Universidad de Costa Rica Facultad de Ingeniería Escuela...

162
Universidad de Costa Rica Facultad de Ingeniería Escuela de Ingeniería Civil Análisis del efecto de la cohesión aparente en el cálculo de estabilidad de taludes Trabajo de Graduación Que para obtener el grado de Licenciatura en Ingeniería Civil Presenta: Ana María Castillo Acuña Director de Proyecto de Graduación: Ing. Rafael Baltodano Goulding, PhD. Ciudad Universitaria Rodrigo Facio Costa Rica Junio, 2010

Transcript of Universidad de Costa Rica Facultad de Ingeniería Escuela...

  • Universidad de Costa Rica

    Facultad de Ingeniería

    Escuela de Ingeniería Civil

    Análisis del efecto de la cohesión aparente en el cálculo de estabilidad de

    taludes

    Trabajo de Graduación

    Que para obtener el grado de Licenciatura en Ingeniería Civil

    Presenta:

    Ana María Castillo Acuña

    Director de Proyecto de Graduación:

    Ing. Rafael Baltodano Goulding, PhD.

    Ciudad Universitaria Rodrigo Facio

    Costa Rica Junio, 2010

  • Tribunal de Graduación

    Director

    Ing. Rafael Baltodano Goulding, PhD.

    1;¡~ Ing. Williar vargas Monge, PhD.

  • Fecha: 2010, junio, 15

    La suscrita, Ana María castillo Acuña, cédula 1-1253-0640, estudiante de la carrera de Licenciatura en Ingeniería Civil de la Universidad de Costa Rica, con número de carné A31240, manifiesta que es autora del Proyecto Final de Graduación Análisis del efecto de la cohesión aparente en el cálculo de estabilidad de taludes, bajo la dirección del Ing. Rafael Baltodano Goulding, quien en consecuencia tiene derechos compartidos sobre los resultados de esta investigación.

    Así mismo, hago traspaso de los derechos de utilización del presente trabajo a la Universidad de Costa Rica, para fines académicos: docencia, investigación, acción social y divulgación.

    Nota: De acuerdo con la Ley de Derechos de Autor y Derechos Cone os Nº 6683, .Artículo 7 (versión actualizada el 02 de julio de 2001), "no podrá suprimirse el n bre del autor en las publicaciones o reproducciones, ni hacer en ellas interpolaciones, sin una conveniente distinción entre el texto original y las modificaciones o adiciones editoriales". Además, el autor conserva el derecho moral sobre la obra, Artículo 13 de esta ley, por lo que es obligatorio citar la fuente de origen cuando se utilice información contenida en esta obra.

    ii

  • iii

    Dedicatoria

    A mis papás. Este triunfo es de ustedes.

  • iv

    Agradecimientos

    Al Dr. Rafael Baltodano por sus consejos y la guía brindada a lo largo del proyecto de

    graduación. Muchas gracias por su tiempo.

    A mis asesores, el Ing. Sergio Sáenz y el Dr. William Vargas, por sus valiosas sugerencias y

    aportes que me ayudaron a mejorar este proyecto de graduación.

    Al Ing. Óscar Valerio por su guía durante la larga etapa de las pruebas de laboratorio, al

    igual que a los técnicos del Lanamme que colaboraron con su ayuda y consejos.

    A Cristian Fernández por su amistad y apoyo durante la elaboración de la tesis.

    Definitivamente la etapa de pruebas habría sido eterna sin su compañía.

    A mis papás, los cuales con su ejemplo de tenacidad, honestidad y superación me enseñaron

    a nunca rendirme y a dar lo mejor de mí siempre. También a mi hermano, mi abuelita y al

    resto de mi familia por darme el apoyo y las palabras de aliento cuando más las necesitaba.

    Gracias a ustedes soy quien soy ahora. Los amo.

    A mis amigos por ser como son y acompañarme a lo largo de estos años. Gracias por

    escucharme, aconsejarme, hacerme reír y apoyarme en los momentos de más tensión.

    Ustedes saben quiénes son. Hicieron de esta etapa algo inolvidable. Los quiero muchísimo.

  • v

    Castillo Acuña, Ana María

    Análisis del efecto de la cohesión aparente en el cálculo de estabilidad de taludes

    Proyecto de Graduación-Ingeniería Civil-San José, C.R.

    A. M. Castillo A., 2010

    xv, 162 [51]h; ils. col.- 33 refs.

    RESUMEN

    Los suelos no saturados presentan cambios volumétricos y en la resistencia al corte cuando aumenta o

    disminuye su contenido de humedad. Dependiendo del grado de saturación y del tipo de suelo, el

    esfuerzo de succión afecta la resistencia y, por ende, la estabilidad de un talud. Es preciso entonces

    examinar el efecto de la cohesión aparente mediante la variación de los grados de saturación y realizar

    el análisis de estabilidad de taludes para determinar la variabilidad del factor de seguridad (FS)

    obtenido para cada tipo de suelo.

    Se caracterizaron 2 suelos, uno plástico y uno no plástico, y se determinó el esfuerzo máximo al corte

    para diferentes grados de saturación. Seguidamente, se obtuvo la curva característica agua-suelo para

    estimar los valores de cohesión aparente y comparar la predicción con los valores obtenidos en la

    prueba de compresión inconfinada. Se utilizaron los datos de estos suelos y 5 más, provenientes de

    trabajos finales de graduación anteriores para realizar el análisis de estabilidad de taludes y determinar

    la variación del FS según el grado de saturación, la pendiente del talud y su altura. Finalmente, se

    realizó un análisis probabilístico utilizando el método de Rosenblueth para poder caracterizar el

    comportamiento del talud ante la variación de los distintos factores que afectan su estabilidad.

    Se determinó que la resistencia del suelo varía con respecto al grado de saturación del suelo, mas no es

    inversamente proporcional a éste, debido a que el efecto de succión influye en el estado de esfuerzos

    según el tipo de suelo y la distribución de las partículas. La variabilidad del FS para los taludes

    analizados no es significativa al cambiar la pendiente, sin embargo sí lo es cuando lo que se varía es la

    altura. Ante un aumento en la altura, el FS disminuye proporcionalmente y la variabilidad entre los

    factores correspondientes a cada grado de saturación también es menor. El análisis probabilístico

    reflejó que para el caso particular del modelo analizado, los suelos que presentaron una variación baja

    en los datos, obtuvieron un índice de confianza más alto, por lo que el rendimiento de estos taludes se

    encuentra por encima del promedio. A.M.C.A.

    Conceptos claves: suelos no saturados; succión del suelo; estabilidad de taludes; cohesión aparente

    Ing. Rafael Baltodano Goulding, PhD.

    Escuela de Ingeniería Civil

  • vi

    ÍNDICE GENERAL

    1 ASPECTOS GENERALES ........................................................................................... 1

    1.1 JUSTIFICACIÓN ................................................................................................ 1

    1.1.1 Problema específico .................................................................................... 1

    1.1.2 Importancia ............................................................................................... 1

    1.2 OBJETIVOS ...................................................................................................... 2

    1.2.1 Objetivos Generales ................................................................................... 2

    1.2.2 Objetivos Específicos .................................................................................. 3

    1.3 ALCANCES Y LIMITACIONES .............................................................................. 3

    1.4 ANTECEDENTES ............................................................................................... 4

    2 COMPORTAMIENTO DE LOS SUELOS NO SATURADOS ............................................... 6

    2.1 GENERALIDADES DE LOS SUELOS NO SATURADOS............................................. 6

    2.1.1 Origen ....................................................................................................... 6

    2.1.2 Fases del suelo no saturado ........................................................................ 7

    2.1.3 Estructura de los suelos no saturados .......................................................... 8

    2.2 SUCCIÓN EN LOS SUELOS ................................................................................. 9

    2.3 RESISTENCIA DE LOS SUELOS NO SATURADOS .................................................14

    3 ESTABILIDAD DE TALUDES .....................................................................................18

    3.1 MODOS DE FALLA............................................................................................19

  • vii

    3.2 ANÁLISIS DE ESTABILIDAD ..............................................................................21

    3.2.1 Método ordinario de las dovelas .................................................................22

    3.2.2 Método simplificado de Bishop ...................................................................24

    3.2.3 Método simplificado de Janbu ....................................................................26

    3.2.4 Método de Morgenstern-Price .....................................................................27

    3.3 ANÁLISIS PROBABILÍSTICO ..............................................................................29

    3.3.1 Índice de confianza, β ...............................................................................30

    3.3.2 Método de Rosenblueth .............................................................................32

    4 METODOLOGÍA ......................................................................................................34

    4.1 CARACTERIZACIÓN DE LOS SUELOS .................................................................34

    4.2 PRUEBAS DE COMPRESIÓN DEL SUELO.............................................................37

    4.3 ANÁLISIS PROBABILÍSTICO DE LOS DATOS ......................................................39

    5 ANÁLISIS DE RESULTADOS .....................................................................................40

    5.1 RESULTADOS DE LAS PRUEBAS ........................................................................40

    5.1.1 Prueba de granulometría ...........................................................................40

    5.1.2 Prueba de límites de Atterberg ...................................................................42

    5.1.3 Prueba de compactación del suelo ..............................................................45

    5.1.4 Prueba de compresión triaxial ....................................................................47

    5.1.5 Prueba de compresión inconfinada .............................................................49

  • viii

    5.1.6 Curva característica suelo-agua ..................................................................62

    5.1.7 Esfuerzo de succión ...................................................................................65

    5.2 ANÁLISIS DE ESTABILIDAD DE TALUDES ..........................................................67

    5.3 ANÁLISIS PROBABILÍSTICO ..............................................................................82

    6 CONCLUSIONES .....................................................................................................88

    6.1 CONCLUSIONES ..............................................................................................88

    6.2 RECOMENDACIONES .......................................................................................90

    7 BIBLIOGRAFÍA .......................................................................................................92

    Apéndice 1: Resultados de las pruebas ...........................................................................96

    Apéndice 2: Análisis de estabilidad con GeoStudio® ....................................................... 102

    Apéndice 3: Factores de seguridad obtenidos ................................................................ 123

    Apéndice 4: Factores de seguridad para segundo modelo de talud .................................. 141

    Anexo ........................................................................................................................ 145

  • ix

    ÍNDICE DE CUADROS

    Cuadro 1. Condiciones de equilibrio estático satisfechas por los métodos de dovelas ........29

    Cuadro 2. Coeficientes de variación ..............................................................................30

    Cuadro 3. Ejemplo de valores para y pF .....................................................................32

    Cuadro 4. Descripción y problemas asociados a las zonas de extracción de los suelos 1 y 2

    ........ ...........................................................................................................................36

    Cuadro 5. Datos de la prueba de granulometría para la muestra del suelo 1 ....................40

    Cuadro 6. Datos de la prueba de granulometría para la muestra del suelo 2 ....................41

    Cuadro 7 Datos obtenidos en la prueba de límite líquido para el suelo 1. .........................42

    Cuadro 8. Contenido de humedad para determinar el límite plástico de la muestra de suelo

    1...... ...........................................................................................................................43

    Cuadro 9. Datos obtenidos en la prueba de límite líquido para el suelo 2. ........................44

    Cuadro 10. Clasificación de los suelos 1 y 2. Límites líquido, de plasticidad e índice de

    plasticidad. ...................................................................................................................45

    Cuadro 11. Peso específico seco del suelo 1 según contenido de agua.............................45

    Cuadro 12. Peso específico seco del suelo 2 según contenido de agua.............................46

    Cuadro 13. Determinación de la altura de las capas y su respectivo porcentaje de

    subcompactación para las probetas de la prueba de compresión inconfinada. ....................49

    Cuadro 14. Características del molde utilizado en la prueba de compresión inconfinada ....49

    Cuadro 15. Esfuerzo máximo alcanzado para la muestra de suelo 1 con ...50

    Cuadro 16. Esfuerzo máximo alcanzado para la muestra de suelo 2 con ...51

  • x

    Cuadro 17. Esfuerzo máximo y resistencia no drenada para el suelo 1 obtenidos de la

    prueba de compresión inconfinada .................................................................................52

    Cuadro 18. Esfuerzo máximo y resistencia no drenada para el suelo 2 obtenidos de la

    prueba de compresión inconfinada .................................................................................57

    Cuadro 19. Datos generales para determinar el grado de saturación según la succión para

    el suelo 1 Fidélitas ........................................................................................................63

    Cuadro 20. Datos generales para determinar el grado de saturación según la succión para

    el suelo 2 Barlovento.....................................................................................................63

    Cuadro 21. Rangos de variación de las propiedades de los suelos utilizados en el análisis de

    estabilidad ...................................................................................................................67

    Cuadro 22. Factor de seguridad obtenido para los taludes de 10m y 20m con pendientes

    H:V 1:1, 1,5:1 y 2:1 ......................................................................................................82

    Cuadro 23. Media y desviación estándar de los suelos analizados ....................................83

    Cuadro 24. Factores de seguridad calculados para cada combinación ..............................83

    Cuadro 25. Factor de seguridad esperado y varianza para cada tipo suelo y altura ...........84

    Cuadro 26. Desviación estándar y coeficiente de variación .............................................85

    Cuadro 27. Media y desviación estándar normales para el cálculo de β ............................85

    Cuadro 28. Índice de confianza y probabilidad de falla ...................................................86

    Cuadro 3.1. Factores de seguridad obtenidos en el análisis de estabilidad de taludes con

    una pendiente 1:1 y altura de 10m............................................................................... 123

    Cuadro 3.2. Factores de seguridad obtenidos en el análisis de estabilidad de taludes con

    una pendiente (H:V) 1,5:1 y altura de 10m ................................................................... 126

  • xi

    Cuadro 3.3. Factores de seguridad obtenidos en el análisis de estabilidad de taludes con

    una pendiente (H:V) 2:1 y altura de 10m ...................................................................... 129

    Cuadro 3.4. Factores de seguridad obtenidos en el análisis de estabilidad de taludes con

    una pendiente 1:1 y altura de 20m............................................................................... 132

    Cuadro 3.5. Factores de seguridad obtenidos en el análisis de estabilidad de taludes con

    una pendiente 1,5:1 y altura de 20m ............................................................................ 135

    Cuadro 3.6. Factores de seguridad obtenidos en el análisis de estabilidad de taludes con

    una pendiente 2:1 y altura de 20m............................................................................... 138

    Cuadro 4.1. Factores de seguridad obtenidos para el talud de 10m para la pendiente

    1:1...... ...................................................................................................................... 141

    Cuadro 4.2. Factores de seguridad obtenidos para el talud de 10m para la pendiente

    1,5:1... ...................................................................................................................... 142

    Cuadro 4.3. Factores de seguridad obtenidos para el talud de 10m para la pendiente

    2:1...... ...................................................................................................................... 142

    Cuadro 4.4. Factores de seguridad obtenidos para el talud de 20m para la pendiente

    1:1...... ...................................................................................................................... 143

    Cuadro 4.5. Factores de seguridad obtenidos para el talud de 20m para la pendiente

    1,5:1... ...................................................................................................................... 143

    Cuadro 4.6. Factores de seguridad obtenidos para el talud de 20m para la pendiente

    2:1...... ...................................................................................................................... 144

    Cuadro A1. Propiedades de los suelos utilizados en las pruebas de compresión

    inconfinada... ............................................................................................................. 145

  • xii

    ÍNDICE DE FIGURAS

    Figura 1. Categorización del suelo sobre el nivel freático basado en la variación del grado de

    saturación ..................................................................................................................... 8

    Figura 2: Curvas Características Suelo-Agua típicas para 3 tipos de suelo .........................11

    Figura 3: Curvas de compactación típicas para una arcilla ...............................................16

    Figura 4: Tipo de movimientos de masas de suelo .........................................................19

    Figura 5: Superficies circulares de rotura.......................................................................20

    Figura 6: Superficie de falla de prueba ..........................................................................23

    Figura 7: Fuerzas que actúan sobre la n-ésima dovela ....................................................23

    Figura 8: Método simplificado de Bishop. Polígono de fuerzas de equilibrio ......................25

    Figura 9: Factor de corrección de Janbu para el método simplificado ...............................27

    Figura 10: Fuerzas que actúan sobre la dovela según Morgenstern-Price .........................28

    Figura 11: Zonificación Geotécnica GAM .......................................................................35

    Figura 12: Ubicación de los sitios de extracción en el mapa para los suelos 1 y 2 .............36

    Figura 13. Curva granulométrica de la muestra del suelo 1 .............................................41

    Figura 14. Curva granulométrica de la muestra del suelo 2 .............................................42

    Figura 15. Variación del porcentaje de humedad según el número de golpes para la

    muestra de suelo 1 .......................................................................................................43

    Figura 16. Variación del porcentaje de humedad según el número de golpes para la

    muestra de suelo 2 .......................................................................................................44

  • xiii

    Figura 17. Curva de compactación de la muestra de suelo 1 ...........................................46

    Figura 18. Curva de compactación de la muestra de suelo 2 ...........................................47

    Figura 19. Curva esfuerzo-deformación para la muestra de suelo 1. ................................48

    Figura 20: Círculo de Mohr para la muestra de suelo 1. ..................................................48

    Figura 21. Curvas esfuerzo máximo-deformación unitaria para el suelo 1 con e=1,0 .........53

    Figura 22. Curvas esfuerzo máximo-deformación unitaria para el suelo 1 con e=1,15 .......54

    Figura 23. Variación de la cohesión no drenada con respecto al grado de saturación para el

    suelo 1 con e=1,0. ........................................................................................................55

    Figura 24. Variación de la cohesión no drenada con respecto al grado de saturación para el

    suelo 1 con e=1,15 .......................................................................................................56

    Figura 25. Curvas esfuerzo máximo-deformación unitaria para el suelo 2 con e=1,4 .........58

    Figura 26. Curvas esfuerzo máximo-deformación unitaria para el suelo 2 con e=1,55 .......59

    Figura 27. Variación de la cohesión no drenada con respecto al grado de saturación para el

    suelo 2 con e=1,40. ......................................................................................................60

    Figura 28. Variación de la cohesión no drenada con respecto al grado de saturación para el

    suelo 2 con e=1,55 .......................................................................................................61

    Figura 29. Comparación de las curvas características suelo-agua para los dos suelos

    estudiados ...................................................................................................................62

    Figura 30. Curva característica suelo-agua del suelo 1 ...................................................64

    Figura 31. Curva característica suelo-agua del suelo 2 ...................................................64

    Figura 32. Curva de saturación en función del esfuerzo de succión para el suelo 1 ...........65

  • xiv

    Figura 33. Curva de saturación en función del esfuerzo de succión para el suelo 2 ...........66

    Figura 34. Corte típico de talud utilizado en el análisis de estabilidad para 10m, 1:1 .........68

    Figura 35. Corte típico de talud utilizado en el análisis de estabilidad para 20m, 1:1 .........68

    Figura 36. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo FIDELITAS con razón

    de vacíos e=1,0 para distintos grados de saturación ........................................................69

    Figura 37. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo FIDELITAS con razón

    de vacíos e=1,15 para distintos grados de saturación ......................................................70

    Figura 38. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo BARLOVENTO con

    razón de vacíos e=1,4 para distintos grados de saturación ...............................................70

    Figura 39. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo BARLOVENTO con

    razón de vacíos e=1,55 para distintos grados de saturación .............................................71

    Figura 40. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo RECOPE con razón de

    vacíos e=0,89 para distintos grados de saturación ...........................................................71

    Figura 41. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo RECOPE con razón de

    vacíos e=0,70 para distintos grados de saturación ...........................................................72

    Figura 42. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo TAJO CL con razón de

    vacíos e=0,58 para distintos grados de saturación ...........................................................72

    Figura 43. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo TAJO CL con razón de

    vacíos e=0,50 para distintos grados de saturación ...........................................................73

    Figura 44. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo TAJO SC con razón

    de vacíos e=0,35 para distintos grados de saturación ......................................................73

    Figura 45. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo TAJO SC con razón

    de vacíos e=0,50 para distintos grados de saturación ......................................................74

  • xv

    Figura 46. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo SANTA ANA con

    razón de vacíos e=0,70 para distintos grados de saturación .............................................74

    Figura 47. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo SANTA ANA con

    razón de vacíos e=0,80 para distintos grados de saturación .............................................75

    Figura 48. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo HOLCIM con razón de

    vacíos e=0,87 para distintos grados de saturación ...........................................................75

    Figura 49. Factores de seguridad obtenidos para la muestra del suelo HOLCIM con razón de

    vacíos e=1,10 para distintos grados de saturación ...........................................................76

    Figura 50: Gráfico de Taylor para suelo cohesivo y ángulos de talud menores a 54° .........78

    Figura 51: Gráfico de Taylor para suelos con cohesión y ángulo de fricción ......................79

    Figura 52: Corte del talud de 10m ................................................................................80

    Figura 53: Corte del talud de 20m ................................................................................81

    Figura A1: Talud de 10m con pendiente 1:1 para el suelo 1 e=1,01 .............................. 102

    Figura A2: Talud de 10m con pendiente 1:1 para el suelo 2 e=1,40 .............................. 105

    Figura A3: Talud de 10m con pendiente 1:1 para el suelo 3 e=0,89 .............................. 108

    Figura A4: Talud de 10m con pendiente 1:1 para el suelo 4 e=0,58 .............................. 111

    Figura A5: Talud de 10m con pendiente 1:1 para el suelo 5 e=0,50 .............................. 114

    Figura A6: Talud de 10m con pendiente 1:1 para el suelo 6 e=0,80 .............................. 117

    Figura A7: Talud de 10m con pendiente 1:1 para el suelo 7 e=0,87 .............................. 120

  • 1

    1 ASPECTOS GENERALES

    1.1 JUSTIFICACIÓN

    1.1.1 Problema específico

    Es común que al hablar de la mecánica de suelos se parta del supuesto del suelo saturado,

    ya que esta condición es recurrente en los países de clima templado y tiende a ser el peor

    escenario en cuanto al estado de falla, a las deformaciones y a la resistencia del suelo.

    Actualmente existen modelos mecánicos que permiten explicar la respuesta de los suelos

    saturados en cuanto a deformaciones volumétricas, resistencia al corte y a diferentes

    condiciones de carga. Sin embargo, en el caso de los suelos no saturados se cuenta con

    poca información y conocimientos sobre el tema, por lo que se hace necesario un análisis de

    las características de los diferentes tipos de suelos en esta condición.

    Los suelos expansivos, residuales y colapsables son algunos ejemplos de tipos de suelos

    denominados problemáticos y representan materiales potencialmente no saturados (Barrera

    et al, 2002). Las variaciones de humedad a los cuales se ven sometidos estos suelos,

    provocan deformaciones y cambios volumétricos en los mismos y su capacidad soportante se

    ve considerablemente afectada. De igual manera, existen casos en los cuales el suelo nunca

    se encontrará saturado ni desarrollará presiones de poro positivas, como sucede con ciertos

    taludes en los que el nivel freático se encuentra muy por debajo de la superficie. Es preciso

    entonces conocer el comportamiento geotécnico de los suelos no saturados con el propósito

    de prevenir o predecir el posible colapso o el asentamiento de un suelo.

    1.1.2 Importancia

    Debido a que gran parte de la superficie terrestre puede encontrarse por la actividad del ser

    humano o por variaciones climáticas en estado no saturado, se hace necesario crear modelos

    generales que representen el comportamiento de los suelos no saturados.

  • 2

    Costa Rica se caracteriza por un clima tropical y lluvioso, lo que provoca constantes cambios

    en el contenido de humedad de los suelos y, por ende, en su volumetría. Así mismo, el agua

    infiltrada en un talud, por ejemplo, puede cambiar considerablemente el grado de saturación

    del suelo y reducir la succión o cohesión aparente producida por el estado de no saturación.

    La condición saturada de un suelo simplifica en gran medida los cálculos y el trabajo

    experimental para el diseño de distintas obras geotécnicas. No obstante, el considerar esta

    condición puede no ser lo óptimo porque se dejan de lado factores importantes como son los

    cambios en la resistencia y el comportamiento de deformación, los cambios volumétricos y

    fenómenos de histéresis, siendo los dos últimos producidos generalmente por cambios en la

    humedad del terreno.

    Estos aspectos influyen en el cálculo de estabilidad de taludes, en los cuales la posición del

    nivel freático en algunas ocasiones se ignora, lo que puede resultar perjudicial si éste se

    encontrara ubicado profundamente, por debajo de la superficie de falla, ya que si se formara

    un frente húmedo por el agua infiltrada, dependiendo del grado de saturación, de la

    permeabilidad y de la porosidad del suelo, se podría alcanzar en pocas horas una superficie

    crítica y comprometer la estabilidad del talud (Suárez, 1998).

    Es por esto que en el presente trabajo se pretenda analizar en qué grado afecta el

    considerar los efectos de no saturación en el cálculo de estabilidad de taludes para el diseño

    y la construcción de estos proyectos. Sin embargo, no se propone demostrar que la

    resistencia del suelo es mayor a saturaciones bajas, sino cuál es la variación de la resistencia

    antes los cambios de saturación.

    1.2 OBJETIVOS

    1.2.1 Objetivos Generales

    � Examinar el efecto de la cohesión aparente en la estabilidad de taludes, mediante la

    variación de los grados de saturación en dos tipos de suelo.

    � Establecer una comparación de factores de seguridad en el cálculo de la estabilidad

    de taludes para diferentes grados de saturación en los suelos estudiados.

  • 3

    1.2.2 Objetivos Específicos

    � Estimar la Curva Característica Suelo-Agua de dos diferentes tipos de suelo para

    determinar los valores de cohesión aparente

    � Cuantificar los valores de cohesión aparente correspondientes a diferentes grados

    de saturación para cada tipo de suelo estudiado a densidades específicas a partir de

    pruebas de compresión inconfinada.

    � Comparar la estabilidad de un talud para diferentes grados de saturación utilizando

    los valores de cohesión aparente obtenidos para los suelos estudiados

    � Realizar un análisis probabilístico de los factores de seguridad utilizando el método

    de Rosenblueth.

    1.3 ALCANCES Y LIMITACIONES

    En este proyecto final de graduación se estudian dos tipos de suelo: uno plástico y uno no-

    plástico, según como los clasifica el modelo propuesto por Perera et al (2005). Las muestras

    utilizadas son moldeadas, por lo que no se presentan las condiciones reales del suelo. Sin

    embargo, esto no perjudica los resultados debido a que lo que se pretende es determinar

    cómo se ve afectado el análisis de estabilidad al considerar el grado de saturación según la

    plasticidad del material. Se dejará el estudio en casos específicos de suelo para proyectos

    futuros y para la continuidad de este tema de investigación.

    Durante las pruebas de compresión inconfinada se trata de mantener constante la razón de

    vacíos de cada una de las muestras, de manera que la única variable sea el cambio en el

    contenido de humedad. Hay que destacar que este no es el caso en la realidad, ya que al

    cambiar el grado de saturación en el campo la razón de vacíos cambia también; el suelo se

    hincha o se contrae al ganar o perder humedad. Por esto, lo investigado en este proyecto

    final de graduación no refleja exactamente el comportamiento real de los suelos, sino una

    aproximación.

  • 4

    1.4 ANTECEDENTES

    El estudio de los suelos no saturados ha sido poco común tanto en Costa Rica como en otros

    países debido al grado de complejidad de los cálculos y experimentos, en comparación con el

    caso de los suelos saturados. Un ejemplo de esto es el principio de los esfuerzos efectivos, el

    cual se basa en la teoría de suelos saturados, pero cuando se considera la no-saturación

    intervienen muchos factores que dificultan el proceso de análisis (Barrera et al, 2002).

    La suposición del cien por ciento de saturación brinda valores más conservadores y permite

    mantenerse del lado de la seguridad en lo que respecta a los efectos de fuerza cortante. Sin

    embargo, factores como la succión, los fenómenos de histéresis debidos a cambios de

    humedad y los problemas de flujo no-lineales, entre otros que se presentan en suelos no

    saturados, se toman en cuenta en nuevos estudios geotécnicos.

    En cuanto a estudios realizados que se relacionan con este proyecto final de graduación, se

    menciona lo siguiente:

    El documento titulado “Introducción a la mecánica de suelos no saturados en vías

    terrestres”, Instituto Mexicano del Transporte (IMT) 2002, explica las características de los

    suelos no saturados y los estados de esfuerzos presentes en ellos. Además incluye

    información acerca de la estabilidad de taludes y cómo la afecta el estado de no saturación.

    Sin embargo, se enfoca en la ingeniería de pavimentos, la cual no se relaciona con el énfasis

    de este trabajo.

    Roy Bogantes (2003) trata la no saturación y el efecto de succión en el suelo como un factor

    importante a tomar en cuenta en la estabilidad de taludes y expone la influencia de la

    humedad en el comportamiento mecánico de los suelos. Propone una metodología para el

    análisis de estabilidad de taludes en suelos no saturados, pero aplicado al Cerro Tapezco y

    utilizando los datos obtenidos específicos para su investigación.

    Álvaro Ulloa (2007) analiza en su tesis de Licenciatura la vulnerabilidad geotécnica de

    rellenos en carreteras de montaña en Costa Rica. Establece los tipos de taludes más

    propensos a inestabilidad y su comportamiento ante distintas condiciones geométricas.

  • 5

    El ingeniero Rafael Baltodano (2006) estudia en su disertación para el doctorado la

    afectación de los efectos de tensión y cortante para arenas no saturadas. Se referirá al

    procedimiento utilizado para crear la curva característica de los suelos y el efecto de los

    esfuerzos cortantes.

    Se utilizará el método indirecto para predecir la curva característica suelo-agua de Perera et

    al (2005) y las teorías propuestas por Fredlund (1997), Khalili (2004) y Lu (2004 y 2006)

    para referirse a los efectos del esfuerzo de succión en los suelos no saturados.

    Bajo la dirección del ingeniero Rafael Baltodano se realizaron los proyectos de graduación

    “Análisis del efecto de la cohesión aparente en la capacidad soportante de cimentaciones

    superficiales” (Carolina Gómez Méndez, 2008) y “Análisis de la cohesión aparente para el

    diseño de muros de retención” (Diana Korte Leiva, 2009) para optar al grado de Licenciatura

    en Ingeniería en Construcción en el Instituto Tecnológico de Costa Rica. Se tomarán los

    datos de los suelos utilizados en estos dos proyectos de graduación para contar con más

    información para el análisis de estabilidad de taludes.

  • 6

    2 COMPORTAMIENTO DE LOS SUELOS NO SATURADOS

    2.1 GENERALIDADES DE LOS SUELOS NO SATURADOS

    Según el Código de Cimentaciones de Costa Rica (CCCR 2009) a lo largo del territorio

    costarricense se encuentran arcillas de alta expansividad, limos de baja resistencia, limos

    colapsables, depósitos marinos, aluviales y eólicos, entre otros. Estos tipos de suelos se ven

    afectados en su mayoría por cambios volumétricos que dependen del grado de saturación.

    Las deformaciones que experimentan estos suelos pueden provocar tanto una contracción o

    el colapso de los mismos como una expansión en el terreno. Este comportamiento depende

    de la estructura del suelo, la cual incluye el esfuerzo de succión y varía según la distribución

    granulométrica y la saturación.

    El estudio de los suelos no saturados y su comportamiento ha evolucionado desde los años

    60. Antes de esta época, los estudios realizados se enfocaban en demostrar la validez del

    concepto de esfuerzos efectivos para los suelos no saturados. Seguido a esto Fredlund y

    otros autores iniciaron la tendencia de utilizar dos variables de estado de esfuerzo: la succión

    matricial y el esfuerzo neto. Más adelante se analizó el comportamiento elástico de los suelos

    sometidos a ciclos de carga y descarga y se unen los conceptos de cambio volumétrico y

    resistencia al corte.

    2.1.1 Origen

    Dentro de los tipos de suelos no saturados de origen natural se encuentran los suelos

    sedimentarios y los suelos residuales. Los residuales, por ejemplo, son producto de la

    meteorización y generalmente se encuentran en estado no saturado debido a su alta

    permeabilidad y a las condiciones climáticas en las que se encuentran, ya que son muy

    comunes en zonas de clima tropical. Los suelos sedimentarios se encuentran en zonas de

    clima árido y semi-árido, las cuales se ven sometidas a temporadas largas de sequías y

    estaciones climáticas muy marcadas.

  • 7

    Las arcillas expansivas son suelos residuales o transportados, generalmente de origen

    volcánico y su distribución geográfica es extensa en el territorio nacional (CCCR, 2009). Estos

    suelos tienden a contraerse y a sufrir asentamientos cuando disminuye su humedad.

    Respecto a los suelos colapsables, en el país se originan mayormente de materiales

    piroclásticos bajo condiciones de alta pluviosidad. La estructura de estos suelos puede fallar

    súbitamente cuando se saturan totalmente.

    2.1.2 Fases del suelo no saturado

    Fredlund y Morgenstern (1977), establecen que en una partícula de suelo no saturado se

    encuentran tres fases: sólido, líquido y gas. Según Barrera (2002) se ha propuesto la

    existencia de una cuarta fase entre el líquido y el gas que actúa independientemente, ya que

    en ésta no se presentan características correspondientes específicamente al agua o al aire.

    Se refiere a una “membrana contráctil”, la cual se equilibra al verse sometida a presiones

    externas aplicadas, al contrario del agua o el aire que más bien fluyen en esta situación.

    La estructura de las partículas sólidas es de especial importancia para el caso de los suelos

    no saturados, ya que influye en el estado de esfuerzos provocado entre las partículas

    líquidas y gaseosas presentes en el suelo. De acuerdo con Mitchell (1993), la estructura del

    suelo se puede definir como la combinación del efecto del material, composición y fuerzas

    entre partículas, (o sea el esfuerzo de succión). La aglomeración de las partículas arcillosas,

    por ejemplo, es la que forma un conjunto que definirá la respuesta del suelo ante un

    determinado caso de cargas.

    A diferencia de los suelos granulares, los suelos finos sufren cambios volumétricos al

    someterse a pruebas de secado. Estas deformaciones se deben a la alteración propia del

    aglomerado de partículas y no a un reacomodo de las mismas, como ocurre en el caso de

    arenas o gravas.

    Si el agua en las partículas contiene sales disueltas, podría estar cargada de cationes que

    provocan variaciones volumétricas y de resistencia, las cuales pueden desestabilizar el

  • 8

    terreno o estabilizarlo. A diferencia del aire, el agua contenida en las partículas de suelo es

    esencialmente incompresible, lo que afecta también los cambios de volumen.

    2.1.3 Estructura de los suelos no saturados

    La diferencia entre un suelo completamente seco y otro saturado está relacionada con la

    compresibilidad del fluido de los poros. Así, si el suelo se encuentra saturado, el agua

    contenida es esencialmente incompresible. Fredlund (1996) propone la categorización de los

    suelos según el grado de saturación conforme el suelo se aleja del nivel freático, como se

    presenta en la Figura 1.

    Figura 1. Categorización del suelo sobre el nivel freático basado en la variación del grado de

    saturación

    Fuente: Fredlund, 1996

    Según Fredlund (1996) el comportamiento de los suelos no saturados depende del estado de

    esfuerzos al que está sometido. Ante cambios en el contenido de humedad, el suelo puede

    aumentar o disminuir su volumen. Si éste aumenta al incrementar la saturación, el suelo

    tiene una naturaleza expansiva, mientras que si su volumen disminuye conforme aumenta el

    contenido de humedad, tendrá una naturaleza colapsable. La diferencia en el

  • 9

    comportamiento está asociada directamente a la distribución y orientación del conjunto de

    las partículas del suelo.

    En un suelo saturado, el estado de esfuerzos efectivos se expresa en función del esfuerzo

    normal del suelo y la presión de poro de agua, uw, ya que no hay vacíos que influyan ante

    las acciones de carga o descarga del suelo. En cambio, para el caso de los suelos no

    saturados, Bishop (1959) propone considerar el efecto de la presión de poro del aire, ua,

    también, como se expresa en la siguiente ecuación:

    [1]

    Se observa que de esta ecuación se deriva la expresión para calcular los esfuerzos efectivos

    en un suelo saturado, ya que la presión de poro de aire, ua, es igual a la presión de poro de

    agua, uw, y el segundo término en [1] se cancela.

    Según Lu y Griffith (2004), al término se le denomina succión matricial y (chi) es

    el parámetro de esfuerzo efectivo, el cual es una propiedad constitutiva del suelo que

    depende del grado de saturación, Sr. Para un suelo saturado, es igual a 1, mientras que un

    suelo seco tendrá igual a cero. Sin embargo, cuando el suelo tiene cierto grado de

    saturación, no es linealmente proporcional, ya que como Khalili et al (2004) explican, este

    parámetro está fuertemente relacionado con la estructura del suelo, por lo que no debería

    sorprender si no se encontrara una relación directa con un parámetro volumétrico tal como

    la saturación. Baltodano (2006) presenta varios métodos para la aproximación de , en el

    que uno de ellos es asumir una relación lineal de con respecto a Sr. Por lo tanto, para el

    caso de un suelo no saturado es importante considerar el efecto de la succión matricial en el

    cálculo de los esfuerzos efectivos del suelo.

    2.2 SUCCIÓN EN LOS SUELOS

    Según Baltodano (2006), la succión del suelo se puede definir como la habilidad de un suelo

    no saturado de atraer o retener agua, en términos de presión. Si no se toma en cuenta la

    succión, no se podría determinar el estado de esfuerzos real y entender la respuesta de

    deformación de los suelos no saturados.

  • 10

    Barrera (2002) indica que si se mantiene una misma relación de vacíos, la succión será

    inversamente proporcional al grado de saturación, por lo que cuanto mayor o menor sea el

    contenido de humedad, menor o mayor será la succión del suelo.

    La succión total de un suelo incluye la succión matricial, mencionada anteriormente, y la

    succión osmótica, la cual es producida por los iones disueltos en el agua del suelo. Esta

    última se define como la presión de agua pura a la que se tendría que someter una masa de

    agua idéntica en composición al agua del suelo para que se encuentre en equilibro a través

    de una membrana semipermeable.

    Varios autores han estudiado el efecto de la succión matricial y de la osmótica. Barrera

    (2002) menciona que se ha llegado a diversas conclusiones con respecto al grado de

    influencia que tiene la succión osmótica en la succión total del suelo, pero se establece que

    es suficiente considerar la succión matricial, ya que es el componente de mayor importancia

    en términos de succión del suelo. Así mismo, Charles et al (2000) afirman que en el caso de

    problemas de estabilidad de taludes, la succión osmótica normalmente no es importante y

    por lo tanto despreciable.

    Curva Característica Suelo-Agua

    Se puede relacionar el contenido de agua con la succión total por medio de la Curva

    Característica Suelo-Agua (SWCC por sus siglas en inglés). Generalmente, la succión de un

    suelo es mayor cuando el tamaño de las partículas es pequeño. Como afirman Perera et al

    (2005), la distribución del tamaño de las partículas de un suelo se relaciona directamente

    con su distribución del tamaño de los poros y, por lo tanto, mantiene una relación cercana

    con la SWCC. Además, es importante considerar el índice de plasticidad del suelo, ya que,

    según Charles et al (2000), la curva característica suelo-agua refleja la capacidad de un

    suelo determinado de almacenar agua para una succión del suelo dada.

    En la Figura 2 se puede observar la variación general de la curva característica suelo-agua

    según el tamaño de las partículas del suelo, presentada por Perera (2005).

  • 11

    Figura 2: Curvas Características Suelo-Agua típicas para 3 tipos de suelo

    Fuente: Perera et al, 2005

    De esta figura se puede observar que para un mismo grado de saturación, la succión

    matricial es mayor en los suelos más finos. También, para grados de saturación bajos la

    succión matricial en un suelo fino (arcilloso), puede alcanzar valores muy elevados, lo cual

    influye en la resistencia del terreno.

    La curva característica suelo-agua se determina mediante pruebas con equipo especializado

    para suelos no saturados, las que requieren de un largo tiempo de experimentación. Charles

    et al (2000) explican que tradicionalmente se determinan en el laboratorio utilizando un

    aparato con placa de presión en el que no se puede aplicar cualquier esfuerzo vertical o de

    confinamiento. Perera et al (2005) presentan una alternativa para determinar mediante un

    método indirecto la SWCC basándose en la distribución del tamaño de las partículas y los

    índices de plasticidad del suelo. Fredlund y Xing (1994), mencionados por Perera (2005),

    proponen un ajuste analítico, el cual utiliza para plantear las siguientes ecuaciones que

    predicen la curva característica suelo-agua.

    Primero, se define el grado de saturación, S, como:

    [2]

  • 12

    Donde C (h) es un factor de corrección en función de la succión matricial y se expresa como

    sigue:

    [3]

    Se tiene que:

    h= succión matricial en KPa

    af= parámetro función de la razón de la entrada de aire del suelo.

    bf= parámetro función de la razón de extracción del agua de un suelo, una vez que el valor

    de la entrada de aire haya sido excedido.

    cf= parámetro función del contenido de agua residual.

    hrf= parámetro función de la succión a la cual se alcanza el contenido de agua residual.

    Suelos no plásticos

    En este caso se toma en cuenta el diámetro de las partículas para los porcentajes pasando

    10, 20, 30, 60 y 90%, tomados de las curvas S granulométricas.

    [4]

    El valor de af será 1,0 si se diera el caso de que la ecuación [4] diera un valor negativo, lo

    que llevaría a resultados erróneos.

    [4.1]

    [4.2]

    [4.3]

  • 13

    Así mismo, bf se expresa a continuación.

    [5]

    [5.1]

    [5.2]

    [5.3]

    Se define cf:

    [6]

    [6.1]

    [7]

    Suelos plásticos

    En el caso de los suelos plásticos, el cálculo de los parámetros af, bf y cf es más sencillo;

    depende del índice de plasticidad y del porcentaje pasando por la malla 200, como se

    muestra a continuación.

    [8]

    [9]

    [10]

    [11]

    wPI es la multiplicación del porcentaje pasando por la malla 200 (expresado en decimales)

    por el índice de plasticidad del suelo.

  • 14

    Según Charles et al (2000), se ha determinado que las curvas características suelo-agua se

    ven influenciadas significativamente por el estado de esfuerzos de los especímenes

    compactados a un contenido de agua inicial por debajo del óptimo. Una vez que se conoce

    qué tanto se ve alterada la SWCC de un suelo, se puede predecir correctamente la

    distribución de la presión de poro de agua y la estabilidad de taludes formados por suelos no

    saturados.

    2.3 RESISTENCIA DE LOS SUELOS NO SATURADOS

    Barrera (2002) afirma que la resistencia al corte crece con el incremento de la succión que

    corresponde a un aumento en los esfuerzos efectivos. En el caso de los suelos saturados, la

    resistencia mínima del suelo corresponde a Sr=100%. Sin embargo es necesario contemplar

    la variación de la resistencia ante los distintos grados de saturación que puede presentar el

    suelo, ya que la falla se puede dar antes de alcanzar la saturación completa.

    Wu et al (1984), citados por Barrera (2002), concluyen de sus estudios que el módulo de

    corte aumenta al incrementar la succión, pero este incremento no es ilimitado, ya que si

    disminuye el contenido de humedad hasta un estado seco, la succión desaparece.

    Fredlund et al (1978) definen la ecuación de la resistencia al corte de los suelos no saturados

    como:

    [12]

    Donde:

    c’: cohesión efectiva

    : ángulo efectivo o fricción interna

    : ángulo de fricción asociado a la succión matricial

    : esfuerzo normal neto

  • 15

    Para obtener los parámetros básicos de la ecuación [12] (c’, y ), se pueden realizar

    ensayos triaxiales con succión controlada, según indica Sáenz (1991).

    Fredlund (1997) menciona que la relación de la resistencia al corte con respecto a la succión

    puede ser lineal o no lineal. En el caso de valores elevados de succión, la envolvente de

    resistencia se torna no lineal. Sin embargo, Sáenz establece que tales valores de succión

    escapan del rango usual de succiones en el campo, por lo que la envolvente puede

    considerarse lineal para aplicaciones prácticas.

    Debido a que estos parámetros son en términos del estado de esfuerzos efectivo, es

    necesario comprender el comportamiento de los suelos con respecto a la teoría de

    compactación del suelo. Ésta explica por qué se generan grandes densidades secas

    conforme se incrementa el contenido de humedad del suelo en términos de esfuerzos

    laterales totales, de presiones residuales de poro de agua y de los cambios de las presiones

    de poro durante la aplicación de cargas.

    Olson (1963) explica que el esfuerzo efectivo varía dependiendo del contenido de humedad y

    la densidad seca del suelo. En el caso de compactación a humedades menores que el

    contenido de humedad óptimo, un incremento en la humedad necesita de mayor densidad

    seca para soportar la energía de compactación. Sin embargo, para contenidos de humedad

    mayores que el óptimo, un incremento en el contenido de humedad da como resultado una

    disminución en la densidad seca, a pesar de que el suelo aún soporta la presión aplicada.

    La teoría de esfuerzo efectivo de compactación del suelo de Olson (1963) muestra que para

    suelos de grano fino, la curva de compactación muestra un doble pico, como se observa en

    la Figura 3.

  • Figura 3: Curvas de compactaci

    Fuente: Tomado de Olson (1963) y modificado por Ana María Castillo Acuña

    En el caso del lado seco de la curva de compactación (humedades menores que la óptima),

    los esfuerzos efectivos entre partículas, multiplicados por el coef

    dan como resultado la resistencia requerida del suelo para soportar la energía de

    compactación. Estos esfuerzos disminuyen debido al desarrollo de presiones de poro de agua

    y de aire positivas, lo que reduce la resistencia

    permite que estas se deslicen unas sobre otras durante la compactación, incrementando así

    la densidad seca (Olson 1963).

    x- presión total no se pudo desarrollar

    Densidad seca- pcf

    Curvas de compactación típicas para una arcilla

    Tomado de Olson (1963) y modificado por Ana María Castillo Acuña

    En el caso del lado seco de la curva de compactación (humedades menores que la óptima),

    los esfuerzos efectivos entre partículas, multiplicados por el coeficiente de fricción superficial,

    dan como resultado la resistencia requerida del suelo para soportar la energía de

    Estos esfuerzos disminuyen debido al desarrollo de presiones de poro de agua

    y de aire positivas, lo que reduce la resistencia al corte de los contactos entre las partículas y

    permite que estas se deslicen unas sobre otras durante la compactación, incrementando así

    la densidad seca (Olson 1963).

    presión total no se pudo desarrollar

    p=800psi

    p=400psi

    p=200psi

    Contenido de humedad- %

    16

    Tomado de Olson (1963) y modificado por Ana María Castillo Acuña

    En el caso del lado seco de la curva de compactación (humedades menores que la óptima),

    iciente de fricción superficial,

    dan como resultado la resistencia requerida del suelo para soportar la energía de

    Estos esfuerzos disminuyen debido al desarrollo de presiones de poro de agua

    al corte de los contactos entre las partículas y

    permite que estas se deslicen unas sobre otras durante la compactación, incrementando así

  • 17

    Conforme aumenta la saturación, el coeficiente aumenta, al igual que la presión de poro

    de agua influye de mayor manera en el esfuerzo efectivo con respecto a la compactación de

    la muestra anterior con contenido de humedad menor. La reducción de los esfuerzos

    efectivos permite que las partículas se reacomoden con mayor facilidad y el pie de presión

    puede desarrollarse solo si el suelo presenta deformaciones mayores que permiten el

    desarrollo de esfuerzos totales de mayor magnitud.

    Olson (1963) explica que en el primer pico de las curvas de compactación probablemente

    hay suficiente contenido de humedad para hidratar los cationes adsorbidos y las superficies

    de la arcilla, de manera que se forme un número limitado de meniscos, pero no entre todas

    las partículas ni en todos los puntos de contacto. Conforme se añade agua, se forman más

    meniscos entre las partículas, lo que incrementa los esfuerzos efectivos y provoca que la

    densidad seca disminuya debido a que hay menos presiones laterales y se requiere menos

    interferencia entre las partículas para soportar la carga de compactación.

  • 18

    3 ESTABILIDAD DE TALUDES

    La excavación de taludes es una solución utilizada en obras civiles por lo general cuando se

    requiere una superficie plana en una zona de pendiente, o alcanzar una profundidad

    determinada por debajo de la superficie. Se busca que se construyan con la pendiente más

    elevada que permita la resistencia del terreno y que cumpla con condiciones aceptables de

    estabilidad.

    Debido a que pueden afectar estructuras construidas en su entorno, las tolerancias de

    movimientos en los taludes son muy restrictivas, por lo que el diseño de taludes está dirigido

    a la estabilidad y al cumplimiento de los criterios de seguridad.

    Es necesario conocer los materiales que forman el talud, las posibles fallas que pueden darse

    y los factores que influyen, condicionan y desencadenan las inestabilidades. La estabilidad de

    un talud depende de su geometría, al igual que de factores geológicos, geotécnicos y de la

    presencia de agua en el suelo (González, 2004).

    La inestabilidad que un talud pueda presentar está íntimamente relacionada con la

    naturaleza del material que lo forma. La presencia de agua, la resistencia de cada tipo de

    material y sus propiedades físicas influyen en el comportamiento deformacional del talud. En

    el caso que el material que conforme el talud sea un suelo, la compactación y la distribución

    del tamaño de las partículas condicionan la circulación del agua y pueden generar zonas de

    debilidad, por lo que es importante conocer ampliamente las características del terreno.

    Según González (2004) la mayor parte de las roturas son producidas por los efectos de agua

    en el terreno, como son la generación de presiones intersticiales, arrastres y erosión de los

    materiales que forman el talud. Esto puede provocar la reducción de la resistencia al corte

    de los planos de rotura, aumento de las fuerzas que tienden al deslizamiento, aumento del

    peso del material por saturación, erosión interna y meteorización de los materiales, entre

    otros.

    Sáenz (1991) afirma que en los deslizamientos que ocurren en suelos residuales

    frecuentemente se dan aún con el nivel freático muy por debajo de la superficie de ruptura.

  • 19

    Comenta que lo más probable es que la falla del talud se deba a la pérdida de la succión del

    suelo causada por la infiltración del agua en el suelo.

    Comparado con los taludes de macizos rocosos o de materiales de relleno, los taludes

    formados por suelos tienen un comportamiento parecido al de un medio homogéneo y

    continuo. Según Barrera (2002), las superficies de rotura en este tipo de taludes se

    desarrollan en su interior, sin una dirección preexistente.

    3.1 MODOS DE FALLA

    Terzaghi y Peck (1967), citados por Abramson (1996), establecen que los deslizamientos

    pueden ocurrir prácticamente de cualquier modo posible, lenta o súbitamente, y con o sin

    provocación aparente. Este tipo de falla se debe usualmente a la pérdida de la resistencia del

    suelo (súbita o gradual), a un cambio en las condiciones geométricas del terreno o en las

    condiciones de carga.

    En la Figura 4 se ilustran los diferentes tipos de movimientos masivos de los taludes

    formados por suelos. Estos pueden ser de tipo traslacional, plano, circular, no circular o una

    combinación de estos.

    Figura 4: Tipo de movimientos de masas de suelo

    Fuente: Tomado de Abramson (1996) y modificado por Ana María Castillo

  • 20

    Los taludes en suelos fallan generalmente a favor de superficies curvas (González. 2004).

    Este tipo de falla se puede originar en tres partes del talud, generando superficies de rotura

    de talud, de pie del talud, o de rotura de base del talud, como se ilustra en la Figura 5.

    Figura 5: Superficies circulares de rotura

    Fuente: Barrera, 2002

    Como se puede observar, el tipo de falla de un talud depende de muchos factores, los cuales

    pueden condicionar o desencadenar a un tipo u otro de rotura. Las propiedades físicas, de

    resistencia y deformación de los suelos, por ejemplo, son factores que condicionan la

    estabilidad del talud.

    El agua y las condiciones hidrogeológicas del terreno son las que más influyen en la

    estabilidad de un talud. Por su efecto erosivo, el agua de un río, por ejemplo, puede socavar

    el suelo en el pie del talud, lo que disminuiría o eliminaría el soporte en la base y aumentaría

    los esfuerzos de corte sobre los materiales. Así mismo, el agua subterránea puede provocar

    cambios en la dilatancia (expansión y contracción) de los suelos, lo que afectará la

    resistencia del terreno.

    La presencia de agua genera presiones intersticiales, las cuales pueden ser negativas o

    positivas con respecto a la presión atmosférica. Las presiones negativas son las que se

    producen sobre el nivel freático del terreno, en la zona del suelo no saturado. Su potencia

    varía según el tamaño de las partículas, como se explicó en el apartado de esfuerzos de

    succión del suelo y pueden incrementar los esfuerzos efectivos.

    En el caso de los suelos cohesivos, más que las presiones intersticiales presentes es el

    contenido de humedad el que afecta la resistencia del terreno, debido a los esfuerzos de

  • 21

    succión que se dan ante diferentes grados de saturación. Esto se ve reflejado en las pruebas

    realizadas en esta investigación y será analizado más adelante.

    3.2 ANÁLISIS DE ESTABILIDAD

    Los taludes se ven expuestos a una serie de fuerzas que tienden a nivelar el terreno tales

    como las fuerzas de gravedad, filtración y presión de agua, entre otras. La resistencia del

    terreno y propiedades de los materiales tienden a oponerse a estas fuerzas, pero cuando las

    primeras predominan sobre éstas, el talud se vuelve inestable.

    En obras civiles, para determinar la seguridad de los taludes se realiza el análisis de

    estabilidad, el cual implica determinar y comparar el esfuerzo cortante desarrollado a lo largo

    de la superficie más probable de falla con la resistencia al corte del suelo. Los métodos de

    análisis de estabilidad contemplan la acción de fuerzas estabilizadoras y desestabilizadoras

    sobre el talud que determinan su comportamiento.

    Existen varios tipos de análisis de estabilidad de taludes, los cuales consideran distintos

    mecanismos de rotura y condiciones geométricas del talud, como el caso del talud infinito, el

    cual presenta un estrato homogéneo en todas direcciones y en el que la falla se da a una

    profundidad mucho mayor que la altura del talud. Así mismo, se analizan los taludes finitos

    por el tipo de superficie de falla, ya sea plana o circularmente cilíndrica. Esta última será la

    considerada en este proyecto de graduación.

    Según Das (2001), hay dos procedimientos de análisis de estabilidad para el caso de una

    superficie de falla circular: procedimiento de masa y método de las dovelas. El primero

    considera que la masa del suelo arriba de la superficie de deslizamiento es unitaria y que el

    suelo es homogéneo. El segundo divide esa masa de suelo en varias dovelas verticales

    paralelas y calcula la estabilidad de cada una de ellas, tomando en cuenta la presión del

    agua de poro, el esfuerzo normal a lo largo de la superficie de falla y la no-homogeneidad de

    los suelos.

    Los métodos de equilibrio límite establecen ecuaciones de equilibrio entre las fuerzas que

    inducen el desplazamiento y las fuerzas resistentes en el momento de la falla. La razón de

  • 22

    las fuerzas estabilizadoras entre las desestabilizadoras será el factor de seguridad del talud

    para la superficie analizada.

    En general, el factor de seguridad se puede expresar de la siguiente forma propuesta por

    González (2004):

    [13]

    Donde:

    Rc: Resultante de las fuerzas cohesivas sobre el área del plano de rotura, como la resistencia

    al esfuerzo cortante del terreno.

    RФ: Resultante de las fuerzas friccionales (entiéndase la componente del peso que se opone

    al deslizamiento y la acción de la presión del agua sobre la superficie de rotura, si se diera el

    caso).

    [14]

    S: Resultante de las fuerzas que tienden al deslizamiento, tales como la componente del

    peso que actúa en la dirección del plano de rotura, cargas exteriores estáticas y dinámicas

    que sean contrarias a la estabilidad.

    [15]

    A continuación se explicarán brevemente los métodos de dovelas utilizados en este proyecto

    final de graduación.

    3.2.1 Método ordinario de las dovelas

    En la Figura 6 se muestra el planteamiento del análisis de taludes por el método ordinario de

    las dovelas, en donde se dividió la masa de suelo sobre la superficie de deslizamiento en

    dovelas verticales. También se muestran las fuerzas que actúan sobre cada dovela en el

    diagrama de cuerpo libre de la Figura 7.

  • 23

    Figura 6: Superficie de falla de prueba

    Fuente: Adaptado de Das, 2001

    Figura 7: Fuerzas que actúan sobre la n-ésima dovela

    Fuente: Das, 2001

    De la figura anterior se define el peso específico de la dovela, Wn, al igual que las fuerzas

    normal y tangencial, Nr y Tr, respectivamente, componentes de la reacción R. Pn y Pn+1 son

    O

    bn

    n

    Wn

    C

    H

    A

    r

    r

    r

  • 24

    las fuerzas normales que actúan sobre los lados de la dovela. De la misma forma, Tn y Tn+1

    son las fuerzas tangenciales que actúan sobre los lados de la dovela. Se supone que las

    resultantes a ambos lados de la dovela coinciden en sus líneas de acción y que son iguales

    en magnitud.

    El método consiste en encontrar el factor de seguridad (FS) mínimo que corresponde a la

    superficie de rotura crítica, por lo que es un método iterativo hasta encontrar este valor. Se

    puede aplicar para taludes con varios estratos y se calcula de la siguiente forma:

    [16]

    Donde:

    cn: Cohesión del estrato en la dovela que está en contacto con la superficie de falla.

    : Ángulo de fricción del estrato en la dovela que está en contacto con la superficie de falla.

    : Es aproximadamente igual a , donde bn es el ancho de la dovela.

    : Ángulo que forma la pendiente del arco perteneciente a la sección de la dovela con

    respecto a la horizontal. Puede ser positivo o negativo. Cuando es positivo, la pendiente del

    arco está en el mismo cuadrante que el talud del terreno.

    : Presión de poro promedio en el fondo de la dovela.

    3.2.2 Método simplificado de Bishop

    Este método considera en alguna medida el efecto de las fuerzas sobre los lados de cada

    dovela. En la Figura 8 se ilustra el polígono de fuerzas de equilibrio, tomado de la Figura 7. A

    diferencia del método ordinario, las fuerzas normales y tangenciales a ambos lados de la

    dovela no son de la misma magnitud, y la resta de Pn-Pn+1 y de Tn-Tn+1 generan un diferencial

    y , respectivamente.

  • 25

    Figura 8: Método simplificado de Bishop. Polígono de fuerzas de equilibrio

    Fuente: Das, 2001

    Este método asume la fuerza cortante entre las dovelas como cero, por lo que se elimina.

    Se establece el equilibrio de momentos de las fuerzas que actúan en cada dovela con

    respecto al centro del círculo (Figura 6) y se obtienen las fuerzas normales a la superficie de

    rotura. Al hacer equilibrio de momentos, estas fuerzas se sustituyen en la ecuación

    resultante y el factor de seguridad se expresa como sigue:

    [17]

    Donde:

    [18]

    bn: ancho de la dovela n-ésima (Figura 6)

    Como se puede observar el término FS está a ambos lados de la ecuación, por lo que es

    necesario realizar iteraciones hasta encontrar su valor. De la misma forma que en el método

  • 26

    ordinario, se debe determinar la superficie crítica de falla para obtener el factor de seguridad

    mínimo.

    3.2.3 Método simplificado de Janbu

    Al igual que el método simplificado de Bishop, el método simplificado de Janbu asume que

    no hay fuerzas de cortante entre las dovelas. Se satisface el equilibrio estático de fuerzas

    horizontales, pero el equilibrio de momentos no. Sin embargo, este método considera no

    sólo la rotura sobre una superficie circular, sino sobre superficies planas y poligonales

    también.

    Del equilibrio de fuerzas se obtiene que el factor de seguridad por este método es:

    [19]

    Este valor se multiplica por un factor f0, el cual es función de la geometría de la dovela y de

    los parámetros de resistencia del suelo. En la Figura 9 se presenta la variación de este

    factor. Estas curvas fueron propuestas por Janbu para compensar la suposición de fuerzas

    cortantes nulas entre las dovelas y corregir los datos obtenidos por el método simplificado.

  • 27

    Figura 9: Factor de corrección de Janbu para el método simplificado

    Fuente: Adaptado de Abramson (1996)

    Si existen diferentes estratos presentes en el talud, se tiende a utilizar la curva para suelos

    con cohesión y ángulo de fricción distintos a cero. Por conveniencia, este factor también

    puede calcularse de acuerdo a la siguiente expresión:

    [20]

    En donde b1 varía según el tipo de suelo:

    • Suelos cohesivos (Φ=0): b1=0,69

    • Φ y c diferentes de cero: b1=0,5

    • Suelos friccionantes (c=0): b1=0,31

    3.2.4 Método de Morgenstern-Price

    A diferencia de los métodos anteriores, Morgenstern-Price cumple las condiciones de

    equilibrio estático en todas las dovelas. En la Figura 10, se muestra la condición de fuerzas

    para cada dovela.

    1,00

    1,05

    1,10

    1,15

    1,20

    0 0,1 0,2 0,3 0,4

    Factor, f0

    Razón d/L

    suelo cohesivo suelo c y suelo friccionante

    L d Superficie de falla

  • 28

    Figura 10: Fuerzas que actúan sobre la dovela según Morgenstern-Price

    Fuente: Muelas, A., (2008)

    La fuerza tangencial a cada lado de la dovela, T, se expresa de la siguiente manera:

    [21]

    Se tiene que es una constante a determinar y f(x) es una función a especificar por el

    usuario. El valor de que cumple con las condiciones de equilibrio, ilustradas en la Figura

    10, es:

    [22]

    Si E’ es la fuerza normal efectiva sobre el lado vertical de cada dovela, debe ser menor

    que tan Φ, de lo contrario, la función supuesta, f(x), es incorrecta. Según Jiménez (1981), el

    factor de seguridad no suele ser muy sensible a la forma de f(x), siempre y cuando esta

    función sea razonable.

    En este proyecto final de graduación se utiliza la versión estudiantil del programa

    GeoStudio® 2007, el cual presenta dos opciones de forma para f(x): constante o semi-

    senoidal. La forma escogida para realizar los análisis de estabilidad es esta última, ya que la

    forma constante se aleja más del comportamiento real que podría presentar la falla.

    h

    T+∆T

    E+∆E W

    H

    E

    T

    α S

    N

  • 29

    A continuación se presenta un cuadro comparativo basado en lo expuesto por Abramson

    (1996) con respecto a los distintos métodos de las dovelas mencionados anteriormente y las

    condiciones estáticas de equilibrio que satisface cada uno.

    Cuadro 1. Condiciones de equilibrio estático satisfechas por los métodos de dovelas

    Método Equilibrio de fuerzas Equilibrio de

    momentos x Y

    Ordinario No No Sí

    Bishop simplificado Sí No Sí

    Janbu simplificado Sí Sí No

    Morgenstern-Price Sí Sí Sí

    Fuente: Abramson (1996)

    3.3 ANÁLISIS PROBABILÍSTICO

    Christian et al (1994), mencionados por Abramson (2002), establecen que la incertidumbre

    de los parámetros se debe a la varianza asociada a 2 factores esenciales, a saber: la

    dispersión de los datos y errores sistemáticos. Estos últimos se ven influenciados por el

    modelo estadístico de la media y los métodos de obtención de la muestra, mientras que la

    dispersión se puede atribuir a la variabilidad espacial en el perfil del suelo y a los errores

    aleatorios de las pruebas.

    Abramson (2002) menciona que los parámetros críticos para tomar en cuenta en los análisis

    de estabilidad de taludes incluyen:

    1. Resistencia al corte (tanto la cohesión como el ángulo de fricción).

    2. Presión de agua en los poros.

    3. Peso específico de los suelos.

    4. Ubicación de la superficie de falla.

  • 30

    5. Espesor de la zona blanda y de resistencia baja.

    6. Efectos externos ambientales, así como cargas externas.

    También se recomienda que la función de distribución de probabilidad atribuida a los

    parámetros de peso específico seco y cohesión del suelo sea del tipo log-normal o normal

    estándar. Se debe también estimar la media y la desviación estándar, la cual se asocia al

    coeficiente de variación, V. Abramson (2002) presenta los rangos en los cuales se ubica

    generalmente este coeficiente, dependiendo del parámetro del suelo asociado. Estos se

    presentan en el Cuadro 2 a continuación.

    Cuadro 2. Coeficientes de variación

    Parámetro geotécnico Coeficiente de variación, V

    Peso específico 3-8%

    Ángulo de fricción 2-21%

    Cohesión 13-49%

    Cohesión asociada con pruebas de campo 10-20%

    Razón de esfuerzos, Su/σv 5-15%

    Fuente: Abramson (2002)

    3.3.1 Índice de confianza, β

    Wolff (1996), citado por Abramson (2002), define que para una función de distribución de

    los datos del tipo log-normal, el índice de confianza es:

    [23]

    Donde:

    Fc: es el factor de seguridad crítico correspondiente a condiciones insatisfactorias o 1,0 en el

    caso de falla

  • 31

    [24]

    [25]

    [26]

    [27]

    [28]

    En el caso de falla (Fc=1,0), Rosenblueth (1975) citado por Abramson (2002) explica que β

    se deriva de la ecuación [25] y se calcula de la siguiente manera:

    [29]

    Debido a que los datos que se utilizan en los análisis de estabilidad presentan cierto grado

    de incertidumbre, es necesario determinar qué tan confiable es el método utilizado para

    estimar el factor de seguridad. El índice permite estimar el grado de confianza de que las

    condiciones analizadas generen un factor de seguridad igual al valor estimado, E[F].

    Este índice también se puede utilizar para determinar la probabilidad, pF, de que el talud

    presente un rendimiento insatisfactorio. El Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados

    Unidos (1997) citados por Abramson (2002), establecieron un rango de valores de junto

    con una descripción subjetiva del nivel de riesgo del talud, lo que se presenta a continuación

    en el Cuadro 3.

  • 32

    Cuadro 3. Ejemplo de valores para y pF

    Nivel de rendimiento Índice de confianza Probabilidad pF

    Alto 5,0 2,871x10-7

    Bueno 4,0 3,169x10-5

    Arriba del promedio 3,0 0,00135

    Abajo del promedio 2,5 0,00621

    Pobre 2,0 0,02275

    Insatisfactorio 1,5 0,06681

    Peligroso 1,0 0,15866

    Fuente: Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos (1997)

    3.3.2 Método de Rosenblueth

    En este método se establece que el factor de seguridad depende de dos variables o más (en

    este caso el peso específico total y la cohesión del suelo), las cuales se asume que son

    dependientes con un factor de correlación ρxy=-0,7, el cual es propuesto por Rosenblueth si

    se cuenta con pocos datos para calcular un ρxy que refleje la actual correlación entre las

    variables de la muestra. Además se supone que la función de distribución de probabilidad es

    simétrica.

    El primer paso consta en evaluar la ecuación del factor de seguridad. Para dos variables

    existen 4 combinaciones posibles, las cuales son, según Rosenblueth (1975):

    [30.a]

    [30.b]

    [30.c]

    [30.d]

  • 33

    Para esto se debe obtener el promedio del peso específico total y de la cohesión de cada

    suelo, al igual que la desviación estándar de estas variables, las cuales serán x y y,

    respectivamente. Dependiendo de la combinación (ecuaciones 30.a - 30.d), la desviación

    estándar se le sumará o restará a la media de la variable correspondiente y seguidamente se

    calculará el factor de seguridad asociado a cada combinación.

    Una vez evaluado el factor de seguridad, Rosenblueth define que el factor de seguridad

    esperado será:

    [31]

    Donde:

    [32]

    [33]

    En donde , el primer subíndice de P indica si se suma o se resta la desviación

    estándar a la media del peso específico y el segundo subíndice de P corresponde a la suma o

    resta de a de la cohesión del suelo.

    Según este método, la varianza del factor de seguridad se expresa como:

    [34]

    [35]

    Al calcular estos valores se podrá calcular el índice de confianza mencionado en la sección

    anterior y se determina la probabilidad de que el factor de seguridad estimado sea menor

    que el factor de seguridad crítico (P (F

  • 34

    4 METODOLOGÍA

    La primera fase de este proyecto final de graduación consta en la caracterización de los

    suelos utilizados y la determinación de la resistencia al corte. También se predice la curva

    característica suelo-agua y la curva de esfuerzos de succión para las dos muestras de suelo.

    Las pruebas fueron realizadas en el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos

    Estructurales (Lanamme) cumpliendo con las normas ASTM correspondientes cuando son

    aplicables.

    Utilizando los datos obtenidos en esta investigación y los recolectados de los trabajos de

    graduación de Gómez (2008) y Korte (2009) se procede a realizar el análisis de estabilidad

    de taludes a corto plazo, en los cuales se introduce el peso específico del suelo y su cohesión

    correspondiente a cada grado de saturación obtenido.

    4.1 CARACTERIZACIÓN DE LOS SUELOS

    Se utilizaron dos tipos de suelo: uno recolectado del campus de la Universidad Fidélitas,

    ubicado en Santa Marta de Montes de Oca y el otro proveniente del condominio Barlovento,

    en Concepción de Tres Ríos. Ambos son originarios de zonas con suelos de origen volcánico,

    en las cuales abundan los suelos blandos y limos colapsables. La Figura 11 (Bogantes, 1999),

    tomada del CCCR 2009, ilustra los tipos de suelo en el Valle Central.

  • 35

    Figura 11: Zonificación Geotécnica GAM

    Fuente: (Bogantes, 1999) tomado del Código de Cimentaciones de Costa Rica (2009)

    El suelo 1 (Fidélitas) se ubica en la zona 1 y el suelo 2 (Barlovento) se ubica en la zona 7. La

    Figura 12 es una ampliación de la figura anterior y en esta se resalta la ubicación

    aproximada de los sitios de extracción de ambos suelos.

  • 36

    Figura 12: Ubicación de los sitios de extracción en el mapa para los suelos 1 y 2

    Fuente: Tomado del CCCR 2009 y modificado por Ana María Castillo Acuña

    El Cuadro 4 presenta la descripción de las zonas y los problemas asociados, según Bogantes

    (1999) citado en el Código de Cimentaciones de Costa Rica 2009.

    Cuadro 4. Descripción y problemas asociados a las zonas de extracción de los suelos 1 y 2

    Zona Descripción Problemas asociados

    1 Limos colapsables, nivel freático a menos

    de 5m en invierno

    Suelos profundos, consistencia suave,

    tipo MH, colapsable

    7 Limos colapsables, nivel freático a menos

    de 10m en invierno

    Suelos profundos, consistencia suave,

    tipo MH, colapsable

    Fuente: Bogantes (1999), tomado del CCCR 2009

    Ambos suelos se recolectaron en sacos y se dejaron secar al natural durante unos 3 días,

    para luego almacenarlos en baldes. Se realizó la prueba de granulometría siguiendo la norma

    1 2

  • 37

    ASTM D 422 y se determinó la curva granulométrica para las dos muestras de suelo. De esta

    curva se obtienen el porcentaje que pasa la malla #200, el cual es necesario para realizar la

    caracterización del suelo mediante el método SUCS.

    También se necesita conocer el límite líquido, límite plástico e índice de plasticidad de los

    suelos para caracterizarlos, por lo que se realiza la prueba de límites de Atterberg según la

    norma ASTM 4318.

    En el caso del suelo 2 (Barlovento) se presentaron dificultades a la hora de realizar esta

    prueba, debido a que su comportamiento variaba considerablemente ante cambios pequeños

    en el contenido de humedad. La prueba del límite líquido tuvo que realizarse varias veces

    hasta conseguir una curva de fluidez que presentara un comportamiento coherente. Así

    mismo, se observó que no era posible realizar la prueba del límite plástico con la norma

    ASTM debido a que no se pudo confeccionar los rollos de 3mm de diámetro sin que estos se

    agrietaran antes.

    Una vez obtenidos los límites de Atterberg, se procedió a clasificar el suelo por SUCS. Para

    determinar la humedad óptima de los suelos y su peso específico máximo, se realizó la

    prueba Próctor Estándar y se obtuvo la curva de compactación para cada una de las

    muestras.

    4.2 PRUEBAS DE COMPRESIÓN DEL SUELO

    Se realizó la prueba de compresión triaxial UU (no consolidado-no drenado) para la muestra

    del suelo 1 (Fidélitas) siguiendo lo establecido en la norma ASTM D 2850-03a, pero primero

    se aumentó el grado de saturación de la muestra para contar con un contenido de humedad

    mayor que el que se alcanzó en las pruebas de compresión inconfinada. Debido a los

    problemas de trabajabilidad del suelo 2, se decidió no realizar esta prueba.

    Al finalizar la prueba se obtuvo la resistencia máxima al corte y se graficaron los resultados

    mediante un círculo de Mohr. Este dato se utilizó junto con los de la prueba de compresión

    inconfinada para graficar la resistencia del suelo ante los diferentes grados de saturación.

  • 38

    Preparación de especímenes utilizando la subcompactación

    Para realizar la prueba de compresión inconfinada las pastillas se moldearon según el

    método de subcompactación propuesto por Ladd (1978). Este método consiste en

    determinar un número de capas por molde con una altura específica, la cual se define más

    adelante. El número de golpes por capa variará en función del grado de saturación y la razón

    de vacíos buscada.

    Se establece un porcentaje de subcompactación para la primera capa y el número de capas

    total. De esta manera, cada capa es compactada a una densidad menor a la deseada como

    resultado final, la cual se alcanzará cuando se compacte la última capa. Así, en la última

    capa el nivel de subcompactación será cero. El valor de subcompactación para las capas

    siguientes se estima mediante la siguiente ecuación:

    [36]

    Donde:

    Un: porcentaje de subcompactación para la capa n.

    Uni: porcentaje de subcompactación para la primera capa.

    Unt: porcentaje de subcompactación para la última capa.

    nt: número total de capas.

    La altura de las capas se define mediante la siguiente ecuación:

    [37]

    En la cual:

    hn: altura máxima por capa.

    ht: altura total del espécimen.

  • 39

    La prueba de compresión inconfinada se realizó siguiendo la norma ASTM D 2166 para las

    dos muestras de suelo, cambiando el contenido de humedad de las pastillas y utilizando 2

    razones de vacíos para cada tipo de suelo.

    Como último paso de esta fase se obtuvieron las curvas características suelo-agua para los

    dos suelos, siguiendo lo explicado por Perera et al (2005) en el método indirecto para

    predecir la SWCC y se construyeron las curvas de esfuerzo matricial en función del grado de

    saturación obtenido para los valores de h en las curvas características correspondientes.

    4.3 ANÁLISIS PROBABILÍSTICO DE LOS DATOS

    Una vez calculados los factores de seguridad para cada caso establecido en el análisis de

    estabilidad de taludes se procede a realizar el análisis probabilístico utilizando los resultados

    obtenidos. De esta manera, se puede determinar un rango mínimo de seguridad en

    contraste con un solo valor de factor de seguridad, considerando la variabilidad de la

    resistencia del suelo y su peso específico ante los cambios del grado de saturación.

  • 40

    5 ANÁLISIS DE RESULTADOS

    5.1 RESULTADOS DE LAS PRUEBAS

    5.1.1 Prueba de granulometría

    Se presenta