7/17/2019 Garza - Discurso Impresores Suarez Figueroa
http://slidepdf.com/reader/full/garza-discurso-impresores-suarez-figueroa 1/5
r
APÉNDICE 1
EL DISCURSO DE LOS IMPRESORES
DE CRISTÓBAL SuÁREz DE FIGUEROA
Sonia Garza
SilviaIriso
Cristóbal Suárez de Figueroa (Valladolid, c. 1571-1645) merece recono
cimiento en un volumen como éste por ser autor de una de las primeras
descripciones conocidas hoy del trabajo realizado por los operarios en los
talleres de imprenta de la época, así como de la relación más precisa del
material utilizado por ellos. El texto en cuestión sehalla en la
P l a z a u n i v e rs a l d e
todasciencias
artes, impresa en Madrid por Luis Sánchez en 1615. Se trata
de una versión de L a p ia zz a u ni ve rs a/ e d i t ut te le p ro fe ss io ni d el m o nd o de
Tomaso Garzoni, Venecia, 1589.
1
En la portada de la versión castel lana y en otras piezas preliminares se
aclara que la obra tiene parte traducida de toscano y parte compuesta ; sin
embargo, en la aprobación, el elogio que el padre Juan de Dicastillo hace de
Suárez de Figueroa encumbra la obra prácticamente al grado de original:
este libro [...] con mas razón se puede decir compuesto todo que traducido
en parte [...]por el modo feliz con que hace tan proprio lo ajeno, realzándolo
admirablemente ... .
La P i a z za u n i v e rs a / e d i t u t te l e p r o f e ss i o nid e l m o n d o diserta sobre los oficios,
ciencias o artes que han ejercido los hombres desde antiguo, disponiendo los
respectivos discursos por orden alfabético. Si bien la intención y la organiza
ción general se respetan en la versión castellana, Suárez de Figueroa no se
mantiene siempre fiel a su modelo: al contrario, reduce a menos de la mitad
el número de profesiones registradas y modifica el texto toscano según su
propia conveniencia. Un buen ejemplo de su quehacer general es el oficio
que interesa a nuestros fines: el De' stampatori o De los impresores
(número ciento veintinueve en el i tal iano y ciento once en el castel lano).
El discurso se construye como una extensa alabanza de la imprenta, principal
difusora del conocimiento entre los hombres. La versión garzoniana da cuenta
de los orígenes de la impresión, enumera a los principales impresores y
r Para la anotación del discurso De los Impresores de Cristóbal Suárez de Figueroa nos
hemos servido de laexcelente edicióna cargo dePaolo Cherchi
Beatrice Collina (Einaudi, Turín,
1996),donde el lector hallará toda la información relativaa Tomaso Garzoni
su obra. Reciente
mente seha puesto de rel ieve lainfluencia de la
Plaza
en Cervantes J García
López,
ed. ,M. de
Cervantes, Novelas ejemplares ,Crítica, Barcelona,en prensa).
59
7/17/2019 Garza - Discurso Impresores Suarez Figueroa
http://slidepdf.com/reader/full/garza-discurso-impresores-suarez-figueroa 2/5
r
260 SoNIA GARZA Y SILVIA Inrso
concluye citando brevemente los ingegnevoli instromenti ch'usano i suoi
professori nell'essercitarla . Suárez de Figueroa se mantiene más o menos fiel
al original precisamente hasta este punto, cuando se distancia del italiano para
explicar pormenorizadamente quiénes intervienen en el proceso de impresión,
cuáles son sus funciones y sus instrumentos de trabajo. Más que la enumera
ción de los operarios -fundidor, componedor, corrector, tirador y batidor-,
llama la atención la detallada descripción de las partes de la prensa, que puede
considerarse no sólo una de las más provechosas, sino, sobre todo, la más anti
gua conservada en castellano. El discurso concluye con una nueva reflexión
sobre otros aspectos del oficio, entre los que destaca la fatiga de los empleados
la puntualidad de las tareas necesaria para el conveniente desarrollo de la
producción.
Quince años después de la primera edición de la P l a za u n i ve r sa l sale a la
luz una nueva a cargo de Luys Roure, impresa en lavil la de Perpiñán, el año
de 1630 (según la portada; el colofón da 1629), que en nuestro capítulo no
manifiesta diferencias respecto a la de
6
5.Muy distinta es, a este respecto,
la editada por el licenciado don Andrés Díez Navarro (Madrid, 1733):
Plaza
u n iv er sa l d e t od a s c i e nc ia s y a rt es [ .. .] N u e va m en te c o rr eg id o y a d ic io n ad o p a ra e st a
impresión.
En esta obra, el discurso sobre laimprenta de Suárez de Figueroa ha
sido sustituido por una nueva redacción en la que Díez Navarro concentra su
interés en lahistoria de los orígenes del arte de imprimir y de sus maestros.
El discurso De los impresores que se transcribe a continuación, moder
nizado en ortografía y puntuación, corresponde al texto íntegro de la edición
de 1615 (folios 366-368v). La cursiva se utiliza para destacar los términos
específicos referentes a los instrumentos, objetos y funciones propios del
taller de imprenta mencionados por primera vez en el texto.
' La solicitud de licencia y privi legio para esta nueva edición de la P l aza U ni vers al se conserva
en el Archivo Histórico Nacional de Madrid, Sección Consejos, Legajo 50629. Debemos esta
noticia a Valentín Moreno Gallego, a quien desde aquí expresamos nuestro mássincero agrade
cimiento.
CRISTÓBAL SuÁREZ DE FIGUEROA
PLAZA UNIVERSAL DE TODAS CIENCIAS Y ARTES
(MADRID, Luis SÁNCHEZ,
1615)
DE LOS IMPRESORES
DISCURSO
CXI
Si los libros, según San jerónimo, son verdaderas efigies y eternas repre
sentaciones de los ingenios de sus dueños, deben dar grandísimas gracias sus
autores a los que procuraron con su industria, mediante las estampas, tener
vivas sus memorias y manifestar a todo el mundo la excelencia de su enten
dimiento mostrado en las obras que escribieron. Y en esta parte viene a ser el
arte de imprimir i lustre y clara, porque ella sola desencentra los tesoros de
erudición, que sin su cuidado se hallaran sepultados en perpetuas tinieblas.
De aquí es poseer nosotros, por su medio, los filósofos antiguos, médicos,
poetas, oradores, astrólogos y todas las ciencias, artes, profesiones y oficios·
que pertenecen al hombre para ser letrado y virtuoso.
2
Así, se puede decir
haber sido la imprenta quien despertó los espíritus del hombre, que estaban
como adormecidos en el sueño de la ignorancia; porque antes de su inven
ción se hallaban, en comparación de ahora, muy pocos letrados. Esto proce
día del intolerable gasto de los libros; supuesto podía solo estudiar el rico y
facultoso, cuya hacienda resistía a tan crecido interés como el de entonces,
causa de quedar muchos pobres, mal su grado, ignorantes. Ahora todos
pueden aprender y darse a virtud por haber cobrado los libros moderados
precios y manifestádose las obras de los antiguos.' Con la estampa, pues, se
r Garwni lee Ieronimo santo,scrivendoa Marcella ,si bien la fuentedirecta delpasajeestáen Poli
doro Virgilio,D e r erum i m x ntor ibus f Guarino,Basilea,1575,II),y BartholomaeusCassanaeus,Catalo-
gusgluriaemundi 0/ .Valgrisi,Venecia,
569,XI, 39: Ínter artificespraeferunturlibrariietimpressores'').
'A las ciencias,artes,profesiones y oficios el italiano añade los mestieri . A partir de este punto
se sigue,al menos en laslíneas principales, a Leonardo Fioravanti,
Dello Specchiodiscient iauniversa/e
(Valgrisi,Venecia, 564,I, 26),y Dell ar te del lastampa ed e suoief fet tim eravigl iosi(f.69ry ss.).
J
La pi azz a
construye a partir de aquí una disertación de laque Suárez de Figueroa sólo recoge
el sentido principal, con una tímida alusión a los encantos : antichi tutti, che restavano nelle rene
bre indegnamente sepolte. La stampa ancora
e
stata, a guisa dell'anello d'Angelica, c'ha rotto gli
incantidi molti filosofiantichi, i quali tanto altamente e profondamente parlavano (convelicoprendo
moltissime pazzie dette da loro), che la pavera plebe, come incantata e stordita, stava delcontinuo
intenta a que' ragionamenti senza moversipunto. Ma orason rotte lemalie, e sisanno lesciocchezze
d'Anassagora . Como se ve,la P l aza uni ver s al pasa por encima de la alusión al anillo de Angélica,
objeto mágico esencial en algunos episodios del Orlando innamorato (l, 15;II, 3,etc. )y del Orlando
Furioso(cantosIV, VII, VIII, etc.).La enumeración de filósofosignorantes que sigue a continuación
retoma elhilo de
La pi azz a .
Aunque no parece la fuente delpasaje,los nombres citados recuerdan la
obra de Henricus Cornelius Agrippa di Nettescheim,
D e i nc er t idudi neet vani ta t es c i ent iar um
(trad. al
italiano por LudovicoDomenichi: Della vanitñ del /escienze,G. de Farri,Venecia, r547).
261
7/17/2019 Garza - Discurso Impresores Suarez Figueroa
http://slidepdf.com/reader/full/garza-discurso-impresores-suarez-figueroa 3/5
262 CRISTÓBAL SuÁREZ DE FIGUEROA
deshicieron los encantos y se supieron las necedades de Anaxágoras, las
ignorancias de Heráclito, los dislates de Demócrito, las vanidades de Melisa,
los descuidos de Carneades y las soberbias de todos los filósofos de aquel
tiempo; tal vez no menos arrogantes que locos. Ella sola abrió los ojos a los
ciegos y dio luz a los ignorantes; ella hizo conocer y distinguir el oro
del plomo, la rosa de la espina, el trigo de lapaja, dando juntamente noticia del
bien y del mal.' Esta es el arte que da vida a la virtud, que solicita fama a
los beneméritos, que mantiene vivos los muertos, que vitupera a los vicio
sos. Esta es madre de las honras debidas a sujetos famosos, centro de inge
nios sutiles,6 perpetuo albergue de senadores, teólogos, filósofos, históricos,
académicos, doctores, estudiantes y de todo lo bueno y loable que se halla
en la ciudad. ' Mas, sobre todo, se debe inestimable gloria a los primeros
inventores desta ingeniosa ocupación. Fue el principal , según Polidoro
Virgilio, Juan Cutembergho, caballero alemán, que la ejercitó desde el año
mil y cuatrocientos y cuarenta y dos o, según otros, mil y cuatrocientos y
cincuenta y uno, en la ciudad de Maguncia, habiendo hallado también la
tinta que usan los impresores. Por lo que el Beroaldo escribió en loa de
Alemania los siguientes versos:
O Germanía muneris repertrix,
Quo ni utilius dedit vetustas,
Libros scribere quae doces premendo.
8
Después el año de mil y cuatrocientos y cincuenta y ocho,
9
dos hermanos
alemanes, según el Bolterano, o solo Conrado, tudesco, introdujo tal ejerci
cio en Italia y fue el primero que imprimió libros en Roma, en casa de los
Máximos, siendo los primeros libros que estampase la
C i ud ad d e D i os
de San
4 E tutto nasce e procede dalla s tampa, laquale ha aperto gli occhi a ' ciechi e dato il lume agli
ignoranti. Arte veramente rara, stupenda e miracolosa .
s Respecto de su original italiano, Suárez de Figueroa sólo rememora las últimas consecuen
cias positivas del advenimiento de la imprenta, que ofrece, además, vacíasde toda ornamentación
retórica: Ora conosciamo i dotti e aneo gli ignoranti, e tutto mondo ne pu ó aver cognizione. Ora
son fugare le tenebre dell'ignoranza affatto affatto. Ora non si
pu ó
vender bugie, e dare a vedere
i l nero per i l bianco. Ora ciascuno da giudicio d'infinite cose che, se non fosse la stampa, non
potrebbe aprir la bocea per parlarne, non che giudicarle. Questa
e
quell'arte che fa conoscere i
pazzi , che manifesta gli arroganti , che palesa i let terati , che da morte all 'ignoranza, che da vita
alla virtú e alla scienza .
6
En este punto presenta Garzoni otras comparaciones, que el castellano omite: ospizio de'
piú mirabili ingegni delle cittadi; ricetto di intelletti sommamente svegghiati .
De nuevo la
Plaza
suprime aquí un fragmento de su original i taliano: Sí che di meritevoli
glorie e onori sene vaaltiera quest'arte insieme co' professori d'essa .
8
Bartholomaeus Cassanaeus,
Ca t a l of f US l o r ia e m u n d i
(V. Valgrisi, Venecia,
1569,
XI,
39),
con
los versos de Fil lippo Beroaldo, los primeros del en d eca sy l l a bu m que cierra el D e foeli it te (en
Opuscu/a, W. Lachner, Basilea, 509, f.CXXX .): 'Oh, Germania, inventora de un don, el más
útil que ha dado laAntigüedad, tú que enseñas a escribir libros imprimiéndolos'.
9 L'anno, poi, mille quattrocento quarant'otto, o cinquant'otto secando altri . ,
DE LOS IMPRESORES 263
Agustín y las D i v i na s i n st i tu c i on e s de Lactancia Firmiano.
1
º
Asimismo, fue
Nicolás Jenson, francés, en tiempo de Agustín Barbarigo, dux de Venecia, el
primero que ilustró aquella república con la estampa. Tras él hubo después
en todo el mundo hombres rarísimos, como Aldo Manucio en la misma
Venecia, que restauró la lengua latina; Francisco Priscianense en Roma, Badio,
Frobenio, Paulo Manucio, el novel Aldo, los Balgrisios, Juntas, Jolitos,
Ziletos, Bertanos, Somascos, Bevilaquas, Moretos y, sobre todo, el Plan
tino.
12
Añádese al valor del arte haber en Roma favorecido sumamente la
estampa Nicolao Quinto junto con Bexarión, cardenal Niceno, y Nicolás
Cusano, cardenal de San Pedro;'
3
después, León X . 4 En Francia, a su imita
ción, el rey Francisco, y el invictísimo Carlos V en Lovaina; en Heidelberg,
Ludovico, conde Palatino; en Witembergh, Federico, duque de Sajonia; en
Ingolstad, Guilielmo, duque de Babiera; en Maguncia, Alberto, arzobispo, y
en otros lugares, muchos príncipes y señores. También crecen el honor
desta ocupación elorden junto con los instrumentos que usan sus profesores, de
quien, por curiosidad, quiero dar alguna noticia.
7
r
Los datos expuestos seencuentran también en Garzoni, quien parece tomarlos de la S i lv a d e
v a r ia l e cció n ,de Mexia, muy probablemente en su versión italiana S e l va d i v a ri a l e tt io n e, trad.
F. Sansovino, G. del Cavalli,Venecia, 1564, Ill, 2, In che cosa scrivevanogli antichi , p. 277) y de
su continuación: N u o v a s e a m d a s e l va , ch e s e g u e P i e t r o M e s s i a (Franceschini, Venecia, 1565, 1, 12 ,
Invenzione della s tampa , p.
26).
Los dos hermanos alemanes son Conrad Sweynheym
( Conrado, tudesco ) y Arnold Pannartz, quienes comenzaron a imprimir en Subiaco, de donde
se trasladaron a Roma, instalando su tipografía en elpalacio de losMassimi.
11
Aldo Manuzio se define como restaurador de lalatinidad no sólo por su labor como edi
tor , s ino también por su difus ión de manua les de gramáti ca lat ina. El novel Aldo es Aldo
Manuzio elJoven. La enumeración de impresores está tomada de las mismas fuentes indicadas
en la nota anterior (Badio, Frobenio y Paulo Manucio se citan, en concreto, en la
Selva,
I II , 3 ,
p.
277) .
Especialmente los últ imos nombres, s in embargo, pudieron haber sido inseridos por
Garwni sin necesidad de recurrir a las fuentes , puesto que conocía muy bien a los editores que
recuerda.
A los Bevilaquas,
L a p ia z za
añade i Guerra, gli lmberti e altri infinit i s tampatori molto
sufficienti . Los lmberti están presentes a partir de la edición de
1587.
Tal adición no parece
casual, puesto que las V i te d e l/ e d o nn e i ll us tr i de Garzoni salen de las prensas de Domenico
lmberti en 1586. En su lugar, Suárez Figueroa inserta a losMoretos y, sobre todo, elPlantino .
1J
El castellano suprime a los venecianos: in Venezia Aldo e Andrea Asulano .
L a p i a zz a
sitúa aLeón X in Roma .
El rey Francisco es, para Garwni cristianissimo , Carlos Ves sencillamente imperatore y
Ludovico no senombra.
16
e in altri luoghi, altri prencipi e signori v'hanno dato aiuto e favorenon mediocre .
Comienza aquí una descripción pormenorizada del proceso de impresión, con enumeración
de ins trumentos, ofi ci al es y técnicas, que arr iba práct icamente has ta e l f inal del capítulo
( ...fáciles de ver a quien entrare en ella ). Frente al castellano, el original italiano apenas enu
mera a los principales interventores en el proceso de impresión, sin detenerse en explicaciones:
Acquista qualche grado d'onore aneo quest'arte dagli ingegnevoli instromenti ch'usano i suoi
professori nell'essercitarla: perché con alcuni ponzoni d'acciaro fino, nella cui ponta
e
scolpito
un carattere dell'alfabetto colborino, risposti nelle sue casselette e acommodati con lesue forme
dentro a telari quadri, e con 'artificioso torchio veramente meraviglioso, in pochi giorni stam
pano una machina grandissima di flogli e di l ibri . E qui intervengono lo stampatore, i l compo
nitore, [qua met te ins ieme le let te re e ne fa forme in folgio , in quarto foglio, in ott avo, in
7/17/2019 Garza - Discurso Impresores Suarez Figueroa
http://slidepdf.com/reader/full/garza-discurso-impresores-suarez-figueroa 4/5
r
264 CRISTÓBAL SuÁREZ DE FIGUEROA
Consta de varios instrumentos y oficiales, como fundidor, componedor,
corretor, tirador y batidor. Toca al primero fundir
caracteres,viñetas,
que son
ciertas flores halladas para ceñir cosas que requieren particular curiosidad, y
reglas para dividir y cercar las planas o páginas. Para la fundición se derrite
estaño y plomo, todo mezclado en una cuchara de hierro grande, y con otra
pequeña se echa el metal en sus moldes de hierro con las matrices de cobre,
donde está formada la letra. Quiébrase, pásase por una piedra y se compone
para cortarle el pie porque estén iguales y derechas, y luego se cuentan y
entregan al impresor.
Pertenece al componedor sacar del original lo que ha de componer. Los
instrumentos necesarios para semejante ministerio son letras usuales y ini
ciales, l igaturas y diftongos de diferentes formas y grandezas, aunque de
una misma igualdad y altura. Las mayores son caracteres de canto o música,
luego gran canon , menor peticanon y respective menores: las de misal,
parangona, texto, atanasia, letura, breviario, glosa, miñona y nomparella,
con griego y hebreo en proporción. Echanse las letras en una caja grande
dividida en otras pequeñas, llamándose distribuir el repartillas en semejan
tes cajetines. Distr ibuida la letra se pone el
original,
que se debe acomodar
en cierto instrumento largo y angosto con un encaje al pie donde se tiene
firme, con nombre de
divisorio.
Pónese en forma de cruz otro de hierro o
palo de una pieza, que desde el principio al fin está cortado por medio,
sirviendo de ceñir eloriginal porque no se caiga y de ir apuntando con él la
materia que se compone, y dícese mordante. Lee el componedor lo que ha
de sacar, y en otro instrumento de una o dos piezas, de palo, metal o
hierro, con cierta concavidad bastante para poner en éllas líneas de la medida
que se quisieren hacer, se va componiendo y ajustando los renglones, igua
les todos, llamando
espacio
al que divide una palabra de otra y
cuadrado
al
que parte los mismos renglones, siendo uno y otro del propio metal que las
letras. Compuesto el renglón, se pone en otro instrumento de madera con
unos perfi les en forma de paredes más bajas que la letra, por cabeza y lados
solamente, que se llama galera, y se pone ladeada la parte inferior porque
no se caiga lo compuesto. Por el pie entra una tabla tan delgada como un
cartón, con una parte della que sale fuera de la
galera
de cuatro dedos de
largo y dos de ancho en su principio, y al fin de cuatro poco más o menos; y
a ésta llaman
volandera.
Ya hecha la página se ata con una cuerda; sácase la
dodici, in sedici, in vintiquattro, e in altre diverse altre forme: come in lettera picciola, grande,
tonda, cancelaresca, moderna, e simili altre sorte); vi e poi i lproto, i l t iratore, qua ha cura di
conzar le forme ne torchio, e giustarle e accommodarle e farli venir registro. Vi e poi [il batti
dore), i l correttore [che corregge gli errori], la s tamparia, i l ponzone, la madre, la forma, le
let tere, la cassa, i l telaro, le vit i, i margini , i l chiovo, la s teletta, la punta, i l torchio, la vite, la
mazza, la cricca, i l piano, le spalle, i l carro, la pietra, i l t ímpano, la fraschetta, i l let to, i l moli
nello, le brache, i piedi; e cosí lacarta, ilfumo della ragia, l'inchiostro e i mazzi . La enumeración
remite a la obra de Leonardo Fioravanti, D el l o s pec chi odi s c ient ia uni ver s a/e (Valgrisi, Venecia,
1564,
I,
26, f.
70), y a la de Alessandro Citol ini, L a T i po c o sm i a (V. Valgrisi, Venecia,
1561,
p.
520).
Entre paréntesis cuadrados seincluyen los fragmentos que faltan en la p r i n e p s italiana.
T
DE LOS IMPRESORES 265
volandera, pónese encima de una tabla igual y lisa, y tirando della, queda la
página en la tabla.
Compuestas las páginas competentes según la marca en que va el l ibro,
grandes o pequeñas, que llenen un pliego por launa parte (seade a folio, de a
cuarto, octavo, deciséis , treinta y dos, sesenta y cuatro, y otras) se pone un
instrumento de hierro igual, l iso y fuerte, hecho de cuatro piezas juntas y
unidas, y otra que atraviesa de alto abajo p,ormedio, que ciñe aquellas pági
nas de que consta la
forma,
y sedice
rama.
Esta tiene ciertas concavidades por
los dos lados y el pie, en que encajan de metal , cobre, o hierro ciertos peda
zos que llenan aquellos vacíos llamados
porquezuelas.
Atraviesa la rama y por
quezuela un agujero con roscas dentro por donde entran ciertos tornillos.
Pónense en la parte alta unos palos que llaman cabeceras.El hierro que atra
viesa larama y las reglas que se le arriman se dicen
cruceros;
lo que se pone a
los lados,
lado,
y
pie
lo que se pone al pie, siendo la obra de a folio, mas si de
otra suerte, se llaman medianiles por demediar las páginas y sus divisiones.
Después se ponen dos hierros a los pies y otros dos a los lados, llamando
imponer
a esto y al poner las páginas en tal concierto y orden que se puedan
leer. Impuesta la forma se aprietan fuertemente los tornillos, dando vueltas
con un instrumento de hierro con nombre de
llave,
que tiene dos como
dientes en que encajan los tornillos.
Llévase tras esto a la prensa, donde se sacauna muestra que llaman prueba,
dándose al corrector para que corrija las mentiras y las emiende el compo
nedor. Estámpase al fin en la prensa, llamando tirar a semejante operación.
La prensa consta de varios instrumentos:
tablado,
dos
piernas
o maderos a
propósito, escalera,dos bandas,camprones,cofre,c igüeña,carro con cierta cuerda,
manija, una piedra en que asiente la forma con hierros y tornillos a los lados
con nombres de
bisagras
y
cantoneras.
De aquí está asido uno que llaman
tím-
pano, encima de quien ponen ciertos paños. Tápase con otro llamado timpa-
nillo
cubierto de pergamino. Hállanse en él dos puntas, a quien dicen
punturas, para que el papel esté firme. Aquíse pone el pliego y seprende con
unos instrumentos llamados chavetas, de que sease otro, dicho frasqueta, que
guarda limpia laobra. Dásele tinta, que consta de aceite de linazay trementina,
sin llevar rejalgar como pensaron algunos ignorantes. Cuécese y confe
ciona, recibiendo después el color negro de humo de pez y el colorado de
bermellón.Toca al tirador el cargo principal de la prensa: él es quien ajusta para que
los renglones salgan a lavuelta (que llaman retiración) en línea con los prece
dentes, que se dicen del
blanco.
Es propio suyo mirar las concordancias del
guión o reclamo, de la signatura, que es la letra que se pone al fin de algunas
páginas, como A 2 , y el reclamo es la palabra últ ima de la página que está
junto a aquella signatura, que concuerda con la que se sigue. También es de
su obligación mojar el papel, no pudiéndose imprimir seco.
Pertenece al batidor ser coadjutor del tirador, como subordinado a él, y
hacer las balas, que son ciertos instrumentos a manera de plato con un palo
7/17/2019 Garza - Discurso Impresores Suarez Figueroa
http://slidepdf.com/reader/full/garza-discurso-impresores-suarez-figueroa 5/5
r
266 CRISTÓBAL SuÁREZ DE F1GUEROA
que sale dellas con que se toman en la mano. Hínchense de lana, cúbrense de
valdrés, toman tinta con las mismas, y después de bien repartida (a quien
llaman distribuir) se la dan a la forma. Es suyo asimismo mezclar la tinta para
que salga bien negra, lavar las formas con lejía para que se limpien, etc. Toca
al corrector corregir las mentiras, señalándolas, comprobar para ver si están
corretas, mirar las concordancias, folios y signaturas, con otras cosas adverti
das ya en el discurso de los correctores.
Por evitar molestia al lector he dejado de poner otros muchos instru
mentos que intervienen en la imprenta, aunque de menos consideración.
Asimismo, el artificio con que se hacen las obras de colorado y negro, como
son las de horas, breviarios y misales, fáciles dever a quien entrare en ella.
En suma, puedo decir ser tal arte no solo ingeniosísima y noble, sino del
provecho público y particular que se sabe, y así digna de toda honra y estima
ción. La fatiga de todos sus oficiales esincreíble, y no menor la de los autores
mientras duran las impresiones de sus libros. Entre unos y otros suele haber
no pocas diferencias y voces, nacidas así de las prolijidades de los primeros,
como de las remisiones de los últimos; si bien en parte están disculpados por
ser precioso en ellos cualquier instante de tiempo para la puntualidad de sus
tareas, que suelen ser grandes. Mas al cabo paran todas estas rencillas en
mucha conformidad, satisfación y agradecimiento, con que tendrá fin este
volumen, que justamente puede ser intitulado l ibro de libros, universal
doctor y jardín deleitoso de admirables frutos y flores . Quiera Dios, a quien
todo se debe, aproveche a todos, alpaso que tuvo su autor deseo de acertar. '
8
En Madrid, por Luis Sánchez.AñoM. D. C. XV.
8 El último párrafo se distancia igualmente del original, alomitir las quejas de Garzoni sobre
los e rrores que cometen correctores y edi tores: E non hanno a lt ro viz io in loro , s e non che
qualche volta nelle correzioni sono addormentati; nello stampare opere altrui menano le maní
per se stessi; nelle cose inutili mettono sovente studio grandissimo, e nelle giovevoli sono scio
perati e negligenti affatto. Or sia ragionato a sufficienza de' professori di quest'arte . Al final del
capítulo, L a p i az z a añade unas Annotazione que tampoco recoge Suárez de Figueroa: Circa la
stampa
e
da notare che ilGiovio tiene quella non essere invenzione degli Alemani, ma molto piú
ant ica ch'a lt ri non pensa , adducendo di ci ó un argomento che , nell Orazioni stampate con
'opera di Giovanni Rosino, vien rigettato con la semplice negazione . El italiano se refiere a la
afirmación de que fueron los chinos los primeros en inventar laimprenta (Paulo Giovio, Histo-
r i ar u m s u i t e m p or is t o m u s p r i m us ,
Lorenzo Torrentino, 1550, l ibro
XN ,
p. 226), opinión ya
rebat ida por G. Ros ino a favor de los a lemanes
O r a t io I V ,
estampada como apéndice a los
R omanorumant i q ui t at em l i br i dec em,
Haeredes Petri Pemae, Basilea, 1583).
APÉNDICE 2
EL SYNTAGMA DE ARTE TYPOGRAPHICA
DE CARAMUEL
Pablo Andrés Escapa
E 1 S y nt ag m a d e a rt e t yp og ra ph ic ade Juan Caramuel y Lobkowitz (Madrid
róoó-Vigevano 1682) se publicó en Lyon en 1664 como apéndice a una
voluminosa obra de teología moral dividida en cuatro partes. Las dos primeras
habían aparecido reunidas por vez primera en Roma bajo el título de Theolo-
g i a m o r al is f u nd a m en ta / is ( sumptibus Blasii Diversini, apud Ignatium de
Lazaris'', 1656).Años después Caramuel añadió lasdos partes que completan la
Theologiafundamenta/is: la tercera se llamó Theologiaintentionalis y la cuarta y
última Theologiapraeterintentionalis .Fueron publicadas en Lyon por Philippe
Borde y compañía en 1664. Cuando llegó el momento de entregar a la
imprenta el manuscrito de laúltima parte -el privilegio de impresión para los
volúmenes tercero y cuarto concedido por Luis XIV a los impresores l leva
por fecha el dos de diciembre de 1663-, Caramuel juzgó que el contenido de
la Theologia praeterintentionalis era insuficiente. En una nota incluida en la
edición reconoció que, a falta de muchas consideraciones que debían inser
tarse sobre el escándalo y el noveno mandamiento, así como otra muche
dumbre de papeles que aún no había podido recibir ( sunt in via cum aliis
multis chartis que nondum pervenerunt ad nos ), le pareció bien poner fin a
la obra añadiendo diversos tratados. La primera de esas compensaciones fue
su S y n t ag; m a d e a r te t y p ogr a p h ic a(pp. 185-200). Para ilustrar algunos avatares
que la impresión de los libros procura a sus autores, Caramuel se refirió en el
artículo VIII del Tratado precisamente a un aspecto del proceso editorial de
la Theologiafundamenta/is , desde la edición romana hasta la de Lyon: cómo
elaborar sistemas referenciales en obras que se reeditan aumentadas sin que
ello afecte a los índices.
La estructura del
S yn ta gm a d e a rt e ty po gr ap hic a
comprende diecisiete
artículos; los ocho primeros se ocupan en aspectos técnicos de la impresión, y
los nueve restantes, sin abandonar las cuestiones materiales -desde las
impresiones en varios colores hasta la proporción de las letras- , incluyen
observaciones de orden moral sobre el oficio de producir libros impresos. No
debe olvidarse que el tratado acompañaba a una obra de teología y que
cuando Caramuel escribió el Syntag;ma la consideración de diversos aspec
tos morales en la producción impresa de libros era disquisición habitual en
las aproximaciones al arte de imprimir. Las fuentes que inspiraron la
267
Top Related