Una ciudad por conocer
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Datos Informativos:
Integrantes: *Brenda Arturo*Francely Bastidas*Estefani Caranqui*Salomé Ponce*Jéssica Méndez
Curso: *6to Contabilidad
Fecha: 16 de marzo de 2011
Asignatura: Computación
Tema: San
Miguel de
Ibarra
Introducción
La ciudad de Ibarra está ubicada al norte del país, conocida también como "La ciudad blanca" por sus fachadas y por los asentamientos españoles de la villa algunos de los cuales se mantienen hasta nuestros días con su imponente arquitectura, como por ejemplo las iglesias y parques que apenas han sido restaurados en los últimos años.
Reconocida por sus paisajes que atraen la atención de cientos de viajeros, su clima veraniego que no solo favorece el turismo si no también el desarrollo de la agricultura en sus distintas parroquias y la amabilidad de sus habitantes; personas justas y emprendedoras que impulsan el crecimiento de la urbe hacen de la cuidad de Ibarra un paraje digno de ser visitado por propios y extraños ya que en él se desenvuelve un rico ambiente cultural donde predomina el arte, la escritura y la historia; esta cuidad encantada por leyendas y relatos posee un valor propio que ah adquirido al pasar de los años y afrontar a catástrofes naturales y batallas que han enfrentado sus habitantes con valor y determinación dignas de convertirse en ejemplo para las futuras generaciones.
La importancia de conocer a esta localidad no radica solo en poseer más conocimientos radica en despertar en nosotros amor por nuestra tierra, por nuestras costumbres y por nuestra gente, como amar algo que no conocemos, como sentir respeto por un lugar que no significa nada para nosotros de aquí proviene la necesidad de realizar este documento ya que nos permitirá estar al tanto de los aspectos más sobresalientes de la cuidad y recordar aquello que hemos olvidado.
Objetivo General
El objetivo general es dar a conocer a la ciudadanía sobre todo lo referente a la ciudad en sus diferentes ámbitos, obteniendo de ellos una aceptación y sobre todo una valorización de lo que poseemos.
Gracias a la diferente diversidad, hemos tenido una gran acogida a nivel mundial, presentándoles algunos atractivos naturales y por ende productos de alta calidad.
Mediante el adelanto que ha logrado la ciudad, la ciudadanía ibarreña, ha mejorado su calidad de vida.
Al concientizar a la ciudadanía sobre la cultura, estamos fomentando un amor, sobre la tierra que los han acogido amablemente.
Marco Teórico
La Villa de San Miguel de Ibarra, es una ciudad ubicada en la región Sierra al norte del Ecuador. Conocida históricamente como "La ciudad blanca" por sus fachadas y por los asentamientos de españoles en la villa, entre sus atractivos esta su fantástica naturaleza, clima veraniego y la amabilidad de sus habitantes. Es muy visitada por turistas nacionales y extranjeros como sitio de descanso, cultura e historia. Es una ciudad cultural en donde predomina el arte, la escritura y la historia; además existe una gran producción turística y hotelera ofrecida para toda la zona. Ibarra, es la capital de la provincia de Imbabura (Ecuador) y es el centro de desarrollo económico, educativo y científico de la zona norte del Ecuador. La ciudad se encuentra edificada a las faldas del volcán que lleva el mismo nombre de la provincia. Fue fundada por el español Cristóbal de Troya, el 28 de septiembre de 1606. Por su ubicación geográfica se la nombró sede administrativa de la región 1 conformada por las provincias de Esmeraldas, Carchi, Sucumbíos e Imbabura.[1]
Historia de la Villa de San Miguel de Ibarra
Fundación
La Villa de San Miguel de Ibarra fue fundada el 28 de septiembre de 1606, por el capitán Cristóbal de Troya, bajo la orden del entonces presidente de la Real Audiencia de Quito, Miguel de Ibarra y bajo mandato del Rey Felipe de España.
La ciudad se construyó entre Quito y Pasto, Quito-Pasto y cerca al mar. En la época de la colonia los viajes comerciales entre estas dos ciudades proveían a Ibarra de un movimiento comercial por lo que se la consideraba como un pueblo en progreso continuó. El intercambio productivo hizo que la ciudad crezca rápidamente y sus características para la agricultura propiciaron el desarrollo de la zona. El asentamiento y la villa de San Miguel de Ibarra fué construida en el valle de los Caranquis, en los terrenos de Juana Atabalipa, nieta del
Inca Atahualpa. Aún se pueden encontrar restos de construcciones Incas- Los datos históricos y antropológicos afirman que en la conquista española se construyó una ciudad colonial sobre la villa Inca, se usaron las mismas piedras talladas para construir casas coloniales. También exite la teoría de que Atahualpa nació en Caranqui.
La Junta Soberana de Quito, el 16 de noviembre de 1811, dio a la villa de San Miguel de Ibarra el título de ciudad. Posteriormente el 11 de noviembre de 1829, el libertador, Simón Bolívar, nombró a la ciudad capital de la provincia.
En la madrugada del 16 de agosto de 1868, la erupción del volcán Imbabura y el consiguiente terremoto devastaron la ciudad y la provincia. Ibarra quedó prácticamente destruida. Los sobrevivientes de este suceso se trasladaron a los llanos de Santa María de la Esperanza, donde se reubicaron y vivieron por cuatros años. Gabriel García Moreno, fue comisionado por el Presidente de la República, para reconstruir la ciudad. Finalmente el 28 de abril de 1872, los ibarreños regresaron a la rehecha ciudad. Esta fecha se considera la segunda más importante después de la fundación de Ibarra.[1]
Batalla de la Independencia de Ibarra
El 17 de julio de 1823, tuvo lugar la encarnizada Batalla de Ibarra, dirigida por Simón Bolívar, que liberó la región del dominio español. El coronel Agustín Agualongo, Comandante Realista de Pasto, aprovechando un posible descanso de Bolívar en El Garzal, en la provincia de Los Ríos, se sublevó el 12 de julio de 1823. Bolívar, escuchando que Agualongo había vencido al coronel Juan José Flores. Se pone en marcha a acabar con la insurrección de Pasto.
Simón Bolívar después de 7 días de marchas forzadas vence a Agualongo. Bolívar reunió a sus tropas en Otavalo, y el 17 de julio de 1823, derrota a Agualongo en las calles de Ibarra, y cerca de la hacienda La Victoria, que se ubica al otro lado del Río Tahuando,
lugar donde está la famosa Piedra Chapetona, que recuerda el hecho. La leyenda, sin sustento práctico, dice que sobre esta piedra se encaramó Bolívar para dirigir a sus tropas a la victoria. La batalla guarda especial importancia por ser la única dirigida personalmente por El Libertador en territorio ecuatoriano. [1]
Geografía
Ubicada en la zona norte de Ecuador. Se ubica a 115 km al noreste de Quito y 125 km al sur de Tulcán. Su clima es Templado seco. Su temperatura media es de aproximadamente 16º Celsius.
Altitud: 2.192 metros. Latitud: 00º 21' N
Longitud: 078º 07' O
Parroquias de Ibarra
Ambuqui
Situado en los cálidos valles del norte del cantón, donde habita el pueblo afro ecuatoriano, se conservan grandes extensiones de caña de azúcar, por donde el tren hace su recorrido. De clima cálido seco muy saludable y frutos típicos del lugar como es el ovo. A la entrada de Ambuquí muy atrayente a la vista, podemos encontrar una formación rocosa similar a una mujer dormida.[7]
Angochahua
Comunidad indígena ubicada al sur este de Ibarra, aproximadamente a 30 minutos. Sitio adecuado para relizar la práctica de trekking en baja, media y alta montaña. Rodeado de majestuosas montañas como el Cubilche, el Cunru y el Gallo Rumi, desde donde usted podrá maravillarse con la vista del majesturoso nevado Cayambe.[9]
Ibarra
Ubicada en la zona norte de Ecuador. Se ubica a 115 km al noreste
de Quito y 125 km al sur deTulcán. Su clima es Templado seco. Su
temperatura media es de aproximadamente 16º Celsius.
Altitud: 2.192 metros.
Latitud: 00º 21' N
Longitud: 078º 07' O
La Esperanza
Población ubicada a 15 minutos de la ciudad, asentamiento indígena con habilidades artesanales, agrícolas y pecuarias. Sus mujeres utilizan un singular traje con bordados y vistosos colores, producto de sus hábiles manos. Ofrece diversos ecosistemas y maravillas naturales, sitio ideal para realizar caminatas, montañismo, ciclismo, cabalgatas y más...[8]
Lita
Ubicación: Se encuentra ubicada en la Cordillera Occidental a 100 Km. de la ciudad de la Ibarra, a 280 Km. de Quito y 92 Km. de San Lorenzo (Provincia de Esmeraldas).
Es el sitio geográfico de confluencia de tres provincias Imbabura, Carchi y Esmeraldas.[4]
Salinas
Ubicación: Salinas se encuentra ubicado a 144 Km de la ciudad de Guayaquil, en el extremo más saliente de la costa del Pacífico Sur, formando parte de la provincia de Santa Elena, en la zona conocida como “Puntilla de Santa Elena”.
Salinas se ha conformado como una ciudad que se desarrolla eminentemente en base al turismo de sol, mar y playa, con una infraestructura hotelera de primera calidad.[10]
San Antonio[3]
Ubicación: De acuerdo al sexto Censo de Población de Noviembre del 2.001, la Parroquia de San Antonio cuenta con: 13,987 habitantes. San Antonio de Ibarra parroquia rural perteneciente al cantón Ibarra de la provincia de Imbabura, ubicada a 5,50 km de la capital provincial y a 174 km de la capital ecuatoriana.La cabecera parroquial consta con las coordenadas geográficas: 0º 20’ 08” de latitud norte y 78º10’ 09” de longitud oeste.[6]
Caranqui
La parroquia de Caranqui, a 2 km al sureste de Ibarra, fue un importante asentamiento de las culturas Carague e Inca. En sus suelos se ha encontrado una gran cantidad de restos arqueológicos que corrían el riesgo de desaparecer. Sin embargo, el Municipio de Ibarra inauguró, el 4 mayo de 1997, el Museo Arqueológico y Etnográfico Atahualpa, de Caranqui, para preservar este legado histórico. Luego, el 25 de febrero de 1999, fue entregado, en comodato, a la Fundación de Turismo y Cultura Atahualpa. Está compuesto por dos salas conectadas por un túnel.Aquí según algunos cronistas nació Atahualpa, el último emperador Inca, en cuyo honor en 1564 se construyó el templo del sol. Existe vestigios de restos arqueológicos importantes, además se dice que la hermosa iglesia del Señor del Amor se construyó sobre el templo de los incas[5]
Por Carlos A. Rivadeneira F.
RESEÑA DEL 16 DE AGOSTO DE 1868: TERREMOTO DE IBARRA
El Terremoto de 1868" - Rafael Troya
Don Manuel Ignacio Zaldumbide, Gobernador de la Provincia de Imbabura; el 16 de agosto de 1868, fecha en la que ocurrió tan terrible cataclismo, él fue quien personalmente presenció las ruinas, los acontecimientos, el cuadro desgarrador de una ciudad destruida por aquel fatal movimiento telúrico, dejando saldos trágicos. Cientos de muertos, casas y grandes edificios se fueron al suelo. Tan horrible fue este cuadro que el Dr. Gabriel García Moreno, cuando llegó a Ibarra a verificar los daños y trazar un plan de reconstrucción, dijo: "Parece que la tierra ha hervido".
Veamos como describe este terremoto del 16 de agosto de 1868 don Manuel Ignacio Zaldumbide. "El 16 de agosto de 1868 es una de las fechas que el dedo de Dios imprime en la historia de las naciones con caracteres de eterna desolación y duelo Es uno de esos días que las generaciones, en cuentos pavorosos perpetuarán en la memoria de los siglos. El terremoto fue, y la desolada ciudad quedó en mudo, profundo y pavoroso silencio. Quien haya pasado por cosa semejante sólo podrá comprender la angustia mortal de aquellos terribles instantes, y lo que pasó dentro de nosotros aquellas horas de agonía y desesperación. Las nuevas convulsiones de la tierra hicieron romper el silencio que el dedo del pavor había impuesto en nuestros labios, y se pobló el aire de débiles y confusos alaridos. Al fin llegó aquella pálida y triste aurora, y a su débil luz lució el cuadro más desgarrador que pudiera imaginarse. La ciudad desolada, en las casas confusión y espanto, las calles cerradas con hacinados escombros, pequeños grupos de gentes desfiguradas, empolvadas y gimientes. He aquí todo lo que se presentaba a la vista como un cuadro de dolor y desgracia. ¿ Dónde estaba aquella población lozana y vistosa que lucía en las plazas y en los templos?. No era, no, ésta que se veía a la pálida luz de las estrellas, levantando sus magulladas y desfiguradas cabezas por entre los escombros, la que esa misma noche se había entregado tranquila al sueño: era su sombra, era quizás la generación pasada que salía de sus tumbas para dar a que la presente se sepultara en ellas.
Empolvados, sangrientos, cadavéricos, despavoridos los semblantes; por mitas vestidos los cuerpos con trajes más peregrinos y extraños al sexo, a la clase y a la edad; era esto más que un funesto acontecimiento de vivos, una fantástica y espantosa fiesta de muertos, que habían salido de sus sepulcros, engalanados con sendos sudarios, y con los harapos hallados de paso en los cementerios. Y luego aquella confusión de voces, de alaridos de llanto, junto con los ayes de los heridos, el exterior de los moribundos, y la pavorosa vista de espantosos y mutilados cadáveres insepulcros... No parecía sino que el mundo se había acabado para nosotros"
Otros testigos nos refieren: "Era la una de la madrugada del 16 de agosto de 1868, y cuando todos dormían tranquilamente, fueron arrojados de sus lechos, luego de un brutal estremecimiento de la tierra. Al romper la aurora, las ciudades eran sepulcros; cadáveres
sus sueños", como escribió por entonces don Juan Montalvo. El sismo destruyó casi toda la provincia de Imbabura, pero las poblaciones que más sufrieron fueron Ibarra, Otavalo, Cotacachi. Atuntaqui, Caranqui, San Antonio, San Pablo, Tumbabiro. Los sobrevivientes de Ibarra después de dejar a sus familiares, amigos o vecinos sepultados entre los escombros de casas y edificios, se trasladaron en éxodo a vivir interinamente en los llanos de Santa María de la Esperanza, hasta que regresaron a sus lares nativos el 28 de abril de 1872. Era el Presidente de la República el Dr. Javier Espinosa, Ministro del Interior don Camilo Ponce. La situación de Imbabura era por demás triste y angustiosa, cientos de miles de gentes hambrientas deambulaban sin destino sobre los escombros; partidas de forajidos y antisociales cruzaban de uno a otro confín, robando, violando, intimidando a los sobrevivientes. En estas circunstancias fue nombrado Jefe Civil y Militar de Imbabura el Dr. Gabriel García Moreno, y el 23 de agosto, en San Pablo dirigió su primera proclama, llamando la atención a todos, sobre la necesidad de contribuir al restablecimiento del orden y la paz de la provincia. Previno a los bandidos en su acostumbrado lenguaje cáustico, que en breve serán castigados con todo rigor que las circunstancias exigían. Algunos países se hicieron presentes ante el dolor: Francia, Inglaterra, Chile y Perú, pero sus donativos no llegaron completos a Imbabura.
Una vez que el Dr. Gabriel García Moreno, había terminado con su misión y encargo recibidos del Presidente de la República Dr. Espinosa, el día domingo 28 de abril de 1872, se llevó a cabo la solemne bendición de la nueva Ibarra a cargo del obispo Dr. Antonio Tomás Iturralde; El Dr. Mariano Acosta pronunció un fogoso discurso; entre otras autoridades civiles estuvieron el Gobernador de Imbabura, Juan Manuel España; don José Nicolás Vacas; los personeros del I. Concejo Municipal; militares coronel Manuel Salazar; luego de la ceremonia se retiraron con nuevas esperanzas y fe, a fin de llevar la ciudad de Ibarra y las demás de la provincia de Imbabura hacia el bienestar y progreso.[2]
EL RETORNO A IBARRA
Bajo la dirección de García Moreno la Convención Nacional de 1869 expidió un Decreto fechado el 14 de julio, ordenando el pronto restablecimiento de las ciudades destruidas por el terremoto y determinando los fondos que habían de invertirse en su reconstrucción.El 20 de abril de 1872, 19 peones transportaron desde la Esperanza los muebles y útiles de las dos escuelas y los colocaron en los planteles escolares de la nueva ciudad.El 21 de Abril, huelga ponderar la emoción de de los habitantes, de gozo la gran mayoría, y a la febril actividad en hombres y mujeres para el transporte ajuar, de comestibles, de infantes incapaces de caminar, de aves y animales de corral etc. etc.
Al despuntar el alba del 22 de abril, día lunes, todo bulle, y todo es bulla en la Esperanza. Se da la última mano a los cargamentos, a los paquetes, el enjaezamiento de los caballos, etc. Alegremente empieza el desfile de las caravanas; grupos abigarrados que descienden a Caranqui, de allí a Chaupi-Estancia, en donde aprovechan la recta y flamante carretera hasta la Ciudad Nueva.
El día 22 transcurrió en un incesante trajinar entre la Esperanza e Ibarra, y en instalarse pasablemente en la villa resucitada. Esta comenzó a ser de nuevo la Capital de Imbabura, después de tres años y ocho meses de haber sido tan solo sede de un Teniente Político.En el decurso de aquella memorable semana las gentes continuaron bajando a Ibarra pues la Esperanza con la partida de las gentes iba resultando, de día en día, menos atrayente y simpática.
El 27 de Abril, se publicó en Ibarra el siguiente Oficio: "El día de mañana tendrá lugar la bendición de esta ciudad, nuestra cara patria, se celebrará una misa en acción de gracias a la Divina Providencia, por la nueva instalación".Aurora la más linda pareció a los ibarreños la que brilló sobre la cima del Imbabura, el día domingo 28 de Abril de 1872. Festivos repiques dé campanas en una improvisada capilla de nuestra Señora de las Mercedes convidó a los sobrevivientes que se agolparon en el diminuto templo y sus contornos. Allí estaba el Hmo. Señor Obispo Tomás Antonio Iturralde con su clero, el dinámico Gobernador Juan Manuel España con las autoridades municipales y cantónales, el Comandante de Armas Coronel Manuel Salazar con la compañía de soldados.[2]
De la Merced arrancó la procesión, en dos largas hileras, cantando la letanía de los santos. Llegados a la plaza principal el bondadoso Prelado bendijo la naciente ciudad mediante las oraciones rituales. Luego regresó la procesión a la capilla de la Merced y se celebró la Santa Misa. Después del Evangelio el señor Canónigo Dr. Mariano Acosta pronunció un hermoso discurso en el cual tuvo estas entusiastas y proféticas palabras: "¡Ibarra! Patria mía, levántate del seno de las ruinas y la diestra del Altísimo te embellecerá. Tus calles serán espaciosas y pobladas. Tus plazas hermosas y afluidas de gentes de los mares. Tus aguas cristalinas y puras. Tus habitantes virtuosos y felices. Un ángel de Dios velará en las alturas de tus Andes para contener los desenfrenos de la naturaleza; y despejará el horizonte al amanecer de los felices días que se te prometen..."
Símbolos Representativos de la ciudad
HIMNO A IBARRA
LETRA DE: Rafael Larrea Andrade MÚSICA DE: José Miguel Vaca Flores
Coro¡Salve, Ibarra!, ¡Hermosa sultana!,
rosa abierta a los rayos del solEn tus campos de oro y de grana,
resplandece la luz y el amor.
EstrofasI
Tierra sacra, de noble linaje,fue tu cuna de regio blasón.
en la pompa triunfal del paisajese refleja tu estirpe imperial
IILa adustez de tus viejas montañas,
en tus Hijos se hizo altivez.Y el vivac de las rudas campañaslos vio siempre luchar y vencer.
III¡Salve Ibarra!, en tu día de gloria
suene un Himno de intensa emoción.Que tu triunfo recoja la historia
y te brinde un futuro feliz...
Bandera de Ibarra
Escudo de Ibarra
Este Escudo de Armas, fue pintado al óleo y con sus respectivos colores, colocado en el Salón de Sesiones del Ayuntamiento, el 28 de Septiembre por el Aniversario de la Fundación de la Villa de San Miguel de Ibarra.
Turismo En Ibarra
Ibarra cuenta con una historia que viene desde la época de los Incas,
e incluso antes, cuando los Quitus y Caranquis dominaban, pasando
por la dominación española y posteriormente los vestigios de la lucha
por la libertad. Todos ésos hechos tienen testigos materiales que son
atractivos turísticos potenciales, y no sólo eso, Ibarra también goza
de paisajes exuberantes; y al ser multicultural y multirracial, un
simple vistazo para tomar un tradicional helado de paila o pan de
leche conforman una experiencia muy agradable. Todo esto sumado
con los servicios, como la gran variedad de infraestructura hotelera,
la convierten también en un lugar atractivo para alojarse dentro de la
provincia.
Monumentos y lugares de interés
Iglesias
La ciudad tiene muchos templos católicos. Los más tradicionales y
dignos de visitar son:
La Catedral: Ubicada en el centro de la ciudad, es la central de
la diócesis, construida después del terremoto de Ibarra, cuenta con
varias obras de la escuela de arte de Quito.
Basílica "La Merced": Su altar está cubierto de pan de oro, fue
construida inmediatamente después del terremoto.
Capilla Episcopal: Anterior al terremoto de 1 868, se encuentra
a un lado de la catedral, cuenta con obras de arte de la época
colonial. No siempre está abierta al público.
San Agustín: Ubicada a tan sólo una calle de la Catedral,
resguarda arte anterior a 1 868 e incluso es testigo sobreviviente a
la batalla de Ibarra (1 823).
San Antonio: En su interior se refugió Simón Bolívar ante las
tropas de Agualongo, está en la parroquia rural de San Antonio de
Ibarra, en las afueras del sector urbano.
Basílica "La Dolorosa": Fue construida sobre la ruinas de "La
Compañía", otro templo católico destruido en el terremoto de 1
868. A su vez, la Basílica de "La Dolorosa", fue destrozada por un
terremoto del siglo pasado (1 987). Actualmente este templo tiene
partes de la construcción antigua y otros tramos son de la
reconstrucción integral hecha a finales del siglo pasado, luego del
terremoto de 1 987, por lo cual llama la atención su arquitectura.
San Francisco y Santo Domingo: Construidos a principio del
siglo pasado, su arquitectura tanto interior como exterior, son
dignos de admiración.
Santuario del Señor del Amor de Caranqui, se ubica al sur de la
Ciudad de Ibarra a 5 minutos del centro histórico.
Parques
Parque Pedro Moncayo: Es el parque principal de la ciudad, se
ubica al frente de la Gobernación y la Municipalidad de Ibarra.
Plazoleta Francisco Calderón: Forma parte de los recuerdos de
la mayoría de los abuelos porque en principio fue un mercado y
luego un coliseo, actualmente es un escenario para eventos
importantes de la ciudad por eso lleva el nombre de Plazoleta de la
Ibarreñidad. Su nombre oficial hace honores al héroe del ejército
independentista, fusilado por las tropas realistas españolas en la
Batalla de San Antonio de Ibarra, parroquia rural de Ibarra donde el
parque principal también lleva su nombre. Fue el padre de otro
héroe de la guerra de independencia, Abdón Calderón.
Parque Germán Grijalva: Se ubica frente a la iglesia de la virgen
del Quinche, forma parte del proyecto de regeneración urbana por
los 400 años de la fundación de Ibarra.
Plazoleta Abdón Calderón: Se ubica frente a la iglesia de San
Agustín, por lo que comúnmente a esta pequeña plazoleta se la
conoce del mismo nombre, forma parte del proyecto de
regeneración urbana por los 400 años de la fundación de Ibarra.
Parque Víctor Manuel Peñaherrera: Está frente a la Basílica de
"La Merced". En siglos pasados, fue sitio de mercado, plaza de
festejos taurinos y de otras distracciones populares y deportes.
Colinda con el antiguo cuartel militar.
Paisajes
Laguna de Yahuarcocha: literalmente significa "lago de sangre"
y debe este nombre al hecho de que en sus orillas se efectuó la
última batalla de resistencia de los Caranquis contra las tropas
incas invasoras. Se dice que luego de ganar la batalla, los incas
pasaron a cuchillo a todos los sobrevivientes y arrojaron sus
cuerpos al lago, tiñéndose este de sangre. Hoy Yahuarcocha tiene
a su alrededor una moderna pista y es sede de numerosas
carreras automovilísticas a lo largo del año. El bello paisaje natural
es aprovechado diariamente por miles de ibarreños que salen a
practicar diversos deportes en este paraje.
Imbabura: Este volcán que lleva un buen tiempo inactivo, es un
buen destino para los excursionistas.
Loma Alta que se encuentra en el sector de la parroquia de la
Esperanza que se encuentra ubicado a 7 kilómetros de la Ciudad
de Ibarra también existe la loma del cubilche en cuya cima se
encuentra lagunas de agua cristalina el cubilche se encuentra al
lado del volcán Imbabura unos sitios que sin lugar a duda se los
debe visitar
Loma de Guayabillas: Esta loma, que se encuentra al otro lado
del río Tahuando, tiene un lugar en el cual hay un zoológico y las
instalaciones necesarias para un paseo familiar.
El Mirador: es una colina ubicada al oriente de la ciudad; sitio
tradicional para divisar todo el fértil valle en donde se asienta la
ciudad y sus alrededores. Aquí se encuentra una estatua de San
Miguel Arcángel, patrono de la ciudad.
Yuracruz: Ubicada a espaldas del anterior, esta loma más alta
permite observar con más amplitud las bellezas naturales de la
ciudad y la provincia.
Valle del Chota: Este lugar goza de un clima caliente, y también
es cuna de los mejores futbolistas ecuatorianos.
Ambuquí: Este sector cuenta con gran infraestructura turística,
que aprovecha el clima cálido de este lugar.
Otros
Obelisco: Este monumento recibía en el siglo pasado a los
visitantes que llegaban a la ciudad en tren. La estación de abordo
y descarga del tren estaba a pocos metros. Por eso, hasta hoy se
lo llama el "Obelisco de la estación". En sus cuatro costados se
encuentran grabados los nombres de los fundadores de la ciudad.
Hasta mediados del siglo pasado, era el inicio de la zona urbana.
Actualmente, sigue siendo punto de referencia de la creciente
ciudad, a pesar de que la urbe ahora cuenta con otros límites en su
extensión citadina.
Esquina del Coco: Forma parte de la historia de Ibarra. En esta
esquina, a pesar de la devastación del terremoto de 1 868, una
palmera de cocos siguió en pie. Desde ahí se trazaron a escuadra,
las calles de la nueva Ibarra, respetando en parte, el trazado
original de la distribución de plazas, manzanas y solares, de la
antigua Villa de 1 606.
Antiguo cuartel de infantería: A pesar de los cambios que ha
sufrido, vale la pena ser visto desde el exterior por su sobrio estilo
y construcción en ladrillo y piedra.
Caranqui: Este sector está lleno de historia, aquí se han
encontrado muchas reliquias arqueológicas debido a que se
asentaron los pueblos que hicieron férrea resistencia a los Incas,
en este sector se encuentran casas de la época anterior al
terremoto, un tributo a los incas, el museo del sol (ubicado bajo el
templo del sol), la tradicional iglesia con su magnífica pintura que
representa al infierno y sus también tradicionales panes de leche,
Piedra Chapetona: Está en las orillas del Tahuando. Luego de
luchar en las calles de Ibarra, el ejército independentista liderado
por Bolívar, arrinconó hasta este sector oriental de la ciudad, por
donde cruza el río Tahuando, al grupo pro español dirigido por
Agustín Agualongo. Cruzando el río hacia el este, Bolívar derrotó
finalmente a los realistas en el sector denominado hasta hoy como
"La Victoria". La leyenda dice que al cruzar el río, desde esta
enorme roca Simón Bolívar dirigió a sus tropas para alcanzar la
victoria sobre los realistas, apodados "chapetones" en esa época.
Museo Banco Central del Ecuador Ibarra : Museo Arqueológico
de la Sierra Norte del Ecuador, posee una colección de más de 350
piezas originales, además de Programa Educativo y Almacén de
Publicaciones.
Casa de la Cultura: Generalmente está abierta al público con
muestras de arte o reliquias históricas.
Museo de Caranqui: Aquí están las reliquias arqueológicas que
se han rescatado en Caranqui.
Casa de Pedro Moncayo: Casa donde nació el ilustre
ecuatoriano Pedro Moncayo.
San Antonio de Ibarra: Ubicada a 5,50 km de la capital
provincial y a 174 km de la capital ecuatoriana es reconocida por
sus artesanías y la escultura haciendo parte de la cultura y
tradición de la provincia y el país.
Cultura
Gastronomía
Entre la comida típica de esta ciudad destaca el consumo de una
amplia variedad de maíces, habas, quinua, chochos, mellocos, ocas,
etc. También cabe mencionar que es parte de la dieta tradicional las
papas. Existe una bebida típica conocida como chapo que se realiza
mediante la mezcla de harina cebada —denominada máchica—,
panela y agua.1
Repostería
Son tradicionales los helados de paila, los cuales se preparan en
pailas de bronce que se disponen sobre una cama de hielo con sal,
envuelta en paja. La receta requiere mezclar en la paila el jugo de
fruta, agua, panela, canela, claras de huevo y pimienta de olor, y batir
los ingredientes con una cuchara de palo hasta obtener el punto de
preparación.1 Estos helados fueron inventados por Rosalía Suárez,
alrededor de 1897, y es tradicional degustarlos en la heladería que
lleva su nombre, ubicada en el centro de la ciudad.2 El arrope de mora
es otro de los dulces típicos de esta ciudad, el cual es un jarabe dulce
de mora. Las nogadas son también golosinas tradicionales, realizadas
a base de nueces de nogal,3 similar al nougat y envueltas en cajas
especiales.4
Empanadas de morocho.
Café y Pan de Leche.
Es tradicional también el Norteño.
Bibliogarfia
[1] http://es.wikipedia.org/wiki/Ibarra_%28Ecuador%299
Wikipedia
[2] www.ibarra.gog.ec/archivo/index.php?option=com-content&view=articicle&id=259&Itemid=259
[3] http://www.visitaecuador.com/andes.php
Club de viajes visita ecuador
[4] http://www.visitaecuador.com/andes.php?
Club de viajes visita ecuador
[5] http://www.visitaecuador.com/andes.php?
Club de viajes visita ecuador
[6] http://www.sanantonio.gov.ec/es/san_antonio.php
[7] http://www.touribarra.gob.ec/es/atractivos/comunidades/139-ambuqui.htmla.
[8] http://www.touribarra.gob.ec/es/atractivos/comunidades/143-la-esperanza.html
[9] http://www.touribarra.gob.ec/es/atractivos/comunidades/141-angochagua.html
[10] http://www.salinasecuador.com/salinas/
[11] http://es.wikipedia.org/wiki/Ibarra_(Ecuador)
Anexos