.

Los datos proporcionados por la Estación Meteorológica de Tagamanent-

Montseny (gráfico 61) indicaron diversas direcciones del viento a lo largo de los meses

que parecen coincidir con la dispersión que se produjo en la zona experimental. Pero,

como se ha especificado anteriormente, la lejanía de la Estación Meteorológica no

permite extraer conclusiones específicas sobre la influencia de esta variable. En todo

caso, nos servimos de los datos proporcionados por el muestreo que se realizó para

sacar conclusiones al respecto.

Page 90: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

90

Figura 13. Situación del hogar con respecto a los edificios más próximos y la dispersión

general de carbones constatada en el muestreo.

Dado que se produjo una dispersión de carbones que abarcaba desde (O a NE)

y en dirección SE, pensamos que los vientos procedentes del NO incidieron en la

dispersión de carbones en dirección SE, ya que serian canalizados por un pequeño valle

de la vertiente Oeste del Macizo del Montseny. Asimismo, consideramos que la

dispersión de carbones que se produjo en dirección (O a NE) estaría relacionada con

vientos procedentes del E. La acción del viento, por tanto, vendría dada por las zonas

relativamente descubiertas y sin obstáculos. Aunque el viento de componente SO está

de alguna manera obstaculizado, pudo tener cierta influencia en la dispersión de

carbones en dirección (N-NE), aunque no podemos asegurarlo. En relación a la

pendiente, no atribuimos a esta variable alguna influencia en la dispersión de carbones,

dado que estaría relacionada fundamentalmente con la acción del viento Figura 13.

Page 91: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

91

III. 4.3 - EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B (Mosqueroles-

Fogars de Montclús)

- Localización.

La Masía de Can Sisó se encuentra en la parte sur del Macizo del Montseny entre el río

de La Tordera y la riera de Pertegàs, en su margen izquierdo, a una altura de 356 metros

s.n.m., muy próxima a la población de Mosqueroles (Fogars de Montclús). Sus

coordenadas geográficas son 41º 43´15. 22” N – 2º 26´24. 36” E. El punto donde se

llevó a cabo la experimentación se encuentra situado en un rellano de superficie con una

inclinación del 17, 7 % en dirección SE sin herbáceas.

En el entorno más próximo a la zona donde se hallan los restos de la

combustión, se encuentra un edificio que corresponde a la Masia de Can Sisó, con una

altura aproximada de 6 metros y unos 15 metros de largo, orientada en dirección (NE-

SO) a escasos metros del hogar (9 metros aproximadamente) y que protege los hogares

de los vientos procedentes del NE. Asimismo, en dirección NE y a unos tres metros, se

encuentra una pequeña valla que no supera los 2 metros de altura. En dirección SO se

encuentra un cultivo de viñas que no superan el metro de altura y separadas entre ellas

aproximadamente por dos metros. La zona no presenta una vegetación densa en ninguna

dirección y sólo se encuentran unos árboles dispersos en dirección NO que no superan

los dos metros de altura. La orografía de la zona y las particularidades montañosas del

lugar hacen que se halle protegido de los vientos de componente N por la presencia del

macizo del Montseny, aunque se encuentra a relativamente alejado del lugar y del NE,

por la presencia de la Masia de Can Sisó.

III. 4.3.1 - Combustión y control 1 (15-3-07)

El día (15-3-07) se realizaron simultáneamente dos combustiones al aire libre

de tipo plano simple en una superficie prácticamente sin vegetación. Con el objetivo de

observar los diversos procesos postdeposicionales, se llevaron a cabo controles

aproximadamente cada dos meses, los días (15-3-07), (30-3-07), (13-5-07), (13-7-07),

(21-11-07) y el día (24-2-08), cuando se dio por finalizada la observación de los hogares

y se realizó la extracción de las muestras para el posterior análisis de dispersión de los

carbones. Para distinguir una experimentación de la otra utilizaremos las abreviaturas

siguientes EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B. Ambas

Page 92: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

92

combustiones se realizaron conjuntamente separadas por pocos centímetros

(aproximadamente a 15 cm.) en un terreno con una inclinación del 17 % en dirección

SE.

La cantidad de madera que se utilizó en las dos combustiones es la siguiente;

en (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A) 1 Kg. de brezo (Erica arborea) y 25 Kg. de madera

de pino blanco (Pinus halepensis), que tenía cierta humedad, con un diámetro

aproximado de los troncos de madera de 5-6 cm., mientras que en (EXP- Fuego 4- Can

Sisó 4-B) se utilizaron 0,7 Kg. de brezo (Erica arborea) y 10 Kg. de madera de pino

blanco (Pinus halepensis) con cierta humedad y con un diámetro similar a la anterior (5-

6 cm.). Una vez posicionadas las termocúpulas sobre la superficie se colocaron

pequeñas ramas de brezo (Erica arborea) para realizar el encendido e inmediatamente

la madera de pino blanco (Pinus halepensis) sin ninguna disposición especial de la

troncos de madera. Durante la combustión se observó que la madera provocaba bastante

humo y que determinados troncos expulsaban resina.

Al igual que en la anterior experiencia, el análisis de las variables relacionadas

con el proceso de combustión implicó el empleo de instrumental para controlar las

temperaturas. Se utilizaron 3 termocúpulas en cada combustión y se dispusieron de la

siguiente manera; en el fuego (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A) la T1 se colocó en

superficie en contacto con el suelo en la zona derecha y cerca del centro; la T2 colocada

a 2 cm. de profundidad dentro del suelo en el centro; la T3 en superficie en contacto con

el suelo en la zona izquierda cerca del centro. En la combustión (EXP- Fuego 4- Can

Sisó 4-B) las termocúpulas se colocaron de la siguiente manera; la T4 en superficie en

el lado derecho cerca del centro, la T5 a 2 cm. de profundidad dentro del suelo en el

centro y la T6 en superficie en contacto con el suelo en el lado izquierdo cerca del

centro. Finalizadas dos combustiones, se realizó un levantamiento planimétrico para

determinar la posición exacta de las termocúpulas dentro del perímetro de los hogares.

El tiempo de combustión de ambos hogares fue de 3h y la temperatura se

controló cada 10 minutos. El valor máximo que alcanzó el fuego de la (EXP- Fuego 3-

Can Sisó 3- A) fue de 737º C y mantuvo una temperatura por encima de los 600º y de

forma constante unos 40 minutos, mientras que en la combustión (EXP- Fuego 4- Can

Sisó 4-B) alcanzó una temperatura máxima de 637º C unos pocos minutos, como

veremos más adelante.

Si observamos los gráficos de temperaturas (Nº 62 y Nº 63) de cada

combustión podemos ver, en primer lugar, que las temperaturas máximas en (EXP-

Page 93: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

93

Fuego 3- Can Sisó 3- A), las alcanzan las termocúpulas T1 y T3 colocadas en superficie

en contacto con el suelo en cada lado (derecho y izquierdo) de la combustión. Ambas

termocúpulas comenzaron a indicar valores altos aproximadamente a los 20 minutos,

pero la T3 alcanzó su valor máximo de 500º C en los siguientes 10 minutos y descendió

progresivamente la temperatura hasta el final de la combustión. Mientras que la T1

mantuvo valores por encima de los 600º C a partir de los 40 minutos de forma constante

unos 50 minutos, alcanzando los máximos valores (737º C), y descendió

progresivamente hasta el final de la combustión. Hay que decir que la termocúpula T1

se movió a los 80 minutos de la combustión; es decir, en el momento que quedó

reflejada la temperatura máxima. Esto sucedió por movimientos de la madera durante la

combustión. Con relación a este hecho se observa que en (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-

A) la termocúpula T2, situada en el centro a 2 cm. de profundidad dentro del suelo,

comenzó a superar valores superiores a los 60 º C a partir de 1 h 20 ´ y a superar los

100 º C a partir de las dos horas, cuando las termocúpulas externas comenzaron a

indicar valores inferiores. Este hecho indicaría una combustión de la madera externa en

su totalidad tras 1 h 30´ y la formación de brasas que comenzarían a impactar sobre el

sedimento con mayor intensidad (Gráfico 62).

Gráfico 62. Temperaturas alcanzadas EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A. Duración controlada 3

horas. Combustible: 1 Kg. de brezo (Erica arborea) y 25 Kg. de Pino (Pinus halepensis)

En la (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B) las temperaturas máximas las alcanzaron

las termocúpulas T4 y T6, situadas en la superficie externa (izquierda y derecha) en

cada lado de la combustión, pero no superaron valores por encima de los 600º C en toda

0

100

200

300

400

500

600

700

800

Gra

dos

Tiempo en minutos

EXP- Can Sisó 3- A

TERMOCÚPULA 1 (exterior- centro superficie derecha)

TERMOCÚPULA 2 ( 2 cm profundidad centro)

TERMOCÚPULA 3 ( exterior- centro superficie izquierda)

Page 94: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

94

la combustión, excepto la T4, que lo hizo unos pocos minutos. La T6 alcanzó un valor

por encima de los 500º C en los primeros 10 minutos, manteniendo una temperatura

próxima a los 600º C unos 30 minutos y descendiendo progresivamente desde este

momento hasta el final de la combustión. Mientras que la T4 indicó progresivamente

valores altos en los primeros 10 minutos, hasta alcanzar a la 1h 20´ el valor máximo de

637º C en unos pocos minutos y descender progresivamente hasta estabilizarse a los

300º C, ya que volvió aumentar al final de la combustión alcanzando valores por encima

de los 400º C. En (EXP- Can Sisó 4- B) la termocúpula situada en el centro a 2 cm. de

profundidad dentro del suelo (T5), mantuvo valores bastante constantes en la

temperatura (40-50º C) hasta transcurridas las 2 h 30´, cuando la temperatura ascendió

hasta los 294º, coincidiendo con un aumento de la temperatura de la T4 al final de la

combustión y a continuación redujo su temperatura (Gráfico 63)

Gráfico 63. Temperaturas alcanzadas EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B. Duración controlada 3

horas. Combustible: 0,7 Kg. de brezo (Erica arborea) y 10 Kg. de pino (Pinus halepensis)

Pasadas las 3 horas, los dos fuegos continuaban con brasas y algunas maderas

que no habían quemado completamente, posiblemente por el estado de la madera ya que

esta tenía una cierta humedad. Las dos combustiones dejaron cenizas blancas y maderas

no quemadas completamente. Los perímetros entre las dos combustiones quedaron

separados unos 4 cm. de distancia y se podía observar la diferencia entre una y otra por

la cantidad de residuos generados por la combustión. El perímetro del hogar EXP-

Fuego 3- Can Sisó 3- A tenía un diámetro de unos 70 cm. de diámetro, mientras que

EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B, unos 50 cm. Fotografía 17

0100200300400500600700

Gra

dos

Tiempo en minutos

EXP- Can Sisó 4- B

TERMOCÚPULA 4 (exterior superficie derecha)

TERMOCÚPULA 5 ( 2cm profundidad centro)

TERMOCÚPULA 6 ( exterior superficie izquierda)

Page 95: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

95

Fotografía 17. Imagen de los restos de las dos combustiones una vez finalizada la

combustión, a la derecha de la imagen la (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A) y a la

izquierda de la imagen la (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4- B). Como referencia, la cinta

métrica con un metro de largo.

Una vez finalizadas las combustiones, se procedió a documentar el perímetro

de ambas combustiones con un levantamiento planimétrico acompañado de fotografías

desde los puntos de referencia principales (A-B), siguiendo la misma metodología

empleada en las anteriores combustiones pero en dirección (NO). Figura 14

Figura 14. Control 1 el día 15-3-07. Planta de los hogares EXP- Fuego 3 A y 4 B Can Sisó -07

tras la combustión.

III. 4.3.2 - Control 2 (30- 3- 07)

Page 96: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

96

Transcurridos unos 15 días, se realizó un nuevo control de los restos de la

combustión y se observó que las cenizas, tras este corto periodo de tiempo, habían

desaparecido completamente. Fotografía 18

Fotografía 18. Segundo control el día (30-3-07). Imagen de los restos de combustión

tras 15 días de abandono. Las cenizas han desaparecido completamente y se observan

rubefacciones al descubierto en determinadas partes de los dos hogares.

Al desaparecer las cenizas en los dos hogares, quedaron al descubierto

los impactos térmicos en la superficie: una mancha de color negro oscuro (PANTONE

438 C), delimitada por una morfología circular, y rubefacciones de color anaranjado

(PANTONE 716 C) intenso en determinadas partes de los dos hogares. Se podía

observar que algunos troncos de madera no se habían quemado completamente y no se

habían desplazado de su lugar. En referencia a la dispersión, los carbones desplazados

tenían una orientación (NO-SE) y se encontraban próximos a los dos hogares, algunos

con un tamaño aproximado de 5-6 cm. Para obtener nuevamente los perímetros de los

dos hogares se realizó un levantamiento planimétrico desde los puntos de referencia

principales (A-B) acompañado de fotografías.

III. 4.3.3 - Control 3 (13-5-07)

En el mes de mayo se realizó el tercer control de los restos de las dos

combustiones (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4- B), tras

prácticamente dos meses y medio de abandono y, al igual que en las anteriores

experimentaciones, se procedió en este control a realizar una cuadrícula que delimitara

Page 97: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

97

una área de estudio y me permitiera documentar la topografía del terreno. En este

control se constató una alteración de los restos de (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B), ya

que el terreno circundante fue cultivado y hubo un desplazamiento de tierras que lo

cubrieron prácticamente, presentando carbones mezclados con la tierra. Mientras que en

(EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A) no se observó ninguna alteración por esta circunstancia

ajena a la experimentación, esto dificultaba el análisis especialmente del hogar alterado.

Ante esta circunstancia, se consideró que era necesario seguir con las observaciones y

tenerlo en cuenta a la hora de interpretar los diversos fenómenos postdeposicionales.

Fotografía 19

Fotografía 19. Tercer control el día (13-5-07). Alteración sufrida por los restos de la

combustión de (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4- B)

En determinadas partes de la superficie habían crecido herbáceas

(Dicotiledóneas- Monocotiledóneas), sobre todo en dirección (NO-N-NE-E), y una parte

de ellas cubría parcialmente los restos de (EXP- Can Sisó 3-A, especialmente en

dirección (E). La vegetación se extendía de manera heterogénea, distinguiéndose zonas

con mayor o menor densidad de herbáceas y en determinados lugares su ausencia. La

dispersión de carbones que se observó cerca del hogar EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-2007

tenía cierta orientación (N-NE-SE), aunque la presencia de herbáceas en estas zonas

dificultaba tener criterios de reconocimiento más claros. Desde los puntos de referencia

principales (A-B) se procedió a crear una cuadricula de 3 x 3 metros, que fue numerada

como queda reflejado en la figura 14. Como referencia para realizar la topografía del

terreno donde se ubicaba el hogar, se obtuvieron las cotas desde un punto “0” relativo

Page 98: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

98

con un nivel de agua que se construyó para tal fin. Posicionándolo posteriormente en

todas las intersecciones de cada cuadro, se fueron anotando las cotas Z del terreno en un

papel milimetrado para el posterior tratamiento de las tres dimensiones arqueológicas

(x, y, z) en un dibujo a escala 1/20. Esta primera imagen topográfica del terreno se trató

en un programa de Autocad para poder obtener una imagen en tres dimensiones. Figura

15

Figura 15. Imagen topográfica del terreno de Can Sisó 2 (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A y EXP-

Fuego 4- Can Sisó 4- B) una vez obtenidas las cotas. Pendiente del 17 % en dirección SE.

Posteriormente, se calcularon la pendiente del terreno y la tangente de la

superficie. El cálculo que se realizó indicaba una pendiente del 17 % en dirección (SE).

(Figura 15). La perturbación provocada en (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B) alteró las

relaciones micro-espaciales originales de los restos de la combustión y provocó una

dispersión de carbones en superficie. La dispersión de carbones que se distinguía en los

cuadros F4 y G4 estaba orientada en dirección S-SE y algunas maderas que no

quemaron completamente se desplazaron de su posición original en dirección SE y

parecía estar relacionada con la alteración anteriormente descrita. Mientras que el hogar

EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A se encontraba intacto y con algunos carbones desplazados

por la superficie próxima en dirección SE, donde no había prácticamente cubierta

vegetal. En este momento, las rubefacciones que en el anterior control se distinguían

perfectamente ahora resultaban difíciles de apreciar, ya que los restos de combustión de

(EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A) estaban cubiertos parcialmente por herbáceas, pero se

observó que las tonalidades del color eran más claras y no tan intensas (PANTONE 713

C). En el resto de cuadros no se podía ver una dispersión clara, ya que las herbáceas

habían cubierto parcialmente la superficie.

III. 4.3.4 - Control 4 (13-7-2007)

Page 99: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

99

En el mes de julio se llevó a cabo un nuevo control de los restos de las dos

combustiones, tras cuatro meses de abandono. La observación indicaba que los restos

habían sufrido diversas alteraciones postdeposicionales, ya que las maderas que no se

quemaron totalmente durante el proceso de combustión se desplazaron y se podía

observar una dispersión de carbones en diversas direcciones. En este momento, las

herbáceas tienen una distribución heterogénea en el área de estudio y presentaban un

estado más seco, dada la estación climática en la que nos encontrábamos. En este

sentido, se distinguían zonas con mayor o menor densidad de herbáceas que se

distribuían por la superficie de forma desigual y diferente al anterior control realizado.

Los restos de la combustión de (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A), que en el anterior

control parecían estabilizados, habían sufrido diversas alteraciones. El hogar estaba

cubierto parcialmente por herbáceas y una parte de los troncos de madera que no

quemaron completamente y estaban situados encima del hogar se desplazaron de su

posición en dirección SO, hacia donde se encontraban los restos del hogar (EXP- Fuego

4- Can Sisó 4- B). Asimismo, los troncos que mantenían su posición estaban sufriendo

procesos de exfoliación y fracturación, provocando una pérdida de volumen de estas

maderas y la incorporación de carbones al sedimento por su exposición al aire libre. La

dispersión de carbones por la superficie estaba orientada en diversas direcciones (S-SE-

E) y con una tendencia de desplazamiento horizontal en el sentido de la pendiente (SE).

Algunos carbones se encontraban a una distancia aproximada de 1,5 metros de los dos

hogares. Este hecho se podía constatar, ya que en esa dirección la cobertura vegetal era

débil y se podía apreciar estos carbones. Fotografía 20

Fotografía 20. Cuarto control el día (13-7-07). Imagen general de los dos hogares tras

cuatro meses de abandono.

Page 100: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

100

Los restos de combustión de (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B) habían sido

cubiertos parcialmente por herbáceas y su estado general continúa siendo el mismo que

en el anterior control, aunque se observó una mayor cantidad de carbones en superficie

y una dispersión de carbones desde su ubicación en dirección SE. Al igual que en

anteriores controles, se procedió a documentar la modificación del perímetro del hogar

desde los puntos de referencia principales (A-B) con un levantamiento planimetrico

acompañado de fotografías. Figura 16

Figura 16. Control 4 el día 13-7-07. Planta de los hogares EXP- Fuego 3 A y 4 B Can Sisó -07

III. 4.3.5 - Control 5 (21-11-2007)

El nuevo control que se realizó en noviembre constató que los restos de las dos

combustiones estaban cubiertos por herbáceas en su totalidad y era difícil distinguir

cualquier proceso postdeposicional. En las zonas de los restos de las dos combustiones

se podía observar carbones a nivel superficial, pero no la orientación de dispersión. Los

lugares con una densidad baja de herbáceas, donde se podían distinguir los restos de las

combustiones, correspondían a las dos zonas donde se encontraban los dos hogares. Es

decir, alrededor habían crecido las herbáceas y estabilizado los restos de la combustión

en su parte central, sobre todo en (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A), mientras que en

(EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B) mantenía superficialmente los restos de carbones,

aunque cubiertos en su totalidad por las herbáceas. Herbáceas que en general habían

crecido bastante en relación al último control, superando los 20 cm. de altura

prácticamente en toda la superficie. Fotografía 21

Page 101: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

101

Fotografía 21. Quinto control el día (21-11-07). Estado de los dos hogares tras ocho

meses de abandono. En primer término se distinguen los restos de (EXP- Fuego 3- Can

Siso 3-A). Se puede observar cómo las herbáceas han cubierto parcialmente los restos

de las dos combustiones.

III. 4.3.6 - Control 6 (24-2-2008)

En el mes de febrero de 2008 se realizó el último control de los dos hogares y

se dio por finalizada la experimentación, tras prácticamente un año de abandono de los

restos de las dos combustiones. Asimismo, se puso en práctica la recogida de muestras

para llevar a cabo el estudio sobre la dispersión de carbones. En este momento, los

hogares habían sido cubiertos en su totalidad por herbáceas que se extendían por todo el

área de estudio y era imposible distinguir cualquier alteración postdeposicional en

superficie. Fotografía 22

Fotografía 22. Sexto control el día (24-2-08). Estado de los dos hogares tras un año de

abandono. Las herbáceas han cubierto totalmente los restos de las dos combustiones.

Page 102: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

102

Los restos conservados hasta el momento de la combustión de (Exp- Fuego 3 -

Can Sisó 3- A) se encontraban estabilizados, ya que las herbáceas los cubrían en su

totalidad y se encontraban en un estado más seco que en el anterior control. Algunas

maderas se podían distinguir pero no en su totalidad. Se observó que algunos restos de

combustión se encontraban a cierta distancia (2,5 m) de los dos hogares en dirección

(SE). Las herbáceas se habían extendido de forma homogénea por toda la superficie, lo

que imposibilitaba diferenciar una dispersión clara en la zona de estudio. Los restos de

la combustión de (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B) también fueron cubiertos

prácticamente por herbáceas, pero en los cuadros (F4- F5) en dirección (SO-O-S) la

superficie estaba cubierta de forma menos intensa, incluso con ausencia de las mismas.

Este hecho permitía distinguir ciertos carbones en superficie, así como el

desplazamiento de una de las maderas que no quemó completamente en dirección S.

III. 4.3.7 - Recogida de muestras (24/2/2008)

La recogida de muestras se puso en práctica utilizando la misma metodología

que en las anteriores experimentaciones, pero ahora para tratar la cuestión espacial en la

distribución de los carbones y de forma conjunta se realizaron dos rosas de viento desde

los centros de los dos hogares abarcando la totalidad de la superficie de la cuadrícula de

(3 x 3 m). Fue necesario para ello hallar los centros de los dos hogares desde los puntos

(A-B) de referencia principales y crear una línea horizontal que coincidía con los dos

centros, y otras dos verticales desde cada centro de cada uno de los hogares. De esta

manera, se dividió el espacio de cada hogar en cuatro partes de 90º cada una. Una vez

realizado este proceso, se creó un cuadro de (1 x 1 m.) desde el centro de cada hogar,

que sirviera para dividir estas cuatro partes en ocho partes de 45º cada una, creando

cuatro líneas desde los centros hacia los cuatro vértices de cada cuadro.

Cada “rosa de vientos” tenía ocho líneas principales que partían desde el

centro de cada hogar cubriendo toda el área de estudio de 3 x 3 m. para realizar el

muestreo de la superficie. A cada línea que partía del centro de cada hogar “punto 0” se

le asignó una letra correlativa partiendo desde la línea “A” y a continuación las líneas

(B, C, D, E, F, G, H), siguiendo la dirección de las manecillas de un reloj. Las líneas (B

y B´) coincidían en su orientación con el norte magnético y, por tanto, serían las

referencias principales a la hora de tratar la dispersión de los carbones. Cada línea fue

numerada partiendo del “0”; es decir, desde el centro de cada hogar de forma correlativa

Page 103: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

103

en toda su extensión, y en los puntos donde se extraerían las muestras (0, A1, A2, A3,

A4, A5, 0, B1, B2, B3, B4, B5, etc.). Para diferenciar la numeración de cada “rosa de

vientos” en cada hogar se optó por adscribir a (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A) la anterior

numeración y a (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B) diferenciarla (0´, A1´, A2´, A3´, A4´, 0´,

B1´, B2´, B3´, B4´, B5´, etc.). En las líneas (C´ y G) se realizaría el muestreo de forma

conjunta ya que coincidían en la misma línea de referencia utilizando los datos de las

muestras extraídas en la línea “G” de (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A), pero de forma

inversa para “C´” de (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B)

Figura 17. Imagen de las “rosas de vientos” y la numeración seguida para extraer las muestras.

Una vez realizada las rosas de viento en la superficie, se procedió a extraer las

muestras de cada punto de la línea a una distancia de 30 cm. desde los puntos “0” y “0´”

hacia el exterior abarcando todo el espacio de la cuadrícula. Para extraer las muestras en

cada punto se utilizó un “tubo de metal” (de un diámetro de 40 mm. x 160 mm. de

largo) que fue introducido en el sedimento picando con un martillo de goma dura. En

total se extrajeron 96 muestras para su posterior análisis contando las que se extrajeron

al final del proceso situadas a 15 cm. (punto 0,5 de las líneas de referencia) desde los

puntos “0” y “0´”

III. 4.3.8 - Datos y análisis de las muestras de EXP- Fuego 3- Can Sisó ·3-A y

EXP- Fuego 4- Can Sisó 4- B

En este apartado se analizan un total de 96 muestras de sedimentos con un

volumen total en cada una de las muestras de (200 ml) y la relación existente entre

las variables del peso de los carbones de cada fracción, volumen total de carbones y

Page 104: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

104

número de fragmentos de los carbones de dichas muestras con el objetivo de ver su

representación espacial, como anteriormente se ha especificado. El número de

carbones recuperados y contabilizados en las muestras de los dos hogares fue de

4315 carbones (fracciones > 4 > 2 > 1). En el hogar (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A)

se recuperaron un total de 2569 carbones y en (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B), un

total de 1746 carbones (Anexo I). Los siguientes gráficos muestran los resultados del

recuento de las variables (número de fragmentos, peso de cada fracción y volumen

total de carbones) y la frecuencia de la distribución en las líneas de referencia

principales de las “rosas de vientos” que se crearon para determinar la dispersión de

los carbones en la (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3- A) y en (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-

B).

III. 4.3.8.1- EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A

Gráfico 64. Número de carbones línea A en Gráfico 65. Número de carbones línea B en

dirección Nordoeste. dirección Norte.

0102030405060708090

100

A 0,5 A1 A2 A3 A4 A5

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea A- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea B- Norte

fracciones > 4

fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 105: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

105

Gráfico 66. Número de carbones línea C en Gráfico 67. Número de carbones línea D en

dirección Nordeste. dirección Este.

Gráfico 68. Número de carbones línea E en Gráfico 69. Número de carbones línea F en

dirección Sudeste. dirección Sur.

Gráfico 70. Número de carbones línea G en Gráfico 71. Número de carbones línea H en

dirección Sudoeste. dirección Oeste.

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5 E6

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea E- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

G 0,5 G 1 G 2 G 3

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea G- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0102030405060708090

100

H 0,5

H 1 H 2 H 3 H 4 H 5

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea H- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Número carbones línea F- Sur

Fracciones > 4

fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

100

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4

Núm

ero

carb

ones

fracciones carbones

Línea C- Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

100

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones

Línea D- Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 106: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

106

Gráfico 72. Número de carbones punto 0.

El número de carbones en las líneas de referencia principales orientadas a los

puntos cardinales indican una clara tendencia de concentración de carbones de las tres

fracciones analizadas en la zona más próxima al centro del hogar (muestras 0,5),

excepto en la línea de orientación D en dirección Este, que presenta una frecuencia baja

y una frecuencia relativa de las tres fracciones de carbones, sobre todo en las líneas de

orientación;

- Línea A dirección Nordoeste. - Línea C dirección Nordeste.

- Línea B dirección Norte. - Línea D dirección Este.

- Línea G dirección Suroeste.

En general, podemos observar cómo las tres fracciones de carbones se

encuentran distribuidas en todas las direcciones, con un cierto dominio de las fracciones

(> 2 > 1) y cómo en determinadas orientaciones las frecuencias aumentan de forma

significativa en determinados puntos por el número de carbones, especialmente de las

líneas de orientación D, en dirección Este, y en la línea G, en dirección Suroeste. Las

gráficas de dispersión nos permiten distinguir dos tendencias; una caracterizada por

valores altos en el número de carbones, sobre todo en los puntos más cercanos al centro

del hogar; y una tendencia de dispersión en determinadas direcciones por el aumento

del número de carbones alejados del punto central del hogar.

Las muestras que proporcionaron un mayor número de carbones son las más

próximas al punto “0”; es decir, los puntos de referencia (A 0,5), (B 0,5), (C 0,5), (E

0,5), (F 0,5), (G 0,5), (H 0,5) situados a 15 cm. del centro del hogar, donde domina la

(fracción > 1), al igual que en el centro del hogar (punto 0), seguida de la (fracción >4),

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

100

Fracciones 4 Fracciones 2 Fracciones 1

Núm

ero

de c

arbo

nes

Punto 0

Fracciones 4

Fracciones 2

Fracciones 1

Page 107: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

107

excepto en (D 0,5), que tiene una frecuencia de carbones menor en la dirección Este. A

continuación, los puntos de las muestras (A1, B1, C1, D1, F1, G1, H1) situadas a 30

cm. del centro del hogar presentan una frecuencia absoluta que varía entre los mismos

puntos, pero que en términos generales está por debajo de las muestras anteriores, ya

que hay un número de carbones inferior. Los puntos de las líneas C3 y D3 parecen

coincidir por el aumento del número de carbones en esta posición en dirección (NE-E).

A partir de las muestras situadas a 30 cm. del hogar, hay una presencia de carbones

desigual, aunque con la presencia de las tres fracciones, donde domina la fracción > 2

>1, sobre todo en dirección (NO-N-E-SO-O). La fracción >4 presenta una frecuencia

menor hacia las partes más externas del hogar, pero en determinadas orientaciones

presenta un mayor número de carbones en las direcciones (SO-O-NO-N-E). En términos

generales, se observa una dispersión que abarcaría desde el SO al N y en dirección E. La

presencia de las tres fracciones en los puntos más externos del punto central del hogar

es significativa, dado el desplazamiento por transporte que han sufrido los carbones por

fuerzas de arrastre. Especialmente de la fracción > 4, que se encuentra representada en

las zonas más externas de las líneas de orientación.

Los siguientes gráficos corresponden al peso de las tres fracciones de

carbones en las líneas de orientación a los puntos cardinales y la frecuencia relativa en

cada una de ellas. Si la correlación es fuerte, permitirá considerar que la variable peso

depende en gran medida del número de fragmentos en cada punto de las muestras como

indicador de orientación.

Gráfico 73. Peso de carbones línea A en Gráfico 74. Peso de carbones línea B en

dirección Nordooeste. dirección Norte.

02468

101214161820

A 0,5

A1 A2 A3 A4 A5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea A- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Peso carbones línea B- Norte

0

5

10

15

20

B0,5

B 1 B 2 B 3 B 4 B 5

M uest ras

Fracciones > 4Fracciones > 2Fracciones > 1

Page 108: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

108

Gráfico 75. Peso de carbones línea C en Gráfico 76. Peso de carbones línea D en

dirección Nordeste. dirección Este.

Gráfico 77. Peso de carbones línea E en Gráfico 78. Peso de carbones línea F en

dirección Sudeste. dirección Sur.

Gráfico 79. Peso de carbones línea G en Gráfico 80. Peso de carbones línea H en dirección Sudoeste. dirección Oeste.

0

2

4

6

8

10

12

14

16

18

20

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea C- Nordeste

Fracciones > 4

fracciones > 2

Fracciones > 1

02468

101214161820

D 0,5

D 1 D 2 D3 D 4 D 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea D- Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

02468

101214161820

H 0,5

H 1 H 2 H 3 H 4 H 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea H- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

02468

101214161820

E 0,5

E 1 E 2 E 3 E 4 E 5 E6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso de carbones línea E- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

02468

101214161820

F 0,5F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea F- Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

02468

101214161820

G 0,5 G 1 G 2 G 3

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea G- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 109: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

109

Gráfico 81. Peso de carbones en punto 0

El análisis de los datos del peso en gramos de las fracciones de los

carbones muestra cómo el mayor peso absoluto se encuentra hacia el centro del hogar en

los puntos (C 0,5), (D 0,5), (E 0,5), (F 0,5), (G 0,5), (H 0,5), de forma general, en todas

las líneas de orientación especialmente de la (fracción > 4), excepto en (A 0,5) y (B

0,5). Estas muestras están representadas por las tres (fracciones > 4, > 2, > 1), aunque

destaca principalmente la fracción > 4 que, por su peso absoluto, resulta más

significativa (C 0,5 supera los 18 gramos) que las (fracciones > 2 > 1), que lo hacen de

forma muy débil por su peso. En las muestras (A1, B1, D1, F1, G1, H1) se observa una

disminución del peso de los carbones hacia el exterior de forma general, excepto en (C1

y E1), donde los valores son poco significativos con relación al peso.

Asimismo, hay una tendencia de mayor representación de la fracción > 4 en

determinadas direcciones en las líneas de orientación y menor de las otras dos

fracciones (>2 >1) que, aunque se encuentran representadas prácticamente en todas las

direcciones, por su peso absoluto no resultan significativas. En los diferentes gráficos

podemos observar que la fracción > 4 se encuentra representada en las zonas más

externas al centro del hogar y que las fracciones > 2 >1 lo hacen de forma poco

significativa.

En los diferentes gráficos se puede apreciar una dispersión efectiva en

determinadas direcciones, especialmente de la fracción > 4, que presenta un mayor peso

hacia las zonas externas del hogar en dirección (NO-N-NE-SO). Asimismo, las líneas de

orientación (D-F) presentan cierta tendencia de desplazamiento de carbones de la

fracción > 4 en dirección (E-S). En términos generales, se observa que la fracción > 4

abarca desde el NO al E y desde el SO al S.

02468

101214161820

Fracciones 4 fracciones 2 fracciones 1

Peso

en

gram

os

0

Fracciones 4

fracciones 2

fracciones 1

Page 110: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

110

Los siguientes gráficos muestran el volumen (ml) total de los

carbones en cada punto de referencia de las líneas principales de la “Rosa de vientos”

que están orientadas a los puntos cardinales. Esta variable está relacionada con el

número de fragmentos de carbones identificados en cada muestra extraída y, por tanto,

puede ser un indicador de la distribución espacial en este estudio. De esta manera, se

puede observar el comportamiento de esta variable con relación al volumen de carbones

desplazados a través de la frecuencia relativa de las tres fracciones y su volumen total

(Anexo I).

Gráfico 82. Volumen de carbones línea A en Gráfico 83. Volumen de carbones línea B en

dirección Nordoeste. en dirección Norte.

Gráfico 84. Volumen de carbones línea C en Gráfico 85. Volumen de carbones línea D en

dirección Nordeste. dirección Este.

01020304050607080

A 0,5 A1 A2 A3 A4 A5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea A- Nordoeste

Volumen …

0

10

20

30

40

50

60

70

80

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea B- Norte

Volumen carbones

0

10

20

30

40

50

60

70

80

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones líena C- Nordeste

Volumen carbones

0

10

20

30

40

50

60

70

80

D 0,5

D 1 D 2 D 3 D 4 D 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea D- Este

Volumen …

Page 111: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

111

Gráfico 86. Volumen de carbones línea E en Gráfico 87. Volumen de carbones línea F en

dirección Sudeste. dirección Sur.

Gráfico 88. Volumen de carbones línea G Gráfico 89. Volumen de carbones línea H

en dirección Sudoeste. en dirección Oeste.

Gráfico 90. Volumen en punto 0

El análisis del volumen total de los carbones recuperados en las muestras

en las líneas de referencia principales orientadas a los puntos cardinales señala un

010

2030

4050

6070

80

E 0,5

E 1 E 2 E 3 E 4 E 5 E6

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea E- Sudeste

Volumen …

01020304050607080

G 0,5 G 1 G 2 G 3

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea G- Sudoeste

Volumen …

01020304050607080

H 0,5

H 1 H 2 H 3 H 4 H 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea H- Oeste

Volumen …

010

2030

4050

6070

80

F 0,5

F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea F- Sur

Volumen …

Volum en carbones punto 0

0

5

10

15

20

25

30

1

Muestra

Volu

men

(ml)

1

Page 112: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

112

volumen mayor hacia el centro del hogar de forma clara en las muestras (A 0,5), (B

0,5), (C 0,5), (D 0,5), (E 0,5), (F 0,5), (G 0,5), (H 0,5) situados a 15 cm. del centro del

hogar y, a continuación, en los puntos ( A1, B1, D1, E1, F1, G1, H1), situados a 30 cm.

del centro del hogar, excepto en (C1) en el que el volumen es poco significativo. A

partir de estos puntos hay un paulatino descenso del volumen de carbones en términos

generales y un aumento en los puntos más externos de las líneas de orientación en

determinadas direcciones a una distancia aproximada de 1, 5 metros del centro del

hogar. Se puede observar que en los diferentes gráficos hay una tendencia general de

distribución hacia las zonas más externas del centro del hogar en todas las direcciones,

pero en algunas direcciones el volumen total en determinados puntos resulta más

representativo. Las líneas de orientación con una tendencia mayor de volumen hacia el

exterior del hogar son;

- Línea A en dirección Nordoeste. - Línea D en dirección Este.

- Línea B en dirección Norte. - Línea E en dirección Sudeste.

- Línea C en dirección Nordeste. - Línea G en dirección Sudoeste.

La línea A en dirección Nordoeste presenta un volumen de 12 ml. en el punto

más alejado del centro del hogar (A5), destacando por encima del resto de puntos

externos en las líneas de orientación a los puntos cardinales. Aunque este hecho no es

indicativo, ya que hay que tener en cuenta todo el conjunto, resulta significativo por el

volumen de carbones alejados del hogar. Los gráficos de dispersión de las líneas de

orientación a los puntos cardinales nos permiten detectar que las muestras extraídas

hacia la zona central del hogar se caracterizan porque en general son las que han

proporcionado mayor volumen total de carbones. Las zonas periféricas con un volumen

inferior, pero representativa, indican que se ha producido un desplazamiento por fuerzas

de arrastre o transporte desde la ubicación del hogar hacia el exterior (Anexo I). De

forma general, se observa un desplazamiento de carbones que abarca las siguientes

direcciones:

- Desde el NO al SE. - Dirección SO.

III. 4.3.8.2- EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B

Page 113: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

113

Gráfico 91. Número de carbones línea A’ en Gráfico 92. Número de carbones línea B´ dirección Nordoeste. dirección Norte.

Gráfico 93. Número de carbones línea C´ en Gráfico 94. Número de carbones línea D´ en

dirección Nordeste. dirección Este.

Gráfico 95. Número de carbones línea E´ en Gráfico 96. Número de carbones línea F´ en

dirección Sudeste. dirección Sur.

0

10

20

30

40

50

60

70

80

D 0,5´

D 1´ D 2´ D 3´ D 4´ D 5´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea D´- Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

E 0,5´E 1´ E 2´ E 3´ E 4´ E 5´ E 6´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea E´- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

F 0,5´ F 1´ F 2´ F 3´ F 4´ F 5´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea F´- Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

C 0,5´ C 1´ C 2´ C 3´ C 4´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Número carbones línea C´- Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

A 0,5´ A 1´ A 2´ A 3´ A 4´ A 5´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea A´- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

B 0,5´ B 1´ B 2´ B 3´ B 4´ B 5´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Número carbones línea B´- Norte

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 114: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

114

Gráfico 97. Número de carbones línea G´ Gráfico 98. Número de carbones línea H´ en

en dirección Sudoeste. dirección oeste.

Gráfico 99. Número de carbones punto 0´

En general podemos ver que los diferentes gráficos muestran distintos patrones de

dispersión, con la presencia de las tres fracciones > 4 >2 >1 hacia el centro del hogar.

De forma general, las muestras más cercanas al centro del hogar se caracterizan por un

mayor número de efectivos de la fracción > 1 en los puntos (C´ 0,5), (D´ 0,5), (E´ 0,5),

(F´ 0,5) situados a 15 cm. del centro del hogar, tal como sucede en el punto (0´), aunque

las tres fracciones se encuentran presentes. A continuación, las muestras situadas a 30

cm. del centro del hogar (A´1, D´1, F´1, G´1,) están representadas por las tres fracciones

donde predomina la fracción > 1, excepto en (H´1) en la que la fracción > 1 es inferior.

Los puntos (B´1, C´1, E´1) presentan un número de carbones inferior o la ausencia de

determinadas fracciones, como en (C´1), donde no hay representación de la fracción >

1. Se puede observar cómo en determinados puntos de estas muestras hay un mayor

número de carbones que en las muestras situadas a 15 cm.), del centro del hogar, como

ocurre en (A´1, D´1, H´1)

0

10

20

30

40

50

60

70

80

H 0,5´H 1´ H 2´ H 3´ H 4´ H 5´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea H´- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

G 0,5´ G 1´ G 2´ G 3´ G 4´

Núm

ero

carb

ones

Fracciones (mm)

Número carbones línea G´- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

80

Volumen (ml)

Page 115: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

115

Asimismo, se aprecia una tendencia de dispersión hacia las zonas externas de

las fracciones >1 y >2, ya que en determinadas direcciones hay un mayor número de

carbones de este tamaño. Los carbones de la fracción >4 se encuentran representados

prácticamente en todas las líneas de orientación a los puntos cardinales, pero en

determinadas líneas está representada de forma débil o nula hacia las puntos más

externos de las líneas (D´, F´, H´). Los puntos de las muestras (A´5 y B´5) en dirección

(NO-N) presentan una frecuencia similar, al igual que (B´2 y C´2) en dirección (N- NE),

y que (D´ 3 y E´ 3) en dirección (E-SE). Las líneas de orientación que presentan una

mayor tendencia de dispersión de carbones son las:

- Línea A´ dirección Nordoeste. - Línea C´ dirección Nordeste.

- Línea B´ dirección Norte. - Línea E´ dirección Sureste.

- Línea G´ dirección Sudoeste.

La presencia de carbones de la fracción > 4 alejados del punto central resulta

significativa, tal como sucede en los puntos de las líneas de orientación (A´5, B´5, C´4,

E´6, G´4), indicativos de que se han producido fuerzas de arrastre que han dispersado

los carbones de mayor tamaño hacia las zonas más externas. En general, podemos decir

que se ha producido una dispersión desde el centro del hogar hacia las zonas externas,

con el dominio de las fracciones > 2 > 1 y que en determinadas direcciones han existido

fuerzas de arrastre de más intensidad que han provocado el movimiento de las

fracciones > 4 hacia las zonas externas. Los siguientes gráficos corresponden al peso de

las tres fracciones en las líneas de orientación a los puntos cardinales y la frecuencia

relativa en cada una de ellas.

Page 116: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

116

Gráfico 100. Peso de carbones línea A´ Gráfico 101. Peso de carbones línea B´

en dirección Nordoeste. en dirección Norte.

Gráfico 102. Peso de carbones línea C´ en Gráfico 103. Peso de carbones línea D´ en

dirección Nordeste. dirección Este.

Gráfico 104. Peso de carbones línea E´ en Gráfico 105. Peso de carbones línea F´ en

dirección Sudeste. dirección Sur.

0

1

2

3

4

5

6

7

A 0,5´A 1´ A 2´ A 3´ A 4´ A 5´

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea A´- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

8

C 0,5´ C 1´ C 2´ C 3´ C 4´

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea C´- Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

D 0,5´

D 1´ D 2´ D 3´ D 4´ D 5´

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea D´-Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Peso carbones línea B´- Norte

0

1

2

3

4

5

6

7

B 0,5´ B 1´ B 2´ B 3´ B 4´ B 5´

Fracciones (mm)

Peso

en

gram

os

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

E 0,5´

E 1´E 2´E 3´E 4´E 5´E 6´

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea E´- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

F 0,5´F 1´ F 2´ F 3´ F 4´ F 5´

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea F´- Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 117: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

117

Gráfico 106. Peso de carbones línea G´ en Gráfico 107. Peso de carbones línea H´ en dirección

dirección Sudoeste. Oeste.

Gráfico 108. Peso carbones punto 0´

El análisis de los datos del peso en gramos de las fracciones de los carbones

muestra cómo el mayor peso absoluto se sitúa hacia el centro del hogar de forma

general en todas las líneas de orientación y prácticamente está representado por las tres

fracciones > 4, > 2, > 1, aunque destaca principalmente la fracción > 4 por su peso

absoluto en comparación con las otras dos fracciones. Los gráficos del peso de carbones

indican que la fracción más representativa es la > 4 de forma general, por su peso

efectivo, mientras que las fracciones > 2 > 1 se encuentran representadas prácticamente

en todas las líneas de orientación, pero no resultan representativas en cuanto a su peso,

aunque en determinados puntos aparecen representadas y son indicativas de cierta

dispersión. Se puede observar que los puntos más representativos por su peso se

encuentran situados a 15 cm. del centro del hogar (A´05), (B´0,5), (C´0,5), (D, 0,5),

(F´0,5), (G´0,5), (H´0,5) y que las muestras (D´1, F´1, G´1, H´1) situadas a 30 cm.

0

1

2

3

4

5

6

7

H 0,5´ H 1´ H 2´ H 3´ H 4´ H 5

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea H´- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

1

2

3

4

5

6

7

8

Fracciones 4 Fracciones 2 Fracciones 1

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones punto 0´

Fracciones 4

Fracciones 2

Fracciones 1

0

1

2

3

4

5

6

7

G 0,5´ G 1´ G 2´ G 3´ G 4´

Peso

en

gram

os

Muestras

Peso carbones línea G´- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 118: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

118

presentan un peso relativo mayor de la fracción > 4 que las más cercanas al centro del

hogar, mientras que las muestras (A´1, B´1, C´1, E´1) tienen un peso poco

representativo. Los carbones de las fracciones > 2 >1 resultan poco representativas por

su peso en estos puntos más cercanos al centro del hogar, excepto en (B´0,5), (E´0,5),

(F´0,5) que alcanzan un cierto peso. Los puntos (B´2 y C´2) presentan un peso similar

en dirección (N-NE). Podemos decir que líneas de referencia principales con una

dispersión hacia las zonas más externas, sobre todo por el peso de la fracción > 4, por

ser la más representativa, son las siguientes:

- Línea A´ dirección Nordoeste. - Línea E´ dirección Sureste.

- Línea B´ dirección Norte. - Línea F´ dirección Sur.

- Línea C´ dirección Nordeste. - Línea G´ dirección Sudoeste.

- Línea H´ dirección Oeste.

Vemos que prácticamente todas las líneas de orientación presentan la fracción

> 4 hacia las zonas externas, excepto (D´). Podemos concluir en este apartado que hay

una tendencia de dispersión hacia las zonas más externas en varias orientaciones,

caracterizada por el mayor peso relativo de la fracción > 4 en dirección;

- Nordoeste-Nordeste. - Sur-Sudeste. –Sudoeste.

Los siguientes gráficos muestran el volumen total (ml.) de los carbones en

cada punto de referencia de las líneas principales de la “Rosa de vientos” orientada a los

puntos cardinales. Esta variable está relacionada con el volumen total de carbones

identificados (fracciones > 4 > 2 >1) de cada muestra extraída, por tanto nos permitirá

tener una visión general de la dispersión del conjunto de carbones y de la distribución

espacial. El objetivo es ver la representación diferencial en los puntos de referencia,

teniendo en cuenta la frecuencia absoluta de los carbones. El análisis del volumen total

de los carbones recuperados en las muestras en las líneas de referencia principales

orientadas a los puntos cardinales señalan un volumen mayor hacia el centro del hogar

de forma clara en los puntos (A´ 0,5), (B´ 0,5), (C´ 0,5), (D´ 0,5), (E´ 0,5), (F´ 0,5), (G´

0,5), (H´ 0,5) situados a (15 cm.) del centro del hogar y a continuación en los puntos

(D´1, E´1, F´1, G´1, H´1), situados a 30 cm., excepto en (A´1- B´1- C´1), en el que el

volumen es poco significativo. A partir de estos puntos hay un paulatino descenso del

volumen de carbones en términos generales y un aumento en los puntos más externos de

las líneas de orientación en determinadas direcciones a una distancia aproximada de 1, 5

metros del centro del hogar.

Page 119: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

119

Gráfico 109. Volumen de carbones línea A´ en Gráfico 110. Volumen de carbones línea B´ en

dirección Nordoeste. dirección Norte.

Gráfico 111. Volumen de carbones línea C´ en Gráfico 112. Volumen de carbones línea D´ en

dirección Nordeste. dirección Este.

Gráfico 113. Volumen de carbones línea E´ en Gráfico 114. Volumen de carbones línea F´ en

dirección Sudeste. dirección Sur.

0

5

10

15

20

25

30

35

D 0,5´

D 1´D 2´ D 3´D 4´D 5´

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea D´- Este

Volumen …

0

5

10

15

20

25

30

35

E 0,5´

E 1´

E 2´

E 3´

E 4´

E 5´

E 6´

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea E´- Sudeste

Volumen …

0

5

10

15

20

25

30

F 0,5´

F 1´ F 2´ F 3´ F 4´ F 5´

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea F´- Sur

Volumen …

0

5

10

15

20

25

30

35

C 0,5´ C 1´ C 2´ C 3´ C 4´

Volu

men

car

bone

s (m

l)

Muestras

Volumen carbones línea C´- Nordeste

Volumen …

0

5

10

15

20

25

30

35

A 0,5´

A 1´ A 2´ A 3´ A 4´ A 5´

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea A´- Nordoeste

Volumen …

0

5

10

15

20

25

30

35

B 0,5´

B 1´ B 2´ B 3´ B 4´ B 5´

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea B´- Norte

Volumen …

Page 120: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

120

Gráfico 115. Volumen de carbones línea G´ en Gráfico 116. Volumen de carbones línea H´ en

dirección Sudoeste. dirección Oeste.

Gráfico 117. Volumen en punto 0´

Se puede observar que hay una tendencia general de distribución hacia las

zonas más externas del centro del hogar en todas las direcciones, pero en algunas

direcciones el volumen total en determinados puntos resulta más representativo. Las

líneas de orientación con una tendencia mayor de volumen hacia el exterior del hogar

son;

- Línea A´ en dirección Nordoeste. - Línea E´ en dirección Sudeste.

- Línea B´ en dirección Norte. - Línea G´ en dirección Sudoeste.

- Línea C´ en dirección Sur.

Los gráficos de dispersión de las líneas de orientación a los puntos

cardinales nos permiten detectar que las muestras extraídas hacia la zona central del

hogar son las que han proporcionado más volumen total de carbones, excepto en la línea

de orientación (A´) en dirección Nordoeste, que presenta en el punto (A´3) un volumen

superior que el punto (A´0, 5), próximo al centro del hogar. Las zonas periféricas con un

0

5

10

15

20

25

30

35

H 0,5´

H 1´H 2´H 3´ H 4´ H 5

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen carbones línea H´- Oeste

Volumen …

0

5

10

15

20

25

30

35

Volumen (ml)

Volu

men

(ml)

Muestra

Volumen (ml)

0

5

10

15

20

25

30

G 0,5´ G 1´ G 2´ G 3´ G 4´

Volu

men

car

bone

s (m

l)

Muestras

Volumen de carbones

Page 121: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

121

volumen inferior, pero representativas, indican que se ha producido un desplazamiento

por fuerzas de arrastre o transporte desde la ubicación del hogar hacia el exterior

(Anexo I)

En el punto (0’) encontramos un volumen total de carbones de 30 ml. y hacia las zonas

más externas de las líneas de orientación los siguientes volúmenes de carbones:

- Punto A 5´- Línea A´ en dirección Nordoeste: 5 ml.

- Punto B 5´- Línea B´ en dirección Norte: 7 ml.

- Punto E 6´- Línea E´ en dirección Sudeste: 5 ml.

- Punto F 4´- Línea F´ en dirección Sur: 10 ml.

- Punto G 5´- Línea G´ en dirección Sudoeste: 5 ml.

Con estos datos podemos indicar que hay una tendencia de dispersión

por el volumen de carbones hacia las zonas más externas en las siguientes direcciones:

- Nordoeste-Norte. - Sur-Sudeste. – Sudoeste.

La distribución de los carbones según el volumen total que se pueden observar en

los distintos gráficos, es bastante similar a la que se ha observado en los gráficos

relacionados con el peso, produciéndose una relación positiva entre estas dos variables.

III. 4. 3. 9 – Variables climáticas (Pluviometría y viento)

Dado que las experimentaciones realizadas en la Masía de Can Sisó se

encuentran localizadas en el mismo lugar se han utilizado los mismos datos del gráfico

Nº 61. Asimismo, se pueden consultar las condiciones climáticas de la zona registradas

por la Estación Meteorológica de Tagamanent-Montseny en el Anexo I.

4. 3. 10 - Discusión de EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B III. 4. 3. 10. 1- El proceso de combustión.

En ambas combustiones para el encendido se utilizó madera de pino blanco

“Pinus halepensis” y madera de brezo “Erica arborea”. Estas dos maderas influyeron

en el rendimiento calorífico y se obtuvieron residuos de combustión formados por

carbones y cenizas. Los valores registrados (EXP-Fuego 3- Can Sisó 3-A) en las

termocúpulas situadas en superficie sobre el suelo (T1-T3) indican diferentes

evoluciones en cuanto a las temperaturas. Inicialmente, ambas registraron un aumento

en los primeros 20 minutos alcanzando temperaturas por encima de los 400º C. A partir

Page 122: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

122

de este momento, comenzarían a indicar valores distintos; mientras que la (T3) alcanzó

las máximas temperaturas (500º C) en los primeros 40 minutos; la termocúpula (T1)

comenzó a indicar valores por encima de los 600º C una vez pasados 40 minutos, y con

diversas fluctuaciones alcanzó la máxima temperatura tras 1 hora 20 minutos (737º C);

es decir, cuando la (T3) experimentaba un descenso de temperatura (ver gráfico Nº 62)

Estos diferentes comportamientos de ambas termocúpulas los atribuimos al

estado húmedo de la madera, ya que mientras la (T3) alcanzaba unos valores altos en los

primeros momentos, el estado húmedo de la madera retardó un aumento de las

temperaturas en la (T1). Los diversos movimientos de la madera contribuyeron a

provocar un aumento de las temperaturas aproximadamente tras 1 hora y 20 minutos en

ambas termocúpulas, pero con mayor intensidad en la (T1), que es la que alcanzó los

valores máximos. Desde este momento se produjo un descenso de los valores de forma

continuada hasta el final de la combustión.

La termocúpula situada a 2 cm. de profundidad dentro del suelo en el centro

del hogar registró un aumento paulatino de la temperatura, hecho que se relaciona con la

generación de las brasas del hogar que paulatinamente fueron incidiendo sobre el

sedimento y provocaron un aumento de la temperatura, alcanzando valores por encima

de los 100º C a partir de las dos horas de la combustión y coincidiendo con el descenso

de las temperaturas de las termocúpulas situadas en superficie una vez que las brasas se

fueron creando de forma definitiva en el hogar. Pensamos que el estado húmedo del

suelo retardó un ascenso de las temperaturas hasta que no se generaron las brasas de

forma definitiva.

En EXP- Fuego 4- Can Sisó 4 B, el proceso de combustión generó un modelo

de temperaturas muy similar al especificado anteriormente, aunque con algunas

diferencias. Las termocúpulas situadas en superficie (T4-T6) indicaron unos valores

altos en los primeros momentos de la combustión, pero con diferente comportamiento

de las temperaturas en ambas termocúpulas; mientras que la (T6) alcanzó los máximos

valores en los primeros 40 minutos (588º C), la termocúpula (T4) sufrió diversas

fluctuaciones y no alcanzó sus valores más altos hasta que transcurrieron 90 minutos

desde el inicio de la combustión. Las dos termocúpulas y en diferentes momentos

alcanzaron temperaturas próximas a los 600º C, la (T4) alcanzó 637º C unos pocos

minutos. Pensamos que no se alcanzaron unas temperaturas más altas debido

fundamentalmente a la cantidad total de madera utilizada (10 Kg.) que no permitió un

mayor rendimiento calorífico.

Page 123: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

123

La termocúpula (T6) tuvo un aumento de las temperaturas importante al inicio

de la combustión, que duró aproximadamente unos 40 minutos, y sufrió un descenso

rápido desde este momento hasta el final de la combustión. Este hecho pensamos que

fue causa de una rápida combustión en la zona izquierda del hogar, mientras que la (T4)

sufrió diversas fluctuaciones de la temperatura a causa de la humedad de la madera que

ralentizó la combustión al no arder con rapidez en la zona derecha del hogar. Las

diversas fluctuaciones y comportamientos de ambas termocúpulas estuvieron

relacionadas con la humedad de la madera. En este hogar se utilizó una menor cantidad

de madera, es por ello que el impacto térmico sobre el sedimento fue menor, como se

puede observar en el gráfico Nº 63. La T5, situada a 2 cm. dentro del suelo, indicó

valores entre 50º y 60º C de forma constante prácticamente durante toda la combustión

a medida que se fueron generando las brasas, aunque al final sufrió una fluctuación

causada por un movimiento de las maderas en la parte externa, que favoreció un

aumento de la temperatura del sedimento por encima de los 200º C los últimos 30

minutos.

Una vez acabada la combustión de los hogares al aire libre de EXP- Fuego

3- Can Sisó 3-A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B, se obtuvieron residuos formados por

carbones y cenizas blancas con algunas maderas no quemadas completamente. Este

hecho consideramos que se produjo por la humedad que tenía la madera al inicio de la

experimentación que no permitió que se quemaran completamente. La cantidad de

madera quemada en cada fuego generó una diferencia en los perímetros de los dos

hogares: mientras que en EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A el perímetro del hogar era de 70

cm. aproximadamente de diámetro, el hogar EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B tenía un

perímetro de 50 cm., diferencia que está relacionada con esta variable, ya que generó

una cantidad total de residuos diferente en cada hogar.

III. 4. 3. 10. 2 – Los procesos postdeposicionales en EXP - Fuego 3- Can Sisó 3A -

2007 y EXP - Fuego 4- Can Sisó 4B -2007

Los restos de la combustión estuvieron sujetos a diferentes agentes energéticos

que determinaron un movimiento específico de los carbones, configurando procesos

superficiales que interactuaron e incidieron en la distribución de los carbones a nivel

espacial de forma horizontal y vertical, así como en la preservación de una parte de los

Page 124: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

124

restos del hogar. Estos agentes provocaron un conjunto derivado o “contexto secundario

aislado” utilizando la terminología de (Butzer, 1989: 117).

Se ha podido comprobar que los factores medioambientales tuvieron un papel

determinante en dicha formación del registro experimental y por tanto consideramos

que fueron los responsables de la modificación y la preservación selectiva de los restos

de los hogares EXP - Fuego 3- Can Sisó 3A -2007 y EXP - Fuego 4- Can Sisó 4B -2007

Como se ha podido comprobar, el desplazamiento postdeposicional de los

carbones puede realizarse a distancias cortas o grandes, dependiendo de la intensidad

del tipo de agente o variable que ha actuado. Los agentes que han actuado sobre los

restos de las dos combustiones y que han modificado su estado original son los

siguientes (tabla 3):

ALTERACIONES POSTDEPOSICIONALES EN EXP- FUEGO 3 -CAN SISÓ 3 A - 2007 y EXP- FUEGO 4 -

CAN SISO 4B - 2007

AGENTES

MECANISMOS

FENÓMENO

OBSERVACIONES

EXPERIMENTALES

Naturales

Viento

Aeroturbación

Desaparición de las cenizas,

dispersión de carbones.

Naturales

Lluvia

Aguaturbación

Lavados sobre el hogar,

dispersión de carbones,

alteración de las

rubefacciones. Exfoliación

de maderas no quemadas

completamente.

Naturales

Vegetación

Floraturbación

Incidencia en la dispersión

de carbones, barreras

naturales, estabilización de

los restos de combustión.

Naturales

Factor tiempo

Modificación/

Conservación

Dispersión, fragmentación,

transporte, enterramiento de

los restos del hogar.

Tabla 3. Alteraciones y modificaciones postdeposicionales documentadas en EXP - Fuego 3- Can Sisó 3A

-2007 y EXP - Fuego 4- Can Sisó 4B -2007

Page 125: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

125

Las diversas observaciones que se realizaron a lo largo de un año constatan

que dichos agentes tuvieron una incidencia en mayor o menor grado durante todo el

tiempo de abandono de los hogares. El segundo control realizado el día 30/3/2007

constató un hecho importante y es la desaparición en poco tiempo de las cenizas de los

hogares aproximadamente tras 15 días de abandono. Durante este periodo de tiempo no

se registraron precipitaciones significativas en el mes de marzo de 2007 (ver gráfico Nº

61 y Anexo I), lo que hace que atribuyamos la responsabilidad de la desaparición de las

cenizas al efecto del viento (ver fotografía 18)

Asimismo, este agente natural provocó una dispersión de carbones en

dirección (NO-SE). Pensamos que el desplazamiento en dirección (SE) estuvo

condicionado por la pendiente del terreno que, junto a la acción del viento, desplazó los

carbones en esta dirección. La dispersión de carbones en dirección (NO), o sentido

contrario a la pendiente, fue consecuencia del viento, ya que no pudo haber otro agente

que provocara dicha dispersión, al no haberse producido precipitaciones significativas

en la zona experimental y encontrarse carbones a cierta distancia de los hogares con un

tamaño de 4-5 cm. Hay que tener en cuenta que hubo rachas de viento en determinados

días de 10, 7 m/s y que pudo tener cierta influencia en dicha dispersión (ver cuadro Nº

61 Anexo I) y (gráfico Nº 61). Pensamos que la “tasa de movimiento” de carbones

impulsada por el viento en un tipo de superficie y según el grado del tamaño de los

carbones depende de la velocidad del viento. Este hecho condicionaría el

desplazamiento de los carbones de diferente tamaño dependiendo de la fuerza de

arrastre sobre tal superficie, en nuestro caso condicionado el movimiento superficial por

la presencia de herbáceas, como veremos más adelante.

No podemos indicar exactamente la dirección del viento que sopló en el

mismo lugar donde se ubicaban los hogares al no ser operativa la Estación

Meteorológica de Tagamanent-Montseny con respecto a esta variable, teniendo en

cuenta que se encuentra situada a 14 Km. de distancia. Hay que tener en cuenta,

además, que el hogar de Can Sisó se encuentra en una cerca de la cadena montañosa del

Montseny que lo protege de los vientos de componente (N) y está protegido de los

vientos procedentes del (NE) por la presencia de la Masia de Can Sisó. Este factor

condiciona la interpretación que podamos dar en relación al comportamiento que pudo

tener el viento en el mismo lugar de la experimentación, pero se ha podido comprobar

que dicho fenómeno alteró las condiciones originales del hogar en un primer momento y

especialmente con la desaparición de las cenizas del hogar. A consecuencia de la acción

Page 126: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

126

del viento, quedó al descubierto parte de la microestratigrafía del hogar pudiéndose

observar parte de las rubefacciones producidas por las combustiones. Como se pudo

comprobar en este primer mes de abandono, se produjeron modificaciones importantes

de los hogares en muy poco tiempo por su exposición al aire libre. A medida que

transcurrían los meses y a través de las distintas observaciones que se realizaron se

observó que el estado de la superficie donde se ubicaban los hogares sufría cambios,

sobre todo en relación al estado de las herbáceas. Este hecho quedó probado en el tercer

control realizado en el mes de mayo (13-5-2007), ya que en abril de 2007 hubo

importantes precipitaciones (ver cuadro Nº 63 Anexo I) que favorecieron el crecimiento

de herbáceas en la zona de estudio.

Atribuimos al viento que se dio en la zona experimental un nuevo

desplazamiento de carbones. Aunque esta dispersión estuvo condicionada por la

presencia de herbáceas, pensamos que no impidió cierto desplazamiento de carbones

por la superficie en determinadas direcciones, ya que se observaron carbones en zonas

parcialmente descubiertas de herbáceas en dirección (N-NE-SE) y alejados a un metro

de distancia en (EXP- Fuego 3- Can Sisó 3 A), que creemos que la lluvia no pudo

producir en contra de la pendiente (NO)

Consideramos que la estabilización de una parte de los restos de este hogar se

produjo por el crecimiento de herbáceas en las proximidades del perímetro del hogar,

fijando en su posición a los troncos que no quemaron completamente y a su vez al

conjunto de los restos de combustión. En relación a la influencia que pudo tener el

viento hay que destacar las rachas de viento que se registraron este mes y que

alcanzaron 14, 2 m/s, aunque no podemos determinar correctamente cómo esta variable

influyó en la dispersión de carbones, así como en la dirección del viento, a pesar de que

hay cierta correspondencia con la dispersión que se produjo en dirección (SE) y los

datos proporcionados por la Estación Meteorológica de Tagamanent- Montseny (ver

gráfico Nº 61) del mes de mayo. Los restos de (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4 B) fueron

cubiertos parcialmente por sedimentos arrastrados desde un terreno circundante que fue

cultivado. El hogar presentaba tierras con carbones mezclados en superficie y se

produjo un desplazamiento de carbones y de maderas no quemadas completamente, en

dirección (S-SE) a una distancia aproximada de un metro de distancia del hogar, que

atribuimos a esta circunstancia ajena a la experimentación.

Page 127: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

127

Por lo que respecta a las modificaciones que se produjeron en las

rubefacciones del hogar (EXP - Fuego 3- Can Sisó 3A -2007), debemos indicar que

fueron causadas principalmente por las precipitaciones que se registraron en el mes de

abril, y que influyeron en el cambio de tonalidad que se observó en este control al pasar

a tonalidades más claras. Las condiciones climatológicas que se sucedieron hasta el

siguiente control en el mes de julio (13/7/07), tal y como queda reflejado por los datos

proporcionados por la Estación Meteorológica de Tagamanent-Montseny en relación a

la pluviometría, indican que se sucedieron meses secos o muy secos hasta el mes de

septiembre de 2007 (ver Anexo I) y (gráfico 61). Esta situación se prolongó

prácticamente hasta finalizada la experimentación, con algunas matizaciones como

veremos más adelante. En general, junio y julio de 2007 fueron especialmente secos

(ver cuadros Nº 67 y Nº 69 de Anexo I), lo que provocó un cambio en el estado de las

herbáceas, ya que se encontraban en un estado seco mayoritariamente. Este cambio de

la cobertura vegetal dejó al descubierto nuevas zonas próximas a los hogares con

densidad baja de herbáceas y zonas donde el sedimento prácticamente estaba al

descubierto.

Asimismo, se pudo comprobar que en determinadas partes y de forma aislada

habían crecido plantas muy próximas a los perímetros de los hogares que estaban

estabilizando los restos de las dos combustiones. Estas condiciones cambiantes de la

cobertura vegetal favorecieron una nueva dispersión de carbones en dirección (S-SE-E)

a causa del viento; es decir, hacia las zonas con menor cobertura vegetal y favorecida

por la pendiente del terreno en dirección (SE). Consideramos que este hecho se produjo

por la acción del viento, dado que no se registraron precipitaciones en los meses de

junio y julio como hemos visto anteriormente y no se produjeron fenómenos

relacionados con corrientes de agua (Aguaturbación) a causa de las escasas

precipitaciones. De la misma manera, la presencia de carbones a una distancia de 1,5

metros del hogar en esta dirección y el desplazamiento de los troncos de madera que no

quemaron completamente del hogar (EXP - Fuego 3- Can Sisó 3A -2007) en dirección

(SO) estaría relacionada con fuerzas de arrastre de origen eólico.

El desplazamiento de carbones y de maderas del hogar (EXP - Fuego 3- Can

Sisó 4B -2007) en dirección (SE) estaría también relacionado con fenómenos de

Aeroturbación, ya que el viento dejó al descubierto una mayor cantidad de carbones al

Page 128: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

128

desplazar parte de los sedimentos que cubrían el hogar y dado que no se registraron

precipitaciones significativas. A consecuencia de los fenómenos atmosféricos, las

maderas que no quemaron completamente estaban sufriendo procesos de exfoliación

que estaban incorporando más carbones al sedimento. Este hecho estaría relacionado no

sólo con el viento, sino también con las temperaturas de estos meses y las escasas

precipitaciones que se registraron en los meses de mayo, junio y julio. En relación con

la influencia que pudo tener el viento, no podemos determinar exactamente cómo

influyo su dirección en todos estos procesos relacionados con fenómenos de

(Aeroturbación), aunque parece existir cierta correspondencia con las direcciones del

viento registradas por la Estación Meteorológica de Tagamanent-Montseny, sobre todo

en los meses de mayo y julio. Pensamos, eso sí, que las rachas de viento que se dieron

durante estos meses influenciaron en este desplazamiento de carbones y maderas (ver

datos Estación Meteorológica de Tagamanent- Montseny meses mayo, junio y julio en

Anexo I). Desde el mes de agosto hasta el mes de noviembre de 2007 hubo ciertas

precipitaciones (especialmente en el mes de octubre). Aunque fueron meses secos, se

produjeron precipitaciones con cierta regularidad (gráfico 61), hecho que favoreció el

crecimiento de las herbáceas en la zona experimental, como se pudo comprobar en el

control del mes de noviembre (21-11-2007), ya que los hogares se encontraban

prácticamente cubiertos por las herbáceas (fotografía 21) que crecieron a causa de las

lluvias registradas sobre todo en el mes de octubre.

Este fenómeno favoreció la estabilización de los restos de los hogares,

especialmente de (EXP- Fuego 4- Can Sisó 4 B), que se encontraba cubierto en su

totalidad, mientras que (EXP - Fuego 3- Can Sisó 3 A) presentaba la zona central

parcialmente al descubierto y rodeado de herbáceas con cierta altura, como se pudo

observar tras nueve meses de abandono al aire libre. Por tanto, los fenómenos de

“Floraturbación” evitaron alteraciones en los hogares producidas por el viento y la

lluvia relacionadas con la dispersión de carbones. De forma general, la cobertura vegetal

fue cubriendo los restos de los hogares hasta finalizada la experimentación en febrero de

2008, provocando una estabilización general de los restos. Aunque en este último

control realizado en el mes de febrero se observaron carbones y alguna madera

desplazada a una distancia aproximada de 2, 5 metros de los dos hogares, en dirección

(SE) en zonas parcialmente descubiertas de vegetación. Este hecho estaría relacionado

con una reducción de las herbáceas en la zona experimental, ya que las escasas

Page 129: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

129

precipitaciones que se registraron desde noviembre hasta febrero de 2008 (ver gráfico

Nº 61), (cuadros Nº 77, Nº 79, Nº 81, Nº 83 de Anexo I) causaron un nuevo cambio en

el estado de la vegetación. Aunque los hogares estaban totalmente cubiertos por

herbáceas, determinadas zonas quedaron al descubierto. Este hecho creemos que

favoreció un desplazamiento nuevamente de carbones que anteriormente se habían

desplazado en diversas direcciones, especialmente en dirección (SE) y el

desplazamiento de alguna madera no quemada completamente de pequeño tamaño

desde la zona del hogar (EXP - Fuego 3- Can Sisó 3 A) hacia estas nuevas posiciones a

causa de las rachas de viento que se produjeron durante estos meses. La dispersión que

se produjo en dirección (S) y próxima al hogar (EXP - Fuego 3- Can Sisó 4 B) estuvo

relacionada con esta nueva cubierta vegetal, ya que los cuadros (F4-F5) quedaron al

descubierto de herbáceas parcialmente y permitió un nuevo desplazamiento de carbones

a causa del viento dado que no se registraron precipitaciones significativas hasta

finalizada la experimentación como hemos visto. El crecimiento de herbáceas sobre los

hogares favoreció cierta estabilización y detuvo los procesos mecánicos de transporte de

carbones de forma horizontal sobre la superficie, evitando la incidencia de los

fenómenos atmosféricos, aunque como hemos visto las condiciones cambiantes

favorecieron un nuevo desplazamiento de carbones. El muestreo que se realizó en la

zona experimental y el posterior análisis de las variables relacionadas con el número de

fragmentos, peso, y volumen de carbones tenia como objetivo específico determinar con

más exactitud los movimientos que se produjeron a lo largo de todo el periodo de

abandono del hogar a nivel espacial y extraer información pertinente relacionada al

comportamiento de las diversas fracciones de carbones que se estudiaron.

Este estudio indica que se produjo una modificación importante del perímetro

del hogar de EXP - Fuego 3- Can Sisó 3 A, ya que se redujo en términos generales,

dado que las muestras mas cercanas al punto “0”, especialmente las situadas a 30 cm.,

presentaban en términos generales unas frecuencias bajas en relación a las tres variables

en determinadas muestras próximas al centro del hogar, como se puede ver en los

(gráficos Nº 109, Nº 110, Nº 111) y una frecuencia alta en los puntos más cercanos

situados a 15 cm. Hay que decir que estas muestras más cercanas al hogar presentaban

las tres fracciones de carbones estudiadas y con cierto dominio de la (fracción > 2 > 1).

Pensamos que el hogar se estabilizó con un diámetro aproximado de 60 cm. a medida

que las herbáceas crecían en las proximidades del hogar y que perdió un importante

Page 130: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

130

número de carbones al inicio de la experimentación a causa del viento, sobre todo en el

perímetro externo, teniendo en cuenta que el hogar tenía aproximadamente 90 cm. de

perímetro al inicio de la experimentación.

El estudio de las tres variables indica que desde los puntos situados a 30 cm.

desde el centro del hogar se produjo una dispersión general, aunque determinadas

direcciones presentaban una mayor representación de carbones hacia las zonas externas

como veremos más adelante y donde las tres variables parecen coincidir positivamente

en cuanto a la dispersión que se produjo. De forma general hubo una mayor dispersión

de las (fracciones > 2 > 1) que, aunque por su peso no resultaron significativas, sí lo

fueron por el número de carbones desplazados hacia las zonas más externas del hogar

(ver gráficos Nº carbones)

Asimismo, hay una relación positiva en el peso y el volumen de carbones, ya

que la (fracción > 4) supuso un mayor volumen y peso en las muestras, indicando un

movimiento de esta fracción hacia las zonas más externas del hogar. En términos

generales, los datos proporcionados por las tres variables parecen coincidir en cuanto a

la dispersión que se produjo en todo este tiempo de abandono del hogar de EXP - Fuego

3- Can Sisó 3 A. En este sentido, hubo un desplazamiento de carbones que afectó

mayoritariamente a las (fracciones > 2 >1) en prácticamente todas las direcciones,

aunque con mayor intensidad en dirección (E-SO) y que hubo una dispersión de las tres

fracciones desde el SO al N y en dirección E. Aunque estos datos tienen que matizarse

por el peso y el volumen de carbones desplazados, ya que aunque parece haber cierta

coincidencia en este desplazamiento general, hay diversas direcciones que también son

representativas por estas dos variables en dirección S y SE. Es decir, que encontramos

un desplazamiento de carbones en dirección a la pendiente (SE), al hallar carbones

desde (S al SE) y un desplazamiento de carbones en contra de la pendiente que

abarcaban desde el O al N. Mientras que en dirección (SO) pensamos que está

relacionado con la proximidad del hogar EXP- Fuego 4- Can Sisó 4 B.

El muestreo realizado en EXP- Fuego 4- Can Sisó 4 B parece coincidir con el

anterior, aunque con algunas matizaciones. Los datos proporcionados por las tres

variables (número de carbones, peso y volumen) indican que el hogar sufrió una

importante pérdida de carbones en la zona central. Este hecho se debió

fundamentalmente al desplazamiento de tierras al ser cultivado el terreno próximo y

removidos los carbones del hogar. Los muestras más cercanas al centro del hogar (15

cm.) presentaron una frecuencia baja del número de carbones, aunque con la presencia

Page 131: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

131

de las tres fracciones y con cierto predominio de la fracción > 1. En las muestras

situadas a 30 cm. en determinadas direcciones (ver gráficos Nº carbones) no había

prácticamente representación, sobre todo en dirección (N-NE-SE), mientras que en

dirección (NO-E-O) presentaba un número mayor de carbones que las muestras situadas

a 15 cm. Estas diferencias en las partes más centrales del hogar las atribuímos a la

desestructuración del hogar a consecuencia del movimiento de tierras que se produjo al

ser cultivado el terreno próximo. Este hecho provocaría un aumento de las (fracciones

>2 >1) en la zona central del hogar, como se puede ver en los (gráficos Nº carbones)

En el análisis de las tres variables parece existir cierta correspondencia con los

datos en relación a la dispersión de carbones. Podemos decir que en términos generales

hubo un dispersión mayoritaria de carbones de la (fracción > 2 >1), aunque no

significativas por su peso, sí por el número de carbones desplazados hacia las zonas más

externas del hogar. Este hecho parece tener cierta correspondencia con el

desplazamiento de carbones de EXP - Fuego 3- Can Sisó 3 A. En términos generales,

las tres variables parecen coincidir en cuanto a la dispersión que se produjo en todo este

tiempo de abandono del hogar de EXP - Fuego 4- Can Sisó 4 B. Por ello podemos decir

que hubo un desplazamiento de carbones que afectó mayoritariamente a las (fracciones

> 2 >1) en prácticamente todas las direcciones, aunque abarcando desde (NO al E), en

dirección (SE) y (SO). Los datos proporcionados por el volumen y peso de carbones,

teniendo en cuenta que la fracción > 4 es la que aumentó de forma general los valores

de estas variables, parecen coincidir con dicho desplazamiento. Asimismo, se puede

observar que el volumen y el peso de los carbones se concentran sobre todo en las zonas

más próximas al centro del hogar (teniendo en cuenta las tres fracciones de carbones) y

que se ha producido un desplazamiento de carbones hacia las zonas externas. Teniendo

en cuenta todas estas consideraciones podemos decir que la dispersión que se produjo

abarcaría desde el (NO al NE), un desplazamiento de carbones que abarcaría desde el (S

al SE) y en dirección (SO). El desplazamiento de carbones en dirección (SE) lo

vinculamos a la proximidad del hogar (EXP - Fuego 3- Can Sisó 3 A). Es decir,

encontramos una dispersión de carbones en contra de la pendiente (NO) y en dirección a

la pendiente (SE). Estos datos coinciden con el análisis que se ha realizado

anteriormente en el hogar EXP - Fuego 3- Can Sisó 3 A ya que, como hemos visto, el

desplazamiento se produjo en las mismas direcciones. Parece haber cierta

correspondencia también con las observaciones que se realizaron a lo largo del tiempo

Page 132: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

132

sobre la dispersión de carbones, antes de que los hogares se estabilizaran tras un año de

abandono.

Es por ello que creemos que hubo movimientos superficiales de los carbones

por fuerzas de arrastre producidas básicamente por la acción del viento, en los primeros

meses de abandono de los hogares, antes de que se estabilizaran definitivamente al ser

cubiertos por las herbáceas. El desplazamiento en contra de la pendiente creemos que

está relacionada con una tasa específica de la velocidad del viento que es capaz de

desplazar los carbones de distintos tamaños, ya que la pendiente no condicionó dicho

movimiento. Esta tasa de movimiento específico relacionada con la velocidad del viento

provocó un desplazamiento de los carbones más pequeños (fracciones > 2 >1) hacia las

zonas más externas de forma general y, en menor medida, de los carbones de la

(fracción > 4). Los fenómenos de floraturbación condicionaron dicha dispersión; es

decir, las zonas con una menor densidad permitieron cierto desplazamiento de carbones

en esas direcciones y, por el contrario, las zonas con más densidad evitaron una

dispersión de carbones en determinadas direcciones. En términos generales pensamos

que la velocidad del viento provocó una tasa específica de movimiento de las diversas

fracciones. Por tanto, creemos que la velocidad del viento puede mover carbones a

cierta distancia dependiendo de si estas herbáceas son altas o bajas. A medida que se

produce el cambio de un estado a otro, el viento incide menos en dicha dispersión.

Los datos proporcionados por la Estación Meteorológica de Tagamanent-

Montseny (ver gráfico 61) indicaron diferentes direcciones del viento a lo largo de los

meses que parecen coincidir con la dispersión que se produjo en la zona experimental.

Pero, como se ha especificado anteriormente, la lejanía de la Estación Meteorológica no

permite extraer conclusiones específicas sobre la influencia de esta variable. En todo

caso, nos servimos de los datos proporcionados por el muestreo que se realizó para

sacar conclusiones al respecto.

En este sentido, podemos decir que existieron movimientos superficiales de

los carbones por fuerzas de arrastres producidas por el viento y la lluvia principalmente

y ambas actuarían a lo largo del tiempo. El viento desplazó los carbones hacia las zonas

externas con una tasa de movimiento específica relacionada con la velocidad del viento,

mientras que la lluvia incidió alterando las posiciones originales de los carbones en el

mismo hogar por los lavados producidos. Este hecho favorecería, posteriormente, que el

viento actuara sobre los carbones y los desplazara a distintas posiciones de las originales

Page 133: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

133

en la superficie. Como se puede apreciar, ambos agentes interactuaron en la dispersión

una vez abandonados los hogares y cada uno de ellos en mayor o menor grado tuvo una

implicación en dichos movimientos incidiendo en una redistribución espacial más o

menos severa. El viento fue el responsable del desplazamiento de los carbones hacia las

zonas más externas del centro del hogar en las líneas de orientación principales, y con

cierta correspondencia entre las tres variables que se estudiaron, que indican que hubo

una dispersión que abarcaba desde (O- NO-N- NE) y en dirección (SE).

Page 134: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

134

III. 4.4 - Experimentación en abrigo.

III. 4.4.1– EXP- Fuego 5- Cova Manena- 2007 (El Catllar – Tarragona)

– Localización.

El abrigo de Cova Manena se encuentra situado en el término municipal del

Catllar, en las coordenadas geográficas 41º 11´11.96´´ N y 1º 20´03. 90´´E a 65 m snm,

situado en la ribera del río Gaià, a 5 Km. de la línea de costa actual. Imagen 7

Imagen 7. Localización orográfica del abrigo de Cova Manena (El Catllar)

El abrigo se encuentra orientado en dirección SO y se abre en una pared de una

longitud de 33 metros en la zona exterior, 8,5 metros de profundidad y 3,5 metros de altura

en la parte central del abrigo. En las proximidades se encuentra el yacimiento de La

Cativera y ambos abrigos forman parte de la unidad de calcarenitas miocénicas de la unidad

de Ardeña, datada en el Serravaliense Superior- Tortoniense Inferior (Angelucci, 2002).

Concretamente, el punto donde se llevó a cabo el experimento se encuentra situado en el

interior del abrigo a unos 5 metros de la cornisa exterior y a unos 4 metros de la pared

izquierda del interior de abrigo. La superficie donde se realizó la combustión presenta una

pendiente del 23,3 % en dirección SO. El paisaje actual de la zona está claramente marcado

por las actividades humanas, principalmente la agricultura, basada principalmente en el

cultivo de viña y olivo. La entrada del abrigo no presenta ningún tipo de obstáculo de

carácter arbóreo por la presencia de un cultivo que se encuentra situado en las proximidades

de la entrada. Fotografía 23

Page 135: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

135

Fotografía 23. Imagen general del abrigo de la Cova Manena y posición del hogar.

III. 4.4.2 – Proceso de combustión y control 1 (27-2-2007)

La experimentación EXP- Fuego 5- Cova Manena-2007 se llevó a cabo a

finales de febrero (27-2-07) y se realizaron diversos controles a lo largo del tiempo para

ver las modificaciones que había sufrido el hogar. Estos controles se llevaron a cabo los

días (27-2-07), (26-3-07), (11-7-07), (9-10-07), y (27-3-08), cuando se dio por

finalizada la experimentación y se recogieron las muestras para el análisis de dispersión

de carbones.

Para realizar la combustión se siguió la misma sistemática operativa que en las

anteriores experimentaciones. Inicialmente se recogieron muestras del sedimento para

su posterior análisis. Se utilizaron (2 Kg.) de zarzaparrilla (Smilax aspera) para el

encendido del fuego y 17 Kg. de madera de pino blanco (Pinus halepensis) en estado

seco en un fuego plano de pequeñas dimensiones (entre 80 y 90 cm. aproximadamente

de diámetro). Los troncos de madera utilizados tenían un diámetro aproximado de (5-6

cm.) y no se realizó ninguna disposición especial de la madera. Primero se colocaron las

ramas de zarzaparrilla (Smilax aspera) para el encendido del fuego y a continuación los

troncos de madera de pino blanco (Pinus halepensis).

El control de las temperaturas de la combustión se efectuó mediante cuatro

termocúpulas (T1, T2, T3, T4), que se colocaron en superficie y en determinadas

posiciones que fueron registradas desde los puntos de referencia principales (A-B).

Colocamos la T1 en el centro a (2 cm.) de profundidad dentro del suelo; la T2, en

contacto con el suelo en el centro; la T3, situada en la parte externa a (2 cm.) de

Page 136: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

136

profundidad dentro del suelo y la T4, en contacto con el suelo en el centro del hogar.

Las temperaturas alcanzadas y la disposición de las termocúpulas quedan reflejadas

según se indica en el Gráfico 118. El tiempo total de la combustión fue de 3 h 5´ y la

temperatura se registró cada 10 minutos.

Gráfico 118. Temperaturas alcanzadas en la combustión de Cova Manena.

Si observamos el gráfico de temperaturas vemos que la T4, colocada en el

centro del hogar, y la T2 alcanzaron los valores más altos; la T4, una temperatura

máxima de 875º C. Esta termorcúpula mantuvo valores altos aproximadamente durante

1 hora 30 minutos. Como se puede observar, a los 20 minutos del inicio de la

combustión se produjo un aumento importante de las temperaturas en la (T1, T2, T4) y

la T3 no empezó a registrar valores altos hasta los 30 minutos de la combustión. Las

termocúpulas T1 y T3, situadas a (2 cm.) de profundidad dentro del suelo, registraron

valores altos en determinados momentos por encima de los 400º C. Estas dos

termocúpulas tuvieron diferentes comportamientos, ya que la T3 mantuvo la

temperatura por encima de los 300º C prácticamente toda la combustión y descendió al

final del proceso, mientras que la T1, y aunque sufrió diversas fluctuaciones, mantuvo

temperaturas por encima de los 300 º C aproximadamente 2 horas y a partir de este

momento descendió de temperatura.

Como se puede apreciar, las termocúpulas colocadas en superficie (T4-T2)

registraron los valores máximos en los primeros 20 minutos. La T1, situada en el centro

y a (2 cm.) de profundidad, registró también valores altos a causa del impacto térmico

sobre la superficie, sobre todo en la parte central del hogar. Esta termocúpula registró

0

100

200

300

400

500

600

700

800

900

1000

10 40 70 100 130 160 3h

TERMOCÚPULA 1 (2 cm profundidad-centro)

TERMOCÚPULA 2 (centro superficie)

TERMOCÚPULA 3 (2 cm profundidad-exterior)

TERMOCÚPULA 4 (centro superficie)

Page 137: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

137

las mismas fluctuaciones que las termocúpulas colocadas en superficie (T2-T4) y redujo

su temperatura en el mismo tiempo.

Tras aproximadamente una hora de combustión, las (T1, T2, T4)

simultáneamente registraron un descenso de las temperaturas y un aumento al poco

tiempo de forma conjunta tras 1 hora 20 minutos, posiblemente por movimientos de la

madera, volviendo a indicar valores altos, especialmente la (T4), que a los 90 minutos

alcanzó la máxima temperatura. La T3, por el contrario, hasta aproximadamente 30

minutos de la combustión no comenzó a indicar valores altos de la temperatura,

superando los 400º C en los primeros momentos y posteriormente manteniendo la

temperatura por encima de los 300º C prácticamente toda la combustión, aunque se

observa un descenso de la temperatura tras 2 horas y 20 minutos de forma progresiva

hasta el final de la combustión.

A partir de 1 hora y 30 minutos, las (T1, T2, T4) empezaron a tener un

progresivo descenso de la temperatura que se prolongó hasta el final de la combustión.

A medida que la madera de la parte central se fue consumiendo y se fueron generando

brasas, la T1 comenzó a registrar las mismas fluctuaciones que las termocúpulas

colocadas en el suelo. A medida que la combustión se fue extendiendo a la madera de la

parte externa del hogar, la T3 comenzó a indicar valores altos. Es decir, a los 20

minutos de la combustión, las brasas generadas y el consumo de la madera en la parte

externa del hogar hizo que se mantuviera de forma constante una temperatura en el

sedimento por encima de los 300º C.

Fotografía 24. Control 1 (27-2-2007). Imagen del hogar una vez finalizada la

combustión.

Page 138: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

138

Hay que indicar que durante la combustión el fuego provocó en determinados

momentos un humo intenso que invadió prácticamente todo el abrigo. La combustión se

dio por acabada a las 3 horas. Una vez finalizada la misma se observó que la madera se

quemó completamente y que las cenizas tenían un color blanco intenso (Fotografía 24).

Para tener una referencia principal se establecieron dos puntos (A-B) separados entre

ellos por un metro de distancia en las proximidades del hogar y se determinó la

dirección del norte magnético. Una vez finalizada la combustión, se procedió a

determinar las posiciones de las termocúpulas y el perímetro del fuego mediante un

levantamiento planimétrico acompañado de fotografías. Este primer control realizado

permitió determinar el punto de partida del análisis postdeposicional. Figura 18

Figura 18. Planta del hogar de Cova Manena una vez finalizada la combustión el día (27-2-2007)

III. 4.4.3- Control 2 (26/3/2007)

El día (26/3/2007) se realizó un nuevo control de los restos de la combustión

de Cova Manena, tras prácticamente un mes de abandono. Al igual que en todas las

observaciones realizadas, se procedió a registrar todos los fenómenos que habían

sucedido. Los fenómenos que acontecieron en este corto periodo de tiempo son de

especial interés, ya que se produjeron fenómenos biogénicos como resultado de la

actividad de animales (Butzer, 1989: Pág. 74)

Esta alteración provocada por un jabalí (Sus scrofa) provocó una importante

modificación del hogar y dejó al descubierto parte de su organización interna o micro-

Page 139: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

139

estratigráfica (cenizas, rubefacción, sedimento, carbones). La zona más afectada era la

parte central del hogar, que presentaba un surco en profundidad en dirección (NO-SE)

de aproximadamente (270 mm. de largo x 70 mm. de ancho). El desplazamiento de

carbones se había producido en dirección SE; es decir, el morro del animal había

levantado el sedimento con los restos de la combustión en esa dirección.

Este hecho permitía ver la microestratigrafía del hogar, con un sedimento

oscuro (PANTONE Black 2 C) con carbones en la parte más profunda del surco, una

mancha rojiza-oscura (PANTONE 157 U) por encima y las cenizas mezcladas con

carbones en la parte superior. Asimismo, parte de los carbones en superficie se

encontraban desplazados en dirección S y SO, siguiendo la pendiente. Un resto de

madera con algunas alteraciones por combustión, de un tamaño aproximado de (160 x

60 mm.) se encontraba ubicado en las proximidades del surco en dirección N- S,

posiblemente extraído por el animal al levantar el sedimento, aunque se desconoce su

procedencia al no ser constatado anteriormente. Fotografía 25

Fotografía 25. Control 2 (26-3-2007). Detalle de la alteración del hogar y su microestratigrafía

al descubierto.

Page 140: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

140

Fotografía 26. Control 2 (26-3-2007). Dispersión de carbones en dirección (SE) y (S-SO). Se

puede observar también la presencia de huellas en primer término de un animal.

Diversos tipos de huellas de animales se podían apreciar claramente en

superficie y, al menos, se podían distinguir tres tipos diferentes de huellas. Los posibles

animales (no está determinado exactamente) que dejaron estas huellas serían (jabalí,

tejón, conejo, perro, zorro, aves). Fotografía 26

Jabalí Tejón Conejo Perro Zorro

(Sus scrofa) (Meles meles) (Orioctolagus cuniculus) (Canis lupus familiaris) (Vulpes vulpes)

Las huellas de un posible jabalí (Sus scrofa) se encontraban orientadas en

buena parte en dirección (NO-O) y en las proximidades del hogar. Existe la posibilidad

de que las produjera otro tipo de animal por el lado contrario y escarbara dentro del

hogar provocando la dispersión en dirección (SE). Asimismo, se observaron huellas de

aves que se extendían por la superficie en diversas direcciones en las proximidades del

hogar. Hay que decir que en el fondo del abrigo existían numerosas cavidades que

podían estar habitadas por alguno de estos animales descritos anteriormente.

Page 141: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

141

Desde los puntos de referencia principales (A-B) se procedió a crear una

cuadrícula de 3 x 3 metros que fue numerada como queda reflejado en la figura 18. Para

determinar la topografía del terreno donde se ubicaba el hogar, se obtuvieron las cotas

desde un punto “0” relativo, haciendo servir un nivel de agua que se construyó para tal

fin. Fotografía 27

Fotografía 27. Control 2 (26-3-2007). Imagen de la cuadrícula realizada de 3 x 3 m.

Utilizando el nivel del agua y posicionándolo posteriormente en todas las

intersecciones de cada cuadro de la cuadrícula se fueron anotando las cotas (Z) del

terreno en un papel milimetrado para el posterior tratamiento de las tres dimensiones

arqueológicas (x, y, z) en un dibujo a escala 1/20. Esta primera imagen topográfica del

terreno se trató en un programa de Autocad para obtener una imagen en tres

dimensiones. Figura 19

El cálculo que se realizó posteriormente tras obtener las cotas (Z) indicó una

pendiente del 23,3 % en dirección SO. Desde los puntos de referencia (A-B) se procedió

a tomar el perímetro del hogar con un levantamiento planimétrico acompañado de

fotografías, para obtener una nueva planta del hogar. Figura 20

Page 142: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

142

Pendiente

Figura 19. Imagen topográfica del terreno del abrigo de Cova Manena una vez obtenidas las cotas.

Figura 20. Planta del hogar de Cova Manena el día (27-3-2007). Un mes de abandono del hogar.

III. 4.4.4- Control 3 (11/7/2007)

El día (11/7/2007) se realizó un nuevo control de los restos del hogar tras

cinco meses de abandono. Tras el último control realizado en el mes de marzo, el estado

del hogar había cambiado sustancialmente. La microestratigrafía ya no se podía

distinguir claramente, ya que en el sedimento se habían producido diversas alteraciones.

Los restos de la combustión (cenizas y carbones) ya no eran visibles en su conjunto. En

este momento el hogar era reconocible básicamente por una mancha de color oscuro

(PANTONE 450 U) sobre el sedimento y una importante dispersión de carbones como

veremos más adelante. Esta mancha sobre el sedimento tenía aproximadamente un

Page 143: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

143

diámetro de (1 m y 20 cm.) y se podían observar carbones por encima que indicaban

que el sedimento había sido removido. Las perturbaciones sobre el sedimento se

extendían de forma general por toda la superficie y se trataba de innumerables pisadas

de animales que habían removido el sedimento. Fotografía 28

Fotografía 28. Control 3 el día (11/7/2007). Estado del hogar tras cinco meses de abandono.

Se puede observar la mancha sobre el sedimento y las alteraciones superficiales por pisoteo.

El surco provocado por el animal descrito en el anterior control ya no era

reconocible, al igual que el trozo de madera que se encontraba próximo había

desaparecido. La dispersión de los residuos de la combustión era evidente que se había

producido por pisadas de animales, aunque no se descarta que el viento que entrara en el

interior del abrigo pudiera tener cierta incidencia en la dispersión de carbones. Las

huellas que se distinguieron eran similares a las descritas en el anterior control, pero no

parecían tan recientes y se trataba de animales similares, pero además se podían

distinguir nuevas huellas de menor tamaño de diversos animales próximas al hogar y de

aves sobre la mancha de la combustión. Las huellas no parecían recientes como se ha

comentado y era evidente que se había producido cierta erosión superficial del

sedimento. Con relación a la dispersión de los carbones, en términos generales, se

encontraban orientados en dirección (O-SO-S-SE-E), abarcando mayoritariamente los

cuadros (B2, C2, D2, D3, D4) y algunos a una distancia aproximada de (1,5 metros) del

hogar, siguiendo la pendiente en dirección (SO). Numerosos carbones se encontraban en

superficie mezclados con el sedimento. Fotografía 29

Page 144: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

144

Fotografía 29. Control 3 el día (11/7/2007). Imagen general del hogar y la dispersión de

carbones en dirección (O-SO-S-SE-E). En primer término, carbones desplazados en dirección

SO siguiendo la pendiente.

En la parte externa de los cuadros (B2-C2) se hallaba una pequeña depresión o

hundimiento en dirección a la pendiente, que en anteriores controles no fue constatada y

con una cierta acumulación de carbones en su interior, aproximadamente a una distancia

de (2 metros). Se desconoce el origen de este pequeño hundimiento orientado en

dirección (NO-SE) y desde el hogar en dirección (O-SO) siguiendo la pendiente, aunque

la presencia de huellas en su interior podría estar relacionada con la acción de algún tipo

de animal, al igual que un pequeño surco situado entre (D4 y D3) orientado en dirección

(E-SE).

Los diversos animales han provocado un movimiento de los restos de la combustión de

forma horizontal y vertical en el sedimento, tal como ha quedado constatado por el

pisoteo de animales. Desde los puntos de referencia (A-B) se procedió a tomar el

perímetro del hogar con un levantamiento planimétrico, acompañado de fotografías,

para obtener una nueva planta del hogar. Figura 21

Page 145: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

145

Figura 21. Planta del hogar de Cova Manena el día (11-7-2007). Cinco meses de abandono del hogar.

III. 4.4.5- Control 4 (9/10/2007)

Transcurridos ocho meses del abandono de los restos de la combustión se

realizó un nuevo control. El estado del hogar no había cambiado sustancialmente, ya

que era reconocible por una mancha de color oscuro (PANTONE 450 U) sobre el

sedimento, que parecía haberse extendido en dirección (O-SO-S) y con cierta tendencia

hacia la pendiente. El estado superficial del sedimento continuaba presentando

evidencias de la presencia de animales en el abrigo y de su incidencia sobre los restos

del hogar. El impacto por pisoteo en toda la superficie no parecía tan intenso como en el

anterior control, pero presentaba signos de que el hogar había sufrido nuevamente una

alteración por la presencia de animales, como veremos a continuación.

Los restos de la combustión presentaban de nuevo señales frescas de huellas

de animales, que indicaban que el hogar había sido nuevamente pisoteado. En algunos

casos, las huellas tenían cierta profundidad e indicaban que un animal de gran tamaño

había perturbado los restos por sus pisadas. Asimismo, se observaban pequeños surcos

sobre el sedimento y la presencia de acumulación de sedimentos en la parte superior

extraídos por algún animal. Posiblemente, algún animal introdujo el morro sobre el

sedimento y provocó este tipo de alteración. El hogar presentaba numerosas huellas en

todas las direcciones que se extendían superficialmente por todo el área de estudio. El

tamaño de las huellas variaba, pero en términos generales dominaban las de pequeño

tamaño. Los animales que pisotearon los restos de la combustión posiblemente

correspondan a las especies que se han descrito en anteriores controles. Fotografía 30

Page 146: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

146

Fotografía 30. Control 4 el día (9/10/2007). Imagen de los restos del hogar tras ocho meses de

abandono en el interior del abrigo. Se pueden observar los restos de la combustión y el pisoteo

que ha sufrido por la presencia de animales.

Las huellas que se observaron sobre el hogar presentaban cierta orientación, ya

que las pisadas se encontraban en dirección (O-SO-S). De forma general, se observó

que la mancha sobre el sedimento se desplazó en estas direcciones y que había

aumentado su perímetro. Las partes externas del hogar presentaban numerosos carbones

mezclados con el sedimento y se apreciaba que los carbones se habían desplazado por la

superficie en diversas direcciones y en algunos casos se habían alejado del hogar (1,5-2

metros) aproximadamente en dirección (S).

La dispersión de los carbones tenía cierta orientación hacia la pendiente en

dirección (O-SO). Este hecho se constató de forma orientativa a través de una brújula de

campo. A nivel superficial se observó cierta erosión del sedimento, ya que no

presentaba tantas irregularidades como en el anterior control. Este alisamiento

superficial posiblemente tenga un origen eólico, ya que no se constató ningún tipo de

erosión provocada por corrientes de agua en superficie. El pequeño hundimiento en la

parte externa de los cuadros (B2-C2) y en dirección (O-SO) presentaba el mismo estado,

aunque con menos huellas y continuaba presentando cierta acumulación de carbones en

su interior, mientras que el surco en (D4-D3) había desaparecido. Desde los puntos de

referencia (A-B) se procedió a tomar el perímetro del hogar con un levantamiento

Page 147: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

147

planimétrico acompañado de fotografías, para obtener una nueva planta del mismo.

Figura 22

Figura 22. Planta del hogar de Cova Manena el día (9-10-2007). Ocho meses de abandono del hogar.

III. 4.4.6- Control 5 (27/3/2008)

En el mes de marzo de 2008 se realizó el último control de los restos de la

combustión y se recogieron las muestras para el posterior estudio sobre la dispersión de

carbones que se había producido durante el periodo de abandono. El hogar del abrigo de

Cova Manena era reconocible por una mancha de color oscuro sobre el sedimento y por

la presencia de ciertos carbones en superficie. En general, había sufrido una alteración

por pisoteo de seres humanos, ya que numerosas huellas se extendían por toda la

superficie y algunas incidían directamente sobre los restos del hogar.

Algunas de las huellas que se encontraban en el hogar correspondían a los

animales que se constataron en el anterior control, pero su incidencia ya no era tan

evidente a causa del pisoteo humano que había sufrido el sedimento. En determinados

lugares, como veremos a continuación, se comprobó la presencia de animales por las

huellas que dejaron éstos en la superficie, pero en este momento tenían una menor

incidencia, ya que sobre todo se encontraban localizadas en la parte externa del hogar.

Tras prácticamente un año de abandono del hogar del abrigo de Cova Manena, se dio

por finalizada la experimentación. Al igual que en anteriores controles se procedió a

tomar el perímetro del hogar desde los puntos de referencia principales del hogar (A-B)

con un levantamiento planimétrico acompañado de fotografías. De esta manera,

Page 148: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

148

podríamos determinar con más precisión los movimientos de los restos de la

combustión. Figura 23

Figura 23. Planta del hogar de Cova Manena el día (27-3-2008). Un año de abandono del hogar.

La dispersión de los carbones en superficie mantenía una cierta orientación en

dirección (O-SO), aunque se trata de una observación de campo. El hogar se

caracterizaba por una mancha con un color oscuro menos intensa (PANTONE 436 U),

que parecía haberse extendido en dirección (NO-O), y con ciertos carbones mezclados

con el sedimento. El perímetro del hogar (de aproximadamente 1,5 metros de diámetro)

presentaba innumerables irregularidades en su interior debido al pisoteo que había

experimentado. En dirección a la pendiente (SO) se encontraban carbones dispersos a

una distancia aproximada de (2 metros) junto con algún resto de madera no quemada

completamente en esta dirección. Sobre la superficie de estudio no se observó ninguna

erosión provocada por el viento, debido a la gran alteración que había sufrido la

superficie a causa del pisoteo. En este control se registraron nuevas huellas de animales,

las de un pequeño mamífero se encontraban en dirección (NE-SO) abarcando las

cuadriculas (D3-D4), mientras que las huellas de una ave se extendían por encima del

hogar y en diversas direcciones. Estas huellas eran las que se podían reconocer mejor

sobre la superficie. Fotografía 31

Page 149: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

149

Fotografía 31. Control 5 el día (27/3/2008). Estado de los restos del hogar en abrigo de Cova

Manena tras un año de abandono. Se puede observar la dispersión de carbones en primer término

en dirección (SO), así como las alteraciones por pisoteo de la superficie y de los restos de la

combustión. En la parte derecha y en dirección (NE-SO) se aprecian las huellas de un animal.

III. 4.4.7 - Recogida de muestras (27/3/2008)

Para muestrear la superficie de estudio se ha tenido en cuenta la cuestión

espacial; es decir, se utilizaron intervalos de muestreo a través de una “rosa de vientos”

creada para tal fin desde el centro del hogar y que abarcaba la totalidad de la cuadrícula

de 3 x 3 m. Fue necesario para ello hallar el centro del hogar desde los puntos (A-B) y

crear una línea horizontal con respecto a estos dos puntos, y otra vertical en superficie

pasando por el centro. De esta manera se dividió el espacio en cuatro partes de 90º cada

una. Una vez realizado este proceso, se creó un cuadro de 1 x 1 m. desde el centro del

hogar, que serviría para dividir estas cuatro partes en ocho partes de 45º cada una,

creando cuatro líneas desde el centro hacia los cuatro vértices del cuadro. Fotografía 32

La rosa de vientos creada constaba de ocho líneas principales que partían

desde el centro del hogar y cubrían toda el área de estudio de 3 x 3 m. A cada línea que

partía del centro del hogar “punto 0” se le asignó una letra correlativa partiendo desde la

línea “A” y a continuación las líneas (B, C, D, E, F, G, H), siguiendo la dirección de las

manecillas de un reloj. Cada línea fue numerada desde el centro del hogar de forma

correlativa en toda su extensión, y en los puntos donde se extraerían las muestras (0,

A1, A2, A3, A4, A5, 0, B1, B2, B3, B4, B5, etc.). La línea “A” estaría posicionada con

Page 150: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

150

relación al norte magnético y sería la referencia principal a la hora de tratar la dispersión

de los carbones.

Fotografía 32. Proceso de muestreo el día 27/3/2008. “Rosa de vientos” creada para extraer

muestras del sedimento y llevar a cabo el estudio de dispersión de carbones.

En total, se extrajeron 57 muestras para su posterior análisis, contando las

que se extrajeron al final del proceso situadas a 15 cm. en todas las líneas de orientación

(punto 0,5 de las líneas de referencia) desde el punto “0”

III. 4.4.8 - Datos y análisis de las muestras de EXP- Fuego 5- Cova Manena - 2007

En este apartado se analizan un total de 57 muestras de sedimentos con un

volumen total en cada una de ellas de (200 ml), así como la relación existente entre las

variables peso, volumen y número de fragmentos de los carbones de dichas muestras

con el objetivo de ver su representación espacial. El número total de carbones

contabilizados asciende a 1675 (Anexo I)

Los siguientes gráficos muestran los resultados del recuento de las variables

(número, peso y volumen de los carbones) y la frecuencia de cada una de ellas en las

líneas de referencia principales de la “rosa de vientos”.

Page 151: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

151

Gráfico 119. Número de carbones línea A en Gráfico 120. Número de carbones línea B en dirección

dirección Norte. Nordeste.

Gráfico 121. Número de carbones línea C en Gráfico 122. Número de carbones línea D en dirección

dirección Este. Sudeste.

Gráfico123. Número de carbones línea E en Gráfico 124. Número de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

0

10

20

30

40

50

60

70

0 A 0,5 A 1 A 2 A 3 A 4 A 5 A 6

Núm

ero

de c

arbo

nes

Fracciones carbones

Línea A dirección Norte

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones de carbones

Línea B dirección Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5 C 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones carbones

Línea C dirección Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5 D 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones carbones

Línea D dirección Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5 E 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea E dirección Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6

Núm

ero

carb

ones

Fracciones

Línea F dirección Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 152: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

152

Gráfico 125. Número de carbones línea G Gráfico 126. Número de carbones línea H en

en dirección Oeste. dirección Nordoeste.

Gráfico 127. Número de carbones punto 0

En los gráficos del número de carbones lo primero que llama la atención en todo

el conjunto es el dominio de la fracción > 1 prácticamente en todas las direcciones, ya

que presenta un índice de frecuencia relativo mayor que las otras dos fracciones de

carbones. Asimismo, hay una frecuencia mayor de carbones hacia el centro del hogar de

forma general, sobre todo de las fracciones > 2 > 1, que presentan una mayor frecuencia

relativa, mientras que la fracción > 4 presenta una frecuencia muy baja hacia el centro

del hogar. Las líneas de orientación con un mayor número de carbones de las tres

fracciones hacia las zonas más externas del centro del hogar son las siguientes:

- Línea A dirección Norte. - Línea E dirección Sur.

- Línea D dirección Sudeste. - Línea G dirección Oeste.

- Línea H dirección Nordoeste.

0

10

20

30

40

50

60

70

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5 G 6

Núm

ero

carb

ones

fracciones carbones

Línea G dirección Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

010203040506070

Núm

ero

de c

arbo

nes

Punto 0

Fracciones > 2

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

10

20

30

40

50

60

70

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4 H 5 H 6

Núm

ero

carb

ones

Línea H dirección Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 153: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

153

En las muestras situadas en (0,5), es decir a (15 cm.) del centro del hogar, hay

una presencia mayor de carbones de las fracciones > 1 y > 2 de forma general,

mientras que la fracción > 4 resulta poco representativa, especialmente en la línea C

en dirección (E), no sólo en los puntos más cercanos al centro del hogar sino

también de forma general. En los siguientes puntos (A1, B1, C1; D1, etc.) también

hay una frecuencia alta de las fracciones > 2 >1, excepto en la dirección E. Desde

estas posiciones hay un progresivo descenso del número de carbones, aunque en

determinadas orientaciones ha habido un importante desplazamiento de carbones

sobre todo de las fracciones > 2 >1 hacia las zonas más externas, con una frecuencia

similar a los puntos situados a (30 cm.) del centro del hogar, como ocurre en las

líneas de orientación (F, G, H) en dirección (SO, O, NO). Las líneas de orientación

que presentan un mayor desplazamiento de carbones de las fracciones > 2 >1 hacia

las zonas más externas del centro del hogar son las siguientes:

- Línea A dirección Norte. - Línea G dirección Oeste.

- Línea E dirección Sur. - Línea H dirección Nordoeste.

- Línea F dirección Sudoeste.

En general, se observa un desplazamiento de carbones de estas dos fracciones

que abarca desde el N al S e integra todas estas direcciones. En relación a la fracción >

4 hay una frecuencia relativamente mayor en las zonas más externas de las líneas de

orientación siguientes:

- Línea D dirección Sudeste. - Línea G dirección Oeste.

- Línea E dirección Sur. - Línea H dirección Nordoeste.

- Línea F dirección Sudoeste.

El desplazamiento de carbones hacia las zonas más externas abarca desde el

Sudeste al Nordoeste e integra todas estas direcciones coincidiendo con la dirección de

la pendiente en dirección SO. Se puede ver que las tres fracciones se encuentran

presentes en todas las líneas de orientación, aunque la fracción > 4 en determinadas

orientaciones no tiene representación o es muy baja, como sucede en la línea B en

dirección Nordoeste y en la línea C en dirección Este. Parece existir cierta coincidencia,

dado que estas dos orientaciones presentan una frecuencia muy baja de carbones en

dirección (NE-E). Asimismo, la línea de orientación F en dirección SO es la que

Page 154: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

154

presenta un mayor número de carbones de la fracción > 4, coincidiendo con la dirección

de la pendiente.

Los siguientes gráficos corresponden al peso de los carbones de las tres

fracciones en las líneas de orientación a los puntos cardinales y la frecuencia relativa en

cada una de ellas. Si la correlación es fuerte, permitirá considerar que la variable peso

depende en gran medida del número de fragmentos de cada punto de las muestras como

indicador de orientación.

Gráfico 128. Peso de carbones línea A en Gráfico 129. Peso de carbones línea B en

dirección Norte. dirección Nordeste.

Gráfico 130. Peso de carbones línea C en Gráfico 131. Peso de carbones línea D en

dirección Este. dirección Sudeste.

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

5

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5 C 6

Peso

car

bone

s

Fracciones (mm)

Peso carbones línea C- Este

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

5

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5 D 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea D- Sudeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Peso carbones línea A- Norte

0

0,5

11,5

2

2,5

3

3,54

4,5

5

A0,5

A 1 A 2 A 3 A 4 A 5 A 6

Fraccio nes ( mm)

Fracciones > 4Fracciones > 2Fracciones > 1

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

5

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea B- Nordeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

Page 155: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

155

Gráfico 132. Peso de carbones línea E en Gráfico 133. Peso de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

Gráfico 134. Peso de carbones línea G en Gráfico 135. Peso de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

Gráfico 136. Peso de carbones punto 0.

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

5

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5 E 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea E- Sur

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

5

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea F- Sudoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

5

G 0,5 G 1 G 2 G 3 G 4 G 5 G 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea G- Oeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

3,5

4

4,5

5

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4 H 5 H 6

Peso

en

gram

os

Fracciones (mm)

Peso carbones línea H- Nordoeste

Fracciones > 4

Fracciones > 2

Fracciones > 1

00,10,20,30,40,50,60,70,80,9

1

Gra

mos

Fracciones (mm)

Peso carbones punto 0

Peso carbones

Page 156: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

156

Los gráficos del peso de los carbones indican que la fracción más

representativa es la > 4 de forma general por su peso absoluto, mientras que las

fracciones > 2 > 1 se encuentran representadas prácticamente en todas las líneas de

orientación, pero presentan unos índices menores en cuanto a su peso, aunque en

determinados puntos son indicativas de cierta dispersión.

Como se puede observar en los gráficos relacionados con el peso de los

carbones, tan sólo determinadas orientaciones presentan de forma clara un peso relativo

mayor hacia el centro del hogar en (A1, E1, F1) en los puntos situados a 30 cm. del

hogar, en dirección (N-S-SO), y que los que se encuentran a 15 cm. (A0, 5, B0, 5, C0, 5,

etc.) no resultan representativos por su peso.

Asimismo, hay determinadas orientaciones donde las tres fracciones no

presentan datos significativos por su peso, como sucede en (A, B, C), que abarcarían la

zona contraría a la pendiente en las siguientes direcciones (N, NE, E). Mientras que las

líneas de orientación (D, E, F) en dirección (S, SO, SE) presentan un peso relativo

mayor hacia las zonas externas que estaría orientada hacia la pendiente del terreno. Las

líneas de orientación que presentan un peso absoluto de carbones de la fracción > 4,

dado que es la fracción más representativa hacia las zonas más externas del hogar, son

las siguientes:

- Línea D dirección Sudeste.

- Línea E dirección Sur.

- Línea F dirección Sudoeste.

La presencia de carbones de la fracción > 4 indicaría fuerzas de arrastre que

han desplazado los carbones de mayor peso desde el SE a SO. Los siguientes gráficos

muestran el volumen (ml) total de los carbones de cada fracción y en cada punto de

referencia de las líneas principales de la “Rosa de vientos” orientadas a los puntos

cardinales. Esta variable está relacionada con el número de fragmentos identificados en

cada muestra extraída y por tanto puede ser un indicador de la distribución espacial en

este estudio.

Page 157: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

157

Gráfico 137. Volumen de carbones línea A en Gráfico 138. Volumen de carbones línea B en

dirección Norte. dirección Nordeste.

Gráfico 139. Volumen de carbones línea C en Gráfico 140. Volumen de carbones línea D en

dirección Este. dirección Sudeste.

Gráfico 141. Volumen de carbones línea E en Gráfico 142. Volumen de carbones línea F en

dirección Sur. dirección Sudoeste.

0

2

4

6

8

10

12

14

16

18

20

A 0,5 A 1 A 2 A 3 A 4 A 5 A 6

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea A- Norte

Volumen de carbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

18

20

B 0,5 B 1 B 2 B 3 B 4 B 5 B 6

Volu

men

(ml)

Muestras

Volumen de carbones línea B- Nordeste

Volumen de carbones

Volumen carbones línea C- Este

0

2

4

6

8

10

12

14

16

18

20

C 0,5 C 1 C 2 C 3 C 4 C 5 C 6

M ue st r a s

Volumencarbones

0

5

10

15

20

25

D 0,5 D 1 D 2 D 3 D 4 D 5 D 6

Peso

en

gram

os

Muestras

Volumen carbones línea D- Sudeste

Volumen carbones

0

5

10

15

20

25

E 0,5 E 1 E 2 E 3 E 4 E 5 E 6 F 0,5

Peso

en

gram

os

Muestras

Volumen carbones línea E- Sur

Volumen carbones

0

5

10

15

20

25

F 0,5 F 1 F 2 F 3 F 4 F 5 F 6

Peso

en

gram

os

Muestras

Volumen carbones línea F- Sudoeste

Volumen carbones

Page 158: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

158

Gráfico 143. Volumen de carbones línea G en Gráfico 144. Volumen de carbones línea H en

dirección Oeste. dirección Nordoeste.

Gráfico 145. Volumen de carbones en punto 0

Como se puede ver en los gráficos relacionados con el volumen de carbones,

hay determinadas líneas de orientación que presentan un volumen bajo de carbones,

especialmente las líneas (A, B, C) en dirección (N-NE-E). En estas direcciones no se

observa una distribución importante de carbones hacia la zona externa del hogar y lo

hacen muy débilmente hacia la zona central del hogar. Mientras que en el resto de

orientaciones sí se aprecia un mayor volumen de carbones tanto en la zona más

próxima al centro del hogar como en las exteriores. Las líneas de orientación que

presentan un mayor volumen de carbones hacia las zonas más externas del hogar son las

siguientes:

- Línea D en dirección Sudeste.

- Línea E en dirección Sur.

- Línea F en dirección Sudoeste.

Volumen carbones línea G- Oeste

0

2

46

8

10

12

1416

18

20

G0,5

G 1 G 2 G 3 G 4 G 5 G 6

M uest ras

Volumencarbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

18

20

H 0,5 H 1 H 2 H 3 H 4 H 5 H 6

Peso

en

gram

os

Muestras

Volumen carbones línea H- Nordoeste

Volumen carbones

0

2

4

6

8

10

12

14

16

18

20

Volumen (ml)

Peso

en

gram

os

Muestra

Volumen carbones punto 0

Volumen carbones

Page 159: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

159

De forma general, habría un mayor desplazamiento de carbones en estas

direcciones, dado el volumen de carbones desplazados (entre 20- 10 ml), y que

abarcaría desde (SE al NO), aunque en las tres direcciones especificadas anteriormente

habría un mayor volumen de carbones. Las líneas de orientación (G, H) en dirección (O-

NO) presentan también un volumen de carbones hacia la zona externa del hogar, pero lo

hacen de forma más débil.

Se puede observar también que las líneas de orientación (E, F, H), en dirección

(S-SO-NO), presentan un volumen de carbones en los puntos de las muestras situados a

15 cm. en (E 0,5, F 0,5, H 0,5) inferior que los que se encuentran a 30 cm. (E1, F1, H1).

Hay que destacar también el volumen de carbones del punto “0” del centro del hogar

con (5 ml), en relación a las líneas de orientación que se han especificado anteriormente

en (E1, F1, H1), que presentan un mayor volumen de carbones (20 ml

aproximadamente)

III. 4.4.9 – Variables climáticas (viento)

Para una información más detallada de los datos proporcionados por la

Estación Meteorológica de Torredembarra se puede consultar el Anexo I). En este

apartado se especifican los datos más relevantes en relación al viento, proporcionados

por la Estación Meteorológica de Torredembarra (Tarragonés), desde el mes de febrero

de 2007 a marzo de 2008. Gráfico 146

III. 4.4.9.1 – - Estación Meteorológica de Torredembarra

Estación

Meteorológica de

Torredembarra

Dir

ecci

ón

del v

ient

o

Vel

ocid

ad

máx

ima

del

vien

to m

/s

Rac

has

máx

imas

de v

ient

o

Esc

ala

de

Bea

ufor

t

(vie

nto)

Febrero 2007

E-O

6, 5 m/s

23, 9 m/s

Brisa moderada

Marzo

NE-SO

8,1 m/s

25, 4 m/s

Brisa fresca

Abril

NE-S

9,6 m/s

22, 5 m/s

Brisa fresca

Page 160: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

160

Mayo NE-NO-S 6,7 m/s 18,4 m/s Brisa moderada

Junio

NE-O-SE

4,6 m/s

13, 9 m/s

Brisa débil/flojo

Julio

NO-NE-E

4,6 m/s

15, 2 m/s

Brisa débil/flojo

Agosto

S-E-NO

4,8 m/s

21, 9 m/s

Brisa débil/flojo

Septiembre

S-NE-NO

4,4 m/s

12,1 m/s

Brisa débil/flojo

Octubre

E-NO

5,3 m/s

15,4 m/s

Brisa moderada

Noviembre

E-S-O

3,4 m/s

14,6 m/s

Brisa débil

Diciembre

E-O

5,6 m/s

18,4 m/s

Brisa moderada

Enero 2008

NE-SE-NW

4,8 m/s

25,2 m/s

Brisa débil/flojo

Febrero

NE-SO-NO

4,8 m/s

11,8 m/s

Brisa débil/flojo

Marzo

NE-O

5,3 m/s

20,5 m/s

Brisa débil/flojo

Gráfico 146. Datos climáticos más relevantes sobre el viento proporcionados por la Estación

Meteorológica de Torredembarra, en el periodo comprendido entre febrero de 2007 y marzo de

2008

III. 4.4.10 – Discusión y resultados de EXP – Fuego 5 - Cova Manena -07

En este apartado se incluyen los resultados más relevantes en relación al

estudio realizado en la experimentación en abrigo de Cova Manena. A partir del trabajo

realizado, se ha observado que los resultados contribuyen a conocer los procesos

postdeposicionales y a determinar cómo los diversos agentes han influido en los restos

de la combustión.

III. 4.4.10.1- El proceso de combustión.

En el proceso de combustión se utilizó madera de pino blanco “Pinus

halepensis” y madera de zarzaparrilla “Smilax aspera” para el encendido. Estas dos

Page 161: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

161

variables influyeron en el rendimiento calorífico y se obtuvieron residuos de

combustión formados por carbones y cenizas. Las termocúpulas colocadas en el centro

y en superficie (T4-T2) registraron valores altos en los primeros momentos de la

combustión; la T4 registró 807º C en los primeros 30 minutos, posteriormente se

produjo una fluctuación de la temperatura ya que descendió progresivamente y tras 1

hora 30 minutos ascendió de nuevo hasta alcanzar los 875º C. La termocúpula T2,

colocada también en el centro y en superficie, tuvo las mismas fluctuaciones, ya que en

los primeros momentos de la combustión alcanzó unos valores de 502º C, a

continuación descendió y tras 1 hora 20 minutos ascendió de nuevo hasta alcanzar los

540º C.

Una vez que se alcanzaron las máximas temperaturas tras 1 hora 40 minutos de

combustión, ambas termocúpulas comenzaron a indicar un progresivo descenso de la

temperatura hasta el final de la combustión. Esta situación se reprodujo en la

termocúpula T1 situada en el centro y a (2 cm.) de profundidad dentro del suelo, ya que

tuvo las mismas fluctuaciones que las termocúpulas situadas sobre la superficie.

Esta termocúpula alcanzó valores altos también (405º C) en los primeros

momentos de la combustión y fluctuaciones muy similares a la termocúpula T2, como

se puede ver en el gráfico de temperaturas (Nº 118). La termocúpula T1, después de

alcanzar un segundo valor alto de 435º C, sufrió un descenso y un aumento de su

temperatura al poco tiempo. Esta termocúpula registró valores inferiores en la

temperatura, ya que no superó los 500º C, pero al estar situada en el centro del hogar

registró las mismas fluctuaciones que las termocúpulas externas.

Por tanto, pensamos que en el transcurso de la experiencia la parte central del

hogar quemó rápidamente generando unas temperaturas altas y a causa del movimiento

de los troncos de madera se produjeron diversas fluctuaciones de la temperatura. Este

movimiento provocó un nuevo aumento de las temperaturas tanto en la parte externa

como en el interior del sedimento. La termocúpula T3, a 2 cm. de profundidad dentro

del suelo, no registró estas fluctuaciones en la parte externa, ya que hasta que no

pasaron 30 minutos no registró un aumento importante de la temperatura; es decir,

cuando las termocúpulas (T4-T1-T2) alcanzaron unos valores altos tal como se ha

especificado.

En este sentido, creemos que a medida que se fue quemando la madera de la

parte central del hogar y se fue traslando la combustión a los troncos situados en la parte

externa, la termocúpula T3 no comenzó a indicar valores altos. Como esta termocúpula

Page 162: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

162

mantuvo una temperatura bastante constante hasta el final de la combustión, pensamos

que se debió a que los troncos quemaron más lentamente que la parte central y que no se

produjeron los movimientos de la madera como en la parte central, esto contribuyó a

generar brasas paulatinamente y a mantener una temperatura constante. Hay que decir

en este sentido que la termocúpula T3 registró un valor máximo de 410º C a los 40

minutos y mantuvo una temperatura constante por encima de los 300º C durante

prácticamente toda la combustión, aunque a las 2 horas y 20 minutos comenzó a bajar la

temperatura hasta el final de la misma.

Dado que las termocúpulas colocadas a 2 cm. de profundidad dentro del suelo

alcanzaron valores altos en relación a anteriores experiencias, creemos que esto está

relacionado con el tipo de sedimento, ya que al tener características limosas permitió un

mayor impacto térmico sobre el sedimento, tal y como se puede apreciar en los cuadros

de las temperaturas alcanzadas en las diversas experiencias (Anexo I)

Todas estas consideraciones referentes al mismo proceso de combustión

indican que la cantidad de madera utilizada (19 Kg.) y su estado seco generaron

aproximadamente durante 3h 5 minutos una “cinética de combustión de la madera” que

incidió directamente sobre la superficie. La madera de pino blanco (Pinus halepensis)

utilizada en la combustión y su estado seco provocaron unas temperaturas altas tanto en

la parte externa como en el interior del sedimento, dado que en determinados momentos

alcanzó temperaturas por encima de los 700º C. Pensamos que este hecho favoreció la

creación de una buena parte de residuos formados por cumburación, ya que al final de la

combustión el hogar presentaba una capa importante de cenizas blancas como se puede

observar en la fotografía 24. Este fenómeno hay que remarcarlo ya que, en el proceso de

muestreo que se realizó posteriormente y que más adelante se comentará, la presencia

de carbones era menor a otras experiencias realizadas. Aunque sujeto a otras

consideraciones, este hecho puede estar relacionado con el proceso de combustión.

Una vez finalizado el proceso de combustión del hogar de Cova Manena

(EXP- Fuego 5- Cova Manena- 2007), se obtuvo un hogar plano de un diámetro

aproximado de (90 cm.) aproximadamente. Según (Wattez, 1988: 365), las cenizas

blancas corresponderían a un fuego bien alimentado e intenso, hecho que se pudo

comprobar durante la experimentación realizada, así como la generación de este tipo de

cenizas.

Page 163: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

163

III. 4.4.10.2 – Los procesos postdeposicionales en EXP – Fuego 5 - Cova Manena -

07

Los estudios sobre los procesos postdeposicionales del abrigo de Cova

Manena han puesto de manifiesto que los principales procesos de alteración de los

restos del hogar son producto de la acción de animales, debido al pisoteo continuado a

lo largo de un año de abandono. Asimismo, consideramos que la acción por pisoteo

continuado provocó un movimiento de los carbones de forma horizontal y vertical en el

sedimento que estuvo asociada a la pendiente del abrigo. Como se ha podido

comprobar, el desplazamiento postdeposicional de los carbones puede realizarse a

distancias cortas o grandes, dependiendo de la intensidad del tipo de agente o variable

que ha actuado. Los agentes que han actuado sobre los restos de la combustión del

hogar EXP- Fuego 5- Cova Manena -2007 y que han modificado su estado original son

los siguientes (Tabla 4).

ALTERACIONES POSTDEPOSICIONALES EN EXP- FUEGO 5-COVA MANENA-2007

AGENTES

MECANISMOS

FENÓMENO

OBSERVACIONES

EXPERIMENTALES

Naturales

Viento

Aeroturbación

Erosión del sedimento y

cubrimiento de carbones

Naturales

Animales

Faunaturbación

Pisoteo, fracturación de carbones y

dispersión de carbones

Antrópicos

Humanos

Antrópico

Pisoteo y dispersión de carbones

Naturales

Factor tiempo

Modificación/

Conservación

Dispersión, pisoteo, enterramiento

de los restos del hogar

Tabla 4. Alteraciones y modificaciones postdeposicionales documentadas en EXP- Fuego 5- Cova

Manena- 2007

Page 164: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

164

En el segundo control realizado el día 26/3/2007 se constató que los

fenómenos biogénicos producidos por la actividad de animales provocaron una

modificación importante de la microestratigrafía del hogar tras prácticamente un mes de

abandono. En este corto periodo de tiempo no se registraron otros fenómenos naturales

que pudieran incidir en la modificación del hogar, por tanto consideramos que la

alteración y modificación de los restos de la combustión se produjo principalmente por

la acción de un jabalí (Sus scrofa), que introdujo el morro sobre los restos del hogar y

provocó un movimiento de carbones en dirección (SE-S-SO), tal y como se puede

apreciar en la fotografía 25. Esta acción estuvo asociada a la presencia de otros animales

en el interior del abrigo, dado que numerosas huellas que se extendían por la superficie

de estudio y estaban próximas al hogar provocaron en su conjunto una alteración

postdeposicional de los carbones de forma vertical y horizontal por pisoteo.

Estos fenómenos de faunaturbación se volvieron a constatar tras cinco meses

de abandono del hogar, ya que en el tercer control realizado en el mes de julio de 2007

(11/7/2007) se observaron nuevamente pisadas de animales que habían alterado los

restos del hogar al ser removido por los diversos animales. En este momento, el hogar

se distinguía básicamente por una mancha en el sedimento, a consecuencia de las

pisadas de animales que modificaron el perímetro del mismo en dirección a la

pendiente, y por la desaparición del surco creado anteriormente por el jabalí (Sus scrofa)

y una nueva dispersión de carbones que abarcaba diversas direcciones (ver III. 4.4.4).

Dado que se constató que numerosos carbones se encontraban alejados a una distancia

de 1,5 metros. del hogar en dirección a la pendiente (SO) pensamos que la inclinación

de la superficie, así como la acción de los animales contribuyeron a desplazar los

carbones en esta dirección.

En este control se observaron nuevas huellas de animales, ésta vez frescas, a

diferencia de anteriores pisadas de animales que habían sufrido cierta erosión

superficial. Pensamos que el viento que entró en el abrigo fue el responsable de esta

erosión. Aunque no podemos determinar claramente la influencia que pudo tener sobre

los restos de la combustión, contribuyó a borrar las huellas del anterior control a

consecuencia de las rachas de viento de cierta intensidad que se produjeron en los meses

anteriores y por los vientos procedentes del (SO) en dirección (SE), como se puede

apreciar en el gráfico 146 y (ver climatología meses de abril, mayo, junio, julio de la

Estación Meteorológica de Torredembarra en Anexo I). Asimismo, la presencia de un

hundimiento en los cuadros (B2-C2), relacionado con la presencia de un animal,

Page 165: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

165

favorecería la acumulación de carbones en su interior al estar situado en dirección a la

pendiente (SO), al igual que (D4-D3), con un pequeño hundimiento en superficie

aunque no presentaba tantos carbones en su interior. Estos hundimientos sobre la

superficie posiblemente se produjeron por la acción de animales al no constatarse otro

fenómeno de carácter natural.

En el cuarto control, realizado en octubre (9/10/2007), la mancha que definía

el hogar presentaba las mismas características que en el anterior control, aunque se

produjo una modificación del perímetro al aumentar en dirección (O-SO-S) y con cierta

tendencia de dispersión de carbones en dirección a la pendiente del terreno (SO) y en

dirección (O). Pensamos que esta modificación del perímetro del hogar se debió al

nuevo pisoteo que se produjo desde el último control realizado, al estar las huellas

orientadas en estas direcciones, como se puede ver en la fotografía 30, y no constatarse

otro tipo de fenómeno. Las huellas de gran tamaño y los surcos sobre los restos del

hogar contribuyeron a modificar su perímetro y a provocar una dispersión de carbones,

como se ha comentado anteriormente. Pensamos que esta acción podría corresponder al

mismo animal, aunque existe la posibilidad de que fueran dos animales distintos.

Dado que la superficie de estudio no presentaba las mismas irregularidades,

atribuimos este fenómeno al viento que entró en el abrigo y que provocó cierta erosión

del sedimento. Asimismo, el pequeño surco en los cuadros (D4-D3) desapareció a

consecuencia del pisoteo que sufrió el sedimento por la presencia de animales en el

interior del abrigo.

Estos fenómenos de faunaturbación continuaron produciéndose hasta el final

de la experimentación, ya que en el último control realizado en marzo de 2008

(27/3/2008) había nuevamente huellas de animales de pequeño tamaño en las

proximidades del hogar. Éste continuaba presentando una mancha de color oscuro con

una tonalidad no tan intensa (PANTONE 436 U) sobre el sedimento, que había

aumentado su perímetro en dirección NO-O y con carbones mezclados con el sedimento

(figura 22). Este desplazamiento de la mancha del hogar la atribuimos al pisoteo

antrópico que sufrió el hogar durante el periodo de abandono desde el último control. La

dispersión de carbones que se produjo en dirección (O-SO) pensamos que estuvo

relacionada con este fenómeno y que la pendiente favoreció nuevamente un

desplazamiento de carbones en estas direcciones.

El muestreo que se realizó en EXP- Fuego 5- Cova Manena- 2007 y el

posterior análisis de las variables relacionadas con el número de fragmentos, peso, y

Page 166: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

166

volumen de carbones tenía como objetivo específico determinar con más exactitud los

movimientos que se produjeron a lo largo de todo el periodo de abandono del hogar a

nivel espacial y extraer información pertinente relacionada con el comportamiento de

las diversas fracciones de carbones que se estudiaron. Este estudio indica que se produjo

una modificación importante del perímetro del hogar a causa del pisoteo sufrido a lo

largo de toda la experimentación. Como consecuencia de ello hubo una pérdida

importante de carbones que consideramos que estuvo relacionada con el fenómeno de

faunaturbación. Como se pudo comprobar en el análisis de las variables relacionadas

con los carbones recuperados en las muestras (ver gráficos Nº carbones), la cantidad

total fue inferior con respecto a las anteriores experimentaciones. Este hecho lo

relacionamos no sólo con el pisoteo sufrido a lo largo del periodo de abandono, sino

también con el tipo de sedimento que favoreció un movimiento vertical de carbones más

intenso.

El análisis de las variables relacionadas con los carbones recuperados en las

muestras indica que la zona central del hogar sufrió una perdida importante de carbones,

sobre todo de la fracción > 4, ya que la fracción dominante en las muestras más

cercanas al centro del hogar correspondieron a las fracciones > 1 y > 2. Es por ello que

consideramos que este hecho estuvo relacionado con las diversas alteraciones que se

produjeron al inicio de la experimentación, a causa de la acción del jabalí en el centro

del hogar que provocó un desplazamiento de los carbones de mayor tamaño (fracción >

4) en dirección (SE-S-SO) y un aumento del número de carbones en las muestras

situadas a (30 cm.) del centro del hogar, como se puede apreciar en los gráficos de

volumen de carbones.

El análisis del número de carbones indica que se produjo un movimiento de

carbones que abarcaba desde el (S al NO), dominado por las fracciones > 2 > 1, que

presentaron un mayor número de carbones alejados del centro del hogar, y en menor

medida de la fracción > 4. Las variables relacionadas con el peso y el volumen (ver

gráficos peso y volumen de carbones) parecen coincidir positivamente con estas

consideraciones, dado que ambas variables indican un desplazamiento general de

carbones que abarcaría desde el (SE-NO). A pesar de ello, determinadas líneas de

orientación presentaron un mayor volumen de carbones desplazados hacia las zonas

externas del hogar en las direcciones (SE-S-SO), hecho que guarda cierta

correspondencia con el peso de los carbones en estas direcciones y con una clara

tendencia de desplazamiento en dirección a la pendiente (SO). Hay que subrayar que la

Page 167: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

167

fracción > 4 es la que presentó un mayor peso absoluto hacia las zonas externas del

hogar, coincidiendo con el aumento de volumen de los carbones en estas direcciones

que se han especificado (Imagen 8)

El análisis de las variables relacionadas con el peso y el volumen de los

carbones indica que las direcciones con un frecuencia baja de carbones desplazados

corresponden a las direcciones (N-NE-E), con cierta relación positiva con el número de

carbones que indican que se ha producido un movimiento escaso de carbones en estas

direcciones, especialmente de la fracción >4, y un movimiento mayor de las fracciones

>2 >1

Por tanto, podemos decir que el pisoteo continuado que sufrió el hogar

provocó una pérdida importante de carbones de la fracción >4, sobre todo en la zona

central del hogar. Asimismo, los diversos movimientos de los animales sobre la

superficie favorecieron un desplazamiento de carbones hacia las zonas externas del

hogar que, sumado a la acción de la pendiente del terreno, favorecieron el movimiento

de los carbones de mayor tamaño hacia las zonas mas externas del hogar, las cuales

sufrieron un menor impacto por pisoteo y alteraciones que la zona donde se ubicaba el

hogar.

Es por ello que consideramos que el pisoteo continuado sobre los restos del

hogar provocó una fracturación de cierta intensidad de los carbones de mayor tamaño

que favoreció una mayor frecuencia relativa de las fracciones > 2 > 1. Las diversas

alteraciones que sufrió el hogar al ser removido de forma continuada por el pisoteo y

por las diversas acciones de los animales creemos que favoreció la creación de una

mancha con productos de la combustión, que siguió la misma dinámica de

desplazamiento al orientarse en dirección a la pendiente.

Los datos proporcionados por la Estación Meteorológica de Torredembarra

(gráfico Nº 146) indicaron diversas direcciones del viento y velocidades, asociadas a

diversas rachas de viento a lo largo de los meses. Pero la lejanía de la Estación

Meteorológica no permite extraer conclusiones específicas sobre la influencia de esta

variable. Aunque se observaron erosiones sobre el sedimento que favorecieron el

cubrimiento de carbones, no podemos concretar con exactitud la influencia que pudo

tener el viento.

Page 168: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

168

Imagen 8. Situación del hogar de Cova Manena y dispersión general de carbones.

Capítulo IV.

IV. 4.5 – Conclusiones.

Este trabajo experimental ha aplicado unas variables que ofrecen información

sobre los procesos postdeposicionales que sufren los hogares una vez abandonadas las

áreas de combustión (AC) en dos contextos diferenciados: al aire libre y en abrigo. La

existencia de procesos diferenciales de modificación y conservación en estos dos

contextos ha quedado constatada en este trabajo experimental. Los hogares al aire libre,

a diferencia del hogar en abrigo, sufrieron de forma general una mayor pérdida de su

secuencia microestratigráfica por su exposición a los agentes naturales externos.

Aunque inicialmente se esperaba que el hogar en abrigo no tuviera una

alteración importante, hemos comprobado que existen agentes perturbadores que no han

estado adecuadamente controlados, que provocan una alteración importante de sus

condiciones primarias. Podemos decir que las observaciones que se ha realizado a lo

largo de todo este tiempo de estudio nos han permitido extraer información relativa a

los agentes que, en un sentido o en otro, han incidido en esta modificación diferencial

de los residuos de combustión en los dos contextos. En este sentido, ha sido positivo

generar datos experimentales que nos permiten entender la dinámica de formación del

registro arqueológico. Se ha comprobado que hay diversos factores comunes en los

hogares al aire libre que le dan cierta validez interna a la experimentación por las

variables independientes que se han aplicado. Sin embargo, en el hogar en abrigo la

Page 169: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

169

existencia de variables perturbadoras que no han estado adecuadamente controladas ha

afectado a la validez del experimento. La falta de replicaciones en este contexto no nos

permite por el momento generalizar su dinámica de formación y si hay una

interdependencia entre factores comunes como en los hogares al aire libre. Las diversas

experimentaciones que se han realizado nos han ofrecido información sobre el proceso

de combustión y los procesos postdeposicionales:

Teniendo en cuenta que el pino es uno de los combustibles más y mejor

representados en los carbones recogidos en excavaciones de yacimientos prehistóricos

(Soler, 2003; 54), los datos proporcionados por las experimentaciones que se han

realizado nos han permitido extraer información en relación a este tipo de madera.

Como hemos podido comprobar, las variables relacionadas con los procesos de

combustión indican que la madera de pino blanco (Pinus halepensis) utilizada generó

unos valores altos al inicio de las combustiones de forma general, superando

temperaturas de más de 600º C. Ni la humedad presente en la madera de las

combustiones de EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B, que

provocó diversas fluctuaciones en la temperatura, ni los troncos que no quemaron

completamente impidieron alcanzar valores altos en el proceso de combustión.

El impacto térmico sobre el sedimento, teniendo en cuenta el tipo de suelo y

la cantidad de madera utilizada en cada combustión en las experimentaciones al aire

libre, generó valores en torno a los 50º C y 100º C en los hogares, con una cantidad de

madera entre 20-25 kg. Mientras que en la experimentación EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-

B la cantidad de madera utilizada (11 Kg.) generó sobre el sedimento unas temperaturas

en torno a los 40º C y 50º C. Estos impactos térmicos sobre el sedimento estuvieron

relacionados con las brasas generadas en la combustión. A medida que la madera se fue

consumiendo al inicio de las combustiones por la alta inflamabilidad del pino blanco

(Pinus halepensis), y una vez alcanzados los máximos valores de temperatura en la

parte externa de los hogares, se fueron generando brasas que incidieron sobre el

sedimento.

Con una cantidad de madera similar (20 – 25 Kg.), los hogares al aire libre

crearon unos perímetros de entre 80- 90 cm. de diámetro, excepto en EXP- Fuego 3-

Can Sisó 3-A y EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B, debido a que la madera no quemó

completamente por la humedad que contenía. Así, una vez finalizada la combustión, el

Page 170: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

170

hogar EXP- Fuego 3- Can Sisó 3-A tuvo un perímetro de un diámetro de 70 cm.,

utilizando (26 Kg.) de madera de pino blanco. EXP- Fuego 4- Can Sisó 4-B, con una

cantidad de madera inferior (11 Kg.), alcanzó un perímetro de 50 cm. de diámetro.

El presente estudio relativo a las combustiones nos ha permitido constatar que

el impacto térmico sobre el suelo del abrigo fue mayor, al alcanzar valores en la

temperatura de más de 300º C. Este hecho estuvo condicionado por las características

limosas del sedimento, a diferencia de los suelos de las experimentaciones al aire libre

de carácter arenoso. El perímetro del hogar en abrigo, una vez finalizada la combustión

y utilizando una cantidad de madera de pino blanco (Pinus halepensis) total de (19 Kg.),

fue de 80 – 90 cm. de diámetro.

En referencia a los procesos postdeposicionales a lo largo de este trabajo he

podido comprobar que el viento, la pluviometría, la vegetación y la acción faunística

superficial han incidido en la distribución de los restos de las combustiones a nivel

espacial, y en la modificación de los hogares al aire libre. En la combustión realizada en

abrigo hemos observado que el agente que provocó una acción más perturbadora de los

restos del hogar fue la faunística. La acción perturbadora de estos agentes ha dado como

resultado una serie de procesos postdeposicionales que modificaron su estado original

primario. Estos agentes provocaron un conjunto derivado o “contexto secundario

aislado”, utilizando la terminología de (Butzer, 1989: 117):

“Un yacimiento secundario se compone de materiales arqueológicos que han

experimentado una dispersión efectiva y/o una perturbación completa, y que se

conservan escasas o nulas asociaciones informativas”.

Todo ello entraría a formar parte de las “transformaciones N” especificadas por

(Schiffer, 1976), que forman un conjunto de leyes experimentales que explican y

predicen las interacciones entre los materiales depositados culturalmente y las variables

medioambientales.

Page 171: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

171

Modificación medioambiental de los residuos culturales

Representación sistémica de la modificación ambiental de restos arqueológicos. Adaptado de

(Butzer, 1989: 118)

Hemos podido comprobar que una de las alteraciones más significativas fue la

pérdida de las cenizas en todos los hogares expuestos al aire libre, aproximadamente

tras un mes de abandono. Esta desaparición de cenizas se ha debido a fenómenos de

Aeroturbación, consecuencia del viento que se dio en los diferentes contextos al aire

libre.

Es por ello que uno de los agentes naturales que mayor incidencia energética

tuvo en la dispersión de carbones a cierta distancia de los hogares al aire libre fue el

viento, al crear una tasa de movimiento específica de las diferentes fracciones de

carbones que se estudiaron. (En todas las experimentaciones al aire libre se encontraron

carbones de la fracción > 4 alejados a cierta distancia de los hogares por la fuerza del

viento, así como una distribución general de las fracciones > 2 > 1). El estudio revela

que la fuerza del viento no impidió el desplazamiento de carbones en dirección contraria

a la pendiente. Aunque se observaron también movimientos de carbones a favor de la

pendiente, pudimos comprobar que el movimiento de carbones estuvo condicionado por

la dirección y la velocidad del viento, a pesar de que la pendiente favoreció el

movimiento de carbones al soplar el viento hacia las direcciones con menor resistencia

al movimiento. El viento provocó una pérdida importante de carbones de la

microestratigrafía de los hogares en los primeros meses de abandono y una distribución

Page 172: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

172

espacial en relación al viento que se dio en las áreas experimentales. Las características

orográficas de las localizaciones de los hogares condicionaron la circulación de los

vientos e influyeron en la dirección de la dispersión de carbones. Esta dispersión de

carbones a causa de fenómenos de Aeroturbación estuvo condicionada no sólo por la

localización de las experimentaciones al aire libre y por la topografía del terreno, sino

también por el progresivo crecimiento de herbáceas (Floraturbación) en las áreas

experimentales.

En este sentido, el crecimiento de herbáceas a consecuencia de las lluvias que

se sucedieron en las diferentes localizaciones a lo largo de los meses condicionó las

dispersiones de carbones a medida que la cubierta vegetal sufría cambios en su

distribución sobre la superficie, constituyendo un freno para el movimiento horizontal

de los carbones por la superficie a medida que crecía la vegetación. El análisis de las

variables relacionadas con la pluviometría indica que, a medida que se sucedían las

estaciones climáticas, la cubierta vegetal cambiaba según la escasez o el aumento de las

precipitaciones. Cuando había periodos con escasas precipitaciones la cubierta vegetal

era más seca, este hecho favoreció el desplazamiento de carbones hacia las zonas con

menor densidad o ausencia de herbáceas a causa de la acción del viento. Pudimos

comprobar que si la altura de la vegetación era baja no impedía cierto movimiento de

los carbones por la superficie, al estar condicionado por la tasa de movimiento creada

por el viento a causa de la velocidad y de las rachas máximas que se dieron en las áreas

experimentales. El análisis de la pluviometría nos ha permitido comprobar que a medida

que se registraban precipitaciones de forma regular la cubierta vegetal iba creciendo de

forma homogénea, estabilizando progresivamente los restos de los hogares y su

cubrimiento tras un año de abandono.

Los fenómenos naturales relacionados con la lluvia (Aguaturbación) tuvieron

una incidencia especial en la desestructuración de la secuencia microestratigráfica de los

hogares al aire libre, al provocar lavados superficiales que desplazaron los carbones

hacia el perímetro externo y dejar al descubierto parte de las rubefacciones de las

combustiones. La exposición de las rubefacciones y de los impactos térmicos sobre el

sedimento a causa de los lavados que se produjeron indica que las lluvias y la

exposición continuada al aire libre provocaron cambios de las tonalidades de las

rubefacciones y de los impactos térmicos hacia tonalidades más claras. Cada

Page 173: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

173

experimentación tuvo sus particularidades como hemos visto a lo largo de este trabajo,

pero los diversos agentes ejercieron una acción común en cada uno de ellos.

Las diversas experimentaciones nos han permitido ver que la secuencia

microestratigráfica de los hogares que hemos estudiado coincide con experiencias

realizadas al aire libre (March, 1989, 1992), (Soler, 2003: 81) ya que, cuando se

excavan los restos de un hogar simple, tanto en suelos arcillosos, limosos o arenosos, se

produce la siguiente secuencia microestratigráfica en el interior:

- Capa de carbones y cenizas: Su potencia varía mucho dependiendo de la

forma de la estructura, el tipo de depósito, las alteraciones post-

deposicionales y el tipo de combustible utilizado.

- Sedimento ceniciento: Está en contacto directo con la capa de cenizas. Si

ésta no existe, es posible que haya desaparecido con ella.

- Sedimento oscuro: Generalmente tiene una potencia milimétrica y es

difícil recuperar en muchas ocasiones por su escasa potencia.

- Sedimento de color rojo, oxidado, cuya potencia variará según la duración

del fuego, la forma del hogar, el combustible, la disposición de los troncos,

la temperatura alcanzada durante su funcionamiento y el tiempo de

combustión.

Se ha observado la acción de un agente perturbador que no se había registrado

en otras experimentaciones en hogares tanto al aire libre como en abrigo y es la acción

de animales (Faunaturbación) sobre los restos de las combustiones del Molí dels

Capellans y del abrigo de Cova Manena. Hay que decir que la actividad biogénica en las

cuevas y abrigos es muy importante durante las rupturas en su ocupación o después del

abandono del sitio por parte de los seres humanos. Según se ha descrito, los animales

excavadores, vertebrados o invertebrados contribuyen al movimiento de carbones de un

nivel arqueológico a otro, cavando galerías o removiendo las tierras (Wood & Johnson,

1978: 318)

Page 174: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

174

Las visitas frecuentes de grandes grupos de animales durante un periodo de

tiempo prolongado pueden cambiar el piso de las cuevas y abrigos con sus deyecciones

y pisadas (Schmid, 1980: Pág. 152). Las perturbaciones producidas por animales

también han sido descritas por (Stein, 1983: 277) y se refiere a la mezcla de la tierra

producida por insectos y mamíferos (conejos, perros, tejones, armadillos, mofetas) que

cavan la tierra y la distorsionan (Faunaturbación) a nivel superficial o en profundidad.

Hemos podido comprobar que la perturbación ocasionada al remover los restos de la

combustión y el pisoteo continuado por parte de animales genera un movimiento tanto

horizontal como vertical de los carbones, influyendo en la distribución de carbones a

nivel espacial.

En este sentido, los dos hogares han mostrado aspectos comunes al hacer acto

de presencia un jabalí (Sus scrofa) que alteró en cada uno de ellos la secuencia

microestratigráfica. Aunque no podemos extraer conclusiones sobre este fenómeno sí se

puede afirmar que pueden provocar alteraciones sobre los hogares.

Los fenómenos postdeposicionales en el hogar en abrigo de Cova Manena,

teniendo en cuenta que los fenómenos atmosféricos relacionados con el viento han

tenido prácticamente una influencia nula, nos han permitido comprobar que la presencia

de animales en el interior del abrigo fue determinante en su desestructuración y en la

dispersión de carbones a causa del pisoteo de diversos animales a lo largo de todo un

año. La pendiente del abrigo favoreció el desplazamiento de los carbones a nivel

superficial a causa del pisoteo que sufrió el hogar, como se desprende del muestreo

realizado una vez finalizada la experimentación. Se ha considerado que la dispersión

puede definirse como un movimiento horizontal primario de los agregados de la

superficie que afecta en diferente medida a partículas de masa y forma distintas y que

produce la distorsión o eliminación de las relaciones micro-espaciales originales

(Butzer, 1984: 97)

Las características del sedimento incidieron en el desplazamiento de los

carbones al presentar características limosas y favorecer el movimiento de las diversas

fracciones de carbones. El muestreo revela que se produjo una pérdida importante del

número de carbones, especialmente de la fracción > 4 y un aumento significativo de las

fracciones >2 >1 a causa del pisoteo continuado. La acción de estos animales creó una

Page 175: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

175

mancha en el sedimento a medida que el hogar era pisoteado y se extendía

progresivamente en dirección a la pendiente del abrigo. En última instancia, el resultado

experimental en abrigo evidencia que los animales han jugado un papel determinante en

los procesos postdeposicionales.

Podemos afirmar que los procesos postdeposicionales diferenciales entre

hogares al aire libre y en abrigo se deben a la exposición diferencial que padecen en

función del contexto donde se encuentran (y esto afecta también a nivel interno a cada

grupo, dependiendo del grado diferencial de exposición que tengan los agentes

meteorológicos en cada uno de los lugares donde se ha experimentado). En función de

los procesos que inciden sobre los hogares y de su identidad se produce una variabilidad

de modificaciones que inciden en una conservación diferencial de los restos.

Aunque de momento no podemos realizar conclusiones definitivas aplicables

al registro arqueológico, hemos extraído información relevante sobre los procesos

postdeposicionales que actúan sobre los hogares simples, y en este sentido ha sido

positivo y útil. Al realizar este trabajo nos habíamos marcado unos objetivos que en

parte hemos cubierto, a pesar de que la metodología que se ha propuesto ha presentado

algunos problemas, sobre todo en relación al control de las variables climáticas, que es

necesario mejorar en próximos trabajos experimentales. Por otro lado, creemos que el

número de experimentaciones ha sido limitado y se hace necesaria la continuidad para

conseguir datos experimentales que sean transferibles al registro arqueológico. Es por

ello que defendemos que sólo conociendo aquellos factores objetivables que interactúan

en los hogares al aire libre y en abrigo estaremos en condiciones de establecer

relaciones más sólidas entre las causas y los efectos; es decir, entre las variables

independientes y nuestros fenómenos a observar.

Page 176: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

176

IV. 4.6 – Perspectivas Este trabajo ha sido un punto de partida y por tanto se pretende mejorar la

metodología utilizada en nuevas experimentaciones con (AC) y aumentar el número de

replicaciones experimentales tanto al aire libre como en abrigo. Se hace necesario

mejorar el registro de las condiciones atmosféricas de las localizaciones de los hogares

experimentales. En este sentido, en futuras experiencias se pretende determinar con más

precisión la tasa de movimiento específica de las diversas fracciones de carbones a

causa de la fuerza del viento y la acción de los animales sobre los hogares. Por otro lado

se pretende realizar diversas excavaciones de los hogares experimentales y determinar

los procesos que sufren una vez que son enterrados. Por último se pretende aplicar los

resultados experimentales al registro arqueológico con hogares prehistóricos al aire y en

abrigo en mi Doctorado.

Page 177: ARQUEOLOGIA EXPERIMENTAL

177

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