Aparato circulatorio
Aparato circulatorio
Esquema del sistema cardiovascular que muestra las arterias y venas principales (en
color rojo y azul, respectivamente) para la circulaciónsanguínea.
Latín [TA]: systema cardiovasculare
TA A12.0.00.000
TH H3.09.00.0.00001
Función Pasar nutrientes, gases, hormonas, células
sanguíneas, etc., a las células del cuerpo,
recoger los desechos metabólicos que se
han de eliminar después por los riñones, en
la orina, y por el aire exhalado en los
pulmones, rico en dióxido de carbono.
Defender el cuerpo de infecciones y ayuda
a estabilizar la temperatura y el pH para
poder mantener la homeostasis.
Transporte de sustancias nutritivas
Transporte de desecho celular
Defensas autoinmunes
Estructuras
básicas
Corazón, Arterias, Venas,Capilares, Sangre
Sinónimos
Sistema cardiovascular, sistema
circulatorio
Enlaces externos
FMA 7161
El aparato circulatorio o sistema circulatorio es la estructura anatómica compuesta por el sistema cardiovascular que conduce y hace circular la sangre, y por el sistema linfático que conduce la linfa unidireccionalmente hacia el corazón. En el ser humano, el sistema cardiovascular está formado por el corazón, los vasos sanguíneos (arterias, venas y capilares) y la sangre, y el sistema linfático que está compuesto por los vasos linfáticos, los ganglios, los órganos linfáticos (el bazo y el timo), la médula ósea , los tejidos linfáticos (como la amígdala y las placas de Peyer) y la linfa.
La sangre es un tipo de tejido conjuntivo fluido especializado, con una matriz coloidal líquida, una constitución compleja y de un color rojo característico. Tiene una fase sólida (elementos formes), que incluye a los leucocitos (o glóbulos blancos), los eritrocitos (o glóbulos rojos) , las plaquetas y una fase líquida, representada por el plasma sanguíneo.
La linfa es un líquido transparente que recorre los vasos linfáticos y generalmente carece de pigmentos. Se produce tras el exceso de líquido que sale de los capilares sanguíneos al espacio intersticial o intercelular, y es recogida por los capilares linfáticos, que drenan a vasos linfáticos más gruesos hasta converger en conductos que se vacían en las venas subclavias.
La función principal del aparato circulatorio es la de pasar nutrientes (tales como aminoácidos, electrolitos y linfa), gases, hormonas, células sanguíneas, entre otros, a las células del cuerpo, recoger los desechos metabólicos que se han de eliminar después por los riñones, en la orina, y por el aire exhalado en los pulmones, rico en dióxido de carbono (CO2). Además, defiende el cuerpo
de infecciones y ayuda a estabilizar la temperatura y el pH para poder mantener la homeostasis.
Tipos de sistemas circulatorios:
Existen dos tipos de sistemas circulatorios:
Sistema circulatorio cerrado: En este tipo de sistema circulatorio la sangre viaja
por el interior de una red de vasos sanguíneos, sin salir de ellos. El material
transportado por la sangre llega a los tejidos a través de difusión. Es
característico de anélidos, cefalópodos y de todos los vertebrados incluido el
ser humano.
Sistema circulatorio abierto: En este tipo de sistema circulatorio la sangre no
está siempre contenida en una red de vasos sanguíneos. La sangre bombeada
por el corazón viaja a través de los vasos sanguíneos e irriga directamente las
células, regresando luego por distintos mecanismos. Este tipo de sistema se
presenta en muchos invertebrados, entre ellos los artrópodos, que incluyen a
los crustáceos, las arañas y los insectos; y los moluscos no cefalópodos, como
caracoles y almejas. Estos animales tienen uno o varios corazones, una red de
vasos sanguíneos y un espacio abierto grande en el cuerpo llamado hemocele.
La circulación de la sangre o circulación sanguínea describe el recorrido que hace
la sangre desde que sale hasta que vuelve al corazón. La circulación puede ser
simple o doble:
Circulación sanguínea simple, la sangre pasa una vez por el corazón en cada
vuelta.
Circulación sanguínea doble, la sangre pasa dos veces por el corazón en cada
vuelta.
La circulación sanguínea también se clasifica en:
Circulación sanguínea completa, no hay mezcla de sangre oxigenada y
desoxigenada.
Circulación sanguínea incompleta, hay mezcla de sangre oxigenada y
desoxigenada.
El corazón de los seres humanos y de la mayoría de los vertebrados más
evolucionados se divide en cuatro cámaras, es tetra cameral. En otros animales
solo tiene dos o tres cámaras, o incluso una sola en forma tubular. Además hay
animales que tienen más de un corazón.
Circulación sanguínea en el ser humano y los vertebrados
En los vertebrados más evolucionados de características homeotermas, como
las aves y los mamíferos incluido el ser humano, el corazón tiene cuatro cámaras
(es tetra cameral) y la circulación es doble y completa.
En la circulación sanguínea doble la sangre recorre dos circuitos , tomando como
punto de partida el corazón.2
Circulación mayor o circulación sistémica o general. El recorrido de la sangre
comienza en el ventrículo izquierdo del corazón, cargada de oxígeno, y se
extiende por la arteria aorta y sus ramas arteriales hasta el sistema capilar,
donde se forman las venas que contienen sangre pobre en oxígeno.
Desembocan en una de las dos venas cavas (superior e inferior) que drenan
en la aurícula derecha del corazón.3
Circulación menor o circulación pulmonar o central. La sangre pobre en
oxígeno parte desde el ventrículo derecho del corazón por la arteria
pulmonar que se bifurca en sendos troncos para cada uno de
ambos pulmones. En los capilares alveolares pulmonares la sangre se oxigena
a través de un proceso conocido como hematosis y se reconduce por las
cuatro venas pulmonares que drenan la sangre rica en oxígeno, en la aurícula
izquierda del corazón.
En realidad no son dos circuitos sino uno, ya que la sangre aunque parte del
corazón y regresa a éste lo hace a cavidades distintas. El circuito verdadero se
cierra cuando la sangre pasa de la aurícula izquierda al ventrículo izquierdo. Esto
explica que se describiese antes la circulación pulmonar por el médico Miguel
Servet que la circulación general por William Harvey.
El circuito completo es:
1. ventrículo izquierdo
2. arteria aorta
3. arterias y capilares sistémicos
4. venas cavas
5. aurícula derecha
6. ventrículo derecho
7. arteria pulmonar
8. arterias y capilares pulmonares
9. venas pulmonares
10. aurícula izquierda y finalmente
11. ventrículo izquierdo , donde se inició el circuito.
Se descubrió que la circulación todavía no se podía observar en los capilares, por
lo que se pensaba que la sangre se consumía en los tejidos.
Es importante notar que la sangre venosa aunque es pobre en oxígeno y rica en
dióxido de carbono, contiene todavía un 75 % del oxígeno que hay en la sangre
arterial y solamente un 8 % más de carbónico.
Cuidados:
En términos generales, el aparato circulatorio y, más específicamente,
el corazón deben ser cuidados con mucho esmero para mantenerlos sanos el
mayor tiempo posible. Dentro de las medidas preventivas que pueden seguirse
para proteger el aparato circulatorio se cuentan las siguiente:
Ejercicio físico: La realización de ejercicio físico moderado con regularidad es
un factor de suma importancia que favorece la circulación de la sangre, por lo
que previene las enfermedades de las arterias y el corazón.
Alimentación sana y variada: Una alimentación sana, con buenas cantidades
de frutas, verduras, cereales; con pocas grasas, pocas frituras, e ingerida con
moderación, favorece el buen funcionamiento del aparato circulatorio, evitando
enfermedades del mismo.
Acudir periódicamente al médico: Visitar periódicamente al cardiólogo es una
medida que ayuda a alejar las enfermedades del corazón y del aparato
circulatorio. Más aún, el cuidado médico se hace indispensable cuando existe
algún problema en el aparato circulatorio.
Sistema cardiovascular
Circuito sistémico:
*Arterias sistémicas (en rojo)
*Venas sistémicas (en azul)
Circuito pulmonar:
*Arterias pulmonares (en rojo)
*Venas pulmonares (en azul).
Los componentes más importantes del sistema cardiovascular humano son
el corazón, la sangre, y los vasos sanguíneos. En él están incluidos: la circulación
pulmonar, un recorrido a través de los pulmones, donde se oxigena la sangre; y la
circulación sistémica, el recorrido por el cuerpo para proporcionar sangre
oxigenada. Un adulto promedio contiene cincuenta y cinco cuartos de galón
(aproximadamente 4.7 a 5.7 litros) de sangre, lo que representa aproximadamente
el 7 % de su peso corporal total. La sangre se compone de plasma, glóbulos
rojos, glóbulos blancos y plaquetas. También el sistema digestivo funciona con el
circulatorio para proporcionar los nutrientes que el sistema necesita para mantener
el bombeo del corazón.
La circulación pulmonar
El sistema circulatorio pulmonar es la parte del sistema cardiovascular en el que la
sangre pobre en oxígeno se bombea desde el corazón, a través de la arteria
pulmonar, a los pulmones y vuelve, oxigenada, al corazón a través de la vena
pulmonar.
La sangre privada de oxígeno procedente de la vena cava superior e inferior, entra
en la aurícula derecha del corazón y fluye a través de la válvula tricúspide (válvula
atrio ventricular derecha) y entra en el ventrículo derecho, desde el cual se
bombea a través de la válvula semilunar pulmonar en la arteria pulmonar hacia los
pulmones. El intercambio de gases se produce en los pulmones, mediante el cual
se libera CO2 de la sangre, y se absorbe el oxígeno. La vena pulmonar devuelve la
sangre ya oxigenada a la aurícula izquierda.
La circulación sistémica
La circulación sistémica es la circulación de la sangre a todas las partes del
cuerpo, excepto los pulmones. Es la parte del sistema cardiovascular que
transporta la sangre oxigenada desde el corazón a través de la aorta desde el
ventrículo izquierdo donde la sangre se ha depositado previamente a partir de la
circulación pulmonar, al resto del cuerpo, y devuelve la sangre pobre en oxígeno al
corazón. La circulación sistémica es, en términos de distancia, mucho más larga
que la circulación pulmonar, ya que recorre cada parte del cuerpo.
Aparato respiratorio
Aparato respiratorio
Diagrama del sistema respiratorio.
Latín [TA]: systema respiratorium
TA A06.0.00.000
TH H3.05.00.0.00001
Función Cambio de gases entre el cuerpo y la
atmósfera.
Estructuras
básicas
Tráquea, pulmones.
Enlaces externos
El aparato respiratorio o sistema respiratorio es el
encargado de captar el oxígeno (O2) del aire e
introducirlo en la sangre, y expulsar del cuerpo
el dióxido de carbono (CO2) ―que es un desecho
de la sangre y subproducto
del anabolismocelular―.1
En humanos y otros mamíferos, el sistema
respiratorio consiste en vías respiratorias,
pulmones y músculos respiratorios que median en
el movimiento del aire tanto dentro como fuera del cuerpo humano.
El aparato respiratorio incluye fosas nasales (usadas para hacer ingresar el aire al
cuerpo), tubos (como la tráquea y los bronquios), los dos pulmones (donde ocurre
el intercambio gaseoso).
El intercambio de gases es el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono, del ser
vivo con el medio. Dentro del sistema alveolar de los pulmones, las moléculas de
oxígeno y dióxido de carbono se intercambian pasivamente, por difusión, entre el
entorno gaseoso y la sangre. Así, el sistema respiratorio facilita la oxigenación con
la remoción contaminante del dióxido de carbono y otros gases que son desechos
del metabolismo y de la circulación.
El sistema respiratorio también ayuda a mantener el balance
entre ácidos y bases en el cuerpo a través de la eficiente eliminación de dióxido de
carbono de la sangre.
El diafragma, como todo músculo, puede contraerse y relajarse. En la inhalación,
el diafragma se contrae y se allana, y la cavidad torácica se amplía. Esta
contracción crea un vacío que succiona el aire hacia los pulmones (inhalación). En
la exhalación, el diafragma se relaja y el aire es expulsado de los pulmones.
En organismos simples.
Los protozoarios (organismos unicelulares), asi como las hidras y las medusas (organismos pluricelulares que están compuestas por dos capas de células), respiran a través de su membrana celular (por medio de difusión) y sus mitocondria (véase respiración celular).
En organismos complejos.
Los insectos, en cambio, bombean aire directamente a los tejidos corporales por
medio de una red de tubos, llamados tráqueas, que se abren a los costados del
cuerpo. La zona final del sistema traqueal está formada por finísimos conductos
denominados «traqueolas».
Los peces introducen agua a través de su boca bañando las branquias donde
captan oxígeno y liberan el dióxido de carbono; luego expulsan el agua a través
del opérculo(una abertura que tienen a cada lado del cuerpo).
Los anfibios mudan su sistema respiratorio durante su paso desde su vida
acuática (cuando son jóvenes) a la terrestre (cuando son adultos). Así, los
renacuajos respiran por medio de branquias, igual que los peces; pero una vez
realizada la metamorfosis (por ejemplo como ranas o sapos) respiran por medio
de pulmones y en algunos casos, por la respiración cutánea.
En las aves, los órganos que intervienen en la respiración son llamados sacos
aéreos, que están comunicados con los pulmones. Estos "sacos" sirven para
almacenar el aire, pero no extraen el oxígeno, mientras que los pulmones si lo
hacen. Existen sacos aéreos anteriores situados en la cavidad torácica y los sacos
posteriores situados en el abdomen.
En el ser humano.
En los seres humanos, el sistema respiratorio consiste en las vías aéreas,
pulmones y músculos respiratorios, que provocan el movimiento del aire tanto
hacia adentro como hacia afuera del cuerpo. El intercambio de gases es el
intercambio de oxígeno y dióxido de carbono, del cuerpo con su medio. Dentro del
sistema alveolar de los pulmones, las moléculas de oxígeno y dióxido de carbono
se intercambian pasivamente, por difusión, entre el entorno gaseoso y la sangre.
Así, el sistema respiratorio facilita la oxigenación con la remoción contaminante del
dióxido de carbono (y otros gases que son desechos del metabolismo) de la
circulación.
El sistema también ayuda a mantener el balance entre ácidos y bases en el
cuerpo a través de la eficiente remoción de dióxido de carbono de la sangre.
El hombre utiliza respiración pulmonar, su aparato respiratorio consta de:
Sistema de conducción: fosas
nasales, boca, epiglotis, faringe, laringe, tráquea, bronquios principales,
bronquios lobulares, bronquios segmentarios y bronquiolos.
Sistema de intercambio: los conductos y los sacos alveolares. El espacio
muerto anatómico, o zona no respiratoria (donde no hay intercambios
gaseosos) del árbol bronquial incluye las 16 primeras generaciones
bronquiales, siendo su volumen de unos 150 ml.
La función del aparato respiratorio consiste en desplazar volúmenes de aire desde
la atmósfera a los pulmones y viceversa. Lo anterior es posible gracias a un
proceso conocido como ventilación.
La ventilación es un proceso cíclico y consta de dos etapas: la inspiración, que es
la entrada de aire a los pulmones, y la espiración, que es la salida. La inspiración
es un fenómeno activo, caracterizado por el aumento del volumen torácico que
provoca una presión intrapulmonar negativa y determina el desplazamiento de aire
desde el exterior hacia los pulmones. La contracción de los músculos inspiratorios
principales, diafragma e intercostales externos, es la responsable de este proceso.
Una vez que la presión intrapulmonar iguala a la atmosférica, la inspiración se
detiene y entonces, gracias a la fuerza elástica de la caja torácica, esta se retrae,
generando una presión positiva que supera a la atmosférica y determinando la
salida de aire desde los pulmones.
En condiciones normales la respiración es un proceso pasivo. Los músculos
respiratorios activos son capaces de disminuir aún más el volumen intratorácico y
aumentar la cantidad de aire que se desplaza al exterior, lo que ocurre en la
espiración forzada.
Mientras este ciclo ventilario ocurre, en los sacos alveolares, los gases contenidos
en el aire que participan en el intercambio gaseoso, oxígeno y dióxido de carbono,
difunden a favor de su gradiente de concentración, de lo que resulta la
oxigenación y detoxificación de la sangre.
El volumen de aire que entra y sale del pulmón por minuto, tiene cierta sincronía
con el sistema cardiovascular y el ritmo circadiano (como disminución de la
frecuencia de inhalación/exhalación durante la noche y en estado de vigilia/sueño).
Variando entre 6 a 80 litros (dependiendo de la demanda).
Se debe tener cuidado con los peligros que implica la ventilación pulmonar ya que
junto con el aire también entran partículas sólidas que puede obstruir y/o intoxicar
al organismo. Las de mayor tamaño son atrapadas por los vellos y el material
mucoso de la nariz y del tracto respiratorio, que luego son extraídas por el
movimiento ciliar hasta que son tragadas, escupidas o estornudadas. A nivel
bronquial, por carecer de cilios, se emplean macrófagos y fagocitos para la
limpieza de partículas.
Definición de los órganos.
Vía nasal: Consiste en dos amplias cavidades cuya función es permitir la
entrada del aire, el cual se humedece, filtra y calienta a una determinada
temperatura a través de unas estructuras llamadas cornetes.
Faringe: Conducto muscular membranoso, que ayuda a que el aire se vierta
hacia las vías aéreas inferiores. Se divide en: Nasofaringe, Orofaringe y
Laringofaringe.
Epiglotis: Cartílago perteneciente a la faringe, impide el paso de alimentos a la
laringe durante la deglución. Funciona como una "tapa" al impedir que los
alimentos entren en la laringe y en la tráquea al tragar, durante la deglución.
También marca el límite entre la orofaringe y la laringofaringe.
Laringe: Conducto cuya función principal es la filtración del aire inspirado.
Además, permite el paso de aire hacia la tráquea y los pulmones, y también
tiene la función de órgano fonador al pasar el aire por las cuerdas vocales,
produciendo el sonido.
Tráquea: Brinda una vía abierta al aire inhalado y exhalado desde los
pulmones.
Bronquio: Conducto tubular fibrocartilaginoso que conduce el aire desde la
tráquea hasta los bronquiolos.
Bronquiolo: Conducto que conduce el aire desde los bronquios hasta los
alvéolos.
Alvéolo: Divertículo terminal del árbol bronquial donde se produce la hematosis
(Permite el intercambio gaseoso entre el aire inspirado y la sangre, de manera
que en su interior la sangre elimina el dióxido de carbono y recoge oxígeno).
Pulmones: Órganos cuya función es realizar el intercambio gaseoso con la
sangre, por ello los alvéolos están en estrecho contacto con los capilares.
Músculos intercostales: Músculos torácicos cuya función principal es la de
movilizar un volumen de aire que sirva para, tras un intercambio gaseoso
apropiado, aportar oxígeno a los diferentes tejidos.
Diafragma: Músculo que separa la cavidad torácica (pulmones, mediastino,
etc.) de la cavidad abdominal (intestinos, estómago, hígado, etc.). Interviene
en la respiración, descendiendo la presión dentro de la cavidad torácica y
aumentando el volumen durante la inhalación y aumentando la presión y
disminuyendo el volumen durante la exhalación. Este proceso se lleva a cabo,
principalmente, mediante la contracción y relajación del diafragma.
Las vías nasales se conforman de:
Células sensitivas.
Nervio olfativo.
Pituitaria.
Cornetes.
Fosas nasales.
distintas enfermedades profesionales del sistema respiratorio adquiridas en el trabajo, sus causas y efectos, tratamiento y prevención de estas como también el rol que debe cumplir el prevencioncita para un correcto y eficiente desempeño en el control de estas. Silicosis. Es una enfermedad del pulmón, producida por la permanente aspiración de polvo de sílice libre cristalizada. Se diagnostica a través de exámenes. No hay dolor radiológico.
Existen 3 tipos de silicosis: Silicosis crónica. Silicosis acelerada. Silicosis aguda.
Transmisión: La silicosis se transmite por la inspiración de materiales.
Neumoconiosis. Síntomas: Dificultad para respirar Tos fuerte Debilidad Dolores en el pecho Los síntomas pueden empeorar y causar la muerte. Tratamiento: No existe un tratamiento específico para la silicosis. El tratamiento complementario comprende antitusígenos, broncodilatadores y oxígeno, si es necesario. El tratamiento también comprende limitar la exposición a sustancias irritantes, dejar de fumar y hacerse pruebas cutáneas de rutina para tuberculosis. Prevención: Si usted se desempeña o tiene un trabajo o pasatiempo de alto riesgo, use máscaras anti polvo y no fume. Dificultad respiratoria progresiva. Tos crónica ( seca o productiva) en función de la neumoconiosis de que se trate. Fatiga transmisión: La trasmisión de esta enfermedad es por la inspiración de polvo de carbón por
periodos prolongados. tratamiento: No hay ningún tratamiento específico y eficaz para las neumoconiosis. Se recomienda evitar la exposición posterior al polvo. Una vez establecido el daño, este es irreversible. Pueden administrarse inhaladores para intentar mejorar la función respiratoria. Prevención: Limitar la exposición a polvos de mineral en el lugar de trabajo. Prevenir la exposición a amiantos en el hogar. Evite fumar cigarrillos. Tuberculosis. Es una infección bacteriana contagiosa que compromete principalmente a los pulmones, pero puede propagarse a otros órganos. Síntomas: tos crónica. Con esputo sanguinolento. Fiebre. Sudores nocturnos. Pérdida de peso. Tratamiento: La transmisión de la tuberculosis sólo puede realizarse por personas que tengan activa la enfermedad. Transmisión: El tratamiento de la tuberculosis es complicado y requiere largos periodos de exposición con varios antibióticos. Prevención: Se previene mediante una vida sana e higiénica, identificando oportunamente a los enfermos. Principalmente por medio de la vacunación con vacuna BCG. Bisinosis. Es una enfermedad pulmonar ocupacional causada por la inhalación de polvos de fibras textiles en trabajadores de algodón y, en menor grado lino, cáñamo y yute. Ocurre en trabajadores de la industria textil especialmente que trabajan en ambientes cerrados y poco ventilados. Síntomas: Opresión en el pecho Tos Sibilancias Tratamiento: La reducción de los niveles de polvo dentro de la fábrica, por medio del mejoramiento de la maquinaria o la ventilación. Medicamentos como los broncodilatadores, generalmente mejorarán los síntomas. En los casos más graves, se pueden prescribir corticosteroides. Puede ser necesaria la oxigenoterapia en el hogar si los niveles de oxígeno en la sangre están bajos.
Prevención: El control del polvo, el uso de máscaras faciales y otras medidas pueden reducir el riesgo. Bronquitis. Es una inflamación del recubrimiento de los bronquios. Entra menos aire a los pulmones y también sale menos. Síntomas: Dificultad para respirar Tos continua que produce esputo Sibilancias Pueden ser útiles los antibióticos y los fármacos broncodilatadores. Tratamiento: Prevención: Es esencial el control del polvo en la instalaciones industriales. A aquellas personas que corren riesgo de contraer la enfermedad, se les aconseja someterse a una prueba de detección temprana con un médico. Laringitis. Es la inflamación e irritación de la laringe, espacio que comunica la boca con la traqueal donde están situadas las cuerdas vocales, por ello se asocia generalmente a ronquera o afonía. Síntomas: Fiebre Ronquera Ganglios linfáticos o glándulas inflamadas en el cuello Tratamiento: Dejar descansar la voz Un humidificador Descongestionantes y analgésicos Prevención: Evitar a las personas con infecciones de las vías respiratorias. Lávese las manos con frecuencia. No fatigue su voz. Dejar de fumar. Cáncer pulmonar. Resultando del crecimiento maligno de células del tracto respiratorio, en particular del tejido pulmonar. Síntomas: Dolor torácico Tos que no desaparece Tos con sangre Fatiga Pérdida de peso involuntaria Inapetencia Dificultad para respirar Sibilancias Tratamiento:
Cirugía Quimioterapia Radioterapia Transmisión: Exposición a químicos cancerígenos Exposición al gas radón Altos niveles de contaminación en el aire Altos niveles de arsénico en el agua potable Prevención: Si usted fuma, deje de fumar Si está expuesto a polvos y emanaciones en el trabajo, indague al respecto Neumonitis por hipersensibilidad. Es una inflamación interna y externa de los pequeños sacos de aire del pulmón (alvéolos). Generalmente ocurre en aquellas personas que trabajan en lugares donde hay altos niveles de polvos orgánicos, hongos o mohos. Causas: Síntomas: Escalofríos Tos Fiebre Malestar (sentirse enfermo) Dificultad para respirar