Adolescentes y

Luchas de Poder

Entiéndalos

Las luchas de poder tienden a ser un shock para los padres/madres de familia que están tratando de educar a sus adolescentes. Con este shock vienen muchas emociones. Usted se enoja y su hijo/a se enoja. Entonces usted se siente culpable y preocupado. Se pregunta en qué momento se complicaron tanto las cosas y en dónde se equivocó. Así que permítame tranquilizarle. Este es un comportamiento absolutamente normal. Estos sentimientos son normales. Cuando alguien se enoja con usted, es normal que usted también se enoje con él/ ella. No importa qué tan bien conozca usted las teorías sobre el desarrollo del adolescente o todas las estrategias de interacción que hay allá afuera. De igual manera usted se sentirá enojado y hasta herido. La clave está en aprender qué cosas positivas se pueden hacer en una lucha de poder, aunque usted se sienta enojado y herido.

Entienda su Desarrollo

Existen muchas razones por las cuales usted notará un incremento en las luchas de poder cuando sus hijos llegan a la adolescencia. He aquí las tres razones principales:

1. Las hormonas es la razón número uno de por qué notará usted un incremento en las

luchas de poder con sus adolescentes. Es tan simple, o tan complicado como eso. Generalmente esto comienza en las mujeres hasta dos años antes que en los hombres. La pubertad está iniciando sus efectos en sus hijos y no se detendrá por un buen rato. Esto significa que los adolescentes podrían no darse cuenta de por qué están discutiendo por un asunto que no les molestaba la semana pasada. Principalmente, porque junto con su cambio de voz vienen cambios de humor. En consecuencia, habrá ocasiones en que será mejor que usted deje pasar el asunto y no involucrarse en una discusión por ello.

2. Las habilidades de pensamiento crítico comienzan a desarrollarse durante la

pubertad y nadie está completamente seguro de cuándo dejan de desarrollarse dichas habilidades1. Los niños que están entrando a la etapa de la vida adolescente ahora son capaces de pensar en áreas grises. Ya no todo es blanco y negro. Combine esto con el hecho de que todavía quieren aferrarse a ciertas fantasías infantiles y entonces usted comenzará a entender cuántos tonos de gris hay en el espectro de color. Las luchas de poder comenzarán porque usted podría nunca estar en el mismo tono de gris que sus alumnos adolescentes1.

1 Lo último en la investigación del cerebro plantea que varias de las áreas del cerebro asociadas con las habilidades

más complejas de pensamiento continúan desarrollándose hasta después de los veinte años de edad.

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… Adolescentes y Luchas de Poder Los adolescentes comienzan a ver a los adultos en sus vidas como seres humanos con fallas (*AUCH*). No solo pueden ver por qué las cosas son correctas o incorrectas, han aprendido a proyectar esto hacia los adultos en sus vidas. Y se encargarán de hacerles saber a estos adultos cómo se sienten al respecto. Puesto que usted es la primera figura estable en las vidas de estos adolescentes, usted será un blanco lógico al cual apuntar mientras practican y desarrollan sus propias ideas. Las luchas de poder surgirán mientras sus adolescentes cuestionan y critican las creencias, actitudes y comportamientos de los adultos significativos en sus vidas.

Entonces, ¿Qué hacer? ¿Qué hacer? He aquí algunas cosas que usted puede aprender y que le ayudarán a evitar las luchas de poder con sus adolescentes en casa y fuera de ella:

• Aprenda a hablar en un tono de voz tranquilo y firme. Levantar la voz y gritar nunca ayuda.

• Respire profundamente y cuente regresivamente desde el 100, y recuerde, el objetivo es, ayudar a que ese adolescente se convierta en un adulto joven responsable, feliz y sano.

• Sea consistente con los límites y las reglas.• Utilice consecuencias naturales y lógicas. Sea firme y apéguese a ellas. • Puesto que probar los límites es un comportamiento normal en los adolescentes, no

espere que cumplan con esos límites a la primera. • Escuche sus sentimientos y mantenga una mentalidad abierta. Aún tiene usted la

posibilidad de decir no, así que por qué no escuchar lo que ellos tienen que decir. • Sea razonable –usted es el adulto. Si lo necesita, tome un “tiempo fuera” para

tranquilizarse.

Psic. Diana Ramírez Santos