“MARIANELA”
“Marianela” es una de las muchas obras que muestran la grandeza de espíritu del género
humano, no obstante pocas logran realizar el profuso escrutinio que realiza Galdós en el
corazón de sus personajes. Marianela, joven huérfana y de pobres atributos físicos, sirve de
lazarillo de Pablo, joven ciego y de cómoda posición social, de quien se enamora, Pablo, que
sólo conocía el mundo a través de las descripciones que de él hacía Nela y de las abundantes
lecturas que le hacía su padre y que Pablo recibía con avidez, jura a Nela que sus sentimientos
hacia ella eran los mismos. Bajo la promesa de una vida juntos, Nela se entrega a la
construcción de las más cándidas fantasías de vivir a su lado.
Golfín, médico de mundo que llega a las minas para visitar a su hermano se presenta a la vista
del padre de Pablo como la encarnación de la providencia, siendo la única esperanza que
posee Pablo para recuperar la vista. Después de varias vicisitudes, Golfín otorga a Pablo el don
de la vista y con esto, la esperanza de conocer un mundo lleno de maravillas. Ya una vez con la
capacidad de ver, Pablo cree haber encontrado en la belleza de su prima a la mujer a quien
prometió amor eterno, Marianela.
Marianela, que sin poder reponerse del sobresalto que le produjo lo inevitable—el desencanto
de su joven amigo—se entrega a la muerte al saberse desprovista del amor de quien era para
ella su única razón para sentirse viva. Marianela es una obra prodigiosa, sin escatimar en
lenguaje, Galdós nos presenta una obra que perdura hasta nuestros días, gracias a la vigencia
en sus descripciones del cuerpo psicológico y volitivo de sus personajes.
Personajes
Marianela - Una joven de 16 años con apariencia de niña. Huérfana y al amparo de la
misericordia de la gente. Sus últimos meses vivió feliz y enamorada de su amo Pablo.
Tuvo una vida llena de desdichas.
Teodoro Golfín - Hombre de mediana edad, bondadoso y de principios rectos. Médico
que le da el don de la vista a Pablo e intenta salvar a la Nela de la meningitis que
padece.
Pablo - Joven ciego, de muy buena posición social que conocía sus tierras como la
palma de su mano y disfrutaba de la compañía de la Nela y de las lecturas de su padre.
Joven muy sensible e inteligente.
Francisco Penáguilas - Padre de Pablo que se desvive por ofrecerle a su hijo todas sus
riquezas. Hombre inteligente y bueno.
Manuel Penáguilas - Padre de Florentina. Vive empeñado en hacer de Florentina una
señorita de “clase”.
Florentina - Prima de Pablo que llega al pueblo para la operación de Pablo. Muy
bondadosa y bella. Futura esposa de su primo.
Carlos Golfín - El ingeniero encargado de las minas y hermano de Teodoro Golfín.
Sofía - Esposa de Carlos Golfín, mujer preocupada por realizar actos de caridad.
Aficionada al piano y apasionada por su mascota Lili.
Familia Centeno - Familia que daba asilo a Nela; los esposos Centeno, dos hijas y dos
hijos integraban la familia.
Celipín. Hijo - menor de la familia Centeno, además de Pablo y Golfín era la única
persona que alguna vez mostró interés por Nela. Tenía aspiraciones de irse de su casa
para ser médico.
Tanasio - Hijo mayor de los Centeno que hace canastos.
Mariuca y Pepina - Hijas de los Centeno.
Sinforoso - Padre de los Centeno, es capataz de mulas en las minas.
Señana - Madre de los Centeno, es muy desconsiderada con Nela; su verdadero
nombre es Señora Ana.
Resumen por capítulos
CAPÍTULO 1: Perdido
Golfín sale para visitar a su hermano en las minas de Socartes (Cantabria). Mientras continua
con su recorrido, Golfín musita para sí adelante, siempre adelante, son las palabras dichas por
las últimas personas que encontró a su paso y que indicaban la ubicación de las minas.
Después de mucho caminar, Golfín encuentra un campo de explotación minera, su asombro
sobrevino al corroborar que estaba abandonado. Mientras se sobreponía de su asombro, se
encuentra con un joven que le indica que efectivamente está en la mina Socartes, pero muy
lejos del establecimiento que es ahora la entrada principal. El joven ofrece servirle de guía
hasta allá. La última sorpresa que guarda la noche para Golfín es que el amable joven que le
serviría de lazarillo es ciego.
CAPÍTULO 2: Guiado
Ya una vez emprendida la marcha rumbo la entrada principal, Golfín sigue sorprendido de que
un joven ciego sea su guía. Mientras recorren el dificultoso camino, el joven hace una detallada
descripción de lo que a su paso encuentran. El joven parece poder prescindir por completo de
la vista para conocer con enorme exactitud la ubicación y composición de las cosas que lo
rodean. Una vez que hubieron recorrido una de las cuevas se encuentran con la muchacha que
ya antes Golfín había escuchado cantar mientras estaba perdido—es Marianela—repuso el
joven ciego—ahora ella se encarga de llevarlo a las oficinas. Golfín y él se despiden con la
promesa de volverse a encontrar y así comienza una amistad.
CAPÍTULO 3: Un diálogo que servirá de exposición
Golfín es guiado por Nela hacia las oficinas de la mina. La curiosidad que le despierta su nueva
guía hace a Golfín preguntarle a Nela sobre su vida. Así es como Golfín se entera de que ella es
huérfana. Ella misma le relata las desventuras que pueblan su pasado y su presente. Golfín se
sorprende al escuchar de la propia Nela la pobre opinión que de sí misma tiene. Nela explica a
Golfín cuál es el origen de su nombre; le habla de Canela, su madre. Golfín descubre que es
sólo el joven Pablo el que muestra afecto hacía Nela. Ya una vez cerca de la mina, las notas de
un piano y el aviso de Nela anuncian a Golfín que está cerca de su ansiado encuentro con
Carlos, su hermano.
CAPÍTULO 4: La familia de piedra
Un rincón de la casa de los Centeno es lo único que por morada tiene la Nela. El maltrato y la
displicencia que de ellos recibe es solamente una consecuencia de la indiferencia y el maltrato
que los propio hijos del matrimonio Centeno reciben. Los Centeno son un matrimonio ocupado
en la acumulación del dinero producto del trabajo en la mina de todos los miembros de la
familia. El hijo menor—Celipín—era el único con aspiraciones más allá del trabajo en la mina, y
el único con quien Nela se relaciona. Su relación se estrecha cada vez más a partir de la
complicidad de ella en los planes secretos de Celipín para estudiar. Nela es también la única
que contribuye para llevarlos a cabo, cada que tiene ocasión le cede el dinero con que la gente
obsequia los favores recibidos de ella.
CAPÍTULO 5: Trabajo, paisaje, figura
El amanecer llega a la mina de hierro y sus alrededores. El pueblo se despierta con la campana
—los hombres salen de sus casas para entrar otro día al trabajo durísimo de la mina, las
mujeres a lavar el mineral extraído, las mulas a cargar de nuevo su tarea sobre lomos. Con la
salida del sol, Socartes y su población resplandecen purpúreas, el fino polvo que es
subproducto de la siderurgia. La Nela también sale, a la casa de Pablo, el joven ciego que
acompañaba a Golfín el día anterior. Nela, el lazarillo de Pablo, sale con él a caminar por los
campos.
CAPÍTULO 6: Tonterías
Nela, Pablo y el perro Choto caminan hacia el bosque. Como todos los días que salen, Pablo
trae a Nela unos regalitos: un dulce, un chocolate, unas nueces. Son las pequeñas riquezas que
le faltan a Nela en su vida frugal con los Centeno. Nela explica la dicotomía de su vida: de día
anda feliz en sus salidas con Pablo pero de noche no encuentra la felicidad en casa. En el
camino, ella describe los detalles del campo y le ofrece sus propias explicaciones supersticiosas
de la naturaleza: como que las estrellas son almas salvas que bajan del cielo a revelar secretos
a los humanos. Pablo le dice que le pedirá a su padre que la enseñe a leer, para que pueda
usar sus dones intelectuales y creativos para mejorar con la educación y razón.
CAPÍTULO 7: Más tonterías
Nela y Pablo llegan a la entrada del bosque, de donde se puede ver un pedazo del mar a la
distancia. Se sientan juntos para descansar entre unos nogales, y Pablo cuenta a Nela de los
libros de historia y ciencia que su padre le leía por las noches. Pero la noche anterior su padre
leyó de Las mil y una noches una descripción de la belleza. Pablo confiesa a Nela que no
necesita usar sus ojos para saber que ella es el epítome de la belleza como en el libro... una
mujer modesta, cariñosa, hermosa como los ángeles. Nela niega que sea una mujer así—en la
realidad es una mujer sencilla y fea. Pablo lamenta que la vista haya robado a los hombres la
capacidad de conocer la belleza verdadera y admite que está enamorado de ella. Después, la
pareja regresa a casa, para encontrar el padre de Pablo con Golfín.
CAPÍTULO 8: Prosiguen las tonterías
Pablo comparte con Nela la esperanza que inunda su espíritu al escuchar de Golfín y de su
padre que el destino guarda para él la esperanza de ver. Pablo traduce su esperanza en la
concreción del anhelo por ver a su amada Nela. Por su parte, Nela comparte la dicha de Pablo
por volver a ver, sin embargo en su corazón crece la zozobra de que una vez recuperada la
vista de Pablo, la belleza que él atribuye a su espíritu no coincida con su exterior. La noche
anterior Pablo no logró dormir por el arrebato de esperanzas que provocaron en él las buenas
noticias, por lo que se quedó dormido en el regazo de la Nela durante su paseo, mientras tanto
Nela creía escuchar la voz de su madre que provenía del fondo de la Trascava…
CAPÍTULO 9: Los Golfines
A poco tiempo de haber llegada a la mina, Golfín la conoce de punta a punta. Cuando hace
buen día, la familia Golfín gusta de hacer caminatas por los alrededores de la mina, cuando no,
la familia se reúne en torna al piano y se deleitan cantando. Sofía(su cuñada)era aficionada a la
obras de caridad, en Madrid había organizado algunos eventos en beneficio de los pobres, a lo
que Golfín le reprocha su falta de atención a los pobres de su alrededor, en particular de Nela.
Al matrimonio Golfín no le sobrevivía ningún hijo, por lo que Golfín sugiere que podrían
adoptar a Nela. Después de un incidente la Nela se espina un pie y Golfín la lleva en hombros
de regreso a casa.
CAPÍTULO 10: Historia de dos hijos del pueblo
A Sofía y Carlos, Golfín relata la historia de él y su hermano, mientras Sofía bromea insinuando
que está exagerando demasiado. Golfín les cuenta como aprendió a leer, como entró en el
Escalapios, cómo estudiaba la medicina, y cómo los hermanos se cuidaban en sus dificultades
financieras mientras. Sigue relatando como Carlos encontró trabajo y Golfín salió para
América. Después del relato, Carlos admira a su hermano Teodoro por su determinación en
devolverle la vista a Pablo, mientras Sofía sigue burlándose de él. Llegan los tres en compañía
de Nela a la casa de Don Penáguilas. Atardece.
CAPÍTULO 11: El Patriarca de Aldeacorba
Después del paseo, la familia Golfín en compañía de la Nela se dirige a casa de Don. Francisco
quien los recibe con un vaso de leche recién ordeñada. Don. Francisco externa a la familia
Golfín su alegría por la esperanza que Golfín da a Pablo de volver a ver. De igual forma
comparte su preocupación por la febril imaginación de Pablo, que en últimas fechas sólo se
ocupa de un pensamiento a saber que la Nela es una chica hermosa. Golfín recomienda a Don.
Francisco que suspenda las lecturas y que provea a Pablo del mayor de los sosiegos a fin de
que el cerebro de Pablo se encuentre en buen estado para la futura operación…
CAPÍTULO 12: El doctor Celipín
De vuelta en casa de los Centeno, Nela entrega a Celipín los dos duros que generosamente le
dio Golfín para que se comprara zapatos. Como de costumbre Nela y Celipín hablan un poco
antes de dormir sobre los planes de éste para irse de casa y estudiar. Nela relata a Celipín la
vida de contrariedades que vivieron los hermanos Golfín antes de ser hombres de bien, la
historia le sirve de inspiración a Celipín, quien decide que quiere seguir los pasos de Teodoro
Golfín y así convertirse al igual que él en un médico respetable. Celipín intenta persuadir a la
Nela de que se marche con él, arguyendo que después de que Pablo recupere la vista nada le
queda por hacer a Nela en Socartes.
CAPÍTULO 13: Entre dos cestas
Como lectores entramos a los pensamientos y la historia de Nela. Aunque la filosofía de ella
esté basada en una mezcla de paganismo y sentimentalismo, rechaza la imagen espantosa de
Dios, mas reconoce las palabras del Evangelio y el poder de la Virgen María, quien, para Nela,
personifica la belleza ideal en forma humana. Nela pregunta a la Virgen por qué la hizo tan fea
y le pide que la haga hermosa para que cuando la Virgen otorgue la vista a Pablo, él no la
encuentre muy fea. Ella quiere a Pablo, pero desea que nunca abra los ojos para mirarla.
CAPÍTULO 14: De cómo la Virgen María se apareció a la Nela
Al llegar la mañana y como de costumbre la Nela dedica algunas oraciones a la Virgen María.
Nela hacía descansar en las divinas facultades de la madre de Dios el encontrar un feliz
desenlace para ella y para Pablo. Durante sus quehaceres Nela repetía para sí las palabras
dichas por Pablo acerca de las sensaciones previas a un temblor. Nela podía sentirlas, no sabía
si sería algo bueno o no, pero estaban ahí. Ya una vez en el campo y continuando con sus
cavilaciones, la Nela se ve sorprendida por la aparición de la Virgen, creyó verla en persona a lo
que quedó petrificada, poco a poco se repone de su sorpresa y cae en la cuenta de que se trata
de Florentina, le bella prima de Pablo, quien a he venido en compañía de su padre para ultimar
los detalles de la boda que tienen planeado sus padres para ella y Pablo.
CAPÍTULO 15: Los tres
Pablo y Nela van a mostrar a Florentina las minas. Platican de la ceguera de Pablo, Florentina
menciona que le esperan algunos chascos cuando adquiera la vista, y Nela empieza a ponerse
nerviosa. Florentina pregunta por la desigualdad que hace que Nela traiga un vestido viejo
mientras ella tiene uno bonito. Decide que va tener a Nela como su amiga, que le va a socorrer
, que le enseñará a ser una mujer de casa útil. Florentina se aleja un poco, y Pablo aprovecha
para decir a Nela que su prima le resulta una mujer hermosa. Las preocupaciones de Nela
siguen aumentando.
CAPÍTULO 16: La promesa
Golfín realiza la cirugía de Pablo sin saber cuáles serán los resultados. Pablo pasa varios días
encerrado, atendido sólo por su padre, por lo que nadie más sabe si la operación fue exitosa.
Florentina acompaña a Nela a la casa de los Centeno, y sale horrorizada de las condiciones en
las que vive Nela. Reafirma su promesa de compartir con lo que ella misma ha recibido. Ocho
días después de la operación, Nela pasa a la casa de Sofía, quien le dice que hay el rumor de
que Pablo ya puede ver. Y ahora con la vista—Sofía le dice—, es casi seguro que el joven Pablo
se va a casar con la señorita Florentina. Carlos llega para confirmar el milagro de su hermano,
sí, Pablo ya tiene el don de la vista.
CAPÍTULO 17: Fugitiva y meditabunda
La noticia de la operación de Pablo llega por todo el pueblo, pero Nela evita ir a la casa de los
Penáguilas. Anda por días como fugitiva en el campo, orando a la Virgen y pensando que Dios
quiere que ella sufra. Llegando a su casa, Nela se encuentra con Florentina, que quiere llevarla
a ver a Pablo. Florentina la convence de que venga a vivir con ella y a ver Pablo, pero mientras
se acercan a la casa de los Penáguilas, Nela huye, explicando que no puede ir. Confusa,
Florentina regresa a casa, diciendo a Golfín que Nela se escapó por su ingratitud.
CAPÍTULO 18: La Nela se decide a partir
Nela sigue vagando en el campo, pero por las noches se acerca a la casa de los Penáguilas sin
que nadie lo note. Regresa al bosque y encuentra a Celipín en el camino. Él ha salido de la casa
y quiere escaparse con Nela para nunca volver a ver a sus padres. Nela rechaza la idea,
diciendo que no es su tiempo para irse de las minas y Celipín se despide de ella. Choto, el perro
de Pablo, descubre a Nela vagando, regresa a la casa de los Penáguilas, y señala a Golfín que la
encontró. Golfín entra en el bosque con Choto y encuentran a Nela, quien sale corriendo y baja
a la Trascava. Luego Golfín la convence que suba para que pueda decirle una cosa.
CAPÍTULO 19: Domesticación
Golfín sorprende a Nela justo a tiempo, pues ésta intentaba despojarse de su propia existencia
bajo la falsa creencia de que la vida depararía para ella una mejor suerte una vez muerta.
Golfín la persuade de no quitarse la vida y la exhorta a que habrá su corazón ante él, única
persona dispuesta a preocuparse por los asuntos que aquejan su corazón. La Nela confiesa a
Golfín el amor que profesa a Pablo y las promesas de no separarse jamás que Pablo hizo a la
Nela. Le confiesa también el motivo por el cual decide marcharse, de cómo siente celos de
Florentina. Finalmente Golfín, después de hacerle ver a Nela, que si bien está desprovista de
belleza exterior, su grandeza de espíritu la hacían un ser excepcional. Al cabo de un rato
regresan a Aldeacorba donde Golfín presenta a la Nela en la habitación de Florentina.
CAPÍTULO 20: El nuevo mundo
El complot retrocede hasta el día que Golfín quitó el vendaje de Pablo. Al principio Pablo tiene
miedo de su nuevo mundo, pero poco a poco le agradece y está inundado con la hermosura a
su alrededor. Ve primero a Florentina, equivocado, piensa que es Nela. Pablo no puede creer
que su prima sea tan hermosa, y le ruega que se quede con él mientras se recupera. Pablo
confiesa a su prima que quiere a Nela, y pide a Florentina la traiga ante él. Florentina
encuentra a Nela, pero Nela se escapa, y Florentina cree que lo hace por ingratitud. Pablo está
seguro de que Nela vendrá sola, a su propio tiempo. Por la noche él escucha las voces de su
padre, Golfín y Florentina. Al día siguiente se levanta de la cama por primera vez desde su
operación.
CAPÍTULO 21: Los ojos matan
La mañana en que la Nela despertó en la habitación de Florentina, el padre de ésta le
anunciaba que en ese momento D. Francisco hablaba con Pablo sobre el asunto de la boda.
Golfín que se encontraba allí, preocupado por el estado de Nela, le describe a Florentina la
desventurada vida que ha tenido que llevar la Nela por la ausencia de un alma que pueda
ocuparse del mínimo cuidado de Nela. Al cabo de un instante, entra a Pablo, quien se había
quitado ya el vendaje e iba a expresar a Florentina la dicha que le provocaba la futura unión
entre ambos. La Nela, que hasta entonces pasaba inadvertida en el sofá, llama la atención de
Pablo, quien se dirige a ella y al sentir la mano de la Nela sobre la suya se da cuenta que se
trata de ella, Pablo clava su mirada sobre Nela, y ésta al sentir el peso de la mirada de Pablo
comienza su descenso a las profundidades de la muerte. Golfín, ante la frustración e
impotencia de no poder salvar a Nela termina por exclamar que ¡Nela ha muerto de amor…!
CAPÍTULO 22: Adiós
Nela, quien nunca tuvo bienes materiales ni reconocimiento en la vida, tiene un funeral al que
asiste todo el pueblo y un sepulcro magnífico obsequiado por Florentina. Para sorpresa de los
que la conocían, su muerte llamó la atención de muchos. Meses después cuando ya todos se
habían olvidado de Nela, Pablo y Florentina se habían casado, llegaron unos viajeros
extranjeros al sepulcro de Nela. Apuntan en una cartera que el sepulcro es de una mujer noble
y hermosísima, la Doña Mariquita Manuela Tellez (Nela). Luego publican su descripción como
Sketches from Cantabria. Los reporteros investigaban la verdad, pero no la encontraron, que
es la razón por la cual el autor escribe este mismo libro: para que sepan los lectores la
verdadera historia de Nela, una de las más interesantes que existe.