UNIveRsIDAD AUTONCMA HETROPOLITANA
UNIDAD IZTAPALAPA
DIVISION DE CIENCIAS SOCIALES Y HUHANIDADES
LICENCIATURA EN LETRAS HISPANICAS
TESINA: LA SECTA RELIGIOSA DEL HERMANO FRANCISCO EN \ \
pAN'T&FxlN Y LAS VISITMKlRAs DE MARIO VARGAS LLOSA //
ASESOR: HERNAN SILVA BAHAMONDE
LECTORAS: ANA ROSA DOMENELLA Y
LAURA CAIZAFtES HERNANDEZ
MEDINA I
1
A mi padre:
porque a ti debo mi tenacidad.
A mi madre:
por tu apoyo incondicional.
A Anita Haria:
porque tú me inspiras belleza.
A mis profesores:
por sus enseñanzas y gran paciencia.
INDICE INTRODUCCION.
3
P. 4 1.- ANALISIS DE LA SECTA DEL HERMANO FRANCISCO.
l. 1 .- La secta de los "Hermanos del Arca". p.12 1.2.- El Hermano Francisco, lfder de la secta. p. 18 1.3.- El sincretismo religioso y otros rasgos importantes de la secta.
2.- LOS CORRELATOS FRANCISCO.
2.1.- El correlato 2 . 2 . - El correlato 2.3.- Los simbolos Francisco.
2.3.1.- El Arca. 2.3.2.- La madera. 2.3.3.- La cruz. 2.3.4.- La sangre.
p.23
Y LOS SIMBOLOS EN LA HISTORIA DEL HERMANO
biblico: la crucifixidn de Cristo. p.28 de San Francisco de Asis. p. 31 empleados en la historia del Hermano
p. 36
p. 36 p. 39 p.40 p. 43
2.3.5.- La crucifixi6n. p.46
3.- ANALISIS DE LAS CRUCIFIXIONES.
3 . 1 . - Crucifixi6n de diversas clases de animales. p.48 3.2.- Crucifixidn de seres humanos. p. 50
3.2.1.- El niño-mdrtir de Moronacocha. p.55 3.2.2.- La Santa Ignacia. p. 57 3.2.3.- Avelino Miranda, sub-oficial del EjBrcito. p.58
4.- EL ESTUDIO DE LOS VASOS COMUNICANTES ENTRE LA HISTORIA DEL HERMANO FRANCISCO Y LA HISTORIA DE LAS VISITADORAS.
4.1.- Doña Leonor, simpatizante de la secta. p.59 4.2.- Pocha y su "hijo crucificadop1 p.66 4.3.- La visitadora Maclovia, miembro de la "Hermandad del Arca" p.68 4.4.- La visitadora "Brasileña", Santa y Mdrtir de los "Hermanos del Arca". p. 72 4.5.- Puntos de comparaci6n entre el Hermano Francisco y Pantaledn Pantoja. p.81 4 . 6 . - El problema de la Iglesia cat6lica con la secta del Hermano Francisco. p.91 4.7.- La funci6n de la Historia del Hermano Francisco en relaci6n con la Historia de las "visitadorasH. p. 94
CONCLUSIONES.
NOTAS.
BIBLIOGRAFIA.
p.97
p. 102
p.107
4
INTRODUCCION
En Arequipa, Perú, el 28 de marzo de 1936, nace Mario
Vargas Llosa, uno de los escritores cuya obra no s610 ha sido
difundida y celebrada en el dmbito de la lengua castellana,
sino que es objeto de traducci6n y estudio en múltiples
paises. La mayor parte de la infancia de Vargas Llosa
transcurre en Cochabamba, Bolivia, en casa de sus abuelos
maternos. Se traslada posteriormente a Piura y mds tarde a
Lima ciudades en las que a sus 16 años se inicia como
periodista y escritor. Columnista de un periddico piurano,
estrena su primera obra teatral, La huida del Inca (1952), en
el Teatro Variedades y escribe sus primeros relatos, los
cuentos de Los iefes.
Vargas Llosa ingresa a la Universidad de San Marcos,
donde estudia literatura y derecho, sin dejar por ello el
periodismo; publica sus articulos y narraciones en diversas
revistas y peri6dicos, y trabaja como redactor de noticias en
una estaci6n de radio.
Con su cuento "El gana el premio otorgado por
la Revue Francaise en 1958; Bste consiste en un viaje a
Paris. Por otra parte, el importante premio Biblioteca Breve
consagra a La ciudad v los 'perros (1963) y por La casa verde
(1966) recibe el premio R6mu:Lo Gallegos.
Es en el campo de la novela donde Vargas Llosa obtendra
sus mejores frutos. Pero tambiBn en el del ensayo practica
frecuentes incursiones con las que procura articular los
S
fundamentos tedricos de su narrativa. Asf, en W r i e l Garcig
Bbrauez: historia de un deici,dio (1971) , elabora su teorfa de
los "demoniosv1 del creador, que son las obsesiones que le dan
un fundamento a la obra de arte, y con La oruf a Derpetua
Flaubert v 'V4adarne BOYECJ;~~' (19751, rinde tributo a este
escritor franc&.
El aspecto que me interesa en la obra de Vargas Llosa es
el tema religioso; en ninguna. de sus novelas es un asunto tan
trascendente como en La uuerra del fin del mundQ y en
pantale6n Y las visitadoras.
La novela de la que me ocupar6 ser6 Pantale6n Y la
itadoras (1973) y, en este caso, pareciera ser que Los
estudiosos de Vargas Llosa restaran importancia a la historia
del Hermano Francisco, pues la mayoria s610 aborda la novela
fijando su atencidn en la historia de las visitadoras.
. .
Sin embargo, considero importante analizar c6mo se
produce la comunicaci6n entre ambas historias, pues la
historia del Hermano Francisco se convierte en verosimil a
medida que logra contrastar con el humorismo de las
visitadoras. Mediante vasos comunicantes las dos historias se
retroalimentan.
Ciertas experiencias personales de Vargas Llosa son el
mecanismo que pone en acci6n su proceso creativo y el caso
especifico de -tale611 v las visitado- surgi6 de un viaje
por el Alto Harañ6n durante tres semanas. En el curso del
viaje lleg6 a oidos de Vargas Llosa una queja que estaba en
boca de todos y era contra las guarniciones de frontera: "10s
6
soldados, los dlas de salida, cometen toda clase de abusos
con nuestras mujeres, hay que esconder a nuestras hijas, a
nuestras hermanas, a nuestras esposas, porque estos sefiores
cuando salen del cuartel, se convierten en seres
peligrosos". (1)
Aunado a esta queja, le contaron casos especificos de
violaciones y por ello habian recurrido a la formacidn de
comisiones para llevar su queja hasta Lima.
Despues de 7 años, Vargas Llosa viaja por segunda
ocasi6n al Alto Marañ6n; y tambien escucha quejas, pero la
raz6n era diferente; se que jaban porque en los cuarteles
gozaban de un privilegio del que estaban excluidos los
civiles y este privilegio era el "Servicio de visitadoras**.
En Estudios criticos de Rossman y Friedman", Vargas
Llosa narra que desde el momento en que descubre la
existencia del "servicio'! siente una imperiosa urgencia de
escribir sobre la persona que lo habia organizado.
En su juventud, Vargas Llosa estuvo en un colegio
militar, de suerte que, para 61, resultaba formidable
imaginar la cara del oficial que un dfa fue llamado para
recibir la orden de organizar un "Servicio de visitadoras".
Por otra parte, sabemos que Vargas Llosa utiliza por
primera vez el humor en esta obra, pues anteriormente temia
usarlo en sus novelas: se consideraba al6rgico a su empleo
literario. Pensaba que el humor congelaba lo real, que lo
disparaba hacia un mundo puramente fantastic0 y lo habia
evitado deliberadamente en sus novelas, incluso se habla
7
declarado en contra del uso del humor en una literatura que
pretendiese ser realista.
Al escribir pantale611 Y &IS visitadoras, Vargas Llosa se
encontr6 con una contradiccibn: las situaciones que describia
eran grotescas, pero el sentido de la historia resultaba
risueño; cuando intentaba escribir esta novela en tono grave,
las dos cosas no concordaban.
Entonces descubri6 que ciertas historias, situaciones y
personajes, únicamente por medio del humor pueden ser
persuasivos y decide escribir esta historia en ese tono, con
lo cual se abre para 41 un mundo muy rico de posibilidades
narrativas.
Pero esto no fue suficiente para ver concluida la obra
en cuesti6n, sino que habria de agregar nuevos elementos,
quiz6 los m8s relevantes para el tema que me ocupa; y fue
precisamente en otro viaje a Iquitos donde se sorprende al
ver una inmensa cruz a orillas del lago de Horona, y al pie
de esta un grupo de personas vestidas de blanco, con unas
velas prendidas de dia y de noche. Supo entonces que acababa
de pasar por la ciudad un santbn, llamado "Hermano Francisco"
y en algunas de las vitrinas de la calle Tacna habia
fotografias de este personaje.
Vargas Llosa confiesa que ademas de la locura militar,
la locura religiosa es el tema que mas le tienta
literariamente, por ello, decidid mezclar ambas historias.
Entonces pens6 que tenia ya la forma de humanizar la
historia de Pantaledn Pantojn. Incrusta en ella la historia
de un lider religioso. Asf, a la locura burocrdtica de
Pantaleh, le entrelaza otro tipo de locura: la locura
religiosa que hace el relato mds humano, real y verosimil,
pues la historia del Hermano Francisco no estd contada en
tono humoristico.
Mi prop6sito es analizar la secta religiosa en pantale6n
L v las visitadoras; el analisis girara en torno al movimiento
mesidnico que dirige el Hermano Francisco y se estudiaran los
rasgos de los llamados llHermanos del Arca" y las
crucifixiones. Existen, como ya se dijo, vasos comunicantes
entre la historia del Hermano Francisco y la historia de las
visitadoras, desarrollados por medio de la yuxtaposici6n y el
paralelismo, lo que otorga a la novela una estructura mas
compleja.
C a b e hacer notar que los conceptos y ttjcnicas
metodol6gicos, algunas de ellas teorizadas y empleadas por el
mismo Vargas Llosa, como es la temica de los vasos
comunicantes, se irdn definiendo a lo largo del analisis
conforme sea necesario.
La historia fundamental, la que da titulo a la novela,
es la del capitan Pantale6n Pantoja y las visitadoras; la
otra es la historia del Hermano Francisco y sus seguidores.
Asi, tenemos, por un lado, el. argumento de la historia de las
visitadoras, el cual trata de un capitan del E jbrcito que es
llamado por sus superiores para ordenarle la creacibn,
organizaci6n y direcci6n de un prostibulo al que llaman
llServicio de visitadorastl, soluci6n que vendra a poner fin a
-.....**." "-.,""-."l-."-.-~~l~._~..- ""I~"--*,C."-.- - "...._ """_"._ _. "___""_._"___. _.. . . .
una problemdtica que la instituci6n no ha podido resolver.
Esta medida acabar6 con las violaciones y vejaciones de que
son objeto las mujeres de la ciudad por parte de los soldados
que salen de la selva hechos unos "locos", luego de haber
permanecido largo tiempo alejados de la civilizaci6n.
Por otro lado, el argumento de la historia del Hermano
Francisco es acerca de un hombre que funda una secta
religiosa, la cual torna dimensiones extraordinarias, por lo
que logra la adhesi6n de miles de seguidores, dispuestos a
obedecerlo ciegamente. Practican un ritual que el Hermano
Francisco les enseña, basado en la crucifixi6n de animales y
seres humanos, hasta llegar a la propia crucifixidn de su
dirigente, por orden suya.
La novela se conforma por 10 capitulos y su estructura
fue elaborada de tal manera que ambas historias llegan a
fusionarse.
En el primer capitulo se proporcionan los datos relevantes de
ambas historias, a traves de la tecnica de la yuxtaposici6n.
Del segundo al septimo capitulos, Vargas Llosa recurre a la
intercalaci6n de diversos tipos de discurso, con el prop6sito
de dar veracidad a la narraci6n, tales como: "partes",
informes, cartas, resoluciones, disposiciones, misivas,
mensajes radiales, oficios confidenciales, etc., asi como
tambikn crea algunos suefios de Pantoja.
En el capitulo octavo se comunican ambas historias
mediante vasos comunicantes, lo cual provoca una mayor
fusi6n -
10
En el noveno se recurre a una narraci6n de tipo
documental, creada por el autor implfcito, como son: nameros
especiales del diario, cr6nicas, noticias sensacionalistas,
una 'Elegfa fúnebre' y una 'Epfstola'; todo esto acerca a h
mds las dos historias.
El decirno es ya la consumaci6n y uni6n de ambas
historias.
A l revisar la critica sobre Pantale611 v las visitadora,
vemos que el tema religioso que me interesa abordar ha sido
poco estudiado.
Por ejemplo, Armas Marcelo ~nicamente menciona que la
historia del Hermano Francisco es relativamente oblicua a la
del Padre Garcia en La casa verde, con todos sus matices y
variantes. (2) En lo que se refiere a Pantale611 Pantoja, se
ocupa de analizar detenidamente el caracter kafkiano y
flaubertiano del mismo.(3)
Por otro lado, FBlix Grande, en su ensayo "Visitar a los
hambrientos", se refiere a.1 Hermano Francisco como a un
sacerdote vehemente que por propia voluntad muere crucificado
por sus mismos seguidores impulsados por su fanatismo; y ve
al personaje como una de las criaturas inolvidables en la
novelfstica de Vargas Llosa. Afirma, por otra parte, que en
Pantale6n y las sltadoras, "hay [. . . J freneticos . .
movimientos de masas, patbticos seismos de gente derramada
por la geologia americana, llevando a cuestas su
rnultitudinaria soledad y su miseria colectiva, llenas de
supersticidn, miedo, ira e infortunio."(4) Esto, que es
11
evidente en La uuerra del fin del BLUndQ, no alcanza dicha
magnitud en nuestra novela objeto de estudio.
Por su parte, Joaquin Roy ve el lugar donde se
desarrollan las practicas efectuadas por la secta fandtica
como el territorio de nadie, escasamente incorporado a la
centralidad de Lima, segdn se descubre en la subtrama con la
presentaci6n de las actividades de los seguidores del Hermano
Francisco: en su sincretismo religioso, la secta consigue
adeptos que se dejan arrastrar hasta cometer las peores
atrocidades.(5)
Por Illtimo, para Oviedo, la historia del Hermano
Francisco apenas se deja correr: este critico la reduce a la
historia del mistico que excita la religiosidad de la gente
de Iquitos. Esta historia muestra un rostro primitivo e
irracional que termina empañado por la atm6sfera grotesca que
exhala.(6)
12
1.- ANALISIS DE LA SECTA DEL HERMANO FRANCISCO.
En este capitulo se analizaran los aspectos relacionados
con la secta de "la Hermandad del Arca", para ello hago
dnfasis en el toque rnesizinico-milenarista de la misma, as1
como en los rasgos de sus adeptos y, principalmente, en las
caracterfsticas del Hermano Francisco.
Como veremos, aqui se encuentran los fundamentos de mi
tema de estudio.
1.1.- La secta de los "Hermanos del Arca".
En cuanto a los rasgos mesihico-milenaristas de la
secta religiosa encabezada par el Hermano Francisco, dados a
lo largo de la historia de la "Hermandad del Arca", podemos
iniciar su estudio con el anBlisis del termino "rnilenarismon,
el cual significa la doctrina de un reinado de mil años. Si
revisamos la Biblia, en nApocalipsis", capitulo 20,
versiculos 1 al 10, estamos ante la explicaci6n de que Cristo
aparecer& sobre la tierra al final de este mundo y
establecer6 un reino rnesianico terreno, que durar6 mil ailos,
y sera entonces cuando los justos serh recibidos en el reino
de los cielos.
El elemento fundamental de esta doctrina es que se trata
de un reino terreno de mil años de duracibn; este elemento ya
se encontraba en los escritos judios y en los rabinicos, y
pervive hasta hoy en una serie de iluminados.
. . , """n"
-
13
Al final de un milenio ,663 espera el fin del mundo, por
ello, la Escritura no conoce mas que una resurreccidn
corporal, tanto de justos como de pecadores, y es
precisamente la del Juicio Final.(7)
Apoydndose en textos como "Segunda de Corintios",
capitulo 5 , versiculo 1 6 , la Iglesia enseña que los justos
entran en la bienaventuranza eterna inmediatamente despues de
la muerte, de modo que no queda espacio para un periodo
intermedio sobre la tierra, durante el cual se interrumpiria
la visi6n beatifica de Dios. De ahi que la resurreccidn
primera al comienzo del reino de los mil años haya de
entenderse s610 en sentido espiritual. Por eso, el reino de
mil años, que se da juntamente con esta resurreccidn, es
igualmente de naturaleza espiritual, y significa un periodo
indeterminado, pero muy largo, en el cual la Iglesia gozar4
de felicidad y descanso.
En el caso especifico de la secta de la "Hermandad del
Arca", para que exista un movimiento con tales
caracteristicas, tiene que darse la conjuncidn de una serie
de elementos. Comenzaremos por analizar los fundamentos en
que se basa la afirmaci6n de que se trata de una secta
mesi8nico-milenarista.
En diversos momentos, la novela arroja datos que nos
indican que la gente congrega,da en las "Arcas" espera pronto
la llegada del fin del mundo, motivo por el cual a lo largo
de la obra encontramos una serie de sacrificios ofrecidos a
su Dios para que tenga a bien aplazar el fin del mundo.(8)
Desde el inicio de la obra se marca el aspecto
milenarista con la aparicidn de un mesias que lleva a cabo su
crucifixi6n con el prop6sito de hacer creer a la gente que el
fin del mundo se acerca (p. 1 : l ) . Esta situacidn no es m8s que
el antecedente de la crucifixi6n del Hermano Francisco; es un
hecho que se repite, quiz6 con cierta periodicidad, como algo
que asi tiene que ser por voluntad y mandato divinos.
Por otro lado, la predica del Hermano Francisco por las
selvas amazdnicas fue de tres años; lo cual coincide
perfectamente con el tiempo que Jesucristo vivid entregado a
su misidn. Asi, en este sentido existe una semejanza con el
Mesfas, profeta que comienza ;a predicar a la edad de 30 años
y lo hace hasta los 3 3 , que es cuando llega el momento
culminante de la crucifixidn.
Ahora, veamos la causa del fortalecimiento de la secta.
Por una parte, la formacidn de esta se debe a que su
dirigente muestra frente a sus adeptos una obediencia plena
al mandato divino encomendado, no duda jamas de sus palabras
y por eso no dudan de 61. La secta nace y se mantiene porque
la gente busca lo aut6ntico; el hecho de que se predique
acerca del sacrificio de anima.les, y que estos sacrificios se
lleven a cabo, es probablemente una de las causas que
sostiene vivo el inter& de continuar inmersos en esas
creencias que los llevardn a la purificaci6n de sus pecados
(p. 300), porque, para ellos, es real y verdadero lo
experimentado.
Otro rasgo caracterlstico de esta secta consiste en que,
quienes aceptan pertenecer a ella, se transforman, abandonan
sus vicios y hasta les nace el deseo de santificarse;
' quieren, de algún modo, parecerse a su carismdtico lfder. Por
ejemplo, el caso del ex-sargento Te6filo Gualino: su deseo es
verse convertido en apdstol, quiere ser puro y santo, para
ello decide no volver jamas a mantener relaciones sexuales
(P. 198) ( 9 ) -
Una vez convertidos en miembros de la nHermandadn, dejan
de emborracharse y ya no engañan a sus mujeres, lo cual
significa que la secta ejerce un fuerte efecto sobre la
personalidad de sus adeptos.
A traves de un personaje secundario, la señora Leonor,
sabemos que la mayoria de los que integran la secta son
analfabetas y pertenecen a la clase baja; y ejercen los
oficios de: zapateros, carpinteros y albañiles, trabajos en
que se emplea la gente sin preparacicjn escolar y que pueden
ejercerse de forma individual, al margen de instituciones o
f dbricas.
Es importante hacer notar que tambidn forman parte de la
secta las "lavanderasvv (p. 7 8 ) (10) de Iquitos y los soldados
del Ejdrcito. Este rasgo nos indica que la secta es de
cardcter popular.
El ejemplo m8s fiel que existe en la novela acerca de
aquellos que se convierten en vlHermanos*v, lo tenemos en el
ex-sargento Te6filo Gualino y la visitadora Maclovia. Este
fue introducido a la "Hermandad" por Maclovia, pues 61 no
"". ..,- . ." ".-. ", _I .""."""""" .~ ..." . . . . -.-. . . . _,._ ""_ "-..."" ~ ..""." ~ y.""" .."".~.C -=-,, ""
16
habia pensado n r [ . . . 3 en el Arca, ni en el Hermano Francisco ni en la salvaci6n por las cruces [ . . . I " (p. 197) . Ella
considera que la secta esta constituida por personas buenas
que persiguen el bien de los demas y se convence aun mas de
ello al tener contacto directo con los mismos "Hermanosn
quienes le ayudaron en las apremiantes necesidades que pas6
al fugarse del "Servicio de visitadoras" junto con Te6fil0,
quien por su condicidn de Soldado, y precisamente por haberse
fugado, es apresado y llevado a un cuartel del Ejercito. Ahi
es donde se opera la transformaci6n del hombre y se aviva su
deseo de convertirse en ap6st.01.
Este episodio representa el mejor ejemplo: Tedfilo lleva
las cosas muy lejos, pues dirige la crucifixi6n del anciano
Arevalo Bemas (p . 198) . Y t:ambibn con ell0 nos encontramos
ante la muestra de solidaridad existente entre quienes se
dicen ser B'Hermanos del Arca@l, &tos confiesan que el anciano
al sentirse enfermo pidi6 que lo clavaran para acabar como
Cristo; es decir, que todos aquellos que creen en Cristo
deben morir como El. Asi según Maclovia, seria esta una
muerte plenamente justificada y simbblica, no causada por
crueldad ni carente de sentidlo ( p . 198) .
A medida que los Wermanos" penetran con mayor
profundidad en el ritual del "Arca", no hay fuerza humana que
los detenga, pues constantemente hay noticias de intentos de
crucifixi6n y de crucifixiones llevadas a cabo (pp. 211,231).
Por otra parte, es problable que un gran porcentaje de
soldados del Ejbrcito se haya convertido en "Hermanos"; este
17
descubrimiento resulta sorp:resivo para las autoridades de
dicha institucibn, ya que al realizar una revista de prendas,
encuentran en las ropas de los soldados oraciones del Hermano
Francisco o estampas del Niño-mdrtir de Moronacocha (p. 213).
El Ejeircito no puede aplacar estas manifestaciones
realizadas por la llHermandadtl, pues son miles de personas y
no grupos reducidos de individuos quienes forman la secta del
"Arca" ( p . 217); ademas, hasta sus propios hombres se
encuentran involucrados en la secta, como ya se ha visto.
Sin embargo, las medidas adoptadas por el Ejhrcito no
van mAs all6 de simples amonestaciones que consisten en
acuartelamientos de 30 a 45 dias , según se les encuentre la
estampa o la foto de sus "santosbt predilectos (p. 220). Pero
esta no es una solucidn efectiva, pues en realidad la
situaci6n se les escapa de las manos ya que la secta crece de
manera descomunal.
Llega un momento que, ante la cantidad de sacrificios
humanos realizados por la secta de la *tHermandadfl, se les
considera como locos que han convertido a la Amazonia en una
tierra barbara (p . 231). A q u i , una vez mas, el Ejkrcito
muestra su incapacidad para xesolver semejante problema; en
el momento en que logran aprehender a 50 nHermanoslt ya no
saben qu6 hacer con ellos (p.. 2 3 4 ) . Ante ta l situacibn, el
E j6rcito decide tenerlos a pan y agua, asustarlos y
soltarlos; excepto a sus lideres, a quienes los envfan a la
capital (p. 2 3 9 ) .
Llama la atenci6n que los crímenes de la secta, en un
momento dado, sean menos importantes dentro de la trama de la
novela que el llServicio de visitadoras"; aquellos asuntos
pasan a segundo plano cuando se trata este tema (p. 241), ya
que de algh modo, a todos los hombres, tanto militares como
civiles, les interesa hacer uso del "ServicioI1.
1.2.- El Hermano Francisco, lider de la secta.
Según la definici6n de Hesias, este termino significa
"El Ungidov1. El equivalente en griego es Cristo. vlMesiasll o
I 1 E l Ungidon1, la mayor parte de las veces va acompaiiado del
nombre personal JesQs, nJesucristo*l o nCristo-Jesos", para
designarlo como el Mesfas.
Sin embargo, la informaci6n histbrica, principalmente la
recogida en $,os Evanaew, revela que los judios pensaron
que Cristo no era el Mesias por ellos esperado.
Respecto a nuestro tema de estudio, el Hermano Francisco
es un lider carismdtico, aceptado por sus adeptos, ya que
como personaje religioso cuenta con caracteristicas
mesidnico-milenaristas, pues desde el momento de su
surgimiento, como guia de 1.a secta de la Wermandad del
Arca", se le reconoce como "el Elegido de Diostv con capacidad
para dirigirlos por recibir la5 6rdenes de la Divinidad. Por
ello, asume perfectamente su papel de profeta y se dirige a
sus vlHermanosvl dici6ndoles: "como les ha ensefiado el cielo
por mi boca" (p. 272); va asi a anunciar el fin del mundo, y
19
constantemente pide a sus seguidores que hagan ofrendas y
sacrificios para el Juicio Final; pues su deseo es ganar "la
inmortalidad de la gloria eterna" (p. 272) en la otra vida.
Por eso siempre, a traves de sus sermones, invita a sus
adeptos a prepararse espiritualmente para "estar con el alma
lavada cuando llegue el MOMENTO FINAL" (p. 272).
Este personaje aparece de manera intempestiva, y a
primera vista es como una especie de sacerdote catdlico
cuando inicia el ritual de la misa, al expresar ante sus
fieles: "En el nombre del Padre y del Espiritu Santo y del
hijo QUE MUR10 EN LA CRUZt8 (p. 12). El Hermano Francisco
enfatiza la frase nque murid en la cruz", y esta se relaciona
con Jesús, El Cristo, que muri6 en la cruz para salvacidn de
los hombres. Sin embargo, este vinculo se da mediante cierta
semejanza, pero tambien existen grandes contrastes.
En cuanto a la semejanza con Jesucristo, tenemos a un
Hermano Francisco verdaderamente fiel, tan entregado a su
causa que resulta autbntico a su prop6sito de anunciar el fin
del mundo.
Su predica se basa en exhortar a sus devotos a que se
desprendan de sus bienes materiales y a que construyan cruces
para formar "Arcas" (pp. 4 0 , 7 4 ) .
Encontramos en la novela. algunos rasgos importantes en
relacidn con las Sagradas Escrituras, y que tienen que ver
con Cristo. Por ejemplo, el Hermano Francisco dice a sus
adeptos: nOiga quien quiera oir, entienda quien quiera
entender" (p. 3 0 ) , como en la Wdbola del sembrador se
explica: "El que tiene oldos para oir, oiga" ( 1 1 ) .
Son miles los seguidores del Hermano Francisco, y entre
ellos se cuentan "a los invdlidos, los ciegos, los leprosos,
los enanos, los moribundos" (p. 230). Se nos dice que eran
veinte mil las personas que estaban con 61, como a semejanza
de Cristo, eran miles los que lo escuchaban, entre ellos
habia una gran cantidad de enfermos que tenian confianza de
sanar, aunque en esto no existe relaci6n alguna con el
Hermano Francisco, pues no hay referencia de que &te sane a
los enfermos.
Finalmente, la prueba d.e su autenticidad radica en su
propia crucifixi6n por sus mismos seguidores, a quienes 61
mismo pide que lo crucifiquen. Cuando lo est6n crucificando
les promete encontrarse con ellos en la otra vida: "all& he
de seguir con ustedes'! (p. 2916)
Ahora, dentro de los principales contrastes y
diferencias del Hermano Francisco con la figura de Cristo, se
halla el hecho de que Cristo predic6 el amor y no pidid
sacrificios de animales ni mucho menos sacrificios humanos
como los que realiza el Hermano Francisco, asi como tampoco
plantaba cruces por donde pasaba, como &te, ni anunciaba el
fin del mundo, ni pedia sacrificios para el Juicio Final.
El Hermano Francisco, al igual que Cristo, se sabe
"Elegido" por la Divinidad; motivo por el cual tambiin se
compromete con lo que le depare el destino al que lo llevar6
su misi6n de 'IEnviado".
21
Una de las caracteristicas lads importantes del Hermano
Francisco es su ferviente entrega a lo que hace; ejecuta con
sinceridad su nrisi6n hasta llevarla a sus dltimas
consecuencias, al sacrificio por la sangre. Es sacrificado a
manos de sus propios "Hermanos" por orden suya, pues quiso
evitar que el Ej6rcito lo aprehendiera y lo tratara como a un
vulgar delincuente.
Despu4s de la muerte del Hermano Francisco no hay quien
se acuerde de 61. Acaba muert-o y arrojado al agua; de acuerdo
con la tradici6n panteista n.aturalista, el hecho de que as1
finalice sus dfas sobre la tierra, puede interpretarse como
una restitucien a Dios que es la naturaleza y esta naturaleza
divina es la sustancia de que estan creadas todas las cosas
( 1 2 )
El Hermano Francisco SE! encuentra rodeado de diversos
slmbolos, los cuales serdn analizados en detalle.
En contraste con los dlemds personajes crucificados a
manos de la "Hermandad del Arca", en especial el Santo Niño
de Moronacocha, la Santa Ignacia, asi como "la Brasileiía", no
encontramos en la novela indicios de que se le impriman
estampas o se le erijan esta,tuas o algo parecido al Hermano
Francisco. En los otros casos es claro el proceso de
simbolizaci6n sagrada como en la religidn cat6lica, pero el
Hermano Francisco representaba ya para sus seguidores la
santidad personificada y su fidelidad nunca fue puesta en
duda.
22
El Hermano Francisco es el profeta de la "Hermandad del
Arca" por lo que podemos considerar tambien el suyo como un
movimiento profetico. La exhortaci6n a sus seguidores es
constantemente la misma: " [ . . . I a desprenderse de sus bienes
y construir cruces de madera y hacer ofrendas para cuando
llegue el fin del mundo, lo que asegura sera prontísimo" (p.
4 0 ) .
Los adeptos del Hermano Francisco depositan su fe y su
confianza en C1, de tal manera que de verdad creen en lo que
&te anuncia: por ejemplo, la señora Leonor "cree que se nos
viene encima el fin del mundo1* (p. 6 9 ) .
La gente que lo llega a escuchar se queda como
hipnotizada: los impresiona la manera como habla, aunque
tambidn, por otra parte, hay quienes lo etiquetan de falso
Mesias y seudo-Jesucristo (:p. 1 8 6 ) ; asi mismo existe la
posibilidad de que, en un momento dado, podamos llamar al
Hermano Francisco "El Anticristo", porque de acuerdo con la
Sagrada Escritura, los cristianos no tienen necesidad de que
nadie, aparte de Cristo, les enseñe, debiendo permanecer en
la enseñanza que este les dej6 ( 1 3 ) .
Sin embargo, desde otra perspectiva, sabemos que el
Hermano Francisco realmente resulta ser otro Cristo en
esencia, porque asume las características arquetipicas del
Cristo que muri6 en la cruz; verdaderamente reencarna el ser
original en &l. Es asi cono ts l Hermano Francisco representa
una escenificaci6n del modelo de Cristo.
23
Por otro lado, el periodista Germdn Ldudano Rosales, "el
Sinchi", es quien se refiere, en una de sus emisiones
radiales, al Hermano Francisco como falso Mesias y seudo-
Jesucristo, pues dicho periodista figura como una especie de
"Judas", ya que siempre se estd vendiendo a si mismo para
obtener dinero, por lo que se infiere que su wdus vivena es
la extorsibn.
Como se dijo antes, el Hermano Francisco origina y
dirige un movimiento mesidnico-milenarista, cuyo Mesias o
Profeta es 61 mismo, puesto que siempre habla del fin del
mundo que se acerca.
Desde este punto de vista, Jesucristo fue un Mesias no
milenarista; su pr6dica no sent6 sus bases en el fin del
mundo como lo hace el Hermano Francisco.
1.3.- El sincretismo religioso y otros rasgos importantes de
la secta.
En Pantaleijn v las v u a d o r m se aprecia un sincretismo
religioso debido a la mezcla (le varias creencias: por un lado
se hallan las religiones andinas propias del lugar, por otro,
la religi6n cat6lica, y por ~.ll.timo, las sectas protestantes.
Dicho sincretismo se cia porque los personajes han
recibido instruccibn religiolsa de sus ancestros, pero al
mismo tiempo recurren a nuevos ritos, como los de "los
Hermanos del Arca", que precisamente se forman por la mezcla
antes mencionada. Es muy probable que "los Hermanosw acepten
la practica de sacrificios de animales y de humanos porque
dentro de su religidn primitiva si se efectuaba este tipo de
rituales; ademds, el hecho de reconocerse como llhermanosll es
algo que únicamente se da en el seno de las sectas
protestantes, ya que para ellos todos los hombres son hijos
de Dios y tienen como UHermifno Mayort1 a Cristo, por lo que,
al hermanarse con El se convierten en "Hermanos en Cristov1 y
de Cristo. Tambien el sincretismo religioso se marca gracias
a la irrupci6n de la religi611 cat6lica, como es el caso de la
llegada de sacerdotes y religiosas canadienses que van a la
selva para cristianizar a los chunchos (p. 6 3 ) .
En este sentido, "la secta de la Hermandad" presenta una
interesante mezcla con los elementos que recoge de cada
creencia.
Para comprender esta situacidn recurramos al ejemplo
claro de Maclovia y Tebfi.10, quienes se convierten en
"Hermanost1. Se fugan del "'Servicio de visitadoras" para
contraer matrimonio, mismo que llevan a cabo mediante el
sacramento de la Iglesia cat6lica, y no es el Hermano
Francisco quien los casa sino un sacerdote cat6lic0, adem&,
lo que sigue es el ritual de la secta de "la Hermandad del
Arca" (p . 1 7 6 ) . A s i , primero contraen matrimonio ante "un
padre viejecitor1, luego se dirigen al nArcatl del lugar y
clavan Wna gallinita en prenda de amor y fidelidad" ( p . 176)
( 1 4 ) 9
Es necesario detenerse a analizar los antecedentes en
que se basan los movimientos rnesidnicos para entender el
w
sincretismo de que hablamos. Estos se remontan a &pocas muy
antiguas. Por ejemplo, el Padre Manuel Mingo escribe, en el
año 1795, un relato acerca de los incidentes que se
produjeron en las misiones franciscanas del Chaco en 1778,
cuando hizo su aparicidn u:n profeta que se atribuia los
privilegios de la Divinidad. Cuenta el Padre Mingo que cien
años mds tarde, otro profeta se proclam6 Dios y provoc6 en la
misma regidn un levantamiento que, por su origen, no era mds
que una repetici6n del anterior.(l5)
Los datos anteriores esclarecen el hecho de que en la
novela se mencione que un individuo se crucifique para
anunciar el fin del mundo (p. 11) , s610 que este hombre no muere. Es detenido y despues dejado libre por la justicia:
podria tratarse incluso, del propio Hermano Francisco.
Dicho acontecimiento nos; da a entender que se trata de
una repetici6n, efectuada gracias a la autenticidad del
ejecutor anterior, aunque para ello no es necesario que
transcurran cien o mas afios. De estos datos extraliterarios
hay antecedentes en Amkrica del Sur, y aqui se verrin
mezclados con datos histdricos y literarios.
Por otra parte, los especialistas en temas religiosos
aseguran que las crisis misticas, sociales y politicas,
presentan una forma muy parecida y tienden a multiplicarse en
situaciones coloniales.
En el caso especf f ico de la novela, no nos encontramos
en una etapa colonialista, pero si son evidentes los rastros
que el colonialismo dejd; de hecho tenemos como elemento de
26
suma importancia un sincretismo religioso que se origina a
partir de la colonia, y de ello hay muestra en la obra. Los
personajes creen en el Cristo crucificado, y tambih recurren
a un brujo o curandero llamado "Maestro Ponciott, quien
celebra ceremonias nocturnas con la ayahuasca (p. 41).
En otra parte de la obra se hace mencidn de las
ayahuasqueras, que son las brujas que preparan la ayahuasca,
y se nos dice que este cocimiento hace sofiar cosas rarisimas
( P a 7 6 ) ( 1 6 ) .
Notamos, por otro lado, que la gente en general es muy
susceptible para creer en ciertas situaciones que carecen de
todo fundamento, como es el hecho de que imaginen que el npez
delfin de los rlos amazthicos es un animal de una
considerable potencia sexualr1 y que, con ayuda del demonio o
espiritus malignos, rapta a las mujeres para satisfacer sus
instintos, adoptando una forma tan varonil y apuesta que
ninguna se le resiste (p. 8 8 ) .
En la novela se menciona tambi6n nla costumbre de azotar
a los niños despues del sabatlo de Gloria para purificarlost1,
por lo que los selvdticos no escapan, según "el Sinchiat, a la
necesidad de ser civilizados para que adopten otras
costumbres (p. 1 8 6 ) .
Si se mira el sincretismo como un movimiento religioso
surgido de la fusidn de religiones primitivas, aunque en este
caso, el sincretismo se da al fundirse las religiones
indigenas con la religidn cat6lica, tenemos que la regidn
andina en un pasado practicaba el culto a un Dios del que se
27
esperaba su regreso. Se dice que el catolicismo no estaba
enraizado en el Perú cuando se pudo ver la aparici6n de
predicadores-profetas que anunciaban que las huacas, es
decir, los antiguos dioses, preparaban su regreso y su
venganza. Según estos profetas, los dioses se proponian hacer
germinar en los campos gusanos que taladrarian el coraz6n de
los españoles, de sus caballos y su ganado, y lo mismo les
ocurriria a los indios convertidos si no abjuraban de la
religi6n de los conquistadores. Los predicadores prometian la
restauraci6n del Imperio Inca a condicidn de que los indios
renunciaran a todo lo que el extranjero les habia
proporcionado -alimentos y vestidos nuevos- y evitasen las
iglesias y todo contacto con curas y frailes. Estaban seguros
de que sus profecias se cumplirian: los dioses iban a llegar,
por ello aconsejaban a las familias blanquear y barrer su
casa para recibirlos.
En este caso los profetas introdujeron una nueva forma
de relaci6n con los dioses. Antiguamente &tos animaban las
rocas, las fuentes o las nube:s y era excepcional que tuvieran
fieles. Una histeria colectiva se apoderaba de pueblos
enteros, poseidos por los dioses, los adeptos del nuevo culto
bailaban, temblaban o lanzaban gritos agudos, se encerraban
en sus casas; otros se ofreclan en sacrificio y se lanzaban
por los precipicios ( 1 7 ) .
2d
2 .- LOS CORRELATOS Y LOS SIMBOLOS EN LA HISTORIA DEL H-O
FRANCISCO.
La novela aporta material para abordar su estudio desde
la perspectiva de los corrslatos, tanto el bfblico, de la
crucif ixidn de Cristo, como el de San Francisco de Asis que
tambitSn, como la historia del Hermano Francisco, se encuentra
plagada de sfmbolos, &tos serh analizados en detalle en
cada uno de los apartados del. presente capitulo.
2.1.- El correlato biblico: la crucifixidn de Cristo.
La irrupci6n del Hermano Francisco, rodeado de cierto
simbolismo -la madera, el Arca, la cruz, la sangre y la
crucifixi6n- no escapa a las Sagradas Escrituras; ya que es
sabido que la cruz es una constante invitacidn a vivir una
nueva vida: "los que son de Cristo crucificaron la carne con
sus pasiones y deseos" ( 1 8 ) y "Con Cristo estoy crucificado.
Y ya no vivo yo: es Cristo quien vive en mi"(19). La cruz es
sirnbolo de los sufrimientos de Cristo, soportados para la
salvaci6n del hombre; as1 tarobien la madera tiene diferentes
significados simbdlicos y diversos usos, por ejemplo: sirve
para labrar la casa, para hacer fuego y ofrecer holocausto,
para la fabricaci6n de utensilios, etc. Es interesante el
manejo de los elementos simb6licos en la forma en que lo hace
Vargas Llosa en la obra, ya que desde el inicio de la misma,
el tratamiento que da al tema es de tipos locos y fandticos;
29
pues viven en un mundo de simbolos, como son: el Arca, la
cruz, la madera, la sangre y la crucifixih, Dibuja a estos
hombres que no son espirituales, ni religiosos, ni estdn
entregados fervorosamente a la religidn cristiana, sino que
estdn inmersos en lo que probablemente sea una fusi6n de
religiones anteriores, como son los ritos propios de la
regi6n selvatica mezclados con el ritual cat6lico y
protestante. Este movimiento toma dimensiones descabelladas y
salvajes.
En "El Evangelio según San Lucas", capitulo 2 3 ,
versiculos 4 4 y 4 5 , respecto al momento de la muerte de
Cristo, se nos dice que cuando 'Iera la hora sexta, hubo
tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena. Y el sol
se 0scureci6, y el velo del templo se rasg6 por la mitad". De
alguna manera, esta respuesta de la naturaleza a la muerte
del Salvador se da tambibn en el Hermano Francisco; pues
encontramos que "en el momento que muri6 se apag6 el cielo,
[ . . . ] todo se puso tiniebla [...J. Los animales del monte se
pusieron a gruñir, a rugir, y los peces se salian del agua
para despedir al Hermano Francisco que subia" (p. 297). Este
relato esta presentado a travbs de la voz del pueblo. Es lo
que dice la gente. Con lo anterior se manifiesta el poder de
Dios presente en estas muertes.
Al efectuar esta crucifixiCin, sus seguidores toman la
sangre del Hermano Francisco; y les parece que al beberla se
ejerce sobre ellos una especie de acto magico, ya que su
efecto es inmediato, por ello dicen: "tom4 una gota de su
sangre y se me quit6 el cansancion (p. 2 9 4 ) .
El mismo Hermano Francisco siente que su misi6n
culminar6 mediante su crucifixibn, por lo que expresa: "me
estdn haciendo un bien, 'hermanos"' (p. 295) y les reitera la
promesa de seguir con su gente a traves de la vida eterna que
da la muerte (p. 296). Los crucificadores, como si fuera agua
bendita, ya que se distribuy.6 por todas partes debido a la
tormenta, "recogian esa agua santa en trapos, baldes, platos,
se la tomaban y quedaban puros de pecado" (p . 300).
Cabe hacer notar que Cristo no fue crucificado por sus
seguidores, como el Hermano Francisco, sino por sus enemigos,
debido a cuestiones sociopoliticas. A partir de este
acontecimiento la crucifixidn tom6 un valor sagrado para la
cristiandad.
En el caso del Hermano Francisco, despues de haber
recibido la muerte, nadie se ocupa de sepultarle, de tal
manera, es posible que el cuerpo haya entrado en estado de
descomposicibn, pues se dice que han transcurrido varios dias
" y la pestilencia da v6mitostt (p. 301). La forma en que acaba
este personaje es impresionante; su cuerpo es botado al rio
con todo y cruz, enseguida lo devoran las pirañas (p. 302),
todo ello en contraste con Cristo a quien Jose de Arimatea da
sepultura y utiliza para este propbsito mirra, bloes; nos
dice la Bibliq en "San Juan", Capitulo 19, versiculo 40, que
"tomaron el cuerpo de JeScí6, 'y lo envolvieron en lienzos con
especias arom8ticas".
31
El Hermano Francisco muere crucificado porque est&
convencido de que asi tiene (que morir, y ademds, como ya se
dijo, para salvarse de las garras del Ejercito y no morir
como un vulgar delincuente. Su muerte es prueba de verdadera
autenticidad en el papel de creador de una secta que llega a
tomar la magnitud que alcanza la "Hermandad del Arca".
La muerte y crucifixi6n de Cristo es una muerte que
trasciende y se convierte en :simbolo de vida; con la muerte y
crucifixi6n del Hermano Francisco aparentemente todo acaba,
"el profeta muerto" (p. 3 0 4 ) ; "El 'Arca' al agua" (p.307),
pero no es asi, otros ya se han crucificado antes para
anunciar el fin del mundo ( p . 1 1 ) , y es posible que, dada la
autenticidad de estos individ.uos, otros m8s se crucifiquen o
se hagan crucificar.
2.2.- El correlato de San Francisco de Asis.
Desde mi punto de vista, el Hermano Francisco parece
estar relacionado con San Francisco de Asis a traves de
cierta semejanza, pero, por otro lado, existen tambien
diferencias muy marcadas entre ambos. Lo que primero resalta
como semejante es el nombre propio de 'Francisco', y aunque
no nos dice mucho, a San Francisco es al Único Santo al que
se le llama "Hermano", y curiosamente Oste es un rasgo
empleado por el protestantismo, ya que los individuos que
forman las sectas protestantes se hacen llamar entre ellos
"hermanos".
32
Es probable que San Francisco se haya nombrado 'Hermano'
por su gran amor a la humanidad y por su ferviente deseo de
parecerse a Cristo, en quien reconocid un 'Hermano Mayor'.
Tambibn los asemeja el hecho de que sus seguidores se
alian a ellos gracias a la autenticidad y entrega a la
religidn que fundan, debido a su sinceridad en lo que creen,
y porque lo hacen siempre fieles, dispuestos a llevar las
cosas hasta sus altimas consecuencias.
Tanto el Hermano Francisco como San Francisco hablan del
desprendimiento de bienes materiales; para el primero, esto
es importante para estar preparados cuando llegue el fin del
mundo (p. 4 0 ) ; para el segundo, es con el prop6sito de
darselos a los pobres.
En contraposici6n con el Hermano Francisco, San
Francisco siempre predic6 el amor hacia toda la creaci6n; y
el Hermano Francisco en cuanto les dijo a sus devotos: "todo
lo que acaba en la madera sub,e y lo recibe EL QUE M[JRIO EN LA
CRUZ", y pone como ejemplo .a la mariposa, al murcielago y
hasta un pique, que es el parasito m6s insignificante:
entonces ellos comienzan a sacrificar toda clase de animales,
mediante crueles ceremonias, con el objeto de lograr la
purificacibn, ellos quedan :bañados con esa sangre: tales
escenas no hablan de amor sino de destruccih, (p. 4 0 ) sobre
todo cuando consuman el primer sacrificio humano (pp. 113-
121), al cual le sigue una cadena de crucifixiones de
personas de distintas edades.
San Francisco nunca le hizo daño a nada ni a nadie, pues
quiso con vehemencia la creacidn de Dios, y en este sentido
se aleja mucho de la imagen del Hermano Francisco, quien
dirige las acciones cometidas; por sus fieles seguidores, y su
secta se vuelve verdaderamente un problema que las
autoridades militares no saben cdmo resolver.
Por otro lado, Maclovia ve al Hermano Francisco como
"capataz de Dios" sobre la tierra y afirma que si ella se
quitara la vida clavdndose una espina de chambira sobre el
corazdn como los chunchos de las tribus, no seria perdonada
aunque aquel quiere a todas las creaturas ( p . 1 7 6 ) . Sin
embargo, en contraposici6n al punto de vista de Maclovia, los
ritos practicados por la secta resultan espantosos.
Ledn Cristiani aborda la vida de San Francisco de Asis a
traves de una obra en la que describe al Santo como "el gran
enamorado de la pobreza" (20) y cita a Paul Sabatier, pues
este vio en San Francisco a uno de los hombres que han
imitado mds ardientemente a Jesucristo.
Cristiani describe a Francisco como "el Pobrecillo de
Asis" ( 2 1 ) que supo demostrar su amor a la Iglesia, su
respeto por el sacerdocio y s,u culto a los sacramentos; todo
lo anterior hace de San Francisco de Asis un hombre
apasionadamente catdlico.
El Hermano Francisco y San Francisco de Asis se asemejan
en cuanto a su pasi6n por la cruz de Cristo; el primero, de
tal manera se entregd a su causa que concluye sus dfas en la
cruz (p. 3 0 2 ) , y el segundo, fue uno de los grandes amantes
Y
de la cruz de Cristo (22). Por ello desde que se entrega a su
misi6n, nada sera mas importante para San Francisco que
seguir a Cristo y su cruz (23). A s i como tambien, para el
Hermano Francisco, el motor de su vida esta en la secta de la
"Santa Hermandadt1.
Vemos, asi mismo, que estas figuras tienen semejanza
como profetas, porque lo que dicen manifiesta tal conviccidn
interior que logran comunicar y contagiar realmente a sus
seguidores. Por ejemplo, a San Francisco de Asis uno de sus
llhermanosll le dijo: "estoy dispuesto a abandonar el mundo y a
seguirte a donde quiera que me lleves ( 2 4 ) . Y 41 le contestb:
"Si quieres ser perfecto, ve, vende todos tus bienes y dalos
a los pobres [. ..] despues ven y sigueme" ( 2 5 ) .
La respuesta que obtuvo San Francisco de Asis, se debid
a los efectos y a la influencia que su nueva visidn a la
religidn cristiana produjo, se trata de un movimiento tan
importante que s610 se hablaba de 61, en su momento(26). En
este sentido, el Hermano Francisco es tan auttjntico como San
Francisco de Asis; ambos en ningan momento resultan
farsantes.
Son tan originales los dos, que en el caso de San
Francisco se dio el prodigio de la estigmatizacidn en
condiciones puras y perfectas como eran las suyas; es decir,
sobre su costado, manos y pies, aparecieron las imageries y
marcas corporales de las llagas de Cristo ( 2 7 ) .
Por otro lado, tambidn el mensaje de ambos es
cautivador, pero aqul hay una gran diferencia en su discurso:
35
San Francisco de Asis habla de amor puro, de amor para Cristo
crucificado, para los pequeños y humildes, de amor entre
todos los miembros de la comunidad cristiana (28). En cambio
el Hermano Francisco es visto por el Chino Porfirio como "un
discuseadol fantdstico. Se le entendfa poco, pelo emocionaba
a la gente" ( p . 3 2 ) : es decir, aunque el Hermano Francisco
resulte poco comprensible, de todos modos es aceptado gracias
a su poder carism6tico.
Clara Offreduccio, contempordnea de San Francisco de
Asis, fue fundadora de la Orden de las Clarisas y sigui6 los
pasos del Santo. Consider6 que Francisco de Asis era el
propio Jesucristo que se manifestaba en persona por su boca
( 2 9 ) '
Por otra parte, a lo largo de la novela, el Hermano
Francisco es visto como el mensajero celestial enviado por
Dios, y siempre est6 dispuesto a dar su propia sangre.
En cuanto a San Francisco, &te lleva al extremo su
pasidn desbordante por El Evangelio, que termina siendo
inmolado al aparecer en su propio cuerpo las llagas que en
Cristo fueron provocadas por :Las heridas de los clavos.
Una de las grandes diferencias entre estas figuras radica en
que San Francisco de Asis predic6 a los animales, en tanto
que el Hermano Francisco los crucificb. Dentro de las
preferencias de aquel se hallan las golondrinas y los
pB jaros, a &tos les dijo 3.0 mismo que a los hombres, y
sostiene Cristiani que una predicacidn como la anterior,
M
desde Jesucristo no se habia dado, tan simple, verdadera y
profunda (30).
Por otro lado, en el cuento "El sueño del pongo" de Jose
Maria Arguedas, se sugiere que para los peruanos, San
Francisco representa al mismo Dios. Aqui es tratado como Hel
gran Padre San Francisco" con autoridad para recibir en el
cielo a los hombres despues de muertos, y con el poder de
Dios para ordenar a los propios bngeles. Esto nos invita a
pensar que San Francisco es un Santo de gran envergadura,
pues logr6, con su propia vida, imitar fielmente al Cristo,
hijo de Dios
2 . 3 . - Los simbolos empleados en la historia del Hermano
Francisco.
Como hemos visto, la secta de "10s Hermanos del Arcatt
sustenta su culto en simbolos tales como: el arca, la madera,
la cruz, la sangre y la crucif ixi6n. Todos ellos mantienen
una interesante relacidn, ya sea por semejanza, ya sea por
contraste, con el simbolismo empleado por la Iglesia
cat6lica.
2.3.1.- El Arca.
Por cada lugar que pasaba, el Hermano Francisco plantaba
una cruz, y ese sitio ya se consideraba 8vArca1t. ¿Por qu8
"Arca" y no "Iglesia de la Santa Hermandad" o mtTemplo del
37
Hermano Franciscoll? En primer lugar, la palabra llArcatl nos
remite a pensar en la a l i a , en su libro del "Gdnesis'l,
donde tenemos que l1E1 Arca de No&'' fue la provisi6n por medio
de la cual los antepasados de toda la humanidad sobrevivieron
al diluvio universal. Dios dio a No6 instrucciones detalladas
en cuanto a su tamailo, forma, sistema de iluminacidn y
ventilacidn, asi como los materiales que habria de utilizar
para su construcci6n; en %6nesis1', capitulo 6 , versiculo 14,
encontramos la orden dada por Dios a No6 acerca de la manera
de construir el Arca, para lo cual Bste deberia usar maderas
resinosas; (31) aqui se unen los simbolos nArcaln-nMaderall,
pues una no puede prescindir (de la otra, ya que, como veremos
mds adelante, la madera es simbolo de salvacibn; asi mismo,
el ltArcall tambib lo es .
La salvacidn de los hornbres en el tiempo del diluvio
universal fue para la humanidad representada por No&, su
esposa y sus tres hijos con sus respectivas esposas. Habia
que introducir en el Arca criaturas vivientes de toda clase
de carne, dos de cada una, macho y hembra. Criaturas
voladoras, animales domesticos y todos los animales que se
mueven por el suelo entrarian en el Arca para conservarlos
vivos.
En la obra no sucede nada parecido; en las nArcasll del
Hermano Francisco no hay m8s que caddveres de diversas clases
de animales, lamparones, manchas de sangre por todas partes y
germenes infecciosos (p. 4 0 ) ; pero aunque esto suceda dentro
de las "Arcas", es importante hacer notar que entre sus
participantes se establece una alianza mediante la sangre
derramada de sus victimas; y su alianza fundamental es con
Dios, pues al reconocerse coimo lrHermanosn , todos ellos pasan a ser hijos de Dios.
Hay un momento en la obra en que se nos presenta como
una escena teatral: el @*Arca It est6 mas llena que de
costumbre; y dentro de ella todo un espectAculo: ntodo el
mundo estaba histt5rico. Rezaban, lloraban a gritos, habla
electricidad en el aire. Y encima, esos truenos y re18mpagosv1
(p. 1 1 6 ) . Esto, lejos de ser una ceremonia cristiana, parecen
simples reacciones histericas como las que se desencadenan en
las reuniones de algunas sec:tas protestantes, probablemente
como respuesta a una catarsis colectiva.
En la historia del Hermano Francisco, las "Arcast1 vienen
a trastocar toda la simbologlia cristiana; ahi no hay mds que
ritos profanos, pestilencia y sangre fresca de cadaveres de
animales y humanos.
El Arca de No6 fue la slalvaci6n, como ya se di jo, para
la humanidad; y el Arca e s , ademds de sfmbolo de salvacibn,
un simbolo de la presencia de Dios.
Por otro lado, el termino vlArcall recibe diferentes usos:
el arca, arca de YahvB, arca de Dios, arca del Dios de
Israel, arca de la alianza, etc., y aqui nos detendremos,
pues el significado de este último uso, es "una temible
enseña sagrada de guerra", la cual era propiedad de una
determinada familia sacerdotal..
39
Los críticos modernos ven esta arca como un objeto para
el oraculo divino o como una especie de imagen de Dios. Esta
arca podía llevarse en hombros o transportarse en un carro.
Era tan importante que sobre ella habia dos querubines que la
protegian con sus alas.
En cuanto al Arca del Hermano Francisco, esta tambitSn es
simbolo de salvaci6n para aquellos que se han hermanado con
61; mediante la celebraci6n constante de su ritual, ellos
esperan lograr la purificaci6n de sus pecados con el fin
primordial de ganar la "gloria eterna".
2.3.2.- La madera.
En el primer capitulo de la novela, a traves de su
predicacibn, el Hermano Franciisco enfatiza el valor de los
usos de la madera; la ve como leño de ofrenda; como
instrumento para hacer fuego; para construir la casa, la
cama, la balsa, armas de caceria, y el ca j6n para el muerto
(PP. 12,171-
Tambien se refiere a la madera cuando habla del acto de
la copulaci6n y del parto; dice el Hermano Francisco: "-Sobre
madera tu padre y tu madre se juntaron para hacerte y sobre
madera puj6 y se abri6 de piernas para parirte [. . . ] La
madera sinti6 su cuerpo, se enro jeci6 con su sangre, recibid
sus lagrimas, se humedecid con su sudor. La madera es
sagrada, el leño trae salud'' (p. 2 4 ) . Afirma que por ello
Cristo "fue clavado en un leño, por eso prefiri6 la cruz";
asi, para el Hermano Francisco, todo lo que se clava en la
madera es ofrenda, todo lo que acaba en la madera sube y lo
recibe EL QUE MUR10 EN LA CRUZ (PP. 2 4 , 3 0 , 3 2 , 3 3 ) . Por estas
razones, la madera representa el origen, el sustrato y el fin
de la vida misma. Sin ella nada tiene sentido, no podrian
prescindir de este objeto sagrado "10s Hermanos del Arcav1.
En este caso, encontramos ciertas coincidencias con la
Biblia en lo que el Hermano Francisco predica respecto a la
madera, pues se dice, por ejemplo, en 'IPrimera de Samuel",
capitulo 6 , versiculo 14, que la madera es para hacer fuego y
ofrecer holocausto; en "Primera de Reyes", capitulo 5 ,
versiculo 1 8 , la madera es para labrar la casa, y en "Segunda
de Timoteol', capitulo 2 , VerSiCUlO 20, esta escrito que "En
una casa grande, no solamente hay utensilios de oro y plata,
sino tambien de madera".
2 . 3 . 3 . - La cruz.
En cuanto al sacrificio de Cristo en la cruz, nos dice
la Biblia en #*Primera de Pedro", capitulo 2, versiculos 2 al
4 , que cristo g111ev6 nuestros pecados en su cuerpo sobre el
maderoa1.
Asi, el hecho de que JFesucristo haya cargado con los
pecados de todos los hombres sobre una cruz de madera,
significa que la elecciljn de la madera es divina: tiene
caracter sagrado. Es santa la cruz de Cristo porque fue
elegida por Dios para salvaci,bn de los hombres.
Según la Bib-, Jesús tenla que ser colgado en un
madero como criminal para quitar la maldici6n que habla cafdo
sobre los israelitas por no haber acatado la Ley de Dios, por
ello esta escrito en %blatas", capitulo 3 , versiculos 10 al
13, que "Cristo nos libr6 de la maldicidn de la Ley llegando
a ser una maldicibn en lugar de nosotros, 'Maldito es todo
aquel que es colgado en un ma,dero' M .
Por otro lado, el apbstlol Pablo fue perseguido por los
judios porque confes6 que la muerte de Cristo en el madero es
la lrnica base para obtener la salvaci6n eterna: como
consecuencia de esta confesidln, para Pablo el mundo era como
algo fijado en un madero, condenado o muerto ( 3 2 ) .
Veamos ahora la cruz del Hermano Francisco: desde mi
punto de vista, se trata de una cruz que parece casi
invisible, con la que carga desde el inicio de la obra hasta
su muerte.
El Hermano Francisco predica atado a la cruz de pies y
manos, por ello siempre esta pidiendo a sus fieles:
IIiPersignense por mi!*t, iArrodillense por mi! ", "¡Abran los brazos por mi!", "Dense tres golpes en el pecho por mi1*, y
*I ¡Planten cruces por mi! @ l . Estas peticiones se encuentran en
diferentes paginas a lo largo de un s610 capitulo de la
novela, y con ello tenemos gran parte del ritual efectuado
por los llHermanos del Arcav1,, lo que parece no seguir una
secuencia es el propio acto de la crucifixibn, que seria el
lrnico elemento faltante para completar el rito, pero este
42
aparece como tal en los momentos mds descarnados de la
novela.
Entonces la cruz del Hermano Francisco es una cruz que
trastoca los valores religiosos de la Iglesia catblica, pues
en ella todo lo que tiene vida, acaba muerto: flores,
animales, mariposas, personas y el mismo Hermano Francisco.
El termino tvcruzll no figura en el Antiguo Testamento, ya
que &te s610 interesa hasta que Jesús, el Cristo, es muerto
en una cruz de madera. Este era un suplicio romano, el mas
cruel e infame de todos. La cruz tenia forma de *ITtv y era
bastante alta para que los pies del condenado, sujeto por las
manos a un madero transversal, no pudieran tocar el suelo. El
lugar del sacrificio solia ubicarse fuera de la ciudad, y los
maderos verticales se hallaban dispuestos de modo permanente.
Por otro lado, en el lihro de ttFilipensesn, capitulo 2,
versiculos 6 al 8 ; asi como en el relato de la pasidn segh
San Juan, encontramos que @@Jesús, al padecer la cruz,
manif est6 libremente su obediencia".
Con el ap6stol Pablo se da la proclamacih de la gloria
de la cruz, por lo que &te dice: "Libreme Dios de gloriarme
en otra cosa que no sea la c.ruz de nuestro Señor Jesucristo
[ . . . J yo llevo en mi cuerpo las marcas de Jesúsv1( 3 3 ) . Para
Pablo, la cruz es una constante invitaci6n a vivir la vida
nueva: de tal manera se da en 61 una pasidn desbordante hacia
el Cristo crucificado.
43
De acuerdo con el estudio de la teologia, la cruz es
como cruz del Cristo rechazado, abandonado, sacrificado, la
revelacidn del ser de Dios en favor del hombre.
La teologia dice que el conocimiento de Dios en la
pasi6n y muerte de Cristo en la cruz es un conocimiento
descendente, que va de Dios hacia el hombre y coloca a &te
en su sitio. Como Cristo se sacrificb, los cristianos tambit5n
deben sacrificarse; asi, la muerte de Jesh en la cruz no
puede comprenderse como %uerte de Dios", sino como una
muerte en Dios ( 3 4 ) .
2 . 3 . 4 . - La sangre.
Dentro de la religibn catblica, la sangre tiene un
sentido simb61icol pues los sacrificios a traves de ella, son
para expiacibn, propiciaci6n y vida. En la Biblia, en el
libro Primera de Juan, capitulo 1, versiculo 7 , encontramos
que Itla sangre de Jesucristo nos limpia de todo pecado".
Asi tambien, ya desd.e el Antiuuo TeStanlentQ, en
"Leviticon, capitulo 1 7 , versiculo 14, la sangre es vista
como el "alma", y en "Deuteronomion, capitulo 12 I versiculo
2 3 , se le considera como riel asiento de la vida", puesto que
la vida pertenece a Dios, que es quien la da; situacibn por
la cual esta prohibido al hombre comer la sangre ( 3 5 ) .
Por otra parte, la sangre de las victirnas se emplea de
diversos modos: se dedica nuevamente a Dios por medio de la
aspersidn del altar, asi opera la expiacibn, y esto lo
U
encontramos en "Hebreos", capitulo 9 , versiculo 22, y en
llExodol*, capftulo 2 4 , versiculos 3 al 8 , en donde se nos
explica que con sangre se sella una alianza, y ademds se crea
un parentesco de sangre entre los que la pactan.
Tambi6n se dice en el libro del 1tG6nesist1, capitulo 4 ,
versiculo 1 0 , que la sangre que los hombres derraman clama
venganza de la tierra a Dios.
En diferentes libros de la Biblia ( 3 6 ) , se habla de la
sangre derramada por una sola persona, pero con distintas
maneras de nombrarla; asf, por ejemplo, se habla de la sangre
de Cristo, de Jesús, de Jesucristo, del Señor o del Cordero.
La antigua alianza fue sellada y puesta en vigor por la
sangre de las victimas (37) , por ello la nueva y eterna
alianza es sellada por la sangre de Cristo, que es derramada
en beneficio de muchos para remisi6n de los pecados, como se
explica en I1El Evangelio según San Mateo", capitulo 2 6 ,
versiculo 2 8 , asi como en ltE'rimera de Corintios", capitulo
11, versiculo 24; de ahi la expresidn "mi sangre de la nueva
alianzat1, que viene a aclararnos que en este caso el Arca de
la Alianza no seria ya la caja con las tablas de la Ley, sino
la sangre del crucificado, ya que la sangre de Cristo es el
alto precio con que El nois ha rescatado del pecado y
reconciliado con Dios.
Es asi como, por su sangre, Cristo nos redime de
nuestros pecados, nos purifica de las obras que nos hacen
indignos delante de Dios y santifica a su pueblo por la
aspersi6n con la sangre de Jesucristo.
45
Por la sangre de Cristo tenemos la plena confianza de
entrar en el santuario, ya que los santos han lavado sus
vestiduras en la sangre del cordero. De manera semejante, los
**Hermanos del Arca" tienen contacto con la sangre de los
crucificados para quedar purificados. Por eso, cada vez que
practican un sacrificio humano, se empapan con la sangre de
la victima, como sucede en el caso del niño de Moronacocha
(p. 1 1 9 ) , o se embadurnan sus caras y sus cuerpos con la
sangre de la cruz y se la beben, cuando sacrifican a la
anciana Ignacia (p. 216) .
Asi tanbien corroboramos, hacia el final de la novela,
que el significado que tiene la sangre como elemento
purificador y salvador es contundente, pues ante el
sacrificio en la cruz de su propio dirigente, recogen la
sangre en trapos, baldes y platos, y se la beben con la
intenci6n de quedar puros de pecado. (p. 300).
Encontramos entonces que la comuni6n que se da a traves
de la sangre de Cristo, y que nos explica la Biblia en
"Primera de Corintios**, capitulo 1 0 , versiculo 1 6 , consiste
en beber de esta sangre, hec:ho que expresa la uni6n con El.
Esta uni6n es alcanzada por el cristiano mediante la
eucaristia, en ella se bebe vino, para que de manera
simb6lica se convierta en 1.a sangre de Jesucristo. Es asi
como la realizacidn mds sublime radica en la antigua idea del
parentesco de sangre entre Dios y los hombres en virtud de la
alianza ( 3 8 ) .
"_,_. _",_ _" ~ ._.__,_.""""_ ".""wT- ." . ..." ?... -.-. -.-r-.-.-.-.... -. 1"- .- .r """"... ""
Respecto a la alianza entre los "Hermanos del Arca",
existen muestras evidentes de que quienes participan en el
ritual de la secta y estan presentes en las crucifixiones de
seres humanos, pactan con la sangre de la victima y con la
propia, pues tenemos, en la transfomaci6n efectuada en
Te6filo Gualino que este lleva la religi6n "adentro de su
sangre" (p. 1 9 8 ) .
2 . 3 . 5 . - La crucifixi6n.
Ya vimos la crucifixibn de Cristo como correlato bíblico
de la crucifixi6n del Hermano Francisco, ahora pasemos a
analizar la crucifixí6n como simbolo empleado a lo largo de
la obra.
Sabemos que despues de haber sido crucificado Cristo,
este sacrificio adquiere un valor sagrado para la cristiandad
y representa, hasta hoy dia, el simbolo de la redenci6n del
hombre. Sabemos tambien que, en la "Hermandad del Arca" , se espera la salvaci6n mediante la practica de sacrificios
realizados en una serie de crucifixiones, a traves de las
cuales pretenden purificarse los "Hermanosll, así como agradar
a Dios para que aplace el momento del fin.
Las crucifixiones realizadas a lo largo de la historia
de los "Hermanos del Arca", de alguna manera actualizan la
muerte de Cristo. Cada caso presentado es distinto, pero
existe un parecido en todas ellas (excepto en la crucifixi6n
de la glBras i leñan), el cual. radica en que se efecttlan con
crudeza, como algo real y verdadero; lo que resulta ser una
diferencia muy contrastante con el sacrificio realizado en la
celebracidn de la misa cat6lic:a; dentro de &Sta, la muerte en
la cruz es totalmente simMlic:a, aunque contintla actualizando
la crucifixi6n del Cristo Salvador.
Por otra parte, observarnos que, para el catdlico, el
hecho de la crucifixi6n de Cristo conserva su caracter
hist6rico a traves del credo apost6lico que reza: nFue
crucificado bajo Poncio Pilato", y en ello se sientan las
bases de la cristiandad.
3.- ANALISIS DE LAS CRUCIFIXIONES
La practica de la crucifixi6n como rito de purif icaci6n
y salvacibn, da a la novela un toque mhgico-religioso, a la
vez que sanguinario. Es interesante el salto efectuado de las
crucifixiones de animales a .los Sacrificios humanos, parece
que estos Illtimos resultan mds efectivos para la adhesidn y
verdadera transformaci6n de "10s Hermanos del Arcatt. Veremos
aqui, por separado, ambos tipos de sacrificios.
3.1.- Crucifixibn de diversas clases de animales (39).
Desde el principio de La novela nos encontramos con el
rasgo caracteristico del sac:rificio de diversas especies a
traves de crueles ceremonias que "consisten en Crucificar
toda clase de animales, a f.in de que su sangre bañe a los
adictos arrodillados al pie de la cruztt ( p . 4 0 ) . Aqui
aparecen incontables cadaveres de animales.
Cuando Pantaleen Pantoja acude a preparar el lugar donde
instalara el "Servicio de visitadoras", tiene que recurrir a
la fuerza pública para desalojar a los @@Hermanos del Arca",
quienes se disponian a crucificar un lagarto, el cual les es
decomisado.
HEIS adelante se afirma que "la mania de esta religidn es
crucificar animales" (p. 7 4 ) , , de esta manera sabemos que ello
es parte importante del ritual celebrado por la "Hermandad
del Arca".
19
Por otro lado, tenemos que tambien en prenda de amor y
fidelidad se crucifican animales, como por ejemplo, la
gallinita que sacrifican la visitadora Maclovia y el ex-
sargento Tedfilo Gualino (p. 1 7 6 ) .
A s i mismo, como advertencia al *tSinchiq', crucifican un
gato, para que 61 sepa de lo que son capaces los ftHermanosft
(p. 187).
En la secta de la nHermandadt' se recurre al sacrificio
de animales porque su dirigente esta convencido de que los
sacrificios como ofrenda a Cristo crucificado son buenos a
los ojos de Dios ( 4 0 ) .
De manera fundamental, este tipo de sacrificios se basa
en el deseo de que Dios aplace el momento del fin, por un
lado, y por otro, tiene la finalidad de alcanzar la
purificacidn de los pecados, ya que si se encuentran
pecadores, serdn indignos del "Reino de los Cielos".
Vemos as€ que el sacrificio de animales e insectos de
toda clase comienza a darse como parte importante del ritual
de los ttHermanoslu; es quiz& uno de los elementos que sostiene
a la secta, situacidn que surge desde el momento que escuchan
a su guia decir: I'Todo lo que clavas en el leño es ofrenda,
todo lo que acaba en la madera sube y lo recibe EL QUE HuRIo
EN LA CRUZ' (pp. 3 2 - 3 3 ) . Creen entonces firmemente que lo
clavado en las cruces sube al cielo y lo recibe Cristo mismo
como ofrenda para lograr con ello la purificacidn de sus
pecados y el aplazamiento del fin del mundo que, seglin ellos,
ocurrir6 pronto.
Podrfamos pensar que la secta es autenticamente
cristiana, sin embargo, el cristianismo no se sustenta en la
prdctica del sacrificio de animales. Dicha practica era
celebrada por pueblos paganos, y en la Biblia, en el libro
del ItLeviticol9, capitulo 9 , versiculos 1 al 4, se habla de
los sacrificios de animales practicados por los israelitas.
Aqui hay múltiples ejemplos dle sacrificios de animales, los
cuales tenian el objeto principal de expiaci6n y holocausto;
y eran ofrecidos directamente a Dios. Los animales utilizados
para este prop6sito eran primordialmente becerros, carneros,
machos cabrios, corderos y bueyes; todos sin defecto alguno,
y debian ser inmolados delante de Jehovd.
Por otra parte, al revisar las raices indigenas del
Perd, encontramos que los santuarios estaban destinados al
sacrificio de los rebaños de auquenidos (41). La utilizaci6n
del ganado sagrado era sometida a mecanismos de distribucidn,
tributo y herencia, ya que tambien parte del rebaño se
empleaba para la subsistencia de los sacerdotes(42).
3 . 2 . - Crucifixidn de seres humanos.
El Hermano Francisco influye de manera importante en
todos los grupos sociales y en toda clase de personas
incultas o no, sobre todo, como ya se apunt6 en el inciso
1.1., la secta recluta a sus seguidores entre las clases
populares. Estos adeptos pronto pierden sus antiguos valores
... """. . I_. _r .- ___""_ ( I , . _ . _ ' ,""", _____.___ . . " -... . - - - - - - - . ---. . "
51
f529iY7 religiosos y forman una especie de secta fanatica que termina
cometiendo actos criminales mediante la realizaci6n de
sacrificios humanos.
Entonces cabe preguntarnos: ¿Que elementos permiten o
provocan la ejecuci6n de actos de esta naturaleza? ¿Que los
origina? ¿En qu6 tipo de sociedades pueden darse?
Marla Isaura Pereira, en Historia y etnoloaia de l o g
mavimientos mesl8nlcos , nos dice que el postulado bdsico del mesianismo se fundamenta en el deber que tiene el individuo
de intervenir en la corriente de los acontecimientos para
orientarlos de manera diferente: y que al igual que los
civilizados, los primitivos saben que pueden intervenir en la
corriente de los hechos socia.les, siempre que la intervenci6n
. .
sea conforme a las tradiciones, religiosas o no. Sin embargo,
nos dice Maria Isaura Pereira, el tipo de religi6n es muy
importante, pues para que u'na creencia mesidnica surja, es
preciso que la religidn este orientada hacia el mejoramiento
de la vida material, y no hacia la contemplaci6n del
perfeccionamiento del alma ( 4 : 3 ) .
ES importante no perder de ViSta este enfoque para
efectuar un cuidadoso seguimiento de las crucifixiones y
estudiar sus caracterlsticas.
Las crucifixiones que se realizan dentro del reino
animal se llevan a cabo con monos, perros, tigrillos, loros,
garzas y , $610 como intento, con un lagarto (p. 4 0 ) . Tambidn
se crucifican cucarachas, mariposas, arañas, ratones (p . 7 4 ) ,
M".- . "r""-cn."""""","""""""*"-.r"~."-.".~~-~~." " . ~ . ~ ~ " ~ " " , " " . . _". _- ._"" . " -
57.
tenemos asi mismo la crucifix:ibn de una gallina (p. 176) y ,
finalmente, se sacrifica un gettito (p. 187).
Las crucifixiones de seres humanos se inician de manera
cruel y escandalosa; comienzam por crucificar a un niño del
poblado de Moronacocha (p. 113), enseguida comercian con este
hecho: imprimen estampas del niño-martir ( p . 1311, fabrican
estatuas de &te (p. 132), y tambien elaboran panes-nifio (p.
141). A este pequeño lo santifican y lo llaman el "Santo niño
de Moronacocha" . Nos encontramos tambien, por otro lado, con un intento
de crucifixi6n de un indio piro (p . 179); luego crucifican al
anciano Arevalo Benzas (pp. 187, 1 9 8 ) . Hay dos intentos m8s
de crucifixih (p. 211), an.tes de crucificar a la anciana
Ignacia Curdimbre Peldez (p. 216), a quien, igual que al niño
de Moronacocha, santifican y comercian con las estampas de la
"Santa Ignatia".
Crucifican tambih a un suboficial del Ejercito (p.
2241, quien no muere gracias a que es rescatado
oportunamente, aunque queda nanco y cojito (p. 226).
En un momento dado, el Ejercito decide recurrir a la
Guardia Civil, puesto que en el transcurso de seis meses han
sacrificado a cuatro persona:s (p. 231). A pesar de ello, adn
crucifican a una viejita (p. 233).
El momento culminante de ambas historias, la de las
visitadoras y la del Hermetno Francisco se inicia con el
ataque a las visitadoras en la Quebrada del Cacique Cocarna,
por parte de siete sujetos que se hacen pasar como *vHermanos
53
del Arca", quienes luego de violar a Olga Arellano Rosaura,
alias Itla Brasileña", deciden crucificarla en un &bol
cualquiera ( 4 4 ) , para hacer creer a las autoridades que
fueron los seguidores del Hermano Francisco los autores de
tan macabro crimen.
Resulta muy particular el caso de **la Brasileña", pues
este personaje tambibn es visto como santa y mdrtir a traves
de los ojos del Hermano Francisco; y como "soldado caido en
el campo de batalla" por Pantale6n Pantoja, su jefe y amante.
Finalmente, se comien:za a hablar de la propia
crucif ixi6n del Hermano Francisco, la que, desde mi punto de
vista, resulta ser la escena mbs atroz de la novela y se
relaciona directamente con la visitadora Olga por la manera
en que la naturaleza participa en estas muertes (pp.
2 5 2 , 2 9 7 ) .
De forma sorprendente, el Hermano Francisco se hace
presente primero con el envio de su ItEpistola a los buenos
sobre los malostt al diario gl Orie-, para justificar a sus
seguidores, y en 6sta afirma que "Las Hermanas, los Hermanos
no matan, no violan, no asaltan, no roban y s610 odian la
violencia del MALH ( P . 2 7 2 ) . Aquí se refiere a Itla Brasileña"
como "pobre, aunque no habia escuchado la palabra, desde ya
la incorporamos a nuestras; oraciones y desde ahora la
recordaremos junto con nuestros mdrtires y santos" (p. 2 7 3 ) .
Y segundo, lleva las cosas hasta sus dltimas consecuencias al
morir 61 mismo crucificado.
Entonces, claramente se aprecia que los sacrificios
humanos llevados a cabo en :La obra tienen el propdsito de
actualizar la muerte de Cristo; principalmente el sacrificio
del Hermano Francisco cumple dicho propbsito, ya que
representa el ejemplo por seguir para sus devotos que deseen
ser otros *lcristos*t de manera autentica.
Por otro lado, desde cal punto de vista de la misa
catdlica, en ella se ofrece una "ofrenda consagrada*$,
simbolizada por el pan y el vino presentados en el altar y
acompañados por la devoci6n y por los sacrificios
espirituales de los participantes, esto es para que se
conviertan verdadera, real y sustancialmente en el cuerpo y
en la sangre derramada de Cristo mismo ( 4 5 ) .
Es asi como en la misa cat6lica, mediante la comuni6n,
que consiste en tomar la lhostia y beber el vino, estos
representan el cuerpo y la sangre de Jesucristo,
respectivamente, y por ello, se da simb6licamente, cada vez
que esto se conmemora, la muerte de Jesús.
Los sacrificios practicados a lo largo de la historia de
la "Hermandad del Arca", as1 como propiamente la muerte del
Hermano Francisco, se dan de manera cruenta, y no recurren a
ningún simbolismo. En este sentido existe relaci6n con la
crucifixi6n de Cristo, quien fuera azotado, abofeteado, le
colocaron una corona de espinas sobre la cabeza, que le
bañaba el rostro de sangre, lo escupieron y golpearon en la
cabeza: y ademas fue juzqlado y tratado como un vulgar
S5
delincuente, para despues ser crucificado en medio de dos
ladrones ( 4 6 ) .
Al lograr evadir al EjBrcito, el Hermano Francisco
alcanza su objetivo final: morir de acuerdo a sus preceptos
religiosos; termina sus dias terrenales en la cruz como
ofrenda mediante un sacrificio real y autentico.
3.2.1.- El niño-martir de Mormacocha.
Llama nuestra atenci6n el hecho de que el primer
sacrificio humano en la obra se lleve a cabo con un pequeño,
no sabemos de qu6 edad, pero posiblemente se trata de un
bebe. Pocha le da esa dimensi6n al relacionarlo con su hijo
pr6ximo a nacer.
En el capítulo 5 , son ella y su suegra quienes siempre
estan hablando del niño crucificado ( 4 7 ) .
Encontramos, por otra parte, que el sacrificio del niño-
martir se convierte en una noticia sensacionalista, la que
posiblemente se est6 dando a cada momento por la radio y tal
vez hasta haya sido publicada en todos los diarios de la
ciudad, lo cual se infiere debido a que Pocha dice que conoce
"el crimen de oidas y de leidas" (p. 115), y es entonces
cuando comienza a vivir la angustia que le produce pensar en
la crucifixidn de su "cadetito".
El sacrificio del niho-mdrtir est6 envuelto con efectos
naturales, como es una tormenta; hay todo un proceso de
agonfa hasta el momento de la muerte del niño, es decir,
muere lentamente luego de ser clavado vivo por los "Hermanos
del Arca'!. Este pequeño es comparado con "un Cristo chiquito"
(p. 120).
En esta ocasidn hay gran movilizaci6n de la policia en
busca de los ejecutores del c.rimen (p. 121). Cuando detienen
a un número considerable de ellos y les preguntan: ¿quien
clavd al niño? Contestan "yo1*. El narrador compara este hecho
con LOS tres mosaueteros, cuyo lema es "Uno para todos y
todos para uno" (p. 124). La situaci6n se debe a que los
"Hermanos" se encuentran perfectamente unificados, en estado
de fusidn grupal.
Por otro lado, resulta interesante la manera en que se
relaciona la crucifixi6n del niño de Horonacocha con el
embarazo de Pocha. Para ella representa un constante temor a
que su llcadetitol* nazca vvfencjmenon (p. 1 2 8 ) . Pero lo curioso
radica en que siempre estan :hablando de este acontecimiento,
de tal manera que, como una regla de cuartel militar, Pantoja
prohibe en su casa hablar del nifio crucificado y de "los
locos del Arca" ( p . 1 2 9 ) , 1.0 que tiene como resultado una
respuesta contraria. Ademds, enseguida comienzan a circular
en el mercado estampas de la imagen del niño-mdrtir, las que
la gente comienza a comprar, como es el caso de la madre de
Panto ja.
Doña Leonor nos explica que el sacrificio de este niño
representa una monstruosidad sin nombre, pero que fue por
miedo y no por maldad; de tal manera, nos queda claro que
para ella significa algo muy natural, ademAs, dice, estaban
57
llenos de miedo ante una tormenta que los hizo imaginar la
inminente consumacidn del fin del mundo. De tal manera,
creyeron que con el sacrificio del niño, Dios aplazaria el
momento final.
Los ttHermanostl actuaron movidos por la idea de que el
niño iria directo al cielo, y' le erigen altares en todas las
tlArcastt (p. 131); ellos estan convencidos de que cumplen la
funcidn de una especie de emisarios ante Dios. Nada mejor que
iniciar el rito de la crucif ixi6n con un niño, reflejo fiel
de la pureza.
Por otra parte, el hecho de que aparezcan estampas,
oraciones, estatuas y hasta panes-nifio, provoca el aumento
del número de adeptos a la "Hermandad del Arca" (pp. 132,
141). Posiblemente esto les de la certidumbre de que lo que
ellos creen es real y verdadero
3.2.2.- La Santa Ignacia.
La crucifixidn de la amciana Ignacia Curdimbre Peldez
deja ver matices tan impresionantes como los del niño de
Moronacocha. Dicho sacrificio es realizado a las doce de la
noche en una plaza pública, ante toda la comunidad compuesta
por 214 habitantes.
Dos guardias civiles no pueden hacer nada para impedir
el hecho. Por el contrario, resultan apaleados. Vemos cbmo,
igual que en el caso del niño-m&rtir, la agonia de la anciana
ocurre en el transcurso de la noche. Tambibn, como con el
niño de Moronacocha, los llHarmanosll se embadurnan caras y
cuerpos con la sangre, se la beben y luego comienzan a adorar
a la víctima.
A semejanza del anterior sacrificio, circulan estampas
de la Santa Ignacia ( p . 216), las cuales son igualmente
aceptadas.
3.2.3.- Avelino Miranda, sub-oficial del Ejercito.
Este personaje llega a ser clavado en la cruz al ser
capturado por los ltHermanos cie1 Arca", pues se encontraba de
permiso y vestia de civil, lo que provoc6 que no
identificaran su condicidn de soldado. Esta situacidn nos
hace pensar que en ningún momento los "Hermanostt desearon
comprometerse con alguna instituci6n, mucho menos con el
E j6rcito.
El hecho no tiene gran relevancia, lo importante radica
en que el Ejercito interviem oportunamente en el rescate de
su soldado, quien resulta lisiado de tal experiencia (p .
226).
4. - EL ESTUDIO DE LOS VASOS COMUNICANTES ENTRE LA HISTORIA
DEL HERMANO FRANCISCO Y LA HISTORIA DE LAS VISITADORAS.
La yuxtaposici6n, el paralelismo y la tbcnica de los
vasos comunicantes son los elementos a los que recurri6
Vargas Llosa para desarrollar dos historias totalmente
diferentes, que luego fusiona, para obtener con ello una
historia distinta. Precisamente la historia nueva es la que
me interesa analizar, pues esta es producto de los vasos
comunicantes.
4.1.- Doña Leonor, simpatizante de la secta.
Hemos visto que uno de :los rasgos caracteristicos en la
estructura de la obra pantae6n y l a s visitadoras es el
paralelismo que emplea Vargar; Llosa en su narraci611, el cual
resulta aún mas interesante al agregarse a ello la tecnica de
los vasos comunicantes empleada a lo largo de ambas
historias, y esta se da precisamente cuando las escenas se
sobreponen y los diferentes espacios y tiempos se invaden :
sucede asf cuando los VBS<XS Comunicantes estdn en pleno
funcionamiento. El propbsito de esta tecnica es crear una
ambigiiedad a traves de la asociaci6n de dos o m8s episodios
que ocurren en tiempos y lugares distintos, para que las
vivencias de cada episodio circulen de uno a otro y se
enriquezcan mutuamente ( 4 8 ) . En particular, me detendre a
analizar los momentos relevantes de la secta de los *'Hermanos
del Arca".
Encontramos, entonces, que desde el inicio de la novela,
y a lo largo de ella, de una linea final de un pdrrafo que
concluye, se inicia el siguiente como si fuera continuacidn
del anterior o una respuesta a una pregunta dada; lo que
sucede es que las dos historias corren al mismo tiempo, hasta
fundirse en algunos pasajes, lo cual crea nuevas situaciones.
Por ejemplo, la señora Leonor, madre de Pantaleh, da la
bendici6n a su hijo (p. 12), y con ello cierra el pdrrafo,
pero en la siguiente linea habla el Hermano Francisco y da la
bendicidn a sus "Hermanos", de tal manera que parece estar
bendiciendo tambih a Pantoja.
De este modo, a lo largo del primer capitulo, los
acontecimientos se presentan yuxtapuestos, sin
interrelacionarse una historia con la otra, y es aqui donde
se encuentran nuestros peitsonajes protagonistas de la
"Hermandad del Arca" y de la "Hermandad de las visitadoras",
aunque, como sabemos, ambas persiguen prop6sitos muy
distintos; una tiene fines religiosos, la otra pretende
satisfacer necesidades de cardcter sexual de los hombres del
E j4rcito.
Uno de los personajes en el que estan presentes los
vasos comunicantes por medio de los cuales se unen ambas
historias, es la sefiora Leonor, quien presenta la
caracteristica de llamarse igual que la matrona "Chuchupe";
es como si fueran dos mujeres en una; dos personajes con
61
diferentes destinos. La una, madre abnegada y
sobreprotectora, pero que en su tiempo libre se dedica a
actividades frivolas, como lo:; juegos de canasta o el simple
chismorreo con sus amigas. La otra, dedicada a la
contrataci6n de prostitutas.
Por otra parte, es en la carta que Pocha envía a su
hermana Chichi donde se refiere a las costumbres de dofia
Leonor, y con ello vuelven a entrelazarse las historias; la
esposa de Pantoja nos informa que su suegra se consuela con
la religidn, "o mejor dicho con la brujeria" (p. 6 4 ) , dice
Pocha. Ella est6 considerando al Hermano Francisco como a un
brujo.
Asegura tambien que doíia Leonor cree que el fin d e l
mundo se acerca (p. 6 9 ) , y por ello se da a la tarea de
fabricar crucecitas de madera para en ellas crucificar cuanto
insecto o animal le es posible.
Tambien sabemos que doña Leonor presencia de cerca uno
de los sacrificios humanos efectuados por l o s tlHermanos del
Arca". Situaci6n ante la cual se desmaya y queda con los
nervios destrozados por varios días (p. 114).
Lo anterior nos indica que doña Leonor tiene un cardcter
susceptible de ser presa fdcil de las creencias de "la Santa
Hermandad" debido a sus rasgos de personalidad histerica.
La señora Leonor cumple una doble funci6n: una consiste
en ser la madre del personaje que encabeza la historia del
wlServicio de visitadorasV1, la otra es figurar como miembro de
la nHermandadll, y desde esta perspectiva vamos a analizarla.
por las mañanas, Pocha encuentra clavadas cucarachas,
mariposas, arañas y tambien un rat6n. Se entiende que este
tipo de prdcticas doña Leonor las realiza, posiblemente, a
las doce de la noche, de acuerdo a la costumbre de la secta
del "Arca". Esta situaci6n provoca riñas entre suegra y
nuera, por lo sucio que resulta para la segunda.
TambiBn, cuando estalla una tormenta, lo Cual es muy
frecuente en esa poblacih, doña Leonor se pone a temblar
ante la posibilidad del fin del mundo; piensa que una gran
cruz en la entrada de su casba es necesaria para detener el
momento del fin [p . 75).
Mirada por Pantoja, doña Leonor resulta como una
pobrecita que, por ver el sacrificio del niño-mdrtir, cae
desmayada y queda con los nervios destrozados. Para nosotros
lectores, esto resulta poco creible, ya que es evidente la
susceptibilidad del cardcter de dona Leonor, quien demuestra
que no es otro su deseo que ver de cerca la crucifixi6n del
niño-martir de Moronacocha, de hecho, este personaje se
encarga de narrar con todo detalle el sacrificio, ya que
presencid su crucifixi6n al pie de la cruz.
Por su parte, Alicia, la amiga de Pocha, considera que
para doila Leonor fue terrible ver tal espectdculo, por lo que
no desea &Sta, ni siquiera Noir hablar del "Arca" y estaria
dispuesta a crucificar al Hermano Francisco por el mal rato
que pas6 (p . 122)
Panto ja, desde su punto de vista, justifica a su madre,
ya que para 61, lo que ocurre es que ella se encarifid con los
63
"Hermanos del Arca" (p. 124) : por eso iba de vez en cuando a
Moronacocha a llevarles ropa i l los niños. Afirma tambihn que
ella nunca habia estado apegada a la religi6n y que con la
experiencia del niño crucificado va a alejarse por completo
de la "Hermandadn.
Despues de esta experiencia se refugia en la Iglesia
catblica, motivo por el que ahora se pasa las horas en la
Iglesia de San Agustin (p . 126), y es entonces que Panto ja
mira con buenos ojos que su madre sea catdlica y no llHermana
del Arca".
Doña Leonor se pasa el. dia hablando del nifio hecho
mdrtir, lo cual reafirma su caracter histerico y que
efectivamente la sanguinaria escena le impactb.(p. 129).
Ella tambien, al igual que los "Hermanos del Arca",
adopta la costumbre de adorar y hacer oraciones al niAo-
mdrtir, por lo que lleva sobre sus ropas una estampa de Bste
para besarla. Al mismo tiempo justifica dicho crimen,
argumentando que estaban asustados con la lluvia, que lo
Único que deseaban era que Dios aplazara el fin del mundo.(p.
131).
Doña Leonor habla con cariño de los "Hermanos del Arca"
porque los ha tratado y los conoce bien. Est6 convencida de
que cuando se convierten verdaderamente cambian de estilo de
vida (p. 134).
Pocha siente que su suegra sigue siendo llHermanat' porque
habla con cariño de los "Hermanos". La cree capaz de
crucificar a su futuro nieto (p. 135).
Por otra parte, a la señora Leonor le parece que "el
pan-niño es el mds rico de Iquitos" ( p . 142), y asi como
ella, la mayoria alimenta esta situaci6n que raya en el
consumismo a raiz de semejante: crimen.
Doña Leonor se escandaliza al enterarse de la clase de
actividades que Pantoja viene desempeñando desde su llegada a
Iquitos. A ella le preocupa "el que dir8n". Se siente
señalada con el dedo por toda la gente (p. 213).
Por otro lado, doña Leonor, debido a sus rasgos
histtSricos, cuando se lo propone llora o rie con facilidad,
como arma para conseguir lo que desea.
Asi tanbien encontramos que se trata de una madre
sobreprotectora, por lo que justifica a Pantale6n sin poner
limite. Por ejemplo, reprueba la actitud de Pocha ante la
conducta del esposo, cuando se entera que su marido es amante
de "la Brasileña" , mientras que doña Leonor sigue
beligerante con 61 como siempre.
Le parece mas denigrant.e el "Servicio de visitadoras"
que la "Hermandad del Arca", la cual, en un momento dado,
atenta contra la vida humana.
Resulta sorprendente que doña Leonor acuda ante el
Obispo para contarle su tragedia. Cuando sabe que su hijo es
el dirigente del "Servicio de visitadoras#' se hace pasar por
una excelente madre y una buena mujer catblica.
Ella deberia saber que el tinico responsable del
desarrollo y crecimiento del "Servicio de visitadoras" es su
propio hijo.
Hace mayor escdndalo al enterarse de que Pantoja se
present6 en la Iglesia de San Agustin con una de las
visitadoras, pero lo que mds le importa es el hecho de que
todas las señoras de Iquitos se hayan dado cuenta.
Cree que pidiendo de rodillas al niño-mdrtir de
Horonacocha puede concedkrsele el deseo de que su hijo
abandone el llServicio'l (p. 239).
Por otro lado, doña Leonor se pasa las tardes rezando en
la Iglesia, y a los ojos de su propio hijo resulta "una
beata", pero sus rezos, opina Pantoja, no tienen respuesta
debido a la mezcla que hace: pide a todos los santos por
igual: al niAo-m6rtirI al Cristo de BagazBn, al Señor de los
Milagros y a la Santa Ignacia (p. 2 4 0 ) .
Como ya 6e dijo antes, doña Leonor trata a Panto ja como
si fuera un beM, y no scjlo eso, sino tarabien vive al
pendiente suyo todo el tiempo: el destino de su hijo es el
destino de ella. A donde quiera que &te vaya, ir8 ella
tambibn.
Presume obediencia ante Pantoja, le da la bendicidn,
como siempre; lo despide y luego se echa a llorar, pues
imagina las peores desgracias, sobre ellos (p. 279).
Finalmente, aunque se vi% de Iquitos, se lleva una serie
de recuerdos; asi como diversos objetos que siempre le
recordaran al niño-mArtir, a la Santa Ignacia y al Hermano
Francisco, de los cuales lleva medallas, estampas cruces y
oraciones (p. 298).
Tambih "compra collares de semillas, de escamas, de
colmillos, flores de plumas de ave, arcos y flechas de hilos
multicolores" ( p . 2 9 8 ) .
Es posible que por su caracter histerico y porque doña
Leonor no pudo realizar las mismas actividades que antes
hacia en Iquitos, como: jugar canasta, oir los radioteatros,
dar tecitos, etc. (p . 6 4 ) , se haya visto orillada a acudir a
las "Arcas", y , en un momento dado, a aliarse con los
"Hemanosn, porque ahi encontrd, de alguna manera, el refugio
que buscaba
4 . 2 . -Pocha y su "hijo crucificado" .
Pocha y doña Leonor hacen una pareja de personajes
tipos. Cumplen funciones especificas, una es la esposa, y la
otra es la madre del personaje protagonista de la historia de
las visitadoras; doAa Leonor nos conecta con la historia de
la "Hermandad del Arca". E1:La aporta la mayor informacidn
acerca de los nHermanosl', pues se mezcla con ellos y
participa de sus ritos.
Lo que vincula a ambas es que representan lo cotidiano,
común y tradicional. Les agra'da el chismorreo, a s i como estar
hablando siempre de lo mismo; no se cuestionan acerca de
ninguna situacidn trascendental. Se dejan llevar por sus
arrebatos, por lo que siempre estdn peleando, dicha situaci6n
es natural que ocurra, lo anormal seria que mantuvieran una
buena relacidn, pues la sociedad machista que refleja la
novela estima que asi debe ser el mundo de las mujeres.
En cuanto a Pocha, 6sta resulta una mujer tan comb que
intencionalmente es llamada por su hipocoristico siempre, y
no por su nombre original, que desconocemos.
La funci6n que cumple Pocha es tambibn de caracter
informativo principalmente, ya que a traves de la carta que
envia a Chichi, su hermana, comenta una serie de aspectos
interesantes acerca de lo que estamos analizando.
Por ejemplo, habla de la irrupcien del catolicismo en la
selva, de las costumbres de su suegra respecto a la religi6n
de la secta del Hermano Francisco, asi como de este, de las
ayahuasqueras y de las "lavanderas" de Iquitos.
Pocha, al mismo tiempo que es personaje antagdnico de
doña Leonor, resulta muy similar a bsta; ambas son amas de
casa, viven s610 para las laloores dom6sticas y aparentemente
no les preocupa nada realmente diferente a ello, aunque sf
les llama la atenci6n lo relacionado con la religi6n del
nArcalf.
Las vincula, por otro l a d o , el parentesco adquirido por
el matrimonio con Panto ja. La vida de estas mujeres gira en
torno del protagonista masculino, que a su vez depende de
ellas y de "la Brasileña".
Entre doña Leonor y Pocha existe una importante
diferencia: ¿Por que Pocha no se hace Hermana del Arca?
Sabemos que si va a Horonzncocha con su suegra a oir al
Hermano Francisco, y es entonces cuando doAa Leonor queda
prendada de 61 ( p . 7 4 ) . La respuesta es que Pocha simple y
sencillamente no cree, es decir, no tiene fe en el gula de la
I'Hermandad del Arca".
En cuanto a su posible llhi jo crucificadot1, se trata sblo
de una idea que ella maneja como factible ante el hecho de
tener tan cerca a un miembro de la "Hermandad del Arca", y
que es precisamente la señora Leonor, a quien considera capaz
de cometer tal crimen. Esto se convierte para Pocha en una
obsesi6n y siempre que puede lo comenta; es algo que se
manifiesta hasta en sus sueños.
Lo mas interesante es que la homicida es doña Leonor.
Pocha la ve asf desde el inicio de su embarazo y sueña que su
suegra le clava una lanza en el abdomen ( p . 138). Este dato
nos habla de la rivalidad entre mujeres.
De esta manera, el supuesto "hijo crucificado" de Pocha
s6lo es resultado de una imaginaci6n influenciada por las
circunstancias del momento, y debido a la cercanfa con el
movimiento que desencadenan los "Hermanos del Arca". Tambih
debido a la rivalidad con doiia Leonor, y a que Pocha adquiere
poder por la maternidad.
4 . 3 . - La visitadora Maclovia, miembro de la "Hermandad del
Arca".
Este personaje resulta interesante gracias a que cumple
la funcidn de conectar la historia de las visitadoras con la
l@Hermandad del Arcall. Por ello mismo, desde el capitulo 3 de
la novela, Pocha narra a su hermana Chichi, a traves de una
carta, la manera en que penetra una lllavanderall en el
dormitorio de su casa, sin que en ese momento sepamos que se
trata de Maclovia, la cual e:; vista como Wna huachafita de
lo mas presentable, cinchada para resaltar las curvas [ . . . I ,
con las uñas pintadas y muy arregladita@@ ( p . 7 8 ) .
Es hasta el capitulo 6 cuando se nos informa que esta
visitadora se fuga con el jefe de la guardia, encargado de la
protecci6n del convoy, sargento primero TeOfilo Gualino, y
entonces comienzan a fusionarse ambas historias mediante
vasos comunicantes, pues los "Hermanos del Arca" son quienes
brindan protecci6n a dicha pareja (p. 1 6 0 ) .
En este sentido resa1t.a el rasgo humanitario de la
"Hermandad del Arca" en contraposici6n con el "Servicio de
visitadorasll, que expulsa a Maclovia 'Isin indemnizaciones y
sin carta de recomendacidn por su irresponsable
comportamiento11 (p. 165) ( 4 9 ) .
MAS adelante vuelve a aparecer con el envio de su carta
a Pocha, en la cual declara que ella es "la lavandera" que
hizo entrar a su casa por equivocaci6n, creyendo que iba a
lavarle la ropav1 (p . 174).
La funci6n de esta carta es, en primer lugar, abrirle
los ojos a Pocha ante una realidad que tal vez no desea ver
( 5 0 ) ; y en segundo, establecer vasos comunicantes entre ambas
historias, ya que en ella, ldaclovia narra su matrimonio con
Tebfilo, asf como sus experiencias vividas de cerca en la
"Hermandad del Arca".
m
Llama nuestra atencidn el hecho de que Maclovia ruegue y
pida piedad a Pocha como a una especie de "santa" que puede
concederle un milagro.
A s i tambi&n, como despedida le besa los pies tanto a
ella como a Gladys, la hija recien nacida de Pocha, a quien
compara con el nifio-mArtir de Moronacocha.
Mas adelante, en la entrevista que le hace "El Sinchi#@ a
travbs de una emisi6n radial, se refiere Maclovia a Pocha
como si esta fuera una virgen con capacidad de interceder por
ella ante Panto ja, de tal manera que seria perdonada y
aceptada nuevamente en el llServicio de visitadoras" (p. 200).
Maclovia refiere que los llHermanos del Arca" los
protegieron y ayudaron en todo, hasta el extremo de abandonar
sus casas e internarse en el monte para no ser capturados por
el Ejercito. Para ella la secta religiosa esta formada por
gente buena que cree en Dios y hace el bien ( p . 176), pues lo
vivid en forma directa sin que nadie le contara.
Por otro lado, recrimina al lnSinchiln que calumnie e
insulte a sus 14Hermanosn, quienes, sewn ella, solamente
desean nque reine el bien y Dios est6 contento11 (p. 1 9 6 ) .
El caso de Tedfilo es relevante, tanto para la historia
de las llvisitadorasll como para la llHermandad del Arca", y
ello se liga directamente a la visitadora Maclovia. Esta lo
introdujo en la religi6n del lnArcang. El se convenci6 al
conocer a los nHemanostl; la autenticidad y la solidaridad de
estos en los momentos mas clificiles que pas6 con Maclovia
71
durante su fuga, lo hicieron decidir ser ap6stol (PP.
1 9 7 , 1 9 8 ) .
Esto tiltimo resulta una ironia de parte del autor
implicit0 para la visitadora que deseaba iniciar una nueva
vida en compañia de un esposo que la alejaria para siempre de
la prostitucibn.
Es tambidn una ironia q'ue I1el SinchiV1, al despedir a
Maclovia de la emisi6n radial, diga a &Sta que al salir del
"Servicio de visitadoras" se le brinda la oportunidad de
regenerarse y volver a la vida honrada y normal (p. 201) , lo cual es imposible, pues todo esta en contra de ella.
A partir de aquf este personaje no vuelve a aparecer, ha
cumplido ya su funcidn de vaso comunicante entre ambas
historias.
n
4 .4 . - La visitadora Santa y MBrtir de los
I1Hermanos del Arca".
Uno de los oficios mfis antiguos ha sido la prostituci6n;
y en la Biblia, tanto en el Antiuuo Testamento como en el
VuevQ, encontramos la mencitjn de rameras a las que Dios
perdona una vez que se arrepienten de su pecado. En
el caso especifico de Maria Magdalena, sabemos que Jesucristo
mismo arroj6 7 demonios que se habian posesionado de ella
(51); posiblemente uno de estos demonios se hallaba ligado a
la prostitucibn. Este personaje es importante porque una vez
dada su conversidn sigue y sirve al Señor Jesucristo a donde
quiera que este va. Es mirada con buenos ojos porque
verdaderamente encontr6 el perddn y su vida cambib.
La anterior explicaci6n tiene el fin de confrontar a llla
Brasileña" con Maria Magdalena; en ellas encontramos cierta
semejanza, ya que la primera es defendida y vista con buenos
ojos por parte del Hermano Francisco, aunque ella no le
sigui6 de cerca, si pertenecia a la "Hermandad del Arca". La
informaci6n al respecto nos es reservada hasta el momento de
su muerte.
Para darnos datos acerca de la vida de "la Brasileña",
Vargas Llosa recurre a la tecnica de la biografia; misma que
a pesar de ser breve, resulta completa. A s i , sabernos que la
madre de Olga fue doña Hermenegilda Arellano Rosaura,
"Traguito Hermes", quien abandona a Olguita de escasos ocho
años (p . 266).
"""".""""". _...""_ "~X""*"T:~".r""-~."~""""""-"-""l"""""~"-."- ..."" ~ ".."__ _-.r" " - . . ~
n
desamparada chiquilla es recogida en su Orfelinato
por una secta religiosa llamada "los Adventistas del StSptimo
Dia", que es una de las Iglesias formadas por los
protestantes. Es entonces cuando la niña recibe las primeras
enseñanzas, y estos religiosos intentan regularle la vida con
los preceptos morales de esa Ilglesia (p. 2 6 6 ) .
Olga es descrita por el Presbftero Abraham Mc Pherson
como "una morochita alegre, de inteligencia rapida y espiritu
vivaz, [...l. Lo que la perdid1 fue, sin duda, la gran belleza
fisica con que la dot6 la. naturaleza a partir de la
adolescencia" ( p . 267). Esto significa que la chiquilla no
era de cardcter rebelde sino m&s bien dc5ci1, y pudo haber
tenido otro destino: sin embargo, a sus 15 años se fuga del
orfelinato con el joven pastor Richard Jay Pierce Jr., recien
llegado de NorteamGrica, quien, presa de remordimiento por
haber sido debil ante el encanto de la muchacha, se ahorca en
una palmera en las afueras del caserio de San Juan. Tenemos
asi una historia trdgica con la primera muerte por el amor a
"la Brasileñan.
A partir de esta experiencia empieza "a rodar por la
pendiente de las malas costumbres y la vida airada" ( p . 2 6 8 ) ,
para lo cual le ayudaban su f isico y su gran simpatia. Desde
esta Bpoca se le empieza a ver en los sitios nocturnos de
Iquitos.
Las murmuraciones atribulan a Olga muchos protectores y
amigos de clase acomodada, la mayor parte de ellos casados,
con quienes la joven se presentaba en público. Se dice que
Olga Arellano presenta rasgos que interesan a la
vinculaci6n directa, por una parte, con el capitdn Pantoja, y
con el Hermano Francisco, por la Otra.
ES hasta su muerte, cuando se publica, en el número
especial del diario E1 Orienta, un reportaje en el Cual se
habla de *!la Brasileña'! comc) de una "joven y descarriada
belleza loretanan ( p . 2 4 7 ) , a quien Pantoja calific6 como
"desdichada mdrtir del cumplimiento del deber y victima de la
soecidad y villania del hombre" (p. 2 4 8 ) .
La solidaridad y el sentimiento que se despertaron ante
la muerte de Olga se manifiestan en el cortejo fúnebre que la
acompañib a su última morada, pues &te fue seguido "de gran
ndmero de taxis y vehiculos particulares*! ( p . 2 4 8 ) ; asi como
de muchos curiosos, pero sobre todo de sus compañeras "de
traba jar*, las "visitadoras" y con verdadera
muestra de congoja en el rostro (p. 2 4 9 ) .
Sobre la tapa del ataod es colocada una bella orquidea,
y la carroza es cubierta de flores; todo esto acompafiado por
una "Elegia fdnebre" de parte de Pantoja como Capitan de
Intendencia del Ejercito Peruano, en la que reconoce
poblicamente a Olga como "una lujosa flor que enriquecia y
perfumaba1* al "Servicio de visitadoras".
A travbs de esta mElegia*l vemos una serie de atributos
positivos que Pantoja adjudica a Olga, como por ejemplo:
**sentido del deber, buen humor, espiritu de camaraderia y
colaboraci6nff, estos atributos que le asigna Pantoja a "la
Brasileña" son muy propios del Ejercito, pero para 81 la
76
belleza de Itla Brasileña" era lo raAs preciado que tenla el
"Serviciot1, y comenta que esa belleza, por voluntad propia,
"la consagr6 con exclusividad generosa a los esforzados
soldados del Perútt ( p . 253). ]Es evidente que aquí hay burla
de parte del autor implicito. Pero, por otra parte, esta
lista de cualidades, llevada!; a otro dmbito del quehacer
humano, son excelentes condiciones para triunfar en la vida
( 5 2 ) . A nosotros como lectores nos cabe la duda acerca de las
afirmaciones que hace Panto:ja, ya que su perorata est6
plagada de emocidn, y es posible que refleje, asi mismo, el
amor que lleg6 a sentir por Olga.
Respecto a la relaci6n que guarda Itla Brasilefialt con los
"Hermanos del Arcatt, cuando el narrador nos advierte que el
ataúd en el que es sepultada tiene forma de cruz, ntcomo es
costumbre entre los difuntos que en vida pertenecieron a la
Wemandad del Arca" (p . 2 4 9 ) , no nos causa sorpresa, puesto
que la mayoria de las visitadoras muestran todo el tiempo su
devoci6n hacia el Hermano Francisco. Lo que si resulta
interesante es la idea de que su muerte fue a manos de la
"Hermandadtt, situaci6n que merece ser analizada
detenidamente.
El dfa que Pantoja hizo, una visita a "Casa Chuchupe",
S610 encontrd ocho de treinta meretrices contratadas, y la
raz6n, a la que califica como "excepcional", es la llegada
del Hermano Francisco a la ciudad de Iquitos, lo cual indica
la disposici6n que tienen de verle y escucharle (pp. 4 6 , 4 7 ) .
Estas son sus seguidoras mas cercanas.
n
Y aunque sabemos que la mayorla de las visitadoras lo
siguen, es hasta la muerte de "la Brasileña" cuando tenemos
la certeza de que ella fue miembro de los nHermanos del
Arca". %a Brasileña't toma una relevante importancia como
personaje relacionado con lis "Santa Hermandad", pues de
manera clara y directa el Hermano Francisco, a traves de su
"Epistola a los buenos sobre los malos", la defiende y
desmiente la acusaci6n que se le imputa a la 18Hermandadn ( p .
250).
En la nEplstolan del Hermano Francisco se habla de "la
Brasileña" como de nla señorita Olga Arellano Rosaura", y uno
de los prop6sitos principales del profeta consiste en aclarar
que ellos no fueron los culpatbles de "la violaci6n, muerte y
posterior CRUCIFIXION" (P. 271) de esta, por lo tanto, niega
las acusaciones de quienes aseguran lo contrario. Afirma que
sus ttHermanoslt no cometieron tal crimen, dice que los que lo
hicieron fueron los trMALOStt que quieren atribuirles dicha
maldad: sin embargo, "Ninguno de los acusados ha pertenecido
nunca a nuestra HERMANDAD [ . <,. 3 y ni siquiera han asistido a
las reuniones celebradas en las ARCAS" (p. 2 7 2 ) .
Argumenta, por otro ladlo, que no se les puede achacar
"un solo acto contrario al BIENtf (P. 272), porque ellos viven
purif icdndose momento a momento en espera del FIN. Y aunque
Olga Itno habla escuchado la palabra". no importa, el Hermano
Francisco est6 dispuesto a orar por ella y recordarla corno
mtirtir y santa, con capacidad de ver, oir, hablar y proteger
desde arriba, a quienes esperan reunirse con ella en el reino
celestial muy pronto.
En la "Cr6nica del asal'to de Nauta", se dice que Itla
muerte y crucifixi6n de Olga Arellano Rosaura, (a ) Brasileña,
fueron un rito de sacrificio y purificaci6n por la sangrett
(pp. 255,256), y aseguran que este rito fue ordenado por la
nHermandad del Arca". Tal afirmaci6n es sostenida dando como
razdn que los siete individuos involucrados en el crimen
fueron meros instrumentos.
En un primer momento estos sujetos dijeron que la idea
habla surgido durante una misa nocturna del 9tArcagv de
Requena, en la que resultaron elegidos para ejecutar la
misidn.
Posteriormente reconocieron que el tema de las
visitadoras era muy frecuente en sus reuniones: y que ya
hablan protestado por escrito ante el EjBrcito, porque ellos
no estaban autorizados para recibir este "serviciotf. Entonces
confiesan que todo comenz6 en una reunidn social, y no de la
"Hermandad del Arca", donde e l ex-alcalde Te6filo Morey
propuso la idea de emboscar un convoy de visitadoras para
tomarlas por la fuerza.
Estos sujetos provocan confusidn mediante el recurso de
falsas declaraciones, pero 1.a "Epistoln a los buenos sobre
los malos1@ aclara los hechos, y tambitSn podemos aceptar como
verdaderos los comunicados de varios ap6stoles de la secta,
asi como tener la certeza de que esta situacidn fue frlamente
planeada, haciendose ellos pasar por "Hermanos del Arcat1 para
79
"despistar a las autoridades en caso de una investigaci6n"
(p. 258).
Inicialmente pretendieron hacer pensar a las victimas y
a la policia que los autores de este asalto eran vecinos de
la localidad de Nauta. Entonces concibieron la idea de dejar
como pista falsa una cruz con un animal clavado, y acusar de
esta maniobra a los llHermanosl'. Para ello tuvieron la
precauci6n de llevar clavos y martillos. Estos fingieron
necesitar ayuda medica para Caifds Sancho, argumentando que
habia recibido una picadura de vibora, y de esta manera
lograron abordar al nEvabl. Una vez arriba atacaron con sus
revdlveres y ordenaron tomar la marcha hacia la Quebrada del
Cacique Cocama, sitio donde ac:echaba el resto de la banda.
Quisieron espantarlos diciendo que estaban ahi por orden
del "Arca" para que escarmentaran por las actividades
pecaminosas del "Servicio de visitadorastv. Pero al descubrir
las intenciones verdaderas de estos su jetos, las
llvisitadorasll, junto con la tripulaci6n, opusieron
resistencia.
A traves del recurso de las notas periodisticas, se da a
conocer el salvajismo con que fueron tratadas las
visitadoras, siendo la mds maltratada Olga, elegida para ser
violada por los siete asaltantes de Nauta (p . 263).
En tanto ocurrian dic:hos acontecimientos llenos de
violencia, el deslizador que atendi6 el llamado de auxilio
que pudo enviar el timonel :Isidor0 Ahuanari, llegd hasta el
"Evan y fue recibido "con una lluvia de balas" (p . 263), para
a
luego entablarse un tiroteo, del cual result6 muerta "la
Brasilefia" pox balas de los propios soldados.
Parece ser que por su experiencia debido a su mayor
edad, Te6f ilo Morey es quien indica a este grupo lo que debe
hacer. Les sugiere que claven a "la Brasileña" en lugar de un
animal, y para no perder tiempo prefieren utilizar un drbol
cualquiera a la orilla del rio; es asi como, al ser
rescatados, el cuerpo de Olga se halla clavado en el tronco
de una lupuna (p . 2 6 4 ) .
Es claro entonces que Olga es crucificada luego de haber
sido violada por los asaltantes y asesinada por las balas del
Ej6rcito; como si hubiera recibido varias muertes al mismo
tiempo.
De manera peculiar, luego de entonar un padre nuestro y
un avemaria "por la salud eterna de la fallecida", se desat6
una fuerte lluvia, como si la naturaleza se uniera al duelo
por esta muerte (p. 252).
La tormenta asemeja las muertes del Hermano Francisco y
la de Olga, S610 con una diferencia de horas; una ocurre a
las 12 del dia y la otra a las 4 de la tarde. Pero ante la
muerte del Hermano Francisco no hay únicamente lluvia
torrencial sino tambien tinieblas, rayos y truenos; ademas de
que la naturaleza se hace presente al unirse al duelo,
tambien participan los animalles con sus rugidos y grui'lidos; y
los peces se salen de su medio para despedir al Profeta que,
según palabras del narrador, esta ascendiendo al cielo (p .
2 9 7 ) . Lo anterior se interpreta como una reproducci6n hecha
por el narrador acerca de las ideas de los Seguidores del
Hermano Francisco, si no fuera asi, estariamos ante una
novela no realista.
A Olga, por otra parte, se le santifica, por lo que
acaba siendo una mzirtir y santa para la "Hermandad del Arca".
4.5 . - Puntos de comparaci6n entre el Hermano Francisco y
Pantale6n Pantoja.
La personalidad de Pantoja presenta marcados rasgos
obsesivos; de principio a fin de la novela encontramos a un
personaje hecho de una sola linea; no tiene dobleces, actúa
siguiendo su Gnico y mas importante prop6sito: servir al
EjBrcito. Es indispensable para 61 recibir y ejecutar
brdenes. Esta dispuesto a hacer lo que le ordenen, no importa
de que se trate. De tal modo, podemos asegurar que si lo
enviaran a matar a un pueblo entero, lo haria. Nunca se
cuestiona si hace bien o no, sencillamente est4 dispuesto a
cumplir las 6rdenes de sus superiores.
A manera de burla lo miran como "representante del arma
en el Paraiso" (p. 13), porque no fuma ni bebe vino. El
Ej6rcito encuentra en Pantaledn una ejemplar conducta y por
ello es "el elegido" (p . 13) ,, A q u i , Pantaledn es semejante al
Hermano Francisco en cuanto a la eleccidn hecha por parte de
sus superiores: el Hermano Francisco es elegido tanbien pero
por la Divinidad, que es superior a cualquier ser humano;
Pantale611 es elegido por los hombres que son superiores a
cualquier otro debido al poder con que cuentan.
Gracias a que Panto ja es un llorganizador nato, con
capacidad ejecutiva y sentido matemdtico del orden" ( p . 1 4 ) ,
pone a funcionar el servicio donde lo manden, llcomo un relojv1
(p. 14). Ademas vive s610 para el trabajo, lo que facilita su
entrega total a cualquier actividad que el Ejercito le
ordene.
Al ser elogiado por sus superiores presume de modestia,
pues el s610 cumple con su deber: pero si habra que observar
su eficacia para administrar 1.a empresa que se le encomienda.
A manera de pardbola, su misi6n consiste en "dar de
comer a los hambrientos" ( p . 20), como especie de ap6stol de
Cristo. En este sentido, el Hermano Francisco es tambien un
ap6sto1, cuya misi6n representa la salvaci6n de los hombres.
Por un lado tenemos a un ap6stol del EjBrcito, y por el otro,
a un ap6stol de Dios.
Hay un momento de vacil.aci6n en el que Pantoja no est6
seguro de poder cumplir en esta ocasi6n, ya que se trata de
algo totalmente distinto a su trabajo habitual (p. 2 4 ) . Deja
entrever que psícol6gicamente su deseo es agradar a sus
superiores, y por ello aplica toda su capacidad para cumplir
las 6rdenes recibidas.
Es sorprendente que Pantoja acepte y este dispuesto
inclusive a l*cambiar de personalidad" (p. 2 6 ) , para llevar a
cabo la realizacidn del nServicio de visitadoras'#. Estamos
frente a un personaje-robot que nunca se cuestiona acerca de
10 que hace, no se detiene a pensar si es correcto moralmente
organizar un prostibulo para satisfacer a los soldados del
Ejkrcito. El acatamiento a 1a:s 6rdenes de sus superiores no
~ 6 1 0 es espiritual; tambib transforma su ser biolbgico para
adecuarse a las funciones que debe cumplir. En este sentido,
el Hermano Francisco tampoco se cuestiona: esta seguro de lo
que hace, 61 es tan $610 un instrumento de Dios.
En ambos personajes la obediencia a los altos mandos
obnubila el libre albedrio o la posibilidad de disentir.
Por su parte, Panto ja, dlebido a su nuevo destino, tiene
que embriagarse, asi como llegar de madrugada a su casa, lo
cual le resulta un suplicio ( p . 3 4 ) . Hace un verdadero
sacrificio para cumplir su .misi6n, pues nunca en su vida
habla procedido de tal forma. Tiene que ocultar su condicidn
de oficial y mantenerse alejado de sus compañeros: as1 como
guardar, ante su esposa y su madre, absoluta discrecisn sobre
su labor ( p . 35). En un momento dado actúa como si fuera un
agente secreto del Servicio de Inteligencia, lo cual le sale
muy natural , por eso no insisten en que hable. Aunque est&
consciente de que la empresa que realiza es clandestina (p.
4 2 ) , aplica su capacidad organizativa para planear
cuidadosamente cada uno de 1.0s detalles relacionados con el
"Servicio de visitadoras"; l o s que conoceremos a travbs de
"partes" o informes minuciosamente detallados y dirigidos a
sus superiores; y esto es todo un proceso que abarca desde la
organizaci6n hasta el arranque del mencionado servicio.
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u
LO anterior es una muest-ra de la capacidad de entrega
con que cuenta Pantoja. Igual que el Hermano Francisco, da su
vida por una causa, pero la. misi6n que le encomiendan a
Panto ja va en contra de su cargcter, situacih que no ocurre
en el caso del Hermano Francisco.
En cuanto a Pantalebn, Pocha lo describe como llcumplidor
y maniBtico [ . . . I con su trabajo, se toma todo lo que le
manden tan a pecho que no duerme ni como ni vive hasta que lo
termina" (p. 6 7 ) . La descripci6n es muy fiel a la conducta
que guarda Bste cuando se da a la tarea de cumplir al pie de
la letra las 6rdenes del Ej&rcito.
Sin embargo, como esto no deja de afectarle
relativamente en su vida personal, presenta sueños
alucinatorios a traves de los cuales intenta evadir la
realidad (p. 8 3 ) , pero luego se ve inmerso en ese mundo nuevo
para 41, no puede escapar. Toma demasiado en serio su
empresa, y logra con ello dar otra dimensi6n a la situacibn.
Una %isitadora1I no es una prostituta; vista por los ojos de
Pantoja es una funcionaria civil del Ejercito (p . 1 1 7 ) .
Por su parte, el Hermano Francisco, en un momento dado,
nos proporciona una opinidn de la visitadora Olga, y parece
que no la mira mal ni la condena.
Panto ja, con su peculiar modo de ver y hacer las cosas,
enaltece el oficio de la prostituci6n. Su obra es una
realidad que empieza a ser vista como una maravilla y es
aclamada; 61 no invent6 el llServicio de visitadoras", pero si
le dio vida, lo cre6 (pp. 1 1 8 , 119). Ademas, con empefio y
dedicaci6n no S610 mejora sino que hace prosperar el
"Servicio" ( p . 1 2 5 ) . A seme j'anza con Pantoja, el Hermano
Francisco dio vida a la secta de los "Hermanos del Arca", la
hizo nacer, la fund4 y la vio erecer.
De tal manera podemos definir a uno como un ser
carism6tico; al otro, como un mago de la organizacibn.
Tal parece que Pantoja fuera incorruptible, sin embargo,
se relaciona intimamente con ulna de las visitadoras; desde la
contrataci6n le ofrece un 10% m& que a las demas porque la
considera un aporte de categoria para el "Servicio'l (p. 133).
Y por otra parte permite la extorsi6n del "Sinchin con tal de
que no hable por la radio acerca del vtServicio de
visitadoras"; piensa siempre en los intereses del EjBrcito.
De algan modo estos gestos lo humanizan, ya que de no
ser asl, resultarla realmente un perfecto robot.
En contraposici6n, el Hermano Francisco en ningún
momento parece robotizarse, no hay duda de que su experiencia
religiosa es autbntica, aunque, a simple vista, parece un
fanatic0 que presenta una especie de locura.
Uno de los rasgos que vincula a ambos es que su misi6n
significa el centro de su vida.
A travks de las emisiones radiales, Pantoja es dibujado
como un "moderno sultdn babilbnico" ( p . 1 8 8 ) , enriquecido con
el vlServicio de visitadoras" mediante la explotaci6n de
mujeres, sin respetar a la familia, a la religidn y al propio
Ejercito ( p . 1 8 8 ) ; as1 mismo, es visto nsin frenos y sin
escrapulos" (p. 190), y tambien se le cataloga como el
M
llEmperador del vicio" (p. 190). Se hace acreedor
motes, como son: el 'IGran Macr6 de la Amazonia",
de Pantilandiatt ( p . 191), el 'IBarba Azul del rio
201).
Llega un instante en .que la vida doble
a diversos
el "Califa
Itaya" { p .
que lleva
Pantaledn le acarrea conflictos interiores que roban su calma
(pp. 205-210), y por ello, en medio de sus sueños pide ayuda
a Santa Rosa de Lima y al niño-mdrtir de Moronacocha para
salir corriendo del centro logistico. Se siente sucio,
malvado, herido y tiene la impresi6n de que por todo su
cuerpo se propaga una erupcit5n de sarna (pp. 206,207). Esto
se contrapone con el Hermano Francisco, quien en todo momento
se est6 purificando, pero con ceremonias sadicas.
Pantoja presenta, por su parte, una personalidad
impresionantemente cambiante ( 5 3 ) : por lo que "la Brasileña"
tiene la ocurrencia de comentar que si dirigiera un
manicomio, lo primero que haria seria volverse loco (pp.
217,218). De cualquier manera, resulta interesante porque
nunca pierde su esencia, sus leyes y reglas que se basan en
la disciplina, rectitud y eficiencia con las cuales conduce
sus obras: pero tambibn ello habla de un problema serio, pues
no tiene un caracter definido; sus jefes pueden utilizarlo,
como lo hacen, para satisfac:er las necesidades del Ejercito
sin pensar en 61 como ser !humano, pero en relaci6n con el
Hermano Francisco, resulta un personaje con autenticidad en
sus actos.
87
Por esta raz6n su proyect,o para el "Servicio de
visitadoras*' es ambicioso, desea darle m& categoria, motivo
por el cual se la pasa reflexionando y haciendo cdlculos
matemAticos; Qnicamente piensa en el "Servicio" hasta el
extremo de que uno de sus jefes comenta que Pantoja "ha
convertido ese Servicio en el organismo mas eficiente de las
Fuerzas Armadas1* ( p . 225). A Pantoja le interesa ser soldado,
pero soldado administrador (p . 226). El mismo asegura que en
lugar de corazdn lleva al Ej&rcito en el pecho; y esa es la
raz6n por la que busca la mayor eficiencia en el trabajo que
se le encomiende. Como el Hennano Francisco bien puede llevar
en su coraz6n la imagen de Dios, y ser 6sta su motor.
Por las actitudes que adopta Pantoja, se da una gran
contradiccidn en su personalidad: es un tipo manihtico y
puntilloso en los asuntos morales, pero tiene una fama muy
negra; todo el mundo lo cree un forajido ( p . 232). Se siente
desfavorecido por el Ejercito al confiarle la organizaci6n y
direcci6n de un prostibulo; sin embargo trabaja con verdadero
ahinco. Sacrifica hasta parte de su sueldo para evitarle
problemas al Ejercito. Asi como Pantoja es victima de la
incomprensi6n, tambi6n lo es el Hermano Francisco, a quien
llega un momento en que se le persigue como al peor de los
criminales.
Para Pantoja las cosas empiezan mal cuando, sin pensar
en lo que hace, acude a plena luz del dia a la Iglesia para
apadrinar al hijo de una "visitadoraI*, lo cual representa un
escdndalo p~blico, pero no tanto como cuando se presenta
uniformado como capitan del Ej16rcito peruano en el pantedn
por la muerte de Olga. Despu& de este acontecimiento no
quiere continuar ocultando su identidad; ademds no lamenta lo
que hizo porque actúo de acuerdo con su conciencia, cumpli6
con su deber y , por ello, no teme enfrentarse a sus
superiores (pp. 277,278).
La actitud adoptada por ]?antoja ante el asalto en
Nauta, no la tiene por haber resultado muerta Itla Brasileña",
de cualquier manera habria actuado igual en el caso de otra
de las nvisitadorasw, para 61 era una obligaci6n ( p . 283).
S610 que en otras circunstancias habria cambiado su perorata
fúnebre, ya que &Sta se encuentra impregnada por su pasi6n
por Olga.
Para Pantoja resulta igual de importante rendir honores
a un medico, a un soldado o a una prostituta, siempre que
sirvan al Ejercito. De esta 'manera autoafirma su trabajo que
de j6 de ser secreto y se tambalea. Sostiene que las
flvisitadorasl* prestan un servicio no menos importante que el
de los m8dicos, los abogados o los sacerdotes. Piensa en los
beneficios que ha dado el ''Servicio de visitadoras1I a la
Instituci6n: los soldados r.inden m&, son mas eficientes y
disciplinados y soportan mejor la vida de la selva desde que
reciben el f*servicioll de las llvisitadorasfl. Y a las mujeres
que llevan a cabo esta tarea con verdadera abnegacibn, según
Pantoja, nunca se les ha reconocido (p. 286). Considera el
trabajo de una "visitadora" como "una labor dificil,
esforzada, mal retribuida y llena de peligro [ . . . I Despues de
10 de Nauta, el Ejbrcito estaba obligado a rendirles
homena jell (287). De todo esto, lo importante es que Pantoja
cree firmemente lo que piensa, es sincero, lo cual esta en
contraposici6n con sus jefes militares, con "el Sinchi" y
hasta con el cura BeltrBn.
por otra parte, el Hermano Francisco se encuentra tambibn del
lado de Olga, misma que acaba siendo mdrtir y santa para la
"Hermandad del Arca".
Al igual que el Hermano Francisco, Panto ja es autentico
consigo mismo; y este hecho sorprende enormemente a su jefe,
el General Scavino (p . 2 8 7 ) , ya que en su medio la sinceridad
no se acostumbra.
Por otro lado, la obediencia es un rasgo que se
encuentra como cualidad en ambos personajes; Pantoja siempre
esta dispuesto a obedecer las 6rdenes de sus superiores, asi
sean las mds absurdas, como es el caso de la creacidn de un
prostíbulo al servicio del E j6rcito. Este personaje tiene el
cerebro programado para obedecer ciegamente, nunca piensa en
las consecuencias de sus actos. Y el Hermano Francisco actda
siguiendo los designios divinos; no es su propia voluntad la
que importa, sino la voluntad1 de Dios.
Vemos, por otra parte , que mientras Panto ja y su
historia de las "visitadorasn se encuentra cargada de humor,
la del Hermano Francisco es. cruel y descarnada. Y es este
contraste lo que da a la novela un toque de realismo, ya que
si únicamente nos queddlramos con Pantale6n y sus
"visitadoras", careceria de sentido, se estancarfa en la pura
anecdota risueña de un capitan del Ejercito que se propone
organizar y dirigir con la mayor eficacia una casa de
prostitutas, no por iniciativa propia, sino por orden del
Ejercito.
DespuQs de que el "Servicio de visitadoras" ha dejado de
existir, sus m8s cercanos colaboradores le proponen a Pantoja
que trabaje con ellos, de manera privada, en la creaci6n de
un gran burdel, del que sera e1 jefe y le obedecerdn en todo
sin que deba rendirles cuenta de nada. El les repite que lo
que organiza es por orden superior, organizar un negocio para
vivir no es de su inter&, para 61 es vital tener jefes,
inclusive aclara que, si no los tuviera, el mundo se le
vendria abajo (p. 293).
El Hermano Francisco realiza sus funciones por orden
divina; se trata de un ser superior sobre todas las cosas,
quien lo ha enviado especificamente a cumplir su misi6n. Asi
pues, Pantoja y el Hermano Francisco son ambos enviados por
un "superior" a efectuar la labor encomendada.
Como ya se dijo, la obediencia est6 presente en estos
personajes, pero es llevada al extremo de perder la
conciencia de la magnitud de sus actos, por lo que rayan en
el fanatismo del Ejercito, par un lado, y en el fanatismo de
la religibn, por el otro.
Al mismo tiempo en que Pantoja institucionaliza la
prostituci6n, trabajando a la luz del dfa (p. 2 9 5 ) ; por su
parte, el Hermano Francisco funda una nueva religi6n.
91
A Pantoja, sus antecedentes personales lo salvan de no
ser sometido a consejo de disciplina y condenado a la
degradaci6n Y expulsi6n del Ejercito. Pero,
sorprendentemente, se niega a pedir su baja y adopta una
actitud que bien puede calificarse como religiosa, ya que
pareciera como si este realizara un acto de contrici6n con el
m6s ferviente deseo de enmienda para no volver a incurrir en
la misma falta, lo cual puede confirmarse cuando Pantoja
expresa que ningdn castigo ser6 peor que el remordimiento de
haber causado daño involuntario a aquello que mas quiere, el
Ejercito (p. 308).
Para el Hermano Francisco, la salvaci6n est6 en su
muerte, pero en la muerte en la cruz, como 131 Cristo
Salvador.
Es asi como hemos visto que ambos personajes llevan “su
religiosidad” hasta el 11tu6taano de los huesos1’ y viven 6610
para ella y por ella.
4 . 6 - El problema de la Igllesia cat6lica con la secta del
Hermano Francisco.
Es interesante que desde el principio de la obra figure
un personaje con la doble funci6n de ser sacerdote cat6lico y
soldado del Ejdrcito con el grado de Comandante. Se trata del
Padre Beltran, quien tiene a su cargo la jefatura del Cuerpo
de Capellanes Castrenses de !La V Regidn (Amazonla) (p . 111).
92
Este cura se muestra en desacuerdo con la creacidn del
ttservicio de visitadorastt, pues le parece una inmoralidad ( p .
22), pero m& adelante sabernos que se trata de una pura pose,
ya que este personaje presenta una doble moral. Ante la
existencia del tfServiciott, recomienda a uno de sus capellanes
"cerrar los ojos y rogar a Dios que ilumine a sus superiores
para que rectifiquen lo que, a la luz de la religi6n cat6lica
[ . . . I , sdlo puede ser considerado una grave equivocaci6ntt ( p .
112), pero 41 no hace nada por remediar la situacibn, antes
al contrario, no se compromete.
A traves del cura BeXtrdn sabemos que la religi6n
oficial del Perd es la cat6lica, la que "es amenazada por una
peste supersticiosa que, con el nombre de ttHermandad del
Arca", asola aldeas y pueblos, gana adeptos dia a dfa entre
la gente ignorante e ingenua [ . . . I incluidos [ . . . I los
cuarteles de la selvatt (pp. 1 7 8 , 1 7 9 ) .
Segiln este sacerdote, "el cuerpo de Capellanes
Castrenses lucha denodadamente contra este flagelo
blasfematorio y homicida en el seno de los regimientos
arnaz6nicost1 ( p . 179); claraimente notamos aqui lo exagerado
del lenguaje, pues lleva sobre si una marca irbnica.
El cura Beltran solicilta su baja del Ejercito Peruano
porque, segdn 61, cuando su cuerpo de Capellanes sostiene la
mayor lucha contra la "Secta fandtica", sus superiores
autorizan y promueven "el funcionamiento de un Servicio que
embota le moral y relaja ].as costumbres de la tropa" (p .
1 7 9 ) .
93
Sin embargo, a lo largo de la novela no se entabla
verdaderamente una lucha entre la Iglesia cat6lica y 10s
"Hermanos del Arcall, lo cual :se hace evidente con la pregunta
del Tigre Collazos ll-¿Y para que esth los curas, para qu6
pagamos capellanes? Ademds de su afirmaci6n 11C6mo va a ser
posible que las guarniciones 'de la Amazonia se esten llenando
de 'Hermanos'" ( p . 2 1 8 ) .
Es claro entonces que e.1 Ejercito es quien paga a los
curas y capellanes a su servicio y que estos no hacen nada
para combatir a la "Hermandad del Arca".
Son los mismos jefes del Ejbrcito los que tienen que
soportar a "los curas y 1a.s beatas de Iquitos que andan
fregando la paciencia a Scav:lnoll (p. 2 2 2 ) , lo cual significa
que el Ejercito como Instituci6n tiene mayor poder que la
Iglesia misma.
Por ello, el Ejbrcito arregla la situaci6n de manera
muy propia de la Institucibn, e implementa una medida que
consiste en encarcelar treinta dias a los soldados a los que
se les encuentra en sus ropas alguna estampa del niño-m6rtir
o de la Santa Ignacia, y si se les haya una foto del Hermano
Francisco, el encarcelamiento aumenta a cuarentaicinco dias.
Es asi como, aparentemente, el Ejercito, y no la
Iglesia, resuelve el problema de la 'Secta de los Hermanos
del Arca', ya que es ante el General Roger Scavino que se
presenta "el obispo, con su estado mayor de curas y
monjasll(p. 2 2 4 ) anunciando que si el Servicio de Visitadoras
no desaparece excomulgara "a todos los que trabajan en 61 o
94
10 utilizan" ( p . 2 2 4 ) . Esta situaci6n es propiciada por la
madre de Pantoja, pues ella va. a llorarle al Obispo.
A lo largo de la obra, en ningún momento se entabla una
lucha feroz entre los miembros de la Iglesia catdlica con la
"Hermandad del Arca". Es interesante que en el capitulo nueve
aparezca el padre Beltran como nex-capel18n del Ejercito y
actual parroco encargado del cementerio de Iquitosll, y que 41
sea quien oficie los responsos fúnebres de "la Brasileñatt,
situaci6n que viene a corroborar que este personaje cumple la
funcidn de mostrar la doble moral de la Iglesia. Por esta
raz6n, el religioso no oculta. su malhumor y fastidio; oficia
la ceremonia con exagerada rapidez, sin pronunciar serm6n, y
abandona el lugar antes del t6rmino de la celebracidn (p.
251). Pero lo mds escandaloso es el hecho de que el Padre
Beltran, hacia el final de la obra, muestra su verdadero
rostro: 81 tambih, como cualquier otro, hace uso de las
prostitutas que pertenecieron al ItServicio de visitadorasnt
(p. 3 0 5 ) .
El manejo que se le da al Padre Beltran y a todo su
sequito de curas y capellanes tiene el propbsito de mostrar
la gran hipocresia de la jerarquia cat6lica.
4 . 7 .- La funci6n de la his.toria del Hermano Francisco en relaci6n con la historia de las nvisitadoras@l.
Ya hemos dicho que los estudiosos de Vargas Llosa han
restado importancia a la historia del Hermano Francisco; la
mayoria s610 ha abordado la novela fijando su atenci6n en la
historia de las vlvisitadoras".
Pero precisamente algunos de los rasgos interesantes de
la obra se deben a la inserc:i6n de la historia del Hermano
Francisco, ya que de otro modo, la novela se verla reducida a
una simple an6cdota humoristica de un prostibulo al servicio
del Ejercito.
La sangrienta historia de la "Hermandad del Arca" cobra
verosimilitud gracias al contraste con el humorismo de la
historia de las nvisitadorast'.
Tambih tiene su parte importante la retroalirnentaci6n
entre ambas historias lograda mediante vasos comunicantes,
los que al fundir ambas, nos proporcionan nuevas situaciones.
A s i , la funci6n de la historia del Hermano Francisco en
la novela se encuentra en la base vivencia1 de la anecdota y
en la necesidad del autor de cambiar su posici6n frente al
humor en la literatura para poder contar esta historia.
Ahora, es importante not.ar que la funci6n de la historia
del Hermano Francisco, en relacidn con la historia de las
"visitadoras'*, consiste en !humanizar la novela, ya que lo
grotesco de la primera historia, si la vemos por separado,
contrasta con lo risuefio de 1.a segunda. Lo interesante es que
Vargas Llosa unid dos situaciones tan diferentes, y el efecto
lo consigui6 gracias a la utilizaci6n de una estructura
cinematogrdfica dentro de la cual coloca desde mi punto de
vista, en un primer plano la historia de las "visitadoras" y
en un segundo plano la historia del Hermano Francisco, pero a
medida que se va desarrollando la trama, el resultado es
extraordinario: los papeles se invierten, pues el segundo
plano opera sobre el primero, viendose reducida la historia
de las llvisitadorasrl a simple fondo sobre el cual continuar4n
practicando su ritual "los Helfrnanos del Arca".
Como resultado tenemos que para Pantaledn Pantoja, el
castigo por desempeñar con eficiencia su trabajo, consiste en
confinarlo a una regih fria y lejana, y $1 servira y vivird
para el Ej6rcito como siempre.
Por el contrario, el Hermano Francisco encuentra la
satisfacci6n plena a su propdkito: trasciende a la muerte, y
otros, posiblemente, seguirdn su ejemplo.
A s i , al incrustar la historia del Hermano Francisco en la
historia de las 9isitadorasV1, Vargas Llosa confront6 dos
actitudes religiosas: la del Hermano Francisco, lider
religioso por naturaleza, y la de Pantale6n Pantoja, soldado-
administrador, fiel servidor del Ejercito peruano.
97
CONCLIJSIONES
Cuando por primera vez hice la lectura de Pantale6n v
las visitadoras, de inmediato resalt6 el humor de la historia
de "las visitadoras" en contraposici6n con la historia del
Hermano Francisco y su secta religiosa, &Sta segunda historia
me impresion6, e hizo nacer en mí la intenci6n de investigar
las razones que tuvo Vargas Llosa para escribir juntas dos
historias tan diferentes una die la otra.
Para mi represent6 un obstaculo el hecho de que la
critica ha restado importancia a la historia de "los Hermanos
del Arca", s610 abordan la novela desde la 6ptica de la
historia del capitan Pantaledn Pantoja y sus "visitadoras".
Rossman y Friedman es quien nos dice c6mo y por qu6
escribe Vargas Llosa esta obra. Parte de lo interesante de la
obra se basa en el humor, que por vez primera utiliza este
escritor, pues se convence que de otra manera no podia
escribir la historia de "las visitadoras".
Sin embargo, en la historia del Hermano Francisco no hay
humor, hay ironia y grotesco, sin que ello le reste realismo,
pues este relato hace mas humana y verosimil la novela.
Lo interesante empieza con la menci6n de las
crucifixiones. A travBs de :Los sacrificios practicados con
animales e insectos se trasluce la ironia por parte del autor
implicito, pues nos mueve a risa imaginar un mono, un perro o
un lagarto crucificados, asi como diversas clases de animales
menores o insectos.
En lo que se refiere a los sacrificios humanos, utilizan
para ello a individuos d6biles o inferiores, como es el caso
de un niño, una anciana o un indio piro.
Respecto a la crucifixi6n de Olga Arellano, hay humor de
parte del autor irnplicito, pues "la Brasileñav1 e5 idealizada
por el Hermano Francisco, c!omo 'Isanta y rndrtir": y como
llsoldado caido en el campo de batalla", con todas las
cualidades positivas de un hombre del Ejercito, por Pantoja.
La crucifixi6n del Herma:no Francisco es una prueba de su
autenticidad, 81 dio su vida por sus "Hermanos1*. Representa
el modelo arquetfpico de Cristo.
En la novela el tiempo y la narracidn de ambas
historias, tienen un mismo inicio y finalizan en un solo
momento.
La estructura de la novela resulta novedosa debido a la
intercalacibn de diversos tipos de discurso, como son:
reportajes periodisticos, emisiones radiales, partes, etc.
Esto da veracidad a la narracibn.
Todos los simbolos empleados en la historia del Hermano
Francisco tienen un significado igualmente importante. WE1
Arcall, "la madera", "la cruz", "la sangre" y "la
crucifixi6nn, dan un toque mgigico-religioso a esta historia.
Desde mi punto de vista,, "el Arca" representa uno de los
simbolos m8s relevantes, ya que tal vez la idea mds cercana a
la secta sea la del "Arca de la Alianza", pues I11os Hermanosp1
pactan una alianza con la sangre de las victimas
sacrificadas: esta los alia, los purifica y los salva.
, . . ,......__.... r"__ _ . _ _ ~ ." "",_ . .. "_" .I . -. _". """ . . . .-.. ._."""_. __,I "___I"_,x". ___ ~ " , ~ - ,-
Por su parte, la madera simboliza un objeto sagrado
indispensable para "los Hermanos del Arca". En ella se
origina la vida y en ella, si se muere en la cruz, encuentran
una muerte redentora que les asegura la tlgloria eterna"
Sin embargo, el simbolismo de la cruz y de la
crucifixi6n se liga m& al Hemano Francisco, quien carga con
su cruz hasta el momento culminante de su muerte, pues parece
que por su personalidad de ltSantolt merece y le corresponde
cargar la cruz y ganar la muerte a traves de ella.
Por otro lado, aunque la secta es propiamente de
carhcter popular, ello no impide que individuos de todos los
estratos sociales se integren a ella y obedezcan ciegamente
al Hermano Francisco. Sus seguidores tienen la particularidad
de depositar su fe en 61 por su caracter de lfder carismdtico
con rasgos mesi6nico-milenaristas.
El caso de "la visitadora" Waclovia y el ex-sargento
Tedfilo Gualino es uno de! los mas significativos para
comprender c6mo se logra la atdhesi6n a "la Santa Hermandad" y
c6mo surge la autentica transformacihn del hombre común en un
hombre sinceramente decidido a dejar lo mundano para
convertirse en apdstol de Cr.isto. La secta les da una prueba
de su Hermandad al asistirlos en todas sus necesidades cuando
asi lo requirieron.
La yuxtaposicidn, el paralelismo y la tecnica de 10s
vasos comunicantes vienen ;a dar un especial sabor a la
narracibn, llega un momento en que ambas historias se
fusionan, y ello da lugar a nuevas situaciones.
~1 cura BeltrBn, doña Leonor, "la Brasileñat1 y "la
visitadorawl Maclovia, son personajes que cumplen una doble
funci6n. El primero es solda.do y sacerdote, la segunda e s
madre del organizador del llServicio de visitadoras1I y miembro
de "la Hermandad del Arca", y las Liltinas son parte
integrante del "Servicio" y "Hermanas del Arca".
"La Brasileña" ocupa un lugar preponderante en ambas
historias, pues es "la estrella" del "Servicio", por un lado,
y por el otro, se gana la gracia del Hermano Francisco,
mdximo dirigente de la secta. Ella es un personaje "puente"
entre ambas historias.
Por su parte, ''la visitadora" Maclovia cumple una
importante funci6n de vaso comunicante, pues participa en
ambas historias y a traves de ella obtenemos informaci6n
acerca del lwServicio de visitadorasfl y tambien de "la
Hermandad del Arca".
Por otro lado, el hecho de que Godofredo Beltran forme
parte de la Iglesia y al final, se comporte corno cualquier
individuo que mantiene relaciones sexuales con las que fueron
**vísitadoras*I, nos habla de la doble moral de la Iglesia
catdlica.
"El Sinchi" representa un ejemplo tipico de la
extorsi6n, ya que para difundir la informaci6n por los medios
masivos de comunicaci6n, lo hace conforme esten dispuestos a
pagar quienes esten involucrados.
Del niño-mbrtir de Moronacocha, de la Santa Ignacia y
del Hermano Francisco se hacen medallas, estampas, cruces y
101
oraciones, con el objeto de mantener la adoraci6n y culto
permanente a sus santos y m8rt:ires.
El asalto de Nauta es dnicamente un pretexto para lograr
la fusi6n de las dos h i s t o r i a s . Los asaltantes nada tienen
que ver con "la Hermandad del Arca".
Entre Pantale6n Pantoja y el Hermano Francisco existen
algunos puntos de comparaci6n, al final lo trascendental
radica en que ambos personajes llevan "su religiosidad" muy
adentro del alma, por eso se comprometieron a fundar, uno,
"la Hermandad de las visitadoras", el otro, "la Hermandad del
Arca".
NOTAS
(1) C. Rossman y A . W . Friedman. Mario Varaas Llosa. Estudios
criticos, p. 3.
( 2 ) J. J. Armas Marcelo. V_arseis Llos3. El vlclo de escr ibir,
p. 320.
( 3 ) mid., pp. 317-325.
( 4 ) Fblix Grande. Once artistas v un dim, pp. 161-162.
(5) Joaquin Roy. "Reiteraci6n y novedad de la narrativa de
Vargas Llosa en pantaledn Y las visitadoras", p. 255.
(6) Jose Miguel Oviedo. l@zÁ(> Varaas Ll-. La invenci6n de
una realidad, pp. 266, 274 .
. I
(7) Blblla de . . Valerg ("Juan 5;:28; Wateo" 25:46; 'lPrimera de
Corintios" 15:51-53).
( 8 ) Mario Vargas Llosa. PantaJe6n v las visitadoras, p. 131.
A partir de esta nota, en toda referencia a esta obra
aparecer6 entre parhtesis s6:Lo la pagina citada.
( 9 ) Estas ideas pertenecen a. las sectas protestantes, y en
ellas sustentan su culto a Jehova.
(10) A s i se les llama en la obra a las prostitutas que van de
casa en casa ofreciendo sus servicios, y que para ello tocan
suavemente en las ventanas y dicen: ¡Lavandera! ¿Tienen
ropa? ". (11) Biblia de Valera. (llMateo*t 13:9).
(12) El pantelsmo naturalista fue desarrollado por Spinoza, y
dice este autor que Dios es la naturaleza, y que &ta es
~."." ~ - . " " _,__I -_.."" 2*_ -.,. - ." -"*'l"""~.""""-"-,-I"x ..-_ -l.,"..."""__."-". ~ "_.-
Dios. Y esta naturaleza divina es la sustancia de todas las
cosas.
(13) Biblia de Valera. ("Primera de Juan" 2:27).
(14) "Amor y fidelidad en lo pr6spero y en lo adverso" es la
promesa que se hacen los esposos al unirse en matrimonio
sacramental dentro de la Iglesia cat6lica.
(15) Alfred Metraux. Beliai6n v maaias indiaenas de Amr5rica
Pel sur, p . 3 .
(16) AYAHUASCA.- Planta narc6tica cuya infusidn toman los
indios ecuatorianos para embriagarse y tener visiones
fant6sticas. En el Perú tambi6n es utilizada para producir
hipnosis . (17) Alfred Metraux. OD. cig., pp. 30-31.
(18) Babl1a de J-=al& . . . ( "Geílatas 5: 24) . (19) Jbia., cap. 2:19-20.
(20) Le6n Cristiani. San Francisco de As&, p. 5.
(21) I b i a . , pp. 7-8.
(22) Jbid., p. 16.
( 2 3 ) Did., p. 23.
( 2 4 ) Jbid., p. 45 .
( 2 5 ) Jbicl., p. 46.
( 2 6 ) u., p. 6 4 .
(27) m., p. 180.
( 2 8 ) Jbid., p. 6 4 .
(29) Loc. u* (30) u., p. 156.
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(31) Llamada %adera de Siti!mfl (las acacias), procedente de
la peninsula del Sinai; el Arca de No6 estaba construida de
madera de gofer.
(32) Avuda para entender l a B l b l l a . Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania, p. 1051.
(33) ]Biblia de Valera. ("Gdlatasl' 6:14-17).
(34) Paul Paupard. Biccionazio de las xeliaioneg, pp. 367-
368.
(35) m l i a de Valera. ("Primera de Samuel" 14:31-44 y
nGBnesistl 9: 35).
(36) Jbid., ("Primera de Corintios" 10:16; "Efesios" 2:13;
*#Hebreos1! 9:4 y 10:19; t8Prj.ntera de Juan" 1:7; "Primera de
Pedro" 1:2; "Primera de Corintios" 11:27; y llApocalipsisn
7:14 y 12:ll).
(37) Jbia., ("Hebreosv1 9:18; "Exodo" 2 4 : 8 ) .
(38) H. Haag y otros. mionario de la Bibli~, pp. 1792-
1793.
(39) Los sacrificios de animales nos remiten al Antiguo
Testamento, donde encontra:mos la ofrenda de las mejores
cabezas de ganado y aves, lo que tenia como prop6sito la
purificaci6n de los pecados.
(40) Dios daba instrucciones con exactitud a su pueblo en
cuanto a la manera c6mo deberian efectuarse los sacrificios.
(41) Auqu6nidos.- Se comprende por estos a las llamas,
alpacas, vicuñas y huanacos,,
(42) Pierre Duviols. &&- destruccidn de las rell-ones
m, p. 389.
. *
. .
1M
(43) Maria Isaura Pereira de Queiroz. Historia Y etnoloqia de
J.OS mavimientos mesldnlcas
(44) "La Brasileña1' ya se encontraba muerta cuando la clavan
en la lupuna, pues antes fue herida mortalmente por balas de
los propios soldados.
( 4 5 ) pnchiridion. Dacumentacidn litúraica DosconciliaK, pp.
4 , , PP. 273-274.
314-316.
(46) Esta informaci6n se enc:uentra en los "Evangelios segh
San Juan" 19:l-3, y según "Sa.n Mateo" 27:30 y 44.
(47) Pantoja expresa a uno de sus superiores estar "enterado
de ese horror", pero no le afecta porque ha conocido a "la
Brasileña", y esto lo pone muy contento, por eso no se
percata de lo ocurrido a su atlrededor.
(48) Luis Harss. Los westrozi, pp. 439-447.
(49) Esto es una ironia del autor implicito. Ninguna
prostituta recibe indemnizaci6n ni mucho menos carta de
recomendaci6n.
(50) Todo el mundo est6 enterado de la existencia del
"Servicio de visitadoras", asi como de la relacibn que guarda
Panto ja con Itla Brasileiia", menos Pocha.
( 5 1 ) Biblia de Valera. ("San Marcosv1 16:9).
( 5 2 ) Algunas de esas caracteristicas reflejan el sistema de
valores de un soldado.
(53) Es interesante cdmo se ve a si mismo Pantoja; se
considera diferente a los demds, habla de que en su juventud
era desganado para comer, pero al encargarse de los comedores
de un regimiento se le despertb un apetito feroz, hasta el
1 0
grado de pasarse el dia comiendo, leyendo recetas y
aprendiendo a cocinar. Lo carnbian de misi6n y se olvida de la
comida, ahora se interesa por la sastreria y era porque le
hablan encargado el vestuario de la guarnici6n.
Ahora, cuando le encargan el "Servicio de visitadorasll su
actividad sexual cambia. Estos datos reflejan que Pantale6n
Panto ja es neur6tico obsesivo.
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