El Señorío de Galisteo.

Galisteo fue cabeza de un señorío que abarcaba las actuales localidades de Aceituna, Aldehuela del Jerte, Carcaboso, Galisteo, Guijo de Galisteo, Holguera, Montehermoso, Pozuelo de Zarzón, Riolobos y Valdeobispo.

Este Señorío fue fundado por don Alfonso X el Sabio, quien lo donó a su hijo don Fernando de la Cerda, pasando posteriormente a pertenecer a la Casa de Osorno y a la del duque del Arco.

El Señorío estaba pues formado por la Villa de Galisteo y las nueve aldeas citadas, aldeas dependientes de la villa y en las que en un principio vivían unas treinta familias aproximadamente.

Las personas de las clases más humildes que vivían en las aldeas, tenían que pagar al dueño del Señorío una serie de impuestos por ocupación de las tierras, tales como alcábalas, terrazgos y martiniega entre otros.

Entre los monumentos a destacar en esta villa podemos citar su muralla, su iglesia parroquial, su castillo y el puente sobre el río Jerte.

La muralla de origen árabe está construida con cantos rodados del río unidos con argamasa. Posee tres puertas de entradas bien conservadas denominadas del Rey, de la Villa y de Santa María.

Puerta del Rey.

Puerta de la Villa.

Puerta de Santa María.

La Virgen de la Asunción es la patrona de la Villa y a ella dedican los galisteños su iglesia parroquial. Una obra de estilo mudéjar que posteriormente fue ampliada, por lo que la fachada principal no pertenece a dicho estilo, al cual pertenece su ábside posterior, en el que podemos observar dos filas de arcadas ciegas.

El tercer monumento digno de mención en este pueblo extremeño es su “Picota”, nombre popular con el que se conoce a la torre del castillo que se divisa desde muy lejos.

Es el único resto que queda de lo que fuera palacio del duque de Montellano y del Arco. Se trata de una impresionante torre rectangular de sillería rematada con un chapitel en forma de pirámide octogonal.

Finalmente destacar en Galisteo su puente sobre el río Jerte. Fue mandado construir por don García Fernández Manrique hacia 1545. Está fabricado todo en piedra y consta de siete arcos. En el centro del puente se colocó un nicho con las armas y el busto del citado duque.

El Señorío de Galisteo quedó disuelto en 1837 por orden de la Diputación Provincial, asignándose a cada aldea la parte de terreno correspondiente, formándose así los actuales términos municipales.