Post on 24-Jul-2015
11 Apr 2014
Acercándonos a Dios
La Semana Santa comienza en
domingo Created By: Marta Martínez Aguirre
Author: Marta Martínez Aguirre
Te invito a que aprontes el mate y le hagas un espacio a Jesucristo, deja que esta
semana se haga más presente que nunca. Matea con tata Dios, porque la Semana
Santa comienza en domingo.
La Semana Santa está
llena de imágenes
contrapuestas. Se
puede ir del ruido y el
bullicio de la entrada
triunfal en la ciudad de
Jerusalén a la silenciosa
y grisácea derrota de la
piedra obstruyendo una
tumba prestada. Al
menos esto es así para
quienes todavía no
comprenden que el
triunfo de Jesús nada tiene que ver con las ideologías del mundo.
Acercándonos a Dios. La Semana Santa comienza en domingo.
Por eso, te traigo estas meditaciones para que te prepares y seas testigo
presencial del amor de Dios, y reflexiones sobre esta última semana de Jesús
en la tierra:
Domingo 13 de abril
Entrada de Jesús en
Jerusalén (Mt 21:1-11, 17; Mr 11:1-11;
Lc 19:29-44)
Deja que resuene en tu interior su
sueño y su misterio. Sé que tienes
muchas tareas por hacer, la casa está
toda revuelta y no puedes silenciar tus
ruidos internos, que te alejan de
disfrutar su presencia. Permite que Él
acalle tus temores, deja que el corazón
contacte con su Hijo, que hace su
entrada triunfal en Jerusalén.
Ahí estás, Jesús, montado en un burro, escuchando los gritos de alabanza que
días más tarde se transformarán en gritos de odios y resentimiento. Nadie te
coloca una corona de oro y perlas, pero habrá quienes, en unos días más, te
coronen con espinas.
Reflexiona. ¿Qué tipo de corona pongo en tu cabeza?, ¿permito que seas Rey
y Señor de mi vida, o acaso lleno de espinas tu frente, dejándote a un lado y
llamándote solo cuando las papas queman?
Aplicación. Quiero que me liberes de mi soberbia y abras brechas de luz en
mis días, para dejar que entres en mi vida; enséñame a necesitarte y a darte el
lugar de soberano en mis actos cotidianos.
Señor, te agradezco que me comuniques que la humildad es la clave para
entrar en tu Reino.
Lunes 14 de abril
Purificación del templo(Mt
21:12-16, 18, 19; Mr 11:12-19;
Lc 19:45-46)
La propuesta que hoy te trae
marca una nueva perspectiva,
da luz a tu entendimiento; por
eso, acércate serena y
confiadamente, que hoy Dios
va a enseñarte con la fuerza
de su Espíritu. Acoge el
silencio y déjate inundar de
paz.
Mira cómo Jesús purifica el templo para recordarte que la vida espiritual
comienza con la purificación de tu alma.
Reflexiona. Llegas al santo templo y te das cuenta de que los hombres lo han
convertido en un mercado. Examina tu interior, acepta con gusto la corrección
que viene de su parte. ¿Qué cosas debe Él dar vuelta y arrojar lejos para que
puedas dejarle entrar?
Aplicación. Padre, aunque me duela, purifica mi vida. Quiero ser piedra viva y
formar así un edificio espiritual donde te encuentre cada día. Sé radical, te dejo
limpiar todo lo que sea necesario: actitudes, miedos, pasiones desordenadas,
vicios, para que sea posible el inicio de una vida nueva.
Que pueda poner entre el ayer y lo que viene una muerte necesaria para
resucitar totalmente renovada.
Martes 15 de abril
Jesús enseña en el
templo y responde
preguntas (Mt 21:20-
25:46; Mr 11:20-13:37;
Lc 19:45-21:36)
Es un día especial,
Jesús va a hablarte, por
eso dedícale este
tiempo, para que el
encuentro sea un
momento de gratitud y
alegría.
Reflexiona. Lee su palabra y reconoce que te habla con autoridad. Se dirige a
tu corazón, ¿lo anhelas y eres consciente de que a veces le mandas callar o
miras hacia otro lado cuando te muestra el camino por donde debes andar?
Sus palabras hoy no solo te animan a orar, sino a creer que lo que pides ya
está ahí esperándote, porque debes pedir todo aquello que encaje en su
voluntad perfecta.
Aplicación. No eres mi supermercado, pero eres el Señor del universo y sé
que quiero que mis peticiones estén de acuerdo con tu voluntad. Voy a darme
la libertad de llegar al trono de la gracia para encontrar misericordia en el
tiempo de mi necesidad.
Padre, gracias por la oportunidad que me das de acercarme a ti en oración. No
quiero vivir desesperadamente, pidiéndote para mis propios proyectos, antes
quiero conocer tus propósitos para mi vida y con confianza y seguridad pediré
de acuerdo con ella.
Quiero que este martes sea santo porque tú estarás hablándome y yo estaré
con el corazón abierto.
Miércoles 16 de abril
Jesús descansa, es ungido
por María y la
confabulación para
matarle (Mt 26:1-5, 14-16; Mr
14:1, 2, 10-11; Lc 22:1-6)
Dispón todo tu ser para estar
a solas con Jesús, deja de
lado tus preocupaciones y
desde tu realidad colócate en
su presencia.
Reflexiona. Jesús cada día
te asombra, es el gran
maestro de los contrastes. ¿Te das cuenta de que a menudo eres como
Simón? Lo invitas a entrar a tu casa, pero la prisa y tantos otros quehaceres
hacen que te mantengas a distancia; tratas de ser amable con Él, pero no te
entregas, te apoltronas en tus seguridades.
Aplicación. Es tiempo de regalarme, de darte mi tiempo y mis mejores nardos,
por eso voy a quebrar el frasco de un solo golpe y dejar toda mi vida
derramada a tus pies. No es tiempo para retener la entrega, ni para demorar la
rendición de mi alma. Al venir a ti, Cristo, deseo ser quebrada en mi ser,
mostrarme frágil, vulnerable, necesitada para que me mires y pueda sentir tu
amor profundo. Tú eres tan radical y por eso me enamoras, no pides una parte
de mí, sino que me deseas toda.
Dejaré que estos días se llenen con tu presencia y así la semana será santa,
porque te haces presente en mi vida.
Vivir la Semana Santa es acompañarlo con nuestra oración, con nuestros
deseos de arrepentirnos de nuestros pecados, con hacernos humildes y
aprender que el servicio es parte de la grandeza. ¡Sé parte de estos
acontecimientos!
Jueves 17 de abril
La última cena,
Getsemaní, traición de
Judas y arresto de
Jesús (Mt 26:17-19; Mr
14:12-52; Lc 22:1-23:56)
Deja de lado la urgencia y
los preparativos en casa
porque vas con los
discípulos a preparar la
Pascua. Quieres que todo
esté listo, la mesa, los
alimentos, el ambiente, la
ropa, pero lo más importante es saber que estarás a su lado, cenando con Él.
Reflexiona. ¿Recuerdas a Judas? No quieres ser la que lo entregas, pero ¿lo
cambias por cosas que son efímeras, porque quieres ser aceptada en este
mundo consumista? Jesús te ha invitado a cenar, su amor es tan grande que te
mira con ternura y te llama amiga. Te dice que te ha elegido, y parte el pan, te
da un trozo y te da de su copa. Te invita a compartir su destino, a demostrar
con tus hechos que le crees hasta el final de los tiempos.
Aplicación. Con el gesto del pan y de la copa me invitas a partirme por amor a
los demás, como tú lo has hecho. Me llamas a darme a los que tienen hambre
y sed de amor, de justicia, de paz y de acogida. Me dices que tú convocas,
reúnes, ¿seré igual?, o por el contrario, ¿seré de las que dispersan con sus
comentarios negativos?, ¿mis palabras serán amables?
Jesús se acercó a los despreciados, a los rotos y pecadores; en sus comidas
incluyó a aquellos que en su tiempo eran rechazados y excluidos. ¿Hago
distinciones en mi familia?
Quiero que este jueves sea distinto, voy a acercarme a aquellos con los que
hace tiempo no tengo contacto; voy a hacerme pan y voy a darme.
Viernes 18 de abril
Juicio, crucifixión y
sepultura de Jesús (Mt
26:20-27:61; Mr 14:53-
15:47; Lc 22:54-23:55)
En esta mañana te invito a
detenerte para meditar
sobre el amor de Dios.
Imagina qué dolor debe
haber tenido al ver morir a
su único Hijo. La muerte de
Jesús es un regalo que el
Padre te hace.
Reflexiona. Te ha dicho, con ese dolor tan grande, que te ama. ¿Eres capaz
de cantar con Él un “himno de esperanza”? Porque aunque la cruz sea grande,
no está todo perdido en los momentos de dificultad. Cuando te oprime la
ansiedad y los miedos oscurecen tu cielo, ¿lo invitas a entrar en tu vida, pones
tu confianza en sus promesas?
Aplicación. No voy a poner mis ojos solamente en la imagen dolorosa del
sufrimiento de Jesús, sino que pondré atención a su alto precio redentor. Es
esa redención pagada en sangre la que me debe llenar de una viva esperanza.
En este día me invitas a recorrer un camino de fe y esperanza, porque ese es
el verdadero camino espiritual.
Hay momentos en los que parece que una roca inmensa se corre
sepultándome en medio de mis angustias más profundas, pero hoy me dices
que te haces presente, lo cual me revela que tienes todo bajo control.
Sábado 19 de abril
Jesús en la tumba (Mt
27:62-66; Lc 23:56)
Deja de lado el activismo
para quedarte a su lado,
contemplando en el
silencio la entrega de
Jesús. Es el día que Dios
eligió para hacer silencio
y acariciar tu alma.
Reflexión. Seguro que
sabes bien el sufrimiento
de la espera, velar duele, saber que esa vida que tanto amas ha partido y no
estará al menos por un tiempo a tu lado. ¿Eres capaz de esperar ese lapso con
fe?, ¿te unes al sufrimiento de amigos y vecinos, o eres de las que prefieren
evadir el dolor ajeno?, ¿mantienes la fe en la espera al ver pasar los años y
que el milagro no sucede?
Aplicación. En medio de la noche más silenciosa te espero y espero, junto a
miles de cristianos despiertos, que la vida triunfe y nos cuentes cómo es llegar
a la orilla de la libertad y la paz infinitas.
Tu gracia sublime es parte de este silencio donde la roca no vence, voy a
creerlo, sin duda alguna. No estás muerto, aunque el mundo diga lo contrario y
quieran decir que has sido derrotado, yo decido aferrarme al amor y a la
esperanza. Enséñame hoy, en medio de este silencio, a celebrar la vida y a
darme en obras a los que me rodean, para regalarles tu triunfo, que será
proclamado en horas.
Domingo 20 de abril
La resurrección (Mt 28:1-
16; Mr 16:1-20; Lc 24:1-
53)
El Padre eterno es un
Dios de sorpresas. La
resurrección de Jesús es
una invitación a participar
aferrados a la esperanza
y a la alegría, porque con
ella tus seres queridos
vivirán para siempre y
podrás volver a verlos.
Reflexión. Frente a tus alegrías cotidianas, que son efímeras y frágiles, ¿este
milagro te refuerza la fe y sabes que no has puesto tu esperanza en un muerto,
sino en un Dios vivo? Te preguntas en este gesto, ¿cuáles son tus sueños
sepultados?, ¿hay tal vez metas que dejaste de soñar?, ¿horizontes que no
quieres cruzar por miedo al fracaso? Quizás es tiempo de recorrer la roca de
los temores y fijarte nuevas metas, y empezar a creer que todo es posible.
Aplicación. Me dices que tenga esperanza en los imposibles, por eso voy a
luchar por mi familia y por todo aquello que parezca marchito. Voy a quitarle el
polvo a las fotocopias de ese examen que demoro en dar, voy a decidirme por
esa tarea que me ofrecieron y tuve miedo. Es otoño y, sin embargo, me dices
que llene mi vida de brotes nuevos.
Saben, amiga lectora y amigo lector, celebrar esta semana es celebrar que
fuimos creados para vivir y sentir con gozo el amor más grande del mundo, y
que la resurrección no es una tímida promesa de Dios para seducirnos.
¡Verdaderamente Cristo ha resucitado!
Marta Martínez es licenciada en Psicología, posee un posgrado como
Loogoterapeuta. Es fundadora de Psico Hábitat, una red de psicólogos que
asisten a domicilio. Contacto:lic.martamartinez@hotmail.com