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La Villa del siglo XIX

Emplazada en un terreno que pertenecía a la fami-

lia Ocampo, en lo alto de las barrancas de San Isidro,

esta casa de veraneo fue diseñada en un época en

que la Capital de la República Argentina se extendía

desde el Río de La Plata hasta la actual avenida Ca-

llao y en que se viajaba en carruajes durante varias

horas para llegar a San Isidro. Toda la familia se insta-

laba allí durante el verano, con numeroso personal de

servicio que los atendía desde la gran cocina y come-

dor del subsuelo y por la noche descansaba en las

habitaciones del último piso. Oscura en el interior, re-

cibía el fresco verdor del parque arbolado y la brisa

del río. Recorrer esta casa es atravesar mucho más

que un espacio, es transitar dos siglos de historia ar-

gentina siguiendo los pasos de una mujer apasiona-

Anfitrionade la cultura por arq. Carlos Sánchez Saravia

Villa Victoria abre sus puertas nuevamente para recibir a los visitantes, de la misma manera que Victoria Ocam-

po recibió allí, durante casi 40 años (desde 1940 hasta su muerte en 1979) a innumerables personalidades de

la cultura, como Graham Greene, Alfonso Reyes, Albert Camus, Aldous Huxley, Le Corbusier, Octavio Paz,

Maurice Ravel, Jorge Luis Borges, y Rabindranath Tagore, entre otros.

La historia de Villa Ocampo

Sonia Sasiain

da que, transformada por la literatura, dedicó

su vida a la edición, traducción y difusión de la

mejores producciones literarias nacionales e in-

ternacionales.

Su legado

Visito la casa en una soleada mañana de

agosto y allí el tiempo parece detenerse y el

ruido y el ajetreo del tránsito de la Av. Liberta-

dor transmutado en el canto de los pájaros,

queda en la percepción, a mucho más que una

cuadra. Seguramente por eso su dueña la eli-

gió para radicarse allí y para convertirla en "(…)

un lugar nuestro y también de los que vengan

con algún aporte valioso; la veo como un sitio

donde hombres y mujeres que se apasionan por

los mismos estudios podrán comentar sus ex-

periencias, intercambiar datos, comparar, reci-

bir y dar."

La UNESCO fue la institución elegida por la

escritora para mantener su legado cultural al

donarle la propiedad en 1973. La casa había

albergado a escritores y artistas de todo el mun-

do, americanos principalmente y en su biblio-

teca se creó la revista Sur para difundir su pro-

ducción. La Villa conformó un espacio de pu-

jante innovación y de permanente polémica, un

lugar de encuentros adonde concurrían perso-

nalidades de gran talento y de muy diversa ideo-

logía.

Durante el verano del año 2005 pude parti-

cipar de una de las etapas de la restauración

de la casa dirigida por la Prof. Cristina Lancelo-

tti y volver a conectarme con la casa en esta

ocasión y recorrer su historia es siempre un re-

novado placer.

patrimonio

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Victoria una criatura maravillosa sobre la que

habían caído tres maldiciones: la de la belleza, la

de la inteligencia y la de la fortuna".

Nace el 7 de abril de 1890, hija mayor de Ma-

nuel Ocampo, ingeniero especializado en puen-

tes y de una belleza de la época: Ramona Aguirre

llamada La Morena por su cutis de criolla, ambos

de familias aristocráticas.

Como toda mujer de su tiempo, independien-

temente de la clase en la que hubiese nacido, te-

nía un destino prefijado para transitar: educarse

para ser "un ángel del hogar" bajo el control del

padre primero y del marido después. Recién cuan-

do Victoria promedió los treinta años la ley argen-

tina equiparó jurídicamente al varón y a la mujer

como ciudadana de pleno derecho y en sus cin-

cuentas estuvo habilitada para votar por primera

vez.

Desde su niñez fue criada para ocupar su lu-

gar en los salones como un objeto sofisticado más,

capaz de educar a los hijos y promover al marido

en las reuniones sociales que debía organizar y

animar. Su educación en distintos idiomas, músi-

ca y pintura quedó en principio en manos de ins-

titutrices extranjeras y pudo acceder a la literatura

inglesa y francesa antes que a la española y lati-

noamericana. Largos viajes familiares por Europa

y cursos en talleres de artistas y en la Sorbona

completaron su formación.

Ser mujer en la aristocraciaargentina del siglo XX

Por Sonia Sasiain

Apasionada lectora, desde los once años qui-

so ser actriz pero su padre sostenía: "el día en que

una hija mía suba a un escenario, en ese mismo

momento, de un balazo me vuelo la tapa de los

sesos". Se casa con Monaco Estrada, en 1912,

miembro de una familia patricia dogmáticamente

católica y conservadora. Viajan a Europa y, du-

rante la travesía Victoria lee una carta de su espo-

so en la que asegura a su suegro que todos los

delirios de Victoria por ser actriz desaparecerán

ni bien ella quede embarazada. Victoria dice: "me

casé con un traidor".

El mirador revestido con mortero que imita a la madera esta sobre el final delparque mirando a la barranca que da al río. Victoria Ocampo disfrutó de estaquinta durante su niñez y juventud, durante la Belle Époque, junto con su familia.

El parque pintoresquista de diseño francés que rodea la casa seextendía originalmente hasta el bajo, cruzando la vía delferrocarril, donde estaban la huerta, los frutales y los macizos de

La magnifica casona de estilo franco normando abre sus tresniveles al gran parque ubicado en las barrancas de San Isidro.

Durante su viaje de bodas conoce a Julián Mar-

tínez, diplomático, primo de Monaco, de quien se

enamora profundamente y se convierte en su pa-

reja permanente por años. Regresa a Buenos Ai-

res, se instala con su marido en la casa de la calle

Tucumán pero cada uno en un piso distinto y sólo

se reúnen en eventos sociales para guardar las

apariencias.

En 1931 funda la revista Sur y dos años más

tarde, la editorial Sur. En su literatura y en la de los

escritores que promocionó incorporó la problemá-

tica del mundo femenino. Objetó el estereotipo de

mujer que dominaba en las imágenes sociales, el

matrimonio tradicional, promovió la defensa del

divorcio, el derecho al goce sexual de las mujeres

y el amor extramatrimonial.

Muere el 27 de enero de 1979 a las 9 de la

mañana en Villa Ocampo. Borges escribe: "En un

país y en una época que las mujeres eran genéri-

cas, tuvo el valor de ser un individuo... Dedicó su

fortuna, que era considerable, a la educación de

su país y de su continente… Personalmente le

debo mucho a Victoria pero le debo mucho más

como argentino."

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Los años posteriores a la muerte de Victoria

transcurrieron sin que se hicieran inversiones en el

lugar, hasta que en 2003, comenzó a restaurarse la

propiedad gracias a la contribución de la Dirección

Nacional de Arquitectura, (Ministerio de Planificación

Federal, Inversión Pública y Servicios), que firmó un

acuerdo con la UNESCO para ello.

Demandó una inversión cercana a los $ 2.000.000.

La UNESCO también aportó fondos, así como la Aso-

ciación Amigos de Villa Ocampo y diversos donantes

privados.

Entrevistamos al arquitecto Fabio Grementieri, res-

ponsable de la investigación y diseño del proyecto de

restauración por el Estudio Baez-Carena Grementieri

quien nos comenta: "El proyecto Villa Ocampo prevé

la restauración integral en distintas etapas.

Anfitrionade la cultura.

Las obras comenzaron en la planta baja en la que se en-

cuentran: la sala de música, el comedor y el salón de reunio-

nes de la revista Sur. En la segunda etapa, se continuó con el

primer piso, donde está la habitación de Victoria y su bibliote-

ca. Por su significado histórico, estos espacios fueron valua-

dos como áreas de máxima protección.

El criterio rector de la restauración era el de respetar el co-

lor blanco, hoy virado al ocre, que Victoria había dado a las

paredes con pintura látex, por eso se decidió realizar una lim-

pieza y consolidar los restos de papel y pintura sueltos. Los

métodos de reintegración de color privilegiaron siempre las

pautas de reversibilidad y mínima intervención.

La restauración

Un tapiz de Pablo Picasso, originalmenteuna alfombra, está colgado de una pareden la llegada de la escalera principal.

El vitraux de lalinterna central que

ilumina todo elprimer piso fue

restaurado.

Contigua a la biblioteca seencuentra la sala de música en laque conviven los mueblespaternos: los gabinetes chinos demadera laqueada del siglo XVIII,los sillones Luis XVI y la lámparade cristal facetada Art Decó con elpiano Steinway de media cola enel que tocaron Federico GarcíaLorca, Igor Stravinsky que lededicó su ópera-balletPersephóne y Ansermet.

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En el hall central los cuadrosde sus bisabuelos pintados

por Prilidiano Pueyrredónnos hablan de una tradición

aristocrática familiar.

E l color blanco de losinteriores, la ecléctica

combinación de muebles,objetos y cuadros enuncian

los principios estéticos yéticos de quien habitó esta

casa y creó un proyectocultural único en Sudamérica.

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Anfitrionade la cultura.

La recuperación de la biblioteca

La recuperación de la biblioteca comenzó en 2006. Hoy,

a través de un proyecto de puesta en valor que compren-

de más de doce mil volúmenes; se los está reubicando

según distintos criterios: temáticos, notas manuscritas que

la escritora hacía en sus páginas, dedicatorias, etc. El

material se digitaliza y acondiciona para que pueda ser

consultado por los investigadores que deseen profundizar

en el universo lector de Victoria y de los intelectuales que

la acompañaban. Los primeros 3.000 ejemplares ya están

disponibles para consulta en el centro de documentación

y los trabajos prosiguen a medida que se restauran nue-

vos sectores de la casa.

En la biblioteca grancantidad de libros deVictoria esperan serclasificados.

Muebles ingleses, un lenteestroboscopico para verfotos 3D, en la pareddesde un cuadro un dibujode Victoria observando ellugar y gran cantidad defotos de Victoria con losvisitantes a la casa.

Al gran comedor que combina la gran mesacon las sillas de paja y las lámparas dediseño Bauhaus. Se pueden imaginar losecos de las conversaciones de los ilustresinvitados bajo la mirada atenta de la figurareproduce en una escultura el retrato deVictoria hecho por el príncipe Troubezkoy.

La selección y clasificación de

materiales fueron realizadas por Er-

nesto Montequín. El inventario fue

corregido por Maximiliano Maito y Flo-

rencia Cuffia. Esta última coordinó el

trabajo de ubicación, limpieza y des-

infección de los ejemplares. El traba-

jo fue financiado por una donación del

David Rockefeller Center for Latin

American Studies de la Universidad

de Harvard.

Con estas obras, la Villa pasa a

formar parte de un circuito turístico

cultural, reabierto para el público con

la colaboración de la Municipalidad

de San Isidro. Se desarrolla un pro-

grama de variadas actividades cultu-

rales que pueden consultarse en la

página oficial:

www.villaocampo.org

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Créditos

Textos: Sonia Sasiain para Saravia Contenidos

Fotografía: Hernán y Jorge Verdecchia

Verdecchia: interlink.com.ar

Papeles victorianos vistenlas paredes de los baños.

Victoria Ocampo acompañada por IgorStravinsky, Indira Gandhi, Manuel MujicaLainez, Andre Malraux, Jorge Luis Borges,José Ortega y Gasset y Rabindanath Tagore.

En uno de los baños principales artefactos norteamericanos de losade los años cuarenta se mezclan con la boisserie pintada de blancoy un extraño mueble que incorpora la bañadera y el inodoro.

En el amplio dormitorioprincipal muebles dedistintos estilos rodeana la gran cama que miraal parque.

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