10 1 MUNDO, SAN JUAN/ f. *. -MIRCOLES 13 DE JULIO DE 1938. .-

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AY BENDITO...! Por AKTURO GIGANTE

Arturo Oigan ti

Mirto Rico no ht ildo fielmente enfocado an por periodista, en- ujMH o novelista alguno. El libre da Puerto Ribo no ha ido escrito todava, *y pesar mucho tiempo sin que alguien plasme es la blan- cura de 1*> cuartillas nuestro raro fenmeno psicolgico y social, nues- tro , "iaiasez-faire", nuestras costumbres, y nuestra idiosincrasia.'

El licenciado Manuel Benitez Flores ha dicho que esteces el pais de Juan Luyanda; ."el que mis alto brinque es el que mejor se encarama". Rafael Menndez. Ramos acaba de decir que "es hora ya da' que acabemos con el ay bendito!, y organicemos una deshollins- dn mental en Puerto Rico". LuU Palee Matos, en una de sus frecuentes genialidades, nos retrata *de cuerpo entero, "Puerto Rico, burundanga"...

Y en realidad d verdad, los tres tienen razn, y loe tres estn *n lo cierto.

En Puerto Rico hacemos reglas acomodaticias para todo, y de todo sabemos. Cuando no encon- tramos tina recia que nos ampare para hacer nues- tro capricho, o la inventamos,o la sugerimos... Ya puede Justlnlano haber vaciado todo el saber hu- mano en su codificacin del Derecho Romano, que si el mismo no acomoda nuestra manera de pen- sar y sentir, ya inventaremos-algo para sustituir a Justlnlano. y encontraremos faltas y defectos a su

maravilllo tratado, que ti agotado este recurso, todava no hemos sacado por completo la pata, apelaremos entonces.al Ay bendito!, en nuestro empeo, de Justificar lo injustificable, .y hasta pondremos fra- ses en boca de nuestro opositor, oue este ni ha pensado ni ha vertido.

Tomemos* como ejemplo el reciente incidente' deportivo que acaba de aucederse en San Juan de Puerto Rico, con .motivo del campeonato de base hall 'aficionado auspiciado por la Federacin Deportiva del Norte, en el que cuatro equipos dieron muestras de un espritu anti- deportivo' y comercial horroroso, y al que todava se pretende justifi- car con excusas y componendas, cuando la verdad encueta y sencilla es que desde el pblico espectador hasta los equipos mismos, todo el mundo sabe que la actuacin de stos es algo qu no debe ni ser co- mentado en pblico. Veamos:

Se forma en nuestra ciudad capital una asociacin de jvenes de- portistas, los que, guiados, por la sola Idea de propender al desarrollo de los deportes en Puerto Rico, organizan varios campeonatos,, sin be- neficio personal o lucro alguno, ni para la asociacin, ni para las. per- sonas o equipos que lomen parte en 1as actividades deportivas a des- arrollarse. Esto, en todos los paisas civilizados, a llama una socie- dad "deportiva de aficionados, que estn en el deporte, por el deporte mismo.

Comienza esta sociedad un campeonato de base ball aficionado, y aunque en el mismo entran equipos cuyo slo nombre es anuncio de productos mercantiles, y en las filas de stos militan jugadores pro- fesionales, (convertidos en aficionados, de la noche a la maftana, mer- ced a tina de estas acomodaticias reglas!, todo va como miel sobre hojuelas, hasta^que llega un da de juegos en el que, por circunstan- cias especiales, el nmero de espectadores que asiste a presenciar los miseaes ee mayor que otras veces. r.

El,pblico llena los "stsnds" y las graderas del campo atlrico... El sol luce en todo su esplendor tropical, y todo hace augurar un dia alegra y feliz para los deportes boricuas, cuando, en el momento mis- mo de comenzar los juegos, y listo ya el arbitro para llamar a los equipos al campo, "Lo apoderado* de loa equipo que tnda abajo a mencionan, (ahora habla la Federacin' Deportiva del Norte, por me- dio de su comunicado oficial a la Prensa de julio 6, 1938) aprovechan el jtalo momento de comenzar */ partido en programa para celebrarte el avado t de julio en el parque atltico Sixto Encobar, para tolibitar la alteracin de la condicionen antee especificada y aceptada, ne- gndote a jugar ti no te aceptaban sil* proposiciones".

Estov requiere un momento de calma y meditacin, para medir bien el alcance de estas declaraciones.

(Fjese bien el lector. Cuatro equipos aficionados,' que. de repen- ta, ain aviso alguno a la Federacin, y aprovechndose del momento en que el pblico est reunido ya en los "tanda* del parque de pelota y espera el comienzo de los juegos, se niegan a jugar si no se les au- menta su parte de los Ingresos de taquilla... Y son aficionados! Qu tal si llegan a ser profesionales...!)

La Federacin Deportiva del Norte, ante esta situacin de "de- portismo pura" por parte de estos cuatro equipos, toma el nico ca- mino a seguir, y expulsa a estos equipos del campeonato qdw auspicia, con el beneplcito del pblico, y para bien del deporte... Y, enton- ces, qu sucede...?

Nada... Casi nada... Muv poco... La Comisin de Recreo y Deportes Pblico* de Puerto 'Rico, pre-

cisamente el organismo encargado por nuestro Gobierno, para velar por la pureza de nuestros deportes, usa todas sus influencias, y "em- pastela" el asunto, (perdnesenos la grafictdad de la palabra usada) y llega-hasta el extremo de que ofrece pagar del peculio privado de su complaciente presidente, la diferencia, monetaria exilente entre la asignacin de la Federacin a cada equipo, y la cantidad exigida por stoa como pago de sus exhibiciones deportivas, y Oh Milagro de Mi- lagros!, asi queda arreglado el asunto. (No sienten ustedes olor a pasteles nuevamente?) ' * .

Peto hay ms, en el empefli de justificar lo Injustificable, y no siendo posible ofrecer un premio de deportismo a, los equipos en cues- tin, se cae pblicamente en el ay bendito! en l Prensa diaria, y se pretende quitarle al aficionado su nico orgullo, y su verdadera glo- ria, su sacrificio da. Ir al deporte por el deporte mismo!, y Oh dlos de carato y de melaza!, oh infantllldad de Ja* infantilldades!, se pre- tende justificar la conducta de lo* equipos que tan alta muestra de deportismo dieron el sbado 2 de julio alegando