Verdad Libertad · 2016. 5. 12. · ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu...

5
Asociación Persona y Familia Pág. 1 Verdad y Libertad ¿Por qué es hermoso ser joven? BENEDICTO XVI Reproducimos algunos párrafos del discurso que dirigió Benedicto XVI a miles de jóvenes en la plaza Matteotti de Génova el 18 de mayo durante su visita pastoral. *** … Me pregunto -he reflexionado-: ¿por qué es hermoso ser joven? ¿Por qué el sueño de la juventud perenne? Me parece que son dos los elementos determinantes. La ju- ventud tiene todavía el futuro por delante; todo es futuro, tiempo de esperanza. El futuro está lleno de promesas. Para ser sinceros, debemos decir que para muchos el futu- ro también se presenta oscuro, sembrado de amenazas. Hay incertidumbre: ¿encontraré un puesto de trabajo?, ¿encontraré una vivienda?, ¿encontraré el amor?, ¿cuál será mi verdadero futuro? Y ante estas amenazas, el futuro también puede presen- tarse como un gran vacío. Por eso, hoy muchos quieren detener el tiempo, por miedo a un futuro en el vacío. Quie- ren aprovechar al máximo inmediatamente todas las belle- zas de la vida. Y así el aceite en la lámpara se consuma cuando la vida debería comenzar. Por eso es importante elegir las verdaderas promesas, que abren al futuro, inclu- so con renuncias. Quien ha elegido a Dios, incluso en la vejez tiene ante sí un futuro sin fin y sin amenazas. Por tanto, es importante escoger bien, no arruinar el futuro. Y la primera opción fundamental debe ser Dios, Dios reve- lado en su Hijo Jesucristo. A la luz de esta opción, que nos ofrece al mismo tiempo una compañía para el camino, una compañía fiable, que no nos abandona nunca, se encuen- tran los criterios para las demás opciones necesarias. Ser joven implica ser bueno y generoso. Y la bondad en perso- na es Jesucristo, el Jesús que conocéis o que busca vues- tro corazón. Él es el Amigo que no traiciona nunca, fiel hasta la entrega de su vida en la cruz. Rendíos a su amor. Como lleváis escrito en vuestras camisetas preparadas para este encuentro: "Liberaos" gracias a Jesús, porque sólo él puede libraros de vuestras preocupaciones y de vuestros temores, y colmar vuestras expectativas. Él dio su vida por nosotros, por cada uno de nosotros. ¿Podría de- fraudar vuestra confianza? ¿Podría llevaros por senderos equivocados? Sus caminos son caminos de vida, llevan a los pastos del alma, aunque sean escarpados y difíciles. Queridos amigos, os invito a cultivar la vida espiritual. Je- sús dijo: "Yo soy la vid, vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él, ese da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada" (Jn 15, 5). Jesús no hace juegos de palabras; es claro y directo. Todos le entienden y toman posición. La vida del alma es encuentro con él, Rostro concreto de Dios. Es oración silenciosa y perseverante, es vida sacramental, es Evangelio meditado, es acompañamiento espiritual, es pertenencia cordial a la Iglesia, a vuestras comunidades eclesiales. Pero ¿cómo se puede amar, entrar en amistad con alguien a quien no se conoce? El conocimiento impulsa al amor y el amor estimula el conocimiento. Así sucede también con Cristo. Para encontrar el amor con Cristo, para encontrarlo realmente como compañero de nuestra vida, ante todo debemos conocerlo. Como los dos discípulos que lo si- guen después de escuchar las palabras del Bautista y le dicen tímidamente: "Rabbí, ¿dónde vives?" (Jn 1, 38), quieren conocerlo de cerca. Es el mismo Jesús quien, hablando con los discípulos, dis- tingue: "¿Quién dice la gente que soy yo?" (cf. Mt 16, 13), refiriéndose a los que lo conocen de lejos, por decirlo así "de segunda mano". "Y vosotros ¿quién decís que soy yo?", refiriéndose a los que lo conocen "de primera mano", habiendo vivido con él, habiendo entrado realmente en su vida personalísima hasta convertirse en testigos de su ora- ción, de su diálogo con el Padre. Así, es importante que tampoco nosotros nos limitemos a la superficialidad de tantos que escucharon algo acerca de él: que era una gran personalidad, etc..., sino que entre- mos en una relación personal para conocerlo realmente. Y esto exige el conocimiento de la Escritura, sobre todo de los Evangelios, donde el Señor habla con nosotros. Estas palabras no siempre son fáciles, pero entrando en ellas, entrando en diálogo, llamando a la puerta de las palabras, diciendo al Señor: "Ábreme", encontramos realmente pala- bras de vida eterna, palabras vivas para hoy, tan actuales (Continúa en la página 3) Año 2008 nº 10 julio

Transcript of Verdad Libertad · 2016. 5. 12. · ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu...

Page 1: Verdad Libertad · 2016. 5. 12. · ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu (formación o cultura de la inteligencia y de la voluntad) y los deberes de la persona

Asociación Persona y Familia Pág. 1

Verdad y

Libertad

¿Por qué es hermoso ser joven? BENEDICTO XVI

Reproducimos algunos párrafos del discurso que dirigió Benedicto XVI a miles de jóvenes en la plaza Matteotti de Génova el 18 de mayo durante su visita pastoral. * * *… Me pregunto -he reflexionado-: ¿por qué es hermoso ser joven? ¿Por qué el sueño de la juventud perenne? Me parece que son dos los elementos determinantes. La ju-ventud tiene todavía el futuro por delante; todo es futuro, tiempo de esperanza. El futuro está lleno de promesas. Para ser sinceros, debemos decir que para muchos el futu-ro también se presenta oscuro, sembrado de amenazas. Hay incertidumbre: ¿encontraré un puesto de trabajo?, ¿encontraré una vivienda?, ¿encontraré el amor?, ¿cuál será mi verdadero futuro? Y ante estas amenazas, el futuro también puede presen-tarse como un gran vacío. Por eso, hoy muchos quieren detener el tiempo, por miedo a un futuro en el vacío. Quie-ren aprovechar al máximo inmediatamente todas las belle-zas de la vida. Y así el aceite en la lámpara se consuma cuando la vida debería comenzar. Por eso es importante elegir las verdaderas promesas, que abren al futuro, inclu-so con renuncias. Quien ha elegido a Dios, incluso en la vejez tiene ante sí un futuro sin fin y sin amenazas. Por tanto, es importante escoger bien, no arruinar el futuro. Y la primera opción fundamental debe ser Dios, Dios reve-lado en su Hijo Jesucristo. A la luz de esta opción, que nos ofrece al mismo tiempo una compañía para el camino, una compañía fiable, que no nos abandona nunca, se encuen-tran los criterios para las demás opciones necesarias. Ser joven implica ser bueno y generoso. Y la bondad en perso-na es Jesucristo, el Jesús que conocéis o que busca vues-tro corazón. Él es el Amigo que no traiciona nunca, fiel hasta la entrega de su vida en la cruz. Rendíos a su amor. Como lleváis escrito en vuestras camisetas preparadas para este encuentro: "Liberaos" gracias a Jesús, porque sólo él puede libraros de vuestras preocupaciones y de vuestros temores, y colmar vuestras expectativas. Él dio su vida por nosotros, por cada uno de nosotros. ¿Podría de-

fraudar vuestra confianza? ¿Podría llevaros por senderos equivocados? Sus caminos son caminos de vida, llevan a los pastos del alma, aunque sean escarpados y difíciles. Queridos amigos, os invito a cultivar la vida espiritual. Je-sús dijo: "Yo soy la vid, vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él, ese da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada" (Jn 15, 5). Jesús no hace juegos de palabras; es claro y directo. Todos le entienden y toman posición. La vida del alma es encuentro con él, Rostro concreto de Dios. Es oración silenciosa y perseverante, es vida sacramental, es Evangelio meditado, es acompañamiento espiritual, es pertenencia cordial a la Iglesia, a vuestras comunidades eclesiales. Pero ¿cómo se puede amar, entrar en amistad con alguien a quien no se conoce? El conocimiento impulsa al amor y el amor estimula el conocimiento. Así sucede también con Cristo. Para encontrar el amor con Cristo, para encontrarlo realmente como compañero de nuestra vida, ante todo debemos conocerlo. Como los dos discípulos que lo si-guen después de escuchar las palabras del Bautista y le dicen tímidamente: "Rabbí, ¿dónde vives?" (Jn 1, 38), quieren conocerlo de cerca. Es el mismo Jesús quien, hablando con los discípulos, dis-tingue: "¿Quién dice la gente que soy yo?" (cf. Mt 16, 13), refiriéndose a los que lo conocen de lejos, por decirlo así "de segunda mano". "Y vosotros ¿quién decís que soy yo?", refiriéndose a los que lo conocen "de primera mano", habiendo vivido con él, habiendo entrado realmente en su vida personalísima hasta convertirse en testigos de su ora-ción, de su diálogo con el Padre. Así, es importante que tampoco nosotros nos limitemos a la superficialidad de tantos que escucharon algo acerca de él: que era una gran personalidad, etc..., sino que entre-mos en una relación personal para conocerlo realmente. Y esto exige el conocimiento de la Escritura, sobre todo de los Evangelios, donde el Señor habla con nosotros. Estas palabras no siempre son fáciles, pero entrando en ellas, entrando en diálogo, llamando a la puerta de las palabras, diciendo al Señor: "Ábreme", encontramos realmente pala-bras de vida eterna, palabras vivas para hoy, tan actuales

(Continúa en la página 3)

Año 2008 nº 10 julio

Page 2: Verdad Libertad · 2016. 5. 12. · ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu (formación o cultura de la inteligencia y de la voluntad) y los deberes de la persona

AL HILO DE LA NOTICIA � Año 2008 � nº 10 � julio

Pág. 2 Asociación Persona y Familia

VI ENCUENTRO MUNDIAL DE LAS FAMILIASEl Pontificio Consejo para la Familia ha preparado diez cateque-sis, en forma de talleres, que habrán de servir, especialmente para las Familias, como preparación a la celebración de este Encuentro. Todo el material catequético ha sido puesto en la página web del VI Encuentro Mundial de las Familias: www.emf2009.com

El cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México, escribe una carta de aliento para preparar dicho encuen-tro. Extractamos algunos párrafos.

LA FAMILIA FORMADORA EN LOS VALORES.Un convencimiento que hemos de tener en relación a la Familia es precisamente en la perspectiva que el Santo Padre ha señala-do como tema de reflexión para el VI Encuentro Mundial de las Familias: ‘La Familia formadora en los valores humanos y cris-tianos'. Hablar de la Familia como formadora en los valores hace referencia a una serie de acciones que implican todo un proceso orientado a lograr una definición, una configuración, una firmeza y una perfección en cada una de las personas que conforman la Familia, procedimientos que permiten alcanzar una mayor reciedumbre y un mejor ‘acabado' en las personas. Es universalmente aceptado que la persona se configura, espe-cialmente en los primeros años de su vida, en el seno de la pro-pia Familia; aquí es donde la Familia tiene un lugar insustituible en la ‘forja' de la personalidad humana y cristiana de las perso-nas. El momento histórico que vivimos nos señala cómo la Fa-milia ha abdicado de su propio ser y de su misión de formar a las personas, con las consecuencias que conocemos de relativis-mo, subjetivismo, sensualismo y carencia de valores en la socie-dad. Los valores tienen como escena natural la vida cotidiana. Es muy importante comprender este escenario real de los valo-res Familiares. Por eso mismo, la vida Familiar es la profunda y constante ocasión real, el vasto horizonte de la más excelente aventura humana, que no es otra, al fin, que el amor verdadero, bueno y bello, como el más elevado valor. Por eso, la Familia tiene una importante y significativa misión: ser formadora en los valores.

LOS VALORES. Los valores definen la ‘cualidad' de las personas, no sólo desde el punto de vista moral, sino también ontológico. Los valores se identifican con las virtudes. La virtud implica una fuerza, un vigor y una valía para actuar con integri-dad y rectitud en función de un logro de vida. Los valores tienen por eso una riqueza y una jerarquía que enriquecen a las perso-nas en diferentes dimensiones:

• Humanamente. La naturaleza humana tiene unos fines, y cuando se consiguen, el hombre alcanza su perfección o pleni-tud. La naturaleza humana consta de dos elementos, uno natural y otro racional. Los valores hacen referencia a la totalidad de la persona. Aquí caben los aspectos psicológicos y sociológicos. El enfoque psicológico estudia, por ejemplo, el modo de ser de la persona (sus facultades, sus talentos, sus motivaciones, etc.) y

determina no sólo cómo "son" los actos huma-nos, sino cómo "deben ser". Es decir, se va con-figurando el ‘deber ser' de la persona. La re-

flexión sobre los valores es también "ciencia de comportamien-tos sociales". Efectivamente, hay muchas y variadas conductas sociales que se van forjando en la Familia. Aquí se enfocan las relaciones de un "yo" con otro "yo" teniendo en cuenta su digni-dad de personas.

• Espiritualmente. La persona es una totalidad biológica y espi-ritual (inteligente y libre) que tiende a su fin último mediante el desarrollo armónico de sus facultades. De ahí que abarque otros ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu (formación o cultura de la inteligencia y de la voluntad) y los deberes de la persona relativos a su Creador (culto interior o religión).

Si tenemos en cuenta que el Cristiano de hoy tiene que ser un verdadero discípulo y misionero en la Iglesia y en el mundo -así lo afirma el Documento del Episcopado Latinoamericano en Aparecida- hemos de devolverle a la Familia el lugar que ocupa en la formación de los Discípulos y Misioneros que la Iglesia nos pide hoy, apostando todos juntos al futuro de las Familias en nuestra Ciudad de México y en nuestra Patria.

LOS SACERDOTES, AGENTES CUALIFICADOSDE LA PASTORAL FAMILIAR. Todos en la Iglesia somos Promotores y agentes de la pastoral de los matrimonios y de las Familias. El Obispo, como primer agente de Pastoral Fa-miliar en la Diócesis, "es el que brinda no sólo el apoyo efectivo de las estructuras eclesiales en esta Pastoral, sino también el apoyo afectivo de todos los participantes en el apostolado de las Familias" (Directorio Nacional de Pastoral Familiar de México, 545). Pero en la organización de la pastoral de la Diócesis, los presbíteros -y especialmente los párrocos- tienen un papel pre-ponderante en la promoción, impulso y acompañamiento de las diversas iniciativas que se refieren a la Pastoral Familiar, por ejemplo la adecuada preparación de los novios a casarse, la atención a las madres solteras, las viudas, los niños de la calle, las Familias en situaciones especiales e irregulares, la promo-ción y defensa de la vida en todas sus etapas, los matrimonios jóvenes, los matrimonios en conflicto y, sobre todo, la forma-ción y promoción de agentes de Pastoral Familiar. Cada parro-quia procure, por tanto, la implementación de un equipo, impul-sado y promovido por su párroco como responsable de esta Pas-toral y secundada y apoyada por la Comisión Diocesana de Pas-toral Familiar y por los Movimientos Laicales y de Familia, aprovechando los recursos propuestos en la misma Parroquia, en el Decanato o en la zona pastoral e igualmente los propuestos a nivel regional y nacional. Tenemos que trabajar juntos para lle-gar a todos los ambientes: familias, escuelas, mundo del trabajo, jóvenes, cárceles, comunidades religiosas, seminarios, etc. Un buen fruto y signo de este empeño por la promoción del Matri-monio y la Familia será el surgimiento de nuevas vocaciones sacerdotales, misioneras, religiosas y laicales en nuestra querida Arquidiócesis.

En la Solemnidad del Corpus Christi, 22 de mayo de 2008.

+ Norberto Card. Rivera Carrera. Arzobispo Primado de México

www.emf2009.com

La Familia formadora de valores Nomar

Page 3: Verdad Libertad · 2016. 5. 12. · ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu (formación o cultura de la inteligencia y de la voluntad) y los deberes de la persona

AL HILO DE LA NOTICIA � Año 2008 � nº 10 � julio

Pág. 3 Asociación Persona y Familia

como lo fueron en aquel momento y como lo serán en el futuro. Este coloquio con el Señor en la Escritura no debe ser nunca un coloquio individual; ha de hacerse en comunión, en la gran comunión de la Iglesia, donde Cristo está siem-pre presente, en la comunión de la liturgia, del encuentro personalísimo de la sagrada Eucaristía y del sacramento de la Reconciliación, donde el Señor me dice: "Te perdo-no". Un camino muy importante es también ayudar a los po-bres, a los necesitados, tener tiempo para los demás. Hay muchas dimensiones para entrar en el conocimiento de Jesús. Naturalmente están también las vidas de los san-tos. Tenéis numerosos santos aquí, en Liguria, en Géno-va, que nos ayudan a encontrar el verdadero rostro de Jesús. Sólo así, conociendo personalmente a Jesús, po-demos también comunicar esta amistad nuestra a los de-más; podemos superar la indiferencia. Porque, aunque parezca invencible -en efecto, a veces, la indiferencia da la impresión de no necesitar a Dios-, en realidad, todos saben qué les falta en su vida. Sólo cuando descubren a Jesús caen en la cuenta: "Esto era lo que yo esperaba". Y nosotros, cuanto más amigos seamos de Jesús, tanto más podremos abrir el corazón a los demás, para que también ellos sean realmente jóve-nes, es decir para que tengan ante sí un gran futuro. Al final de este encuentro tendré la alegría de entregar el Evangelio a algunos de vosotros como signo de un man-dato misionero. Id, queridos jóvenes, a los ambientes de

vida, a vuestras parroquias, a los barrios más difíciles, a los caminos. Anunciad a Cristo, el Señor, esperanza del mundo. El hombre, cuanto más se aleja de Dios, su Fuen-te, tanto más se extravía; la convivencia humana se hace difícil, y la sociedad se disgrega. Estad unidos entre vosotros, ayudaos a vivir y a crecer en la fe y en la vida cristiana, para que podáis ser testigos intrépidos del Señor. Estad unidos, pero no cerrados. Sed humildes, pero no tímidos. Sed sencillos, pero no inge-nuos. Sed sensatos, pero no complicados. Entrad en diá-logo con todos, pero sed vosotros mismos. Permaneced en comunión con vuestros pastores: son ministros del Evangelio, de la divina Eucaristía, del perdón de Dios. Para vosotros son padres y amigos, compañeros de cami-no. Los necesitáis y ellos os necesitan, todos os necesita-mos. Cada uno de vosotros, queridos jóvenes, si permanece unido a Cristo y a la Iglesia, puede realizar grandes co-sas. Este es el deseo que formulo para vosotros y que os dejo como consigna. A los que estáis inscritos para parti-cipar en el Encuentro mundial de julio en Sydney os digo: "¡Hasta la vista!". Extiendo este saludo a todos, porque todos podéis seguir ese acontecimiento incluso desde aquí. Sé que en esos días las diócesis organizarán con ese motivo momentos comunitarios, para que los jóvenes del mundo entero vivan de verdad un nuevo Pentecostés. Os encomiendo a la Virgen María, modelo de disponibili-dad y de humilde valentía para aceptar la misión del Se-ñor. Aprended de ella a hacer de vuestra vida un "sí" a Dios. Así Jesús vendrá a habitar en vosotros, y lo lleva-réis con alegría a todos.�

(Viene de la página 1)

Una familia numerosa

“Cuando llegamos a fin de mes, aplaudo”Begoña Fernández es madre de ocho hijos de entre13 años y 4 meses. Por lo general, está acostumbrada a que los de-más deduzcan que le gustan mucho los niños o que su ma-rido gana mucho dinero. En realidad, su gran familia no responde ni a una cosa ni a la otra, sino a la Fe que profe-san en Jesucristo, como católicos y pertenecientes al Cami-no Neocatecumenal. Ella y su marido, Josep Masmitjà, en-tienden que viven en una sociedad donde ya están apare-ciendo otras realidades que pueden ser geniales, pero, para ellos matrimonio y familia son conceptos y realidades cris-tianas: "Nosotros vivimos en la Fe católica. Es Cristo el que

nos hace estar llenos de vida, de manera que podemos darla. El centro de nuestra vida no es la preocupación por el cansancio que, a veces, podemos sentir, ni tampoco el tener más o menos dinero.

Josep es modelista de una empresa automovilística. Tiene horario flexible (currado a pulso pues no me lo querían dar) que le permite llevar a los niños al colegio. Begoña, que estudió periodismo, cuida de la Familia y es quién recibe toda la prole en la pausa del mediodía. Josep llega a las siete. Entonces hay que ocuparse de los deberes de todos los cursos y poner la cena. "Siempre procuramos hacerles ver (a nuestros hijos) que esta familia nos la ha construido el Señor y tratamos de que TODOS tengan un recuerdo para Cristo todas las noches, alguna oración, etc. Excepto el Domingo que buscamos un momento en la mañana para rezar todos juntos y ver cómo nos ha ido la semana". Se apañan. Sólo reco-rren a la canguro (cuidadora) cuando tiene que ir a la Parroquia. ¿Y ahorran? "Cuando llegamos a fin de mes nos aplau-dimos, pero seguimos adelante" dice Begoña.

Familias como la suya van disminuyendo (el matrimonio católico bajo el 14,8 % en 2006). No obstante, creen que el Gobierno central debería apoyar a los que aportan hijos a la sociedad: las ayudas son muy escasas en comparación con Europa a pesar de lo que diga el nuestro presidente; las casas no están diseñadas para acoger familias numerosas, y la normativa de tráfico sobre las silletas de los coches da soluciones "A familias de un hijo, no de ocho".

Josep y Begoña, reportaje publicado en el Periódico de Catalunya el 18/05/2008

T E S T I M O N I O

Page 4: Verdad Libertad · 2016. 5. 12. · ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu (formación o cultura de la inteligencia y de la voluntad) y los deberes de la persona

AL HILO DE LA NOTICIA � Año 2008 � nº 10 � julio

Pág. 4 Asociación Persona y Familia

LOLA VELARDE, presidenta de la sección europea del Instituto de Política Familiar (el IPF European Net-work), ha sido recientemente nombrada miembro del Consejo Pontificio para los Laicos.

Agradecimiento es lo primero que le viene a la mente a doña Lola Velarde cuando se le pregunta por su nom-bramiento: por «el privilegio, para mí, de poder estar en un Consejo con tantas personas de tanto prestigio y ca-lidad humana», y por «el respaldo que supone, desde la Iglesia, hacia el trabajo del Instituto de Política Familiar. Ahora mi inquietud -confiesa- es estar a la altura de este reto y cumplir fielmente la misión que se me enco-mienda. Confío en la oración de mucha gente que está rezando mucho por mí, y eso me da muchísima tranqui-lidad». La señora Velarde destaca también que «los últimos nombramientos reflejan claramente la importancia que da la Iglesia al papel de los laicos y a la presencia católi-ca en la vida pública», que incluye la polí-tica, pero que no se agota en ella. «La importancia de la sociedad civil está tre-mendamente presente en la doctrina so-cial de la Iglesia desde sus orígenes», destaca. Pero de forma muy especial, hoy, «en toda Europa, asistimos a un des-pertar de la sociedad civil», como res-puesta a situaciones verdaderamente apremiantes. «Se ve de forma muy clara en España: desde hace algunos años, hay una ideologización muy fuerte, una ex-pansión de la ideología de género, que está generando ataques contra la familia desde la raíz, porque considera que la familia es una lacra para la mujer. Esta corriente se plasma en leyes y deja ver ya sus consecuencias en la vida real: en Eu-ropa, hay un millón de rupturas familiares al año; en los últimos 15 años esas ruptu-ras han afectado a 21 millones de niños... Ante esto, las familias, que hace 20 años no sentían la necesidad de participar en la vida pública, están viendo que, o defien-den ellas sus propios principios y derechos, o sólo van a retroceder cada vez más».

Desde sus tiempos universitarios, Lola Velarde ha parti-cipado en diversas asociaciones, siempre con una in-quietud de participar en la vida pública en defensa de la familia, que ha compartido después con su marido. Pasó también por la política: en la Comunidad de Madrid, fue Directora General de la Juventud, «una experiencia fa-bulosa», dice, porque «uno se da cuenta de que, desde la política, se puede hacer mucho bien, mucho más de lo que yo imaginaba». De ahí pasó a convertirse en una de las personas de referencia en el mundo asociativo familiar español, junto con el fundador del IPF, Eduardo Hertfelder. «La vida me ha ido llevando por este cami-

no, que, por otra parte, a mí me apasiona -confiesa-. Y creo que los tiempos actuales nos urgen a dar testimo-nio».

ZENIT.org publica una entrevista tras su nombramiento:

--Ustedes han analizado las políticas familiares de todos los países que actualmente forman la Unión Europea. De todos los problemas que parece tener la familia en Europa -baja natalidad, falta de apo-yos económicos, legislaciones ambiguas, etc.- ¿cuál cree usted que es el mayor de todos?

--LV: A mí me parece que el problema más grave y do-loroso es la ruptura familiar. Según los datos que tene-mos, la ruptura familiar en Europa en los últimos 15 años ha afectado a más de 21 millones de niños. Este dato es dramático, porque hay evidencias científicas de sobra para afirmar que la familia es el ámbito más ade-cuado para el desarrollo de un niño.

Por lo tanto, todas las políticas familiares deberían tener como primer objetivo el fortalecimiento de la institución del matri-monio, la resolución de las crisis, el afron-tamiento de las dificultades, por un bien mayor, que es la unidad de la familia, para los propios esposos y para los hijos.

--¿Cree usted que los gobiernos euro-peos son conscientes de que el gran problema está ahí?

--LV: Probablemente no. Si se es conscien-te del problema demográfico. Sobre esto hay más sensibilidad, ya que el problema demográfico va unido a un problema eco-nómico, que es el descenso de la población activa que permitirá en el futuro sostener las pensiones y la Seguridad Social. Pero no se hace un análisis a fondo de las cau-sas -con alguna excepción, como un re-ciente informe que señalaba la margina-

ción social, la drogadicción y el fracaso escolar como consecuencias de la ruptura familiar-.

Hay otro problema, y es la fuerte ideologización de las instituciones, como yo he podido constatar, dentro de la estructura de las Naciones Unidas y de las instituciones europeas. Se trata de una serie de minorías muy ideolo-gizadas y muy sectarias que están teniendo una enorme influencia en las resoluciones que salen del Parlamento Europeo, del Consejo de Europa y de las Naciones Uni-das.

Estas minorías no reflejan en absoluto el sentir de la gente de la calle, pero están impregnando las institucio-nes, y estas ideologías son muy contrarias a la familia. Una de ellas es la ideología de género, que considera entre otras cosas que la familia es una lacra social por-que impide la plena realización de la mujer.

Para más información puedes visitar www.zenit.org y www.alfayomega.es

Consejo Pontificio para los Laicos

Lola Velarde

Page 5: Verdad Libertad · 2016. 5. 12. · ámbitos: Los deberes de la persona relativos a su espíritu (formación o cultura de la inteligencia y de la voluntad) y los deberes de la persona

AL HILO DE LA NOTICIA � Año 2008 � nº 10 � julio

Pág. 5 Asociación Persona y Familia

--Respecto al caso concreto de España, y enlazán-dolo con lo que pasa en Europa, muchos analistas están convencidos de que las políticas que está promoviendo el actual Gobierno están inspiradas por la Unión Europea. ¿Eso es cierto?

--LV: Ha habido una serie de resoluciones del Parlamen-to Europeo (que no tienen fuerza legal) en el mismo sentido que las polémicas leyes españolas. Lo cierto es que uno puede apoyarse en esas «recomendaciones» para promover unas políticas determinadas, pero lo hace de forma voluntaria, porque los temas de familia son de competencia nacional, no de competencia euro-pea.

Ciertamente, lo que está ocurriendo en España está re-lacionado con lo que está ocurriendo en Europa y en la ONU. No es una estrategia particular de nuestro Gobier-no, sino que forma parte de una estrategia más amplia, como comentaba antes, de ciertos sectores muy ideolo-gizados.

También es verdad que España, en este sentido, está siendo la punta de lanza, ahora mismo el Gobierno es-pañol es el protagonista y máximo impulsor de esta ideología en el mundo. Dentro de Europa, España está siendo como el campo de pruebas de cómo implantar estas ideologías contrarias a la familia y a los valores cristianos y humanos, y además en un país de tradición católica, porque si lo pueden hacer aquí, lo pueden hacer en cualquier otro sitio. En este sentido, hay un vínculo entre lo que ocurre en España y lo que ocurre en Europa, ciertamente.

--¿Cree usted que esta «racha ideológica» pasa-rá?

--LV: Yo creo que eso depende de lo que hagamos no-sotros. Pasará o no pasará dependiendo de que haya personas que tengan convicción y fortaleza para luchar por determinados valores. Porque esto no hay quien lo pare.

En España se está viendo, yo creo que hay un gran des-pertar en este sentido, en defender los principios más profundos, la familia, la vida humana, las libertades... Son cuestiones básicas, y si nos mantenemos firmes en su defensa, con liderazgo y sin complejos, transmitiendo algo que es tremendamente positivo y atractivo, habrá quien lo siga, cada vez más, y eso acabará teniendo un reflejo en las políticas públicas.

Yo he podido constatar que en el resto de Europa miran a España en este sentido con admiración. La moviliza-ción social que ha habido por parte de las asociaciones familiares , el hecho de que las manifestaciones o la reciente fiesta de la Familia del 30 de diciembre haya convocado a más de un millón de personas, en el resto de Europa lo miran muy impresionados. También en Italia ha habido una actividad muy esperanzadora.�

JOSÉ MIRÓ I ARDÈVOL volvió a la Iglesia hace algo más de quince años, lo que le permite decir que su vivencia de la fe todavía «es nueva». Con el tiempo, se fue dando cuenta de que «una de las de-bilidades que tenía la Iglesia era que exis-tía una escasa pre-sencia de los laicos en la vida pública, en las instituciones de la política, la co-municación, la cultu-ra...» Dado el peso que tiene el catoli-cismo en España, esto daba lugar a «un desequilibrio importante» que influía a la hora de «facilitar o dificultar la transmisión de la fe y del funciona-miento de la sociedad». Otra debilidad es que, «en polí-tica, hay mucha gente católica, pero que a la hora de votar sitúan su fe en un plano secundario».

Por ello, hace siete años nació en Cataluña E-Cristians,con un doble propósito: «Buscar caminos para traducir la doctrina social de la Iglesia en propuestas concretas para los problemas y necesidades de la gente», y tener «capacidad de crítica frente a realidades terribles» que se dan en la sociedad. Por otro lado, se quería también ofrecer «un lugar de encuentro para los católicos con distintas espiritualidades y sensibilidades, pero unidos en el sentido de pertenencia a la Iglesia y fidelidad a su magisterio».

En E-Cristians -explica el señor Miró i Ardèvol-, conviven las más diversas experiencias religiosas y de militancia política, «con el criterio de que, cuando se entra en con-tradicción, debe primar lo que dice la Iglesia. Somos católicos en el mundo (instituciones, partidos, asociacio-nes...), no miembros de estas instituciones dentro de la Iglesia».

Para el señor Miró i Ardèvol, su nombramiento como miembro del Consejo Pontificio para los Laicos ha su-puesto, «evidentemente, una sorpresa y una alegría». Sin embargo, considera que «no se trata tanto de una significación personal, sino de subrayar una determina-da posición colectiva a lo largo de los pocos años» de vida de E-cristians. Cree que así se reconoce la impor-tancia de este tipo de organizaciones. Además, «el hecho de que E-Cristians haya nacido en Cataluña y sea allí donde tenga su base más numerosa también puede, quizá, significar que se presta atención a las circunstan-cias, particularmente adversas, que aquí vive el catoli-cismo». �

Para más información puedes visitar www.zenit.org y y www.alfayomega.es

Consejo Pontificio para los Laicos

José Miró i Ardèvol