Un Nuevo Paradigma Para Comprender El Mundo de Hoy

2
Un nuevo paradigma para comprender el mundo de hoy Alain Touraine Paidós , 2005 Alain Touraine (1925), sociólogo francés especializado en la sociología de la acción y de las sociedades postindustriales, director de estudios en la prestigiosa Escuela de Estudios Superiores en Ciencias Sociales (ÉHÉSS en sus siglas en francés) de París desde 1960, forma parte de un influyente cuarteto de intelectuales europeos, junto a Ulrich Beck, Manuel Castells y Anthony Giddens. En su último libro, aparecido a principios del pasado año –¡antes del otoño de las banlieues!– en francés (bien y prontamente traducido al castellano), Touraine escribe sobre el fin de lo social como configurador del mundo. Hemos entrado en la era de lo postsocial, de lo cultural (y lo religioso que se le añada, habrá que ver si como complemento o con autonomía propia). Los problemas culturales han tomado una importancia tal que el pensamiento social se organiza en torno a ellos. Millones de personas deploran el triunfo de un individualismo desorganizador y la ruptura de los vínculos sociales (por cierto, ¿no sería mejor traducir lien social por vínculo social, en lugar de lazo social?). El libro habla del mundo: un orden sobre el caos, un cosmos “creado” por el hombre para dar sentido a su existencia. El mundo objetivo ha cesado de ser percibido como tal y ahora sólo tenemos a mano un mundo virtual. En la primera parte Touraine parte de la ruptura provocada por el 11 de septiembre y analiza la mundialización en relación con la construcción social del Estado y la construcción de Europa, un Estado sin nación. El capítulo 4 es esencial porque aborda el fin de la representación social sobre la sociedad y la ruptura del vínculo social, para concluir con el retorno sobre sí mismo del sujeto. La segunda parte (“ahora que hablamos de nosotros en términos culturales”) pasa de la construcción del sujeto a su amenaza y atribuye al cristianismo el giro que supuso la conversión del Dios todopoderoso en un Dios de amor generador de la interiorización del sujeto en el individuo. Los derechos culturales y el posfeminismo centran el resto. Un índice onomástico y otro conceptual, además de una bien seleccionada bibliografía acompañan este manifiesto para entender el mundo que nace ante nuestros ojos, escrito por este intelectual francés en la mejor tradición de los ensayos, pero también con un cierto tono de “escrito de combate”. La tipografía original francesa subraya mejor que se trata de “un nuevo paradigma”, dejando como subtítulo “para comprender el mundo de hoy”, lo que no aparece tan claro en la edición castellana. En nuestro mundo amenazado todos luchamos para salvar nuestro “yo” como un ser de derechos y dedicamos una importancia enorme a la búsqueda del sujeto. La crisis de lo social pone en cuestión también la laicidad universal como paradigma social y abre el camino a la reivindicación de los derechos culturales (particulares) como forma de defensa en un mundo que ya no existe. Este nuevo paradigma será postsocial y cultural; no identificará la modernidad simplemente con la modernización europea, sino que deberá conjugar distintos modos de modernización. Por último, dará lugar a

Transcript of Un Nuevo Paradigma Para Comprender El Mundo de Hoy

Page 1: Un Nuevo Paradigma Para Comprender El Mundo de Hoy

Un nuevo paradigma para comprender el mundo de hoy Alain Touraine Paidós , 2005

Alain Touraine (1925), sociólogo francés especializado en la sociología de la acción y de las sociedades postindustriales, director de estudios en la prestigiosa Escuela de Estudios Superiores en Ciencias Sociales (ÉHÉSS en sus siglas en francés) de París desde 1960, forma parte de un influyente cuarteto de intelectuales europeos, junto a Ulrich Beck, Manuel Castells y Anthony Giddens. En su último libro, aparecido a principios del pasado año –¡antes del otoño de las banlieues!– en francés (bien y prontamente traducido al castellano), Touraine escribe sobre el fin de lo social como configurador del mundo. Hemos entrado en la era de lo postsocial, de lo cultural (y lo religioso que se le añada, habrá que ver si como complemento o con autonomía propia). Los problemas culturales han tomado una importancia tal que el pensamiento social se organiza en torno a ellos. Millones de personas deploran el triunfo de un individualismo desorganizador y la ruptura de los vínculos sociales (por cierto, ¿no sería mejor traducir lien social por vínculo social, en lugar de lazo social?).El libro habla del mundo: un orden sobre el caos, un cosmos “creado” por el hombre para dar sentido a su existencia. El mundo objetivo ha cesado de ser percibido como tal y ahora sólo tenemos a mano un mundo virtual. En la primera parte Touraine parte de la ruptura provocada por el 11 de septiembre y analiza la mundialización en relación con la construcción social del Estado y la construcción de Europa, un Estado sin nación. El capítulo 4 es esencial porque aborda el fin de la representación social sobre la sociedad y la ruptura del vínculo social, para concluir con el retorno sobre sí mismo del sujeto. La segunda parte (“ahora que hablamos de nosotros en términos culturales”) pasa de la construcción del sujeto a su amenaza y atribuye al cristianismo el giro que supuso la conversión del Dios todopoderoso en un Dios de amor generador de la interiorización del sujeto en el individuo. Los derechos culturales y el posfeminismo centran el resto.Un índice onomástico y otro conceptual, además de una bien seleccionada bibliografía acompañan este manifiesto para entender el mundo que nace ante nuestros ojos, escrito por este intelectual francés en la mejor tradición de los ensayos, pero también con un cierto tono de “escrito de combate”. La tipografía original francesa subraya mejor que se trata de “un nuevo paradigma”, dejando como subtítulo “para comprender el mundo de hoy”, lo que no aparece tan claro en la edición castellana. En nuestro mundo amenazado todos luchamos para salvar nuestro “yo” como un ser de derechos y dedicamos una importancia enorme a la búsqueda del sujeto. La crisis de lo social pone en cuestión también la laicidad universal como paradigma social y abre el camino a la reivindicación de los derechos culturales (particulares) como forma de defensa en un mundo que ya no existe. Este nuevo paradigma será postsocial y cultural; no identificará la modernidad simplemente con la modernización europea, sino que deberá conjugar distintos modos de modernización. Por último, dará lugar a una acción de recomposición de lo que el modelo occidental ha separado. Serán las mujeres (¡ya lo están siendo!) las que ocupen el lugar del proletariado universal revolucionario que ejerza el papel simbólico de recomponer lo que se separó un día.Josep M. Margenat

Después de la ruptura y la desaparición del modelo de la primera modernización el único movimiento cultural susceptible de insuflar a nuestra sociedad una nueva creatividad es la búsqueda de la recomposición de la vida social y de la experiencia personal: tratamos de reunir lo que ha sido separado por la primera modernización. (p. 248).