2.- Clash.- El Lado Peligroso de Jude Ryder

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    StaffModeradora:Mery St. ClairTraductoras:

    MonikgvDemoiselle

    KassAmy

    MacasolciJo

    LuisaNats

    Perpi27JulesG92

    VaneLucia A.

    Elle87Juli_Arg

    Amnl3012Chachi--

    Mery

    Correctora:MaryJaneNatsItxi

    LadypandoraVerito

    Suelick*Zafiro

    VericityAnnabelle

    Violet~Juli_Arg

    Deeydra AnnMelii

    Revisin & Lectura Final:Juli_Arg

    Diseo:Hanna Marl

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    ndiceSinopsisCaptulo 1Captulo 2

    Captulo 3

    Captulo 4Captulo 5

    Captulo 6

    Captulo 7

    Captulo 8

    Captulo 9

    Captulo 10

    Captulo 11

    Captulo 12

    Captulo 13

    Captulo 14

    Captulo 15

    Captulo 16

    Captulo 17

    Captulo 18

    Eplogo

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    Sinopsisa nica cosa fcil en la relacin de Jude y Luce es su amor entre ellos.Todo lo dems es difcil.Especialmente cuando se trata de refrenar el temperamento de Jude

    y los celos cada vez ms fuertes de Luce por la animadora que sigue a Jude entodas las maneras que una chica puede. Sintiendo el estrs por salir con un chico

    malo por excelencia mientras se convierte en la bailarina principal de su clase,Luce sabe que algo tiene que terminar. Quiere a ambos. Necesita a los dos. Perosi no toma una decisin, corre el riesgo de perderlo todo.

    Para Lucy Larson y Jude Ryder, amar puede no ser suficiente.

    Crash, #2

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    1 Traducido por MonikgvCorregido por MaryJaneo me concentr en el hecho de que cerca de mil pares de ojosestaban puestos en m. Progresando en el difcil final, bail slo paraun grupo. Las luces que me cegaban de la multitud, la presin de

    hacer una presentacin que me impulsar hacia delante, y la falla en el vestuarioque estaba a un hilo de romperse, empuj todo de lado y bail para l.

    Los ltimos compases de la msica llegaron a su fin cuando yo haca migran alegro final en el aire. Mis puntillas aterrizaron al mismo tiempo que el ltimoacorde flua a travs de la habitacin.

    Este era. El momento que yo amaba. El respiro y la mitad de quietud ysilencio antes de moverme en una reverencia y que la multitud aplaudiera. Unaventana de dos segundos para reflejar y deleitarme en la sangre, sudor, ylgrimas que haba derramado para llegar a este punto. El punto en el que, si yofuera un espectador en el juego de la vida de Lucy Larson, podra asentir y pensartrabajo bien hecho.

    Era un momento que quera que durara para siempre, pero lo acept por loque era. Un vistazo a la perfeccin antes de que fuera descartado.

    Aspirando aire, levant mis brazos y, movindome en una posicin dereverencia, levant mis ojos. Justo donde Madame Fontaine me haba entrenadopara dirigirme al final de una presentacin. Al frente y al centro. Y luego, contratodo lo que ella me haba advertido nunca hacer, una sonrisa jug en lascomisuras de mi boca.

    Era imposible no hacerlo cuando mi frente y centro era Jude Ryder.l se levant de prisa de su asiento, aplaudiendo como si estuviera tratando

    de llenar toda la habitacin con ello, sonrindome de una manera que me hacaun nudo en el estmago. Aquellos que lo rodeaban ya miraban con curiosidad,as que cuando Jude salt sobre su asiento y comenz a gritar Bravo a todovolumen, esas miradas de curiosidad se afilaron en algo no tan bueno.

    No es que me importe. Haba aprendido hace un tiempo que estar conJude significaba ir contra la corriente de la sociedad. Luchbamosconstantemente contra la corriente y casi cada norma social y el principiogeneralmente aceptado que hay. Vala la pena.

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    Haciendo una reverencia ms, encontr su mirada una vez ms e hice loimpensable. Gracias que la creadora Madame Fontaine no haba venido aquesta noche porque su moo perpetuamente apretado podra haberse rotocuando yo emparej mi sonrisa con un guio. Dirigido directo al hombre que seelevaba sobre la multitud, animndome como si yo hubiera salvado al mundo desu extincin.

    Las luces se apagaron y, antes de que me apresurara a salir del escenario,escuch una ronda ms de Jude gritando y silbando. l rompi toda regla tcitade cmo uno deba mostrar su apreciacin por las artes. Y yo lo amaba.

    As como nuestra relacin, todo lo hacamos fuera del estndar.

    Crees que podras tratar, slo por una vez, de no dar una presentacinperfecta? Sabes, para que el resto de nosotros no luzcamos como principiantes

    me susurr Thomas, un amigo estudiante y bailarn, mientras yo me mova detrsde las cortinas.

    Podra le susurr por detrs mientras el ltimo bailarn tomaba elescenario. Pero, dnde est la diversin en eso?

    Sonriendo, me tir una botella de agua. Tomndola con una mano, losalud con la otra agradecindole y me dirig hacia los bastidores para estirarmey cambiarme. Tena un descanso de diez minutos antes de la presentacin que seacerca al final, y saba por experiencia que Jude estara viniendo a toda prisa alos bastidores para encontrarme si yo no lo encontraba primero. l no eraexactamente un hombre paciente, especialmente despus de un recital de

    baile. Lo que me provocaba a m el verlo jugar ftbol, mi baile se lo provocaba al.

    Deslizndome hacia el vestidor, agarr mi pie, estirando mis cudricepsmientras suba hacia mi esquina de la habitacin, desatando mi zapatilla. El nudocolorido de la banda elstica enrollado alrededor de mi cuello, sosteniendo micors en su lugar as mi presentacin no se convertira en un show pornogrfico, serompi al momento en que estir mi cuello hacia un lado. La falla en el vestuariono pudo escoger un mejor momento para fallar.

    Estirando la otra pierna hacia atrs, mis dedos trabajaron por desatar mi

    otra zapatilla. Tirando ambas en mi bolso, saqu mis vaqueros, suter, y botas demontar. Era viernes por la noche y, ya que Jude tiene un juego maana, esosignificaba que tenamos toda la noche para nosotros. l tena algo planeado yme haba dicho que me vistiera con algo caliente. Yo preferira estar vestida paraclima caliente, pero realmente, cuando se trataba de estar con Jude, no meimportaba lo que vesta. De hecho, preferira no usar nada, pero por el ltimopatrn de virtud de santidad, Jude Ryder, no tena nada de eso hasta quearreglara su mierda.

    Nunca haba querido que se arreglara su mierda ms rpido.

    Realmente necesitaba estirar un poco ms, pero tena dos minutos mximo

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    antes de que Jude viniera corriendo a travs de la puerta del vestidor.Retorciendo mis brazos detrs de m, trabaj en el cors de mi traje. Dndeestaba Eve cuando la necesitaba? Esa chica poda amarrar y desamarrar uncors ms rpido de lo que un mujeriego poda bajarse la cremallera en la partede atrs de su coche deportivo.

    Estaba medio contemplando buscar un par de tijeras para escapar delaparato de satn cuando un par de manos clidas se apoyaron sobre mishombros.

    Puedo ser de ayuda? dijo Thomas, sonrindome mientras lo mirabasobre mi hombro.

    Si tu ayuda viene con velocidad y precisin, entonces s, por favor lecontest.

    Su sonrisa se llen de maldad. Cuando se trata de quitarle la ropa a lasmujeres, la velocidad y la precisin son de suma importancia.

    Lo code mientras se rea. En cualquier momento hoy, Sr. DedosCalientes.

    S, seora dijo, haciendo crujir los dedos dramticamente antes demoverse hacia la parte posterior de mi vestido.

    Thomas tena razn, l haba dominado la parte de la velocidad y laprecisin del desvestir a las mujeres. Sin embargo, no haba nada ni remotamententimo sobre un bailarn ayudando a otro bailarn a vestirse o desvestirse, hombre o

    no. Al bailar por demasiado tiempo, te acostumbras a casi todos los bailarines enun radio de tres estados mirndote a un lado desnudo. No haba lugar para seruna mojigata en el mundo de la danza.

    Ya casimurmur Thomas mientras sus dedos trabajaban hacia la parteinferior del remache de mi cors.

    Yo estaba a punto de volverme con algo inteligente de mi variedadingeniosa cuando la puerta del vestuario se abri. No tuve ni un segundo calientepara explicar antes de que el rostro de Jude palideciera de entusiasmo aasesinato.

    Qu diablos?grit, su rostro de un rojo llameante.Judecomenc, dndome la vuelta y levantando mis manos.

    Eres hombre muertoespet, lanzndose a travs de la habitacin hacianosotros.

    Movindome rpidamente delante de l, puse ambas manos en su pechoduro como una pared de ladrillos. Me iban a doler un poco por la maniobra.

    Jude! Esta vez grit. Detente! orden, interponindome delantede l de nuevo cuando se abalanz hacia Thomas, quien se retiraba hacia un

    rincn de la habitacin.

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    Claro, voy a parar respondi Jude, sus ojos grises destellando comonix1. Una vez que este cretino est bailando en el escenario en una silla deruedas.

    No haba visto su monstruo rabioso en meses y verlo de nuevo en toda sugrandeza me dej sin palabras. Este era el tipo de ira de la que la gente contabahistorias alrededor de una fogata.

    Girando de nuevo alrededor de m, Jude se lanz hacia Thomas, quienmiraba con los ojos muy abiertos, medio confundido, medio aterrado, por elhombre furioso tratando de destruirlo. Mi fuerza no igualaba la de l, ni siquiera ladcima parte para ser su rival, pero yo tena otros poderes que podan rendirlo enesclavitud. Corriendo a toda velocidad frente a l, salt, envolviendo mis brazos ypiernas alrededor de l tan fuerte como pude.

    Se detuvo inmediatamente, lo asesino oscurecindose en sus ojos. Slo unpoco.

    Judedije con calma, esperando a que sus ojos volvieran a los mos. Lohicieron. Detenterepet.

    Hice un gesto hacia Thomas.Me estaba ayudando a salir de mi traje. Yole ped que lo hiciera. l accedi. Quera apresurarme a cambiarme para aspoder estar contigoenfatic, y a menos de que quisieras esperar un ao ymedio por m, deberas estar agradecindole a Thomas.

    Mirando entre Thomas y yo, las lneas de su rostro se atenuaron. Sin

    embargo, su mirada cay sobre m. Por qu no me pediste que te ayudara,Luce?pregunt, con la mandbula apretada.

    Porque no estabas aqu le dije, sintiendo como si estuviera diciendo loobvio, pero si lo obvio era lo que se necesitaba para bajarlo de la cornisa, eso eslo que yo hara.

    Estoy aqu ahora.

    Puse mis manos sobre sus mejillas. S, lo ests dije, esperando mientrassus ojos cambiaron a un tono ms claro. Su pecho comenzaba a levantarse ycaer en un patrn regular de nuevo. Gracias por la ayuda, Thomasenfatic,

    mirando hacia atrs donde l se encontraba, todava mirando a Jude como siestuviera a punto de ir todo nuclear sobre l de nuevo. Nos vemos luego?

    Thomas pas a un lado alrededor de nosotros, sin quitar sus ojos de Jude.Claro, Lucydijo, dndome una sonrisa inclinada. Nos vemos ms tarde.

    Le sonre con agradecimiento.Buenas noches.

    Adis, Peter Panle dijo Jude. Nos vemos ms tarde, tambin.

    Thomas ya estaba fuera del vestidor, pero no haba duda de que habaescuchado el ltimo ataque de amenazas e insultos de Jude.

    1El nix u nice es un mineral de la clase 4 (xidos), es considerado como piedra semipreciosa.

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    Suspirando, llev mis dos pulgares bajo su rostro. Jude Ryder. Qu voy ahacer contigo?pregunt.

    Esa fue, tal vez, la pregunta ms desconcertante que jams haba hecho.

    Nada era fcil sobre nuestra relacin. Bueno, nada menos enamorarnos uno delotro. Todo lo dems era como tratar de nadar contra la corriente. Uno nuncapareca estar haciendo muchos progresos, pero el viaje compensaba la falta deuna alta clase social.

    Tomndome por las caderas, Jude me coloc de vuelta en el suelo.Dndome vuelta, sus dedos soltaron la cinta de satn de los ltimos remaches. Susmanos apenas rozando mi piel, pero slo apenas disparando rfagas de calor

    profundo en mi estmago.

    Qu voy a hacer yo contigo, Luce? solt detrs de m, su voz

    cuidadosamente controlada.Las piezas del hombre que amaba se ajustaban de nuevo. El monstruo

    rabioso se retiraba hacia su jaula.Ya que me tienes casi sin la parte de arriba, tedejar llenar los espacios en blanco a esa pregunta impliqu, arqueando unaceja mientras me volva para mirarlo.

    Sus ojos no se hallaban lquidos como usualmente cuando estbamoscompartiendo o a punto de compartir un momento ntimo. Las comisuras de suboca no se curvaban en anticipacin. Jude era firme en su control mirndomecomo si me hubiera comportado como una nia.

    No hagas eso de nuevo, Luce dijo, doblando la cinta en sus manosantes de meterla en su bolsillo.

    Qu? dije encogindome de hombros, fingiendo ignorancia. Estabacomenzando a sentirme un poco agresiva. No me gustaba ser tratada as, sobretodo por Jude.

    Ya sabes qu.

    Poda sentir un ceo fruncido colocarse en mi rostro. Ya que obviamentete he decepcionado, no me gustara hacerlo de nuevo, as que, por qu no slome lo dices?

    Me maldije. La nica cosa que resultara de una pelea entre fuego confuego seran unas desagradables quemaduras de primer grado. Jude y yo nonecesitbamos que nuestra relacin se complicara ms, entonces por quaporreaba una puerta complicada?

    Aspirando lentamente, fui testigo del esfuerzo que le tomaba quedarsetranquilo. l haca el esfuerzo de mantener esto de estallar en un combate degritosPor qu no yo?

    No dejes que otro hombre, hada, usando medias o no, te ayude aquitarte la ropa de nuevo dijo, sus ojos entrecerrndose slo lo suficiente para

    saber que algunas ardientes emociones se disparaban a travs de l justo

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    ahora. Si necesitas ayuda para quitarte incluso un calcetn, llmame,entiendes? Ese es mi trabajo.

    Sper. El posesivo, polica controlador estaba de vuelta en la ciudad.

    Pareca que en los ltimos tiempos, quera tomar residencia permanente. Lopoda negar todo lo que quera, pero ser controlador implicaba que no confiabaen m, y llmenme tonta, pero la confianza no era fundamental en una relacin,era esencial.

    Lo entiendes, Luce?dijo cundo me qued en silencio.

    Dios, lo amaba. Demasiado para mi propio bien, pero no me daranrdenes. No, Jude. No lo entiendo le dije, a un paso de echar humo por lanariz. As que por qu no vas a esperar afuera y dejar que asimile eso mientrastermino de desvestirme? Sola aad antes de que pudiera abrir su boca para

    protestar. Porque si lo haca, yo no sera capaz de decir que no.Hizo una pausa, mirndome con indecisin escrita en su rostro. Finalmente,

    asinti.Est biendijo. Voy a estar afuera.

    Es porque as puedes asustar a cualquier otro chico que puedaayudarme con mi traje, o slo porque vas a esperar con paciencia y respeto portu novia?dije, dndome la vuelta y caminando hacia mi bolso.

    El suspiro de Jude fue tan largo como lo era su tortura. Ambas dijoapenas en un susurro antes de cerrar la puerta detrs de l.

    Tan pronto como se fue, lo sent. Culpa. Remordimiento. Seguido por una

    potente dosis de arrepentimiento.Yo saba en lo que me meta cuando Jude y yo volvimos a estar juntos al

    comienzo del ao. Lo hice voluntariamente con ojos abiertos; lo haba hechogustosamente.

    Jude haba pasado por ms mierda que cualquier persona deba y juntocon eso vinieron ciertas caractersticas que podan ser calificadas como menosque saladas.

    Pero t tomaste lo malo con lo bueno. Y cuando se trataba de Jude RyderJamieson, haba un supervit de buenas cosas que siempre consegua no

    necesariamente limpiar lo malo, pero hacer un trato justo. Si sealaba a quinestaba daado, tambin poda girar el dedo alrededor, porque yo no era unainocente, flor sin defectos.

    Esa era parte de la belleza de estar juntos. Tambin era parte del problema.

    Yo tena casi tantos factores desencadenantes que marcaban mitemperamento y casi tantos fantasmas de mi pasado como los tena Jude.Cuando su ira arda, la ma responda del mismo modo, y viceversa. El caso de losltimos dos minutos por ejemplo.

    Luego, como siempre, la ira que haba sentido hacia Jude se mova hacia

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    m. Si me hubiera tomado el tiempo para ponerme en las Converse nmero docede Jude, qu habra dicho o hecho si hubiera visto a alguna chica ayudndolo aquitarse su ropa.

    Metindome en mi suter, me di cuenta de que mi reaccin no hubierasido tan diferente de la suya. De hecho, mis garras podran haber dado un golpemedio antes de que l pudiera abrir su boca para explicar. El viejo Jude, el queera pre-Lucy, habra pateado traseros primero y hecho preguntas despus. Elnuevo Jude, aunque an no era un graduado del manejo de la ira, habamanejado dejar que las palabras difundieran la situacin. No sus puos.

    Progreso. Progreso importante que l haba hecho por m. Y, cmo se lohaba recompensado?

    Gritndole y sacndolo del vestuario.

    Ponindome el resto de mi ropa como si estuviera declarndole la guerra aella, guard mi traje en mi bolso al mismo tiempo que tir de l por encima de mihombro. No me molest en soltar mi pelo fuera de este moo productor de dolorde cabeza. No me molest en lavar las tres capas de profundo maquillajecargado que cubra mi rostro.

    Tena que ir donde l. No poda hacerlo ms rpido.

    Lanzndome hacia el otro lado de la habitacin, abr la puerta.

    Inclinndose contra la pared de enfrente, Jude estaba atormentado entodas las tonalidades. La emocin que se expresaba en su rostro era la misma

    emocin que me sofocaba.Un lado de su boca se curv hacia arriba mientras se frotaba la parte

    posterior de su cuello.

    Dejando caer mi bolso, me lanc contra l, envolviendo mis dos brazosalrededor de l tan fuertemente que poda sentir cada una de sus costillas confuerza contra mi pecho. No haba un latido antes de que sus brazos cayeranalrededor de m con la misma urgencia y tal vez incluso alivio.

    Lo siento dije, inhalando al chico que, incluso su olor, exudaba unainsinuacin de problemas apenas enmascarada por una dulzura renuente.

    Metiendo mi cabeza debajo de su barbilla, exhal.Yo tambin lo siento.

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    2 Traducido por Demoiselle & kassCorregido por MaryJanePor qu no me dices a dnde vamos? le pregunt, presionndomecon tanta fuerza contra Jude en el asiento de su vieja camioneta que

    cada centmetro de mi empujaba cada pulgada de l.Sonri en el oscuro camino por el que nos encontrbamos. Donde quiera

    que furamos, yo dudaba que hubiera comodidades modernas como el aguacaliente y la recepcin de telfono celular.

    Porque estoy disfrutando de tus intentos de empujarme lejos contestl, mirando por encima de m. Sus ojos destilaron alegra perversa.

    Mi corazn cambi de saltar a detenerse.

    Justo antes de que se reiniciara, como si estuviera tratando de tomar vuelo.Es as?

    Hizo un ruido de acuerdo, mojando sus labios.

    Contra todo instinto que haba sido derrocado por el deseo, me saqu elcinturn y me deslic por el asiento hasta que estuve presionada de nuevo contrala ventana del lado del pasajero.Sigues disfrutando?

    Me mir, su cara llena de contemplacin, justo antes de que llegara al otrolado de la silla para m. Dnde crees que vas? pregunt, deslizando miespalda en el asiento, pero no se detuvo ah. Agarrando mi muslo derecho, lolevant, moviendo mis caderas hasta que tuvo xito girndome a la derecha,sobre su regazo. El camin no se detuvo, aceler, haciendo a mi cuerpo vibrarencima de Jude.

    Creo que no voy a ninguna parte susurr, entrelazando mis dedosdetrs de su cuello, sintiendo la presin del volante contra mi espalda, sintiendo lafirmeza de su cuerpo en todas partes.

    Manteniendo un ojo en la carretera y el otro en el volante, le dio al resto desu cuerpo atencin a m. Maldita sea, no lo hars dijo, su boca curvada enuna sonrisa que desapareci cuando mi boca cubri la suya.

    No fue exactamente un gemido, fue ms profundo que eso, pero el sonido

    que sali de su pecho cuando mis labios se separaron de l y mi lengua se desliz

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    en su boca fue todo Jude. No le prestaba mucha atencin al camin, pero pensque podra haber detectado otro aumento de velocidad.

    Jude me devolvi el beso, igualando todos los movimientos de mi lengua y

    labios con uno de los suyos. Su mano libre se desliz bajo mi suter, alisando elplano de mi espalda. Su mano era clida, ligeramente spera de das pasadostrabajando en el garaje y en el campo de futbol, y eran capaces.

    El camin golpe un bache particularmente desagradable, golpeando mispiernas con fuerza contra las suyas. Calor propagndose en el rea entre mispiernas, y esta vez fui yo la que hizo un ruido que an no haba sido nombrado. Larealidad de nosotros conduciendo por una oscura, carretera de grava de treintaa cuarenta kilmetros por hora no se registr conmigo cuando mis manos dejaronsu cuello para tirar del dobladillo de mi suter. Si l no iba a hacerlo, yo lo hara.Lanzando el suter por encima de mi cabeza, lo tir al otro lado del asiento.

    Luce dijo Jude, su voz esforzndose para hacerme saber que hacaalgo muy bien. Estoy tratando de conducir aqu.

    l pona un freno aqu muchas veces antes, metafricamente hablando, nolo dejara esta vez. Estaba plantando mi pie debajo de ese freno antes de que lpudiera golpear hacia abajo.

    Moviendo mi boca justo en las afueras de su oreja, le susurr: Yo tambin.Justo antes de tomar el lbulo de su oreja en mi boca, succionndolosuavemente.

    Otro sonido se desliz por su garganta, tan fuerte que hizo vibrar mi pecho.El infierno con estodijo, no haba vacilacin o incertidumbre en su voz. Era tanfirme y decidida como su cuerpo zumbando debajo del mo.

    Con un simple movimiento de sus dedos, mi sostn chasque libre de miespalda, deslizndose por mis brazos hasta que aterriz en el suelo al lado del piede Jude. Su boca cubri la ma de nuevo, caliente e inflexible. Yo no podarespirar. No quera, si significaba no poder besar a Jude como me besaba ahoramismo. Como me poda hacer sentir su pasin, su amor, y su posesin en un besoera inexplicable. Pero pudo. El cuerpo de Jude expresaba sus sentimientos, lamayora de veces, mejor que sus palabras.

    Un poco de ayuda?sopl en el espacio de nuestras bocas. Su manoagarro la ma y la llev hasta el botn superior de su camisa. A menos quequieras que esto termine en el hospital, tengo que mantener una mano en elvolante. Sus palabras eran tensas, como si supiera como seran las mas si yopudiera hablar en estos momentos. Quiero sentirte contra m, Luce dijo,cuando mis dedos olvidaron en lo que se supona que trabajaban.

    Incluso con ambas manos torpemente sobre l, me tom un largo besopara desprender el primer botn. Era agraciada en todos lados menos en laintimidad con Jude. Aqu, me converta en una torpe, lo de nervios y

    extremidades. Decidiendo que iba a estar al otro lado de la lnea de estado antes

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    de que terminara el trabajo, dej de besarlo para concentrarme. Concentrarmeun pocoms.

    La forma en que me miraba me hizo casi intil. Las emociones que poda

    transmitir con sus ojos me confundieron, no importaba lo que yo trataba de haceren ese momento.

    Ests seguro de que esto es seguro? pregunte, forzndome a tomaruna respiracin controlada. Tuve que poner en mis pulmones tanto oxigeno comoera posible antes de eso. No es que realmente me importe, pero estoy segurade que estamos rompiendo casi todas las leyes de trnsito puestas enmovimiento, y te hice hacer una especie de promesa para mantenerte por elbuen camino.Dos botones ms libres, algunos ms para irse.

    Sonre, eran las pequeas cosas que me hacan feliz.

    La sonrisa de Jude se igual a la ma cuando nuestros ojos se encontraronpor un instante. Por supuesto que ests segura, Luce prometi, un ojovolviendo a ponerse en la carretera. Nunca te pondra en peligro. Nuncadejara que nada te sucedadijo, como si fuera un mantra. Lo sabes. Cierto?Dale a Jude una simple pregunta y mira como la tuerce en algo que no es.

    Por supuesto que s dije, mirndolo antes de concentrarme en elsiguiente botn. No dejaba que la direccin en la conversacin me detuviera.Slo quera asegurarme. A horcajadas entre un conductor mientras se intentandesnudarse el uno al otro a cuarenta kilmetros por hora es la primera vez param. Solo quera obtener el sello de seguridad de aprobacin antes de proceder.

    Espero que sea la primera vez dijo, las graves lneas de su caradesvanecindose. Y consider tu seguridad con sello estampado. Conducaantes de masturbarme, Luce. Puedo controlar un vehculo mejor de lo que puedocontrolarme a m mismo.

    Cario dije, liberando el ltimo botn derecho antes de tirar la camisalibre de sus pantalones, tus palabras nunca fallan para hacerme quererdesmayarme y retorcerme al mismo tiempo. Sacando la camiseta de sucuerpo, deslic mi pecho contra el suyo. Las partes blandas de mi cuerpoforjadas contra sus partes duras. La ms ligera capa de sudor cubra su pecho,

    intercambiando con el brillo de la ma. Otro aumento de velocidad.No quiero decepcionarte, Luce dijo, su mano libre apretndose

    alrededor de mi espalda, ajustando mi cuerpo contra el suyo como una llavedeslizndose en una cerradura.

    Esto fue lo ms lejos que habamos llegado desde la primavera pasada,justo antes de que nos graduramos y descubriramos nuestras familias y elpasado trgico tejido por ambas. Mi cuerpo olvid como respirar, tuve querecordarme a m misma como hacerlo.

    Nunca lo hacesle susurre a travs de una sonrisa mientras mis manos se

    movan bajo los planos cortes de su estmago, instalndose en la costura de sus

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    vaqueros.

    Ahora este botn, mis dedos lo lograron tirar libre en el espacio de unainhalacin de sorpresa.

    Luce.Hubo advertencia en su voz, pero tambin bienvenida.

    Decid escuchar la ltima.

    Pellizcando la cremallera entre mi pulgar y mi dedo, la deslic hacia abajo,dividindome entre el deseo de saborear el momento y esperando para dejarque me devore por completo. Listo con la cremallera, dobl el material de susjeans hacia abajo y me deslic sobre l, movindome por su cuerpo hasta quepude sentir su calor entre mis piernas.

    l gru, movindose por debajo de m, hacindome jadear en voz alta.

    Maldita sea murmur mientras ambos brazos se apretaban alrededorde la herida antes de que golpeara los frenos. Sus brazos me sostenan ms firmede lo que cualquier cinturn de seguridad podra hacer.

    Pens que podas manejarlodije sin aliento, sonriendo con la mirada.

    Su pecho suba y bajaba con fuerza contra el mo, encontr mi sonrisa conuna suya.Me equivoqu.

    Y luego su boca cubri la ma, sus manos moldeando mi cara. Su cuerpopresionando el mo, inclinando mi espalda sobre el volante.

    Si?modul contra su boca inflexible. Era una pregunta formulada queno necesitaba ninguna explicacin. Era una que yo haba estado preguntandohace tiempo. Una que l nunca haba acordado hasta esta noche.

    Sent su sonrisa contra mi boca mientras su lengua burlaba la ma por otromomento. Tomando mi cara tan firmemente como se podra y aun as seraconsiderado suavemente, su boca abandon la ma, sus ojos tomando su lugar.

    Infierno, srespondi, su sonrisa una dicotoma de paz y conflictos.

    Todos los msculos en mi cuerpo se tensaron con anticipacin. Esto eratodo. Finalmente. El hombre que se haba acostado con ms mujeres de las quequera saber finalmente se permita dormir con su novia.

    Ests segura? pregunt, mirando como si l fuera a reventar algo siresponda negativamente.

    He estado tan segura que he tomado la pldora la semana despus deque volviramos juntos dije, deslizndome arriba y abajo sobre su regazo. Elgimi otra vez, su cabeza cayendo hacia atrs contra el asiento. Ests seguro?pregunte, movindome un poco ms rpido para influir en su respuesta.

    Luce, he estado tan seguro que fui a hacerme pruebas y he estadoteniendo esta goma en mi bolsillo desde el daque volvimos juntosdijo, con una

    sonrisa del tipo que me torturaba.

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    Moldeando mis manos alrededor de su rostro, trazando la cicatriz que corraa lo largo de su mejilla con mi pulgar. Este hombre era todo lo que quera entodas las maneras que una mujer poda querer a un hombre y por fin, podatenerlo en la ltima forma que no lo tena.

    Te amo, Judedije. Porque eso era todo lo que quedaba por decir.

    Las lneas de su frente subsanndose. Y eso me hace el bastardo msafortunado en el mundo.

    Le sonre. Ven aqu le dije, sosteniendo su rostro mientras bajaba miboca a la suya.

    Quiero saber cmo el bastardo ms afortunado del mundo hace el amor.

    S seoradijo, antes de colocar sus labios sobre los mos.

    Sus manos acababan de encontrar el botn de mis jeans cuando unconjunto de deslumbrantes luces explot en la cabina.

    Gem, cubriendo mis ojos con mi antebrazo cuando el conductor encendilas luces del camin.

    Mierdamaldijo Jude, mirando por encima de su hombro.

    La puerta del camin explot abierta, seguido de algunos hombresaullando y gritando.

    Esperando compaa? suspir, cubrindome con mi otro brazomientras haca mi camino fuera de su regazo. Fue doloroso, separarme de lo-que-podra-haber-sido.

    No exactamente respondi, doblndose a s mismo por encima de miregazo y agarrando mi suter. Elevndolo sobre mi cabeza, me lo puso, tomandocada brazo por m mientras meta cada brazo dentro. El suter marcando lo quehaba pasado hace cinco minutos.

    Jude acababa de levantar su cremallera cuando alguien se abalanzcontra la puerta del lado del conductor.

    Ryder, hombre! grit uno de los compaeros de Jude a travs delcristal, evalundonos. Conseguiste a esta hermosura? Mirndome, elcompaero de Jude movi las cejas. Eres un bastardo con suerte.

    Buscando mi camino, Jude me sonri.

    Te lo dije.

    ***

    Un fuego crepitaba en mis pies, las estrellas parpadearon por encima de m,los brazos de Jude me abrazaron fuertemente contra l, y el sonido de un equipode futbol de la universidad entera vomitando su camino a travs de Hey Judehacindome de serenata.

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    No puedo creer que esta gran noche que pens que habas planeadopara nosotros involucrara a ms de cincuenta jugadores de futbol le dije,inclinando mi cabeza hacia atrs contra el pecho de Jude para que pudiera vermi expresin.

    Lo siento, cario dijo, besando las lneas de mi frente. Pens quetendramos un par de horas para nosotros antes de que estos animales vinieran.

    Un par de horas? Me habra conformado con, oh, unos quince minutos.

    Un coro de eructos lleg a un final concluyente, el silencio temporal slo sevio interrumpido por un coro de flatulencias. Gem, cerrando mis ojos yapretndome la nariz.

    Hombre, esto es estpido, Ryder. Tony, el receptor abierto nmero unode Jude, su voz inconfundible grit al lado de la fogata. Si yo tratara de ganar

    una chica de nuevo, no hay manera de que pusiera todo el esfuerzo parasobornar a su compaera de cuarto para llevarla a una fiesta para que pudieradarle una serenata de DJ con algunas tontas y viejas canciones acerca deprofesarle mi amor eterno.

    Abr mis ojos para ofrecerle una mirada a travs del fuego a Tony. Meencantaba el chico, su carcter infeccioso haca imposible no hacerlo, lamayora de los das. Este no era uno de esos das.

    Yo acabara de subir a ella y estara como Oye, beb. Cmo va todo?Ya sabes, algo realmente suave como eso?Tony me sonri como el demonio.

    Tonyhabl Jude, doblando su barbilla sobre mi hombro, Cundo fuela ltima vez que tuviste a alguna de tus antiguas novias para tomar tulamentable culo de nuevo?

    La cara de Tony se arrug en contemplacin.

    Encogindose de hombros, respondi: Nunca.

    Exactodijo Jude, levantando su dedo medio a l.

    Mis brazos estaban metidos y apretados en la manta en la que Jude mehaba envuelto antes, as que cuando baj su dedo, le di un codazo. Uno ms

    por m.Tony recibi el dedo medio de Jude nuevamente, esta vez cortesa de Lucy

    Larson.

    Vamos, Lucydijo Tony mientras el resto de los jugadores se mecan en larisa, algunos pocos bandolo en malvaviscos. T sabes que pienso que eres lamierda. Slo estoy celoso porque ests cerca de ser cinco veces demasiadobuena para Ryder y quiero entrar en esos cinco-veces-demasiado-bueno-para-mpara beneficiarme, tambin.

    Tal vez si pararas de dejar caer la pelota y empezaras a conseguir entrar

    en la zona de anotacin, podras conseguir encontrar una chica que quiera

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    hacer ms que correr sus manos por tus veinte pulgadas de bceps dije,inclinando mi cabeza.

    Jude ahog su risa en la manta. El resto del equipo, no tanto.

    Elevando sus cejas hacia m, Tony desliz la manga de su camiseta haciaarriba, besando su grotescamente grande bceps, y luego lo repiti en el otro.

    Deja de odiarme, Lucy. Jude va a agarrarnos si no dejas de ser tan obviadijo, agachando su cabeza cuando la botella de bebida deportiva de Judepas junto a l. Y no hay necesidad de preocuparse de la zona de anotacinmaana, nena. Har a la zona de anotacin mi perra.

    No voy a aguantar la respiracin contest, incapaz de contener misonrisa cuando Tony continuo con su teatro. En un momento determinado, fuecomo ver a un hombre de circo de tres pistas. Y, toda broma a un lado, Tony era

    un infierno de receptor abierto. Juntos, l y Jude haban estado estableciendorcords que probablemente nunca podran ser competidos.

    Esto es lo que no entiendodijo Tony, empujando al tipo al lado de l. Elpateador nmero uno del equipo. Creo que su nombre era Kurt. O tal vez era Kirk.O Kent. Bueno, K algo. En el departamento de apariencia, Ryder es un siete, talvez un ochodijo, entrecerrando los ojos mientras inspeccionaba a Jude. Kurk oKirk valoraba a Jude, frotndose la barbilla.

    Entonces eres un dos negativo, Tony murmur, realmente maldiciendomi suerte por haberme quedado atrapada bromeando con un par de

    compaeros de Jude mientras que el resto hablaba y realizaba todo lo masculinoque nunca debe ser conocido por las mujeres.

    Su personalidad es tan no me importacontinu Tony, empujando alpateador cuyo nombre comenzaba con K. Por qu en todas las cosas injustasy poco razonables l siempre consigue que las buenas hagan cola frente a supuerta?

    Jude se inclin hacia delante. Te puedo dar una explicacin en ochopasos, Rufello.

    Tony y el pateador miraron a Jude, y luego el uno al otro, justo antes de que

    echen sus cabezas hacia atrs y estallen en carcajadas.Jude se uni a ellos justo a la mitad.

    Pero lo que dijo Tony necesitaba una pequea aclaracin. Qu buenashacen cola frente a la puerta de Jude? pregunt, tratando de mantenerserena mi voz.

    La risa se Tony desapareci, sus ojos oscuros se alejaron tan pronto comoaterrizaron en m. El cuerpo de Jude se puso lo suficiente tenso a m alrededorcomo para dar seales de que algo estaba fuera de lugar.

    T dijo Tony, empujando sus manos hacia m. T eres una de las

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    buenas haciendo cola frente a su puerta

    No, no me lo creo. Yo haba visto a Tony cerca de las lgrimas la noche desu ltimo ao de escuela secundaria cuando su trofeo VIP se rompi a la mitad

    cuando un chico lo us como bate de bisbol en una de las legendarias fiestasen su casa, e incluso entonces su sonrisa estaba casi presente. No haba ni rastrode ella ahora, lo que significaba que Tony trabajaba para cubrir algo.

    Trepiti otra vez, cuando yo segua retenindolo preso con mi mirada.

    Y Adriana Vix agreg otro de los compaeros de equipo de Jude quese encontraba detrs de nosotros, sonando como si se conformara con hacer elamor slo con el nombre.

    Ahora mi cuerpo se tens, ya no estaba colocada alrededor de Jude. Megir en mi asiento entre sus piernas, encontrndome con sus ojos.

    Nada en ellos me dijo algo. Esa era, quizs, la peor manera en la quepodan estar.

    Quin es Adriana Vix? le pregunt, mi voz es la mezcla perfecta deansiedad y enfado.

    Las manos de Jude se colocaron en torno a mi cara, mirndome fijamentea los ojos. Era difcil respirar cuando me miraba as.Nadie respondi, sin alejarsus manos o dejar de mirarme a m.

    Nadie?grit el chico desde atrs, tomando asiento junto a nosotros.Tu definicin de nadie debe ser chicas por las que un hombre se amputara lamitad de su miembro para estar con ellas. Para estar con unacontino eljugador cuyo nombre no recordaba, pero saba que calentaba mucho elbanquillo. Iba a seguir permaneciendo en el banquillo si no se meta la adoracinpor Adriana Vix donde el sol no brillara.

    Matt advirti Jude, finalmente dejando mi cara, pero slo paraenvolverme entre sus brazos. Cierra el pico.

    Tu chica fue la que pregunt contest levantando las manos. Estabarespondiendo a una pregunta.

    Bueno, deja de exagerar dijo Jude, aumentando su tono de voz, peroyo poda sentir que temblaba. Estaba a punto de desbordarse. De hecho, Porqu no dejas de hablar por el resto de la noche?

    Matt asinti encogindose de hombros, tomando un trago de su cerveza. Sino fuera por el lmite de cerveza del equipo durante las dos noches antes de unpartido, podra descartar la adoracin de Matt por Adriana Vix como lasdivagaciones de un borracho. Matt estaba sobrio cuando llegaron, lo quesignificaba que Adriana estaba tan caliente como insinuaba.

    Girndome para as poder apoyar la espalda en el lado donde estaba lapierna doblada de Jude, encontr su mirada de nuevo. Llevaba su viejo gorro gris

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    esta noche, pero slo porque haca fro. Ya no se esconda tras l.

    A ella le gustas? Un gran punto por hacer la pregunta con la menoremocin posible.

    Se encogi de hombros. Tal vez un poco respondi, sus ojos nuncadejando los mos.

    Un poco? grit Tony a travs de la hoguera donde slo haba unaspocas personas los cuales nos sonrean. Gracias a Ryder la poblacin masculinade Syracuse ha podido disfrutar an ms del gran busto de Adriana en lapantalla. Pens que estaban a punto de salirse de ese pequeo vestido con elque ella apareci ayer. Tony silb entre dientes, sus ojos se nublaron conensoacin. Esa cosa magnifica est al acecho. Y tiene su vista puesta en tuchico, amor dijo mirndome con un poco de lastima. Como si yo hubiese

    perdido el juego de Jude por defecto. Por defecto en mi apariencia.Dilo de nuevo Tony advirti Jude con la mandbula apretada, y lo

    nico que voy a estar lanzando a tu cabeza de alfiler va a ser mi bota.

    Qu? dijo Tony. Por estar diciendo la verdad sobre Adrianajadeando de calor para ti?

    No, imbcildijo Jude, notas de ira se deslizaban entre sus dientes. Porllamar amor a mi chica. Ella es ma. Slo yo la llamo as. No un insignificantepajero con una boca muy grande.

    No se haba ido. El territorial Rottweiler que Jude era cuando lleg a m.

    Normalmente, me molestaba cuando l hablaba de m como si yo fuera algoque pudiera ser de propiedad, pero ahora, despus de or hablar de la diosa y sustetas, yo estaba bien con que l estuviera siendo territorial conmigo como lquera.

    Mi error dijo Tony, levantndose y sacudindose el pantaln. Dadoque me parece que no puedo mantener mi boca cerrada, ser mejor que mevaya a la cama antes de comerme un sndwich de nudillos en mi cara. Mesonri, pero sus ojos no se encontraron con los mos. En ellos haba un poco delastima hacia m. Como si yo hubiera tenido ya mi tiempo y ahora ste llegaba asu fin. Iba a ser derrocada por Adriana Vix. Lleven sus feos y peludos culos a lacama grit Tony a los rezagados que todava miraban con los ojosentrecerrados en el fuego. Tenemos unos cuantos culos que patear maana.

    Un coro de gruidos y seguidos de chillidos ya que la mayora de los chicosse levantaron y siguieron a Tony a sus respectivas tiendas o se lanzaron a travs delas puertas traseras de sus camionetas. Esta noche no fue como me habaimaginado que sera.

    Jude y yo nos sentamos acurrucados en silencio durante un minuto, los dosmirando como el fuego se consuma, esperando a que el otro dijera algo primero.

    Te gusta ella?susurr antes de que realmente lo hubiera pensado.

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    El suspiro de Jude fue largo e irritado. Era la primera vez que yo recordaraque estuviera tranquila de que l estuviera irritado conmigo. Me gir as quequed frente a l, pero todava me encontraba entre sus piernas, l me nivel am con sus ojos oscuros.

    Norespondi. No en la forma en que tu mente loca est pensando.

    l solo haba previsto la forma en que la palabra loca llegara a mi mente.Y qu hay de la otra forma?

    Vi las ltimas sombras de las llamas del fuego que se consuman en el ladode la mejilla de Jude. Ella est bien respondi, levantando las cejas yesperando. Porque saba lo suficiente sobre m para saber lo que vena.

    Ella est bien?repet, con mi voz en aumento. Est bien como queme gustara follar con ella en dos segundos en el piso si fuera soltero, o est bien

    ya que ella es slo una chica?Jude me haba advertido meses atrs de no hacer preguntas si no quera

    respuestas honestas. Al instante me gustara poder hacer mi pregunta de nuevo.

    Luce dijo Jude, desplegando la manta ceida a m alrededor,agarrando mis manos cuando las dej libres, Eres mi chica. La chica. Paraunirse a las otras emociones de su rostro, un rastro de dolor tambin se reflej enl. Cuando veo a Adriana, o a cualquier otra chica, eso es todo lo que veo.Otra chica que no es michica. No las miro a ellas, Luce. Te miro a ti continu,con el ceo fruncido. Slo te he mirado a ti.

    La preocupacin que apretaba mi estmago comenzaba a desaparecer.Podras por favor, por el amor de Dios, parar tu acto de chica

    paranoica?

    Con Jude, cuando l estaba as, lo mejor que podas hacer era cesar ydesistir. Yo lo saba, pero nunca fue un consejo que segu y no me gustaraempezar ahora.

    Algo as como cuando t te comportaste como un chico paranoico conThomas y yo hace un rato? Si mis palabras no sealaron con hipocresa suspalabras, mi mirada ciertamente lo hizo.

    Las palabras de Jude no salieron de su boca. Mantenindola cerrada, conlneas en su frente mientras recostaba su espalda en un tronco. Sus ojosarrugados, con los ojos entrecerrados y sus dientes en el lado derecho de sumejilla. Esta era una de las nuevas expresiones de Jude que se haba convertidocada vez ms familiar ltimamente. Era su mirada de contemplacin, y que lhaba trabajado mucho en sustituir cuando su reaccin inmediata era la ira.

    Esper dndole todo el tiempo y el espacio que necesitaba.

    Luce dijo al fin con voz suave, Qu quieres que haga? Hizo unapausa, esperando mi respuesta, pero no estaba segura de lo que haca, as que

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    no hubo respuesta.

    Por favor, dime algo continu. Dime lo que quieres que te diga, y lohar, cuando se trata de Adriana o de cualquier otra chica que se meta en el

    camino, y lo voy a hacer. Quieres que les dispare una bola de saliva entre susojos? Que as sea. Quieres que les saque el dedo en cualquier momento en elcual se paren en mi camino? Ya lo tienes. Quieres que me saque los ojos as nopodr ver otra de sus sonrisas sugerentes de nuevo?Se arrastr, la mitad de sucara aplastndonos juntos. Bueno, eso sera un asco, pero me gustara hacerlo.Para ti.Acunando mi rostro entre sus manos de nuevo, se inclin hacia adelantepara que sus ojos miren a los mos desde medio metro de distancia. Dime, nena.Qu quieres que haga?

    Yo no lo poda expresar con palabras porque cuando se lo pregunt aquemarropa, ni siquiera saba lo que quera hacer ni que decir cuando se trataba

    de otras mujeres agitando sus tetas en el camino de Jude. Hombres como Judeno podan caminar por un cementerio sin ser golpeados sucesivamente.Entonces, Qu quiero que haga cundo llegue a la fuente interminable dechicas listas y dispuestas a tirarse en su cama en la primera oportunidad quetengan? Quera que l fuera mezquino con ellas? Bueno, s, algo as, pero miparte salvadora del mundo se dio cuenta que esa no era la respuesta. Entonces,cul era?

    Esa pregunta tendra que seguir sin respuesta porque no tena otra cosa enmi mente.

    Enlac mis dedos con los suyos en donde calentaba mi rostro, me acerqums hasta que no haba el espacio de medio metro que nos mantenaseparados.Quiero que me lleves a la cama.

    Estaba segura de que nunca haba visto las arrugas de la cara de Judedesaparecer tan rpido. Ahora eso, no slo puedo hacerlo respondi,agarrndome entre sus brazos antes de levantarse, puedo hacerlo con unasonrisa.

    Podra haberme redo si me lo hubiese permitido, pero un nombre todavacolgaba entre nosotros. No estaba preparada o en condiciones de presionar el

    botn de borrado en Adriana Vix tratando de poner sus garras en mi hombre.Espera hasta que eches un vistazo a la instalacin que he hecho para

    nosotros dijo Jude con voz suave mientras me cargaba a travs de todo elcampamento improvisado hacia su camioneta oxidada. Era tan oxidada que nose poda decir si haba sido originalmente de color negro o gris o algn color entreambos. Haba conseguido el camin por casi nada a algn viejo campesino yhaba utilizado parte de sus ahorros que consigui trabajando en el garaje paracomprar las piezas que necesitaba. El interior del coche se hallaba en muy buenestado, pero a juzgar por el exterior, el camin pareca que necesitaba serdesechado.

    Me encantaba que a Jude no le importara lo que los dems pensaban

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    pero s lo que yo pensaba. Am cuando dijo que lo que contaba era el interior.Yo saba que haba hablado de autos, de la camioneta especficamente,cuando lo haba dicho, pero todava consigui ablandar mis rodillas.

    Pasando a travs de algunos de sus nuevos compaeros de equipo,equipando sus camionetas. Jude se detuvo en la parte posterior de la suya. Bajla compuerta trasera con una mano, que chirri al abrirse. Su habitacin paraesta noche, seorita Larson dijo con voz cantarina, sealando el colchn deaire y el montn de mantas y almohadas que recubran la parte trasera de lacamioneta. Incluso haba puesto una chocolatina en mi almohada, al lado deuna rosa blanca.

    En la escuela secundaria haba aprendido lo que los colores de las rosasqueran decir, y como podas descifrar las intenciones del individuo, basndote enla que te haba dado. Rosa quera decir que estaba enamorado de ti, amarillo

    quera decir que quera que fusemos amigos, no poda contar el nmero derosas amarillas abandonadas que haba visto decorando el interior de los cubosde basura en la escuela secundaria, los pasillos de color rojo significaban queestaba enamorado y el blanco representaba pureza.

    Es decir que sus intenciones eran puras.

    Lo que significaba que no quera hacer todas las cosas que una chicaimaginaba hacer en la parte trasera de una camioneta por la noche.

    Malditas rosas blancas, todas a la mierda.

    Pero incluso en mi momento de odio a las rosas blancas, creo que tambinme encant. Tan pronto como pens que tena a Jude Ryder descubierto, lhaba ido y dejado una rosa blanca sobre mi almohada. En la cama que bamosa compartir un par de horas despus de que l hubiese accedido a tenerrelaciones sexuales conmigo en la cabina de su camioneta, pegada a su volante.

    Puedes ser bastante romntico cuando te lo propones le dijemirndolo.

    No se lo digas a nadie dijo, sentado conmigo en la puerta trasera. Sequej por lo bajo de m. Sera arruinar mi reputacin de cojonudo. Adems,creo que las chicas se estn poniendo en fila ahora Dio a entender y me diouna sonrisa de nio.

    Le di un empujn en su pecho, esta reaccin hizo que se riera.

    As que decid hacer algo que no esperaba. Agarr con mis puos suchaqueta trmica y lo atraje hacia m.

    Ven aqudije en voz baja, bajando mis ojos a su boca. Djame ponera las chicas en su lugar.

    Sus labios se haban separado slo con su inhalacin de sorpresa cuando miboca los cubri, trabajando en ellos para separarlos. Sus manos se apoderaron de

    la carne por debajo de mis caderas, deslizndome hasta el borde de la puerta

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    del maletero, as que me mov a la derecha en su contra. En este punto de vista,nos quedamos ajustados perfectamente. El darme cuenta de esto me hizo darleun beso ms, uniendo mis manos al juego de ser capaz de explorar rpido o losuficientemente firme.

    Poda or el latido acelerado del corazn de Jude, Poda sentir como cadaparte de l me quera. Pude ver la incertidumbre eclipsar sus ojos cuando mispiernas terminaron apretadas alrededor de su torso, frotndome en l. Podasentir el conflicto tratando de apoderarse de su descuido, y yo quera pararlo enseco.

    Agarrando el borde de su camiseta, se la romp en su espalda al tratar desacarla por encima de su cabeza.

    Slo para ser detenida antes de que yo la hubiese subido por su pecho.

    S?le pregunt de nuevo, esta vez sabiendo la respuesta.No se detuvo.Nodijo con firmeza. No as.

    Gem en voz tan alta que podra haber despertado a un par de chicos quese encontraban ms cerca de nosotros. No as como qu? Caliente,apasionado, una noche ardiente aparte del sexo?

    Jude sonri tan ampliamente que la cicatriz de su mejilla se arrug.Agarrando el portn trasero, trabaj en la regulacin de su respiracin.

    Eso suena bien dijo, con la respiracin casi normal. La ma no seranormal hasta por lo menos otros diez minutos. Pero realmente no soy de la clasede persona que motiva a su chica a tener relaciones sexuales a causa de loscelos por otra chica. Al menos no en nuestra primera vez dijo, dndome unbeso en la sien. Despus de eso, con mucho gusto me entretendr y soportarcualquiera o todos los episodios de sexo duro, celoso o enfadado que quierasechar en mi camino.

    Lo empuj de nuevo, resolviendo lo de esta noche en un giro casto. Patelas botas, me deslic de nuevo en el colchn de aire, colocando las mantas a malrededor.

    Sin dejar de sonrerme, Jude se quit sus botas y salt dentro. El colchn de

    aire me pareci bien para recuperarme. Se coloc detrs de m, con un brazoenrollado debajo de m y el otro extendido por encima de m, sosteniendo unarosa blanca.

    Jude se ri en la parte de atrs de mi cuello.

    Tom la rosa y la tir fuera de la camioneta.

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    3 Traducido por AmyCorregido por Natsstaba lloviendoms como torrencialmente. Al menos, eso es lo quepens cuando me despert. Entonces o la risita ahogada y me dicuenta de que la razn por la que mi ropa y mantas se aferraban a m

    empapadas no tena nada que ver con la naturaleza.Abr los ojos cuando uno de los compaeros de Jude, que se cerna sobre

    nosotros por encima de la cabina, volc un cubo de quince litros de agua sobrenosotros. Grit mientras los miembros del equipo de ftbol explotaban en risasalrededor de la camioneta de Jude. Eso fue, hasta que Jude se despert,abalanzndose a por el primer hombre que se movi.

    El jugador situado en su cabina, salt de la camioneta antes de que Judepudiera engancharse a alguno de sus tobillos, pero Jude se encontraba fuera dela cama y persiguindole un segundo ms tarde. El pobre hombre no llegara muylejos.

    Por qu corres, Clay? grit Jude tras l, dejando un rastro desalpicaduras de agua. Ambos sabemos que soy un infierno mucho ms rpidoque t!

    Mirando a Jude cerrar la brecha entre l y Clay, retorc mi cabello y echlas pesadas mantas a un lado. Chasquearon cuando chocaron contra lacamioneta.

    Me asegur de que mi mirada apuntara a cada jugador alrededor,finalizando en Tony, que me sonrea de una manera infantil. l ya fue perdonadoantes de abrir su boca. Qu? dijo, como si no pudiera reaccionar. Losiento, Lucy. Pero no es justo que Ryder est clido acurrucado con tu fino trasero.Hemos tenido que igualar la balanza un poco.

    Saliendo del colchn, me lanc sobre la puerta trasera. La prxima vezque decidan igualar la balanza con Jude, podranpor favor esperar hasta queest fuera para tirar el cubo de agua? Quera tomar una manta paraenvolverme, pero todas estaban empapadas. Est helado aqu afuera. Mirespiracin se vea en el aire, por lo que me estremec an ms.

    La sonrisa de Tony se desvaneci un poco. Ah, demonios, Lucy dijo,quitndose la sudadera. Somos unos bestias. Vivimos el momento y realmente

    no pensamos en las consecuencias de nuestras acciones. Me la tir como si

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    fuera una ofrenda de paz, con las cejas levantadas. Nos perdonas?

    No en esta vida, habra sido mi respuesta si hubiera sido capaz de salir de laconversacin. Odiaba un par de cosas ms que estar congeladaun

    tratamiento sin Novocana2por ejemplo.Fruncindole el ceo a Tony, as sabra que esto no le exima de cualquiera

    que fuese su participacin en la broma, agarr la sudadera en la que cabran doshombres de tamao normal con espacio de sobra.

    Toma ese pedazo de mierda de nuevo. Apareciendo detrs de m,Jude agarr la sudadera de Tony de mis manos y se la arroj en la cara. Laprxima vez que t o alguno de ustedes, bastardos, le haga eso a mi chica otravez, les patear todo el cuerpo, lo pillan? grit Jude, sus ojos barriendo a sustranquilos compaeros en silencio.

    Esper hasta que el ltimo de ellos asinti.Y t dijo Jude, adelantndose y sealando a Tony a la cara, no

    vuelvas a tratar de darle a mi chica algo tuyo para que se lo ponga. Susmsculos del cuello sobresalan como las aletas de un tiburn, estaba tan tenso.O nunca ms te lanzar un baln, entiendes?

    Y yo pensaba que se haba enojado por los litros de agua.

    Ryderdijo Tony, levantando sus manos en seal de rendicin.

    Jude dio otro paso hacia l hasta que sus pechos chocaron.Lo. Pillas?

    Tony baj la mirada retrocediendo.Lo pillo.Bien respondi Jude, volvindose hacia m. Su ira ya disuelta.

    Consigamos algo de ropa secadijo, su voz baja y controlada.

    Asent. No saba cmo poda enfurecerse y calmarse como si fuera uninterruptor, pero era tanto un don como una maldicin.

    Oye, Ryderllam uno de sus compaeros. Uno de los que estuvo en lasafueras y no experiment la dosis letal de la ira de Jude. Nadie en el crculointerior se dirigira a l por un tiempo. Qu demonios le hiciste a Hopkins?

    Jude me envolvi con su brazo, dirigindome hacia el lado del pasajero desu camioneta.Encerrarlo en tu maletero, Palinski!

    Cuando le mir fijamente, me dio su sonrisa ladeada.

    No lo hicistedije, sabiendo que lo hizo.

    Demonios, s, lo hice dijo, abriendo la puerta e inclinndose sobre elasiento para recuperar su bolsa de lona. Y esa no es toda la venganza quesufrir ese pequeo bastardo hoy.

    Quiero saber?

    2Polvo blanco derivado de la cocana que se util iza como analgsico.

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    Revisando el contenido de su bolsa, sac una camiseta negra de mangalarga.No. No quieresrespondi, dndomela. Pero ya vers.

    Teniendo la clida y seca camiseta en mis manos, asent. Algo que

    esperar.Ryderdijo Tony, aclarndose la garganta mientras caminaba alrededor

    de la camioneta. Sostena su telfono. El entrenador acaba de llamar. Nosquiere una hora antes de lo habitual. Le dije que nos llevara al menos otraregresar. Dijo que nos arrastrramos rpido.Su cara era casi como una mueca,como si estuviera anticipando la reaccin de Jude.

    Si el entrenador nos quera una hora ms temprano, debera haberlodicho antes respondi Jude, sin mirarlo mientras segua rebuscando otrascosas. Tengo que conseguirle el desayuno a Luce antes de llevarla a nuestro

    lugar, por lo que el entrenador tendr que esperar.Quieres que le diga al entrenador la razn por la que llegars tarde?

    pregunt Tony, nada antagnico al respecto, slo una persona honesta haciendouna pregunta honesta.

    Demonios, dile dijo Jude, agarrando mi cintura y levantndome. Dileque mi chica est antes que el ftbol. Dile que el desayuno de mi chica estantes que el ftbol.Girndose hacia Tony, le mir, esperando.

    Necesitas que lo escriba o crees que podrs manejarlo?aadi Judecuando Tony se qued mirando.

    Nah dijo finalmente, con una pequea sonrisa. Chica. Desayuno.Luego ftbolrecit, golpeando su cabeza. Creo que lo tengo.

    Abrochando el cinturn, Jude cerr de golpe la puerta del pasajero yrode la camioneta. Detenindose fuera del lado del conductor, desgarr lahmeda trmica y la lanz a los rboles. Abri la puerta, se arroj dentro, yarranc la camioneta. Encendi los calefactores, centrando cada uno de ellosen m. Haba estado congelada, pero ahora me senta toda pegajosa y clida, apesar de que el calor an no llegaba. Todo por culpa de un reciente hombre sincamiseta, mojado y sonriendo a mi lado.

    Qu?dijo, su sonrisa profundizndose mientras continuaba mirndole.Deslizando los ojos por su cuerpo, termin mi investigacin en sus plateados

    ojos. Igual su sonrisa. Ahora esto es un buen espectculo con el quelevantarse.

    ***

    Despus de asegurarle a Jude que no necesitaba sentarme para el

    desayuno y que un sndwich de huevo y una taza de caf seran ms que

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    suficiente, nos detuvimos en la entrada de la casa que l y otros cinco chicoscompartan. Si no fuese porque el hombre que amaba viva all dentro, noentrara. No estaba sucio, pero casi cerca de estarlo, y todo el lugar noimportaba si era por la maana o por la tarde, fin de semana o entre semanaola como a ropa sucia y sexo.

    Nos tom una hora y media regresar, despus de que Jude insistiera endetenerse por comida y por cafena, lo que significaba que ya se atrasaba mediahora. Jude no era un jugador de cada da en la universidad, era ms del tipo porel que los entrenadores rezaban los domingos, as que no estara calentandobanquillo. Pero tendra problemas. De una manera u otra.

    Te acompaar dijo, todava sin camiseta y sonriendo. Tener quesentarme con este hombre durante noventa minutos, logrando mantener mismanos quietas, tendra que conseguirme alguna especie de medalla. Una

    grande.Tienes un partido que ganar dije, besando la comisura elevada de su

    boca. Conozco mi camino.

    Cuida tu paso. Creo que Ben hizo anoche una fiesta mientras noestbamos y ya sabes cmo son dijo, tomando mi barbilla entre el pulgar y elndice. Se acerc, sus labios apenas rozando los mos antes de que terminaran enmi mandbula. Bajando, sus dientes tocaron la piel sensible. Y el hombre segua sincamiseta, as que poda presenciar cada msculo que se apretaba mientras suboca y manos continuaban explorndome.

    Ignora la medalla, mereca el equivalente virtuoso del Premio Nobel de laPaz.

    Tembl cuando su boca me dej. Sin lugar a dudas temblaba como siestuviera experimentando retiradas.

    Saba que estaba siendo presumido. Jude amaba la forma en la que mehaca sentir y las respuestas que poda desencadenar de m. Sin embargo,comenzaba a cansarme todo ese juego previo que luego no nos conduca anada.

    Alcanzando la manija de la puerta, exhal, trabajando pararecomponerme. Te veo en un rato dije, fallando en hacerlo. Ser uno deesos cincuenta mil gritos, moviendo mis brazos en el aire y gritando tu nombre.

    Eres lo nico que veo all, Luce dijo, mientras me escabulla por lapuerta.

    Me entreg mi bolso, apoyando su otro brazo encima del volante. Queratomar una foto para congelar este momento. Podra mantenerme clida durantelas fras noches de invierno en Nueva York, cuando durmiera sola en mi cama.

    S, eres un poco lo nico que veo all , tambindije. Pero es sobre todopor cmo se ve tu trasero en ese spandex3.

    3Telas elsticas y apretadas, como las calzas.

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    Resopl. Y yo que pensaba que era el campen mundial vigente de ladeshumanizacin.

    Eras, Ryderaclar, erasera el plazo operativo.

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    4 Traducido por macasolciCorregido por Itxil menos la ducha que Jude y Tony compartan estaba limpia. Almenos "limpia" segn los estndares del bachillerato universitario.

    Haba llevado una media hora de agua hirviendo para lograr

    volverme a calentar. No poda recordar que una ducha se sintiera tan bien,especialmente sabiendo que era donde Jude estaba completamente desnudoun par de veces al da. Incluso me haba encontrado cerrando los ojos,imaginando, mientras enjabonaba mi cuerpo con su gel de ducha.

    Enrollando mi cabello en una toalla, me lav los dientes y me deslic en misjeans y la sudadera de ftbol favorita de Jude de Syracuse. No haba sido lavada,as que todava ola a l. Afortunadamente, el buen tipo de olor jabn yhombrey no a cmo ola despus del entrenamiento.

    Me puse las botas antes de dejar el bao porque Jude no haba

    exagerado, el cuarto era un desastre. El tipo de desastre por el que alguienconsiderara llamar al equipo de materiales peligrosos. Haba tenido que esquivarobstculos como botellas de cerveza, recortes de cartones de mujeres en bikinisen el suelo, y un par de bxer arrugados para llegar a la habitacin de Jude mstemprano. Lo nico que haca su habitacin ms limpia que la del resto de lacasa era la falta de figuras de cartn de mujeres decorando el suelo.

    Cerrando la puerta del bao detrs de m, di un paso atrs para metermeen la habitacin de Jude, detenindome en seco casi inmediatamente. Esta noera la misma habitacin que haba dejado treinta minutos atrs. Tuve quecomprobar dos veces la foto de nosotros dos que l tena decorando su cmoda

    para asegurarme de que esta era, de verdad, la habitacin de Jude.El cuarto se hallaba limpio, casi brillantemente limpio. La cama estaba

    hecha, las esquinas incluso haban sido estiradas y dobladas. No haba ningnartculo de ropa decorando la alfombra ni ninguna superficie plana como lohaba habido antes. El desastre se haba ido, pero haba sido intercambiado poralgo casi igual de ofensivo, en mi opinin.

    Papel crepe naranja y blanco giraba desde el ventilador de techo hacia lasesquinas de la habitacin. Posters de cartulina de tamao humano con purpurinanaranja con el nmero 17, Vamos Ryder, o Syracuse #1 estaban colgados, al

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    menos tres sobre una pared. Alguien haba llamado a la polica rah-rah4 paraJude y l iba a estar enojado por encima del arco iris cuando lo viera.

    Caminando tentativamente a travs de la habitacin que no reconoca,

    abr el primer cajn de mi tocador y volv a meter la bolsa de aseo en el interior.Jude y yo tratbamos de pasar los fines de semana con el otro, as que yo estabaall de vez en cuando. En lugar de slo dejarme simplemente un cajn para miscosas, l haba ido y haba comprado una cmoda entera slo para mi uso. Elgesto me haba dejado extraamente sin palabras.

    Deslizando el cajn para cerrarlo, hice una nueva investigacin de lahabitacin. La foto nuestra llam mi atencin otra vez. Acercndome unos pasos,entend por qu. Una lnea diagonal hecha aicos la atravesaba, cortando aJude de m casi perfectamente. Levantando la mano, pas un dedo por la lnea,suprimiendo el temblor.

    Perdn por eso.

    Me sorprend, la foto se cay de mis manos y dio volteretas desde laesquina de la mesita de noche de Jude. El vidrio se fractur una vez ms, pero nose rompi.

    De seguro llorara si segua mirando la foto fracturada a mis pies, as que medi la vuelta. Slo para desear haberme quedado mirando una eternidad ms aese vidrio roto.

    Accidentalmente la tir ms temprano cuando limpiaba dijo la alta,

    delgada chica en uniforme de porrista naranja y blanco, deslizndose alrededorde la habitacin de Jude, sin mirarme.

    Quin eres?pregunt innecesariamente, cruzndome de brazos. Ya losaba.

    Adrianadijo, ofreciendo nada ms mientras llevaba un cesto rebosantede ropa doblada hacia la cmoda de Jude. Ya sabes, no se le permite laentrada a nadie en la habitacin del jugador antes del juego, excepto por suHermana Espiritual dijo, abriendo el primer cajn de la cmoda antes decomenzar a meter la ropa interior de Jude dentro.

    Dos emociones me golpearon en ese momento, viendo a Adriana Vix, unachica que era el doble de alta y linda que yo, manoseando toda la ropa interiorlimpia de mi novio mientras la ordenaba. Hubo ira, pura y cruda, como la queJude senta.

    Hubo algo que apret mi garganta y mi corazn fuerte, sintindose como siambos se fueran a romper.

    Soy su novia respond, intentando dejar que hablara la ira. Se mepermite la entrada cuando quiera. Puedes verlo seal a los carteles, por el

    4Sonido que hacen las porristas/animadoras.

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    nmero 17 si no me crees. Y qu demonios es una Hermana Espiritual? Ademsde lo obviotermin, evalundola antes de arrugar la nariz.

    Su piel era color cobre, su cabello oscuro, y tena unos ojos verde musgo

    que casi resplandecan en contraste con su oscura piel. Sus piernas eran tanlargas que la falda del uniforme pareca ms bien un par de bragas que unafalda, y tal como Tony haba dicho ardientemente, tena enormes tetas. Yaparentemente no tena problemas en dejar que el mundo conociera esas tetas,a un nivel de no dejar nada a la imaginacin.

    Cada porrista es asignada a uno de los jugadores de ftbol. Uno de losjugadores de mayor rendimiento, porque nosotras no somos suficientes paracubrirlos a todos ellos, y de todas formas, cul es el punto de atender a alguienen el banco? explic, cerrando el cajn de Jude y movindose al que lesegua. Dobl y presion camisetas en aquel, incluso con un cdigo de color.

    Soy la capitana de mi equipo, y Jude es la estrella del suyo. ramos unacombinacin obviadijo, sonriendo a las camisetas limpias de Jude.

    Era impresionante lo atrayente que luca arrancarle a esta chica losmechones salidos de su brillante cabello oscuro. Incluso reconoc que habraconsecuencias, posiblemente incluso una noche en la crcel. Y no meimportaba.

    Obviamente dije sin expresin, estrechando mis ojos mientras ellapasaba al siguiente cajn, guardando los tres nicos pares de pantalones quetena Jude. Entonces qu? Como Hermana Espiritual consigues limpiar sus

    cuartos, lavarles la ropa, prepararle los brownies, ese tipo de mierda de ama decasa de los 50? Ah, all estaba. Ese genio que necesitaba elevar para noatragantarme las palabras en frente de esta extica Barbie.

    Dndose la vuelta, dej caer el cesto de la ropa vaco al suelo.

    Y cualquier otra necesidad de la que puedan llegar a querer ocuparse dijo, su sonrisa contando toda la historia.

    Sent que mis puos se cerraban, preparndose para el impacto. An nome haba metido en una pelea de gatas, pero estaba segura de que una seaproximaba con fuerza.

    Escucha, Adriana, cierto?dije, rodeando los pies de la cama de Jude,parndome tan alta como era. Ella aun as se alzaba unos quince centmetrosencima de m. S a qu ests jugando. Lo he visto un milln de veces diferentesy en un milln de maneras diferentes. Pero djame ahorrarte el suspenso sobre elresultado de este pequeo juego que ests tratando de manipular.

    Di otro paso ms cerca, cruzndome de brazos porque no confiaba en ellospara que dejaran de pensar por su propia voluntad y dejaran un puetazo justoen medio de esos lindos ojos verdes.

    Perders. Jude est conmigo y yo estoy con Jude. Fin. Puedes preguntarle

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    si necesitas ms explicaciones.

    Los labios de Adriana se fruncieron por un momento antes de que seaplanaran de nuevo en esa sonrisa de cera.

    No le lavas la ropa, no limpias su habitacin, todos sabemos que no teabres de piernas, as que qu bien eres para l? Un hombre tiene necesidades.Puede que l sea tuyo hoy. Pero qu hay de maana? Se apoy en eltocador, sus dedos jugando con la esquina. No quera que sus dedos pasaran aspor encima de ninguna de las cosas de Jude.

    Muy bien, djame poner esto en trminos de gente estpida dije,juntando mis dedos debajo de mi barbilla. Mantente alejada de Jude o yo,figurativa y literalmente, patear tu trasero. Con una sonrisa agregu, luciendouna.

    Arqueando un par de las cejas ms meticulosamente esculpidas que habavisto, Adriana chasque la lengua.

    Quieres saber qu le pas a la ltima chica que se meti en mi camino?

    No, en realidad, pero no me pude resistir.

    Qu?

    Se encogi de hombros, deslizndose a travs de la habitacin hacia lapuerta en esas piernas malditamente interminables.

    No lo s. Jams escuch nada de ella otra vez despus de conseguir a su

    hombre dijo, mirando de vuelta hacia m. Se ahog en mi estela. Ser mejorque sepas nadar si vas a ir en mi contra.

    Esta perra tena suerte de que la estuviera dejando ir en una pieza.

    Como un maldito pez.

    Para cuando haba hecho mi camino a travs de miles de aficionados parallegar al asiento guardado para m en cada partido local, mi ira y el odio haciaAdriana no se haban atenuado ni en lo ms mnimo. Saba que de meterme conla Seorita Vix, esa pelea de gatas que me haba evitado durante dieciocho aosllegara a su punto crtico.

    Hacindome a un lado en la primera fila, equilibrando cuidadosamente mispalomitas y mi chocolate caliente, encontr un rostro familiar en el asiento de allado del mo, en el centro y al frente.

    Oye, t! grit Holly por encima de la multitud hacia m, agarrando laspalomitas que tena as poda sentarme.

    No cre que pudieras venir respond, dndole un abrazo de costadoantes de tomar mi asiento. Syracuse todava tena que salir al campo, peroestbamos a segundos de eso, a juzgar por el volumen rompe-tmpanos en elestadio. Jude delante de su equipo saliendo a la cancha para adoracin de

    miles, en esa camiseta de lycra formando y resaltando los msculos de l que

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    merecan ser resaltados... Bueno, era una vista que jams me querra perder.

    Manteniendo mis ojos fijos en el tnel por el que sala el equipo local, le diun codazo en la pierna a Holly.

    Tu mam estuvo de acuerdo en cuidar al pequeo Jude por unanoche?

    Me tom algo de convencimiento creativo, y tuve que acceder ahacerle mechitas ms claras en el cabello por un ao, pero s, estuvo de acuerdo.Adems, tuve que hacerle la permanente como a doce cabezas de cabello deanciana en el hogar de la ciudad para pagar el billete de avin dijo Holly,arrojando una palomita de maz en su boca. Esta es mi primera noche afuera, ya juzgar por la falta de entusiasmo de mam de cuidar de su nico nieto, serprobablemente la ltima en un tiempo, as que esta noche me voy a soltar el

    cabello, chica.Pasndose los dedos por el pelo, Holly lo desorden, luego echla cabeza hacia adelante, dndole una sacudida bulliciosa. Advertencia justaagreg cuando tir la cabeza de vuelta hacia atrs. Su largo cabello rubiohaba ganado dos centmetros y medio de altura.

    Slo asegrate de usar un condn esta vezdije, sonrindole de lado.Y no te arrastres hacia nada que se parezca a Sawyer Diamond.

    No es divertidodijo, apartando mi brazo.

    Cmo est el seor Diamond? pregunt, sin importarme, perosuponiendo que ella tena la primicia ya que vivamos en una ciudad donde

    todos conocan los asuntos de los dems.No lo s. No me importarespondi. Sin embargo, encuentro una gran

    satisfaccin cuando descubro que cada vez que uno de sus amigos disfruta deun buen pedazo de culo, l est teniendo suerte con nada ms que el lado suavede su mano.

    Re, extendiendo mi chocolate caliente. Ella lo tom, lanzando una sonrisahacia m.

    Luego de enterarme que no era el amor de Jude y madre de su hijo, fuicapaz de mirar a Holly con una luz neutra. Y haba comenzado a gustarme.

    Mucho. Nuestro aspecto no era lo nico que se pareca entre nosotras dos,nuestras personalidades eran tan parecidas que ella a menudo deca lo mismoque yo iba a decir. Slo que Holly era ms valiente lanzndolo. Mientras que yoera demasiado cobarde para actuar, Holly lo haca sin pensarlo dos veces.

    Era un rasgo que yo quera afilar.

    El equipo visitante sali de su tnel, siendo bienvenido por un abucheo ybromas de casi todo el estadio. Holly incluso se les uni, lanzando unas cuantaspalomitas hacia el campo.

    Y luego las banderas naranjas y blancas, seguidas por un conjunto de

    animadoras que yo odiaba, partiendo de la base, dando volteretas de espaldas y

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    patadas al aire, resurgieron del tnel local. No necesit consultar el nmero en supecho para identificarlo cuando sali corriendo del tnel. Jude tena una marcaparticular de pavoneo, incluso cuando corra, que sera capaz de identificardentro de cincuenta aos.

    Juro que ese hombre se pavonea mientras duermele grit a Holly.

    S, pero el pavoneo de Jude es justificado, no manipulado. Se mueve conese contoneo porque sabe cmo hacer que una mujer tire su cabeza hacia atrsen la cama. Y lo sabedijo, devolvindome el chocolate caliente.

    S, lo hacemurmur perdida en el mar de ruidos.

    El estadio se volvi salvaje, gritando, cantando y haciendo reverenciasmientras que su hroe diriga al equipo al campo. En apenas dos meses de juegouniversitario, Jude ya se haba convertido en una leyenda. Jugaba a un nivel

    completamente diferente que el resto de los chicos universitarios. Jugaba como sifuese un dios. Y sus fanticos lo adoraban en consecuencia.

    Disparndome de mi asiento, llevando a Holly conmigo, salt, silb y grit lomejor que pude. Tanto, que ya me senta ronca cuando Jude tom su lugar en lazona lateral del campo, justo en mi lnea de visin. El entrenador hablaba con l,pero Jude miraba hacia atrs, sus ojos encontrndome de inmediato. Losbeneficios de guardar el asiento de en frente y al centro para tu novia, supuse.Salud con la mano a Holly, luego me gui un ojo a m, lo que respond con unbeso al aire. La sonrisa separ la barra de su casco antes de volver su atencin alentrenador.

    Ese hombre tiene un trasero digno de una mirada de "necesita seragarrado de un puado" dijo Holly, echndole una mirada soadora al traserode Jude. Me habra puesto celosa si hubiera sido cualquier otra persona en lugarde la mejor amiga de la infancia de Jude. Holly, y slo Holly, poda hacer unaobservacin honesta sobre el trasero de Jude sin que yo me pusiera en noviacelosa con ella.

    Quiero decir, eso es algo a lo que una chica podra aferrarse en la camaagreg Holly, masticando una palomita de maz.

    Un destello de calor enrojeci mis mejillas, asignndole una imagen a esadeclaracin.

    Como si pudiera sentir nuestros ojos devorando su parte trasera, Jude sellev el brazo hacia atrs y se dio un manotazo en el trasero, lanzndome unarpida sonrisa por encima del hombro antes de acurrucarse con algunos de sustitulares.

    Jude Ryder era cruel en todas las formas.

    Entoncescomenz Holly, codeando mi lado. Ustedes dos...?

    La mir de lado.

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    Eso fue un firme no murmur, escondiendo su sonrisa detrs de la tazade chocolate caliente.

    Observ mientras Jude y los chicos se metan en el campo despus del

    primer saque. El nombre del nmero 23 llam mi atencin. Donde haba estadoestampado "Hopkins" en su camiseta durante toda la temporada, esta nochetena la palabra "Idiota" escrita en rotulador negro en un pedazo de cintaadhesiva. Jude se tom su venganza en serio.

    Bueno, no ha sido por falta de esfuerzo dije, dndome la vuelta en miasiento para enfrentar a Holly. Me senta cmoda hablando con Holly sobre laaparente incapacidad de Jude de dormir conmigo porque Holly era el ejemplode no juzgar. Dudaba que ella hubiera levantado una ceja si yo hubieradivulgado que tena una especie de fetiche de succionar pies. Por mi parte, almenosaad.

    Sabes que no es porque l no quiere hacerlo, verdad? dijo,mirndome. Porque el hombre te desea tanto que est a punto de explotar ensus pantalones. Slo est malditamente empeado en hacer todo esto biencontigo. No quiere arruinar nada, y si eres Jude, crees que arruinarlo est en tunaturaleza. Hizo una pausa, mordisqueando una palomita mientras Jude sealineaba detrs de su lnea ofensiva. Salt al nivel del resto de los aficionados.Slo dale algo ms de tiempo.

    Mucho tiempo ms, y voy a estallar y luego, si est bien o mal dormirconmigo, no importar respond, manteniendo el aliento cuando Jude se

    agach en posicin.Cario, conozco el sentimiento dijo Holly. Esta yegua ha estado

    saliendo a pastorear en primavera desde antes del pequeo Jude.

    Dios, Holly dije, casi ahogndome con mi grano de palomita de maz,pero luego el central elev el baln y me congel. Jude amag hacia un lado,luego el otro, arqueando el baln mientras Tony cargaba contra el campo. Elbrazo de Jude se puso borroso, la pelota se arque en una espiral de dignaalabanza, enumerando las yardas hasta que aterriz en los brazos acunados deTony en la dcimo quinta yarda.

    La multitud estall, los pompones se sacudieron, las manos rebotaron, losfanticos cantaron; era ms intenso que cualquier concierto de rock al que habaido.

    Maldita sea!me grit Holly, despus de silbar entre dientes. Ese chicono est all afuera slo por un dulce trasero.

    Puede jugar dije, sin hacer hincapi adecuadamente. Dulce traseroes slo un ttulo honorario.

    Holly lanz otro comentario, pero Jude estaba de vuelta en posicin y yoapagu todo lo dems. Esta vez, tan pronto como Jude atrap la pelota, ech a

    correr. Esquivando un par de jugadores que se deslizaban por su camino, se abri

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    paso ms all de la dcimo quinta, y luego las ltimas pocas yardas quedaronabiertas.

    Y estbamos en el marcador con seis puntos a menos de un minuto de

    juego. Saba que no haba ninguna J en la palabra equipo, pero esos puntos erancasi todos gracias al nmero 17, Jude Ryder.

    Agarrando la barandilla en frente de m, salt, gritando hacia el campo.Holly estaba gritando tambin, a pesar de que el suyo estaba interrumpido por un"dulce trasero" cada pocas palabras.

    Jude dej caer el baln en la zona final, habiendo ya abandonado hacamucho tiempo la teatralidad de anotar un touchdown despus de su primerpartido. Algo acerca de meter la bola en la zona final de una a dos veces porpartido, haca parecer las teatralidades un poco deslucidas.

    Sin embargo, haba una tradicin de apertura de touchdown que l nohaba dejado morir. Yo ya me inclinaba por encima de la barandilla antes de quel corriera ms all de la dcima yarda. Se senta como si la mitad de los ojos delestadio estuvieran en m, porque si alguno de ellos haba ido a algn partido,saban por qu Jude Ryder estaba sacndose del casco y a quin le sonrea.

    Jams haba sido de las que hacen escenas o de las que participan endemostraciones pblicas de afecto, pero cuando se trataba de Jude, lo llevara adonde quiera que l se ofreciera a ir. Sin importar si estbamos solos o en el mediode miles de aficionados enloquecidos. Cuando nos mirbamos el uno al otro dela manera en que lo estbamos haciendo ahora, todo se desvaneca en el

    olvido.

    Abrindose paso entre sus compaeros que le daban palmadas en laespalda mientras pasaba, dej caer su casco antes de saltar en el aire. Sus manosatraparon la barra superior de la primera fila y, colgndose de lado de labarandilla igual que un levantamiento de barbilla, se impuls.

    Inclinndome ms, le sonre a su rostro perlado de sudor.

    Presumesusurr, tan cerca que casi poda saborear la sal de su piel.

    Su sonrisa se curv an ms.

    Ven aquorden, sus ojos cayendo a mis labios.

    Dejando caer mi boca a la suya, prob el salado sudor de su piel. Y luego lobes. La multitud estall de nuevo, amando el show que su estrella mariscal decampo les daba. Pero no lo hacamos por ellos. Esto, lo hacamos por nosotros.Todo lo que hacamos como pareja lo hacamos por nosotros.

    No me dej alejarme cuando me mov. En su lugar, de algunas manera selas arregl para sostenerse con una mano mientras que con la otra agarraba laparte trasera de mi nuca y me acercaba de vuelta a l. Me bes an ms fuerte,as no poda respirar, y el estadio estaba girando y, como esper, todo excepto

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    Jude se desvaneci. Me haba perdido total y completamente en l.

    Luego, inclinndose hacia atrs, presion un ltimo beso dulce en mislabios.

    Dios mo, Luce respir, el calor de ste recubriendo mi rostro, cmose supone que un hombre se concentre en el ftbol despus de esto?

    Buena suerte con eso respond, mi voz tan escalonada como supuseque lo estara.

    Ser mejor que haya ms de donde vinieron esos despus del partido dijo, mostrando una sonrisa mientras se bajaba.

    Muchosle grit.

    Ryder! grit el entrenador en jefe por encima del ruido. Seguro que

    s como el infierno que no te importa hacer el ridculo por ti mismo, pero deja dehacer el ridculo por m y el resto del equipo! Tranquiliza tu polla y enfcate!

    Jude rod los ojos hacia m antes de darse la vuelta y dirigirse a la zonalateral del campo.

    Me alegro de verte tambin, Jude! grit Holly, cruzndose de brazos yluciendo positivamente molesta.

    Dndose la vuelta, Jude extendi los brazos.

    Sabes que te quiero, Hol!

    S, smurmur ella, haciendo un ademn de despedida.Y luego una diosa de bronce se puso en el camino de Jude, con las manos

    en las caderas y dndole una mirada que me hizo poner muy furiosa otra vez. Dijoalgo, pero no pude escuchar qu. Aunque de haber sido lectora de labios,estara echndome por encima de la baranda y golpeando esa sugestivasonrisita hasta sacarla de su rostro.

    Jude asinti en reconocimiento, agachndose para recuperar su casco.Adriana se movi ms rpido, tomando el casco y sacndolo de su alcance.Jude lo intent alcanzar, pero ella lo esquiv, levantndose ms alto. El rostro deJude no estaba divertido, y el mo estaba enfurecido. Esta chica recurra a latctica de juegos infantiles para atraer la atencin de un chico. Era dbil. Ypattico.

    Volviendo a estirarse para alcanzarlo, Adriana lo esquiv, sostenindololejos de las manos de Jude. l se detuvo, con las manos en las caderas, y dejescapar un suspiro. Pareca como si dijera por favor, a lo cual ella sacudi sucabeza. Luego, sus ojos aterrizaron en m antes de tocarse la mejilla con el dedo.Ella esper, sosteniendo su casco lejos de l, asegurndose de que yo la miraba.Lo estaba.

    As que cuando Jude se inclin y le dio un beso en la mejilla, ella pudo ver

    la tormenta que nubl mi rostro. Bajando el casco, se lo devolvi, pero no antes

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    de levantar una ceja hacia m y poner una sonrisa victoriosa en su lugar.

    Quin es esa perra?dijo Holly, sonando tan furiosa como yo lo estaba.

    Ceuda hacia ella a pesar de que ya se haba dado la vuelta y se haba

    reunido con el resto de las Hermanas Espirituales, plane mi venganza.

    Est a punto de ser una perra muerta.

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    5 Traducido por JoCorregido por LadyPandoraonte esto me orden Holly, lanzando un fajo de ropa roja en micamino. Detenindola antes de que cayera como un paracadas enmi rostro, la sostuve frente a m. Era un vestido sin tirantes, ajustado y

    hasta la rodilla.Por qu? pregunt. Para un hombre, esto se consideraba ardiente.

    Para una mujer, vulgar.

    Porque vas a derrotar a esa perra Vix en su propio terreno comentdespectivamente, desdoblando un vestido blanco con escote halter5 que eraconsiderablemente ms corto que el mo.

    La perra Vix repet mientras deslizaba la camiseta de Jude por micabeza. Queda bien.

    Eso es porque sus ancestros fueron las musas para el trmino.

    Re entre dientes mientras luchaba por quitarme los ajustados pantalones.Estaba agradecida de que Holly estuviera aqu. Sostuvo mi mano a travs delresto del partido que Syracuse gan, gracias a que Jude Ryder pas un total desiete pases a la zona de anotacin en un partido. Entre buscar huecos por laespalda de Adriana y gritar todo lo que daban de s mis pulmones despus decada pase completado que Jude lanzaba, estaba echa polvo y exhausta.

    Qu hora es? pregunt mientras Holly le enviaba mensajes a alguiendesde su telfono.

    La hora de que metas tu culo en ese vestido y le ensees a la perra Vixque la venganza es un plato que se sirve mejor con el lado impresionante deLucy.

    Suspir y me met en el vestido.

    Tan slo date prisa, bien? La calle ya est llena de autos aparcados y elequipo llegar pronto. Vas a querer estar ah abajo cuando Jude entre porquecon eso vas a ser lo nico que vea dijo Holly, arrastrndose fuera de su ropa ydeslizndose en el vestido blanco.

    5Halter:Escote que deja al descubierto los brazos, los hombros y la espalda. Se abrocha por laparte posterior del cuello. Es muy adecuado para las mujeres con buena figura y ayuda adisimular el busto generoso.

    P

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    Era una tradicin del equipo que la casa de Jude fuera la anfitriona de lasfiestas despus de los partidos. Nunca faltaban ni mujeres ni alcohol y lasinhibiciones estaban siempre en bajas medidas, as que poda y sera un momentosalvaje para todos. En la ltima fiesta que el equipo haba tenido aqu hace unassemanas, Jude y yo slo nos habamos escondido en su oscura habitacin,acaricindonos mutuamente. Estara ms que conforme con repetir eso.

    Atando el halter detrs de su cuello, Holly lanz una bolsa de cosmticos enla cama de Jude y comenz a revolver el contenido. Tomando un par de tubos,se acerc a m, blandindolos como si fueran armas.

    Qudate quietaorden, destapando lo que supuse que era delineadornegro.

    Maqullamedispar, sabiendo que discutir con Holly era intil.

    No creas que no lo har.Rindindome con un suspiro, cerr los ojos y dej que se saliera con la suya.

    La chica me deline los ojos y puso rmel en un minuto. Tena un don.

    Qu numero de zapato usas? pregunt, llevndome a su maletamientras juntaba mis labios.

    Siete y medio.

    Ah, perfecto.Sacando un par de zapatos negros de cuero de su bolso,los lanz a mis pies en el suelo.

    Intent meter mi pie en uno, pero no daba. Mirando a la talla de debajo,entend por qu.

    Estos son del seis dije, preguntndome si mis botas o pies desnudosseran la mejor opcin.

    Y?dijo, pintando sus labios con un brillo rosa coral.

    Por qu esto no tena sentido?

    Pues que es una talla y media ms pequeo.Aqu tiene, se lo explicarms claro.

    El dolor es belleza, cario dijo, sacando un par de tacones de tirasplateados de su bolso y ponindoselos. Ponte estos taconazos y funcionar.

    Podra discutrtelo? pregunt, presionando mis dientes mientras metami primer pie en el zapato pequeo, rezando para que unas pocas horas deusarlos esta noche no afectaran a mi manera de bailar durante unas semanas.

    Podras dijo, lanzando su cabeza hacia delante de nuevo y siguiatando las tiras. Pero sera perder el tiempo.

    Me lo imaginaba murmur, fortalecindome mientras deslizaba el otropie en el ltimo zapato.

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    Bien, deja que te vea dijo, deslizando un aro en su oreja. Mecontempl, como un pintor inspecciona su obra maestra y una sonrisa se puso enposicin. Qutate la ropa interior.

    Qu? dije, sin estar preparada para la