Bitcora Marxista-Leninista
Sobre el proyecto de Constitucin
de la UNIN SOVITICA
Informe ante el VIII Congreso Extraordinario
de los soviets de la Unin Sovitica
25 de noviembre de 1936
Isif Vissarinovich Dzhugashvili
STALIN
EDITORES
Equipo de Bitcora Marxista-Leninista
Editado el 1 de septiembre de 2013
La presente edicin, sin nimo de lucro, no tiene ms que un objetivo,
promover la comprensin de los fundamentos elementales del
marxismo-leninismo como fuente de las ms avanzadas teoras de
emancipacin proletaria:
Henos aqu, construyendo los pilares de lo que ha de venir
Contenido
Introduccin de Bitcora (M-L)----------------------------------------------pg.01
Sobre el proyecto de Constitucin de la Unin Sovitica---------------------pg.07
Formacin y tareas de la comisin de la Constitucin----------------pg.07
Los cambios en la vida de la Unin Sovitica desde 1924 hasta 1936-------
------------------------------------------------------------------------------pg.08
Particularidades esenciales del proyecto de Constitucin------------pg.14
Crtica burguesa del proyecto de Constitucin-------------------------pg.18
Enmiendas y adiciones al proyecto de Constitucin------------------pg.24
Importancia de la nueva Constitucin de la Unin Sovitica---------pg.33
1
Introduccin de Bitcora (M-L)
Dejamos en vuestras manos un documento esencial para la comprensin de las
tareas llevadas a cabo por los marxista-leninistas soviticos en la etapa
socialista; en el mismo se explica el fin de la redaccin de una nueva
constitucin para la Unin Sovitica, y se ver cmo fue abordado el proyecto
desde una visin marxista-leninista, considerando los avances alcanzados por la
sociedad sovitica desde la etapa inmediata al triunfo de la revolucin de
octubre de 1917, pasando por la nueva poltica econmica en 1921 y la posterior
consecucin del Primer Plan Quinquenal en 1928, as como el inicio del triunfo
de la colectivizacin en los aos 30, etc. Estas etapas, como era de esperar,
supusieron un cambio en la fisonoma de la sociedad sovitica.
Se abordaran tambin los cambios que operaron en las relaciones de clases, y al
interior de cada clase y capa social en particular, se ver el cambio cualitativo
ocurrido en un sociedad socialista tras la derrota y desaparicin objetiva de la
burguesa que induce a la desaparicin del proletariado como tal, y a la
aparicin de un nueva clase social obrera: la clase obrera de la sociedad
socialista que tiene en sus manos los medios de produccin al tiempo que dirige
los campos de lucha polticos, econmicos e ideolgicos en la nueva sociedad en
alianza con el resto de capas trabajadoras; es el caso del campesinado
trabajador: que ya no era propietario individual de la tierra o que ya no estaba
desposedo de una propia parcela individual, debido a que se haba erradicado
tantos a los terratenientes como a los kulaks burguesa rural como clase. Este
campesinado trabajador se acercaba a la clase obrera mediante el trabajo a gran
escala junto a otros campesinos, papel fundamental tendra en este cambio
operado en el campo el desarrollo de las granjas estales. Tambin capas como
las de la intelectualidad al no existir ya las clases explotadoras, y existir cada vez
ms libertad e igualdad de oportunidades en la cultura y el estudio, sus
elementos no se nutran ya de las explotadoras como en la sociedad capitalista,
sino de las clases trabajadoras.
Es preciso comprender que cuando en este informe se habla de que ya no hay
antagonismo de clases, no significa que se ha detenido la lucha de clases, que
sta haya desaparecido o haya terminado; sino que en la realidad objetiva, ya no
existen los burgueses ni los kulaks ni ninguna otra clase explotadora como clase
social, pues estos han sido despojados de los medios de produccin durante
varias etapas desde 1917: entindanse que mediante la posesin de dichos
medios de produccin mediante los cuales explotaban a la clase obrera y al
campesinado creaban el mismo ser de su de clase social, y que sin esta
propiedad confiscada por el Estado socialista pierden la razn de ser como clase
social. El campesinado es vanguardizado por el proletariado, y se va
proletizando con: 1) el paso de la explotacin individual de su parcela; 2) a la
2
explotacin conjunta de la tierra en la colectividad y; 3) finalmente con el paso
de estas a granjas estatales donde se iguala al obrero de la ciudad como clase
social. En consecuencia, tanto el obrero de la ciudad, como el campesino, que
est en cualquiera de estos tres puntos, tienen intereses comunes, ya que desde
el partido comunista como tal se busca la igualacin de las clases trabajadoras
para la posterior abolicin de clases en el comunismo.
Este periodo de la sociedad socialista de que habla Stalin significa que la lucha de clases no desaparece sino que se profundiza en el interior del Estado socialista contra los rescoldos y reminiscencias burguesas en cualquiera de los campos poltico, econmico, ideolgico; en ese sentido, una vez conquistado el poder poltico estableciendo la dictadura del proletariado y el econmico acabando con la propiedad privada, ser en el campo ideolgico, y en particular en la rama de la cultura, en dnde ms trabajo quedar por hacer en cuanto al desarrollo de la lucha de clases pues ah an anidarn la conciencia y costumbres retrgradas de la anterior sociedad es la llamada superestructura, siendo un campo ms atrasado que el campo econmico y poltico, y la razn de que este campo requerir de la necesidad de ms tiempo para su transformacin, eso no significa descuidar la lucha de clases en el campo poltico defender la dictadura del proletariado y econmico defender el orden econmico socialista, y de hecho el campo poltico siempre tendr un papel de primer orden: Para la victoria del proletariado es necesario suprimir la resistencia de los explotadores, no slo en el campo de la poltica y la economa, sino tambin en el campo de la ideologa. En el campo de la ideologa la resistencia es an ms persistente, larga, profunda, y continua despus de haber suprimido la resistencia armada de las clases explotadoras. Por lo tanto, la lucha contra la resistencia ideolgica de la vieja sociedad contra los restos del capitalismo en la mente de los trabajadores es una de las tareas ms importantes de la lucha de clases proletaria. Sin el cumplimiento de la tarea la clase obrera no puede reforzar su supremaca poltica. Y bajo la dictadura del proletariado este conduce la lucha de clases poltica, econmica e ideolgica. En esta lucha el campo de la poltica sigue siendo la principal forma de lucha de clases. (Partido Comunista de la Unin Sovitica; El materialismo histrico, 1950) Esto sera comprendido y asimilado por otros marxista-leninistas: Defendiendo estoicamente el punto de vista de que en el socialismo la lucha de clases se desarrollo de una manera integral, entrelazada con sus tres principales frentes el poltico, econmico e ideolgico, el partido se opone a la tesis de que, con la liquidacin de las clases explotadoras, la lucha de clases se desarrollo solo o principalmente en el frente ideolgico. La experiencia nos muestra, que en esta etapa, tambin, la lucha de clases sobre el frente poltico se mantiene siempre en el centro de la lucha de clases. Esta lucha toma decisiva importancia porque ella es una lucha por el poder estatal, una lucha sobre la cuestin de si la dictadura del proletariado debe ser mantenida y fortalecida, o si ella degenera y es liquidada. Independientemente del hecho de que en las diferentes etapas particulares formas de la lucha de clases se agudizan, la lucha de clases debe ser librada de manera simultnea en los tres
3
frentes: poltico, econmico e ideolgico. La decada en alguno de estos tres frentes encarna una desviacin de la teora marxista-leninista, porque trae consigo el debilitamiento de toda la lucha de clases. (Jorgji Sota; Sobre la dictadura del proletariado y la lucha de clases en Albania, 1983)
En la lucha de clases interior no hay que olvidar que las viejas clases
explotadoras estarn estimuladas de diversas formas por el cerco imperialista
exterior, entre las clases explotadoras nacionales hay entonces un cariz y
voluntad contrarrevolucionario de cara a la revolucin de su pas por doble
razn: por sus propios intereses de clase nacionales, y por la estimulacin de
clase explotadora que azuza desde el exterior a estos elementos explotadores
derrocados para que corten de raz las transformaciones revolucionarias o en
caso de ya haberse realizado, de degenerarlas:
Hay que demoler y arrojar lejos de nosotros la podrida teora de que, a cada
paso que damos adelante, la lucha de clases entre nosotros ir extinguindose
paralelamente, que a medida que aumenten nuestros xitos, el enemigo de
clase se har ms manso. No se trata solo de una teora podrida, sino tambin
es una teora peligrosa, porque adormece a nuestros hombres, les hace caer en
trampas y permite al enemigo de clase recobrarse para combatir al poder
sovitico. Por el contrario, cuanto ms avancemos, cuanto ms xitos
conquistemos, tanto mayor ser el furor de los restos de las clases
explotadoras aplastadas, tanto ms de deprisa recurrirn a las ms agudas
formas de lucha, tanto ms intentarn perjudicar al Estado sovitico, tanto
ms se agarraran a los ms desesperados procedimientos de lucha, como el
ltimo recursos de aquellos que van a la ruina. (Isif Vissarinovich
Dzhugashvili, Stalin; Sobre los defectos del trabajo del partido y sobre las
medidas para liquidar a los elementos trotskistas y dems elementos de doble
cara; Informe y discurso de clausura en el Pleno del Comit Central del
Partido Comunista (bolchevique) de la Unin Sovitica, 3 y 5 de marzo de
1937)
Estas lecciones calaron profundamente en la prxima generacin de marxista-
leninistas:
El hecho de que, en algn momento, descubrimos y aplastamos a los
elementos o grupos aislados hostiles, no nos debe poner a dormir o hacernos
creer que los enemigos han sido eliminados por eso. Mientras la lucha de clase
se prosigue, mientras la presin burguesa hostil se hace sentir del interior y del
exterior, el peligro de la aparicin de nuevos enemigos y de su accin contra el
socialismo subsiste. El partido y el pueblo tiene que estar siempre en guardia,
vigilante y revolucionario, deben llevar una lucha de clases resuelta e
intransigente y bloquearles as a los enemigos todo acceso por dnde estos
pudieran perjudicarnos. (Enver Hoxha; Informe en el VII Congreso del
4
Partido del Trabajo de Albania; Obras escogidas, Tomo V, 1 de noviembre de
1976)
En el plano exterior en las relaciones interestatales continua la lucha de clases
frente al cerco imperialista, que sigue manteniendo la presin ya sea a base de
acciones saboteadoras, propaganda ideolgica e incluso contiendas blicas. Este
peligro nunca desaparece:
El cerco capitalista, significa en concreto que existe un pas, la Unin
Sovitica, la cual ha instaurado el orden socialista, y que por otra parte, hay
una gran nmero de pases, pases burgueses, que continan llevando un
gnero de vida capitalista y estn cercando a la Unin Sovitica, aguardando
la menor oportunidad para atacarla, para abatirla o, en todo caso, para
socavar su potencia y debilitarla. (...) Nos preguntamos, por qu los Estados
burgueses debern observar hacia el Estado sovitico socialista una actitud
ms delicada y de mejor vecindad que hacia los Estados burgueses de mismo
tipo que ellos? Por qu enviarn a la retaguardia de la Unin Sovitica,
menos espas, saboteadores, agentes de diversin y asesinos de los que han
enviado a las retaguardias de los Estados burgueses congneres? De dnde
han salido tales suposiciones? No sera ms justo admitir, desde el punto de
vista marxista, que los Estados burgueses deben enviar a la retaguardia de la
Unin Sovitica hasta dos y tres veces ms saboteadores, espas, agentes de
diversin y asesinos de los que envan a la retaguardia de cualquier Estado
burgus? No est claro que mientras exista el cerco capitalista, existiran en
nuestro pas los saboteadores, los espas, los agentes de diversin y los
asesinos enviados a nuestra retaguardia por los agentes de los Estados
extranjeros?. (Isif Vissarinovich Dzhugashvili, Stalin; Sobre los defectos del
trabajo del partido y sobre las medidas para liquidar a los elementos
trotskistas y dems elementos de doble cara; Informe y discurso de clausura
en el Pleno del Comit Central del Partido Comunista (bolchevique) de la Unin
Sovitica, 3 y 5 de marzo de 1937)
Enver Hoxha dira en relacin al cerco capitalista, y conociendo las lecciones de
Lenin y Stalin sobre ste:
El cerco imperialista-revisionista no es en modo alguno pasivo o simplemente
geogrfico, es un cerco amenazador y activo, que nos combate en todos los
dominios y en todas las direcciones. No obstante, todava hay gente que tiene
un diseo superficial y simplista de este cerco, que subestima unas veces el
peligro de agresin militar, otras las dificultades que se derivan del bloqueo
econmico, y otras el peligro de diversin ideolgica extranjera. Actitudes de
este gnero son muy nocivas. (Enver Hoxha; Informe en el VII Congreso del
Partido del Trabajo de Albania; Obras escogidas, Tomo V, 1 de noviembre de
1976)
5
Y as expona Isif Stalin, algunos de los efectos de la interrelacin de ambos
flancos interior y exterior de la lucha de clases:
No hay que perder de vista que los restos de las clases derrotadas en la Unin
Sovitica no estn solos. Cuentan con el apoyo directo de nuestros enemigos,
ms all de las fronteras de la Unin Sovitica. Sera un error creer que la
esfera de lucha de clases se limita a las fronteras de la Unin Sovitica. Si un
flanco de la lucha de clases acta en el marco de la Unin Sovitica, su otro
flanco se extiende hasta el interior de las fronteras de los Estados burgueses
que nos rodean. Los restos de las clases derrotadas no pueden ignorarlo. Y,
justamente porque lo saben, continuarn tambin en el futuro sus ataques
desesperados. (Isif Vissarinovich Dzhugashvili, Stalin; Sobre los defectos
del trabajo del partido y sobre las medidas para liquidar a los elementos
trotskistas y dems elementos de doble cara; Informe y discurso de clausura
en el Pleno del Comit Central del Partido Comunista (bolchevique) de la Unin
Sovitica, 3 y 5 de marzo de 1937)
Los marxista-leninistas albaneses, tambin entenderan perfectamente esta
interrelacin:
El frente interior y exterior de la lucha contra los enemigos de clase estn
muy unidos entre s. Estn unidos por la ideologa anticomunista y por la
necesidad de sostenerse mutuamente en la lucha contra el partido y el orden
socialista. Es importante entender no slo que esta situacin seguir existiendo
mientras exista el cerco imperialista-revisionista y los restos del capitalismo
dentro del pas, sino que esta colaboracin puede reforzarse y volverse muy
peligrosa si nos mostramos desatentos, si mostramos falta de vigilancia y no
combatimos esta accin con determinacin. (Enver Hoxha; Informe en el
VII Congreso del Partido del Trabajo de Albania; Obras escogidas, Tomo V, 1
de noviembre de 1976)
Un pequeo resumen y explicacin de la importancia de los cambios en la
constitucin, puede verse en la entrevista a Stalin concedida a Roy Howard poco
antes de institucionalizarse la nueva constitucin, donde responde a las
preguntas de un periodista burgus sobre la idiosincrasia del sistema sovitico:
Howard: En la Unin Sovitica se est elaborando una nueva constitucin, la
que prev un nuevo sistema electoral. Hasta qu punto este nuevo sistema
puede cambiar la situacin en la Unin Sovitica, si en las elecciones slo va a
seguir tomando parte, igual que antes, un nico partido?
Stalin: Aprobaremos nuestra nueva constitucin, seguramente, a fines de este
ao. La comisin encargada de elaborarla trabaja y debe terminar pronto su
6
labor. Como ya se ha declarado, segn la nueva constitucin las elecciones
sern generales, iguales, directas y secretas. A usted le desconcierta el que en
estas elecciones slo vaya a tomar parte un nico partido. No ve qu lucha
electoral puede haber en estas condiciones. Es evidente que en las elecciones no
presentar candidaturas solamente el Partido Comunista (bolchevique) de la
Unin Sovitica, sino que las presentarn tambin toda clase de
organizaciones sociales sin partido. Y de stas hay centenares en nuestro pas.
En nuestro pas no existen partidos contrapuestos los unos a los otros,
exactamente lo mismo que no existen la clase de capitalistas y la clase de los
obreros explotados por los capitalistas, contrapuestas la una a la otra.
Nuestra sociedad est formada exclusivamente por trabajadores libres de la
ciudad y del campo: obreros, campesinos, intelectuales. Cada una de estas
capas sociales puede tener sus intereses especiales y expresarlos a travs de las
numerosas organizaciones sociales existentes. Pero desde el momento en que
no hay clases, desde el momento en que los limites entre las clases se van
borrando, desde el momento en que slo existan algunas, aunque no radicales,
diferencias entre las diversas capas de la sociedad socialista, no puede haber
ambiente para la creacin de partidos que luchen entre s. Donde no hay
diferentes clases, no puede haber diferentes partidos, pues el partido es parte
de una clase. En el nacionalsocialismo existe tambin un solo partido. Pero
ste sistema fascista de un solo partido no conduce a nada. La cosa est en que
en Alemania subsiste el capitalismo, subsisten las clases y la lucha de clases,
que, pese a todo, saldr a la superficie, incluso en el terreno de la lucha entre
partidos, que representan a clases contrapuestas, lo mismo que ha salido a la
superficie, por ejemplo, en Espaa. En Italia tambin existe un solo partido,
fascista; pero tampoco all, y por la misma causa, esto conduce a nada. Por
qu nuestras elecciones sern generales? Porque todos los ciudadanos, con
excepcin de los privados judicialmente del derecho de sufragio, tendrn
derecho a elegir y a ser elegidos. Por qu nuestras elecciones sern iguales?
Porque ni las diferencias de carcter patrimonial que todava existen
parcialmente ni el hecho de pertenecer a una raza o a una nacin irn en
privilegio o en quebranto de nadie. Las mujeres disfrutarn del derecho
electoral activo y pasivo en el mismo plano que los hombres. Nuestras
elecciones sern autnticamente iguales. Por qu secretas? Porque queremos
dar a los soviticos plena libertad para que voten por aquellos a quienes
quieran elegir, a quien confen la defensa de sus intereses. Por qu directas?
Porque las elecciones directas celebradas en cada localidad para todas las
instituciones representativas, hasta llegar a los rganos supremos, garantizan
mejor los intereses de los trabajadores de nuestro inmenso pas. A usted le
parece que no habr lucha electoral. Pero la habr, y yo preveo una lucha
electoral muy reida. En nuestro pas hay no pocas instituciones que trabajan
mal. Suele ocurrir que tal o cual rgano local de poder no sabe satisfacer tales
o cuales necesidades tan complejas y cada da mayores de los trabajadores de
la ciudad y del campo. Has construido o no has construido una buena
7
escuela? Has mejorado las condiciones de la vivienda? No eres un
burcrata? Has ayudado a hacer nuestro trabajo ms eficaz, a hacer nuestra
vida ms culta? Tales sern los criterios con que millones de electores
abordarn a los candidatos, dejando a un lado y borrando de las listas a los
que no sirvan, destacando los mejores y presentando sus candidaturas. S, la
lucha electoral ser reida; girar en torno a una multitud de problemas
candentes, principalmente en torno a problemas prcticos que tienen una
importancia primordial para el pueblo. Nuestro nuevo sistema electoral har
andar derechas a nuestras instituciones y organizaciones y las obligar a
mejorar su trabajo. Las elecciones generales, iguales, directas y secretas en la
Unin Sovitica, pondrn en manos de la poblacin un ltigo contra los
rganos de poder que trabajen mal. Nuestra nueva constitucin sovitica ser,
a mi juicio, la constitucin ms democrtica de cuantas existen en el mundo.
(Isif Vissarinovich Dzhugashvili, Stalin; Entrevista al camarada Stalin por
Roy Howard, 1936)
Este documento ha de considerarse como un clsico de la doctrina marxista-
leninista, el mismo ha permitido a muchas generaciones de marxista-leninistas
entender las caractersticas de la sociedad socialista, la democracia proletaria, la
lucha de clases en el socialismo, la naturaleza de una constitucin socialista, etc.
Razn por la que toda una pila de revisionistas han denigrado u olvidado esta
obra. Tambin esta obra refuta las mentiras ms groseras del jruschovismo,
maosmo, titoismo, trotskismo, anarquismo etc. sobre que Stalin habl en 1936
del fin de la lucha de clases, del fin de todas las clases en la sociedad
sovitica, de la apertura hacia una democracia burguesa, y todo tipo de
mitos propagados por la historiografa burguesa-revisionista.
8
Isif Vissarinovich Dzhugashvili
STALIN
Sobre el proyecto de Constitucin de la Unin
Sovitica
Formacin y tareas de la comisin de la Constitucin
Camaradas:
La comisin de la Constitucin, cuyo proyecto se somete al examen del presente
Congreso, fue formada, como es sabido, por una disposicin especial del VII
Congreso de los Soviets de la Unin Sovitica aprobada el 6 de febrero de 1935.
La disposicin dice:
1) Se introducirn modificaciones en la Constitucin de la Unin Sovitica en
el sentido de:
a) democratizar todava ms el sistema electoral, sustituyendo las elecciones
no del todo iguales por elecciones iguales, las elecciones indirectas por las
directas, el sufragio pblico por el secreto.
b) precisar la base social y econmica de la Constitucin, poniendo esta en
consonancia con la actual correlacin de las fuerzas de clase en la Unin
Sovitica creacin de la nueva industria socialista, aplastamiento de los
kulaks, triunfo del rgimen koljosiano, consolidacin de la propiedad socialista
como base de la sociedad sovitica, etc.
2) Proponer al Comit Ejecutivo Central de la Unin Sovitica que elija una
comisin, encargada de elaborar el texto corregido de la Constitucin
basndose en los principios sealados en el prrafo primero, y que presente
dicho texto a la aprobacin de la Sesin del Comit Ejecutivo Central de la
Unin Sovitica.
3) Realizar las prximas elecciones ordinarias a los rganos del poder
sovitico en la Unin Sovitica sobre la base del nuevo sistema electoral.
(Resolucin tomada en el VII Congreso de los soviets de la Unin Sovitica, 6
de febrero de 1935)
Eso fue el 6 de febrero de 1935. Un da despus de tomado este acuerdo, es
decir, el 7 de febrero de 1935, se reuni la primera Sesin del Comit Ejecutivo
9
Central de la Unin Sovitica, y, en cumplimiento del acuerdo del VII Congreso
de los Soviets de la Unin Sovitica, form una comisin de la Constitucin,
integrada por 31 miembros, a la que encarg la redaccin del proyecto de la
nueva Constitucin de la Unin Sovitica.
Tales son la base legal y las directivas dadas por el rgano supremo de la Unin
Sovitica que deban regir los trabajos de la comisin de la Constitucin.
La comisin de la Constitucin deba, pues, introducir cambios en la
Constitucin vigente, adoptada en 1924, teniendo en cuenta los progresos hacia
el socialismo que se han producido desde 1924 hasta nuestros das en la vida de
la Unin Sovitica.
Los cambios en la vida de la Unin Sovitica desde 1924 hasta 1936
Cules son los cambios que se han producido en la vida de la Unin Sovitica
durante el perodo de 1924 a 1936 y que la comisin de la Constitucin deba
reflejar en su proyecto?
Cul es la esencia de estos cambios?
Qu tenamos en 1924?
Nos encontrbamos entonces en el primer perodo de la NEP Nueva Poltica
Econmica, en el que el poder sovitico permiti cierta reanimacin del
capitalismo, al mismo tiempo que haca todo lo posible por desarrollar el
socialismo, confiando en organizar las cosas de modo que el sistema socialista
prevaleciese sobre el capitalista en el curso de la emulacin entre ambos
sistemas econmicos. La tarea consista en consolidar en el curso de esta
emulacin las posiciones del socialismo, lograr la supresin de los elementos
capitalistas y coronar la victoria del sistema socialista como sistema bsico de la
economa nacional.
Nuestra industria presentaba entonces un cuadro poco envidiable, sobre todo la
industria pesada. Es verdad que se iba restaurando poco a poco, pero todava
distaba mucho de haber alcanzado su nivel de produccin de anteguerra. Estaba
basada en una tcnica vieja, atrasada y exigua. Desde luego, se desarrollaba
hacia el socialismo. La proporcin del sector socialista en nuestra industria era,
en aquella poca, cosa del 80%. Pero el sector capitalista segua poseyendo no
menos del 20% de la industria.
10
Nuestra agricultura presentaba un cuadro an ms desconsolador. Verdad es
que la clase de los terratenientes ya haba sido suprimida, pero, en cambio, la
clase de los capitalistas agrarios, la clase de los kulaks, segua constituyendo una
fuerza bastante considerable. Vista en su conjunto, la agricultura pareca
entonces un inmenso ocano de pequeas haciendas campesinas individuales,
de atrasada tcnica medieval. En este ocano, los koljoses y los sovjoses venan a
ser puntos aislados e islotes, y, por cierto, no desempeaban todava un papel
algo importante en nuestra economa nacional. Los koljoses y sovjoses eran
dbiles, mientras que el kulak segua siendo fuerte. Entonces no hablbamos de
suprimir a los kulaks, sino de limitarlos.
Lo mismo puede decirse de la circulacin de mercancas en el pas. El sector
socialista slo abarcaba de un 50 a un 60% de la circulacin de mercancas,
mientras que el restante campo de actividad se hallaba en manos de
comerciantes, especuladores y dems representantes del capital privado en la
esfera del comercio.
Este era el cuadro que presentaba nuestra economa en 1924.
Qu tenemos ahora, en 1936?
Mientras que entonces nos encontrbamos en el primer perodo de la NEP, a
comienzos de la NEP, en un perodo de cierta reanimacin del capitalismo,
ahora nos hallamos en el ltimo perodo de la NEP, al final de la NEP, en el
perodo de la supresin completa del capitalismo en todas las esferas de la
economa nacional.
Empezaremos sealando que nuestra industria se ha desarrollado durante este
perodo hasta constituir una fuerza gigantesca. Hoy ya no se la puede calificar
de dbil y decir que est mal equipada tcnicamente. Al contrario, ahora se basa
en una maquinaria nueva, abundante, moderna, y tenemos una industria
pesada de gran desarrollo y una industria de construccin de maquinaria ms
desarrollada todava. Lo ms importante, sin embargo, es que el capitalismo ha
sido desterrado completamente de la esfera de nuestra industria, y que la forma
socialista de produccin es ahora el sistema que domina por completo en ella.
No se puede tildar de pequeez el hecho de que, por el volumen de su
produccin, nuestra actual industria socialista supere a la de anteguerra en ms
de siete veces.
En la esfera de la agricultura, en lugar de un ocano de pequeas haciendas
campesinas individuales, con una base tcnica dbil, y del predominio del kulak,
tenemos ahora la produccin mecanizada ms grande del mundo, equipada con
tcnica nueva: el sistema de los koljoses y los sovjoses, dominante en todo el
pas. Nadie ignora que la clase de los kulaks ha sido suprimida en la agricultura
11
y que el sector de la pequea hacienda campesina individual, con su atrasada
tcnica propia del medievo, ocupa ahora un lugar insignificante; por cierto, su
peso relativo en la agricultura, en lo que toca a la superficie de siembra, no pasa
de un 2 un 3%. Debe sealarse que los koljoses cuentan ahora con 316.000
tractores con una potencia de 5.700.000 HP y que, unidos a los sovjoses, tienen
ms de 400.000 tractores, con una potencia de 7.580.000 HP.
En lo que se refiere a la circulacin de mercancas en el pas, los comerciantes y
los especuladores han sido expulsados completamente de este campo. Toda la
circulacin de mercancas se encuentra ahora en manos del Estado, de las
cooperativas y de los koljoses. Ha surgido y se ha desarrollado un nuevo
comercio, el comercio sovitico, comercio sin especuladores, sin capitalistas.
Es, pues, un hecho la victoria completa del sistema socialista en todas las esferas
de la economa nacional.
Y qu significa eso?
Significa que la explotacin del hombre por el hombre ha sido suprimida,
eliminada, y que la propiedad socialista sobre los instrumentos y medios de
produccin se ha consolidado, como base inconmovible de nuestra sociedad
sovitica. (Prolongados aplausos)
Todos estos cambios en la esfera de la economa nacional de la Unin Sovitica
han hecho que contemos ahora con una nueva economa, la economa socialista,
que no conoce las crisis ni el paro forzoso, que no conoce la miseria ni la ruina y
que ofrece a los ciudadanos plena posibilidad de disfrutar una vida de bienestar
y de cultura.
Estos son, a grandes rasgos, los cambios que se han producido en nuestra
economa durante el perodo de 1924 a 1936.
Conforme a estos cambios en la economa de la Unin Sovitica, ha cambiado
tambin la estructura de clase de nuestra sociedad.
La clase de los terratenientes, como es sabido, fue ya suprimida gracias a la
victoria obtenida en la guerra civil. En lo que respecta a las dems clases
explotadoras, han compartido la suerte de la clase de los terratenientes. Ya no
existe la clase de los capitalistas en la esfera de la industria. Ya no existe la clase
de los kulaks en la esfera de la agricultura. Ya no hay comerciantes y
especuladores en la esfera de la circulacin de mercancas. Todas las clases
explotadoras han sido, pues, suprimidas.
Queda la clase obrera.
12
Queda la clase campesina.
Quedan los intelectuales.
Pero sera un error creer que estos grupos sociales no han sufrido ningn
cambio en este intervalo, que siguen siendo lo mismo que eran, por ejemplo, en
el perodo del capitalismo.
Tomemos, por ejemplo, la clase obrera de la Unin Sovitica. Frecuentemente
se la llama proletariado, por tradicin. Pero qu es el proletariado? El
proletariado es una clase privada de instrumentos y medios de produccin en un
sistema econmico donde los instrumentos y medios de produccin pertenecen
a los capitalistas y donde la clase de los capitalistas explota al proletariado. El
proletariado es una clase explotada por los capitalistas. Pero, como se sabe, en
nuestro pas la clase de los capitalistas ha sido ya suprimida, los instrumentos y
medios de produccin han sido quitados a los capitalistas y entregados al
Estado, cuya fuerza dirigente es la clase obrera. Por lo tanto, ya no hay una clase
capitalista que pueda explotar a la clase obrera. Por lo tanto, nuestra clase
obrera no solamente no est privada de los instrumentos y medios de
produccin, sino que, por el contrario, los posee en comn con todo el pueblo.
As, por esa razn, y por haber sido liquidada la clase de los capitalistas, queda
descartada toda posibilidad de explotacin de la clase obrera. Podemos,
despus de esto, llamar a nuestra clase obrera proletariado? Claro que no. Marx
deca que para que el proletariado pueda emanciparse tiene que aplastar a la
clase de los capitalistas, quitar a los capitalistas los instrumentos y medios de
produccin y destruir las condiciones de produccin que engendran el
proletariado. Puede decirse que la clase obrera de la Unin Sovitica ha
alcanzado ya estas condiciones de su emancipacin? Indiscutiblemente, puede y
debe decirse. Y qu significa eso? Significa que el proletariado de la Unin
Sovitica se ha transformado en una clase completamente nueva, en la clase
obrera de la Unin Sovitica, que ha destruido el sistema econmico capitalista,
ha consolidado la propiedad socialista sobre los instrumentos y medios de
produccin y lleva la sociedad sovitica camino del comunismo.
Como veis, la clase obrera de la Unin Sovitica es una clase completamente
nueva, liberada de la explotacin, una clase obrera como no conoca hasta ahora
la historia de la humanidad.
Pasemos a la cuestin de los campesinos. Suele decirse que los campesinos son
una clase de pequeos productores, cuyos miembros estn atomizados,
dispersos por todo el pas, que hurgan aisladamente la tierra en sus pequeas
haciendas, de tcnica atrasada; que son esclavos de la propiedad privada y
explotados impunemente por los terratenientes, los kulaks, los comerciantes, los
13
especuladores, los usureros, etc. Y, en efecto, los campesinos, en los pases
capitalistas, hablando de su masa fundamental, son precisamente una clase as.
Puede decirse que nuestros campesinos de hoy, los campesinos soviticos, se
parecen, en su conjunto, a esos campesinos? No; no puede decirse. Ya no
existen tales campesinos en nuestro pas. Nuestros campesinos soviticos son
campesinos absolutamente nuevos. Ya no existen en nuestro pas terratenientes
ni kulaks, ni comerciantes ni usureros que puedan explotar a los campesinos.
Por lo tanto, nuestros campesinos son campesinos emancipados de la
explotacin. Adems, nuestros campesinos soviticos son, en su aplastante
mayora, campesinos koljosianos, es decir, campesinos que no basan su
actividad productora ni su patrimonio en el trabajo individual y en una tcnica
atrasada, sino en el trabajo colectivo y en una tcnica moderna. Por ltimo, la
economa de nuestros campesinos no se apoya en la propiedad privada, sino en
la propiedad colectiva, que se ha desarrollado sobre la base del trabajo colectivo.
Como veis, los campesinos soviticos son campesinos completamente nuevos,
como no los conoca hasta ahora la historia de la humanidad.
Pasemos, por ltimo, a la cuestin de los intelectuales, a la cuestin de los
ingenieros y dems personal tcnico, de los trabajadores del frente cultural, de
los empleados en general, etc. Tambin han cambiado mucho durante el
perodo transcurrido. Ya no son los antiguos intelectuales osificados, que
trataban de colocarse por encima de las clases, cuando en realidad servan en su
masa a los terratenientes y capitalistas. Nuestros intelectuales soviticos son
intelectuales completamente nuevos, cuyas races todas estn vinculadas con la
clase obrera y con el campesinado. En primer lugar, ha cambiado la
composicin social de los intelectuales. Los descendientes de la nobleza y de la
burguesa constituyen un pequeo porcentaje de nuestros intelectuales
soviticos. El 80 90% de los intelectuales soviticos proceden de la clase
obrera, del campesinado y de otras capas trabajadoras. Y, por ltimo, ha
cambiado el carcter mismo de la actividad de los intelectuales. Antes se vean
obligados a servir a las clases ricas, pues no tenan otra salida. Ahora tienen que
servir al pueblo, pues ya no existen clases explotadoras. Y precisamente por ello
son miembros con plenos derechos de la sociedad sovitica, donde, en comn
con los obreros y campesinos, hombro a hombro con ellos, llevan a cabo la
edificacin de una nueva sociedad, de la sociedad socialista sin clases.
Como veis, se trata de una intelectualidad nueva, de una intelectualidad
trabajadora, como no la hay en ningn otro pas del mundo.
Estos son los cambios que se han producido en el perodo de que tratamos en la
estructura de clase de la sociedad sovitica.
Qu evidencian estos cambios?
14
Evidencian, en primer lugar, que las lneas divisorias entre la clase obrera y los
campesinos, as como entre estas clases y los intelectuales, se estn borrando, y
que est desapareciendo el viejo exclusivismo de clase. Esto significa que la
distancia entre estos grupos sociales se acorta cada vez ms.
Evidencian, en segundo lugar, que las contradicciones econmicas entre estos
grupos sociales desaparecen, se borran.
Evidencian, por ltimo, que desaparecen y se borran, igualmente, sus
contradicciones polticas.
Esos son los cambios que se han producido en la estructura de clase de la Unin
Sovitica.
El cuadro de los cambios que se han producido en la vida social de la Unin
Sovitica no sera completo si no dijsemos unas palabras de los cambios
habidos en otro terreno. Me refiero a las relaciones entre las nacionalidades de
la Unin Sovitica. Como se sabe, en la Unin Sovitica hay cerca de 60
naciones, grupos nacionales y pueblos. El Estado Sovitico es un Estado
multinacional. Claro est que la cuestin de las relaciones entre los pueblos de
la Unin Sovitica no puede por menos de tener para nosotros una importancia
de primer orden.
La Unin de Repblicas Socialistas Soviticas se form, como es sabido, en
1922, en el I Congreso de los Soviets de la Unin Sovitica. Se form basndose
en el principio de la igualdad y la libre unin de los pueblos de la Unin
Sovitica. La Constitucin actualmente en vigor, la de 1924, es la primera
Constitucin de la Unin Sovitica. Era aqul un perodo en el que las relaciones
entre los pueblos todava no estaban debidamente organizadas; en que las
reminiscencias de la desconfianza hacia los grandes rusos todava no haban
desaparecido, en que las fuerzas centrfugas continuaban an obrando. En
aquellas condiciones era necesario establecer la cooperacin fraternal de los
pueblos sobre la base de la mutua asistencia econmica, poltica y militar,
unindolos en un Estado multinacional federal. El poder sovitico no poda
dejar de ver las dificultades de esta obra. Ante s tena los experimentos
fracasados de los Estados multinacionales en los pases burgueses. Tena ante s
el fracaso del experimento del viejo imperio austro-hngaro. Sin embargo,
resolvi intentar la creacin de un Estado multinacional, porque saba que un
Estado multinacional surgido sobre la base del socialismo tena que salir
triunfante de toda clase de pruebas.
Desde entonces han transcurrido catorce aos. Es se un perodo suficiente para
comprobar un ensayo. Y qu vemos? El perodo transcurrido desde entonces
15
ha evidenciado, sin dejar lugar a dudas, que el ensayo de formar un Estado
multinacional sobre la base del socialismo ha tenido pleno xito. Esta es una
victoria indiscutible de la poltica leninista en cuestin nacional. (Prolongados
aplausos)
A qu se debe esta victoria?
La ausencia de clases explotadoras, que son las principales organizadoras de los
choques entre las naciones; la ausencia de la explotacin, que cultiva la
desconfianza mutua y atiza las pasiones nacionalistas; el hecho de que el poder
se halle en manos de la clase obrera, enemiga de toda esclavitud y fiel campeona
de la idea del internacionalismo; la realizacin efectiva de la ayuda mutua entre
los pueblos en todas las esferas de la vida econmica y social; y, por ltimo, el
florecimiento de la cultura nacional de los pueblos de la Unin Sovitica, cultura
nacional por su forma y socialista por su contenido; todos estos factores y otros
anlogos han cambiado esencialmente la fisonoma de los pueblos de la Unin
Sovitica; su sentimiento de mutua desconfianza ha desaparecido, se ha
desarrollado en ellos el sentimiento de la amistad, y de esta manera se ha
establecido una cooperacin verdaderamente fraternal entre los pueblos en el
sistema de un Estado federal nico.
Como resultado de ello, tenemos ahora un Estado socialista multinacional
definitivamente cristalizado, que ha salido triunfante de todas las pruebas y
cuya solidez puede envidiar cualquier Estado nacional de cualquier parte del
mundo. (Clamorosos aplausos)
Estos son los cambios que se han producido durante el perodo que nos ocupa
en las relaciones entre las nacionalidades de la Unin Sovitica.
Tal es el balance general de los cambios habidos en la vida econmica, poltica y
social de la Unin Sovitica durante el perodo de 1924 a 1936.
Particularidades esenciales del Proyecto de Constitucin
De qu manera se han reflejado en el proyecto de la nueva Constitucin todos
estos cambios producidos en la vida de la Unin Sovitica?
En otras palabras: Cules son las caractersticas principales del proyecto de
Constitucin sometido al examen de este Congreso?
A la comisin de la Constitucin se le encomend que introdujese
modificaciones en la Constitucin de 1924. El trabajo de la Comisin ha dado
16
por fruto un nuevo texto de la Constitucin: el proyecto de la nueva
Constitucin de la Unin Sovitica. Al redactar el proyecto de la nueva
Constitucin, la comisin ha partido del principio de que una Constitucin no
debe confundirse con un programa. Eso quiere decir que entre un programa y
una Constitucin existe una diferencia esencial. Mientras un programa formula
lo que todava no existe y lo que hay que alcanzar y conquistar en el futuro, una
Constitucin, por el contrario, debe tratar de lo que existe ya, de lo que ya ha
sido alcanzado y conquistado. Un programa se refiere principalmente al futuro,
y una Constitucin, al presente.
Dos ejemplos, a ttulo de ilustracin.
Nuestra sociedad sovitica ha conseguido ya realizar el socialismo en lo
fundamental; ha creado un rgimen socialista; esto es, ha realizado lo que, en
otros trminos, los marxistas denominan fase primera o inferior del
comunismo. Eso quiere decir que en nuestro pas se ha realizado en lo
fundamental la primera fase del comunismo, el socialismo. (Prolongados
aplausos) El principio bsico de esta fase del comunismo es, como se sabe, la
frmula: de cada cual, segn sus capacidades; a cada cual, segn su trabajo.
Debe reflejar nuestra Constitucin este hecho, el hecho de que hayamos
conquistado el socialismo? Debe basarse sobre esta conquista? Sin duda
alguna. Debe hacerlo, porque el socialismo es para la Unin Sovitica algo que
ya se ha alcanzado y conquistado.
Pero la sociedad sovitica no ha llegado todava a la fase superior del
comunismo, en la cual el principio dominante ser la frmula: De cada cual,
segn sus capacidades; a cada cual, segn sus necesidades, aunque se plantea
el objetivo de lograr en el futuro la realizacin de la fase superior del
comunismo. Puede basarse nuestra Constitucin en la fase superior del
comunismo, que todava no existe y que an debe ser conquistada? No; no
puede, porque la fase superior del comunismo es para la Unin Sovitica algo
que todava no se ha realizado y que debe realizarse en el futuro.
No puede, si no quiere convertirse en un programa o en una declaracin sobre
futuras conquistas.
Tales son los marcos de nuestra Constitucin en el presente perodo histrico.
As, pues, el proyecto de la nueva Constitucin es un resumen del camino
recorrido, un resumen de las conquistas logradas ya. Es, por tanto, el registro y
consolidacin legislativa de lo que se ha alcanzado y conquistado de hecho.
(Clamorosos aplausos)
17
Esa es la primera particularidad del proyecto de la nueva Constitucin de la
Unin Sovitica.
Prosigamos. Las constituciones de los pases burgueses parten generalmente de
la conviccin de que el sistema capitalista es inconmovible. La base esencial de
estas constituciones son los principios del capitalismo, y sus fundamentos
principales, la propiedad privada de la tierra, de los bosques, las fbricas y
dems instrumentos y medios de produccin; la explotacin del hombre por el
hombre y la existencia de explotadores y explotados; la pobreza para la mayora
trabajadora, en un polo de la sociedad, y el lujo para la minora que no trabaja,
pero es rica, en el otro polo, etc., etc. Las constituciones de los pases burgueses
se basan en stos y otros anlogos fundamentos del capitalismo. Esas
constituciones reflejan y consolidan legislativamente dichos fundamentos.
A diferencia de estas constituciones, el proyecto de la nueva Constitucin de la
Unin Sovitica parte del hecho de la supresin del rgimen capitalista, del
hecho de la victoria del rgimen socialista en la Unin Sovitica. La base
esencial del proyecto de la nueva Constitucin de la Unin Sovitica la integran
los principios del socialismo, sus fundamentos principales, que ya han sido
conquistados y realizados, a saber: la propiedad socialista de la tierra, los
bosques, las fbricas y otros instrumentos y medios de produccin; la supresin
de la explotacin y de las clases explotadoras; la eliminacin de la miseria de la
mayora y del lujo de la minora; la supresin del paro forzoso; el trabajo como
obligacin y como deber de honor de todo ciudadano apto para el mismo, de
acuerdo con la frmula: el que no trabaja no come. El derecho al trabajo, es
decir, el derecho de todo ciudadano a obtener ocupacin garantizada; el derecho
al descanso; el derecho a la instruccin, etc., etc. El proyecto de la nueva
Constitucin se basa en stos y otros parecidos fundamentos del socialismo, los
refleja y los consolida legislativamente.
Esa es la segunda particularidad del proyecto de la nueva Constitucin.
Prosigamos. Las constituciones burguesas parten tcitamente de la premisa de
que la sociedad se compone de clases antagnicas, de clases que poseen riquezas
y de clases que no las poseen; parten de que, sea cual fuere el partido que llegue
al poder, la direccin estatal de la sociedad dictadura ha de hallarse en manos
de la burguesa; parten de que la Constitucin es necesaria para consolidar el
orden social deseable y beneficioso para las clases poseedoras.
A diferencia de las constituciones burguesas, el proyecto de la nueva
Constitucin de la Unin Sovitica parte de la premisa de que en la sociedad no
hay ya clases antagnicas; de que la sociedad se compone de dos clases amigas:
la de los obreros y la de los campesinos; de que precisamente estas clases
trabajadoras son las que estn en el poder; de que la direccin estatal de la
18
sociedad dictadura se halla en manos de la clase obrera, la clase de
vanguardia de tal sociedad; de que la Constitucin es necesaria para consolidar
el orden social deseable y beneficioso para los trabajadores.
Esa es la tercera particularidad del proyecto de la nueva Constitucin.
Prosigamos. Las constituciones burguesas parten tcitamente de la premisa de
que las naciones y las razas no pueden ser iguales en derechos; de que hay
naciones con plenos derechos y naciones sin plenitud de derechos, y que,
adems, hay una tercera categora de naciones o razas, por ejemplo, en las
colonias, que tienen todava menos derechos que las naciones que no gozan de
plenos derechos. Eso quiere decir que todas estas constituciones son, en el
fondo, nacionalistas, es decir, constituciones de naciones dominantes.
A diferencia de esas constituciones, el proyecto de la nueva Constitucin de la
Unin Sovitica es, por el contrario, profundamente internacionalista. Parte del
principio de que todas las naciones y razas son iguales en derechos. Parte del
principio de que las diferencias de color o de idioma, de nivel cultural o de nivel
de desarrollo estatal as como cualquier otra diferencia entre naciones y razas,
no pueden servir de base para justificar la desigualdad de derechos entre las
naciones. Parte del principio de que todas las naciones y razas,
independientemente de su situacin pasada y presente, independientemente de
su fuerza o su debilidad, tienen que disfrutar de iguales derechos en todas las
esferas de la vida econmica, social, estatal y cultural de la sociedad.
Esa es la cuarta particularidad del proyecto de la nueva Constitucin.
La quinta particularidad del proyecto de la nueva Constitucin es su democracia
firme y consecuente hasta el fin. Desde el punto de vista de la democracia, las
constituciones burguesas pueden dividirse en dos grupos: un grupo de
constituciones niega sin rodeos o reduce de hecho a la nada la igualdad de
derechos de los ciudadanos y las libertades democrticas; el otro grupo de
constituciones acepta de buena gana, e incluso proclama a bombo y platillos, los
principios democrticos. Pero, al hacerlo, pone tales reservas y restricciones,
que los derechos y las libertades democrticos quedan completamente
mutilados. Hablan de igualdad de derechos electorales para todos los
ciudadanos, pero los limitan a rengln seguido mediante requisitos de
residencia, de instruccin e incluso de fortuna. Hablan de igualdad de derechos
de los ciudadanos, pero hacen a rengln seguido la salvedad de que no se
refieren a las mujeres, o que se refieren a ellas parcialmente, etc., etc.
Un rasgo caracterstico del proyecto de la nueva Constitucin de la Unin
Sovitica consiste en que est exento de tales salvedades y restricciones. Para l,
no existen ciudadanos activos o pasivos; para l, todos los ciudadanos son
activos. No reconoce diferencias entre los derechos de los hombres y de las
19
mujeres, o entre domiciliados y no domiciliados, pudientes y no pudientes,
instruidos o sin instruccin. Para el proyecto de la nueva Constitucin, todos los
ciudadanos son iguales en derechos. No es la fortuna, no es el origen nacional o
el sexo, ni la situacin que ocupa oficialmente, sino la capacidad personal y el
trabajo personal de cada ciudadano lo que determina su posicin en la sociedad.
Por ltimo, hay otra particularidad en el proyecto de la nueva Constitucin. Las
constituciones burguesas se limitan generalmente a enunciar los derechos
formales de los ciudadanos, sin preocuparse de las condiciones para el ejercicio
de estos derechos, de la posibilidad de su ejercicio, de los medios para su
ejercicio. Hablan de la igualdad de los ciudadanos, pero olvidan que no puede
haber verdadera igualdad entre el patrono y el obrero, entre el terrateniente y el
campesino, cuando los primeros poseen riquezas y tienen peso poltico en la
sociedad, mientras los segundos estn privados de lo uno y de lo otro; cuando
los primeros son explotadores, mientras que los segundos son explotados.
Hablan, adems, de libertad de palabra, de reunin y de imprenta, pero olvidan
que todas estas libertades pueden convertirse en palabras huecas para la clase
obrera, cuando se la priva de la posibilidad de disponer de locales adecuados
para sus reuniones, de buenas imprentas, de suficiente cantidad de papel, etc.
Un rasgo caracterstico del proyecto de la nueva Constitucin consiste en que no
se limita a enunciar los derechos formales de los ciudadanos, sino que hace
hincapi en las garantas de estos derechos, en los medios de su ejercicio. No
proclama simplemente la igualdad de derechos de los ciudadanos, sino que la
asegura consolidando legislativamente la supresin del rgimen de explotacin,
la emancipacin de los ciudadanos de toda explotacin. No proclama
simplemente el derecho al trabajo, sino que lo garantiza, consolidando
legislativamente la ausencia de crisis en la sociedad sovitica, la supresin del
paro forzoso. No solamente proclama las libertades democrticas, sino que las
garantiza legislativamente, facilitando los medios materiales necesarios. Por
tanto, es evidente que la democracia del proyecto de la nueva Constitucin no es
la corriente y comnmente reconocida democracia general, sino una
democracia socialista.
Esas son las particularidades esenciales del proyecto de la nueva Constitucin
de la Unin Sovitica.
As se reflejan en el proyecto de la nueva Constitucin los progresos y cambios
producidos en la vida econmica, social y poltica de la Unin Sovitica durante
el perodo de 1924 a 1936.
Crtica burguesa del proyecto de Constitucin
20
Unas cuantas palabras sobre la crtica burguesa del proyecto de Constitucin.
La actitud observada por la prensa burguesa del extranjero ante el proyecto de
Constitucin, ofrece, indudablemente, cierto inters. Por cuanto la prensa
extranjera refleja la opinin de distintos sectores de la poblacin en los pases
burgueses, no podemos pasar por alto la crtica que esta prensa ha desplegado
contra el proyecto de Constitucin.
La reaccin de la prensa extranjera ante el proyecto de Constitucin se
manifest al principio como una tendencia a silenciar el proyecto de
Constitucin. Me refiero, en este caso, a la prensa ms reaccionaria, a la prensa
fascista. Este grupo de crticos consider que lo mejor sera silenciar el proyecto
de Constitucin, presentar las cosas como si tal proyecto no existiera en
absoluto. Alguien puede decir que la tctica del silencio no es crtica. Pero no es
cierto. El mtodo del silencio, como mtodo especial de pasar por alto los
hechos, es tambin, aunque, cierto, tonta y ridcula, una forma de crtica.
(Hilaridad general. Aplausos) Pero el mtodo del silencio no les dio resultado.
Al fin se han visto obligados a abrir la vlvula y a informar al mundo de que, por
muy triste que sea, el proyecto de Constitucin de la Unin Sovitica existe, y no
solamente existe, sino que est empezando a ejercer una influencia perniciosa
en las mentes. Y no poda ser de otra manera, porque, al fin y al cabo, en el
mundo hay una opinin pblica, lectores, gentes que quieren saber la verdad de
los hechos, y es completamente imposible mantenerlos mucho tiempo en las
garras del engao. Con el engao no se puede ir muy lejos.
El segundo grupo de crticos reconoce que el proyecto de Constitucin existe en
realidad; pero considera que no encierra gran inters, ya que no es, en esencia,
un proyecto de Constitucin, sino un pedazo de papel, una promesa vana, dada
para hacer cierta maniobra y engaar a la gente. Y a esto aaden que la Unin
Sovitica no poda dar un proyecto mejor, ya que la Unin Sovitica misma no
es un Estado, sino solamente un concepto geogrfico (hilaridad general), y
puesto que no es un Estado, su Constitucin no puede ser una verdadera
Constitucin. Un representante tpico de este grupo de crticos es, aunque
parezca extrao, la Deutsche Diplomatisch-Politische Korrespondenz, rgano
oficioso alemn. Esta revista dice claramente que el proyecto de Constitucin de
la Unin Sovitica es una promesa vana, un engao, una aldea Potemkin.
Declara sin vacilar que la Unin Sovitica no es un Estado; que la Unin
Sovitica no es ms que un concepto geogrfico exactamente definido
(hilaridad general); que la Constitucin de la Unin Sovitica no puede, en vista
de ello, reconocerse como una verdadera Constitucin.
Qu puede opinarse de tales, con perdn sea dicho, crticos?
21
En uno de sus cuentos, el gran escritor ruso Schedrn pinta un tipo de burcrata
tirano, muy limitado y obtuso, pero en extremo credo de su persona y celoso.
Despus de que este burcrata hubo establecido orden y tranquilidad en la
regin que se le haba confiado, exterminando a millares de habitantes y
quemando decenas de ciudades, lanz una mirada alrededor y divis a Amrica
en el horizonte, un pas, naturalmente, poco conocido, en el que existan ciertas
libertades que perturbaban al pueblo y donde el Estado era gobernado por otros
mtodos. El burcrata vio Amrica y se indign: Qu pas era aqul? De dnde
haba salido? Con qu derecho exista? (Hilaridad general. Aplausos) Claro que
haba sido descubierto casualmente, haca algunos siglos; pero no era posible
cubrirlo de nuevo para que no se volviese a or nada de l? (Hilaridad general) Y
una vez dicho esto, decret: que se vuelva a cubrir Amrica. (Hilaridad
general)
Yo creo que esos seores de la Deutsche Diplomatisch-Politische Korrespondenz
y el burcrata de Schedrn se parecen como dos gotas de agua. (Hilaridad
general. Aplausos) Hace ya tiempo que la Unin Sovitica es para estos seores
una raspa en el ojo. Hace diecinueve aos que la Unin Sovitica se yergue como
un faro, contagiando a la clase obrera del mundo entero del espritu de la
emancipacin y provocando el furor de los enemigos de la clase obrera. Y he
aqu que la Unin Sovitica no solamente existe, sino que crece, y no solamente
crece, sino que prospera, y no solamente prospera, sino que redacta un proyecto
de nueva Constitucin, un proyecto que exalta las mentes e inspira nuevas
esperanzas a las clases oprimidas. (Aplausos) Despus de esto, cmo es posible
que los seores del rgano oficioso alemn no se indignen? Qu pas es ste?,
gritan. Con qu derecho existe? (Hilaridad general) Y si fue descubierto en
octubre de 1917, por qu no se le puede cubrir de nuevo para que no se vuelva a
or nada de l? Una vez dicho esto, han decretado: volver a cubrir la Unin
Sovitica; proclamar alto y claro que la Unin Sovitica, como Estado, no existe;
que la Unin Sovitica no es ms que un simple concepto geogrfico. (Hilaridad
general)
Una vez dictada la decisin de cubrir Amrica de nuevo, el burcrata de
Schedrn, a pesar de su estulticia, manifest, sin embargo, ciertos elementos de
comprensin de la realidad, pues se dijo a s mismo: Pero yo creo que eso no
depende de m. (Carcajada general, clamorosos aplausos) No s si esos seores
del rgano oficioso alemn tendrn el suficiente meollo para comprender que,
desde luego, pueden cubrir a cualquier Estado sobre el papel; pero, hablando
en serio, eso no depende de ellos (Carcajada general, clamorosos aplausos)
En cuanto a eso de que la Constitucin de la Unin Sovitica no es ms que una
promesa vana, una aldea Potemkin, etc., quisiera referirme a una serie de
hechos establecidos, de por s elocuentes.
22
En 1917, los pueblos de la Unin Sovitica derribaron a la burguesa y
establecieron la dictadura del proletariado, establecieron el poder sovitico. Eso
es un hecho, y no una promesa.
Despus, el poder sovitico suprimi la clase de los terratenientes y entreg a los
campesinos ms de 150 millones de hectreas de tierras seoriales, del Estado y
de los monasterios; y ello, aparte de las tierras que ya se hallaban en manos de
los campesinos. Eso es un hecho, y no una promesa.
Despus, el poder sovitico expropi a la clase de los capitalistas, le quit los
Bancos, las fbricas, los ferrocarriles y dems instrumentos y medios de
produccin, los declar propiedad socialista y puso al frente de estas empresas a
los mejores hombres de la clase obrera. Eso es un hecho, y no una promesa.
(Prolongados aplausos)
Despus, una vez organizada la industria y la agricultura sobre principios
nuevos, sobre principios socialistas, dndoles una nueva base tcnica, el poder
sovitico ha logrado que la agricultura rinda hoy en la Unin Sovitica vez y
media ms que antes de la guerra, que la industria produzca siete veces ms y
que la renta nacional se haya cuadruplicado en comparacin con el perodo de
anteguerra. Todo eso son hechos, y no promesas. (Prolongados aplausos)
Despus, el poder sovitico ha suprimido el paro forzoso, ha hecho realidad el
derecho al trabajo, el derecho al descanso, el derecho a la instruccin; ha
garantizado mejores condiciones materiales y culturales para los obreros, los
campesinos y los intelectuales; ha garantizado a los ciudadanos el sufragio
universal, directo, igual y secreto. Todo eso son hechos, y no promesas.
(Prolongados aplausos)
Por ltimo, la Unin Sovitica, ha trazado un proyecto de nueva Constitucin
que no es una promesa, sino un documento que fija y consolida legislativamente
esos hechos generalmente conocidos, que fija y consolida legislativamente lo
que ya se ha alcanzado y conquistado.
Cabe preguntar: a qu se reduce, pues, toda esta charlatanera de los seores
del rgano oficioso alemn sobre las aldeas Potemkin, si no es a que se han
propuesto ocultar al pueblo la verdad sobre la Unin Sovitica, confundir al
pueblo, engaarlo?
Esos son los hechos. Y los hechos, como suele decirse, son tercos. Los seores
del rgano oficioso alemn pueden decir: Tanto peor para los hechos. (Hilaridad
general) Pero se les puede contestar con el conocido proverbio ruso; Las leyes
no se han escrito para los tontos. (Grandes carcajadas, prolongados aplausos)
23
El tercer grupo de crticos est dispuesto a reconocer que el proyecto de
Constitucin tiene cosas buenas; lo considera como un fenmeno positivo, pero
saben ustedes?, duda mucho de que varias de sus tesis puedan llevarse a efecto,
pues est convencido de que, en general, son imposibles de realizar y quedarn
en el papel. Esos crticos son, hablando suavemente, escpticos. Escpticos
como sos los hay en todos los pases.
Debo decir que no es la primera vez que nos los encontramos. Cuando los
bolcheviques tomaron el poder en 1917, los escpticos decan: Los bolcheviques
quiz no sean malas personas, pero no sabrn administrar el poder; fracasarn.
Result, sin embargo, que no fueron los bolcheviques, sino los escpticos,
quienes fracasaron.
Durante la guerra civil y la intervencin extranjera, este grupo de escpticos
deca: El poder sovitico, claro est, no es malo; pero Denikin y Kolchak,
ayudados por los extranjeros, lo aplastarn indudablemente. Result, sin
embargo, que los escpticos se equivocaron tambin en este caso.
Cuando el poder sovitico public el primer plan quinquenal, los escpticos
salieron de nuevo a escena, diciendo: El plan quinquenal es, desde luego, bueno,
pero no creemos que pueda realizarse; es de suponer que los bolcheviques
fracasarn con su plan quinquenal. Los hechos demostraron, sin embargo, que
los escpticos volvieron a tener mala suerte: el plan quinquenal se realiz en
cuatro aos.
Lo mismo puede decirse del proyecto de la nueva Constitucin y de la crtica que
de l han hecho los escpticos. Bast que se publicara el proyecto para que este
grupo de crticos saliera de nuevo a escena con su sombro escepticismo, con sus
dudas respecto a la viabilidad de ciertas tesis de la Constitucin. No hay ningn
fundamento para dudar de que los escpticos fracasarn tambin en esta
ocasin, de que fracasarn ahora lo mismo que fracasaron una y otra vez en el
pasado.
El cuarto grupo de crticos, al atacar el proyecto de la nueva Constitucin, lo
caracteriza de evolucin a la derecha, de abandono de la dictadura del
proletariado, de liquidacin del rgimen bolchevique. Los bolchevique se
han desviado hacia la derecha; esto es un hecho, dicen en diferentes tonos.
Esto lo repiten con especial fervor algunos peridicos polacos y, en parte, los
norteamericanos.
Qu puede opinarse de tales, con perdn sea dicho, crticos?
Si no consideran la extensin de la base de la dictadura de la clase obrera y la
conversin de la dictadura en un sistema ms flexible y, por lo tanto, ms
24
poderoso de direccin estatal de la sociedad, como un fortalecimiento de la
dictadura de la clase obrera, sino como su debilitamiento o incluso su
abandono, cabe preguntar: saben en general esos seores lo que es la dictadura
de la clase obrera?
Si la consolidacin legislativa de la victoria del socialismo, la consolidacin
legislativa de los xitos de la industrializacin, de la colectivizacin y de la
democratizacin, las llaman evolucin a la derecha, cabe preguntar: saben
en general esos seores en qu se diferencia la izquierda de la derecha?
(Hilaridad general, aplausos)
No cabe la menor duda de que estos seores se han hecho un lo en su crtica del
proyecto de Constitucin, y, hechos un lo, han confundido la derecha con la
izquierda.
No puede uno por menos de recordar con este motivo a la pequea sirvienta
Pelagueya, de Almas muertas, de Ggol. Pelagueya, segn nos cuenta Ggol,
quiso una vez mostrar el camino a Selifn, el cochero de Chchikov; pero como
no saba distinguir el lado derecho del camino del lado izquierdo, se hizo un lo,
colocndose en una situacin embarazosa. Hay que reconocer que nuestros
crticos de los peridicos polacos, a pesar de sus grandes pretensiones, no han
sobrepasado en mucho el nivel de comprensin de Pelagueya, la sirvienta de
Almas muertas. (Aplausos) Como recordaris, el cochero Selifn crey necesario
leer la cartilla a Pelagueya porque confunda la derecha con la izquierda, y le
dijo: Ay, pies negros, no sabes dnde tienes la derecha ni dnde la izquierda!
Yo creo que a nuestros infortunados crticos tambin se le debera leer la
cartilla, dicindoseles: Ay, crticos de mala muerte, no sabis donde tenis la
derecha ni donde la izquierda! (Prolongados aplausos)
Finalmente, hay otro grupo de crticos. Mientras el grupo anterior acusa al
proyecto de Constitucin de renunciar a la dictadura de la clase obrera, este
grupo, por el contrario, lo acusa de no cambiar nada en la situacin existente en
la Unin Sovitica, de dejar intacta la dictadura de la clase obrera, de no admitir
la libertad de partidos polticos y de mantener en vigor la presente situacin
dirigente del partido comunista en la Unin Sovitica. Este grupo de crticos
cree que la ausencia de libertad de partidos en la Unin Sovitica es indicio de
violacin de los principios de la democracia.
Debo reconocer que el proyecto de la nueva Constitucin deja efectivamente en
vigor el rgimen de la dictadura de la clase obrera y no cambia en nada la actual
posicin dirigente del Partido Comunista de la Unin Sovitica. (Clamorosos
aplausos) Si los honorables crticos consideran esto un defecto del proyecto de
Constitucin, no podemos hacer ms que lamentarlo. Los bolcheviques lo
consideramos una virtud del proyecto de Constitucin. (Clamorosos aplausos)
25
En cuanto a la libertad para los diferentes partidos polticos, nosotros
mantenemos una opinin un tanto diferente. Un partido es una parte de una
clase, su parte de vanguardia.
Varios partidos y, por consecuencia, la libertad de partidos, slo pueden existir
en una sociedad en la que existen clases antagnicas, cuyos intereses son
hostiles e irreconciliables; en una sociedad donde, por ejemplo, hay capitalistas
y obreros, terratenientes y campesinos, kulaks y campesinos pobres, etc. Pero en
la Unin Sovitica ya no hay clases como los capitalistas, los terratenientes, los
kulaks, etc. En la Unin Sovitica no hay ms que dos clases: los obreros y los
campesinos, cuyos intereses, lejos de ser hostiles, son, por el contrario, afines.
Por lo tanto, en la Unin Sovitica no hay base para la existencia de varios
partidos y, por consiguiente, para la libertad de esos partidos. En la Unin
Sovitica slo hay base para un solo partido: el partido comunista. En la Unin
Sovitica slo puede existir un partido, el partido comunista, que defiende
valientemente y con toda consecuencia los intereses de los obreros y los
campesinos. Y que no defiende mal los intereses de estas clases es un hecho que
no puede ponerse en duda. (Clamorosos aplausos)
Se habla de democracia. Pero qu es la democracia? La democracia en los
pases capitalistas, en los que existen clases antagnicas, no es, en ltima
instancia, ms que democracia para los fuertes, para la minora poseedora. La
democracia en la Unin Sovitica es, por el contrario, democracia para los
trabajadores, es decir, democracia para todos. Pero de aqu se deduce que los
principios de la democracia no los viola el proyecto de la nueva Constitucin de
la Unin Sovitica, sino que los violan las constituciones burguesas. Por eso creo
que la Constitucin de la Unin Sovitica es la nica Constitucin del mundo
consecuentemente democrtica.
Eso es lo que puede decirse de la crtica burguesa en torno al proyecto de la
nueva Constitucin de la Unin Sovitica.
Enmiendas y adiciones al proyecto de Constitucin
Pasemos a las enmiendas y adiciones al proyecto de Constitucin hechas por los
ciudadanos durante la discusin del proyecto por el pueblo entero.
La discusin del proyecto de Constitucin por el pueblo entero ha dado, como se
sabe, un nmero bastante considerable de enmiendas y adiciones. Todas ellas
han sido publicadas en la prensa sovitica. En vista de la gran variedad de las
26
enmiendas y de su distinto valor, lo mejor sera, a mi juicio, dividirlas en tres
categoras.
El rasgo distintivo de las enmiendas de la primera categora consiste en que no
tratan cuestiones de la Constitucin, sino cuestiones de la labor cotidiana de los
futuros rganos legislativos. Varias cuestiones sobre seguros, algunas cuestiones
sobre la edificacin koljosiana, algunas cuestiones sobre la edificacin
industrial, cuestiones de finanzas: tales son los temas de estas enmiendas. Al
parecer, sus autores no ven claramente la diferencia entre las cuestiones
constitucionales y las cuestiones de legislacin corriente. Precisamente por ello
quieren introducir en la Constitucin el mayor nmero posible de leyes, con
vistas a hacer de la Constitucin algo as como un cdigo de leyes. Pero una
Constitucin no es un cdigo de leyes. Una Constitucin es una ley fundamental,
y nada ms que una ley fundamental. Una Constitucin no excluye, sino que
presupone el trabajo cotidiano de los futuros rganos legislativos. Nuestra
Constitucin ofrece la base jurdica para la futura actividad legislativa de esos
rganos. Por ello, las enmiendas y adiciones de esta ndole deben ser pasadas, a
mi juicio, a los futuros rganos legislativos del pas, puesto que no guardan una
relacin directa con la Constitucin.
En la segunda categora debe incluirse las enmiendas y adiciones que tienden a
introducir en la Constitucin reseas histricas o declaraciones sobre lo que el
poder sovitico todava no ha logrado y debe lograr en el futuro. Consignar en la
Constitucin las dificultades que el partido, la clase obrera y todos los
trabajadores han vencido durante largos aos en la lucha por la victoria del
socialismo; indicar en la Constitucin el objetivo final del movimiento sovitico,
es decir, la edificacin de la sociedad comunista completa: tal es el contenido de
esas enmiendas, que se repiten en numerosas variantes. Creo que las enmiendas
y adiciones de esta ndole deben tambin dejarse a un lado, puesto que no
guardan una relacin directa con la Constitucin. La Constitucin es el registro
y la consolidacin legislativa de las conquistas ya obtenidas y aseguradas. Si no
queremos alterar este rasgo principal de la Constitucin, no debemos llenarla de
reseas histricas sobre el pasado o de declaraciones sobre las futuras
conquistas de los trabajadores de la Unin Sovitica. Para eso tenemos otros
medios y otros documentos.
Por ltimo, en la tercera categora deben incluirse las enmiendas y adiciones
que guardan una relacin directa con el proyecto de Constitucin.
Gran parte de estas enmiendas son de redaccin. Por ello pueden ser pasadas a
la comisin Redactora, que, yo as lo creo, constituir el presente Congreso,
encomendndole que redacte definitivamente la nueva Constitucin.
27
En cuanto a las dems enmiendas de la tercera categora, tienen una
importancia ms sustancial, y yo creo que sobre ellas habra que decir algunas
palabras.
1) Primeramente, sobre las enmiendas hechas al artculo primero del proyecto
de Constitucin. Hay cuatro enmiendas. Unos proponen que en lugar de decir:
Estado de obreros y campesinos, se diga: Estado de trabajadores. Otros
proponen que a las palabras Estado de obreros y campesinos se aada: y
trabajadores intelectuales. Otros piden que, en lugar de las palabras Estado
de obreros y campesinos, se diga: Estado de todas las razas y nacionalidades
que pueblan el territorio de la Unin Sovitica . Otros proponen reemplazar la
palabra campesinos por la de koljosianos, o por las palabras trabajadores
de la agricultura socialista.
Deben aceptarse esas enmiendas? Yo creo que no.
De qu trata el artculo primero del proyecto de Constitucin? De la
composicin de clase de la sociedad sovitica. Podemos nosotros, marxistas,
eludir en la Constitucin el problema de la composicin de clase de nuestra
sociedad? No, evidentemente. La sociedad sovitica se compone, como es
sabido, de dos clases: los obreros y los campesinos. De eso precisamente habla
el artculo primero del proyecto de Constitucin. Por consiguiente, dicho
artculo refleja con exactitud la composicin de clase de nuestra sociedad. Puede
preguntarse: y la intelectualidad trabajadora? La intelectualidad nunca ha sido
ni puede ser una clase: ha sido y sigue siendo una capa social, cuyos miembros
proceden de todas las clases de la sociedad. En los viejos tiempos, los
intelectuales procedan de la nobleza, de la burguesa, en parte del
campesinado, y, solamente en la ms nfima proporcin, de la clase obrera. En
nuestra poca, en la poca sovitica, los intelectuales salen, ante todo, de entre
los obreros y los campesinos. Pero de donde quiera que proceda y tenga el
carcter que tenga, la intelectualidad es una capa social, y no una clase.
No lesiona esta circunstancia los derechos de la intelectualidad trabajadora?
En absoluto. El artculo primero del proyecto de Constitucin no habla de los
derechos de las distintas capas de la sociedad sovitica, sino de la composicin
de clase de esta sociedad. De los derechos de las diversas capas de la sociedad
sovitica, incluidos los derechos de la intelectualidad trabajadora, hablan
principalmente los captulos X y XI del proyecto de Constitucin. Esos captulos
evidencian que los obreros, los campesinos y la intelectualidad trabajadora son
completamente iguales en derechos en todas las esferas de la vida econmica,
poltica, social y cultural del pas. Por tanto, ni hablar se puede de que los
derechos de la intelectualidad trabajadora sean lesionados.
28
Otro tanto hay que decir de las naciones y las razas de la Unin Sovitica. En el
captulo II del proyecto de Constitucin se dice ya que la Unin Sovitica es una
unin libre de naciones iguales en derechos. Es necesario repetir esta frmula
en artculo primero del proyecto de Constitucin, que no trata de la composicin
nacional de la sociedad sovitica, sino de su composicin de clase? Claro que no.
En cuanto a los derechos de las naciones y las razas de la Unin Sovitica, de
ello se habla en los captulos II, X y XI del proyecto de Constitucin. Esos
captulos evidencian que las naciones y las razas de la Unin Sovitica disfrutan
de los mismos derechos en todas las esferas de la vida econmica, poltica, social
y cultural del pas. Por lo tanto, ni hablar se puede de lesionar los derechos
nacionales.
Sera igualmente equivocado reemplazar la palabra campesino por la palabra
koljosiano, o por las palabras trabajador de la agricultura socialista. En
primer lugar, entre los campesinos an existen, adems de los koljosianos, ms
de un milln de hogares no koljosianos. Qu debe hacerse con ellos? No
piensan descartarlos los autores de estas enmiendas? Eso sera insensato. En
segundo lugar, si la mayora de los campesinos se han organizado en koljoses,
esto no quiere decir todava que hayan dejado de ser campesinos, que ya no
tengan hacienda individual, economa individual, etc. En tercer lugar, habra
entonces que sustituir igualmente la palabra obrero por las palabras
trabajador de la industria socialista, lo que, sin embargo -ellos sabrn la
razn-, no proponen los autores de las enmiendas. Por ltimo, acaso han
desaparecido ya en nuestro pas la clase de los obreros y la clase de los
campesinos? Y si no han desaparecido, hay que tachar del vocabulario las
denominaciones establecidas para ellas? Por lo visto, los autores de la enmienda
no se refieren a la sociedad actual, sino a la sociedad futura, en la que ya no
habr clases y en la que los obreros y campesinos se habrn convertido en
trabajadores de una sociedad comunista nica. Por lo tanto, se han anticipado,
manifiestamente. Pero al redactar la Constitucin no hay que tomar como punto
de partida el futuro, sino el presente, lo que existe ya. La Constitucin no puede
ni debe anticiparse.
2) Sigue la enmienda al artculo 17 del proyecto de Constitucin. Esta enmienda
propone eliminar completamente del proyecto de Constitucin el artculo 17,
que dice que las Repblicas Federadas conservan el derecho de separarse
libremente de la Unin Sovitica. Yo creo que esta proposicin no es acertada y
que, por lo tanto, el Congreso no debe aprobarla. La Unin Sovitica es una
unin libre de Repblicas Federadas iguales en derechos. Eliminar de la
Constitucin el artculo referente al derecho de separarse libremente de la
Unin Sovitica significa violar el carcter voluntario de esta unin. Podemos
nosotros dar este paso? Yo creo que ni podemos ni debemos darlo. Se dice que
en la Unin Sovitica no hay ni una sola repblica que quiera separarse de ella y
que, por tanto, el artculo 17 no tiene importancia prctica. Naturalmente, es
29
cierto que no hay ni una sola repblica que desee separarse de la Unin
Sovitica. Pero de ello no se desprende, ni mucho menos, que no debemos fijar
en la Constitucin el derecho de las Repblicas Federadas a separarse
libremente de la Unin Sovitica. En la Unin Sovitica no hay Repblicas
Federadas que quieran aplastar a otra Repblica Federada. Sin embargo, de ello
no se desprende, ni mucho menos, que deba eliminarse de la Constitucin de la
Unin Sovitica el artculo que trata de la igualdad de derechos de las
Repblicas Federadas.
3) Tambin se ha hecho la propuesta de completar el captulo segundo del
proyecto de Constitucin con un nuevo artculo cuyo contenido queda reducido
a decir que las repblicas socialistas soviticas autnomas, una vez alcanzado el
nivel de desarrollo econmico y cultural correspondiente, pueden transformarse
en repblicas socialistas soviticas federadas. Puede aceptarse esta propuesta?
Yo creo que no. Es errnea no solamente por su contenido, sino tambin por su
argumentacin. El paso de las repblicas autnomas a la categora de repblicas
federadas no puede obedecer a su madurez econmica y cultural, as como el
que una u otra repblica figure en la lista de las repblicas autnomas no puede
deberse a su retraso econmico o cultural. Tal enfoque del problema no sera
marxista, no sera leninista. La Repblica Trtara, por ejemplo, sigue siendo
autnoma, mientras que la Repblica de Kazajia pasa a ser federada; pero esto
no quiere decir que la Repblica de Kazajia, desde el punto de vista del
desarrollo cultural y econmico, sea superior a la Repblica Trtara. Ocurre
exactamente al contrario. Lo mismo debe decirse, por ejemplo, de la Repblica
Autnoma de los Alemanes del Volga y de la Repblica Federada de Kirguisia, la
primera de las cuales es superior a la segunda desde el punto de vista cultural y
econmico, aunque sigue siendo una repblica autnoma.
Cules son las condiciones que deben reunir las repblicas autnomas para
que puedan pasar a la categora de repblicas federadas?
Estas condiciones son tres.
Primero, es necesario que la repblica sea perifrica, que no est rodeada por
todos lados de territorio de la Unin Sovitica. Por qu? Porque si se garantiza
a las Repblicas Federadas el derecho de separarse de la Unin Sovitica, es
necesario que la Repblica que ha pasado a ser Federada tenga lgica y
prcticamente la posibilidad de plantear la cuestin de su separacin de la
Unin Sovitica. Pero tal cuestin slo puede plantearla la repblica que limita
con un Estado extranjero y, por consiguiente, no est toda ella rodeada de
territorio de la Unin Sovitica. Es cierto que no tenemos repblicas que
planteen prcticamente la cuestin de su separacin de la Unin Sovitica. Pero
si se garantiza a las Repblicas Federadas el derecho de separarse de la Unin
Sovitica, hay que hacerlo de manera que este derecho no se convierta en un
30
jirn de papel desprovisto de sentido. Tomemos, por ejemplo, la Repblica de
Bashkiria o la de Tartaria. Admitamos que se haya elevado estas repblicas
autnomas a la categora de repblicas federadas. Podran, lgica y
prcticamente, plantear la cuestin de su separacin de la Unin Sovitica? No,
no podran. Por qu? Porque estn enteramente rodeadas de repblicas y
regiones soviticas y, en rigor, no tendran por dnde salirse de la Unin
Sovitica. (Hilaridad general, aplausos) Sera, pues, errneo pasar estas
repblicas a la categora de repblicas federadas.
Segundo, es necesario que la nacionalidad que ha dado su nombre a la repblica
sovitica constituya en ella una mayora ms o menos compacta. Tomemos, por
ejemplo, la Repblica Autnoma de Crimea. Es una repblica perifrica, pero
los trtaros de Crimea no constituyen la mayora en esta repblica; al contrario,
son en ella minora. Por lo tanto, sera equivocado e ilgico pasar la Repblica
de Crimea a la categora de repblica federada.
En tercer lugar, es necesario que la repblica no sea demasiado pequea en
cuanto a poblacin se refiere; que tenga una poblacin no inferior, sino
superior, pongamos por caso, a un milln de habitantes. Por qu? Porque sera
un error suponer que una pequea repblica sovitica, con una poblacin
nfima y un ejrcito insignificante, pudiese contar con una existencia
independiente como Estado. Es indudable que los tiburones imperialistas no
tardaran en engullirse a esa repblica.
Yo creo que sin la existencia de estas tres condiciones objetivas, sera errneo
plantear en el momento histrico presente la cuestin de pasar esta o aquella
repblica autnoma a la categora de repblica federada.
4) Se propone asimismo suprimir en los artculos 22, 23, 24, 25, 26, 27, 28 y 29
la enumeracin detallada de la divisin territorial administrativa de las
repblicas federadas en territorios y regiones. Creo que esa propuesta es
tambin inaceptable. En la Unin Sovitica hay gente dispuesta a cortar y
recortar incansablemente y de muy buena gana territorios y regiones,
ocasionando con ello la confusin y la inseguridad en el trabajo. El proyecto de
Constitucin pone freno a esta gente. Y eso est muy bien, porque en este
terreno, como en muchas otras cosas, necesitamos una atmsfera de
certidumbre, necesitamos estabilidad y claridad.
5) La quinta enmienda se refiere al artculo 33. Se juzga que no tiene sentido
crear dos Cmaras y se propone suprimir el Soviet de las nacionalidades. Yo
creo que esta enmienda es tambin errnea. El sistema de Cmara nica sera
mejor que el bicameral, si la Unin Sovitica fuera un Estado uninacional. La
Unin Sovitica es, como bien se sabe, un Estado multinacional. Tenemos un
organismo supremo en el que estn representados los intereses comunes de
31
todos los trabajadores de la Unin Sovitica independientemente de su
nacionalidad. Es el Soviet de la Unin. Pero, adems de intereses comunes, las
nacionalidades de la Unin Sovitica tienen tambin sus intereses particulares,
especficos, ligados a sus particularidades nacionales. Pueden descuidarse esos
intereses especficos? No, evidentemente. Es necesario tener un organismo
supremo especial que refleje precisamente esos intereses especficos?
Indiscutiblemente, s. No cabe la menor duda de que sin un organismo
semejante sera imposible gobernar un Estado multinacional como la Unin
Sovitica. Este organismo es la segunda Cmara, el Soviet de las Nacionalidades
de la Unin Sovitica.
Se invoca la historia parlamentaria de los Estados de Europa y Amrica; se
invoca que el sistema bicameral existente en esos pases ha dado siempre malos
resultados, que la segunda Cmara degenera habitualmente en un centro de
reaccin, en un freno contra el progreso. Todo eso es cierto. Pero ello ocurre
porque en dichos pases no hay igualdad entre las Cmaras. Como es sabido, a la
segunda Cmara suelen concedrsele ms derechos que a la primera, y adems
Top Related