DOSISCULTURAL

Volúmen 4 (1) - Año 2016Revista de difusión artística de la Facultad de Ciencias de la Salud

DOSIS CULTURALRevista de Difusión Artística de la Facultad de Ciencias de la Salud ISBN: 2014 - 15560

Universidad Privada de TacnaUPT PerúAv. Bolognesi 1177Fono - Fax 427212Apartado postal: 126URL: http://www.upt.edu.pe/Tacna - Perú

UNIVERSIDAD PRIVADA DE TACNAAUTORIDADES UNIVERSITARIAS

Rector: Dr. Hugo Calizaya Calizaya

Vicerrector académicoDr. Oscar Angulo Salas Vicerrector de investigaciónDr. Raúl Valdivia Dueñas

Decano de la Facultad de Ciencias de la SaludDr. Javier Rios Lavagna

COMITÉ EDITORIAL

Mgr. Marco Carlo Rivarola HidalgoMed. Marggoriett Vásquez Silva Ing. Verónica Condori Chavez

Sr. Angeluz Vargas OntiverosSrta. Cecilia de la Flor Catacora TiconaSr. Italo Tasayco Berrios Sr. Adrián Zea Berolatti Sr. Bryan Campos Pacoricona

Diseño y diagramación: Lic. Luis Felipe Ramírez Montesinos

Editorial Llenando espacios

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La vida universitaria se pinta como un mundo básicamente académico y alrededor de él, probablemente la investigación y la producción de algún servicio o generación de bien, suenen a complementos, pero la verdadera Universidad, va más allá, se compromete con su entorno de manera responsable, y se compromete mucho más con su comunidad, ofreciéndole espacios que deben de llenarse contribuyendo de manera efectiva a la formación integral de sus estudiantes.

“Dosis Cultural”, se convirtió en el espacio que ofrece la Facultad de Ciencias de la Salud, para mostrar la sensibilidad de los miembros de su comunidad, y fue fácil saber que en estos cuatro años de ser publicada, iba a estar llena de la inspiración concretada en poesía, cuento, ensayo y fotografía, mostrándose como una ventana abierta al mundo para poder mostrar a los artistas que llevan dentro, junto a esa vocación de servicio tan propia de nuestras carreras.

Cuando leemos u observamos los trabajos que presenta esta edición, sabemos que llenamos el espíritu de emoción, nos conmovemos o alegramos con textos profundos o cotidianos, con imágenes nostálgicas o de vital colorido, y que todos ellos contribuyen a formar a ese profesional integral, no solo pensando en el que ha publicado, sino también en todos aquellos lectores, que reviven esas emociones al recorrer estas páginas.

Con satisfacción, que no puedo negar tiene tintes personales, puedo afirmar que estamos construyendo profesionales sensibles, que estamos llenando todos sus espacios, los del SABER, los del HACER pero sobretodo los del SER con SENSIBILIDAD y ese compromiso se renueva en esta oportunidad con esta edición de “Dosis Cultural”, La Revista de Difusión Artística de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Privada de Tacna.

Marco C. Rivarola H. Comité Editorial

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FOTOGRAFÍA:

- “ES POSIBLE TENER DOS PASIONES”- “LEGADO”- “CHICA DE ROSAS”- “LA ORACIÓN ES LA FUERZA DEL HOMBRE”- “LIBERTAD”- “1”- “2”- “ÚNICA Y BELLA”- “ESPERANZA”- “NUNCA DEJES DE VIVIR”- “4”- “MARGHERITA”- “SONREÍR ES VIVIR, VIVIR ES SONREÍR”- “MIRADAS”- “LIBERTAD DE FRONTERAS”- “A VECES UNO NO TIENE ELECCIÓN”- “EL INICIO DE TODO”- “VIVAS”- “3"- “FREEDOM”

CUENTO: - “MUJERES O ÁNGELES”- “AQUELLA TARDE DE DICIEMBRE”- “UN NUEVO AMANECER”- “JULIETTE Y BORJA”- “UN BREVE ANÁLISIS”- “ELLA Y ÉL, EXTRAÑA SENSACIÓN”- “LA CIUDAD RESPLANDECIENTE”- “OLVIDO”- “LAZOS DE AMOR- “VIEJO Y OLVIDADO- “JUGAR CON FUEGO”- “ZAPATOS DE TACÓN ROJOS”- “LA ÚLTIMA CARTA”

Contenido:En orden de aparición.

POESÍA:

- “PARA MAMÁ”- “AVANZA”- “PARA TI”- “YO”- “DOLOR”- “BRISA DE UN AMOR DE VERANO”- “FILOSOFÍA BANAL Y ALGO MÁS”- “ROJO Y VERDE”- “MEMORIAS”- “ESENCIA DE MUJER”- “RECUERDOS”- “NO TE QUISE”- “AMARILLO”- “DE UN NIÑO AL MUNDO”- “CARTA DE UN MÉDICO A LA MUERTE ”- “BAJO EL MAR”- “SOLO RECUERDA QUE YO NO TE PUEDO OLVIDAR”

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«La medicina es mi esposa legal, el teatro mi amante, cuando me aburro de una paso la noche con la otra.»

”ES POSIBLE TENER DOS PASIONES”

Marcela Cáceres Arias Estudiante - Ciencias de la Salud

“AVANZA”Nelly Kuong Gómez

Docente

“PARA MAMÁ”

Katheryne Cayo HuayhuaEstudiante - Medicina Humana

Avanza paso a pasoO avanza raudamente

Según tu posibilidadMás no desistas nuncaNo deseches tu ideal.

Si te cansas haz un altoMás no dejes de luchar

A la vuelta de la esquinaPuede estar la meta

Que creías no alcanzar.

Adelante, siempre adelanteY si acaso retrocedes

Que sea para más avanzar.Hay caídas en la vida

Y escollos en el caminoQue tendrás que superar

Para arribar al destinoY el triunfo acariciarNo desistas nunca

No deseches tu ideal

Si a tu meta ya llegasteDescansa y mira adelante

Sueña con otro ideal.Otra puerta se abre pronto

Renueva fuerzas y adelante,vuelve de nuevo a bregarLa vida es eterno avance

Es otro reto afrontarY que a tu paso por ella

Quede de tu andar la huellaNo desistas nunca

No deseches tu ideal.

Hojas que caenRuidos del silencio

El andar de tus pasosGrandes raíces que me aguardaban

Tu eterno descanso, miradas perdidas, historias reescritasEras mas que mi árbol

”LEGADO”

Angela Farfán ZagaEstudiante - Medicina Humana«La educación es un acto de amor, de coraje;

es una práctica de la libertad dirigida hacia la realidad.

Te amo. (no hay nada más para decir)Todos mis escritos exprimidos en tu rostro

todas mis miradas rodando a ras de tus ojos,Voy a impostar caminos hasta llegar

donde duermen tus pupilasy sin ánimo de despertarlas, reptaré,

Lento-ofidio-reptil-hombreHasta posar mis labios en los tuyos…

¡Cuanta paz cuando tú y yo nos besamos…!Creo que te amo, mujer niña,

Después de todonevan tus ojos copos de amor

y mi cuerpo es la aldea

que se blanqueará con tu nieve…

(no hay nada más para decir)

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“PARA TI”Benjamín Humberto Núñez Espinel

Docente

”¿MUJERES O ÁNGELES?”

Autor: AnónimoEstudiante - Medicina Humana

Era inevitable el olor a café por las mañanas; desde que elegí estudiar la carrera de medicina humana mis horas de sueño se habían acortado drásticamente, y para suplir esa necesidad recurrí al café como un buen aliado. Aquel día era uno muy especial; Mi primer día en el hospital. Y no, no era por el internado, sino debido al curso de Procedimientos de enfermería. El uniforme, el maletín, la bata hacían que uno se sienta distinto, otorgaba mágicamente una nueva personalidad y sin darte cuenta también hacía que tu amabilidad se incremente en proporciones en las que uno no llegaba a reconocerse como tal. Entre idas y venidas, llegue al 4º piso del hospital; al servicio de Medicina Mujeres, allí junto a mis compañeros conocimos a la enfermera Patricia; una mujer carismática con la sonrisa siempre en el rostro y de buen trato, un semblante algo cansado pero siempre mostrando una actitud jovial que la caracterizaba bien.Éramos 6 personas, nuestro trabajo consistía básicamente en tomarles los signos vitales a los pacientes, administrar medicamentos, y establecer una buena relación con ellos. Nos asignó 2 pacientes a cada uno, y aunque todos los presentes estábamos temerosos por ser la primera vez que íbamos a tener contacto con un paciente, ella nos dio la seguridad que nos hacía mucha falta y nos impulsó a hacerlo sin temor. Mi primera paciente fue una mujer de 25 años; estaba allí por una picadura de araña y aunque parezca algo banal; aquello representaba un riesgo considerable; me dijo que era su cumpleaños en un tono algo triste mientras le tomaba la presión; esbozando una sonrisa le dije: << Feliz cumpleaños, de seguro todo mejorará>>, ella sonrío.La segunda paciente era muy callada, no hablaba mucho y se me hizo relativamente fácil tomarle los signos vitales. Fue así como culminó mi primer día en el hospital; la enfermera Patricia con aires de ternura nos despidió y regresé a casa.La segunda rotación fue medicina varones; en realidad debería ser la primera pero por cuestiones de horario y una par de cosas más hubo un cambio ligero. La encargada de aquel servicio era la enfermera Matilde; temida por muchos, la viva imagen de lo correcto, alguien leal al hospital y una gran persona que nos enseñó que un médico debe ser alguien digno de admirar en todo sentido; en la postura, el trato, la limpieza, conocimientos y otras cualidades más. La tercera rotación fue en el servicio de cirugía. Allí conocimos a la enfermera Carmen Julia; una mujer alta con el cabello corto y ondulado, bonita sonrisa, y una personalidad que esconde a un ángel dentro. Nos enseñó la clase de vendajes y aunque aún sorprendido de la paciencia que nos tuvo a todos fue algo que siempre admiré.La cuarta rotación fue llevada a cabo por la enfermera Guadalupe en el servicio de Emergencias; una persona muy graciosa, sus anécdotas, su sonrisa y su actitud tan jovial la hacían una gran mujer; no recuerdo la última vez que me reí tanto; siempre nos agradó su trato a mí y a todos mis compañeros y a aunque solo tuvimos una sola clase con ella siempre quedará en el recuerdo.La quinta y última rotación estuvo a cargo de la enfermera René y fue en el servicio de Ginecología, una mujer seria, de cabello crespo, paso firme y mirada fuerte. Su forma de hacer las cosas con tanta seguridad, sus conocimientos en el área y su severidad al momento de hacernos preguntas es algo que nos dejó impresionados a todos.Finalmente me encuentro aquí, frente a la computadora escribiendo esta pequeña narración con el único fin de hacerles un reconocimiento a esas mujeres que hicieron de mi primera experiencia en el hospital la más agradable de todas.

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“YO”Diego Mauricio Huanqui Tovar

Egresado

No soy sólouna persona algo seria

algo cansadaalgo vestida de blanco

con palabras rarasjuguetes raros

y que quiere sabercosas más raras aún.

Tú

No eres sóloun llanto, un estado irritable,fiebre, tos vómitos, diarreas,

preocupación de padres.

Tú no eres sólo esa tarde en que dejaste de jugar.

Y de un lado yo,observándote, analizando,

queriendo entenderel universo de tu salud.

Del otro tú,que creas universos

para explorarlos,para disfrutarlos.

Puede que yo no sea tu superhéroeo vaquero favorito,

quién te salve de piratas y marcianos.

Puede que túno seas un diagnóstico complicado

una evolución tórpidaun pronóstico reservado.

O desafortunadamente pueda que sí.

Y espero combatir juntos tu dolencia,alejarnos de todo miedo,

espero mantener la esperanzay juntos sonreír un día.

Al final,nos daremos cuentaque me necesitaste

para que esas tardes de juegos vuelvan.

Y yo,te necesité más aún,

en silencio,para sentir la alegría de mis juegos

que dejé en una olvidada tarde.

“Mirada perdida, te acaricia la luz de una tarde porteña,

rodeada de flores.. la ciudad se detiene

en un segundo infinito de ti.”

”CHICA DE ROSAS”

Adrián Ernesto Zea BerolattiEstudiante - Medicina Humana

Han pasado ya tres años desde aquella tarde en que la conocí; aún recuerdo como era el ambiente, un cielo tenue, decidiéndose entre el día y la noche, irradiando una ligera luz ámbar como esos que observas en los atardeceres de la orilla del Pacífico, prácticamente un color hermoso, como de los que Picasso o algún otro genio utilizaría para pintar alguna de sus más finas obras de arte; en resumen, un cielo espectacular para un diciembre que no tenía atardeceres deslumbrantes; pero aquel día, así fue para mí.Era un clima cálido, la primavera es de las estaciones más bonitas del año, todo florece, incluso en personas que no pensarías que ocurriría; nunca me considere un romántico, las cosas del amor y sentimientos siempre estuvieron en segundo plano para mí, y así permaneció por mucho tiempo.

Me gustaría contar una bella historia de amor juvenil, uno de esas que ablandan el corazón del hombre más rudo, de los que las personas quieren ver en películas, sin embargo este no es el caso. Ella no era una actriz de televisión, mucho menos una modelo de alta costura, era una chica común, una adolescente como todas las demás; éramos de la misma edad, en su rostro estaba el fresco aire de juventud, unos ojos pardos que expresaban vida y una ligera sonrisa carismática que irradiaba confianza, un cabello largo y sedoso con el cual jugaba frecuentemente. Ella siempre se sentaba adelante; por mi parte, yo preferiría la parte de atrás; quien diría que en algún momento nuestros seres entrarían en contacto, era prácticamente difícil, todo un mar de gente entre nosotros, y pensar que algún momento nos hablaríamos era complicado, no sé si algún vidente lo hubiera predicho o algo así; pero aquella tarde así pasó.

En la vida pasan muchas cosas, cosas de las que te enorgulleces, de las que te apenas, y también están de las que te arrepientes; la mía siempre la considere perfecta, siempre hacia lo que mis padres me ordenaban, las cosas que había logrado siempre fueron gracias a mi esfuerzo y dedicación, tenía numerosos logros en mi haber de los que me enorgullecía, siempre trate de ser un chico ejemplar; nunca me había importado el lado espiritual, el emocional, para mí todo tenía que ser logros y objetivos cumplidos; quizá por eso cuando el amor toca a tu puerta, te agarra desprevenido.

Las conversaciones con esa chica se hacían más frecuentes, de semana a semana, de día a día; teníamos objetivos comunes en cierto sentido, como cualquiera, queríamos triunfar en la vida, cumplir nuestras metas y lograr lo que nos proponíamos; yo siempre había planificado lo que quería hacer con mi vida, ella por su parte también sabía a medias lo que quería. La amistad no tardó en aparecer y cuando te sientes cómodo con alguien, el tiempo siempre pasa rápido, aquel diciembre se pasó como en un abrir y cerrar de ojos. Ya iba a comenzar un nuevo año, un treinta y uno de diciembre a medianoche nos preguntamos mutuamente que nos depararía el futuro, sería uno incierto, de eso estábamos seguros, pero sabíamos que pase lo que pasé, no sería tan malo.

Yo siempre pensé que era “inmune” a los sentimientos, nunca había lagrimeado en las películas tristes, y tampoco me habían “roto” el corazón por relaciones fallidas; pero que yo me sintiera así, no significaba que todos también eran "inmunes".

”AQUELLA TARDE DE DICIEMBRE”

Zenn Anthony Arias CarazasEstudiante - Medicina Humana

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La relación con mi ahora nueva amiga se basó en la confianza, conversaciones que no terminaban hasta que uno cayera dormido; fue la primera vez que me dormí a las tres de la mañana por hablar con alguien, eran entretenidos y amenos aquellos diálogos nocturnos, hablábamos de cosas como aficiones y metas, hasta que película habíamos visto recientemente o que gustos musicales teníamos. Prácticamente nos habíamos vuelto más cercanos; sin embargo todo cambia y si bien yo la consideraba una gran mujer, los sentimientos están a flor de piel en verano, sobretodo en una chica joven como ella.

Yo ya había estado en relaciones con otras chicas antes, para mí era todo monótono, lo mismo de siempre, como dije antes, el amor nunca estuvo en primer plano para mí, y a pesar de lo que había vivido, nunca me había enamorado, siempre pensé que eso experimentaría de mayor, quizá en unos diez años después recién me preocuparía en buscar a la chica perfecta, pero en aquellos tiempos solo pensaba en cumplir mis objetivos.

Ella fue una gran amiga para mí, sin embargo no la veía más que eso, no quería herir sus sentimientos, nunca quise, es así que tomé una de las peores decisiones de mi vida, un error del cual siempre me arrepentí, en ese momento pensé que era la decisión correcta, quizá la tome muy rápido, fui muy apresurado en mis acciones o no pensé en las consecuencias; pero en una mente joven y orgullosa como la mía, no pensé que me equivocaría, solo atine a actuar, y es así como las conversaciones pasaron de ser diarias, a cada tres días, luego semanales, hasta prácticamente ser dos desconocidos; dos almas que se perdieron en el camino, que se alejaron por decisiones mal tomadas, y que nunca más se volvieron a reencontrar.Las primeras semanas fueron difíciles, había perdido a una gran chica con la que la pasaba bien, por vergüenza no volví a buscarla, el tiempo ya había pasado y no sabía cómo volver a iniciar la conversación, no estaba seguro si la confianza aún seguía; ahora me pregunto: ¿y si no hubiera tomado esa decisión? , ¿Si nunca me hubiera alejado de esa forma tan inmadura? , ¿Si hubiera seguido con ella?, ¿Si hubiera intentado una vida entera con ella?

Han pasado ya tres años desde aquella tarde en que la conocí, es diciembre, como aquel día que nos conocimos, sin embargo, la chica de esta historia ya no está a mi lado, ahora solo miro al cielo y espero que haya encontrado la felicidad que siempre se mereció.

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”LA ORACIÓN ES LA FUERZA DEL HOMBRE”

Shirley More Estudiante - Medicina Humana

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Tal vez debí aferrarme a mis sueños más de lo que hice, no debí desmoralizarme frente al primer impedimento; quizá debí intentar algo, un esfuerzo más; probablemente con eso lo hubiera conseguido, la vida ideal que desee desde chico. Siempre tuve altas expectativas de como guiaría mi futuro, tenía numerosas metas, ideales que quería realizar para esta edad; sin embargo, ahora mismo mis pensamientos son solo dudas, incertidumbre llena de nostalgia que solo perturba mi mente.

Si me preguntaran como defino mi vida, respondería con una tenue voz: Pude haber hecho algo más; o debí atreverme a hacerlo, no perder la oportunidad cuando la tuve, así tendría un presente prometedor, repleto de felicidad y podría sentirme realizado; ahora solo me pregunto, ¿soy acaso un perdedor? Pensar en errores del pasado un día de semana a medianoche, en lugar de pensar a futuro no es algo de ganadores, prácticamente en siete horas tengo que volver a trabajar; y poniendo el tema del trabajo, ahora me cuestiono, ¿es acaso mi actual ocupación lo que en serio me apasiona? He trabajado ahí por cuatro años, así que seguramente sí; pero, es ahí donde me gustaría trabajar todos los días sin importar lo que pase, siempre con una sonrisa la jornada completa, incluso en los días donde no quiera ni levantarme de la cama; las horas me parecen eternas cuando estoy en la oficina, sinceramente no sé si soporte tanto tiempo hasta mi jubilación.

Otra pregunta que me retumba en la mente es: ¿acaso la chica que está acostada en la cama de mi habitación, es la mujer de mi vida? ¿La que Dios mandó para mí? Nunca he sido un católico ferviente, pero en estas cosas del amor nunca fui bueno, y solo me basare en la fe, que Él tiene a alguien para cada quien, la media naranja como dicen, pero ¿Es en serio esa mujer con quien debo estar, la que Él mandó para mí? ¿Y si aún no conocí a la indicada? ¿O si la indicada fue alguien que ya conocí pero no hice lo suficiente para quedarme con ella?

Son ideas que me aquejan últimamente y me ponen a pensar: ¿es esta la vida que siempre quise? Pensar en el pasado siempre es tedioso; imaginar lo que pude haber hecho, las cosas que pude haber logrado, las personas de las que me aleje, amigos que perdí en el camino, amores que fracasaron, todo eso es un conglomerado de ideas que sólo me ponen nostálgico.

Y pensar que todo comenzó en aquella reunión, hace un par de días, cuando me reencontré con colegas, antiguos compañeros de clases que no veía desde hace ya mucho tiempo; con ellos, quienes compartí mucho tiempo en la facultad, días enteros de estudio y también noches de parranda; sin embargo la vida nos dio caminos diferentes y prácticamente no supe más de ellos, la mayoría estaban felizmente casados, trabajos estables, algunos con hijos; me alegre por ellos, al parecer lograron lo que querían, sin embargo, me cuestione si yo también lo había hecho, les atine a decir que si, con una sonrisa disimulada, con los ojos desorbitados y la cabeza un poco gacha; me encontré con un antiguo amor; de esos de la adolescencia, aquella con la que creía que iba a tener una vida entera y no duro más que un par de años; ella estaba como la recordaba, la misma sonrisa de siempre, con esa tierna mirada que siempre me cautivo, sin embargo ahora ella llevaba un anillo en su dedo que lucía con orgullo, se iba a casar con un hombre de la alta sociedad, su rostro irradiaba orgullo y satisfacción, logro lo que siempre quiso; solo me acerque y la felicite; quería que la velada acabara, no pude aguantar mucho tiempo en aquella reunión, por eso me retire temprano esa noche.

”UN NUEVO AMANECER”

Zenn Anthony Arias CarazasEstudiante - Medicina Humana

Mi mente estaba en blanco, no sabía que había hecho estos últimos cinco años, cuantos sueños que dije cumpliría al final terminaron en solo eso, sueños; quería viajar por el mundo, tomar el té en algún lugar de Londres, recorrer la gran muralla china, iniciar un viaje espiritual con algún monje del Himalaya; y para estos años, estar felizmente casado con una mujer que me quiera, con la que comparta todas esas experiencias, la que Él me mandaría, mi tan anhelada media naranja; sin embargo no cumplí nada de eso, y ahora estoy solo nostálgico en el balcón de mi habitación.

Ellos recordaban mi sonrisa, una que parece ya no estar tan presente en mi rostro, lo peor es que pasaron dos días de aquella reunión, no pensé que me afectaría tanto, sin embargo miro el reloj y ya son las tres de la madrugada, en unas cuantas horas volveré a trabajar y no he dormido nada, me he pasado la noche entera admirando la luna llena desde mi dormitorio, arrepintiéndome del pasado, pensando que he hecho con mi vida, tratando de idear una máquina para volver al pasado, pero eso es solo de ficción; me gustaría volver atrás y corregir errores, arreglar mi vida y ponerla como siempre la quise, con todos esos sueños hechos realidad; más creo que ya debo dormir, acostarme en la misma cama de todos los días , al lado de la misma mujer que he visto los últimos meses, con la vida que yo solo construí gracias a nunca arriesgarme.

Miro como la luna se aleja por el horizonte y me pregunto: ¿es demasiado tarde? ¿Aún podré conseguir la vida que siempre quise? Estas dos noches de reflexión me hicieron pensar, aun soy joven para cambiar las cosas, nunca es tarde para volver a intentarlo, desenterrare mis antiguos sueños y metas y haré de mi vida lo que en serio quiero, después de todo mi futuro solo depende de mí, mis decisiones la guiaran, y nunca es tarde para nada, todo es posible y todo depende de mí; creo que después de todo, aquel reencuentro no me hizo tan mal, me hizo reflexionar, me hizo darme cuenta en que rumbo estaba llevando mi vida y me he decidido, no soy un perdedor por no haber logrado lo que quise, mucho menos por arrepentirme de lo que pude haber hecho, o conseguido, soy un ser humano con errores, todos los cometemos, lo importante es que esos me ayudaran a aprender, y ahora erigiré mi nueva vida, como siempre la quise, todo depende de mí, tomaré una ducha, le daré un beso a mi novia y me iré a trabajar lo más pronto posible, será un nuevo comienzo, volveré a sonreír.Veo el sol salir a lo lejos, eso significa que es un nuevo amanecer para mí.

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”LIBERTAD”

Angela Farfán Zaga Estudiante - Medicina Humana

“Buscar tu propio camino y enseñar a otros a hacerlo, es libertad”

Se trastocó tu miradaEn espina

De mi pecho.Desde entonces

Respiro entrecortado Amando y amando

Tu mirada O caminando En pos de ti

“DOLOR”Benjamín Humberto Núñez Espinel

Docente

Gonzalo Renato Carpio Mamani Estudiante - Medicina Humana

“1”

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Te veo a lo lejos y ya sé cómo seguirá este día,pero quizás hoy sea diferente.

Sé que me darás un apasionado beso en los labios,sé que preguntarás si llegaste demasiado tarde y

sé también que tomarás de mi mano,suavemente, como sueles hacerlo,e iremos caminando calle abajo.Y es que la monotonía y la rutina

acabaron por meterse de lleno en nuestra relación,pero tú pareces no notarlo, siempre tan alegre,

parece que no te das cuenta de lo que está pasando.Sospecho que de verdad estás enamorada de mí,

pues esos ojos apasionados y esa mirada encantadorano han cambiado en todo este tiempo.

Pero todo esto es extraño, siento que me falta algo.Como si parte de mí se hubiera desvanecido hace mucho tiempo.

Siento que las cosas no están como se supone que deberían,ya no me nace ser romántico contigo.

Pues desde hace un tiempo dejé de sentir.Ya no tengo los sentimientos que, en un principio,

hicieron de nuestra relación lo más maravilloso del mundo.Las cosas cambiaron,

las mariposas que en mi estómago revoloteabanya no están: murieron.

Sé que últimamente he estado engañándome,pensando en que podría pasar por alto todo esto.Llevo planeando en este día hace unas semanas,

pero no logro encontrar una manera en la que no sufras,de cualquier manera, te romperé el corazón y te haré trizas,

pero no puedo seguir con esto, por tu bien y por el mío.Es tu culpa, por hacer de mí tu todo,

por ponerme en el centro de tu universo y por creer en cosas eternas.¡Qué tontería! No existe cosa semejante a un "amor eterno".

Te acercas tiernamente a mi pecho ymecánicamente extiendo mis brazos sobre tus hombros.

Te abrazo y, casi automáticamente, susurro a tu oído algo que no entiendesMe miras a los ojos y dices que me quieres,sin siquiera imaginar lo que estoy por hacer.

“BRISA DE UN AMOR DE VERANO” Pedro Jesús Salvatierra Mazuelos

Estudiante - Medicina Humana

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Tren interminable, tema incompletoSuspiros en las alcobas, susurros en la noche

Ideas locas de amantes, delirio de poetasFantasía de infelices, dogma de profetas

¿Es eso el amor?¿Naturaleza sin concepto, sin forma, sin sentido?

¿Un aviso inevitable para un destino ya premeditado?¿Una ascensión entre besos de fuego y sonrisas delirantes?

O es que acaso son fantasmas borrando nostalgias pasadasExhalando montones de palabras dulces al oído

Quitándole el sentido pleno a lo vividoDejando una falta de juicio y creando un cuento infinito

Filosofía banal intentando explicar al amor Una historia, una mujer, una declaración, un beso

De testigos un perro, una tarde y el fríoPrincesa de marfil, hagamos de este mundo tuyo y mío.

Gonzalo Renato Carpio Mamani Estudiante - Medicina Humana

“2”

“FILOSOFÍA BANAL Y ALGO MÁS” Brayan Miranda Chávez

Estudiante - Medicina Humana

Caelo

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Juliette era la mujer de mi vida, y me demoré mucho tiempo en darme cuenta - mi nombre es Borja y el día de hoy tengo un sentimiento como si tuviera un camote atorado en mi garganta, ese sentimiento que se parece a una disfagia esofágica mezclado con angina de pecho estable, soy médico y además residente de cardiología y aún no puedo curarme a mí mismo, es un síndrome que jamás he leído en los libros y que lo padezco.Mi enfermedad comenzó hace 8 años cuando llevaba cursos de CEPU con Juliette, ella era una de las más sobonas de la clase, alta, delgada de pelo liso largo color castaño claro con destello rubios y ojos verdes que miraban como único objetivo ingresar a la facultad de medicina, era lo que más quería como todos los demás postulantes, al verla el primer día de clases me sorprendió lo fastidioso que eran sus incesantes ganas de aprender, pero sin darme cuenta del pasar de los días llamé su atención y esta chica se sentó a mi lado y me comenzó a hablar, me dejó de parecer tan fastidiosa y me dio cierta comodidad como si comenzara una bella amistad.Terminando el CEPU, Julie y yo seguíamos en contacto, pero me empezó a mandar ciertas señales de amor, señales de esas que nosotros los hombres no comprendemos bien a menos que sean muy evidentes, al ser tan evidentes trate de ignorarlo porque ella no me gustaba, el amor no estaba en mi plan de vida; olvidaba decir que tengo mi vida bien calculada no pensaría en enamorarme hasta después de graduarme, terminar la residencia de cardiología y obtener un doctorado, así que dejé de tener contacto con ella.

Julie seguía mandándome mensajes pero no los respondía, tiempo después cuando comenzaron las clases me di cuenta que Julie y yo éramos de la misma promoción, ¡Lo que me faltaba! , Julie era como una resonador magnético que atravesaba mi epitelio escamoso estratificado queratinizado, ella veía mi interior como si hasta mi páncreas le hubiese parecido hermoso, me enteré por unos amigos que ella aún seguía enamorada de mí, pero yo no sentía amor por ella, Julie no me interesaba quizá porque no estaba seguro de mis sentimientos por ella o por mi enfoque en la carrera de medicina y porque jamás me he enamorado de nadie, en fin eran muchas cosas por las que preferí alejarme de ella.Tiempo después me di cuenta que Julie iba perdiendo interés en mí, yo sólo la veía a lo lejos, no quería hacerle daño, ella no me gustaba, solo extrañaba hablar con ella y la amistad y confianza que me daba.Un año después me enteré que Julie tenía enamorado, un chico alto, delgado, para nada simpático, 4 años mayor que ella y estudiaba en la facultad vecina de ingeniería. Y fue así como mis amigos comenzaron a fastidiarme en reuniones y fiestas que Julie ya no se moría por mí sino por alguien más, le quise demostrar a mis amigos en mi afán machista que Julie aún se moría por mí, así que le volví a hablar, con excusas tontas me acerqué a ella, había pasado año y medio desde que nos dejamos de hablar y Julie me habló normalmente, poco a poco fui recobrando esa amistad perdida, empecé a sentirme diferente masomenos un mes despúes de hablar con ella.Era verano ya, y aún sentía necesidad de hablarle diariamente, nos reíamos bastante, ella era de esas amigas a las que podía contarle lo peor de mi vida y reírme con ella de lo mejor de mis días.Comencé a escribirle cartas a Julie, de las verdaderas, a mano, no sabía porque lo hacía, pero sentía esas endorfinas circulando en mí, mi profesor decía : Las hormonas se apoderarán de ti y harás cosas que nunca pensaste hacer, supongo que a esto se refería, comencé a ver diferente a

”JULIETTE Y BORJA”

Jeniffer Diana Vincha MaqueraEstudiante - Medicina Humana

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Comencé a escribirle cartas a Julie, de las verdaderas, a mano, no sabía porque lo hacía, pero sentía esas endorfinas circulando en mí, mi profesor decía : Las hormonas se apoderarán de ti y harás cosas que nunca pensaste hacer, supongo que a esto se refería, comencé a ver diferente a Julie como si un manto de belleza la recubriera y se vistiera de inteligencia y humildad, me transmitía una tranquilidad única, no había miedo ni vergüenza de mostrarme como soy con ella, ella no me juzgaría ni mucho menos se burlaría de mí, era el clonazepam que necesitaba en mis días rudos, y la adrenalina que necesitaba cuando me sentía abatido por la oleada de parciales, los piropos médicos son muchas veces incromprensibles pero sabes que te nacen de lo profundo de tus conocimientos, y es así como tus conocimientos y tus sentimientos se juntan y pum! Sale un piropo bien elaborado.Julie me gustaba mucho, pero ella tenía novio, yo sabía que ese chico no la merecía, y aún más sentía que yo sí la merecía, no sabía qué hacer, lo pensé muchos días y varias ocasiones, pensé en decírselo, este amor que sentía crecía como un carcinoma de células escamosas invasivo dentro de mí, todo comenzó como una vacilada de mis amigos y comencé a sentir un cariño de amistad al inicio que siguió avanzando hasta sentir que ella era a mujer de mi vida y no quería separarme de ella nunca, ni siquiera por el tarado de su novio, me comenzaron a entrar los celos de verla con él, sabía que algo no iba bien en mí, así que no lo aguante más y se lo dije: Julie, me gustas mucho, y siento que yo si te merezco y no él, obviamente Julie se quedó sin palabras y me dijo que tal vez yo me estaba equivocando que ella me quería bastante pero sólo me veía como un amigo y hace tiempo tal vez esas palabras hubieran tenido lugar; Julie tenía razón, perdí mi oportunidad con ella hace mucho tiempo, cuando yo lo era todo para ellaComo de ser evidente, Julie dejó de hablarme después de esa fecha, poco a poco se fue alejando y evitándome, yo obviamente me moría por dentro, por sus palabras, que me clavaban como estacas por todo el cuerpo. Dejé de estudiar, dejé de ir a clases, dejé que el viento se llevara mi alma, no se en que momento me abandoné así, mis amigos me hicieron recapacitar, lloré por primera vez por amor y me rompieron el corazón por primera vez.Yo era muy reservado con mis problemas personales, sufría por dentro, ese sentimiento se comía todo lo que tenía dentro de mí, devoraba todo a su alrededor y yo me dormía pensando en ella, pensando en cómo sería mi vida sin ella y como hubiera sido mi vida con ella como novia, mía, solo quería eso que fuera mía, mi dueña, madre de mis hijos y abuela de mis nietos , la iba a dejar que gobierne en mis pensamientos y en mi corazón, ya no era la medicina mi único motor. Lo peor que te puede pasar siendo estudiante de medicina es que te enamores, eso es realmente un fastidio, sobreviví a Julie y su rechazo, concentrándome en mis últimos dos años de estudios.En el internado circulaban un rumor de que Julie se casaría con su novio, el patán de ingeniería, que era como mil años mayor que ella, se casarían por civil pero aun no tenían una fecha, yo aún sentía que debía ir y cuando el juez diga: alguien se opone? , ahí gritaría : Yo me opongo.Pensaba realmente en las probabilidades, pero no me atrevería a hacerlo.Me llegó una invitación hace un par de días por parte de un amigo, era la tarjeta de invitación para la boda de Julie, se me partió el alma, esa mujer era la mujer de mi vida y verlo casarse con otro hombre era probablemente el trombo que ocluiría mi arteria coronaria, no pensé que Julie, mi Julie se casaría con otro hombre que no sea yo, pero nada podía hacer ya.Hoy vi a Julie mientras yo salía comprar un pastel de cumpleaños para mi madre, Julie al parecer veía su pastel de bodas, al verme, se acercó y me habló, nos sentamos a hablar un rato y luego ella me besó como si se hubiera aguantado esas ganas por mucho tiempo y yo le correspondí como si le entregara todo mi amor en cada beso, fue el mejor día de mi vida, le pedí que no se casara con él, pero ella empezó a llorar y me dijo que no podía retroceder, que yo era su mejor amigo y que ella me quiso como a nadie pero yo la rechacé, ahora ella vive con alguien más lo que yo me negué desde un principio, me dijo que nunca me olvidaría pero que el beso era porque no quería que yo la olvidara.Le dije que ella es como un electrocardiograma que se interpretar a la perfección y que jamás olvidaría como hacerlo.

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Le dije que ella es como un electrocardiograma que se interpretar a la perfección y que jamás olvidaría como hacerlo.Julie no cambiaría de opinión, no hay vuelta que darle.Junio 6 del 2021, el día de la boda de Julie, yo me encontraba en el servicio de cardiología y me enteré por las enfermeras que llegó a emergencia una mujer médico con traumatismo craneoencefálico de mal pronóstico por accidente de tránsito, preguntando me dijeron que la mujer se llamaba Juliette Rivera que había sido atropellada la mañana de ese día, me entró un frío por las piernas que me subió hasta la cabeza y fui corriendo a emergencia, al llegar me dijeron que no podía ingresar porque los médicos estaban luchando por la vida de Julie, finalmente mi Julie se dejó ir, mi Julie luchó pero su situación era muy mala, lloré como si fuera el día de mi muerte, Julie era la mujer de mi vida y me di cuenta muy tarde.

Cecilia de la Flor Catacora Ticona Estudiante - Medicina Humana

“ÚNICA Y BELLA”

“Por que nada es eterno y porque hasta una flor en el desierto

da un grito de coraje por ella.”

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Sé que es difícil empezar un pensamiento escrito sobre todo si no tienes bien visualizado como terminarlo o como darle forma, leyendo el libro de Paulo Cohelo que por cierto aun no termino, me ha invitado a escribir algo que incluso dentro del mismo libro toma como libertad, algo que me llamo mucho la atención, en una parte la esposa le pregunta al personaje si ha encontrado la felicidad, y si es así ¿qué es para él? , y tiene razón al pensar o al mencionar que todos decimos familia, carrera, riquezas, sin embargo siguen siendo infelices por toda su vida por ese algo que les falta. Hoy no me voy a quejar de mi falta de valentía al enfrentar mi mundo o a otras personas, hoy no son quejas si no un análisis muy extenuante.Mi hermano me dice que soy emo de closet y me está empezando a gustar esa definición.Como mencionaba mi análisis, hacia lo que me hace feliz o infeliz, no encuentro por qué cuando leo un libro o cuando me escribo con una persona que esta remotamente lejos, o cuando veo una película de algún lugar lejano y que realmente me llama la atención, me siento feliz, fuera de todas las enseñanzas de mis padres, que si el divorcio o no, la falta o no de mi padre en ciertas cosas, que si está o no esa firme convicción de seguir estudiando, seguir adelante, tener una carrera, ser alguien, tratar a las personas con respeto, la sociedad, los amigos, las fiestas, la manera de comportarse, la clase, los pleitos, todo dentro de lo mismo. Hace unos días en prácticas, salí del laboratorio a despejarme un poco después de unas palabras del doctor y al verme reflejado en un vidrio, mi bata blanca, mi pantalón, bien peinado, me vi como lo que quiero ser, un Odontólogo, que para fin de cuentas es lo que he deseado toda mi vida, sin embargo no me sentí feliz, me sentí aliviado de tener una meta, mas no me sentí feliz, me preocupa ese sentimiento porque últimamente lo he traído en mente, esa pregunta de que si lo que he hecho o dejado de hacer ha sido suficiente o ha sido lo mejor y aunque sé que el pasado no regresa, me duele pensar que he hecho todo lo que la gente toma para ser feliz y no lo es, y sigo buscando maneras de que mi mente escape de aquí, de verme involucrado en la minuciosa búsqueda de la belleza, incluso en las cosas donde no se encuentra, de buscar aquello que dispare mi mente hacia mundos en los que no he estado y en los que me gustaría quedarme por un rato, buscar una y otra vez el amor, que a lo mejor no llega a importarme más esa imperiosa necesidad de que mi vida sea vista a través de los ojos de alguien más, o ese empuje que podría darme mi abuelo.En fin, mi hermano me dice que ya es hora de cenar, intentare terminar mi análisis más rato.

”UN BREVE ANÁLISIS”

”ELLA Y EL, EXTRAÑA SENSACIÓN”

Jean Pierre Vizcarra CentonEstudiante - Odontología

: Roxana Benavides Montes de OcaEstudiante - Medicina Humana

Corría una noche de jueves y era el segundo mes que lo veía, su bondad era tan mágica que hacía que Ella vea el mundo con la misma bondad, a pesar de las desavenencias de nuestro tiempo, y el transcurrir del mundo agitado en el que vivimos; Él hacía que toda la sala se llenara de paz y los que estén en la sala se llenen de toda esa dulzura de ser humano que sólo él emanaba y que no se encuentra así no más en un sitio como ese. Tenía paciencia, era gentil, con todos y con todas, en medio de todo ese ambiente especial parecía reinar la paz con su sola presencia; Él la miraba con dulzura, y Ella respondía con una tierna sonrisa que a Él le encantaba, era evidente porque le respondía con otra sonrisa igual de cálida, Ella no sabía si Él

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era con todos igual y que una vez más Ella veía cosas donde no, a veces cuando Él hablaba ella miraba con cordura y atención, pero al sonreír y ver que él sonreía también , ella se contagiaba de su paz, se ponía algo nerviosa y volvía a sentir esa paz rara, dulce pero pura, sin perturbación, ni malicia, era real, era honesta, era como volver a sentirse niño, así de puro. Y recordaba un cariño especial no de esta época, no de este mundo, quizás algo así como el que sentía Anne Frank por Peter Van Pels en medio de la segunda guerra mundial allá por los años 1943, en medio de ese ambiente hostil en donde se anidaba aun algo llamado afecto, era como que si al decirle adiós, o hasta luego Él y Ella se abrazaban en un segundo y con un tímido beso en la mejilla se decían adiós, ojalá algún día encuentre a alguien como tú.

Rubia de cabellos rojos, asemejas,el inicio de los tiempos con el rojo erupcionar de los volcanes.

caminas por entre parques verdes,por entre gentes rojas, devoras aire.

Mientras hombres rojos matan hombres verdes,y ricos verdes viejos compran rojas niñas pobres.

Vives sola, rubia roja, con tu bolsa en la cinturaen acecho del hombre verde que pagará tu sueño rojo,

en la triste noche vestida, como tú; de minifalda,en la triste esquina pintada, como tú; de prostituta.

¡Oh rubia roja de cabellos libres y sueños rotos!Saldrás luego del trabajo, despeinada,

agotada de besos y palabras no sentidas,caricias regaladas a compás

de verdes papeles o monedas rojas.Caminarás por mil veredas, con tus tacos minifalda

y tu mirada regalando compañía a hurtadillas.Pasearás en parques nuevos donde ricos verdes,

siguen comprando rojas pobres..y un vértigo cruzará tu memoria… de prostituta.

Seguirás tu vida con algo de tristeza y calma resignada,nuevos clientes verdes, nuevos billetes rojos,

pagarás tu vida y tu rutinacon los mismos billetes rojos de los clientes verdes..

y un sueño clamará por lo no cumplido,y una vida llorará lo no entendido…

Quizás, algún día, alguna niña roja pobre te dirá:“De grande, mamá, voy a ser como tú”

Te sonrojarás por la inocencia de la niña,y dirás con palabras rojas de prostituta,

“Tal vez, hija, tal vez”…Sendas gotas rojas caerán por tu mejilla verde

y volarán, al viento, tus cabellos rojos de medusa…

“ROJO Y VERDE” Vanesa Núñez Díaz

Estudiante - Medicina Humana

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Como de rutina salíamos como siempreY como cosas planeadas o casualidades inmensas

Se hizo de noche, de un de repenteCaminamos como era costumbre

Y como acto de magia, se fue la luzDejándonos en una penumbra permanente

Saltaste hacia mí y quise abrazartePero la cobardía me albergaba

( y de inseguridad moría )No hubo estrellas que nos iluminen

Pero tu voz me dio la luz que necesitabaTus labios a mis labios se acercaban

Y mi oscuridad poco a poco se iluminabaFue un primer beso

Aquel que perdura, que no se olvidaEse que te deja inquieto, alegre, entusiasmado

De esos que para volver a vivirTe demoras una vida

“MEMORIAS” Alonso Jahir Flores Galarza

Estudiante - Odontología

Daniela Liendo Vargas Estudiante - Medicina Humana

“ESPERANZA”

“Solo deja ver la pureza de su alma.”

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Mirada tierna e inocentePupilas perfectas y claras

He intentado verlasY he perdido el valor

Mirada de niña risueñaPestañas de inmenso albor

Yo quiero siempre verlasY es ahí donde empieza el temor

Mirada sincera de niñaReflejo de tu amor

Ya romperé mis barrerasHasta entonces evito mirarte, con dolor

“ESENCIA DE MUJER” Alonso Jahir Flores Galarza

Estudiante - Odontología

Gian Carlo Ruiz Pérez Estudiante - Medicina Humana

“NUNCA DEJES DE VIVIR”

“A pesar de todas las adversidades que se pueden presentar, debemos buscar lo que nos mantenga vivos,

solo nosotros decidimos cuando es el momento de poner un alto a nuestra vida.”

- Muy bien señorita. ¿Entonces me dice que la entrada de la cueva se derrumbó y que la luz de esta puerta aquí a mi costado te transmitió calma y la atrajo hasta aquí? – Le dijo el guardián de la puerta, levantando una ceja de su metálico rostro a la pequeña niña- S… sí, señor. – le dijo la niña.- Y ahora qué, ¿Quieres cruzarla? – Le dijo el guardián de metales a la niña pequeña en son de burla.- Sí, señor -Respondió la niña, tratando de calmar su intenso miedo ante el enorme, extraño y metálico individuo.- Quiero cruzarla, tiene que ser la salida de esta cueva.El guardián se acercó a ella, la miró de pies a cabeza y refunfuñando le dijo:- Mm, entrarás, pero te advierto, al atravesar las puertas no saldrás de la cueva, sino entrarás a una ciudad de infratierra. Éstas son las puertas de una ciudad. La salida que buscas está cruzándola. Pero para salir por ahí tienes que pedirle permiso al Rey. - ¿Al Rey?- preguntó la niña con curiosidad, nunca antes había visto a un rey.- Sí, el Rey Holften. Él vive en el palacio que está en el medio de la ciudad resplandeciente. Te darás cuenta de él apenas atravieses las puertas. El guardián se levantó de su asiento, él parecía un conglomerado de metales rehusados, como tuercas, tornillos, alambres, piñones que juntos formaban a un individuo en forma de hombre viejo pero firme. El guardián busco las llaves de la puerta en sus ropas. Se detuvo un instante como recordando algo, y después dijo:- Ah, ya me estaba olvidando. – Buscó entre sus cosas debajo de su silla y sacó dos objetos. – Toma esta capa, póntela, es para que pases desapercibida entre los guardias. - La niña se quedó maravillada con ella, ésta era, al igual que el guardián, fabricada con cosas rehusadas metálicas, pero una pintura dorada la adornaba y le ponía un toque mágico, era hermosa y era de su talla. Se la puso. Parecía un vestido, cuya capucha tenía forma de máscara. -La gente conoce a los humanos, una vez vino uno, pero ya hace mucho tiempo, sin embargo la seguridad se ha vuelto más exigente que ante, ya te las ingeniarás para entrar a palacio. Y ahora toma esto. – El guardián le acercó una especie de llave plateada con incrustaciones esmeralda. - ¿Qué es esto?- preguntó la niña- Es una llave, muéstrasela al rey a penas estés enfrente de él, pero antes has una reverencia. Esta llave significa que yo te la di, que el Guardián de las Puertas Norte Miridor te dejó entrar, así te creerá. No se las muestres a los guardias, ellos no confían en nadie, ahora anda- El guardián abrió las puertas de par en par.- Te deseo suerte, niña.- Le dijo con voz suave.- Gracias, guardián – Ella le dio un tierno abrazo y entró a la ciudad.Cuando ya estaba dentro, volteó para ver al guardián, pero sólo vio una pared de roca, como si las puertas nunca hubieran existido, como si rocas oscuras hubieran tapado la entrada, se dio cuenta, entonces, que la entrada era mágica que las puertas por dentro eran invisibles y que el guardián estaba fuera para protegerlas de los extraños.La pequeña niña, entonces prosiguió su camino, adentro era hermoso, era una ciudad con casitas de metal relucientes, todas eran medianas, y en el centro se veía un enorme edifico en forma de puntas y cúpulas que brillaba con el dorado del ambiente y que estaba en el medio de la ciudad en un montecito verde, que pareciese era hasta ahora el único verde lugar de ese lugar. La niña caminaba entre las personas metálicas de la ciudad, ellos no se daban cuenta de su disfraz y la trataban como una simple niña.

”LA CIUDAD RESPLANDECIENTE”

Alexita GuzmánEstudiante - Facultad de Ciencias de la Salud

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Entonces llegó por fin a la entrada de palacio, la puerta principal de rejas, había dos guardias y una fila de personas elegantes que iban entrando en parejas lentamente. En la entrada decía en un cartel: Prohibido niños. Entonces se dio cuenta que ella no podría entrar. Pero entonces tuvo una idea al mirar a la última pareja de la fila. Disimuladamente se puso detrás de la señora de vestido pomposo, estaba hablando a cerca de un vals del rey Holften, pero fue entonces cuando la niña se metió rápidamente entre sus faldas y así pudo ingresar a palacio. Ya adentro la niña salió del vestido y se escondió debajo de la mesa de bocaditos de la Sala Real. En ese momento las trompetas suenan y por la escalera principal bajan El Rey Holften II (como así lo presentaron), el príncipe Jikl con un traje azul y la princesa Amaia con un vestido blanco, y cada uno se sentaron en sus sillas reales. Entonces un vals sonó y el Rey dio la señal para que todos empiecen a bailar, esta era la oportunidad de salir de la mesa y presentarse ante el rey. Se colocó en frente de la familia real, el Rey la miró y se asombró, qué hacia una niña aquí en el palacio.- ¿Qué haces tú aquí? –preguntó groseramente el ReyLa niña se descubrió el rostro.- ¡Eres una humana! -Dijo el rey- Mi nombre es Eivy, Rey Holften II. Hizo una reverencia como le dijo el guardián y seguidamente le mostró la pequeña llave plateada con incrustaciones esmeralda.La princesa se asombró, al ver la reluciente llave. El público danzante se percató de la presencia de la niña, entonces todos se pasaron la voz y pararon de bailar a observar la escena. La princesa, se levantó de su asiento real y se acercó a la niña y le preguntó - ¿Querida, quién te dio esto?- Le preguntó con voz amable a la pequeña niña.- Me lo dio Miridor, el Guardián de las Puertas del NorteLos ojos de la princesa se abrieron de asombro - ¿Dices que Miridor te lo dio?, ¡Eso es imposible!, Él desa…- ¡No, él no está desaparecido! Si eso es lo que iba a decir, él está afuera de las puertas invisibles. Miridor me dijo que venga aquí al palacio y que… - miró al Rey- hable con el Rey para pedirle por favor que me deje salir por la otra puerta.- ¿Eso te dijo?- preguntó el príncipe- Sí, señor. - Él es mi padre.- dijo la princesa en voz baja- ¿En serio? – le dijo la niña sonriente con tono de sorpresa, por haber escuchado algo inesperado y repentino.Pero la princesa al darse cuenta de que hizo mal en ignorar al rey, romper el protocolo por un instante al ponerse delante de este para hablar con la niña, la princesa Amaia se excusó y tomó de nuevo su lugar a un lado del príncipe.- A ver, a ver, niña, si lo que dices es cierto, entonces Miridor el Gran Guardián de las Puertas del Norte te dijo el precio que tenías que pagar para que yo el Rey te deje salir.La pequeña niña le dijo que Miridor no le dijo algo como eso. El rey le explicó que la condición era que baile el vals que él había creado, la razón por la que todos sus invitados estuviesen presentes. - Si bailas bien te dejaré salir de la ciudad, pero si no bailas bien te quedarás. ¿Qué dices?- Mm, porque no mejor- Con el fin de arreglar la vida del guardián y de esa ciudad – porque no mejor, aparte de que me deje salir, usted haga que las puertas de este lugar sean al revés y que la roca se vea desde afuera y las puertas desde adentro, y que por lo tanto el guardián este adentro y no afuera lejos de sus familia. Creo que así estarán más seguros del mundo exterior.La princesa al oír las dulces palabras de la niña, le apareció una sonrisa de oreja a oreja. El Rey lo pensó, y al final accedió a la petición. De pronto el vals empezó a sonar, Eivy se puso en el centro de la pista de baile, recordó todas las clases de ballet a las que su mamá la llevaba en vacaciones.

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Entonces empezó con un salto y dio piruetas por la sala, sus brazos al moverse en el aire parecían como palomas volando en las pequeñas corrientes de aire que formaba, su piernas saltaban, se desplazaban, flexionaban y volteaban, su vestido de cosillas metálicas con adornos dorados, hacían que cada vez que diera una pirueta se formara una luz dorada alrededor de la niña, haciéndola parecer una pequeña hadita mágica en medio del público, el que estaba con la boca abierta, como hechizado por la pequeña bailarina. Incluso el rey no podía distraer sus ojos en otra cosa; el príncipe y la princesa estaban maravillados con sus delicados pero seguros pasos de baile. La música se terminó y el final de su baile fue hermoso. Todos aplaudieron y el Rey tuvo que acceder a la petición. La princesa se acercó a la niña, el príncipe la siguió, ella le dio un enorme abrazo y le dio gracias por lo que hizo por ella. Entonces el príncipe le dijo – Ahora, es momento de ir a la Puerta del Sur. - El Rey dio la orden de fabricar el hechizo para hacer que las puertas se dieran la vuelta. Y cuando Eivy salió junto a los príncipes reales, vieron al guardián en la entrada de palacio, la princesa atravesó el jardín corriendo y ambos, padre e hija, se abrazaron fuertemente en la puerta de rejas. Eivy los alcanzó y el guardián después de haber besado a su hija cien veces le dijo a la pequeña niña:- Hola muchachita, así que pudiste lograr lo que querías. – Eivy sonrió – Te digo algo, esa idea tuya de voltear las puertas, fue una espléndida idea- Miridor se hincó ante la niña, para alcanzar su altura – Ten esto - ¿Es otro regalo?- Le preguntóEl guardián le obsequió un pequeño dado hecho de cables de cobre enredados, era del niño que él y todos los presentes habían conocido hace tiempo. Se le había olvidado en este mundo. Eivy lo miró, le dio un abrazo y le dio las gracias. Finalmente todos los presentes acompañaron a Eivy a la Puerta del Sur. Ella se despidió de ellos para siempre y atravesó las puertas, y cuando miró hacia atrás, sólo vio rocas. De pronto escuchó llamar su nombre, era la voz de su padre que la estaba buscando. Eivy salió del callejón de rocas claras y llegó a la salida, el cielo estaba celeste.- ¿Hija pero dónde estabas?, ¿Y este vestido? Te estaba buscando, ya pude arreglar el carro, unos extranjeros que pasaban por la carretera en su carro me ayudaron.- ¡Papá, no vas a creerme!- De dónde conseguiste este vestido, ¿qué es eso que llevas en la mano?Eivy le mostró el pequeño dado de cobre.- Él me lo obsequió. – Entonces el padre lo miró con curiosidad, lo tomó con su mano y miró a su pequeña y sonriente niña. Este es mi dado.

Y ayer perdí algo mas que una simple billetera,un dolor cualquieraen una borrachera

donde deje de lado una cajetilla de cigarros hilton media llenael pasaje de un rumbo sin fronteras

dos cartas que te escribí en un papel deshojado

pero lo que hubiera querido perder,se quedo aferrado a mí, comoun beso o quizás una caricia

entendí que a cada segundo se aferrabamas a mi, como diciéndome "no me quiero ir"y me quedé como siempre con tus recuerdos

y es así como me perdíen tus besos y caricias

que no es mas que solo recuerdos.

“RECUERDOS”Carlos Enrique Tintaya Fernandez

Estudiante - Facultad de Ciencias de la Salud

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“4”

Gonzalo Renato Carpio Mamani Estudiante - Medicina Humana

Todas las mañanas hace lo mismo, sentada sobre la vereda, arropando su locura, balbucea interminablemente canciones ininteligibles masticadas fervientemente por la insanía, por el delirio.. por momentos mira hacia arriba, como esperando alguna divina revelación o protección.. o como si buscase a través del cielo nublado alguna respuesta que obviamente no podría entender... El suelo es también motivo de sus miradas, hurga entre las rendijas de la vereda por donde filas de hormigas llevan y traen pequeñas migajas, por momentos, con sus extremadamente delgados y hasta podría decirse cadavéricos dedos se acomoda el cabello, hirsuto, enmarañado, extremadamente negro, misteriosamente limpio, vuelve a mirar al cielo y sigue con sus rezos.. Las personas que a esa temprana hora pasan por allí, la conocen, pues comparten la rutina de todos los días, ellos al ir al trabajo, ella sentada en la vereda. La miran ya casi sin sentimientos, como algo ya sabido, ya estudiado, ya superado y olvidado. Ella sin embargo, cada vez que pasan les sigue estirando la mano, canturreando algo que rompe el silencio sin decir nada, pidiendo entre dientes lo que no se entiende, no es dinero lo que su corazón clama, es alivio, es cordura, es compañía en dolor vivido, pero nadie sabe de ello. Sólo recibe una incompleta mirada, un resquicio de olvido y de

”OLVIDO”

Benjamín Humberto Núñez EspinelDocente

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indiferencia, Pasan uno tras otro, los conocidos, como es de esperar; sólo pasan, sin gastar ni siquiera un minuto en ella.. sin incomodarse, sin importarles, como sabiendo que al día siguiente será lo mismo… ella les seguirá estirando la mano, brotando permanentemente de sus labios esas palabras que nadie entiende, que nadie escucha, que nadie festejará nunca, mezcla de canciones de arrullo y lamentos de dolor… Nadie sabe, sin embargo, que a veces, al abrir los ojos, muy de mañanita, cuando nadie la ve ni la oye, llegan a su memoria imágenes reales, visiones que recuerdan tormentosamente su vida… muy vividas, muy sentidas… arrancan unas lágrimas, un sollozo, un gutural sonido de dolor y sufrimiento… Recuerdos que borran cualquier brote de cordura, que la llevan a abrazar voluntaria y fervientemente el olvido, como único refugio para su alma.. Sólo así se calma, respira hondo y al exhalar el aire, exhala también sus odios, sus fracasos, su vida.. vuelve a ponerse su patológico vestido mientras comienza el balbuceo eterno, las miradas perdidas, los pasos rápidos en pos de su vereda, de la que es ama y dueña, su única propiedad, su refugio, su pedazo de mundo… impregnada a ella por tantos años de locura y de olvido.Se podría decir que prefiere ese estado, sin responsabilidades cotidianas, sin presiones, sin más temor que la despojen de su reino, que le impidan balbucear sus rezos y llorar sus canciones. Ya hubieron días así, donde la obligaron a subir a una camioneta, la llevaron a un lugar extraño, con gente extraña, hombres y mujeres que no la entendían, que no se entendían, que no entendían nada… lejos de su vereda, de sus hormigas, de sus migajas, de sus mañanas… Ella sólo se acurrucaba por algún rincón, mirando perdidamente el horizonte, haciéndose la que no sabía, jugando nuevamente en el suelo con sus alargados dedos, esta vez con pena, con miedo, con algo de dolor. La gente entonces comprendía su estado y la dejaban tranquila, por momentos venían personas de blanco que le hablaban, agradables, sonrientes, complacientes… pero ella solo miraba lejos, sin responder nada a nadie, luego se iban y de nuevo a acurrucarse soñando otra vez con su vereda matutina. Luego de algunos días, los mismos que la llevaban en la camioneta, se encargaban de dejarla, nuevamente sola, sin más compañía que sus balbuceos y miradas perdidas.. volvía otra vez la rutina y los pasantes de la mañana la veían otra vez en el lugar de siempre, y como siempre, le regalaban un cuarto de mirada y medio gesto, de indiferencia… Hubo una mañana en que sus recuerdos extrajeron más dolor que de costumbre, se quedó sin balbuceos, sin miradas.. sin vereda. Esa mañana no tuvo fuerzas para nada, solo para llorar, esta vez sus ojos ya se perdían en las sombras, estaban lúcidos, con un brillo de realidad que la trajo de sopetón a este mundo, a su vida, de dolor permanente, y no pudo olvidar… y entonces recordó, se vió en una casa, no muy grande, no muy chica, con un hombre a su costado que le hablaba familiarmente, cotidianas cosas, preocupaciones simples… ella, que ya esbozaba miradas perdidas, palabras no dichas, frases impensadas, no respondía nada. Sólo pensaba en su embarazo, acariciaba su barriga como ungiendo algo divino, como si quisiera con sus caricias retener a su producto, evitar que se pierda, evitar que otra vez a través de un sangrado pierda lo poco de alma que le quedaba.. Cuatro veces había muerto en vida, cuatro veces su matriz enferma no pudo contener el embarazo, rompiendo en llanto sangrante su impotencia, acabando de paso, poco a poco, con sus fuerzas, con sus ganas y esperanzas…A cada pérdida, a cada embarazo no llegado a término, ella se alejaba, se perdía en el silencio, en lo oscuro del dolor, en la amargura… se hacía cada vez más distante, solitaria… por las tardes canturreaba canciones de cuna que nadie entendía, le hablaba y cantaba a su barriga esperando ansiosamente que crezca, que se deforme maternalmente, necesitaba ver grande su abdomen para encontrar finalmente la paz en su vivir...Ya no le importaba el hombre que tranquilamente escuchaba hablar, ya no le importaba el recuerdo de sus padres muertos, ya ni pensaba con pena en su ciudad, de donde vino y no pudo volver.. ya no le importaba su vida, solo pensaba en su bebe, que unido aún a su regazo luchaba por vivir.. Esa mañana, mientras el hombre de su costado le seguía hablando, ella se alejó más, enmudeció más, los primeros balbuceos comenzaron a brotar, las primeras miradas perdidas se adueñaron de sus ojos, y es que desde muy temprano, otra vez, igual que las anteriores, sintió esas punzadas

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en el bajo vientre, dolores leves que contraían su matriz, convirtiendo angustia y temor en fatal premonición…sentía y sabía lo que se venía, sentía también que su cordura se iba, y esta vez, no haría nada por detenerla, ya para qué, ya para nada serviría su lucha.. y se dejó ir, junto a los dolores más intensos, junto al sangrado incontenible, acompañando a su bebe se fue su mente, su calma, su ira, su esperanza, y se quedó ella, simple y sola, con sus balbuceos y miradas perdidas, sin nadie a quien hable ni escuche.. perdida en su ausencia con indiferencia.. Esa mañana no cumplió su rutina pues fue demasiado el dolor de recordar, se quedó quieta, calmada, eternamente sola en cuerpo y alma…Esa mañana, le seguí hablando y hablando, como siempre lo he hecho, en la casa no tan grande, no tan chica, a través del tiempo, esperando que por momentos, sus ojos perdidos me encuentren. Misteriosamente, me escuchó y se dejó escuchar, dejó que lavara su cabello, me preguntó sobre cosas cotidianas, cosas simples, paseó por la casa como antes, canturreo canciones lindas, entendibles, extrañamente melódicas… una luz de esperanza me inundó.. y fue pasando el día entre calmas y palabras tranquilas.. A la mañana siguiente, muy de mañana, me despertaron unos balbuceos incomprensibles, unos dedos extremadamente largos acomodaban los cabellos enigmáticamente limpios, ella cantaba mientras iba otra vez a su refugio, a su mundo, a su oscuridad.. esa vez ya no me habló, y yo en vez de hablar la dejé ir… Pero no pierdo la esperanza que me vuelva a encontrar, esta vez, para siempre.

“MARGHERITA”

Adrián Ernesto Zea Berolatti Estudiante - Medicina Humana

Entre las gradas del edificio, esa criatura que la vida le vale por siete, así que mejor tomarse su tiempo.

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¡¿Por qué?!Acabo de despertar, sobresaltada,

soñé que me mirabas,que me envolvías con aquella profundidad de tu mirada,al ras del movimiento de aquellas tus risadas pestañas…

Caigo en lo más hondo del desconsuelo,al saber que solo fue un sueño.

Extraño en demasía tus ojos, tus manos, tus labios.Lunes; recuérdalo, no te quise.

Y fue un día, así, de repente,no entendía, no comprendía.

El viento me susurraba tu nombre al oído,mientras yo abrazaba el silencio de tu ausencia,

acompañada solo por la luz de la luna,aquella luna que un día fue nuestra y ahora solo es mía.

Martes; recuérdalo, no te quise.

He gritado tu nombre hasta el cansancio,aturdida pedía a voces tu presencia, tu mirada, tu respiración.

Te he preguntado ¿Por qué?, ¿Por qué?, ¿Por qué?,¿Por qué de tu ausencia?

Pero no me hoyes, no me escuchas, no me sientes.Miércoles; recuérdalo, no te quise.

Me hubiera gustado poder evitar tu partida,rogar que te quedaras, suplicar que no me dejaras,pero, ¿cómo he de tomar por lo menos tu mano?si ya ni podía mirarte, no podía ya ni contemplarte.

Dios te ha querido a su lado,¿Cómo le explico que yo te quiero conmigo?

Jueves; recuérdalo, no te quise.

Han pasado ya 20 años, de aquella noche de mayo,echándote de menos, ocaso tras ocaso, sin soslayo,

increpando vilmente a Dios por haberte alejado de mi lado,sintiendo las lágrimas secarse en mis mejillas,

aquellas lágrimas que una a una cuentan su propia historia.Viernes; recuérdalo, no te quise.

Hoy te dejo ir,por justicia a mi tranquilidad,

te dejo ir hoy.Quizá no he de olvidarte,

Y ¡¿Cómo olvidarte amor?!Pero sí he de dejarte.

Solo, mírame una vez más,mírame una vez más,

absorta aquí y de rodillas, por favor, mírame una vez más.Sábado; recuérdalo, no te quise.

Estoy muriendo literalmente ahora y con mis trémulas manos,al igual que Pablo Neruda, puedo escribir los versos más tristes esta noche,

pues cuanta falta le haces a este corazón,Domingo; ya te dije, recuérdalo, no te quise.

Fue más que solo eso.En fin.

“NO TE QUISE”

Rocío Alexandra Valdivia Pilco Estudiante - Medicina Humana

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De risa en risa, brillo tras brillo, larga temporada de miel de melocotónasi de a poquitos te abriste paso en mi corazón, luna de cartón.

Tu espejismo me atrapo, me capturoy sin mirar atrás, sin recordar mi historia te hice cargo de este corazón

tu olor, el palpitar de tus labios, el vibrar de tus manoscomo un verano por la tarde o agua de limón

tu dulce amargo me ensordecio,ya no bastaba mas

tus palabras habían empapado mi corazonde ilusiones, de esperanzas, de ideales y deseos

simples visiones de estropeados anhelos.

Fue asi que las noches se estiraban, los días se contaban y los minutos no alcanzaban.

Efímero sueño, los instantes se vuelven eternossi decidimos quedarnos en ellos

mas no son realidades compartidasal menos no para uno, no para el amarillo de tu corazón

pervesa luna de cartón.

“AMARILLO”

Katheryne Cayo Huayhua Estudiante - Medicina Humana

“SONREÍR ES VIVIR, VIVIR ES SONREÍR”

Rocío Alexandra Valdivia PilcoEstudiante - Medicina Humana

“Una vida que le suma a otra vida.”

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Cuando la honestidad se escapa,cuando la tolerancia huye,

cuando la sinceridad acaba,¡Por fin! Será el mundo de fantasía,¡Por fin! Será el mundo de ensueño,

¡Por fin! Será el mundo que todos quisimos tener.Este será el mundo… el mundo…

que tiene a la injusticia como líder,que tiene a la envidia como arbitraria,

que tiene a la arrogancia como vencedor.Y así el alma humana, se ira enfriando poco a poco…

Solo quedaran en nosotroslas ilustres enseñanzas aprendidas,

doy gracias por todos los conocimientos transmitidos,Aprendí que el dinero, vale más que mil palabras,

y puede comprar lo inimaginable.Aprendí que la única forma de sobresalir en la vida

es pasar por encima de los demás.Aprendí que con la nueva tecnología, todo es posible,

ya no es necesario caminar,ya no es necesario hablar,ya no es necesario pensar.Pero existe un problema,

Algunas personas todavía se les escapa la razón¡Todavía queda cariño en el corazón!

¡Todavía quedan deseos de superación!¡Todavía muy dentro de nosotros se encuentra el amor!

“DE UN NIÑO AL MUNDO”

Vivian Shirley Cahuana Chambe Estudiante - Medicina Humana

El sol brillaba. Esplendoroso. Sus rayos reflejaban las claras aguas del río. Los pequeños rocíos jugueteaban entre las flores. Los peces golpeteaban con sus colas. Un hermoso paisaje, conocido entre aquellas personas que viven en el campo e ignorado por aquellos que viven en la ¨jungla de cemento¨.Micaela amaba su hogar, sus escasos años no le impedían reconocer ese clima de paz. Era su pequeña burbuja de felicidad. Vivía con su madre en una reducida casa. Acogedora. Dos habitaciones la componían. Una era destinada para el dormitorio, en la que se encontraba una cama y un limitado armario; la otra, formaba la sala-comedor en donde existía una ventana, pequeña en dimensiones pero con un gran valor emocional para ella. Pues era su lugar preferido para leer. Se sentaba allí al amanecer y al atardecer, al terminar, respiraba profundamente y disfrutaba del sonido de las aguas al crepitar.Su mamá, nacida y criada en el campo, se regocijaba viéndola. Trabajaba en los cultivos y con eso sustentaba a su familia. Eran tiempos difíciles, los grandes comercializadores ya no apostaban por los pequeños agricultores, no importaba cuán alta era la calidad, sino la cantidad. No obstante, cada vez que regresaba a su hogar, recibía a su hija con una sonrisa que transmitía seguridad. No importaba cuánto trabajase, todo lo hacía para asegurarle una favorable educación a su hija.

”LAZOS DE AMOR”

Diana Ticona HuancoEstudiante - Medicina Humana

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Cuando Micaela tuvo la edad suficiente para estudiar en la escuela, solo existía una en la ciudad, a 30 minutos de donde vivía.Todas las mañanas se levantaba con el canto de su Carmelo. Se vestía. Alistaba su mochila, un lápiz, un cuaderno, era suficiente. Se sentaba a desayunar lo que su mamá le había preparado; pues ella ya se encontraba trabajando.Esperaba, en realidad saltaba, inquieta, la llegada del bus que la trasladaría hasta su escuela. Le emocionaba la idea de conocer nuevos niños y jugar hasta cansarse. No controlaba las ansias de llegar, los 30 minutos que duraba el viaje se le hacían eternos.Con el pasar de los años, Micaela terminó su primaria con extraordinarias notas y en la secundaria obtuvo la excelencia académica. Su mamá estaba orgullosa, se le escapaban las lágrimas cuando le entregaron el diploma de honor a su retoño, no podía con tanta felicidad. En el momento que su hija terminó de dar el discurso de despedida, saltó de su asiento y corrió a abrazarla. Micaela sorprendida, no habría dudado en corresponderle. Pero ella había cambiado. Radicalmente.El tiempo que pasó en la ciudad modificó sus pensamientos, la noción de su hogar e inclusive más importante, la forma de apreciar a su madre. Nada de esto era percibido por su progenitora aún, hasta que fue demasiado tarde.Micaela obtuvo una beca en la mejor universidad de su país. Se ubicaba en la capital. Muy lejos del lugar que solía llamar hogar. Por fin podría codearse con las ¨grandes mentes¨ y ocupar el status que creía merecer, solo necesitaba empacar sus pertenencias y despedirse de su madre. Esto último no la emocionaba.Al recibir el tierno abrazo, su corazón dio un brinco. Miró los ojos lagrimeantes de su mamá. Se paralizó por un segundo. Su mente rápidamente le exclamó que tendría una vida mejor, allá en la capital. Tomó sus maletas y se fue. En ningún momento volteó a verla.Cuando llegó, alquiló un departamento junto con una amiga de la secundaria. No necesitaba dinero para sus pasajes o comida, pues todo lo sustentaba la universidad. Por supuesto, tendría que trabajar en la biblioteca dos veces a la semana. Eran detalles menores, su amor por la lectura todavía era latente.En clases, era la favorita de los profesores. Estudiaba sin cansancio y pronto se convirtió en la mejor estudiante de su profesión. Era algo que esperaba.Los fines de semana, las inmensas casas de playa de sus amigas eran su hogar. Donde las fiestas al atardecer eran comunes y los conciertos, esperados. Disfrutaba ese ambiente, la vida social era lo suyo. Sin embargo, sentía que algo faltaba. Lo sabía. Pero se negaba a aceptarlo.La relación con su mamá era mínima, recibía las cartas que le escribía con tanto cariño, junto con el dinero para pagar el alquiler. Sacaba los billetes y precipitadamente, botaba la carta.Aquellas a las que llamaba amigas, ignoraban el hecho de que provenía del campo. Micaela nunca les comentó. Tenía vergüenza de sus raíces, así como de la procedencia de su madre.Los años pasaron, la niña se convirtió en una hermosa joven. Era querida por sus profesores y celada por sus ̈ amigas¨, quienes veían en ella solo una forma de aprobar los cursos.Ella lo podía sentir. El ambiente en el que ahora vivía no se comparaba al hermoso paisaje de su niñez. Lo reconocía, pero sus ansias de ser mejor le nublaban el juicio.Un día, recibió una invitación de su amiga. Negra. Pomposa. Lazos y ribetes la adornaban. Al leerla, se enteró con gran malestar que su tía, como cariñosamente la nombraba, había fallecido. Triste, la abrazó y le brindó palabras de consuelo. En ningún momento observó lágrimas ni una señal de dolor. Indiferencia.La tarde del entierro, el local estaba cuidadosamente decorado. No escatimaron gastos en la recepción. Dos encantadoras fuentes recibían a los invitados. Nadie se acercaba al féretro. Nadie.Observó a lo lejos a su grupo de amigas, entre ellas se encontraba la hija de la recién fallecida. Se acercó. Reían a carcajadas por algo que había dicho una de ellas. Con asombro, escuchó que la hija comentaba con satisfacción cuánto le había dejado su madre de herencia. Organizaría una gran fiesta, iría a comprar vestimenta a las más famosas tiendas por departamento. Lo tenía planeado todo.

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Micaela se horrorizóTapándose la boca con ambas manos, retrocedió lentamente. No podía creerlo. ¿Cuánta indiferencia puede haber por una madre fallecida? ¿Acaso no debería existir dolor por la pérdida, en vez de regocijo?Entonces recordó.Todos los años que no había visitado a su mamá. Ni una carta. Ni una llamada. Se paralizó. ¿Cómo había olvidado el amor que sentía por su mamá? ¿No recordaba acaso todas las veces que llegaba a su hogar cansada por el duro trabajo, y aun así la recibía con los brazos abiertos y una cálida sonrisa? Mil emociones se agolparon. La culpa prevalecía sobre ellas.No. No podía permitirlo. Tenía que remediarlo ya.Preparó sus maletas. Tomó el primer bus que salía. Los 30 minutos de regreso le desesperaban. ¡Vamos, ya estoy cerca! Se repetía.Al vislumbrar el paisaje que tanto había amado de niña. No puedo evitar sonreír. Todo permanecía igual. La belleza de la naturaleza la recibía.Era primavera, por lo que las flores resplandecían con luz propia, invitando a tocarlas. El río corría con más fuerza, saludándola.El corazón de su mamá brincó, aún sin verla, sabía que había llegado. Corrió hacia la puerta. Cuando sus miradas se encontraron, los ojos de Micaela recobraron luz, aquella que había perdido en sus años en la capital. Corrieron, se abrazaron, rieron, lloraron. Cualquiera que las viera se contagiaría del regocijo que transmitían.Micaela quería disculparse, pero a su mamá no le importaba. Su hija por fin estaba en casa. El lazo que tenían se había restablecido.Juntaron sus frentes. Su mamá le tocó cariñosamente las mejillas, como cuando era niña. Micaela se prometió que no volvería a olvidarla, era parte de su vida y seguiría allí por siempre.Pues no hay amor más puro ni más fuerte que aquel que se brinda sin esperar nada a cambio.EL AMOR DE MADRE.

“MIRADAS”

Vivian Shirley Cahuana ChambeEstudiante - Medicina Humana “Un alma joven abrazada a una vieja sabana

que refleja su punto de partida al reto de la vida”

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“LIBERTAD DE FRONTERAS”

Rocío Alexandra Valdivia PilcoEstudiante - Medicina Humana “La belleza es libre y no tiene fronteras,

Bolivia, Chile y Perú.”

Mi deber es quitar tu suerteJugar con el destinoCambiar el camino

Se lo digo a usted señor muerte.

No crea que me di por vencidoNo es consiente del contexto

Es muy ajeno al hecho imprudenteSe lo digo a usted señor muerte.

Es mi deber cambiar la suerteDe aquellos que usted cree que le pertenecen

Quitar la vida de los desdichadosSe lo digo a usted señor muerte.

¿Qué les espera al final del camino?¿Qué vida tendrán cuando llegue la muerte?No pretenda pensar que me di por vencido

Yo luchare hasta que usted llegue, señor muerte.

“CARTA DE UN MÉDICO A LA MUERTE”

Rocio Jazmín Gauna Zarate Estudiante - Medicina Humana

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Quiero brincar a la callePorque mi suelo me quema;

Y ya no aguanto el fuego con que enciendes mi suelo

y ardes mi planta…¡Oh! Recatada sirena nocturna,

Apaga con tu saliva el chasquear de mis células inicuas.(Aló? ¡Oyes mi profano corazón

a través del tiempoa través de la mecedora columpiada en un adiós?)

Es la calle; prendo un cigarrillo con los dientesY bebo una estrella.

Aspiro, fuerte; tu fraganciay la libertad que se siente

al no quemarse mis sueños.¡Gustas de los pájaros que vuelan por tu cuerpo

y que otean la miel que me da tu silencio?¡Gustas que nazca

de un papel dobladouna paloma que te arrulle esotéricamente?

No sabes cuanta calma en tu mirada tranquilaY cuanta paz

En tu ronco contestar: Alo?!(NO, adiós, te llamo luego)

Y mi lid con los miedos y temores que desean devorarmey acabarme por siempre

por los siglos con tu ausencia…¡Oh! Sirena nocturna, recatada, marina;

Vuelve esos tus ojos a los míos, devuelve tu clamor a mi pelo

y haz que entone tu faringeuna melodiosa canción que sepa desvertirse

y gemir ante el sonido de mi guitarra café.Otra vez la calle, ya sin riesgo;

Ya sin le estrella en mi garganta.Otra vez estar sin ti,

en la noche lesiva a mis sentimientosy a tus piedades.

Sirena:mujer-pez-volátil-sueño-mar-olvido…quiero aferrarme a tu cola marítima

para estar juntos por siempre,por los siglos,

asido a tu voluntadhasta que me canse de agarrarte, o

hasta que me muera, ohasta que nos pesque la mar

con su atarraya y cerremos nuestros ojos

para siempre…ya sin dolor, ya sin pena…

SIRENA…....

“A VECES UNO NO TIENE ELECCIÓN”

Carlos Enrique Tintaya FernandezEstudiante - Ciencias de la Salud

“La vida es como una planta, de un lento crecimiento

que debe sufrir y vencer los embates del infortunio,

antes de que sus frutos lleguen a completa madurez.”

“BAJO EL MAR”

Benjamín Humberto Núñez Espinel Docente

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En la vida hay mucho inicios y finales, como anillos que se entrecruzan hasta formar una larga cadena. La vida y la muerte usualmente suceden en diferentes momentos pero este es un curioso caso, donde el inicio es un final y el final un inicio. Este es un curioso caso e irónicamente un caso común.Leopoldo Martínez Franco es un señor ya pasado la edad adulta mayor, que se da una buena vida, llena de lujos, tiene una gran finca a las afueras de la ciudad, los mejores caballos de carrera y el mejor vino de la región. El señor Leopoldo o Leo como prefiere ser llamado, tiene todo en la vida, pero tiene un problema, está solo. Leo vive un día normal, se despierta 5 am cuando el cielo cambia sus colores para dar bienvenida a un nuevo día; se levanta, sacude el poco pero canoso cabello que le queda y se dirige para hacer su aseo, desayuna, lee el periódico del día – “Asesinan al Presidente Kennedy” llega a leer, entonces se levanta en dirección a su establo donde da de alimentar a sus caballos. La nostalgia se adueña de sus pensamientos, recuerda llamar sus hijos para darles de beber a los caballos cuando eran pequeños; Leo da un largo suspiro y se dirige laburar en una pequeña silla que viene haciendo hace un par de días. “Señor Leo, su almuerzo está listo”- menciona una de las sirvientas. Leo come con desgano, siente un vacío en su estómago y luego se dirige a tomar una siesta. Se despierta, sudoroso, asustado, quería gritar pero algo lo detuvo, realizó que sólo era una pesadilla. Sale de su habitación con vista a la finca; el sol se va desvaneciendo pero las luces de la casa aún no encienden, nada se enciende, el sol se aleja rápidamente y todo es oscuridad en un momento, sólo se escucha el viento soplar y el Señor Leo cierra los ojos contemplando aquel momento de paz.Leo a sus 22 años era un chico pobre pero con mucha imaginación, tenía una gran pasión por la vida bohemia, se juntaba con sus amigos a conversar de la vida, ensayar poemas que componían y sobre todo beber vino; pero Leo tenía una gran curiosidad por los negocios y la industria alimentaria estaba en auge. Se ganó la confianza de su tío que siendo una persona muy solitaria, le heredó un terreno. Leo no desaprovechó la oportunidad y creó su primera empresa de producción de vinos en la ciudad, tuvo tanto éxito que le permitió viajar por el mundo haciendo crecer su empresa. Se casó con María Paredes Buendía, se conocieron en un viaje a Córdoba. Estaban juntos en el bus, cuando en un momento de valentía, Leo tragó saliva e inició una pequeña conversación a la luz de las estrellas que iluminaban la carretera, aquella imagen se quedó grabada en su recuerdo por siempre, quedaron en comunicarse y lo hicieron, se enviaban cartas todos los meses.Tiempo después se casaron, tuvieron 2 hijos y sus hijos tuvieron 2 hijos cada uno. Las cosas iban bien para el Leo, desgraciadamente María enfermó, dejando viudo a Leo. Leo no se pudo recuperar del todo y sus hijos lo sabían, poco a poco se fueron separando y lo dejaron envejecer en su lujosa finca.El señor Leo, desapareció entrando la noche. Ninguno de los ayudantes de la finca lo ha visto. No hay signos de que otra persona haya ingresado a tan lujoso lugar y tampoco dejó una nota. La última vez que fue visto fue andando por las plazuelas de su antiguo barrio, donde creció.

-¡Corre Leo, trae la pelota, ¿tenías que patear tan fuerte?!- dijo un niño que descalzo alzaba sus brazos apurando a Leo. - Ya voy - replicó Leo.Entonces Leo corre detrás del parque y camina lentamente para no despertar al perro de la Señora Velasquez, Leo le tenía pavor a aquel perro, un día llegó a morderlo. Ya llegando donde se encontraba la pelota. Leo ve una sombra acercándose detrás de él, asustado toma la pelota y corre.

”VIEJO Y OLVIDADO”

Antony André Flores Acero Estudiante - Medicina Humana

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- Jovencito, me ... me ... ayuda por favor? - Leo voltea y a regañadientes responde- ¿Sí?- -Estoy buscando Los Ediles, ¿conoces donde es?- -Sí, es donde vivo, está detrás de esta calle- -Ya gracias muchacho-. Leo cuando estaba a punto de correr hacia el parque, un pensamiento lo mantiene intrigado. -Señor, usted me parece conocido, luce como mi padre pero más viejo,- El anciano suelta una pequeña carcajada, ¿En serio?, niño, ¿me harías el favor de acompañarme?, mi vista es muy débil y no traje mis anteojos.A lo lejos se asoman los amigos de Leo. –Leo, apúrate, porque demoras tanto-exclaman sus amigos. – ¡Pero que curioso!, - el anciano suelta de nuevo una ligera carcajada, -Yo también me llamo Leo, Leopoldo Martinez- complementa orgulloso.-También me llamo Leopoldo Martinez- exclamó Leo, teniendo más confianza en el señor, Leo devuelve la pelota y les hace un ademán de que volverá pronto. Ambos van caminando por la vereda de aquel pobre barrio, se hacía tarde y el sol empezaba a ocultarse.-Leo, ¿quisieras ser mayor? –trata de decir el anciano, limpiándose la garganta- Sí, quiero trabajar de lo que sea y tener dinero, darle a mi mamá casa bonita y grande-. Responde Leo dejando un silencio que ni el viento se logra llevar. -Tu no extrañas ser joven- - La verdad que sí, podía jugar todo lo que quería, te sientes libre y sonríes todo el tiempo- Leo responde con extrañeza - ¿Y porque ya no sonríes tanto?- -Ah niño, son muchas cosas pero así es la vida, mira te doy un consejo, sonríe tanto como puedas y abraza a tu madre cada vez que puedas y siempre haz lo que te gusta porque si tú eres feliz todos demás lo serán.--Está bien señor- Responde Leo recordando lo que el padre de la iglesia le había dicho una semana atrás, ya se volvía casi un sermón para él.El abuelo saca de su bolsa un racimo de uvas - ¿Probaste esto niño?, se llaman uvas. Las traigo de mi chacra- -Nunca las probé porque están muy caras y a mi mamá no le alcanza- -Toma te invito para ti y tus amigos- -Gracias- Leo recibe la bolsa, saca una uva de ella y la prueba, abre los ojos y se queda boquiabierto. - ¡Es lo más rico que he comido!- -Ten toda la bolsa niño- y anda ya llegamos a donde quería.- -¡Hasta luego!- exclama el niño.-Diviértete y cuando con el perro- Entonces voltea y ve al niño, con la bolsa de uva, un viento sopla y se lleva al niño, desapareciéndolo.La noche cae pero las luces de la ciudad no encienden, todo está en oscuridad y el viento parece tomar protagonismo. El Señor Leopoldo se encuentra solo en una puerta donde la única iluminación que tiene es del interior de la casa. -“Creo que ya llegué”- piensa Leopoldo. Deja un largo suspiro al viento, una lágrima sale recorre su arrugada cara, se siente fatigado y tristeEl señor Leopoldo saca una vieja llave y la inserta en la cerradura, voltea a buscar al niño pero no lo encuentra, “ya se ha ido”- piensa. Ingresa a la casa, se sienta en su antiguo sofá, entonces cierra los ojos y recibe el aroma de su antigua casa, se deja llevar.Es un día gris, se ve el roció sobre el césped, el aroma húmedo de una tarde luego de la lluvia. En el cementerio se escucha la voz del padre dejando su plegaria, muchas personas de terno guardan silencio y uno que otro sollozo se escucha, pero ningún familiar está presente, sólo amigos lejanos y uno que otro conocido. El Serñor Leopoldo había fallecido y con él todos sus recuerdos y alucinaciones.Falleció en algún momento en que sus hijos lo abandonaron en aquel albergue, en algún momento cuando los empleados no le daban los cuidados que necesitaba y que incluso lo llegaban a maltratar, en aquel momento cuando la sociedad se olvidó de aquel anciano y lo dejó a la merced de la muerte. El Señor Leopoldo falleció.

Solo sé que te has ido y no basto para olvidarEl olvido es un enigma y su contrapunto es recordar

El recuerdo es un misterio y por eso no te puedo olvidarPero recuerda tú también que no existe el dilema, si dilema piensas crear

Recrea la historia primero y de gota a gota lograras crear el mar

Solo recuerda que yo no te puedo olvidarPorque los sentimientos no se recuerdan ni olvidan

Porque el sentimiento es ajeno al tiempoDescarado e inconsciente y de más

Quien siente es inconsciente de lo que pueda crearUn mundo perfecto no está lejos si sentir significa amar

Y amar se vuelve el sentimiento más fuertePara aquellos que alguna vez pensaron olvidar

No es opción del consienteY el subconsciente no lo puede soportar

Solo recuerda que yo no te puedo olvidarNo si mi recuerdo es intacto

Sumándole el sentimiento que pretende escapar

Pero no dejo que se vuelva mi lamentoPorque el olvido no es la sentencia de los que llegaron a amar

Pero es perfecto para aquellos que nunca pensaron en amarA ellos que no conoces el sentimiento y el sufrimiento sagrado

Que causa el sentimiento que por bien divino nos deja el pasadoAl ignorante del sentimiento aquel tiene derecho de olvidar

“SOLO RECUERDA QUE YO NO TE PUEDO OLVIDAR”

Rocio Jazmín Gauna Zarate Estudiante - Medicina Humana

Mi mamá me contaba todos los días que debería ser cuidadosa con los chicos, que el amor es como jugar con fuego, que podría salir lastimada.

Oh…esa canción, me recuerda tantas cosas.

Había pasado un año desde que me di cuenta que había una persona me gustaba.

No sabía si llamarlo amor en ese momento.

Sus acciones me hacían feliz, era una sensación rara, pero hermosa al mismo tiempo; estar con él me hacía temblar, sentirme nerviosa, y era algo que no podía comprender.

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”JUGAR CON FUEGO”

Anónimo Estudiante - Facultad de Ciencias de la Salud

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Cada día que pasaba era una aventura nueva, y me daba cuenta de que su personalidad me atraía cada vez más.

Hija mía…ten cuidado.El amor es como jugar con fuego.

La voz de mi madre retumbaba en mi cabeza cuando lo veía, no sabía si darle la razón; experimentar estas sensaciones extrañas para mí, eran como observar algo sin sentido alguno.

Sólo cuídate.No quiero que te lastimen como aquella vez.

Ya había pasado por esto una vez, pero ese fuego no era tan intenso que con él.

Ese fuego era mucho más fuerte.Quería probar si no podía quemarme con él.

Un pastel, mi cumpleaños…él tomó la torta y la empujó hacia mi cara, veía como reía como un tonto, yo también, sentí que la temperatura de mi rostro aumentaba, que temblaba.

Y en la universidad estudiamos juntos, compartíamos el mismo gusto por la carrera; él me ayudaba a estudiar, y de vez en cuando las bromas hacían acto de presencia.

No juegues con fuego.

Me fui de vacaciones a una hermosa playa de arena blanca, y perdí el contacto que tenía con él, pero no lo olvidaba…

Es más…aparecía constantemente en mis pensamientos.

El volver a clases se hacía importante, lo volvería a ver después de meses de descanso, siendo la causa de mis nervios tan solo al verlo.

Compartir el día a día, estudiar, y tener tiempo para los dos.

Espero que esto no me llegue a quemar.No te das cuenta de lo que pasa pequeña, el amor te ha dejado ciega. Otra vez la voz de mi madre, lo ignoré de nuevo, y dejé que el tiempo haga lo que tenga que hacer…

Sentirme más atraída a él.

Pero…

¿Tenías que contarlo de esa manera?¿Por qué lo hiciste?Yo…yo te quise de una forma que no entendía del todo.

Me enteré que él salía con alguien.Lloré…noche tras noche.

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No sabía cómo ocultarlo, se me hacía difícil verlo a él con otra persona que no era yo.

Que ingenua y tonta eres.Empezaste jugando con fuego y terminaste lastimada…El fuego te consumió.

No le tengo rencor, pero alejarme del mundo fue lo que hice.

Te lo advertí, no sabes escuchar.Nunca debiste meterte en el juego del amor, porque el amor es como jugar con fuego.

“EL INICIO DE TODO”

Cecilia de la Flor Catacora TiconaEstudiante - Medicina Humana

“Hay que vivir la vida como si todo empezara de nuevo cuando en realidad parece

que termina”

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¡MIERDA!, sentí una presión muy fuerte sobre mi pecho… es muy temprano como de costumbre, 5 AM, hora de levantarse y ejercitar un poco para comenzar el día; suelo sentarme al borde de la cama y fijar la mirada en cualquier objeto que tenga al frente, como el zapato de hoy, sí, ese zapato de tacón rojo que dio un giro a mi vida.Lo había conocido hace 4 meses, pero, pareciera que lo conociera desde hace mucho tiempo atrás; era un joven alto, de cabello algo rizado de color negro, contextura delgada con algo de amor en el abdomen, ¡já!, lo que más me llamaba la atención era su sonrisa y su coquetería, llámenme cursi, pero eso era lo que más me agradaba de él; sé que está mal guiarme de primeras impresiones, NOTA MENTAL: no te enamores de su físico. Como todo un caballero empezó a hablarme por chat, él era uno de los arquitectos que trabajaba para la constructora de Livilcar, mientras que yo, era una practicante de último año. Quizás hubiera podido evitar esto sí solo no hubiera contestado ese mensaje, pero bueno, un poco de charla no le hace mal a nadie; desde el momento que empezamos a charlar, no pudimos parar, desde un buenos días hasta un buenas noches, algunas bromas y chismes de la constructora, me agradaba Diego, quería conocerlo más, pero en persona. Llegó el momento esperado, me invitó a salir… sabía que estaba mal salir con alguien de la constructora, pero, si no tomas riesgos, ¿Cómo podría saber si es la persona indicada?

“VIVAS”

Daniela Liendo VargasEstudiante - Facultad de Ciencias de la Salud “Fotografía realizada en Calana,

donde observamos a moscas disfrutando de su tranquilidad.”

”ZAPATOS DE TACÓN ROJOS”

Katherin Estefania Ponte Fernandez Estudiante - Medicina Humana

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¡MIERDA! Otra vez se me hizo tarde, tomé mis pantalones, una sudadera y zapatillas, emprendí rumbo al parque que está a unas cuadras de mi casa; necesitaba salir a correr, el verano ya estaba a la vuelta de la esquina, y lo que más quiero es usar ese lindo bikini de colores, mamá solía decía, “La belleza cuesta”, “Persevera y alcanzarás tus objetivos”, si algo me caracteriza es mi “GRAN perseverancia”, o como la llamo, “MI terquedad”; NOTA MENTAL: debo dejar de ser terca en determinadas situaciones.Diego me invitó a salir tres veces, de las cuales, rechacé las 3, no lo hice por ser creída, fue porque no se dio el momento; la cuarta vez me invitó al cine, acepté, a lo que él me respondió con una sonrisa y un “paso por ti a las ocho”; me sentía algo ansiosa, sabía que era algo mayor, pero no tenía idea de cuan mayor era, me vestí algo decente y esperé a que llegara por mí. La película estuvo genial, me agrada mucho las de terror y por lo visto a él también, pude comprobar que es un gran cinéfilo, tal cual como yo, ¡GENIAL!, algo que compartir. Sentía mucha curiosidad al saber su edad, sabía que era mayor pero no tanto, era uno de los más jóvenes de la constructora; decidí preguntarle y bueno… 35 y 25, ¡JA!, no era algo así como la canción 40 y 20, tomé un respiro y me sentí un poco más calmada; fuimos por unas copas pero, se nos fueron de las manos; él me pregunto si le incomodaba esa diferencia de edades, a lo que le respondí: la edad cronológica es solo un número, la manera de pensar y relacionarse es otra, siempre existirán malos comentarios por parte del medio, depende de cada quien en aceptar o solo ignorar, por mi parte me es irrelevante… solo me miró y sonrió.Llevaba corriendo unos 5 minutos, y creía que había pasado más de media hora, estaba amaneciendo, se sentía como aumentaba la temperatura en el ambiente. 5:30AM, ¡MIERDA!, se me está haciendo tarde para ir a la constructora, debía estar allí a las ocho. Estaba muy atenta escuchando unas baladas de mi celular mientras corría, para mí era entretenido correr mientras escuchaba a Arjona, “lo mío fue aceptarlo todo porque te quería”, eso fue suficiente para recordarlo. Pasaron los días y las invitaciones a salir eran con mucha más frecuencia, me agradaba Diego, quiero decir, me gusta él; si bien, él era nuevo en la constructora, no tenía idea con que personas anteriormente había salido antes, lo único que sabía, que era muy coqueto con el personal. Le pregunté acerca de su pasado amoroso, a lo que me respondió: antes quizás hubiera estado de novio, tuve una relación muy larga, pero más fue rutina que sentimiento alguno. Lo noté algo extraño al expresarse, como si ocultara algo, asumí que era mi idea y no insistí más acerca de ello. ¡MIERDA!, siempre tan distraída, tropecé con una piedra en el camino, sentía mucho dolor en el tobillo, tome un descanso y me senté sobre una banca del parque, miré hacia el cielo, y pude ver el enorme y cálido sol, eran las 6AM, ya debía estar en casa, pero, me quedé por un momento pensando en aquel viaje con Diego, muy linda experiencia.Sé que era muy pronto, pero decidí arriesgarme; Diego me invito a acampar y acepté, quedaba a unas horas de la ciudad, fue una muy bonita experiencia, mayor tiempo para conocernos, ¡GENIAL!. Al regresar, algo empezó a cambiar, lo notaba algo cambiado y diferente, asumí que solo era mi idea y me quede callada. NOTA MENTAL: no asumir ni mucho menos callar, conversar acerca de esas incomodidades. Llegué a casa cojeando, opte por sentarme de inmediato, y descansar un momento, estaba algo enojada conmigo misma, ya era algo tarde, no pude terminar mi rutina, y bueno, hoy tuve que recordar el mal sabor de boca que me dejo esa relación.No estaba muy convencida como antes, Diego era muy linda persona según mi perspectiva, pero algo ocultaba, algo hizo cambiar su actitud, o quizás siempre se mantuvo así. Era casi fin de año, y la constructora daba una cena por fiestas, me invitó y acepté con algo de temor, por lo mismo que sería la comidilla de la compañía al ir con él; me arriesgué y fui. Ese día, llevaba un vestido corto blanco con algunas aplicaciones negras y aquellos zapatos de tacón rojos, él estaba muy galante, y algo más simpático que de costumbre; las personas de la cena murmuraban al vernos, decidí hacer de oídos sordos e ignorar. Bailamos sin parar hasta que el cansancio llamó, él fue a saludar a otros compañeros mientras que yo, me quedé sentada; una de las compañeras de Diego se me acercó y me dijo: eres muy joven para andar con alguien como él, y más aun sabiendo la clase de

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hombre que es, ¿Sabías que se va a casar?, su prometida no está aquí, ella vive en la ciudad de donde vino, estaban peleados hace unos meses, pero arreglaron sus diferencias y bueno ahora se casaran. Esas palabras bastaron para entender todo lo raro que estuvo este tiempo, solo había sido su intermedio hasta que se reconciliaran, revise su teléfono que lo dejó sobre la mesa, y ¡BINGO!, tenía un fuerte vínculo con Alicia según las conversaciones. Me sentía incomoda en ese lugar, cientos de ojos con la mirada fija en mí, decidí levantarme, coger mi bolso y salir del lugar; bajaba las escaleras del noveno piso, derramando unas cuantas lágrimas en el camino y pensando… Diego bajó a buscarme, no sabía el motivo de mi salida, solo atiné a decirle: se feliz con tu novia, felicidades, que sean muy felices, no me vuelvas a buscar; él estaba algo pasado de copas, se quedó pasmado y plantado en ese lugar, baje lo más rápido las escaleras hasta llegar al primer piso, había un enorme espejo en frente mío, al cual pude observar a una mujer con el maquillaje y peinado estropeados, un lindo vestido con zapatos de tacón rojos, tenía una mancha sobre ellos, atiné a limpiarlos con un pañuelo, me levanté y volví a ver en el espejo, estaba terrible, eso no dudarlo, pero me miré fijamente a los ojos y me dije: ¿Qué estoy haciendo aquí?, cuanto tiempo tuvo que pasar para toparme con mi pared, enamorarme y luego que… sentirse MIERDA por dentro, no valgo esto, no estoy para que me traten a su modo, no soy una niña incauta, así como borré esa mancha de mi zapato borraré estas manchas de mi alma, soy una mujer fuerte y esto solo fue un pequeño tropiezo, la vida me dio una pequeña prueba para demostrarle de lo que estoy realmente hecha, mantener la cabeza siempre en alto. Me limpié el rostro y subí al taxi.Ahora si se me hizo muy tarde, soy arquitecta y trabajo en la constructora Solange, opté por alejarme de todo lo que me hace daño; Diego se casó, tiene un pequeño hijo con Alicia y es muy feliz. Quizás mi error fue el no darme cuenta que tan rápido pasaron las cosas, que tan rápido pude catalogar a una persona por su apariencia, y sobretodo el callar y asumir que todo estaba bien. Pero ahora, estoy feliz en mi empleo, con visiones mucho más amplias; hoy tengo una reunión con unos inversionistas estadounidenses, llevo puesto aquellos zapatos de tacón rojos, SIN mancha alguna, recordándome SIEMPRE al usarlos de que estoy hecha, valorándome y sobretodo, empujándome a seguir adelante. ¡A DARLE POR MÁS!, que es solo el comienzo de éxito…

“3”

Gonzalo Renato Carpio Mamani Estudiante - Medicina Humana

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Querida Rose, si lees esta última carta probablemente ya esté en el hospital esperando a mi muerte.La leucemia está acabando con mi vida.Solo quería decirte lo feliz que me hiciste sentir en los últimos 4 años de relación que tuvimos; me hiciste sentir como el mejor hombre del mundo con una mujer perfecta como tú.Sabes…me hubiera gustado que estuvieses conmigo en mis últimos días, pero tú decidiste esto; si quieres buscarme para verme por última vez estaré en el hospital central.Hazme feliz por última vez.Nunca dejé de amarte, y creo que cumplí la promesa que hice cuando te marchaste.Recuerda que te dejé el anillo de compromiso en una de las cartas.Dejo mi última rosa en el florero.Por siempre tuyo…Jackson Kim.

“FREEDOM”

Shirley More Estudiante - Cs. de la Salud “Al tiempo aprenderás, que no se pueden encerrar,

ni aves, ni corazones.”

”LA ÚLTIMA CARTA”

Valeria Fernanda Zúñiga Gutiérrez Estudiante - Medicina Humana

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Tomé rápidamente un taxi, y fui con el pequeño Nicholas en busca de Jackson.

No puede perder la oportunidad de ver a su hijo.No puedo quitarle ese privilegio.

Comencé a llorar en silencio, Nicholas estaba durmiendo en el camino; y fue en ese momento en el que pensé que no debí huir de él.

No debí haberle quitado la oportunidad de ser padre.Disfrutar de ser padres.

Con mi pequeño de ya cinco meses, entré a la recepción para buscarlo…

– ¿Se encuentra aquí Jackson Kim? – pregunté a la enfermera –– Habitación 312 – respondió – pero no puede llevar al niño ahí…– Tengo que, tiene que conocer a su hijo – continué, ya débil ante la situación –– Pase, yo la acompañaré – dijo, llevándome a la habitación –

Ahí lo vi.Demacrado.Destrozado.

– Ro…Rose… – le escuché apenas hablar – viniste…– Jackson… – continué, comenzando a llorar – perdóname, no debí haberme ido, tenía miedo…– ¿Por qué? – preguntó –– No estaba lista para una responsabilidad tan grande, hui de ti pensando que era la solución – dije, viendo a Nicholas – y ahora te encuentro aquí, a punto de morir…– ¿Él es mi hijo? – continuó, intentando hablar más fuerte – cómo se llama…– Nicholas, se llama Nicholas Kim – respondí –– ¿Puedo? – preguntó, dándome a entender lo que quería –– Claro… – respondí, entregándole a Nicholas –

Vi como lo observaba con amor, la escena era tan hermosa que decidí tomarle una foto.

– Nicholas Kim, tienes a una madre maravillosa – le comenzó a hablar – espero que cuides de ella como yo lo hice, lo hubiera dado todo para estar bien mi pequeño, ahora tengo que partir, me alegro de haberte conocido hijo mío…Nick, espero que seas el niño más feliz

Lloré al escucharlo.

– Nick…no quiero dejarte – dijo llorando – no quiero…

Su cara era otra.Triste y destrozada por la leucemia.

– Rose…acércate – continuó, secándose las lágrimas y dejando a Nick a su lado – gracias por permitirme verlos por última vez, gracias por haberme hecho feliz en estos últimos días que me quedan; por favor cuida bien de Nicholas, sé que él podrá hacer grandes cosas…

Me acercó con dificultad a sus labios, labios que quería sentir antes de que partiera.

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– Jack, traje esto… – le mostré el anillo dorado con un pequeño diamante en él –– El anillo… – continuó, tomándolo con sus delgados dedos – Rose Park, ¿quisieras casarte conmigo?– Jack…pero tú, tú… – dije, y él interrumpió mis palabras –– Hazme feliz por última vez Rose… – continuó, tomando mi mano – Yo, Jackson Kim, me entrego a ti Rose Park como tu esposo, en las buenas y las malas, en la pobreza y la riqueza, en la salud y la enfermedad, junto a nuestro Nicholas, hasta que la muerte nos separe…

Colocó el anillo en mi dedo.Sonrió.Sonreí.La tristeza me abrumaba, pero intenté ser feliz.Y la última foto, juntos como familia.

– Hora de irnos Nick – dije mientras lo tomaba en mis brazos –– Gracias…Rose – suspiró, sonriendo –

Y fue que dejó de existir.Salí corriendo de ahí.Llorando desconsolada.Junto a mi hijo.Nuestro hijo.Jack Jack…gracias por todo.