Lectura 8

ESTRATEGIAS EDUCATIVAS PARA LA FORMACIÓN INTEGRAL1

Esther Fragoso Fernández

Carácter educativo de las estrategias Estrategia (Gómez, 2001) es el arte del mando militar, plan de acción; del francés stratégie es el oficio del general; del indoeuropeo str-to, extendido; del griego strategía (Aula Santillana, 1996) arte de dirigir las operaciones militares. En educación (Díaz y Hernández, 1997) la estrategia ha pasado al conjunto de directrices que determinan qué hay que seguir en las fases de los procesos educativos, relacionándolas con los objetivos que se pretenden alcanzar y una planificación concreta. Se podría definir a la estrategia de enseñanza como los procedimientos o recursos utilizados por el agente de enseñanza para promover aprendizajes significativos. La persona necesita ayudas específicas para aprender, por ello surgen las estrategias que son el procedimiento adaptativo mediante el cual se organiza secuencialmente la acción a fin de conseguir las metas previstas. La estrategia es la manera de concretar el curso a seguir para el logro de los objetivos educativos. El aprendizaje es la construcción de un significado y la estrategia apoya este proceso personal de aprender. La estrategia crea un vínculo entre la teoría y la práctica, potencializa el aprendizaje del discípulo (Villalobos, 2004). “Tiene poco sentido poseer altas calificaciones académicas si se es incapaz de hacer frente a las vicisitudes de la vida, debe enseñarse a los niños desde muy temprana edad a enfrentar sus emociones y sentirse en paz y tranquilos donde estén. Se les debe mostrar cómo utilizar el discernimiento y la sabiduría, y cómo conducirse con humildad, a ser compasivos y saber perdonar a otros” (Jumsai y Burrows, 2000, p.69) Por más que se intenten “enseñar” los valores humanos si los hijos no los ven vividos en sus padres difícilmente los pondrán en práctica, así que más importante que todas las estrategias que aquí se proponen es el vivo ejemplo de los padres día a día: cómo tratan ellos a las demás personas, a qué le dan prioridad en su vida, como se relacionan entre sí o con sus hijos, cómo tratan a sus propios padres; no hay estrategia educativa más fuerte que la propia persona del padre frente a su hijo. En ocasiones los padres ponen mucho hincapié en el éxito escolar de sus hijos, el cual es muy importante, pero más valioso que ocuparse intencionalmente en ayudar a los hijos a

1 Fuente: Fragoso Fernández, Esther (2011) Estrategias educativas para la formación de valores en la Familia, México: Universidad la Salle Pachuca, pp 58-88

desarrollarse como buenas personas, de un carácter intachable, es decir, a lograr la excelencia humana. La atmósfera que se construye en casa es fundamental para la vivencia de los valores, en los niños fluirán buenas interacciones con su familia en un ambiente de confianza y amor. Los padres más que quejarse de la situación económica, el gobierno o los gastos; o en vez de explicar con profundidad como debe ser la conducta de su hijo ha de inspirarlo a través de cada acto de su propia vida. Integración de las estrategias educativas El sentido de integración y unidad de estas estrategias se basa en el desarrollo pleno de la persona sin favorecer algún aspecto de la personalidad, sino que al mismo tiempo se desarrolle su intelecto como su físico y el trabajo con sus emociones, fomentando igualmente un desarrollo en la voluntad y la espiritualidad. Son los instrumentos de los que se pueden valer los padres para educar algo fundamental en el ser del humano: los valores. Es posible que en ocasiones se haya usado alguna o varias de estas estrategias porque son antiquísimas, pero lo que contiene esta propuesta es una unidad de propósito: el desarrollo integral del ser humano por lo que se ha de llegar a todos los espacios de su personalidad, de ahí que la riqueza que contienen es la aplicación de todas ellas el ser utilizadas solo bajo un propósito. El aplicar todas las estrategias en casa en un solo espacio de tiempo intencionalmente –una semana o dos según las posibilidades de padres e hijos-, permitirá el desarrollo del valor, según el mejor modo para cada hijo. Por esta razón, las estrategias siempre deberán ir encaminadas hacia un solo propósito, específicas para un solo hijo en un tiempo determinado; por ejemplo, si se decide que hay que dedicarse al valor de la tolerancia, toda esa semana se contarán cuentos de tolerancia, se oirán canciones sobre la tolerancia, se reflexionará citas o refranes sobre la tolerancia, que los hijos apliquen el ser tolerantes; llevándolos a que: vivan, piensen, sientan y finalmente tiendan a manifestar el ser tolerantes, es decir, realmente hayan hecho suyo el ser tolerantes. Silencio Como su nombre lo indica, sentarse en silencio incluye fomentar en los hijos que se sienten silenciosamente por unos pocos minutos cada día. Martí García (2000, p. 57) observa, “Es necesario escuchar el silencio para saber a ciencia cierta qué hay dentro de uno mismo”. El silencio permite al hombre comunicarse con su ser interior de tal manera que le ayuda a conocerse mejor. Es tan sólo en soledad que las cosas más importantes ocurren, las decisiones más importantes se toman, se hacen nuevos descubrimientos y se percibe la novedad en la soledad de la mente. El silencio es un estado en el que las cosas grandes se modelan. Morales afirma que el hombre actual necesita y busca los lugares silenciosos “Porque la única alternativa es reencontrarse, reunificarse, recogerse para recuperar la dimensión contemplativa del silencio creador, donde germina toda acción fecunda, transformadora, con garantía de permanencia.” (Morales, 2000, p. 96).

Desde el comienzo del tiempo, los más grandes científicos, músicos, poetas y artistas han usado y recomendad el hábito de sentarse en silencio. No sería exagerado decir que la razón principal para haber alcanzado el éxito fue su “insight” en realidad adquirido en el silencio de la mente. El silencio, etimológicamente quiere decir “abstención de hablar, falta de ruido, del latín silentium, silencio (Gómez, 2001, p. 640); literalmente quiere decir “ausencia de todo sonido o ruido, quietud, falta de ruido” (Larousse, 1998, p 921) . Sentarse en silencio no quiere decir únicamente sentarse en silencio en un lugar. Sentarse en silencio es una relajación completa de cuerpo y mente. Lo que se requiere es calmar la mente y tranquilizarla, liberarla de toda agitación. Incluso aunque se observe el silencio si la mente continúa construyendo un millón de imágenes de memorias pasadas, personas, lugares, no se logra el silencio verdadero y sólo mediante la determinación fuerte la mente se puede controlar. IV 2.2 ¿Qué sucede en el niño al ejercitar el silencio? Hoy el ruido “rompe el silencio creador, contemplativo, imposibilita un reencuentro con uno mismo en su centro interior… bloquea así el acceso al misterio de la propia persona, de los demás y de Dios” (Morales, 2000, p. 96). Indudablemente “el silencio es como el portero de la vida interior” (Escrivá de Balaguer, 2000, p. 90) Al practicar el silencio, el cuerpo se relaja y el intelecto se calma para tratar de suspender la producción de pensamientos, recuerdos, reflexiones. Todas las olas de la mente se tratarán de calmar completamente. La mente descansa en el silencio, entonces, podría disfrutar el silencio en forma duradera. A menudo se desperdicia la energía en conversaciones vanas y en chismorreo. Análogamente, cuando el radio está prendido, consume electricidad –energía, aunque se aumente o disminuya el volumen, la electricidad –energía- se sigue consumiendo. Sólo apagando la radio se puede conservar la energía. Cuando el cuerpo y la mente están calmados y en paz, se desarrolla la fuerza de voluntad. Es de gran ayuda para observar la verdad y controlar el enojo. Las emociones se controlan y la irritabilidad se desvanece. La vivencia del verdadero silencio logra la concentración, mejora la receptividad y afina el poder de captar. A un nivel más profundo, aumenta considerablemente la memoria y prepara el terreno para el despertar de la intuición. Se ha investigado para demostrar que los niños que practican el sentarse en silencio rápidamente mejoran la memoria (Jumsai, 1987, p. 49) Sentarse en silencio es entonces de gran ayuda para mejorar la memoria y también colabora en el proceso de aprendizaje Khonna (2000 p. 2) destaca que el silencio lleva a aumentar el poder de concentrarse en un punto. Al mejorar la concentración, el trabajo que hacemos, el servicio que prestamos, se vuelve mejor. Sentarse en silencio otorga paz mental y equilibrio emocional, compostura y postura, los cuales se necesitan tanto para hijos como padres. También, aumenta el poder de persistencia, paciencia y perdón. Aumenta nuestra

memoria, poder de captar y receptividad. A un nivel más profundo, despierta nuestra intuición, por ejemplo ayuda a entonarse con la voz interior y a desarrollar nuestra creatividad. Los niños que lo practican regularmente derivan gran beneficio. Con práctica constante, se siente en gran paz y encuentran gradualmente que emociones tales como la rabia, la codicia, la lujuria y la envidia se disminuyen. Entonces la intuición comienza a despertarse. Se experimentan destellos internos de comprensión y conocimiento Muchos científicos han encontrado que tales destellos de intuición los han llevado a grandes descubrimientos. Newton descubrió la ley de gravedad mientras estaba sentado silenciosamente debajo de un manzano, no cuando estaba trabajando en su laboratorio. La experiencia práctica del doctor Art Ong Jumsai, un científico de Tailandia: estaba involucrado en el proyecto científico Vikingo, tenía que aterrizar un satélite en Marte. Escogió trabajar sobre una técnica de aterrizaje suave para el Vikingo. Pero dos veces el proyecto de aterrizaje suave en Marte falló. Pensar mucho y durante mucho tiempo no lleva a las respuestas. Lo mejor es parar de pensar. El doctor Art Ong Jumsai se fue al pico de una montaña en California y se sentó completamente quieto. Practicó la técnica de sentarse en silencio, completamente desconectado del Proyecto Vikingo y de todas las preocupaciones mundanas. Se volvió hacia adentro y de pronto obtuvo la respuesta. Ahora sabía cuál era el componente para la construcción del Vikingo. Le vino de la intuición. Después, presentó el componente para construir el tren de aterrizaje suave a la NASA. Lo usaron y funcionó (Jumsai, comunicación personal, 17 junio 2005). La inspiración recibida durante períodos de silencio no se limita a los científicos, también es experimentada por poetas, músicos, artistas, ingenieros, políticos, de hecho por cualquiera que regularmente se sumerge en sí mismo en la profundidad de su propio silencio interno. Si uno fuera a ir un paso más allá, sentarse en silencio le ayuda a uno a aquietar las olas y caprichos de la mente y borra las diez mil imágenes que están impresas en nuestro marco mental por nuestra fantasía e imaginación. La mente se ve sumergida en un mar infinito de bienaventuranza sublime. Uno llega a un punto en el que uno se vuelve uno con el silencio prevaleciente y la paz. Mientras el sentarse en silencio mejora la calidad y finura del trabajo, directamente despierta los valores de verdad y paz. Se recomienda ante todo para los padres en su propia vida porque por sí solo conlleva autenticidad al tener la experiencia de primera mano. Saraf (en Khona, 2000, p. 3) destaca, “El individuo es un alma y el propósito de la educación es despertar al hijo a este hecho, capacitarlo para encontrar el espíritu interno y moldear su vida y acción en la luz y poder del espíritu interior”. Estrategia del silencio Aplicación de la estrategia del silencio: hay que iniciar con pocos minutos e ir aumentando gradualmente, el éxito se logra sólo si es continua su práctica. Cada vez se logrará con más

facilidad aquietar la mente y agudizar el intelecto; el objetivo es lograr un estado de paz y de contento. Se ha de tener cuidado con la postura y la respiración, se puede pedir a los niños que se sienten derechos y calmados; se recomienda siempre utilizar el mismo lugar. Muchas veces se cree que es una pérdida de tiempo pero lejos de perder diez minutos, los padres que practica el silencio pronto percibirán buenos resultados en sus hijos que se tranquilizarán y se concentrarán más rápido en el trabajo. ¿Qué se logra con el silencio? A través de la práctica de esta estrategia pueden obtenerse los siguientes beneficios: desarrollo de la memoria, más concentración, sentimientos de paz, equilibro, autocontrol Toda persona busca la paz y la felicidad, pensando qué podría darla, es una tragedia que se desee encontrarla afuera, la ironía es que siempre es mucho más fácil descubrir el espacio que rodea que penetrar en el espacio interior; en esta era, se piensa que la tecnología tiene respuestas para todo, como si solo con oprimir un botón se pudiera encontrar paz, pero eso no es así. Las respuestas a nuestras preguntas más importantes, están dentro de uno mismos y la única manera de hallarlas es aprender a escucharse. Ejemplos de silencio en casa Esta estrategia es sencilla de aplicar, basta con que se aliente a los niños a sentarse en silencio por unos cuantos minutos. La práctica constante de estar en silencio, nos vuelve cada vez más receptivos e intuitivos; es darse un momento para estar con uno mismo, de disfrutar la propia compañía. Es una técnica que se puede aplicar al inicio del día o al comenzar una actividad para que se empiece a trabajar con una mayor concentración. Los minutos de silencio pueden ser pocos al principio, y ser más conforme los hijos van dominando el arte de estar callados. Una pequeña práctica: se sientan todos los miembros de la familia en una postura cómoda cada quien en su silla, si tienen objetos en el regazo se hacen a un lado. Se hace una respiración profunda y se cierran los ojos... Se puede ir dirigiendo lo siguiente: se exhala el aire que se tomó, suavemente... se vuelve a inhalar y se siente cómo este aire que nos da la vida entra por las fosas nasales, inunda los pulmones completamente... se intenta escuchar el latir del corazón, suave, profundo, rítmico... se exhala... se inhala nuevamente, pero esta vez más hondo, que el aire llene los pulmones del todo, el corazón se oxigena, la sangre se limpia, el cuerpo se relaja... se trata de no pensar en nada más, más que en el aire que está ahí, dándole vida a todo el ser. Exhalar lentamente... inhalar... y dar gracias por estar vivo, por estar en paz consigo mismo, por esta oportunidad de simplemente ser...

exhalar... Permanecer así unos minutos, en silencio, gozando de este momento... (después de un par de minutos)... inhalar, exhalar... abrir los ojos lentamente. Y se puede comentar entre los miembros de la familia que participaron: ¿cómo se sintieron, alguien experimentó algo inusual, se sintieron cómodos o no? La armonización o silencio que se acaba de describir puede utilizar para, entre otros propósitos, si se busca desarrollar en los niños virtudes como la calma, la paciencia, la gratitud, la disciplina. La estrategia del silencio no significa necesariamente silencio. Hay muchas otras formas de realizar esta práctica: uso de luz o guiar una visualización con sonido objetos sensibles al tacto y/o al olfato poniendo música de fondo usando la respiración o una pequeña actividad física Otro ejercicio de aplicación de esta estrategia en casa sería: en esta práctica sólo hay una regla: no se puede hablar. Puede levantarse de sus lugares, hacer gestos, moverse, pero no se puede hablar. Descripción de la actividad: previamente a esta actividad, los padres prepararán varias fotografías o ilustraciones de imágenes positivas (por ejemplo una familia, dos amigos, un niño recogiendo la basura) y cortarlas en varias partes mezclar las diferentes partes de las ilustraciones, de tal manera que no queden juntas las piezas que forman parte de la misma fotografía repartir estas piezas a cada uno de los hijos sin decir nada al cabo de unos minutos, alguno de ellos se dará cuenta de que se trata de formar un rompecabezas entre todos e irán juntando las piezas Esta forma distinta de llevar a cabo la estrategia del silencio se puede ejercitar en la búsqueda del desarrollo del: trabajo en equipo, unidad, imaginación, indagación Esta estrategia está vinculada especialmente al nivel emocional, pues sólo al aquietar las emociones puede surgir la paz. Se trata de ejercicios que mantienen los niveles físico, mental y emocional tranquilos. Análogamente es como si las emociones fueran el agua y el nivel físico y mental el recipiente. Cuando mantenemos el recipiente quieto, físico sin movimiento y mente concentrada se aquieta el agua, se estabiliza el nivel emocional, y se logra paz interna. Oración, frase, cita o refrán

Las citas graban en la memoria nuevas ideas que posteriormente forman la base de pensamiento para elegir una conducta correcta. Esta estrategia trabaja la parte intelectual pues usa la memorización, genera una sensación de paz, al guardar una frase positiva los niños (o el adulto) se siente bien. Pensamientos buenos generan buenas acciones en el futuro y por eso también se relaciona con el aspecto físico (comportamiento) del ser humano. Oración, del latín orationem súplica, ruego o elevación de la mente a Dios Y refrán, “sentencias que consta de pocas palabras y es de origen popular o didáctico” (Larouse, 1998, p. 734) Las citas son pequeñas expresiones de sabiduría que pueden traerse de diferentes religiones “haz a otros lo que esperarías que te hicieran a ti”, “recoges lo que has sembrado”, “ama a todos, sirve a todos”, etc. o de pensamientos universales importantes que permitan al niño recordar cuál sería la forma de consolidar un buen carácter “el que persevera alcanza”, “quien a buen árbol se arrima buena sombra lo cobija”, “haz bien y no mires a quién”. La estrategia de la cita también incluye el trabajo con los refranes, que pueden ser memorizados en casa y trabajados posteriormente de manera lúdica en diversas actividades. Asimismo, pueden utilizarse como herramientas muy importantes para el aprendizaje de la lectura y la escritura. La oración es parte de esta técnica. Es importante que el niño aprenda a orar con amor. Bashiruddin (en Khonna, 2000, p. 4) cuando se refiere a la oración afirma: “En sus aspectos más generales, la oración es un acto de comunión amorosa entre Dios y el ser humano. Logra muchos objetivos y uno de ellos es revelar la “verdad” que “libera al hombre” Por otro lado, Juan Pablo II (1994, p. 40) afirma, “Sobre la oración se ha escrito muchísimo y, aún más, se ha experimentado en la historia del género humano, de modo especial en la historia de Israel y en la del cristianismo. El hombre alcanza la plenitud de la oración no cuando se expresa principalmente a sí mismo, sino cuando permite que en ella se haga más plenamente presente el propio Dios”. A fin de cuentas la oración es un encuentro amoroso con Dios en el cual el hombre se entrega a él a través de la fe en su poder y sabiduría. Necesidad de Orar Rezar es un impulso natural del ser humano, que emerge de una necesidad intuitiva de perfección y equilibrada por un sentido de la imperfección e inhabilidad para alcanzar nuestras metas por uno mismos. Rezar, por consiguiente, da un sentido de seguridad y también de satisfacción de haber llamado la atención del poder último, que puede hacerse cargo de lo mejor y lo mayor. Rezar da la alegría de haber experimentado intuitivamente el Amor de nuestro Creador. La Fe en el poder sutil no visto, que es Dios, y el Amor por El, es una fuente indudable de

todos los valores, virtudes y fortalezas y debe alimentarse en las mentes de nuestros niños pequeños. Rezar regularmente desarrolla el hábito de “simplemente vivir y de pensar en lo alto” desarrollando también las cualidades benignas de cabeza y corazón, torciendo los rasgos egoístas y deseos infructuosos. Rezar da una mirada positiva de las situaciones de la vida y de uno mismo; uno empieza a depender de las reservas internas de poder, en lugar de depender de otros. Rezar trae a la conciencia, la presencia de Dios, en todo lo que se hace a nivel del cuerpo, palabra y mente con la resultante de pensamientos, sentimientos y acciones. Eleva la conciencia del niño y su visión del nivel mundano a alturas más nobles, no para escapar de la realidad sino como una vista más clara de la comprensión de lo mismo. Las oraciones desarrollan el poder de concentración y la intuición y ayudan al poder de comprensión, retención, memoria y voluntad, resultando en la mejoría en el desempeño en el colegio y en la casa, conservando energía. ¿Qué sucede en el niño al orar, aprender frases, refranes o citas? Las afirmaciones se graban fácilmente en los pequeños. Por ello hemos de acotar ideas que posean una gran carga positiva. El objetivo de esta práctica no es lavarles el cerebro ni imponerles un valor específico que sólo memorizan. No es una clase más como en la escuela, lo que se busca es que una sencilla oración sea una guía para la toma de las propias decisiones basándose en una clara conciencia. Los beneficios de esta práctica son entre otras desarrollar la autoconfianza, el análisis, la reflexión e introspección, capacidad de discernimiento, memoria y búsqueda de la verdad. La mente posee una gran capacidad para memorizar, así que si seleccionamos cosas buenas para llenar este espacio podremos cumplir aquello que dice “como piensas, así eres”. La mente de un niño es como un gran almacén, y toda esta información alimenta para bien o para mal su mente; el excesivo bombardeo actual de imágenes negativas, de violencia, de agresión e intolerancia que pueden ser combatidas si alimentamos su mente con pensamientos positivos, valiosos, armónicos y coherentes. De hecho, la finalidad de cada una de las herramientas no es otra más que lograr que el niño haga suyo el valor de ser humano, y pueda tener coherencia entre sus acciones, sus pensamientos y su hablar. Utilización de la oración, frases, citas y refranes En esta práctica podemos usar pensamientos positivos del día, citas y frases que contenga algún valor.

También pueden usarse poemas o dichos, refranes de la cultura popular como: “camarón que se duerme se lo lleva la corriente”, “a Dios rogando y con el mazo dando”, “no todo lo que brilla es oro”. O que los mismos niños inventen sus propias frases u oraciones. Lo que es importante tomar en cuenta, como en las otras estrategias es la edad de los hijos: poemas y oraciones cortas para niños pequeños y más largos si tienen más edad; y usar solo palabras que comprendan. Para la aplicación de la estrategia de la frase cada niño es distinto por lo que se debe saber qué requiere cada hijo en especial. La mejor herramienta como padre es estar atentos y ser sensibles a las necesidades de nuestra familia. Algunas recomendaciones generales para la aplicación de esta técnica son: elegir la frase o poema de acuerdo a la edad, al vocabulario que manejen que sea concordante al valor que se eligió para trabajar en esa semana si la cita es corta, el niño puede aprenderla con mayor facilidad es bueno analizar en familia el significado de la frase, ¿qué quieren decirme con esto?, ¿qué me dice a mí?, ¿conozco otra frase diferente pero con un significado similar?, ¿estoy de acuerdo con lo que la cita refiere? Ejemplos de oración, frase, cita y refrán o en casa Práctica de esta estrategia en la familia: se puede poner una cita o refrán en algún punto de la casa donde todos pasen y en un momento de la semana reflexionar que le dice a cada uno, que cada miembro de la familia busque una frase, cita o refrán o lo invente sobre el valor que trabajarán esa semana, jugar ahorcado adivinando citas o frases del valor que se quiere trabajar con alguno de los hijos, decir una sentencia que contenga un valor y comprometerse en familia a aplicarla en algún acto de la semana, al finalizar la semana comentar ¿qué sucedió?...y tantas formas como creativa sea la familia. “Somos lo que pensamos”, esta afirmación ha sido ampliamente aceptada por psicólogos y científicos. Por ello es fundamental considerar especialmente con qué nutrimos nuestro nivel intelectual. Las citas o frases se relacionan con este nivel. Las citas son conclusiones o síntesis de verdades que van siendo almacenadas en nuestro subconciente, para ser utilizadas cuando sea necesario, sobre todo si la mente está en calma. Los refranes o frases nos ponen en contacto con la verdad Canto en grupo Todos los niños por naturaleza aman la música y el canto en grupo. Esta técnica consiste en cantar en coro. Es muy importante que los sentimientos de amor, relacionados con todos los valores y con Dios sean la corriente subterránea de tales canciones puesto que la devoción, la forma más pura del amor, es la fuente madre de todos los valores humanos,

que cuando se expresa en actos, sentimientos y comprensión, hace que la vida del niño esté completamente basada en valores y por ende debe dársele la mayor expresión también. Volúmenes de lecturas pueden fallar en hacer un impacto, mientras que una sola canción melodiosa puede derretir el más terco de los corazones y tener el efecto deseado en la mente y acción de las personas. ¿Qué sucede en el niño al ejercitar el cantar en grupo? Los componentes de la música tienen una influencia significativa en los diferentes niveles de la personalidad del niño así: En primer lugar en los sentimientos, estados de ánimo o pensamientos, que se representan en todo lo que cantamos. Debe expresar amor desinteresado solamente. Expresamos estos pensamientos a través de tonos, los cuales son ondas de sonido que tienen impacto definitivo en la mente, porque ella trabaja con los datos que le dan los sentidos El ritmo, todo en la naturaleza, cada movimiento que se da es en ritmo. Cualquier cosa, cualquier actividad en ritmo induce orden, armonía, balance, postura, paz. “Cantar en grupo es una herramienta muy poderosa y tiene muchos efectos benéficos en el desarrollo físico, mental, emocional y espiritual del niño” (Burrows, 1997, p. 104) Estrategia del canto La práctica del canto a la mayoría de los niños les gusta cantar, pero algunos de ellos pueden ser algo tímidos, por lo que cantar en el grupo familiar les permite superar esto, además de que desarrolla los valores de unidad, armonía, confianza, trabajo en equipo, cooperación y calma. El canto si es bueno, permanecerá además en la memoria el niño, permitiendo que la enseñanza del valor no se limite sólo al tiempo de trabajo de esa semana, sino que la llevará aún fuera de ella. ¿Cuántos no se sorprenden a sí mismos tarareando una cancioncilla que se les ha quedado grabada de sólo escucharla? Nuevamente la edad es un factor importante en la selección del canto así como el valor elegido para la actividad. Las canciones pueden ser populares o creaciones propias, o también se puede adaptar la melodía de un canto existente con una letra que transmita el valor deseado. ¿Qué se logra al cantar en el grupo familiar? Los beneficios de esta estrategia en los diferentes niveles de la personalidad: Físicamente, cantar promueve la respiración rítmica profunda que es buena para la salud. También ayuda a la disciplina física, puesto que uno debe sentarse o pararse derecho

y quieto para que la voz se abra completamente. El canto en grupo enseña a los niños a cooperar entre ellos y trabajar juntos como equipo. Al nivel mental, cantar desarrolla la concentración y fortalece la memoria. Es mucho más fácil recordar un conjunto de valores o una actividad familiar que se organiza con música. Especialmente si el tono es melodioso o “pegajoso”, la canción continuará sonando en la mente mucho tiempo después de que se termina la actividad, reforzando el valor que se trabajó. A nivel emocional, cantar desarrolla la autoconfianza. Ayuda a que el niño venza la timidez e inhibiciones. Muchos niños que prácticamente no se atreven a abrir sus bocas para responder preguntas, se olvidan de sí mismos al cantan en voz alta y con alegría como grupo familiar. Espiritualmente, cantar y la música ayudan a desarrollar la intuición. Para cantar apropiadamente tiene que haber coordinación de la melodía, las palabras y el ritmo lo cual crea un sentido de equilibrio y armonía en la personalidad. De acuerdo con H. A. Lingerman (en Khonna, 2000, p. 7) la música puede: Aumentar la vitalidad física, relevar la fatiga y la inercia. Atravesar los estados de ánimo, calmar la ansiedad y las tensiones, levantar los sentimientos. Focalizar el pensamiento, clarificar metas, promover la valentía. Estimular la creatividad y sensibilidad. Fortalecer el carácter y el comportamiento constructivo. Expandir la conciencia de la reparación espiritual. El canto grupal nos da una sensación de unidad, de paz, de armonía y confianza, y si la canción nos enseña además un valor, se convierte en una excelente herramienta de aprendizaje que gusta y divierte al niño; además con la rima adecuada y pegajosa no será olvidada. En una analogía, imagínense en medio de la metrópoli llena de movimiento, de tráfico denso, bocina estridente de autos, chillidos de frenos, voces que gritan, ruido de una construcción; ¿cómo se siente? irritados, nerviosos, incómodos. Ahora imagínese que está sentado bajo un árbol, escuchando el sonido de los pájaros y las hojas que susurran por el viento, y a lo lejos un arroyo que golpea contra las piedras, ¿cómo son ahora los sentimientos? relajados, en paz, contentos. Los niños son muy susceptibles al ruido, por eso es primordial crear una buena atmósfera en casa; si ponemos un poco de música instrumental puede ayudarnos a mantener al el ambiente del hogar tranquilo y relajado, además de que facilita la concentración. La música tiene ese fabuloso potencial, refresca, tranquiliza, estimula al silencio, a la interiorización. Ejemplos de canciones de valores en casa

Se puede poner la misma canción en el momento en que la familia está reunida y hacer coreografías, o comentar que gustó más de la letra, hacer un espectáculo y cada quien debe traer una letra sobre el valor de la semana y enseñarla a los demás, se pueden formar coros en familia y con instrumentos creados con materiales de reciclaje o tantas otras ideas como la familia construya. Esta técnica está relacionada con el nivel intuicional y con la manifestación del amor. El canto grupal y la música son medios muy eficaces para abrir el corazón, apareciendo sentimientos de alegría, amistad, cooperación experimentando amor por los demás, por la naturaleza, por uno mismo. Cuento, relato, historia o biografía Contar historias siempre ha sido uno de los medios más fascinantes de instruir y de ilustrar. Ayuda a encender el espíritu de investigación que lleva a los niños a ideales más claros, agudos y puros, promoviendo un sentimiento de unidad con el mundo. Contar historias surgió como una urgencia, se volvió entretenimiento, tomó la proporción del arte, y se ha vuelto ahora una ciencia. Como arte requiere habilidad, inspiración y un llamado a nuestras emociones. Es una inundación espontánea de sentimientos de un corazón a otro y no de una cabeza a otra. Como ciencia trata sobre los requisitos científicos del ser humano, el estudio de su mente, es decir, la psicología. El niño hoy puede obtener el alimento para su intelecto y un físico robusto mediante el ejercicio o una dieta balanceada, pero ¿qué pasa con su ser moral?, ¿qué pasa con su espíritu?, ¿qué se hace para llevarlo a actuar como humano y calmar los impulsos pasionales que hay en él? Aquí está la importancia de contar historias, la meta es elevar el espíritu del ser humano y cultivar su visión interior que le permite inculcar valores para toda la vida. Puesto que contar historias es una estrategia muy poderosa, es imperativo que los padres la utilicen a cabalidad y en todo su valor. “Para que una historia mantenga de verdad la atención del niño, ha de divertirle y excitar su curiosidad. Pero, para enriquecer su vida, ha de estimular su imaginación, ayudarle a desarrollar su intelecto y a clarificar sus emociones; ha de estar de acuerdo con sus ansiedades y aspiraciones; hacerle reconocer plenamente sus dificultades, al mismo tiempo que le sugiere soluciones a los problemas que le inquietan.” (Bettelheim, 1988, p. 11). Estrategia del cuento, historia o parábola Contar historias es una técnica en sí misma. No solamente debe ser buena sino bien contada. Al escoger y contar la historia se deben tener en cuenta los siguientes puntos. Las historias se deben seleccionar con cuidado. Los hijos deben ser expuestos al tipo correcto de historias, que tengan un significado claro para ellos. Las historias pueden seleccionarse de textos sagrados, mitología, folclore, historia, vida y literatura. Los niños deben llegar a establecer una relación entre el cuento y sus vidas.

Las historias se deben escoger según la edad de los niños y la composición del grupo familiar. La audiencia, la ocasión y el propósito se deben tener en cuenta. Si el día de la Independencia está cerca, o el nacimiento o aniversario de la muerte de un familiar o un festival religioso o cualquier tradición entonces se ha de contar una historia apropiada para esta ocasión. La historia seleccionada debe colocarse sutilmente en una atmósfera apropiada. La audiencia puede ser niños o niñas, toda la familia o dos miembros, los hijos con sus amiguitos, pero independientemente de la edad de los chicos debe mantener el entusiasmo de todos los escuchas en un momento dado. De acuerdo a los tipos de historias o cuentos, la idea de la historia puede darse a través de un poema, una pieza de teatro, una canción, una fábula, una biografía de alguien de la familia o una persona célebre o una parábola. De acuerdo al tema el contenido de la historia debe estar acorde con la edad, la ocasión y la idea que se quiere transmitir. Los personajes de la historia deben ser pocos para que no haya acumulación en las mentes de los escuchas. Han de ser convincentes, reales, de la vida, sin dejar de lado cuando sea necesario el incluir personajes llenos de fantasía e imaginación. Los niños deben ser capaces de identificarse con estos personajes. Ellos se impresionan fácilmente cuando se les cuentan historias de personajes que les impactan y luego tratan de adquirir sus buenas cualidades Personajes aventureros, amorosos, amables, heroicos les satisfacen, dándoles así un sentido de la aventura, el amor, el cariño y una sensación de estar “completo”. Para elegir la historia adecuada en casa, hay que tomar en cuenta ciertas recomendaciones: la edad del niño: para pequeñitos podemos utilizar fábulas, entre los 6 y los 10 años son más aceptados los cuentos fantásticos, de los 10 a los 15 las historias realistas y para adolescentes lo mejor son las historias basadas en vidas o hechos reales la entonación y gesticulación al relatar el cuento nunca leer el cuento, sobre todo a grupos de niños pequeños; ellos requieren que se mantenga contacto visual con ellos, ver la expresión de nuestra cara, y escuchar el sentimiento adecuado en nuestra voz; la lectura de narraciones e historias puede usarse sólo cuando los hijos son ya jovencitos se puede utilizar material de apoyo como títeres, muñecos, ilustraciones y disfraces el cuento ha de gustarle a uno mismo, sentirse cómodo con la historia que se ha de narrar; si no es así, se escoge otra historia. Ahora bien, existen tres fases en el relato de un cuento: Preparación: Se elige el cuento, se familiariza uno con él y se puede preparar material de apoyo (como dibujos, ilustraciones, recortes, uso de títeres, muñecos) Relato: Se cuenta el cuento, nunca se lee. Se resalta el valor que se desea trabajar. Utilizamos la voz y el lenguaje corporal. Seguimiento: Guiamos y ayudamos a los niños a digerir el mensaje sin forzarlos a una moraleja preestablecida; es una guía sutil que puede apoyarse con diferentes actividades como:

actuar el cuento, relatarlo nuevamente en grupos, o con preguntas como ¿qué nombre le pondrías al cuento?, ¿qué sentiste cuando escuchaste qué…?, ¿te hizo recordar algo?, ¿a ti te ha pasado algo semejante?, ¿qué hubieras hecho en lugar de…? ¿Qué se logra con el cuento o la historia? La narración de historias posee grandes beneficios: ayuda al desarrollo de habilidades como la imaginación y la creatividad; genera un interés genuino y estimula, inspira, ilustra e imparte conocimiento de una manera única. Los cuentos poseen un extraordinario efecto en los niños dándoles modelos a seguir. En la clase de valores, la historia es la parte medular, por ello un padre debe convertirse en un tesoro de cuentos. La historia o cuento es la parte medular del trabajo de valores. De ella se parte para desarrollar el valor que ese día se ha decidido trabajar. Si bien es cierto que una historia puede contener varios valores en sí misma, habrá que centrarnos en uno solo y reforzar a través de la narración, de las preguntas de seguimiento, con la frase y las otras estrategias, el valor que se ha seleccionado. Una historia bien narrada, puede hacer milagros en un niño. El chiquito acepta casi automáticamente al héroe del cuento, se identifica con él o ella y tiende a imitarlo. Si el padre sabe hacer uso adecuado de una buena historia, puede modificar a través del simple contar estos relatos la conducta más rebelde. Ejemplos de cuentos o historias en casa El relatar cuentos en un arte antiguo, antes de que existiera el lenguaje escrito, lo que se aprendía o se sabía pasaba de mano en mano a través de la palabra hablada. La historia de cada país está llena de leyendas, de relatos mágicos y misteriosos que forman parte esencial de lo que cada nación es. Tanto los viejos sabios como los grandes líderes han hecho uso de esta extraordinaria herramienta para ilustrar sus enseñanzas y mensajes. En casa, se puede echar mano de cuentos conocidos, de mitos y leyendas, de fábulas, inventar uno propio que se adapte a la enseñanza que queremos dejar ese día, o hasta el relato de lo que pasó en la vida real. Los niños actúan básicamente por identificación, los cuentos y las historias les ofrecen modelos de identificación de actitudes, que es lo que necesitan para proceder con “rectitud”. Está relacionada con el nivel físico. Actividades en grupo Esta estrategia conlleva la participación del grupo familiar completo de preferencia. Hebalkar señala que las actividades en grupo tienen un doble impacto en el comportamiento de un individuo. Primero, mientras participan en las actividades en grupo

él o ella inconscientemente adquieren un código de conducta que se traduce en comportamiento social. Este código de conducta se refiere a las maneras y a la moral, a un sentido de lo que está bien y lo que está mal. En segundo lugar, cada individuo juega un rol consciente o inconsciente en un grupo. Estas reglas de grupo se aprenden a través de la participación en actividades colectivas. Así que si se quiere inculcar valores humanos en el niño, tenemos que manejar las actividades en grupo que correspondan. Mientras participan en estas actividades en grupo, adquieren esos comportamientos que lo hacen un ser humano en el sentido real del término. Ellos juegan y participan en actividades en grupo y hacen lo que hacen los demás, a través de la imitación. Tipos de actividades grupales La familia es una pequeña comunidad en donde los niños aprenden mediante la participación en las actividades planeadas en grupo, en diferentes lugares ya sea dentro o fuera de casa, por ejemplo en el campo o en la azotea en una noche estrellada, así las actividades en grupo se pueden planear para inculcar valores aprovechando distintos lugares. Las actividades se pueden seleccionar y organizar de acuerdo con el nivel de desarrollo y el rango de edad de los niños. Actividades en casa: Aquí se incluyen actividades culturales tales como juego de roles, test de aptitudes, canto en grupo, danzas en grupo y actividades literarias. Historias a través de fotos o representaciones: Series de cartas que contienen historias se llevan, se mezclan y barajan. Los niños escogen cartas, las arreglan en forma continua y luego cuentan historias, así usan el lenguaje pero con un valor, aprenden a hablar en forma de oraciones correctas. Hay otros varios juegos para el salón de clase que se pueden organizar tales como preparar un álbum o libro de borrador, el juego de la culebra o escalera, quizá de matemáticas. Algunas actividades organizadas en el campo: Juegos de si - no: Se seleccionan numerosas frases, que se refieren a conducta correcta o si no. Los niños deben expresar su opinión como positiva o negativa. Regla del juego: Si la respuesta es afirmativa, levante la mano, y si la respuesta es negativa, quédese quieto. Valor: Poder para discriminar entre lo correcto y lo incorrecto. La reina (rey) de esta casa dice: Los jugadores se dispersan en frente a quien dirige en forma de semicírculo. El para o la mama o hasta el niño les pide a los jugadores que hagan varias actividades, por ejemplo tocarse los zapatos/pies, alzar las manos, cerrar los ojos, etc.

Regla del juego: Si la orden va precedida de “El Rey dice” o “la reina dice”, los jugadores deben obedecerla. Si no es así el jugador no debe realizar la acción. Si el jugador se equivoca, sale del juego. El último jugador que quede es el ganador. Valor: obediencia a los mayores, hábitos de formación de conductas deseadas. Pares de animales: Se preparan las hojas, una para cada jugador. El nombre de cada animal seleccionado se escribe en hojas separadas. Se escogen los animales para que hagan sonidos comúnmente conocidos tales como león, gato, perro, gallina, burro, vaca, etc. Coja las hojas y barájelas. Pídale a cada jugador que escoja una hoja. Comience el juego. Cada jugador lee en silencio el nombre del animal que está escrito en su hoja y comienza a hacer el sonido apropiado. Cuando todos los animales encuentran su respectivo compañero, realice una asamblea de animales. Deje que los niños se identifiquen con los animales y hable en primera persona sobre la utilidad de esos animales. El padre o madre o el niño deberán sacar entonces sus cualidades, hablar del cuidado a los animales y narrar historias especiales al respecto. Valor: Inculcar las buenas cualidades a través de los animales mediante la comprensión, el respeto y el amor por los animales. Actividades por fuera del hogar: Actividades de servicio tales como recolectar plata en la “caja de donaciones” y organizar la distribución de ropa y otros artículos para las personas necesitadas. Visitas a sitios educativos importantes. Montar un programa cultural en la comunidad Muestra de talentos Trabajo manual o proyecto de exhibición Estudio de la naturaleza Esta lista no es exhaustiva. Teniendo en mente el ambiente local, el papa o la mamá, puede usar su propia iniciativa y talento creativo para planear nuevas actividades en estos lugares. Estrategia de la actividad grupal Se ha de establecer el objetivo de la actividad en familia de acuerdo al valor que se está trabajando, se establece un juego, actividad fuera o ejercicio con reglas claras para jugar y si hay un ganador, el padre no tomar el papel de líder sino de participe de la actividad, ir evaluando la actividad para que cada miembro de la familia analice si vivió el valor o le costó trabajo, tratando de hacer este rato divertido y aceptando los resultados obtenidos sin forzar respuestas esperadas (García, 2004, p. 29). ¿Qué se logra con la actividad grupal? De acuerdo con Burrows (1997, p. 145) las actividades en grupo ayudan a desarrollar muchas cualidades en los niños, tales como:

Cooperación: Los niños aprenden a trabajar y juegan juntos bien sea en equipos o como curso. Autoconfianza - Las actividades en grupo les proveen oportunidades de discutir sus puntos de vista y actitudes libremente a través de lo cual los niños ganan confianza y no tienen temor de hablar en voz alta. Autocuestionamiento: Al utilizar algunas técnicas tales con tests de actitudes el niño o niña examina sus motivos. Creatividad: Todos los niños son básicamente creativos pero a menudo no saben cómo expresarlo. A través de actividades tales como trabajo en arte, juego de roles y drama los niños tienen la oportunidad de desarrollar su creatividad. Concentración: Para jugar adecuadamente muchos juegos, se requiere la concentración. Se pueden hacer juegos de recordación como “concéntrese” formando parejas de imágenes similares relacionadas con los valores, o mostrando palabras que posteriormente los niños deben recordar. Esta estrategia es la que le da significación a los valores porque finalmente es la puesta en práctica de lo aprendido, es la parte experiencial de la propuesta de despertar los valores a través de estas estrategias, una forma dinámica de aprendizaje en relación con los otros. Los beneficios de esta herramienta son: diversión e interés en el valor aprendido actividades creativas construye confianza y seguridad desarrolla la coordinación despierta talentos ocultos y desarrolla habilidades y el trabajo en equipo IV.6.5 Ejemplos de actividades grupales en casa El ser humano vive en grupo, se relaciona durante toda su vida con algún grupo, por lo que trabajar juntos y en unidad debiera ser algo natural. Muchos de los problemas existentes en la actualidad es la propia falta de tolerancia hacia los demás, hacia la labor grupal. Utilizar esta estrategia en casa, le enseñará al niño a llevarse bien con el otro, a trabajar en forma conjunta con un sólo objetivo común. Existen una gran variedad de actividades que pueden realizarse en casa: dramatizaciones tests juegos trabajo creativo: plastilina, maquetas, dibujo, barro trabajos grupales: presentación de una obra, exposiciones, periódico mural actividades de rol play cuestionarios

Esta estrategia está relacionada con el nivel espiritual, pues involucra el funcionamiento de todos los niveles y por consiguiente apunta al desarrollo de la unidad. Este objetivo de la actividad grupal se logra despertando alegría, cooperación, imaginación,

discernimiento y fundamentalmente estimula la autoconfianza. También le permite al niño

aprender normas y obligaciones sociales, así comprenderá mejor su ambiente y podrá enfrentar

situaciones diferentes.