Antonio bolivar-botia

Post on 21-Jul-2015

80 views 0 download

Transcript of Antonio bolivar-botia

Mesa redonda

Autonomía de los centros

Antonio Bolívar

Universidad de Granada

El objetivo prioritario de toda política educativa

� Un objetivo prioritario: Asegurar a todo el alumnado una buena educación, de modo inclusivo y equitativo.

� En Europa (“Estrategia de Lisboa”): asegurar los aprendizajes imprescindibles o su derecho a la educación

� En la sociedad de la información, una condición necesaria para la inclusión social: Una educación de calidad para todos.

� A su servicio: el currículum, la autonomía y organización de los establecimientos y el liderazgo escolar

� ¿Cómo dinamizar las escuelas para conseguir buenos aprendizajes para todos?

Autonomía y éxito educativo

� Autonomía: vía prometedora para que todos los alumnos puedan conseguir un éxito educativo, a condición de que forme parte de un cuadro más amplio de medidas coherentes.

� Una regulación burocrática, homogénea y vertical, ha dejado de dar respuesta en sociedades complejas (p.e. persistente fracaso). Se imponen salidas postburocráticas: autonomía y control de resultados.

� Tendencia internacional en las políticas educativas: nuevos modos de regulación y de responsabilización de los centros escolares.

� De una regulación por las normas a una regulación por los resultados

Cambios en modos de regulación

Burocrática Postburocrática

Normas Alta regulación Escasa. Autonomía

Resultados No importan Control y responsabilización

de resultados

Evaluación Grado cumplimiento

normativa

Grado consecución de

resultados

Administración

educativa

Supervisar y asegurar

cumplimiento formal

Controlar resultados y tomar

medidas para equidad

Modelo “Igualdad formal”

(moderna) o

neocentralismo

“Nueva gestión pública” (new

public management)

Tendencia

actual

Modelo agotado, en

descrédito

Tendencia creciente

La mejora escolar:éxito educativo

Presión externaControl Dar cuenta resultados

Compromiso eImplicaciónAutoevaluaciónAutonomía

Políticas de mejora

Nuevos modos post-burocráticos de regulación

� De una regulación por las normas a una regulación por los resultados

� Autonomía, capacidad de los equipos directivos, conjugar responsabilidad por los resultados con procesos internos de autoevaluación y mejora

Lógica burocrática de control

Lógica profesional del compromiso

Reestructurar el modelo organizativo y de gestión

� Las sucesivas reformas en las dos últimas décadas no han incidido, primariamente, en el modelo de gestión. Una de las razones del fracaso del currículum

� Una organización para el éxito educativo de todos los alumnos tiene que ser más flexible

� LOE (preámbulo): “La flexibilidad del sistema educativo lleva aparejada necesariamente la concesión de un espacio propio de autonomía a los centros docentes”.

� LEC (Ley de Educación de Cataluña): La autonomía de los centros educativos, “implica la aceptación de la diversidad de centros y el rechazo de la uniformidad como valor del sistema educativo”.

� Frente a la igualdad (“égalité républicaine”) como uniformidad, alejarse de valores modernos por un nuevo modo de regulación (contrato-programa).

¿Qué cambios fuerzan en esta dirección?

� Mayores márgenes de autonomía y, paralelamente, una mayor responsabilidad por los resultados escolares.

� Los equipos directivos pueden marcar una diferencia crítica en la calidad de las escuelas y en la educación de los alumnos

� La mejora escolar es, cada día, más dependiente de cada centro escolar

Autonomía de los centros al servicio del éxito educativo

� Más que declaraciones generales, articular condiciones, modos y procesos de llevarla a cabo.

� La autonomía ha de ser diferencial, posibilitando diversos niveles de ejercicio.

� La autonomía como posibilidad de que los centros educativos, en función de determinados objetivos, en una especie de contrato-programa, establezcan y consensuen la autonomía que precisan, para lograr incrementar el éxito educativo de su alumnado.

� Capacidad para establecer su propia estructura organizativa y gestión del personal

� Se subordina a un rendimiento de cuentas: favorecer el éxito escolar del alumnado y disminuir el abandono

La autonomía escolar al servicio del éxito educativo

� Los centros deben garantizar a todo el alumnado, como

ciudadanos, las competencias básicas. La dirección escolar está

para hacerlo posible, tomando las medidas oportunas.

� Punto conflictivo, pero en las experiencias y literatura

internacional, aparece cada vez más claro: si los profesores son

clave de la mejora, los directores pueden ejercer un papel clave en

la mejora de los aprendizajes.

Autonomía y dirección� La autonomía debe ser articulada en los centros y gestionada por

los equipos directivos. La autonomía de los centros educativos debe ir unida a un modelo de dirección eficaz, moderno, basado en proyectos de mejora

� Esto obliga a replantear la dirección escolar, tal como la tenemos establecida, para que los equipos directivos puedan garantizar buenos aprendizajes de todos los estudiantes.

� Qué tareas, atribuciones y responsabilidades deban tener los directores y directoras de centros educativos y, de acuerdo con ellas, promover los cambios oportunos en la estructura organizativa de los centros educativos.

� No al margen de cómo se sitúa el tema a nivel internacional. Se impone una convergencia con la evidencia internacional: el liderazgo de la dirección es un factor crítico en el mejora de los aprendizajes

Articular la escuela por el liderazgo

� Transferir las competencias y autonomía a la propia escuela, cuando está desarticulada como organización, lleva poco lejos y no es solución.

� Se precisa unos modos de articulación horizontal: liderazgo educativo y configurar la escuela como proyecto conjunto

� Liderazgo educativo y el centro escolar, como trabajo colectivo, en torno a un Proyecto van unidos.

� El liderazgo es una cualidad de la organización, y no cabe un ejercicio de liderazgo pedagógico si no se reestructura la organización para que sea posible un trabajo colegiado.

“Los líderes escolares sólo pueden influir en los resultados de los estudiantes si cuentan con autonomía suficiente para tomar decisiones importantes acerca del currículum y la selección y formación de maestros; además, sus principales áreas de responsabilidad deberán concentrarse en mejorar el aprendizaje de los alumnos. Los países optan cada vez más por la toma de decisiones descentralizada y por equilibrar ésta con una mayor centralización de los regímenes de rendición de cuentas, como las pruebas estandarizadas”

Pero, paralelamente, otros factores

� No basta reiterar la relevancia del liderazgo si,

paralelamente, no se reestructuran dimensiones

necesarias para que tenga lugar.

� El liderazgo pedagógico cuestiona la cultura de los

establecimientos como organizaciones, las condiciones

de trabajo del profesorado, la relación de los

establecimientos con la administración educativa y con

la comunidad.

� Cambiar el liderazgo y las prácticas docentes requiere

cambios en la estructura organizativa de la escuela.

La autonomía no está exenta de problemas (internos y externos)

Y sin embargo,…

Carácter problemático o poliédrico

� La autonomía puede ser decretada, pero es distinto de ser “construida” . Las declaraciones formales de autonomía no la crean, se precisa crear condiciones y capacitar agentes y centros.

Ley General de Educación (1970)

� Art. 56: [...] “los centros docentes gozarán de la autonomía necesaria para establecer materias y actividades optativas, adaptar los programas a las características y necesidades del medio en que están emplazados, ensayar y adoptar nuevos métodos de enseñanza y establecer sistemas peculiares de gobierno y administración”.

Carácter problemático o poliédrico

� España: La supervivencia de una tradición normativista, presente tanto en gobiernos progresistas como conservadores, impide desarrollar proyectos propios y encorseta las prácticas docentes hasta límites desprofesionalizadores

� La autonomía es algo que se aprende. Supone un grado de desarrollo. No puede aplicarse del mismo modo a todos los centros. Necesidad de niveles a través, por ejemplo, de contratos-programa de autonomía.

� De ahí que decretarla para “todos”, más que una solución es un problema: mejor para los que ya están mejor situados para hacer ofertas atractivas a los “clientes”

Carácter problemático: Tensiones y dilemas

� En nuestra actual coyuntura social, la legítima aspiración al

autogobierno de los centros escolares, mezclada con la tendencia

neoconservadora a introducir mecanismos de desregulación y

competencia entre los centros escolares, puede dar lugar a

diferenciar institucionalmente la oferta pública de

educación

� La declaración de autonomía sin recursos suficientes se

transforma en un abandono en la práctica

� - Esto hace que se convierta en un tema esencialmente

problemático, sujeto a tensiones y dilemas:

� [1] Conservadora: Incrementar las diferencias de oferta al servicio

de los clientes

� [2] Progresista: mejorar la educación pública

� -

Posibilidades para la construcción de una autonomía: Escenarios y caminos

� La verdadera cuestión es:

� [a] ¿Es posible organizar la educación con otra lógica no-burocrática, que posibilite capacitar a los centros educativos para su propio aprendizaje y desarrollo institucional?

� [b] ¿Qué se puede hacer, aquí y ahora, para dinamizar un

sistema educativo, una vez que las lógicas de control

burocrático y uniformadoras se han mostrado insuficientes?

� Autonomía, capacidad equipos directivos y responsabilidad

por los resultados conseguidos

Asegurar el

éxito

educativo

Liderazgo pedagógico

equipos directivos

Autonomía de los centros

Responsabilidad por los resultados

(evaluación)

Contexto político

Contexto social

Una nueva “política” en educación

� “Para tener escuelas que aseguren, a todos los estudiantes en todos los lugares, el genuino derecho a aprender, no se requiere menos política sino más y mejor política.

� Esto supone cambiar los afanes de los políticos y administradores, obsesionados en diseñar controles, por otros que se centren en desarrollar las capacidades de las escuelas y de los profesores para que sean responsables del aprendizaje y tomen en cuenta las necesidades de los estudiantes y las preocupaciones de la comunidad” (Darling-Hammond, 2001: 42).