Instituto de Formación Docente
‘MARÍA AUXILIADORA’
Carrera: Profesorado de Educación Primaria
Unidad Curricular: Curriculum en y para la diversidad
Régimen de cursada: Cuatrimestral
Profesora: Lic. Stella Maris De Vita
Alumna: María Agustina Clemente
Trabajo práctico: N° 2
Ciclo Lectivo: 2015
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CONSIGNA
A- Investigar y desarrollar, el niño que presenta la dificultad seleccionada,
aspectos a valorizar y dificultades en el contexto escolar.
B- Planificar una reunión de capacitación para docentes, pensando en dar
ítems que orienten en la escuela.
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MMUUTTIISSMMOO SSEELLEECCTTIIVVOO
A- Contexto escolar.
⇒ Aspectos a valorizar
El niño realiza todo tipo de actividades que involucren motricidad fina y/o
gruesa sin dificultad aparente. Por ejemplo: pintar, recortar, repasar, ensartar,
rodear, construir rompecabezas, ordenar secuencias, escribir letras y números.
Se muestra introspectivo y sensible, parece entender el mundo que lo
rodea mejor que otros niños de su edad, y
demuestra una mayor sensibilidad a los
sentimientos y pensamientos de los demás.
⇒ Dificultades
-Inhibición del comportamiento y timidez.
-Ansiedad.
-Se quedan inmóviles, rígidos. A veces se
esconden.
-Algunos no logran hacer contacto visual.
-Evitan relacionarse con otros y se esconden.
-Incapacidad para hablar en ciertas situaciones.
-Temor a la mayoría de las personas
-Sensibilidad al ruido y al tacto.
-Náuseas, vómitos, diarreas, dolor de cabeza.
- Pensamientos negativos, irracionales o exagerados.
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B- Reunión de capacitación.
Tema: Mutismo selectivo.
Destinatarios: docentes de
Educación Inicial y Primaria.
Primera parte: Como disparador, se
invitará a los concurrentes a observar la siguiente imagen.
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Luego de un breve debate guiado por la capacitadora, se leerá un
fragmento de una carta realizada por Macarena Lucero Schmidt, una de las
licenciadas que forma parte de la Dirección de Educación Especial de
CABA. Cito a continuación:
“Pensar en escuelas inclusivas implica promover una serie de
cambios en todo el sistema educativo en relación con la gestión
escolar, con los valores educativos, con la formación y
capacitación docente, con la normativa vigente, con el
equipamiento tecnológico, con la formación de equipos docentes
colaborativos e interdisciplinarios que sean promotores de la
integración escolar, entre otros. (…) Pensamos en un sistema
educativo que no solo incluya a todos los ciudadanos, sino que
además respete la heterogeneidad y las diversas necesidades
educativas de los alumnos. Un sistema no homogéneo, pero
tampoco fragmentado. Un sistema focalizado en la escuela, en
el docente y en el alumno, es decir, centrado en el proceso de
enseñanza y aprendizaje, y en el contexto en que este proceso
se desarrolla. La educación inclusiva se concibe como una
aliada de los procesos de integración de alumnos con
necesidades educativas especiales. Supone la existencia de una
escuela común o especial, de gestión pública o privada, que se
muestra abierta y proactiva frente a los desafíos sociales,
pedagógicos y didácticos de una población diversa que
comparte un tiempo y un espacio.”
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Segunda parte: la capacitadora disertará sobre Mutismo selectivo.
¿Qué debemos saber?
Cuando hablamos de inclusión, nos referimos a un proceso, una búsqueda
permanente de la mejor manera de responder a las diferencias. Busca identificar
y remover barreras, estar atentos a los obstáculos y hallar la mejor manera de
eliminarlos. Tiene en cuenta al grupo, al sujeto y al contexto.
El tratamiento del mutismo selectivo no resulta fácil y requiere de tiempo,
paciencia y complicidad entre todos los agentes que intervienen. Hay que tener
en cuenta que, en general, el niño se comunica con normalidad en determinados
ámbitos sociales, y no se comunica en otros. Tiene dificultades para separase
de la familia y se aísla socialmente, presentando cierto grado de rechazo social.
En varios casos, el niño cuando se encuentra en situaciones sociales que le
generan un alto nivel de ansiedad, suele comunicarse a través de gestos o
escribiendo en un papel para poder hacerse entender por los demás. Sin
embargo, en otras ocasiones, simplemente se limita a afirmar o negar. En
síntesis, el niño presenta importantes limitaciones sociales e interpersonales,
dando como consecuencia un rendimiento escolar por debajo del adecuado.
Debemos llevar a cabo medidas que faciliten el desarrollo sociopersonal
del niño y estimulen su capacidad expresiva en las distintas situaciones de
interacción verbal con otros. Hay que ofrecerle un ambiente tranquilo, seguro,
comunicativo, afectuoso y comprensivo. Destacar los puntos fuertes/habilidades
y evitar actitudes sobreprotectoras y las que tienden a minimizar o ignorar el
problema. Fomentar la interacción del niño con sus pares y docentes,
enseñándole las formas adecuadas de iniciar y mantener interacciones verbales
y sociales con los otros; reforzando el círculo de amigos del niño y ampliándolo
progresivamente.
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¿Cuál es el objetivo?
La intervención se debe realizar de forma paralela en los ámbitos familiar-
sociales y escolar; y girará en torno a dos objetivos básicos, uno general que
pretende mejorar las condiciones personales y sociales del alumno y otro más
específico que incide directamente en la interacción verbal.
El objetivo final es que el niño con mutismo selectivo sea capaz de
interactuar verbalmente de forma espontánea con los adultos y niños de la
escuela, llevando a cabo peticiones verbales espontáneas y respondiendo de
forma audible a las preguntas que los demás interlocutores le plantean.
¿Cuáles son los ítems que hay que tener en cuenta?
Ofrecer al niño un ambiente de seguridad, comunicación, serenidad,
comprensión y afecto. La escuela debe ofrecerle la posibilidad de poder
expresar a qué tiene miedo, cómo se siente, qué problemas tiene. El niño
deberá tener la seguridad de que su comportamiento no va a ser juzgado
y criticado. Igualmente, manifestarle confianza en sus posibilidades y en
la superación del problema.
Posibilitarle experiencias que le conduzcan al desarrollo personal y social.
Priorizar la autonomía personal y el desarrollo de hábitos adecuados a su
edad, relacionados con la alimentación, higiene, vestido, orden.
Incidir en lo positivo, destacar sus puntos fuertes y reforzar con frecuencia
las tareas y actividades que el niño realiza bien. La utilización frecuente
del elogio tiene un efecto positivo en las actitudes y comportamientos.
Podemos también premiar al niño con algún objeto de su interés o con la
posibilidad de realizar una actividad que le resulte muy gratificante.
Eliminar actitudes de sobreprotección, evitar los estilos educativos
autoritarios y la exigencia excesiva de perfección, tanto en lo que
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respecta al habla como a las tareas y actividades que el niño realiza. Los
reproches y comentarios negativos deben ser reducidos al mínimo.
Modelar y enseñar al niño formas adecuadas de iniciar y mantener
interacciones verbales con otros (cómo saludar, cómo pedir jugar, cómo
acercarse). Reforzar las aproximaciones verbales y no verbales del niño
hacia otras personas tanto iguales como adultos.
Docente mediador en tanto pueda acercarse al grupo y acompañar al niño
en distintas actividades. Luego, ir retirándose progresivamente una vez
que el niño se ha integrado en el grupo.
Para resumir
a) La intervención en la escuela es imprescindible. Por una parte, es uno de los
entornos principales donde las dificultades se ponen de manifiesto; por otra, la
cantidad y calidad de las situaciones de interacción lo configuran como el
escenario idóneo para estimular y generalizar la comunicación verbal.
b) El establecimiento de una vinculación afectiva “muy positiva” con el niño es
requisito imprescindible para llevar a cabo la intervención educativa.
c) Las actitudes de facilitación y sobreprotección no consiguen más que reforzar
el miedo a hablar e incrementarlo.
d) Hay que plantearle situaciones de interacción que conlleven intercambio
verbal, pero éstas deben ser cuidadosamente planificadas en función del nivel
de exigencia que conllevan.
e) Antes de ponerle en situación de exigencia de habla, debemos garantizar que
el niño posee las estrategias y habilidades necesarias para enfrentarse a las
mismas.
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f) Intensificar el vínculo afectivo positivo con el niño. Con este fin se pueden
realizar diversas estrategias: destinar momentos concretos a lo largo del día
para estar con él e interesarse por sus preferencias; establecer contacto físico
cariñoso frecuente con él, utilizar el elogio privado y público por las tareas bien
realizadas, contar con él en las situaciones que se produzcan en el aula, hacerle
consciente de la atención del profesor con sonrisas y guiños, realizar juegos en
el aula y hacer pareja de juego con él.
Cierre: se proyectará el corto “Por cuatro esquinitas de nada”, con el fin
de invitar a los concurrentes a reflexionar sobre la aceptación y el respeto
a la diversidad. No siempre surge de forma espontánea por lo cual ha de
ser educado y vivenciado en el día a día. Los docentes deben llegar a
comprender que, aunque sus alumnos tengan características similares,
todos son distintos y merecen la aceptación, el respeto y la posibilidad de
aprender.
Como souvenir, la capacitadora ofrecerá lo que se adjunta a continuación:
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BIBLIOGRAFÍA
⇒ Cortometraje. Por cuatro esquinitas de nada. En línea:
https://www.youtube.com/watch?v=DBjka_zQBdQ (Visto el 12/09/2015)
⇒ Creena. Centro de Recursos de Educación Especial de Navarra. El
mutismo selectivo. Guía para la detección, evaluación e intervención precoz en
la escuela.
⇒ Instituto Child Mine. En línea:
http://www.childmind.org/en/posts/articles/2014-1-29-info-basica-mutismo-
selectivo (Visto el 4/09/2015)
⇒ Ministerio de Educación. (2008): El trabajo en el aula desde una
perspectiva inclusiva. Gobierno de la ciudad de Buenos Aires. Buenos Aires.
⇒ Psicodiagnosis. En línea:
http://www.psicodiagnosis.es/areaclinica/trastornosemocionales/el-mutismo-
selectivo/ (Visto el 06/09/2015)