Una Tragedia Ocultada - Copia

download Una Tragedia Ocultada - Copia

of 228

Transcript of Una Tragedia Ocultada - Copia

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    1/228

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    2/228

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    3/228

    UNA

    TRAGEDIAOCULTADA

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    4/228

    UNA TRAGEDIA OCULTADAMiguel Angel CabodevillaMilagros Aguirre

    Prlogo: Massimo De Marchi

    CicameNicols Lpez y Av. de La Prensa Telf. 022257689

    Fundacin Alejandro LabakaPontevedra N24 294 y Vizcaya Telf. [email protected]

    DiseoNadia Hidalgo, Salem Diseo

    Diseo de PortadaEstudio Juan Hermoso

    ImpresinEdifepp 1Primera edicin, Cicame-FAL 2013500 ejemplaresQuito-Ecuador

    Esta publicacin se harealizado gracias al apoyodel Gobierno de Navarra

    ISBN: 978-9978-319-36-9

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    5/228

    Prlogo: Massimo De MarchiMiguel Angel Cabodevilla - Milagros Aguirre

    UNATRAGEDIAOCULTADA

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    6/228

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    7/228

    NDICEPrlogo, Massimo Di Marchi ...................................................................................................................................... 9

    La masacre qu nunca existi? , Miguel Angel Cabodevilla ................................................. 21

    Ocultados! La bitcora de unas muertes anunciadas, Milagros Aguirre ......................... 141

    Anexos ........................................................................................................................................................................................ 205

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    8/228

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    9/228

    9

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    PRLOGO

    Los trgicos acontecimientos de marzo 2013 y las acciones consiguien-tes de las instituciones pueden bien representar un caso de estudio demanual sobre conictos, polticas territoriales y culturales. El 5 marzoOmpure y Buganey, dos ancianos Waorani, miembros de un grupo deindgenas en contacto inicial, murieron lanceados por parte de un gru-po de Taromenani, indgenas en aislamiento. Antes del nal del mes, los

    familiares de los fallecidos entraban en la selva para vengar la perdidade sus seres queridos, restituyendo muerte y raptando dos nias Taro-menani. Por qu puede representar un caso de estudio? Por que la se-rie, aparentemente esquizofrnica, de acciones actuadas por parte de lasdiferentes instituciones del Estado y las tentativas de un protagonismopor parte de la sociedad civil han repetido elementos estructurales, ca-denas de secuencias, producciones de discursos tpicos de las prcticas

    operadas en territorios lejanos, como es la Amazonia.

    Agradeciendo a los autores que me han pedido hacer este prlogo, voy atratar de presentar este trabajo, que no es tanto o solamente una denun-cia, cuanto la importante reconstruccin de hechos fundamentales paraelaborar una ciencia ciudadana (advocacy science), pre-condicin paradesarrollar practicas ms adecuadas a la realidad compleja.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    10/228

    10

    Cabodevilla - Aguirre

    LOS HECHOS

    Milagros Aguirre nos ofrece la bitcora de unas muertes anunciadas.A partir de las polaridades de las deniciones con la que se habla deestos hermanos en aislamiento: ocultados, acorralados, desplazados. LaDirectrices de proteccin para los pueblos indgenas en aislamiento pre-paradas por parte de la Ocina del Alto Comisionado de las NacionesUnidas para los Derechos Humanos OACNUDH (que han recibidostambin contribuciones por parte de expertos y activistas ecuatorianos)declaran1 que en algunos pases se los conoce como, inter alia, pue-

    blos libres, no contactados, ocultos, invisibles, en aislamiento volunta-rio. A pesar de las formulaciones diferentes, todas ellas hacen referenciaal mismo concepto [] aislamiento como estrategia de supervivencia yno de voluntariedad. Milagros reconstruyendo la variedad de trminoscon los que la sociedad mayoritaria intenta describir lo que no conoce,evidencia la contradiccin del oculto (ocultado) y el drama de genteacorralada por el aumento de presiones externas, gente de ecosistemas

    que pierden su territorio y son transformados en refugiados ecolgicoscomo explico Madhav Gadgil2. Esta bitcora nos relata todas las tentati-vas de la sociedad civil ecuatoriana en el mes de marzo 2013 por evitarla cada en el barranco de la violencia.

    Ms all, el trabajo de Milagros Aguirre permite ubicarse en la fragmenta-cin y bombardeo de noticias que entre marzo y agosto 2013 han llenadolos peridicos, ofreciendo un orden a un conjunto de hechos y detalles

    que los ecuatorianos han escuchado en estos meses sin continuidad y sintener la posibilidad, a veces, de mantener el hilo del discurso. Ofrece tam-

    1 OACNUDH (2012), Directrices de proteccin para los pueblos indgenas en aislamiento y en contacto inicial de la Regin Amaznica, el GranChaco y la Regin Oriental del Paraguay, Resultado de las consultas realizadas por OACNUDH en la regin: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador,Paraguay, Per y Venezuela, OACNUDH, Ginebra. Se vean especialmente lo prrafos 8 y 9.2 Gadgil M. (1995), Prudence and profligacy: a human ecological perspective, in T.M. Swanson (ed.), The economics and ecology ofbiodiversity decline, Cambridge University Press, pp. 99-11

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    11/228

    11

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    3 De Marchi M., Natalicchio M., Ruffato M. (2010), I territori dei cittadini, il lavoro dellOLCA (Observatorio Latinoamericano de ConflictossAmbientales), CLEUP, Padova.

    bin a las personas que no han vivido la cotidianidad de la catstrofe, unanarracin que permite comprender y aprender a partir de los hechos.

    Por lo tanto, el relato reconstruye un caso tpico en Amrica Latina deaccin ciudadana que intenta poner en accin los conceptos innovado-res de constituciones y leyes y que la debilidad institucional no consiguemantener sino al puro nivel de formulacin3.

    De hecho, como una voz que grita en el desierto, la sociedad civil haintentado e intenta desarrollar una pedagoga de la paz con los Waora-rani y las comunidades cercanas a los Tagaeri-Taromenani; se trata de

    un proyecto ambicioso y difcil, pero indispensable para construir unaconvivencia posible.El trabajo de Miguel ngel Cabodevilla nos acompaa paulatinamentecon el extremismo de la realidad adentro las comunidades Waorani,con una mirada compleja y profunda, y con una peculiar atencin por ladimensin histrica que no permite olvidar las causas y las consecuen-

    cias de una masacre legalizada. El colocar los hechos en un intervalotemporal ms amplio nos permite la comprensin de los recientes he-chos, dentro la reproduccin de dinmicas territoriales ms consolida-das en la Amazonia.

    El autor empieza citando a Primo Levi, un escritor italiano que estuvo enel campo de concentracin en Auschwitz, y que pas toda su vida dan-do cuenta de lo que aconteci, con el lenguaje complejo de la realidad,intentando dar explicacin a un sistema estructural de violencias en lassociedades humanas. Cabodevilla lleva el lector, con numerosos detallesdel da a da del macabro mes de marzo 2013, a la matanza de los Taro-

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    12/228

    12

    Cabodevilla - Aguirre

    menane, con tambin la irona de la presunta y del quizs: la masacrelegalizada, que nunca existi? Y antes de la tragedia, demostrando cmola dinmica era casi previsible con una atenta y documentada lectura an-

    tropolgica de estos pueblos ocultos y des-protegidos por el Estado.

    El trabajo pone tambin en cuestin la retrica de conceptos abusadosque producen interpretaciones esquizofrnicas4. Por un lado hay unaparato de palabra-estigma como guerra entre clanes y justicia ind-gena que excluye cualquiera intervencin y deja una total responsabi-lidad a ellos. Por otro lado hay el maletero de palabras-deseos - como

    cuando se dice que los Waorani son hermanos de los Taromenane, ose habla de vecinos - que sirven para crear un clima tranquilizador yno pedir alguna intervencin porque todo ya est arreglado. El autor,por lo tanto, nos ayuda a desmiticar los estereotipos como etapas ne-cesarias para la construccin de convivencias reales.

    En este marco es interesante la reexin que Cabodevilla hace sobrela gura de Ompure, que llevaba en sus espaldas una tarea muy com-

    plicada: la de ser mediador y bisagra entre dos mundos. Pero culesmundos?, los de los Tagaeri-Taromenani y de los Waorani, o lo de loscowori y de los aislados? Cuntos deseos hemos dejado en las ma-nos de Ompure!, dejndolo solo como amortiguador Waorani de unaimposible convivencia entre cowori y aislados. No solo Ompure hasido dejado solo, sino tambin sus familiares despus su muerte: el mis-mo destino de soledad trasmitido a los waorani abandonados en la es-

    piral de la violencia.

    4 Santos M. (2000), , Ariel, Barcelona.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    13/228

    13

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    LAS TEORAS

    Las teoras necesitan de hechos por dos razones: la primera, para cons-truir mejores teoras y consiguientemente interpretar nuevos hechos. Lasegunda, porque los hechos son los nicos anticuerpos para mantenerterica una teora, porque pueden probar si una teora funciona. Elabandono de viejas teoras y la creacin de nuevas teoras es la base delcrecimiento y del desarrollo del conocimiento, elemento central de laciencia y tambin por la construccin de una ciencia ciudadana5. Las

    alternativas a las teoras son las ideologas: ellas no tienen miedo delos hechos, porque son los hechos los que tienen que conformarse a lasideologas y todo el esfuerzo es diputado para manipular hechos y no noafectar las ideologas6. La lectura de los trabajos de los dos autores so-bre el asombrarse de algunos funcionarios por la reaccin aorani hastanegar los hechos, obedece, exactamente, a cuanto est expuesto sobrelas diferencias entre teoras e ideologas, evidenciando la necesidad de

    tener un buen aparato terico para ubicarse en la realidad compleja y nodeber inventar un mundo demasiado simple (la masacre no existi...)

    Una primera reexin terica es sobre la debilidad institucional pbli-ca, que los dos autores muestran de manera gigantesca y amplicada apartir de los hechos sobre los acontecimientos de marzo 2013, y de losmeses siguientes. La debilidad institucional se expresa por una seriede elementos.

    Uno primer y ms conocido es la visible falta de una organizacin en lamaquinaria publica especcamente calibrada para manejar el asunto -esclaro que en asuntos complejos es difcilmente disponible una nica orga-

    5 Lakatos I. Feyerabend P.K. (1995), , Raffaello Cortina Editore, Milano6 Santos M. (2004), l, Convenio Andrs Bello, Bogot.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    14/228

    14

    Cabodevilla - Aguirre

    nizacin y resulta necesario articular la organizacin de las organizacio-nes-, combinada con la idea que esta falta pueda ser sanada apuntandosobre la centralidad de las personas en cargo, ms que en las instituciones

    que cada persona representa. Cuando la institucionalidad de lo pblico sequeda extremamente centrada en la persona7, se desarrolla el paradigmadel buen prncipe o del buen soberano. El buen prncipe es el quepodra actuar bien si solamente tuviese conocimiento de los problemasdel pueblo: l no puede actuar por falta de comunicacin entre los proble-mas del pueblo y lo que l puede hacer. Las responsabilidades nunca sondel prncipe, sino de los intermediarios entre pueblo y prncipe: no sirven

    organizaciones, sirve un buen prncipe e intermediarios

    eles que no es-condan las cosas al prncipe. Se trata de un problema bien difundido enmuchos contextos polticos de democracias plebiscitarias y carismticas,facilitado por la expectacularizacin de la poltica y por una cultura dela prestacin publica pensada como performance instantnea y no comocapacidades consolidadas resultantes de un aprendizaje de largo plazo8.Cuantas veces, en los hechos presentados por Aguirre y Cabodevilla, seencuentran los que podan resolver las cosas, y que no lo haban hecho

    porque no estn sucientemente informados? Sin embargo, el modelo delbuen principie se repite, generando niveles elevados de prncipes inter-mediarios que retrasan cualquier operacin y dan como resultado cons-truir una organizacin especializada en el no actuar.

    Otro sntoma de la debilidad institucional es la falta de coordinacinentre diferentes niveles de gobierno. El Ecuador est viviendo, desde

    hace 20 aos, pasando a travs de las dos reformas constitucionales de1998 y 2008, la tentativa de descentralizar responsabilidades y tareas

    7 Hopkins N.S., Mehanna S.R., El-Haggar S. (2001), , The AmericanUniversity in Cairo Press, Cairo.8 Bohman J. (1996),

    , Cambridge University Press, Cambridge.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    15/228

    15

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    desde el Estado hasta los gobiernos locales. En las prximas pginas delos artculos de Milagros Aguirre y Miguel Angel Cabodevilla invito loslectores a buscar todos los ejemplos de implicacin de los gobiernos

    locales en el asunto de los Tagaeri Taromenani (y de los Waorani).

    Sin embargo, como en otros pases de Amrica Latina la des-centrali-zacin lucha contra una cultura consolidada del centralismo basado enlas capitales. La lentitud en la maduracin de una cultura del local (mu-nicipal, provincial, regional, dependiendo de los pases) y la permanen-cia de una visin centralizadora se mezcla con la continua interrupcin

    de los procesos de des-centralizacin, que, mientras cruzan el laberintode las burocracias, encuentran nuevos proyectos estratgicos y nuevascarteras publicas producidas por las capitales. En la Amazonia este pro-blema es ms agudo considerando la preeminencia de proyectos de im-portancia nacional que quieren ser gobernados desde las capitales y queno son compatibles con la cooperacin institucional y la delegacin depoderes9. El centralismo metropolitano contina combatiendo contrala descentralizacin que, si est escrita en las normas, no est practica-

    da en el da a da institucional. Es claro que si combinamos el primerproblema (personalizacin sin instituciones) con este segundo (culturade la centralizacin en las personas) el resultado llega a ser monstruoso.Otro elemento de la debilidad institucional es la prctica recurrente delpadrn globalizado de la exibilidad del trabajo, que involucra la or-ganizacin del trabajo en la esfera pblica. El plan de medidas cautela-res, por ejemplo, (pero tambin muchas instituciones pblicas), utili-

    zan personal con contrato de pocos meses, hasta el mximo de un ao,dejando al nal de cada ao las decisiones sobre la continuacin de los

    9 UCLG (2008) Decentralization and local democracy in the world, First Global Report on Decentralization and Local Democracy, UnitedCities and Local Governments, Cits et Gouvernements Locaux Unis, Ciudades y Gobiernos Locales Unidos and World Bank, Barcelona. UCLG(2010), Local Government Finance: The Challenges of the 21st Century, Second Global Report on Decentralization and Local Democracy,United Cities and Local Governments, Cits et Gouvernements Locaux Unis, Ciudades y Gobiernos Locales Unidos, Barcelona.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    16/228

    16

    Cabodevilla - Aguirre

    contratos. Se generan elevados niveles de turn over(e incertidumbre)que mal se adaptan a manejar asuntos tan delicados como los de los Ta-gaeri-Taromenani. No se trata de una prctica solamente del Ecuador, o

    del Ministerio de Justicia, sino de un patrn generalizado que generadebilidad institucional: no hay posibilidades de consolidar conocimien-to, de cristalizar saberes, fortalecer instituciones. Sin embargo, el juegode la exibilidad o discontinuidad se acta con diferentes niveles de in-tensidad: sugiero a los lectores de comprobar en las pginas de Aguirrey Cabodevilla cmo la continuidad y discontinuidad de personal pbli-co (y no solamente) inuyen en los acontecimientos.

    La segunda cuestin terica que quiero analizar es la del territorioAmaznico, teatro fundamental de los hechos de los escritos de Aguirrey Cabodevilla. Personicacin del poder pblico, lucha del centralis-mo contra la des-centralizacin, prcticas contradictorias de disconti-nuidad y continuidad en los cargos en las organizaciones, son huellascomunes de la debilidad institucional de muchas administraciones enAmrica Latina; en la Amazonia estos problemas son agudizados por la

    particular combinacin del binomio instituciones y territorio.

    La geografa poltica de los pases Amaznicos muestra un manejo del te-rritorio donde el Estado central renuncia a una presencia capilar fundadaen la combinacin de fuerza (orden pblico) y consenso (servicios sociales e infraestructuras) para adoptar un modelo imperial que se basa eneleccin de lugares, actores y relaciones privilegiadas y discontinuas10.

    Si es verdad que con la presidencia Correa, a partir del 2007, se ha in-crementado la presencia del Estado en la Amazonia, sea con el cam-bio fuerte de la huella empresarial -desde empresas transnacionales

    10 Badie B. (1996), La fine dei territori, saggio sul disordine internazionale e sullutilit sociale del rispetto, Asterios Editore, Trieste.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    17/228

    17

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    anglo-hablantes, hasta chino-hablantes, y una mayor representacinde las empresas pblicas sea con las infraestructuras y algunos ser-

    vicios pblicos, sin embargo, con una diferente intensidad, se repite la

    lgica territorial imperial11. El Estado contina manejando porcioneslimitadas de territorios, podramos decir porciones puntuales y linea-les (carreteras, terminales terrestres, aeropuertos, hospitales, escuelas,ciudades del milenio), sin un real control espacial de tipo areal. Estecontrol de las supercies se acta todava a travs los bloques petrole-ros o los grandes proyectos de minera, delegando a las impresas tareastpicas del Estado, necesarias tanto para la visibilidad del poder como

    para la generacin del consenso. En Kawimeno, por ejemplo, comuni-dad Waorani asentada en el ro Yasun, dentro el bloque 31 (operadopor Petroamazonas), la atencin mdica semanal es brindada por unmdico de la compaa.

    El control imperial del territorio es hecho por una combinacin (prag-mtica) entre delegacin de poderes a instituciones no estatales (empre-sas, pueblos indgenas, iglesias, ONG) y manejo cognitivo, utilizando

    el aparato de la geografa imaginaria12. El control territorial imperialse hace privilegiando lugares, actores, recursos, en manera funcionalal desarrollo de un programa que para los pases amaznicos se fundaen un modelo endocolonial13 de extraccin de recursos beneciandolas grandes ciudades, penalizando las regiones amaznicas. Por un ladose abre un problema bien conocido como falta de justicia ambien-tal o territorial14: osea, las personas que viven ms cercanas a las

    11 De Blij H. (2009), The power of place, Geography destiny and Globalizations roug Landscape, Oxford University Press, New York12 Gregory D., Pred A. (eds) (2007), Violente geographies: fear, terror and political violence, Routledge, New York. Agamben G. (2005), Stateof exception, The University of Chicago Press, Chicago.13 Varese S. (1982). Lmites y Posibilidades del Desarrollo de las Etnias Indias en el Marco del Estado Nacional. En: Bonfil, G., Ibarra, M.,Varese, S., Verissimo D. y Tumiri, J. (coord.), Amrica Latina, etnodesarrollo y etnocidio. San Jos, Costa Rica: EUNED14 Reynaud A. (1984), Disuguaglianze regionali e giustizia socio-spaziale, Unicopli, Milano

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    18/228

    18

    Cabodevilla - Aguirre

    reas de extraccin de los recursos estratgicos nacionales (nor-malmente una minora) son las ms penalizadas por los pasivosambientales y las menos beneciadas por las inversiones pblicas.

    Por otro lado hay que manejar las oposiciones de las minoras para be-neciar las mayoras manejando las resistencias territoriales a travsde acciones para debilitar, sea la institucionalidad social, sea la de losgobiernos locales15.

    Todos los planes de desarrollo y ordenamiento territorial producidos

    por las provincias amaznicas, evidencian un nivel agudo de debilidadinstitucional consolidada y repetida, y agravada por los grandes pro-yectos extractivos. Creaciones de consenso, rupturas de organizacionesde la sociedad civil, criminalizacin de la oposicin, conictos entreinstancias del Gobierno central y los Gobiernos locales, son elementoscomunes en los diagnsticos institucionales que se encuentran dentrode los planes16.

    La combinacin perversa entre razones territoriales y razones institu-cionales constituye un particular ensamblaje (como dira Saskya Sas-sen17), o una particular historia dentro el espacio (como deca Elis Re-clus18), en denitiva una particular geografa, osea combinacin entrelugares e instituciones, un terreno privilegiado y no neutral, donde sedespliegan las dinmicas perversas expuestas por los dos autores.

    15 Gregory D., (2005), Geographies, publics, and politics, Progress in human geography 29, pp. 367-378.16 Gobierno Autnomo Descentralizado Provincial de Orellana (sf), Plan de Ordenamiento Territorial de la Provincia de Orellana, MacroEstrategia Territorial Concertada. Gobierno Autnomo Descentralizado Provincial de Pastaza (sf), Plan de Ordenamiento Territorial dela Provincia de Pastaza 2025, actualizacion 2012. Gobierno Autnomo Descentralizado Provincial de Morona Santiago (sf), Plan deOrdenamiento Territorial, PLANDOT-MS 2012-2030. Gobierno Autnomo Descentralizado Provincial de Zamora Chinchipe (sf), Plan deDesarrollo y Ordenamiento Territorial.17 Sassen, S. (2010), Territorio, autoridad y derechos: de los ensamblajes medievales a los ensamblajes globales, Katz, Buenos Aires, Madrid.18 Reclus E. (1905), Lhomme et la terre, Tome 5, Librairie Universelle, Paris

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    19/228

    19

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    El elemento de sntesis de este conjunto de debilidad institucional y te-rritorio es la falta de desarrollo de reales procesos de autonoma localcombinado con el privilegiar solamente lugares, relaciones y actores

    funcionales a interesen no locales. Cmo los procesos de conictosinstitucionales son articulados para debilitar posibles cooperaciones yprocesos de desarrollo local? Y qu lugar ocupan los Waorani y losTagaeri Taromenani?

    Las preguntas pueden ser muchas ms, pero ahora deseo dejar a loslectores el tiempo para aprovechar y dedicarse con la necesaria tranqui-

    lidad a la emocionante lectura de las prximas pginas y a las preguntasque necesariamente surgirn.

    El trgico caso de estudio, como lo he llamado en la primeras palabrasde este prlogo, sea la ocasin para reexionar sobre el cmo garantizarlos derechos a la autodeterminacin de pueblos que quieren seguir consu vida en la selva, abandonando denitivamente practicas esquizofr-nicas y ocultantes.

    Massimo De Marchi, Padova11 de Septiembre de 2013

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    20/228

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    21/228

    21

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    LA MASACREque nunca existi?

    Miguel ngel Cabodevilla

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    22/228

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    23/228

    23

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    La mayor parte de los fenmenos

    histricos y naturales no son simples,

    o no son simples con la simplicidad

    que quisiramos (Primo Levi)

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    24/228

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    25/228

    25

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    CONTRA EL OLVIDO

    A nales de marzo de este ao, 2013, se perpetr, en las selvas del noro-riente ecuatoriano, una gran matanza de indgenas ocultos. Consumadade una forma abusiva y cruel. Se elimin, sobre todo, a mujeres y nios.

    Funcionarios gubernamentales siguen hablando de presunta, o de quequiz pudo darse. No obstante, las pruebas del desastre, desde un inicio,no pueden ser ms contundentes.

    La sociedad ecuatoriana, por lo general, se ha mostrado poco interesaday con insucientes reacciones ante esa tragedia. Por su parte, personerosdel Gobierno o del Estado han sostenido lo que parecera una campa-

    a en torno a ella. Durante meses se ha objetado de muchas formas lamasacre causada por un grupo waorani en los lmites de las provinciasde Orellana y Pastaza. O, podra decirse, la achican y enturbian comodeseando hacerla desaparecer. Dirigentes de la organizacin waoraniNawe admitieron, desde un inicio, el linchamiento, pero fueron rebatidospor la Fiscala y el Ministerio de Justicia; advertidos, adems, con un dejede amenaza. Medios de comunicacin le dedicaron, por algunos das, al-

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    26/228

    26

    Cabodevilla - Aguirre

    gn inters a la noticia, siempre sin meterse en investigaciones minucio-sas. Hubo escasas reacciones de entidades cvicas o acadmicas. La mayormatanza ocurrida en Ecuador en decenas de aos ha pasado de puntillas

    ante la apata general. Tampoco ha trascendido al extranjero. Entre unos yotros el caso se difumin demasiado pronto, dada su gravedad.

    Cuando esto se escribe, han transcurrido ya ms de cinco meses desdela aniquilacin. An no se ha dado ninguna explicacin ocial, mni-mamente razonable, sobre la misma. Simplemente se la est haciendoparecer un mero caso policial. Sobre el que tampoco hay resultados de

    la indagacin. Se entrega su investigacin a Fiscala General y, con eso,parece haberse absuelto el asunto. Como si no tuviera que ver con elfuncionamiento, acertado o equivocado, de las instancias polticas yadministrativas gubernamentales. Adems, algunos funcionarios de laFiscala estn actuando con una desproporcin en sus funciones quesorprende. Segn ellos, nadie debe saber del caso, ni investigar, fuera deellos. Les molesta que se opine en pblico sobre el asunto; se han mos-trado retadores contra algunos que lo han hecho. Han advertido que los

    llamarn a declarar, mientras dejan tranquilos a los protagonistas delatropello. Se est poniendo ms inters en silenciar los pormenores dela matanza que en develarla? Oyendo a ciertas personas pblicas daraesa impresin. En Ecuador el poder est muy concentrado y se ejercecon determinacin. Los testigos temen manifestarse en pblico; muchoms si trabajan en empresas o entidades ociales.

    Por nuestra parte nos oponemos a reducir este desastre a un caso demera investigacin policial o jurdica. Porque se trata de un suceso quedescubre la negativa a comprender y enfrentar con determinacin lacompleja realidad en el entorno de la Zona Intangible. Reeja, de variasmaneras, la dejacin de responsabilidades de toda la sociedad ecuato-riana. Por eso, no nos referiremos solamente al actuar gubernamental,

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    27/228

    27

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    sino a las opiniones y acciones de distintos actores sociales. Pues no setrata de un problema que toca nicamente a la poltica del Gobierno na-cional, ni tampoco (aunque s en gran manera) solo a los gobiernos sec-

    cionales, sino a la sociedad ecuatoriana en su conjunto. Cuando se de-bate un tema tan bsico en Derechos Humanos, pues afecta nada menosque al exterminio de un grupo social y cultural humano, todos estamosimplicados. De manera que el poco eco de estos hechos entre nosotros,o la mezquindad y error de convertirlos solamente en un arma arroja-diza contra el Gobierno, debera ser un grave toque de atencin general.

    Lo ms doloroso de la masacre es su reincidencia. Por desgracia, no setrata de la nica desgracia de ese tipo ocurrida en la zona; ms bien elgoteo de muertes semejantes est siendo incesante en los ltimos aos.sta tragedia, como vamos a comprobar, no solo estaba advertida, sinoque resultaba casi irremediable, tal como se ha manejado la situacin.Pero hay otra circunstancia que le aade una gravedad mxima y la con-

    vierte en la mayor amenaza para el porvenir de los pocos sobrevivientesentre los pueblos ocultos dela zona. Es lo que llamamos legalizacin o,

    al menos, legitimacin de la masacre. Tiene que ver con lo anterior. Silos exterminios se suceden (la ltima gran matanza conocida haba sidoen el 2003) sin ninguna reaccin de la legalidad, el Estado o la sociedad,qu se puede esperar?

    Porque, al enmascaramiento ocial, se suma el silencio de aquellos con-siderados amigos de los indgenas. Imaginan qu hubiera sucedido si

    esta matanza la realizan gentes relacionadas con la explotacin petrole-ra, los madereros, etc.? Se hubiera armado un pandemnium nacionale internacional. En Ecuador, decenas de pequeas instituciones, Ongs,organizaciones indgenas, iglesias, etc., hubieran levantado la voz contrael atropello. De inmediato se lo calicara de genocidio. Pero es que, una

    vez ms, los agresores han sido indgenas. Nada menos que quienes se

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    28/228

    28

    Cabodevilla - Aguirre

    autoproclaman hermanos de los ocultos. Y, entonces, muchos que hu-bieran gritado, callan. Por comprensin a sus formas culturales, dicen.Preeren disimular y considerarlo asunto interno, de familia. De esos

    asuntos que se lavan en casa, sin que trasciendan.

    As, por una dejacin u otra, la impunidad de una accin con vctimasocultas y victimarios indgenas va tomando carta de naturaleza. Alu-diendo a que se trata deguerra entre clanes, de costumbres ancestrales, deuna supuestajusticia indgena, se acepta, como si fuera un derecho, quelos grupos waorani puedan tomarse la venganza que deseen sobre los

    grupos ocultos. En realidad se puede sospechar si esa conducta social,ms la aadida desidia estatal, no esconden algo mucho ms inconfe-sable que tenga que ver con un soterrado racismo. Lo cierto es que, enbuena parte gracias a ello, estas mortandades se siguen repitiendo sinque nadie resulte censurado por ellas. Crendose as una inmunidadque es aceptada, en la prctica, como una situacin corriente. As, dealguna manera, se legaliza, pues se consiente.

    Vamos a mostrarlo con la reconstruccin de los hechos principales deestos ltimos sucesos. Un recuento que nada tiene que ver con la pes-quisa policial o jurdica, en la cual no queremos entrometernos, sinomucho ms con la indagacin cultural del suceso1. Lo hacemos a basede testimonios, grabaciones, fotografas y vdeos de primera mano, ofre-cidos por algunos de los ms cercanos participantes en el drama. Tam-bin, claro est, siguiendo la informacin pblica del caso a travs de los

    medios de comunicacin, as como las citas de la documentacin ocialproducida durante estos meses.

    1 Aunque est escrito en plural, pues son muchas las personas que han querido colaborar en la preparacin del escrito, reconozco laresponsabilidad personal nica en su redaccin. Casi todas las informaciones (grabaciones/traducciones, fotos, comunicados, noticias, prensa,etc.) llegaron a mis manos mientras resida en Espaa, al hilo de los sucesos. All fui escribiendo este relato, conforme poda apoyarlo en datosseguros y de primera mano. Pero, naturalmente, el nico sentido del mismo es hacerlo pblico en Ecuador, donde estoy en este momento ydonde he residido, durante tantos aos, interesndome por la suerte de esos grupos ocultos, tan valiosos como desconocidos para casi todos.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    29/228

    29

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    En nuestro trabajo no aparecern algunos nombres particulares. La Fis-cala General se ha reservado el derecho de investigar hasta las ltimasconsecuencias sobre los participantes en la matanza. Es su derecho. Anun-

    ciaron tambin que de ninguna manera permitirn la impunidaden tornoa estos hechos2. Llevamos cinco meses esperando ver cmo realizan unacosa y otra. Entre tanto, nosotros hemos investigado, desde un punto msantropolgico y etnogrco el discurrir de los ltimos acontecimientos.

    EL ATAQUE

    La maana del martes 5 de marzo (2013) ocurri en el poblado wao deYarentaro, al borde de la Va Maxus, dentro del Bloque 16 explotadopor Repsol, un hecho extrao. A un lado de la aldea, los obreros quetrabajaban en las instalaciones de un Zoocriadero para la comunidad,en un programa Repsol/Ecuambiente, vieron de pronto surgir de la sel-

    va un grupo numeroso de hombres corpulentos, desnudos, pintados,cargando lanzas en sus hombros. Iban a paso ligero hacia la trocha querodea la comunidad, sin inmutarse por su presencia. Fue una escena

    2

    (El Comercio 17/5/2013)En el mismo peridico, el fiscal general, Galo Chiriboga, se sumaba a la peticin del Relator:

    El Relator Especial de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indgenas, James Anaya, ha mantenido un dialogo con elGobierno de Ecuador en el cual ha urgido la adopcin de las medidas necesarias para prevenir nuevos actos de violencia entre los pueblosindgenas Tagaeri-Taromenane y Waorani. Ningn crimen cometido puede quedar impune, recalc el Sr. Anaya. Exhorto a las autoridades aque procedan con la urgencia del caso y lleven a cabo una investigacin a fondo en coordinacin con el pueblo Waorani y el apoyo de peritosantroplogos. (El Comercio 17/5/2013)En el mismo peridico, el fiscal general, Galo Chiriboga, se sumaba a la peticin del Relator: es un tema que no puede quedar impune. Sealque la defensa de la vida es compartida por todas las culturas, y bajo esa premisa van a buscar una sancin en los trminos en los queantropolgicamente sea posible. Chiriboga indic que se debe aplicar justicia para que los pueblos sepan que el Estado ecuatoriano es unEstado de derecho y que esos actos de violencia contra la vida no los vamos a permitir.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    30/228

    30

    Cabodevilla - Aguirre

    sorprendente que los dej en suspenso, estaran ensayando los jvenesde la comunidad alguna esta? Lo comentaron entre s, pero decidieronseguir su trabajo.

    Entre tanto, Ompure, quiz el vecino ms connotado, haba llegado muyde maana a la aldea. A l le gustaba vivir lejos del ruido de Yarentaro,el poblado donde resida buena parte de su amplia familia, descendientede sus dos mujeres, Buganey y Ana, hermanas entre s. Ompure, a ojosde los waorani, era un anciano3 que ya no se acomodaba con las nuevasformas de vida de sus descendientes. Tena dos casas selva adentro, una

    a varias horas de la aldea, en la orilla del Dikaro, y otra a ms de un dade camino. Haba vivido mucho tiempo solo, aunque en ocasiones leacompa su hija Acawo, y tambin su hijo Tewane, ste con su mujerNemunte. ltimamente le acompaada en el monte su esposa Buganey,la mayor de las hermanas.

    Precisamente ese da, 5/3/2013, haba salido caminando de su casa, selvaadentro, hacia Yarentaro. Cargaba un buen bulto de carne de monte,

    como sola hacer con frecuencia, pues la caza abundaba mucho ms enesas profundidades selvticas, y l segua siendo, ante todo, un cazador.Le gustaba traer esa preciada carga a sus familiares, cada vez ms inte-grados en un estilo de vida dependiente de la comida afuerea. Ompurehaba sido siempre delgado ybroso, mantena un esplndido estado

    3 De l hemos hablado en otras publicaciones, Los huaorani en la historia de los pueblos del Oriente, o, ms recientemente, en Zonaintangible, peligro de muerte!, aunque en este ltimo trabajo sin citar su nombre. En esa ocasin lo habamos, junto al personal de relacionescomunitarias de Repsol, sacado hasta Quito. Su ojo sano (haba perdido el otro hace mucho, en un accidente de caza) se haba casi veladodel todo por esa turbia niebla que llamamos cataratas, de manera que estaba quedando ciego. Algo fatal y angustioso para un cazador. Laoperacin en Quito, a donde sala por primera vez, result un xito. Recordamos muchas ancdotas de esos das de recuperacin en la capital,los largos ratos de charla con l, las confidencias acerca de su vida, con varios y vvidos recuerdos de sus contactos con los pueblos ocultosde su alrededor. Ompure estaba fascinado con los aviones, veamos los grandes pjaros, sola ordenar. Fue magnfico nuestro viaje al zoo deGuayllabamba, donde l pudo observar, asombrado, aves de un tamao inimaginable, como el cndor, o incluso rerse con ganas de la simplezaincomprensible de, nosotros, los cowori, pues mantenan all una familia de monos sin cazarlos y comerlos!Alejandro Labaka le cita repetidamente en su primer contacto con su clan familiar en 1976. Vase Crnica Huaorani. Ompure forma parte de lafamilia que acoge al misionero, al estilo de un hijo. En ese sentido, Ompure sera de Alejandro.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    31/228

    31

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    de forma para sus casi setenta aos. Haba partido antes de las cincode la madrugada, sin ms vestido que su gumi en la cintura, y botas decaucho protegiendo sus pies. Buganey, tambin delgada y gil, segua

    sus pasos, mucho ms descargada. Detrs de ellos caminaba una mujeranciana, que les haba acompaado por breve espacio en su casa, car-gando tambin su parte de cacera. Se iba quedando muy rezagada, perola trocha era clara hasta el poblado y, supuestamente, no haba peligroalguno en esa travesa.

    El cazador y su esposa llegan antes de la ocho de la maana a su casa deYarentaro. De inmediato Ompure llama por radio a su hermano menor,Araba, residente en Dikaro, para decirle que tiene carne en abundancia,que venga a llevarse su parte. En efecto, poco despus llega aqul, recibesu parte y regresa de nuevo a su cercano poblado. El anciano sale en-tonces de su casa, caminando al lo de la escuela de Yarentaro, ve que elprofesor est ya en clase con los muchachos, entre los que se encuentran

    varios de sus nietos, y, sonriente, se detiene en la puerta del aula parabromear con ellos, como haca a menudo. Viene a decirles algo equi-

    valente a: muchachos, no sern vagos, aprovechen ahora que puedenaprender, los viejos no pudimos hacerlo! Sonre y sigue su camino por latrocha que bordea el poblado, seguido a breves pasos por Buganey. Porall ha de asomar la anciana que caminaba con ellos, aunque todava estrezagada. El cazador ignora la escena que, poco antes, ha asombrado alos trabajadores del Zoocriadero.

    Ompure sinti demasiado tarde a los emboscados que, de pronto, salta-ron de la espesura arrojndole sus largas lanzas de chonta. Sali del ca-mino queriendo huir hacia el ro, seguramente con la intensin de lan-zarse a l, pero no pudo avanzar ms all de unos pasos, enredado entrela hojarasca, herido ya. Cay al suelo, apoyndose en su brazo, sin llegara desplomarse del todo. Le alcanzaron nueve gruesas lanzas de chonta,de ms de tres metros de largo, maravillosamente labradas, adornadas

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    32/228

    32

    Cabodevilla - Aguirre

    con brillantes plumas multicolores. Los lanceros no se acercaron pararematarlo, como suelen acostumbrar en otras ocasiones. El ataque fueacelerado. Tres lanzas apenas se enhebraron en la piel, una de ellas le

    atravesaba supercial y lateralmente el rostro. Dos ms se clavaron entierra, a ambos lados del cuerpo, sin llegar a herirle. Los agresores, sinduda, huyeron precipitados. Ompure muri con rapidez4.

    Entretanto, Buganey qued paralizada junto a un rbol viejo, tumbado enmedio de la trocha lodosa. De inmediato cuatro lanzas le atravesaron elpecho y el vientre. La mujer cay sentada sobre el barro. Iba a seguir viva

    durante ms de una hora con las enormes lanzas prendidas de su cuerpo.

    Seguramente los atacantes, por la vegetacin cerrada y la distancia, novieron a la mujer que vena un trecho atrs. sta oy los terrorcosgritos del ataque, luego las quejas de los heridos, de modo que salihuyendo del monte, sin abandonar su carga de carne, hacia el cercanopoblado a dar la noticia. All nadie haba percibido nada. En varias delas casitas de madera las radios sonaban a esa primera hora de la ma-

    ana tan estruendosamente como acostumbran. Eran precisamente losruidos que molestaban a Ompure y que le hicieron construirse sus casasen el monte, bien lejos de esa bulla inaguantable.

    4 Era la segunda vez que Ompure sufra un grave ataque. En varias publicaciones de Cicame citadas (por ejemplo, Los huaorani en lahistoria) aparece el episodio del ataque que sufri por parte de los Tagaei, a quien l haba asaltado previamente. Pero vamos a citar esaescena, tal como la cuenta Deta en trabajo de Jack Jaramillo, del que contamos con una edicin artesanal: Historia y evolucin de losltimos guerreros del Yasun a travs de una memoria histrica, 2009.

    Algunos comentan que, ahora, uno de los viejos taromenani (que, en este caso, sera un tagaeri asimilado) lo pudo reconocer de ese tiempopasado a causa de la cicatriz visible en su vientre. Parece muy improbable, aunque no imposible.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    33/228

    33

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    TRAS EL ASALTOEn pocos minutos llega un tropel de gentes de Yarentaro hasta los lan-ceados. Hemos comprobado varios vdeos y muchas fotos de esos pri-meros instantes. Nos lo detallaron algunos de sus protagonistas. Fueronunas escenas de enorme conmocin. En los videos se oyen los sollozosde allegados, los gritos y amenazas de otros. Ompure est muerto, noas Buganey que, ya dijimos, vivira una hora ms. Durante bastantesminutos, hasta que la hemorragia interna la debilita demasiado, pudohablar y accionar con sus manos.

    Sentada en el lodo, junto al palo que cruza la trocha, Buganey trata desostener alguna de las formidables lanzas que le hieren, sobre todo unaque le atraviesa el costado, de izquierda a derecha, para que su peso nole oprima tanto.

    Hemos traducido voces de esos vdeos. En el primero, recin llegadoslos que van a ver y ayudar, Buganey dice varias veces: Crtenme la lan-

    za, crtenme la lanza!, Corten con un cuchillo esta lanza, para que puedavivir!, Agarren la lanza, sostnganla! Todava vivo, pero si sacan la lanza,voy a morir, Dame agua, pon agua en mi cabeza, Sostenga la lanzaUna pariente wao est a su lado, tambin otras mujeres, mantienen lacabeza de la herida en sus manos. Se nota una terrible angustia alrede-dor. Buganey, dice con voz ms apagada: todava vivo, pero voy a morircuando me sacan la lanza Con una pequea sierra le estn cortando

    las lanzas, para que no pesen sobre su cuerpo, para poder trasportarla alDispensario de salud cercano. Se oye la voz furiosa de uno de sus hijos,que grita: Voy a matar a todos! Voy a matar a todos los taromenani!Llora y al mismo tiempo grita. Una mujer dice: no hables as!

    Cortadas las lanzas, pusieron a Buganey en una hamaca y la llevaronhacia la ambulancia que haba acudido. Falleci en ese trayecto, en el

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    34/228

    34

    Cabodevilla - Aguirre

    mismo balde de la camioneta, no lleg a ingresar en la enfermera. Eldoctor se limit a constatar su fallecimiento. Hay un vdeo que recoge laescena del mdico examinando el cadver. Los familiares se encargaron

    luego de la dolorosa tarea de extraerlas del cuerpo. Las armas, comootras de sucesos semejantes en los ltimos aos, tienen, como adornos,objetos pertenecientes a los cowori: fundas de plstico, bra de saquillo,etc. En las fotos de su velorio se las poda ver, serradas, muy gruesas,sobre el fretro de Buganey.

    No se trata de aadir morbo a esta escena. No obstante, resulta del todo

    necesario reconocer la crueldad de esas muertes, sobre todo la de Buga-ney, demorada, padecida a la vista de todos los suyos, para comprenderlo que signic para el nimo de los waorani, parientes o allegados. Laconsternacin y el dolor de la gente se mezclaban, al mismo tiempo,con la ira por la agresin. En momentos parecidos se suele desatar entrelos waorani un furor asombroso. Sin duda los hombres sintieron unallamada, la ms honda posible, atvica, como un eco de toda su largatradicin, a vengar esas muertes! Los enemigos, en una inaudita demos-

    tracin de osada y podero, se haban atrevido a llegar hasta el propiopoblado. Sin duda esa ostentacin de pujanza les preocup y humill,incluso ms all de las muertes. De hecho, algunos hombres salieronde inmediato, armados de escopetas y alguna lanza, tras los agresores.Necesitaban comprobar la ruta de su huida, tambin que no se hubieranquedado cerca y los habitantes del poblado siguieran todava en peligro.

    Al mismo tiempo, el suceso llegaba a las ocinas locales y centrales deRepsol. El personal de la compaa fue replegado a sus campamentos,se suspendi el trco operativo. Dieron noticia a las autoridades com-petentes. stas (Ministerio de Justicia, Fiscala de Orellana y otras) in-gresaran al da siguiente en helicptero a Yarentaro5. Se toparon, claro

    5 Vase la informacin de Jaime Plaza, El Comercio, 7/3/2013

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    35/228

    35

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    est, con unas gentes terriblemente encrespadas y hostiles. Velaban loscuerpos. Haban exigido a Repsol una mquina para cavar unas tumbas;llegaron los fretros. Las lanzas del ataque pasaban de mano en mano

    aumentando el malestar. La indignacin era maniesta. Varios waoraninegaron datos o informaciones a la scala. La gente senta, con razn,que no haban sido protegidos. Por otro lado, los hombres insistan enque la respuesta a semejante ultraje ya era cosa suya. Nadie de fuera te-na que ver con lo deba suceder a continuacin. Los funcionarios salie-ron lo antes posible de all. Si creyeron que haban hecho algo til, es quepoco entienden de esas gentes y situaciones. Los hechos que ocurriran

    a continuacin lo pondran de mani

    esto.

    Era un da muy complicado para viajar por la Va Maxus. El obispo deCoca, Mons. Jess Esteban Sdaba, acompaado de dos miembros dela Fundacin Alejandro Labaka (FAL), lleg en la tarde a Yarentaro, loscuerpos ya haban sido enterrados. Fue recibido cortsmente. No en

    vano Ompure era hermano de Alejandro Labaka. Tanto l, como susesposas, u otros integrantes del clan, solan ser asiduos visitantes de la

    Misin Capuchina en Coca. Con todo, la tensin entre las gentes de Ya-rentaro y las que vinieron de Dikaro u otros enclaves cercanos era impo-nente. No faltaban gestos amenazadores. En esos momentos de dolor, alos waorani no les gusta tener visitantes, ni menos espectadores ajenos.Monseor observ cmo salan pequeos grupos de vigas armados ahacer la ronda de defensa del poblado. Por supuesto, bulla en el entornouna autntica tormenta de comentarios, desde los detalles de lo sucedi-

    do hasta los rumores ms descabellados de lo que prevean o teman departe de los taromenani.

    En una computadora de la comunidad le proyectaron al obispo vdeostomados en la agona de Buganey. Uno de los miembros de FAL grab laescena proyectada y lo que ocurra alrededor. Como era de esperar, enlos comentaristas espontneos, se oan voces que reejaban las discusio-

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    36/228

    36

    Cabodevilla - Aguirre

    nes que un hecho tan dramtico estaba desencadenando en el grupo. Seoye una voz femenina: Ompure ya les haba avisado, un sahno mordi aBuganey6. l ya saba, pero ustedes no hicieron nada. Haca dos das que

    los taromenani haban dejado una seal; doblaron la planta del pltano ypusieron all una lanza. Los hijos de Ompure lo vieron, tambin la lanzarota. Ellos ya avisaron. Ompure lo advirti y ustedes no hicieron nada.Suena la voz de Ana, la mujer viva de Ompure: cogimos la lanza, traji-mos tres lanzas.

    Son voces de indignacin, agresividad. No obstante, tambin ofrecen

    datos para tratar de entender este sorprendente ataque. Ompure solapasar mucho tiempo en sus casas del monte, a cuarenta minutos de ca-noa a motor surcando el amengono, un auente del Dicaro (Yasun)que corre cerca del poblado. Si hubieran querido matarlo, no sera mu-cho ms sencillo haberlo hecho cuando estaba solo all?, haba ocu-rrido algo en los ltimos tiempos que desatara la ira de los taromenanide manera que se arriesgaran a buscarlo en sitio tan lejano a su casa?,o sera que iban en busca de otro y estos dos ancianos, fatalmente, se

    atravesaron en su camino?

    Lo mismo que ocurra dentro de la comunidad, la noticia gener unaserie de interpretaciones en el mundo externo. Desde la interpretacinque citamos en nota, donde una misionera evanglica describe la te-rrible escena, a lo divino, haciendo un ejercicio imaginativo increble,que podra ser ms de intoxicacin que de interpretacin7, hasta otras

    6 No es fcil entender bien esas palabras. Probablemente tienen que ver con las interpretaciones que, en momentos as, suelen hacer loswaorani (por lo general, todos los indgenas amaznicos) refirindolas a significados o seales, tanto realistas como mgicas. Lo cierto esque Buganey haba sido mordida en la mano, unos das antes, por un sahno, los doctores de Repsol le estaban curando.7 La cita es larga, pero resulta valiosa para comprobar un tipo de misin que ahora mismo tiene gran influencia en comunidades waorani de lafrontera con esos grupos ocultos. Se trata de una pgina de la misionera Katie Williams que suelen colgar en su pgina web, Las aventuras delos Williams. stos, un matrimonio norteamericano que visita regularmente la comunidad de oeno y otras waorani. La carta est en ingls y latraduccin es nuestra. El lector opinar sobre la honradez y tica de comentarios semejantes.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    37/228

    37

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    utilizaciones de la circunstancia no menos sorprendentes por parte derepresentantes de organizaciones ecuatorianas8 donde se siguen mane-jando los tpicos ms manidos, inoperantes y peligrosos. Esa rusoniana

    e insulsa imagen del buen salvaje que poco tiene que ver con lo quesucede ah adentro.

    EL EXTERMINIO QUE NO CESA

    Hemos colocado arriba la cita de Primo Levi con premeditacin. Estoshechos ahora acaecidos tampoco son simples. La sombra del exterminiode grupos ocultos en esta zona oriental, en la parte alta del Napo y Cu-raray, es muy alargada. Viene de atrs. Lo ocurrido en marzo del 2013,no va a entenderse bien si no se mira con perspectiva histrica. La Fun-

    Gracias por vuestras continuas oraciones y preguntas mientras caminamos junto a varios Waodani seguidores de Cristo tras las consecuenciasdel reciente alanceamiento realizado por los Tagaedi y/o los Tadomenani.Segn informes recientes, los hijos de la pareja de Waodanis asesinados recibirn cada uno como compensacin una casa construida en sucomunidad, y una pequea suma de dinero que les entrega el Gobierno de Ecuador para tranquilizar a los miembros ms cercanos de la familia,tras la muerte a lanzazos de parte de los Tagaedi y/o Tadomenani.

    Esperamos que esto llevar a los hijos de los asesinados a no tomarse la venganza de la muerte de sus ancianos padres por su cuenta, muertesucedida la maana del pasado martes, mientras caminaban cerca de su aldea de Yarentano.Mientras las muertes de Ompore y su esposa Bogueney han sacado a los Waodani, una vez ms, al plano poltico, me estoy acordandode hechos muy parecidos en la mayora de las grandes ciudades del mundo, donde se les denomina guerra de pandillas. Los Tagaedi y losTadomenani se han mantenido como un grupo de personas apenas contactado, a pesar de estar rodeados por aldeas o grupos de Waodani(parientes un poco lejanos), y por las compaas petroleras que van invadiendo el territorio para extraer el crudo. Estas muertes a lanzazospudiera ser su forma de responder al avance en su territorio de los generadores y de los cascos. Pudieron ocurrir muchas cosas dentro deeste grupo, y esta muerte fue una de las maneras de vengarse de todo ello. Probablemente nunca sabremos la verdadera razn de estealanceamiento. Lo que s sabemos es que esa muerte es una oportunidad para hablar del ms all a estos pueblos abandonados.Hablando con una amiga que vivi de cerca con la gente de Yarentaro los momentos y los das que siguieron a la matanza, sus relatos recogenmomentos importantes para ella y para la familia de Bogueney. Durante unas dos horas despus de ser alanceada, mientras su cuerpo sedebata entre la vida y la muerte, Bogueney llam a sus hijos para que estuvieran junto a ella. Sus hijos, despus de cortarle las largas lanzas quesalan de su cuerpo para aliviarle el peso y el dolor, escucharon el mensaje que con toda gravedad dirigi a cada uno de ellos. Les mand que secalmaran, que no fueran a tomarse la venganza por su cuenta como era tradicional en los Waodani. Les dijo a todos que ella no iba a ir a dondesu esposo acababa de ir; que ella iba a ir con Jess. Y con fuertes palabras les habl del inminente retorno de Jess y de la necesidad de estarpreparados para verle pronto. Jess viene! Y les pidi que no respondieran con odio ni con lanzas, sino que trataran de vivir. Seguid la sendade la vida con Dios y pronto estaremos juntos de nuevo. Les habl de que haba odo las voces de Toae y de otros que le llamaban a seguirles(Toae fue el primer mrtir Waodani). Los hijos le dijeron que ni Toae ni otros cristianos Waodani estaban en la tienda con ellos, sino que eranalucinaciones suyas. Pero Bogueney insisti en que se iba con ellos hacia Jess. Sus ltimas palabras expresaron su deseo de que sus hijos,sus nietos y las futuras generaciones hicieran caso del aviso que les daba. Estad preparados para la eternidad! Esta vida pasa pronto.8 Otras opiniones sugieron de inmediato afirmando, sin recato y sin ninguna prueba, que la mujer dijo cosas diferentes: les habran atacado porel ruido de los pozos petroleros, etc. Eduardo Pichilingue, coordinador del Observatorio de Derechos Colectivos del Ecuador, declar que no esque los indgenas aislados sean asesinos. Estos ataques son una cuestin de guerra por la necesidad del recurso espacio y de alimentos. No esun simple acto de que quieran matar. El Comercio, 7/3/2013. Declaraciones que, o no dicen nada, o suponen un abuso porque le hacen afirmaralgo muy diferente a lo que dijo.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    38/228

    38

    Cabodevilla - Aguirre

    dacin Alejandro Labaka y Cicame se vienen ocupando de esta penosay prolongada hecatombe desde hace decenas de aos. Si alguien quiere,de verdad, seguir el rastro de esta ltima tragedia, esto es, tener el con-

    texto preciso para entenderla a fondo, sera oportuno que lea alguno desus variados estudios9. Alguno de ellos fueron citados arriba.

    Repasando esos ttulos el lector podr comprobar hasta qu punto acer-tamos o no en nuestros anlisis e incluso predicciones. Quisiera citaraqu tan solo unas frases de un trabajo anterior: Otra historia de violen-cia y desorden, escrito tras la muerte a lanzazos de una seora colona y

    dos de sus hijos, el ao 2009. Creo que sobra insistir en que todo lo queha sucedido ya estaba ms que pronosticado.

    quienes estn ah, no son unos indgenas que quieren vivir en paz con susvecinos cowori, como quieren hacernos creer algunos desatinados funciona-rios, sino guerreros impelidos, tanto por sus creencias como por su tradicin,a matarlos. De manera que mantener a la gente en su cercana es obligarlosa participar en una fatal ruleta rusa. Habr intentos que no causen bajas,

    pero, fatalmente, los cadveres reaparecern.Ustedes, lectores, creen que los cercanos estarn esperando, pacientemente,ver a quin le tocar ser la nueva vctima propiciatoria? Eso parecen pensarlos que hacen muy poco para evitar estas muertes. Pero nosotros opinamosque, probablemente, episodios como este ltimo se renueven o, todava msprobable, que algunos de los vecinos maten a los taromenani (p 93-94).

    9 Citaremos, comenzando por los ms recientes: Noticias histricas y territorio. La nacin waorani, 2010; La selva de papel, 2010;Otra historia de violencia y desorden, Lanzas y muerte en Los Reyes, 2009; Zona Intangible, Peligro de muerte!, 2008; A quin leimportan esas vidas! Un reportaje sobre la tala ilegal en el Parque Nacional Yasun, 2007; Pueblos no contactados ante el reto delos derechos Humanos, 2005; El exterminio de los pueblos ocultos, 2004; etc.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    39/228

    39

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    Eso se escribi hace cuatro aos. La fatal profeca se ha cumplido puntopor punto. As en las muertes, como en la simpleza de algunos que in-tervinieron entonces como funcionarios y aparentan no haber aprendi-

    do nada de tantas vctimas.

    Lo vamos a mostrar, una vez ms, a continuacin.

    EL CONTEXTO HISTRICO CERCANO

    Como esto lo hemos estudiado al por menor en otros trabajos10, bastarhacer ahora un resumen mnimo.

    No hay duda de que la amenaza principal y ms agresiva para la vidade los grupos ocultos amaznicos result ser el hallazgo de petrleo ysu posterior explotacin por parte del Estado ecuatoriano. Eso resultaobvio. La decisin ecuatoriana de explotar esas selvas, desde nales de

    los aos 60 del siglo XX11, sin tener para nada en cuenta a sus propieta-rios autctonos, modic sustancialmente su vida y los puso en trancede ser exterminados. Tal situacin sigue hasta hoy con aquellos gruposan no asimilados.

    La explotacin petrolera, tal como se realiz a partir del nal de los 60en el entorno de la mal llamada Va Auca fue, adems, promotora de otra

    injusticia asimismo amparada desde las polticas nacionales: la invasin yapropiacin de esos espacios por parte de colonos u otros indgenas.

    10 Sobre todo en los dos libros de historia waorani: Los huaorani en la historia de los pueblos del Oriente (1994) y Noticias histricas yterritorio, La nacin waorani (2010).11 Pero en trabajos como Los huaorani en la historia de los pueblos del Oriente ya mostramos, con profusin de datos, que en lasexploraciones petroleras anteriores a esas fechas, como las de la Shell en los aos 40 del pasado siglo, los choques mortales con partidaswaorani y seguramente de grupos que ahora llamamos taromenani se haban cobrado muchas vidas. Vase tambin el trabajo reciente, convariados episodios violentos, ya citado: Noticias histricas y territorio. La nacin waorani.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    40/228

    40

    Cabodevilla - Aguirre

    Si a todo eso le sumamos la debilidad y casi inexistencia de institucio-nes estatales de control social (autoridades locales, policas, jueces, etc.)en la zona, al menos hasta hace muy poco y todava en la actualidad,

    podremos comprender cmo esta regin ha sido, y lo sigue siendo talcomo mostraremos a continuacin, frontera sin ley, o con muy poca. Ental situacin, la vida de los ms dbiles, en este caso los pequeos gruposocultos, pende de un hilo. Que muchas veces se rompe.

    Sucesivos gobiernos ecuatorianos intentaron alguna medida paliativaante semejante expolio, quiz las ms importantes han sido: la creacin

    del Parque Nacional Yasun, la concesin de un territorio a los waorani, lacreacin de la Zona Intangible, la puesta en marcha del Plan de MedidasCautelares. Como es obvio, todo ello no resuelve el problema de fondo: losgrupos ocultos se quedaron sin su amplio espacio vital tradicional y, ni hanpodido comprenderlo, ni hasta hoy se resignan a cederlo denitivamente.

    De manera que tenemos este panorama: esos grupos ocultos, recolec-tores y escasamente agrcolas, que durante siglos han tenido a su dis-

    posicin una selva inmensa, se ven ahora constreidos en una mnimaparte de lo que consideraban su territorio propio. Porque, lo que se hade comprender es que, el lugar donde viven, en realidad, no es una selva,un simple lugar de recoleccin, sino su morada en el profundo signi-cado de la palabra: bosque cultivado y cultural, lugar de sus tradiciones,tumba de sus parientes Su mundo, en una palabra que tiene para elloshondas resonancias. Que ahora ha sido saqueado y reducido, sin que

    ellos puedan entenderlo.

    Esa zona roja, que algunos ilusos o cnicos llaman intangible, sigue to-dava permeada por toda clase de intromisiones ilcitas: madereros, ca-zadores colonos o indgenas, buscadores de emociones fuertes Un sinn de intromisiones peligrosas. Ms otras legales, como las de sus ve-

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    41/228

    41

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    cinos waorani que les rodean, cuyos dirigentes, con frecuencia, suelenllamar hermanos a los taromenani. Peligrossimos hermanos, hay quedecir. La mayor parte de las muertes conocidas en este siglo entre los

    grupos ocultos las han causado estos inciertos parientes. Por ejemplo,esta ltima escabechina. O la anterior, tambin terrible, del 2003.

    Por consiguiente, los grupos ocultos no pueden estar contentos dondeestn, porque les hemos arrojado como al patio o vertedero de su anti-gua gran casa. A ms de eso, estn rodeados de violencia, pues muchosde sus vecinos son ilegales e inescrupulosos. Y ellos son guerreros. Son

    orgullosos, recuerdan sus derechos, sus posesiones antiguas y sus que-ridas tradiciones.

    En resumen: el Estado ecuatoriano, a lo largo de aos, por incompeten-cias, inacciones, o acaso expresamente, ha creado ah una zona explo-siva, llena de minas antipersonales. Que van cobrando vidas sin pausa.Pero que, sobre todo, les explotan a los propios grupos ocultos. Es decir,los hemos connado al patio trasero de su antigua gran propiedad y ah

    los estn aniquilando ante la impasible mirada de quien les despoj decasi todo. Ecuador entero vive del petrleo de sus tierras, como no cesade asegurarlo el actual Presidente de la nacin, pero en decenas de aosno ha encontrado un mtodo ecaz para salvarles siquiera la vida.

    La inecacia estatal y gubernamental se ha puesto de nuevo de mani-esto. Ahora, cinco meses despus de la ltima tragedia se sigue, displi-

    centemente, motejndola de presunta. Ms de cien das y no ha habi-do cmo encontrar la manera de despejar la incgnita! Saben el puntoexacto donde ocurri, pero decidieron no bajar all. O, si lo hicieronluego, nada dicen. Hay testigos participantes (tanto entre los ejecutores,como en las nias raptadas) al alcance de cualquier averiguacin, perono se dan resultados. Por qu?

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    42/228

    42

    Cabodevilla - Aguirre

    Siguiendo el rumbo de nuestro relato, quiz tengamos ocasin de averi-guar la razn de ese misterioso silencio.

    TRAGEDIAS PENLTIMAS Y DEJACIN DEL ESTADO

    Lo primero que hay que reiterar es que esta masacre se ha dado en lamisma rea donde se produjeron mltiples lanceamientos y venganzasen lo que llevamos de siglo. Han muerto varias decenas de personas en

    un escaso territorio. Por tanto, hablar nuevamente de sorpresa es unamanera de enmascarar la incompetencia o, peor, la dejacin de respon-sabilidades. Insistimos tambin en esa mirada con perspectiva objetiva:no es responsabilidad nica de este Gobierno actual, aunque le toque suparte; la cosa viene de lejos.

    El 22 de abril de este ao 2013, la Ministra de Justicia enva un infor-me12 al Dr. Emilio lvarez Icaza, Secretario ejecutivo de la ComisinInteramericana de Derechos Humanos (CIDH). Se trata de un informedetallado de las actividades que el Estado ecuatoriano ha venido desarro-llando en virtud de la medida cautelar a favor de los pueblos indgenas enaislamiento voluntario Tagaeri y Taromenane, otorgada el 26 de mayo de2006(Id). A su vez representa la contestacin a la solicitud de informa-cin que la CIDH ha presentado al Gobierno ecuatoriano en relacin ala situacin de Pueblos Indgenas Tagaeri-Taromenani13. La CIDH peda

    informacin adicional y actualizada sobre la situacin de los beneciarios(Id). Por tanto, este documento gubernativo es la sistematizacin de suejecutoria ms reciente.

    12 INFORME DE ACTIVIDADES REALIZADAS POR EL ESTADO ECUATORIANO EN VIRTUD DE LA MEDIDA CAUTELAR A FAVOR DELOS PUEBLOS INDIGENAS EN AISLAMIENTO VOLUNTARIO TAGAERI Y TAROMENANE, Quito, D.M., 22 de abril de 2013. Lo citaremos enadelante como Inf-abril 2013.13 REF: Pueblos Indgenas Tagaeri-Taromenani. MC-91-06. Ecuador

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    43/228

    43

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    Existen en l algunos pasajes de mucho inters para nuestro propsito.Como los funcionarios suelen escudarse en la magnitud de la tarea (escomplicado controlar todo el extenso territorio del PY y la ZI), vamos a

    mostrar, con sus propias palabras, cmo estaban informados de la situa-cin muy particular de una zona peligrosa. Por lo cual, resulta an msincomprensible su falta de previsin antes de la tragedia. Hacemos unalarga cita en nota y lo resumimos aqu14. El Informe gubernamental ha-bla de tres grupos ocultos, dos de ellos tal vez fusionados en la cercanasde Armadillo y la zona de Hormiguero; recuerdan dos ataques mortalesen el sector (2008 y 2009), por parte de los ocultos, y, segn la cita, reco-

    nocen: Con todos estos antecedentes, es responsabilidad del Estado redu-cir al mnimo estas probabilidades, y prevenir otras casualidades fatales oataques violentos que podran darse all por la injerencia de estos agentesexternos. Pues bien, resulta evidente que la responsabilidad del Estadono ha sido efectiva pues, como mostraremos, ha sido precisamente enesa misma zona, que segn ellos estaba bien estudiada y prevenida, don-de se ha ejecutado la matanza. Adems, el Informe del Gobierno omita,tal vez por brevedad, otros detalles decisivos, sin duda bien conocidos

    por ellos, que ahora han resultado cruciales.

    14 En el Parque Nacional Yasun existen sectores donde se ha determinado lugares de mayor actividad de PIAs, como en el sector Nor-Occidental del PNY (desde Armadillo / los Alpes hasta El Trebol) donde se asienta el grupo denominado Armadillo, en el sector del Rio Nashino(grupo Nashino), en el rea entre los Ros Cuchiyacu y Mancaro (grupo Taro-Mencaro, posiblemente fusionado con el grupo Armadillo), y en lazona establecida entre Cononaco y Curaray (grupo Cononaco). Con esta base geogrfica, el rea de mayor susceptibilidad es la que est entreArmadillo y la zona de Hormiguero (ltimo tramo de la va al Pindo), pues en estos lugares se ha reportado seales de presencia de pueblosen aislamiento, y porque all existen asentamientos campesinos, Waorani, Kichwa, y Shuar, todos quienes estn expuestos a los efectos de lapresencia petrolera, y quienes adems dependen de actividades econmicas como la extraccin de madera, la produccin agropecuaria, laprestacin de servicios, y otras que son facilitadas por la presencia de vas de comunicacin y ros que permiten el acceso.As est representa un rea de altsima vulnerabilidad para los PIAs y para todos los habitantes campesinos de la zona, as como una zonade posible contacto fortuito o forzado, entre agentes externos, y Tagaeri o Taromenane, lo que podra desencadenarse en eventos violentos,como lo acontecido en agosto del 2009 en la comunidad de los Reyes, o como en el ataque fatal a E. Castellanos cerca al Armadillo en marzode 2008. Con todos estos antecedentes, es responsabilidad del Estado reducir al mnimo estas probabilidades, y prevenir otras casualidadesfatales o ataques violentos que podran darse all por la injerencia de estos agentes externos.En definitiva, se han tornado en cuenta todos los factores y aspectos disponibles, y se ha incluido toda la informacin generada durante estosltimos aos en relacin al tema, por lo que es posible afirmar que estos criterios se han construido con todos los elementos de juicio y toda lainformacin requerida para soportar los argumentos tcnicos que se plasman en este documento. Inf-abril 2013.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    44/228

    Cabodevilla - Aguirre

    En marzo del 2008 (tal como citan) muri lanceado cerca de Armadilloun maderero colono, Luis Castellanos, que trabajaba en colaboracin conWane Cawiya, el wao jefe de oeno. Cumpla, pues, una tarea ilegal bajo

    la supervisin de un wao que se beneciaba de la extraccin maderera.Wane, como era de conocimiento general en la zona, llevaba en ese ne-gocio varios aos. Con esta muerte se molest tanto que se uni a varioswaorani ms y se fue en busca de los taromenani. En una entrevista de

    junio de este ao15, su hija Alicia, nos ha vuelto a conrmar lo que es algosabido por todos en el sector: Wane y los suyos llegaron hasta una casa ta-romenani y, a cierta distancia entre los dos bandos, mantuvieron un inter-

    cambio de palabras tan tenso y dramtico que uno de los acompaantesde Wane cay al suelo, paralizado por el pnico16. No tenemos constanciade que en ese encontronazo se produjeran muertes, pero Alicia enfatizaun dato de importancia: uno de los acompaantes de su pap, que conocael terreno, es quien ha acompaado (tal vez guiado) a las gentes de Yaren-taro y Dikaro para su venganza de nales de marzo de este ao 201317. Losfuncionarios conocan muy bien a Wane, supieron de su entrada violenta,tambin de sus acompaantes; por tanto, aunque siguieran hablando de

    PIAv, saban que ese grupo, no solo haba sido contactado, sino que estabaexactamente localizado por los waorani.

    15 Fueron con mi pap: CI, CT, O, P. Mi pap dice que ese da quera ir a matar. Castellanos (la familia de Castellanos) haba dicho a mi papque vaya a matar. Yo s le habl duro a mi pap, le dije, acaso es familia tuya Castellanos para que vayas a matar a nadie? Pero mi pap fue. lhaba ido desnudo. Les pregunt por qu mataron al hombre (cowori/Castellanos) y ellos dijeron que ese hombre con la motosierra hizo que seasusten las aves que estaban en el saladero. Le dijeron que no mande para all gente que moleste, que molesta el ruido, se van los animales.Ah le dijeron a mi pap que es cowori y l dijo que no. Le dijeron: no robes ni la hamaca, ni lanza, si eres waorani te vas a tu casa. Mi pap noentr y se regres. Al nio haba cogido pero le solt. El taromenani, al verlo primero desnudo, pens que era familia. Dicen que haba fiesta,y que cantaban fuerte, llamando, golpeaban el palo a que vayan los dems. Pero los otros tenan botas, botas amarillas. Son cowori, habandicho. Luego corrieron. Dice mi pap que donde ellos hay bastante morete cerca, que es como una isla. Por eso (ahora) mi papa est nervioso.Mi pap cree que van a ir a matarle. [Omitimos los nombres de los acompaantes] Grabacin a Alicia Cawiya, Coca, junio 2013.16 Puede verse un relato de esta secuencia, tomado de boca de Wane, el protagonista, con algunas deferencias propias de los relatos oralesen Taromenani warani nani, Pueblos indgenas en aislamiento voluntario. Tagaeri-Taromenani en la Amazonia ecuatoriana, deJos Proao Garca y Paola Colleoni, Abya Yala, 2008. El relato est a partir de la pgina 71. En adelante lo citaremos como Proao-Colleoni,2008.17 Vase la referencia a la entrada de Wane en el: Informe ejecutivo sobre ataque con lanzas en la comunidad de Los Reyes, Ministerio delAmbiente, 19 de agosto 2009.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    45/228

    45

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    Poco despus de un ao tras el ataque al maderero, los ocultos de la zonalancearon ms al norte, en la precooperativa Los Reyes, en agosto de200918. Por ese tiempo, el Ministerio de Ambiente era el encargado de

    la aplicacin del PMC y estaba empeado en una meticulosa operacinarea sobre los taromenani, fotograando sus casas y chacras. Tengamosen cuenta ese dato de los vuelos que se repite machaconamente en losltimos ataques . En el asalto de Los Reyes murieron una seora y dosde sus hijos; otro hijo, de pocos meses de edad, fue secuestrado y aban-donado, muy cerca, en la selva. El nio fue encontrado despus y viveen la actualidad. Como mostramos en nuestro estudio Otra historia de

    violencia y desorden, la actuacin de los funcionarios gubernamenta-les no estuvo a la altura requerida. Era evidente que aquellos vecinosno estaban informados de la peligrosa cercana taromenani. La confu-sin entre los campesinos de la zona fue pattica. La mayora negaban laexistencia de los indgenas ocultos y, pblicamente, acusaban del ataquea waorani cercanos con quienes mantenan una vecindad espinosa, o in-cluso a petroleros disfrazados. Era evidente que los funcionarios guber-namentales no haban cumplido con ellos la ms mnima informacin o

    prevencin; tambin qued patente la falta de procedimientos previstosante un incidente de esa magnitud. Salieron de paso diciendo que no sepoda prever el ataque. Luego elaboraron un Plan irreal, que entr a for-mar parte de la ingente selva de papel en que se pierden esas iniciativasdesatinadas y que, como es evidente, tampoco ha servido para prevenirestos casos de ahora20.

    18 Id.19 En el extenso documento: Comunicado sobre el contacto violento con los Tagairi-Taromenani del 10 de agosto 2009, firmado porNancamo Eromenga, Presidente de Onwo y Penti Bahihua, Coordinador de OGKH hay un prrafo expreso sobre el punto: (No) sigan haciendosobrevuelos, cosa que las comunidades (contatados) de la Zona Intangible, Ome Gompote Kiwigimoni Huaorani, hemos reclamado cuntasveces, porque sabemos de nuestra historia waorani que los sobrevuelos traen problemas y hacen sufrir y molestar a los yagairi-Taromenani. Eltema de los sobrevuelos aparece enfticamente, al menos tres veces, dentro del documento. Recordemos que los sobrevuelos encargados porel Ministerio del Ambiente fueron muy numerosos en ese tiempo.20 Informe ejecutivo sobre ataque con lanzas en la comunidad de Los Reyes, Ministerio del Ambiente, 19 de agosto 2009.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    46/228

    46

    Cabodevilla - Aguirre

    Los funcionarios al frente de la investigacin del caso se mostraron en-tonces sumamente prepotentes con quienes quisimos colaborar y com-partir informacin con ellos. Segn ellos, se bastaban solos. Tampoco

    hicieron mayor caso del largo documento presentado por Onwo el 10 deagosto de ese mismo ao y citado arriba21. Seguramente calcularon malsus fuerzas dentro del aparato gubernamental porque, ellos mismos, untiempo despus, fueron relegados de sus funciones. Dijimos que inclusoel Ministerio del Ambiente fue relevado de esa responsabilidad. Luego,el traslado de informacin al Ministerio de Justicia dur casi un ao!Con eso llegaron al caso y al campo gentes nuevas a comenzar todo casi

    desde cero. La improvisacin permanente.

    Qu hizo, sobre aquel caso, la Fiscala? Iniciar procedimientos, por su-puesto. Pero no terminarlos, aadimos. Todava el 19 de marzo de 2012,el Fiscal General del Estado ecuatoriano, el mismo que contina hoy,escriba en una carta a Mons. Jess Esteban Sdaba, obispo de Aguarico:se asign un perito en criminalstica que ha presentado el informe respec-tivo y siguen las investigaciones por las muertes ocurridas en la zona22.

    Siguen las investigaciones cinco aos despus del suceso en Los Reyes,pero no concluyen nada. No hay una sola resolucin ocial hecha p-blica sobre el asunto23.

    21 Comunicado sobre el contacto violento con los Tagairi-Taromenani del 10 de agosto 2009 en el que puede leerse: La familia waoraniTagaeri-Taromenani por su historia y experiencia con sobrevuelos, carreteras, petroleras y colonos, en nuestro territorio ancestral no puedenestar tranquilos cuando vienen ms y ms. Cuando destruyen ms y ms. Estn defendiendo su casa, su territorio y su vida. Tienen derecho adefender.El Estado Ecuatoriano, al promover la colonizacin en nuestro territorio waorani y violaciones de nuestros derechos, sembr el conflictoLa conclusin del Documento y sus propuestas tenan mucho inters, aunque no se tomaran en cuenta. Tampoco se contemplaron algunascrticas internas a la organizacin waorani que all se hacan y a las que nos referiremos despus.22 Carta del Fiscal y documentos adjuntos (AV).23 Pero nos preguntamos cmo podra hacerlo, al menos en el caso de un ataque taromenani. La Fiscala se encuentra entonces ante unquehacer impracticable. Cmo va a investigar sobre probables homicidas si stos son gente oculta a la que, por imperio de la Carta Magnanacional, no debe contactarse? Gente intangible, aforada absolutamente. Aqu nos topamos con disposiciones constitucionales que, de hecho,estorban (si no impiden) el desarrollo habitual de una investigacin fiscal. Por esto no se entiende cual puede ser el afn de alguno de susfuncionarios en cerrar este caso de marzo/2013 para toda otra accin que no sea la fiscal; justamente la que menos resultados puede ofrecer.Pues, al tratar de encontrar responsabilidades, se topar con dos temas sin salida: unos atacantes estn legitimados por su condicin deocultos, los otros quieren estarlo acomodndose a lo que llaman justicia propia.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    47/228

    47

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    Queremos mostrar con todo esto que la tragedia de hoy estaba pro-nosticada desde ayer, ms que anunciada. Vimos que Gobierno deci-di suprimir el equipo de funcionarios del Ministerio del Ambiente

    y pasar las competencias al de Justicia. Por otro lado, el nuevo FiscalGeneral reanud las investigaciones en el 2012, tres aos despus!An no existe veredicto.

    Cules seran las razones de semejante insolvencia en la actuacin es-tatal y gubernamental? Est de ms insistir en que el tema interesa muypoco dentro del Gobierno, al menos si lo comparamos con otras acti-

    vidades o

    ciales en la zona. Eso parece obvio. Bastara tener en cuentala eciencia mostrada en el control de cualquier incidencia de lo queconsideraron alteracin de orden pblico, si afectaba a la explotacinpetrolera (recordemos, en la zona, el caso Dayuma24), o el tan ecazempuje ocial para el desarrollo petrolero. El cambio de Ministeriosencargados junto a la constante remocin de funcionarios destinadosal campo, la reduccin de presupuesto, todo ello conspiraba por te-ner como encargados de campo y anlisis a gente necesariamente de

    poca competencia y escasa perspectiva del problema25. Adems, cuandoconocimos en esa labor funcionarios bien intencionados y preparados,se topaban con tal enredo interno en el funcionamiento legal y opera-cional que acaban frustrados, con las manos amarradas por un sinfnde disposiciones superpuestas y pertenecientes a una inacabable listade Ministerios o entidades supuestamente involucrados. Basta mirar el

    24 En el libro Dayuma, nunca ms!, Cicame-FAL 2008, Milagros Aguirre investig la desproporcionada accin policial/militar frentea un paro en esa poblacin de Va Auca. Se ejerci una gran violencia, hubo varios heridos; de todos los detenidos a quienes se acusabagravemente, ninguno result condenado.25 Ese barajar permanente de Ministerios y funcionarios para ese tema, que naturalmente dificulta, en gran manera, la verdadera creacin ysistematizacin de polticas sobre el tema, contrasta fuertemente con lo que ocurre, para el mismo lugar, con la poltica en disputa: el Ministeriode Recursos no Renovables (antes de Energa). Estos das de finales de agosto estamos oyendo continuamente a uno de sus mximosresponsables, Ing. Wilson Pastor, insistir en que lleva 40 aos consecutivos en puestos de responsabilidad dentro de esa industria. Si laproteccin de los pueblos sin contacto fuera de la importancia que dicen las autoridades, si el PMC fuera un tema cardinal dentro de la polticadel Gobierno, no debera asegurar al frente de ese cometido a gentes menos movedizas y tan de repuesto? Es difcil creer que esa diferenciaen el mantenimiento de los responsables sea hecha, durante tantos aos, por azar.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    48/228

    48

    Cabodevilla - Aguirre

    mapa de la zona para comprobar cmo sobre ella se superponen in-nidad de lmites de tierras, parques naturales, concesiones petroleras,ncas privadas, territorios indgenas Un caos26, no sabemos si solo

    consentido o perfectamente planeado.

    Tampoco hemos de ceder a una confusin muy repetida en nuestra his-toria patria: se cree que por tener una ley o una disposicin nueva sobreel caso, ste queda, sin ms, resuelto. La supuesta magia de los pape-les. El papel, ya sabemos, aguanta todo, pero no transforma la realidad.Precisamente resulta un caso emblemtico ste de la Zona Intangible.

    Proclamada en 1999, con el coro auspicioso de muchos en Ecuador, yconseguida la cuota de cierta relevancia internacional por resultar ade-lantados en polticas de proteccin, result que habran de pasar ochoaos hasta ser denida geogrcamente en 2007. Entre una fecha y otra,es decir, entre su proclamacin ocial y su demarcacin denitiva, elEstado ecuatoriano ejecut concesiones petroleras en el rea27 compli-cando muchsimo su ejecucin.

    En Abril del 2007 el Ecuador elabora la Poltica Nacional de los Pueblosen Situacin de Aislamiento Voluntario, con el objetivo de respetar yproteger la vida, integridad, cultura y territorios de los pueblos Tagaeri yTaromenani y en diciembre del mismo ao se formula un Plan de Medi-das Cautelares a favor de los Pueblos Indgenas Aislados (PMC-PIAs)28.Es decir tenemos otras dos medidas: Poltica Nacional y Plan de Medidas.

    26 Vase al respecto el trabajo: ZONA INTANGIBLE TAGAERI TAROMENANE (ZITT): UNA, NINGUNA, CIEN MIL? Delimitacincartogrfica, anlisis geogrfico y pueblos indgenas aislados en el camalenico sistema territorial del Yasun, Massimo De Marchi - SalvatoreEugenio Pappalardo - Francesco Ferrarese, Fundacin Alejandro Labaka, 2013. Un anlisis par ticularmente certero sobre la relacin entre ladelimitacin territorial de la ZI y las polticas extractivas del Estado ecuatoriano en esa zona.27 Vale la pena aqu sealar como los Bloques No. 14 y No. 17 fueron entregados en el ao 2003 a la Compaa canadiense Encana, y luego aotra empresa transnacional Andes Petroleum (Aguirre, 2009). Todos estos procesos de entrega desde una compaa a otra han sido otorgadosdespus de la declaracin en el ao 1999 de la ZITT mediante el D.E. 552. (De Marchi et alia, op cit.)28 Segn se lee en el INFORME DE ACTIVIDADES REALIZADAS POR EL ESTADO ECUATORIANO EN VIRTUD DE LA MEDIDA CAUTELAR AFAVOR DE LOS PUEBLOS INDIGENAS EN AISLAMIENTO VOLUNTARIO TAGAERI Y TAROMENANE, enviado por la Ministra de Justicia, Dra.Johana Pesntez, al Secretario Ejecutivo de la Comisin interamericana de Derechos Humanos, con fecha 22/4/2013.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    49/228

    49

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    No obstante, sabemos que Poltica y Plan no sirvieron para impedir lasmuertes del 2009. Tampoco han tenido suciente operatividad para evitarla matanza de ahora. Del dicho al hecho sigue habiendo un gran trecho.

    Se trata de un caos devenido por el desinters y displicencia en el temade la proteccin de esos grupos ocultos por parte de sucesivos Gobier-nos que ha dado lugar a ese pantanal? O habra supuestos para pensarde otra manera? Porque cuesta pensar que puedan darse errores tan fre-cuentes y constantes en una misma actividad de proteccin y durantetantos aos. A este respecto, admira pensar cmo este Gobierno actual,

    que tan e

    caces y valiosas transformaciones ha conseguido en aspectossociales de la vida nacional, ha resultado tan inocuo en los cambios queeste viejo enredo de la ZI demandaba. Quiz porque ha cambiado entantos aspectos la poltica nacional, pero no tanto entre las fuerzas fcti-cas que intervienen decisivamente en todo lo referente a la explotacinpetrolera? Consideraciones aparte, lo real es esto: los repetidos hechosmuestran que el desacierto gubernamental ha propiciado una larga se-rie de muertes en la zona.

    Por otro lado, la inexperiencia de muchos funcionarios comienza por suimposibilidad para comprender siquiera conceptualmente la cuestin.Ms de uno ha repetido (todava lo hacen) en sus documentos nocio-nes comopueblos sin contacto, opueblos en aislamiento voluntario29 queno parecen comprender a cabalidad. sas, como aqullas de considerara los waorani hermanos de los taromenani (otro tpico vaco repetido

    hasta la saciedad), considerar esas acciones violentas comoguerras entreclanes, o, nalmente, absolverlas como ajustadas a una supuestajusticia

    29 ltimamente se comienza a estudiar, con alguna precisin, esos tpicos tan repetidos como fuera de lugar en nuestro caso ecuatoriano.Vase al respecto el trabajo citado: ZONA INTANGIBLE TAGAERI TAROMENANE (ZITT): UNA, NINGUNA, CIEN MIL?

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    50/228

    50

    Cabodevilla - Aguirre

    indgena30, no son simplemente palabras ms o menos acertadas, sinoconceptos muy peligrosos de no manejarlos bien. Como est ocurrien-do. Palabras que estn ocultando la realidad, la falsican, y promueven,

    seguramente sin pretenderlo, violencias como la que vamos a describir.

    EL PELIGROSO OFICIO DE MEDIADOR

    En el Informe 24/4/2013, ya citado, la Ministra de Justicia, como si no

    hubieran ocurrido las muertes de Yarentaro y la matanza posterior, ar-maba (los subrayados son nuestros): En denitiva, se han tomado encuenta todos los factores y aspectos disponibles, y se ha incluido toda lainformacin generada durante estos ltimos aos en relacin al tema, porlo que es posible armar que estos criterios se han construido con todoslos elementos de juicio y toda la informacin requerida para soportar losargumentos tcnicos que se plasman en este documento31

    Todo era perfecto en su trabajo. Sin embargo, es evidente que algo no sehaba hecho bien. De seguro contaban con mucha informacin, pero larealidad les acababa de demostrar que resultaba muy compleja de mane-

    30 La actual (tambin la anterior) Constitucin de Ecuador se refiere a la justicia indgena. Sin duda es un concepto que debera serdesarrollado si se quiere, ante todo, comprender su autntico significado y alcance; luego, si se pretende poder aplicarlo. Si aspirara a decir, porejemplo, que todos los indgenas ecuatorianos participan de un mismo cdigo o costumbres jurdicas de aplicacin general, sera estar fuera dela realidad. Porque, en el caso que nos ocupa, poco tiene que ver, en ese plano, la tradicin wao (un grupo de fragmentados clanes autnomos)con la de sociedades estables y estructuradas como pueden ser las indgenas andinas ecuatorianas. Si, por el contrario, quisiera decir que seaplique en este caso la justicia wao se encontraran en otro problema maysculo. Primero, porque sera muy difcil que los mismos waoranillegaran a un acuerdo sobre el tema (basta observar las discusiones que ahora mismo tienen sobre la accin). Luego, porque en su tradicin(como este grupo de la matanza pretende mantener) existen normas imposibles de conciliar con la Declaracin Universal de los DDHH.Por nuestra parte hemos pedido, en privado y en pblico, a instituciones acadmicas ecuatorianas, a investigadores nacionales de algunaseriedad, que afronten de una vez el alcance y significado de esos conceptos en la situacin actual. Sera muy conveniente para todos. Hay quesalir de esa pereza de los tpicos sin sentido que poco tienen que ver con lo que est sucediendo en la selva nororiental. Se ha de investigar yreflexionar con rigor y mucha menos retrica.31 INFORME DE ACTIVIDADES REALIZADAS POR EL ESTADO ECUATORIANO EN VIRTUD DE LA MEDIDA CAUTELAR A FAVOR DE LOSPUEBLOS INDIGENAS EN AISLAMIENTO VOLUNTARIO TAGAERI Y TAROMENANE, 22/4/2013.

  • 7/29/2019 Una Tragedia Ocultada - Copia

    51/228

    51

    UNA TRAGEDIA OCULTADA

    jar. O que les faltaban datos imprescindibles. En ese informe detallabanmuchas de sus actividades de proteccin hasta el momento de las muertesen Yarentaro. Leyndolo, parecera que tenan la situacin bajo control.

    Entonces, cmo haba sucedido que, cuatro aos despus del ltimo lan-ceamiento en 2009, los hechos les tomaran de nuevo por sorpresa y tuvie-ran parecida capacidad de reaccin a la que exhibieron entonces?

    Algo esencial, en lo que no ponan suciente atencin, era el hecho deque los taromenani seguan haciendo muchos contactos en toda esazona que el Ministerio deca tener bien estudiada y controlada. No solo

    aquellos violentos, como el arriba relatado de Wane, u otros de los quese habl con colonos de la zona32. Se ocasionaban otras varias seales deellos aportadas por los cazadores waorani metidos por las tierras entreel Tiputini y Tivacuno, las cabeceras del Cononaco chico, o ros comoen Shiripuno y Cunchiyacu. Pero las haba an ms crticas y peligrosas.Esos grupos taromenani, familiares o relacionados entre s, se acercabanpor los alrededores de poblados waorani situados, desde Va Pindo o elnal de la Va Aucas, hasta los recintos situados en la Va Maxus. En to-

    dos esos lugares hubo, durante meses, seales de su paso o vigilancia, lesvieron en alguna ocasin, notaron sus hurtos en chacras y casas, etc. Lostaromenani se movan constantemente, como enjaulados en un espacioinsuciente, vigilaban sus lmites, quiz necesitando tambin otros re-cursos: tiles y herramientas, parejas

    Los del Ministerio no hicieron gran cosa respecto a esa actividad. Pri-

    mero porque se trata de un trabajo en extremo complejo. Quiz por-que sigue pesando mucho en al