ESCUELA NORMAL SUPERIOR

“PROFR. MOISÉS SÁENZ GARZA”

MODALIDAD MIXTA

SEGUNDO SEMESTRE

ESPECIALIDAD: HISTORIA

PROPÓSITOS Y CONTENIDOS DE LA EDUCACIÓN BÁSICA II

PROFESOR DE LA ASIGNATURA:

FRANCISCO HONORIO ALANÍS MARÍN

INTEGRANTES DEL EQUIPO: Jesús Rogelio Castillo Quiroz Linda Karina Díaz Álvarez Juan José Fraga Rivera Brenda Elizabeth Fuentes Espiricueta

Monterrey, Nuevo León, a 19 de julio de 2012

ESTUDIO DE CASOS:

“DS”

INTRODUCCIÓNDebido a las diversas situaciones que se han venido presentando dentro de

las aulas respecto a la problemática actitudinal de los alumnos nos hemos dado a

la tarea de reflexionar acerca de ciertos comportamientos de los estudiantes

contrastándolo desde diversas perspectivas de los miembros activos en la escuela

y con autores analizados en esta asignatura.

Dicho análisis se manifiesta en el presente documento por medio de un

estudio de caso, que hace referencia a la aplicación de diferentes instrumentos,

como la observación y algunas encuestas realizadas, que permiten obtener una

información amplia del sujeto en cuestión y que faciliten la explicación del “por

qué” el sujeto actúa de determinada manera.

El estudio de casos esta basado en la observación dentro del aula, que se

realizó al alumno “DS”, estudiante del tercer grado de primaria. Dicho sujeto

presentó actitudes desfavorables en el ámbito personal y de convivencia con el

resto de sus compañeros, dando como resultado un ambiente poco propicio para

el aprendizaje y la socialización de los conocimientos propios del ciclo escolar.

Caso “DS”El alumno en cuestión en este estudio de casos lo llamaremos “DS”, un niño

con discapacidad motriz en el lado izquierdo de su cuerpo, tiene 10 años y cursa

el tercer grado como repetidor. Estudia en una Escuela Primaria ubicada en

Apodaca, Nuevo León.

Debido a esta discapacidad motriz, DS tiene impedimento para mover

normalmente su brazo y por lo que se refiere a su pierna, es casi imperceptible

que tiende a cojear. A lo largo del ciclo estuvo yendo a rehabilitaciones a Houston

ya que lo estaban valorando para intervenirlo quirúrgicamente. Esta discapacidad

no afecta para nada su proceso de aprendizaje, es un niño como todos.

Para establecernos en este grupo de alumnos es importante mencionar que

a lo largo del ciclo escolar fueron inquietos y un poco desordenados, actitudes que

complicaban el avance de los aprendizajes esperados en ellos; había un grupo de

niños muy notable por su mal comportamiento y una falta de interés en el

aprendizaje, entre estos se encontraba DS.

¿Cómo es él? Cabe destacar que era la segunda vez que cursaba el tercer

grado, la maestra anterior lo reprobó debido a que mostraba desinterés por las

clases, era agresivo y por su ausentismo en poco más de un bimestre, debido a un

accidente; la docente menciona que regresando no realizaba las actividades en

clase, no cumplía con tareas y su participación era poca o casi nula, además de

no socializar con sus compañeros, por lo cual no tenía las habilidades para

acreditar su ciclo escolar y pasar al cuarto grado.

En lo que respecta al ciclo escolar 2011-2012 el cambio no fue mucho, la

mayoría de las veces no ponía atención a las clases, para que trabajara tenía que

ser muy insistente con él, aunque cuando se lo proponía era muy listo y

participativo (actitudes poco comunes) faltaba con tareas y molestaba demasiado

a sus compañeros, no había día que no tuviera alguna queja de él. Los alumnos

lo identificaban como el niño mal portado y el que les pegaba a todos sin razón

aparente.

Con respecto a su conducta de siempre molestar y golpear sin causa

alguna a los demás niños e insultarlos, se le llamó la atención, se habló con sus

padres, se le sancionó, se habló a conciencia con él, incluso acudí con maestros

de apoyo y los directivos de la institución, y no hubo cambio en DS.

Los padres del alumno tienen mucho que ver en su comportamiento, por un

lado el padre es autoritario y dominante, así lo describía el niño, además que

como titular presencié un fuerte enojo, el cual se desbordó con gritos y actitudes

amenazantes hacia mi persona.

Por otro lado, se logró observar que la madre tiene un carácter dócil, DS la

manipulaba a conveniencia, por lo cual era posible percatarse de la

sobreprotección que tenía y lo consecuente que era con el niño. En una charla con

el padre, mencionó que mientras él quería o pretendía educarlo a base de

sanciones, éstas no surgían efecto alguno, ya que la señora le levantaba los

castigos.

Debido a la discapacidad del niño, la madre lo solapaba respecto a su

incumplimiento con tareas y trabajos, evadiendo su responsabilidad como alumno

en que se cansaba con facilidad, o atañendo la falta de trabajo a su discapacidad

en el brazo.

Todo esto lo hacía con el fin de enmendar ese sentimiento de inferioridad

que ella creía que DS tenía debido a que en algunas charlas logró expresar y

hacerlo sentir bien, como un niño “normal”. Logrando con ello que su hijo no

tuviera límites en casa y por tanto en la escuela no hacía lo que sus maestros le

indicaban.

De acuerdo con la información presentada se observa que este niño no está

obteniendo una educación de calidad, sobre todo en el aspecto de relevancia, ya

que como lo menciona Schmelkes (1996), “no puede hablarse de calidad

educativa si el sistema educativo no está siendo capaz de propiciar el desarrollo

de aprendizajes relevantes, significativos, útiles, relacionados con la vida actual y

futura de los alumnos” (p. 2). De tal manera que si el niño tiene comportamientos

inadecuados es debido a que la escuela no le está brindando los aprendizajes que

él necesita, ya que padece de una discapacidad motriz, que no está relacionada

de ninguna forma con sus capacidades cognitivas.

Torres (1998), comenta que lo que se necesita es un aprendizaje innovador

que se refiere a que el alumno sea capaz de “prever los cambios y saber

manejarlos, de modo que las personas puedan construir el futuro” (p. 1). Esto

encaminado a que en su momento se debió concientizar a Daniel de la

problemática motriz que le estaba afectando.

Del mismo modo, Canales y Solís (2009), comentan “que repetir un grado

es el primer paso para terminar en la deserción” y esta acción realizada pudo

haber dañado la autoestima del niño ya que lejos de beneficiarse con la posibilidad

de volver a cursar cierto grado, puede resultar contraproducente, ya el propio niño

se siente incapaz de poder lograr el aprobar el grado escolar y de esa forma,

también sus compañeros lo perciben, lo cual en lugar de mejorar los aprendizajes

del alumno, lo ciclan repitiendo los mismos contenidos dos años consecutivos.

Continuando con análisis del caso, para que el niño lograra los aprendizajes

esperados planteados en los programas es necesario que los padres apoyen la

educación de sus hijos, tal como lo menciona Sánchez (2006), ya que “la familia

es la primera institución que ejerce influencia en el niño, ya que transmite valores,

costumbres y creencias por medio de la convivencia diaria”. (p. 1).

Nord (1998), en Pedro Sánchez, (2006), afirma que “el involucramiento de

los padres en la educación de su hijo es importante para el éxito escolar, pero no

todos los niños tienen padres quienes se involucren en su escuela” (p. 1) De modo

tal que, sobre todo en este caso en que el alumno presenta cierta discapacidad,

son este tipo de estudiantes los que más apoyos necesitan para que puedan

desempeñarse dentro de un marco de conductas regulares, a diferencia de la

sobreprotección que recibía por parte de la madre.

Si estos y todos los padres de familia participaran activamente en el

proceso enseñanza-aprendizaje de sus hijos, ocurriría lo que nos comenta

Sánchez, (2006), este argumenta que cuando los padres participan

proactivamente en la educación escolar se producen resultados positivos como

una mayor asistencia, disminución de la deserción, mejoramiento de las actitudes

y conducta del alumno, una comunicación positiva padre-hijo y mayor apoyo de la

comunidad a la escuela.

En la situación presentada se aprecia que hubo fallas en las personas

involucradas, por lo que, en su momento debió de haberse analizado con mayor

detalle su participación e impacto, ya que finalmente el beneficiado o el

perjudicado sería el alumno, por lo que en esta realidad de acuerdo al Plan de

Estudios vigente se establece que “la educación es un derecho fundamental”, y a

su vez, el sistema educativo hace efectivo este derecho al ofrecer una educación

pertinente e inclusiva. (p. 36)

Por lo que en dicho documento se explica que para atender a los alumnos

que, por su discapacidad cualquiera que esta fuere, se requieren de estrategias de

aprendizaje y enseñanza diferenciadas, por lo tanto, “es necesario que se

identifiquen las barreras para el aprendizaje con el fin de promover y ampliar, en la

escuela y las aulas, oportunidades de aprendizaje, accesibilidad, participación,

autonomía y confianza en sí mismos, ayudando con ello a combatir actitudes de

discriminación”. (p. 36).

CONCLUSIÓN

En este documento se abordó una de tantas historias que surgen en las

distintas aulas, en el quehacer diario de los profesores. Pero, ¿Qué es lo que nos

deja de enseñanza este estudio de casos?

En primer lugar, como docente se tiene que ampliar la visión de la oferta

educativa, ya que no basta con estandarizar la enseñanza y el aprendizaje de los

estudiantes, sino que más bien se necesita dar relevancia al quehacer en cada

uno de esos niños que presentan alguna discapacidad e incluso problemas de

índole familiar. Para cumplir con el Perfil de Egreso de la Educación Básica, con el

único propósito de propiciar el desarrollo integral de las personas.

En lo que concierne a los alumnos, debemos de desarrollar la capacidad de

observación, misma que nos permitirá en un primer momento orientar las acciones

necesarias para contribuir al desarrollo de los individuos logrando con esto apoyar

en esas problemáticas individualizadas, debido a que los niños no solo tiene que

lidiar con los conflictos escolares, sino con los que haya en casa.

Por último, como lo señala uno de los Principios Pedagógicos, debemos de

renovar el pacto entre el docente y el padre de familia, ya que somos la base, el

ejemplo o referente a seguir que tienen los alumnos, y con ello debemos entender

que la educación no le concierne única y exclusivamente al profesorado, sino que

somos un equipo, con un fin común que es el desarrollo pleno del estudiante.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Canales, D; Solís, R. (2009). Impacto sobre la reprobación en primaria y

secundaria sobre la evaluación PISA. X Congreso Nacional de Investigación

Educativa. Veracruz. México. www.comie.org.mx/congreso/

Sánchez, P. (2006). Discapacidad, familia y logro escolar. Universidad Autónoma

de Yucatán. México. Revista Iberoamericana de Educación (ISSN: 1681-5653)

n. º 40/2 – 10 de octubre de 2006. EDITA: Organización de Estados

Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI)

Schmelkes, S. (1996). Educación para la vida: algunas reflexiones en torno al

concepto de relevancia de la educación. Conferencia presentada en la Mesa

Chiapas para la Educación organizada por la Secretaría de Educación del Estado

de Chiapas, en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.

Secretaría de Educación Pública. (2011a). Plan de Estudios 2011. México: SEP

Torres, M. (1998). Competencias cognoscitivas básicas en  Qué y cómo aprender.

Necesidades básicas de aprendizaje y contenidos curriculares.

SEP/UNESCO/OREALC.

ANEXOS