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La revista En Patagonia es una publicacin fuera de comercio perteneciente a la Fundacin Parques Nacionales.Se distribuye gratuitamente.
En su realizacin han intervenido:Coordinacin General: Daniel Hirsch / Texto y Fotos:Brge Ousland y Thomas UlrichCoordinacin de contenido: Santiago Storni / Edicin: Cynthia Palacios / Mapa: Sergio Zagier / Diseo: Fundacin Proa
Fundacin Parques Nacionales agradece la colaboracin de Tecpetrol - Organizacin Techint
y de National Geographic
ISBN 987-21199-1-0FUNDACION PARQUES NACIONALESCerrito 1294 5 piso C1010AAZ Buenos Aires - Argentina(54-11) 4816 6130 - Derechos reservados 2005
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HIELO CONTINENTAL
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dE NOrTE A sur EN TIEmpO rECOrd
po Thoa ulich y Bge Olan
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El viento te derriba. La nieve te sepulta. La glida niebla anula la visibilidad durantedas. Es un lugar que hace que te sientas pequeo, pero tremendamente vivo.
La descripcin pertenece al noruego Brge Ousland y se ajusta perfectamente al lugar
al que se refiere: el Campo de Hielo Sur de la Patagonia. Ousland y el fotgrafo suizo
Thomas Ulrich son dos aventureros que ostentan orgullosos una hazaa histrica. Entre
finales de agosto y principios de octubre de 2003 atravesaron sin apoyo exterior, el Campo
de Hielo Patagnico Sur, una de las mayores extensiones de glaciares del mundo.
El cruce dur slo 54 das. Y dejaron su huella: la suya fue la travesa sin reabaste-
cimiento externo del Hielo Continental ms importante completada hasta hoy. Son 400
kilmetros de meseta congelada, expuesta a los vientos ms violentos, y que encierra una
falla tectnica que, en la prctica, es una pared de hielo de 600 metros que debieron salvar
con el pesado equipo de travesa polar a cuestas.La aventura cubri 523 kilmetros, 90 de los cuales debieron atravesar por agua.
El primer da en que llegamos a la meseta pudimos usar nuestros kites.En un solo da logramos la misma distancia que en los cinco das anteriores
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El resto, fue puro hielo. Las temperaturas iban de los -2 a los -30 C. Por momentos, el
viento blanco les impeda ver el final de sus esques.
Ousland es un gran explorador polar y ya era conocido por haber sido el primer hombre
en completar una travesa sin apoyo exterior y en solitario entre Siberia y Canad, atrave-
sando el Polo Norte. Ulrich es un devoto de la escalada patagnica.
La gesta no fue nada sencilla. Los esperaban tormentas impiadosas, grietas traicioneras
y un viento feroz. Casi todas las expediciones haban fracasado por el mal tiempo. Com-
binaramos la experiencia de Thomas como alpinista y la ma como explorador polar para
desplazarnos con rapidez y seguridad. Partiramos al final del invierno, cuando hace ms
fro y est ms oscuro, pero tambin cuando los puentes de nieve son ms firmes y los
vientos ms predecibles. Salimos de la localidad chilena de Tortel el 24 de agosto de 2003
con cuatro kayaks, provisiones para 67 das y una sana inquietud ante lo que nos esperaba.
Entonces empez el trabajo duro, cuenta Ousland.
Su plan consista en usar imgenes satelitales y un GPS para hallar las mejores rutas que
bordean las mortferas grietas y atraviesan las cumbres nevadas.Llevaban unos 130 kilos de comida, combustible y dems pertrechos. Llegaron hasta el
frente del glaciar Jorge Montt y a partir de all siguieron a pie. Llova constantemente y
eso haca que nos atascramos. Un da tardamos once horas en arrastrar nuestros peque-
os trineos-kayaks a travs de dos kilmetros de nieve pastosa, relata Ousland.
Dos semanas de duro esfuerzo los dejaron a los pies del monumental campo de hielo.
All empezaba otro captulo de esta historia.
El viento sacuda nuestra carpa con tal violencia que no pudimos dormir, sigue Ousland.
Las rfagas de viento alcanzaron los 100 kilmetros por hora y detuvieron el campamento
durante tres das. Los trineos quedaron sepultados bajo la nieve. No fue fcil recuperar el equi-
po de escalada que necesitaban para enfrentar una de las partes ms riesgosas del recorrido: el
descenso de una enorme cascada hasta el paso de la falla Reichert. As todo, prefirieron aven-
turarse a la cascada que soportar otra noche interminable en un lugar a merced del viento.
Brge planica la travesa en el Hotel en Coihalque antes de salir.
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Brge carga un kayak sobre la morena hacia el glaciar. Tardamos cuatro das en transportar el material
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Comenzaron los problemas. Una ampo-
lla en el pie del explorador se infect
gravemente. Ousland se comunic con su
mdico en Oslo, que aconsej una sema-
na de reposo. Dos das despus, con una
doble dosis de antibiticos mediante, laexpedicin segua su curso.
Retrasados por el viento, la nieve y las
ventiscas, tardamos 16 das en recorrer
13 kilmetros a travs del paso de la falla
Reichert. Tras descender 1000 metros por
una cascada de hielo llena de bloques
inestables, escalamos una cumbre helada
de 1375 metros, para luego bajar en rapel
por una pared del otro lado. Conscientes
del peligro de aludes en aquel tramo, la
visin de al menos 13 cndores sobrevo-
lndonos levant nuestro nimo, cuenta
el privilegiado testigo de aquella solitaria
inmensidad de hielo.
Un pequeo lago de aguas dulces en el ascensodesde el ordo hacia el glaciar nos facilita eltransporte del material
En el ordo Calne: 3 da camino al glaciar Jorge Montt
1- Nos conectamos con el mundo exterior a travs del telfonosatelital
2- Thomas Ulrich registra cada dia en el diario de viaje la posicinexacta del campamento. Da 25. Tramo realizado: 12, 5 m.Posicin: S495730/W734337. Altura: 1703 msnm
3- Brge conversa con su mdico en Noruega, quien le recetapara la septicemia una dosis doble de antibitico
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Varias veces cruzamos el valle del Huemul desde el mar hacia el glaciar Jorge Montt.Nos fascin la diversidad de vegetacin
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Tercer da camino al glaciar Jorge Montt.Los bloques de hielo nos muestran que
no puede faltar mucho
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Es un lugar que haceque te sientas pequeo,pero tremendamente vivo.(Ousland)
Thomas + Brge. Primer da en kajak, camino al glaciar Jorge Montt
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Ecalao ecoz
Ulrich es un apasionado de la escalada. Casi se podra decir que comenz a practicarla
a poco de empezar a caminar Este aventurero, nacido en Interlaken, Suiza, cuenta que
comenz a despuntar esta pasin en secreto, a escondidas de su madre y sus maestros,
cuando slo tena cinco aos. Su casa estaba rodeada de montaas y no le resultaba difcil
salir a practicar.En realidad, primero fue esquiador. Soy una persona a la que le gusta empujar los
lmites, as que rpidamente comenc a escalar duro y parejo, relata.
Cuando el amor por las montaas dej de ser algo prohibido, Ousland llev una cmara
de fotos para explicarle a su madre las aventuras que lo esperaban en las laderas. Pero
realmente nunca so con convertirme en fotgrafo. Lo haca para aprovechar la ocasin,
recuerda hoy.
Sacar fotos agrega dificultad a la misin de escalar y l lo sabe. A veces slo quisiera
estar escalando -dice al respecto-. Quizs con el tiempo deje de hacer este tipo de expe-
diciones.
La familia tambin importa. Cuando era joven era medio loco. Desde que tengo familiatengo que ser ms inteligente, y si te sents responsable de tu familia penss mejor las
cosas. Pero me ayuda a sacar buenas conclusiones y si estoy en situaciones de peligro o
si tengo que decidir ste o aquel otro camino, ah me son de gran ayuda porque siempre
tens a tu familia detrs. Cuando voy a una expedicin, la seguridad es la primera priori-
dad, asegura.
La primera escalada fuera de los Alpes fue en la Patagonia. Desde entonces, el Sur lo
encontr en sus cumbres unas diez veces ms. Por qu le interesan tanto estas monta-
as? Puedo escalar diez veces en el Cerro Torre, que para m es ms aventura y me voy
a sentir ms feliz que si viajo a los Himalayas o Pakistn. Me gusta volver a estos lugares
que conozco, con gente que conozco y descubrir ms y ms, explica el fotgrafo.
Tambin estuvo en Groenlandia dos veces y en los Estados Unidos. La Antrtida es una
cuenta pendiente.
La travesa por el Campo de Hielo le ense mucho de desplazamiento por hielo hori-
zontal. Tanto que est proyectando cruzar el casquete polar rtico el ao prximo, solo y
sin apoyo.
sobevivi en el hielo
Ousland resea la vida cotidiana. Harto de que la nieve mojada me dejara la ropa tiesa,
sal a hacer mis necesidades semidesnudo. El mejor momento era la cena: 1800 caloras
de carne y pur de papas, preparados y
devorados a la luz de las linternas en laoscuridad invernal, explica.
No haba tiempo ocioso. Repasbamos
las imgenes de satlite para estudiar la
ruta que tenamos por delante. Una noche,
Thomas me despert para que mirara si
tena algo en los ojos; senta los prpados
como papel de lija. Padeca ceguera de
la nieve y le apliqu colirio. Despus nos
enteramos de un agujero de ozono haba
pasado sobre nosotros, exponindonos a
una mayor intensidad de radiacin ultravio-
leta, comenta el expedicionario.
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Cruce de la enorme grieta, al inicio del glaciar Jorge Montt
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Amanecer sobre el campamento debajo de la cima del Cerro Bastin
Con el trineo totalmente cargado, Brge asciende al Cerro Bastin.Usa grampones en vez de esques
En la ltima etapa del hielo continental. Brge an tira del trineo de aprox. 80 kg
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Las grietas los acechaban en silencio. Como trampas ocultas debajo de sus pies. Antes
de la falla Reichert, el arns de su trineo impidi que Ousland cayera en una de ellas. Monta-
ron un sistema de cuerdas para pasar las provisiones a travs de un puente de nieve. Tras
enterrar unos sacos llenos de nieve como anclaje, Thomas inici el descenso. El primer
trineo se qued atascado y Thomas tuvo que escalar para soltarlo. El segundo descendi
sin problemas. Yo fui detrs. Cuando llegamos abajo, nueve horas despus, nos abrazamos
emocionados, cuenta Ousland.
El final estaba cerca. Disfrutaron de una plcida travesa: con unas pequeas velas tipo
kite de traccin se valieron del viento para avanzar. Cuando dejaron atrs el hielo les llev
otra semana transportar los equipos por las rocas, descender los rpidos y cruzar un fiordo
a remo. Llegaron a la playa de Puerto Natales. En el Eberhard Hotel los esperaba un lujo
aorado: una ducha caliente.
Prepararnos bien y no desviarnos de lo planeado haba sido nuestro lema. Cincuenta y
cuatro das despus de salir de Caleta Tortel, entramos en el bar del hotel vestidos todava
con el equipo de rafting. Dos pisco sours, ped al barman, que ni se inmut. En la Patago-
nia, como habamos podido comprobar, casi todo es posible.
As culmina una empresa signada por el herosmo y la aventura que, sin dudas, hizoleyenda.
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Brge marcha hacia el Cerro Torre + Fitz Roy (atrs en el medio).
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Logstica previa
En el 2001 hicimos un viaje y navegamos los fiordos observando desde un barquito
pesquero, para planificar todo. Trabajamos sobre mapas y fotos satelitales de la zona,
cont Ulrich.
Luego de buscar los mapas ms adecuados, incluyendo los del Instituto Geogrfico
Militar Argentino, optaron por manejarse en el terreno con fotos satelitales adquiridas a unaagencia especializada.
Consultaron a Sebastin de la Cruz, nico integrante argentino de la expedicin espaola
de Al Filo de lo Imposible, y a Pablo Besser, lder de la expedicin chilena: Las fotos de
Sebastin de la Cruz de la falla fueron importantes para saber con qu nos bamos a encon-
trar. l nos ayud mucho. Tambin intentamos conseguir informacin de la expedicin
chilena, pero no nos dieron nada. Pensaron que no bamos a tener xito. Y luego dijeron
que no era posible que lo hubiramos logrado tan rpido, y que habamos mentido. Pasaron
dos aos desde que tuvimos la idea hasta que la concretamos. No es que de repente decs
Vamos al campo de hielo y te vas, dijo Ulrich.
Ulrich y Ousland como equipo
l es de Noruega, como mi mujer. Me interesaban sus expediciones al Polo, y un da
dijimos que podramos hacer algo juntos. Le mucho sobre distintas expediciones. Esto no
es montaismo; es algo intermedio entre una expedicin polar y montaismo pens.
Yo no hubiera podido hacer el Campo de Hielo sin Ousland y l no hubiera podido cruzar
la falla sin m. Por eso, entre los dos formamos un excelente equipo; y eso nos posibilit
poder llegar con xito y tan rpido. Tuvimos un par de problemas para comunicarnos entre
nosotros, pero pocos. Mi noruego no es tan bueno. Yo aprend mucho de Brge, sin l no
lo hubiera logrado, reconoci Ulrich.
Fotgrafo y aventurero
Nacido en Suiza en 1967
Thomas Ulrich Boerge OuslandExplorador polar
Nacido en Noruega en 1962
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Hasta hora nadie haba atravesado todo el Campo de Hielo Sursin reabastecimiento. Casi todas las expediciones haban fracasadopor el mal tiempo. Thomas y yo tenamos un plan: usaramos imgenessatelitales y un GPS para hallar las mejores rutas que bordean lasmortferas grietas y atraviesan las cumbres nevadas. Combinaramosla experiencia de Thomas como alpinista y la ma como exploradorpolar para desplazarnos con rapidez y seguridad.(Ousland)
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Da 22: poco despus de pasar por los Gigantes de granito,los cerros Torre (fondo) y Fitz Roy : Thomas Ulrich pasa por el
lado oeste del Nunatak Viedma (derecha)
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Cuando voy a una expedicin,la seguridad es la primera prioridad.Si voy a una expedicin que puede tener algn riesgo,entonces la seguridad debe estar al ms alto nivel.
Si no, pods perder tu vida.(Ulrich)
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Thomas Ulrich: despus de 4 das de tormenta pudimoshacer por primera vez el reconocimiento de la Falla
Reichert (descenso de 1.888 a 1.162 msnm.)
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Creo que el Cerro Torre es como una llamaque est siempre encendida y vuelves haciaella porque siempre est all.
(Ulrich)
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Expediciones anteriores
Con el correr de los aos, los desafos
exploratorios fueron dejando paso a metas
deportivas, entre ellas, las travesas. Al princi-
pio, fueron los cruces transversales; ms tarde,
los intentos de cruce longitudinal. Sin embargo,esto ltimo result ser ms difcil de lo que
se supona y varias cordadas internacionales
fracasaron en el intento, dndole a la travesa
la fama de misteriosa y complicada.
En 1992, el grupo espaol del programa Al
Filo de lo Imposible logr encadenar gran parte
de la travesa, pero debieron utilizar un helicp-
tero para atravesar la Falla Reichert. Abandona-
ron los Hielos Continentales en el sector norte
del Glaciar Tyndall. Integrantes: Jos CarlosTamayo, Antonio Trabado, Jos Luis Fernndez
y Sebastin de la Cruz, de Bariloche, en la que
Sebastin lvaro, director de Al Filo... junto
con Antonio Prez Grueso los acompaaron
filmando hasta el Paso del Viento
Del 24 de octubre 1998 al 30 de enero de
1999 los chilenos a lo largo de 98 das, habiendo
instalando un puesto de abastecimiento
intermedio antes de la falla Reichert, fueron
los primeros en cruzarla a pie, y culminaron
la expedicin saliendo al sur por el Glaciar
Balmaceda al Seno de la ltima Esperanza.
Integrantes: Pablo Besser, Mauricio Rojas, Jos
Montt y Rodrigo Fica.
un a e hielo
El Hielo Continental es un inmenso glaciar
de 400 kilmetros de longitud y entre 50 y 80
kilmetros de ancho, con una altitud promedio
de 1500 metros sobre el nivel del mar. Ocupa
gran parte del extremo sur de Amrica latina, aloeste de la cordillera de los Andes. Se estima
que tiene una superficie de 20.000 kilmetros
cuadrados, subdividida en un rea central de
mesetas que ocupa unos 14.000 kilmetros
cuadrados y el rea perifrica, constituida por
lenguas de hielo y montaas.
Oficialmente, el norte de esta enorme masa
helada comienza a 48 15 de latitud, cerca del
fiordo Calen del Canal Backer, mientras que
su extremo sur se ubica a 51 40 de latitud,
unindose con una cadena de montaas que
forma la pennsula Sarmiento.
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Despus del descenso del Cerro Bastin(C. Mayo), Thomas Ulrich sufre una fuerteceguera de la nieve. A veces no us lentesde sol durante el descenso. La consecuen-cia: tres das fatales de dolor en los ojos
Con el trineo totalmente cargado, Brgeasciende al Cerro Bastin. Usa gram-pones en vez de esques
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Brge casi se pierde en el laberinto interminable de grietas. Casi logramos la primera etapa! El acceso al hielo conti-nental, a 1500 msnm, va el glaciar Jorge Montt, fue la etapa ms cansadora de toda la expedicin
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El clima en esta zona es indudablemente hostil. Su temperatura promedio es de 0C,aunque las tempestades hacen que la sensacin trmica ronde los -20C. Vientos con
velocidades superiores a los 150 kilmetros por hora son una constante casi todo el ao.
A los impiadosos vientos se suman las violentas perturbaciones de la humedad recogida
en el Pacfico que se descarga en forma de nieve al encontrarse con la cordillera, lo que
provoca malas condiciones meteorolgicas que pueden durar un mes.
Los accesos a esta gigantesca sbana blanca son difciles. En su vertiente occidental,
los glaciares caen al mar abruptamente y producen gran cantidad de tmpanos que com-
plican la navegacin. La presencia de acantilados y tupidos bosques impiden la penetracin
por tierra y la escasa cantidad de das con buen clima limitan la aproximacin por aire.
El gigante glaciar Jorge Montt constituye el comienzo del Hielo Continental Sur. Pero 40
kilmetros ms al sur se inicia una vasta sucesin de mesetas heladas que se suceden alo largo de todo el Hielo Continental. Al este y al oeste, largas lenguas de hielo convergen
hacia los grandes lagos argentinos y hacia los estrechos fiordos chilenos.
Los Hielos Continentales estn divididos por una profunda depresin que corta perpen-
dicularmente y a baja altura la meseta blanca. Se llama Falla de Reichert y es un corredor
de ocho kilmetros de largo por cuatro de ancho, con una profundidad de 900 metros, que
se extiende desde el Pacfico hasta el Atlntico.
No fueron pocas las expediciones que intentaron cruzar el Hielo Continental, ya sea en
sentido longitudinal o transversal. El primer abordaje fue en 1557, cuando la carabela del
capitn Juan Fernndez Ladrillero se encontr con la enorme masa blanca. Una tempestad
lo oblig a separarse del grupo cuando intentaba verificar la ruta occidental hacia el Estre-cho de Magallanes, por pedido del gobernador chileno Garca Hurtado de Mendoza.
La nave de Fernndez Ladrillero se perdi en el laberinto de canales y fiordos del archi-
pilago que se antepone a la tierra firme. Cuando navegaban por un largo fiordo, sus ojos
encontraron una enorme regin de hielos que parecan no tener fin. Varios siglos ms
tarde, este fiordo fue bautizado con el nombre de Eyre cuando fue recorrido por gegrafos
britnicos.
Fernndez Ladrillero intent acercarse otras tres veces a las heladas regiones internas.
Creyendo que toda el rea estaba cubierta por hielo, bautiz al lugar como Sierra Nevada.
Desde entonces, gran cantidad de exploradores se vieron atrados por surcar la inmen-
sidad de este manto blanco y con sus expediciones contribuyeron a conocer mejor los
accesos y las zonas limtrofes. Antonio Viedma, James Kirke, el Perito Francisco P. Moreno,Hans Steffen y Ricardo Michell son slo algunos de estos valientes exploradores.
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Soy una persona a la quele gusta empujar los lmites,as que rpidamente comenca escalar duro y parejo.(Ulrich)
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Brge sobre una supercie de hielo inmensa.Pocas veces hubo buen viento para usar los kites
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Hitoia e n conflicto centenaio
La firma del acuerdo por los Hielos Continentales o Campo de Hielo Sur, as llamados,
respectivamente, en Argentina y en Chile, puso fin a ms de un siglo de disputas territo-riales entre ambos pases.
La resolucin de este conflicto limtrofe caracteriz la relacin bilateral de Argentina y
Chile durante casi todo el siglo XX.
La Navidad de 1978 encontr a ambos pases casi al borde de una guerra, cuando la
disputa territorial por las islas fueguinas del Canal del Beagle haca crecer ms y ms la
tensin. La intervencin del cardenal Antonio Samor, enviado especialmente por el papa
Juan Pablo II, evit que estallara la guerra.
Dos aos despus, la Santa Sede present una propuesta para poner fin al conflicto.
Pero la calma debi esperar dos aos ms: el 29 de noviembre de 1984 los gobiernos de
ambos pases firmaron el Tratado de Paz y Amistad en el Vaticano.
Sin embargo, quedaban 24 puntos limtrofes sin resolver. El 2 de agosto de 1991, elpresidente argentino Carlos Menem y su par chileno Patricio Aylwin firmaron un acuerdo
que resolva 22 de los puntos en discusin. El punto 23, la Laguna del Desierto, se llev a
un arbitraje internacional mientras que, para el punto 24 los Hielos Continentales o Campo
de Hielo Sur se estableca una traza poligonal que deba ser ratificada por los congresos
de ambos pases.
El acuerdo definitivo fue firmado por los presidentes Carlos Menem y Eduardo Frei Ruiz
Tagle en Buenos Aires, el 16 de diciembre de 1998. Previa aprobacin de la Cmara de
Senadores de Chile y Argentina, el acuerdo fue finalmente ratificado el 2 de junio de 1999
por la Cmara de Senadores argentina y la de Diputados chilena el 10 de marzo de 1999.
Era el punto final a una centenaria discusin limtrofe en este rincn del mundo.
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Da 22: poco despus de pasar por los Gigantes degranito, los cerros Torre y Fitz Roy: Brge pasa por el
lado oeste del Nunatak Viedma (izquierda)
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En los ltimos metros, antes de Puerto Natales, debimos remar nuevamente
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El equipamiento
Dos kayaks cada uno. Uno grande y otro chico. Con el grande llegaron por los fiordos hasta el Glaciar JorgeMontt, que es la puerta de entrada norte al campo de hielo. All los abandonaron y continuaron con loschicos, usndolos en el hielo como trineos individuales de arrastre. Luego los usaron como kayaks parallegar hasta Puerto Natales. Atando los kayaks transversalmente con los esques armaron una balsa.
Crampones para caminar por el hielo escarpado y esquies con pieles antideslizantes en terreno ms plano.
Barriletes (kite); cuando el viento y las condiciones lo permitan, desplegaron velas (hechas especialmente).
Elementos de escalada en hielo, principalmente para ser usado en la Falla Reichert. Requirieron depiquetas, cuerdas y arneses. Tambin usaron descensores, puos de ascensin, tornillos de hielo, mos-quetones, cintas y cordines.
Un GPS (Sistema de Posicionamiento Global), brjula y altmetro, con el soporte de fotos satelitales.
Dos cmaras de fotos y una filmadora Mini-DV.
Un botiqun y ropa especialmente diseada contra el agua, la nieve y temperaturas sub-cero.
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Descenso dicultoso por las grietas enel paso de la Falla Reichert
Thomas + Brge. 2 da en kajak,camino al glaciar Jorge Montt
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Los peores momentos fueron las tormentas.Cuando camins est todo bien, pero cuando tensque frenar es difcil; es cuando paro a pensar y quie-
ro volver a casa. Estuvimos cuatro das adentro de lacarpas; ah tens que pensar en positivo, y evaluarqu son cuatro das en tu vida.
Durante mis expediciones previas not que elclima es ms estable en invierno que en verano, yque las tormentas no entran tan fuerte. Es muy fro,pero calmo. El clima cambia lentamente, y como lameseta argentina est fra, no hay tanto contrastede temperaturas. Mi experiencia como gua de mon-taa me dice que para estar en un glaciar es mejoral final del invierno, aunque tens tiempos ms
cortos. Los puentes de nieve al principio del inviernotodava estn blandos y no se pueden cruzar, pero alfinal del invierno los halls bien fuertes.
Esta expedicin me ense mucho sobre m:hasta dnde puedo llegar, cunto sufrir, cules sonmis lmites.
Me entusiasmo con las expediciones hasta lamaana en que me tengo que ir al aeropuerto. Ahpienso: Dios, qu clase de idiota soy yndome otravez tres meses a la Patagonia. Al minuto de irmequiero estar de nuevo en casa, y al minuto de estaren casa ya me quiero ir.
(Ulrich)
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Campamento durante la tormenta de nievedebajo del Paso Mayo. Despus de 5 semanas,cada uno sabe por dnde comenzar
Quedan an etapas dciles por delante para llegaral Ro Grey. En parte, pudimos hacerlas nadando,trepando por las rocas, y en algunos puntos, a rappel
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Entramos en el bar del hotel vestidos todava con el equipo de rafting.Dos pisco sours, ped al barman, que ni se inmut. En la Patagonia,
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