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NTRODUCCIÓN. La telenovela es un género que a pesarde contar con una audiencia muy amplia y de ser unmedio eficaz para la trasmisión de mensajes ha sido

subutilizado con fines educativos, tanto escolares comono formales.

Es un género heredero del melodrama, nombre quese les dio en el siglo XVIII a las obras dramáticas con fon-

do musical, que regularmente tenían argumentos senti-mentales y en cuyos finales siempre triunfaba la virtudsobre la maldad.

Varios autores coinciden en ubicar al melodrama comogénero teatral. Nació en ese siglo con Pigmalión, de JeanJacques Rousseau, y floreció en el siglo XIX, siendo su máxi-mo exponente Guilbert de Pixérécourt, dramaturgo fran-

USOS EDUCATIVOS DE LA TELENOVELAun recurso más en la educación de adultos

Irene Martínez ZarandonaINSTITUTO LATINOAMERICANO DE LA COMUNICACIÓN EDUCATIVA, A.C./MÉXICO

irenezarandona25@hotmail.com

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cés, que ponía gran énfasis en el rea-lismo de sus historias.

Las obras eran ofrecidas al pue-blo, que encontraba en estas escenifi-caciones un motivo de entretenimien-to y también información e iniciaciónen la puesta en común de sus pro-blemas sociales.

Desde sus orígenes el teatro ha te-nido un aspecto propagandístico delas ideas y un efecto concientizador;debido a esto, autoridades de la épo-

ca prohibieron el uso de la palabraen las obras escenificadas provocan-do que los actores aumentaran su mí-mica y exageraran la expresión de lossentimientos magnificando su gestua-lidad; así fue como se originó la ca-racterística exageración de las expre-siones no verbales y la ampulosidadque caracterizan al melodrama.

Pero el melodrama no sólo se for-ma en los escenarios sino que tieneuna de sus fuentes en la novela senti-

mental del siglo XVIII, con escritoscomo el de Samuel Richardson y suobra Pamela, considerada por muchoscomo la primera novela sentimentalinglesa; es nuevamente Rousseau consu obra La nueva Eloísa uno de losprimeros escritores de melodramapara ser leído por el pueblo.

Con el folletín y la novela por en-tregas el melodrama adquiere su ca-racterística de narración fragmenta-da y ofrecida al público en pequeñasdosis para mantener su interés porespacio de muchas semanas, inclusomeses. Estas publicaciones impresastuvieron gran éxito debido al granauge y difusión de la imprenta quepermitió el abaratamiento de costos,la reproducción de muchos ejempla-res y la amplia circulación. Paralela-mente se presenta un fenómenosocial nuevo, que es la naciente po-blación alfabetizada, la cual encuen-tra en el folletín seriado una novedo-sa fuente de entretenimiento.

Con el arribo de los medios masi-vos de comunicación, el melodramase ha perfilado y apropiado del len-guaje audiovisual, llegando a ser unode los géneros televisivos más vistos.

La telenovela tiene en su origendos trayectorias: el drama y la litera-tura, que se han entrelazado y evolu-cionado formando un género cuyascaracterísticas le otorgan una perso-nalidad propia (que a su vez puededesembocar en otros subgéneroscomo la telenovela infantil, la educa-tiva o de reforzamiento de valores, lahistórica y la telenovela de época, en-tre otros).

LA TELENOVELA Y SU POTENCIAL EDUCATIVO.Tratando de definir el género conmayor precisión, Ana Meléndez des-cribe a la telenovela como un melo-drama que respeta los elementos na-rrativos básicos de la novela literaria,aunque dividido en capítulos paraseriar la trama, con episodios frag-mentados para poder introduciranuncios publicitarios y que utiliza elsuspenso como gancho para mante-ner el interés del telespectador.

Respecto a las características delgénero melodrama convertido en te-lenovela diversos autores identifican

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los siguientes elementos, por mencio-nar los más importantes:

• Maniqueísmo: polarización delbien y el mal.

• Triunfo de la justicia: seguridad deun final feliz.

• Énfasis en los sentimientos, espe-cialmente temáticas amorosas yproblemáticas referidas al primercírculo de interacción del ser hu-mano: la pareja y la relación conla madre, el padre y los hijos.

• Personajes estereotipados, "tipos"y "arquetipos".

• Situaciones cotidianas pero modi-ficadas por el destino, Dios o elfatalismo, y que son mostradas congran efecto y espectacularidad.

• Temas que excluyen aspectos so-ciales y reflexiones filosóficas.

El melodrama ha alcanzado suverdadero auge en la versión televisi-va. En el Reino Unido hay telenove-las como Coronation Street que llevamás de treinta años produciéndose.Argentina, Brasil, Colombia, México,Cuba, Chile, Perú, Puerto Rico y Ve-nezuela se cuentan entre los princi-pales productores y consumidores deeste género en América Latina. Posi-blemente la cantidad de títulos pro-ducidos en la región a lo largo de cua-tro décadas supera los cuatro mil.

En México la telenovela tiene unode sus antecedentes en la llamadaépoca de oro del cine mexicano, cuan-do el melodrama se desarrolló contoda su riqueza en su modalidad ci-nematográfica. En los años cincuen-ta del siglo XX, junto con el ocaso delmelodrama cinematográfico surgie-

ron la radionovela y la telenovela; espor eso que se les considera comoherederas del melodrama fílmico.

Durante los últimos años en Méxi-co se ha venido gestando un nuevotipo de telenovela cuyas temáticasmuestran problemáticas de actualidady aunque los personajes y las histo-rias giran sobre aspectos de su vidaemocional, tanto el planteamientocomo el contexto en el que se desen-vuelven se va pareciendo cada vez mása las problemáticas sociopolíticas deun México que está cambiando, cuyopúblico telenovelero madura y exigehistorias con personajes más reales,con reacciones, errores y triunfos depersonas de carne y hueso.

Este tipo de telenovela se despren-de cada vez más de temas maniqueís-tas y finales dulces y felices. Tal vez

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ya no podremos llamarlas melodra-mas sino dramas, perfilándose conello un nuevo subgénero, la llamadatelenovela de fondo o de contenido.

Desde sus inicios el melodrama hasido un importante transmisor y re-productor de los valores de cada épo-ca y sociedad. Podemos distinguir tresaspectos educativos bien diferencia-dos del melodrama:

Educación directa.Existe un tipo de telenovela con unorigen netamente educativo, como esel caso en México de la telenovela devalores creada por Miguel Sabido yproducida por Televisa; sus expresio-nes colocan a nuestro país como elprimero en utilizar este género deamplia cobertura para enseñar al au-ditorio temas como la alfabetización,la planificación familiar, eventos his-tóricos, etcétera. Este tipo de teleno-vela basa su éxito en que el hecho dever lo que le sucede a otros (en estecaso los personajes de la telenovela)le permite a la persona pensar en suspropios problemas.

Educación indirecta.La telenovela educa aún sin proponér-selo porque fomenta pautas conduc-tuales encaminadas a formar, en elpúblico que las contempla, certidum-bre acerca de qué es obrar correcta-mente, porque el bien prevalece sobreel mal y la justicia funciona lógicamen-te premiando a los buenos y casti-gando a los malos. Este aspecto edu-cativo surge de la identificación delpúblico con los personajes que sue-len mostrarse como bellos, buenos ysufridos. El aprendizaje se da graciasa las mediaciones que establecen la co-munión diaria entre el receptor y lospersonajes y sus problemáticas.

Los estereotipos juegan un papelimportante dentro del género; a tra-vés de éstos los telenoveleros se identi-fican, sueñan, proyectan sus deseosy temores e introyectan valores.

Educación para los medios.Un tercer aspecto educativo de la te-lenovela surge de la corriente peda-gógica denominada "educación paralos medios", que retoma el interés de

las nuevas generaciones por los pro-ductos mediáticos y a través de la al-fabetización audiovisual los preparacomo receptores críticos.

La educación para los mediosofrece los productos televisivos a ni-ños y jóvenes como objeto de estu-dio, tanto de los aspectos técnicos yde producción como de las temáti-cas, contenidos, personajes, estereo-tipos y el manejo de los conflictos,promoviendo la reflexión que los ayu-da a distanciarse del mensaje y a de-cidir libremente sobre la aceptacióno rechazo de éste.

Este enfoque implica una "alfabe-tización audiovisual", hace que la re-cepción sea más conciente, e inclusoque se tenga mayor capacidad degozo ante las producciones de cali-dad; asimismo, resulta una mediacióninvaluable entre el sujeto y la mani-pulación que de él puedan hacer losintereses mercantiles.

Podemos concluir que la teleno-vela constituye un vehículo culturalde gran impacto que puede ser utili-zado positiva y propositivamente enla educación por autoridades, maes-tros y padres de familia.

RECOMENDACIONES PARA LA ACCIÓN

1. Las telenovelas ofrecen a los recep-tores una gran variedad de temas yvalores que pueden utilizarse paraestimular la reflexión sobre la propiavida. El educador de adultos puedevalerse de ello para identificar a lospersonajes de acuerdo con sus carac-terísticas (los buenos, los malos, losprotagonistas, los antagonistas ... ) yreflexionar en qué se parecen y en quése diferencian de la vida real en susactitudes, emociones, cualidades ydefectos.2. El educador de adultos puede tam-bién utilizar este género elaborandocon sus alumnos listas de las carac-terísticas de los personajes y las si-tuaciones que se expresan en las te-lenovelas para después relacionarlascon la situación familiar y laboral delpersonaje: su ocupación, su lengua-je, su clase social, religión, conflic-tos que viven y reacciones y solucio-

nes que se presentan ante éstos; apartir de estas descripciones se iden-tifican y analizan críticamente losmodelos que representan, especial-mente la imagen que proyectan de loshombres y las mujeres.3. Otra actividad que se sugiere es lacreación de una telenovela en el gru-po, con un tema de interés general apartir del cual se elabora una histo-ria, se crean los diálogos y se asignanlos papeles cuestionando los estereo-tipos. Puede llegarse, incluso, a laproducción misma de la telenovela.

Las actividades que aquí se sugie-ren, y otras que el educador desarro-lle, pueden convertirse en un puntode partida para ejercitar la lectura yla escritura y también para profundi-zar y debatir sobre temas que se ex-presan fuertemente en las telenove-las, como la discriminación racial.

Lecturas sugeridas

GALINDO, M. C., 1985. La telenovelade refuerzo de valores sociales, tesis pro-fesional, Universidad Iberoamerica-na, México, D.F.

GONZÁLEZ, J., 1988. "La cofradía delas emociones interminables", en Cul-turas contemporáneas, No. 4-5, Univer-sidad de Colima, México.

MARTÍNEZ Z., I., 2000. "Telenovelasy telenoveleros", en Revista mexicana decomunicación, año 13, No. 67, México.fundacionbuendia@infosel.net.mx

TORRES A., F. J., 1994. Telenovelas, te-levisión y comunicación, EdicionesCoyoacán, México.jtorres@oakhilltech.com

Micrositio Aprender a ver:http://sepiensa.org.mx/familia/escuelaparapadres

Yo soy yo y mi circunstancia, y si no lasalvo a ella no me salvo yo.

José Ortega y Gasset, filósofo y periodista español,

1883-1955.