47 LA IMAGINACIÓN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

download 47 LA IMAGINACIÓN EN LA CIENCIA  HOLTON.pdf

of 28

Transcript of 47 LA IMAGINACIÓN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    1/28

    LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA1.

    GERALD HOLTON.

    Me siento muy honrado por haber sido elegido para hablarles sobre el tema dela imaginacin en la ciencia en el marco de este prestigioso Festival dei Due

    Mondi;las artes y las ciencias tambin son Dos Mundos, pero mantienen una

    relacin de primos hermanos porque, aunque sus herramientas y productos

    son diferentes, el ingenio y la pasin que les caracteriza son similares.

    Tambin hay una larga historia de estimulacin recproca, ya desde la poca

    de Pitgoras, quien sostena que tanto la msica como los fenmenos de la

    naturaleza estn gobernados por la relacin entre los nmeros enteros. Y como

    voy a tratar de demostrar aqu, los historiadores del arte nos han proporcionado

    enfoques clave en lo que se refiere a determinados problemas de la historia de

    la ciencia.

    No obstante, si deseamos analizar la imaginacin de los cientficos en pleno

    funcionamiento, tendr que ser pillndoles por sorpresa. Por razones bastantes

    slidas, los cientficos modernos tratan de mantener sus conflictos personales

    al margen de los datos que publican y de sus libros de texto. Sobre ese punto,

    continua vigente el consejo que Louis Pasteur daba a sus alumnos y colegas:

    Haced que vuestros resultados parezcan inevitables.

    As pues, es en los registros privados y en los cuadernos de laboratorio donde

    los historiadores de la ciencia pueden encontrar cualquier cosa que los propios

    cientficos deseen ocultar. Aun cuando la lgica, las matemticas y la

    experimentacin constituyen guas constantes, no son suficientes en absoluto

    si lo fueran, cualquier ordenador podra ocuparse de las mismas

    investigaciones sin ayuda. Si miramos por el agujero de la cerradura de la

    puerta del laboratorio, veremos que el cientfico tambin necesita muchas otras

    herramientas. Voy a citar ejemplos de tres de estas herramientas en el

    quehacer de la ciencia, tres compaeras estrechamente unidas en el progreso

    1Este artculo es una reproduccin textual del documento de imgenes y metforas de la ciencia compilacin deLorena Preta, publicado por Alianza Editorial en 1992., lo estamos utilizando reconociendo plenamente su autoria yque se esta utilizando con fines exclusivamente educativos.

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    2/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    2

    de la ciencia moderna y que rara vez son debidamente reconocidas. Les voy a

    hablar de la imaginacin visual, la imaginacin metafrica y la imaginacin

    temtica. La mayor parte de mis ejemplos proceden de la fsica, pero se

    podran cosechar casos similares de las dems ramas del rbol de la ciencia.

    Empezaremos por la imaginacin visual, aunque slo sea porque los primeros

    pasos de la ciencia occidental transcurrieron a travs de los ojos -a travs de la

    observacin de los enigmticos movimientos de los planetas, constantes

    caminantes entre las estrellas fijas. Por eso no resulta sorprendente que a

    menudo se rodearan de grandes sospechas aquellas entidades que podan

    imaginarse pero permanecan ocultas a la visibilidad directa. Por ejemplo, el

    esquivo ter pareca una base necesaria para entender la propagacin de la

    luz, constituida por ondas electromagnticas transversales; pero, con el fin de

    reproducir los movimientos supuestos dentro de ese ter, hubo que inventar

    modelos mecnicos todava ms fantsticos --que dieron lugar a ejemplos de

    modelos en movimiento en el ter -hasta que Heinrich Hertz decidi "echar el

    alto", diciendo que las ecuaciones matemticas que describen la luz son todas

    las que podemos imaginar cuando examinamos el movimiento de las ondas

    luminosas.

    De modo similar, la antigua nocin del tomo como entidad diminuta, indivisible

    y discontinua resultaba cada vez ms insuficiente a medida que iba siendo

    necesario explicar nuevas propiedades de la materia elctricas, qumicas y de

    otros tipos. Al comienzo de este siglo, algunos cientficos corno, por ejemplo,

    Ernst Mach, se lanzaron contra la idea misma del tomo, preguntando a todo el

    mundo con gran sarcasmo:" Alguien ha visto alguno?"

    De hecho, no habra sido imposible conseguir algn tipo de fsica y qumica sin

    postular la existencia de los tomos, pero habra sido mucho ms complicado y

    la ciencia hubiera sido menos bonita. Afortunadamente, los ojos acudieron en

    nuestra ayuda. En 1912, el fsico C. T. R. Wllson mostr estas fotografas

    (Figura 1) en una reunin cientfica, y aquello zanjo la cuestin para la mayora

    de la gente. Haba dirigido un haz de partculas alfa procedentes de una fuenteradioactiva hacia una cmara de niebla, una pequea caja de cristal llena de

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    3/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    3

    aire hmedo a baja temperatura. A lo largo del recorrido de las partculas alfa,

    que por supuesto son invisibles, aparece una faja de niebla, una pequea

    nube. Eso es lo que revela los recorridos de las partculas alfa, algo as como

    las estelas de vapor que dejan en el cielo los aviones en el paso.

    figura 1

    Aquello result bastante espectacular. Pero lo verdaderamente excitante

    estaba en las discontinuidades, en los cambios repentinos de la direccin dealgunos recorridos (como el que se observa en el ngulo inferior izquierdo). La

    partcula alfa pareca chocar con algo, y desviarse en otra direccin. En un

    caso, el obstculo con el que haba chocado a saber, el ncleo de una de las

    molculas de gas- haba recibido el impulso suficiente como para dejar su

    propio rastro diminuto de vapor mientras la partcula recorra una corta

    distancia en otra direccin. Estas imgenes son sencillas, silenciosas y

    apacibles; no hay evidencia de movimiento. En s mismas, cada una de ellasrepresenta tan slo un parsimonioso jeroglfico. Pero para una mente

    debidamente preparada y conectada a un ojo alerta, presentaban un drama

    abrumador: la primera evidencia irrefutable de la existencia de discontinuidad

    atmica a un nivel bastante inferior al de la percepcin directa. La dispersin de

    haces de partculas se convirti en el camino para "ver" acontecimientos

    atmicos.

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    4/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    4

    La generacin siguiente de herramientas para vislumbrar acontecimientos

    subatmicos fue la cmara de burbujas. Las trayectorias se describan en un

    medio lquido, y se hacan visibles en forma de filas de diminutas burbujas. La

    figura 2 representa un ejemplo clebre. La fotografa tiene un aspecto algo

    rudimentario, pero en este caso hay que ignorar las rayas y los garabatos y

    concentrar la atencin tan slo en cinco lneas. Estas revelan que ha tenido

    lugar un ciclo vital en esta pequesima etapa, como se observa en la figura 3:

    un pin -partcula elemental cuya trayectoria est marcada con la letra !en la

    ilustracin que interpreta las observaciones sin ms - entra en el campo visual

    procedente de la parte inferior. Se encuentra con un confiado protn en la

    cmara y de su interaccin surgen dos partculas llamadas "extraas" ( K0y "0)

    debido a que su periodo de supervivencia es inesperadamente largo tratndose

    de partculas creadas: nada menos que 10-10 segundos! Estas partculas, al

    ser neutrales, no dejan ninguna huella, y finalmente tambin se descomponen.

    El resultado de la descomposicin de cada una de las partculas "extraas" es

    una partcula positiva y otra negativa, que producen en nuestro campo visual,

    como si dijsemos, una tercera generacin, en la que cada cual posee de

    nuevo su propio perodo de vida caracterstico.

    figura 2

    Notarn ustedes que el fsico est utilizando aqu la retrica propia de un

    conocido tipo de drama o relato popular, representado en el tiempo y en el

    espacio, una historia de nacimiento, aventura y muerte. La fuerza de muchosconceptos cientficos de gran utilidad descansa, al menos en parte, sobre el

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    5/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    5

    hecho de que son meras proyecciones antropomrficas del mundo de los

    asuntos humanos.

    figura 3

    Aqu tenemos otra fotografa de una cmara de burbujas, tomada en 1973.

    Para entonces la cmara de burbujas ya se haba convertido en un monstruo

    de 12 metros cbicos de propano lquido, apodado Gargamel en recuerdo de la

    madre de Garganta. Entre los miles y miles de fotografas tomadas en el

    CERN, donde pasaron por la cmara innumerables haces de invisibles

    partculas neutrnicas creadas por un acelerador, uno de los detectores se fijoen la configuracin que muestra la figura 4, diferente de cualquier otro. Al

    analizarla se descubri que se trataba de algo que solemos denominar suceso

    dorado , el reflejo de una rara pero reveladora, interaccin.

    Debemos aconsejar al ojo no especializado que ignore casi todo lo que

    aparece en la fotografa y se centre, esta vez, en el tenue garabato de la

    izquierda; es la firma tpica de un electrn. La interpretacin de este suceso

    contribuy definitivamente a confirmar la teora de la unificacin de las fuerzas

    electromagnticas y dbiles, la llamada fuerza electrodbil. Por ese logro

    compartieron un premio Nbel los Norteamericanos Sheldon Glashow y Steven

    Weinberg con un investigador de la Universidad de Trieste, llamado Abdus

    Salam. Dentro de un momento volver sobre esta fotografa para decirles como

    la encajo la imaginacin cientfica.

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    6/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    6

    figura 4

    Pero, antes de esto, debemos retroceder hasta el nacimiento de la ciencia

    moderna en el siglo XVII, para entender mejor la fuerza inmensa de la

    imaginacin icnica, es decir, de la capacidad para formar imgenes mentales

    satisfactorias a partir de imgenes ptimamente esquivas y para convertir

    vagas percepciones en slidos conocimientos. Mi amigo el profesor JeromeBruner ha trabajado mucho sobre el aspecto psicolgico de este proceso, y

    cuando intervenga en este simposio la semana prxima quiz haga referencia

    a ello. Hoy, mi ejemplo de este proceso de conversin desde la imaginara

    ptica hasta la mental se refiere a Galileo Galilei. Se trata de un caso estudiado

    por el historiador del arte Samuel Edgerton, cuyo exhaustivo anlisis voy a

    esbozar aqu.

    sta es la historia: en 1609, haba dos hombres mirando hacia nuestra Luna a

    travs de un nuevo invento, el telescopio. El primero era el matemtico,

    cartgrafo y astrnomo Thomas Hariot que, desde Londres, operaba con un

    telescopio de 6 aumentos desde finales de julio de 1609. El otro era Galileo,

    entonces profesor de matemticas en la Universidad de Padua; haba

    aprendido por su cuenta a pulir lentes y se haba fabricado un telescopio de 20

    aumentos, con el que observaba la Luna desde finales de otoo del mismo

    ao. Afortunadamente, tenemos datos de lo que cada uno de estos dos

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    7/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    7

    hombres pensaban que vean. Resulta instructivo comparar sus anotaciones

    privadas, as corno conocer las razones de las grandes diferencias entre ellos.

    figura 5

    Ambos saban que, al menos desde la poca de Aristteles, se consideraba a

    la Luna corno una esfera perfectamente lisa y uniforme, smbolo del universo

    incorruptible allende la Tierra. Adems, en los cuadros posteriores a la EdadMedia, la Luna aparece como un signo de la Inmaculada Concepcin de la

    Virgen Mara; la figura 5 es un ejemplo (tomado de un cuadro de Murillo).

    Desde luego, haba dos problemas. Uno era que algunas reas de la Luna real

    evidentemente son ms oscuras que otras, por lo que no poda ser totalmente

    uniforme. Thomas Hariot se refiri a "esa extraa abundancia de manchas". El

    segundo problema consista en que si la Luna realmente era un espejo con

    forma de esfera perfecta, en algn momento nos reflejara la imagen del sol tan

    slo sobre una pequea zona de su superficie, como un punto brillante sobre

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    8/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    8

    una gran bola oscura. Pero, como siempre, surgieron las teoras ad hoc

    necesarias para hacer frente a esos problemas. Por ejemplo, hubo quien dijo

    que la superficie de la Luna era translcida y, como si fuera de alabastro,

    devolva la luz de una manera difusa, dejando entrever los diferentes

    materiales interiores.

    La primera observacin de Hariot se ha conservado entre sus papeles (figura

    6). Se trata de un tosco dibujo que muestra el limite de la iluminacin, la lnea

    divisoria entre las zonas oscuras y la parte iluminada de la Luna. Pero lo ms

    importante es que evidentemente Hariot no sabe, y no comenta en absoluto,

    porque se trata de una lnea quebradaen lugar de la lnea curva que seria de

    esperar si la Luna fuera realmente una esfera perfecta. El ve, pero las teoras

    de la poca sobre la perfeccin de la Luna le dificultan la tarea de entender lo

    que ve.

    figura 6

    Veamos ahora el caso de Galileo. A partir de finales de noviembre de 1609,

    examina con atencin la fantasmagrica Luna a travs de su telescopio y

    representa sus observaciones en forma de varios bellos dibujos a la sepia

    (Figura 7). Es evidente que Galileo tambin ve las lneas quebradas

    correspondientes al lmite de la iluminacin. Pero las interpreta enseguida

    como irregularidades de la superficie, como montaas y crteres, y utiliza la

    tcnica pictrica del claroscuro para manipular la luz y la oscuridad, recalcando

    las protuberancias y las depresiones.

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    9/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    9

    Lo que ve Galileo aparece magnficamente descrito en su libro Siderius

    Nuncius, publicado en 1610. La figura 8 muestra una de las ilustraciones de

    este libro: exagera el paisaje Lunar a propsito. Galileo escribe all que la

    superficie de la Luna, en contra de la concepcin filosfica de la poca, no es

    lisa, uniforme y exactamente esfrica..., sino irregular, tosca y llena de

    cavidades y prominencias, similar a la faz de la Tierra, ataviada de cadenas

    montaosas y valles profundos. Galileo ve que no hay una diferencia

    cualitativa entre la Tierra y la Luna. Incluso calcula a partir de las sombras

    proyectadas por los picos, que las montaas deben tener 6.000 metros de

    altura, qu son mas altas que los Alpes de la Tierra! Su voz suena muy

    tranquila: pero l sabe que la vieja concepcin aristotlica del mundo se est

    desmoronando bajo los efectos de esa voz.

    figura 7

    Las noticias de los sensacionales hallazgos de Galileo se extendieron

    rpidamente por toda Europa y transformaron lo que la gente vea he aqu un

    ejemplo de cmo el significado transmitido por datos objetivos depende de los

    supuestos de partida. El propio Thomas Hariot, despus de leer el libro de

    Galileo, volvi a situarse ante su telescopio en julio de 1610, un ao despus

    de su primer intento, e hizo un dibujo de su nueva observacin (Figura 9),

    donde aparecen montaas y crteres ensombrecidos -ms todava que en el

    esbozo de Galileo. Una vez convertido a un nuevo modo de mirar, una vez

    abandonados sus viejos supuestos de partida, Hariot empez a ver algobastante diferente de la misma vieja Luna. Quiero recordar aqu ese magnfico

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    10/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    10

    pasaje de Ana Karenina en el que Ana, desesperadamente enamorada del

    conde Vronsky, explica a una amiga que no puede amar a un hombre como su

    esposo porque ste tiene unas orejas enormes. Su amiga replica, muy

    sabiamente, que lo que ha cambiado no son las orejas del marido de Ana, sino

    el corazn de sta.

    figura 8 y 9

    Ahora debemos preguntarnos qu fue lo que, antes del cambio de actitud de

    Hariot, hizo que Galileo y l miraran el mismo objeto con ojos tan diferentes.

    Por supuesto, parte de la respuesta descansa sobre la mayor disposicin de

    Galileo a considerar un universo copernicano, en el que todos los planetas y

    satlites pueden ser similares. Pero otra gran parte de la respuesta tambin

    descansa sobre sus respectivas formaciones en materia de visualizacin, sobre

    el modo en que haban aprendido a utilizar sus ojos como herramientas de laimaginacin. En la Inglaterra de 1609 en la que viva Hariot, la cumbre del logro

    artstico era la palabra, por ejemplo la de Shakespeare, que era ms importante

    que cualquier cosa en el mbito de las artes visuales. De hecho, desde el punto

    de vista visual, Inglaterra estaba bastante atrasada -casi podramos decir que

    en la Edad Media- con respecto al entendimiento de realizaciones en

    perspectiva. Sin embargo, en la Italia de Galileo, la pintura del Renacimiento

    haba captado a los intelectuales en estado de alerta. Bajo el reinado de

    Cosimo I de Florencia, Vasari haba fundado la gran Academia de Diseo en

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    11/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    11

    1562, un centro de artes visuales y arquitectura a beneficio de todos, no

    solamente de los profesionales. No es casualidad que cuando Galileo solicit

    su primer empleo a la edad de veinticinco aos, fuera para cubrir el puesto de

    profesor de matemticas en esa Academia, para ensear geometra y

    perspectiva, y en 1613 lleg a ser elegido miembro de tan distinguida

    Academia.

    As pues, es muy probable que Galileo, como todos los alumnos de la

    Academia, hubiera estudiado el problema de las sombras que proyectan los

    cuerpos sobre superficies diferentes. Los textos tpicos y ms que sobados que

    se utilizaban en la Academia muestran cmo se traducen en luces y sombras

    las protuberancias y depresiones de unas esferas reticuladas (figura 10). El

    arte de la perspectiva y del claroscuro eran herramientas y habilidades que

    Galileo haba aprendido en su juventud y, en 1609, cuando reaparecieron ante

    sus ojos los viejos problemas relacionados con la proyeccin de la sombra,

    tuvo ocasin de hacer buen uso de dichas herramientas en un contexto tan

    diferente como el del campo visual telescpico. Se podra decir que Galileo

    consigui entrever, a travs de este tubo ptico todava bastante pobre, que los

    cientficos de todo el mundo pronto empezaran a ver y a entender los

    fenmenos caractersticos del sistema solar.

    figura 10

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    12/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    12

    Este caso representa un ejemplo de esta mezcla poderosa a la hora de hacer

    ciencia: la mezcla de datos rigurosos, de slidos recursos matemticos y

    pragmticos y de presupuestos tericos, todos ellos trabajando juntos en el

    teatro de la mente. Y en esta mezcla, ha menudo a resultado crucial la destreza

    en el uso de la imaginacin visual. En una clebre carta dirigida a Jacques

    Hadamar, Einstein confesaba lo siguiente: Las palabras o el lenguaje, ya sean

    en su forma escrita u oral, no parecen jugar papel alguno en mi mecanismo de

    pensamiento. Las entidades fsicas que parecen actuar como elementos del

    pensamiento son signos concretos e imgenes ms o menos claras que

    pueden producirse y combinarse deliberadamente. Era como si, en su

    actividad intelectual, Einstein jugara con las piezas de un rompecabezas. Y en

    otra carta dirigida a Max Wetheimer, Einstein deca: Muy rara vez pienso en

    palabras... suelo hacer una especie de repaso, un repaso visual.

    Seguramente por eso, durante sus aos de juventud en Berna, Einstein haba

    sido un excelente inspector de la Oficina de Patentes. Su trabajo consista en

    estudiar las descripciones, y sobre todo las ilustraciones, enviadas por los

    inventores, y despus reconstruir en su mente aquellas mquinas propuestas

    para ver si realmente podan funcionar. Era una tarea fcil para l. Y adems,

    en el marco de su fsica, l poda visualizar sin esfuerzo ciertos procesos que

    para otros eran excesivamente complejos.

    Permtanme ponerles un sencillo ejemplo relacionado con esto. Si ustedes han

    estudiado fsica y llegado hasta la introduccin de la peculiar teora de la

    relatividad, sin duda alguna su libro de texto les pedir que supongan que un

    tren pasa a gran velocidad por delante del andn de una estacin en un da detormenta. Tambin tendrn que imaginar que hay un observador en el andn y

    otro que viaja en la parte central del tren. Ahora caen del cielo dos centellas,

    cada una de las cuales inciden sobre el tren en marcha; una incide en la parte

    de delante y la otra en la de atrs. La pregunta importante es: cmo vern

    esto los dos observadores, el que est parado en el andn y el que viaja en el

    tren a gran velocidad?.

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    13/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    13

    Ustedes recordarn que la respuesta era: si para el primer observador las dos

    centellas parecen estrellarse a la vez, al otro (el que viaja hacia uno de los

    objetos centelleantes y se aleja del otro), le parecer que caen en momentos

    distintos. Esto demuestra que la simultaneidad no es absoluta para todo el

    mundo, sino que depende del estado de movimiento de cada cual. Es

    relativa.

    De la visualizacin de esta escena en sus pensamientos, de la realizacin

    correcta de este "experimento mental", obtendrn ustedes gran cantidad de

    fsica, y este ejemplo tan grfico desde el punto de vista visual se deriva

    directamente de los escritos del propio Einstein. (En su libro de 1917 sobre la

    relatividad aparece un diagrama que presenta su esbozo caractersticamente

    parsimonioso de la situacin.) Todo esto era un juego de nios para l, aunque

    no resultaba tan fcil para los dems, que tardaron mucho tiempo en aprender

    a ver.

    Actualmente quiz haya llegado a ser demasiado fcil. La imaginera de

    Einstein se ha abierto camino incluso en el mundo del teatro. Si han visto

    ustedes la pera de Robert Wilson y Phillp Glass que lleva por ttulo Einstein on

    the Beach y cuya representacin dura cinco horas, habrn tenido ocasin de

    contemplar el retrato de ese tren; en la pera se desliza muy lentamente por el

    escenario durante dos largos actos, y por encima de l se mueve tambin muy

    despacio algo parecido a esas centellas de que antes hablbamos. A Einstein

    le habra dejado atnito este espectculo, porque en su ejemplo todo dependa

    de que el tren fuera a gran velocidad.

    En cualquier caso, la imaginacin visual de Einstein le proporcion una ayuda

    soberbia en mltiples ocasiones. Hace algn tiempo encontr en los Archivos

    Einstein un manuscrito fechado en 1920 en el que el gran filsofo explicaba

    cmo lleg a inventar la teora general de la relatividad. La clave estuvo en

    darse cuenta de que los efectos del movimiento acelerado y de la gravedad

    pueden considerarse equivalentes. Como el propio Einstein describe en el

    manuscrito: un da de 1907 se me ocurri la idea ms afortunada de mi vida,a saber, que el campo gravitatorio tan slo tiene una existencia relativa.

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    14/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    14

    Porque si nos fijamos en un observador que cae ligeramente desde el tejado de

    su casa, veremos que mientras cae no existe para l ningn campo

    gravitatorio. Por ejemplo, cualquier objeto que l mismo lance durante su cada

    permanecer cerca de l.

    Este experimento mental cientfico visualizable y extraordinariamente simple

    es la base del principio de equivalencia de la relatividad general. Debo aadir a

    modo de inciso que me alegra enormemente el hecho de que Robert Wilson y

    Philip Glass no conocieran la existencia del manuscrito de Einstein, porque de

    lo contrario quiz hubieran colocado a alguien cayendo libremente desde el

    tejado al escenario del teatro.

    Durante los primeros decenios de este siglo, la imaginacin icnica continu

    dando lugar a un triunfo cientfico tras otro. Por ejemplo, el tomo de Niels Bohr

    de 1913 adopt la imaginera del sistema solar copernicano. Al principio, desde

    luego supuso un gran avance pero, a mediados del decenio de 1920 empez a

    resultar evidente lo peligroso que era considerar los procesos atmicos en

    trminos de una imaginera inicialmente inventada para acontecimientos a gran

    escala, tales como el movimiento de los planetas.

    Era necesario un nuevo mtodo para imaginar fenmenos como la rotacin

    del electrn o para considerar la luz como onda y como partcula. Se haban

    convertido en un obstculo las intuiciones de fcil visualizacin, en oposicin a

    la abstraccin conceptual. No hace falta saber mucho acerca del principio de

    incertidumbre de Heisenberg para darse cuenta de que aquellas rbitas tan

    precisamente trazadas de los modelos atmicos de Bohr en realidad no puedenexistir en la naturaleza. Esto llev a Heisenberg, a partir de 1925, a proponer

    una solucin necesaria pero drstica, una solucin que hasta hoy hace difcil

    que los legos en la materia se sientan cmodos dentro de la fsica moderna.

    Heisenberg elimin por completo el uso de modelos representables del tomo.

    Una frase tpica de Heisenberg era: El programa de la mecnica cuntica tiene

    que liberarse antes que nada de esas descripciones intuitivas... La nueva

    teora, por encima de todo, debe abandonar por completo la visualizabilidad.O, como escribi Dirac en 1930: La tradicin clsica consideraba al mundo

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    15/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    15

    como una asociacin de objetos observables... Sin embargo, desde hace

    relativamente poco tiempo cada vez es ms evidente que la naturaleza

    funciona de acuerdo con un plan diferente. Sus leyes fundamentales no

    gobiernan el mundo tal como aparece en nuestra imagen mental de un modo

    directo, sino que controlan un sustrato del que no podemos formarnos una

    imagen mental sin introducir irrelevancias.

    En la mayora de las dems ciencias, la vieja imaginacin icnica contina

    plenamente vigente. Pero los cientficos cunticos de hoy han logrado un nuevo

    tipo de visualizabilidad, aunque en gran medida a travs de constructos

    matemticos en lugar de fsicos, a travs de simetras y de diagramas

    abstractos. La figura 11 nos ofrece al menos una pista del modo en que el

    nuevo mtodo de pensamiento difiere del antiguo. En la parte superior se

    encuentra representado el viejo mtodo visceral que se empleaba para contar

    lo que ocurre cuando dos electrones con la misma carga se aproximan entre

    s. Es una especie de instantnea situacin en el espacio; ambos electrones

    ejercen mutuamente fuerzas de repulsin que de algn modo atraviesan el

    hueco existente entre ellos. Pero ahora se considera mucho ms significativo

    pensar que este fenmeno obedece a que las dos partculas intercambian un

    fotn, una entidad que mediatiza la interaccin. La parte inferior de la figura 11

    representa este nuevo mtodo de pensamiento, por medio de un tipo de

    diagrama que debe su nombre a su inventor, Richard Feynman, y que aporta

    una representacin en el espacio-tiempo de la dispersin de los dos electrones.

    figura 11

    Algo similar se aplica a la desintegracin beta del neutrn, que fue explicada

    por primera vez por Enrico Ferm. La figura 12 est tomada de un libro editado

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    16/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    16

    recientemente por el profesor Paul Davies, The New Physics, quien sin duda

    hablar de la nueva fsica en su exposicin programada para maana. Segn

    el viejo modo de representar la desintegracin beta del neutrn (parte superior

    de la figura 12), la interaccin entre el neutrn original y el protn, electrn y

    neutrino resultante, tiene lugar en un nico punto espacio temporal A. En

    contraste, como seala el profesor Davies, y tal como se representa en la parte

    inferior de la figura 12: De acuerdo con la contemplacin de la desintegracin

    beta, la interaccin entro las cuatro partculas se despliega en el espacio-

    tiempo por medio del bosn W que intercambian. A energas bajas, las dos

    descripciones dan las mismas predicciones, pero, cuando la energa es

    elevada, los resultados son bastante diferentes.

    figura 12

    A medida que han ido desvanecindose los modelos mentales simples, han

    ocupado su lugar nuevos auxiliares diagramticos al servicio de nuestros

    procesos de pensamiento -nuevos diagramas en los que cada elemento

    representa una expresin matemtica necesaria para calcular fuerzas o

    probabilidades de dispersin. La figura 13 constituye otro ejemplo. Como mi

    colega Howard Georgi describe en un artculo: La existencia de corrientes

    neutras supone una verificacin importante de la teora moderna de la fuerzaelectrodbil. Esto significa que pueden darse procesos dbiles [es decir, raros,

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    17/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    17

    improbables] del tipo indicado, procesos en los que se intercambia un quanto

    virtual elctricamente neutral [Z] entre un neutrino [ representado por la lnea

    curva de la izquierda] y un quark [ lnea curva de la derecha], permaneciendo

    invariables sus identidades [es decir, sus cargas].

    figura 13

    Y, como antes les promet, esto nos acerca de nuevo al suceso dorado de

    que hablbamos al principio. Porque lo que les acabo de leer es precisamente

    la descripcin de lo que ocurre en la fotografa que presenta la figura 4.

    Nuestros "ojos desnudos" nicamente veran un garabato nada convincente,

    pero el ojo de la mente, gracias a la versin "diagrama Feynman" del mismo

    fenmeno, ve que un neutrino esparce un electrn sin modificar para nada las

    cargas; as pues, existe una "corriente neutra"; As pues (simplificando

    demasiado quiz), si a alguien se le hubiera ocurrido todo esto antes que a

    Glasgow, Weinberg o Salaam, ese alguien a lo mejor habra tenido que hacer

    el equipaje y viajar a Suecia a recoger su premio Nbel.

    Examinemos ahora otra herramienta conceptual que algunos cientficos utilizan

    con gran maestra en la gnesis de sus ideas. Se trata de la metfora y de su

    prima hermana, la analoga.

    Esto quiz les sorprenda a ustedes. Despus de todo, algunos filsofos opinan

    que la imaginacin metafrica no sirve para nada en el mbito de la ciencia. El

    Diccionario del pensamiento moderno dice de la metfora y de la analoga que

    "representan una forma de razonamiento particularmente propenso a la

    extraccin de conclusiones falsas a partir de premisas verdaderas". Se

    considera a la metfora como "la esencia de la poesa"; opera a travs de la

    ilusin, y desde luego la labor de los cientficos es precisamente todo lo

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    18/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    18

    contrario. As pues, podra parecer que la metfora y la analoga son dos cosas

    que los cientficos deberan evitar con la mxima asiduidad.

    Sin embargo, los cientficos utilizan analogas continuamente; Thomas Young,

    un fsico del siglo XIX, representa un excelente ejemplo del castigo que puede

    acarrear el hecho de hacerlo abiertamente. Este fsico debe la mayor parte de

    su fama a su defensa de la idea de que la luz es fundamentalmente un

    fenmeno ondulatorio, en contra de los principios de la teora cuasi corpuscular

    que gozaba de tan amplia aceptacin en su poca. En una de sus primeras

    publicaciones, Thomas Young escribe: "La luz es la propagacin de un impulso

    comunicado al ter por cuerpos luminosos". Recuerda a sus lectores que ya

    dijo Euler que los colores de la luz se deban a las diferentes frecuencias de las

    vibraciones del ter luminoso". Pero si hasta entonces se trataba tan slo de

    una mera especulacin, Young deca haberlo confirmado: la idea de que la luz

    consiste en la propagacin de un impulso enviado al ter "est slidamente

    confirmada..."; mediante qu?, Cmo? " A travs de la analoga entre los

    colores de una chapa delgada y los sonidos de una serie de caones de

    rgano" (dos fenmenos totalmente diferentes).

    Incluso sin detenernos a estudiar los detalles de esta curiosa y, como el tiempo

    ha demostrado, fructfera analoga entre la luz y el sonido -de esta

    sorprendente extensin de la metfora del movimiento ondulatorio de un campo

    a otro, aparentemente sin relacin -percibimos el considerable desafo que

    supone esta transferencia de significado. De hecho, el valor que supone hacer

    esta conexin, y lanzar la prueba experimental de la naturaleza ondulatorio de

    la luz, no le pareci muy acertado ni siquiera a George Peacock, el editor de losCollected Papers de Thomas Young, amigo incondicional del mismo, y hombre

    de ciencia del Trinity College de Cambridge. Cuando Peacock public una

    recopilacin de escritos de Young en 1855, es decir, veintisis aos despus

    de que Young falleciera y mucho tiempo despus de la consagracin de la

    teora ondulatoria, Peacock continuaba sintindose obligado a evitar que el

    lector cayera en algn terrible error sobre el tema que nos ocupa y, por ello,

    aadi un asterisco tras la frase crucial de Young y redacto una severa nota de

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    19/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    19

    pie de pgina que tal vez sea nica en la literatura: "Esta analoga es

    caprichosa y absolutamente infundada. Nota del editor".

    El caso de Thomas Young es un ejemplo de la funcin creativa, aunque

    arriesgada, de la metfora o de la analoga durante la fase inicial de la

    imaginacin cientfica. La utilizacin de la misma idea una y otra vez en

    contextos bastante diferentes era parte del credo cientfico de Enrico Fermi.

    Segn l, cualquier fenmeno fsico se podra entender en trminos de una

    analoga con una de entre ms o menos dos situaciones fsicas primarias,

    primitivas. Por ejemplo, efectivamente dio un gran impulso a la moderna fsica

    de las partculas elementales con un trabajo que public en 1934 sobre la

    desintegracin beta, en el que deca que cualquier teora sobre la enigmtica

    emisin de partculas ligeras, como los electrones, a partir de un ncleo,

    debera entenderse por analoga con la consolidada teora de la emisin de los

    quanta luminosos (fotones) a partir de la desintegracin del tomo. As fue

    como eludi la trampa de tener que pensar que el electrn ya exista en el

    ncleo antes de su emisin; despus de todo, a nadie le haba parecido

    necesario pensar que el fotn ya estaba formado dentro del tomo antes de ser

    irradiado.

    Y de nuevo, poco despus de escribir un trabajo sobre el efecto ejercido por los

    electrones lentos al chocar con un tomo, Ferm nicamente era capaz de

    entender el efecto de los neutrones lentos sobre el ncleo. Esto ocurra en

    octubre de 1934, cuando l y su equipo, casi por mero accidente, descubrieron

    la radiactividad artificial milagrosamente realzada de la plata, que result haber

    sido provocada por la dispersin de neutrones, es decir, por su deceleracin.Las pginas del cuaderno de laboratorio que registran este descubrimiento son

    bastante lacnicas y el trabajo resultante muy corto, pues no llega a dos

    pginas. Sin embargo, se podra decir que su utilizacin de la analoga coloca a

    Fermi sobre lo que result ser el primer paso necesario hacia el reactor

    nuclear, y de ah a la llamada era nuclear.

    Y por fin llego a la tercera de las herramientas Imaginativas que algunoscientficos utilizan durante la fase inicial -se trata de lo que yo llamo

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    20/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    20

    imaginacin temtica. Es todava ms arriesgada que las que hemos analizado

    hasta ahora: Me refiero a la prctica de dejar tranquilamente que los

    presupuestos del cientfico acten durante un tiempo como gua de su propia

    investigacin cuando todava no hay pruebas suficientes de dichos

    presupuestos, y en ocasiones Incluso frente a la evidencia aparentemente

    contrapuesta. Esto viene a representar una suspensin deliberada de la

    incredulidad, que es precisamente lo contrario de lo que se suele considerar la

    actitud escptica del cientfico.

    De hecho, la expresin "suspensin deliberada de la incredulidad" procede de

    un anlisis de la poesa efectuado por Samuel Taylor Coleridge en su

    Biographia Literaria. Segn sus propias palabras, l se consideraba obligado a

    imbuir sus escritos poticos de una apariencia de verdad suficiente para

    originar esas sombras de la imaginacin, esa suspensin deliberada y

    momentnea de la incredulidad que constituye la fe potica.

    Sin embargo, lo ms seguro es que esto no tenga nada que ver con la ciencia.

    Segn la opinin autorizada de un filsofo de la ciencia como Karl Popper, el

    criterio de demarcacin de todas las actividades verdaderamente cientficas es

    la suspensin de la creencia, no de la incredulidad. De acuerdo con Popper,

    debemos someter nuestros constructos racionales a un rgirnen curativo a

    base de purgas hasta encontrar algn defecto funesto, incluso en la ms

    atesorada de nuestras inspiraciones concretas. Debemos esforzarnos en

    falsearlas, es decir, en refutarlas y, por lo tanto, en repudiarlas.

    Sin embargo, cuando nos detenemos a mirar por el aguiero de la cerradura dela puerta del laboratorio, observamos que muchos de nuestros cientficos no

    prestan odos a ese buen consejo. De hecho, en ocasiones dejan que su

    trabajo crezca al mximo y madure a partir de una idea improbable que ellos

    mismos se encargan de evitar que pueda ser destruida a manos de la frrea

    racionalidad. Desde luego, al final, tras la superacin de esta fase inicial y

    privada, los resultados obtenidos con la tcnica de la maduracin y bajo la

    direccin de la teora de la maduracin, deben someterse a la verificacinexperimental. Con la naturaleza no se juega. El cementerio de la ciencia est

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    21/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    21

    lleno de vctimas de obstinadas creencias en ideas que no han demostrado ser

    dignas ni del nombre. Pero debemos tener en cuenta el hecho curioso de que

    hay espritus geniales que pueden arriesgarse a perseverar durante largos

    perodos sin contar con apoyo confirmativo alguno, y sobrevivir hasta el

    momento de recoger sus premios. Despus de analizar este tipo de

    anotaciones personales, ahora sabemos que Newton, John Dalton y Mendel,

    entre otros, se negaron a aceptar datos que fueran en contra de sus

    presupuestos, y resultaron estar en lo cierto.

    No obstante, la adopcin de temticas ardientemente sostenidas, y la

    suspensin de la incredulidad en ellas, si bien resultan necesarias en algunos

    casos y a menudo tienen mucho xito, en ltimo extremo pueden conducir a

    terribles confusiones. Y para concluir mi exposicin con un ejemplo de fracaso

    despus de haber hablado de tantos xitos cientficos, permtanme volver a

    Galileo, y a un longevo misterio a cerca de uno de sus escasos, pero grandes,

    errores.

    Como todos sabemos, el clmax de la revolucin cientfica para las ciencias

    fsicas del siglo XVII fueron los Principia de Isaac Newton, que combinaban los

    imaginativos avances de Galileo Galilei con los de Johannes Kepler. Newton

    deca que vea ms all que los dems porque se hallaba encaramado a

    hombros de gigantes. Kepler desde la corte del loco y magnfico emperador

    Rodolfo II de Praga y Galileo desde las brillantes Venecia y Florencia, eran dos

    personalidades bien diferentes; pero tambin tenan muchas cosas en comn,

    sobre todo su apasionada devocin por la teora copernicana del sistema

    planetario. Ambos desafiaron los peligros que entraaban sus herticasnociones, y Kepler, ocho anos mas joven que Galileo y extravagante admirador

    del mismo, trat por todos los medios de captar su atencin y apoyo moral.

    Habra sido francamente lgico que Galileo hubiera mostrado la misma actitud

    hacia Kepler, dado que las leyes de ste indicaban claramente la superioridad

    del modo copernicano de imaginar el sistema del mundo. Pero, en contra de

    toda expectativa razonable, Galileo guard siempre las distancias con respectoa Kepler, trat de desautorizarle todo lo que pudo y nunca acept sus leves del

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    22/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    22

    movimiento planetario. Y ese ha sido uno de los grandes enigmas de la historia

    de la ciencia. Por que Galileo evit utilizar los hallazgos de Kepler como arma

    arrojadiza contra los enemigos que no dejaban de asediarle? Qu fue lo que

    provoc este fallo de imaginacin, uno de los poqusimos que presenta la

    esplndida opera omnia de Galileo? Nunca intent explicar su extrao rechazo,

    e incluso este dato indica que debi haber una causa bien profunda. Como dijo

    en una ocasin el historiador de la ciencia Giorgio de Santillana, las ideas de

    Kepler "debieron poner en movimiento algn mecanismo de proteccin en la

    mente de Galileo". Qu era lo que quera proteger?.

    Finalmente un historiador del arte, el magistral Erwin Panofsky, encontr la

    explicacin, una vez ms de la manera ms inesperada. Su brillante anlisis

    parta del hecho que he mencionado antes de que Galileo, como tantos

    intelectuales italianos de su poca, se consideraba a s mismo, y con razn, no

    slo cientfico, sino tambin admirador y crtico de las artes. Ms aun, para

    Galileo constitua un criterio fundamental de slido pensamiento cientfico

    utilizar exclusivamente elementos de pensamiento que resultaran aceptables

    desde el punto de vista esttico. Y era precisamente desde este punto de vista

    esttico desde donde Galileo consideraba inaceptables, e incluso repulsivas,

    las ideas de Kepler.

    Permtanme extenderme un poco sobre la argumentacin de Panofsky. Galileo,

    hijo de un conocido msico y terico de la msica, creci en un ambiente ms

    humanista que cientfico. Todos sabemos, por ejemplo, que dedic muchos

    meses de paciente labor a comparar la obra de los poetas Ariosto y Tasso, con

    el resultado de grandes alabanzas para el primero y ninguna compasin para elsegundo. Al margen de la literatura, Galileo tambin se lanz alegremente a

    controversias en el mbito de las artes visuales. Por ejemplo, estuvo muy unido

    a Lodovico Cardi, alias Cigoli, el pintor florentino ms importante entre los

    coetneos de Galileo. De hecho, Cigoli incluso colabor con su amigo en

    algunas observaciones astronmicas; llamaba a Galileo su maestro" en el arte

    de la perspectiva y no dudo en proclamar su admiracin hacia l cuando, en su

    ltima obra, los frescos de Santa Maria Maggiore, represento la ascensin de lavirgen Maria sobre una Luna que era exactamente igual a la que Galileo haba

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    23/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    23

    utilizado en una de sus ilustraciones de Siderius Nuncius, como ya vimos

    anteriormente. (Figura 14 y 15).

    En Junio de 1612, Cigoli pidi a Galileo que le ayudara a luchar contra los que

    alegaban que la escultura era superior a la pintura. Por extrao que parezca,

    en la carta resultante de Galileo sobre la superioridad de la pintura podemos

    encontrar una clave de su rechazo frente a la astronoma kepleriana. Segn

    Galileo, el problema de la escultura es que resulta demasiado parecida a las

    cosas naturales, a los objetos con los que comparte la propiedad de la

    tridimensionalidad.

    figura 14

    El pintor parece merecer mayor crdito por su obra precisamente porque solo

    dispone de dos dimensiones para crear la apariencia de tridimensionalidad.

    Porque, contina diciendo Galileo, cuanto ms lejos de la cosa que se

    pretende imitar estn los medios para imitarla, ms admirable ser la

    imitacin". Y para recalcar ms esta idea, aade que solemos admirar a un

    msico cuando "nos hace sentir simpata por un amante a base de representarsus sufrimientos y pasiones en forma de cancin", pero no cuando el msico se

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    24/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    24

    limita a transmitir lamentos y sollozos; y an admiraramos todava ms al

    msico que no se sirviera de cancin alguna, sino que nicamente utilizara

    instrumentos musicales para actuar sobre nuestras emociones.

    figura 15La idea de Galileo es que debemos adherirnos al "purismo crtico", debemos

    distinguir entre la representacin y "su contenido". Se trata del mismo cuchillo

    afilado que empleo Galleo para separar cantidad y calidad, ciencia y religin.

    Pona objeciones a cualquier desdibujamiento de lneas fronterizas. sta es la

    razn por la que a Galileo no le gustaron absolutamente nada las alegoras

    fantsticas de Tasso (por ejemplo, en el poema Gerusalemme Lberata) y,

    sobre todo, por la que Galileo, como Cigoli, tambin se opuso a las distorsionesartsticas que a su juicio degradaban el medio de la pintura, como era el caso

    de las "ilustraciones trucadas". Galileo se mostr especialmente mordaz con el

    entonces muy admirado Giuseppe Arcimboldo, pintor de la corte de Rodolfo II

    (lo que pona las cosas todava peor), cuya especialidad era la personificacin

    de conceptos o estaciones mediante disposiciones de utensilios o de frutos y

    flores (la figura 16 representa el verano). Este estilo, hoy da denominado

    manierismo, surgi como una tendencia "anticlsica" que, como Panofsky

    seala, representaba la oposicin "a los ideales de racionalidad..., simplicidad y

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    25/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    25

    equilibrio", y en cambio se inclinaba a favor de "cierto gusto por lo irracional, lo

    fantstico, lo complejo y lo disonante".

    Ahora bien, hay un elemento en particular que fue tan enfticamente rechazado

    por el arte del alto Renacimiento (que Galileo adoraba) como favorecido por el

    manierismo (que Galileo aborreca). Hablamos de la elipse. En pintura y

    escultura fue introducida como elemento significativo por Correggio y Gian

    Maria Falconetto, respectivamente; en arquitectura, Miguel ngel juguete un

    poco con la idea en un diseo que hizo para la tumba del papa Julio II, pero

    tan slo como elemento interior, totalmente invisible desde fuera. Tanto en el

    terreno de la msica como en el de la pintura o la poesa, para Galileo era un

    deber sagrado luchar contra el manierismo, contra la complejidad innecesaria,

    contra la distorsin y el desequilibrio.

    Y ahora ya podemos preguntarnos, como Panofsky, "si, como sabemos, la

    actitud cientfica de Galileo influy sobre su juicio esttico, no podra ser que

    su actitud esttica hubiera influido sobre sus teoras cientficas?. Mas

    concretamente, no podra ser que tanto en calidad de cientfico como de

    critico de arte estuviera acatando las mismas tendencias rectoras?.

    Empezaremos viendo por que razn Galileo pensaba que Kepler estaba

    totalmente equivocado. Al nivel ms obvio, los escritos de Kepler, entre los que

    citaremos Mysteriurn Cosmographicum y Harmonici Mundi, estn tan plagados

    de ideas y materias distintas que resulta difcil ver qu hay de valioso bajo toda

    esa aparente fantasa. Las tres leyes del movimiento planetario de Kepler, sin

    las que Newton nunca hubiera conseguido nada, estn enterradas bajo

    montaas de escombros de tal manera que incluso Newton tuvo dificultadespara reconocer su deuda hacia ellas.

    Pero aparte del carcter indigerible del estilo de Kepler a la hora de escribir, su

    estilo de pensar entronizaba de lleno al manierismo en el sistema solar a los

    ojos de Galileo. Segn ste, segn Aristteles, y tambin segn Copernico,

    todo movimiento celeste tena que proceder en trminos de la superposicin de

    crculos, por ejemplo, en un epiciclo circular llevado a un deferente circular. Elcrculo y el movimiento uniforme a lo largo del crculo eran las marcas propias

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    26/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    26

    de la uniformidad, perfeccin y eternidad. Kepler en un principio tambin haba

    pensado de esta manera, pero luego se dej llevar por los datos, y en contra de

    sus mejores instintos, proclam su primera ley: que los planetas se mueven

    describiendo elipses alrededor del Sol. As pues, no se hallaban en lo que

    Galileo consideraba como movimiento natural, sino que variaban

    continuamente su velocidad mientras se movan.

    figura 16

    Para Galileo, que segua completamente hechizado por la circularidad, la elipse

    era un crculo distorsionado -una forma indigna de los cuerpos celestes.

    Aceptar semejante aberracin era dar la victoria a los Correggios y Arcimboldos

    de este mundo. Eso jams. La primaca del crculo era para Galileo lo que yo

    he llamado uno de esos presupuestos temticos irresistibles sin los que su

    imaginacin cientfica no hubiera podido operar. Y no solamente en el cielo,

    sino tambin en la Tierra. Como seala el propio Galileo: Todos los

    movimientos humanos o animales son circulares. Correr, saltar, caminar, etc.,

    son tan slo movimientos secundarios que dependen de los primarios, de lo

    que tiene lugar en las articulaciones; el salto o la carrera son producto del

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    27/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    27

    juego de la pierna con la rodilla y del muslo con la cadera, que son

    movimientos circulares.

    Al final, el encantamiento del crculo no logr socavar gravemente la

    cosmologa de Galileo. Pero s tuvo consecuencias nocivas para su fsica,

    porque le impidi darse cuenta de que el movimiento ms natural es el

    rectilneo y no el circular. En lugar de eso, Galileo mantena, como puede

    comprobarse en el libro I delDialogo, que la naturaleza permite el movimiento

    en lnea recta slo de vez en cuando y con la nica finalidad de restablecer el

    orden. Una vez que el elemento en cuestin ocupa el lugar que le corresponde,

    "tiene que permanecer inmvil o, si se mueve, hacerlo slo de modo circular".

    As pues, Galileo paso por alto la idea que constituye la mismsima base de la

    mecnica moderna y que ahora conocemos como la primera ley de Newton, es

    decir, que, en ausencia de fuerzas, todo cuerpo permanece en reposo o en

    movimiento rectilneo uniforme. Es verdaderamente irnico que el honor del

    descubrimiento de este principio de inercia al final fuera a parar al ingles, a

    quien ningn esfuerzo de imaginacin podra haberle hecho considerarse a si

    mismo admirador ni crtico de ninguna de las artes.

    Hasta aqu hemos visto tres de las herramientas ms importantes de la

    imaginacin cientfica en accin. Tal vez ello nos ayude a desembarazarnos de

    esa nocin tan comn de la ciencia como proceso mecnico, casi irresistible,

    de induccin a partir de hechos Incontestables. Los historiadores de la

    ciencia y otros estudiosos de todas partes del mundo han tratado de reunir las

    piezas de esta realidad ms compleja y catica, pero ms realista e

    interesante, para lo que no han dejado de adentrarse en cuestiones cada vezms difciles de resolver a lo largo de los cuatro ltimos siglos.

    Pero deseo terminar con una nota de atencin. Al final, desde luego no

    habremos explicado a Galileo ni a Fermi, corno tampoco a Mozart ni a Verdi.

    Nunca llegaremos a resolver del todo el enigma de cmo determinados

    cientficos elegidos sientan las bases del estado venidero de la ciencia, de

    cmo es posible que nuestras mentes descubran el orden de las cosas. Sobreeste punto, una vez ms Albert Einstein tiene la ltima palabra: Aqu estriba el

  • 8/11/2019 47 LA IMAGINACIN EN LA CIENCIA HOLTON.pdf

    28/28

    UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS Y ARTESFACULTAD DE EDUCACIN EPISTEMOLOGA E HISTORIA DE LA FSICA

    28

    sentido de la curiosidad, que crece de manera continua -precisamente a

    medida que aumenta el desarrollo del propio conocimiento.