UNIVERSIDAD FERMÍN TORO
VICERECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICA Y SOCIALES
ESCUELA DE COMUNICACIÓN SOCIAL
AUTOR: ALEJANDRO FERNÁNDEZ
C.I: 20.237.035
ASIGNATURA: PERIODISMO FOTOGRÁFICO
DOCENTE: RAFAEL LUCENA
JUNIO – 2016
Aunque la mayoría de las personas transitan diariamente sin fijarse en los detalles, también hay aquellos que se detienen por un momento a analizar y a buscarle el porque a las cosas. Para todos aquellos que no les basta con lo obvio, que intentan siempre comprender su entorno o ver mas allá, se presenta la siguiente investigación. Todos los días se mantiene una rutina, levantarse, ir al trabajo y volver a la casa, pero siempre hay personas que se cruzan en ese camino, entre ellos los
trabajadores informales. El café de la mañana para afrontar el día, lo puedes encontrar al transitar unas pocas cuadras desde tu mismo vehículo, seguramente no es un trabajador de una empresa registrada, pagando impuestos, pero la necesidad los ha llevado a esto, a otros los ha llevado a realizar cosas mucho peores.
FOTO: Alejandro Fernández
Producto que buscan al alcance de su mano, en esta oportunidad, se observa a un trabajador ‘no tan informal’ ya que los vendedores de periódicos generalmente son pagados por alguno de los medios de comunicación de la región. No obstante, su lugar no es un kiosco o un centro de distribución autorizado, su lugar también es la calle.
Tampoco falta aquel que diga “prensa prensa, para que acompañé el café leyendo” lo que para muchos arranca desde el hogar, los trabajadores informales se mantienen, y se seguirán manteniendo gracias a la facilidad que le generan a ciertos conductores de acercarles aquel
FOTO: Alejandro Fernández
FOTO: Alejandro Fernández
Camino al trabajo, tras estacionar, son muchas las cosas que se encuentran, pocas las que se aprecian. El comercio informal está en todos lados, desde la música, películas, hasta jabón de baño, variedad y diversidad.
FOTO: Alejandro Fernández
En horas del mediodía, antes o después de ir a la casa para almorzar. Ahí también está presente el empleo informal, ya se a para vender algún antojo, o para complementar ese mismo almuerzo. No se trata de respaldar o apoyar a aquellos que comercializan sin cumplir
con la normativa legal, sino de observar el entorno que rodea la vida cotidiana, y apreciar también como parece crecen paulatinamente la cantidad de comerciantes informales sin lugar a duda, debido a la crisis económica que atraviesa el país. La sociedad se encarga de evidenciar de distintas maneras sus carencias, la falta de producción, organización, sigue desencadenando consecuencias que se aprecian de diversos modos, este es uno de los modos de apreciarlos, desde la realidad de aquel que vive el día a día. sin quincenas, no hay norma de edad si vende come.
Finalizando el día, al caer el sol de regreso a los hogares, también se aprecia el comercio informal, los zapateros trabajando, el panadero que vende ese pan para llevar a casa, muy criticados, pero forman parte de la cultura venezolana, y de la vida del barquisimetano.
FOTO: Alejandro Fernández
Top Related