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COLOR DEL DINERO 7 ee el Ti: la promesa de Obama mas incómoda para México Por ANTIMIO CRUZ Desde suTpocä cOmo precandidato presidencial del Partido Demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Barack Obami prometió"usarmartii!o"paramodificarel Tratado de Libré Comercio con México y Canadá, a partir de entonces, el tema se'"^ convirtió en una "papa caliente".

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7 COLOR DEL DINERO Desde suTpocä cOmo precandidato presidencial del Partido Demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Barack Obami prometió"usarmartii!o"paramodificarel Tratado de Libré Comercio con México y Canadá, a partir de entonces, el tema se'"^ convirtió en una "papa caliente". Por ANTIMIO CRUZ

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COLOR DEL DINERO7

eeel Ti:la promesa de Obamamas incómoda para México

Por ANTIMIO CRUZ

Desde suTpocä cOmo precandidato presidencial del PartidoDemócrata a la presidencia de Estados Unidos, Barack Obami

prometió"usarmartii!o"paramodificarel Tratado de LibréComercio con México y Canadá, a partir de entonces, el tema se'"^

convirtió en una "papa caliente".

a mañana del 20 de febrerode este año, los lectores del

^diario The Dallas Mornings encontraron entre sus

un artículo inquietante fir-mado por el entonces aspirante a lacandidatura demócrata por la pre-sidencia de Estados Unidos, BarackObama. El encabezado era una pro-mesa: «Repararé nuestra relación c onMéxico», y planteaba como compni-miso con sus electores la renegocia-ción de! Tratado de Libre Comerciode América del Norte (TLCAN),alianza que entró en vigor en 1994y regula la compra y venia, de pro-due tos por un valor aproximado de600,000 millones de dólares.

—leñemos que entender que elTLCiAN ha funcionado en unaspartes y ha causado estragos en otras—indicaba Obama en esa etapatemprana de la lucha electoral yagregó: Buscaré normas laboralesy ambientales más fuertes, en lugarde los acuerdos paralelos que hicie-ron muy poco para corregir las fallasdel l'LCAN.

Una semana después, ei 26 defebrero, reforzó públicamente laposición expresada en el diario texa-no ton la frase: «Al día siguientede tomar posesión buscaré al presi-dente de México para renegociar elTLCAN».

Obama sostieme que las modifi-caciones al acuerdo comereial conCanadá y México eran una de laspeticiones comunes en 18,000 con-stiltas con grupos de electores en

toda la Unión Americana y C|ue poreso serían parte de su plataforma.Pero el discurso contra ei tratadose hizo complejo mientras se acercóla elección y generó molestia en losgobiernos mexicano y canadiense.

LOS AGREDIDOSEl gobierno mexicano manifestó sudisgusto por las declaraciones deObama respecto a la renegociacióndel TLCAN, pues consideraba queeran "superficiales" y "proteccio-nistas" a los intereses de los esta-dounidenses. El 2 de septiembreFelipe Calderón dijo en una entre-vista radiofónica: —Me preocupaen Estados Unidos la vuelta al pro-teccionismo, que se hable con unagran supeiiici alidad de cancelar omodificar el TLC».

Calderón subrayó que los sociosdel TLCAN no pueden ignorar laimportancia de México, de su eco-nomía y su pueblo, y afirmó queEstados Unidos no puede tener éxito«si ignora la imixirtancia vital deMéxico».

Para el académicojosé Luis Calva,del Instituto de InvestigacionesEconómicas de la UNAM, existenvarias razones por las que Méxicono quiere renegociar el TLC: Paraquienes se beneflcian pagando bajossalarios y prestaciones, esta renego-ciación no es deseable. En cambio,para el México de los asalariadosrestiltará muy conveniente "ama-rrar" en el TLCAN el cumplimientode nuestras leyes laborales, por ejem-

(V)nt€nido/NOVIEMBRE 200S

pío la del salarío minimo(suficiente para las nece-

sidades de una fami-lia) y las relativas ala segurídad social.

Además reabrir el temaimplicaría hacer fren-

te a movimientos socia-les inconformes con el TLC

—advierte.Obama ha respondido a las acu-

saciones de proteccionismo explican-do que «No hay nada proteccionistaen exigir comercio que promueva losbeneficios de la globalización, en vezde dirigirlos a intereses especiales ydarle poco a trabajadores en EstadosUnidos y en el extranjero.»

Por su parte Canadá tampocoha visto con buenos ujos las decla-raciones que ha hecho el candidato.Durante encuentros entre miembrosdel equipo de campaña de Obama ydiplomáticos canadienses, estos últi-mos han subrayado la importanciadel acuerdo para ia economia de laregión.

En un fallido intento por dete-ner la furia canadiense, asesores delaspirante a la presidencia estado-unidense les aseguraron cjuc todose trataba de una promesa de cam-paña que no prosperaría, lo cualquedó consignado en una seríe dememorandos. El problema es que ladeclaración salió a la luz pública yla campaña de Barack Obama vivióuno de sus momentos más diñcilcsy puso en duda la credibilidad delPartido Demócrata.

Todo comenzó en Chicago:El 9 de febrero se reunieron en

la tercera ciudad más grande deEstados Unidos el príncipa! ase-sor económico de Barack Obama,Austan Goolsbee, y el cónsul generalde Chanada para Estados Unidos,Georges Riux.

Según el documento queredactó el asistente del consuladoJoseph DeMora y envió al emba-jador canadiense Michael Wilson,Goolsbee reconoció sinceramenteel sentimiento proteccionista queha emergido, particularmente enel medio oeste de Estados Unidos,pero aseguró que la posición delcandidato de su partido «Debe servista más como una posición poli-tica que como la clara articulaciónde planes».

Tres semanas después la agenciade noticias canadiense CTT' Jv'ewsdio a conocer otra información queavanzaba en sentido similar: «Unmiembro principal del equipo decampaña de Oljama habló telefóni-camente con el embajador Wilsonpara a.segurarle que no debe pre-ocuparse por lo que Obama diga delTLCAN».

l^ primera reacción del equipodel candidato demócrata fue negarla noticia publicada por ia agen-cia canadiense, pero menos de unasemana después, la agencia estado-unidense AP divulgó un texto y unafotocopia del memorando que resu-mía la reunión de Chicago, entrecanadienses y demócratas.

Lo que ocurríó después ha sidointcqirctado por los periodistas esta-dounidenses como política fina. Losmedios volvieron a preguntar al equi-

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I NOVIEMBRE 2oo8 / Contenidu ]

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po de campaña sobre la doble posi-ción que estaban manejando frentea! tema dei TLCAN. El equipo decampaña dijo que seguramente poruna lamentable equivocación tos ca-nadicn.ses hablan «malinterpretadolas palabras del asesor Goolsbee».

El consulado canadiense enChicago terminó de limar aspere-zas con un comunicado en el queaseguraba que nunca quiso decirque el equipo de Barack Obamadijera cosas diferentes en público yen privado.

La conclusión de los diarios másinfluyentes de Estado.s Unidos fueque Obama le debia un gran favora Canadá.

CON OBAMA O SIN OBAMAMás allá del nombre del próximopresidente de Estados Unidos, encl Congreso se percibe una cre-ciente oposición hacia los Tratadosde IJbre Comercio, no sólo el quetienen con México y Canadá. Porlo que a decir del investigador JoséLuis Calva México debe reflexionarseriamente en los temas de posi-ble renegociación, al menos en elmediano plazo.

Existen varios focos rojos indi-cativos de que la renegociación delTLC está por venir. El Congresoestadounidense ya se ha manifestadoa favor de reformular los tratadoscomerciales vigentes. Los demócra-tas Sherrod Brown y Mike Michaudhan propuesto una ley de reformacomercial que incluye una nueva

serie de requisitos laborales, ambien-tales, de salud y seguridad alimenta-ria, entre otros reglamentos.

El proyecto demócrata estableceque para junio de 2010 la Oficinade Supervisión del Gobierno (GAO)revisará todos los tratados de librecomercio que se han implementadoen Estados Unidos bajo estas regula-ciones. Por su parte los legisladoreshan dicho que el auge de Obamarefleja el deseo de los votantes por uncambio en las negociaciones comer-ciales, y cuentan con mantener unamayoria demócrata en el Congresopara concretar esta ley.

El aspirante demócrata, al igualque muchos otros partidarios, argu-menta que el TLC entre su país,México y Canadá (NAFTA, por sussiglas en inglés), ha resultado en lapérdida de miles de trabajos estado-unidenses y ha advertido que retira-ría a los Estados Unidos del acuerdosi México y Canadá no acceden auna renegociación.

Ya en 2005 votó en contradel TLC con Centroamérica yRepública Dominicana (CAFTA) enel Senado y, en un discurso recienteen Miami, Obama explicó que elcomercio debe ser parte de la solti-ción, pero rechazó el punto de vistade Bush y McCain en el sentido deque cualquier tratado es un buenacuerdo.

En opinión de José Luis Calvagane Obama o McCain, le guste ono a Felipe Calderón, México debepreparar los puntos a negociar del

(«nípnidri/NOVIEMBRE ?oo8

El presidenteGeorge W.Bushdefiende el TLCal que considera,como todo tratado,un buen acuerdo.

TLC: —La renegociación podríaconvertirse, además, en un caminode transición paulatina hacia elestilo europeo de integración eco-nómica, con libre flujo de mano

de obra y fondos estructurales y decohesión social que promuevan laconvergencia socioeconómica enAmérica del Norte —concluye elinvestigador.C

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LO BUENO Y LO MALO DEL TLCAN

A 14anos de operación, elTratado de Ubre Comercio para América del Norte (TLCAN) ha duplica-

do las exportaciones e incrementado la importación extranjera directa a México, pero también

ha ocasionado pérdidas en el sector manufacturero (se estima un déficit de 3,000 millones de

dólares por año) y en el campo (se han perdido 2 millones de empleos).

En estos 14 años el sector agrícola mexicano es el que más ha resentido el TICAN pues Estados

Unidos no ha cumplido con algunos acuerdos y en cultivos como los de caña de azúcar, los esta-

dounidenses ofrecen precios más bajos que los mexicanos porque sus productores reciben subsi-

dios por 50.000 millones de dólares, 10 veces mas que los subsidios entregados en México,

Otros sectores donde la apertura no ha sido favorable para los mexicanos es en el autotranspor-

te (se ha impedido a los traileros nacionales transitar por las carreteras al norte del Rio Bravo),

y en las manufacturas de baja tecnologia como la industria del juguete.

Desde 1994 México duplicó sus exportaciones hacia Canadá y Estados Unidos. En 7993 la venta

de bienes mexicanos hacia ambos países sumaba 40,000 millones de dólares, mientras que al

cierre de 2007 las ventas hacia ese pais sumaron 100,000 millones de dólares.

Gracias a la creación de esta zona de libre comercio entre Canadá, Estados Unidos y México,

donde habitan 341 millones de personas, el total del intercambio de bienes entre los 3 paises

sumó, el año pasado, 600,000 millones de dólares. Gracias al TLCAN México ha recibido 295,000

millones de dólares de inversión extranjera directa, el triple de la deuda externa que dejó el

gobierno de José López Portillo.

Entre los sectores que han tomado un gran impulso se cuentan la industria automotriz, el

turismo, el sector maquilador, el minero, las tecnologías de ia información y los materiales para

la construcción.

En la balania comercial el saldo es positivo para México: en 1993 teníamos un déficit de 3,000

millones de dólares en el intercambio con Estados Unidos, mientras que al cierre del año pasadohubo un superávit de 67,000 millones de dólares.

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