En nuestra vida terrenal, aunque restringida por el pecado, el
mayor gozo y la más elevada educación se encuentran en el servicio.
Y en la vida futura, libre de las limitaciones de la humanidad
pecaminosa, hallaremos nuestro mayor gozo y nuestra más
elevada educación en el servicio: Dando testimonio, y mientras lo
hacemos aprendiendo de nuevo acerca de “las riquezas de la gloria
de este ministerio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la
esperanza de gloria.”
La Educación p. 308-309
116
INTRODUCCIÓN
Después de predicar el inminente retorno de Jesús por más de 170 años,
Su persistente retraso está creando una crisis de credibilidad y planteando un
dilema para los creyentes en el Mensaje de los Tres Ángeles. Hemos señalado las
muchas señales en el mundo que apuntan al cumplimiento de las profecías del
fin de los tiempos de la Biblia. Cuando la primera bomba atómica fue detonada
sobre Hiroshima y Nagasaki, nuestros púlpitos resonaron con la noticia de que
el fin de este mundo estaba muy cerca. Cristo retornaría muy pronto para destruir
a aquellos que destruyen la Tierra. Eso fue hace más de setenta años, no obstante
aún estamos aquí.
¿Qué está causando el retraso? ¿Necesitamos más calamidades, o guerras,
o crimen en este mundo? Difícilmente. Debe ser el hecho de que no estamos
preparados para la venida de Cristo lo que está provocando el retraso.
En este libro buscaremos el motivo por el cual aún estamos aquí. No es
porque Cristo no tenga seguidores fieles en la Tierra. No hay duda de que hoy en
día Cristo tiene Sus ‘siete mil’ en Israel que buscan sinceramente preparar sus
vidas para Su venida. Entonces, ¿cuál es el problema? La inspiración nos indica
que en nuestro limitado entendimiento de la gran verdad recae la razón de
nuestra existencia como iglesia. Esa verdad es Daniel 8:14. El mensajero del Señor
nos dice que esta verdad, ampliada en el Mensaje de los Tres Ángeles, es el
mensaje más solemne y más importante jamás antes dado a los mortales. Este
transciende incluso los mensajes gloriosos proclamados por el Apóstol Pablo y
los otros apóstoles. Ver Testimonios Tomo 9 p.19 1.
El Conflicto de los Siglos p.409 y 423 nos dice que “La Escritura que por
encima de las demás ha sido tanto los cimientos como la columna central de la fe
adventista fue la declaración: ‘Va a tardar dos mil trescientos días con sus noches.
Después de eso, se purificará el santuario.’” “El tema del santuario fue la llave que
develó el misterio del Gran Chasco de 1844. Se abrió para ver un sistema completo
de la verdad, conectado y armonioso, mostrando que la mano de Dios había dirigido
el gran movimiento adventista, y revelando el deber actual al sacar a la luz la posición
y el trabajo de Su pueblo.” Y también se nos dice que
1 Los números de página de todos los Libros de Ellen White hacen referencia a
sus versiones originales en inglés
1
“Dios ha entregado a Su pueblo un trabajo que realizar en la Tierra. El mensaje del
tercer ángel fue el de darse, las mentes de los creyentes debían de dirigirse hacia el
santuario celestial, donde Cristo había ingresado por la expiación de Su pueblo.” El
Evangelismo p.695.
¿Qué hay en Daniel 8:14 que se nos ha escapado? ¿Cómo un total
entendimiento de esta verdad nos prepara como individuos y como iglesia
para el Cierre de la Puerta de la Gracia y la segunda venida? Se nos dice en
Testimonios Tomo 5 p.575 que “Todos necesitan volverse más inteligentes con
respecto al trabajo de expiación, el cual está aconteciendo en el santuario celestial.
Cuando esta gran verdad sea vista y entendida, aquellos que la asuman
trabajarán en armonía con Cristo para preparar a un pueblo que se levante
en el gran día de Dios, y sus esfuerzos serán exitosos.” Por deducción,
podemos decir que el motivo por el cual nosotros como pueblo no hemos sido
preparados para los eventos del final de los tiempos y la venida de Cristo es
que esta gran verdad no ha sido vista o entendida claramente.
Hasta que entendamos totalmente esta gran verdad y cooperemos con Cristo
en Su trabajo de purificación del santuario, diez mil esfuerzos evangélicos y
cientos de miles de bautismos, aun maravillosos e importantes como puedan
ser, no traerán a Cristo a la Tierra para la redención de Su pueblo. Entonces,
¿qué es necesario que suceda? Observe lo siguiente: No estamos llamados a
adorar y servir a Dios por los medios empleados en años anteriores. Dios requiere un
mayor servicio hoy más que nunca. Él requiere el perfeccionamiento de los dones
celestiales. Él nos ha puesto en una posición en la que necesitamos cosas mayores y
mejores que las que se han necesitado antes. La Iglesia adormecida debe ser levantada,
despertada de su letargo espiritual, para la materialización de las tareas importantes
que se han quedado sin hacer. El pueblo no ha entrado al lugar santo, donde Jesús ha
ido por la expiación de sus hijos. Necesitamos al Espíritu Santo para comprender las
verdades de esta época; pero hay una sequía espiritual en las iglesias, y nos hemos
acostumbrado a satisfacernos fácilmente con nuestra posición ante Dios. Decimos que
somos ricos, con más bienes y sin necesidad de nada, cuando en realidad somos pobres,
y desdichados, y miserables, y ciegos,… RH Feb.25, 1890
última hora, al llamado de Dios para convertirnos en ese ‘hombre justo'
para que pueda ponerle fin al dominio de Satanás? Y que la experiencia
de la última generación de la Tierra llegue más allá de este mundo. El
testigo nacido por Cristo para la grandeza de la redención otorgada a los
pecadores perdidos resonará a través de las eras de la eternidad
incesantes. Lo siguiente está tomado de la Inspiración.
“¿Por qué se permitió que el Conflicto De Los Siglos continuará
a través de las épocas? ¿Por qué no se interrumpió la existencia de
Satanás al comienzo de su rebelión? Fue para que el universo pudiera
convencerse de la justicia de Dios en Su manejo del mal; para que ese
pecado pudiera recibir la condenación eterna.”
En el plan de redención hay alturas y profundidades que la
eternidad por sí sola nunca podrá agotar, maravillas que los ángeles
desean mirar. Solo los redimidos, de todos los seres creados, han
conocido por experiencia propia el conflicto real con el pecado; han
actuado conjuntamente con Cristo, y, como ni siquiera los ángeles
pudieron hacerlo, han entrado en la confraternidad de Su sufrimiento;
¿acaso no prestarán testimonio de la ciencia de la redención—algo
que no es digno de los seres caídos?
“En su templo todos gritan: ¡Gloria!” (Salmo 29:9), y el canto que los
rescatados cantarán - el canto de su experiencia - declarará la gloria de
Dios: “Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso.
Justos y verdaderos son tus caminos, Rey de las naciones. ¿Quién no te
temerá, oh Señor? ¿Quién no glorificará tu nombre? Solo tú eres santo.”
Apocalipsis 15:3, 4, R.V.
2 115
¿Qué hubiera sucedido si la humanidad nunca hubiera
transgredido contra Dios? Se nos dice en RH Feb.24, 1874 que “Después
de que Dios había realizado toda provisión para la felicidad del Hombre,
y habiendo satisfecho todos sus deseos, puso a prueba la lealtad de Adán.
Si la pareja santa hubiera sido obediente, la especie después de un
tiempo hubiera sido hecha igual a los ángeles.”
La capacidad de elevarse a una esfera más alta era única de la
especie humana. No leemos sobre ángeles que hayan sido leales y
verdaderos, elevándose a una esfera superior a la de un ángel. Ni
leemos sobre los seres caídos de otros mundos elevándose a la esfera de
un ángel. ¿Por qué Dios creó al Hombre de esa manera? Si la humanidad
hubiera cooperado con su Creador en la ejecución de Sus planes, su
experiencia hubiera demostrado la falsedad de las acusaciones de
Lucifer sobre que la obediencia de la ley trae esclavitud y restringe la
posibilidad de una existencia más elevada.
Pero como el corredor final en una carrera de relevos, somos
llamados al gran privilegio de asegurar todo el equipo de corredores que
ha corrido antes que nosotros. Los grandes héroes de la fe que corrieron
valientemente incluso hasta ser lapidados o cortados por la mitad sin
ceder su fidelidad dependen de que el último tramo de la carrera
cósmica ejecute la carrera final de manera perfecta, sin falla, sin tropezar.
Y eso no será posible sin la gracia especial que Cristo está esperando
derramar sobre ellos al final de Su ministerio en el santuario celestial.
Por más de 170 años Cristo ha estado aguardando la perfección de
Su pueblo a través de Su ministerio especial en el lugar santísimo. Toda
la hueste de santos durmientes que han estado esperando en sus tumbas
a que la generación final sea perfeccionada, para que el ‘hombre justo’
venga a la escena final del mundo y lleve al macho cabrío a su
destrucción definitiva para que puedan ser elevados y recibir su
recompensa eterna. ¿Responderemos, los que vivimos en esta
CAPÍTULO UNO
EL TEMPLO - UNA LECCIÓN OBJETIVA
“Porque nosotros somos templo del Dios viviente. “ 2 Corintios 6:16 El templo de Jerusalén se diseñó para ser una lección objetiva para el pueblo
de Dios. Cuando Dios instruyó a Moisés que construyera el primer
tabernáculo, le dio una visión de un modelo del santuario celestial. Todo lo
que correspondía al santuario, ya fuera el mobiliario y su disposición, o los
servicios celebrados durante el año— todo fue modelado según el santuario
en el cielo. Cuando Moisés iba a construir el tabernáculo, Dios le ordenó,
diciendo, “Asegúrate de hacerlo todo según el modelo que te he mostrado en la
montaña.” Hebreos 8:5. Y es observando lo que aconteció en el tabernáculo
terrenal cuando obtenemos una visión clara de lo que acontece en el
santuario celestial. “Lo que se realizó como modelo en el servicio del santuario
terrenal, se efectúa en verdad en el santuario celestial.” El Conflicto de los Siglos
p.420.
Cuando Jesús purificó el templo, reveló algo de profunda importancia
“Al purificar el templo de los comerciantes y compradores del mundo, Jesús anunció
Su misión para purificar el corazón de la corrupción del pecado, —de los deseos
terrenales, las pasiones egoístas, los hábitos malvados, que corrompen el alma.” El
Deseado de Todas las Gentes p.161. Esto es de lo que tratan los servicios del
santuario. Hay un proceso de purificación continua del pecado que ocurre
durante el año, finalizando con la purificación del mismo santuario el gran
día de la expiación.
También hay una profunda significancia en el hecho de que hubo
dos purificaciones del templo, una vez al comienzo de Su ministerio y la
otra al término de Su ministerio. Esto tiene un paralelismo especial
114 3
con lo que Cristo realiza en Su ministerio en el santuario celestial como lo
veremos. Esta transferencia de pecado desde el pecador al santuario terrenal
provocó que el santuario se volviera impuro. Por ello hay un día especial en
Israel, el día de la expiación, cuando el santuario fue purificado de todos los
pecados que se habían acumulado ahí durante el año. “Así hará propiciación
por el santuario para purificarlo de las impurezas y transgresiones de los israelitas,
cualesquiera que hayan sido sus pecados. Hará lo mismo por la Tienda de reunión,
que está entre ellos en medio de sus impurezas.” Levítico 16:16. De la misma
manera, el santuario celestial también ha sido corrompido por los pecados
que han sido transferidos ahí, y Dios ha designado un día, expuesto a la vista
en Daniel 8:14, cuando el santuario celestial deba ser purificado.
LOS TRES TEMPLOS DE DIOS
Hasta ahora hemos cubierto algunos hechos fundamentales concernientes al
servicio del santuario, tanto el tipo terrenal como el prototipo en el cielo.
Cada estudiante de la Biblia debe familiarizarse bien con el servicio
fundamental del santuario. Pero hemos estado considerando solo dos
santuarios, el terrenal, y el celestial. Sin embargo, la Biblia habla de tres
santuarios. Y el tercero es en verdad el más importante de todos. Pablo
reconoció la importancia del tercer santuario cuando escribió, ¿Y qué clase de
unión puede haber entre el templo de Dios y los ídolos? Pues nosotros somos el templo
del Dios viviente. Como dijo Dios: «Viviré en ellos y caminaré entre ellos. Yo seré su
Dios, y ellos serán mi pueblo.” 2 Corintios 6:16. Pablo aquí se refiere a Éxodo
25:8 que dice, “Después me harán un santuario, para que yo habite entre ustedes.”
La iglesia remanente ha sido despertada para responder todas las
preguntas que están en las mentes de los seres caídos. El Mensaje del
Tercer Ángel producirá los 144,000 por quienes Cristo demostrará que
los pecadores completamente redimidos estarán a salvo eternamente de
infectar nuevamente el universo con el virus del pecado.
La seguridad y la estabilidad del universo dependen de una
demostración visible de que el carácter de Dios y Sus leyes son santas y
justas y buenas, y conducen a la más alta elevación del ser. El universo
El universo no estará a salvo de otra deserción hasta que todo ser
inteligente sea convencido de la benevolencia y justicia del carácter y de
las leyes de Dios.
Lucifer ha planteado muchas preguntas y sembrado dudas con
respecto al carácter de Dios y las leyes de Su gobierno. Su rebelión ha
resonado a través de todo el universo. Y el tener una tercera parte de los
ángeles y a la vasta mayoría de los seres humanos respaldando sus
afirmaciones, le ha dado a sus alegatos un aire de credibilidad.
Dios creó la especie humana para responder las acusaciones de
Satanás. Desafortunadamente, el padre de nuestra especie aceptó la
sofistería de Lucifer, al hablar del árbol del conocimiento del bien y del
mal y le dio más respaldo a los alegatos del arconte impostor.
La caída de la especie humana fue una aguda decepción para Dios,
pero no abandonó Su propósito de reclutar la ayuda de la humanidad
para reivindicar Su carácter y Su ley, aunque la tarea se había vuelto
infinitamente más difícil. Él logrará por medio de la humanidad caída lo
que Él se había propuesto realizar por medio de la humanidad no-caída.
Dios declaró Su fe en la humanidad a través del profeta Isaías, diciendo,
“Este pueblo que formé para mí mismo, para que proclame mi alabanza.
Isaías 43:21.
4 113
Tendría que haberse convertido en un pecador, y eso Lo hubiera
descalificado para ser el Cordero sin mancha que pagaría el castigo de la
transgresión del Hombre. Así que la cuestión de si la seguridad eterna
del universo es posible si pecadores plenamente redimidos ocupan
puestos de honor en el reino de los cielos no ha sido respondida aún. Los
héroes más ilustres de la fe como Abrahán, Moisés y Elías, entre otros, no
han demostrado una certeza contra la caída. Todos ellos necesitaron un
intercesor durante su estadía terrenal. Debido a esa realidad, el universo
celestial está más interesado en si los pecadores redimidos pueden estar
a salvo en el cielo de recaer en el pecado, como sucedió durante su
experiencia en la Tierra.
Más allá de ello, Cristo ha hecho sumamente grandes promesas a
los pecadores redimidos que podrían causar preocupación en el universo
leal. Durante el juicio, se nos dice que “El divino Intercesor aboga por que a
todos los que han vencido por la fe en su sangre se les perdonen sus
transgresiones, a fin de que sean restablecidos en su morada edénica y
coronados con Él ‘coherederos del "señorío primero’." Él pide para Su
pueblo “no solo el perdón y la justificación, plenos y completos, sino además
participación en Su gloria y un asiento en Su trono.” El Conflicto De Los
Siglos p. 484.
Poner a los pecadores redimidos que alguna vez se rebelaron
contra Dios y contra las leyes de Su gobierno en tan altas posiciones de
poder y autoridad como para volverse herederos conjuntos con Cristo y
ocupar un asiento con Él en Su trono parecería una propuesta peligrosa.
Ese era el alto cargo al que Lucifer aspiraba, honor que se le fue negado.
¿Qué tan a salvo estarán los rebeldes de ayer de rebelarse nuevamente?
Este es un asunto monumental que concierne a la seguridad futura
del universo. Dios ha prometido que la tribulación no se repetirá. Los
seres caídos confían que Cristo se asegurará que nunca suceda. Al mismo
tiempo, Cristo no les quitará la libertad de elección a todo ser inteligente.
El Espíritu de Profecía está repleto con pasajes que hablan de la
importancia del templo humano, considerado un santuario para que
Dios lo habite. El Deseado de Todas las Gentes tiene esta hermosa
observación. “Desde las épocas eternas era el propósito de Dios que cada creatura,
desde el brillante y santo serafín hasta el ser humano, fuera un templo para que habite
el Creador. A causa del pecado, la humanidad dejó de ser un templo para Dios.
Oscurecidos y corrompidos por el mal, el corazón del ser humano ya no revelaba la
gloria de la Unidad Divina. Pero por la encarnación del Hijo de Dios, el propósito
del Cielo se realiza. Dios habite en la humanidad, y por medio de la gracia salvadora
el corazón de los hombres nuevamente se convierten en Su templo. Dios diseñó que
el templo de Jerusalén fuera un testigo permanente del elevado destino abierto para
todas las almas.” El Deseado de Todas las Gentes p.161. Podemos ver en estos
pasajes que tanto el santuario terrenal como el celestial fueron erigidos para
ser una representación visible del templo humano que Dios desea convertir
en Su morada.
La distribución del santuario y sus servicios fueron diseñados por
Dios Mismo. Es simple en su organización, pero solo una sabiduría infinita
pudo haber concebido un modelo tan simple que ilustre tan claramente los
diferentes componentes del templo vivo, y la manera en que Dios trabaja en
ese templo para llevar al alma a una expiación completa con Él.
El paralelismo entre el templo humano y el santuario construido por
Moisés es verdaderamente notable. El santuario fue diseñado con un atrio
exterior y un santuario interior. Así, en el templo humano, hay un ser
humano exterior y un ser humano interior. Pablo se refirió a esto cuando
escribió: “Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos
desgastando, por dentro nos vamos renovando día tras día.” 2 Corintios 4:16.
También en Efesios él habla de estar “fortalecido con poderío por Su Espíritu en
el ser humano interior.” La misma analogía se usa en lo siguiente: “Necesitamos
alcanzar un estándar más alto. La verdad no debe mantenerse
112 5
en el atrio exterior. Traigan sus principios al santuario interior del alma” The
Review and Herald, 7 de Enero, 1902
Somos la mano de obra de Dios, y Su palabra declara que estamos hechos
‘temiblemente y maravillosamente.’ Él ha preparado esta habitación viva para la
mente; está ‘curiosamente forjado,’ un templo que el Señor mismo ha preparado para
la morada de Su Santo Espíritu.” Fundamentos de la Educación Cristiana p.426-
427 Todos los órganos del cuerpo - los huesos, los nervios, los músculos, el
cerebro, forman el atrio exterior, la persona física.
EL SANTUARIO INTERIOR
Podemos ver cómo el atrio exterior representa la parte física del ser
humano, la parte que puede verse y tocarse. El santuario interior, con sus dos
salas, representa al ser humano interior, la parte espiritual del ser que no
puede verse ni tocarse físicamente. Diversos sinónimos han sido usados en
inspiración para describir al ser humano interior. Tales términos, como
corazón, mente, o alma son usados comúnmente. También lo es el término
espíritu. Todos estos sustantivos describen los componentes invisibles que
conforman el ser humano interior con su individualidad y carácter. Así como
hay dos salas en el santuario interior, así hay dos partes en el ser humano
interior. En el santuario literal, el ministerio diario involucraba al atrio
externo y a la primera sala. Los sacerdotes iban siempre a la primera sala,
pero solo una vez al año el sumo sacerdote entraba a la segunda. (Ver
Hebreos 9:6.)
La analogía de la mente humana con las dos salas del santuario es
notable. Así como la primera sala era un lugar de actividad diaria de los
sacerdotes, así nuestras actividades diarias involucran a nuestra mente
consciente, ya que intencionalmente pensamos y planeamos nuestras
rutinas diarias. En la segunda sala del santuario celestial, se preservan
desde el comienzo que siempre sería de esa manera. Pero ahora, a través
de la culminación de la poderosa redención que Cristo proveyó en el
Calvario e instituyó plenamente en Su ministerio en el lugar santísimo, el
síndrome del pecado ha sido destrozado. Se ha devuelto la jugada.
Satanás ahora se encuentra a sí mismo sometido a la voluntad del hombre
justo que lo aleja a su destrucción definitiva. Satanás “se detiene para
mirarlas como una fortaleza inexpugnable ante sus sofismas y engaños. Son para
él un misterio incomprensible.” Testimonios a los Ministros p. 18
Uno de los grandes problemas en el universo desde el ingreso del
pecado es el establecimiento de la seguridad eterna contra otra
recurrencia del pecado. ¿La redención que Cristo ha otorgado tan
abundantemente ha protegido a los pecadores redimidos de recaer
nuevamente en el pecado? Sabemos que Cristo vino en naturaleza
humana caída para demostrar que los que viven en naturalezas humanas
caídas podían, a través del poder y la gracia otorgados por el Espíritu
Santo, obedecer perfectamente los mandamientos de Dios. ¿Pero qué hay
sobre los que alguna vez han pecado? ¿Pueden los pecadores que se han
arrepentido y que se les han perdonado sus pecados seguir la ley de Dios
de manera tan perfecta como Jesús lo hizo en Su humanidad? La
respuesta es, no hasta que Cristo haya completado Su obra de expiación
en el lugar santísimo. Una vez que el Hombre ha pecado, su naturaleza
espiritual se volvió tan depravada que ya no podía presentar una
ofrenda perfecta de obediencia. Se había convertido en un corrupto canal
humano que contaminaba incluso las buenas obras que realizaba. Estaba
vestido con ropas viles, las cicatrices de una consciencia herida, la
remembranza de los pecados pasados que están escritos con una pluma
de hierro y con la punta de un diamante en las tablas de sus corazones.
Vea Jeremías 17:1 y el Libro SAF p.39-41.
Jesús nunca tuvo la discapacidad espiritual cuando vivió en Su
humanidad. Ciertamente, Jesús no pudo demostrar si un pecador
plenamente redimido podría estar a salvo de recaer en el pecado.
6 111
la ley de Dios no puede ser obedecida se habrá justificado y se
demostraría que el plan de redención fue un fracaso.
La Biblia compara nuestro paso a través de este mundo a correr
una carrera. Hebreos 12:1 nos urge a que “corramos con perseverancia la
carrera que Dios nos ha puesto por delante.” El ‘hombre justo’ es como el
último corredor en una carrera de relevos en las Olimpiadas. Se espera
que sea el corredor más rápido del equipo. (En Primeros Escritos p. 67,
se urge a los remanentes del último día a “avanzar de prisa” y a aprender
en unos cuantos meses lo que a otros les llevó años aprender.) Es
responsable de recuperar la distancia perdida o de mantener el liderato
obtenido por los primeros corredores. Todo el equipo depende de que él
ejecute el último tramo de la carrera sin tropezarse ni soltar el testigo. Si
él fracasa en su tramo, todo el equipo habrá perdido la carrera. De la
misma manera, si el ’hombre justo’ fracasa en sujetar al macho cabrío
firmemente en su puño, “Israel perderá sus vidas.” Toda persona desde
la caída de Adán se perderá.
Será una gran humillación para el príncipe de este mundo “… que
sacudía a la tierra y hacía temblar a los reinos” (Isaías 14:16) encontrarse a Sí
mismo atado y siendo llevado a su perdición por la generación más débil
que vive al final de los tiempos. Dios ha hecho algunas promesas
poderosas a Su pueblo que serán plenamente realizadas en estos últimos
días. A través de Isaías Ha declarado, “Los pueblos los acogerán y los
llevarán hasta su patria. Los israelitas los tomarán como siervos y siervas
en el suelo del Señor; apresarán a sus captores y dominarán a sus opresores…
Que con furia y continuos golpes castigaba a los pueblos, que con implacable
enojo dominaba y perseguía a las naciones.” Isaías 14:2 y 6.
Durante 6000 años, Satanás y sus ángeles han mantenido captivo
al pueblo de Dios incitándolos al pecado, sometiéndolos así a la
esclavitud del pecado y de su reino de oscuridad. Y Satanás determinó
los libros de registro que contienen todos los pensamientos y obras de
todos los seres vivientes sobre la Tierra. Todas las buenas obras y todos
los pecados están delineados con precisión en esos libros de registro. De
la misma manera, todos nuestros pensamientos y obras con los
sentimientos y emociones que los acompañan, se registran en el santuario
interior del alma. Podemos no pensar conscientemente en estas cosas,
pero se encuentran en nuestro banco de memoria e influyen en nuestro
comportamiento. Esta es la mente subconsciente, la gran biblioteca del
individuo, todos los libros que ha escrito él mismo. Su carácter es
revelado por lo que está almacenado en su biblioteca personal, porque el
carácter es la suma total de los pensamientos y sentimientos de un
individuo. (Ver Testimonios Tomo 5 p.310.)
En vista de la analogía entre el templo que Cristo purificó al
principio y término de Su ministerio y del templo humano del que habló
Pablo, consideraremos varias premisas con respecto a la importancia de
las dos purificaciones del templo. Todo lo que Cristo hizo tenía
significancia. Y todo lo que fue hecho en el santuario tuvo significancia.
“En todo, Dios deseó que Su pueblo continuara Su propósito para la mente
humana.” La Educación p.36.
110 7
CAPÍTULO DOS
DOS PURIFICACIONES DEL TEMPLO
En los servicios del santuario provistos al antiguo Israel, había dos
purificaciones distintas otorgadas al pueblo. Levítico 4 y 5 describe cómo
el pecador fue limpiado de su pecado por medio de los sacrificios
expiatorios diarios presentados en el tabernáculo. Se le pedía que
colocara sus manos sobre la cabeza de la víctima y confesara sobre esta
los pecados que había cometido. Después, con sus propias manos
degollaba al animal y el sacerdote tomaba un poco de la sangre y la
llevaba al santuario y la rociaba ante el velo detrás del cual estaba la ley
que el pecador había transgredido. De esta manera, el pecado era
transferido del pecador al santuario y el pecador era purificado de su
culpa. Todos los pecados confesados en el tabernáculo llegaban a su fin
en el santuario, directamente o en ocasiones indirectamente, cuando el
sacerdote comía la carne del sacrificio. Después, al final del año, otra
purificación tomaba lugar el día de la expiación. Esta purificación era
distinta y estaba separada de lo que se hacía en el ministerio diario, y
acontecía en la segunda sala. Pero esto plantea algunas interrogantes que
demandan respuestas detalladas.
Si el pecador arrepentido era purificado por medio de la sangre
del sacrificio expiatorio en el servicio diario, ¿por qué se requería otra
expiación y otra purificación al final del año? ¿Por qué otra expiación? La
importancia de este día es señalada por el hecho de que cualquiera que
ignorara ese día o realizará su trabajo habitual sería expulsado de Israel.
Este era su típico día del juicio. Levítico 23:27-30 describe la importancia
crítica de ese día.
“El día diez del mes séptimo es el día del Perdón. Celebrarán una fiesta
solemne en honor al SEÑOR, y ayunarán y le presentarán ofrendas por fuego.
durante el tiempo de la tribulación, demuestran más allá de cualquier
duda que la redención de Cristo es una cura eterna contra otra
apostasía.
El gran propósito supremo de Dios en Su manejo del Conflicto
De Los Siglos es la seguridad eterna del universo contra otra apostasía
mientras continúa otorgando a todos los seres inteligentes libertad de
elección. Dios ha prometido que “¡La tribulación no se repetirá!” Nahúm
1:9. ¿Pero qué garantía tiene el universo observante de que ninguno de
los resucitados comenzará otra deserción en las épocas venideras?
¿Cómo pueden tener la confianza de que el pecado no alzará su horrible
cabeza nuevamente? Han visto a muchos pecadores que, como el ladrón
en la cruz, aceptaron al Salvador en los últimos momentos de su vida.
¿Qué tan seguros estarán de no volver otra vez al pecado? En los 144,000,
Dios proveerá todas las respuestas y garantías. Después de ver el
desarrollo del último drama del conflicto de los siglos durante el tiempo
de la tribulación, y ver tal inquebrantable lealtad de los 144,000 que una
vez fueron pecadores como el resto de los redimidos que aún duermen
en sus tumbas, la totalidad del universo leal estará verdaderamente
convencida de que “la tribulación no se repetirá.”
Así que el hombre justo debe primero tener éxito en llevar al
macho cabrío a las tierras áridas de este mundo, cargando solo con los
pecados de los 144,000 y de quienes han muerto desde 1844 antes de
que ocurriera el sellado. Si el macho cabrío efectuara su escape, no solo
estaría libre de los pecados de los 144,000 y de los de aquellos que
murieron bajo los Mensajes de los Tres Ángeles, sino también dejaría de
ser responsable de los pecados del pueblo de Dios, de los que han
muerto a lo largo de las épocas antes de 1844. Todo el Israel de Dios
perdería sus vidas debido a que la acusación original de Satanás de que
8 109
de que la humanidad caída puede, a través de la expiación provista,
obedecer perfectamente la ley de Dios.
Y eso no es todo. Su lealtad también demuestra otro punto contra
el reino de Satanás. Los 144,000 han probado el reino de Satanás y han
entendido por experiencia los placeres del pecado y todas sus
seducciones. Pero han renunciado al servicio de Satanás para convertirse
en hijos de Dios. Han recibido todos los beneficios de la gracia redentora
de Cristo, y han probado los placeres de Su reino. Si regresaran al servicio
de Satanás, sería testimonio para todo el universo de que el reino de
Satanás es preferible al reino de Dios. Esto traería gran deshonra al reino
de Dios. Pero ninguno de los 144,000 regresará jamás a las filas de Satanás.
De hecho, preferirían morir antes de retornar a las filas del mal, y así
demuestran para toda la eternidad que el servicio de Dios es
infinitamente mejor que el servicio de Satanás.
LA EXPIACIÓN, ANTÍDOTO ETERNO
Otra cuestión vital se resuelve por la firmeza de los 144,000. Ellos
demuestran que la redención que Cristo ha otorgado es un antídoto
eterno para la reaparición del pecado. Ellos han experimentado todo lo
que fue tipificado en el servicio del santuario; el arrepentimiento y el
perdón en el atrio exterior; la santificación y la victoria en la primera sala;
y finalmente el borrado del conocimiento del mal y la recepción de la
plenitud del Espíritu Santo en el lugar santísimo. Si, después de haber
recibido todos los beneficios de la salvación, cayeran en pecado
nuevamente, se demostraría que todo el plan de redención fue un fracaso,
y la seguridad del universo estaría en riesgo. El macho cabrío escaparía
e Israel perdería sus vidas. Al continuar viviendo vidas perfectas sin
pecado, incluso bajo tan adversas circunstancias y presiones
En ese día no harán ningún tipo de trabajo, porque es el día del Perdón, cuando
se hace expiación por ustedes ante el SEÑOR su Dios. Cualquiera que no observe
el ayuno será eliminado de su pueblo. Si alguien hace algún trabajo en ese día,
yo mismo lo eliminaré de su pueblo.
El día de la expiación, todos los servicios en la primera sala
cesaban, incluyendo el perdón de los pecados. Levítico 16:17.
Ministerio de Curación p.437 lo describe de esta manera: “En el
día del año designado para el ministerio en el lugar más sagrado, el sumo
sacerdote ingresaba trémulo a la presencia de Dios, mientras que las nubes de
incienso velaban la gloria de su vista. En todos los atrios del templo todo sonido
era acallado. Ningún sacerdote ministraba en los altares. El anfitrión de los
adoradores, inclinándose con reverencia silente, presentaba sus súplicas a la
misericordia de Dios.”
El día de la expiación era la purificación final del año que acontecía
en el tabernáculo terrenal. Y lo que se hacía en figura en el santuario
terrenal se hacía realidad en el santuario celestial. Pero la pregunta
apremiante es, ‘¿Cuál era la diferencia entre la purificación llevada a cabo
en la primera sala con la realizada en la segunda?’ Abordaremos esto más
adelante en los siguientes capítulos para encontrar el vínculo faltante en
este aspecto crucial de la verdad actual. La expiación diaria que era
realizada para los pecadores arrepentidos en Israel era en realidad su 1
Juan 1:9. Eran purificados simbólicamente de toda iniquidad. El sacrificio
expiatorio era simbólico del Salvador del que dependemos
108 9
hoy para perdonarnos y purificarnos. Estas ofrendas mostraban la gracia
maravillosa y el amor de nuestro sustituto divino que murió en nuestro
lugar para proveer una purificación de la culpa de su carga aplastante.
La oración penitencial de David en el Salmo 51 muestra su deseo
ferviente de esta clase de purificación. “Lávame de la culpa hasta que quede
limpio y purifícame de mis pecados… Purifícame con hisopo, y quedaré limpio;
lávame, y quedaré más blanco que la nieve. “ Él también conocía por
experiencia la bienaventuranza de aquellos que han sido perdonados y
purificados de toda iniquidad. Él exclamó, “Dichoso aquel a quien se le
perdonan sus transgresiones, a quien se le borran sus pecados. Dichoso aquel a
quien el Señor no toma en cuenta su maldad y en cuyo espíritu no hay engaño. ”
Salmos 32:1 y 2.
Esta es la experiencia de la justificación. Se nos dice que “El perdón
y la justificación son una y la misma cosa. Mediante la fe, el creyente pasa de la
posición de un rebelde, un hijo del pecado y de Satanás, a la posición de un leal
súbdito de Jesucristo, no en virtud de una bondad inherente, sino porque Cristo
lo recibe como hijo suyo por adopción. El pecador recibe el perdón de sus pecados,
porque estos pecados son cargados por su Sustituto y Garante. El Señor le dice
a su Padre celestial: “Este es mi hijo. Suspendo la sentencia de condenación de
muerte que pesa sobre él, dándole mi póliza de seguro de vida -vida eterna- en
virtud de que yo he tomado su lugar y he sufrido por sus pecados. Ciertamente,
él es mi hijo amado”. De esa manera el hombre, perdonado y cubierto con las
hermosas vestiduras de la justicia de Cristo, comparece sin tacha delante de
Dios”. Fe y Obras p.103.
El ministerio diario no solo provee el perdón, sino que también otorga la
fuerza para vencer al pecado y no exista un patrón de culpa recurrente.
Esto significa que Dios ha provisto que la victoria sobre el pecado sea
representada por los artículos de mobiliario
ayuda de Su pueblo para vindicarlo. “Al pueblo que formé para mí mismo,
para que proclame mi alabanza.” Isaías 43:21. “Y he puesto mis palabras
en tu boca y te he escondido a salvo dentro de mi mano. Yo extendí el cielo
como un dosel y puse los cimientos de la tierra. Isaías 51:16.
También, en Testimonios Tomo 5 p. 746 leemos, “Está por
sobrecogernos la lucha final del gran conflicto, cuando con ‘grande potencia, y
señales, y milagros mentirosos, y con todo engaño de iniquidad’, Satanás obrará
para representar falsamente el carácter de Dios, a fin de seducir, ‘si es posible,
aun a los escogidos’. Si hubo alguna vez un pueblo que necesitase un aumento
constante de la luz del cielo, es el pueblo que, en este tiempo de peligro, Dios
llamó a ser depositario de su santa ley y a vindicar su carácter delante del
mundo.”
LAS ACUSACIONES DE SATANÁS SON DESMENTIDAS
Hay cuestiones poderosas en riesgo en este dramático episodio
con el macho cabrío. Satanás ha, desde el comienzo, acusado a Dios de
haber dado una ley que es restrictiva y que nadie puede obedecer.
Afirmó que su principio de libertad de la ley era superior a los principios
de Dios. Y este argumento debe desterrarse completamente y finalmente
en las mentes de las inteligencias del universo. Para este propósito creó
Dios una nueva clase de seres cuando creó a la humanidad que vindicaría
a Dios y las leyes de Su reino.
Por medio de los 144,000 Dios va a desmentir las acusaciones de
Satanás contra Su ley. De hecho, Él las refutará 144,000 veces. Los
144,000 obviamente no tienen una divinidad preexistente, no obstante
ninguno de ellos se rendirá a los artilugios de Satanás, incluso bajo las
circunstancias más desalentadoras durante el tiempo de la tribulación.
Ellos serán Su principal evidencia ante el observador universo
10 107
Podríamos indagar sobre el significado de esto. ¿Cómo intenta Satanás
realizar su escape? ¿Cómo se le impide escapar? ¿Por qué perdería sus
vidas Israel si escapara?
En primer lugar, llevar lejos al macho cabrío no es una lucha física.
Es simbólica. Pero será entendida por cualquier persona que alguna vez
ha intentado guiar a un cabrito a dónde no quiere ir. Tendrá una
compresión de la dificultad implicada en la lucha espiritual para llevar
lejos al macho cabrío. En el pasaje Inspirado citado arriba, tenemos un
período de tiempo para este evento culminante. Toma lugar durante la
época de las plagas. Este es también el tiempo de la angustia de Jacob
por el pueblo de Dios. Leyendo en la Inspiración lo que sucedía en este
momento, encontramos a Satanás haciendo todo lo posible para
provocar que los santos sellados se aparten de su lealtad a Dios. Si él
lograra que pecara tan solo uno de ellos, obtendría una gran victoria en
su oposición al gobierno de Dios.
Satanás ha, desde el comienzo, acusado a Dios de haber dado una
ley que nadie puede obedecer. Afirmó que su principio de libertad de la
ley era superior a los principios de Dios. Cuando Jesús vino en
humanidad caída y vivió una vida de perfecta obediencia, Satanás vio
que su acusación de que la ley no podía ser obedecida de manera perfecta
fue desmentida. Sin embargo, Satanás ha argumentado persistentemente
que Cristo era divino— que realmente Él no vino en nuestra naturaleza
caída— y porque estaba exento de nuestra herencia, Él podía rendir esa
clase de perfecta obediencia que el hombre caído no puede. Este es el
argumento del que hacen eco muchos teólogos hoy en día. Este es el
desafío que Satanás continúa arrojando a Dios. Pero Dios ha reclutado la
ayuda del hombre para refutar la afirmación de Satanás.
A través de Isaías Dios ha revelado Su propósito de reclutar la
en la primera sala. La mesa de los panes representa el pan de vida, la
Palabra de Dios. Como Jeremías declaró, “Fueron halladas Tus palabras, y
yo las comí;” así debemos alimentarnos en la Palabra para poder crecer y
ganar fuerza espiritual. El Candelabro con sus siete antorchas de fuego
representa el trabajo -que todo lo abarca- del Espíritu Santo. En
Apocalipsis 4:5 las siete antorchas de fuego se identifican como “los siete
Espíritus de Dios.” Es el Espíritu Santo quien vuelve eficaz la Palabra de
Dios en nuestras vidas, transformándonos cada vez más a la imagen de
Cristo. También inspira nuestras oraciones, las cuales ascienden a Dios
como incienso dulce, representado por el altar de incienso, situado justo
antes del velo que separaba las dos salas.
Es a través del estudio de la Palabra bajo la influencia del Espíritu
Santo, y a través de la oración diaria inspirada por el Espíritu Santo, que
podemos vivir una vida de victoria continua y obediencia. Dios ha
prometido que “mientras más pecaba la gente, más abundaba la gracia
maravillosa de Dios.” Romanos 5:20. Y Dios no permitirá que nadie sea
tentado más de lo que sea capaz de soportar.
Debe recordarse que el perdón y la justificación están
condicionados a que el creyente experimente una conversión de corazón.
Cristo le dijo a Nicodemo que solo por medio del nacimiento nuevo
puede alguien ver el reino de los cielos. Debe haber nacido del agua y del
Espíritu. Sin ello, a nadie se le otorgará un derecho en el cielo. De hecho,
la renovación de corazón es una parte vital del perdón que Cristo confiere
a aquellos que se arrepienten. “El perdón de Dios no es solo un acto de
justicia mediante el cual nos libera de la condenación. No es solo el perdón de los
pecados, sino la recuperación del pecado. Es la corriente de amor redentor que
transforma el corazón.” Montaña de Bendiciones p.114.
106 11
La experiencia de la conversión que da inicio al caminar Cristiano
debe renovarse cada día. Pablo dijo, “Muero diariamente”. Un proceso
continuo de purificación debe estar aconteciendo en el templo del alma.
Se nos dice que “Cuando nos aferramos a Cristo por la fe, nuestra obra solo ha
comenzado. Todo hombre tiene hábitos corruptos y pecaminosos que deben ser
vencidos mediante una lucha intensa. A toda alma se le pide que libre la lucha de
la fe.” Mente, Carácter y personalidad Tomo 2 p.121.
Y en Mensajes Selectos Tomo 3 p.193 leemos, “Seamos cristianos que
crecen. No debemos detenernos. Debemos estar hoy más adelante de lo que
estábamos ayer, aprendiendo todos los días a ser más confiados, a descansar más
plenamente en Jesús. Así tenemos que crecer. No alcanzaréis la perfección de un
solo salto. La santificación es una obra de toda la vida.”
PURIFICANDO EL TEMPLO DEL ALMA
Parece existir cierta confusión sobre algunas afirmaciones en
Espíritu de Profecía que hablan sobre la purificación del templo del alma
de toda corrupción al purificar Cristo el santuario celestial. Estas
declaraciones han sido aplicadas ocasionalmente a la purificación de
Daniel 8:14, la cual es el borrado de los pecados. Ha prevalecido la idea
de que cuando hemos purificado completamente nuestro templo del
alma de todos los actos de pecado por medio de la gracia y poder del
Espíritu Santo, la obra de Daniel 8:14 se realiza en nosotros, y Cristo
puede entonces limpiar los registros en el cielo y cesar Su intercesión.
Pero este concepto no reconoce la diferencia entre una purificación del
templo del alma que debe realizarse mientras el ministerio de la primera
sala todavía está aconteciendo, y la del ministerio de la segunda sala. No
distingue la diferencia entre vencer el pecado y el borrado de los pecados.
Purificar el templo del alma de todas nuestras acciones pecadoras
es algo que realizamos por medio de la fuerza otorgada por el Espíritu
Santo. Como se afirma en El Deseado de Todas las Gentes p. 466,
ÉL ÁNGEL DE APOCALIPSIS 20
La obra del pueblo de Dios se describe en el libro del Apocalipsis
por medio de ángeles que llevan a cabo la comisión divina. En
Apocalipsis 14 vemos tres ángeles que representan al pueblo de Dios,
dándole al mundo el último mensaje del cielo. De igual manera, en
Apocalipsis 18 vemos al Pueblo de Dios, representado por un ángel
poderoso, proclamando el mensaje del fuerte clamor y llamando a todas
las almas fieles a salir de Babilonia. Después en Apocalipsis 20, vemos
a otro ángel que está afianzado al dragón, el antitípico macho cabrío, y
lo ata con una gran cadena antes de su destrucción definitiva. Este ángel
encaja muy bien en el simbolismo del hombre justo que emerge del
servicio del día de la expiación en el santuario para sujetar al macho
cabrío y llevarlo lejos a su muerte definitiva. La Inspiración nos presenta
una perspectiva interesante en este episodio.
“Entonces vi que la obra de Jesús en el santuario pronto estará terminada.
Y después que Su obra haya terminado, Él vendrá a la puerta del primer
departamento, y confesará los pecados de Israel sobre la cabeza del macho cabrío
de la escenografía. Entonces se pondrá las vestiduras de la venganza. Entonces
las plagas vendrán sobre los impíos, y no vendrán hasta que Jesús se ponga esa
vestidura, y tome Su lugar sobre la gran nube blanca. Entonces mientras
las plagas están cayendo, la Cabra del Paisaje está siendo llevada lejos. Hace una
gran lucha para escapar, pero es sostenido por la mano que lo guía. Si él realizara
su fuga, Israel perdería sus vidas. Vi que tomaría tiempo llevar la Cabra del
Escaparate a la tierra del olvido después de que los pecados fueran puestos sobre
su cabeza.” Spalding and Magan Collection, p.2
De acuerdo al pasaje anterior, el macho cabrío hace un gran
esfuerzo para escapar, y si tuviera éxito, Israel perdería sus vidas.
12 105
sumo sacerdote había completado su obra en el lugar santísimo, como
observamos en Levítico 16. El comentario inspirado en este pasaje lo
declara así: “Había sido decidido todo caso y numerada cada joya. Detúvose un
momento Jesús en el departamento exterior del santuario celestial, y los pecados
confesados mientras él estuvo en el lugar santísimo fueron asignados a Satanás,
originador del pecado, quien debía sufrir su castigo.” Primeros Escritos p.280.
Es interesante notar que solo los pecados que fueron confesados
cuando Jesús estaba en el lugar santísimo fueron colocados sobre el
macho cabrío en este momento. Quizá la razón para esto sea el hecho de
que aquellos que murieron en la fe del Mensaje del Tercer Ángel
vendrán al término del tiempo de la tribulación en una resurrección
especial de la que se habla en Daniel 12:2.
La gran pregunta a la que nos enfrentamos en este punto es, ¿Quién
es el hombre justo? Sabemos por el relato de la Escritura que no se trataba
del sumo sacerdote, ni se hace mención de que fuera sacerdote en
absoluto. Aparentemente era un hombre de la congregación que
evidentemente había participado en el servicio solemne del día de la
expiación y recibió sus beneficios. Entonces, ¿a quién podría representar
este “hombre justo” en el anti-tipo?
No parece lógico esperar que el simbolismo del hombre justo
aplique a solo un individuo. Por el contrario, es más razonable considerar
que el hombre justo representa la última comunidad de santos sellados
que han experimentado los beneficios de Hechos 3:19, que es la
experiencia del día de la expiación. Serán sus pecados junto con los de
aquellos que murieron bajo la entrega de los Mensajes de los Tres
Ángeles, los que serán colocados en Satanás en este punto.
“La expulsión del pecado es la obra de la propia alma” por medio de la fuerza
catalizadora del Espíritu Santo. Pero la purificación del templo en el día
de expiación no es obra de la propia alma. Al igual que el perdón de los
pecados, se realiza por nosotros si hemos cumplido las precondiciones.
El borrado de los pecados es un perdón pleno y completo y se concreta
a través de la expiación de Cristo y no por nuestra propia expiación.
Preste atención a esta declaración del El Conflicto de los Siglos p.484.
“Con sus esfuerzos para engañar y tentar a nuestra raza, Satanás había
pensado frustrar el plan que Dios tenía al crear al hombre, pero Cristo pide ahora
que este plan sea llevado a cabo como si el hombre no hubiese caído jamás. Pide
para su pueblo, no solo el perdón y la justificación, plenos y completos,
sino además participación en su gloria y un asiento en su trono.”
Aquí parece haber un vínculo faltante en la teología con respecto
a la purificación del santuario. La purificación diaria de los pecados
conocidos no es la purificación de Daniel 8:14. Una vez que Cristo
comience el juicio de los vivos y el borrado de los pecados, será
demasiado tarde para que purifiquemos nuestro templo del alma de
todo pecado asediante.
A continuación leemos algunas afirmaciones que hablan de la
purificación del templo del alma durante el ministerio diario, la cual
necesita preceder la purificación final del santuario y del borrado de los
pecados.
¿Quién está dispuesto a colocar su dedo sobre sus ídolos acariciados de
pecado, y permitir a Cristo purificar el templo echando a los compradores y
vendedores? ¿Quién está preparado para permitir que Jesús entre al alma y lo
limpie de todo lo que mancha y corrompe?” Escuela de Educación Bíblica,
Oct.1, 1910.
104 13
“Estamos heridos, manchados de pecado; ¿qué haremos para ser sanados
de la lepra? Hasta donde esté en vuestro poder hacerlo, limpiad el templo del
alma de toda contaminación, y entonces mirad al “Cordero de Dios que quita el
pecado del mundo”. Mensajes Selectos Tomo 3 p.152.
“Para cada uno de nosotros hay una tarea para limpiar la calzada del Rey.
Deseamos confesar y renunciar a nuestros pecados y hacer que se marchen antes
del Juicio, cuando lleguen los tiempos de refrigerio de la presencia del Señor, y
Él envíe a Jesucristo, y nuestros pecados sean borrados. Lo que deseamos es una
religión pura e inmaculada ante Dios…”Manuscritos Inéditos Tomo 5 p.7.
En el antiguo Israel, hacían sonar las trompetas el primer día del
séptimo mes como un recordatorio de que el día de la expiación estaba
solo a nueve días. Era especialmente urgente que todos los pecados
fueran confesados en el santuario antes de ese día porque no podía
otorgarse el perdón el día de la expiación. Hoy en día, la llamada de Joel
2 a soplar la trompeta será hecha sonar en todas las iglesias.
“Ante la perspectiva de aquel gran día, la Palabra de Dios exhorta a su
pueblo del modo más solemne y expresivo a que despierte de su letargo espiritual,
y a que busque Su faz con arrepentimiento y humillación: ‘Toquen la trompeta
en Sion; den la voz de alarma en mi santo monte. Tiemblen todos los habitantes
del país, pues ya viene el día del Señor; en realidad ya está cerca. … Proclamen
el ayuno, convoquen a una asamblea solemne. Congreguen al pueblo, purifiquen
la asamblea; junten a los ancianos del pueblo, reúnan a los pequeños y a los niños
de pecho.’ El Conflicto de los Siglos p.311.
Hoy en día, mientras Cristo está en el lugar santísimo realizando
la expiación final para los muertos, todavía está ministrando los
beneficios de la primera sala para los vivos. Esto incluye el perdón de los
pecados
su supremacía perdida, que le fue arrebatada cuando la reforma
Protestante infligido la herida mortal. Y según las apariencias ella
“tiene todo el mundo en sus manos.”
Satanás también se regocija de recibir pleitesía casi universal a
través de la pleitesía rendida a la gran ramera. Pero desde el santuario,
emerge un “hombre justo” que va a desafiar a Satanás y sus aliados en
sus intentos de ejercer una completa dominación sobre el planeta Tierra.
Cuando el fuerte clamor haya concluido su obra y todas las almas
fieles sean llamadas de Babilonia, el ministerio de Cristo en el santuario
llegará a su término. El juicio investigador será terminado, el santuario
habrá sido purificado de los pecados del pueblo de Dios. Entonces la
secuela final tomará lugar, como se prefiguró en la ceremonia del día de
la expiación en el antiguo Israel, que lleva al ‘hombre justo’ a la escena
mundial. Levítico 16:20-22 describe este evento:
“Cuando Aarón haya terminado de hacer propiciación por el santuario,
la Tienda de reunión y el altar, presentará el macho cabrío vivo, y le impondrá
las manos sobre la cabeza. Confesará entonces todas las iniquidades y
transgresiones de los israelitas, cualesquiera que hayan sido sus pecados. Así el
macho cabrío cargará con ellos, y será enviado al desierto por medio de un hombre
designado para esto. El hombre soltará en el desierto al macho cabrío, y este se
llevará a tierra árida todas las iniquidades.”
Consideremos el significado de llevar lejos al macho cabrío y quién
es el “hombre justo” que lo guía al desierto a morir. Tenemos un buen
indicio de cuándo el macho cabrío será llevado lejos. En el antiguo
servicio ritual, esto sucedía inmediatamente después de que el
14 103
que los reformadores defendieron con arduo trabajo y por la cual sacrificaron
sus vidas...” Mensajes Selectos Tomo 3 p.386.
La luz de la verdad penetrará cada rincón de la Tierra tan
completamente que ninguna alma honesta se dejará en Babilonia. Todos
se apresurarán a salir como Lot se apresuró a salir de Sodoma. Pero,
¿qué quedará entonces? Solo aquellos que hayan recibido la marca de
la obra maestra de Satanás. Él será el total maestro del mundo excepto
por un comparativamente menor remanente que tiene el sello de Dios
perfeccionado en ellos. Ahora, si él puede deshacerse del odioso
remanente, finalmente habrá conquistado su meta de establecer su reino
y autoridad en este planeta sin impugnaciones de aquellos que
permanecen aún leales al Creador. Pero mientras él y la gran ramera se
felicitan diciendo “Estoy sentada como reina; no soy viuda ni sufriré jamás.”
(Apocalipsis 18:7), una sorpresa inesperada los espera. Al terminar el
fuerte clamor cuando termine el período de prueba, entrará en escena
un “hombre justo” del santuario, presentado al final del servicio del día
de la expiación, para sujetar al macho cabrío y llevarlo a morir en el
desierto.
¿Quién podría ser este hombre justo, y cuál es la importancia de
que lleve el macho cabrío hacia su destrucción definitiva? ¿Cómo logra
esta difícil proeza? ¿Qué sucedería si el macho cabrío escapara de sus
manos? Estas son preguntas importantes que pueden ser más cruciales
de lo que muchos hayan pensado.
EL HOMBRE JUSTO
Cuando la marca de la bestia haya sido universalmente aplicada,
y todo el mundo rinda pleitesía a la bestia, la obra maestra de Satanás
en este mundo habría sido perfeccionada. Y la gran ramera del
Apocalipsis estará confiada de que una vez más ha recuperado
y el revestimiento de la rectitud imputada, que nos da un estatuto de
perfección ante Dios. También contamos con la transferencia de nuestros
pecados al santuario celestial, y con la gracia para vencer todo asedio a
través de la fuerza de la lluvia tardía. Aquellos que reciben estos
beneficios estarán listos para el juicio y la resurrección. Pero esto no será
suficiente para presentarse sin un mediador después de que el período
de prueba ha terminado. También necesitamos los beneficios de la
segunda sala para presentarnos después de que la prueba ha terminado.
QUÉ SUCEDE DESPUÉS DEL PERDÓN
Otros dos puntos que deben ser entendidos tienen que ver con la
responsabilidad permanente de los pecados perdonados y el efecto
dañino del pecado en la mente y en la consciencia, que no es eliminado
completamente durante el ministerio de la primera sala. Cuando los
pecados son perdonados, no son borrados como muchos piensan. Dios
intenta asegurar al pecador arrepentido que sus pecados son borrados
usando expresiones como “llevarlos tan lejos como está el este del oeste”,
o “arrojarlos a las profundidades del mar”. Se insta al pecador perdonado
a considerar sus pecados como si hubieran sido borrados. Sin embargo,
hallamos muchas afirmaciones que muestran que los pecados no son
realmente borrados hasta el juicio. “Es imposible que los pecados de los
hombres sean borrados antes del fin del juicio en que sus vidas han de ser
examinadas.” El Conflicto de los Siglos, p.485.
Consideremos qué es lo que sucede cuando el pecado es perdonado. En
las siguientes referencias de la Inspiración, descubrimos que fue la culpa
la que nació por la víctima expiatoria. Es la culpa la que causa un
alejamiento entre el pecador y el Salvador, y es la culpa la que tiene que
ser eliminada antes de que puede haber comunicación y sanación.
102 15
“La ley de Dios quebrantada exigía la vida del transgresor. La sangre, que
representaba la vida comprometida del pecador, cuya culpa cargaba la víctima, la
llevaba el sacerdote al lugar santo y la salpicaba ante el velo, detrás del cual estaba
el arca que contenía la ley que el pecador había transgredido. Mediante esta
ceremonia, el pecado era transferido figurativamente, por intermedio de la sangre,
al santuario.” El Conflicto de los Siglos p. 418.
“Cualquiera que sea el pecado, si el alma se arrepiente y cree, la culpa
queda lavada en la sangre de Cristo.” El Deseado de Todas las Gentes 322.
Pero el perdón no eliminó la responsabilidad del pecador por sus pecados.
Por la parábola de los dos deudores de Mateo 18 sabemos que el hombre
al que se le habían perdonado 10,000 talentos subsecuentemente perdió
su perdón cuando se rehusó a perdonar al hombre que le debía 100
peniques. Ver COL p. 251. El perdón de los pecados es condicional
durante el período probatorio. Preste atención a lo siguiente.
“En la ofrenda por el pecado que se ofrecía durante el año, se había
aceptado un substituto en lugar del pecador; pero la sangre de la víctima no había
hecho completa expiación por el pecado. Solo había provisto un medio en virtud
del cual el pecado se transfería al santuario. Al ofrecerse la sangre, el pecador
reconocía la autoridad de la ley, confesaba la culpa de su transgresión y expresaba
su fe en Aquel que había de quitar los pecados del mundo; pero no quedaba
completamente exonerado de la condenación de la ley.” Patriarcas y Profetas
p.355-356.
Antes de que el pecador sea liberado completamente de la
responsabilidad de sus pecados, se le dará un período de prueba para ver
si continúa estando arrepentido por ellos. Es como con un hombre
convicto de un crimen. El juez puede darle un perdón condicional con
una condena suspendida. Se le otorga libertad condicional, durante la
cual estará bajo la supervisión de un oficial de rehabilitación, Si reincide
momentáneamente en su anterior crimen, pero está profundamente
posible fuese, aun a los escogidos”. Testimonios Tomo 9 p.16.
“…El SEÑOR se aparecerá sobre ellos, y como un relámpago saldrá su
flecha. ¡El SEÑOR omnipotente tocará la trompeta y marchará sobre las
tempestades del sur!” Zacarías 9:12-14.
DOBLE RESPUESTA AL FUERTE CLAMOR
La obra del pueblo remanente de Dios bajo la lluvia tardía
tendrá dos efectos diferentes sobre las personas de la Tierra. Las almas
honestas en Babilonia que hayan sido engañadas por ella, responderán
a los mensajeros de la verdad con alegría. Para ellos, estos mensajeros
serán como el suave y refrescante rocío de la mañana. Pero para
aquellos que se resistan a la obra del Espíritu de Dios, los mensajeros
de la verdad serán como un león que ruge. Vea Miqueas 5:7-8.
Cuando el fuerte clamor del ángel de Apocalipsis 18 sea
escuchado, despertará a todo el mundo de su sopor. Aquellos que
respondan de manera positiva serán marcados con el sello de Dios y a
su vez ayudarán a esparcir la luz. Serán el medio por el cual el fuerte
clamor crecerá a un poderoso crescendo.
“Habrá muchos que saldrán de las filas del mundo, de las diferentes
iglesias—aun de la Iglesia Católica—, cuyo celo excederá en mucho al de los que
han estado hasta ahora en las filas para proclamar la verdad. Por esta razón los
obreros de la hora undécima recibirán su denario. Estos verán la aproximación
de la batalla y darán a la trompeta un sonido cierto. Cuando la crisis esté sobre
nosotros, cuando venga el tiempo de la calamidad, ellos avanzarán para ocupar
la vanguardia, se ceñirán la armadura completa de Dios, y exaltarán su ley; se
adherirán a la fe de Jesús, y sostendrán la causa de la libertad religiosa
16 101
Durante la crisis provocada por la leyes de persecución que serán
promulgadas, habrá un cribado poderoso entre el pueblo profeso de Dios.
“Cual nube, el tamo será llevado por el viento, aun en los lugares donde solo
vemos sembrado hermoso trigo.” Testimonios Tomo 5 p. 81. “En el gran
zarandeo que pronto se llevará a cabo podremos medir más exactamente la fuerza
de Israel.” 5T 80. Muchos que han profesado su fe en el Mensaje del Tercer
Ángel abandonarán sus puestos y se unirán a las filas del enemigo. Todos
serán puestos a prueba así como el ejército de Gedeón fue puesto a prueba
antes de la batalla con los Madianitas. El resultado final de este proceso
de cribado se describe en la Inspiración.
“El gran asunto que muy pronto afrontaremos, eliminará a todos
aquellos a quienes Dios no ha señalado, y él tendrá un ministerio puro,
verdadero, santificado, preparado para la lluvia tardía...” Mensajes Selectos
Tomo 3 p.385
Cuando el pueblo de Dios haya recibido la experiencia descrita en
Hechos 3:19 con su liberación de energía espiritual sin precedente, el
escenario estará dispuesto para que los dos ejércitos enemigos se
enfrenten cara a cara en una lucha final por la vida y la muerte. Satanás
ha estado preparando su vasto ejército y consolidando sus fuerzas. Y
Cristo también ha estado preparando Sus soldados para la batalla contra
los poderes corruptos de la Tierra que se han entregado al control de
Satanás. Ninguna pelea o batalla de la Tierra hasta ahora puede
compararse con la contienda global entre la religión de la Biblia y la
religión de la fábula.
“Es imposible dar una idea de lo que experimentará el pueblo de Dios que
viva en la tierra cuando se combinen la manifestación de la gloria de Dios y la
repetición de las persecuciones pasadas. Andará en la luz que emana del trono
de Dios. Por medio de los ángeles, las comunicaciones entre el cielo y la tierra se
mantendrán constantes. Por su parte Satanás, rodeado de sus ángeles, y
haciéndose pasar por Dios, hará toda clase de milagros a fin de seducir, si
100
arrepentido, él continuará siendo cubierto por su perdón condicional. Sin
embargo, antes de que termine su libertad condicional, necesita
demostrar que ha vencido sus debilidades. Ya no se complacerá más en
sus antiguos hábitos. Si ha renunciado a sus costumbres anteriores
durante su período de prueba, el juez le otorgará un perdón no-
condicional, y se le liberará completamente de cualquier registro de sus
crímenes.
Así funciona el plan de salvación. A todos los que han pecado se
les otorga un período de prueba para demostrar si continúan
arrepentidos por sus pecados, y se han rehabilitados de ellos. Si este es el
caso, se le otorgará al pecador un perdón incondicional y sus pecados
serán borrados, ya no serán más testigos en su contra.
EL CONOCIMIENTO DEL MAL
Existe otro aspecto del pecado que no se aniquila cuando el pecado
es perdonado. Esto es lo que la Inspiración llama ‘el conocimiento del
mal’. Esto nos lleva de vuelta al Jardín del Edén con su árbol del
conocimiento del bien y del mal. El conocimiento del mal que Dios no
deseaba que nuestros primeros padres tuvieran no era solamente el
conocimiento acerca del mal. Dios y los ángeles santos sabían del mal
gracias a la deserción de Lucifer. El ‘conocimiento del mal’ que ha
causado estos estragos en la especie humana no es únicamente saber de
la existencia del mal, sino es una experiencia en el mal que solo puede
provenir del pecado personal. Observe el siguiente texto de la
Inspiración.
“A Adán y a Eva se les permitió participar de cada árbol del huerto, con excepción
de uno. Había una sola prohibición. El árbol prohibido era tan atrayente y
hermoso como cualquiera de los árboles del huerto. Se lo llamó el árbol del
conocimiento, porque al participar de ese árbol, del cual Dios había dicho
17
‘no comerás’ (Génesis 2:17), tendrían un conocimiento del pecado y
experimentarían la desobediencia.” KH p.14.
Después de que pecaron, sintieron terror y culpa por lo que habían
hecho. Cuando escucharon la voz de Dios en el jardín llamándolos, se
escondieron en los rincones más apartados del jardín, en vez de recibir
con gozo a su Creador como siempre lo habían hecho antes. Pero cuando
se arrepintieron afligidamente de su desobediencia, Dios
bondadosamente los perdonó. Su culpa fue asumida por el “El Cordero
que fue inmolado desde el principio del mundo.” No obstante, no se les
permitió permanecer en el jardín, incluso cuando prometieron nunca
volver a desobedecer. ¿Por qué no podían quedarse en el hermoso jardín
que habían disfrutado tanto? Dios condescendió a explicarles el problema
que el pecado había causado.
“Después de su pecado, Adán y Eva no pudieron seguir morando en el
Edén. Suplicaron fervientemente a Dios que les permitiese permanecer en el
hogar de su inocencia y regocijo. Confesaron que habían perdido todo derecho a
aquella feliz morada, y prometieron prestar estricta obediencia a Dios en el futuro.
Pero se les dijo que su naturaleza se había depravado por el pecado, que había
disminuido su poder para resistir al mal, y que habían abierto la puerta para que
Satanás tuviera más fácil acceso a ellos. Si siendo inocentes habían cedido a la
tentación; ahora, en su estado de consciente culpabilidad, tendrían menos fuerza
para mantener su integridad.” Patriarcas y Profetas p.61.
Podemos ver en el pasaje anterior un poco del daño específico que
provoca una experiencia de pecado. Pervierte la naturaleza y aminora la
fuerza espiritual para resistir el mal. También abre una puerta para que
Satanás acceda más fácilmente al corazón y la mente. El perdón del
pecado no deshizo los efectos perniciosos que el pecado había traído
CAPÍTULO OCHO
LA GRAN CONFRONTACIÓN FINAL
“Estos tienen un mismo propósito, que es poner su poder y autoridad a
disposición de la bestia. Le harán la guerra al Cordero, pero el Cordero los vencerá,
porque es Señor de señores y Rey de reyes, y los que están con él son sus llamados,
sus escogidos y sus fieles.” Apocalipsis 17:13-14.
“El llamado mundo cristiano será el teatro de acciones grandes y decisivas.
Hombres en posiciones de autoridad pondrán en vigencia leyes para controlar la
conciencia, según el ejemplo del papado. Babilonia hará que todas las naciones
beban del vino del furor de su fornicación. Toda nación se verá envuelta… Habrá
un vínculo de unión universal, una gran armonía, una confederación de fuerzas
de Satanás. ‘Y entregarán su poder y su autoridad a la bestia’… En la guerra
que se librará en los últimos días estarán unidos, en oposición al pueblo de Dios,
todos los poderes corruptos que han apostatado de su lealtad a la ley de Jehová.”
Mensajes Selectos Tomo 3 p.392-393.
El mundo pronto se encontrará con una terrible crisis conforme el
conflicto de los siglos se acerque a la confrontación final. La Inspiración
nos provee descripciones detalladas de las cosas que pronto vendrán.
Cuando el pueblo de Dios esté listo, se permitirá que los eventos
predichos lleguen a una conclusión final que marcará el fin de la historia
humana. Y las cuestiones involucradas son reveladas abiertamente.
“La oposición de las leyes humanas a los preceptos de Jehová producirá el
último gran conflicto de la controversia entre la verdad y el error. Estamos
entrando ahora en esa batalla, que no es simplemente entre iglesias rivales que
contienden por la supremacía, sino entre la religión de la Biblia y las religiones
de las fábulas y tradiciones. Los agentes que se han unido contra la verdad están
ya obrando activamente.” Profetas y Reyes 625.
18 99
Sabemos por la Inspiración que está íntimamente conectado con la
ley del domingo. Y también sabemos que se trata del borrado de los
pecados, la lluvia tardía y el sellado. Estos son los eventos más
trascendentales a los que nos enfrentamos en estos tiempos finales.
Importante es, entonces, que nos volvamos inteligentes sobre estas cosas,
para que podamos prepararnos para ellas.
a Adán y Eva. Debido a esto, no podían quedarse en el Jardín del Edén
ni mantener una abierta comunión con Dios. No obstante, cuando la obra
de expiación se haya completado, la Biblia nos dice que “lo verán cara a
cara, y llevarán su nombre en la frente.” Apocalipsis 22:4.
EL PECADO, UNA MONEDA DE DOS CARAS
El pecado es como una moneda de dos caras. Un lado es la faceta
de la culpa y la condenación. El sentido de culpa y de condenación que
Adán y Eva sintieron creó un distanciamiento de Dios y una aversión a
Su presencia. No obstante, cuando se perdona el pecado y se quita la
culpa, la comunicación entre el alma y Dios es restaurada y el proceso de
sanación puede comenzar. Del otro lado de la mano está la faceta del
‘conocimiento del mal’, la experiencia en la desobediencia, la cual no
desaparece cuando el pecado es perdonado. Este aspecto del pecado con
frecuencia se ignora o no se comprende. Bastó un solo instante para que
Adán y Eva obtuvieran un ‘conocimiento del mal,’ pero descubrieron
que no se librarían de él ningún día de sus vidas. La Inspiración nos dice,
“Era voluntad de Dios que la inmaculada pareja no conociese
absolutamente nada de lo malo. Les había dado abundantemente el bien, y vedado
el mal. Pero, contra su mandamiento, habían comido del fruto prohibido, y ahora
continuarían comiéndolo y conocerían el mal todos los días de su vida.”
Patriarcas y Profetas p.59.
El conocimiento del mal pone al pecador en una distintiva desventaja
que obstaculiza sus mayores esfuerzos para servir al Señor. Esto fue
hecho trágicamente evidente en la experiencia de Adán y Eva, que
habían caído de un estado inmaculado a un estado de pecado.
98 19
“Adán y Eva habían escogido el conocimiento del mal, y si alguna vez habían de
recobrar la posición perdida, tenían que hacerlo en las condiciones desfavorables
que ellos mismos habían provocado.” La Educación p.25. Cuando Adán y
Eva transgredieron por primera vez, pensaron que era un asunto menor,
algo que Dios en Su gran amor estaría dispuesto a pasar por alto. Pero
después de ver las terribles consecuencias que había traído el pecado,
cayeron en la cuenta como nunca antes la malignidad del pecado. En ese
momento ellos también pudieron apreciar el valor del sacrificio y de la
gracia que había sido otorgada para salvarlos de la esclavitud del pecado
y de la culpa.
Si realmente deseamos conocer de qué habla Daniel 8:14,
necesitamos comprender el cambio en la condición del hombre con la
llegada del ‘conocimiento del mal.’ Esto se nos dice en la Inspiración. A
fin de comprender qué abarca la obra de la educación (redención), necesitamos
considerar tanto la naturaleza del ser humano como el propósito de Dios al crearlo.
Hemos de considerar también el cambio que sufrió la humanidad por la
introducción del conocimiento del mal, y el plan de Dios para cumplir, sin
embargo, su glorioso propósito en la educación (redención) de la especie humana.”
La Educación 14-15.
El cambio realizado por el conocimiento del mal es visto más
claramente en la experiencia de Adán y Eva. La caída de un estado
perfectamente sin pecado a un estado de pecado fue una experiencia
dramática y trágica, difícil de entender completamente por los seres
humanos caídos. Al leer la narración provista en la Inspiración de qué
tan diferente se volvió el mundo debido a aquel pecado, y cómo afectó no
solo la naturaleza humana, sino toda la creación de Dios, podemos
comenzar a ver lo tremendamente maligno que es el pecado. Como seres
humanos caídos, todos hemos repetido el pecado de Adán y Eva
participando, por así decirlo, del árbol del conocimiento del bien y del
mal.
término de su prueba. Escucharán el clamor, “El Esposo viene; salir a
Recibirle.”
“Por tanto, también vosotros estad apercibidos; porque el Hijo del hombre
ha de venir a la hora que no pensáis.” Mateo 24:44. Por la noche, no os acostéis
sin antes haber confesado vuestros pecados. Así hacíamos en 1844, cuando
esperábamos ir al encuentro del Señor. Ahora ese acontecimiento está más
cercano que cuando por primera vez creímos. Estad siempre apercibidos, por la
tarde, por la mañana y al mediodía, para que cuando repercuta el clamor: “¡He
aquí, el esposo viene, salid a recibirle!” podáis, aun si este grito os despertase del
sueño, ir a su encuentro con las lámparas aderezadas y encendidas.”
Testimonios Tomo 9 p.48.
En relación con esta parábola llega una advertencia de no esperar
hasta que se escuche el clamor antes de llenar nuestras lámparas con el
aceite del Espíritu de Dios. El período probatorio termina primero con la
“casa de Dios” porque el juicio comienza con la casa de Dios. Vea 1 Pedro
4:17.
“A menos que humillen sus corazones ante el Señor, muchos serán
sorprendidos y chasqueados cuando resuene el grito: “He aquí, el esposo viene”.
Testimonios Tomo 9 p.155.
“No podemos estar listos para encontrar al Señor despertándonos cuando
se oye el clamor: “He aquí el esposo”, y entonces recoger nuestras lámparas
vacías para llenarlas.” Nuestra única esperanza es que cada día amemos a Dios,
amemos la verdad, no en aras de sus claros argumentos, sino por ser solo la
verdad. Debemos traer la verdad a nuestros corazones y nuestras mentes, y cada
día ser luces vivientes y brillantes, que aprenden cada día más sobre Jesús.”
Señales de los Últimos Tiempos, 6 de agosto de 1894.
Es importante para nuestra supervivencia espiritual que
conozcamos lo que tendrá lugar cuando comience el juicio con los vivos.
20 97
vírgenes durmientes, a las prudentes y a las fatuas. Justo antes de que
el juicio comenzara para los muertos en 1844, se dio una señal, referida
como el clamor de medianoche. Si se dio una señal que despertó al
pueblo de Dios antes de que el juicio comenzara para los muertos, ¿no
es lógico que se dé otra señal antes de que el juicio comience para los
vivos? Ciertamente, Ellen White nos dice que "mi mente fue llevada al
futuro cuando se dará la señal, "el esposo viene, salid a recibirlo".
El pueblo remanente de Dios no será casado con Cristo mientras
Él realiza la expiación final sin su deseo, consentimiento y cooperación.
Cristo no hace nada por Su pueblo sin su cooperación. Y para que ellos
cooperen con Él, deben estar conscientes de lo que Él está intentando
hacer por ellos.
En la parábola de las diez vírgenes, el llamado a la medianoche
fue escuchado por las prudentes y las fatuas. Ambas despertaron de su
letargo. Ambas estaban conscientes del evento que iba a suceder. Esto
sucedió en 1844 justo antes de que el juicio de los muertos comenzara,
y será cumplido de nuevo antes del juicio de los vivos.
“A menudo se me refiere a la parábola de las diez vírgenes, cinco de las
cuales eran sabias, y cinco fatuas. Esta parábola ha sido y será cumplida al pie
de la letra, porque posee una aplicación especial para este tiempo, y, al igual que
el mensaje del tercer ángel, ha sido cumplida y va a continuar siendo verdad
presente hasta el fin del tiempo.” The Review and Herald, 19 de agosto de
1890.
Pablo les dijo a los creyentes tesalonicenses que no estaban en la
oscuridad con respecto al día del Señor, así que no los tomaría por
sorpresa. De igual manera el pueblo de Dios en estos últimos días no
estará en la oscuridad con respecto a los eventos conectados con el
96
Preste atención a lo siguiente de La Educación p.29:
“En la vida de todo ser humano se manifiesta el resultado de haber comido
del árbol del conocimiento del bien y del mal. Hay en su naturaleza una
inclinación hacia el mal, una fuerza que solo, sin ayuda, él no podría resistir.”
Esta inclinación hacia el mal no se refiere a la naturaleza física donde la
naturaleza inferior clama obtener predominio sobre la naturaleza inferior.
De acuerdo a Hebreos 2:14-18, Cristo también participó de nuestra
naturaleza física debilitada y degradada cuando vino a vivir en la
humanidad, no obstante nunca tuvo una inclinación al mal ni una
propensión pecadora en Su naturaleza espiritual. Pero, como Adán y Eva
descubrieron para su pesar, el haber cometido ese solo delito pervirtió su
naturaleza espiritual y creó en ellos una ’inclinación al mal,’ una
propensión a pecar que no habían tenido antes.
Más aún, el arrepentimiento y el perdón no eliminaron el efecto de
la caída. La ‘ley del pecado’ continuará operando en sus experiencias
diarias. Pablo reconoció esto cuando escribió: “Y, si hago lo que no quiero,
ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que habita en mí. Así que descubro
esta ley: que, cuando quiero hacer el bien, me acompaña el mal. Porque en lo
íntimo de mi ser me deleito en la ley de Dios; pero me doy cuenta de que en los
miembros de mi cuerpo hay otra ley, que es la ley del pecado. Esta ley lucha contra
la ley de mi mente, y me tiene cautivo.” Romanos 7:20-23.
Justo desde el comienzo, Dios prometió a la humanidad caída en
Génesis 3:15 que el poder divino sería provisto para contrarrestar la ‘ley
del pecado’ para que el pecado no tuviera dominio sobre ellos.
Pablo escribió, “No permitan que el pecado controle la manera en que
viven; no caigan ante los deseos pecaminosos.” Romanos 6:12 y 14.
21
Si bien el pecado no reina, permanece aún. 1 Juan 1:8 nos dice “Si
afirmamos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no
tenemos la verdad. “ Y el Hombre Sabio escribió en Proverbios 20:9, ¿Quién
puede afirmar: «Tengo puro el corazón; estoy limpio de pecado»?
UN PELIGRO PARA TODA LA VIDA
El efecto permanente del conocimiento del mal se revela
claramente en la Inspiración. Si deseamos entender en qué consiste la
obra específica de Cristo en el lugar santísimo, debemos prestar atención
especial a lo siguiente. En Jeremías 17:1 leemos, “El pecado de Judá está
escrito con cincel de hierro; grabado está con punta de diamante sobre la tabla de
su corazón y sobre los cuernos de sus altares.” Y el siguiente versículo nos
dice por cuánto tiempo estará escrito el pecado en la mesa del corazón.
Será “Como ellos se acuerdan de sus hijos, así se acuerdan de sus altares y de sus
Aseras junto a los árboles frondosos, en las altas colinas.” Jeremías 17:2
Mientras el pecado esté grabado en el corazón y en la conciencia
del individuo, el pecado será recordado. El conocimiento del mal que
reside en la mente le da a Satanás una ventaja que nunca hubiera tenido
sobre alguien que nunca ha pecado. No la había tenido sobre Adán y Eva
antes de que cayeran, y nunca la tuvo sobre Cristo. Pero después de que
Adán y Eva cayeran de la gracia, Dios les advirtió que habían abierto una
manera para que Satanás tuviera fácil acceso a ellos. Encontrarían una
respuesta condicionada al pecado que nunca antes habían experimentado.
Como se lee en el Ministerio de Curación p.451, “Las tentaciones del exterior
hallan eco en el corazón, y los pies se dirigen imperceptiblemente hacia el mal.”
A continuación se presentan algunas de las numerosas
afirmaciones relacionadas con los problemas que causa una experiencia
en el pecado. “Una vez violada, la conciencia se debilita mucho.
La plenitud del poder divino y la revelación de la presencia
divina solo puede otorgarse a aquellos que han sido purificados de toda
corrupción y a los que se les ha borrado sus pecados.
“Cuando, en su estado mortal, Juan contempló la gloria de Dios, cayó
como muerto; no pudo soportar la visión. Pero cuando los hijos de Dios hayan
recibido la inmortalidad, lo verán “como él es”. Estarán delante del trono,
aceptos en el Amado. Todos sus pecados habrán sido borrados, todas sus
transgresiones expiadas. Entonces podrán mirar sin velo la gloria del trono de
Dios.” Maranata p.349.
ESPERANDO AL ESPOSO
El juicio será cuando el matrimonio entre Cristo y Su pueblo sea
consumado. Primeros Escritos p. 280 declara, “Todos los casos habían sido
fallados para vida o para muerte. Mientras Jesús oficiaba en el santuario, había
proseguido el juicio de los justos muertos y luego el de los justos vivientes.
Cristo, habiendo hecho expiación por su pueblo y habiendo borrado sus pecados,
había recibido su reino. Estaba completo el número de los súbditos del reino, y
consumado el matrimonio del Cordero.”
Se nos dice que antes del juicio habrá un llamado para las
vírgenes que duermen para despertarlas; “Mi mente fue llevada al
futuro cuando se dará la señal, “’El esposo viene, salid a recibirlo.’ Pero
algunas habrán tardado en obtener el aceite para rellenar sus lámparas, y
demasiado tarde descubrirán que el carácter; representado por el aceite, no es
transferible.” RH Feb.11, 1896.
De acuerdo a Mateo 25:6, se dará una señal que despertará a las
22 95
Cabe preguntarse, ¿por qué el borrado de los pecados es una parte
tan integral de la ecuación espiritual que brindará una demostración tan
poderosa de la energía espiritual? ¿No podía Cristo derramar la lluvia
tardía sin el borrado de los pecados? La respuesta es 'No'. Por ejemplo,
si tenemos un motor eléctrico que está ajustado para 110 voltios de
energía, no podemos conectarlo a una fuente de energía de 220 voltios, o
quemará el motor. De la misma manera, mientras el pueblo de Dios tenga
todavía el conocimiento del mal, el corrupto canal humano que hemos
discutido previamente, el alto voltaje espiritual de la lluvia tardía, lo
consumirá. Para el pecado, la presencia del Espíritu de Dios es un fuego
que consume. Por lo tanto, Dios ha prometido dar “la lluvia temprana
moderadamente” Joel 2:23. Dios debe darnos el Espíritu en cantidades
moderadas después de que hayamos nacido nuevamente, gradualmente
aumentado la medida mientras crecemos espiritualmente y nos
purificamos de nuestros pecados ocultos. Al someternos diariamente a Él,
podremos recibir cada vez más de la llenura de Su Espíritu. En
Pentecostés, vemos todo el poder de la lluvia temprana, y sus gloriosos
resultados. No obstante, se nos dice que la lluvia tardía vendrá con
mayor poder y abundancia. Observe lo siguiente:
“Es con ferviente anhelo que anticipo el tiempo cuando se repetirán los
sucesos del día de Pentecostés aun con mayor poder que en esa ocasión. Juan dice:
“Vi a otro ángel descender del cielo con gran poder; y la tierra fue alumbrada con
su gloria”. Entonces, como en el momento del Pentecostés, la gente oirá la verdad
que será presentada a cada, hombre en su propio idioma.” Comentario Bíblico
Adventista Tomo 6 p.1055. (Vea también Lecciones Objetivas de Cristo
p.121)
Necesita fuerza y vigilancia constante y oración incesante. Usted está en un
resbaladero. Necesita toda la fuerza que la verdad pueda darle para fortalecerlo y
salvarlo del naufragio completo.” Testimonios Tomo 2 p.90.
“El que cedió una vez a la tentación cederá con más facilidad la segunda
vez. Toda repetición del pecado aminora la fuerza para resistir, ciega los ojos y
ahoga la convicción.” Patriarcas y Profetas p.268.
Además, la permanencia del efecto del conocimiento del mal que
resulta del pecado también se muestra claramente en lo siguiente.
“Es cierto que algunos podrán ver su insensatez y arrepentirse.
Dios puede perdonarlos. Pero han herido sus propias almas, y han traído
sobre ellos un peligro que durará toda su vida. El poder de discernir, que
siempre debe ser mantenido aguzado y sensible para distinguir entre lo
correcto y lo erróneo, en gran parte se destruye. No son rápidos para
reconocer la voz guiadora del Espíritu Santo o para discernir los engaños
de Satanás. Demasiado a menudo, en tiempo de peligro, caen en la
tentación, y son alejados de Dios. El final de su vida amante de los
placeres es la ruina para este mundo y para el mundo venidero.”
Lecciones Objetivas de Cristo p.55.
“Los pensamientos, si se les permite discurrir por niveles bajos, pronto
pervierten las facultades del ser. Como el Israel antiguo, los amadores de los
placeres comen y beben, y se levantan a regocijarse. Abundan el bullicio y la
parranda, las carcajadas y la hilaridad. Por medio de estas cosas, la juventud
sigue el ejemplo de los autores de los libros que son puestos en sus manos para
estudiar. El mayor de los males es el efecto permanente que estas cosas tienen
sobre el carácter. Los que están al frente de estas cosas le ocasionan a la causa una
mancha que no se borra con facilidad. Dañan sus propias almas y llevarán
94 23
las cicatrices por toda la vida. El malhechor podría reconocer sus pecados y
arrepentirse; Dios podría perdonar al transgresor; pero la facultad del
discernimiento, que debiera mantenerse viva y sensible para discernir entre lo
sagrado y lo profano, es en gran medida destruida.” Testimonios Tomo 8 p.66.
La siguiente afirmación muestra la relación entre el registro de los
pecados en los libros del cielo y el registro en el alma.
“Oh, si todos los jóvenes y los adultos pudieran ver, como yo he visto, el
espejo de la vida de las personas que se presenta delante de ellas, considerarían
con más seriedad los pequeños deberes de la vida. Cada error, aunque parezca sin
importancia, deja una cicatriz en esta vida y una mancha en los registros
celestiales.” Dios nos Cuida p.227.
En la siguiente referencia vemos cómo los pecados pasados le dan
una palanca a Satanás con la cual asalta la mente con sus seductoras
tentaciones.
“Y nadie se lisonjee pensando que los pecados acariciados por un tiempo
pueden ser fácilmente abandonados en alguna ocasión futura. Esto no es así. Cada
pecado acariciado debilita el carácter y fortalece el hábito; y el resultado es una
depravación física, mental y moral. Podéis arrepentiros del mal que habéis hecho,
y encaminar vuestros pies por senderos rectos; pero el amoldamiento de vuestra
mente y vuestra familiaridad con el mal, os harán difícil distinguir entre lo
correcto y lo erróneo. Mediante los malos hábitos que hayáis formado, Satanás os
asaltará repetidas veces.” Lecciones Objetivas de Cristo p.281.
(Para más referencias sobre este punto, vea Proverbios 5:22, DA
302, TM 447, FE 195, 3BC 1158)
NO HAY NINGÚN JUSTO
La Biblia nos dice que todos hemos pecado y hemos sido hallados
faltos de la gloria de Dios. Así que no “No hay ni un solo justo, ni siquiera
uno.” Romanos 3:10. Todos hemos adquirido un conocimiento del mal
con sus efectos nocivos. Por ello “Ningún apóstol o profeta
E=MC2 bíblico que Dios nos dio hace más de 170 años. Ha estado en
nuestras pizarras teológicas por todos estos años como una teoría, pero
nunca se ha implementado. Sin embargo, qué importante es en este
tiempo cuando la batalla del Armagedón se acerca a su confrontación
final que el pueblo de Dios implemente esta ecuación divina para la
liberación del poder espiritual sin precedente que llevará al conflicto de
los siglos a una conclusión expedita.
En el ámbito espiritual, existen dos elementos inherentes en
Daniel 8:14 que, cuando se combinen, liberarán abundancia de luz y
poder espiritual sin precedentes. Estos dos elementos son identificados
en Hechos 3:19. “Por tanto, para que sean borrados sus pecados, arrepiéntanse
y vuélvanse a Dios, a fin de que vengan tiempos de descanso de parte del Señor.”
Aquí tenemos el vínculo faltante. Es el borrado de los pecados con la
lluvia tardía lo que da a esta verdad tal poder. Cuando los pecados del
pueblo de Dios sean borrados y las ropas viles sean quitadas, serán
llenados con la lluvia tardía y la Tierra se iluminará con la gloria de Dios.
Cuando esto suceda, la obra se propagará como fuego en el
rastrojo. Joel 2:2-11 nos da una imagen gráfica del último ejército de Dios
avanzando para pelear la batalla del Armagedón. Primeros Escritos
p.278 también nos otorga un emocionante adelanto de lo que habrá de
ser.
“La luz derramada sobre los fieles penetraba por doquiera; los que en las
iglesias tenían alguna luz, y no habían oído ni rechazado los tres mensajes,
obedecieron la exhortación y abandonaron las iglesias caídas. … El tercer
mensaje iba a efectuar su obra. Todos iban a ser probados por él, y las almas
preciosas iban a ser invitadas a salir de las congregaciones religiosas. Una fuerza
compulsiva movía a los sinceros, al paso que la manifestación del poder de Dios
infundía temor y respeto a los incrédulos parientes y amigos para que no se
atrevieran ni pudieran estorbar a quienes sentían en sí la obra del Espíritu de
Dios.”
24 93
demonios. Es una guarida para todo espíritu inmundo, un nido para todo buitre
repugnante y una cueva para todo animal sucio y espantoso’.” Apocalipsis
18:1-2
Aquí hemos descrito la mayor liberación de poder espiritual que
el mundo haya visto. La mayor liberación de energía física que este
mundo ha conocido vino como resultado de la implementación de una
ecuación especial desarrollada por Albert Einstein a comienzos del siglo
20. En su forma más simple, esa ecuación es E=MC2. Esta fórmula ha
estado en las pizarras de los principales físicos del mundo por varias
décadas. Era solo una teoría interesante que nadie había intentado
implementar.
Entonces la Segunda Guerra Mundial estalló en Europa. De pronto
hubo una carrera febril por ambas facciones del conflicto para
implementar esta fórmula y fabricar una bomba atómica. Se convirtió en
la principal prioridad para ambos bandos, porque era evidente que quien
la desarrollará primero dominaría al mundo. Y el mundo no ha sido el
mismo desde entonces. El desarrollo de esta simple ecuación de Einstein
catapultó el mundo a nuestra era atómica moderna.
Dios también ha dado a Su iglesia remanente una ecuación simple,
si se implementa, resultará en la más grande liberación de energía
espiritual que este mundo haya presenciado. Esa ecuación está
encapsulada en aquel texto de la escritura que es el fundamento y la
columna central de la fe Adventista. La Inspiración ha identificado ese
texto para nosotros en estas palabras: “’El pasaje bíblico que más que
ninguno había sido el fundamento y el pilar central de la fe adventista era la
declaración: "Hasta dos mil y trescientas tardes y mañanas; entonces será
purificado el Santuario.’ (Daniel 8:14)” El Conflicto de los Siglos p.409. Este
texto de la escritura es el
pretendió haber vivido sin pecado. Hombres que han vivido lo más cerca de Dios,
hombres que sacrificaron sus vidas antes de cometer a sabiendas un acto
pecaminoso, hombres a quienes Dios honró con luz divina y poder, confesaron
su naturaleza pecaminosa. No pusieron su confianza en la carne, no
pretendieron poseer una justicia propia, sino que confiaron completamente en la
justicia de Cristo.” Los Hechos de los Apóstoles p.561.
El conocimiento de nuestra experiencia en el pecado reside en la
mente. Y dado que la mente es como una biblioteca personal que contiene
muchos libros que conforman las experiencias de toda nuestra vida,
podemos apreciar el hecho de que siempre que haya una combinación
de libros buenos y malvados, a biblioteca no puede considerarse una
biblioteca intachable. Puede haber muchos libros de gran valor espiritual
y moral, pero si también hay libros inmorales o pornográficos, o cosas
malsanas, la biblioteca no cumplirá el alto estándar de pureza
demandado por la ley santa de Dios hasta que todos los libros
corrompidos se supriman.
Esto nos lleva a una pregunta crucial. ¿Dónde reside la mayor
parte de todos nuestros pensamientos durante nuestra vida? ¿En la
mente consciente o en la subconsciente? Debe ser evidente que residen
en la memoria o en la parte subconsciente de la mente. Esta es la
biblioteca de datos personales de cada individuo. Solo un pequeño
porcentaje del total de pensamientos y experiencias acumulados reside
en la mente consciente. Por mucho, la mayor parte de nuestros
pensamientos y experiencias en la vida se encuentran en la mente
subconsciente o inconsciente a las cuales llamamos memoria.
¿DÓNDE RESIDE NUESTRO CARÁCTER?
Si nuestro carácter está formado por nuestros pensamientos y
sentimientos, como se notó antes, ¿qué proporción de nuestro carácter
está realmente compuesto de lo que existe en nuestra memoria, en
92 25
nuestra mente subconsciente? Este es un punto importante. Obviamente,
por mucho, la porción más grande de nuestro carácter está compuesto de
lo que existe en nuestra mente subconsciente. Nuestro entendimiento de
este hecho se vuelve especialmente importante al relacionarlo con la
perfección del carácter y la purificación del santuario, como veremos en
un momento. Nos ayudará a entender la diferencia entre el tipo de
perfección de carácter que podemos tener ahora y la perfección
inmaculada que todos debemos tener para presentarnos sin un mediador
al final del período de prueba. El tipo de perfección que podemos gozar
ahora se describe bien en el texto siguiente de la Inspiración. “Los que han
nacido en la familia de Dios no se caracterizan por practicar el pecado, porque la
vida de Dios está en ellos. Así que no pueden seguir pecando, porque son hijos de
Dios.” 1 Juan 3:9. Pero esta no es la perfección inmaculada. El comentario
de EG White sobre este versículo lo explica de la siguiente manera.
“Si un hombre nace de Dios, respetará los principios del gobierno divino,
y no transgredirá deliberadamente la ley de Dios en pensamiento, con palabras,
o con acciones… ‘Quienes permanecen en Él, no pecan’," esto es, no transgreden
deliberadamente la ley de Dios… Y entonces añade, “Incluso aquellos que se
afanan sinceramente para obedecer la ley de Dios, no están siempre libres de
pecado. Con alguna tentación ilusoria, son engañados, y caen en el error”
Señales de los Últimos Tiempos, 30 de abril de 1896. También, en
Testimonios para los Ministros leemos, “Se pesa a los hombres en la balanza
y se los halla faltos cuando viven cometiendo algún pecado conocido.” TM p. 440
La perfección es posible en un nivel consciente. No hay excusa para
caer en pecados conocidos. Podemos obtener la victoria sobre todo asedio
por medio de la gracia que Dios provee. Y antes de que el período de
prueba concluya se nos dice que “Todo lo que sea imperfecto en nosotros será
quitado. Toda envidia, y celos, y malas sospechas, y todo plan egoísta
eternamente a salvo de los artilugios de los tentadores. Ellos nunca más serán
pervertidos por las corrupciones del mundo. Vea Testimonios Tomo 5 p.475.
Antes de que el Pueblo de Dios sea sellado por la lluvia tardía,
serán probados por la imagen de la bestia. Esto hará manifiesto si
verdaderamente se han asentado en la verdad. El plazo de este evento se
indica claramente a continuación: “El Señor me ha mostrado claramente que
la imagen de la bestia va a ser formada antes del cierre de gracia; porque esta debe
de ser la gran prueba para el pueblo de Dios, por la cual su destino eterno va a
ser decidido... (Apocalipsis 13:11-17, citado.) Esta es la prueba que el pueblo
de Dios debe pasar antes de ser sellado. Todos los que demuestren su lealtad a
Dios obedeciendo su ley y rehusando aceptar un día de reposo espurio, se
alistarán bajo la bandera del Señor Dios Jehová y recibirán el sello del Dios
viviente. Los que renuncien a la verdad de origen celestial y acepten el descanso
dominical, recibirán la marca de la bestia.” Comentario Bíblico Adventista 7
p.976.
La prueba de la imagen de la bestia llega al mismo tiempo que el
pueblo de Dios enfrenta el juicio de los vivos con toda su conmoción. La
marca de la bestia habrá sido instituida para ese momento. Vea 5T 473.
Solo será por medio de la gracia sostenedora de Dios que podrán
atravesar ese momento de prueba. Esa es la razón por la que Hechos 3:19
llama al genuino arrepentimiento y a la conversión. Después del
acalorado juicio, Dios enviará a Su pueblo la refrescante lluvia tardía que
los revivirá y fortalecerá para proclamar el fuerte clamor y entonces
atravesar el tiempo de la tribulación como si nunca hubiera existido.
LA MAYOR LIBERACIÓN DE ENERGÍA ESPIRITUAL
“Después de todo esto vi que otro ángel bajaba del cielo con gran autoridad,
y la tierra se iluminó con su resplandor. Dio un fuerte grito: ‘¡Ha caído Babilonia,
cayó esa gran ciudad! Se ha convertido en una casa para los
26 91
Cuando la restauración de la mente y del alma se logre en su
totalidad, cuando la memoria del pecado se haya ido de la mente y el
nombre de Dios esté escrito en las frentes de Su pueblo fiel, la gran obra
de expiación será consumada y el ángel registrador declarará,
“Consumado es.” “Podemos hablar de las bendiciones del Espíritu Santo, pero
a menos que nos preparemos para recibirlo, ¿de qué valdrán nuestras obras?
¿Nos estamos esforzando con toda nuestra capacidad para alcanzar la estatura
de hombres y mujeres en Cristo? ¿Estamos buscando su plenitud, siempre
adelantando hacia la marca establecida para nosotros—la perfección de su
carácter? Cuando el pueblo de Dios alcance esta marca, será sellado en sus
frentes. Llenos del Espíritu, estarán completos en Cristo, y el ángel anotador
declarará: “Consumado es”. Nuestra Elevada Vocación p.150.
EL SELLO DE LA LLUVIA TARDÍA
Una bendición adicional que se les dará a aquellos a los que se les
remuevan los pecados será la institución del sello de Dios sobre sus
frentes. Durante todo el tiempo probatorio, el pueblo de Dios del final
de los tiempos estuvo preparándose para que el sello de Dios fuera
estampado sobre su frente. Hubo un proceso constante para establecerse
en la verdad. Aceptaron un rayo de luz después de otro, lo que les mostró
la manera de alcanzar la perfección de su carácter. Tenían el sello de la
lluvia temprana descrita en Efesios 1:13 donde aquellos que recibieron a
Cristo “fueron marcados con el sello que es el Espíritu Santo prometido.” Este
sello era una especie de promesa de lo que Dios habría de realizar para
el creyente mientras este continúa viviendo una vida de santificación. En
otro pasaje, Pablo afirma que es Dios quien “nos selló como propiedad suya
y puso su Espíritu en nuestro corazón como garantía de sus promesas.” 2
Corintios 1:22.
Pero aquellos que recibieron el sello de la lluvia temprana podrían
perderlo si no permanecían férreos. Vea Hebreos 6:4-6. Sin embargo,
aquellos que reciban el sello de la lluvia tardía estarán
habrán sido eliminados de la vida.” Mensajes Selectos Tomo 3 p.427. Esto
significa que Dios revelará nuestras faltas ocultas a la mente consciente y
nos dará la gracia para expulsar todo mal de la vida.
¿Pero qué hay sobre la mente subconsciente o inconsciente? ¿Qué
hay de todos los pensamientos malvados y experiencias en el pecado que
cuelgan en los pasillos de la memoria? “¿No hay muchos cuadros
desagradables grabados en la memoria? Con frecuencia habéis necesitado el
perdón de Jesús. Habéis dependido constantemente de su compasión y amor.”
Testimonios Tomo 5 p.610. Lo que está en la memoria conforma la mayor
parte de nuestro carácter. Podemos no revivir estas experiencias pasadas
en nuestra mente consciente, pero tienen influencia, mayor o menor, en
nuestro comportamiento presente.
Nuestra experiencia pasada en el pecado no solo nos condiciona a
repetir esos errores, sino que también afecta negativamente las buenas
obras que realizamos. El Espíritu Santo que obra dentro de nosotros,
inspira nuestras oraciones, nuestras alabanzas, y nuestro servicio sincero
a Dios. Pero todas estas cosas buenas están empañadas por nuestra
experiencia pasada en el pecado. Job pregunta, “¿Quién de la inmundicia
puede sacar pureza? ¡No hay nadie que pueda hacerlo!” Job 14:4. Podremos
haber confesado y repudiado nuestros pecados pasados, y estar
caminando en humilde obediencia a todos los mandamientos de Dios,
pero Cristo todavía debe combinar Sus méritos con todas las obras
buenas que realizamos, o nunca podremos ser aceptables para Dios. Si
comparamos la experiencia de Cristo en Su humanidad, vemos una
marcada diferencia en este punto. Aunque Cristo cargó consigo nuestra
carne pecadora, Sus oraciones y servicio al Padre no requirieron un
mediador para su purificación antes de que pudieran ser aceptables. No
había pecado en Él que empañara Sus buenas obras y su fidelidad a Su
Padre celestial
90 27
Algunas de las afirmaciones siguientes de la Inspiración pueden
ser un tanto devastadoras para la mente Laodicea que se considera
bastante valiosa y enriquecida con las obras buenas, y siente que no le es
necesaria una mayor gracia o iluminación espiritual. Es aleccionador
para nuestro orgullo espiritual el caer en la cuenta de que incluso
nuestras obras buenas se encuentran profanadas y necesitan purificación.
Preste atención a lo siguiente.
EL CANAL CORRUPTO DE LA HUMANIDAD
“Los servicios religiosos, las oraciones, la alabanza, la confesión
arrepentida del pecado ascienden desde los verdaderos creyentes como incienso
ante el santuario celestial, pero al pasar por los canales corruptos de la
humanidad, se contaminan de tal manera que, a menos que sean purificados por
sangre, nunca pueden ser de valor ante Dios. No ascienden en pureza
inmaculada, y a menos que el Intercesor, que está a la diestra de Dios, presente
y purifique todo por su justicia, no son aceptables ante Dios. Todo el incienso de
los tabernáculos terrenales debe ser humedecido con las purificadoras gotas de la
sangre de Cristo. El sostiene delante del Padre el incensario de sus propios
méritos, en los cuales no hay mancha de corrupción terrenal. Recoge en ese
incensario las oraciones, la alabanza y las confesiones de su pueblo, y a ellas les
añade su propia justicia inmaculada. Luego, perfumado con los méritos de la
propiciación de Cristo, asciende el incienso delante de Dios plena y enteramente
aceptable. Así se obtienen respuestas benignas.” Mensajes Selectos Tomo 1
p.344.
La mezcla de la justicia de Cristo con las oraciones y el mejor
servicio de los santos ha tomado lugar automáticamente desde la caída.
Este hecho no ha sido reconocido ni apreciado tanto como debería. Ni
por un momento podría el mayor de los santos comparecer ante Dios
durante el período probatorio sin la cubierta preciosa que Cristo coloca
sobre cada creyente sincero. Sin esa cubierta, “toda nuestra rectitud es como
vestiduras viles.”
“El perdón de los pecados no es el único resultado de la muerte de Jesús.
El hizo el sacrificio infinito, no solo para que el pecado fuese quitado, sino para
que la naturaleza humana pudiese ser restaurada, reembellecida, reconstruida
desde sus ruinas y hecha idónea para la presencia de Dios.” Testimonios Tomo
5 p.537.
Esta obra de restauración y reembellecimiento será plenamente
lograda por la refrescante lluvia tardía. La restauración que será
alcanzada es un tema que es merecedor de nuestro profundo interés y
estudio. El mundo cristiano generalmente solo conoce sobre el perdón de
los pecados, y algunos de los más iluminados también preservan el
privilegio de estar liberados de nuestros hábitos pecaminosos. Pero solo
los creyentes en el Mensaje del Tercer Ángel entienden la obra de Cristo
en el lugar santísimo, y el borrado absoluto del conocimiento del mal y
la restauración que se efectuará en sus vidas a través de la
perfeccionadora lluvia tardía.
“La lluvia tardía, que cae hacia el fin de la temporada, madura el grano y
lo prepara para la siega… La maduración del grano representa la terminación
de la obra de la gracia de Dios en el alma. Mediante el poder del Espíritu Santo
se ha de perfeccionar en el carácter la imagen moral de Dios. Debemos ser
totalmente transformados a la semejanza de Cristo” Testimonios para los
Ministros p.506.
¡Un pensamiento maravilloso! Todo el daño que ha causado el
pecado será deshecho y restaurado. La naturaleza espiritual será como si
el hombre nunca hubiera pecado. El perdón del pecado fue una
experiencia bendecida para todos los que se arrepintieron de sus pecados.
Pero el borrado de los pecados y de su recuerdo vergonzoso será una
experiencia aún más bendecida. “Sus pecados han sido examinados y
borrados en el juicio; y no puede recordarlos.” El Conflicto De Los Siglos p.
620
28 89
CAPÍTULO SIETE
LA GRAN BENDICIÓN DE HECHOS 3:19
Después del agonizante calvario que los santos atraviesan en el
momento del juicio de los vivos, Dios confortará y revivirá a Su pueblo
enviándoles un poderoso refrigerio. Hechos 3:19 describe la secuencia de
eventos. Primero hay un período de profundo arrepentimiento y
conversión, y después el borrado de nuestros pecados por la efusión de
la lluvia tardía. “Por tanto, para que sean borrados sus pecados, arrepiéntanse
y vuélvanse a Dios, a fin de que vengan tiempos de descanso de parte del Señor,
enviándoles el Mesías que ya había sido preparado para ustedes, el cual es Jesús.”
Hechos 3:19.
La obra de la lluvia tardía frecuentemente se ha descrito en
términos de su poder maravilloso para ser testimonio ante el mundo
cuando se proclame el fuerte clamor y el verdadero pueblo de Dios sea
llamado de Babilonia. Y es esa una gran bendición a la que debemos
aspirar. Pero frecuentemente olvidamos que antes de que podamos ser
un poderoso testimonio ante el mundo, la lluvia tardía realizará una obra
grandiosa de transformación en nosotros. En Hechos 3:19 vemos cómo la
refrescante lluvia tardía está conectada con el borrado de los pecados. No
podemos experimentar una sin el otro. La transformación efectuada por
la lluvia tardía en nuestro carácter está maravillosamente retratada en la
Inspiración. Isaías 60:1, 62:1-3, Zacarías 9:12-17 son ejemplos de pasajes
bíblicos que describen esta experiencia.
También tenemos estos pasajes alentadores en Espíritu de
Profecía.
“Es el propósito de la redención, no solamente borrar el pecado, sino
devolver al hombre los dones espirituales perdidos a causa del poder
empequeñecedor del pecado.” Lecciones Objetivas de Cristo p.266.
En gráfica representación de la ineficacia de la rectitud rendida a
Dios por el mayor de los santos, la Inspiración quita todo el orgullo
espiritual y la autosuficiencia en estas palabras.
“Pueden poner a los pies de nuestro Redentor fervor en el trabajo e
intenso afecto, realizaciones intelectuales elevadas y nobles, amplitud de
entendimiento y la más profunda humildad; pero no hay una pizca más de gracia
y talento que los que Dios dio al principio. No debe entregarse nada menos que
lo que el deber prescribe, y no puede entregarse un ápice más que lo que se ha
recibido primero; y todo debe ser colocado sobre el fuego de la justicia de Cristo
para purificarlo de su olor terrenal antes de que se eleve en una nube de incienso
fragante al gran Jehová y sea aceptado como un suave perfume.” Fe y Obras
p.23-24.
Antes de 1844, podía no ser tan importante entender el canal
corrupto que imparte un olor terrenal a las mejores obras de los santos.
Pero ahora, en el tiempo que el santuario debe purificarse, es
especialmente importante entender la naturaleza de nuestra enfermedad.
Testimonios Tomo 4 p.87 nos dice que la única esperanza para los
Laodicenses, que se consideran valiosos y enriquecidos con las obras
buenas y sienten que nada necesitan, es comprender la naturaleza de su
enfermedad.
Porque “Todos han pecado y están cortos de la gloria de Dios”, todos
necesitamos el favor inmerecido de la gracia de Dios para comparecer
justificados ante Él. Dios en Su grande amor libremente “declara (imputa)
Su justicia para la remisión de los pecados” (Romanos 3:25). Esta es la única
manera en que alguien, incluso el mayor de los santos, puede
comparecer en aceptación ante Dios durante el período probatorio.
Incluso si progresa diariamente en su santificación, se nos dice que
“Creciendo diariamente en la vida divina, no alcanzará la completa estatura de
un hombre perfecto en Cristo hasta que cese su tiempo de prueba.” Testimonios
Tomo 4 p.366-367.
88 29
Un verdadero entendimiento de su condición real llevará a los
creyentes Laodicenses a una experiencia de arrepentimiento ferviente.
“En cada paso que demos en la vida cristiana, se ahondará nuestro
arrepentimiento.” Lecciones Objetivas de Cristo p.160. Si algún día
llegamos a ser curados de nuestra enfermedad, tendremos que ver lo
pecaminoso de nuestra naturaleza y nuestra necesidad de una completa
purificación de la mente consciente e inconsciente. Pero esta comprensión
de nuestra necesidad pecaminosa no debe hacernos sentir condenados ni
desalentados. Cristo carga los pecados de todos los que se han
arrepentido, y esto nos debe inspirar con gratitud y amor. En verdad, “No
puede existir amor profundo por Jesús en el corazón que no comprende su propia
perversidad.” Camino a Cristo 65. Vea también la página 138.
confesados y perdonados. Levítico 16:29, 23:27-30
7. La primera sala trae las bendiciones de la lluvia temprana.
Hechos 2:38
8. La segunda sala trae las bendiciones de la lluvia tardía. Hechos 3:19
9. La primera sala trae el sello de la lluvia temprana. Efesios 1:13
10. La segunda sala trae el sello de la lluvia tardía. Apocalipsis
7:1-4, 14:1-5
11. La primera sala trae un estado de perfección a través de la imputada
justicia de Cristo. Colosenses 1:28
12. La segunda sala trae un estado de perfección a través de la
impartición de la justicia de Cristo. Isaías 45:8, Testimonio a los
Ministros p.506
13. La primera sala prepara para la muerte y la resurrección.
1 Tesalonicenses 4:13-17
14. La segunda sala prepara a los santos para que atraviesen el
término del período de prueba y sean trasladados sin ver la
muerte.
Apocalipsis 14:4, Primeros Escritos p.71
30 87
como el rocío, y tus pecados como la bruma de la mañana. Vuelve a mí, que te he
redimido. ¡Canten de alegría, cielos, que esto lo ha hecho el SEÑOR! ¡Griten
con fuerte voz, profundidades de la tierra! ¡Prorrumpan en canciones, montañas;
y bosques, con todos sus árboles! Porque el SEÑOR ha redimido a Jacob, Dios ha
manifestado su gloria en Israel.”
Debemos observar en este pasaje de Isaías que el borrado de los
pecados es referido dos veces como un acto de redención, cuando dice,
“Te he redimido” y “el Señor ha redimido a Jacob.” La salvación es
alcanzada plenamente en el lugar santísimo del santuario y Dios llama al
cielo y a la Tierra, y a todo lo que habite en ella, a cantar y a regocijarse.
La última y más poderosa obra de la gracia redentora ha sido realizada.
“Con justicia Sion será redimida, y con rectitud, los que se arrepientan.”
Isaías 1:27.
En resumen, podemos concluir los puntos siguientes.
1. La primera sala llama al arrepentimiento para la remisión de los
pecados. Hechos 2:38
2. La segunda sala llama al arrepentimiento para el borrado de los
pecados. Hechos 3:19
3. La primera sala llama a los pecadores al arrepentimiento Ezequiel
18:30- 32
4. La segunda sala llama a los justos al arrepentimiento.
Ezequiel 36:25-31
5. La primera sala llama al arrepentimiento de los pecados no
confesados y sin perdonar. Isaías 55:7
6. La segunda sala llama al arrepentimiento de los pecados
CAPÍTULO TRES
LA PURIFICACIÓN FINAL DEL CONOCIMIENTO DEL MAL
Es importante entender que el mayor problema en este mundo
comenzó con la llegada del conocimiento del mal, y que no se resolverá
hasta que el conocimiento del mal sea eliminado. De hecho, si deseamos
comprender lo que se involucra en la obra de redención, se nos dice que
necesitamos considerar “el cambio que sufrió la humanidad por la
introducción del conocimiento del mal, y el plan de Dios para cumplir, sin
embargo, su glorioso propósito en la educación (redención) de la especie humana.”
La Educación p.14-15. Debido a que el conocimiento del mal ha
infectado toda la especie humana, cada gran renacimiento y reformación
espiritual en los últimos 6000 años ha sido seguida por recaídas y
apostasía. Pero cuando finalmente se borre el pecado, el pueblo de Dios
estará eternamente a salvo de los artilugios del tentador. Nadie recaerá
ni apostatará. (Vea Zefanías 3:13 y Apocalipsis 14:5 y 12.)
La expiación realizada en el lugar santísimo del santuario celestial
ocurre específicamente para remediar el problema causado por nuestra
experiencia en el pecado. Este parece ser el vínculo faltante en nuestro
entendimiento de Daniel 8:14. Los pensamientos relativos al pecado se
almacenan en la memoria, y mientras la memoria de los pecados pasados
permanezca, sus efectos nocivos se harán sentir. Como indicamos
anteriormente, estos pensamientos del subconsciente no están latentes.
Los pensamientos guardados en la memoria influyen el comportamiento
presente y futuro para bien o para mal. Se nos dice que “Debemos vigilar
estrictamente nuestros pensamientos, pues un pensamiento impuro hace
profunda impresión en el alma. Un pensamiento malo deja una mala impresión
en la mente.” Mensajes para los Jóvenes p.144.
El efecto del pensamiento errado se debilitará si
86 31
estos pensamientos son persistentemente suprimidos cuando surjan. Si
el cristiano se ha arrepentido de sus pensamientos y sentimientos
malignos, y si se esfuerza por albergar pensamientos buenos, y honestos,
los pensamientos malignos almacenados en su memoria perderán mucha
de su influencia y fuerza. Pero nunca se alejan durante el tiempo
probatorio, y pueden resurgir nuevamente en un momento de debilidad
cuando el alma baja la guardia. Así sucedió con Moisés cuando golpeó la
roca dos veces, en vez de dirigirse a ella. Ochenta años antes de ese
evento, Moisés había intentado tomar las cosas en sus propias manos
para liberar a Israel de Egipto cuando asesinó al egipcio. Ahora él
manifestaba el mismo espíritu una vez más cuando exclamó,” ¡Escuchen,
ustedes rebeldes! —gritó—. ¿Acaso debemos sacarles agua de esta roca?”.
LA RESOLUCIÓN FINAL AL PROBLEMA DEL PECADO
Debe ser evidente que el pueblo remanente de Dios no puede
comparecer ante Dios después de que Cristo haya cesado Su intercesión,
abrumado aún con el “canal corrupto” que pervierte incluso sus
oraciones y buenas obras. Este es el problema específico que la expiación
especial de Cristo en el lugar santísimo del santuario va a remediar. No
es el otorgar el perdón por los pecados cometidos diariamente, ni
impartir la gracia facilitadora para superar todo asedio. Esa es la obra de
la primera sala. Desde 1844, Cristo ha estado llevando un ministerio dual
en el santuario.
Aunque el juicio y la expiación especial han estado sucediendo para los
muertos, Él ha continuado otorgando los beneficios de la primera sala
para los vivos. De otra manera, no habría más perdón, porque en el día
del juicio no habrá sacrificios expiatorios aceptados a las puertas del
santuario. Ningún sacerdote ministrará en los altares para el perdón de
los pecados. Vea Levítico 16:17 y Ministerio de Curación p.437-438.
El Sello de la Lluvia Tardía
Preparación para el Término de la Prueba y el Traslado
Cristo se encuentra ministrando los beneficios de la segunda sala
para los muertos. Nadie va al cielo sin recibir primero la expiación
especial del lugar santísimo. Cuando los muertos sean ascendidos a la
inmortalidad, caerán en la cuenta de estos beneficios. Pero Cristo no
comenzará el juicio de los vivos hasta que la marca de la bestia sea
instituida. Él aún provee los beneficios de la primera sala para los vivos
mientras está juzgando a los muertos. Necesitamos todos los beneficios
provistos en la primera sala como prerrequisito para recibir los
beneficios de la segunda sala. Sin embargo, si creemos que podemos
obtener la perfección de carácter y el sello final sin el borrado de los
pecados y la remoción de las ropas viles, ¿no estamos realmente todavía
adorando en la primera sala? Estamos ignorando o rechazando la luz
de la puerta abierta. Esto nos pone en peligro de caer bajo la influencia
impía de Satanás. Como se menciona en Primeros Escritos p.256, solo
manteniendo nuestra fe centrada en el lugar santísimo, y entendiendo
la naturaleza de la expiación realizada ahí, podremos mantenernos a
salvo de los fuertes engaños. Mientras usamos las bendiciones que nos
fueron ministradas en la primera sala, debemos entender que el trabajo
de preparación para la venida del Señor no puede completarse sin los
beneficios de la segunda sala. El mayor logro de la obra completa de
redención es consumado en el ministerio final de Cristo en el lugar
santísimo. Dios considera el borrado final de los pecados como un
poderoso logro sobre el cual llama al cielo y a la Tierra a regocijarse. En
Isaías 44:22-23 leemos,
En Isaías 44:22-23 leemos, “He disipado tus transgresiones
32 85
Perdón Condicional
Pecados Transferidos al Santuario
La Perfección a través de la Justicia Imputada e Impartida
La Memoria de los Pecados Permanece
La Lluvia Temprana Derramada
El Sello de la Lluvia Temprana
Preparación para la Muerte, el Juicio y la Lluvia Tardía
Mientras apreciamos las bendiciones de la primera sala, podemos
ver en lo anterior que los beneficios de la primera sala no traen la plena
perfección de carácter. No conllevan el sello final necesario para stand
sin un mediador después de que el período de prueba termine y ser
trasladados durante la venida de Cristo. En los beneficios de la segunda
sala, hay una culminación de la obra de la gracia que fue comenzada e
impulsada en la primera sala. Por ejemplo, donde la primera sala otorgó
el perdón de los pecados, la segunda sala provee el borrado de los
pecados. (Vea más detalles en el Apéndice p.135)
Beneficios de la Segunda Sala
El Borrado de los Pecados
Perdón Pleno y Completo de los Pecados
Pecados Transferidos a Satanás
Perfección sin Pecado a través de la Justicia Impartida
Memoria de los Pecados Borrados
La Lluvia Tardía Derramada
En vista de la inminencia del término de la prueba, es
absolutamente esencial que seamos perfeccionados en nuestra mente
consciente y en nuestra mente subconsciente. Ambas salas del santuario
del alma necesitan limpiarse del pecado. Hoy en día, mientras todavía
tenemos los beneficios del ministerio de Cristo de la primera sala en el
santuario celestial, debemos limpiar la primera sala del templo de
nuestra alma de toda corrupción.
El ministerio diario es perfeccionar la mente consciente. A través
de la gracia de Dios y de nuestros diligentes esfuerzos, podemos salir
victoriosos sobre todo asedio del pecado. Necesitamos no continuar la
práctica de todo pecado conocido y de desatender todo deber conocido.
Podemos mantener una consciente limpia. Esta es la preparación que
necesitamos para la tumba o para el juicio. “Ser hijos de Dios significa más
de lo que muchos sueñan, porque no se han convertido. Se pesa a los hombres en
la balanza y se los halla faltos cuando viven cometiendo algún pecado conocido.”
TM p.440. Esto es sumamente importante si deseamos recibir la
purificación final de la segunda sala. Este es el prerrequisito para recibir
el más grande de todos los beneficios de la redención que Cristo obtuvo
para nosotros con su muerte.
Pero la demostración de la naturaleza perniciosa del pecado no era
completamente realizada en el ministerio diario. El pueblo de Dios no
estaba totalmente protegido contra la caída. La obra de proteger al
hombre contra las maquinaciones de Satanás requiere las experiencias
del servicio diario y del servicio anual. ¿Qué sucede en el servicio anual
que es tan diferente de aquel del servicio diario? ¿Qué realiza Cristo en
el servicio anual para Su pueblo que no realiza en el diario? ¿Y cómo los
protegerá esto de otra apostasía para que puedan comparecer sin un
mediador tras la terminación del período probatorio y durante la prueba
más severa? Estas y otras preguntas pertinentes serán
84 33
respondidas mientras continuamos examinando este tema a la luz de la
Inspiración.
UNA EXPERIENCIA MUY TRAUMÁTICA
Hay una experiencia traumática más para el pueblo de Dios que
precede inmediatamente el borrado de sus pecados y del conocimiento
del mal. Hebreos 10:3 nos dice que en el día de la expiación, “Pero esos
sacrificios son un recordatorio anual de los pecados…” En el antiguo Israel,
sus pecados serán traídos a la mente y se reconfirmará su arrepentimiento.
“Vivimos actualmente en el período solemne del antitípico día de la expiación.
En el tipo, los pecados del pueblo eran, el día de la expiación, traídos a la mente
para su arrepentimiento.” Manuscritos 5 p.5.
Los pecados que eran traídos a la mente no eran pecados que no se
habían confesado antes. Si llegaban al día de la expiación con pecados sin
confesar, ellos eran separados de la congregación. No había sacerdotes
ministrando en la primera sala mientras la expiación tenía lugar en la
segunda sala. No había perdón disponible ese día. Pero había una
remembranza del pasado, de los pecados confesados que serían
completamente expiados y borrados ese día.
En este antitípico día de la expiación, la remembranza de los
pecados pasados será un evento muy traumático y agonizante. Será
efectuado por el Espíritu Santo, quien traerá a la mente consciente todas
las experiencias pasadas de importancia espiritual. La revelación será
sumamente vívida y producirá en cada verdadero creyente el
arrepentimiento más profundo. A continuación hay unos cuantos pasajes
de la Inspiración que describen este suplicio.
“Así se acordarán ustedes de su mala conducta y de sus acciones
34
La trascendencia entre la adoración en el lugar santo y la adoración
en el lugar santísimo tiene que ver con entender la diferencia de la obra
que Cristo realiza en cada sala. Es una cuestión de creer y seguir la
verdad presente. En el antiguo Israel, el santuario terrenal y sus servicios
eran su verdad presente que debían seguir en la fe y en la práctica.
Cuando Cristo murió en el Calvario como el Cordero de Dios, y ascendió
al cielo para comenzar Su ministerio en la primera sala, la verdad
presente en ese momento se centraba en Su ministerio ahí.
“El gran sacrificio había sido ofrecido y aceptado, y el Espíritu Santo que
descendió en el día de Pentecostés dirigió la atención de los discípulos desde el
santuario terrenal al celestial, donde Jesús había entrado con su propia sangre,
para derramar sobre sus discípulos los beneficios de su expiación. Pero los judíos
fueron dejados en tinieblas totales. Perdieron toda la luz que pudieran haber
tenido acerca del plan de salvación, y siguieron confiando en sus sacrificios y
ofrendas inútiles. El santuario celestial había reemplazado al terrenal, pero ellos
no tenían noción del cambio. Por lo tanto no podían recibir beneficios de la
mediación de Cristo en el lugar santo.” Primeros Escritos p.260.
Entonces, ¿cuáles son los beneficios derramados desde cada una
de las salas en el santuario celestial? ¿Por qué es tan peligroso
conformarse con buscar solo los beneficios de la primera sala? Es una
cuestión de seguir la verdad presente y la experiencia especial que esta
trae. La segunda sala nos preparará para presentarnos sin un mediador
después del término de la prueba y ser trasladados cuando Cristo venga.
A continuación se señalan ocho diferencias entre las dos salas y sus
beneficios.
Beneficios de la Primera Sala
El Perdón de los Pecados 83
mantenerla engañada, arrastrarla hacia atrás y seducir a los hijos de Dios.”
Primeros Escritos p.55-56.
REGRESANDO A LA PRIMERA SALA
Es un terrible engaño pensar que estamos orando a nuestro Padre
celestial cuando, en realidad, es Satanás quien responde nuestras
plegarias. Y es un terrible engaño creer que estamos recibiendo el
Espíritu Santo cuando en realidad estamos recibiendo el espíritu de
Satanás. El falso espíritu que Satanás vierte en aquellos que ignoran
entrar por la puerta abierta por la fe es una falsificación cercana de la
verdad. Satanás pretende, no solo mantener en el engaño a aquellos que
se encuentran alabando en la primera sala, sino también “hace retroceder
y engañar a los Hijos de Dios” que han ingresado al lugar santísimo. En
otra referencia a esta visión, Ellen White añade otra sentencia que
muestra lo que les sucede a aquellos que fueron engañados por el espíritu
en el lugar santo, y retornaron del lugar santísimo al lugar santo. Escribió:
“vi, uno tras otro dejar la compañía de los que estaban orando a Jesús en el lugar
santísimo, ir a reunirse con los que estaban delante del trono, y a su vez
recibieron la influencia impía de Satanás” Day Star, 14 de marzo de 1846.
¿Por qué es tan trágico regresar a la primera sala después de
adorar en el lugar santísimo? No es la ubicación física lo que marca la
diferencia. Y no tenemos ninguna indicación de que aquellos que
continuaron la adoración en la primera sala hayan caído en algún error
particular después de que Cristo fue a la segunda sala. Ellos tan solo no
aceptaron la verdad presente que venía como una nueva revelación
desde la puerta del santuario celestial. Y eso hizo toda la diferencia.
Porque no recibieron el amor de la verdad, Satanás fue capaz de llevarlos
a grandes engaños.
perversas, y sentirán vergüenza por sus propias iniquidades y prácticas
detestables.” Ezequiel 36:31 Vea también COL 160 y 5T 466.
“Cada uno en el día del Juicio investigador se juzgará en su carácter como
realmente es; individualmente rendirá cuentas a Dios. Toda palabra pronunciada,
toda desviación de la integridad, toda obra que ensucia el alma, serán pesadas en
las balanzas del santuario. Las memorias serán ciertas y vívidas en la
condenación del culpable, quien en ese día sea hallado falto. La mente recordará
todos los pensamientos y acciones del pasado; se presentarán ante su mente las
escenas de toda su vida. Así, cada uno será condenado o absuelto por su propia
boca, y la justicia de Dios será reivindicada.” The Review and Herald Nov.4,
1884
En vista de las afirmaciones anteriores, podemos ver por qué el día
de la expiación era un tiempo de gran humillación y arrepentimiento. Y
este tema debía ser nuestro estudio constante, y también ser enseñado a
nuestros niños.
“Estamos en el gran día de la expiación, y la sagrada obra de Cristo que se
está llevando a cabo en este momento en favor del pueblo de Dios en el santuario
celestial, debiera ser nuestro estudio constante. Debemos enseñar a nuestros hijos
lo que significaba el típico día de la expiación, y que era una época especial de
gran humillación y confesión de pecados ante Dios. El día simbolizado por la
expiación ha de ser del mismo carácter. Todo el que enseña la verdad por precepto
y ejemplo dará a la trompeta un sonido certero.” Testimonios Tomo 5 p.520.
Hay más afirmaciones que detallan este punto. En el siguiente
pasaje, Ellen White se dirige a los estudiantes del Battle Creek College
donde comparó la examinación del Juicio con los exámenes finales en
dicha Universidad.
82 35
“Deben continuar instruyéndose en la escuela de Cristo, con el corazón
abierto para recibir el conocimiento celestial que les será impartido; y así crecerán
en gracia y en el conocimiento de la verdad. Hay un examen final que debe
conducirse en referencia a su período de prueba en este mundo que es de vital
interés para cada uno de nosotros. En ese día no habrá espectadores indiferentes.
Cada uno tendrá un rol que ejecutar, y tendrá un intenso interés en aprobar esa
prueba con honores celestiales. Todos tendrán la oportunidad de educarse a sí
mismos mientras se encuentren en este mundo, para que puedan ser aptos de
presentarse al gran examen que debe suceder en corto tiempo.
Si se esfuerzan en un período escolar en nuestra Universidad, y por
negligencia de su parte fracasan la prueba examinadora, pueden consolarse con
la esperanza de redimir su fracaso en el siguiente período. Pero, si en el vital
interés de la salvación de su alma descuidan el aprender las lecciones necesarias
para presentar a la prueba de la gran examinación que ha de venir, no habrá un
segundo privilegio ni se otorgará otra oportunidad. Es ahora o nunca que deben
perfeccionar el carácter cristiano. No habrá siguiente período en el que puedan
inscribirse en la escuela de Cristo para redimir el abuso de sus privilegios y sus
oportunidades desaprovechadas. Es de la más alta importancia que en la gran
examinación que viene puedan comparecer con los méritos de su Redentor
celestial al obtener la victoria en Su nombre.” Señales de los Últimos Tiempos
14 de febrero de 1878.
La Inspiración no está escasa de pasajes que describen la revelación
final de la vida cuando se abran los libros. Ciertamente, los libros en el
cielo son solo un espejo de lo que es registrado en la mente de todo ser
inteligente.
“Recuerden los padres y los hijos que día tras día están formando un
carácter, y que los rasgos de ese carácter se imprimen en los libros del cielo.
ST 22 de abril de 1889.
2 Tesalonicenses 2:10-12 nos advierte de las graves consecuencias
de ignorar o rechazar la verdad. “…Con toda perversidad engañará a los que
se pierden por haberse negado a amar la verdad y así ser salvos. Por eso Dios
permite que, por el poder del engaño, crean en la mentira. Así serán condenados
todos los que no creyeron en la verdad, sino que se deleitaron en el mal.”
Si alguna vez fue peligroso el rechazar la luz incrementada,
ciertamente lo es más desde que Cristo ha abierto la puerta al lugar
santísimo donde Él está ahora, realizando la expiación final para los
muertos. Una de las visiones más sorprendentes dadas a Ellen White tenía
relación con este preciso peligro. En Primeros Escritos páginas 55-56,
habla de la diferencia en la experiencia de aquellos que siguieron la luz
que brillaba desde la puerta abierta del lugar santísimo, y de los que no
lo hicieron.
“Vi al Padre levantarse del trono, y en un carro de llamas entró en el lugar
santísimo, al interior del velo, y se sentó. Entonces Jesús se levantó del trono, y
la mayoría de los que estaban prosternados se levantó con él. No vi un solo rayo
de luz pasar de Jesús a la multitud indiferente después que él se levantó, y esa
multitud fue dejada en perfectas tinieblas. … Los que se levantaron con Jesús
elevaban su fe hacia él en el lugar santísimo, y rogaban: “Padre mío, danos tu
Espíritu.” Entonces Jesús soplaba sobre ellos el Espíritu Santo. En ese aliento
había luz, poder y mucho amor, gozo y paz. Me di vuelta para mirar la compañía
que seguía postrada delante del trono y no sabía que Jesús la había dejado. Satanás
parecía estar al lado del trono, procurando llevar adelante la obra de Dios. Vi a la
compañía alzar las miradas hacia el trono, y orar: “Padre, danos tu Espíritu.”
Satanás soplaba entonces sobre ella una influencia impía; en ella había luz y
mucho poder, pero nada de dulce amor, gozo ni paz. El objeto de Satanás era
36 81
del lugar santísimo, que él abrió en 1844, donde está el arca que contiene las dos
tablas de piedra en las cuales fueron escritos por el dedo de Jehová los diez
mandamientos.” Ibíd. 43.
Fue de crítica importancia para la supervivencia espiritual de los
primeros creyentes Adventistas seguir la luz que emana desde la puerta
abierta del santuario celestial. Esta fue la orden dada repetidamente por
el Tercer Ángel mientras les señalaba el santuario celestial. “El tercer ángel
concluye así su mensaje: ‘Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan
los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.’ Al repetir el ángel estas palabras,
señalaba al santuario celestial. La atención de cuantos aceptan este mensaje se
dirige hacia el lugar santísimo, donde Jesús está de pie delante del arca, realizando
su intercesión final por todos aquellos para quienes hay todavía misericordia, y
por los que hayan violado ignorantemente la ley de Dios. Esta expiación es hecha
tanto para los justos muertos como para los justos vivos.” Ibíd. 254.
“… pero el tercer ángel dirigía la atención de ellos hacia el lugar santísimo,
y los que habían tenido experiencia en los mensajes anteriores les indicaban el
camino del santuario celestial. Muchos percibieron el perfecto eslabonamiento de
verdades en los mensajes angélicos, y aceptándolos gozosamente uno tras otro,
siguieron al Señor por la fe en el santuario celeste. Estos mensajes me fueron
representados como un áncora para el pueblo de Dios. Quienes los comprendan
y acepten quedarán libres de verse arrastrados por los muchos engaños de
Satanás.” Ibíd. 256.
La única seguridad de los creyentes Adventistas estuvo en entrar
por la puerta abierta y entender lo que Jesús iba a realizar por ellos. Esto
los salvaría de ser arrastrados por los muchos engaños de Satanás. Pero
es peligroso ignorar o rechazar la luz que Cristo hace brillar en nuestro
camino. “Nuestro mayor peligro yace en nuestra tendencia a rechazar una luz
más brillante, y nuestra única seguridad es ver y entender por nosotros mismo
lo que ha dicho el Señor."
Dios dibuja lo que son sus hijos, tan ciertamente como un artista dibuja
los rasgos de hombres y mujeres transfiriéndolos al lienzo. ¿Qué clase de cuadro
queremos que se reproduzca?” Conducción del Niño p.562
“La vida que nos ha dado es una responsabilidad sagrada, y ningún
momento de ella ha de ser considerado livianamente, pues hemos de encontrarlo
nuevamente en el registro del juicio. Nuestras vidas están tan ciertamente
trazadas en los libros del cielo como una fotografía en la placa del fotógrafo.”
Comentario Bíblico Adventista 7 p.987.
EL SUEÑO MÁS IMPONENTE
Quizá un pasaje final sobre este tema ayudará a dejar la cuestión
más allá de cualquier duda. El hombre sabio advirtió a sus lectores que
Dios llevaría cada obra a juicio con toda cosa secreta. En las afirmaciones
que leemos de la Inspiración, se nos esclarece cómo Dios llevará cada cosa
a juicio. En el siguiente sueño, Ellen White tuvo una visión del juicio. Fue
tan impresionante que dijo que las palabras le fallaron para describir
adecuadamente lo que vio y el efecto que tuvo en su mente.
“En la mañana del 23 de octubre de 1879, a eso de las dos, el Espíritu del
Señor descansó sobre mí, y contemplé escenas del juicio venidero. Las palabras
me faltan para describir adecuadamente las cosas que pasaron delante de mí y el
efecto que tuvieron sobre mi espíritu.”
Parecía haber llegado el gran día de la ejecución del juicio de Dios. Diez
mil veces diez millares estaban congregados delante de un gran trono, sobre el
cual estaba sentado un personaje de majestuosa apariencia. Delante de él había
varios libros y sobre las tapas de cada uno de ellos estaba escrito en letras de oro
semejantes a llamas de fuego “El libro mayor del cielo.” Uno de estos libros, que
80 37
contenía los nombres de los que aseveran creer en la verdad, fue abierto entonces.
Inmediatamente perdí de vista los incontables millones que rodeaban el trono y
mi atención se dedicó únicamente a los que profesan ser hijos de la luz y la verdad.
A medida que se nombraba una tras otra a estas personas, y se mencionaban sus
buenas acciones, sus rostros se iluminaban con un gozo santo que se reflejaba en
toda dirección. Pero esto no pareció ser lo que impresionó con más fuerza mi
espíritu.
Se abrió otro libro en el cual estaban anotados los pecados de los que
profesan la verdad. Bajo el encabezamiento del egoísmo venían todos los demás
pecados. Había también encabezamientos en cada columna, y debajo de ellos,
frente a cada nombre, estaban registrados en sus respectivas columnas los
pecados menores.
Mientras el Ser santo que estaba sobre el trono hojeaba lentamente las
páginas del libro mayor, y sus ojos se posaban un momento sobre las personas,
su mirada parecía penetrar como fuego hasta sus mismas almas, y en ese
momento, toda palabra y acción de sus vidas pasaba delante de sus mentes tan
claramente como si hubiesen sido escritas ante su visión en letras de fuego. El
temblor se apoderó de aquellas personas, y sus rostros palidecieron. Al principio,
mientras rodeaban el trono, aparentaban una indiferencia negligente. Pero ¡cuán
cambiadas estaban! Había desaparecido la sensación de seguridad, y en su lugar
reinaba un terror indecible. Cada alma se sentía presa de espanto, no fuese que se
hallara entre los que eran hallados faltos.
Todo ojo se fijaba en el rostro de Aquel que estaba sentado sobre el trono;
y mientras sus ojos escrutadores recorrían solemnemente la compañía, los
corazones temblaban, porque se sentían condenados sin que se pronunciase una
palabra. Con angustia en el alma, cada uno declaraba su propia culpabilidad, y
en forma terriblemente vívida veía que al pecar había desechado el precioso don
de la vida eterna.”
CAPÍTULO SEIS
SEGURIDAD CONTRA LOS FUERTES ENGAÑOS
En Apocalipsis 3:8, Cristo habla a Sus fieles seguidores después
de su amarga decepción en 1844, cuando estuvieron en un gran dilema
porque Cristo no había venido a la Tierra como ellos esperaban. Él dijo,
“Mira que delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar.”
Esto fue una invitación para entrar por la fe por la puerta abierta donde
encontrarían Jesús nuevamente. También descubrirían el motivo por el
cual no pudo venir el 22 de octubre como habían esperado.
Entonces, ¿cuál es esa puerta abierta a la que fueron invitados a
entrar? Primeros Escritos p.42 explica: “Esta puerta no se abrió hasta que
hubo terminado la mediación de Jesús en el lugar santo del santuario en 1844.
Entonces Jesús se levantó, cerró la puerta del lugar santo, abrió la que da al
santísimo y pasó detrás del segundo velo, donde está ahora al lado del arca y
adonde llega la fe de Israel ahora.”
Vemos aquí que la puerta que fue abierta en 1844 era la puerta
del lugar santísimo del santuario celestial. Aquellos que por la fe
entraron por aquella puerta entenderían el cambio en el ministerio de
Cristo y la expiación especial que Él va a realizar. “Jesús envió sus ángeles
a dirigir la atención de los desalentados hacia el lugar santísimo adonde él había
ido para purificar el santuario y hacer expiación especial por Israel” Primeros
Escritos p.251.
Pero también nos dice que “Los enemigos de la verdad presente han
estado tratando de abrir la puerta del lugar santo, que Jesús cerró, y de cerrar la
puerta
38 79
Pero Satanás hará todo lo posible para impedir la culminación de
la expiación de Cristo. Tiene un engaño especial hecho a la medida de los
Adventistas del Séptimo Día, con el cual intenta embaucar a los elegidos.
Es su obra maestra del engaño. La encontramos representada en
Primeros Escritos p.55-56. Ese será el tema del siguiente capítulo.
Existen buenos motivos para que Dios traiga de vuelta el pasado a
la mente consciente. Cuando los pecados son confesados originalmente,
el pecado podía no haber parecido tan pecaminoso como era en realidad
debido a una ceguera parcial a la enormidad del pecado. Pero conforme
el creyente se acerca cada vez más a Cristo, el pecado parece aún más
pecaminoso, de modo que para el día de la expiación, aparece en toda su
enormidad. Esto provocará el arrepentimiento y humillación más
profundos, y ayudará a proteger al creyente para nunca desear repetir
esos pecados. Primeros Escritos, páginas 269-271, describe la traumática
experiencia del pueblo de Dios en este momento. Dios dará a cada uno
una examinación de su registro de vida, y una oportunidad para decidir
de una vez por todas si desean que se les devuelvan sus pecados o si
desean que les sean borrados para siempre.
A través de esta difícil experiencia, Cristo purifica a Su pueblo para
que nunca más sean corrompidos por el pecado. Cuando el proceso haya
completado su obra, Cristo se levantará y les quitará las ropas viles, el
conocimiento del mal, y los vestirá con ropas de justicia eterna. Ahora
estarán protegidos eternamente contra los artilugios de los tentadores.
Esta es la purificación final del templo del alma ilustrada en Daniel 8:14.
78 39
CAPÍTULO CUATRO
LA PURIFICACIÓN FINAL DEL TEMPLO
Hay numerosos pasajes en la Biblia y en el Espíritu de Profecía que
describen la purificación final del templo. En El Conflicto de los Siglos
426 leemos que “La venida de Cristo como nuestro Sumo Sacerdote al lugar
santísimo para la purificación del santuario, de la que se habla en Daniel 8:14; la
venida del Hijo del hombre al lugar donde está el Anciano de días, tal como está
presentada en Daniel 7: 13; y la venida del Señor a su templo, predicha por
Malaquías, son descripciones del mismo acontecimiento representado también
por la venida del Esposo a las bodas, descrita por Cristo en la parábola de las diez
vírgenes, según Mateo 25.”
Queremos resaltar especialmente de lo anterior que Daniel 8:14 es
el mismo evento que Malaquías 3:1-4, el cual describe al Refinador
purificando y purgando a los hijos de Leví para que puedan presentar las
ofrendas al Señor conforme a la justicia.
El mayor desafío que enfrenta nuestro Gran Sacerdote desde 1844
es que Su pueblo entienda Su obra en el lugar santísimo y coopere con Él
en Su esfuerzo para purificar, no solo el santuario en el cielo, sino
también el templo del alma. Primero, Él desea salvar a Su pueblo de su
continuo pecado intencionado. Esta es Su obra en la primera sala,
purificar la mente consciente. Luego Él desea convencer a Su pueblo de
que también necesitan purificar su mente subconsciente del registro de
los pecados confesados que aún residen ahí. Desea mostrarles el peligro
que causan sus pasadas experiencias en el pecado, y cómo estropean y
corrompen incluso su obediencia y sus oraciones, y el mejor servicio para
Él.
Cristo anhela completar Su obra como devorador de pecados y
regresar como Rey de reyes y Señor de Señores para llevar a Su pueblo
40
“Está por sobrecogernos la lucha final del gran conflicto, cuando con
“grande potencia, y señales, y milagros mentirosos, y con todo engaño de
iniquidad”, Satanás obrará para representar falsamente el carácter de Dios, a fin
de seducir, “si es posible, aun a los escogidos”. Si hubo alguna vez un pueblo
que necesitase un aumento constante de la luz del cielo, es el pueblo que,
en este tiempo de peligro, Dios llamó a ser depositario de su santa ley y
a vindicar su carácter delante del mundo. Aquellos a quienes se confió un
cometido tan sagrado deben ser espiritualizados y elevados por las verdades que
profesan creer.” 5T 746.
Cristo puede recibir gloria solo a través de los santos que ha
redimido. “Vi que somos el único pueblo sobre la Tierra de quien Dios recibe
gloria, y si nosotros calláramos las mismas piedras clamarían, pues Dios debe
recibir la gloria de aquellos que moran sobre la Tierra. La única compañía que
puede alabar y honrar a Dios, Yo vi, son aquellos que guardan los mandamientos
de Dios y la fe de Jesús” Manuscritos 5 p. 201. Son Su evidencia al mundo
y al universo de la terrible perversidad del pecado y de la terrible ruina
y degradación que conlleva. Pero cuando se han redimido plenamente,
manifestarán los gloriosos resultados de ser llevados a la completa
expiación con Cristo y Su ley.
“El Señor Jesús está realizando experimentos en los corazones humanos
por medio de la manifestación de su misericordia y abundante gracia. Está
realizando transformaciones tan sorprendentes que Satanás, con toda su
triunfante jactancia, con toda su confederación del mal unida contra Dios y las
leyes de Su gobierno, se detiene para mirarla como una fortaleza inexpugnable
ante sus sofismas y engaños. Son para él un misterio incomprensible. Los
ángeles de Dios, serafines y querubines, los poderes comisionados para cooperar
con los agentes humanos, contemplan con asombro y gozo, cómo hombres caídos,
una vez hijos de la ira, están desarrollando, por la enseñanza de Cristo,
caracteres a la semejanza divina, para ser hijos e hijas de Dios, para desempeñar
una parte importante en las ocupaciones y placeres del cielo.” TM p. 18.
77
Cosas más elevadas y mejores se nos ofrecen en estos últimos días,
como no se habían ofrecido nunca antes. Todos los mandatos de Dios son
propicios. Necesitamos la fe de Abrahán que no se tambaleará en las
promesas sino creerá lo que Dios ha prometido que es capaz de realizar.
Y todas estas cosas están disponibles para nosotros desde el lugar
santísimo donde Cristo, nuestro Sumo Sacerdote está ministrando en
nuestro nombre. Desde 1844, Él ha puesto delante de nosotros una
puerta abierta por la cual podemos entrar por la fe y recibir toda la gracia
y poder necesarios para estos días finales del conflicto de los siglos.
Observe lo siguiente.
“El gran plan de la redención, como está revelado en la obra final de estos
últimos días, debe recibir estricto examen. Las escenas relacionadas con el
santuario celestial deben hacer tal impresión en la mente y el corazón de todos,
que puedan impresionar a otros. Todos necesitan llegar a ser más inteligentes
respecto de la obra de la expiación que se está realizando en el santuario celestial.
Cuando se vea y comprenda esa gran verdad, los que la sostienen trabajarán en
armonía con Cristo para preparar un pueblo que subsista en el gran día de Dios,
y sus esfuerzos tendrán éxito.” Testimonios Tomo 5 575.
Recordemos que “Fuimos traídos a la existencia porque fuimos
necesitados. Qué triste es el pensamiento de que si nos ponemos del lado
equivocado, en las filas del enemigo, nos hemos perdido para el diseño de nuestra
creación. Estamos decepcionando a nuestro Redentor; los poderes que Él designó
para Su servicio son usados para combatir Su gracia y Su amor incomparable.”
ST 22 de abril de 1903.
Cristo ha hecho todo por nosotros. No se escatimó ni a Sí mismo
para traernos una salvación eterna y una vida eterna. Podemos mostrar
nuestro agradecimiento por toda Su bondad y bendiciones haciendo todo
lo que podamos para glorificarlo y reivindicar Su carácter delante del
universo. Este es el privilegio especial de aquellos que viven en estos
últimos tiempos.
a las mansiones que Él ha preparado para ellos. Pero Su pueblo parece
contentarse con hacer que Él continúe cargando sus pecados y que los
levante cuando caigan. Así que Él continúa llamando a la puerta,
intentando obtener la cooperación de Su pueblo para finalizar la
expiación, y ponerle fin al pecado.
Para lograrlo, Él necesita borrar los pecados de su pueblo. Pero no
puede hacerlo hasta que Su pueblo desee que esto sea hecho. Y Su pueblo
no deseará que esto sea hecho hasta que caigan en la cuenta que esto es
necesario. Y no lo hallarán necesario hasta que se vean a sí mismos, aún
vestidos con ropas viles, necesitando la constante intercesión de un
mediador para encubrir su carácter imperfecto. Como se declara en
Lecciones Objetivas de Cristo, p.158, “Debemos conocer nuestra verdadera
condición, pues de lo contrario no sentiremos nuestra necesidad de la ayuda de
Cristo. Debemos comprender nuestro peligro, pues si no lo hacemos, no huiremos
al refugio. Debemos sentir el dolor de nuestras heridas, o no desearemos
curación.” Para ver nuestra condición espiritual, necesitamos mirar la
obra que está sucediendo en el lugar santísimo. Entonces, al igual que
Isaías, exclamaremos, “… ¡Ay de mí, que estoy perdido! Soy un hombre de
labios impuros y vivo en medio de un pueblo de labios blasfemos, ¡y no obstante
mis ojos han visto al Rey, al Señor Todopoderoso!” Isaías 6:5
Comentando sobre la experiencia de Isaías, Ellen White escribió;
“Isaías había denunciado el pecado de otros, pero ahora se ve él mismo expuesto
a la misma condenación que había pronunciado sobre otros... Su visión de sí
mismo podría ser expresada en el lenguaje del apóstol Pablo, ‘¡Soy un pobre
miserable! ¿Quién me librará de este cuerpo mortal?’"... La visión dada a Isaías
representa la condición de los hijos de Dios en los últimos días. Tienen el
privilegio de ver por fe la obra que se está desarrollando en el santuario celestial...
Mientras miran por fe en el lugar santísimo, y ven la obra de Cristo en el
santuario celestial, perciben que son un pueblo de labios impuros… Con razón
76 41
podrían entregarse al desaliento al comparar su propia debilidad e indignidad con
la pureza y hermosura del carácter de Cristo. Pero hay esperanza para ellos si,
como Isaías, reciben el sello que el Señor quiere que se imprima sobre el corazón
y si humillan su alma delante de Dios. El arco de la promesa está sobre el trono
y la obra realizada a favor de Isaías se realizará en ellos. Dios responderá las
peticiones provenientes del corazón contrito.” Comentario Bíblico Adventista
4 p.1139.
DURMIENDO EN LA PUERTA ABIERTA
En Apocalipsis 3:8 Cristo nos dice, “Conozco tus obras. Mira que
delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar…” Por más de
170 años esa puerta ha permanecido abierta. No obstante aún estamos
aquí en este mundo de pecado. En El Evangelismo p.695 leemos que
“Dios ha encomendado a su pueblo una obra que debe terminarse en la tierra. El
mensaje del tercer ángel debía predicarse, las mentes de los creyentes debían
dirigirse hacia el santuario celestial, donde Cristo había entrado para realizar
expiación por su pueblo.” Si esto hubiera sido realizado, nos diría que la
obra habría sido completada y Cristo vendría para que Su pueblo
recibiera su recompensa. Pero esto no ha sucedido. Así que ¿cuál es
nuestra necesidad más urgente en este momento?
“La Iglesia durmiente debe despertar de su letargo espiritual y darse
cuenta de las tareas importantes que ha dejado de cumplir. Las personas no han
entrado al lugar santo, donde Jesús ha ido a hacer la expiación por sus
hijos. Necesitamos al Espíritu Santo para comprender las verdades de este
tiempo; pero hay una sequía espiritual en las iglesias, y nos hemos acostumbrado
a quedar satisfechos con la manera como nos estamos presentando ahora ante
Dios.” The Review and Herald, 25 de febrero de 1890. Veamos algunas
declaraciones específicas que nos muestran lo que Cristo quiere hacer por
nosotros a través de Su especial ministerio de expiación en el lugar
santísimo.
verdaderamente realizado.
La última generación de santos sellados es llamada primicias ante
Dios. Son las primicias de entre los vivos que serán trasladados sin ver
la muerte. Son un testimonio vivo para el universo del poder
omnipotente de la gracia redentora de Cristo que puede transformar a
los pecadores en seres sin pecado que reflejan la imagen de Cristo
perfectamente. No es hasta que estas primicias sean desarrolladas y
presentadas delante del Señor que el resto de la cosecha se recogerá. No
es sino hasta que los 144,000 asean madurados, sellados y puestos a
prueba durante el tiempo de la tribulación, que la cosecha de los santos
durmientes será resucitada y reunida en el reino celestial. Esta parece ser
la razón por la cual solo los pecados de aquellos que han vivido o muerto
bajo la predicación del El Mensaje del Tercer Ángel, son colocados sobre
el macho cabrío al final del día de la expiación. Hasta que eso suceda todo
el universo espera la manifestación de estos hijos de Dios. (Romanos 8:22)
Ahora podemos ver por qué los santos fieles del pasado “… aunque
ninguno recibió todo lo que Dios le había prometido. Pues Dios tenía preparado
algo mejor para nosotros, de modo que ellos no llegaran a la perfección sin
nosotros.” Hebreos 11: 39-40.
Aquellos que sean despertados por el llamado final al matrimonio
harán muy rápidos progresos en su experiencia espiritual y conocimiento
de la verdad. “Algunos de nosotros hemos tenido tiempo para llegar a la verdad,
para avanzar paso a paso, y cada paso que hemos dado nos ha fortalecido para
tomar el siguiente. Pero ahora el tiempo está casi agotado, y lo que hemos tardado
años en aprender, ellos tendrán que aprenderlo en pocos meses.” Primeros
Escritos 67. El proceso de santificación será enormemente acelerado. Al
comparar meses con años en la sentencia anterior, parecería sugerir que
el proceso será acelerado doce veces más rápido. Otras referencias
parecen indicar lo mismo. “A medida que nos acercamos al fin de la historia
de esta tierra, o avanzamos más y más rápidamente en el crecimiento cristiano,
o retrocedemos en proporción igualmente decidida” Mensajes Selectos 3 407.
42 75
“Pues Dios tenía preparado algo mejor para nosotros, de modo que ellos no
llegaran a la perfección sin nosotros.” Hebreos 11:39-40. El pleno
cumplimiento de las promesas del nuevo pacto aguarda la
“manifestación de los hijos de Dios” (Romanos 8:19) que será revelada
cuando el Mensaje del Tercer Ángel haya completado su obra. Hasta que
eso suceda, toda la creación “gime de angustia como si tuviera dolores de parto”
Romanos 8:22.
LAS PRIMERAS PRIMICIAS PARA DIOS
En Apocalipsis 14:4-5 los resultados del Mensaje del Tercer Ángel
se muestran por los santos perfeccionados y sellados que están sin
mancha delante del trono de Dios. Son llamados las “primicias unto Dios
y el Cordero.” Aquí vemos una tipología significativa que nos lleva de
vuelta al antiguo servicio del santuario. En Levítico 23:10 -11 leemos: “que
les dijera a los israelitas: «Cuando ustedes hayan entrado en la tierra que les voy
a dar, y sieguen la mies, deberán llevar al sacerdote una gavilla de las primeras
espigas que cosechen. El sacerdote mecerá la gavilla ante el SEÑOR para que les
sea aceptada. La mecerá a la mañana siguiente del sábado.” Comentando sobre
esta ceremonia, PP 539 nos dice, “La cebada era el primer cereal que se
cosechaba en Palestina, y al principio de la fiesta empezaba a madurar. El
sacerdote agitaba una gavilla de este cereal ante el altar de Dios en
reconocimiento de que todo era suyo. No se había de recoger la cosecha antes que
se cumpliera este rito.”
Esto nos está diciendo que la cosecha general no puede segarse
hasta que las primicias hayan sido presentadas delante del Señor.
Sabemos que Cristo fue la primicia de aquellos que duermen en la tumba.
“Lo cierto es que Cristo ha sido levantado de entre los muertos, como primicias
de los que murieron.” 1 Corintios 15:20. Pero la gran cosecha de los santos
durmientes no resucitó con Él cuando Él ascendió. Él trajo de vuelta a
unos cuantos de cada generación que habían estado en la tumba como
una promesa de lo que Él hará en la cosecha del final de los tiempos. Ese
es el momento cuando el simbolismo de las primicias será
74
“Pero ¿quién podrá soportar el día de su venida? ¿Quién podrá
mantenerse en pie cuando él aparezca? Porque será como fuego de fundidor o
lejía de lavandero. Se sentará como fundidor y purificador de plata; purificará a
los levitas y los refinará como se refinan el oro y la plata. Entonces traerán al
SEÑOR ofrendas conforme a la justicia.” Malaquías 3:2,3.
El pasaje anterior puede aplicarse a las purificaciones diarias de
nuestros hábitos pecaminosos. Pero tiene una aplicación específica a la
purificación de la corrupción que permanece después de que los pecados
se han confesado y perdonado. Ellen White vincula a Malaquías 3 con
Daniel 8:14 en El Conflicto De Los Siglos p. 426. El siguiente pasaje
también tiene una aplicación directa al día de la expiación.
“Entonces el ángel me mostró a Josué el sumo sacerdote, que estaba de pie
ante el ángel del SEÑOR. El Acusador, Satanás, estaba allí a la derecha del ángel
y presentaba acusaciones contra Josué. Entonces el SEÑOR le dijo a Satanás:
‘Yo, el SEÑOR, rechazo tus acusaciones, Satanás. Así es, el SEÑOR que eligió
a Jerusalén te reprende. Este hombre es como un tizón en llamas que ha sido
arrebatado del fuego’. La ropa de Josué estaba sucia cuando estuvo de pie ante el
ángel. Entonces el ángel dijo a los otros que estaban allí: ‘Quítenle esa ropa
sucia’. Luego se volvió hacia Josué y le dijo: ‘¿Ya ves? He quitado tus pecados y
ahora te voy a dar esta ropa nueva y fina’.” Zacarías 3:1-4.
Con respeto a este pasaje se nos dice que la visión de Zacarías de
Josué y el Ángel “se aplica con fuerza peculiar a la experiencia del pueblo de
Dios durante la terminación del gran día de expiación.” Testimonios Tomo 5
p.472. Y, en el comentario de Ellen White sobre esta visión, se nos otorga
la que es quizá la descripción más gráfica de lo que sucede cuando Cristo
realiza la expiación especial para Su pueblo fiel.
“Mientras los hijos de Dios afligen sus almas delante de él, suplicando
pureza de corazón, se da la orden: “Quitadle esas vestiduras viles”, y se
43
pronuncian las alentadoras palabras: “Mira que he quitado de ti tu pecado, y te
he hecho vestir de ropas de gala’. Se pone sobre los tentados, probados, pero fieles
hijos de Dios, el manto sin mancha de la justicia de Cristo. El remanente
despreciado queda vestido de gloriosos atavíos, que nunca han de ser ya
contaminados por las corrupciones del mundo. Sus nombres permanecen en el
Libro de la Vida del Cordero, registrados entre los fieles de todos los siglos. Han
resistido los lazos del engañador; no han sido apartados de su lealtad por el
rugido del dragón. Ahora están eternamente seguros de los designios del
tentador. Sus pecados han sido transferidos al originador de ellos. Y ese residuo
no solo es perdonado y aceptado, sino honrado. Una ‘mitra limpia’ es puesta
sobre su cabeza. Han de ser reyes y sacerdotes para Dios. Mientras Satanás
estaba insistiendo en sus acusaciones y tratando de destruir esta hueste, los
ángeles santos, invisibles, iban de un lado a otro poniendo sobre ellos el sello del
Dios viviente.” Testimonios Tomo 5 p. 475.
¿QUÉ SON LAS ROPAS VILES?
Este pasaje describe al pueblo de Dios quienes se convertirán en
los 144,000 al llegar al juicio final y al día de la expiación vestidos en
ropas viles. ¿Qué son las ropas viles? No pueden ser los pecados no
confesados y no perdonados. Si tuvieran algún pecado sin confesar, al
llegar su caso a juicio, su nombre sería borrado del libro de la vida. (Vea
El Conflicto De Los Siglos p. 483). Así que las ropas viles no son pecados
que no han sido confesados hasta ese momento. Se nos da un indicio con
respecto a lo que estas ropas viles realmente son, unas páginas antes en
el libro. Son los pecados pasados que han deshonrado a Dios. En la
página 473 leemos, “Como Josué intercedía delante del Ángel,
les parecía sublime. Habían tenido hambre y sed de la verdad, y ésta les era más
preciosa que la vida. Pregunté por la causa de tan profundo cambio y un ángel
me respondió: “Es la lluvia tardía; el refrigerio de la presencia del Señor; el
potente pregón del tercer ángel.”” Primeros Escritos 271.
La justificación por la fe como se presenta en el Mensaje del Tercer
Ángel es en realidad la culminación plena de la promesa del nuevo pacto.
Aquellos que acaten el testimonio directo del Testigo Verdadero para los
Laodicenses, experimentarán el arrepentimiento del día de la expiación
que traerá el perdón y la justificación, plena y completa, junto con todas
las demás bendiciones del nuevo pacto. Después de describir la
intercesión final que Jesús realiza por Su pueblo en el juicio, El Conflicto
De Los Siglos p. 485 nos dice, “Así se cumplirá de un modo completo la
promesa del nuevo pacto: ‘Perdonaré su iniquidad, y no me acordaré más de sus
pecados’.” "En aquellos días y en ese tiempo, dice Jehová, será buscada la
iniquidad de Israel, y no la habrá, y los pecados de Judá, mas no podrán ser
hallados."
El pueblo de Dios no experimentó en el pasado la culminación
plena del nuevo pacto. La tuvieron en parte. Fueron bendecidos con la
certeza del perdón de los y de la justificación por medio de los méritos
de Cristo mediante los cuales fueron aceptados delante de Dios. Tenían
una posición de perfección como si jamás hubieran pecado. Pero como
se citó anteriormente, “no quedaban completamente exonerado de la
condenación de la ley” No eran liberados de la responsabilidad de sus
pecados pasados. No es hasta que los pecados sean borrados que los
creyentes en Jesús experimentarán la realización plena del nuevo pacto.
De esto trata El Mensaje del Tercer Ángel.
Cuando leemos sobre los muchos héroes de la fe registrados en el
capítulo décimo primero de Hebreos, vemos muchos ejemplos
meritorios que somos animados a emular. Pero incluso esos grandes
hombres de fe no experimentaron la realización plena de las promesas
del nuevo pacto,
44 73
El llamado final a la iglesia también está representado por el
testimonio directo a la iglesia de Laodicea. Este es el llamado al
arrepentimiento del día de la expiación para una iglesia que se siente
enriquecida y engrandecida con bienes y que no cae en la cuenta de que
es despreciable, pobre y ciega miserable, y desnuda. Se nos dice que “Este
solemne mensaje hará su obra. Cuando fue presentado por primera vez, indujo a
un detenido examen de conciencia. El pueblo de Dios confesó sus pecados, y se
despertó en todas partes. Casi todos creían que este mensaje concluiría con la
predicación en alta voz del tercer ángel.” 1T 186. Cuando este testimonio
directo venga de nueva cuenta al final de los tiempos, resultará
verdaderamente en el fuerte clamor del tercer ángel. Lea lo siguiente de
Primeros Escritos 269-271.
“Vi que algunos, con fe robusta y gritos acongojados, clamaban ante Dios.
Estaban pálidos y sus rostros demostraban la profunda ansiedad resultante de su
lucha interna. Gruesas gotas de sudor bañaban su frente; pero con todo, su
aspecto manifestaba firmeza y gravedad…
“Pregunté cuál era el significado del zarandeo que yo había visto, y se me
mostró que lo motivaría el testimonio directo que exige el consejo que el Testigo
fiel dio a la iglesia de Laodicea. Moverá este consejo el corazón de quien lo reciba
y le inducirá a exaltar el estandarte y a difundir la recta verdad. Algunos no
soportarán este testimonio directo, sino que se levantarán contra él, y esto es lo
que causará un zarandeo en el pueblo de Dios.”
Aquellos que son despertados por el directo testimonio serán
llenados con el Espíritu Santo y proclamarán la verdad con gran poder.
Se les dará una guardia doble de ángeles celestiales y serán vestidos con
armadura de cabeza a pies. El pasaje continúa diciendo, “Oí que los
revestidos de la armadura proclamaban poderosamente la verdad, con fructuosos
resultados. Muchas personas habían estado ligadas; algunas esposas por sus
consortes, y algunos hijos por sus padres. Las personas sinceras, que hasta
entonces habían sido impedidas de oír la verdad, se adhirieron ardientemente a
ella. Desvanecióse todo temor a los parientes y solo la verdad
72
la iglesia remanente, con corazón quebrantado y ardorosa fe, suplicará perdón y
liberación por medio de Jesús su Abogado. Sus miembros serán completamente
conscientes del carácter pecaminoso de sus vidas, verán su debilidad e
indignidad, y mientras se miren a sí mismos, estarán por desesperar. El tentador
estará listo para acusarlos, como estaba listo para resistir a Josué. Señalará sus
vestiduras sucias, su carácter deficiente. Presentará su debilidad e insensatez,
su pecado de ingratitud, cuán poco semejantes a Cristo son, lo cual ha
deshonrado a su Redentor. Se esforzará por espantar a las almas con el
pensamiento de que su caso es desesperado, de que nunca se podrá lavar la
mancha de su contaminación. Esperará destruir de tal manera su fe que se
entreguen a sus tentaciones, se desvíen de su fidelidad a Dios y reciban la marca
de la bestia.”
En el pasaje anterior vemos al pueblo de Dios experimentando ese
arrepentimiento profundo y quebrantamiento del corazón que
caracteriza al día de la expiación. Están plenamente conscientes de lo
pecaminosas de sus vidas. Esto se debe a la revelación de sus registros
de vida, la cual sucede durante el juicio, y no a los pecados no confesados.
Satanás señala sus ropas viles o sus caracteres defectuosos que son
resultado de sus pecados pasados. Se empeña en atemorizarlos con el
pensamiento de que la mancha de la corrupción de sus pecados pasados
nunca será limpiada.
También tenemos este comentario sobre la visión de Josué y el
Ángel que encontramos en Manuscritos 21 p.384, que define lo que las
ropas viles simbolizan.
“Aquí Josué representa al pueblo de Dios, y Satanás señala sus vestiduras
sucias y los reclama como suyos, sobre quienes él tiene derecho de ejercer su
poder cruel. Pero éstos han usado las horas de su tiempo de prueba, confesando
sus pecados con contrición de alma y apartándose de ellos, y Jesús ha escrito
"perdonado" frente a sus nombres.
Aquellos que no han desistido del pecado ni se han arrepentido ni
buscado perdón para sus transgresiones, no están representados en esta
45
compañía; porque este grupo aflige sus almas a causa de la corrupción e
iniquidad que abundan a su alrededor, y Dios reconocerá a aquellos que están
suspirando y clamando por las abominaciones que se cometen en el mundo. No
se han corrompido delante de Dios; llevan el manto inmaculado del carácter,
lavado y emblanquecido en la sangre del Cordero.
Satanás les señala sus pecados, los que todavía no han sido
borrados y que él mismo los tentó a cometer, y entonces los afrenta
porque son pecadores vestidos con ropas inmundas. Pero Jesús les cambia
su apariencia. Él dice, "'Quitadle esa ropa sucia'... 'Mira que he quitado tu
pecado de ti, y te vestí de ropa de gala'. Manuscrito 21 p.384.
En esta cita vemos que las ‘ropas inmundas’ se identifican como
“los pecados que aún no se las habían borrado.” Se trata de los pecados que
Satanás los ha tentado a cometer, pero de los cuales se han arrepentido y
han sido perdonados. Esto es lo que constituye las ropas viles que Satanás
señala en sus acusaciones. Pero gracias a Dios, Jesús cambia su apariencia
y les ordena ‘quítenles las ropas viles y vístanlos con ropas de gala’.
La purificación de los pecados pasados del pueblo en el día de la
expiación era indicada en el tipo. En Levítico 16:30 leemos, “En dicho día
se hará propiciación por ustedes para purificarlos, y delante del SEÑOR serán
purificados de todos sus pecados”. Observa cuántas veces se hace referencia
a “ustedes” en este versículo relacionado con la purificación. Se menciona
tres veces en un solo versículo. En los versículos que siguen a este
versículo, también se menciona el propio santuario, pero menciona de
nuevo que la purificación era para el pueblo.
justo antes del juicio de los vivos. Aquellas vírgenes fatuas, que habían
estado durmiendo en la seguridad carnal mientras profesaban estar
aguardando al Esposo fueron sorprendidas y no estuvieron preparadas
para unirse con el renacimiento espiritual que las prudentes
experimentaban. En otra dramática visión, se le mostraron a Ellen White
más detalles de cómo acontecerán estas cosas cuando el último
renacimiento poderoso llegue justo antes del juicio de los vivos.
UN SUEÑO SORPRENDENTE
“Estaba en mi sueño hace unas cuantas noches desde que hablé con
ustedes cuando estaban reunidos. Una gran congregación estaba delante de mí.
Hablé, lloré, oré, y algunos parecieron ser tan imposibles de impresionar como
las rocas de granito, pero hubo una poderosa revelación del Espíritu de Dios.
Jesús caminó en medio de nosotros, tocó a uno y a otro, y entonces a otro,
y ¡cómo se iluminaron sus rostros! Alabaron a Dios con corazones gozosos.
Algunos aprobaron. La luz era brillante, omnipresente, pero a algunas pobres
almas Jesús las miró con lástima; se escabulleron en oscuras esquinas, sin
intentar venir hacia la luz, mientras que otros se apresuraron a salir de la
oscuridad, abriéndose paso, como si se tratara de vida y muerte con ellos, y el
clamor prosiguió como nunca lo había escuchado antes. ‘¿Qué debo hacer para
ser salvado? Hubo confesiones de pecados; hubo regocijo por los pecados
perdonados. Me pareció que reinaban antes del Juicio. Pero no todos
participaron. No habían caminado en la compañía de Jesús, sino alejados de Él,
y no notaron su presencia. Parecían pensar que no se trataba de Jesús. ¡Ay, no
lo conocían!!” The New York Indicator, 7 de marzo de 1900.
La escena anterior es sumamente alentadora. Aquellos cuyo
discernimiento espiritual no había desaparecido completamente,
despertaron por la poderosa revelación del Espíritu. Escaparon de la
oscuridad y se apretujaron en la luz y se aferraron a la salvación que fue
tan generosamente ofrecida. Los pecados fueron confesados y se
regocijaron en el perdón tan abundantemente provisto.
46 71
con Jesús, se nos dice “muchos serán sorprendidos y chasqueados cuando
resuene el grito: “He aquí, el esposo viene”. 9T 155. Demasiado tarde
descubrirán que no pueden obtener el aceite necesario para ser parte de
la procesión de la boda que marcha al salón del banquete. “No podemos
estar listos para encontrar al Señor despertándonos cuando se oye el clamor: “He
aquí el esposo,” y entonces recoger nuestras lámparas vacías para llenarlas.”
Lecciones Objetivas de Cristo p. 413-414.
No obstante, a Ellen White se le otorgaron diferentes visiones que
describen en diversas maneras el renacimiento final que vendrá justo
antes de que termine el período de prueba para la iglesia. Ella vio que
sería una rápida obra realizada para el pueblo de Dios la que los llevaría
al mismo nivel de experiencia. Incluso cuando las 10 vírgenes se
adormilaron y durmieron, no fue demasiado tarde para que las sabias
experimentaran el renacimiento final de la verdadera divinidad que es la
mayor y más urgente de nuestras necesidades. Observe el siguiente
pasaje relativo a este punto: “Todos los que esperan al Esposo celestial están
representados en la parábola como dormidos, porque su Señor demoraba su
venida; pero los prudentes se despertaron ante el mensaje de su aproximación,
respondieron al mensaje, no perdieron todo su discernimiento espiritual, y
se pusieron en acción. Su experiencia religiosa se robusteció e incremento al
aferrarse de la gracia de Cristo, y pusieron su afecto en las cosas de lo alto.
Comprendieron dónde estaba la fuente de sus recursos y apreciaron el amor que
Dios les prodigaba. Abrieron su corazón para recibir el Espíritu Santo por el cual
el amor de Dios fue derramado en su corazón. Arreglaron y encendieron sus
lámparas, las cuales proyectaban constantes rayos de luz a las tinieblas morales
del mundo.” Comentario Bíblico Adventista 5 p.1099.
Tendremos un mejor entendimiento del momento en que este
renacimiento tendrá lugar cuando comprendamos que el matrimonio
descrito en la parábola de las 10 vírgenes sucede en el lugar santísimo del
santuario celestial. El matrimonio es el tiempo del juicio, el día de la
expiación. El llamado final al matrimonio es dado
Isaías también nos da un retrato maravilloso de la purificación del
día de la expiación, y los resultados gloriosos que experimentarán los
aún fieles a Dios que quedan en Sion cuando el cribado haya concluido.
“Pero en aquel día, el retoño del Señor será hermoso y glorioso. El fruto
de la tierra será el orgullo y la gloria de todos los sobrevivientes de Israel. Los
que queden en Sion serán un pueblo santo, los que sobrevivan la destrucción de
Jerusalén y estén registrados entre los vivientes. El Señor lavará la inmundicia
de la hermosa Sion y limpiará a Jerusalén de sus manchas de sangre con el
aliento abrasador de su ardiente juicio.” Isaías 4:2-4. (Vea El Conflicto De
Los Siglos 485)
Por supuesto, cuando los pecados del pueblo de Dios sean
borrados, cuando la inmundicia de las hijas de Jerusalén sea lavada, el
registro de sus pecados también será borrado en el santuario celestial.
No quedará recordatorio de sus pecados. Cuando el objeto original ha
sido purificado, el reflejo también será puro.
La gran obra de la expiación se centra en el pueblo, no en el
propio santuario. Como se mencionó antes, todo el servicio del santuario
era una lección objetiva para enseñarnos que “Desde las eras eternas era el
propósito de Dios que cada creatura, desde el brillante y santo serafín hasta el
hombre, fuera un templo para la eterna morada del Creador.” Al observar
todo el servicio del santuario, podemos ver que es por medio de la gracia
(favor inmerecido) que somos perdonados y justificados; es por medio
de la gracia que somos santificados (hechos justos); y es por medio de la
gracia que se nos borrarán nuestros pecados y recibiremos un completo
perdón y justificación. La obra final de la gracia, que confiere el perdón
y la justificación, totales y completos, no se realizará por nuestros
70 47
logros, sino por la expiación especial de Cristo. Note el siguiente
comentario.
Todo el más profundo interés manifestado entre los hombres por los fallos
de los tribunales terrenales no representa sino débilmente el interés manifestado
en los atrios celestiales cuando los nombres inscritos en el libro de la vida desfilen
ante el Juez de toda la tierra. El divino Intercesor aboga por que a todos los que
han vencido por la fe en su sangre se les perdonen sus transgresiones, a fin de
que sean restablecidos en su morada edénica y coronados con él coherederos del
"señorío primero." (Miqueas 4: 8.) Con sus esfuerzos para engañar y tentar a
nuestra raza, Satanás había pensado frustrar el plan que Dios tenía al crear al
hombre, pero Cristo pide ahora que este plan sea llevado a cabo como si el hombre
no hubiese caído jamás. Pide para Su pueblo, no solo el perdón y la
justificación, plenos y completos, sino además participación en su gloria y
un asiento en su trono.” El Conflicto de los Siglos p.483-484.
LA ELIMINACIÓN DEL CONOCIMIENTO DEL MAL
Cuando los pecados del pueblo fiel de Dios sean borrados, no
tendrán más conocimiento de ellos. Incluso cuando estén plenamente
conscientes de que son pecadores redimidos, aun así no podrán
remembrar sus pecados pasados. Así Dios purificará los corazones y
mentes de Su pueblo de la mera remembranza de sus pecados pasados
que incluso “En esos días —dice el Señor—, no se encontrará pecado en Israel
ni en Judá, porque perdonaré al remanente que yo guarde.” Jeremías 50:20.
Dios ha prometido “No temas, porque no serás avergonzada. No te turbes,
porque no serás humillada. Olvidarás la vergüenza de tu juventud, y no
recordarás más el oprobio de tu viudez.” Isaías 54:4. Con la plena realización
del nuevo pacto, Dios ha prometido que ya no más recordará nuestros
pecados, y será una bendición para Su pueblo el no recordarlos más.
alcanzará la completa estatura de un hombre perfecto en Cristo hasta que cese
su tiempo de prueba.” 4T 367.
Hay dos cosas que son de suma importancia en este tiempo crítico.
Dios nos ha mostrado cómo habremos de lograr la clase de perfección
requerida en este final de los tiempos. No será por nuestro logro
santificado, aunque tampoco será sin él. Solo aquellos que hayan sido
salvados por la sangre del Cordero recibirán los beneficios de la
intercesión final de Cristo. Pero será gracias a la expiación de Cristo. No
es hasta que nuestros pecados sean borrados del santuario interior del
alma que experimentaremos esa perfección que será demostrada en los
144,000. La expiación de Cristo consiste en el borrado de los pecados y
en la efusión de la lluvia tardía. El mensaje para hoy es, “por tanto, para
que sean borrados sus pecados, arrepiéntanse y vuélvanse a Dios, a fin de que
vengan tiempos de descanso de parte del Señor” “ Hechos 3:19. Es la lluvia
tardía la que hace eficaz la expiación que Cristo realiza en el santuario
celestial, completando así la obra de la gracia de Dios en el alma. Vea TM
506. La lluvia tardía también permitirá que el pueblo de Dios finalice la
evangelización del mundo en muy corto tiempo.
¿Pero cómo serán llevados los verdaderos creyentes al mismo
nivel de experiencia para que sus pecados puedan ser borrados y ellos
puedan llenarse con la lluvia tardía? La Inspiración nos dice que habrá
un llamado especial a la mitad de la noche que despertará a todas las
vírgenes durmientes. Observe lo siguiente:
“Mi mente fue llevada al futuro cuando se dará la señal, ‘el esposo viene,
salid a recibirlo.’ Pero algunas se retrasaron en obtener el aceite para llenar sus
lámparas, y demasiado tarde descubrirán que el carácter, representado por el
aceite, es intransferible.” RH Feb.11, 1896. Este será el último llamado
dado a la iglesia. Aquellos que no han estado viviendo en cercana
hermandad
48 69
UNA DEMOSTRACIÓN FINAL
Dios intenta convencer a toda Su creación que Sus principios son
“placenteros y en sus senderos hay paz.” Proverbios 3:17. ¿Pero cómo
persuadirá Dios a los seres inteligentes de que Sus maneras y Sus leyes
son infinitamente mejores que las de Lucifer? Lo llevará a cabo a través
de una total demostración de ambos lados del conflicto de los siglos. Los
resultados de los siguientes principios de Satanás serán vistos
completamente en estos finales de los tiempos cuando produzca un
pueblo que tenga su sello, la marca de la bestia, en sus frentes o en sus
manos. “Los hombres serán transformados en demonios al entregarse a las
influencias satánicas; y los que fueron creados a la imagen de Dios, que fueron
hechos para honrar y glorificar a su Creador, se convertirán en habitación de
dragones, y Satanás verá en una raza apóstata su obra maestra de mal: hombres
que reflejen la imagen del diablo” Comentarios Bíblicos Tomo 5 1136.
Por otra parte, los resultados de seguir los principios de Dios se
verán plenamente en una persona que tenga el sello de Dios en su frente
y sea obediente a todos Sus mandamientos. Vea Apocalipsis 14:12. Los
seguidores de Satanás están instalados en completa rebelión contra la ley
de Dios y aquellos que siguen a Dios están instalados en perfecta
obediencia a Su ley de amor.
El universo no estará seguro hasta que haya sucedido esta
demostración de los principios de Dios en contraste con los principios de
Lucifer. Dios necesita tener un pueblo que obedezca Su ley de manera
perfecta. Necesita un pueblo que sea capaz de presentarse sin un
intercesor que compense cualquier deficiencia o limitación en sus vidas.
De esto trata el Mensaje del Tercer Ángel. La Inspiración muestra, y el
tiempo lo ha demostrado, que la clase de perfección requerida para
presentarse si un mediador no proviene del proceso normal de
santificación, a pesar de lo importante que es él “El hombre puede crecer en
Cristo, su cabeza viviente. No es tarea de un momento, sino de toda una vida.
Creciendo diariamente en la vida divina, no
Leemos sobre los santos que buscaban en sus corazones durante el tiempo
de la angustia de Jacob para ver si había algún pecado que no hubiera
sido atendido. Pero El Conflicto De Los Siglos p.620 nos dice que “Pero
por muy profundo que sea el sentimiento que tiene de su indignidad, no tiene
culpas escondidas que revelar. Sus pecados han sido examinados y borrados en el
juicio; y no puede recordarlos.” Su mente subconsciente ha sido tan
cuidadosamente limpiada de los últimos vestigios del pecado que no
pueden recordarlos. Observe que no dice que ellos eligen no recordarlos,
sino que no pueden hacerlo. “No podrán recordar ningún pecado particular,
pero en toda su vida ven muy poco de valor. Sus pecados han ido al juicio, y se ha
registrado frente a ellos el perdón. Sus faltas han sido llevadas al país del olvido,
y no pueden ser traídas a la memoria.” Dones Espirituales 3 p.135.
Cuando esta experiencia llegue al pueblo de Dios, serán
transformados enteramente a la semejanza de Cristo. Vivirán en este
mundo de pecado cubierto con carne pecadora como Cristo lo hizo en Su
humanidad, sin ningún vestigio de pecado en ellos. Sus caracteres serán
perfeccionados, porque todos los pensamientos y sentimientos que
conforman su carácter son ahora puros, sin más remembranza del pecado.
Leemos que “Nuestro Salvador no pudo ser inducido a ceder a la tentación ni
siquiera en pensamiento. … Satanás no pudo encontrar nada en el Hijo de Dios
que le permitiese ganar la victoria. Cristo guardó los mandamientos de su Padre
y no hubo en él ningún pecado de que Satanás pudiese sacar ventaja. Esta es la
condición en que deben encontrarse los que han de poder subsistir en el tiempo de
angustia.” El Conflicto De Los Siglos p.623.
Los santos que vivan durante la promulgación del Fuerte Clamor y
68 49
del tiempo de angustia de Jacob, tampoco tendrán nada en ellos que
responda a las tentaciones de Satanás. Su firmeza espiritual será puesta
a prueba duramente, pero ninguno tropezará ni caerá. Crear esa clase de
pueblo es la razón por la que Cristo ingresó al lugar santísimo en 1844.
Este es el gran objetivo del El Mensaje del Tercer Ángel.
ha retrasado Su venida y permitido que el conflicto de los siglos continúe
por tan largo tiempo.
¿Por qué Dios crearía otra clase de seres inteligentes justo en el
momento en que se había desatado una gran rebelión en el cielo? La
respuesta la hallamos en ST, 22 de abril de, 1903 que dice, “Fuimos traídos
a la existencia porque fuimos necesitados. Qué triste es el pensamiento de que si
nos ponemos del lado equivocado, en las filas del enemigo, nos hemos perdido para
el diseño de nuestra creación.”
Dios necesitaba que alguien lo ayudará a contraatacar los alegatos
de Lucifer de que Su ley era restrictiva y que estaba impidiendo que las
inteligencias del universo se elevaran a “un grado de existencia más elevado
y glorioso.” Vea El Conflicto De Los Siglos p.499. El Hombre fue creado
para refutar las acusaciones de Lucifer. Dios hizo al Hombre, una nueva
y distintiva clase de seres con la capacidad de cooperar con su Creador y
de llevar a cabo Sus planes. El Hombre fue hecho del polvo del suelo, y
por debajo de los ángeles. Pero “si la santa pareja se somete a la obediencia,
la especie será, después de un tiempo, hecha igual a la de los ángeles” RH Feb.24,
1874. Esto demostraría la falsedad de las afirmaciones de Lucifer de que
las leyes de Dios eran restrictivas e impedían que los seres inteligentes se
elevaran a un estado elevado de la existencia.
No puede obtenerse seguridad universal hasta que se dé una
demostración tangible que reivindique el carácter de Dios y la
benevolencia y justicia de Su ley. La ley de Dios ha sido el punto central
de los ataques lanzados por Lucifer y todos los que se han aliado con él
en su rebelión.
50 67
crecimiento espiritual continuó solo por muy corto tiempo. No obstante,
todos ellos serán resucitados cuando Cristo venga y ascenderán con los
trasladados a su hogar eterno. Cristo ha realizado la expiación especial
para los muertos mientras dormían en sus tumbas, borró sus pecados y
les quitó sus ropas viles. Todos sus pecados ignorantes así como sus
pecados confesados fueron borrados en el juicio. Cuando vengan en la
resurrección, ellos, como los trasladados, serán plenos como Cristo, sin
culpa delante del trono de Dios. Así que nos enfrentamos a esta cuestión.
¿No podía Cristo hacer lo mismo para los santos vivientes? ¿No podía
realizar la expiación por los pecados ignorantes de los santos vivos y
borrarlos? ¿No podía aceptar un mínimo de desarrollo espiritual como lo
hizo con el ladrón en la cruz? Esta parece ser la opinión general entre
muchos creyentes profesos del Mensaje del Tercer Ángel.
Verdaderamente, Cristo podría hacer por los muertos lo que Él
hace por los muertos. Podría aceptarlos en las diversas etapas de
crecimiento espiritual sin requerir la clase de perfección donde cada
pecado oculto deba ser revelado y echo a un lado. En las épocas de
ignorancia del pasado, Dios hizo un guiño, y podría hacerlo en estos
tiempos finales también. No obstante, sabemos que este no es el caso. Se
nos dice que antes de que la prueba termine “todo lo que sea imperfecto en
nosotros será quitado. Toda envidia, y celos, y malas sospechas, y todo plan
egoísta, habrán sido eliminados de la vida.” Mensajes Selectos Tomo 3 427.
¿Por qué quiere Cristo que Su pueblo logre un alto estándar de perfección
en estos finales de los tiempos cuando no se lo requirió a ninguna otra
generación? La razón de ello recae en los mismos cimientos del conflicto
de los siglos. Lo que Cristo está intentando lograr a través del Mensaje
del Tercer Ángel se señala en Nahúm 1:9, donde Él ha prometido que “la
tribulación no se repetirá.” Todo el universo debe protegerse contra otra
rebelión, otro conflicto de los siglos. Esto es porque Cristo
CAPÍTULO CINCO
EL MENSAJE DE 1888
En medio de la controversia por el mensaje que fue entregado a la
gente en la Conferencia Bíblica de 1888 en Minneapolis, algunos
solicitantes aparentemente confundidos le preguntaron a Ellen White
sobre el mensaje de la justificación por la fe, y si era parte del Mensaje
del Tercer Ángel. En Mensajes Selectos 1 p.372 leemos, “Varios me han
escrito preguntándome si el mensaje de la justificación por la fe es el mensaje del
tercer ángel, y he contestado: “Es el mensaje del tercer ángel en verdad”.
El Mensaje del Primer Ángel proclama el comienzo del juicio
investigador que sabemos que comenzó en 1844. El segundo y el tercer
ángel siguen al primero. Por lo tanto, el Mensaje del Tercer Ángel no
pudo haberse otorgado antes del comienzo del juicio en 1844. Entonces,
¿por qué Ellen White afirmó tan contundentemente que la justificación
por la fe es el Mensaje del Tercer Ángel en veracidad?
Para encontrar la solución a ese dilema necesitamos mirar más de
cerca a esta gran verdad de la justificación por la fe. Como se mencionó
antes, esta verdad fue revelada a Adán a través del sistema expiatorio
que fue instituido después de su caída. Y todos los fieles a lo largo de las
épocas del viejo testamento tuvieron un conocimiento básico de la
justificación a través de su substituto divino. Las maravillosas verdades
relativas a la muerte expiatoria de Cristo en nombre de los pecadores
fueron reveladas en tiempos antiguos a través del servicio del santuario.
Los méritos justificadores de la justicia imputada de Cristo se
manifestaron especialmente en el altar de incienso. Lea esta declaración:
“El incienso, que ascendía con las oraciones de Israel, representaba los méritos y
la intercesión de Cristo, su perfecta justicia, la cual por medio de la fe es
acreditada a su pueblo, y es lo único que puede hacer el culto de los seres humanos
aceptable a Dios.” PP 353.
Pero hubo otras lecciones significativas con respecto a la verdad
66 51
de la justificación que fueron reveladas en el servicio del santuario que
necesitamos entender. Se nos dice que “En la ofrenda por el pecado que se
ofrecía durante el año, se había aceptado un substituto en lugar del pecador; pero
la sangre de la víctima no había hecho completa expiación por el pecado.
Solo había provisto un medio en virtud del cual el pecado se transfería al
santuario. Al ofrecerse la sangre, el pecador reconocía la autoridad de la ley,
confesaba la culpa de su transgresión y expresaba su fe en Aquel que había de
quitar los pecados del mundo; pero no quedaba completamente, exonerado
de la condenación de la ley.” PP 355.
Destacan dos detalles importantes en el pasaje anterior. Primero,
nos dice que “la sangre de la víctima no había hecho completa expiación por el
pecado.” Solo proveía un medio para transferir el pecado al santuario.
Esto puede sorprender a muchos creyentes, especialmente a la luz de lo
siguiente: "La justificación es el pleno y completo perdón de los pecados" y "ser
perdonados en la manera en que Cristo perdona es no solo ser perdonados, sino
ser renovados en el espíritu de nuestra mente. En el momento en que un pecador
acepta a Cristo por fe, en ese momento es perdonado. La justicia de Cristo le es
imputada a él y él no dudará más de la gracia indulgente de Dios” Comentario
Bíblico Adventista 6 p. 1071. Segundo, también nos dice que aquel que
por la ofrenda de la sangre expresada en su fe en el Redentor que viene
“no era completamente liberado de la condenación de la ley.” Esto también
puede parecer extraño, especialmente cuando el Espíritu de Profecía
define la justificación como “lo opuesto a la condenación. La ilimitada
misericordia de Dios se ejerce sobre los que son totalmente indignos. El perdona
transgresiones y pecados por amor a Jesús, quien se ha convertido en la
propiciación por nuestros pecados.” Fe y obras 104.
Vemos en lo anterior cómo la justificación es lo opuesto de la
condenación. Pero en el pasaje citado de PP 355, nos dice que el pecador
perdonado no era completamente liberado de la condenación de la ley.
La sangre de la víctima no había realizado una expiación completa por
su pecado. En otras palabras, el pecador arrepentido no era plenamente
justificado. Esto puede parecer una revelación perturbadora
Aquellos que viven bajo el Mensaje del Tercer Ángel han nacido
verdaderamente en un punto especial de privilegio en el tiempo. Estarán
involucrados en las escenas finales del conflicto de los siglos conforme
llega a una triunfante conclusión. El Tercer Ángel tiene que completar
una tarea crítica. Primeros Escritos 118 nos dice, “Vi luego el tercer ángel.
Dijo mi ángel acompañante: “Su obra es terrible. Su misión es tremenda. Es el
ángel que ha de separar el trigo de la cizaña, y sellar o atar el trigo para el granero
celestial. Estas cosas debieran absorber completamente la mente y la atención.”
El Mensaje del Tercer Ángel es recoger la cosecha final. Para tener una
cosecha final, todo el pueblo de Dios tendrá que madurar en el mismo
período de tiempo. Es imposible cosechar un cultivo de trigo si el trigo se
encuentra en diferentes etapas de crecimiento. Pero, ¿cómo madurará
todo el trigo al mismo tiempo? Sabemos que la santificación es la obra de
toda una vida. Habrá muchas diferentes etapas de crecimiento entre el
pueblo de Dios mientras se acerca que la cosecha que ha existido a través
de las eras. ¿Cómo se llevará al Pueblo de Dios al mismo nivel de
madurez? Asimismo, ¿es necesario tener una iglesia completamente
perfeccionada sin mancha ni arruga antes de que Cristo venga por
segunda vez?
MORIR EN EL SEÑOR O SER TRASLADADO
Es desafortunado que muchos que profesan ser creyentes del
Mensaje del Tercer Ángel hayan llegado a la conclusión de que es
imposible e innecesario que Dios perfeccione la última generación de Su
pueblo antes de la venida de Cristo. No hacen distinción entre la
experiencia de aquellos que han muerto en la fe y los que serán
trasladados sin ver la muerte.
Es verdad que los millones de santos que murieron en Cristo se
encontraban en todas las etapas de crecimiento espiritual. Hubo hombres
de fe tan ilustres como Job y Daniel que obtuvieron una elevada estatura
de expiación espiritual. Y hubo otros como el ladrón en la cruz cuyo
52 65
que fueron cometidos por el pueblo de Dios. Ellos estarán
indudablemente aliviados de que las desagradables escenas de aquellos
hechos hayan sido removidas para siempre de sus mentes. Olvidar el
adulterio y el asesinato cometido por David, o el fracaso de Moisés y
Aarón al hablarle a la roca en vez de golpearla; y olvidar la frenética
huida de Elías desde Jezabel después de presentarse osadamente en el
Monte Carmelo, sería realmente una bendición para ellos. Y después de
los 1000 años, cuando los malvados sean destruidos junto con Satanás y
sus ángeles, ¿no sería lógico que Dios removiera de todas las inteligencias
del universo las horribles escenas de los crímenes, los derramamientos de
sangre y la iniquidad que atormentó a este mundo por 6000 años?
En Isaías 65:16 y 17 Dios ha prometido, “…las angustias del pasado
han quedado en el olvido, las he borrado de mi vista. Presten atención, que
estoy por crear un cielo nuevo y una tierra nueva. No volverán a mencionarse
las cosas pasadas, ni se traerán a la memoria.” Cuando todos los malvados y
Satanás y sus ángeles sean destruidos, y este mundo sea recreado, no
habrá más recordatorio del pecado y de la devastación que causó. Todo
el universo será libre de la horrible memoria del dolor y el sufrimiento
que caracterizó a este mundo por más de 6000 años. En Patriarcas y
Profetas, p.358 leemos, “La obra de Cristo en favor de la redención del hombre
y la purificación del pecado del universo, será concluida quitando el pecado
del santuario celestial y colocándolo sobre Satanás, quien sufrirá el castigo final.”
La referencia en la sentencia anterior a la “purificación del pecado del
universo” no significa que exista pecado en los otros mundos. Pero
cuando el pecado sea destruido finalmente en el lago de fuego, el
universo estará libre de toda memoria del pecado y de sus nefastos
resultados. El pecado habrá manifestado completamente su malignidad
y será aborrecido universalmente. El universo será purificado de todas
las persistentes escenas mentales de iniquidad y horror que
constantemente se exhibieron en este mundo. “No volverán a mencionarse
las cosas pasadas, ni se traerán a la memoria.”
para aquellos que no están familiarizados con el resto de la historia.
Leyendo en PP 356 descubrimos la solución a este desconcertante
problema. Nos dice, “El día de la expiación, el sumo sacerdote, llevando una
ofrenda por la congregación, entraba en el lugar santísimo con la sangre, y la
rociaba sobre el propiciatorio, encima de las tablas de la ley. En esa forma los
requerimientos de la ley, que exigían la vida del pecador, quedaban satisfechos.”
Entonces el sumo sacerdote tomó simbólicamente los pecados que habían
sido transferidos al santuario y los puso sobre el macho cabrío. Y nos dice
que “cuando el macho cabrío que llevaba estos pecados era conducido al desierto,
se consideraba que con él se alejaban para siempre del pueblo.” Ellos entonces
se consideraban completamente libres de la condenación de la ley. Así
podemos ver en qué punto del servicio del santuario su justificación se
completaba plenamente. Sucedía el día de la expiación cuando los
pecados confesados del pueblo eran sacados del santuario y dispuestos
sobre la cabeza del macho cabrío.
Ahora, si la verdad de la justificación por la fe es el Mensaje del
Tercer Ángel en veracidad, veamos cómo y por qué es así. Un
entendimiento más detallado de la justificación nos ayudará a obtener
más respuestas. En el libro Fe y Obras, p.103, encontramos una buena
descripción del significado de la justificación diaria. “El perdón y la
justificación son una y la misma cosa. Mediante la fe, el creyente pasa de la
posición de un rebelde, un hijo del pecado y de Satanás, a la posición de un leal
súbdito de Jesucristo, no en virtud de una bondad inherente, sino porque Cristo
lo recibe como hijo suyo por adopción.”
Aquí se nos dice que el perdón y la justificación son una y la misma
cosa. Hay dos cosas principales que suceden cuando el alma es
perdonada. Primero, Cristo quita el pecado del pecador y lo carga Él
mismo. El pecador es liberado de la carga de la culpa y se le da un indulto
de la condenación por sus pecados. Segundo, Cristo viste al pecador con
Su propia justicia para que pueda presentarse delante de Dios como si
nunca hubiera pecado. Esta es una maravillosa transacción por la
64 53
cual debemos siempre estar agradecidos. Cristo nos adopta como Sus
hijos y nos da Su póliza de seguro de vida—una póliza de seguro de vida
eterna. Si muriéramos en ese momento, tendríamos la misma garantía
que el ladrón en la cruz—“De cierto te digo hoy estarás conmigo en el paraíso.”
Esta clase de justificación prepara a las personas para la muerte y
la resurrección. Se ha realizado para todos los santos desde que Adán y
Eva pecaron en el Edén. Pero estos santos de Dios no vivían bajo la
proclamación del Mensaje del Tercer Ángel. Cristo todavía estaba
ministrando por ellos en la primera sala del santuario celestial. No
estaban enfrentando el momento en que Cristo cese Su intercesión y el
perdón deje de ser ofrecido.
Durante el tiempo probatorio, el perdón y la justificación están
condicionados a una vida de santificación diaria. “Pero al paso que Dios
puede ser justo y sin embargo justificar al pecador por los méritos de Cristo, nadie
puede cubrir su alma con el manto de la justicia de Cristo mientras practique
pecados conocidos, o descuide deberes conocidos. Dios requiere la entrega
completa del corazón antes de que pueda efectuarse la justificación. Y a fin de que
el hombre retenga la justificación, debe haber una obediencia continua mediante
una fe activa y viviente que obre por el amor y purifique el alma.” Mensajes
Selectos 1 366.
Debemos también caer en la cuenta de que cuando pecamos
intencionalmente, perdemos nuestra justificación. “Cuando infringe la ley,
el hombre está bajo la condenación de la misma, que se convierte en un yugo de
esclavitud para él. Sea cual fuere su profesión, no queda justificado, o sea
perdonado.” ML 250. “La menor transgresión de la ley de Dios acarrea culpa
sobre el transgresor, y sin un sincero arrepentimiento y un abandono del pecado,
éste ciertamente se convertirá en un apóstata” Mensajes Selectos 2 379.
Cuando las almas caen en pecado, la cosa más noble que pueden realizar
es acercarse a Cristo con humilde arrepentimiento y pedir el perdón y el
revestimiento de Su justicia. Aquellos que piensan que pueden permitirse
pecados pequeños y aún retener su justificación viven en un terrible
En este punto, surge la cuestión de si los malvados de este mundo
podrán recordar los pecados del pueblo de Dios que fueron borrados.
Jeremías 50:20 nos dice que en aquel tiempo la iniquidad de Israel y los
pecados de Judá serán buscados, pero no serán encontrados. La
Inspiración nos da un poco más de perspectiva en este punto. El siguiente
pasaje señala que una vez que los pecados del pueblo de Dios sean
puestos sobre el macho cabrío, sus pecados ya no serán recordados en su
contra. “Cuando lleguen los tiempos de refrigerio de la presencia del Señor,
entonces los pecados de las almas arrepentidas que han recibido la gracia de
Cristo y han vencido mediante la sangre del Cordero serán removidos de los
registros del cielo, y serán colocados sobre Satanás, el macho cabrío, el originador
del pecado y no serán recordados nunca más para siempre” ST 16 de mayo de
1895. Así que sus pecados no solo ya no serán recordados por ellos, sino
que sus pecados ya no serán recordados en contra de ellos. Esto va de la
mano con lo que leemos en Ezequiel 33:16 donde nos dice que “no se
sacará a relucir ninguno de sus pecados pasados”
Así parece que será con el remanente. Sus pecados han sido
separados para siempre de ellos y aunque los busquen, “no habrá
ninguno… no serán encontrados.” “Pero Israel será salvada por el SEÑOR
con salvación eterna; y nunca más volverá a ser avergonzada ni humillada.”
Isaías 45:17. Hablando de aquellos que son partícipes de la lluvia tardía,
Dios declara, ¡Nunca más será avergonzado mi pueblo! Joel 2:26 y 27. E
Isaías declara, Disfrutarán de una doble honra en lugar de vergüenza y
deshonra. Poseerán una doble porción de prosperidad en su tierra, y una alegría
eterna será suya.” Isaías 61:7.
Pero el borrado de los pecados puede tener un mayor efecto más
allá de este mundo. Las mentes de todas las inteligencias de otros
mundos también pueden purificarse de la remembranza de los pecados
54 63
EL CUMPLIMIENTO COMPLETO DEL NUEVO PACTO
La magnitud de la experiencia de aquellos que reciben la bendición
de la justificación, plena y completa, es casi imposible de comprender. El
cumplimiento completo de los beneficios del nuevo pacto trasciende
cualquier experiencia espiritual que haya vivido cualquier persona en la
historia de este mundo. El Conflicto De Los Siglos p.485 nos da una breve
descripción. “Así se cumplirá completamente la promesa del nuevo pacto:
"Perdonaré su iniquidad, y no me acordaré más de sus pecados. "En aquellos días
y en ese tiempo, dice el Señor, será buscada la iniquidad de Israel, y no la habrá, y
los pecados de Judá, mas no podrán ser hallados."
Tan completamente será aniquilado el pecado que ya no podrá
encontrarse más. Dios ha dicho que Él lo olvidará, y los santos también
olvidarán su experiencia en el pecado. (Vea El Conflicto De Los Siglos 620
y 3 S.G. 134-135.) Jeremías 50:20 nos dice que aunque los pecados del
pueblo de Dios sean buscados en ese momento, no serán encontrados.
Cuando Cristo purifica el santuario, coloca los pecados de aquellos que
creyeron en el Mensaje del Tercer Ángel en Satanás. En ese punto, ni Dios
ni los santos recordarán esos pecados. Dios ha prometido “Yo soy el que
por amor a mí mismo borra tus transgresiones y no se acuerda más de tus pecados.”
Isaías 43:25.
Se nos dice que Satanás “tiene conocimiento exacto de los pecados que
les ha hecho cometer” (El Conflicto De Los Siglos 618) lo cual es entendible,
porque él los está llevando en este momento. En otras palabras, el último
recordatorio de los pecados del pueblo de Dios reside en la mente de
Satanás, el antitípico macho cabrío. Por ello los santos están determinados
a no dejarlo escapar. Se nos dice que hace una gran lucha para escapar,
“pero es sostenido por la mano que lo guía. Si él realizara su fuga, Israel perdería
sus vidas.” Spalding Magan Collection, p.2.
engaño. Esta es uno de los mayores engaños jamás inventados. Note esta
declaración. “Prevalece la idea de que Cristo lo ha hecho todo en nuestro favor,
que podemos caminar violando los mandamientos y que no se nos culpará por
ello. Este es el mayor engaño que haya inventado el enemigo.” Mensajes
Selectos 3 p. 153.
Consideremos ahora la diferencia entre la justificación por la fe
que ha estado con nosotros desde el comienzo y la justificación por la fe
que es particular al Mensaje del Tercer Ángel. Veamos otra definición de
justificación dada por Ellen White. “¿Qué es la justificación por la fe? Es la
obra de Dios que abate en el polvo la gloria del hombre, y hace por el hombre lo
que éste no puede hacer por sí mismo.” TM 456. En otras palabras, es algo
que Dios realiza, no el Hombre. Es hacer algo para el Hombre que él no
puede hacer por sí mismo. Es algo que no requiere el esfuerzo del
Hombre como lo requiere la obra de santificación y superación del
pecado en la vida. En el perdón y en la justificación diarios, no se requiere
que el Hombre realice un esfuerzo para perdonar sus pecados y vestirse
a sí mismo con las vestimentas de la Justicia de Cristo. Por el contrario,
es la obra de Dios tirar la gloria del Hombre en el polvo y h hacer por él
lo que no está en su poder hacer por sí mismo. El Hombre no puede
perdonarse a sí mismo y no debe ni siquiera intentarlo. Todo lo que
puede hacer es aceptar con gratitud el perdón de Cristo y la túnica de Su
justicia para cubrir sus transgresiones pasadas. Pero el Hombre tiene un
rol en el cumplimiento de las condiciones o prerrequisitos para el perdón
y la justificación. Observe lo siguiente:
“Los que encubren sus pecados no prosperarán, pero si los confiesan y los
abandonan, recibirán misericordia.” Proverbios 28:13.
“Hay condiciones para que recibamos la justificación, la santificación y
la justicia de Cristo.” Mensajes Selectos 1 377.
“El sentimiento no tiene nada que ver con la fe. Las condiciones de la
aceptación son, que salgamos del mundo y seamos separados, que hagamos
62 55
a un lado los pecados secretos, y que cesemos de intencionalmente transgredir
todo requerimiento de Dios.” RH 16 de marzo de 1886.
Aquí vemos los prerrequisitos para ser justificado y aceptado por
el amado. Necesita ocurrir una confesión y una renuncia de los pecados
conocidos. Esa es una obra que requiere el ejercicio de nuestra voluntad
y también esfuerzo de nuestra parte. Pero esto no contribuye de ninguna
manera a la obra de la justificación. Esa es obra únicamente de Dios. No
podemos por cualquier cosa que hagamos, sumarle a ella. En pocas
palabras, podemos decir que la justicia de Cristo es el ‘medio’ por el cual
somos justificados y la confesión y la renuncia del pecado conocido es la
‘condición’.
El mensaje que Jones y Waggoner comenzaron a predicar en 1888
fue corregir el malentendido que muchos tenían con respecto a la justicia
por la fe. Ellen White se lamentaba del hecho de que los Adventistas
habían predicado la ley sin Cristo hasta que estuvieron tan secos como
el Monte Gilboa. Ella escribió, "El mensaje del Evangelio de Su gracia tenía
que ser dado a la iglesia con contornos claros y distintos, para que el mundo no
siguiera afirmando que los adventistas del séptimo día hablan mucho de la ley,
pero no predican a Cristo, ni creen en Él.” EGW 1888 Materiales p.1337.
Una religión normativa había sido considerada como totalmente
correcta y Dios envió un mensaje para cambiar esa situación. Lo que
Waggoner y Jones estuvieron predicando estaba destinado a establecer
a los Adventistas del Séptimo Día como primeros en la verdad de la
justificación diaria como la que Dios había dado a Sus seguidores en
tiempos antiguos, y especialmente en el tiempo de los apóstoles. Hasta
que la iglesia fuese establecida sobre la doctrina básica de la justificación,
no podrían ser capaces de comprender el entendimiento más avanzado
de la justificación que Dios quería darles. Es muy desafortunado que el
inicio del Mensaje del Tercer Ángel fue rechazado en su veracidad, y que
la luz más brillante que le hubiera seguido, si los hermanos hubieran
respondido al mensaje básico de la justificación, nunca llegó.
Esta experiencia se describe en Zacarías 3:1-5. Aquí se nos da una
vista del juicio cuando todos aquellos nombres que ingresaron al libro de
la vida aparezcan delante del tribunal celestial. Satanás se muestra de pie,
en oposición de la intercesión final de Cristo en nombre de Su pueblo.
Pero Cristo da la orden de “quitarles las ropas viles” que han manchado
sus caracteres, y vestirlos con una prenda especial. Aquellos que
experimenten esta experiencia especial son llamados “hombres
admirados” u hombres de admiración. Y no sin motivo.
El Mensaje del Tercer Ángel es designado como el mensaje más
solemne, importante y glorioso jamás prometido a los mortales. “No hay
en nuestro mundo otra obra tan grande, sagrada y gloriosa, ninguna que Dios
honre tanto, como la obra de la predicación evangélica. El mensaje presentado en
este tiempo es el último mensaje de misericordia para un mundo caído. Los que
tienen el privilegio de oír y persisten en negarse a escuchar la amonestación,
desechan su última esperanza de salvación. No habrá un segundo tiempo de
gracia.” 6T 19. El destino de los billones de habitantes de la Tierra estará
determinado por su aceptación o por su rechazo del mensaje del Tercer
Ángel. Esta será su última oportunidad, su último período de prueba. No
habrá más mensajes después de que el Tercer Ángel haya hecho su
trabajo. Aquellos que reciban y obedezcan este último mensaje serán
realmente hombres de admiración. Ellos atravesarán una experiencia
espiritual como la que ninguna persona ha experimentado antes. Son
descritos en Apocalipsis 14 como una compañía especial que tiene el
nombre del Padre, Su sello, escrito sobre sus frentes. Cantan un canto
que nadie más puede aprender a cantar porque es un canto de su
experiencia. Ellos comparecen sin mancha delante del trono de Dios, sin
malicia en sus bocas. Son representados por el hombre justo en el antiguo
servicio del santuario que sujetó al macho cabrío sobre el cual se
depositaron los pecados de Israel al final del día de la expiación, y lo
llevó a morir en el desierto.
56 61
manifestado en los atrios celestiales cuando los nombres inscritos en el libro de la
vida desfilen ante el Juez de toda la tierra. El divino Intercesor aboga por que a
todos los que han vencido por la fe en su sangre se les perdonen sus
transgresiones, a fin de que sean restablecidos en su morada edénica y coronados
con él coherederos del "señorío primero." (Miqueas 4: 8.) Con sus esfuerzos para
engañar y tentar a nuestra raza, Satanás había pensado frustrar el plan que Dios
tenía al crear al hombre, pero Cristo pide ahora que este plan sea llevado a cabo
como si el hombre no hubiese caído jamás. Pide para su pueblo, no solo el
perdón y la justificación, plenos y completos, sino además participación en
su gloria y un asiento en su trono.” El Conflicto De Los Siglos 483-484.
Aquí se presenta la maravillosa verdad de la justificación por la fe
que Ellen White identificó como el Mensaje del Tercer Ángel en veracidad.
Este bendice a los fieles con el perdón y la justificación, plena y completa.
Y más que eso, Cristo pide que Su pueblo sea restaurado en su hogar del
Edén y coronado como herederos conjuntos del señorío primero. Y al
pedir el perdón y la justificación, plena y completa, Cristo también pide
para ellos una participación en Su gloria y un asiento en Su trono. Esta es
la mayor buena nueva del evangelio que podría darse jamás.
Una comparación entre la justificación diaria y la justificación final
revelará muchas similitudes. Lo que acontece en la justificación diaria es
consumado en la justificación final. La justificación diaria conlleva un
perdón condicional del pecado y el vestirse de la justicia imputada de
Cristo. La justificación final conlleva el perdón total y el borrado de todos
los pecados cometidos, y que el creyente se vista con la justicia impartida
de Cristo. En la justificación inicial, el creyente es marcado con el sello de
la lluvia temprana. Vea Efesios 1:13. En la justificación final, el creyente
es marcado con el sello de la lluvia tardía. En la experiencia diaria, el
creyente comienza a recibir los beneficios de la promesa del nuevo pacto.
En la experiencia final, el creyente experimenta la culminación de la
experiencia del nuevo pacto. Vea El Conflicto De Los Siglos 485.
En su libro Cristo Nuestra Justicia, Anciano A.G. Daniells escribió estas
palabras en la página 40.
“¿Quién podría decir, lo que hubiera sucedido en la iglesia y a
favor de la causa de Dios si ente mensaje de la justicia por la fe hubiese
sido aceptado en aquél tiempo por todos y de todo corazón? Y ¿quién
puede calcular la pérdida que se experimentó por el descuido de muchos
en aceptar este mensaje? Únicamente la eternidad podrá descubrir la
verdad completa sobre esta cuestión.”
JUSTIFICACIÓN DEL TERCER ÁNGEL
Se nos dice en Proverbios 4:18 que la ruta del justo es una luz
brillante que brilla más y más hacia el día perfecto. Y ciertamente es así
con la verdad de la justificación por la fe. Como se mencionó
anteriormente, el antiguo servicio del santuario enseñó al pueblo que no
estaban completamente justificados en el ministerio diario realizado para
ellos. La sangre del sacrificio que ofrecían no realizaba una expiación
total de sus pecados ni los liberaba completamente de la condenación de
la ley. De otra manera, no hubieran requerido reunirse en el santuario
para que una expiación especial fuera realizada por sus pecados en el
décimo día del séptimo mes.
Eso nos enseña hoy que, incluso cuando se nos hayan perdonado
nuestros pecados, no estamos completamente libres de nuestra
responsabilidad por ellos. Esto es ilustrado por la parábola de los dos
deudores que Cristo narró. Al hombre que debía a su Señor diez mil
talentos se le perdonó su enorme deuda porque su Señor tuvo compasión
de él. Pero cuando él se encontró con un compañero sirviente que le
debía cien peniques, le ordenó que le pagara. Cuando el hombre le
suplicó por más tiempo para pagar la deuda, no le mostró la misma
compasión que se le había mostrado a él, en cambio lo echó a la cárcel
hasta que pagara la deuda. Pero cuando su Señor escuchó lo que había
hecho, llamó de nuevo al sirviente y lo reprendió por no mostrar la
60 57
misma misericordia a su deudor que a él se le había mostrado. El
resultado fue que perdió su perdón y nuevamente fue responsable de su
deuda. Esto nos muestra que hay una diferencia entre el perdón y el
borrado de los pecados.
Si investigamos las definiciones de la justificación provistas en la
Inspiración, que la define como “lo opuesto de la condenación” y “un
perdón completo y pleno”, podemos ver por qué la justificación durante
el tiempo probatorio no es completa ni plena. El pecador perdonado
todavía lleva la impresión de sus pecados pasados en su mente y su alma.
Y la acumulación de los pecados perdonados una vez más se vuelve
responsabilidad del pecador si este le da la espalda a la justicia y retorna
a sus pecados.
Este es el principio bíblico que encontramos en Ezequiel 33: 12-16
“Hijo de hombre, da este mensaje a tu pueblo: “La conducta recta de los justos
no los salvará si se entregan al pecado, ni la mala conducta de los malvados los
destruirá si se arrepienten y abandonan sus pecados. Cuando les digo a los justos
que vivirán, pero después pecan y piensan que se salvarán por haber sido justos
anteriormente, entonces no se tomará en cuenta ninguno de sus actos de justicia.
Los destruiré por sus pecados. Y supongamos que les digo a unas personas
malvadas que de cierto morirán, pero después abandonan sus pecados y hacen lo
que es justo y recto. Por ejemplo, podrían devolverle la garantía a un deudor,
restituir lo que habían robado y obedecer mis leyes que dan vida dejando de hacer
lo malo; si así lo hacen, entonces de cierto vivirán y no morirán. No se sacará a
relucir ninguno de sus pecados pasados, porque hicieron lo que es justo y recto,
por eso ciertamente vivirán.”
No es hasta que nuestros pecados sean finalmente expiados y
borrados que podremos estar completamente libres de nuestra
responsabilidad por ellos. Este hecho era enseñado en el típico día de la
expiación como lo muestra lo siguiente de PP 356.
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“El día de la expiación, el sumo sacerdote, llevando una ofrenda por la
congregación, entraba en el lugar santísimo con la sangre, y la rociaba sobre el
propiciatorio, encima de las tablas de la ley. En esa forma los requerimientos de
la ley, que exigían la vida del pecador, quedaban satisfechos. Entonces, en su
carácter de mediador, el sacerdote tomaba los pecados sobre sí mismo, y salía del
santuario llevando sobre sí la carga de las culpas de Israel. A la puerta del
tabernáculo ponía las manos sobre la cabeza del macho cabrío símbolo de Azazel,
y confesaba "sobre él todas las iniquidades de los hijos de Israel, y todas sus
rebeliones, y todos sus pecados, poniéndolos así sobre la cabeza del macho cabrío."
Y cuando el macho cabrío que llevaba estos pecados era conducido al
desierto, se consideraba que con él se alejaban para siempre del pueblo.”
Este hecho debe llenarnos de gratitud por la maravillosa
esperanza extendida para nosotros a través de la completa justificación
presentada en el Mensaje del Tercer Ángel. Si cumplimos las condiciones
de este gran día de expiación, Cristo borrará nuestros pecados y nos
liberará de ser responsables por ellos nuevamente... La promesa es “Yo,
sí, yo solo, borraré tus pecados por amor a mí mismo y nunca volveré a pensar
en ellos.” Isaías 43:25. Y también ha prometido que “No temas, ya no vivirás
avergonzada. No tengas temor, no habrá más deshonra para ti. Ya no recordarás
la vergüenza de tu juventud ni las tristezas de tu viudez.” Isaías 54:4.
La justificación que se presenta en el Mensaje del Tercer Ángel se
describe claramente en este pasaje de El Conflicto de los Siglos, páginas
483-484. La escena descrita es la escena del juicio, un tiempo en el que
los pecados del pueblo profeso de Dios serán borrados o, bien, sus
nombres serán quitados del libro de la vida y todas sus buenas obras
serán borradas.
“Todo el más profundo interés manifestado entre los hombres por los
fallos de los tribunales terrenales no representa sino débilmente el interés
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