HUMANITASB O L E T IN E C U A T O R IA N O
D E A N T R O P O L O G IAm •
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E D IT O R IA L U N IV E R S IT A R IA
IMPRESO EN EL ECUADOR
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H U M A N IT A S
MUSEO ETNOGRAFICO DE LA UN IVERSIDAD CENTRAL
Sección del
INSTITUTO DE C IEN C IA S NATURALES
H U M A N IT A S
BOLETIN ECUATORIANO DE ANTROPOLOGIA
Director; Antonio Santiana.Organo del Instituto de Antropología y el Museo Etnográ
fico de la Universidad Central.Aparecerá semestralmente.Comité de redacción: Antonio Santiana, Darío Guevara,
María Angélica Carluci Lazzarini de Santiana. Dirección: Museo Etnográfico, Universidad Central. Qui
to, Ecuador.
Lo responsabilidad por los conceptos emitidos corresponde exclusivamente a sus autores.
• HUMANITASB O L E T IN E C U A T O R IA N O
D E A N T R O P O L O G IA
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
INSTITUTO DE ANTROPOLOGIA
QUITO
A la in fo rm a c ió n a n te r io r añ ed im o s los s i* g u ie n tes da tos , que nes han sido p roporc ionados po r e l Sr. W p w E m ilio E strada. 1.a p ieza fu e e n co n tra d a en C o nve n to , M o n o b i, en un ba rranco . A d q u ir id a luego de su h o lla rg o po r un co m e rc ia n te español de a n tigüed ade s , Sr. G óm ez, fu e ve n d ida a un señor de la Caso T a g u a de C bonc. C om p rada p o s te rio rm en te pa r el E m ba lador Francés en Q u ito , señor Jeorges T e rve r, pasó por f in en co lid a d de do nac ión a l M useo E tn o g rá fico de la U n ive rs idad C e n tra l, donde se custod ia hoy.
Pertenece a la c u ltu ra de B ahía I, con una a n tig ü e d a d m a ya r a 5 0 0 A .C ., techa C 1 4 pa ra la fose in te rm e d ia e n tre S ch ia I y I I . El va lioso e je m p la r m id e 5 4 ,5 cen t, de a ltu ra po r 33 de a n cho y 2 7 ,5 de espesor.
V l f i E T A
Arte Aborigen del Ecuador
SELLOS O PINTADERAS
po r U M H R E M IL IO E STR AD A
Existen en los museos arqueológicos y colecciones privadas del Ecuador, cientos, por no decir miles, de sellos o pintaderas hechas de barro cocido. Las hay planas o c ilindricas. De estas últimas encontramos sólidas o con perforaciones para el eje de madera sobre el que giraban. Su uso indudablemente era para decorar tejidos o, tal vez, el cuerpo humano en ceremonias especiales que requerían esta clase de pintura. Otros sellos cilindricos tienen solamente pequeñas entrantes en los extremos para la yema de los dedos con los que se les hacía rodar.,
Sellos para estampar diseños en cerámica no se han encontrado, salvo uno post-hispánico y tal vez uno que otro de uso problemático, de líneas simples en zig-zag.
Casi todos los sellos planos tienen la prolongación necesaria para tomarlos con la mano y algunas perforaciones en esta agarradera, que habría servido para colgarlos del cuello de su propietario, el brujo o el escribano del pueblo, que seguramente estampaba un diseño ritual en tejidos o en el cuerpo de algún cliente como certificación de algún acto cumplido o a cumplirse.
^Puede apreciarse una gran variedad de diseños, a lgunos sumamente sencidos, pero oíros de una complejidad y desarrollo artístico notables. Constituyen sin duda una de las más altas expresiones de nuestro arte aborigen.^
Las culturas a que nos referiremos comprenden aquellas que han sido definidas por Evans y Meggers (1957), Bushnell (19511, ColIier y Murra (1943) y nosotros (Estrada 1957 a, b, c, 1958). Salvo aquellas descriptas por Collier y Murro, las otras cubren específicamente el territorio de la costa del Ecuador.
Los tamaños de nuestros sellos van desde aquel de la figura 97, de 12 cm. x 7 cm. el más grande de nuestra colección, hasta uno de 1.5 cm. de diámetro. Hemos tenido noticias, sin embargo de sellos aun más grandes existentes en otras colecciones del país.
Más que una larga descripción de cada sello, hemos preferido la publicación de diseños artísticamente importantes por sí solos, o representativos de estilos propios de cada cultura. Nos limitaremos por lo tanto a una pequeña discusión del significado hipotético que pueden tener ciertos sellos, o similitudes originadas en relaciones culturales, una de cuyas pruebas precisamente pueden ser ellos m:smos.
Hemos temado en consideración algunos de los mejores sellos publicados por D'Harcourt (1942) originarios de Esmeraldas y varios de Bushnell (1951), para am pliarla gama de tipos y estilos no representados en nuestra propia colección.
.indudablemente que los sellos o pintaderas constituyen en Ecuador uno de ios mejores indicios de sus nexos culturales con Mesoamérica. Muchos duplicados de sellos mesoamericanos se encuentran en el territorio ecuatoriano, correspondiendo precisamente a las culturas relacionadas íntimamente con los centros más desarrollados de! Norte. So~ r'emes'ració', rs'r-'sma, de contento a través ce ru.es ma. Limas pues, e.íaeníemen.e, .a
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frecuencia de ellos en la costa del Pacífico, de Colombia, Panamá, etc., constituye prueba fehaciente de esto aseveración. ■»
Cubillos ( i 955) para sus excavaciones y adquisiciones en la zona de Tumaco (Colombia', con una cultura tan similar a la de la contigua zona ecuatoriana de Esmeraldas, no muestra un solo sello.
^ Linné (1929) y Lothrop (1942) nos muestran poquísimos para Darién y Cocié, sólo unos pocos de tipo cilindrico y con diseños relativamente sencillos. Por otra parte, su ausencia en Perú limita y precisa el punto o foco principal de esos desembarcos mesoamericanos, ya que es la zona norte de Manabí y la costa de Esmeraldas la región de mayor concentración de los sellos asignables como de procedencia mexicana.,
Más hacia el Sur, en la costa del Ecuador, son menos frecuentes, excepto en la zona de la Cultura Guangala, que posee abundantísimos sellos planos, de una factura enteramente suya.
JEn general podemos decir que sólo en las culturas costaneras o del litoral del Pacífico del Ecuador encontramos este elemento. Brillan per su ausencia en la Sierra, excepto en la zona sur andina, en las culturas de Norrio, que a su vez muestran otros íntimos elementes de enlace en la Costa pudiéndose, sin lugar a dudas, atribuir a esta cultura un origen o ascendencia costanera en buena parte de su complejo. _
JEn función de tiempo podemos situar los sellos con toda seguridad a partir de la Cultura Chorrera.^ No se hen encontrado indicios de ellos en las culturas anteriores, Valdivia y Machaliíla. En estratigrafías de los últimos tiempos del período Chorrera hemos encontrado sellos planos (figs. 19 y 22). Comienzan a aparecer por lo tanto a lgunos siglos antes de Cristo.
vEn el período siguiente, Guangala, aparecen también sellos planos, en su mayoría de un tipo especial, con d¡-
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senos geométricos (figs. 1 o 16). La cultura con mayor abundancia de ellos parece ser aquella que denominamos Jama-Coaque coetánea, en parte, de Guangala, que corresponde al norte de Manabí y Esmeraldas.t En las otras culturas costaneros, como Bahía, coetánea de Chorrera ú ltima; Manteña y Quevedo-Milagro, también se los encuentra, pero en menor número. Estas dos últimas son las más modernas culturas pre-hispánicas del litoral.,
De un sepulcro de la Cultura de Jambelí, que cubre Puna, las cestas de El Oro y del Guayas, en el Golfo de Guayaquil, intermedia entre Manteño y Guangala en función de tiempo, obtuvimos el sello de la fig. 39, de característica zoomorfa. Esta cultura la describiremos próximamente con Evans y Meggers, una vez definido todo su complejo.
Es posible que la ausencia de sellos de cerámica en las culturas del altiplano del Ecuador se deba a que éstos fueron de madera o de algún otro material destructible con el tiempo. Es sabido que los Cayapas hasta hace pocas decenas de años tenían sellos o pintaderas hechos en madera. x Un solo ejemplar cilindrico de piedra, que podemos calificarlo como sello, es el que nos muestra Bushnell (1951) en su figura 25, d. Posiblemente haya sido este un sello para fabricar en barro, a su vez, los típicos sellos planos de la Cultura Guangala, que se usaron con seguridad para decorar tejidos, en esta cultura tan adicta al pó- licromado y a diminutos dibujos geométricos, que nos muestra la gran mayoría de sus sellos. Sospechamos que en esa misma cultura, ciertos tipos de sellos como los de las figuras I I y 14, eran usados paro decoración de cerámica ya que, aunque raramente, hemos visto improntas semejantes en cerámica Guangala.
Un sello de nuestra colección procedente de Chone, Manabí (fig. 38), es definitivamente post-hispánico, demostrando la supervivencia de estos artefactos hasta bien avanzado el siglo XVI, o sea un poco más de dos mil años
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de existencia y uso continuado en las varias culturas. Este raro ejemplar de sello cilindrico fue usado posiblemente para decorar cerámica indígena post-hispánica. Su motivo de ángel o personaje con un caballo no deja dudas en cuanto a su época. El sello es de tipo negativo para dejar el motivo en relieve en la cerámica a decorarse. Eso decoración semiaplicada en relieve, es característica de la técnica popularizada por la conquista.
Clara manifestación del uso ritual ceremonial de sellos cerámicos encontramos en las culturas Milagro-Que- vedo. El sello plano N9 42 tiene la típica figura del buho, significativa de la muerte en el ritual del shamán de estos pueblos.
En nuestro trabajo N9 2 (1957, a) estudiamos detenidamente el ritual shamar.ístico de los pueblos Milagro- Quevedo, antecesores de los Cayapas-Colorados de hoy. La figura del buho, común en su cerámica ceremonial, sus hachas ceremoniales, etc., es extremadamente importante no solamente en ella sino en otras como la Guangala y Manteña, aunque en menor escala. Los demás sellos de Milagro-Quevedo son artísticamente muy pobres, sin a finidad clara ninguna, ni con las otras regiones del propio Ecuador. En realidad, esta cultura muestra en casi todo su complejo, muy poco parentesco con sus vecinos, salvo el ejemplo arriba mencionado y poquísimos otros.
En la Cultura Manteña ciertos tipos de sellos con felinos, pueden ser asimismo representación de un culto, pero sorprende allí la ausencia de los sellos con el pelícano, que sabemos era el tótem más común de esa cultura, lo que parece indicar el poco uso ritual del sello en el territorio manteño. Lo mismo hemos visto en la Cultura Guangala, donde su uso era estrictamente decorativo. En la Cultura Manteña ciertos sellos guardan relación íntima con los diseños de sus estelas de piedra. No ha sido posible aún descifrar mayormente el culto en las culturas de Jama y Coaque, salvo apreciar ciertas afinidades con las re
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ligiones mexicanas. Es as! que allí vemos los dioses representativos más importantes de Mesoamérica. Nuestro sello N” \6C puede muy bien ser de dios con máscara de serpiente. Aquellos Nos. 3, 29, 37, 51, 77, 101, 158, y 159, aparentemente son una degeneración estilística de los primeros. Las figuras Nos. 94 y 95 indudablemente representan la serpiente plumada, básica en la Mitología Maya.
Otros diseños de flores en ciertos sellos de nuestras figuras 109, 119 y 120, son asimismo relativamente comunes en México, como los vemos en fiquras de Enciso (1953).
El diseño de la figura 3 y similares se repite en la zona Cañari, en la Cultura de Norrio. D'Harcourt (1942), nos dice que este diseño también existe en el arte Chimú. En todo caso vemos que se regó en el Ecuador en casi toda la zona con sellos.
El felino de lengua bífida, de nuestra figura 97, es típicamente mexicano. Es muy posible que ciertos diseños de sellos de Jama-Coaque representen glifos mexicanos. Es esa la región donde encontramos una marcada huella zapoteca. El sello 105 puede ser calificado como del g lifo C, como nos lo muestra Caso (1952), en su figura 27. Otro diseño, (fig. 98) es típico del arte coclesano, diseño zoomorfo doble simétrico que también apreciamos en placas de oro de Esmeraldas.
Los sellos de nuestras figuras 78, 79 y 80, planos todos ellos, representación de mano extendida con círculo interior, constituyen un motivo que ha sido detenidamente estudiado por Rands (1957) : el motivo de "Ojo en Mano" y formas relacionadas. A través del sello 79 se aprecia un nexo con otros, como los de las figuras 8$ al 85 con ardillas, etc.
Jorge Enciso (1953) en su figura IV de la pág. 134, nos muestra un sello plano proveniente de San Andrés, Tuxtla, exacto al nuestro de la figura 78. En la misma
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página nos muestra otros cuatro sellos emparentados. Existe por lo tanto un nexo íntimo entre Ecuador, México y Norte América en este tipo de diseño, indudablemente de función ceremonial.
Rands (1957) dice que círculos concéntricos en lamano ocurren frecuentemente en glifos mayas. Demuestra un uso similar de este motivo entre los pueblos Adena del Este de Estados Unidos y otros del Sudeste, pero asegura el origen más antiguo de este diseño entre los Mayas.
Entre los pueblos del Sudeste de Estados Unidos y los Mayas, el motivo "Ojo en Mano" era característico del Culto a la Muerte. Sin embargo, entre los pueblos de la costa noroeste de América este simbolismo no parece haber sido parte del mismo culto. Por haberse encontrado estos sellos en la región ecuatoriana que tiene varios nexos directos con Mesoamérica, no puede quedar duda de su origen y su función representativa entre nuestros antiguos habitantes.
Webb y Baby (1957) en su figura 40 nos muestran la tableta Gaitskill de la cultura Adena, en la que se aprecia claramente el motivo del "Ojo en Mano", significativo del culto a la Muerte entre esos pueblos. En la discusión sobre este motivo y varias otras tabletas, tan similares a nuestros sellos planos, los autores califican este diseño como representación de pata de ave de rapiña, que se aprecia en varias otras tabletas Adena, que además tiene representaciones de cabezas trofeos presentes en nuestra cultura Jama-Ccaque, en figurines y placas en relieve, o sea la misma cultura en que encontramos los sellos con el motivo "Ojo en Mano".
Webb y Baby creen en el uso ceremonial por parte del Shamán de estas placas y consideran que eran usadas para estampar diseños rituales en los cuerpos o vestimentas de los practicantes, para lo cual se usaba ocre rojo mezclado con grasa. Pigmentos rojos se han encontrado en las áreas de bajorrelieve de las tabletas Adena,
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tal como en ciertos sellos de Ecuador. Es curioso que en esta cultura Adena se encuentren tabletas de piedra arenisca perfectamente pulidas y cuadradas, con sus filos muy bien trabajados pero sin grabados, como los que se encuentran en la Isla de la Plata, en el Ecuador. En ese cen tro ceremonial de la cultura Bahía I, tenemos este elemento como exclusivo, en el sentido de que no se encuentra en los paraderos o basureros de la misma cultura. Solamente los hay en la Isla de la Plata, donde la casi ausencia de cerámica utilitaria y la predominancia de los figurines de esa cultura, indica claramente que la Isla de la Plata fue exclusivamente un centro ceremonial. La teoría de Webb y Baby sobre el uso de estas tabletas no decoradas, como piedra para afilar punzones de hueso en las ceremonias de extracción de sangre, parte del ritual histórico de indios americanos, es posible también para nuestros aborígenes de la cultura Bahia I, que gustaban de ese denominador común, el motivo "Ojo en Mano" que si bien no lo encontramos aún específicamente en la Cultura Bahía, lo hay entre sus vecinos relacionados, aquellos de Jama-Coa- que.
Las conocidas tabletas de piedra grabadas de la Isla de la Plata (fig. 40) que nos trae Dorsey (1901), pertenecientes a la Cultura Bahía I, son muy semejantes en sus diseños a sellos usados en el juego de Parchesi o Patolli, común en México pre-hispánico. Sellos mexicanos con e1 mismo dibujo nos muestra Jorge Enciso (1953) en sus f i guras de la pág. 144, motivo que se repite en nuestra f i gura 117. Tal vez las tabletas de Dorsey desempeñaban el mismo papel de ciertos sellos cerámicos de otras culturas en el ceremonial del centro religioso que era la Isla de la Plata. Dudamos que hubiesen sido sellos por la superficialidad de sus diseños, mas sobre su uso ceremonial no puede existir la menor duda.
Jijón y Coamaño (1951) denominó toda una Cultura Manabita como "estilo de los Sellos", por la reproduc
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ción en cerámica grabada o pintada de los motivos estilísticos de ciertos sellos profusamente decorados como aquellos de las figuras 100, 110, etc. Nosotros localizamos es- tratigráficamente este estilo al final de la cultura Bahía y comienzo del Manteño en Manabí. Es notable, por otro lado, que en ese horizonte cronológico, o algo antes, y aproximadamente con la misma distribución geográfica, aparezcan en el Ecuador toques asiáticos o polinésicos como descansanucas de barro; templos con techados al estilo de Oceanía; figuras de guerreros con ojos orientales, con collares de colmillos pequeños o uno solo grande; cascos multicolores de factura asiática; doble barba en punta, etc.
Por cierto que los diseños del "Estilo de los Sellos", tiene un aire muy oriental. La Cultura de Bahía arribó al Ecuador pocos cientos de años antes de Cristo. Duró hasta siglos después.
,En todo caso el hecho de llevar estas tabletas o sellos, tanto en Ecuador como en otros países, un significado ritual o religioso, demuestra el comienzo de la asociación de figuras graficadas relacionadas con pensamientos determinados, o sea el primer paso hacia la constitución dei sistema de glifos, y por lo tanto de una escritura embrionaria. Nuestros pueblos prehistóricos no estuvieron por lo tanto muy alejados de esa etapa demostrativa de elevada cultura y civilización, que constituyó el pensamiento representado por signos gráficos, tal como lo conocemos hoy.^
Apreciamos claramente que este aporte cultural, como tantos otros, vino por la ruta usual, o sea del Norte, desde Mesoamérica.
Como aporte artístico para nuestros arquitectos, escultores, pintores, etc. de hoy, se le puede asignar, ade más, un valor inmenso, que debe a su vez constituir la ba se de un arte autóctono ecuatoriano, con rivetes netamente
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nuestros y no copiados ni importados, salvo a través de la herencia cultura! de hace uno o dos milenios.
Los dibujos de este artículo, copias de trabajos originales de artistas aborígenes ecuatorianos de antaño, deben servir de inspiración para nuestros artistas y decoradores de hoy.
Mas aun, de entre la gama de torteros, decoraciones pictóricas y plásticas de nuestras diversas culturas prehispánicas se pueden obtener otras fuentes de inspiración. Ellas deben popularizarse para darle paulatinamente al producto ecuatoriano la autoctonidad de un diseño inspirado, no en Tiahuanaco, por ejemplo, ni en la piedra de sacrificio Azteca. Nuestro arte aborigen es suficiente- rrtente rico y variado para permitirnos también a nosotros un cierto nacionalismo en el fundamento de nuestro arte.
Ojalá este pequeño aporte contribuya en algo a este propósito.
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SELLOS O PINTADERAS
Diseños agrupados por culturas o por localización geográfica.
Aquellos que llevan el dato de profundidad, corresponden a excavaciones estratigráficas.
til
CULTURA G U A N G A LA(Guayas)
VALDIVIA SUPERFICIE
LOMA ALTA D 1,00 M.4
5LOMA ALTA D 1,00 M
6BARCELONA
7
9
Pertenece a la c u ltu ra del río D au le , m uy re la c io n a
da con G uanga la .BIJAHUAl - LOMA DE SAN JUAN
LOMA ALTA D 1,00 Wi
l l'»ARCA ONA - LOMA PRUDENTE
LOMA ALTA D 1 00 M.
V S /V W W W W V V N A
VALDIVIA SUPERFICIE14
'íWSnfr15
MACHALILLA B
G U A Y A SVarios
17
E ncon trado en els itio C horre ra . Nol e y seguridad encua n to a cu ltu ra .
CHORRERA
SAMTA LUCIA
C u ltu ra C horrera
LIBERTAD C 2,40 M.
20
CHORRERA
Encontrados en el s itio C horrera. No hay seguridad en cuan to a cu ltu ra .
LIBERTAD C 1,80 - 2,00 M
BALZAR
Z O N A A U S T R A L
CAÑAR
26 27
CUENCA
C U L T U R A M A N T E Ñ A
PROGRESO
ryTyflñnmfflnrcTnTTiiLiLLiLi. ü ^ ü¿*
31
POSORJA
PUNA NUEVA MANABI
PORTOVIEJO
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MANABI37
V A R I O S
VIANABI-CHONE
Sello p ist-hispónico
T ob le fo de p iedra. ISLA DE LA P LA TA
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CULTURA M ILÀGRO-QUEVEDO(Guayas, Los Ríos)
COUNTRY CLUB GUAYAQUIL
45
CARRIZAL
FRUTA DEL PAN
SELLOS DE M A N A B I
COAQIIE H L L L U c t w
MANABI50
MANABI
MANABI
MANABI
54 56
COAQUE
PATA DE PAJARO (COAQUE)
VUELTAS LARûAS (GUALEj
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MANABI
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6 3
MANABI
RIO MARIANO
MANABI
65
MANABI
66
MANAB'
6 7
iwanab» manabi
MANABI
76
MANABI
77
MANABI
SELLOS DE ESMERALDASMotivo "ojo en mano" y relacionados
78
LAS MINAS
ESMERALDAS (TOMADO DE D'HARCOURT)
ESMERALDASVarios
PUERTO ESMERALDAS
ESMERALDAS
81FELFA
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LA T O L IT A
ESMERALDAS
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M A T E
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MUSEO MUNICIPAL GUAYAQUIL
LA T O L IT A
99
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100
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LA TOLITA
LA TOLITA
M A T E M A T E
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PUERTO ESMERALDAS ESMERALDAS
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LA TOLITA
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E S M E R A L D A S
E S M E R A L D A S A C H IO T E
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PUERTO ESMERALDAS
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132 133
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LA T O L IT A
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E S M E R A L D A S
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PUERTO ESMERALDAS
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ATACAMES
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D 'H a rc o u rt nos d ice que este st fue en con trado a p a ren tem e n te en Qu vedo, pero él cree que es o rig ina rio Esmeraldas. A nuestro m odo de ver i debe e x is tir ta l du da . El sel o N? ; del Guayas es m uy s im ila r a l N? 1¡ y otros de la zona C aña ri que Uhle I pub licado . El e s tilo se encuen tra regí do por todo el te r r ito r io ecua to riano ¡ que ex is ten sellos.
ESMERALDAS (TOMADO DE D'HARCOURT)
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ESMERALDAS (TOMADO DE D'HARCOURT)
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GRUPOS SANGUÍNEOS (sistema ABO) DE LOS INDIOS Y MESTIZOS DS LOS ALREDEDORES DE QUITO
por Rícardína Romos de Andrade,Carmen Loscano y Martha Zarate
Aunque ü los trabajos exhaustivos del Prof. Dr. Santia-na casi nado queda por agregar en cuanto a los grupos sanguíneos de los indios del Ecuador (sistema ABO), realizamos una nueva encuesta, la cual confirmó los resultados obtenidos por este investigador. Sin embargo, nuestra investigación re extendió a los mestizos de los mismos lugares, que proceden de cruzamientos recientes y en los cuales los genes del Indio se encuentran en mayoría. Nuestro trabajo se realizó en un total de 161 individuos de ambos sexos, 106 indios y 55 mestizos, en los vecinas poblaciones de Calderón y Zámbiza. Fueron empleados los métodos ya clásicos en estos exámenes.
Los resultados obtenidos constan en el siguiente cuadro-
Indios
0 A B AB
75----------------------- —
2 _____
" " 1 1
Calderón 96.15 2.56 1.28
25 2 1 —
Zámbíza 89.28 7.14 3.57
Tota!... 100 4 1 1
Mestizos
0 A B AS
Calderón2068.96
724.13
26.87
Zámbíza1557.69
934.61
13.84
13.84
Total... 35 16 3 1
En indios de !a localidad de Calderón, el Prof. Santia- na (1) obtuvo los resultados siguientes:
O A B AB170 4 1 _97.14 2.28 0.57
Y en los indios del Ecuador:
O A B AB8.743 307 96 21
95.37 3.24 1.04 0.22
2 0 —
con la fórmula sérica:
r p q suma r -fp + q0.977 0.015 0.007 0.999
Bien sabemos que los genes r, p, q, están presentes en c.\ indio americano en ausencia de todo mestizaje, y que la prevalencia de r es sólo relativa. Sin embargo, en nuestros resultados se exteriorizan a la vez los aportes genéticos del blanco y del indio y esto hasta el punto de guardar cierto paralelismo con el grado de los mismos.
< 1 ) S A N T J A N A , A n to n io : Los Grupos Sanguíneos de los Ind ios de! E cuador. C om u n ica c ió n d e fin it iv a ; A na les de la U n ivers idad
C e n tra l, N os. 32.5— 3 2 6 y S eparata , Q u ito , Ecuador, 19 48 pp. 5 -5 0 .
ESTATURA Y PESO DE LOS ESCOLARES DE LA CSUDAD DE QUITO
por Lino Naranjo, Inés Logroño y María L. Galarza
Por encargo del Prof. Dr. Antonio Santiana, y bajo su control, realizamos la investigación cuyos resultados daremos a conocer sumariamente.
Material y MétodosEl examen se hizo en dos grupos distintos: el prime
ro compuesto de varones cuya edad oscila entre los 12-20 años. Este consta de 1015 Individuos. El segundo de niños y niñas de 7 y 6 años de edad respectivamente; éstos suman 1036 individuos.
Nos servimos del conocido Instrumental antropométrico, cuya eficacia fue comprobada antes de comenzar la Investigación. Los individuos llevaban pantalón corto y liviano y estaban descalzos; se cuidó su posición corree -
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ta ai medir la estatura y la determinación del peso se hizo antes de la comida del mediodía. La estatura esta determinada en milímetros y el peso en kilogramos.
Como se verá en el Cuadro NQ 2, los niños que forman el segundo grupo fueron clasificados de acuerdo al nivel económico de sus padres, y esto con el objeto de determinar la influencia de los factores ambientales, entre ellos -el económico, sobre tales ccracteres morfológicos. Diremos, por fin, que las cifras que dan a conocer nuestros resultados, no van más allá de los conocidos promedios, por considerarlos lo suficientemente demostrativos para este caso.
Resultados obtenidos
Los resultados obtenidos en el primer grupo constan en el Cuadro N° 1, en el que pueden verse las variacionesde la estatura y el peso c medida que avanza ¡a edad.
C U A D R O N9 1
i N® c¡3 casos Edad E síotu ro Peso___
j 99 12 1370 29,70233 13 1412 32,31183 14 1469 37,10161 15 1542 43,10108 16 1586 49,00110 17 1628 50,0882 18 1640 52,7028 19 1643 53,50
i 11 ¡ 20 1648 53,80
2 2 —
El Cuadro Np 2 correspondiente al segundo grupo, nosofrece las diferencias de sexo y principalmente aquellas que se originan en niveles económicos.
CUADRO N * 2
¡Pensionado
iG ratuíto
VARONES N ÑOS
N°. de
Casose d a d : 7 a ñ o s e d a d : 6 a ñ o s
Estatura Peso Estatura Peso
5 í 8
5 1 3
1 1 7 6
1131
2 2 ,2 5 7
2 0 ,0 0 0
1 1 2 2
1 0 9 5
2 0 ,0 3 9
1 7 ,3 1 2
Consideración sobre los resultados
Los individuos que examinamos son mestizos en su gran mayoría, con predominio de los genes del blanco en los niños que pagan su instrucción. Les jóvenes del primer grupo y los niños que reciben instrucción gratuita proceden de capas sociales pobres, cuya dieta alimenticia podemos desde ya considerar insuficiente; lo mismo podemos agregar en lo que se refiere a las condiciones de salubridad de los hogares en que viven. Los niños que costean su educación proceden de hogares acomodados; sin embargo no podemos considerarlos bien alimentados porque su dieta alimenticia no está científicamente balanceada; las féculas predominan sobre las albúminas y los dulces y golosinas sobre los productos lácteos. Esto, indudablemente, debe tener su repercusión en el peso y la estatura.
La influencia que la alimentación y condiciones generales de viaa ejercen sobre el desarrollo, ha sido suficientemente demostrada en varios países, entre otros España, Bélgica, Estados Unidos, Alemania, etc.
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A pesar de la importancia que revisten los factoresconsiderados, no debemos olvidar la significación del aporte aborigen con sus genes en mayoría en el elemento humano examinado. La población adulta del Ecuador, cuya composición racial se caracteriza por los integrantes genéticos proporcionados por el indio y el blanco, tiene estatura pequeña, como los Andidos, de los cuales deriva.
En resumen, dos factores influyen en estatura y peso de los elementos considerados: su ascendencia ge nética y racial y los factores económicos y ambientales que los rodean. En los individuos del primer grupo se advierte también la influencia de la pubertad en e' crecimiento y de los ejercicios físicos.
PRESENCIA DEL INDIO ECUATORIANO EN LA PRENSA
por ANTONIO SAN TIAN A
— En un pais con alto porcentaje de población aborigen, como Ecuador, donde la pequenez del territorio pone en contacto estrecho a grupos humanos de diversa ascendencia histórica y cultural, con distintos niveles de desarrollo, la presencia del indio adquiere una significación fundamental y, en ciertos aspectos, un valor casi decisivo. Este hecho, innecesario es decirlo, está determinado por los relociones de trabajo y económicas que se establecen entre los grupos y clases sociales que Integran la nacionalidad, relaciones harto estrechas precisamente aquí, donde buena parte de la mano de obra descansa sobre los hombros de la población indígena.
Sobre esta realidad, na sólo presente sino también de raigambre histórica se asienta el proceso de edificación del país, en ^ c u a l participan todos las clases sociales con aporte^de variada índole. Aunque las relaciones entre los
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grupos económicos, sociales y culturales que componen su población se basan, al 'menos en estos dios, en un status aparentemente equilibrado y estable, subsiste el problema, digamos más bien el latente conflicto, cuyo subterráneo rumor se exacerba en ciertos momentos. Y los hechos reveladores de esta situación afloran a la superficie con singular in sistencia, para revelarnos no sólo que todos quieren participar de las ventajas de la civilización actual, sino íam bien que el indio vive aún, en gran escala, las vicisitudes económicas y sociales del pasado.
Nos proponemos dar aquí a conocer tales hechos c través de las informaciones de prensa; aunque aislados tienen poco valor, en su conjunto adquieren toda la signi ficación del indio y de su existencia.
LOS AUCAS
Así llama nuestro pueblo a una pequeña tribu de la Amazonia ecuatoriana, cuyo habitat se asienta sobre el río Curaray, a nivel de la desembocadura de! Oglán. Emparentada lingüísticamente al tronco Záparo,— su verdadero nombre es Aushiri. Agricultores de la azada, los Aucas siguen todavía adheridos a las actividades ancestrales de la caza, la pesca y la recolección de frutos.El bosque tupido, lluvioso y tropical en cuyo seno viven les ha permitido desarrollar el tipo de cultura propio de estas áreas.
Los individuos pertenecientes a este etno tienen la piel pardo oscura, el pelo ofrece la típica distribución ¡n- fantil-feminoide, la estatura es pequeña, el tórax amplio, corpulentos, con extremidades cortas, la cara ancha y la cabeza redondo.
Fueron objeto de evangelización durante el siglo pasado. Habiendo recibido al principio con docilidad a los misioneros católicos, más tarde se negaron a todo contacto con ellos y en ocasiones los victimaron. Sufrieron pos-
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teriormente la presión de las fuerzas militares peruanas, que los empujaron hacia el oeste. El exiguo territorio en que se encuentran actualmente arrinconados constituye su último refugio. Lo que más contribuyó a crear y estimular su aversión al "blanco", fue su contacto con los caucheros, los buscadores de riquezas y otros aventureros. Hace varios años atacaron sorpresivamente el campamento de una compañía petrolera estacionada en las vecindades de su habitat. Es mundialmente conocido su asalto y victimación a cinco misioneros americanos que habían penetrado a su territorio con fines de evangelización.
Desde entonces los Aucas son objeto de atención preferente, pero sólo por la prensa y para la publicidad. Damos a continuación el resumen de algunas noticias publicadas sobre ellos y en general sobre los aborígenes ecuatorianos, en el diario El Comercio de Quito y durante el año de 1958.
MISIONEROS LOGRAN ESTABLECER NUEVO CONTACTO CON LOS AUCAS
El 1 3 de noviembre de 1957, 3 mujeres aucas se acercaron a un caserío donde viven ocho familias quechua, esto es a 22 meses de la victimación de los cinco misioneros americanos (ocurrida el 8 de enero de 1956). Los quechua avistaron a las tres mujeres al cruzar el río Curaray a horas tempranas de la mañana; éstas gritaban imitando el sonido del avión. Los quechua dieron inmediatamente aviso a la Misión Evangélica de Arajuno. La Sra. Elliot, viuda de uno de los misioneros victimados, se dirigió al lugar y se encontró con dos mujeres aucas (la tercera había regresado). Gracias al empleo de algunas palabras aucas pudo comunicarse con ellas.
INCURSIONES DE LOS AUCAS
A mediados de febrero de 1958 un grupo de indígenas del Curaray se presentó al Presidente de la República
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Pa
st
o
M A P A E TN O G R A FIC O DEL ECUADOR P R EC O LO M B IN O . Obsérvese el área ocupada por lae tit ia A u s h ir i (A u c a s ).
solicitando ayuda para establecerse en la aldea de Araju- no. La razón aducida es el ataque que sufrieron a manos de los Aucas en noviembre del año pasado. Su aldea, situada a dos kilómetros de la desembocadura del Oglán, en el Curaray, fue destruida en una noche. Los Aucas llegaron silenciosamente y lograron sorprenderlos. Mataron a un hombre y raptaron a una niña, aunque su intención era exterminar a todos. El ataque lo realizaron con lanzas. Por ello han llegado a la conclusión de que deben abandonar ese sitio.
Inmediatamente se dispuso la entrega de machetes, hachas, anzuelos, ropa, etc. para los habitantes de la localidad atacada y se impartieron instrucciones a los indígenas para que regresen a su aldea, dándoles protección contra los Aucas. Estos no atacan sino cuando son moles-
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todos y su última agresión se debe o incursiones a su recinto últimamente realizadas.
Pocos días después, en los primeros días de marzo, se informaba que los Aucas habían secuestrado una niña. Poco tiempo antes habían raptado otra niña de 16 años. Exigen que se les devuelva dos mujeres de su tribu, posiblemente Mankuma y Mintaka, ambas de alrededor de 22 años de edad, que están ahora bajo la protección de la Sra. Elliot.
Un nuevo ataque de los Aucas se produjo en los primeros días de julio. Según informe del misionero capuchino, Fray Anastasio Bruñel, trs indios Quijo que habían salido de cacería fueron atacados durante la noche, al tomar su canoa de regreso a la hacienda Armenia Vieja, a ori-
2.— Grupo de indios A ush iri (aucas)
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lias del río Ñapo. El ataque lo hicieron los Aucas con lanzas, habiendo sido uno de los atacados atravesado en una mano por esta arma. Las lanzas de que se valieron son de madera dura, una de ellas mide dos metros y ocho centímetros de largo y consta de tres caras, más o menos de 2 centímetros de ancho cada una. Este hecho ha causado alarma entre los moradores de la región, pues indica que los Aucas, partiendo de su habitat original, están incursio- nando a gran distancia.
CONOCEDOR DE LAS COSTUMBRES DE LOS AUCAS DA IDEAS SOBRE COMO PODER ATRAERLOS
El Sr. Carlos Sevilla, propietario de una hacienda situada a pocos kilómetros del territorio auca, dijo que conoce mucho de las costumbres de la tribu, y que retiene en su poder q cinco individuos procedentes de tal etno.
Después de narrar algunos combates sostenidos por él contra los Aucas, manifestó que tienen fama por la ferocidad de sus ataques. Algunos son altos pero los hay también de estatura mediana y pequeña. Fornidos, están siempre entrenados para la lucha. Su arma de combate es la lanza de madera dura (chonta), larga y bien a fila da, que usan con gran precisión. Para la caza utilizan la cerbatana, con proyectiles de tamaño variable, pero siempre envenenados. Temen las armas de fuego; se ocultan en la espesura. Cuando se lanzan al ataque dan alaridos ensordecedores.
Utilizan la técnica del engaño para sorprender al enemigo y evitar que-use sus armas. Para ello imitan el can to de las aves o el rugido de las fieras. Cuando el adversario sale fuera de la choza, se le ataca y mata con efectividad y sin conmiseración. En chozas abandonadas por ellos se han encontrado figuras antropomorfas cinceladas en madera, grandes y chicas, acribilladas por agujeros pro-
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ducidos por puntas de lanzas. Las grandes servirían para el entrenamiento inicial de los niños y las chicas para sus faces finales; estas figuras tienen los objetivos pintados.
El Sr. Sevilla ha protegido en su hacienda 5 mujeres fugitivas que llegaron buscando albergue. Ellas le informaron que el jefe del grupo más numeroso — de los tres en que se divide la tribu— , Miupa, es un hombre sanguinario, pero es el que lucha con más bravura. El jefe tie ne sus prerrogativas; lleva brazaletes de plumas y adornos vistoscs en la cabeza. Practica la poligamia, tiene 5 mujeres, en tanto que los demás son monógamos.
Los Aucas realizan la decoración cutánea mediante dibujes lineales. El pelo es largo y lo llevan en forma de crenchas que cuelgan sobre la espalda; en tonto que del lado de la frente lo cortan formando cerquillo. Sevilla vio a las Aucas fugitivas cortar el pelo golpeándolo entre dos piedras. Encienden hogueras durante la noche, duermen sobre hamacas de fibra vegetal. Practican la cestería ornamental, empleando para ello una planta llamada "cham- bira"; extienden sobre el suelo una alfombra de vistosos colores, "lanchana", hecha de corteza de árbol. Son muy hábiles para la fabricación de cerámica o "alpamanga", la cual es fina y resistente.
El Sr. Sevilla estima que los Aucas son muy trabajadores. La prueba, dice, son sus extensas chacras, cuidadas impecablemente, como se pueden ver desde el avión. Cultivan el maíz en abundancia, maní, papa china, jicama, ají amarillo, yuca y plátanos. La carne es uno de los elementos principales de su alimentación y la obtienen mediante la caza y la pesca, la última con lanzas pequeñas que arrojan a la distancia. Su chicha de plátano maduro no es fermentada. Los alimentos los toman cocidos y crudos. Obtienen el fuego por frotamiento de dos trozos secos de madera de achiote (bixa oreilana) en un medio de madera resinosa.
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i . - — M a d re A ush iri con su niño.
Como sus vecinos, los Quijo, los Aucas entierran sus muertos a un metro de profundidad, en el suelo de la caso de habitación. El cadáver es colocado en cuclillas, envuelto en hojas. Luego la caso es definitivamente aban donada.
Se cree que hay oro y minerales en el territorio auca, mas las expediciones organizadas para buscarlos han fracasado hasta ahora.
Otro Informante es el Sr. Mario Olmedo Chávez, quien ha permanecido en el Oriente desde 1904, cerca del territorio que ocupa esa tribu. Cuando en esa fecha llegó a Santa Rosa, acompañado de 60 colonizadores, encontró ocho cadáveres tendidos, víctimas de los Aucas; tenían grandes lanzas clavadas en el pecho. Los Aucas inspiran un terror ya proverbial y sólo oir nombrarlos produce pá nico entre las tribus de la región.
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4 .— H om bre y m u je r de la tr ibu A u ih ir i . El vestido que lleva la
ú ltim a le tía sido proporcionado por los misioneros evangelistas.
Chávez relató que hace unos 8 años llegaron a Archi- dona numerosos indígenas de un pueblo pacífico, gritando desesperadamente porque hablan aparecido en ese sector algunos Aucas.
En un relato posterior, el Sr. Sevilla señala el hecho de que los Aucas son excelentes cazadores, capaces de derribar cualquier ave en pleno vuelo. Está en uso entre ellos la cerbatana y "virolas" envenenadas. Cuando los aviones aparecieron por primera vez sobre su territorio, los Aucas los atacaban con flechas desde la copa de los árboles más altos. Según el cálculo del Sr. Sevilla su número oscila entre 5 y 6 mil.
Otros datos interesantes hay que agregar, y son los proporcionados por dos exilados políticos cubanos que ¡n- cursíonaban en septiembre del año posado en un sitio ubi-
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codo entre los ríos Puni-Yacu y Arajuno, o día y medio del territorio auco. Obtuvieron valiosos datos acerca de los Aucas. Supieron que su jefe, Miupa, murió hace poco tiempo y le sucedió un joven sanguinario. Los Alamas (agrupación subtribal) les informaron que han notado movimiento de guerreros aucas, los cuales se están aproximando a las tribus semicivilizadas. Las picas colocadas en el límite de su territorio han desaparecido, lo cual pre- udia una incursión. Los Alamas añadieron que los Aucas
son gente sana; no beben licor e incluso la chicha que toman no es fermentada. Su agresividad es producto de un concentrado rencor contra el hombre "blanco” , desde que los caucheros que entraron a su habitat en el segundo decenio de este siglo, les robaron las mujeres y mataron muchos integrantes de la tribu.
Enero 25
UN EXPLORADOR CANADIENSE SE LANZARA EN PARACAIDAS SOBRE EL POBLADO PRINCIPAL
DE LOS AUCAS
Se encuentra en Quito, de paso a la región oriental ecuatoriana, el Dr. Roberto Tremblay, quien declaró a los periodistas que ai conocer la noticia de la muerte de los mi-
. .ioneros americanos o manos de los Aucas, se propuso abordar a éstos. Experimentado en hazañas de esta indo e, dijo estar seguro del éxito de su empresa. El Dr. Trem
blay considera que el uso del paracaídas es el único medio de entrar en c^tacto directo con ellos' y conocer sus secretos. Se lanzará sobre el poblado principal de los Aucas, que se encuentra en las inmediaciones del rio Oglán. Antes de ahora ha estcdo dos veces en nuestro Orlente. Dijo que cuenta con el apoyo de varios institutos científicos y sociedades cristianas. El Dr. Tremblay conoce a lgunas palabras aucas y cree que "aushiri" significa "nos-
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otros los señores". Según él los Aushiris serán los descendientes modernos de los antiguos Shíris de Quito. Opuestos a toda civilización, migraron a la Amazonia ecuatoriana para preservar su libertad y vivir la vida de los cazadores y recolectorés. Auca "en el idioma de ellos" quiere decir diablo. El Dr. Tremblay se dirigirá al Oriente en los primeros días de febrero, comandando una expedición "que descorrerá el velo que mantiene el secreto de los Aucas". Volará pues al río Oglán, se lanzará en paracaídas y retornará en compañía de dos o tres miembros de la tribu. Aseguró que éstos no son agresivos ni atacan sino cuando se sienten hostigados y perseguidos.
Enero 2 6
NUEVA INFORMACION ACERCA DEL DR. TREMBLAY Y SU PROYECTADA EXPEDICION
En su última entrevista nos manifestó que hace un año y medio estuvo con los Mau Mau en Africa, tribu muy conocida por su belicosidad, con quienes vivió durante a lgún tiempo habiendo conquistado su confianza y afecto. La finalidad de su viaje a los Aucas es hacer, como psicólogo, estudios científicos sobre la mentalidad primitiva. A tal objeto se halla auspiciado por varias entidades, como el Consejo de Investigación Científica del Canadá, la O ficina del Desarrollo Social Indígena de Otawa, la Organización de Desarrollo de los Primitivos. En Ecuador cuenta con el apoyo del Gobierno Nacional, los Padres Reden- toristas, el Ministerio de Defensa Nacional y el Servicio Social de la Policía Civil. Mediante la exhibición de certificados de personas del lugar, probó haber permanecido en el Oriente por algunos meses, en el sector del río Aguano, dos días hacia adentro del Oglán, muy cerca de los Aushiri, aunque sin contacto con ellos. Conoce los idiomas de la región, habiéndose puesto en contacto con los
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indígenas de Archidona, Tena e lia. Calcula que el número de Aucas oscila entre 2 / 3 mil individuos que se distribuyen asi: sobre él rio Ogián y sus tributarios, unos 500; en la región de Tzapum más o menos 1.000 y en la región de Maishiña otros 500. Supone que el número de mujeres es bastante reducido, lo cual explicarla sus ataques a las tribus de la vecindad.
A poco de aparecer estas primeras noticias, la prensa informaba que varias personas se presentaron al Doctor Tremblay deseosas de acompañarle. El viajero fijó como fecha de partida e l l 1 de febrero, y como fecha para enarbolar la bandera ecuatoriana en territorio auca, el 25 de marzo. Su itinerario comprende Shell Mera, donde se estacionará por unos 10 o 15 días; luego seguirá a pie o en avión a la confluencia del río Ogián con el Curaray, meta de sus ambiciones.
Días después el Dr. Tremblay había desistido, o por lo menos estaba en suspenso el proyecto de lanzarse en paracaídas.
Ya en la Amazonia, Tremblay manifiesta que piensa permanecer en territorio auca hasta el mes de junio. Terminada su labor regresará con dos o tres Aucas que testimonien su hazaña. Más tarde retornará a la colectividad auca para "devolver" los indígenas y establecer entre ellos una misión permanente.
Por dos meses la prensa suspendió sus informaciones acerca del intrépido viajero, manteniendo la espectativa general; mas el 30 de junio se supo que el expedicionario canadiense incursionaba por el bajo Curaray, una de las zonas más peligrosas para los "blancos" que tratan de aproximarse a los Aucas. Ya ha descubierto Tremblay un poblado auca compuesto de cuatro casas pequeñas y una central de dos pisos. El informante, señor Alberto Albu- ja, asegura que hasta el 4 del mes de mayo Tremblay se encontraba en el bajo Curaray. Albuja envió una patrulla de indios conocedores de la selva, para hacerlo regre-
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sar a la Misión Josefina en caso de que se encontrara v ivo. Efectivamente, encontraron a Tremblay en un lugar avanzado del bajo Curaray, pero se negó a regresar y expresó su deseo irrevocable de cumplir su sueño: "ganar los Aucas a la civilización o morir perforado por sus lanzas". Los indios regresaron y Tremblay preparó todo lo necesario para presentarse sorpresivamente en las viviendas aucas. En el día de hoy la pregunta es: ¿estará vivo todavía?
Nuevamente la prensa guardó silencio acerca de la suerte corrida por el explorador Roberto Tremblay, hasta que a fines de septiembre los dos cubanos antes mencionados, que estuvieron en un sitio entre los ríos Puni-yacu y Arajuno, manifestaron que lo único que pudieron averiguar con respecto a Tremblay fue que había salido aguas abajo con una canoa, un perro, un gallo y una gallina. Posteriormente los colonos encontraron el perro muerto en tanto que la canoa había desaparecido. Nada se supo de Tremblay, sólo que una hermana de éste se encuentra en el Ñapo organizando una expedición para rescatarlo.
En agosto la prensa publicaba la noticia ya casi segura de que el explorador Roberto Tremblay había tenido un trágico fin en su viaje al territorio de los Aucas. Un miembro de la Associated Press hizo el envío de una información completa acerca del Dr. Tremblay y la suerte corrida por él. Según ella hacia tres semanas que las avionetas "Alas del Socorro" de los misioneros protestantes, verificaron que Tremblay había construido una choza justamente en el lugar donde hacía treinta y dos meses murieron a manos de los Aucas los misioneros americanos.
En los primeros días de octubre era ya un hecho que Tremblay había sido ultimado por los Aucas, según lo atestiguan las palabras de algunas indígenas Aucas que se encuentran en contacto con la civilización y que habían hecho una visita a su tribu. La noticia proporcionada por ellas dice que Roberto Tremblay, al llegar a los dominios de la tribu fue de inmediato muerto Consumado este he-
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5.— Puntas de lanxa fa b rica d a s en madera de chonta, en uso ac
tu a l entre ¡os Aushiris.
cho, los Aucas destruyeron sus casas, incluso la apartada choza que sirvió de alojamiento a Tremblay, y se refugiaren en otro paraje de su territorio.
Un tiempo después, la avioneta de la Misión volvió a volar sobre ese Sitió y observó que la choza de Tremblay estaba completamente destruida. Los objetos personales dél explorador estaban esparcidos por la playa.
Se comprobó además que el antiguo poblado auca había sido incendiado y nuevas chozas se levantaban en lu-
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gares más profundos de la selva. Estos hechos hacen presumir, añadía la Associated Press, que el misionero Tremblay pagó con su vida su temeridad. El Dr. Tremblay había venido al Ecuador en son de aventura, en la opinión del periodista, estimulado por el revuelo que causó en el mundo el sacrificio de los cinco misioneros evangelistas a manos de los Aucas.
N O T A .-—Las fo to g ra fía s que presentam os h a n sido p u b lica d a s po r la la M is ió n E vangélica de A ra ju n o , de las cua les las núm ero 1, 2 y 4 hem os re p rod uc ido con leves m o d ificac ion es .
Los misioneros llaman “ Plan Auca" a las actividades que vienen desarrollando para acercarse a los Aucas. En la mañana del 27 de septiembre llegaron a la Misión Evangélica de Arajuno, siete mujeres y tres niños en actitud amistosa. Fueron recibidos con suma complacencia por los misioneros. Dayuma, juntamente con Mintaka y Man- kuma, regresaron a su tribu prometiendo volver al poco tiempo. En efecto, regresaron a los pocos días con la noticia de que el jefe que gobernaba a la tribu en la fecha en que fueron sacrificados los misioneros americanos, había muerto asesinado por los suyos. Añadieron que el jefe actual era un hombre bueno y ofrecía la posibilidad de in iciar relaciones amistosas con los hombres de la civilización. Cuentan que el jefe anterior había sido el responsable de ¡a muerte de los misioneros. Este, acompañado de guerreros, había salido a recibirlos después de haber manifestado la necesidad de matarlos “ porque sen nuestros enemigos". Añadieron que Tremblay fue muerto de inmediato al llegar a sus dominios.
En esta misma campaña de acercamiento, el Presidente del "Inter-Mision-Felowship of Ecuador", Sr. Henri
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C. Miller, dio a conocer el éxito alcanzado en la incorporación da la tribu auca a la vida civilizada. Siete mujeres con tres niños visitaron durante quince días la M isión Evangélica de Arajuno. En compañía de ellas, la Sra. Betty v. de Elliot, su hija Valeria y la Srta. Raquel Saint se dirigieron al sitio donde viven 40 o 50 personas "pertenecientes a la tribu auca", siendo cordialmente recibidas el 9 de octubre, día de su llegada. De esta manera establecieron el primer contacto amistoso con esos indígenas indómitos. Se abriga la esperanza de que en día no lejano, tal contacto se traducirá en obra de positivo beneficio para esos aborígenes.
Asumieron el papel principal para facilitar este contacto las mujeres aucas Dayuma, Mintaka y Mankuma. La primera fugó de la tribu hace más de diez años, aterrorizada por los crímenes que había visto. Fue recogida por el señor Carlas Sevilla, colono ribereño del Ñapo. Este la puso al cuidado de la Srta. Raquel Saint, miembro del Instituto Lingüístico de Verano, interesada en aprender la lengua Auca. Dayuma tiene unos 20 años de edad y ha sido un valioso apoyo para los estudios que realiza el Instituto. Viajó a los Estados Unidos y por su capacidad y don de gentes impresionó al Alcalde de Kansas, Sr. Rol Bartle. El Sr. Sevilla tenía en su poder hacía poco tiempo a un hijo de Dayuma a quien hizo bautizar con el nombre de Ignacio Silverio Padilla. En los primeros días de febrero se lo envió a los Estados Unidos para reunirse con su madre. Por su parte Dayuma ingresó el 1 6 de abril a la religión cristiana, "renunció a las creencias paganas de la tribu" al recibir las aguas bautismales e ingresar a la Iglesia Evangélica Libre. A su regreso de Estados Unidos fue con Mintaka y Mankuma a visitar a los suyos.
OTRAS INFORMACIONES
Los Jíbaros.— Llegó a Quito una delegación integrada por 5 Jíbaros, los cuales traían la representación de uno
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de los etnos más caracterizados de la amazonia ecuatoriana. Solicitaron al Gobierno y en particular al Instituto Nacional de Colonización, les conceda títulos de propiedad sobre, las tierras que trabajan desde hace numerosos años, en las cuales desean construir una población como base de cohesión para su comunidad. Los terrenos que solicitan se encuentran en Nungüi-lpangui, zona de Cumbaratza del Conten Zamora, Prov. de Santiago-Zamo- ra. Esta petición se funda en e! temor de que algunos "blancos'' se apoderen de tales terrenos.
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Los Coiorcdos.— Una delegación, representando a 230 indígenas pertenecientes a esta tribu, llegó a Quito con el objeto ríe realizar gestiones tendientes a obtener la entrega de dos mil hectáreas de tierras en el área donde se encuentran actualmente asentados. Recibieron de monos del Presidente de la República el texto rie Decreto por el cual se les .conceden las tierras solicitados, las cueles se encuentran junto al río Cóngorna. Tal adjudicación se hace en "forma indivisa y global" a! grupo, y "las tierras no podrán ser cedidas o vendides a ningún título, pera que se mantengan como patrimonio exclusive del grupo familiar indígena adjudicatario".
4 0
CRONICAS Y NOTICIAS
ECUADOR
ACTIVIDADES EN EL INSTITUTO DE ANTROPOLOGIA DE LA
UNIVERSIDAD CENTRAL
Los a lum nos de la cá te d ra de A n tro p o lo g ía S upe rio r y de Investig a c io n e s C ie n tífica s , te rm in a ro n en e l ú lt im o oño le c tiv o su in ve s tig a c ió n sobre los g rupos san gu í
neos (s is tem a A B O ) de los indios y m estizos de las pob lac iones de C a lde rón y Z o m b íz a , vec inas de lo c iu d a d de Q u ito . A u n q u e el n ú m ero de in d iv id u o s exam inados es re la tiv a m e n te pequeño, sus re su ltados n o son m enos s ig n if ic a t ivos en re la c ión con los qu e o b tu v ie ra hace c ie rto tie m p o A . S an tia na en los Ind ios de l Ecuado r en genero I.
El es tu d io de l peso y la es ta - tu ro en lo po b lac ión esco la r ae la C a p ita l, que a n unc iam os en nu es tro n ú m ero a n te r io r , fu e p ro segu ido d u ra n te e l oño ú lt im o . En o tra sección de este B o le t'n d a mos o conocer los p rim eros re su l. tados ob ten idos.
Tanto los alumnos de lo cátedra de Antropología Morfológica, como los de Etnología y Arqueología, se dedicon actuo'mente, odemás de los prácticas regulares, o la lectura de temas y ou- tores relacionados con tales materias. Los estudiantes de Antropología Superior rejlizan uno amplia Investigación bibliográfica sobre temas elegidos por el profesor.
EL MUSEO ETNOGRAFICO
El o n tig u o M useo de A rq u e o lo gía de la U n ive rs idad C e n tra l, c u ya designación presente, de ocu e rdo o sus propósitos y co n te n ido , es la de M useo E tnog rá fico , debe su ex is te nc ia o los desvelos de dos investigadores b ien co n o cidos en A m é r ic a : M a x U h le y Ja c in to J ijó n y C oam año. Después de varios oños de progreso con tin u a d o , su fr ió a lgunos reve ses, en tre e llos el incen d io que lo destruyó en 1 9 2 9 y más ta rd e el a le ja m ie n to de sus fundadores.
A l a su m ir la có ted ra de A n tro po logía su o c tu o l D irec to r, e l D r
A n to n io S o n tio no , se propuso su re o rg a n iza c ió n e inc re m en to . Después do c ie rto tie m p o de tra b o jo se ha logrado,, g ra c ia s a la m a g n if ic a com prens ión de l R ector de lo U n ive rs id a d C e n tra l, D r. A l fre d o Pérez G ue rre ro , d o ta r lo de un nuevo loca l pa ra exh ib ic ió n , con fine s de in s tru cc ió n po pu la r. Se le está p roveyendo o l m ism o tie m p o de los im p le m en tos n e cesarios a u n m useo m oderno, c o m o v itr in a s y mesas, fiche ros y p royec to r. Y un resu ltado de este m o v im ie n to p rog res is ta ha sido la a p a ric ió n de H u m a n ita s , nuestro B o le tín E cu a to ria n o de A n tro p o logía-
EN L A A S O C IA C IO N E C U A T O R IA N A DE A N T R O P O LO G IA
B a jo los ausp ic ios de esta e n tid a d y com o re su ltado de su c o rta estadía en Q u ito , e l p ro feso r
de P reh is to ria y A rqu eo log ía de las U n ivers idades de Buenos A ires y Lo P la ta , D r. Fe rnando M á rq u e z M ira n d a , d io una con fe re n c ia e l 3 0 de Enero de este añ o sobre el sugeren te tem a "A rq u e o lo g ía de l N oroeste A rg e n t in o " , la cu a l fue ilu s tra d a con proyecciones. El a c to tu v o tu g a r en el sa lón de actos de lo F a cu lta d de F iloso fía y Le tra s y fu e p res id ido po r e l D econo de la m ism a , D r. Lu is V e rd e - soto Solgado, y e l P residente de la A soc ia c ió n , D r. A n to n io San- t ia n a , q u ie n se e n ca rgó de p re se n ta r a l ilu s tre v is ita n te .
El D r. M á rq u e z M ira n d a se re f ir ió a las inves tig ac ion es que
d u ra n te un s ig lo han hecho c inco generaciones de a rqueó logos a r ge n tinos en la m e nc iono da área. C om o los resu ltados de las m is mas son de co n o c im ie n to pú b lico , hue lga un re la to d e ta lla d o de l t e m a de su in te rve n c ió n .
In v ito d o po r la Casa de !a C u ltu ra E cua to riana , e l D r. M á rq u e z M ira n d a d io o tra con fe re n c ia el -1 de Febrero b a jo el t í tu lo "S iena v is ta po r un a rq u e ó lo g o ", a la cu a l as is tió un ilu s tra d o p ú b lico . El d is tin g u id o v is ita n te fu e m u y fe lic ita d o . El D r. M á rq u e z M ira n da había as is tid o a lgu nos días e n tes, com o de legado de las ya m e n c ionadas U n ivers idades, a la IV R eun ión de C onsu lta de H is to r ia , re a liza d a en C uenca (Ecuador» b a jo los ausp ic ios de l In s t itu to P anam ericano de G eo gra fía e H is to ria .
IN A U G U R A C IO N DE L A S A LA DE E X H IB IC IO N DEL MUSEO E TN O G R A FIC O DE L A U N IV E R
S ID A D C E N T R A L
El d ía 11 de J u lio de l a ñ o en curso tu v o lu g o r la in a u g u ra c ió n de la Sola de E xh ib ic ió n de l M u seo E tn o g rá fico de la U n ive rs id a d C e n tra l. El a c to fu e hon rad o con la p resencia de l señor R ecto r y V ic e rre c to r de la U n ive rs id a d , de los Deconos de a lg u n a s F a c u lta des u n ive rs ita r ia s y de se lecto p ú b lico . D io com ienzo e l D r. A n to n io S an tia na con la le c tu ra del d iscurso que con pequeñas m o d ificac ion es pub licam o s o c o n tin u a c ión , y de c la ró in a u g u ra d a la S a-
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la el D r. A lfre d o Pérez G uerre ro, R ecto r de lo U n ive rs idad , con un conceptuoso d iscurso.
Se p royec ta ron o co n tin u a c ió n co lecc iones de slides sobre e tn o g ra fía de tr ib u s aborígenes ecu ato r ia n a s , y el a c to f in a liz ó con la v is ita a l M useo.
Fundamento teórico
A si com o las C ienc ias del H o m bre ha n to m a d o tres direcciones, la A n tro p o lo g ía M o rfo ló g ic o que estud io a l ho m bre com o ob je to fís ico ; la A rq u e o lo g ía y la E tno g ra fía cuyo o b je tiv o es su p a t r im o n io c u ltu ra l, sea en el posado o en e l presente, e l M useo E tno g rá f ic o com prende tres sectores donde se cus to d ian sus co lecc io nes. Su o rg a n iza c ió n no se a t ie ne, por to n to , o una f in a lid a d m e ram e n te o rd e n a tiva , s ino a lo ley que d e fin e la n o tu ra le z a y re lac iones de estas c iencias.
C ons iderado el hom bre como c re ado r de c u ltu ra s nos es dado, g ra d a s a la recons trucc ión de los m ism as — ob je to y m é todo de la A n tro p o lo g ía C u ltu ro l— , buscar y con fre cuen c ia ob te n e r los to rm os y creaciones de la v ida en su t r i p le aspecto, m a te r ia l, soc ia l y as im ism o, seg u ir lo evo lu c ión de ta les creaciones desde los u te n s ilios e ins trum en tos , los vestidos y lo casa de h a b ita c ió n , hasta sus concepciones esté ticas, leyendas, m ito s e in tu ic io n e s de l U niverso. S egu ir los progresos que la v ida im pone a l hom bre y su cu ltu ra , es pues e l m é todo de esta c ie n
cia g rac ias a l concepto de es tra t if ic a c ió n de las capas cu ltu ra le s y de yux ta pos ic ión de las e tn ias en e l espacio.
O rie n ta r esto reconstrucc ión hac ia e l pasado le jan o , es el o b je to espec ifico de la A rqu eo log ía y la P reh is to ria ; en ta n to la E tn o g ra fía investiga , com o Im b e llo - n i lo ha d ich o con a c ie rto , " la s c u ltu ra s de los pueblos que v iven a c tu a lm e n te en la p e rife ria del m undo c iv il iz a d o " .
Ta les son los fun dam en to s te ó ricos que han dado im pu lso o lo c reac ión y de sarro llo de l M useo E tnog rá fico , llam a do an tes M useo A rqueo lóg ico . Su f in a lid a d se c o n c re ta en estos tres aspectos: h a cer la búsqueda de los e lem entos cu ltu ra le s con m iras a la reconstru cc ión de l pasado de los pueblos que m ora ron en el área que constituye e l Ecuador a c tu a l. Esta búsqueda se ex tiende a los cu ltu ras m a rg ina les de i presente. E llo se cum p le m e d ian te lo investig a c ió n c ie n tífic a . Labor docente o b je tiva y p rá c tica es su segunda f in a lid a d . La te rcera la in s tru cc ió n de l p ú b lico qu e v is ita sus salas buscando fo rm arse una idea de las fo rm as de v id a de los pueblos, sus costum bres, in d u s trias , invenciones de to d o género, arm as y adornos, l itu rg ia y creación a rtís tica . Y esta enseñanza d ir ig id a o l pueb lo cobro en la a c tu a lid a d ta l im p o rta n c ia , que gobiernos e in s titu c io nes de E uropa y A m érica le ded ican ricos p re supuestos anuos, destinados a d e sa rro lla r lo o rg a n iza c ió n de sus
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museos y el In c re m e n to de sus co
lecciones.
Organización y colecciones
A un q u e po r n a tu ra le z a es u n iversa l, e l e lem en to e cu a to r ia n o es po r ah ora su m á x im o y casi e x c lu s ivo p a tr im o n io . C onsto de dos secto res: el de los ob je tos de e x h ib ic ió n , seleccionados y dispuestos pa ra ilu s tra r o l v is ita n te ; y el de los m a te ria le s de depós ito , ú tile s a lo docencia y la inves tig ac ión c ie n tíf ic a . Los ú ltim o s son con m ucho los más num erosos.
Tres g randes co lecc iones lo in te g ra n : la os teo lóg ica , que se com pone de m ás de un cen tena r de cráneos de aborígenes p reco lom b inos y m odernos, de fo rm ados y norm ales. La e tn o g rá fic o , que consto do unas cu a n ta s p iezas co m o redes pa ra pescar, in s tru m e n tos m usica les, a rm as y ob je tos ce rem on ia les recogidos en tre c ie rtas e tn ías com o los J íba ros y Q u ijos, C o lo rados y C ayopas.
Pero la más num eroso de to das es la a rq u e o ló g ica . C om puesta d e a lgunos m illa re s de ob je tos, es toda una gam a que va desde las m o num e n ta le s " s i l la s " de p ie -- d ro de M a n a b í, hasta las d im inu tas p u n ta s de f le ch a y raspadores de o b s id iana y o tros p e de rna les, posando p o r todas las g ra daciones en o rden de a n tig ü e d a d y todos los p e rfe cc io n a m ie n to s en sen tido es té tico y u t i l i ta r io . J u n to a a lg u n a s p iezas de oro está la co lecc ión de ob je tos de cobre
com puesta po r hachos ce re m o n ia les, topos y ob je tos de a d o rn o c o rpo ra l. El tra b a jo en concha y h u e so está representado po r cuch illo s , p u n ta s y co lla res . Pero e n tre to dos es la co lecc ión de cerám icas la que le da a l M useo su v o lu m en. Estos a b a rcó n todos los p e riodos c u ltu ra le s encontrados hos- ta ahora en el país, desde el a g r i- co lo in ic ia l hasta e l que precede de in m e d ia to a la con q u is ta españo la . En ta les ce rám icas están representados todos los grados y es tilos de decorac ión , desde la in c ip ie n te de líneas y pun tos incisos hasta el com p le jo es tilo p ic tó ric o de T u n ca h u á n . C erám ica rú s tica y u t i l i ta r ia de los com ienzos d e v iene o l f in a l en e jecuciones de acabada m aestría , com o la de l ¡dolo de M a n a b í que ilu s tra la po rtad a de este fo lle to . La f in a lid a d exc lus iva m en te u t i l i ta r ia de las fases in ic ia les , se tra n s fo rm a con el tie m p o en un an h e lo esté t ic o que s in pe rde r de v is ta el o b je tiv o y p rá c tico — que p res id ió la in ven c ión— a cu m u la ta l r i qu eza de su b je tiv ism o que tra n s fo rm a la obra en acabada re a lizac ión esté tica.
A parecen más ta rd e y com o co n s titu ye n d o una c u lm in a c ió n esas p iezas de b a rro f in o cuya s u p e rfic ie p u lid a os te n ta los to nos m ates de l oce ro y el bronce. A ríbo los y vasos con fo rm as a n im a les y hu m ana s ; trípodes y te trápodos de inacabada a p a r ie n c ia ; án fo ra s , p lo tos , copas y co m po teras hechas com o pa ra d a r lu jo y rea lce o un fe s tín h ie rá tic o .
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Y en a la d o esfuerzo f in a l surgen esas re a lizac ione s de lo que p o d ría llam a rse un "a r te po r el a r te " . Este t r iu n fa en la te rra co ta cuya f in a lid a d e xc lus iva m en te esté t ic a se cum p le m e d ia n te la re p resen tac ión de lo v ida . D ios y la d iv in id a d , m ito y l itu rg ia , te rn u ra y pensam ien to , poder y soberan ía ; e l a m o r y el in s tin to en to das las m a n ifes ta c io nes . que el Hom bre conoce: sexo, p reñez, p a rto , la c ta n c ia y m a te rn id a d . Lo a lim e n ta c ió n , el tra b a jo , la g u e rra y las en ferm edades. La decora c ió n co rp o ra l y la d e fo rm ac ión ce fá lic a , los vestidos, costum bres, e l v ic io , todo lo que la v id a tiene y produce se p in ta com o en espe jo m á g ico en esas f ig u r in a s en las cua les to d a v ía v iven el od io y el am or, el d o lo r y el p lace r y la esperanza que s in tie ro n sus a r tífice s .
Advertencia pare el visitante
El estado a c tu a l de o rg a n iz a c ión de las co lecciones con ten idas en esta sala, no p e rm ite un o r d e n a m ie n to c ie n tíf ic o de las m is m as. Esto só lo será posib le p ró x im am ente , cuando d ispongam os de l m o b la je d e fin it iv o
Erebo Historia del Museo
Etnográfico
El M useo E tn o g rá fico debe su ex is te n c ia a l ce lo y a c tiv id a d de u n c ie n tíf ic o , el D r. M a x U h le 1 1 8 5 6 -1 9 4 4 ) . Es sab ido que es
te inves tig ado r ded icó su v ida al estud io de las c u ltu ra s de los aborígenes que ocuparon A m é rica del Sur en los tiem pos an te rio res o su descubrim ien to . Su periodo e cu a to ria no se c a ra c te r izó po r su ded icac ión a la C á ted ra , el t r a b a jo sobre e l te rren o y la p u b licac ión de numerosos estudios m onográ ficos que a c la ra ro n el vago h o rizo n te de nuestra p reh is to ria .
El D r. U h le llegó a l Ecuador en 1919 a in v ita c ió n del Sr. Ja c in to J ijó n y C aam año. T en ía 6 3 años de edad y pe rm aneció en nuestro país hasta 19 33 . Empezó su t r a b a jo a rqueo lóg ico en la reg ión de Lo ja y Cuenca y lo re a lizó en tre 1 9 1 9 -2 2 . Sus más im po rtan tes investigac iones las h izo en T a - m ebam ba y C erro N o rr io . En 1923 y 1 9 24 , encontrándose en Q u ito d io uno serie de con fe renc ias sobre inves tig ac ión a rqueo lóg ica . En 19 2 5 y ba jo la recto ría de l Dr Is id ro A yora , la U n ive rs idad C en- tro l creó ia cá tedra de A rq u e o logía, la cua l le fu e co n fia d a . Ret ib ió adem ás el encargo de fo r m a r un m useo nac io na l de A r queolog ía a d scrito a lo U n iv e rs idad. Podemos cons ide ra r ese año com o el de la fu n d o c ió n de l M u seo E tnog rá fico , cuyo Sala de E xh ib ic ión se inau gu ra en estos m om entos. Este fue e l te rce r m u seo o rg a n iza d o po r él en Sudam é- rica . P aró le la a l tra b a jo de c á ted ra fue su inves tig ac ión en el te rren o y así re a liz ó excavaciones en C um bayó, Esm eraldas, M a n a - bí. C arch i y A langa s í. El 9 de N o v iem bre de 1929 , con m o tivo del
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in c e n d io que de s truyó e l e d if ic io de la U n ive rs id a d C e n tra l, el M u seo A rq u e o ló g ico desaparec ió casi en su to ta lid a d b a jo los escom bros. M a x U h le , con pe rseveran c ia e je m p la r, re in ic ió la fo rm a c ión de un nuevo m useo. H iz o v a rias excursiones a los luga res seña la dos an tes, com o ta m b ié n a C ochasquI, sede de su ú lt im o t r a b a jo en el E cuador. Poco tiem po después regresó a su p a tr ia , A le m a n ia . Es de v o la r im po nde rab le lo que debe el E cuador y en p a rt ic u la r la U n ive rs id a d C e n tra l a ta n Ilus tre sab io . A su inm enso es fue rzo y s o c r if ic io debe el M u seo E tn o g rá fic o su e x is te n c ia , c u ya bose son las co lecc iones que ó l recogía y tra n sp o rta b a person a lm e n te desde d is tin to s lugares de l país.
A su sa lida la cá te d ra de A r queo log ía fu e co n fia d o con sob rado a c ie r to a l Sr. Ja c in to J ijó n y C aam oño que hab ía ven id o destacándose p o r sus tra b a jo s en esto m a te ria . Sus lecciones fu e ro n dados b a jo los ausp ic ios de la F a c u lta d de F iloso fía y Le tras. Su a p o rte a l M useo fu e en tus ias ta y generoso en e l do b la se n tid o In te le c tu a l y m a te r ia l. D esgrac iado- m en ta se a le jó p ro n to de la U n ivers idad y su re tiro fu e d e fin it iv o . Lo que v in o después fu e casi ta n tr is te com o lo o c u rrid o en a q ue llo ac iag a noche de N ov iem bre . Las puertas de l M u seo fu e ro n ce rradas y la cá te d ra de A rq u e o lo g ía o b o iid a . Por sue rte los llaves fu e ro n en tregadas a un p robo fu n c io n a r lo de la U n ive rs id a d , qu ie n
las g u a rd ó d u ra n te años en su casa. Sin em bargo , una vez le fu e ro n requeridas los coleccionas p o ro su tra s la d o y e xh ib ic ió n en una fe r ia . Después tod o quedó am on to n a d o en el p iso cíe una sala lóbrega y fr ía y b a jo un te cho de te la raña s .
Pasado c ie rto tie m p o v in o la reacción. Fue c re ada p o r la F a c u lta d h u m a n ís tica po r exce le n c ia , la de F iloso fía y Le tras, la cá te d ra de E tn o g ra fía , el M useo c o n flo d o o su a c tu a l D ire c to r y re ab ie rto . A rd u o fu e e l tra b a jo po ra re o rg a n iz a r los colecciones y a d q u ir ir los Im p lem en tos m a te ria les necesarios a su ca ta lo g a c ió n c ie n tíf ic a . H asta en tonces el M u seo había s ido exc lu s iva m e n te a r queo lóg ico , es d e c ir estaba destin a d o só lo a los restos de c u ltu ras aborígenes ya e x tin g u id o s . Se le d io la nuevo de s ig nac ió n de E tn o g rá fico , más a m p lia , y que le p e rm ite con tene r a la vez que los tes tim o n io s de las c u ltu ra s p reh is tó ricas , los e lem entos in te g ra n te s de lo c u ltu ra de los a u tóc tonos v ivos en e l d ía de hoy.
Poco o poco, s in em bargo, la buena v o lu n ta d de au to rid a d e s u n iv e rs ita r ia s y fu n c io n a rio s y con e llo su co la b o ra c ió n , lo sacaron de a q u e lla abando nad a s e p u ltu ra. P a u la tin a m e n te fu e co n q u is tan do el M u sco un s it io c o n d ig no a su im p o rta n c ia y s ig n if ic a c ión . Fueron p rim e ro m uebles, p e desta les y es tan te rías ; m ás ta rd e un ayu d a n te estab le en cargodo de su cu id a d o ; después un apoyo pe rm on en te en el presupuesto a l
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In co rp o ra rlo o l In s t itu to de C ie n c ias N a tu ra le s y e n tre g a rlo a su p ro te cc ió n . U ltim a m e n te , esto herm osa sa la , las mesas, v itr in a s , s illa s , a rch ivado res y o tros o b je tos. Queda to d a v ía po r m e n c io n a r un p ro ye c to r pa ra " s lid e s " d e s tinado a a m p lia r las d e m o s tra ciones y, com o cu lm in a c ió n , un ó rgano p ro p io de p u b lic id a d , H U - M A N IT A S , B o le tín E cua to riano de A n tro p o lo g ía , cuya segunda e n tre ga está ya en prensa. Esta re v is ta c irc u la e n tre las in s titu c io n e s c ie n tíf ic a s o fln e s de tod o el m u n do y, a l d e c ir de los tes tim o n io s dec lb ldos, su aco g ida ha sido c o rd ia l. G rac ias a com pras y p r in c ip a lm en te a l s istem a de can jes se ha fo rm a d o en los ú lt im o s años una b ib lio te c a e sp ec ia lizada , que es en tre las In s titu c io n a le s la más com p le ta que ex is te en el país.
T a l es el estado del M useo E tn o g rá fico en estos m om entos. Pero este re la to , esta c o n s ta ta c ión de hechos no sería co m p le ta n i ju s ta si no ag rega ra que el de sa rro llo de que nos hem os ocu pa do no ha b ría s ido pos ib le de no haberse co n ta d o con lo c o m p rens ión y ayuda m a te r ia l d e l sa- ñ o r R ecto r de la U n ive rs id a d C e n tra l, e l D r. A lfre d o Pérez G u e rre ro. Y no se to m e lo ú lt im o com o una fra se de es tilo o de cortesía o b lig a d a , que poco orn igos somos de ta le s fó rm u la s en t ra tá n dose de estos asuntos. Lo que aca bo de d e c ir es se n c illa m en te lo q u e ocu rrió , y m i deber es de c ir lo en a c to de ju s tic ia y recon o c im ie n to . Ig u a l g ra t itu d debe
mos a l señor D ecano de la Fac u lta d de F iloso fía y Le tras, Dr. Lu is V erdesoto Salgado y a l D ire c to r de l In s t itu to de C iencias N a tu ra le s , D r. P lu ta rco N a ra n jo , po r el apoyo que en tod o m o m ento han dado a nuestros a c t iv idades.
L u ga r ap a rto m erece nuestra óp tim a co laboradora y com pañera, la Sra. M a ría A n g é lico C a r- iuc i L a z z a r in i de S antlana , a qu ien se debe no sólo la in ic ia tiv a s ino ta m b ié n la re a lizac ión de esta m a g n ifica ob ra.
A h o ra , y en esta Sala boñada de luz , e l M useo E tn o g rá fico de la U n ive rs idad C e n tra l tie n d e sus m anos ol, p ú b lico y le do su b ie n ven ido.
Q u ito , tu l lo 11 de 1959.
A N T O N IO S A N T IA N A , D irec to r.
A C T IV ID A D E S EN EL P LA N P ILO T O DEL IPGH
Con m o tiv o de la V Reunían P anam ericana de C onsu lta de G eogra fía , y la presencia en Q u ito del A rq u ite c to D on Ign ac ioM a rq u in a , S ecre ta rio G enera l del IPGH, tuvo lu g a r una A sam b lea Genera l de co laboradores de d i cho P lan. Su ob je to era presenta r e! estada a c tu a l de las investiga c io nes y hacer las sugerencias necesarias o l é x ito de sus a c tiv idades . De acuerdo a l In fo rm e ve rba l presentado po r los Invas-
tigadores, el t ra b o jo está ba s tan teo d e la n ta d o ; .sólo en unas pocqr, secciones se h a lla d e te n id o por causas de ca rá c te r técn ico o por escasez de recursos. En A n tro p o logía , to n to c u ltu ra l y ap lica da com o m o rfo ló g ica , los tra b a jo s está n avanzados. Estos verán la luz b a jo los ausp ic ios de l ll-'GH a fines de l presente año y consta rán de dos vo lúm enes b ien ilus trados
EL PRESIDENTE DEL IN S T IT U T O IN D IG E N IS T A IN T E R A M E R IC A - N O , DR. JU A N C O M A S , V IS IT O L A M IS IO N A N D IN A DE LAS N A C IO N E S U N ID A S , EN L A P R O V IN C IA DEL C H IM B O R A Z O
(EC U AD O R C E N T R A L !
Después de re co rre r a lgu nas com un idades ind ígenas, a co m p a ñado po r e l Dr. G arcía O rt iz , P re s iden te del In s t itu to In d igen is ta de l Ecuador, e l D r. Jua n Comas as is tió a una asam blea de m ie m bros de la M is ió n , de experto e x tra n je ro s y persona! n o c io n a l. Se h iz o una a m p lia expos ic ión de los tra b a jo s en que se b o lla e m peñada lo M is ió n A n d in a y de sus p lanes po ra el fu tu ro . El D r. C o mes expresó sus op in iones sobre e l tra b a ja te o lizo d o , h iz o a lgu nos observaciones y fe l ic itó o los m iem bro s de lo m ism a po r su en tus iasm o y a c ie rto . Ins is tió luego en la necesidod de que e l G ob ie rn o proceda a la c re ac ión o f i c ia l de un In s t itu to In d ig e n is ta com o se ha hecho en o tros países de A m é rica , cuya la b o r seria la de c o o rd in a r las d iversas a c t iv i
dades que se están de sa rro lla n d o en el' m ed io ru ra l ecu a to ria n o . P rev iam en te , de v is ita en Q u ito , el D r. Cornos había dodo dos c o n fe renc ias en la Casa de lo C u ltu ra sobre tem as a n trop o lóg ico s y p res id ido una sesión de M esa R edonda pa ro d is c u tir cuestiones ind ig en is ta s .
SE DESCUBRE F O R T A LE Z A IN C A S IC A EN LOS ALREDEDORES
DE Q U IT O
A com ienzos de O ctu b re de 1958 , la prensa lla m ó la a te n c ió n con un a r tíc u lo que se re fe ría a una gran construcción preincaica,
probablemente una fsrtolexo, des
cubierta en San Antonio de Pichincha. El a r t ic u lo hab ía sido re dac ta do po r e l señor Jorge Per - nández.
A pocas m illo s al n o rte de la C a p ita l, en las p ro x im id a d e s de la a ldea de San A n to n io de P ich inch o , el In g en ie ro Sr. José B c- n ite z h iz o e l h a lla z g o de una p i rá m ide de tres pisos, cuya c im a , to ta lm e n te c u b ie rto , le da a l c o n ju n to la a p a rie n c ia de uno c o lino. Lo b reve inspecc ión re a liza d a ha p e rm itid o c o n s ta ta r los y a c im ien tos y m uros de u n e d if ic io que parece una fo r ta le z a m il i ta r , p robab lem e n te p re incás ica . Se ven tod av ía las p ied ras a lin e a d o s fo r m ando pa lm os d is tin to s . La base de la co lin a tien e unos 6 0 0 o 7 0 0 m e tros cuadrados y, ha c ia e l oc c iden te , se levan ta sobre una g ran hondonada que le hace casi in a c cesib le . Su pos ic ión es es tra tég ica
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y desde e lla se do m in a el va lle . Sobre la su p e rfic ie de la co lina y en sus a lrededores están espm c ldos fra g m e n to s de ce rám ica p re co lo m b in o . Lo que fa lta ch o ra es p roceder a l es tud io c ie n tíf ic o d . ‘ la m ism a.
Casi en la m ism a fech a se a n u n c ia b a que grandes fortalezas
preincásicas fueron descubiertos
en Cangahua (E cua dor s e p te n tr io n a l) . Se tra to de doce pucarós d is tr ib u id o s en s itios a lto s po ra d o m in a r los va lles vecinos. C onstru id o s en una época p ro b a b le m e n te a n te r io r a la de los Incas, dadas las ca ra c te rís tica s que o fre cen, parece que su f in a lid a d fue la de con tene r las Invasiones, Los doce pucarós se d is tr ib u y e n a lo la rg o de la m eseta de P a m b a m a r- ca, desde el a n e jo ind ígena de Paccho - P ucará hasta el cerro M u y u -U rc o , fro n te a la p a rroq u ia de El Q u in che . T a les "p u c a r ito s " están s ituados en luga res a lto s y es tra tég icos para d o m in a r los v a lles cercanos. C oda un o de e llos tie n e la fo rm a de una inm ensa e lipse y está in te g ra d o po r una serie de cadenas cuya su p e rfic ie se reduce a m ed ida que gana a l tu ra . Los andenes han s ido asegu rados con gruesos m uros de p ied ra y co m u n ica n en tre sí m e d ia n te g raderías de p ied ra . Una co lín a s irve a cada uno de ellos com o base de sus te n tac ió n . Por o tra pa rte , cada andén está fo r m ado po r 5 o 7 c ircu ios concéntrico s . En una de las co n s tru cc io nes h o y ed ifica c ione s , p ro b a b le m e n te v iv ie n d a s para los d e fe n
sores. A lre d e d o r de cade pucará hoy una fosa lo su fic ien 'em en te ancha pa ra que p u e d r c ru za rla un hom bre . El más grande de ta les "p u c a ró s " está s ltu ,do en la "L o m a de Q u ito " , y tien e lo fo r ma de un ocho. La a ltu ra a que se e n cuen tran es de 4 .2 3 0 m etros sobre el n ive l del m a r y se d is ponen ordenadam ente desde la m eseta de P am bam arca hasta la pob lac ión de El Q uinche.
Estos pucarós son conocíaos con los nom bres de "P u c a rá -C o iz a " , "U ljá n -P u c a rá " , "P u c a rá -C a m p a - n a " , "P u c a rá -C u c u p u ro " , "P u c a rá -M o n te c e rr ín " , "P u c a rá -A d e ro - to r io " . H a y adem ás tres en Pam - bcimarcn y q tros tan tos en M o - yobam ba.
AN TR O P O LO G O N O R T E A M E R IC A N O E S T U D IA R A LAS T R IB U S
COLORADOS Y C A Y A P A S
En N ov iem bre se h iz o presente en Q u ito el a n trop ó logo estadoun idense, Sr. M ilto n A ltsch u le r, qu ien ha ven ido a re a liz a r investigac iones c ie n tífica s paro p repa ra r su tesis do c to ra l en la U n ivers idad de M inn eso ta . Su es tu d io lo re a liza rá en tre los tr ib u s de los Colorados y Cayapas. Estim o el Sr. A lts c h u le r que la in fo rm a c ió n de,.que a c tu a lm e n te se d ispone sobre ta les e tn ias es a n ticu a d a y escasa. T ra b a ja rá b a jo los auspic ios de la Fundación D ohe rty de N ueva Y o rk y del D ep a rta m e n to de S alud P úb lica de los Estados Unidos. Su propósito es radicarse en e l Ecuador d u ra n -
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te dos años, ded icand o u n añ o a la inve s tig a c ió n sobre ios C o lo rados y e l o tro a la de los C oyapas.
C IC LO IN T E R N A C IO N A L DE CURSOS DE V E R A N O DE L A
U N IV E R S ID A D C E N T R A L
V a n ya a lgunos años en que la F a cu ltad de F iloso fía , Le tras y C ienc ias de la E ducación de la U n ive rs id a d C e n tra l v iene desarro lla n d o sus C ursos de V era no , e n tre el 1 1 de A g o s to y e l 11 de S eptiem bre , te m porada de va ca ciones en todos los e s ta b le c im ie n tos ed uca tivos de la S ierra E cuato r ia n a . Pero e l lapso co rrespo nd ie n te a 19 58 tu v o e x tra o rd in a r ia im p o rta n c ia p o r la co la b o ra c ió n de ca te d rá tico s e x tran je ros de reconocido p re s tig io y la p re sencia de de legac iones de los p a íses h ispa noa m erica nos que c o n c u rr ie ro n en c a lid a d de a lum nos.
La fu n c ió n in te rn o c io n a l del C ic lo de V e ra n o de 1 9 5 8 y la e fic a c ia de su o rg a n iz a c ió n y rend im ie n to , se deb ió o ta o tin a d o y d in á m ic a d ire cc ió n de l ao c to r Lu is V erdeso to S algado, D ecano de lo m e n tad a F a cu lta d a^e re co g ió las in ic ia t iv a i de las U n iv e rs idades am erican as aue v is itó en una g ira de fru c t í fe ra labo r de d ir ig e n te u n iv e rs ita r io . Y to m b ié n
a la co la b o ra c ió n n a c io n a l de c a te d rá tico s de ■<: enseñanzo super io r y secundaba , y de in te le c tu a le s esp ec ia lizado s en d ive iso s d is c ip lin a s c ie n tífic o s , o r t is tx o s y l ite ra r ia s .
A estos cursos as is tie ron com o a lum nos, va rios con tin g e n te s de profesores, de es tud ian tes u n ive rs ita rios , de a lum nos de enseñanza secundarla y de personas de o tros n ive les c u ,tu ró la s que m a n tie n e n el a fá n de superarse e s p ir itu a lm e n te p o r e l co n o c im ie n to de las c ienc ias y a rtes ú tiles .
E ntre las p r in c ip a le s a s ig n a tu ras que se d ic ta ra n , f ig u ra n las s igu ie n tes : A r te y L ite ra tu ra , F ilo sofía y E ducación, S ocio log ía e H is to r ia , B io log ía y Psico logía , A n tro p o lo g ía y F o lk lo re , G eografía y G eología, C as te lla no y Q u ichua , Id io m as E x tran je ros . La A n tro po log ía , nuestra m a te r ia , fue d ic ta d a po r el D r. A n to n io S an- t ia n a , A n tro p ó lo g o de la U n iv e rs idad y p o r su esposa, señora M a ría A n g é lic a C a rlu c i de S an tia na , L icen c iada de la U n ive rs idad de Buenos A ire s en A n tro p o lo g ía e H is to r io . E llos e lig ie ro n la " A n tro p o lo g ía P reh ispán ica y a c tu a l de l E cu a d o r", cons igu iendo e l más v iv o in te rés de sus d isc ípu los n a c iona les y e x tra n je ro s . T a m b ié n fu e de especia l aco g ida , p r in c ip a lm e n te po r los es tu d ian tes e x tra n je ro s , lo m a te r ia de F o lk lo re E cua to riano que la d ic tó e l P ro f. D arío G uevara . Y en este cam pa cabe a n o ta r la e fic a z c o n tr ib u c ió n de la señ orita A n g é lic a M i ra n d a , de A rg e n tin a , L icen c iada en F o lk lo re , po rque — a la vez que re c ib ió las clases de Fo lk lo re E cua to riano— , d ic tó una serie de con fe re nc ias sobre F o lk lo re A r -
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g e n tin o y d io o lgu nos clases de danzas gauchas.
Los C ursos en cuestión a lte r n a ron sus ciases regu la res con co n fe re nc ias sobre diversos tem as re la c iona dos con los p rog ram os en d e sa rro llo y, as im ism o, se re a liza ron a lgu nas excursiones c ie n t ífica s y recrea tivas que h ic ie ro n am ena y ú t i l la tem porada .
A !a c lausu ra , en a c to so lem ne s im ila r a l de su in a u g u ra c ió n , los a lu m n o s — p rin c ip a lm e n te ios e x tra n je ro s— , h ic ie ro n voz p ú b lica y a g rade c ida po r ei g rande y provechoso re n d im ie n to a lca n za d o en el C ic lo in te rn a c io n a l de V e rano de 1 9 5 8 .
Q U IN T A R E U N IO N P A N A M E R IC A N A DE C 0 N 5 U L T A SOBRE
G E O G R AFIA
El In s t itu to P anam ericano de G eogra fía e H is to r ia , o rgan ism o e sp e c ia lizado de la O rg a n iza c ió n de Estados A m erica nos , había re sue lto que la Q u in ta R eun ión de C onsu lta sobre G eogra fía se lie ve a cabo en !a C a p ita l de la R epú b lica de i E cuador, det 7 a l 1 5 de Enero de! presente año de 1 9 5 9 . Lo C om is ión E cua to riana m c o rg a d a de p repa ra rla , b a jo la P res idencia de l Genera l D on A n ge l Isaac C h ir ib o g a , c u m p lió su co m e tid o en la m e jo r fo rm a que le fu e posib le, y así la m en tado R eun ión c ie n tíf ic a se re a lizó en el lapso ind ica do con 172 d e le gados que representaban a ve in te países am ericanos y a las más im p o rta n te s in s titu c io n e s cu ltu ra le s
det Ecuador. La p res id ió e l In g e n ie ro Don Fablo de M acedo Soores de l B ras il y estuvo as is tida po r e l A rq u ite c to D on Ig n a c io M a rq u ln a , S ecre ta rio G enera l delI.P .G .H .
El tra b a jo se desenvolv ió en C o m ité s y Equipos de los s igu ien tes órdenes: de Recursos N a tu ra le s , de C lim a to lo g ía , de Uso y C la s ifica c ió n de las T ie rras , de G eog ra fía de las A m érlca s , de Enseñanza y Tex tos de G eogra fía , de T ra b a jo de M apas de P oblación y do T ra b a jo de G eogra fía U rb a na. Estos suborganism os e s tu d ia ron los d iversos tra b a jo s especializados que presentaron los d e legados nac iona les y ex tran je ros , fo rm u la ro n y d iscu tie ron ponen cias y, en a m b ien te de ca m a ra de ría in te rn a c io n a l, pus ie ron de re lieve su saber y su f irm e deseo de sa tis fa ce r en la m e jo r fo rm a el encargo y c o n fia n za del In s t itu to P anam ericano de G eogra fía e H is to ria .
Entre las im p o rta n te s reso luc io nes aprobadas en las sesiones p ie - na rias, son de ano ta rse los s ig u ie n tes :
1. — R ecom endar a l IPGH que pida a los Estados M iem bros, institu c io n e s in te rnac io na les y d i r i gentes de la Educación, e l apoyo necesario pa ra la re a liza c ió n de los tra b a jo s de d o s if ic a c ió n de los Suelos y su C a rto g ra fía .
2 . — R ecom endar a l IPGH que se d ir i ja a los gob ie rnos de los Países M ie m b ro s para que den e! más a m p lio y genera l apoyo, ta n to c ie n tíf ic o com o económ ico , con
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el o b je to de o lc o n z o r lo e la b o ra c ió n de una ob ra g e o g rá fica con lo f in a lid a d específica de c o n tr ib u ir a lo ob ra de G eogra fía de las A m érica s .
3 . — R ecom endar a los M ie m bros N ac ion a les q u e p rop ic ien un in te rc a m b io de te x tos de enseñ a n za , m apas y tra b a jo s de Ín do le g e o g rá fica .
4 . — R ecom endar o los Estados M ie m b ro s qu e , en lo posib le , se reponga o se recons truya , con su p ro p ia o r to g ra fío , ,1a to p o n im ia que ha sido pe rd id a o re e m p la zada con nom bres m odernos.
5 . — R ecom endar a los G o b ie rnos de los países m iem bros la in c lus ión de la a s ig n a tu ra de "R e cursos N a tu ra le s y su C onservac ió n " en los p rog ra m as de enseñanza p r im a ria , secu nda ria y u n iv e rs ita ria .
6 . — R ecom endar a los G ob ie rnos M ie m b ro s que se proceda a c re a r parques na c iona les que sa lvag ua rd en los tesoros de la fa u na , la f lo ra y los m o num e ntos n a tu ra le s de v a lo r h is tó rico .
7 . — S o lic ita r a l G ob ie rno del E cuador que la ca ld e ra vo lcán ica de l P u lu la g u a sea de c la ra d a P arque N a c io n a l.
8 . — E stob lecer becas pa ra e l p e rfe cc io n a m ie n to de los g e ó g ra fos am erican os , ta n p ro n to com o la C om is ió n de G eo g ra fía cue n te con fondos esp ec ia lm e n te d e s tinados a este f in .
P arte n o ta b le de esta Q u in ta R eun ión P ana m erica na fu e la Expos ic ión G eo g rá fica en uno de los pabe llones de la C iuda d U n iv e rs i
ta r ia . La R epúb lica del E cuador e x h ib ió : T ra b a jo s de l In s t itu to G eo g rá fico M il i ta r , C a rtas G enerales del E cuador, P lanos de C iu dades, C a rtas de A m é r ic a , H o jas T o p o g rá fica s , L ib ros de G eografía , C olecc iones de Recursos M i nera les, M a pas Geológicos, M u e s tra s Foresta les, M a q u e ta s P ro v in c ia les, etc . V o rio s países co n cu rren tes ta m b ié n exp us ie ro n su m a te r ia l g e og rá fico .
El In s t itu to E cua to riano de A n
tro p o lo g ía y G eogra fía es tuvo p re sente en esta Exposic ión , con una Sección de E tn o g ra fía qu e m e re c ió buenos estím u los de los v is ita n te s e x tran je ros .
Las sesiones de esta Q u in ta R eun ión a lte rn a ro n con e xcu rs io nes c ie n tíf ic a s a l P u lu la g u a , a la L ínea E qu ino cc ia l, a l P ane c illo , a l V a lle de los C h illo s , etc . Y a p ro vech ando de estas breves g ira s de cam arad e ría in te rn a c io n a l, los d e legadas v is ita ro n — a p a rte de los m onum entos a rtís tico s de Q u ito — el M useo E qu ino cc ia l de l señor L u c ia n o A n d ra d e M a rín , la B ib lio te c a -M u s e o de la C om poñ ío de Jesús en C o to co ila o y o tro s lu gares más que pus ie ron a l a lc a n ce de los v is ita n te s , los tesoros c ie n tífico s , a rtís tico s y n a tu ra le s conque se en riquece nuestro país en la m ita d de l m undo.
C U A R T A R E U N IO N DE C O N S U LT A SOBRE H IS T O R IA
A c o n tin u a c ió n de la Q u in ta R eun ión de C onsu lta sobre G eog ra fía llevad a a cabo en la c iu -
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d a d de Q u ito , se re a lizó la C ua rta R eun ión de C onsu lta sobre H is to ria en la c iu d a d de C uenca. Esta nueva jo rn a d a c ie n tíf ic a se c u m p lió de l 18 a l 2 5 de Enero de 1 9 5 9 , in ic ián dose so lem nem ente b a jo la P res idencia de l d o c to r S ilv io Z a v a la , P res idente ta m b ié n de la C om is ión P anom ericana de H is to ria . En la sesión in a u g u ra l p ro n u n c ia ro n d iscursos a lus ivos el G enera l Don A n g e l Isaac C h ir i- boga , e l A lc a ld e de la C iuda d de C uenca y e l M in is tro de Educac ió n . El p rim e ro dec la ró H uéspedes Ilus tres a los delegados y el segundo o fre c ió el t r ib u to de g ra t i tu d de l G ob ie rno N a c io n a l a los o rgan iza do res de l ce rtam e n , esto es, a la M u n ic ip a lid o d de C uenco, a la U n ive rs idad y a l N úc leo de la Casa de la C u ltu ra .
Esta cu a rta R eun ión P anam erica n a de C onsu lta sobre H is to ria , en tra b a jo con s tan te y o rga n iza d o , llegó a a p ro b a r 7 9 resoluc iones, e n tre las cua les a n o ta mos las s igu ie n tes :
1. — Que los gob ie rnos M ie m bros es tab lezcan en sus museos naciona les, salas de e xh ib ic ió n de ca rá c te r a m erican o , en las que se presente, en fo rm a in te g ra l, la evo lu c ión h is tó rica de los pueb los de l C o n tin en te .
2 . — Que el C om ité de A n tro pología' se encargue de la o rg a n iza c ió n de exposic iones c irc u la n tes de m a te r ia l a rqueo lóg ico y e tn o g rá fic o , re p resen ta tivas a las d iversas c u ltu ra s am ericanas.
3 . — Que los gob ie rnos M ie m bros, o rg a n ice n exposic iones c ir
cu lan tes de sus respectivos r iqu e zas a rqueo lóg icas y e tn o g -ó 'ic cs que estim en conven ien te e xh ib ir en los dem ás países am ericanos.
4 . — Que los gobiernos de Bo- liv ia , C o lom b io , Ecuador, P anam á, Perú y V ene zue la , designen de legaciones de h is to riado res que •se encarguen de p re p a ra r en co labo rac ión , estudios tend ien tes o destacar ana logías en sus p rocesos h istó ricos.
5 . — Que los gob ie rnos de los m ism os países am ericanos d e s ig nen de legaciones que se e n ca rguen de rev isa r los tex tos de h is to r ia pa ra la enseñanza p r im a ria y secundaria , y p re pa ra r nuevos inanua les sobre la m a te ria , a p ro vechando la co lab ora c ión de té c n icos expertos de la UNESCO.
6 . — Que el C om ité de A rc h iveros ausp ic ie la ce leb rac ión de una reun ión de a rch ive ros in te r nacionales, para a yu d a r a p ro m over el con oc im ien to y s o lid a ridad pro fes iona les en tre aque llos y poro a yu d a r ta m b ié n a resolver sus más im p o rta n te s problem as.
7 . — -Que se recom iende g e s tio nes para la o b tenc ión de becas de la OEA para la esp ec ia lizac ión de M useógra fos.
8 . — Que se cree un D e p a rta m en to de A n tro p o lo g ía para que se ed iten obros sobre esta m a te r ia .
9 . — Que se e r ija un m o n u m en to a H ua in acáp ac en la c iu dad de C uenca, reconociendo así su obra de c reador de c u ltu ra en el C o n tin e n te A m e rica n o .
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10 .— Q ue se s o lic ite a l G o b ie rno de! E cuador p a tro c in a r la Segu n d a R eun ión de l C om ité de H is to r ia e Ideas de A m é r ic a , en el mes de A g o s to p ró x im o , com o ho m ena je a l 15 0 A n iv e rs a rio del P rim e r G rito L ib e r ta r io de l 10 de A gosto .
En esto ocas ión , adem ás, se re a liz ó la E xposic ión de H is to rio P anam ericana con más de 2 .0 0 0 vo lúm enes que fu e ro n enviados de cu a n to se ha p u b lica d o sobre lo m a te r ia en el C o n tin e n te A m e r icano. Estas obras pasaron después a la b ib lio te c a "J u a n B au tis ta V á s q u e z " de la U n ive rs idad de C uenca.
De las va r ia s excursiones que e fe c tu a ro n los Delegados, una les llevó a l M useo A rq u e o ló g ico del señor M a x K o n a n z , el m ism o que — en o p in ió n de los v is ita n te s e x tra n je ro s — es d ig n o de exh ib irse com o m ode lo en cu a lq u ie ra de las ca p ita le s de A m é r ic a .
Darío Guevara
SO L IV IA
U N A M IS IO N A R Q U E O LO G IC A A L E M A N A EN B O L IV IA
Desde e l mes de Febrero hasta S eptiem bre de 1 9 5 8 , ha t ra b a ja do e n la A rq u e o lo g ía de la R epúb lic a de B o liv ia una im p o rta n te M is ió n A rq u e o ló g ic o a le m a n o , o r g a n iza d a In ic la lm e n te po r e l D r. H e rm a n n T r im b o rn , de la U n iv e rs idad de B onn ; h a s ido d ir ig id a
d u ra n te e l presente año p o r el D r. H ans D isse lh o ff, D ire c to r del M useo A rq u e o ló g ico de B erlín e in ic ia d a po r el D r. H e in z W a lte r y e l P ro f. A lfre d o A sm a n n , de l M useo E tn o g rá fico de H am b urg o . P ersona lm ente co lab o ra m os en lo m ism o, com o p rin c ip a le s conocedores de los ya c im ie n to s n o - t ia - hu anaco tas de B o liv ia .
Los tra b a jo s p r in c ip a le s se re a liz a ro n en cu a tro yac im ie n to s , c o rrespond ien tes o las lo ca lid ades de V isca ch a n i, a l sur de l D e p a rta m e n to de La Paz, C liz a y M iz que, en el D e p a rta m e n to de C o - cha bam b o, le lo , en e l D e p a rta m e n to de C huqu isaca . El m a te r ia l o b te n id o ha s ido a b u n d a n te y com prenden restos de c u ltu ra s m u y diversas.
En e l p r im e r y a c im ie n to , V is cach an i, lu g a r de no m in a d o H u a n - c o ra n i, se e n con tró u n tú m u lo re dondeado y bo jo , fo rm a d o po r los restos de uno po b la c ió n m u y a n t ig u o , consis ten tes en c im ie n to s de p ied ra , restos de adobes y c a pas de cen izo . El m a te r ia l c o n s is tió en fra g m e n to s de un o c e rá m ica se n c illa , u t i l i ta r ia , s in p in tu ra , pun tos de f le ch a de p ied ra y m u y a b unda n te s ins trum en tos de hueso.
El segundo y a c im ie n to , C liz a , o cu a re n ta k iló m e tro s de C ocha - bom bo, con s is ten te en un o serie de tú m u los , pe rtenec ía a l pa recer a u n n iv e l m ás d e sa rro lla d o de la m ism a c u ltu ra ; la ce rá m ica fu e m ucho m ás a b u n d a n te , s iem pre sin p in tu ra , e n ta n to qu e fo l to - ron los p u n tos de f le ch o . Este y o -
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c im ie n to y e l p recedente seríanan te rio re s a T ia h u o n cco .
En M iz c le e le la se e n co n tra ron ya n ive les de ce rám ica p in ta d a . En M iz c le , los n ive les más a n tig u o s eran a n te rio res a la ex pansión de la c iv iliz a c ió n de T ia - h u anaco ; luego se presentaba ésta con g ra n ab undanc ia de restos. En le la fa lta b a la conqu ista de T lo h u a n a co , que no se p re senta en e l D e pa rtam en to de C h u - qu is ica , en ta n to que los pueblos
on te rio re s con cerám ico p in ta d o seguían su p ro p io desarro llo hasta la poste rio r conqu is ta de los Incas.
En el año p róx im o se c o n tin u a rán las excavaciones b a jo la D irección del D r. H . T rim b o rn .
Dick Edgar Ibarra Grasso
D ire c to r de l M useo A rqu eo lóg ico , U n ive rs idad M a y o r de San Simón,
C ochabam ba, B o liv ia .
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RESEÑAS BÍBLIOGRAFICAS
ALTSCHULER, M»itt>n: On the environmentol limitations of Mayan Cultural develcpment; Southwestern Journal of Anthropology, Vol. X IV University of Minnesota, Minnesota, U.S.A. 1958, pp. 189-98.
Es un trabajo destinado a analizar el origen y desarrollo de la civilización Moya Clásica a través de las opiniones de Betty Meggers. Esta investigadora ha sostenido, en principio, que un área cuyo suelo es de limitado potencial agrícola, no puede dar nacimiento ni soportar el desarrollo de una alta civilización. Un ejemplo de esto lo constituye la cultura Marajó de la boca del Amazonas la cual, según Meggers, aparece súbitamente y bien desarrollada; luego declina hasta alcanzar el nivel propio de las selvas tropicales. De aquí saca la conclusión de que cuando una alta cultura se asienta en un área de bajo potencial agrícola, la arqueología revelará su aparición en estado de gran desarrollo, no se difunde a los territorios vecinos y más tcrde declina gradualmente. Aplicando esta teoría al área maya, Meggers sostiene que siendo ésta de bajo potencia! agrícola, la cultura Maya Clásica debe haber tenido origen fuera del área ocupada por ella.
Altschuler, sin pretender rebatir los planteamientos de Meggers relativos a cultura y ambiente, se propone probar con la evidencia arqueológica que la cultura maya no vino de afuera, fue cutóctona y tuvo un Período Formati- vo, vale decir de desarrollo in situ, de apogeo y, por fin, un declinar algo súbito. En efecto, el examen de las culturas que la precedieron, las llamadas "Formativas", revela un comercio bien desarrollado, los comienzos de la agricultura y un arte ya avanzado. Esto parece indicar
que no se produjo un hiatus entre el Clásico Maya y elPeríodo Formativo, sino, al contrario, una continuidad bien definida. Los trabajos de Kidder demuestran que durante el Formativo Maya hubo actividad, y una base económica capaz de soportar actividades de rendimiento no utilitario. Y esto se reveló no sólo por la arqueología; Brainerd cree que el calendario era ya conocido durante el Período Formativo.
Pero, ¿cuál fue la causa del rápido declinar de la Cultura May a? Meggers sostiene que ésta fue el colapso de los medios básicos de subsistencia, no desarrollados hasta el punto de poder sostener una sociedad en cuyo seno se había producido la división del trabajo. Para el autor la causa habría sido no sólo la limitación de los medios de subsistencia, sino "imperativos sociológicos" que hicieron muy difícil, casi imposible, mantener una sociedad dividida en clases y cuya organización política no era tal que permitiera a los grupas dominantes, el clero y la nobleza, ejercer el control de la producción agrícola y de las actividades de los campesinos. Es probable que a tal situación dominante, se hayan unido otros factores secundarios, las enfermedades por ejemplo.
Antonio Sontiana-
COMAS, Juan: Manual de Antropología Física; Fondo de Cultura Económica, México 1957, 698 Págs. y numerosas ilustraciones.
El conocido antropólogo e investigador, Dr. Juan Comas, ha publicado un Manual de Antropología Física. Como él lo afirma, y lo creemos también nosotros, satisface una necesidad sentida por profesores y alumnos, especialmente en América Latina. Desde este punto de vista, el libro del Dr. Comas llega con oportunidad.
A través de doce capítulos, varios apéndices y una bibliografía adecuada al texto, Comas nos da lo que podríamos decir una visión panorámica de la Antropología Morfológica. Esta abarca tanto su contenido teórico y especulativo como su aspecto práctico y técnico. Y de que ello es un acierto estamos seguros porque en estas disciplinas el peligro está en su deshumanización, por exceso de técnica, o sea el olvido del hombre al considerarlo ex
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elusivamente mediante el empleo de cifras. Escrito en lengua española, en estilo claro y sencillo, puede servir para la consulta aún de los alumnos menos preparados, y este con ventajas sobre el clásico Lehrbruch der Anthropologie de Rudolf Martin o del Anthropometry de Hrdlicka.
En la primera parte, "Generalidades", se ocupa de los antecedentes históricos del conocimiento del hombre como ser físico. Empieza por el relato de Periplo de Han- non, hecho 1.000 años antes de Cristo y termina en nuestros días. Esto, que visto con ligereza parecería un derroche de erudición, cumple una finalidad pedagógica muy honda: presentar al alumno no sólo la ciencia acabada y perfecta de nuestro tiempo, sino también el proceso histérico-genético de su formación, sus vicisitudes y progreso. Y ello no sólo completa la formación intelectual del futuro antropólogo, sino que le da confianza en sus propias fuerzas.
Que Comas se propone poner esta disciplina al alcance del alumno, se ve a lo largo de su obra. Para completar su formación intelectual invade ciertas áreas próximas. Apartándose de los clásicos — Martin, Hrdlicka, Frizzi— que habían exaltado los aspectos métricos y técnicos de esta ciencia, sin negar su utilidad, le da un contenido humano y universal, práctico y especulativo al mismo tiempo. De este modo, con sentido pedagógico, aumenta el interés del estudiante para una ciencia que ya no se reduce a la aridez de la técnica y las cifras, sino que ofrece un contenido interesante y variado, útil y práctico y en cierto modo ameno.
No se puede negar, en efecto, la utilidad de los conocimientos sobre Paleoantropología, Herencia, Biotipolo- gía y Taxonomía humana. Para el antropólogo físico resultan especialmente interesantes los capítulos sobre Crecimiento y Estatura, Somatología, Craneología y Osteología. Para el profesor es valioso el capítulo sobre U tilización y Enseñanza de la Antropología Física, con los apéndices y bibliografía que le siguen. Innecesario añadir que en todos ellos se une a la erudición del autor la experiencia del pedagogo.
El Manual, lo repetimos, tiene el mérito de la oportunidad. Esto en cuanto a su contenido considerado en conjunto. Pero cuando analizamos detenidamente las partes que lo integran, los detalles que lo informan, surge
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nuestro desacuerdo con el autor. No nos proponemos revisar el texto desde este punto de visto. Sólo daremos dos o tres ejemplos. Desde ya cabe preguntar si no será un exceso ese largo capítulo sobre Nociones del Método Estadístico (pp. 45-74). Si el Manual está destinado a estudiantes medios de Antropología Física, salta a la vista ese exceso de erudición y exigencia. A menos que en México los programas docentes sean tales que obliguen al estudiante a saber toda esa elaboración matemática. Esto no significa negar la importancia de las matemáticas en Antropología y en Biología, sino solamente señalar un exceso poco pedagógico. Si el Manual está destinado a los que aprenden, hay entonces que seleccionar los datos, tamizarlos, antes de hacer su entrega. Todo dato cuyo valor sea sólo histórico y sin aplicación a la ciencia actual, lleva la confusión a quien, como el alumno, no tiene todavía la formación científica que le permite seleccionar lo que realmente necesita saber buscándolo entre lo innecesario, Más tarde, ya en madurez científica, podrá por su iniciativa y cuenta hacer toda la consulta bibliográfica que desee. Ilustraré con un ejemplo esta observación. En el Cuadro 76, pág. 297, aparecen unas cifras elaboradas por R. Ottenberg y L. H. Snyder en 1925 y 26 respectivamente.
Que tales cifras, generalizadcrbs, son enteramente irreales y por tanto innecesarias, huelga añadir. Son también artificiales los grupos humanos a los cuales se aplican, como el llamado Pacifico-americano, cuya fórmula sera- lógica sería 0, 77.7%; A, 20.2%; B, 2.1 %; AB, 0.0%. Este está formado por los Filipinos y los Amerindios. Pregunto, ¿en qué se fundan los autores para unir en un mismo grupo a Filipinos e indios americanos? ¿Y en qué para aplicarles la misma fórmula sérica? Creemos que el autor, en vez de ofrecer esto en su Manual, ha debido presentar el cuadro que resume la distribución de los grupos sanguíneos, al menos del sistema ABO, en todos los grupos aborígenes de América, biológicos y étnicos, en los cuales se ha hecho su estudio. Esto es tanto más necesario cuanto la fórmula sérica varía — fuera de toda la influencia del mestizaje— desde el predominio de A, como en ciertas tribus de indios norteamericanos, hasta el predominio de 0 y, al parecer, también de B, como en los Carayá de Golden.
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Le hago, por fin, un reclamo personal. Es obvio que sin el cuadro antedicho, toda mención de los Yómana y de las vicisitudes en cuanto a su determinación sanguínea (pp. 296-97), está como traída de los cabellos. Y esto sube de punto cuando el autor se ocupa, en un manual que cumple finalidades didácticas y esenciales, de las h ipotéticas razones por las cuales Rham se equivocó. Pero aquí hay algo más que añadir. El Dr. Comas conoce bien, como antiguo editor del B.B.A.A., que el trabajo sobre los grupos sanguíneos de los Fueguinos en general y de los Yá- mana, en particular, no fue realizado por Alejandro Lipschütz, sino por Antonio Santiana. Esto quedó demostrado en forma concluyente y definitiva gracias a las cifras con las cuales A. Santiana corrigió, enmendó y amplió los datos de Lipschütz, los cuales le fueron proporcionados parcialmente por mí. Y esta corrección de A. Santiana fue leída y autorizada para su publicación por el editor en dos tomos distintos del B.B.A.A. (Vol. IX, pp. 170-72, 1947 y Vol. X, pp. 117-20, 1948). La corrección fue tan clara, precisa y convincente, que el mismo Lipschütz creyó necesario incluir el nombre del verdadero autor del trabajo en publicaciones posteriores a la de! American Journal of Physical Anthropology, como en la revista inglesa de Biología, The Nature. Habría sido mejor que el autor se abstuviera de tratar en su Manual didáctico, temas tan pequeños y controvertidos.
Antonio Santiana
ESTRADA, Emilio: Los Culturas Pre-Clásicas, Formativas o Arcaicas del Ecuador; Publicación del Museo Víctor Emilio Estrada, Guayaquil 1958, 1 13 págs.
Es este el quinto en la serie de trabajos publicados por el señor Emilio Estrada, dedicados al estudio minucioso de las antiguas culturas que florecieron en un sector de la Costa Ecuatoriana. Como el título indica, el autor ha abordado un asunto de capital y decisiva importancia para la arqueología del Ecuador.
Las primeras páginas de la obra bosquejan, en forma comprimida y global, el cuadro cultural del Ecuador dentro de una cronología casi definitiva que se remonta hasta dos milenios a.C. El primer período, Formativo Tem-
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prono,, estaría presente en la reducida zona costanera de Valdivia y Machalilla, siendo la primera la más antigua.El Formativo Tardío, tentativamente fechado entre 1.000- I a.C., estarla representado en su mayor parte por la cultura Chorrera, cuya cerámica ampliamente esparcida es considerada por el autor como netamente ecuatoriana, que evoluciona más adelante hacia otras culturas más modernas del país. Una etapa posterior denominada Desarrollo Regional, pertenece según el autor al comienzo de la Era Cristiana y comprendería una serie de culturas regionales ubicadas en la Costa y que se extendieron bastamente hacia el S. E. Por fin, el período, de Integración, tuvo su desarrollo en la primera parte del milenio actual, hasta la Conquista. Se establece también aquí una relación entre los períodos y distintos elementos de la Costa y los de la Sierra, en base a las clasificaciones ya existentes para esta zona del país. Por otra parte, se hace una descripción délas características de la cerámica y objetos pétreos que pertenecen a cada período y se asocian en cada caso con otros elementos nuevos, como tipos de enterratorio, habitación, metalurgia, tejido, así como los límites alcanzados en su dispersión.
A continuación pasa a estudiar detenidamente las culturas de Valdivia, Machalilla y Chorrera, dedicando un capítulo para cada una. Allí se exponen con minuciosidad los elementos que integran cada cultura, ilustrándolas profusamente.
Un capítulo está destinado a explicar el contenido de un cuadro que presenta la frecuencia de los tipos de cerámica encontrados en cada yacimiento, según la profundidad de los cortes, que han sido efectuados cada veinte centímetros. A su vez cada yacimiento está asociado a la cultura a que pertenece.
El último capítulo es también de gran importancia pa ra la arqueología en general, ya que el autor establece una relación detallada con el exterior, de las Culturas Forma-tivas del Ecuador, valiéndose pata ello de la selección de las características estilísticas y tecnológicas que parecen más significativos.
Al finalizar el trabajo se agregan las Conclusiones a que el autor llega, estableciendo la relación y posible parentesco con culturas de regiones muy lejanas, tal como el Delta del Amazonas, Centro América, Colombia y Perú.
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£1 señor Estrada concluye que quedan pocas dudas de que las culturas de Valdivia, Machaliila y Chorrera tuvieron un origen mesoamericano, aunque admite la posibilidad de movimientos contrarios menos importantes.
Este nuevo trabajo de Estrada viene a llenar parte del vacío que aqueja a la arqueología del Ecuador y tiene, a la par de sus recientes publicaciones, el inestimable valor de ser el resultado de un trabajo metódico y ordenado, condición indispensable para hacer buena arqueología. En definitiva, el libro que comentamos ha de ser uno de aquellos de necesaria consulta para quienes se interesen por la arqueología del Ecuador.
María Angélica Carluci Lazxarini de Santiana.
I BARRA GRASSO, Dick Edga r: La verdadera historia de los Incas; Separata da Revista do Livro, N® 8, Río de Janeiro, Brasil 1957, pp. 85-94.
El autor, bien conocido por sus investigaciones arqueológicas, se propone en esta condensada síntesis darnos a conocer el contenido de su libro, de igual título, próximo a aparecer.
Ya ésta promete una ¡dea nueva, una verdad no conocida antes, y sugiere el carácter polémico de su contenido. No es "un libro más" acerca del Imperio Incaico y su historia, ni una simple crítica de los aspectos anecdóticos.
Ibarra Grasso empieza señalando las diferencias existentes entre el relato semi-novelesco de Garcilaso y la descripción austera y real de cronistas como Cieza de León, Betanzos, Sarmiento de Gamboa y otros. Añade, sin embargo, que aunque la diferencia es aparentemente grande no es tanta en realidad, porque en lo fundamental el relato de uno y otros se conforma dentro de un molde, el preestablecido, que es siempre el mismo para todos. La Historia de Garcilaso, redactada en estilo galano, sería una "idealización" del relato más sencillo y realista de los otros cronistas.
La otra diferencia consiste en el "envejecimiento" de los hechos históricos, que se sitúan en épocas anteriores a aquellas en las que en realidad ocurrieron, lo cual fue realizado por Garcilaso y continuado por los otros cronis-
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fas. Pero, al fin, todos coinciden en el relato mismo, en los hechos que lo integran, en su orgánico conjunto. V aquí está la "tram pa", en la que casi todos cayeron. "A lgo había que ocultar y se lo ocultó muy bien. Tal fue la sorpresa que preparó para el futuro el soberano Inca".
Y lo que el Inca quiso ocultar, según Ibarra Gresso, fue su origen reciente y advenedizo. Guamán Poma y Montesinos coinciden en aceptar la existencia de un imperio preincaico, y cada uno de ellos ofrece, en apoyo de su tesis, una larga lista de soberanos. Los Incas no habrían continuado a éstos; sólo los reemplazaron. Se ha sostenido también que entre aquel Viejo Imperio y el advenimiento de los Incas se produjo un "hiatus", aceptado por la mayoría de los autores, caracterizado por la existencia de pequeñas tribus guerreras que se combatían constantemente, las "behetrías" de los antiguos cronistas.
Pasa más tarde a ocuparse de los autores modernos, como Posnansky, Max Uhle e Imbelloni, para señalar que ninguno de ellos ha dado una interpretación que se aleje de la tradicional en lo que se refiere al conocimiento del Incario verdadero: es decir todos han caído en la "tram pa" tan hábilmente preparada para la posteridad. Pero, ¿en qué consiste la trampa?. En la creación artificial del hiatus entre la Era Incaica y las civilizaciones que la precedieron, cuya antigüedad, demostrada por la investigación arqueológica, se remonta a unos dos milenios. El origen real del Incario no serían, por tanto, las behetrías, es decir la nada, sino uno de los tantos reinos Collas, Chinchas, Chimús, que precedieren al Imperio Incásico. La "historia" que el Inca Pachacutec ordenó hacer, eliminó todo ese a,ntiguo pasado e hizo empezar la historia del Incario sólo un par de siglos antes y como producto de una "nada" que en realidad nunca existió.
Los Incas no pueden haberse iniciado de un modo muy distinto a los Aztecas, los Chibchas y otros. Empezaron como un pueblo en pregresivo desarrollo, situado junto a otros que formaban reinos más antiguos y fuertes, al sur el poderoso Reino Colla y al noroeste el Chincha. El primero, al decir de Cieza de León y Sarmiento de Gamboa, fue conquistado por el Inca Pachacutec. Según Garcilaso no habría existido el Reino Colla, sino sólo behetrías, lo cual no confirma la arqueología. La verdad es que los primeros Incas fueron vasallos de los reyes Collas, y los da-
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tos arqueológicos confirman esta interpretación, "ya que la cerámica incaica aparece como derivada de una fase decadente del período Tiohuanacóta". En el aspecto lingüístico también se confirma, puesto que, "el quichua era la lengua propia de los Chinchas", en tanto el quichua cuzqueño ofrece una influencia fonética aymara.
El autor concluye que la historia de los Incas escrita por los cronistas, a pesar de sus diferencias "ha sido fabricada al parecer en tiempos del Inca Pachacutec, con el objeto de borrar de ella una serie de hechos anteriores que molestaban su pretensión de ser Hijos de! So!, y lo primero que se suprimió fue que les Incas, hasta el advenimien to de Pachacutec, no fueron señores soberanos sino dependientes, vasallos, de otros reyes vecinos más poderosos y antiguos". Y la aceptación de esa historia incaica falsificada, nos llevó a la ilusión de su aislamiento de pueblos anteriores y contemporáneos. En esto consiste la trampa preparada por Pachacutec para la posteridad: "fabricar una historia en donde sólo ellos figuraban, comenzando incluso con ellos la historia del mundo".
Aquí termina el trabajo de Ibarra Grosso, resumen de un libro que esperamos con ¿I mayor interés. Suge- rente y polémico, lleno ds interrogantes, cumple la gran finalidad de la ciencia histórica: desbrozar la maraña, ordenar los hechos, aportar ideas nuevas, promover nuevas investigaciones.
Antonio Sontiana.
KRAUSE, Fritz: Alcova de parto entre os Bakain; Traduce.de Sérgio Buarque de Hollando; Rev. do Museu Paulista, Nueva Serie, Vol. VI, San Pablo 1952, pp. 461 -63.
Se refiere el autor a los esbozos presentados por W ilhelm v. d. Steinen en sus cuadernos de viaje al Xingú en 1887-88. En la página 19 del esbozo se represento una alcoba de parto, lo que constituye un descubrimiento raro, pues esas alcobas no son de uso frecuente entre ciertos pueblos primitivos. Además, hace alusión al relato de Karl von den Steinen publicado en Berlín en 1894 bajo el título "Unter den Naturvölkern Zentral-Brasiliens", sobre
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la práctica de la eauvade en una aldea bakalrí, describiendo las prescripciones que ambos, padre y madre, observan durante el período pre y post-natal.
Von den Steinen describe una genuino alcoba de parto en Maigerí; las hamacas que desprendían el fuerte olor a piqui para fricciones, el estado de debilidad en que encontró a dos recién nacidos y el tratamiento que les administraban sus padres, soplándoles continuamente, casi sin interrupción, aún durante la noche.
El régimen alimenticio a que se sometían ¡os padres consistía en comer sólo pogu ralo o pelota de yuca mezclada con agua, pues cualquier otra comida repercutiría en la salud del recién nacido, práctica que se abandonaba junto con las demás restricciones el día en que le caía al niño el cordón umbilical. Para cortar el cordón umbilical se usaba una caña de cambaiúva, tratándose de un varón y de tacuara si fuera una niña.
Dos dibujos ¡lustran este artículo y, aunque no coinciden plenamente con la descripción de la referida alcoba de parto, da una clara e inequívoca idea del papel que representa y su colocación en relación a los demás compartimientos que forman la habitación grande colectiva.
Becirix Quirino de Concho.
KRAUSE, Fritx: Tatuagem de unha de dedo de uní indio Yamarikumá; Traducción de Sergio Buaroue de Hoiianda; Rev. do Museu Pauiista, Nueva Serie, Vol. VI, San Pablo 1952, pp. 465-67.
Describe el caso considerado único hasta hoy de tatuaje de uñas, relatado por el Dr. Hermann Meyer cuando realizó una expedición por el Xlngú, en el año 1896. El Dr. Meyer observó el tatuaje que presentaba el Indio Kav/ulú de ¡os Yamarikumá-Nabuquá, quien se dirigía a ¡as aldeas Kamalurá, en las proximidades del río Culuene, para obtener urucú.
Por Kuwulú tuvo el Dr. Meyer las primeras noticias precisas de los Nabupuá situados entre el río Culisehu y el Culuene, y de los Yarumá al este del río Culuene. Meyer no hace mención del tatuaje de Kuwulú en los apuntes de su diario de viaje; sin embargo se encuentra entre
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los mismos una hoja de papel en que había dibujado los dedos de Kuwulú mientras éste mostraba, dibujando con una flecha en la arena, la geografía de la región Culisehu- Culuene, donde estaban las aldeas de los Nabuquá y tribus vecinas. Se supone que el tatuaje fue ejecutado con un objeto cortante, un fragmento de concha quizá, pues no disponían en esta región de instrumentos de hierro adecuados para hacer la operación. Las líneas que presentaba hab'an sido teñidas de negro y el dibuio se parec;a a los llamados por Kar! von den Steinen “ dibujos Merexú, aunque estos eran desconocidos por los Nabuquá. La misma clase de dibuio se encuentra en las máscaras de las tribus indígenas de la región del Culisehu-Culuene; el autor desconoce el significado. Describe detalladamente el dibujo que presenta Kuwulú en sus uñas, siendo de notar que la primera y quinta uñas de ambas manos no estaban tatuadas.
Concluye Krause que es posible que ese tatuaje haya sido ejecutado ocasionalmente por Kuwulú, por no haberlo observado en otro indio de su tribu o de tribus vecinas, y que éste se deba a un simple pasatiempo de su portador, teniendo en cuenta que debido al crecimiento de las uñas, el dibujo tendría que desaparecer con el tiempo. Además piensa el autor que el tatuaje probablemente fue ejecutado no por el propio Kuwulú, sino por otra persona.
Beatrix Quitina de Concha.
LARREA, Carlos Manuel: El m:ster;o de las llamadas Sillas de piedra de Manabí; Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 1958, 51 págs.
Las páginas introductorias hacen una presentación del Ecuador, como campo propicio para el estudio de la Arqueología, señalando las múltiples condiciones y circunstancias que hicieron de este país un lugar de confluencia de distintos movimientos migratorios por una parte, y de atracción por otra, lo que encuentra su evidencia en la variedad de culturas que encierra su territorio.
El autor ha dedicado el presente trabajo a las “ sillas" de piedra de Manabí, que deben su nombre a los primeros en describirlas, quienes les atribuyeron una finalidad aten-
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diendo, en parte, a la semejanza que tales objetas guardan con nuestras sillas actuales. Bien conocida es la dificultad conque tropieza el arqueólogo al diagnosticar la naturaleza y finalidades de ciertos objetos, emitiéndose a veces numerosas y contradictorias opiniones en torno al mismo.
“ Su forma es la de una silla o sillón de asiento más o menos cóncavo, sin espaldar y con brazos, sobre una base maciza esculpida, con la representación de un animal o de una figura humana encorvada, que soporta sobre las espaldas el asiento en forma de “ U". Otras descripciones muy detalladas hechas por varios autores dan idea bien clara de las características de este interesante objeto encontrado en la provincia costeña de Manabí.
Numerosos interrogantes plantea el señor Larrea acerca de las “ sillas": qué eran, para qué se utilizaron, qué significado tienen las variadas figuras del soporte, a qué cultura y época pertenecieron. Remontándose a épocas remotas, destaca el hecho de que cronistas y conquistadores que describieron minuciosamente estas tierras y todo lo que en ellas vieron y hallaron, no hacen mención alguna de estos monolitos, y, aún en la época de la Colonia se guarda silencio al respecto, indicio de que no formaban parte de! mobiliario de los indios de ese tiempo. Por consiguiente, talas objetos habrían estado por entonces enterrados, ocultos o cubiertos por la abundante vegetación del lugar.
Recién a mediados del siglo pasado se las menciona por primera vez, habiéndose hecho el primer hallazgo en el Cerro de Hojas, Manabí, en número aproximado de treinta, formando círculo, lo que indujo a pensar que el conjunto estaba destinado a alojar un congreso de hombres, ¡dea que más tarde hicieron suya varios estudiosos. Numerosas descripciones y comentarios se hecieron más adelante, mas todas estaban de acuerdo en aceptar que se trataba de sillas, llegando incluso a reconocer las comodidades de las mismas. Algunos pensaron que eran sillas, pero no de uso ordinario sino destinadas a sacerdotes o magnates. Tiempo después la ¡dea de que estos objetos Uticos se hubieran encontrado en círculo, exclusivamente, fue descartada por el hecho de habérselas hallado aisladas y sin orden alguno.
El autor de este estudio demuestra que no se trata de sillas asientos, haciendo una comparación con las descripciones que otros autores han hecho de otros objetos que sí cumplían esa finalidad, pero que en definitiva, a pesar
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cb los semejanzas, eran d:stintos a los objetos en cuestión. Por otra .parte, destaca las desventajas que como verdaderas sillas tenían, por su gran peso que hacía difícil moverlas, estreches a veces y de altura variable que oscila entre un máx'mun y un mínimun que descarta la posibilidad de que fueran asientos. También desecha el autor la posibilidad de que se tratara de tronos de jefes o caciques, ya que en un área relativamente reducida, donde no podía haber tantos caciques, se han hallado numerosos ejemplares.
Expuestos todos los argumentos que invalidan las interpretaciones de que se trataba de asientos o sillas, pasa nuestro autor a exponer su propia teoría al respecto, que los considera como objetos ceremoniales, relacionados con las creencias religiosas y sus ritos. Esta idea ya habia empezado a insinuarse en alguno de los autores aue con anterioridad habían atribuido al objeto valor enteramente utilitario. El interesante y significativo hallazgo posterior de algunos ba;o- rrelieves en piedra, que representan ura diosa con la cabeza circundada por una especie de pórtico constituido por las "sillas" en cuestión, sobre las que descansan uno o dos discos, que podrían ser el sol y la luna, afianza más la ¡dea de que se tratara de objetos ceremoniales. En la opinión del autor, estas estelas serían "imágenes de la procreación de la tierra fecunda y de los astros que presiden la vida de la naturaleza" a los que se rendía culto. Otra prueba de ser objetos relacionados con el culto la constituye el hecho de haberse hallado unas miniaturas semejantes en piedra y barro cocido. Los mismos lugares donde se han encontrado los singulares monolitos, en los cerros y recintos cerrados — posibles adoratorios domésticos los últimos— inducen rotundamente al Sr. Larrea a afirmar que se trata de altares o aras para sacrificios.
El haber llegado a la conclusión de que se tratara de objetos ceremoniales, es ya un gran paso en el esclarecimiento de la finalidad para que fueron esculpidas estas piedras; sin embargo queda todavía en pie el interrogante de la función que desempeñaban en el culto.
En cuanto a qué cultura pertenecían y cuál fue el pueblo que esculpió estas piedras, extenso sería hacer una enumeración de todas las culturas que sucesivamente aparecieron en Manabí, sin saber ciertamente a cuál de ellas a tribuirlas. Por de pronto puede anticiparse que ninguna de las culturas que florecieron en el litoral pacífico de América del
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Sur, ha alcanzado tal adelanto en el trabajo de la piedra como las de Manabí, y que estos objetos deben fecharse en unG época anterior a la llegada de los españoles. Mas sólo estudios sistemáticos y metódicos pueden permitir la ubicación de estos monolitos en un período seguro.
Es este un trabajo valioso, como sabe hacerlo el Sr. Larrea, destinado a poner al día y aclarar con erudición, sumando sus juicios y opiniones propias, el misterio de uno de los objetos más destacados y enigmáticos de la arqueología ecuatoriana.
M ar ío Angélica Cariuci Lazxarini de Santiana.
LHULLSER DOS SANTOS, Yolanda: A testa do Kuarüp entre os indios do Alto Xingú, Revista de Antropología de la Universidad de San Pablo, vol IV, N° 2, San Pablo, Brasil 1956, pp. 1 11-16.
Las tribus que habitan las cabeceras del Xingú, con excepción de los Trumaí, celebran la fiesta religiosa del kuarüp para provocar la liberación del espíritu de un muerto, masculino o femenino, que como habitante aún de la tierra tendrá la oportunidad de encaminarse definitivamente para el más allá, tal vez su Paraíso. No hay época cierta para la realización de esta fiesta, que puede ser celebrada en intervalos indeterminados de meses o años.
Kuarüp, nombre que se refiere a la madera empleada — jatobá o ipe— es un pedazo de madera pintada con colores peculiares a cada tribu y a'e acuerdo con el sexo de la persona que se va a homenajear. De modo que el kuarüp es fefnenino o masculino y, según la pintura o decoración se sabrá la jerarquía del muerto. Los troncos son pintados por individuos del sexo masculino, en ausencia de las mujeres. A éstas cabe preparar los alimentos que serán ofrecidos, como el piqui y el beiju, y a hacer el lloro con los niños, que se conservan a cierta distancia.
La fiesta, como casi toda fiesta indígena, es precedida por dantas de los guerreros y por una especie de entrenamiento deportivo para una futura demostración de agilidad y de fuerza entre los distintos concursantes, pues han de asistir caciques y guerreros de todas las tribus de la vecindad.
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En el día de la fiesta, después que el kuarüp haya sido pintado de acuerdo con la categoría y sexo, se realiza la sacada del luto. Un indio lava a otro, que se han pintado de negro, simbolizando en esta forma que está libre del luto; en caso que el difunto sea masculino, la viuda acompaña ese rituai con lamentaciones. Algunos indios, incluyendo las mujeres y los niños hacen escarificaciones en su cuerpo introduciendo en las lastimaduras un poco de pimienta. El dolor que experimentan es símbolo del dolor que sintieron por la pérdida del muerto. Con estos preparativos pa san la tarde, y al atardecer comienzan a llegar los componentes de otras tribus como los Auetí, los Aurá, los Kama- yurá, los Guaikurú. A cada una está reservada una posición en el patio. También acuden los caciques con sus maracas, quienes danzan y saltan. Todos llevan sus adornos y armas, no solamente arco y flecha, sino también armas más modernas, pues algunos ya poseen carabinas. Las mujeres y los niños de las tribus visitantes quedan en los campamentos, a cerca de un kilómetro de distancia. Después de la danza cada uno regresa para su grupo, quedando junto al kuarüp solamente la tribu a la cual pertenece el muerto. Al día siguiente, después de la aparición del sol, comienza la ruka-ruko, iucha deportiva en la que toman parte todos los guerreros de las tribus que están representadas allí. Luchan por deporte, sin rencores y hasta los niños luchan. Antes que el sol se torne muy fuerte termina la fiesta y cada uno se prepara para regresar comiendo previamente más beijú, pescado y piqui; los flautistas de las tribus visitantes hacen una ofrenda musical al ofertante.
La fiesta del kuarüp es una conmemoración fúnebre y en ella toman parte octiva solamente los hombres, ya que las mujeres sólo se encargan de los alimentos y de hacer el lloro ritual con algunos niños. Esta ceremonia está basada en el mito originario de la playa del Morená, en la confluencia de los ríos Ronuro, Batovi y Culuene, que forman el Xingú. Todas las tribus xinguanas realizan la fiesta del kuarüp a excepción de los Turna i.
Terminada la fiesta, la fuerza de los muertos se traslada a los vivos y los kuarüp irán a dormir su sueño eterno en el fondo de los ríos.
Describe por fin la autora la leyenda que ha dado origen a la celebración, y que se interpreta como la creación
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de la tribu de los Yaulapiti, a la que perteneció el héroe creador de este mito.
Ton interesante trabajo ha sido documentado por los estudios de varios investigadores, conocedores de las costumbres y tradiciones de los indígenas de esa región.
Beatrix Quirino de Concha
MEGGERS, Beíty: Ambiente y cultura de la cuenca del Amazonas; revisión de la teoría del determinismo ambiental. Estudios sobre ecología humana. Unión Panamericana, Washington, 1958, pp. 71-89.
Bajo el título: "Ambiente y Cultura en la Cuenca del Amazonas; Revisión de la Teoría del Determinismo Ambienta l", Betty J. Meggers realiza un interesante estudio de la cuenca del río más caudaloso del mundo, siendo el objetivo principal de su artículo establecer la relación y la influencia del ambiente sobre el desarrollo de la cultura.
Considera la autora que en la zona estudiada la intensidad, cantidad y variabilidad de las precipitaciones ejercen innegable influencia en la vegetación; la abundante precipitación anual excede a la evaporación, produciendo el lavado de las sustancias solubles nutritivas de las plantas; la intensidad de las lluvias, en su mayoría chaparrones, tiene un gran poder erosivo. Por otra parte, la variabilidad de la precipitación anual, es tan marcada, que hace imposible predecir los recursos de agua para las cosechas. La temperatura y otros factores que influyen positivamente en la fertilización del suelo son estudiados minuciosamente, citándose entre otras, la influencia de las bacterias, que desempeñan un papel primordial en el proceso de mineraliza- ción y los hongos que, según se cree, son los principales productores de humus. En consecuencia la autora concluye lógicamente que "los factores climáticos que favorecen la acción de los hongos, favorecen al mismo tiempo la fertilidad del suelo y su conservación".
No ocurre lo mismo en las regiones tropicales que se caracterizan por un índice elevado de temperatura y humedad, y donde la actividad de las bacterias sobrepasa a la de los hongos, determinando la menor acumulación de hu-
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mus en el suelo, grave problema debido al importante papelque éste desempeña en la fertilidad de los suelos.
Se hace más adelante el estudio de las condiciones de los suelos con clima standard y la influencia favorable de la vegetación natural en el bosque tropical lluvioso, tendiente a contrarrestar el empobrecimiento del suelo, ya que el follaje tupido protege el suelo de la lluvia y el sol, lo que permite la acumulación de humus; también esta vegetación atenúa la fuerza conque el agua de las lluvias golpea la superficie del suelo, con lo cual el índice de erosión disminuye notablemente.
Pasa luego Betty Meggers a exponer ejemplos concretos que sustentan su teoría del determinismo ambiental en las culturas. Así por ejemplo la agricultura de roza que se practica en la cuenca del Amazonas, tiene ciertas características a las que debe adaptarse la cultura, resultando entre otras lo muy importante consecuencia de que el poblado no puede permanecer en el mismo sitio por mucho tiempo, lo que impida la especialización; el progreso de la tecnología es lento y bajo y, por consiguiente, se estanca el desarrollo de la cultura. Por otra parte, el determinismo am- bientcrl hace sentir sus efectos incluso sobre aspectos muy apartados de la esfera de la subsistencia y, como su influencia no es homogénea, resulta difícil dominar todas las áreas puesto que algunas modificaciones favorables en ciertos lugares pueden dar resultados negativos en otros. Resulta pues necesario conocer la cualidad determinante del ambiente para comprender el éxito o fracaso en el desarrollo cultural de esos lugares.
Como culminación de su trabajo pasa la autora a destacar los problemas más difíciles que soportan las regiones que estudia, y la urgencia de dar posibles soluciones a los mismos como un medio para lograr su adelanto cultural. Estima la autora que el reconocimiento de la existencia de los determinantes ambientales permite enfocar en forma más realista el problema de mejorar su potencial cultural en el futuro.
La exposición de Betty Meggers puede ser aceptada, en primer lugar por las conclusiones u que llega con respecto al determinismo ambiental y su repercusión en la cultura, y luego porque da a conocer en forma acabada una importantísima región de la cuenca del Amazonas, analizando.
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sus características en lo que se refiere a clima y vegetaciónasí como sus posibilidades económicas en el futuro.
Héctor Cazar RomeroA y u d a n te d s l M useo E tn o g rá fico
PEÑAHERRERA de Piedcd y COSTALES S., Alfredo:YUNGANAN. Historia Cultural y Social del cam
pesinado ds la Provincia de Bolívar; LLACTA, Vols V y VI. Quito, 1958. 236 págs. y algunas ilustraciones.
Conocemos a esta joven pareja de autores como laboriosos investigadores de la Antropología Social Ecuatoriana y, sin menoscabar a la diligente señora, más a Alfredo Costales Samaniego, hombre versado en su materia y de ágil estilo para hacer vivo el fruto de sus investigaciones, siempre con sentido humano y un sincero afán de ponernos a la vista los problemas que surgen en la historia, la geografía y la desiquilibrada convivencia nacional.
Piedad Peñaherrera de Costales y Alfredo Costales Sa- maniego, esta vez nos ofrecen YUNGANAN, concretado en el estud'O minucioso y prolijo de la Provincia de Bolívar en los aspectos histórico, geográfico, arqueológico, filológico, cultural, social folklórico y cuanto más cabe en una monografía de ese género. Y franccmente la obra es bien lograda, por más que ellos mismos reconocen modestamente ciertos vacíos que no pudieron llenarlos en espera de "un sendero de luz".
Esta obra abarca una serie de capítulos y al fin de cada uno de ellos, las conclusiones son ds lógica claridad y de explicación de las reclidades que tenemos que resolver en aras del bienestar nacional. Entre esos capítulos anotaremos el correspondiente al marco geográfico de la Provincia y el de Los Chimbos, éste a modo de redescubrimiento de una nación importante de la prehistoria ecuatoriana, a la luz de la Arqueología, de las crónicas antiguas, de toponimias y antroponimias, de los asientos de los cacicatos con vivos tradiciones todavía. Sigue luego el estudio de las yatas prehistóricas, de ias ruinas de templos y adoratorios, de la dependencia del hombre y la tierra, de los elementos cut-
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turóles y las formas de vida, de las comunidades indígenas, de la explotación de las salineras de la parroquia Salinas, de las costumbres, etc. Ai último de este complejo y valioso estudio hay un conjunto folklórico de extraordinaria información, referente al muy celebrado "Carnaval de Guaran- da". En este campo antes se ponderaba una breve y elegante descripción hecha por Eudófilo Alvarez, refiriéndose sólo a la ciudad capital de la provincia; ahora el cuadro abarca toda la jurisdicción provincial, con una antología de cantares de ocasión que da el relieve claro de un pueblo amante de la poesía y de la música.
YUNGANAN es pues una Monografía de Antropología Social que pone de manifiesto la capacidad de investigación de sus autores, el conocimiento de los antecedentes previos a la observación, la penetración en los caracteres del hombre y la tierra, una denuncia de las condiciones infrahumanas en que viven ciertos grupos del pueblo y una puerta abierta a quienes deben conocer y remediar los complejos problemas nacionales.
Darío Guevara
PEREZ T „ Aquiies R.: Contribución al conocimiento de la Prehistoria de los pueblos del Norte del territorio de la República del Ecuador. LLACTA, Vols. V y VI. Quito, 1958, 160 págs.
El Prof. Aquiies R. Pérez, antes consagrado al estudio de la Geografía de! País, en los últimos tiempos se ha dedicado a prolijas investigaciones prehistóricas e históricas, dándonos así estudios valiosos que ponen de relieve su metódica elaboración y el aprovechamiento acertado de las fuentes de información. Esta vez nos ofrece su "Contribución al conocimiento de la Prehistoria de los pueblos del Norte del territorio de la República del Ecuador", basándose en la Arqueología, la Lingüística, las noticias de los Cronistas de Indias, los estudios sobre la materia de autores que le precedieron y sus propias investigaciones personales.
En uso de tan buenos recursos estudia comparativamente la cerámica, la metalurgia, la orfebrería, el dibujo, la vida hogareña, las costumbres, el idioma y las tradiciones de
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varias poblaciones del sur de Colombia y del norte del Ecuador, llegando a admitir que los pueblos de la provincia del Carchi y, posiblemente, de Imbabura también, fueron habitados por gentes procedentes de Colombia, principalmente por los Páez, Pasto y Quimbaya, y por los Cayapa y Colorados que actualmente viven en el Ecuador.
Más de cien páginas dedica a la lingüística de topónimos y antropónimos correspondientes a los dos grupos de pueblos de los países mencionados. Recoge un total de 1.404 fichas de ambos órdenes, y del análisis etimológico de ellas concluye para los pueblos colombianos "la preponderancia del Colorado, en primer lugar para los antropónimos; del Cayapa en segundo lugar; del Koayker en tercer lugar". Anota luego que "el mayor porcentaje de topónimos del Koayker sobre el de antropónimos de la misma lengua manifiesta la antigüedad de posesión de la tierra por parte de esta etnia y las inmigraciones posteriores de Colorados y Cayapas". Proporciones semejantes encuentra en los pueblos correspondientes del norte ecuatoriano, al tener de estas cifras:
Coayker Colorado Cayapa Poox Quechua A rau cano
Gua ro
ui
C olom b io 17 % 1 4 ,7 % 1 3 ,2 % 7 % 1 ,5 % 0 ,0 % 0 ,0 %E cuador 1 7 ,7 % 1 6 ,7 % 1 0 ,0 % 9 % 1 ,7 % 0 ,5 % 0 ,5 %
De las "conclusiones inducidas por el aporte de la Lingüística", es muy interesante la relativa a la sangre y la psicología de los pueblos del Norte del Ecuador y del Sur de Colombia. Expresa: "Los actuales habitantes del Departamento de Nariño y de la provincia del Carchi, tienen en su sangre el común denominador de sus antepasados: Koay- keres, Colorados, Cayapas y Paéces, particularmente de los tres primeros. Y la calidad de esa sangre ha determinado en dichos pueblos su psicología particular: combativos, dueños de su independencia, unidos para su progreso y bienestar".
Darío Guevara.
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RUBIO ORBE, Gonzalo: Promociones Indígenas en América;Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, Ecuador, 1 957, 404 págs.
Mucho se ha hablado del "problema" indígena, del re- sago y "prim itivismo" del indio, pero casi nada práctico se ha hecho para solucionarlo. Este asunto, de trascendental importancia, debe ser estudiado en toda su magnitud para encontrar la solución definitiva.
El Dr. Gonzalo Rubio Orbe, autor de numerosos trabajos y conocedor del problema desde su raíz, merced a su vida cerca de un conglomerado indígena (comunidad de Otavalo) y a los estudios hechos en calidad de indigenista y como miembro de comisiones de investigación en otros países, es el autor de la obra en breve referencia. En ella nos proporciona un ,amplio material informativo, con el análisis, la crítica y las sugestiones recogidas en varios países por él visitados, como México, Bolivia, Perú y, desde luego, Ecuador, todos con un alto porcentaje de población indígena al margen de la civilización y del adelanto cultural alcanzado por muchos otrps pueblos.
En Promociones Indígenos en América expone el autor una información acerca de los medios y formas que se están utilizando en los países mencionados para mejorar la situación del indio. Hay en ella la guía necesaria para solucionar el problema del indio americano, aplicándola a la vez a nuestro país, ya que "particularmente, se anhela que la divulgación de las observaciones y los juicios vertidos sobre los varios campos de la labor, tengan alguna importancia en estos esfuerzos, pese a que los problemas constituyen necesidades urgentes y fundamentales para el progreso nacional".
Corresponde a las instituciones culturales y a los organismos competentes hacer un análisis de tales directrices, para ponerlos en práctica adaptándolas a nuestro medio de acuerdo a situaciones particulares.
Podemos concluir, al final de este rápido comentario, que la obra del profesor Dr. Rubio Orbe es un excelente trabajo cuyo fin es la liberación del indio mediante su promoción simultánea en los campos de la economía y de la cultura.
Héctor Cazar RomeroAyudante del Museo Etnográfico
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TREJO, Lydia Blanca: Leyendas Mexicanas. México, 1959,138 págs.
Por medio de este bello libro, Blanca Lydia Trejo saludó a su patria en la alborada del presente año. Es un libro destinado a poner las mejores tradiciones de México al servicio de la niñez, cumpliendo ese precepto pedagógico de dar al pueblo lo que es del pueblo, por medio del arte y la educación.
Blanca Lydia Trejo, sin hipérbole, es una escritora y maestra de América que tiene un privilegiado puesto en la literatura infantil, principalmente en el campo del relato. Tiene cuentos como "La Marimba" o "El Quetzal", por ejemplo, en les que campean tradición, poesía y didáctica ccmo savia apetecida de formación espiritual.
"Leyendas Mexicanas" cumple una noble misión del del Folklore. Si éste se presta a su investigación y recolección, en funciones diversas de orden científico, cumple también un papel formativo de las generaciones nuevas que recibieron el viejo legado de sus antepasados. Lo que atesoró el pueblo, sea cualquiera su origen, hay que guardárselo y cuidárselo cariñosamente, aunque frunzan el entrecejo los snobitas de un mal entendido "modernismo".
"Leyendas Méxicanas" está destinado a los niños y, por lo mismo, a los maestros y padres de familia también, puesto que las lecturas educativas deben ser aprovechadas por los primeros y sigilosamente controladas por los otros Reúne tradiciones indígenas de México, originalmente recogidas por la autora y por otros folkloristas-literatos que entendieron bien oi lenguaje de los adultos y no estuvieron en capacidad de verterlo en el alado idioma de los niños. V en hacer esta versión, precisamente, está el mérito de Blanca Lydia Trejo, diestro buzo de las tradiciones patrias y de1 espíritu infantil.
Tal vez no hay otro país en América que ame las tradiciones indígenas con más devoción que México, entroni-
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zándolas con sincero y encomiabie orgulio. Y es que en ese caudal precioso que le viene de la tierra y del hombre, con la raíz de la nacionalidad, está la semilla y el sustento de una edad gloriosa que se perpetúa en la eternidad de la América Prehispana.
Una sola de sus leyendas, entresacada en fragmentos por nuestra demanda, bastará como ejemplo de los relatos de este beilo libro de Blanca Lydia Trejo. El "Nacimiento del Maíz". Su hora llegó en un sueño de Quetzatlcóatl. Este Dios prometeico vió que las hormigas transportaban "cuatro granitos de color de m arfil", y que más allá estaban "grandes extensiones de tierra cubierta por unas plantas de flexibles tallos, de hojas alargadas y con unas espigas de las que se derramaba un penacho de hiIiIlos dorados como la cabellera del Sol".
Quetzatlcóatl se despertó y, como el Prometeo que robó el fuego de Júpiter para dárselo a los hombres, se transformó en hormiga roja, y furtivamente "entróse a la casa subterránea pudiendo así llegar hasta los depósitos de donde tomó uno de esos maravillosos granos. Lleno de gozo, ocultóse para reaparecer más tarde entre sus súbditos, a los que dió esos dientecillos blancos robados a las hormigas negras. Así descubrió a los hombres la dádiva del cielo, el cereal divino, el maíz que en oleaje de esmeralda ofrece a los hijos de México su canción de vida".
Darío Guevara.
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ZAFFARONI, BECKER, Zahora: Poesía F o lk ló rica in fa n t i l de l U rug uoy , M o n te v id e o , U ru g u a y , 1958 .
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HUMAN1TAS. BOLETIN ECU ATO R IAN O DE AN TRO PO LO G IA
I : 2
IN D IC E
TRABAJOS ORIGINALES
Pógs.
Víctor Emilio Estrado: Arte aborigen del Ecuador.Sellos o pintaderas ............................... 7
CONTRIBUCIONES
Grupos sanguíneos (sistema (ABO) de los indios y mestizos de los alrededores de Quito, por Ricardina Ramos de Andrade, Carmen Loscano y Martha Z á ra te ......... 19
Estatura y peso de los escolares de la ciudad de Quito, por Lino Naranjo, Inés Logroñoy María L. G a larza.......................... 21
Presencia del indio ecuatoriano en la prensa, porAntonio Santiana .......................... 24
CRONICAS Y NOTICIAS
ECU ADO R
Pógj.
Actividades en el instituto de Antropología de laUniversidad Central ................................ 41
E¡ Museo Etnográfico ........................................... 41En la Asociación Ecuatoriano de Antropología . . 42Inauguración de la Sala de Exhibición del Museo
Etnográfico de la Universidad Central . . . 42Actividades en el Pian Piloto del IP G H ............. 46Ei presidente del Instituto Indigenista Interame-
ricano, Dr. Juan Comas, visitó la Misión Andina de ias Naciones Unidas, en la provinciadel Chimborazo (Ecuador central) ........... 47
Se descubre fortaleza incásica en los alrededoresde Quito ......................................................... 47
Antropólogo norteamericano estudiará las tribusColorados y Cayapas..................................... 48
Ciclo Internacional de Cursos de Verano de laUniversidad C en tra l....................................... 49
Quinta Reunión Panamericana de Consulta sobreG eografía........................................................ 50
Cuarta Reunión de Consulta sobre Historia . . . . 51
S O L IV IA
Una misión arqueológica alemana en Bolivia . . . 53
RESEÑAS BIBLIOGRAFICAS
Altschufer, Milton: On the environmental limitations ofMayan Cultural development (Antonio Santiana) 56
Comas, Juan: Manual de Antropología Física (AntonioSantiana) ................................................................ 57
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Pig*.
Estrada, Emitió: Los Culturas Pre-Clásicas, Formativas o Arcaicas del Ecuador (María Angélica C. L. deSantiana) ................................................................. 60
Ibarro Grosso, Dick Edgar: La verdadera historia de losIncas (Antonio Santiana) ..................................... 62
Krouse, Frifx: Alcovc de parto entre os Bakairi (BeatrixQ. de Concha) ......................................................... 64
Krouse, Fritx: Tatuogem de unna de dedo de um indioYamorikumá (Beatrix Q. de Concha) ................ 65
Lorrec, Carlos Manuel: El misterio de las llamadas Sillas de Piedra de Manabí (María Angélica C. L.de Santiana) ........................................................... 66
Lhuttier Dos Santos., Yolanda: A festa do Kuarfüp entreos indios do A lto Xingú (Beatrix Q. de Concha) . . 69
Meggers, Betty: Ambiente y cultura de la cuenca de!Amazonas (Héctor Cazar Romero) .................... 71
Peñaberrera de C., Piedad y Costales S., Alfredo: Yun- gañan. Historia Cultural y Social del Campesinadode la Provincia de Bolívar (Darío Guevara) ......... 73
Pérex T,, Aquilas R.: Contribución al conocimiento de la Prehistoria de los pueblos del Norte del territorio de la República del Ecuador (Darío Guevara) . . 74
Rubio Orbe, Gonzalo: Promociones Indígenas en América (Héctor Cazar Romero) ............................... 76
Trejo, Lydia Blanca: Leyendas Mexicanas (Darío Guevara) ........................................................................ 77
PUBLICACIONES RECIBIDAS ..................................... 79
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SES Q U IC E N TE N AR IO DEL PRIM ER G R ITO DE L A IN D E P E N D E N C IA EN H IS P A N O A M E R IC A
10 DE AG O STO Q U IT O - 1 8 0 9 - 1959
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