EL MUNDO. DOM|NGo 17 D€ JUNIO DE 2012 53

Literatura / Entrevista

frente al espejode la novela negraEl autor recupera a su 'alter ego'David Gurney en'Deja enpaz al diablo'

John Verdon

oR¡¡tet vAzQuez sALLÉs / BarcelonaDeja en paz al dioblo, advierte el es-critor John Verdon con el tíhrlo de sunueva novela. Roca editorial acabade pubticarel nuevo tftriller del autorde Sé lo que estós pensondo y Nocbros los ojos, y en la nueva entregainterpretada por el ex detective Da-vid Gurney, la verdadera pesadilladel lector es El Buen Pastor. un ase-sino enserie al que nuncaatraparondespués de cometer seis asesinatos.

Verdor¡ americano con aspecto dehombre Marlborq sólo ha necesita-do publicar dos novelas ytenerunaen capilla para obtener la confianzade millones de lectores cuya fidelidadvoluble depende de lacapacidadde seducción del escritor: <Miprinci-pal audiencia es mi muje4 y su opi-nión me ayudaa no pensar demasia-do en las o<pectativas de millones delectorep.

<<El objeüvo es laverdad. tavirfiides la objetividad. [¿ emoción es elenemigo perenne de laverdaór, afir-ma el autor. Antes de mirarse al es-npin v emnez¡r n c-sarihir las novelas

protagonizadas por zu detective, Ver-don había trabajado como directorcreaüvo envarias agencias de publi-cidad de Nueva York. Cansado deejercer de urbanita en una ciudad ci-clotímica. los atentados del l1-S lehicieron tomar una decisión aplaza-da: la de retirarse a la región monta-ñosa de los Catskills. Tras muchaslecturas negrocriminales, a Verdon leentró el gusanillo de la escritura.<Discutiendo un día sobre la estruc-tuta de una novela que acababa delee4 mi mujer me sugirió que escri-bieraun thriller. Es cierto gre con losaños me he hecho mas disciplinadqpero esta vez logré pasar de la pági-na 100 por la naturaleza de un géne-ro que me manteníaimplicadoyex-citado>. Así nació el personaje deGurney. Así nació Sé Io que estaspensando.

En la nuwa entega, Gumey siguefiel a la metodología deductiva de laescuela de Sherlock Holmes, perosin olvidar que vivimos en la épocade Harryel Suciq deJason Bourne ode Hennibal Inrfer. lohn Verdon, fotoerafiado el oasado mes de abril en B¡lbao. / tñAKt ANDRÉS

CULTURA / EMz,

Si en todas su novelas Verdon uti-liza a Gurneypara explorartemasque le preocupan,enDejaenpaz aldiablo el autorliaceuna dura críticade los programas de telebasura poli-cial y de la metodología de investiga,ición estadounidense. <<El mundo dela criminología se ha convertido enun circo mediáticq y los programasde televisión son una buena muesbade ello. I¡s humanos siempre hanantepuesto la emoción a la lógica,hasta el punto de que hoy muchosexpertos en criminología fueruan larealidad hasta que el delincuenteconcuerda con sus tecirías>. Hay undeje de fracaso en las palabras deVerdon. En un mundo en el que sebusca larespuesta inmediatano haylugar ni para la reflexión, ni para lossentimentales con aspecto de

<La criminología seha convertido enun circo mediático>,denuncia Verdon

cowboy crepuscular Conlos años, lacibernética controlará el destino devíctimas y asesinos, y Gurney seráparte de los protagonistas del <cual-quiertiempo pasado fue mejon>.

Gurneyhuyó de laurbe sometidaa la polución, la histeria y la deshu-manización y se fue a las montañascon su mujerpara enconhar un nue-vo punto de partida. Verdontambiénhuyó con su esposa a los Catskills.I¡s cuatro viven en la misma casa.sólo separados por un espeio.