Revista...Carlos Loeza Manzanero Coordinador de Análisis Económico Ana Karina Sánchez Relaciones...

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Segunda ÉpocaDirector: Carlos Ramírez / indicadorpolitico.mx / [email protected] / No. 45 / indicadorpolitico1 / @CR_indipolitico / Lunes 28 de Octubre de 2019 / $20

ESCRIBEN: Carlos Angulo Parra, Por Rodulfo Reyes, Eduardo Sadot-Morales Figueroa, Roberto Vizcaíno, José Luis Benavides, Claudia Luna Palencia, Marcos Marín Amezcua, Jaime Enríquez Félix, Miguel Ángel Sánchez de Armas

La fuerza de Estado,superior a la de los cárteles

Por Carlos Ramírez pág. 3

Cuento post Hitchcok

Por Lilia Cisneros Luján pág 16

Entre el odioy la razón

Por Armando Reyes Vigueras pág 14

La tarea que no se ha hecho

Por Fernando Dworak pág 5

Mala planeaciónPor Rodolfo Aceves

Jiménez pág 4

Tamaños por LuyEditorial: En una entrevista publicada en un medio de comunicación mexicano, el especialista en

temas de seguridad, Edgardo Buscaglia, aseguró que lo sucedido en Culiacán, Sinaloa, el pasado 17 de octubre es un acto de terrorismo y que el Estado mexicano quedó arrodillado frente al poderío demostrado por el Cártel de Sinaloa.

Se trata de un enfoque que nos ayuda a comprender de otra manera lo sucedido en una zona en la que el narcotráfico se ha mimetizado con amplios sectores sociales y en donde el Estado brilla por su ausencia.

Pero lo que también es necesario destacar, es que ese mismo Estado que ahora está siendo cuestionado –como antes lo fue en el caso Ayotzinapa–, tiene la capacidad de hacer frente y derrotar a los grupos del crimen organizado que ahora dominan amplios sectores del país.

Se trata de algo que tendría que entenderse en lugar de culpar a entes etéreos, en algo que sólo ayuda a prolongar un debate que no nos lleva a ningún lado.

Es por eso que es necesario llamar a las cosas por su verdadero nombre: los cárteles del narcotráfico son organizaciones terroristas, el que está fallando es el gobierno en turno –en todos sus órdenes– y las actividades delictivas que realizan estos grupos no deben ser idealiza-das o defendidas en aras de ganar una discusión ideológica.

Ninguna democracia que se precie de serlo tolera que un grupo armado delictivo, se asuma como poder paralelo y, encima de todo, sea defendido gracias a ciertas coincidencias ideológicas. Y esto no debe ocurrir en México.

Conspiracy TheoryTal parece que para lo que sí son buenos en comunicación social de la presidencia de México

–además de la propaganda– es para producir distintas versiones para tapar lo negativo que sucede con relación a ciertas decisiones de gobierno.

Con lo de Culiacán, se demostró que no hay quien evalúe los acontecimientos y haga un manejo adecuado de crisis, porque se han contado 6 versiones sobre cómo se dio la detención de Ovidio Guzmán López, siempre buscando evitar mencionar la presencia de la DEA en Sinaloa.

Luego tuvimos las versiones de que se sabía, que no, que el presidente no estaba enterado, que SEDENA no conocía del operativo, además del reparto de culpas, pero no una versión no sólo creíble, sino que evite tanta crisis para el gobierno de la 4T.

Luego vino la protesta de alcaldes en las puertas de Palacio Nacional y las versiones de que solicitaron ser recibidos, pero no se les permitió, el uso de gases lacrimógenos, que luego fueron un repelente natural para terminar con las disculpas de Gobernación, en momentos en que John Ackermann aseguraba que no pasó nada de eso.

Lo bueno es que iban a ser diferentes y, en este sentido lo son, pero también peores que el gobierno anterior.

DirectorioMtro. Carlos Ramírez

Presidente y Director [email protected]

Lic. José Luis RojasCoordinador General Editorial

[email protected]

Mtro. Carlos Loeza ManzaneroCoordinador de Análisis Económico

Ana Karina SánchezRelaciones Institucionales y ventas

[email protected]

Revista Indicador Político es una publicación diaria editada por el Centro de Estudios Económicos, Políticos y de Seguridad, S. A. de C.V. Editor responsable: Carlos Javier

Ramírez Hernández. Todos los artículos son de responsabilidad de sus autores. Oficinas: Durango 223, Col. Roma, Delegación Cuauhtémoc, C. P. 06700, México D.F.

indicadorpolitico.mx

Lic. Armando Reyes ViguerasDirector [email protected]

Dr. Rafael Abascal y MacíasCoordinador de Análisis Político

Raúl UrbinaAsistente de la dirección [email protected]

LDG. Marco Antonio Clemente Diseño

ÍndiceLa fuerza de Estado, superior a la de los cárteles 3Por Carlos Ramírez

Mala planeación 4Por Rodolfo Aceves Jiménez

La tarea que no se ha hecho 5Por Fernando Dworak

La Coyuntura Culiacán 6Por Carlos Angulo Parra

El ‘efecto diputadita’ 7Por Rodulfo Reyes

Violencia sello de Morena o desencanto religioso 8Por Eduardo Sadot-Morales Figueroa

AMLO, ni despide a nadie, y afirma que su estrategia de seguridad, seguirá igual 9Por Roberto Vizcaíno

La Presidencia Imperial reloaded 11Por José Luis Benavides

México: caminar sin agravios 12Por Claudia Luna Palencia

Culiacán 13Por Marcos Marín Amezcua

Entre el odio y la razón 14Por Armando Reyes Vigueras

Attolini y el movimiento #YoSoy132 15Por Jaime Enríquez Félix

Cuento post Hitchcok 16Por Lilia Cisneros Luján

Aquel dos de octubre 17Por Miguel Ángel Sánchez de Armas

328 de Octubre de 2019

La fuerza de Estado, superior a la de los cárteles

El Estado ha logrado descabezar a los prin-cipales cárteles con capturas o muertes en com-bate. De los 23 principales capos registrados, la fuerza del Estado ha liquidado a 16 y mantiene en permanente huida a otros siete. El caso más espectacular fue el de Joaquín El Chapo Guzmán Loera, quien huyó dos veces de la cárcel y fue capturado tres ocasiones. La arrogancia del capo o llevo a buscar a la actriz Kate del castillo y al actor estadunidense Sean Penn, pero en un ope-rativo controlado por la policía para localizar su escondrijo. Entregado a los EE. UU., El Chapo fue juzgado y sentenciado a cadena perpetua en una prisión estadunidense de altísima seguridad.

De los capos en libertad sólo destaca el caso de Nemesio Oseguera Cervantes El Mencho, jefe del poderosísimo Cártel Jalisco Nueva Genera-

ción. Esta organización criminal es hoy la mas activa, en constante proceso de expansión y con una exhibición de fuerza intimidante.

De acuerdo con una recopilación minucio-sa de Wikipedia, los 16 capos liquidados son los siguientes:

1. Amado Carrillo (†)2. Osiel Cárdenas Guillén (capturado)3. Omar Treviño (capturado)4. Alfredo Beltrán Leyva (capturado)5. Arturo Beltrán Leyva (†)6. Vicente Carrillo (capturado)7. Luis Fernando Sánchez (capturado)8. Servando Gómez (capturado)9. Édgar Valdez Villarreal (capturado)10. Juan Francisco Treviño (capturado)

11. Cleotilde Rentería (capturado)12. Homero Cárdenas Guillén († presunta-

mente)13. Juan José Esparragoza El Azul († presunta-

mente)14. Joaquín Guzmán (capturado)15. Ignacio Rentería (capturado)16. José María Guízar (capturado)

Y los capos prófugos son pocos:17. Ismael El Mayo Zambada (prófugo)18. Nemesio Oseguera Cervantes El Mencho

(prófugo)19. Fausto Isidro Meza (prófugo)20. Juan Gerardo Treviño (prófugo)21. Juan Pablo Ledezma (prófugo)22. Enedina Arellano Félix (prófuga)23. José Antonio Yépez Ortiz (prófugo)

Estos datos revelan que la fuerza del Estado fue eficaz, aunque con ciertos errores de plan-teamiento. La meta de los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto fue sólo tratar de sacar del juego o liquidar a las cabezas visi-bles, a capos con nombres famosos, pero sin des-mantelar sus estructuras criminales. La estrate-gia supuso que, sin sus jefes, las organizaciones tenderían a disolverse. Y no fue así, salvo por ca-sos excepcionales. En los mandos hubo ascensos improvisados de jefes sin capacidad directiva ni

enfoques estratégicos. Lo peor fue que muchos de los miembros de las bandas se separaron al morir sus jefes y crearon nuevas formas delic-tivas: la extorsión, el robo directo, el secuestro, entre otros.

La fuerza del Estado en el campo del cri-men organizado/desorganizado es conocido por las propias agrupaciones; los seguidores de Ovi-dio Guzmán López no confrontaron al Estado en una lucha de fuerzas, sino que crearon una batalla de estrategias militar guerrillera para ha-cer retroceder a las fuerzas de seguridad y para liberar a su jefe. Una vez logrado el objetivo, los delincuentes regresaron a sus refugios secretos. Una reorganización de las fuerzas de seguridad hubiera causado estragos entre los delincuentes, cuyos efectivos y armas nunca se compararon con las del Estado.

En todo caso, la crisis con el Cártel de El Cha-po debiera llevar a una profundización de la estra-tegia de seguridad del Estado: no solo perseguir capos y jefes sino comenzar ya a desmantelar por la fuerza las organizaciones criminales quitándo-les dinero, propiedades, seguidores y flujo de ar-mas. El Estado es el único que tiene la fuerza para ser la dominación hegemónica de la república.

[email protected]

@carlosramirezh

Por Carlos Ramírez

Los análisis sobre la crisis de seguridad en Culiacán el 17 de octubre suelen ser perentorios. El titular de portada de la revista Proceso ilustro el tamaño de la incompren-

sión “ustedes mandan”. Pero no fue así: la ofensiva del Cártel de El Chapo fue reacción al arresto con fines de extradición de uno de los hijos de El Chapo; una vez logrado el objetivo, los narcos regresaron a sus cuevas clandestinas donde viven escondidos.

4 28 de Octubre de 2019

Columna Brújula Pública

Mala planeaciónPor Rodolfo Aceves Jiménez

El autor es Maestro en Seguridad Nacional por la Armada de México

Correo electrónico: [email protected]: @racevesj

Entre los errores de diseño en su planeación se encuentra, no haber previsto las etapas y esce-narios del antes, durante y después del operati-vo. Por ejemplo, no se diseñaron escenarios para proteger, custodiar y cerrar momentáneamente, en carretera y ciudad, instalaciones estratégicas, como gasolineras, plantas de luz, de suministro de agua potable, control y bloqueo de comuni-caciones por telefonía convencional y celular, reforzamiento de centros penitenciarios o juzga-dos y el establecimiento de un sistema momen-táneo de inteligencia en las vías secundarias por

En el operativo que capturaría a Iván Archibaldo y Ovi-dio Guzmán, hijos de Joaquín Guzmán Loera “El Cha-po” hubo errores graves y no subsanables desde su dise-

ño hasta su implementación, que determinaron el fracaso del operativo con el costo político y humillación de las institucio-nes del Estado mexicano. Ni hablar de las instituciones polí-ticas y de gobierno de Sinaloa y Culiacán, quienes hicieron lo que bien saben hacer en seguridad: nada.

donde estaban llegando camionetas con sicarios, principalmente.

En la etapa del durante, no se previó la rea-lización de varios operativos espejo en diversos puntos de la ciudad, que coordinadamente re-produjeran por tierra y por aire el mismo esce-nario en cuatro o cinco puntos de Culiacán, que confundiera a los sicarios. No se establecieron ni se coordinaron operativos para que mientras las fuerzas federales capturaran a los hijos de “El Chapo”, la policía estatal y municipal, prote-giera a la población civil en espacios y oficinas públicas, centros comerciales, escuelas, univer-sidades y hospitales, y otorgar a la ciudadanía la sensación de seguridad. No hubo información de inteligencia para prever el escenario de ame-naza en la colonia militar y los sicarios tuvieron oportunidad de tomar como rehenes a militares para intercambiarlos por los hermanos Guzmán.

En la etapa del después, no se previó el es-cenario la reacción de los sicarios, se desestimó la capacidad de los sicarios y las fuerzas federales estaban superadas en cantidad de efectivos.

La comunicación oficial se tardó en dar una respuesta oficial y debió impedirse el acceso a medios de comunicación a los abogados de los hijos de “El Chapo” con el fin de agradecer al titular del Ejecutivo Federal su intervención, ya que es percibida como una humillación. En fin.

Parece ser que el poder político o quién haya diseñado el operativo, menospreció y subestimó la capacidad de las Fuerzas Armadas. El presiden-te tuvo que salir a medios a declarar que él per-sonalmente ordenó la liberación de Ovidio Guz-mán para evitar y no se pidió el auxilio de otras instituciones, como la DEA o el FBI, quienes tienen experiencia en este tipo de operaciones.

Pero parece que el presidente desconoce las capacidades de las Fuerzas Armadas mexicanas o le mal informaron. En los operativos para cap-turar a diversos capos, solo en 2009 para captu-rar en Cuernavaca a Arturo Beltrán Leyva “El Barbas” murieron él y los escoltas de su primer círculo de seguridad; en 2012 cuando se atrapó a “El Mencho” en Zapopan, Jalisco o en 2016 cuando se atrapó a “El Chapo” en un hotel de Los Mochis, Sinaloa, no hubo víctimas civiles.

Entre las diversas consecuencias por el fra-caso del operativo para capturar a los hijos de El Chapo se encuentra, una reconfiguración en los temas de la relación bilateral con Estados Uni-dos, así como una nueva relación con la clase militar mexicana. Por otra parte, el empodera-miento de los carteles Jalisco Nueva Generación y Santa Rosa, de tal forma que, cuando sus lí-deres sean capturados, no les será difícil tomar Guadalajara o Guanajuato para presionar en su liberación.

La impericia e ineficiencia en el diseño del operativo y de la comunicación puso de rodillas al poder político.

Va mi reconocimiento personal a las Fuerzas Armadas por su valor y honor.


La tarea que no se ha hechoPor Fernando Dworak

El pasado martes 22, alcaldes del PAN, PRI y PRD protestaron afuera de Palacio Nacional para exigir al ejecutivo mayores recursos para infraestructura y seguridad pública. Al solicitar audiencia, bloquearon calles y realizaron diver-sos actos como tronar cohetones. La manifesta-ción fue disuelta con gas lacrimógeno, a lo cual la vocería de la Presidencia afirmó que se había hecho para proteger a los trabajadores que ahí laboraban.

En un momento donde imperan las emociones, lo menos importante es tener la razón. Sin embargo, para recon-quistar la confianza del electorado, es necesario que los

partidos hoy en la oposición representen algo; y para ello ne-cesitan ser creíbles. Lo anterior se ha repetido varias veces en este espacio, sabiendo que el ataque frontal y la mera reacción termina legitimando al gobierno y afianzando sus posiciones.

Dejemos a un lado la gravedad del acto y la señal de selectividad que envía: puedes ser delin-cuente y tendrás un trato más respetuoso y expe-dito que los presidentes municipales. También demos por sentado que, por lo menos, esta mo-vilización ameritaría una mesa de negociación con la Secretaría de Hacienda y la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, ante la incapaci-dad de los propios coordinadores de los grupos parlamentarios en la Cámara de Diputados para negociar en un entorno mayoritario.

El problema no es quién tiene la razón, y menos cuando leemos en las redes sociales co-mentarios como, reproduzco textualmente: “A este momento de la vida le llamo felicidad y cumplimiento del deber de la autoridad”; “Cómo no les lanzan una estricta auditoría de gestión en el desempeño”; “No cabe duda que la democracia les irrita sus partes innobles”; “Muy bien. Para que sepan lo que se siente”; “Oh!!! Ps no clamaban/exigían el uso de la fuerza contra manifestantes? Ah no! Seguimos con la exigen-cia en el otro pero no en mis derechos verdad?” entre otras expresiones que, por más miseria humana que reflejen, hablan de una tarea que no han sabido atender los partidos: comunicar alternativas.

Si el primer reto es hacer una autocrítica, es necesario atajar errores y excesos anteriores, como lo habitual que se volvió dejar las gestio-nes de los municipios con niveles elevados de deuda pública, lo común que se volvió la ima-gen de los “moches” en el debate y la negligen-cia no sólo de cobrar impuestos locales, sino la ocurrencia de los estados a eliminar otros como la tenencia vehicular. No asumir esto sólo hace poco creíble a todo intento por mejorar las con-diciones de vida de los ayuntamientos.

Siguiente tema: ¿qué se ha hecho de 2018 al día de hoy para detener la ola de Morena? ¿Qué políticas han instrumentado en rubros como la transparencia y la rendición de cuentas para mostrar un deseo por ganar recuperar la con-fianza del votante? ¿Cuál es su narrativa ante los gobiernos del obradorismo? A nadie le gusta autolimitarse y renunciar a márgenes de opaci-dad, pero es cuestión de vida o muerte para los diversos proyectos partidistas.

Finalmente, ¿qué ofrecen a cambio de más recursos? Es posible que Morena haga cosas po-sitivas al eliminar el ramo 23, conocido como el de los “moches” y reducir financiamiento, pero si se deja que el discurso de la “austeridad” permee, se puede no solo reducir las capacida-des del Estados en sus tres niveles, sino generar incentivos de opacidad que beneficien a los go-biernos locales afines al gobierno federal. Esto implica presentar una plataforma de reformas que calibren los excesos del pasado y apuesten por mejorar a todas las instituciones, indepen-dientemente del color partidista.

No hacer esto terminará facilitando la legiti-mación de un nuevo gobierno y de su líder; por más gas lacrimógeno les avienten a los ediles o se cometan atropellos similares.

@FernandoDworak


1. Que la principal y primordial activi-dad del gobierno es el darnos seguri-dad y justicia.

2. Que debe de haber un orden insti-tucional con un Estado fuerte.

3. Que el Estado tenga el monopolio de la fuerza.

4. Que se debe de respetar la Consti-

tución.5. Que nadie ni nada debe estar por en-

cima de la ley.6. Que no debe haber impunidad.7. Que se debe prevenir y combatir la

corrupción.8. En última instancia, que debemos de

respetar el Estado de Derecho.

9. Que no debe de haber privilegios.10. Que debemos de fomentar la paz.11. Que todos debemos pagar impuestos.12. Que debe de haber transparencia en las

acciones de gobierno.13. Que todos los que usan recursos públi-

cos tiene que transparentar su destino.14. Que debe de haber rendición de cuen-

tas.15. Que debe de haber eficacia en el go-

bierno.16. Que el gobierno debe de fomentar la

solidaridad en los mexicanos.17. Que se debe impulsar y cuidar la de-

mocracia y la participación ciudadana, a través de un Gobierno Abierto.

Por Carlos Angulo Parra

En relación con los acontecimientos del pasado jueves en Culiacán, me da tristeza que es un pretexto más para polarizar a los mexicanos. Ello me llama a considerar

que todos los mexicanos estamos de acuerdo en que en nues-tro país se cumpla con los siguientes fines y principios:

Columna Última Instancia

La Coyuntura Culiacán18. Que no debe de intervenir el gobier-

no en donde los particulares puedan actuar.

19. Que se debe de respetar la propiedad privada.

20. Que se debe de respetar los derechos humanos.

21. Que se debe de fomentar las activi-dades empresariales privadas.

22. Que debe de haber austeridad en el gasto público sin perjudicar la eficacia del gobierno.

23. Que el gobierno debe procurar el bien común de todos, cumpliendo con sus funciones de seguridad y justicia, ser-vicios públicos, infraestructura, comu-nicaciones, educación, servicios de sa-lud, vivienda, cultura y esparcimiento.

Creo que de los puntos arriba enunciados pocos podrían estar en desacuerdo con ellos. La situación es que de qué manera el gobierno pre-tende llevarlos a cabo.

Si los mexicanos nos concentramos prime-ro en los fines, y luego en los cómos, creo que podemos partir de un buen punto de recon-ciliación nacional. El presidente tiene la opor-tunidad de enfocarnos en esos fines con el gran liderazgo que tiene.

Si el fin del presidente es distinto y no de-sea esos fines, sino que desea antes consolidar un poder para llevar a cabo acciones que no cumplan con uno o varios de los fines anterio-res, entonces sí tenemos un problema grave en el país, y tendremos que luchar para que eso no suceda.

No quiero, por ahora, meterme en el be-renjenal de decir si una u otra cosa que está haciendo el presidente va en contra de los fines anteriores. Lo que sí puedo decir, es que, si el presidente ha llevado a cabo acciones que con-travienen esos fines, ahora, ante lo sucedido en Culiacán que considero que es coyuntural, es tiempo de que rectifique y se enfoque en la con-secución de dichos fines, sin afectar a los otros fines y principios que antes enuncié.

Si los mexicanos vemos que hay buena vo-luntad y disposición a llevarlos a cabo, el presi-dente puede generar un verdadero movimiento de regeneración nacional. Por el contrario, si ve-mos que no hay buena voluntad, hay una mala disposición y lo que se quiere es una manipu-lación política para consolidarse en el poder y cambiar a una mafia por otra, entonces estare-mos en un gran problema en donde los mexica-nos debemos luchar para que no suceda.

Si las urnas le dieron a AMLO un claro mandato para gobernar, fue para que se cum-plan los fines que arriba enuncié, no para que nos desgarremos en una guerra entre bandos opuestos que no me atrevo a etiquetar, porque el hacerlo nada más abona a la separación de los mexicanos y eso genera encono que nos lleva a resultados totalmente opuestos a los fines que queremos lograr.

Si caminamos con rumbo a logra esos fines, tendremos paz, crecimiento económico y bien-estar para todos que nos lleve al Bien Común.


Columna De primera mano

Tras el triunfo aplastante de Andrés Ma-nuel López Obrador en los comicios presi-denciales de ese año, todos los aspirantes del partido del tepetiteco se alzaron con la vic-toria por la propia inercia del ‘efecto AMLO’.

Sobra decir que hasta la ama de casa que quería ser mencionada en las ondas hertzia-nas barrió a sus oponentes. Tiempo después, la persona que le coordinaba su proselitismo le envió un mensaje a este columnista: “A ver

El ‘efecto diputadita’Por Rodulfo Reyes

Durante el proceso electoral del 1 de julio de 2018, una persona que le veía prensa a una desconocida aban-derada a una diputación local por Morena, se acercó

a este reportero para pedirle que le gestionara algunas entre-vistas de radio a la candidata. Ningún medio electrónico es-tablecido quiso darle espacios porque carecía de estatura para interesarle a la audiencia.

si ahora alguno nos da una entrevista para la radio”, y cerraba la indirecta con la figura del changuito que se pone las manos en la boca en señal de incredulidad.

A la señora que ganó la elección y la per-sona que la maneja no les pasó por la cabeza que la victoria no fue de ellas.

Las fulanas estaban a años luz de lograr una victoria en unos comicios sino fuera por-que iban montadas en Morena y en la figura de AMLO.

A la imagen triunfalista de la legislado-ra de personalidad menor se le conoce en el Congreso como “fenómeno diputadita”, y hace alusión a los morenistas que se creen del tamaño de López Obrador porque ganaron el 1 de julio, según ellos porque el electorado los eligió por sus propios méritos, cuando en realidad los ciudadanos cruzaron las boletas porque eran parte del partido del presidente.

El equipito de la ciudadana que ganó por el ‘efecto López Obrador’ siente tener fuerza propia y se ha metido “a hacer política” (si a insultar en redes sociales a políticos y pe-riodistas se le puede llamar “hacer política”), promoviendo a la susodicha para buscar más posiciones, mientas la persona que la maneja se ha metido a “vender” sus “buenos oficios” para “hacer ganar a cualquiera” como lo hizo con la señora de referencia.

PARA SU INFORMACIÓN…

ESTA SEMANA EMPEZARÁ a llegar al Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (ISSET) un nuevo equipo de oftal-mología para tratamiento de pacientes con glaucoma, glaucoma retinopatía diabética, así como para procedimientos de cirugía de retina. También se espera el arribo de venti-ladores volumétricos para terapia intensiva. Este anuncio lo hizo el sábado el director general de la institución, Fernando Mayans Canabal, durante la clausura de las Jornadas Académicas del ISSET 2019. El exsenador cuenta con el respaldo del Sindicato Úni-co de Trabajadores del ISSET, cuya lideresa es la enfermera Teresa García Rodríguez… EL COLEGIO MÉDICO de Tabasco entregó el viernes el reconocimiento y la medalla al mérito médico a la directora de la División Académica de Ciencias de la Salud (DACS) de la UJAT, Miriam Carolina Martínez López, por su entrega a la investigación y a la formación de profesionales de la medicina en el estado... EL LLAMADO ‘GRUPO Uni-versidad’, que busca influir en el sucesor de José Manuel Piña Gutiérrez en la rectoría, está festinando el video en el que se escucha decir al secretario de Educación, Guillermo Narváez Osorio, que era increíble que los maestros no puedan aguantar sin cobrar tres quincenas. Esa ‘hermandad universitaria’ bus-ca imponer en la rectoría a Fernando Rabelo Hartman.

@RodulfoReyes


Violencia sello de Morena o desencanto religioso

Por Eduardo Sadot-Morales Figueroa

MORENA realizó asambleas en varios es-tados de la república, con saldo de violencia, tema que pasó inadvertido por los medios y la ciudadanía, rebasada por la violencia en Agui-lilla, Guerrero, Veracruz y Sinaloa, por inex-periencia y soberbia del gobierno emanado de MORENA. También puede circular la sospecha de que sea precisamente en estados que aún no gobierna MORENA donde se ha dejado crecer la violencia, quizá en un esquema que propicie el arribo a las gubernaturas de esos estados de militantes de MORENA.

Lo que si hay que definir, deslindar y dejar muy claro el origen de esa violencia, que desde luego no apunta a los gobiernos estatales sino a decisiones del gobierno federal.

El presidente Obrador ha manifestado su in-tención de abandonar MORENA si ésta no logra

La violencia en el país, los muertos a diario, el tema de Aguilillas con trece muertos, pareciera hecho con el pro-pósito de crear una cortina de humo frente a las pifias

del gobierno de MORENA, una cortina de humo por alguien sin escrúpulos, en un México bizarro, pero no es así. Desde su origen, la violencia ha marcado el sino de ese movimiento. Un Partido, que maduró a la sombra y servicio de su líder, cuyo grito de batalla fuera durante muchos años “honestidad valiente” que llamaba a la violencia, envalentonada y alimen-tada por años de abusos, injusticias y agravios, infringidas por gobernantes insensibles – que no Partidos – que solemos con-fundir, conveniente y estratégicamente, con los institutos que los postulan.

consolidar la paz en sus filas, lo mismo ha dicho su actual presidenta Yeidckol Polevnsky intentan-do aplacar los ánimos, sin mucho éxito. Igual que como sucedió cuando abandonaron al PRD por motivos similares, para crear MORENA. Lo que campea en el fondo es la radiografía del pueblo de México, porque no podemos regatear que el per-fil de la militancia de ese movimiento, representa el perfil promedio cultural, educativo y tempera-mental de la mayoría de los mexicanos. Es una realidad inocultable que un Partido que pudiera evolucionar en una estructura institucional, ma-dura racional y disciplinada, que México esperaría que fuera así como evolucionara, pero no es así.

Lo dicho por Obrador y Polevnsky no es mentira, así lo hicieron con el PRD, y lo ha-rían ahora también, así hasta el infinito, quizá porque ese sea el proceso de evolución y decan-tación de una militancia, cuya evolución es de-masiado lenta y por debajo de las necesidades que el país demanda.

Los liderazgos crecen y se fortalecen pero los partidos no, corriendo el riesgo de la formación de caudillos y liderazgos en menoscabo de los partidos y las instituciones que deben ser más vigorosas, que trasciendan a los hombres.

La contradicción popular está en el despre-cio de los partidos y el sistema partidista, y el anhelo social de creer en algo o en alguien, en palabras bonitas o personas que puedan ver y tocar, aunque les mientan. Y es así, que se forta-lece la fuerza en torno a caudillos, que los parti-dos ofrecen al pueblo, lo más parecido a un ser superior, casi divino o celestial y omnipotente, cercano y tocable en quien la gente deposite sus esperanzas y satisfaga su natural inclinación a descargar sus responsabilidades y necesidades en un ser superior, semejante a Dios, así se vio y vivió el fin de semana en la zona ñu savi (mix-teca) oaxaqueña, el que personifique el poder omnímodo, todopoderoso que lo resuelva todo, carencias, enfermedades, todo.

Por cierto como anotación al margen, tierra de los Ramírez, familia apreciada y reconocida en la zona encabezada por Heladio Ramirez, ex-gobernador de Oaxaca, padre del Director del ISSSTE, que en la gira, se pudo apreciar clara-mente con muchos años de antelación, que Luis Antonio Ramírez Pineda, será el candidato de MORENA al gobierno de ese Estado.

[email protected]@Eduardo Sadot


Todo desde ese 17 de este octubre ha pasado rápido. Como ya es normal hoy, las redes socia-les, y el resto de los medios, nos mostraron a los mexicanos y al mundo entero las imágenes en vivo de la toma armada de Culiacán, una de las 32 capitales en el país, por el cártel del Chapo Guzmán.

Todo transcurrió en un santiamén, luego de que, hacia las 3 y media de la tarde, militares

capturaron a Ovidio Guzmán, uno de los hijos de El Chapo.

¿Es Ovidio, de 28 años de edad, quien ad-ministra el cártel del Pacífico?

Por el tamaño, la rapidez y la contundencia de la reacción de sus sicarios, parece que sí.

En las siguientes 4 horas, tiempo en que Ovidio fue dejado en libertad, los sicarios que superaron en armamento, estrategia y número

de quizá 3 a 1 a los militares, hubo 8 muertos, enfrentamientos en diferentes puntos de la ciu-dad, cierre de carreteras, retención de 11 mili-tares, quema de camiones y otros vehículos y la amenaza de volar dos enormes pipas de gasolina en la unidad habitacional de la zona militar, con todos los familiares de los soldados dentro.

En 6 versiones distintas, confusas todas, el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo; los se-cretarios de la Defensa y Marina y el presidente Andrés Manuel López Obrador lo único que dejaron en claro fue que ante la derrota sufrida ante los sicarios del cartel, soltaron a Ovidio.

Viernes, sábado y domingo comentarios en redes y en artículos de medios de todo el mun-

do, se habló de que México bajo la presidencia de AMLO es un Estado fallido, rendido, claudi-cado, sometido y derrotado. Y los más audaces y adelantados incluso señalaron que México es encabezado por un narco-gobierno porque su-ponen que los hechos muestran un contuber-nio entre el Presidente y al menos el cartel del Pacífico, presuntamente dominado por el Mayo Zambada y algunos de los 13 hijos de El Chapo.

Sin duda por Ovidio.Ni siquiera cuando capturaron al padre se

movilizaron los sicarios como ahora, dicen.Las interrogantes son múltiples y diversas.

Una esencial es: ¿quién luego de la toma de Cu-liacán por los narcos, y de la claudicación del Es-

Por Roberto Vizcaíno

Columna Tras la puerta del poder

Inmersos en el pasmo, no pocos mexicanos llegamos a este lunes luego del jueves negro en Culiacán, sin saber que seguirá.

AMLO, ni despide a nadie, y afirma que su estrategia de seguridad, seguirá igual


tado Mexicano el jueves 17 de octubre de 2019, va a querer ser policía o autoridad judicial en Sinaloa, en cualquier parte del país? ¿Qué va a ocurrir con los capitales donde operan los cárte-les más abiertos: el del Mencho en Guadalajara y otras entidades; el de El Marro en Guanajuato, etc?

¿Qué va a pasar con estos? ¿Alguien se va a atrever a capturarlos?

¿Qué va a pasar con los capitales en esos estados? ¿Con los inversionistas y empresarios? ¿Con los simples ciudadanos? ¿Quién va a elegir candidatos en las siguientes elecciones y quién va a financiar sus campañas: Ovidio, El Mayo, El Mencho, El Marro?

¿Qué esperaremos del gobierno de EU cuando aquí no hay capacidad de contener a los carteles que envenenan a sus ciudadanos?

Un presidente que hoy iniciará la semana con su mañanera en Palacio, como si no hubiera pasado nada.

HAY QUE RESCATAR LA CONFIANZA Y LA CREDIBILIDAD

En medio de un gabinete, de colaboradores presidenciales ausentes, mudos, que simplemen-te adoptaron la figura del “tancredo” que se que-da quietecito, silencioso, ante el paso del toro, el líder de la mayoría senatorial de Morena, el zacatecano Ricardo Monreal, presidente además de la Junta de Coordinación Política de la cáma-ra alta fue quien salió a defender la plaza, a darle su apoyo a López Obrador y a señalar que “hay que rescatar la confianza y la credibilidad” en las Fuerzas Armadas.

Y, desde Hermosillo, Sonora, a donde fue a acompañar al senador morenista, Arturo Bours Griffith, en su primer informe de labores legis-lativas, dijo:

“Hay que proteger, hay que solidarizarnos y hay que darles instrumentos a los oficiales de la ley, a los soldados, a todos, para que hagan su trabajo en beneficio de la recuperación de la paz

social; pero, sobre todo, hay que solidarizarnos con sus familias.

“La verdad, es que… ellos todos los días se juegan su vida por las labores de seguridad y de tranquilidad social”, subrayó.

Y adelantó que en los siguientes días anali-zará la posibilidad de aumentar las penas contra quienes ataquen a las fuerzas institucionales, las fuerzas de defensa de la población.

Indicó que esto es necesario porque hoy el Código Penal permite salir con fianza a quienes agreden a soldados.

“… no son delitos graves; pero ya se mo-dificó el 19 constitucional, para hacer prisión oficiosa para todos aquellos que tengan armas prohibidas o permitidas sólo para el uso del Ejército. Ya no alcanzarán fianza.

“Falta complementar algunos artículos para erradicar el uso de armas prohibidas o de uso exclusivo del ejército”, dijo.

Monreal consideró que los hechos indican que el Congreso debe legislar para asegurarles a

los militares y guardias nacionales su trabajo, y garantizarles que puedan desempeñarlo, porque su trabajo es el más dedicado de todos en las épocas de violencia y de inseguridad.

LA VIDA EMPRESARIAL SIGUEY a pesar del escenario de violencia y poca

seguridad, ausencia o entrega del Estado de Derecho, organismos como Cadenas Empresa-rial ENLAZADOT AC bajo la presidencia de Héctor Gabriel Pérez González, en compañía delas dirigencias de Concamin y de México si Vale informaron de la realización del encuen-tro #ENMiPYMESENLAZADOT2019 que se realizará los días 13 y 14 de noviembre en Expo Guadalajara.

Con una inscripción hasta el momento de micro y pequeños empresarios de los sectores de servicios, del comercio y de la industria, este encuentro empresarial suma ya casi 4 mil em-presarios de un poco más de 8 mil que se espera asistan.

A esta concentración no sólo asistirán em-prendedores mexicanos, sino que ya se tiene inscritos a no pocos de Estados Unidos y Ca-nadá, así como de 17 entidades de la Repúbli-ca: Aguascalientes, Baja California, Ciudad de México, Colima, Estado de México, Guanajua-to, Michoacán, Nayarit, Nuevo León Oaxaca, Querétaro, Sinaloa, San Luis Potosí, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.

Pérez González indicó que #ENMiPYME-SENLAZADOT2019, es una iniciativa de la sociedad civil organizada por MIPYMES para MIPYMES.

“Recordemos que el 99% de las empresas en nuestro país son de este tipo y uno de los grandes retos es conectar a éstas a las cadenas globales de valor e incentivar su productividad para la exportación en todos los sectores, dijo.

Se espera, agrego, que este encuentro pro-picie crecimiento, alianzas, aprendizaje, desa-rrollo, innovación, networking, CEOS, finan-zas, financiamiento, casos de éxito e iniciativas, además de un aproximado de 50 charlas en diferentes ejes de trabajo MKT, transformación digital, desarrollo humano, cultura financiera, cultura fiscal entre otras, actividades que se han programado.

Otro de los objetivos del #ENMiPYMES-ENLAZADOT2019, señaló, es acercar la oferta disponible de la cuádruple hélice (Academia, Gobierno, Cámaras Empresariales, Asociacio-nes Civiles) ya que existe mucha oferta, pero no llega a veces al microempresario, explicó Pérez González.

Casi 2 millones 300 mil personas a nivel na-cional es el alcance registrado por Cadena Em-presarial ENLAZADOT AC en redes sociales hasta el momento, con una interacción de más de 75 mil emprendedores, por lo cual #ENMi-PYMESENLAZADOT2019 superará sus ex-pectativas de asistencia, y se están sumando más alianzas y medios para su difusión, afirmó.

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En este contexto, resulta interesante que Krauze inicie su relato con el Ex Presidente Manuel Ávila Camacho y la concluya con Car-los Salinas de Gortari, pasando por todos los priistas de aquellas épocas “doradas” para algu-nos y dolorosas para otros.

Sin embargo, me parece que hoy Enrique Krauze ya tiene material suficiente para hacerle un addendum a su obra y así poder tener una digna SEGUNDA PARTE, donde confluyan -todavía más- las intrigas palaciegas, las confe-siones de alcoba, los muchos villanos y los pocos héroes que hagan las delicias del público cono-cedor.

De esta misma manera, me parece que to-dos y cada uno de los Sexenios comprendidos entre los años de 1994 al 2018 e incluyendo lo que llevamos de la #CuartaTransformación

en el 2019, tienen sus destellos de PRESIDEN-CIAS IMPERIALES, tal vez unos más o unos menos, pero lo que es indudable es que tanto Colosio si hubiera llegado a ocupar la Silla del Águila, como Zedillo, Fox, Calderón, Peña y ahora Lopez Obrador le han o le hubieran dado su toque personal a lo que ellos desean o desea-ron fuera su propio “legado histórico”.

Así que vamos a ser sintéticos y hablaremos de los Presidentes de 1994 al 2019, quienes pudieran formar parte del primer script de una secuela del multicitado PRESIDENCIALIS-MO IMPERIAL, el cual se antoja de epopeya para una jauría digital urgida de conocer y ac-ceder a los entretelones del poder real y no sim-bólico como algunos extraviados que conozco:

COLOSIO: Simplemente fue la expectati-va de un hombre y un proyecto que pudo ser

y no fue, pero que dieron paso a una leyenda nacional.

ZEDILLO: El bolerito de Mexicali que fue Presidente ¿sin buscarlo o provocarlo?, quien por culpa de su Junior tuvo un altercado inter-nacional con la banda de rock U2, mismo que por recomendación del cantante Bono sacó a México por varios años de los principales tours mundiales de muchos de los exitosos grupos musicales de la epoca.

Así pues, y para que se le quitará a Bono, el Presidente Zedillo les demostró a él y a sus compañeros irlandeses que por muchos discos que pudieran vender a nivel mundial…, en Mé-xico el Presidente es “El Rey” y punto.

FOX: El Empresario que inauguró la épo-ca de los Mirreyes con el clásico ¿Qué paso mi Rey? cuando se dirigió al Rey Juan Carlos de España, célebre por sus botas vaqueras y el ¿yo por qué?, odiado por las ambiciones presiden-ciales de su impresentable Martita y recordado por el “Hoy, hoy, hoy…” que dejó tendidos en el camino electoral a Labastida y Cárdenas.

CALDERÓN: Mejor conocido como “El Hijo Desobediente” o mejor aún, por su inol-vidable frase del 2006: “Haiga sido como hai-ga sido”, personaje que es un Zoon politikón y por tal razón, lo veremos con su nuevo partido político en la lucha por el poder hasta el día que ya no esté entre nosotros.

PEÑA: El toluqueño Golden Boy del pelo

engominado; La “promesa cumplida” de Atla-comulco; El hombre del “Saving México”; El Esposo de la Gaviota con todo y su inexplicable “Casa Blanca”, pero también el referente más cercano, palpable y natural de la corrupción priista del Siglo XXI…, y obvio, el primero en darle la extremaunción y sus correspondientes santos oleos al @PRI_Nacional.

LÓPEZ OBRADOR: El beisbolero Tabas-queño quien se define como un Slugger que ba-tea trescientos de porcentaje y que se levanta al amanecer para dar sus HOMILÍAS DIARIAS, perdón “CONFERENCIAS MAÑANERAS”; El hombre de “los otros datos” y del “me can-so ganso”; El Líder Social de “primero los po-bres”, quien siempre quiso Presidente para ser “El Rey” y tan esa así, que se fue a vivir a Pala-cio Nacional para vivir “humildemente” como Juárez; El hombre que menciona a la FRATER-NIDAD UNIVERSAL sin estudiarla y menos haberse iniciado en esos sagrados misterios y por supuesto, el vencedor de la “OPOSICIÓN MORALMENTE DERROTADA”.

Una vez expresado lo anterior sobre tan ilustres personajes, yo pienso que la PRESI-DENCIA IMPERIAL NO REGRESÓ CON LÓPEZ OBRADOR, SINO CON PEÑA, ya que los excesos en el ejercicio del poder aunados a la corrupción sistemática y aderezados a la fri-volidad característica de los inefables Peñistas, dieron como consecuencia que ese fenómeno reviviera fuertemente y con olor a chorizo de Toluca revuelto con Agua de Colonia de la Marca Carolina Herrera y mezclado con la promesa de un “cuento de hadas” entre una bonita pareja del @Hola de la Región 4, situa-ción que acabó en tragedia para todos nosotros los mexicanos, encarcelamiento para algun@s y todavía persecución judicial y mediática para otros pájaros de cuenta.

Más aún, es un hecho que la PRESIDEN-CIA IMPERIAL es del pleno gusto de Lopez Obrador, es más, me parece que la disfruta en sobremanera y por eso se ríe de sus adversarios políticos, se burla de sus enemigos en desgracia a quienes les aplica la máxima de: “A los amigos, justicia y gracia; a los enemigos, la ley a secas” y en esos casos ni hablar, la suerte ya está echada para todos ellos.

Finalmente, estamos en momentos en que la reedición de la PRESIDENCIA IMPERIAL no pasa de ser un simple eufemismo para in-tentar poner en “evidencia” al Presidente de la República y tal vez con ello intentarlo contener de alguna manera, pero lo que es un hecho que imperial o no, lo único importante y que debe-ría de importarnos es México y los mexicanos; Al tiempo.

Si tienen alguna duda no dejen de mandar-me sus comentarios y con gusto se los respon-deré.

La Presidencia Imperial reloaded Por José Luis Benavides

Amigos de #Indicador Político conforme pasan los días y nos acercamos peligrosamente al primer aniversario de la toma de posesión del Presidente de la Repú-

blica Andrés Manuel López Obrador [@lopezobrador_] es claro que vivimos una RESTAURACIÓN de la PRESIDEN-CIA, misma que unos ven como “AUTORITARIA”, otros la califican de “IDEOLÓGICA” y los más románticos como “IMPERIAL”, evocando el libro clásico de Enrique Krauze (Tusquets Editores, 1997).

¡Hasta la próxima y síganme en Twitter! @Benavideslaw o visiten mi Fan Page:

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Columna #Negocios&Política


podía vencer al jefe azteca. Andando el tiempo, la Ciudad de México fue fundada en el mismo sitio de la capital azteca, Tenochtitlán”, abundó.

España y México han creado una gran cul-tura conjunta, ¿qué se puede aprender de ésta? A lo que Pérez Ariza me respondió: “La cultura del mestizaje que creó España en todos los órde-nes, no solo en la mezcla de razas es de inmensa importancia. No se ha dado tal fenómeno social positivo en ninguna otra forma de imperios pa-ralelos al español”.

Vamos a 2020, hoy en día mucha gente en México sigue refiriéndose al país ibérico como “la Madre Patria”, y ya han pasado 200 años de vida independiente, ¿cómo interpretarlo? ¿Sigue vivo un vínculo umbilical?

En voz del profesor asentado en Málaga, hay pruebas del inmenso amor y ayuda que el presidente Cárdenas prestó al exilio republicano español, sin olvidar “el gesto fraternal y huma-nitario con los niños españoles y los intelectua-les” que acogió México desde finales de los años treinta del pasado siglo. Ese cariz humanitario es también herencia de nuestro mestizaje.

A COLACIÓNTodos somos descendientes de aquel mo-

mento, me dijo José Luis de Rojas, historiador de la Universidad Complutense, con sus con-secuencias y cambios que no se pueden volver a atrás.

En este sentido, remarcó el investigador, el agravio y el rencor están en las personas no en la historia aunque hayan ocurrido muchas cosas que nos hubieran gustado que fuesen de otra manera.

Para el experto miembro de la Academia Mexicana de la Historia, las relaciones binacio-nales actuales pasan “por un muy buen momen-to con la apertura de la Casa de México” con todas las actividades que se realizan y la política de caminar juntos.

¿Qué trajo de positivo la Conquista? El in-tercambio de ideas, de personas, de productos tanto animales como vegetales… América no podría vivir hoy en día sin lo que les llegó de Europa y Europa no podría vivir sin lo que se trajo de América.

¿Y el perdón histórico? Según el catedrático España no debe pedir perdón por lo que pasó: “En aquel momento, ni existía España, ni existía México, y en el mismo contexto, ¿debería pedir España perdón a otros países por sus invasiones? Hay que aprender del pasado”.

No todo fue devastación destacó por su par-te Juan Antonio García Galindo, académico de la Universidad de Málaga, quien puso en la mesa el legado de una lengua en la que México se ha convertido en el repositario del español, erigiéndose a sí mismo en defensor de la cultura hispánica occidental como ningún otro país. Lo que hay que hacer es caminar sin sentirse agra-viado…

Directora de Conexión Hispanoamérica, economista experta en periodismo económico y escritora de temas internacionales.

@claudialunapale

“Se tiene la impresión de que se ama-odia a Cortés en México, pero también podemos afirmar que este México es el producto cultural del mestizaje que fundó Hernán Cortés. A estos 500 años, puede ser buena la hora de hacer valer todo lo que nos une, sin dejar de sopesar con seriedad académica aquellos hechos y nuestro futuro juntos”, me dijo.

Para el doctor en periodismo, la distancia de

esos cinco siglos “nos da una nación poderosa”, que inició su recorrido histórico con toltecas, mayas y aztecas, que son los que confrontan su cultura con la hispana.

“En unos pocos años de 1519 a 1521, Cor-tés se hizo con el territorio principal de Moc-tezuma y sus sucesores, pero no lo hizo solo él y sus soldados, no hubiera podido hacerlo ante la poderosa fuerza militar de los aztecas. Contó,

gracias a sus habilidades diplomáticas con miles de combatientes totomacos de Cempoala y los tlaxcaltecas, ambas etnias habían sido esclaviza-das por los aztecas, cuya política religiosa, basa-da en los sacrificios humanos y el canibalismo, les obligaba a subyugar a los pueblos vecinos”, refirió el periodista.

Pérez Ariza recordó a la princesa Malinche, una figura importantísima en el vínculo de Cor-tés y los territorios por conquistar, bautizada como doña Marina hablaba náhuatl y maya.

“No solo le sirvió de traductora, sino que le dio a conocer la realidad política de aquella tierra. Hay que recordar que, Moctezuma creía que Cortés era la viva reencarnación de Quetzal-cóatl, el legendario dios principal en la religión azteca. Y el extremeño vio perfectamente cómo

Por Claudia Luna Palencia

A la distancia de esos cinco siglos, México es el país de Hispanoamérica que mejor ha conservado la herencia cultural española, a decir de Carlos Pérez Ariza, ex di-

rector del vicerrectorado de Comunicación de la Universidad de Málaga.

México: caminar sin agraviosColumna Por la espiral


Y avisa que no enmendará su estrategia. Do-blemente grave. Porque decirle a la Nación “ma-ñana hablamos…” cual pareja enfadada que se voltea en la cama y evade la discusión, entonces advierte que existen problemas. Le toca hacer su trabajo y el que el priista Peña Nieto debió de hacer y no hizo, porque todos sabemos que el priista llegó sin estrategia y ya a mediados del sexenio pasado abandonó la lucha contra el nar-co. Se tiene que decir, porque otra vez el pasado hay que recordarlo, no obstante que al hacerlo hagan berrinche los priistas – que aplaudieron como focas tantas tonterías del sexenio pasado o se beneficiaron de tal– o los panistas en su día. Su actuar nos está afectando negativamente, hasta hoy.

Ese es el panorama en que se desenvuelve el actual gobierno, descalificándose así a todos los partidos, porque todos son corresponsables de la catastrófica situación prevaleciente, de-sastrosa en materia de seguridad. Y en primer

lugar está el priista gobernador de Sinaloa, un sujeto gris, que los priistas han estado poniendo arriba en encuestas que nada muestran y a nadie importan, que lo venden como presidenciable, como el eficaz que no es y que se llama a víctima por no ser informado del operativo federal en su estado, cuando en realidad debería de explicar su inacción para atender la seguridad en su esta-do y haber evadido el operativo, en un no haber actuado a tiempo y adecuadamente.

6 versiones dadas por las autoridades revelan que la cadena de mando falla. Que el presiden-te señale que no estaba enterado y termine por asumir la culpa y las responsabilidades de otros, implica errores brutales y autoridades torpes. Desde los creadores de este asalto fallido hasta el secretario de la Defensa y al inoperante Durazo, a quien sostenerlo se antoja un error grave.

Sí, también es cierto que liberar al narcotra-ficante supuso salvar vidas de un Culiacán ama-gado, amenazado en caso de no soltar al sujeto,

mandó llamar días antes, el gobernador priista Quirino Ordaz, y segundo porque ese país no ha hallado cómo más meterse hasta la cocina, y esta clase de incidentes nos exponen a dejarlos entrar más. Después de todo se afirmaba que se buscó al hijo de El Chapo cumpliendo una or-den de extradición que luego hasta la embajada mexicana en Washington negaba que existiera. Por si faltara, se afirma que esa captura importa para cerrar un círculo sobre las triangulaciones de redes de complicidades de El Chapo en am-bos países y quedarse allá con su dinero, ese que dicen, se destapó en su juicio manhattanesco. Suena lógico.

Para el actual gobierno hay dos retos clave: economía y seguridad. El manejo adecuado de la primera en un posible escenario mundial de recesión, dependerá en mucho de las medidas internas y de cómo capotee las turbulencias ex-ternas, que pueden ser terribles si se siguieran criterios priistas de Videgaray, por ejemplo. Con la seguridad será la sociedad y no el gobierno ni los partidos políticos, la que valore si le con-vence lo que mira o no. Y ambos rubros supo-nen ser un examen a la presente administración, uno permanente, reclamante y justo, y si ella no observa cambios sustanciales, este gobierno ya puede despedirse de repetir. No va bien la cosa y no resta sino reconocerlo.

Es lo de Culiacán una crisis de gobierno, ni será la primera ni la única y como en todas par-tes. De eso a que el gobierno caiga o el Ejecuti-vo es cobarde, hay un mundo. El insulto ayuda poco. Hay que ser sensatos en las declaraciones. Así ¿era equivocada la decisión? Preguntémoslo de nuevo: el supuesto error de liberación no lo parece. El operativo tal y como se efectuó, es evi-dente que sí. Y no se observa estrategia y eso es alarmante. Lo demás, sobra. Atender las causas del problema de drogas es loable, pero queda el resto y no se está haciendo bien.

Hay quien pregunta si cosas como esta no han producido arrepentimientos en el voto de 2018. Eso se responde de dos formas: tales acon-tecimientos no hacen mejores a los anteriores y desde luego ¿alguien vio a los anteriores, arre-pentirse de desfalcar a México? Pues eso.

Nota al margen: el papelón de los alcaldes de extracción plural golpeando las puertas del Palacio Nacional para ser atendidos en la maña-nera, porque lo ordeno y mando, es deleznable. Así no. Se pide audiencia, se ajustan agendas, no se plantan a la brava, increíble que no lo sepan los señores munícipes, y a golpear la puerta a mano abierta como confesó la alcaldesa de Chi-huahua. Qué erráticos. Que el alcalde de Huix-quilucan diga que somos Cuba tras ser gaseados esos violentos y que se les reprimió, es de una irresponsabilidad y de una frivolidad, brutales. ¿Es que los alcaldes por serlo, van por delante del resto de los ciudadanos, ya formados? al gra-do de exigir un “me atiendes” sin más? es rebati-ble y muy cuestionable un “sí”. Y en efecto, que ahorren, que su dispendio es bastante insolida-rio en tiempos de crisis como esta.

@marcosmarindice

CuliacánPor Marcos Marín Amezcua

Si el panista Calderón desencadenó la guerra atroz contra el narco, al que declaró la guerra con todas sus letras, porque el panista Fox rehuyó el problema endilgándose-

lo, no afrontándolo como debió de suceder, y ante un narco que ya se le subía a las barbas al Estado, gracias a que el PRI hasta 2000 lo dejó crecer y se entendía con él; ergo al mo-renista López Obrador le estalla el problema en la cara. No nace con él, solo está encarándolo de la manera posible, que no la más idónea, y eso es grave. Y no lo ha diagnosticado adecuadamente.

o sujetos, como ha trascendido, expuesto a serlo por un error del gobierno federal. El punto fino será saber si solo se perdió una batalla o si el narco ya organizado podía arrasar con Culiacán. Y preguntemos al PRI local porqué lo ha dejado crecer, si su gobernador es tan estupendo en las encuestas. Ya se dijo: de esas encuestitas la ciu-dadanía está hasta el moño.

Lo verdaderamente importante será recono-cer que el actual gobierno ha sobredimensiona-do el problema, ha carecido de una mejor estra-tegia para combatir el crimen, deslindándose del PRI o el PAN, y afrontar al narco exitosamente; y en el caso específico, demuestra una desorga-nización total. No hay que darle tantas vueltas.

No es un tema solo de comunicación hacia los medios, de iniciación, de control de daños. Esos son parámetros vetustos priistas para ex-plicar situaciones. No sirven. Criterios trasno-chados sin aporte. Lo que debe de alarmarnos es ver que no hay mejor estrategia. Ni ganas de enmendar. Estamos igual que el PRI, inoperante desde 2012. Hoy se tienen ideas, siquiera, y no las mejores. Y eso sirve de poco. Aunque brilla-ron por su ausencia en el sexenio priista inme-diato anterior.

El supuesto error de Culiacán al soltar al hijo de El Chapo, pero en efecto, acertando al salvar la ciudad de una masacre, demuestra iniciativas de diseño de estrategia graves que comprometen al país y a su inepto gabinete de seguridad nacional, cuya bisoñez es alarmante, con la respuesta de no cambiar un milímetro, pero que igual no se sugieren alternativas desde una oposición que clamó por la violencia; y con el convencimiento de que en el tema concreto del combate al narco, actuar “con abrazos y no balazos” es la solución, nos vulnera y nos expo-ne. Como frase de campaña, pasa, como acto de gobierno ante las evidencias, es alarmante.

El desastre de Culiacán no es menor, mas no doblega al Estado. Cabe ser cuidadosos con semejantes afirmaciones sensacionalistas. Eso puede ser una verdadera exageración. Sí lo deja vulnerable de manera innecesaria, máxime si hubo error y desde luego, nos expone más a Estados Unidos, inmiscuido primero porque lo


Ódiame sin medida ni clemenciaOdiar es parte de nuestras actividades co-

tidianas. Se ve en actividades incluso triviales como podría ser la afición a un equipo depor-tivo, aunque uno de éstos ha he hecho del lema “ódiame más” una muestra de su personalidad.

El problema es que a diario tenemos que lidiar con esto, incluso en la calle en donde los automovilistas, ciclistas o peatones parecen mostrar este sentimiento hacia los demás.

El ambiente de polarización que vivimos en

el país, en el cual los adversarios de algún go-bernante pueden recibir desde etiquetas usadas antaño hasta calificativos bastante graves como desestabilizadores y otros parecidos, muestra también como el odio es el motor que mueve muchas de estas frases.

Ni que decir de las redes sociales, terreno en el cual cualquier periodista puede recibir ex-presiones insultantes ya sea que critique al pre-sidente en turno o si reconoce algún acierto que tuvo.

Se ha dicho mucho que el voto en la pasa-da elección presidencial estuvo motivado por el odio que se sentía a cierto sector de la clase po-lítica gobernante, aunque ésta no se diferencie mucho de la actual, por lo que no es extraño escuchar desde condenas hasta deseos de que pasen a mejor vida sin presentar alguna prueba de culpabilidad.

Así, en estos tiempos en los que para mu-chos cualquier cosa es motivo de reprobación y ataque, lo que priva en el ambiente público es ese sentimiento de que es necesario odiar a los adversarios.

Y hay todo un catalogo que muestra como el odio se ha colocado en un lugar importante en nuestra sociedad actual.

Para los de la izquierda lo peor es ser de de-recha y viceversa. Muchos hablan de cómo es necesario acabar con estos adversarios, incluso se pueden leer una multitud de artículos señalan-do como es necesario terminar con este tipo de sectores políticos, aunque se repruebe al mismo tiempo el camino a una dictadura.

¿Hasta dónde podemos llegar si la política, por citar un ejemplo, está inmersa en un am-

Entre el odio y la razón

Mucho se ha hablado de que el principal motor que anima mucha de la actividad de redes sociales, defi-ne el sentido del voto y establece el tono de la con-

versación pública es el odio. Odiamos a quien piensa diferen-te, lo señalamos y lo atacamos como se hace con un enemigo al que hay que exterminar. Los miembros de los distintos par-tidos políticos señalan lo equivocado que están sus adversarios y los ahora defensores o antagonistas de la 4T muestran el desprecio que tienen por quienes son sus contrarios, todo en un ambiente en el que el odio es el principal ingrediente.

Por Armando Reyes Vigueras

biente de odio? Sin poder dar una respuesta concreta a esta interrogante, lo que es seguro es que lo que no se tendrá es una solución a mu-chos de los problemas que tenemos como país, pues si para encontrarla se necesita del concurso de todos gracias a este odio se genera una ex-clusión de quienes piensan diferente y podrían aportar algo a este tipo de soluciones.

Otro problema derivado de todo esto, es que nos estamos acostumbrando al odio. En marchas podemos apreciar como algunos de los asistentes dan rienda suelta a sus impulsos vio-lentos, pues consideran que es necesario mostrar su odio incluso al mobiliario urbano o la propa-ganda de los candidatos rivales.

Mucho se ha presumido de la pluralidad que existe en el país, de la diversidad que enri-quece nuestra cultura y de la tradición de la cual proviene, pero a últimas fechas ya se han visto expresiones de odio a los primeros españoles que vinieron a lo que ahora es México, incluso alentadas por una misteriosa carta que exige una disculpa por lo cometido hace siglos.

También tenemos sectores que culpan, en una generalización que ya es preocupante, a quienes –según sus designios– son los culpables, así no falta en una manifestación a favor de los derechos de las mujeres quien pida matar a los hombres o en un tuit en el que se critica al pre-sidente, quien pida cerrar la cuenta o eliminar a quien está en contra del mandatario.

Cabe recordar aquellos mensajes en los que se festinaba la ocurrencia, luego del accidente aéreo de German Wings en Europa, de quien pidiera un piloto depresivo para el avión presi-dencial o quien preguntara a que hora sale el fan del actual gobernante que emulara al que mató a John Lennon.

Y es que parece ser que hemos renunciado a la capacidad de razonar –y con ella a la to-lerancia–, para entender que otros pueden te-ner puntos de vista o preferencias distintas a las nuestras, pero que eso no los hace ni nuestros enemigos, ni despreciables, ni motivo del odio que llevamos dentro.

Razonar es la solución para salir de este entorno en el que nos encontramos y buscar soluciones entre todos, pensando antes en la ne-cesidad de alcanzar consensos –eso que tanto le gusta presumir, pero sólo de dientes para afuera, a muchos políticos–, pero que en la realidad no se tienen a pesar de que son necesarios y que, como dice la canción, “si me odias, quedare yo convencida de que me amaste mi bien” (escuche la versión de Estela Núñez).

@AReyesVigueras


Attolini y el movimiento #YoSoy132Por Jaime Enríquez Félix

Vicente Fox no es su mejor producto. Tam-poco Josefina. Pero son los primeros egresados de licenciatura de escuelas privadas en México, que se atrevieron a aspirar a los altos cargos de la dirección política, y desde luego Peña, hijo de los señoriales del Opus Dei, del antiguo Institu-to Panamericano de Humanidades, hoy Univer-sidad, y nieto del IPADE.

Ante un festín político que poco les impor-taba, pero sintiéndose despreciados por la nega-tiva original del pirruris de Atlacomulco para asistir a su Universidad, y por la postergación infinita de Josefina a sostener un encuentro con su comunidad, aplaudieron a rabiar a Andrés Manuel López Obrador. Se les olvidó que era naco y que ellos eran señoritos y lo aclamaron

“¡Presidente!, ¡Presidente!”En su propio evento, Peña fue desprecia-

do, y su torpe equipo los calificó de porros y otros epítetos que nada les agradaron. Se des-encadenó el escándalo. Jóvenes crecidos en los medios y en el Internet, respondieron con la bravura de un Miura con el #YoSoy132, obli-gando a Televisa en su tiempo AAA (que vale 40 mil dólares por 20 segundos de spots) a atra-gantarse con la foto, la credencial y la marca. Nació así un movimiento anti PRI, replicado enseguida por otras universidades privadas, como un rechazo al sistema, a los medios y al stablishment, aunque ellos mismos sean par-te de él. Se generó una ola “sesenta y ochera” que inocula a las universidades públicas, que en

otras épocas eran las que infectaban el orden y el progreso porfirista de las escuelas privadas.

Hermoso movimiento natural, que nace en el preludio de la elección. Se agiganta: viejos se-sentones, viudas, jubilados, partidos políticos… todos quieren montarse en la bella épica de los jóvenes. Estos sobreviven con dificultad, buscan su esquema de autogobierno y de toma de deci-siones autónomas.

Hoy son un movimiento mundial. Le dan respiración boca a boca a la campaña de Andrés Manuel López Obrador, derrumban la de Enri-que Peña Nieto y Josefina se convierte a partir de entonces en mera figura testimonial. El parti-do del Presidente pasa a ser tercera fuerza nacio-nal y la izquierda en su obsoleta silla de ruedas, transita hacia la victoria en un país ansioso del cambio verdadero, y fatigado de un “más de lo mismo” que son el PRI y el PAN.

Hoy, la irrupción de la juventud es absoluta-mente necesaria. Las otras generaciones tenemos que darle paso a este nuevo aliento. No conta-minemos el sentir de los universitarios. No es-torbemos en la construcción del nuevo México que nosotros no pudimos edificar. Limpiemos los andamiajes que permitan el ascenso al po-der de una nueva generación que reemplace los añejos esquemas de la izquierda, del centro y de la derecha.

Este movimiento hermoso e irrepetible, de jóvenes cuya colegiatura era pagada por sus padres a razón de mil dólares mensuales, más gastos de estacionamiento, antros, ropa y diver-siones, se sublevaron contra el Canal de las Es-trellas. Sin embargo, la izquierda y la derecha de políticos en México quiso cooptarlos y lo logró. Uno de los dirigentes más protagónicos Antonio Attolini Murra, egresado del ITAM, fue com-prado en plena campaña electoral. Hoy mostró sus miserias al convertirse en vocero de cuarta, de la Cuarta Transformación. Es funcionario de Relaciones Internacionales del Instituto Mexica-no del Seguro Social, en pago por sus perma-nentes elogios a AMLO y al resto de su jauría. Recibe ahora más de 100 mil pesos -como si fuera presidente de la República- y ha dejado al movimiento #YoSoy123, como una etapa de la historia de México. No como un movimiento de masas, sino de un grupo de jóvenes inquietos que nacieron rechazando al candidato Peña Nie-to que se tuvo que esconder en los mingitorios de la Ibero por temor, no a una agresión verbal, sino física. Attolini quedará en el recuerdo de aquel grupo de muchachos como un traidor a un bello movimiento que sigue viviendo en la mente de los mexicanos.

@jaimenriquez

La “pirruricracia” asalta el escenario. Los metrosexuales, las chicas Ibero, los “nice” de Santa Fe bien alimentados y bien pertrechados tecnológicamente, desafían al poder

que los engendró. Y ante un auditorio de aromas Dolce&Ga-banna, Chanel, Boss, Mont Blanc, Juicy Couture y Lancome, irrumpen el escenario repleto, casa de los jesuitas que fueron expulsados de España, México y otras latitudes, por sus sub-versivas convicciones, siempre apegadas a la educación y, des-de luego, construyendo las conciencias de los hijos del poder.


Después de la matanza que hicieron los pájaros en el año 1952 y que magistralmen-te relató, con buena dosis de suspenso Alfred Hitchcok nueve años después, fueron pocos los ocupados de analizar para prever, la conducta de mapaches y ratas en una lucha biológica, no solo para ocupar territorios sino para evitar su extin-ción. Los mapaches son mamíferos carnívoros que tienen tres especies con algunas variables no solo físicas sino de sitios donde habitan. La es-pecie más común, cuyo nombre es simplemente mapache, se dice pariente de los gatos de cola anillada y un animal denominado cacomiztle –en náhuatl: tlaco-mixtli, ‘medio-felino’– cuya conducta básicamente nocturna y merodeado-ra es compartida por todos ellos. Diez millones de años, fueron necesarios para establecer las diferencias genéticas y hábitos conductuales de cada una de estas variables; sin embargo todos

ellos son creativos, capaces de alimentarse con basura, aun cuando no son carroñeros si el ham-bre lo impone –igual comen carne aun de otros animales atropellados, ranas, peces, cangrejos, insectos, huevos y roedores– en suma traviesos y sobre todo con una inteligencia poco común que les permite desarrollar destrezas, a fin de so-brevivir en distintos entornos aun los diversos a su origen.

A simple vista y como resultado de la crea-ción humana de animación recreativa, los poco ilustrados suelen imaginar que son simpáticos animalitos de peluche disfrazados de lindos bandidos, sobre todo por su permanente antifaz negro; pero en realidad de trata de animales te-mibles en extremo sobre todo cuando se sienten acorralados.

Aunque en los tiempos modernos se ha es-tablecido como su territorio natural el norte de

América, la Europa central y Japón, lo cierto es que por su capacidad de adaptación –pueden vi-vir en agujeros de árboles o cuevas, en vehículos abandonados, graneros y casas vacías etc.- los mapaches han llegado a territorios lejanos muy complicados y extremos donde los climas y las condiciones que les rodean no les sean favora-bles. La invasión de mapaches en Madrid, ha sido tal, que se autorizó desde 2003 en deter-minadas temporadas, la caza controlada de ta-les animales, no solo porque son portadores de rabia, leptospirosis o lombrices intestinales, sino por su conducta agresiva y traicionera, motivo por el cual no es recomendable considerarlos como mascotas.

Lucen guapos, por su exageración de lim-pieza –lavan sus alimentos en riachuelos o cube-tas– aun cuando estén lejanos de las leyes de la naturaleza entre muchas otras cosas porque no

Cuento post HitchcokPor Lilia Cisneros Luján

son criaturas sociables, duermen de día y aun-que no hibernan tienen alta posibilidad de so-brevivir en las épocas difíciles. Los roedores son algunos de sus alimentos favoritos, de ahí que acabar con ratas –perversas y corruptas o aun las que presumen de haberse arrepentido de sus costumbres criticables- es una de sus habilidades que les enorgullecen. El pleito entre mapaches y ratas, ha sido siempre un riesgo para los hu-manos que comparten el planeta con estos y muchos otras alimañas, peligrosas o no, de los cuales las personas procuran no ocuparse.

Por años, los mapaches parecen haber des-aparecido pero en realidad, se están reprodu-ciendo en sus guarderías –son los tres meses que se cuidan la hembras y a las crías hasta el año en que esa media docena, empiezan a sepa-rase de sus madres– luego de que aprendieron a usar sus cinco dedos de las manos delanteras y a correr decididos debido a sus patas trase-ras similares a las de los osos. Son perversos los motivos por los cuales algunos mapaches, con todo y su malicia se atreven a convivir con los humanos, a tal grado que pueden poner en ja-que a soldados, gobernantes y especialistas en diversas acciones que puedan ofrecer poder o dinero y sobre todo dominio sobre millones de ratas. Desaparecer del panorama y sobre todo demostrar que se han arrepentido de sus ma-las acciones es la única posibilidad que tienen algunos roedores de salvarse de los mapaches. Estos últimos recuerdan que debido a su des-cuido, en Madrid fueron ejecutados casi 500 ejemplares, solo en un parque a donde los arre-pentidos humanos que los adoptaron como mascotas, los abandonaron.

Convertirse en una especie invasora –ocurre con los peces y las aves– es quizá más grave que la posibilidad de extinción, pues se usan armas y balas para limitar su crecimiento, con el con-secuente riesgo de mirarse como un monstruo depredador. Luego de los cazados en un parque regional en Madrid, ¿los maches disminuyeron su población o simplemente aprendieron a mo-verse a otros territorios? ¿Permitir el crecimiento de la población de mapaches, es el mejor cami-no para terminar con las ratas sucias, que roban guardan el producto de su actividad ilegal en los sitios menos imaginable y asustan a las pobla-ciones de humanos? ¿Es factible en un sexenio acabar con las ratas que por siglos han sido escu-rridizas y hábiles para guardar sus porquerías en agujeros poco visibles y accesibles? El arrepenti-miento y su filiación a los clubes de buscadores de la paz, ¿les garantiza su supervivencia?

Nadie puede asegurar que los mapaches no se conviertan en enemigos más peligrosos que las ratas y no se sabe para el futuro si será necesa-rio armar grupos de búhos, linces y coyotes para controlarlos; lo cierto es que cuando se rompe el equilibrio natural aun sí la motivación sea “moral o ética”, los riesgos son tan espeluznan-tes, como las reacciones de un grupo de pájaros, vueltos locos por haber ingerido ácido domoico –presente en un alga que consumieron– como ocurrió en California cuando Hitchcock prepa-raba su famosa película.

Columna Una Colorada (vale más que cien descoloridas)


to poder” se engolosina con la misma presteza que el primero, que el segundo y que el tercero.

En un fascinante libro, “The Trust”, se reve-la que el venerado New York Times mantuvo en reserva la información del Proyecto Manhattan para desarrollar la bomba atómica a cambio de la “exclusiva” después de que el artefacto fuera empleado. También se da noticia de que los editores censuraron notas sobre los campos de concentración nazis pues estaban convencidos de que se trataba de propaganda.

En otro lugar he escrito que en los años de la guerra fría, respetados y respetables editores del primer mundo de la democracia llevaban sus artículos al escritorio del asesor presidencial Schlesinger quien a su vez compartía los más “duros” con el presidente Kennedy para “sua-vizarlos” antes de su publicación, complicidad que evoca la escena de “El Padrino” en donde el capo Hyman Roth exclama satisfecho: “Por fin... ¡un gobierno amigo con el que se pueden hacer negocios!”

En el curso de una investigación histórica di con el que puede ser el ejemplo señero en esta materia. La confirmación de que en los más al-bos castillos de la pureza puede haber una cloaca y muchos esqueletos en el ropero. Hablo de The Atlantic Monthly, la gran revista liberal funda-da en 1857 por Ralph Waldo Emerson, Henry Wadsworth Longfellow, James Russell Lowell y Oliver Wendell Holmes (¡acervo de pedigrí po-cas veces visto!) que a lo largo de su centenaria existencia ha publicado firmas que son las joyas de la corona de la inteligencia, la razón y el co-nocimiento.

En una antología de la revista se pueden en-contrar textos que iluminaron épocas, como la “Carta de la cárcel de Birmingham” de Martin Luther King, Jr., el ensayo “Ventanas rotas” de James Q. Wilson y George L. Kelling, el en-cuentro de la poesía y la política de Archibald MacLeish o el profético artículo “La raíz de la ira musulmana” de Bernard Lewis, además de letras de Kipling, de Mark Twain, de Tagore y de Frost, entre muchas luminarias.

En junio de 1938, tres meses después de que el gobierno del general Cárdenas expropiara la industria petrolera extranjera, esta casa de la vir-tud publicó un número extraordinario: “The At-lantic Presents – Trouble Below the Border – Why the Mexican Struggle is Important to You” (The Atlantic presenta – Problemas al sur de la frontera – Por qué la lucha de México es importante para usted) que de acuerdo a personajes de la época, entre ellos el embajador de Estados Unidos en México, Josephus Daniels, y don Jesús Silva Herzog, fue una de las más extremas muestras de la villanía de la prensa a cambio de treinta monedas.

De esto hablaré en la siguiente entrega.

Son pasadas las tres de la madrugada y estoy en la acera frente al Kiko’s de la avenida Juárez dentro de una bandada de alumnos de la prepa dos que en zigzagueos y a saltos desde el Zóca-lo busca cobijo para llegar al amanecer y a la corrida de los camiones “Bellas Artes – CU” que llevan a territorio libre y seguro. El miedo transpira en los rostros. Está Rubí, ojos verdes a medio abrir, y Sergio, el copete inmune a la agitación de la jornada. Hay una chica que se unió al grupo en Santo Domingo. Tiene las ma-nos manchadas de la pintura con que estuvo es-tampando consignas en las mantas para el mitin de Tlatelolco. No dice su nombre. No es muy alta. Tiene el pelo desordenado y me dirige una sonrisa torcida. Hay un debate sobre si avanzar por Bucareli hacia el mercado y ahí esperar, o caminar por Reforma al parque de La Madre.

De pronto una parvada de jóvenes aparece por Balderas y se desplaza velozmente en di-rección a la Alameda con un pelotón que agita fusiles y grita pisándole los talones. Otros sol-dados llegan desde la Avenida Juárez. Los dos contingentes arrinconan a los jóvenes contra los cristales de la librería Porrúa y las culatas de los mosquetones caen sobre cuerpos que se desmo-ronan sobre las baldosas. Gritamos, más para aliviar nuestro propio miedo que para detener

la golpiza. Varios fotógrafos de prensa se han aproximado y observan la escena impávidos, con las cámaras inertes colgando al cuello. Me acerco y les reclamo que no registren la alevosía, que son parte de la prensa vendida. Alguien me alerta que los militares ahora se dirigen a nuestro grupo. Me alejo a paso veloz y me detengo en la esquina, desde donde observo que el oficial al mando interroga a los fotógrafos. Uno de ellos, alto, tez blanca y pelo gris plateado, traje bien cortado y fuera de lugar en el escenario, me se-ñala y le dice algo al soldado, quien avanza en mi dirección. Corro como nunca en mi vida, como gamo aterrorizado por las balas del caza-dor, como zorro perseguido por mastines. No vuelvo la mirada. Llego a La Fragua, irrumpo en el Sanborn’s y choco de frente contra dos mese-ras muy jóvenes. Sin decir palabra me toman de los brazos y me arrastran por la cocina al patio de servicio y me arrojan en un enorme tambo de basura en donde permanezco hasta bien entrada la mañana.

Por la noche me presento en Novedades en donde soy redactor y traductor. Y ahí, frente a la entrada de departamento de fotografía, veo al delator. Me entero que es un fotógrafo free lance apodado “el Che” y que es un argentino insu-frible. Me reconoce. Se acerca y quiere explicar

que no tuvo opción. Le pregunto que a cuántos otros ha denunciado. Le doy la espalda. No lo vuelvo a ver en mi vida. Desde entonces pienso que era un espía de la dictadura videlista. Ojalá haya corrido la misma suerte que su compatrio-ta Alfredo Astiz, el torturador de monjas que se rindió sin disparar un tiro frente a los ingleses en Malvinas.

En 1968 viví como incipiente periodista el gran movimiento que sacudió al país aquel año en que vivimos en peligro. De las consignas de esas jornadas hubo una que sobresaltó mi en-tonces virgen inocencia profesional: “¡prensa vendida!”

No alcanzaba yo a comprender el significa-do profundo de aquel reproche lanzado una y otra vez por multitudes que rebosaban las ave-nidas defeñas. Las mantas, los puños en alto y la expresión colectiva de encono me sumían en un estado de confusión. Pero más temprano que tarde abrí los ojos a una dolorosa realidad de nuestra noble profesión: demasiados medios están al servicio del sistema y alejados de la so-ciedad a la que dicen servir.

Durante años me agobió la sospecha de que entre el diarismo sucio del mundo, el mexica-no ocupaba un lugar no menor. Con el tiempo comprobé que en todas partes el llamado “cuar-

Por Miguel Ángel Sánchez de Armas

Aquel dos de octubre

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Columna Juego de ojos

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