EN ESTE NÚMERO • Perfiles: Martin Dihigo: El

Inmortal

• En la Mirilla: Stephen Stras-burg

• En el Rundown: Predicciones 2010 de Grandes Ligas

• Predicciones Liga Japonesa

• ¡Industriales Campeón!

• Los Peloteros del Maine

FECHA DEL BOLETÍN: ABRIL DE 2010

VOLUMEN 1, Nº 1

Por Reynaldo Cruz

El 27 de diciembre de 1874, cerca de una veintena de hombres vistiendo las franelas de La Habana y Matanzas, protagonizaron el primer encuentro oficial de béisbol de Cuba, en el territorio que hoy ocupa el terreno del Palmar del Junco, en la ciudad de Matanzas. Mucho ha pasado desde entonces. Tuvo que caer la colonia española, y empezar la seudo-república para que se comenzara a jugar béis-bol de manera organizada en la isla. Al triun-fo de la Revolución, la liga profesional cuba-na era una liga de respeto, donde se foguea-ban peloteros de la Triple A para lograr su ascenso a la Gran Carpa. La primera Serie Nacional de Béisbol, en el año 1962, fue un acontecimiento que marcó para siempre al pueblo cubano. El gran cam-peón de esta serie resultó ser el equipo de Occidentales, y desde entonces, ganar un campeonato de la pelota cubana se ha conver-tido en algo de vida o muerte. Nuestra pelota, y ya centrándonos un poco más en nuestra Serie Nacional, tiene una his-toria rica en anécdotas, hazañas y momentos memorables. Sin embargo, hoy día muchos de esos hechos van quedando en el olvido. Las nuevas generaciones de cubanos desco-nocen por completo que en los años sesenta había un lanzador oriental que le enseñaba el número en su espalda al bateador con su wind-up y lanzaba con una velocidad astro-nómica, que no se podía medir porque el ve-

locímetro aún no se había inventado, o que había un bateador de los Industriales que casi nunca se ponchaba y que era un gran amigo del ya mencionado lanzador, pero que en el terreno eran enemigos mor-tales. Las nuevas generaciones conocen a Babe Ruth, un hombre de las Grandes Ligas que murió antes de la primera Serie Nacional, y no conocen que en Matanzas había una tanda de bateadores muy inte-grales que eran conocidos como “Los Tres Mosqueteros”, o que en los Azucare-ros había un lanzador que podía tirar casi todos los días, y que incluso lanzó un par-tido de veinte entradas. Lo más triste resulta quizás que algunos, de esos mismos que veneran a Babe Ruth, Mickey Mantle, o Ted Williams, no co-nozcan a Jorge Luis Valdés, José Luis Alemán, Juan Manrique o Lázaro Junco, hombres que estaban haciendo de las su-yas hace una década solamente. ¿Qué nos ha faltado por hacer?

Continúa en P 3

El Equipo de Industriales derrotó en una reñida final al conjunto de Villa Clara en la Serie Nacional de Béisbol de Cuba y se coronó Cam-peón de la 49 edición.

Jugando con un juego de des-ventaja y en patio ajeno, los Leones Azules de la capital sepultaron a un elenco que supo perder con las botas puestas.

Diez agónicos capítulos, que tuvieron decisión en la parte alta de la décima cuando el Jardinero Stayler Hernández conectó un largo batazo que se fue a primer rebote por entre right y center y un corre-dor a bordo. Luego, el éxito se complementó con el excelente relevo del siniestro de 19 años Joan Socarrás.

Germán Mesa hizo magia otra vez y se llevó las naranjas al agua.

Es la segunda final que se decide en extra inning… las dos han tenido un final azul.

_ Universo Béisbol

Universo Béisbol

¡Comenzamos!

Estadio “Palmar del Junco”

135 AÑOS… Y EL BÉISBOL CUBANO AÚN PIDE UN SITIAL

Tomado de www.ahora.cu

¡Industriales Campeón! ¡Ruge León!

Fotos: CubaDebate

Cuba, Abril 2 (Universo Béisbol) — El equipo de Industriales se coronó cam-peón de la 49 Serie Nacional de Béisbol en un final espectacular, no apto para cardíacos.

No fue solamente esta una de las finales más emocionantes y espectaculares, sino que además significó el fin de la campa-ña más reñida que se haya jugado jamás.

Desde el inicio, Guantánamo fue único animador, con un paso de victorias que fue imposible que mantuvieran, pero que dio colorido a la Serie.

Ya en la etapa final, Pinar del Río, In-dustriales, Las Tunas, Holguín, Santiago de Cuba y Granma se enrolaron en una lucha sin cuartel por un cupo por la cla-sificación, los dos primeros por el Occi-

dente y el resto por el Oriente. Al final, hubo que ir a los encuentros pendientes para decidir.

Los Play Off demostraron que “una cosa es con guitarra y la otra…”

Industriales, último clasificado, dio cuenta del equipo más ganador, Sancti Spíritus, en tanto los sorpren-dentes Guantánamo y Cienfuegos cayeron ante Ciego y La Habana, respectivamente. Un Santiago de Cuba diezmado asustó a Villa Clara, pero eso fue todo.

La Habana cayó ante los azules y Ciego sucumbió otra vez. El resto quedó entre azules y naranjas, y ya es historia.

PÁGINA 2 VOLUMEN 1, Nº 1

EN EL RUNDOWN Roy Haladay vs Cliff Lee. Siempre existe la posibilidad de que puedan enfrentarse – sea en el 81º Juego Todos Estre-llas en Anaheim o en la 106ta Serie Mundial – pero esta es realmente una cuestión de cual de los ex ganadores de Cy Young le dará mejores resultados a los que los adquirieron. Lee ha regresado a la Liga Americana con Seattle, y Halladay deja una historia de 146-76 con Toronto y se une a los campeones de la Liga Nacional. Estas transacciones tienden a me-dirse mejor a largo plazo que en el primer año, pero fue la primera vez que ganadores múltiples de Cy Young fueron transferidos en tratos múltiples, y habrá escrutinio desde el principio. Los vemos en Target Field, y traigan frazadas. Habrá días frescos en Minnesota, pero ¿qué importa? Los fanáticos más fieles de los Mellizos están deseosos de ver béisbol al aire libre nuevamente, y en un hermoso nuevo parque. Lo más inte-resante será ver cómo los Twins se acomodan al nuevo terreno de hierba real. Este ha sido un equipo que siempre parece competir, y fue conformado bajo techo. Adiós, Metrodome. La camiseta de Joe Girardi. El mentor de los Yankees usó el número 27 en 2009, y su equipo ganó su Serie Mundial número 27. Girardi eleva su número a 28 en 2010 por la misma razón, incluso forzando al recién llagado Curtis Grander-son a desprenderse de su número por el 14. Los Yankees fueron el último equipo en repetir de 1998 a 2000, y ahora están en posición de hacerlo nuevamente. El balance competitivo es mayor ahora que hace una década, así que parece les será mucho más difícil. Los campeones han hecho cambios no trajeron a Granderson solamente… además, cambiaron a Melky Cabrera por Javier Vázquez en un negocio de cinco jugadores. Pujols termina la Mejor Década de la Historia. El primera base de los Cardenales se apresta a su décimo torneo, y este completará la mejor primera década de las Ligas Mayores para un jugador de posición. Busquen a Babe Ruth, Ty Cobb, Willie Mays, Joe DiMaggio y cualquier otra persona en Cooperstown, no importa. Pujols ha logrado al menos, (y por lo general muy por encima) un promedio de .300, 30 cuadrangulares y 100 carreras empujadas en cada una de sus tempora-das. Ahora en su horizonte avista la Triple Corona, que puede ganar visto sus números del año pasado: AVE: .327, HR: 47, CI: 135, todos tercero en la Liga Nacional. Cuenten con los Cachorros. La pregunta es si este año finalmente podrán ganar su primera Serie Mundial desde 1908. Así que haremos la pregunta nuevamente: ¿Será “el próximo año” finalmente el año? Ahora, bajo la propiedad de la fami-lia Ricketts, ¿tendrá alguna influencia el liderazgo? Las probabilidades se inclinarán eventualmente a su favor? Chris Coghlan sigue bateando. Los Marlins tuvieron al Novato del Año de la Liga Nacional en 2009, cuando Coghlan encabezó los hits en la segunda mitad de la temporada. Terminó con 162 en solamente 128 juegos, como si no fuese gran cosa. Esperemos ver si comienza donde terminó y es considerado como jardinero Todos Estrellas. Otros que ansiamos ver florecer son el derecho de los Bravos Tommy Hanson (11-4, 2.89 PCL, 116 K en 21 aperturas), el cerrador de los Atléti-cos y Novato del Año en la Americana Andrew Bailey (26 salvados, 0.88 WHIP), y el patrullero central de los Piratas Andrew McCutchen (74 carreras, 124 hits, 12 jonrones, 54 impulsadas, 22 robos en solo 108 juegos). ¿Cambio de guardia en el Oeste de la Liga Americana? Seattle y Texas son dos de las tres franquicias activas que no han llegado a la Serie Mundial (Washington y Montréal). Chone Figgins fue de los Angelinos a los Marineros y los pri-meros dejaron ir a John Lackey a Boston, Lee se fue a Seattle, y Texas regresó al ganador de 17 juegos Scout Feldman a un equipo que se mantuvo al acecho al final de la temporada pasada.

_ Mark Newman Editor MLB.com

Predicciones 2010

Apuntes de la 49 Serie Nacional

de Béisbol

Industriales celebra el Título Nacional Foto: Tribuna de La Habana

Estadio de los Orix Buffaloes Foto: Yuko Takizawa

Resulta muy poco alentador que la his-toria de nuestras Series Nacionales (SN) nos llegue en la fría modalidad de las estadísticas de las Guías Oficiales de Béisbol, que con un esfuerzo muy vale-roso se recuperaron y salen a la venta año tras año, o a través del excelente libro escrito por el historiador Félix Ju-lio Alfonso López: “Con las bases lle-nas”. Desafortunadamente, las bases están llenas y los graderíos están desier-tos. La apatía hacia las SN ha comenza-do a reinar en el corazón de muchos cubanos, y no los culpo. Hace poco más de dos años, tuve en mi poder un documental hecho por la Ma-jor League Baseball Productions que recogía, hasta el año 2001 los 30 mo-mentos más memorables en la historia de las Grandes Ligas. Es realmente ver-gonzoso que entre esos momentos inclu-yan a Mark McGwire y a Barry Bonds, con sus músculos artificiales y llenos de esteroides, haciendo trizas las marcas establecidas por peloteros que eran sola-mente ayudados por los hot dogs y las cervezas. Luego de ver el documental unas dos veces - y reírme a costa de esos dos tramposos – me pregunté: ¿Qué tiene Aquino Abreu que envidirle a Johnny Vander Meer? ¿Qué tiene Osma-ny Urrutia, que bateó más de 400 en cuatro años al hilo, que envidiarle a Ted Williams, que lo hizo una sola vez? ¿Es el jonrón de Marquetti contra Rogelio García menos que el de Bobby Thomp-son, el de Mazeroski, el de Carlton Fisk,

o el de Joe Carter? ¿Acaso el jonrón 371 de Lázaro Junco fue menos importante que el 715 de Hank Aaron? ¿Acaso el triunfo de Holguín fue menos sorpren-dente, emocionante e inesperado que el de los Mets? O peor aún, ¿Acaso a nues-tros productores les falta el talento que tienen los productores de la MLB Pro-ductions? Me parece que todas las res-puestas son negativas. Sin embargo, hay mucho más en eso: La pelota cubana, profesional antes del 59 y amateur desde entonces, no tiene un Salón de la Fama. Nuestro inmortal Martín Dihigo, está incluido en el Salón de México y en el de las Grandes Ligas estadounidenses, aún sin haber jugado en estas últimas. Pero Dihigo, ese que podía lanzar y jugar todas las posicio-nes, ese que podía ganar una corona de bateo y una de pitcheo en el mismo campeonato, no está en el Salón de la Fama del Béisbol Cubano… simplemen-te porque tal salón no existe. En el año 2010, iniciará la Serie Nacio-nal número 50, y el Salón de la Fama de la Pelota Cubana no está en los planes por ningún horizonte visible. Es triste que ya nos hayan dejado Huelga, “Changa”, Ricardo Lazo, Alarcón, Laf-fita, el gran Bobby Salamanca, el Deca-no Eddy Martin, y muchos otros, sin que haya un lugar al que los cubanos puedan ir y ver su foto o escuchar de sus hazañas.

Comencé hablando de aquella tarde de 1874, porque es en ese preciso lugar, que hoy ocupa un terreno casi subutilizado y en condiciones deprimentes, donde debe levantarse el Salón de la Fama del Béis-bol Cubano. Sin pretender ser anticapi-talino, o antihabanista, es lo más justo que sea allí, donde todo comenzó real-mente. Considero que no podemos dar-nos el lujo de dejar que otra generación de peloteros nos diga adiós sin nosotros darles el homenaje que se merecen. No es necesaria una construcción al estilo de Cooperstown, y ni siquiera es necesario que se llame Salón de la Fa-ma… ¿Por qué no dejamos que se llame “Palmar del Junco” a secas, y así lo decimos todo? Un sitial así, servirá de referencia, no solamente a nuestros jóve-nes, sino a aquellas personas que vienen de otros países, ávidos de conocer más sobre la historia y la cultura de nuestra isla. El objetivo no es convertirnos en máqui-nas comerciales, ni convertir a nuestros peloteros en figuras como David Bec-kham. Lo que creo imperativo es que, para salvar a nuestro béisbol, nuestros jóvenes atletas y aficionados deben co-nocer su historia. Brindo por Félix Julio, Padura, Peter Bjarkman, Julia Osendi, Aurelio Prieto Alemán y todos los que tratan de salvar las memorias, pero su esfuerzo no es suficiente: creo que todos debemos unirnos para que la historia de nuestro béisbol no quede limitada a los que lo amamos tanto que queremos saberlo todo.

los números de la revista — con salida mensual — es, además del hecho de que les estimo y sé que muchos aman este deporte, que estoy abierto a propuestas y estoy dispuesto a aceptar trabajos de ustedes, que serán publi-cados luego de una revisión.

Quien se comprometa a ser-vir de columnista para UB,

Estimados Lectores:

Durante poco más de tres meses he estado planeando en llevar a cabo el proyecto de Universo Béisbol para dar a conocer anécdotas y curiosidades, así como otros sucesos ocurridos en cualquier béisbol del mundo, estadísticas y otras informacio-nes. La razón por la que he es-cogido a este grupo para enviar

deberá hacerlo según los términos que le informaré. Este es un asunto serio, y co-mo tal deberá llevarse a cabo.

Por ahora, solamente verán un nombre en el equipo de realización, pero pronto se incrementarán los columnis-tas.

Reynaldo Cruz

Creador

“¿Por qué no dejamos que se llame “Palmar del Junco” a secas, y así lo decimos todo?”

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135 AÑOS… Y EL BÉISBOL CUBANO AÚN PIDE UN SITIAL VIENE DE LA PRIMERA

Mensaje a los Lectores de Universo Béisbol

Martin Dihigo nació en Limonar, Matan-zas, el 25 de mayo de 1906.

Fue uno de los jugadores más completos de la historia del béisbol. Podía lanzar y jugar cualquier posición. Puesto a que no se cuenta con estadísticas de aquellos tiem-pos, sus números exactos son un misterio. Sin embargo, se dice que logró más de 260 victorias como lanzador y bateó por enci-ma de .300.

Tiene a su cuenta el primer juego sin hits ni carreras del béisbol mexicano.

Durante su carrera de 30 años, jugó todas las posiciones del béisbol. Como prueba de su talento, en 1938 ganó el título de bateo en la Liga Mexicana con .387, pero ade-

más tuvo balance de 18-2 y 0.90 como lanzador.

Buck Leonard lo consideró el “mejor juga-dor de béisbol que he visto.” en tanto John-ny Mize decía que “Era el único hombre capaz de jugar las nueve posiciones, dirigir, correr y batear ambidextro:”

Ganó tres lideratos de jonrones en las Li-gas Negras y empató otro con Josh Gib-son.

Su habilidad le valió un puesto en el Salón de la Fama de las Grandes Ligas aún sin haber llegado a la Gran Carpa.

A su muerte en 1971 era Ministro de De-portes en Cuba.

en la que sectores chovinistas dentro del Gobierno y la prensa estadounidense an-daban a la caza de un suceso que desatara una guerra contra España, so pretexto de los desmanes cometidos por esta contra la población insular.

Mientras, en la capital cubana nada in-usual presagiaba semejante desastre, e incluso el capitán del barco, Charles Sigs-bee, un veterano de la Guerra de Secesión, había asistido a una corrida de toros el domingo anterior a la detonación que hundió el barco de más de seis mil tonela-das.

Mucho se ha escrito sobre las posibles causas del estallido en los pañoles de mu-nición ubicados en la proa del buque, de-bajo de los camarotes de la tripulación, lo que explica el alto número de víctimas, así como de las consecuencias de este suceso; pero casi nadie sabe o recuerda que entre los fallecidos estaba casi completo un equipo victorioso de béisbol.

Integrado por jóvenes marineros, la estre-lla del team era el pitcher negro William Lambert, un fogonero oriundo de Hamp-ton, Virginia, quien poseía buena veloci-dad, una excelente curva y gran control.

En un ambiente de confraternidad racial impensable en los torneos oficiales de Grandes Ligas y guiados por Lambert, el equipo del Maine había ganado el campeo-

nato naval de béisbol de la marina esta-dounidense, derrotando 18 a 3 al conjunto del USS Marblehead, en diciembre de 1897, apenas tres meses antes de la catástrofe. El torneo se celebró en Cayo Hueso, don-de el navío recibió la orden de dirigirse a Cuba, y allí abandonaron a la cabra que era mascota del equipo, única sobrevivien-te junto al jugador John H. Bloomer. Se sabe que otro de los peloteros del bar-co, C. H. Newton, había hecho el toque reglamentario para apagar las luces, como era habitual, a las 9 y 10 de la noche. Me-dia hora después solo quedaría del conjun-to campeón su última fotografía, en la que sus ojos miran serenos a la cámara y el pitcher negro aprieta en su mano izquier-da una blanca pelota. Me gustaría pensar que de no haber ocu-rrido la explosión, quizás el domingo si-guiente los peloteros del Maine hubieran podido bajar a tierra y disputar un partido de exhibición contra una novena local, como se hizo frecuente después durante el período de ocupación militar, y los Esta-dos Unidos no hubieran tenido entonces el pretexto que buscaban para iniciar la gue-rra contra España. Me gustaría imaginar que tal vez un juego de pelota habría cam-biado la historia.

Tomado de www.bohemia.cu

LOS PELOTEROS DEL MAINE

Por Félix Julio Alfonso López

Es un hecho muy conocido la explosión en la bahía de La Habana del USS Mai-ne, un acorazado de segunda clase de más de cien metros de eslora, 20 metros en su parte más ancha y con una tripula-ción de 364 hombres entre marinos y oficiales.

El trágico evento sucedió la noche del 15 de febrero de 1898, a escasas sema-nas de su llegada a la capital cubana, en —digamos— "visita amistosa", el 25 de enero de ese mismo año, en una época

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El Perfil:

Martin Dihigo: El Inmortal

Fuente: Negro Leagues Baseball Players’ Association

EN LA MIRILLA: STEPHEN STRASBURG

VIERA, Florida -- Los Nacionales de Washington enviaron el sábado 20 de marzo a las menores al pitcher Stephen Strasburg, la gran joya de la orga-nización y primera selección del último sorteo. El equipo quiere que el prospecto tenga un movi-miento de lanzar más lento para acelerar su llega-da a las mayores. "No creo que un jugador puede venir del béisbol aficionado y jugar de inmediato en las mayores", comentó el gerente general de los Nacionales, Mike Rizzo. "He visto a prospectos magníficos intentarlo y hay muchos que fracasan. Este es un jugador muy valioso". Los Nacionales enviaron al lanzador de 21 años a Doble-A. Strasburg fue el mejor pitcher de los Nacionales en los campos de entrenamientos con marca de 1-0 y 2.00 de efectividad. /AP

Nombre: Stephen Strasburg Nacido: 20 de julio de 1988 Posición: Lanzador Batea: Derecho Lanza: Derecho Estatura: 1.94m Peso: 100kg Observaciones: Mejor lanzador de los Nacionales en el campo de entrenamiento: PCL: 2.00 Innings: 9.0 Ponches: 12 Recta que alcanza las 98mph

“Lo que sí necesita mejorar va a mejorar solamente en las ligas

mayores.”

_ Keith Law, de ESPN Criticando la democión de Strasburg a

las menores

“...No estoy muy centra-do en mi futuro lejano en estos momentos.”

_ Stephen Strasburg

Por Bill Landson/MLB.com VIERA, Florida – Cuatro días después de que los Nacionales enviaran al derecho Stephen Strasburg al Harrisburg de la Doble-A, el tirador tuvo una sólida actua-ción en un partido intra-equipo que con-cluyó con empate a cero. Strasburg lanzó 4 entradas y un tercio, permitió un hit, ponchó a nueve bateado-res y transfirió a tres. Hizo 79 lanzamien-tos (46 strikes) y la recta le llegó a las 98 millas. Su mejor entrada fue el principio de la cuarta cuando sacó los tres outs por la vía del ponche. El juego terminó en el princi-pio del quinto cuando Strasburg llegó a su límite de lanzamientos. Esta resultó ser su peor entrada, pues transfirió a dos bateadores. Incluso, llegó a tirar seis bolas en línea.

Sólida aparición de Strasburg en las menores

Saitama Seibu Lions Manager: Hisanobu Watanabe Last season: 70-70-4 (Cuarto) La única vez que los Leones terminaron fuera de los tres primeros lugares volvieron por sus fueros para ganar la Serie del Japón al año siguiente. La escuadra que coman-da el mentor Hisanobu Watanabe tratará de repetir la hazaña esta temporada. Los Leones seguirán rugiendo en el plato siempre y cuando Takeya Nakamura, quien ha disparado 94 batazos de cuatro esquinas en las dos últimas temporadas siga con ese paso (esperando que se recupere de las lesiones sufridas en su rostro durante la primavera). El mejor jugador de Seibu, Hiroyuki Nakajima (.309, 21 jonrones y 92 remolques la pasada temporada) y G.G. Sato (.291, 25, 83) también se espera desempeñen un papel importante para llevar a los campeones de 2008 a la cumbre de la Liga del Pacífico. La rotación está encabezada por el ganador del Premio Sawamura Hideaki Wakui (16-6, 2.30 PCL) y Takayuki Kishi (13-5, 3.26 PCL). Hokkaido Nippon Ham Fighters Manager: Masataka Nashida Last season: 82-60-2 (Primero) Las lesiones de Yu Darvish pusieron a los Fighters en un aprieto a fines del año pasado, una lucha que el equipo espera evitar para tratar de obtener su cuarto título de la Liga del Pacífico en cinco años. Darvish es el mejor lanzador nipón y una temporada de 15-5 con un promedio de limpias de 1.73, unido a una heroica actuación en el Juego 2 de la Serie del Japón eliminó las dudas. La ya débil ofensiva de largo metraje de los Fighters per-dió fuerza cuando Terrmel Sledge firmó con los BayStars de Yokohama durante el invierno. Yoshio Itoi (.306, 15 HR y 58 CI) ayudó en el sorpren-dente empuje ofensivo en tanto Shinji Takahashi (.309, 8, 75), Makoto Kaneko (.304, 14, 66) y Eiichi Koyano (.296, 11, 82) rellenaron la alineación. Tohoku Rakuten Golden Eagles Manager: Marty Brown Last season: 77-66-1 (Segundo) Las Águilas estuvieron a unas victorias de coronarse con la Serie del Japón y es ahora tarea del nuevo director Marty Brown mejorar su actuación. Rakuten tiene lo que puede ser el mejor dúo de abridores con Hisashi Iwakuma y Masahiro Tanaka. Podrían ser una mayor amenaza si el lanzador de cuatro campañas Satoshi Nagai tiene un año tan bueno como 2009. Rakuten confía además en el veterano Takeshi Yamasaki (39 HR, 107CI el año pasado), pues puede repetir esta temporada. Teppei Tsuchiya fue el líder de la liga con .327 de avera-ge y representa un peligro con hombres en base. Además el equipo cuanta con Fernando Seguignol, Daisuke Kusa-no y Naoto Watanabe.

Orix Buffaloes Manager: Akinobu Okada Last season: 56-82-2 (Sexto) Uno de los pasos para unos Búfalos azotados por las lesio-nes el año pasado será que sus jugadores se mantengan saludables. El equipo “liberó” a Tuffy Rhodes, dejando la ofensiva en las confiables manos (si se mantienen saludables) de Alex Cabrera, quien bateó .314 con 13 jonrones y 39 remolques en una campaña acortada a 65 juegos por las lesiones. Greg LaRocca puede producir mientras esté en forma. Tomotaka Sakaguchi (.317, 5 HR, 50 CI, 16 bases roba-das) puede ser el mejor del equipo, pues ha ido en ascenso durante tres años. En tanto el pitcheo fue el peor de Japón, pues los jóvenes lanzadores no florecieron y los veteranos nada pudieron hacer. Chiba Lotte Marines Manager: Norifumi Nishimura Last season: 62-77-5 (Quinto) Los Marines esperan sumar un poco de poder a su tanda con la adquisición del jonronero Koreano Kim Tae Kyun. Kim fue muy bueno en la KBO (Korean Baseball Ogani-zation) con .310, 188 jonrones y 701 remolques en nueve temporadas con los Hanwha Eagles. Si produce, podrá apoyar a Shoitsu Omatsu, Saburu Omura, Tadahito Iguchi y Toshiaki Imae. El slump de dos años del lanzador Hiroyuki Kobayashi lo envió al bullpen y Naoyuki Shimizu fue enviado a Yoko-hama, dejando a Shunsuke Watanabe (3-13, 4.05) y a Yos-hihisa Naruse (11-5, 3.28) los despojos de la rotación. Fukuoka Softbank Hawks Manager: Koji Akiyama Last season: 74-65-5 (Tercero) Las lesiones y la edad están comenzando a hacer mella en los Hawks, cuya oportunidad se acaba rápidamente. El jonronero Nobuhiko Matsunaka (.279, 23 HR, 80 CI) está entrando en años, pero puede producir si puede man-tenerse en forma. Recuperándose aún de cirugías en su codo y en su rodilla, Matsunaka comenzará en las menores por vez primera desde su año de novato, pues en siete en-frentamientos de exhibición tuvo un promedio de .111 sin jonrones ni remolques. Esto la pone más presión al veterano Hiroki Kokubo, quien fue el único jugador del conjunto en aparecer en los 144 juegos con promedio de .266, 18 HR y 81 CI. José Ortiz, Yuya Hasegawa, y Hitoshi Tamura harán lo suyo, pero puede haber problemas si fallan las rodillas de Matsunaka. El as Toshiya Sugiuchi es lo único seguro en la rotación, tras números de 15-5 y 2.36 PCL el año pasado. Dennis Houlton (11-8, 2.89) tuvo una buena campaña.

Liga Japonesa: Predicciones Liga del Pacífico

Por Jason Coskrey/ The Japan Times

Yu Darvish apunta como el mejor serpentinero nipón

Liga Japonesa: Predicciones Liga Central

Por Jason Coskrey/ The Japan Times

Chunichi Dragons Manager: Hiromitsu Ochiai Last season: 81-62-1 (Segundo) Luego de terminar como subcampeones de la Liga Cen-tral en los últimos tres años, los Dragones esperan mejo-rar este año. Chunichi está apostando por un cambio de posiciones entre el torpedero Hirokazu Ibata y el camarero Masahiro Araki, aunque este último, irónicamente, se perderá el inicio de la temporada con una lesión. El grueso de la alineación es tan intimidante como cual-quier otro con Masahiro Morino (.289, 23 HR, 109 CI), Tony Blanco (.275, 39,110) y Kazuhiro Wada (.302, 29, 87), con muy buenas temporadas. Chinichi tiene buenos abridores con Chen Wei-yin y Ka-zuki Yoshimi encabezando la rotación. Chen, zurdo, (8-4) fue uno de los mejores pitchers del año pasado lide-rando la Liga Central con 1.54 de PCL, mientras el dies-tro Yoshimi tuvo un balance de 16-7 con PCL 2.00. Por otro lado, Yudai Hawai viene de una temporada con más de 10 victorias y Kenta Asakura (10-8, PCL 4.04) sigue siendo una opción viable. Yomiuri Giants Manager: Tatsunori Hara Last Season: 89-46-9 (Primero) Los Kyojin dominaron la Liga Central la temporada pasa-da, y no es de dudar que se espere lo mismo de ellos si resuelven la situación de su pitcheo. Los Gigantes castigaron a sus oponentes, anotando 109 carreras en la primera entrada, debido a la efectividad de los primeros bates Hayato Sakamoto y Tetsuya Matsu-moto, sirviendo la mesa para el tercer bate Michihiro Ogasawara (.309, 31 HR, 107 CI) y el maestro cuarto bate Alex Ramírez (.322, 31 HR, 103 CI). El ataque se completa con Yoshiyuki Kamei (.290, 25 HR, 71 CI) en el quinto puesto y se espera un buen regreso del rejuve-necido Yoshinobu Takahashi y el confiable receptor Shinnosuke Abe. Con Kamei y Takahashi, los días como regular del jonro-nero koreano Seung Yeop Lee están contados. El nuevo coach de pitcheo Masaka Saito demanda al menos quince victorias per cápita de Tetsuya Utsumi (9-11, 2.96) y Shun Tohno (8-8, 3.17). Hanshin Tigers Manager: Akinobu Mayumi Last season: 67-73-4 (Cuarto) El Calendario Chino dice que 2010 es el año del Tigre, y el regreso de Kenji Johjima (.268, 48 HR en cuatro tem-poradas en Grandes Ligas de Estados Unidos) puede ayu-dar a Hanshin a convertirlo en una realidad. Esta adquisi-ción no rejuvenece a los Tigres, pero el receptor puede acoplarse con Tomoaki Kanemoto, Takahiro Arai y Craig Brazell. Entre los lanzadores sobresalen Atsumi Nomi (13-9, PCL 2.62), quien fue además un “guerrero” como visitador (9-3, 1.76). Yuya Ando (8-12, 3.90) debe tener una mejor temporada.

Tokyo Yakult Swallows Manager: Shigeru Takada Last season: 71-72-1 (Tercero) Yakult viene para tratar de comenzar con el ímpetu que casi los puso en play off el año pasado. Las “Golondrinas” podrán tener una ofensiva decente con Jaime D’Antona y el canadiense Aaron Guiel además de Norichika Aoki y Kazuki Fukuchi. Aoki (.303, 16 HR, 66 CI) tuvo una temporada ligeramente mala para sus posibi-lidades. Shohei Tateyama (16-6, 3.39) y Masanori Ishikawa (13-7, 3.54) son garantías en la lomita y dan confianza al mentor Takada. Pero para llegar a la postemporada, Ryo Kawas-hima (5-6, 4.81) y los jóvenes Yoshinori Sato (5-10, 3.50) y Kyohei Muranaka (1-6, 7.12) deberán tener mejores des-empeños. Yokohama BayStars Manager: Takeo Obana Last season: 51-93 (Sexto) Los BayStars han importado un grupo de nuevos rostros que esperan les ayuden a evitar los mismos viejos resulta-dos. Yokohama regresó a la mesa de diseños luego de la horrenda demostración del año pasado, contratando a un nuevo director y 12 jugadores. En el plato, Yokohama agregó algo de poder con la suma al equipo de Terrmel Sledge (.266, 27 HR, 88 CI) de Hok-kaido Nippon Ham. El equipo también se “fue de com-pras” y trajo a José Castillo y al ex receptor de los Chiba Lotte Marines Tatsuku Hashimoto. Las nuevas adiciones son Seiichi Uchikawa (.318, 17 HR, 66 CI) y un Shuichi Murata saludable. Hiroshima Toyo Carp Manager: Kenjiro Nomura Last season: 65-75-4 (Quinto) El otrora estelar de Carp toma las riendas con la esperanza de regresar a la gloria. Lo primero en la lista sería sacar a la luz un poco de producción en el plato, luego de tener una escuadra superior estadísticamente al Yokohama en la pasada temporada, al terminar penúltimo en todo Japón en average colectivo (.245) y en carreras con 528. El antesalista Todos Estrellas Kenta Kurihara cayó en slump al punto de descender su promedio a .257 y empujar 79 carreras. Los Carp tienen buenos bateadores como Akihiro Higashide, pero faltan los empujadores en un equipo en el que solamente Kurihara remolcó más de 60. En la lomita, esperan tener un mejor desempeño de Kenta Maeda – quien sufrió del síndrome de la segunda tempora-da – que sus números de 8-14 el año pasado. Kan Otake regresa después de una sólida temporada (10-8, 2.81) y Yuki Saito (9-11, 3.99)podrá aportar algunas victorias.

Yoshinobu Takahashi aspira a regresar al estrellato con los Kyojin

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Universo Béisbol surge en marzo de 2010 como parte de un proyecto mayor que deberá abarcar las noti-cias más notables del béisbol en todo el planeta, sin tener en cuenta las ligas o la diferencia de calidad entre las mismas. Tendrá además una sección dedicada en cada número a la historia de algún beisbolista que haya marcado la historia del deporte de las bolas y los strikes en su país o a nivel mundial. También se hará mención a la historia del deporte, su surgimiento y su globalización. El objetivo de su creador es hacer que se conozca un poco más sobre el béisbol de todo el globo terráqueo, su historia y algunas curiosidades particulares de cada liga. Acá tendremos. • Noticias de diferentes ligas • Hechos históricos • Biografías • Reseñas • Estadísticas • Artículos de opinión Todo, con el objetivo de expandir el béisbol. Atentamente Los Realizadores

¡Nos vemos en el próximo

número!

bras con aquel jugador de nuestro equi-po a quien tanto admiramos, o empren-derla con los árbitros cuando una jugada cerrada es decretada a favor del conjun-to visitante — y que nosotros siempre vemos a favor del equipo de casa.

Cierto es que muchos se lanzan a las entradas de los estadios en busca de los mejores puestos, mientras otros, que quieren parecer más pasivos llegan sobre el tercer capítulo, pero no pueden escon-der su euforia y se suman a los más apa-sionados.

Eso es lo que muchos perseguimos cuando llenamos los graderíos techados o al sol; por eso estamos allí.

Por Reynaldo Cruz — Alguna vez hemos ido a un parque beisbolero para ver al equipo de nuestras preferencias lucir como los mejores del mundo... o como los peores. Lo cierto es que en el corazón de cada fanático prima el deseo de ver a “sus muchachos” (porque son sus muchachos) coronarse con el cetro de la liga. Pero más allá de ese deseo que muchos mueren sin ver cumplido está el espíritu de los estadios.

Los colores, el ruido intenso de los faná-ticos, los carteles, el olor a hierba o a maní no son sino imanes que atraen a más seguidores al partido. Luego está la posibilidad de atrapar una pelota de fly o simplemente de poder cruzar unas pala-

EL equipo de béisbol de Holguín, de la SNB de Cuba, celebra barrida ante el

subcampeón Villa Clara

EL ESPÍRITU DE LOS ESTADIOS

Equipo de realización de “Universo Béisbol” Creador/Editor jefe: Reynaldo Cruz

Traducción: Reynaldo Cruz Diseño: Reynaldo Cruz Díaz