Post on 21-Jul-2015
EL LIDER COMO GENERADOR DE LA FELICIDAD EN
EL TRABAJO
Hace unos meses escribí el primer artículo sobre la
felicidad en el trabajo, y dijimos que la felicidad en
el trabajo es una responsabilidad y decisión personal
y eso suele considerarse como un dogma o paradigma en
el desarrollo personal, pues nuestra obligación desde
que nacemos es ser felices y no hay otra alternativa.
En otro artículo mencionamos que la felicidad en el
trabajo es una actitud, es decir una predisposición o
tendencia a ser felices.
Sin embargo, cuando se trata de un ambiente de
trabajo, la responsabilidad de la felicidad, también
se comparte con el líder, gerente, jefe o supervisor
de un grupo de trabajo. Cuando una persona ejerce la
dirección de un equipo de trabajo, requiere tres
aspectos fundamentales: Conocimiento, habilidades y
actitud. Bien es sabido que la actitud es lo más
importante, y en el caso del líder se ha comprobado
que necesita influencia, persuasión, capacidad de
comunicación, alta capacidad de relaciones
interpersonales, y es ésta última habilidad la lo que
lo hará tener éxito en la conducción de su grupo de
trabajo, bien sea éste grupo compuesto por voluntarios
o por subalternos que integran su equipo de trabajo.
John Maxwell en su libro EL
PODER DE LAS
RELACIONES, afirma que un
líder exitoso tiene en cuenta
5 cosas importantes:
1. Las relaciones aumentan tu
influencia en cualquier situación. 2. Las relaciones giran en torno a los demás.
3. Las relaciones van más allá de las palabras. 4. Las relaciones requieren energía siempre.
5. Las relaciones son una destreza más que un talento
natural.
Entonces, ¿dónde reside la clave de las relaciones
para tener éxito en el trabajo, y hacer felices a las
personas que dirigimos?. La clave es relacionarse con
la gente que trabaja con nosotros y conocer de cada
una de ellas tres aspectos fundamentales, a lo que le
llamo la fórmula DNI, que sencillamente es:
Deseos Necesidades
Intereses
Todas las personas estamos llenos de deseos,
aspiraciones, anhelos. Todas las personas tenemos
necesidades, que pueden ser financieras, sentimentales
o de cualquier otra índole. Todas las personas también
tenemos intereses, en lo artístico, en lo social, en
algún deporte, en una afición o en un hobby.
Si yo quiero hacer feliz a alguien, debo saber cuáles
son sus deseos, anhelos, aspiraciones o como
queramos llamarle. Si como líder puedo facilitar,
contribuir a que mi colaborador cumpla sus deseos en
esa medida voy contribuir a su felicidad en el
trabajo.
Hace algunos años una
empresa mexicana muy
reconocida hizo un
estudio acerca de las
causas del porqué se
retiraban los
colaboradores de la
empresa, y dentro de las
conclusiones del estudio
se determinó que el 40%
de las bajas era por
causa de la mala
relación entre jefes y
colaboradores. Es decir
que una buena parte de nuestro trabajo como líderes
impacta en el ambiente de trabajo y por su puesto en
la continuidad del personal dentro de la
organización. Ese mismo estudió reflejó que
manteniendo esa tendencia, el costo de esa rotación,
en un plazo de 5 años, era equivalente al costo de
inversión para montar una nueva planta de producción.
Así que podemos concluir que el líder que genera
felicidad en el trabajo también contribuye a la
rentabilidad de la organización y por consiguiente a
incrementar el capital intelectual.
Espero sus comentarios.
Hasta la próxima entrada.
Vicente Ibarra. Ingeniero Industrial, M.Sc.
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