111111 San Pedro de Ceque

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GPS GUÍA PARA SALIR Viernes 11.11.11 Burgos instala el escenario electrónico MÚSICA Digital 21 abandera desde mañana el Festival Multidisciplinar Espiralmental 2011 [P10] El matón que protege a la estrella CINE Collin Farrell y Keira Knightley protagonizan el thriller ‘London Boulevard’ [P8] El placer de echarse al monte en la joya forestal de San Pedro de Ceque [P2-3] Entre encinas centenarias

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Elplacerdeecharsealmonte enlajoyaforestaldeSan PedrodeCeque [P2-3] Elmatón queprotege alaestrella Burgosinstala elescenario electrónico CollinFarrellyKeira Knightleyprotagonizan elthriller‘London Boulevard’ [P8] Digital21abandera desdemañanael FestivalMultidisciplinar Espiralmental2011 [P10] MÚSICA CINE Viernes 11.11.11

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GPSGUÍA PARA SALIR

Viernes11.11.11

Burgos instalael escenarioelectrónico

MÚSICA

Digital 21 abanderadesde mañana elFestival MultidisciplinarEspiralmental 2011 [P10]

El matónque protegea la estrella

CINE

Collin Farrell y KeiraKnightley protagonizanel thriller ‘LondonBoulevard’ [P8]

El placer de echarse al monteen la joya forestal de San

Pedro de Ceque [P2-3]

Entre encinascentenarias

PLANES Viernes 11.11.11EL NORTE DE CASTILLAGPS2

Aunque no lleguen a milaños da igual. Las ‘encinasmilenarias’ del monte públi-co de San Pedro de Cequebien valen el paseo que me-dia entre este pueblo zamo-rano y el paraje de Las Maja-das, el corro de unas 15 hec-táreas en el que se localizanlas cerca de 150 encinas queasí, a decir de los vecinos,«vendrían a acercarse mu-cho a los 700 años de edad».

Árboles vetustos que, encualquier caso, han mereci-do desde antiguo veneracióny respeto.

Así se explica el milagro deque algo, a pesar de estar a lamano del hombre, se libre dela destrucción durante tan-to tiempo. O así al menos locree el alcalde de San Pedro,que recuerda también cómoantiguamente el monte secuidaba mejor que ahora. Y

son varias las razones. Unade ellas es porque se aprove-chaba más. Por ejemplo, paraleña. El reparto de leña im-plicaba que el monte se ibadespejando de maleza y, porende, que se cortaba lo me-nudo para que lo grande tira-ra mejor. A esta labor, funda-mental para que los ejempla-res más maduros alcancenlongevidad y tengan vigor,se sumaba la explotación ga-nadera que, mediante el pas-toreo, también se aplicaba endespejar de brotes nuevos elsuelo del monte. Es así comoestos bosques de roble y en-cina, la más pura esencia delbosque mediterráneo, ibantomando su perfil de paraísoadehesado.

AbandonoHoy las cosas no son comoayer y el monte, a la vistaqueda, va ganando en fron-dosidad y maleza, un peligropotencial que, además de nobeneficiar el crecimiento deejemplares mastodónticos,puede ser catastrófico si sedeclarara un incendio. Peroel aprovechamiento de leñaya no es tanto como en otrostiempos y, a decir del alcal-de, tampoco se hace con elcuidado deseable. Y la gana-dería tampoco ayuda. Si enel pasado era común ver porallí yeguas o vacas ahora yasolo triscan unas pocas ove-jas y algunas cabras.

El monte público Real Altoy Real Bajo ocupa casi 900hectáreas en los aledaños deSan Pedro de Ceque. Y desdeesa población parte el paseoa pie que, en otros tiempos,acostumbraban a hacer tam-bién los vecinos cuando seponía a tiro disfrutar una tar-de de domingo de tortilla yexcursión. El arranque se lo-caliza en el corazón del pue-blo, donde corresponde to-mar la carretera que se diri-ge hacia Junquera de Terapara, 500 metros después, sa-lirse por una pista de tierraancha y rectilínea que que-da a mano derecha. Es la par-te más aburrida del paseo.Pero sirve como buen prólo-

go a lo que se verá después,que es esa masa densa y os-cura que queda al fondo.

El recorrido por la pista deconcentración dura unos1.600 metros, con campos aun lado y otro, hasta alcan-zar una explotación ganade-ra en el lindero del bosque.Ahí el camino se abre en va-rias ramificaciones, pero laque cuenta es la que sigue defrente. Los siguientes 1.700metros son ya de robledal,de Quercus pyrenaica, paraser más precisos, la especiepredominante allá donde selo permite la encina. Esa esla distancia en la que se al-canza la siguiente bifurca-ción y que, en este caso, seresuelve por el camino de laderecha.

Aunque se vaya de char-la conviene estar atentosporque 200 metros más allá,en una vaguada algo másaclarada que el resto se ini-cian unas roderas que, por laderecha del camino, condu-cen en 500 metros hasta ellavajo de Vallaguna, un be-llo encharcamiento represa-do artificialmente para sa-ciar a los ganados sedientosque recorren estos idílicosparajes pero que sirve tam-bién de bebedero de patos yotras aves acuáticas que sal-drán de estampida comocohetes en cuanto alguien

Un encinarcon soleraEncinas centenarias y lagunasen San Pedro de Ceque

RUTAS CON ENCANTOSAN PEDRODE CEQUE

Un viejo corral de adobe y paredes apuntaladas en el interior del monte.

Rendida la debidapleitesía a unosencinones que yadaban bellotas antesde que Colón pisaraAmérica, el cuerpopide ver más

Los cuidados hanhecho que estosbosques hayan idotomando su perfil deparaíso adehesado

Los vetustos árboles se retuercen en formas caprichosas.

Dos encinas centenarias.

JAVIERPRIETO

Viernes 11.11.11EL NORTE DE CASTILLA PLANES 3GPS

se aproxime por las bravas.De regreso al camino prin-

cipal, el acercamiento a lasencinas ‘casi-milenarias’ con-tinúa por donde se venía parasalir enseguida a las praderasde Pernacio, otra vaguada queacostumbra a mostrar lagu-nas en cuanto los acuíferosse recargan, algo que en el pa-sado también acontecía conmucha más frecuencia queen la actualidad. De hecho,si Pernacio era más frecuen-tado antaño como lugar demeriendas se debe tambiéna que de sus fuentes mana-ban algo más que telarañas.

En Pernacio el camino sebifurca de nuevo y de nuevotoca seguir de frente otros700 metros más, punto en elque se alcanza la última delas bifurcaciones y en el queun cartel nos pregona que porla derecha se entra en el pa-raje de ‘Las Majadas, árbolesmilenarios’.

Ya en llano, el volumen yconsistencia de algunos delos ejemplares que quedanjunto al camino evidencianla solera de un bosque del quese dice que perteneció a losCondes de Benavente antesde llegar a manos del pueblo

de San Pedro de Ceque. Perohay muchas más y más lon-gevas entre las espesuras quese abren a uno y otro lado.

El paseo por este bellezónde monte no tiene porquedetenerse aquí. Rendida ladebida pleitesía a unos enci-nones que ya daban bellotasantes de que Colón pisaraAmérica, el cuerpo pide vermás. Y para ello basta seguirel camino que, en breve, co-mienza a descender cada vezmás acosado por el matorral.Así desemboca en otro máspisado y arenoso que se tomahacia la derecha para ir reco-rriendo el rebollar ahora ha-cia oriente.

El camino corre paralelo alarroyo del Regato, que pre-sume también de fresnoscentenarios en sus orillas.Cuatro kilómetros más ade-lante, sin tomar desviacio-nes ni cruces, y después deun aburrido trecho de nuevoentre campos de labor, se aca-ba por desembocar en la ca-rretera que une Uña de Quin-tana y San Pedro de Ceque.Un kilómetro más de asfaltocierra el circuito en la plazade este último.� [email protected]

�En marcha. A San Pedrode Ceque puede llegarse des-de Benavente o Puebla de Sa-nabria por la A-52 tomandoel correspondiente desvío enCamarzana de Tera.

�El paseo. Circuito sin se-ñalizar de unos 12 km conprincipio y fin en San Pedrode Ceque que permite el pa-

seo por uno de los encinaresmás sobresalientes de la pro-vincia de Zamora. Con muypocos desniveles, puede re-correrse con niños en unastres horas.

�Dormir. Tel. informacióninstitucional: 902 20 30 30.Web: www.castillayleones-vida.com.

Fuente en las praderas de Pernacio.

Robles reflejados sobrelas aguas someras deVallaguna, en el Montede Las Majadas de lalocalidad de San Pedrode Ceque.:: REPORTAJE GRÁFICODE JAVIER PRIETO

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