UF1120 Prevención de Riesgos Laborales y Medioambientales en El Montaje Alumnos

41
UF1120 Prevención de riesgos laborales y medioambientales en el montaje y mantenimiento de instalaciones eléctricas en telefonía Tema 1._ Conceptos básicos sobre seguridad y salud en el trabajo 1. Introducción El simple hecho de desempeñar un puesto de trabajo, por sedentario, monótono o tranquilo que parezca conlleva unas determinadas connotaciones psíquicas y físicas que hacen que el trabajador que lo desempeñe quede expuesto a una serie de riesgos, que de no evitarlos, pueden ocasionar accidentes o enfermedades. Es por ello, que cualquier empresa está en la obligación de proporcionar los medios suficientes para evitar o disminuir en la medida de lo posible, todos estos factores de riesgo que pueden ocasionar perjuicios en los trabajadores, en base a unas normas y consejos impuestos por ley. Vista la implicación de trabajadores y empresa, se hace de obligado cumplimiento el desarrollo de un manual que recoja los principales aspectos sobre prevención de riesgos laborales en el montaje de instalaciones de redes en general, ya que además, por su naturaleza eléctrica, estas llevan implícitos una serie de riesgos que será muy recomendable conocer y prevenir. Este manual tratará de informar sobre todo tipo de medidas de prevención y de seguridad en general, pero centrándose en los riesgos derivados de instalaciones eléctricas, analizándolas y aplicando planes de seguridad preestablecidos. En este capítulo se hará una introducción a conceptos básicos sobre seguridad y salud, se estudiarán los factores de riesgo profesionales, y se analizarán las consecuencias y daños derivados del trabajo, para finalmente, hacer un pequeño recorrido por el marco normativo básico en materia de prevención de riesgos laborales. 2. El trabajo y la salud Trabajo y salud “van de la mano” en el desarrollo rutinario de las tareas profesionales de un trabajador. Para desempeñar un puesto de trabajo en plenas facultades, es requisito indispensable mantener unos niveles de salud que permitan conservar al trabajador el más alto grado de bienestar físico, mental y social. Esto repercutirá en el rendimiento de sus tareas, en la productividad y en definitiva, en

Transcript of UF1120 Prevención de Riesgos Laborales y Medioambientales en El Montaje Alumnos

UF1120 Prevención de riesgos laborales y medioambientales en el montaje y mantenimiento de instalaciones eléctricas en telefonía

Tema 1._ Conceptos básicos sobre seguridad y salud en el trabajo

1. Introducción

El simple hecho de desempeñar un puesto de trabajo, por sedentario, monótono o tranquilo que

parezca conlleva unas determinadas connotaciones psíquicas y físicas que hacen que el trabajador

que lo desempeñe quede expuesto a una serie de riesgos, que de no evitarlos, pueden ocasionar

accidentes o enfermedades.

Es por ello, que cualquier empresa está en la obligación de proporcionar los medios suficientes

para evitar o disminuir en la medida de lo posible, todos estos factores de riesgo que pueden

ocasionar perjuicios en los trabajadores, en base a unas normas y consejos impuestos por ley.

Vista la implicación de trabajadores y empresa, se hace de obligado cumplimiento el desarrollo de

un manual que recoja los principales aspectos sobre prevención de riesgos laborales en el montaje

de instalaciones de redes en general, ya que además, por su naturaleza eléctrica, estas llevan

implícitos una serie de riesgos que será muy recomendable conocer y prevenir.

Este manual tratará de informar sobre todo tipo de medidas de prevención y de seguridad en

general, pero centrándose en los riesgos derivados de instalaciones eléctricas, analizándolas y

aplicando planes de seguridad preestablecidos.

En este capítulo se hará una introducción a conceptos básicos sobre seguridad y salud, se

estudiarán los factores de riesgo profesionales, y se analizarán las consecuencias y daños derivados

del trabajo, para finalmente, hacer un pequeño recorrido por el marco normativo básico en materia

de prevención de riesgos laborales.

2. El trabajo y la salud

Trabajo y salud “van de la mano” en el desarrollo rutinario de las tareas profesionales de un

trabajador. Para desempeñar un puesto de trabajo en plenas facultades, es requisito indispensable

mantener unos niveles de salud que permitan conservar al trabajador el más alto grado de bienestar

físico, mental y social. Esto repercutirá en el rendimiento de sus tareas, en la productividad y en

definitiva, en el desarrollo de la empresa, y por tanto, en la creación de un ambiente laboral

adecuado en el que todas las partes implicadas se consideren satisfechas.

Salud: La salud es definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como el completo estado de bienestar físico, mental y social, y no la mera ausencia de enfermedad

Es obvia, por tanto, la implicación directa que trabajador y empresa tienen en este “papel”. Por ello,

la empresa ha de aportar los medios oportunos para evitar los riesgos, pero el trabajador también es

responsable de utilizar esos medios y equipos según unos consejos dados, a poder ser, mediante la

adquisición de hábitos adecuados y costumbres, de modo que la utilización del equipo de protección

o la tarea de prevención entren dentro de la rutina diaria y no se convierta en una imposición.

El poder mantener ambos conceptos, trabajo y salud de modo que uno no entorpezca a otro, solo es

posible a través de costumbres, hábitos y actividades preventivas.

Para mantener activa dicha prevención se debe evitar caer en medidas de prevención puntuales, ya

que los trabajadores no son los mismos, no realizan las mismas tareas durante todo el año, y su

estado general también varía.

La prevención de riesgos no se puede tomar como acciones puntuales. Se han de desarrollar

conductas y hábitos para la prevención de todos los riesgos identificados

Por otra parte, es igualmente preciso conocer la naturaleza de los trabajos y de todos los factores

que influyen en su realización, para que así se puedan establecer unas correctas pautas preventivas.

Es por tanto necesario asimilar una serie de conceptos vistos desde el marco de la prevención de

riesgos:

n Riesgo: posibilidad de sufrir un accidente o una enfermedad laboral.

n Prevención: todo procedimiento encaminado a evitar riesgos.

n Estándar: es la norma. Las pautas correctas a seguir.

n Subestándar: es lo contrario a la norma. Son los hechos realizados sin seguir la

norma correcta.

n Peligro: es la situación subestándar que puede provocar accidentes no solo en las

personas, si no en dispositivos materiales.

n Pérdida: es la causa de la bajada de rendimiento. Es disminución indeseada de

productividad material o humana.

n Accidente: suceso que es provocado por una acción repentina que da lugar a una

lesión corporal.

n Incidente: cuando se puede frenar el hecho que va a provocar el accidente.

Caso práctico:

Imagine que usted es el delegado de prevención de riesgos laborales de su empresa, y se encuentra

desempeñando el papel de interlocutor ante una inspección en materia de prevención de riesgos. Un

compañero suyo, se encuentra canalizando un ramal de la red telefónica, a una altura que le implica

estar subido en un andamio. El inspector le observa y le pregunta si considera a ese trabajador en

situación de riesgo o peligro.

¿Cómo respondería?

SOLUCIÓN

Para un trabajador en altura. ¿Existe riesgo? Indudablemente sí.

Siempre hay una posibilidad, aunque sea mínima de sufrir un accidente. ¿Existe peligro? Depende. Si

el trabajador está sobre un andamio homologado, bien montado, con un adecuado sistema anti-

caídas y ha recibido formación adecuada para prevenir riesgos, es decir, si se está en una situación

estándar, como debería ser, no habrá peligro

3. Los riesgos profesionalesLos riesgos profesionales son aquellos a los que está sometida cualquier persona por el hecho de

desempeñar un trabajo. El trabajo permite alcanzar unos objetivos y asegurar una serie de

necesidades vitales, pero el desempeño de dicha actividad está expuesto a unos riesgos que pueden

influir en la salud. Se prevé por tanto necesario identificar y controlar dichos riesgos profesionales

Los riesgos profesionales tendrán distinta naturaleza. La exposición a un gas tóxico y el desgaste

psíquico de un trabajo poco motivador son distintos caminos para un mismo fin: perjudicar la salud

del trabajador. Dentro de esta relación hay que destacar los siguientes puntos:

n El trabajo puede influir en la salud tanto positiva (favorece la motivación y realización

personal) como negativamente (a causa de los riesgos laborales).

n El empresario ha de ser consciente de que debe invertir en seguridad, ya que

provocará menos pérdidas en sus recursos materiales y humanos, aumentando así

rendimientos.

n El trabajo es preciso para satisfacer determinadas necesidades pero llevado de forma

inadecuada repercutirá de forma negativa en la salud.

n Los medios materiales, instalaciones y equipos de la empresa no deben ser fuente de

riesgos.

n Las personas, la organización, el buen ambiente de trabajo, etc., también son factores

influyentes en la salud, y a su vez, en el trabajo.

n Las condiciones de seguridad no son eternas. Si en una compañía cambian los

procesos, la organización, o los medios técnicos y materiales usados, los riesgos serán

distintos, y por tanto su modo de prevención será también diferente.

4. Factores de riesgo

Los factores de riesgo son elementos que se pueden presentar mediante cualquier tipo de

circunstancia o situación, y siempre pueden originar un accidente.

La salud se puede ver alterada por muchos motivos. No se puede entender la prevención de

riesgos como “prevención de accidentes”, ya que existen muchos factores psicológicos que en

algunas ocasiones provocan enfermedades a largo plazo mucho más perjudiciales que muchos de los

accidentes puntuales que se pudiesen producir.

Dentro de este aspecto psicológico también es importante la ubicación del trabajador en el puesto

de trabajo que mejor se adapte a sus capacidades. Un trabajo desacorde con las habilidades

profesionales de una persona afectará de forma negativa al bienestar del trabajador.

Dentro de los factores de riesgo que pueden perjudicar la salud se encuentran los siguientes:

n Trabajos poco motivadores.

n Procedimientos de trabajo peligrosos.

n Materiales tóxicos utilizados en algún proceso de elaboración de productos.

n Factores estructurales: trabajos en altura, instalaciones, maquinaria, etc.

n Uso de herramientas inadecuadas.

n Desarrollo de los trabajos en malas condiciones (gases tóxicos, ruido, calor,

radiaciones, etc.).

n Uso inadecuado de nuevas tecnologías.

n Disponer de una estructura empresarial de elevada jerarquización, con falta de

confianza en los trabajadores.

A medida que se incide en la temática de prevención se observa que la exposición a los riesgos

laborales es mayor de la que en principio se pudiera pensar. Por esto se aborda la necesidad de

realizar un completo estudio de cada uno de ellos, abarcando:

n La identificación original para cada tipo de riesgo y los peligros derivados.

n La evaluación del riesgo.

n La parametrización para llevar a cabo su control.

n Realización de un seguimiento adecuado.

5. Consecuencias y daños derivados del trabajo

Entre las obligaciones que por ley tiene un empresario en la prevención de riesgos laborales

destacan las siguientes:

n Evitar los máximos riesgos posibles.

n Evaluar los riesgos inevitables.

n Afrontar la batalla contra los riesgos desde el origen de los mismos.

n Adaptación del trabajo en sí, equipos y métodos de trabajo para cada persona.

n Adaptación a los nuevos procesos de la empresa.

n Sustitución de todo lo peligroso, por peligro controlado o peligro inexistente.

n Planificación de la prevención.

n Imponer inicialmente medidas preventivas colectivas, para después detallar las que se

aplicarán individualmente.

n Informar adecuadamente sobre todas las instrucciones en materia de prevención a los

trabajadores.

La Ley de Prevención de Riesgos Laborales 31/1995, de 8 de noviembre en su artículo 15, define los “principios generales de la acción preventiva” que el empresario está obligado a aplicar.

El riesgo y el peligro pueden tener los mismos orígenes: actividad laboral en sí, ambiente de

trabajo, equipos, materiales, instalaciones, etc., no obstante, habría que diferenciar el término

peligro, considerado como algo inminente y próximo, del término riesgo, entendido como

probabilidad de que ocurra algo por el desempeño de un trabajo.

CASO: Un trabajador que está fumando junto a unos bidones de algún tipo de sustancia

inflamable, está en peligro, mientras que el riesgo sería la probabilidad de que los bidones estallaran

como consecuencia de las tareas propias de un trabajo (un mal contacto de una central de telefonía

instalada en un radio cercano a la sustancia inflamable).

No obstante, bajo un término u otro, el objetivo fundamental es minimizar o anular en la medida

de lo posible ambos conceptos para disuadir los daños derivados del trabajo. La solución es mantener

una constante y firme actividad preventiva. En ella se analizarán las condiciones de trabajo en

función de sus características y se determinará si son condiciones estándar o subestándar, es decir,

si el trabajo que se está desarrollando se está haciendo de una forma correcta o no.

Para poder analizar las condiciones de trabajo y poder aplicar planes preventivos será necesario

conocer todos los factores que pudieran estar presentes en las actividades. Estos factores se pueden

clasificar en:

n Factores materiales.

n Factores físicos:

· Mecánicos.

· Eléctricos.

· Ópticos.

· Atmosféricos.

· Acústicos.

· Vibraciones.

· Radiaciones.

. Factores químicos:

· Agentes sólidos.

· Agentes líquidos.

· Aerosoles sólidos o líquidos.

· Gases y vapores.

. Factores biológicos:

· Bacterias.

· Virus.

· Parásitos.

· Hongos.

. Factores personales:

· Fisiológicos.

· Psicológicos.

· Psicosociales.

. Socio-empresariales:

· Formativos.

· Culturales.

· Adaptativos.

Una vez conocidos todos los factores que pueden intervenir en una actividad laboral se seguirán

los principios generales de la acción preventiva:

· Evitar los riesgos en primera instancia o evaluarlos cuando no sea viable su eliminación

· Luchar contra los riesgos desde el origen y analizar las causas de las posibles malas actuaciones

Una vez analizados los peligros será turno de conocer las consecuencias que se pueden generar

en cada uno de ellos.

5.1. Accidente de trabajo

Cabe recalcar que el accidente se ha de entender como algo no deseado que originará pérdidas a

los trabajadores, a los medios físicos o a los procesos laborales, y consecuentemente, al rendimiento

global.

Los accidentes no son fruto de una casualidad sino que son originados, en primer lugar, por

motivos evitables, y en segundo lugar, por una cadena de causas. Es decir, los accidentes se

producen por toda una serie de circunstancias dependientes unas de otras, por lo que con eliminar

cualquier eslabón de esa cadena podría evitarse la aparición del citado accidente.

En la investigación de las posibles causas de accidentes se ha de diferenciar entre causas

técnicas (equipamiento de trabajo inadecuados), y causas humanas (mal uso de equipos o

actuaciones inseguras en general). Es por ello importante el estudio de las causas que producen los

accidentes con objeto de eliminar todas las que sean posibles, reduciendo así el número de estos.

Aunque al hablar de accidente se suele pensar en lesiones físicas, también hay que tener en

consideración los accidentes que generan trastornos psicológicos. Por ello, no basta con limitar la

prevención a accidentes físicos, sino que también habrá que velar por mantener un buen estado de

salud psíquico y social.

Es por tanto que serán igualmente evaluables parámetros como la carga de trabajo, la distribución

apropiada de las tareas, estilos de mando (gestión de la jerarquización, etc.) para no ocasionar

situaciones de estrés o insatisfacción laboral de forma general.

Para poder controlar todos estos factores existen una serie de técnicas y ciencias utilizadas en el

desarrollo de los planes de prevención. Entre ellas se encuentran:

n Ergonomía: conjunto de ciencias que vela por la coordinación entre trabajo-persona.

n Psicología (aplicada a PRL): estudia los factores psicológicos que afectan al

trabajo.

n Medicina del trabajo: intenta cuidar y mejorar el estado de salud del trabajador.

5.2. Enfermedad profesional

La enfermedad profesional es otra consecuencia directa de riesgos y peligros provenientes de una

mala política de gestión en la prevención. Según el artículo 116 de la Ley General de la Seguridad

Social, R.D. 1/1994:

Enfermedad profesional

Es aquella enfermedad contraída a consecuencia del trabajo ejecutado por cuenta ajena en las

actividades que se especifiquen en el cuadro que se apruebe por las disposiciones de aplicación y

desarrollo de dicha ley, y que esté provocada por la acción de los elementos o sustancias que en

dicho cuadro se indiquen para cada enfermedad profesional.

Cabría destacar una importante diferenciación entre accidente y enfermedad profesional, ya que

el primero se considera como un acontecimiento inesperado y casi inmediato, mientras que la

segunda aparece tras un tiempo de exposición del trabajador al agente que la origina.

Este hecho conlleva dos consecuencias muy graves:

n Cuando se detecta la enfermedad ya está arraigada en el trabajador.

n Al haber transcurrido tanto tiempo desde su origen la relación causa-efecto será difícil

de determinar, y por lo tanto, el motivo concreto que la originó no quedará claro a priori.

El cuadro de enfermedades profesionales (según Real Decreto 1299/2006, de 10 de noviembre)

las clasifica en seis grupos:

n GRUPO 1: enfermedades profesionales causadas por agentes químicos.

n GRUPO 2: enfermedades profesionales causadas por agentes físicos.

n GRUPO 3: enfermedades profesionales causadas por agentes biológicos.

n GRUPO 4: enfermedades profesionales causadas por inhalación de sustancias y agentes

no comprendidas en otros apartados.

n GRUPO 5: enfermedades profesionales de la piel causadas por sustancias y agentes no

comprendidas en otros apartados.

n GRUPO 6: enfermedades profesionales causadas por agentes carcinogénicos.

La enfermedad profesional aparece transcurrido un tiempo de la exposición a los agentes que la

originan. Este hecho provoca dificultades en la emisión del diagnóstico y causalidad de la misma.

De todas estas enfermedades se derivarán los siguientes daños:

n Envenenamientos, irritaciones, intoxicaciones y asfixia.

n Infecciones producidas por virus, bacterias, hongos y parásitos.

n Hipoacusia, síndrome de Raynaud(Es un trastorno que afecta a los capilares de las

manos y pies, provocando palidez y enfriamiento de los mismos), golpe de calor y efectos

deterministas de las radiaciones.

n Ulceraciones y cáncer.

5.3. Otras patologías derivadas del trabajo

Cabría destacar la incorporación de todo el apartado psíquico como nuevo elemento de estudio de

prevención. Hasta hace relativamente poco tiempo, solo los riesgos y peligros que derivaban en

connotaciones físicas contaban en los planes de prevención, y es que obviamente, los aspectos

físicos son directamente visibles, evaluables y fácilmente estudiables.

No obstante, y debido al ritmo de vida actual, el plano psicosocial ocupa un papel fundamental en

el desarrollo de un trabajo, ya que este entraña una serie de aspectos no visibles que ocultan

peligros y riesgos, perjudicando notablemente la salud y entorpeciendo el plan de prevención.

Dentro de este conjunto no evaluable físicamente se podrían destacar dos patologías derivadas

del trabajo, consecuencia de todos los aspectos negativos que entrañan los factores psicosociales:

n Fatiga: no solo entendida como fatiga física producida por mantener un nivel de esfuerzo

corporal por encima de lo normal, sino también, como necesidad de sobrepasar la capacidad

mental de una persona cuando lo requiere un trabajo.

n Insatisfacción: fenómeno que origina rechazo al trabajo y entrada en una espiral peligrosa de

desilusión, desmotivación y consecuentemente pobre rendimiento, provocados por:

n Falta de participación.

n Exigencias inadecuadas.

n Carácter plano del individuo.

n Frustración.

4. Repercusiones económicas y de funcionamiento

A parte de todos los daños derivados de los accidentes, cabría mencionar otro tipo de pérdidas de

carácter económico.

La aplicación de un mal plan de prevención no conllevará únicamente riesgos, daños y accidentes,

sino que tendrá una serie de repercusiones en el funcionamiento de la cadena empresarial,

provocando pérdidas económicas diferenciadas en dos tipos: directas e indirectas.

Las repercusiones económicas directas serán consecuencia inmediata de los accidentes o

daños que pudieran ocurrir en la organización. Estos son del tipo:

n Pagos a la seguridad social.

n Días laborables no trabajados por el empleado.

n Necesidad de nuevos contratos y formación en caso de sustituciones.

n Daños materiales que se pudieran generar en los equipos.

Sin embargo, las repercusiones económicas indirectas son motivadas por un mal funcionamiento

en la cadena diaria y el “modus operandi” empresarial, alterando el mecanismo productivo del día a

día. Este mal funcionamiento tiene las siguientes consecuencias:

n Disminución de la producción por días laborables no trabajados, o trabajados a menor

rendimiento.

n Posibles retrasos en entrega de proyectos u otro tipo de imagen negativa que se pudiera

transmitir a los clientes.

n Se podrían incluir también los daños materiales, ya que estos, además de tener una

consecuencia económica directa (sustitución o reparación) provocarán una alteración en el

proceso de producción o venta de la compañía.

CASO:

En el proceso de canalización empotrada de una red de telefonía en una oficina en cons-trucción, un compañero se lesiona un pie con los clavos de un tablón. Usted, como responsable de prevención de riesgos de su empresa, ¿cómo analizaría la situación para llegar al fondo de la cuestión?

Solución :

Si un trabajador se hinca unos clavos en un pie es porque no posee calzado de seguridad

(situación subestandar). La lesión del pie ocasionará pérdidas. Las causas del accidente son que

el trabajador no lleva calzado de seguridad, y que se han abandonado tablones con puntas en

zona de paso. Pero hay que ir más allá. ¿Cuál ha sido la causa básica para que pasara este

accidente? ¿El trabajador no estaba formado o informado sobre la necesidad de llevar calzado de

seguridad? ¿Habían dotado al trabajador con calzado adecuado? ¿Se lleva algún tipo de actividad

preventiva en la obra? ¿Cómo se ha podido llegar a esta situación subestándar sin que se actuara

antes del accidente? Es necesario contestar todas estas preguntas para llegar a la causa del

accidente.

6. Marco normativo básico en materia de prevención de riesgos laborales

Dentro del marco laboral existen una serie de normativas que velan por la protección de los

trabajadores frente a los peligros que puedan conllevar sus trabajos.

El estatuto de los trabajadores (R. D. 1/1995, de 24 de marzo), que es un texto que regula la

relación laboral en general, hace también referencia a términos de seguridad e higiene, por lo que

puede ser considerado otro pilar fundamental en el marco normativo en materia de prevención.

Concretamente, los apartados, derechos y deberes correspondientes son:

n art. 4.2d: los trabajadores tienen derecho a la integridad física y a una adecuada

política de seguridad e higiene.

n art. 5.b: los trabajadores tienen como deberes básicos observar las medidas de

seguridad e higiene que se adopten.

n art. 19.1: el trabajador, en la prestación de sus servicios, tendrá derecho a una

protección eficaz en materia de seguridad e higiene.

n art. 19.2: el trabajador está obligado a observar en su trabajo las medidas legales y

reglamentarias de seguridad e higiene.

n art. 19.3: el trabajador tiene derecho a participar en la inspección y control de las

citadas medidas de seguridad e higiene.

n art. 19.4: el empresario está obligado a facilitar la formación práctica y adecuada en

materia de seguridad e higiene en el momento de la contratación del trabajador, al cambiar de

puesto de trabajo, o cuando este necesita aplicar nuevas técnicas que entrañen algún tipo de

peligro. A su vez, el mismo artículo recoge la obligatoriedad por parte del trabajador de seguir

dichas pautas.

n En los siguientes epígrafes se realizará un estudio más profundo de todo el marco

normativo que rodea la prevención de riesgos laborales

6.1. Ley de Prevención de Riesgos Laborales

Todas las actuaciones y acciones que se dispongan en materia de prevención están recogidas por

ley, concretamente la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (Ley 31/1995 de 8 de noviembre de

1995).

Básicamente, las normas que recoge se basan en la obligación de protección que toda empresa

tiene respecto a sus trabajadores. Esto queda reflejado en el artículo 14, donde se informa de la

obligatoriedad de acción anticipada de la empresa (prevención) antes de la producción de cualquier

daño.

La LPRL está compuesta por 7 capítulos y 54 artículos, en los que se puede destacar:

n Capítulo I: objeto de la ley, ámbito de aplicación y definiciones. En él se especifica que la

promoción de la seguridad y salud de los trabajadores es objeto de la ley.

n Capítulo II: objetivos, normas reglamentarias y actuaciones de la administración pública.

En él se recogen las normas básicas de las administraciones públicas y organizaciones de

empresarios y trabajadores en materia de prevención.

n Capítulo III: derechos y obligaciones. En este apartado se especifican los derechos y

obligaciones de empresarios y trabajadores. Los primeros deben velar por la seguridad de sus

empleados y proporcionar recursos (físicos y personales) para llevar a cabo un correcto plan de

prevención. Los segundos han de adoptar dicho plan. Se podría resumir algunas actuaciones de

ambas partes:

Capítulo IV: servicios de prevención, donde se recogen los servicios prestados a empresarios,

representantes y trabajadores de los órganos especializados en materia de prevención. El

empresario ha de contactar con entidades adecuadas que ofrezcan estos servicios, teniendo

que estar estas debidamente acreditadas por la administración laboral.

n Capítulo V: consulta y participación de los trabajadores. En él se informa de la necesidad de

creación de la figura del delegado de prevención que será el representante de los trabajadores

en materia de prevención, y canalizará todas las comunicaciones en este campo, entre

empresario y trabajadores.

n Capítulo VI: obligaciones de los fabricantes, importadores y suministradores de maquinaria,

equipos, productos y útiles de trabajo. Igualmente que empresarios y trabajadores disponen

de sus obligaciones, toda empresa suministradora de material, objeto de ser usado en un

entorno laboral, ha de garantizar unas pautas mínimas de trabajo sin riesgos.

n Capítulo VII: responsabilidades y sanciones. Aquí se contemplan las sanciones económicas

directas en caso de incumplimiento de la ley, oscilando desde los 30 a los 600.000 euros en

función de la gravedad de la infracción.

6.2. El reglamento de los Servicios de Prevención

La LPRL deriva en el Reglamento de los Servicios de Prevención (R.D. 39/1997, de 17 de enero), el cual

recoge tres puntos fundamentales en el marco de acciones preventivas, como son:

n Evaluación de riesgos y planificación de la actividad preventiva. La evaluación de riesgos es

necesaria, principalmente, en aquellos riesgos que no han podido evitarse, extendiéndose a

cada uno de los puestos de trabajo, y en las condiciones de trabajo tanto existentes como

previstas. Toda evaluación de riesgos debe reciclarse cuando se incluyan nuevos equipos de

trabajo en la empresa, cambien las condiciones generales de trabajo, incorporaciones de

nuevos trabajadores, etc.

Tras dicha evaluación, el empresario deberá poner en marcha un plan de acciones

preventivas con el objetivo de minimizar o anular los riesgos detectados.

Evaluación de riesgos: En el art. 3 del Reglamento de los Servicios de Prevención se define la evaluación de riesgos como el proceso dirigido a estimar la magnitud de aquellos riesgos que no hayan podido evitarse, obteniendo información necesaria para que el empresario esté en condiciones de tomar una decisión apropiada sobre la necesidad de adoptar medidas preventivas y, en tal caso, sobre el tipo de medidas que deben adoptarse

n La organización. Todo empresario debe adoptar una organización de recursos para

desempeñar el conjunto de actividades preventivas. Esta organización corresponderá a alguna

de las siguientes estructuras:

· En empresas de hasta 6 trabajadores, el empresario podría asumir la actividad

preventiva, no siendo necesario tampoco ningún delegado de formación, pero siempre que

la empresa no pertenezca al grupo de actividades de especial peligrosidad, y el empresario

esté capacitado para la realización de las funciones.

· Se pueden designar uno o varios trabajadores para asumir el conjunto de actividades

preventivas, de igual forma, siempre y cuando estén capacitados.

· En empresas de más de 250 trabajadores se puede constituir un servicio de

prevención propio, con los medios humanos y materiales necesarios.

· Como última opción se puede recurrir a una entidad especializada para que asuma el

asesoramiento, ejecución y apoyo necesario en toda actividad de prevención.

n Funciones y niveles de cualificación para el desempeño de las actividades preventivas. En el

reglamento se pueden encontrar tres niveles de funciones preventivas y formación relacionada

para cada una de ellas:

Funciones de nivel básico. Donde se promueven comportamientos seguros, actuaciones

preventivas básicas y donde se realizan evaluaciones elementales de riesgos, así como

actuaciones primarias en casos de emergencia.

· Funciones de nivel intermedio. En este nivel se promueve la prevención en la empresa con

carácter general. En este punto se desarrollan las acciones formativas y de vigilancia del

cumplimiento de la norma y programa de control de riesgos.

· Funciones de nivel superior. Aquí se destacan las funciones correspondientes a todas

las disciplinas preventivas de medicina y seguridad del trabajo, higiene industrial,

ergonomía y psicosociología aplicada.

6.3. Alcance y fundamentos jurídicos

Cabría decir que el alcance último de aplicación de toda la materia de prevención, es en definitiva,

el fijar unos niveles óptimos de protección a todos los trabajadores. Precisamente esta premisa es la

que incluye la política de “seguridad y salud de los trabajadores en el lugar de trabajo”, dentro de la

política social de la Unión Europea.

Textualmente, se recoge que “los Estados miembros procurarán promover la mejora, en

particular, del medio de trabajo, para proteger la seguridad y la salud de los trabajadores, y se fijarán

como objetivo la armonización, dentro del progreso, de las condiciones existentes en ese ámbito”,

entendiendo como ámbito a todo el territorio europeo.

Es por ello que se puede deducir, que además de la protección de todos los trabajadores, se está

intentando que dicha protección sea homogénea en todos los Estados de la Unión Europea, para ello:

n La Unión Europea elabora directivas en donde se recogen las disposiciones mínimas

que los Estados deben adoptar.

n A su vez, los Estados están obligados a asumir dichas directivas, aunque tengan

ciertas libertades de aplicación.

6.4. Directivas sobre seguridad y salud en el trabajo

Existe una directiva concreta en este ámbito que promueve la mejora de la seguridad y de la

salud de los trabajadores en el entorno laboral, concretamente, es la directiva principal sobre

seguridad y salud en el trabajo: 89/3921/CEE (Directiva del Consejo de 12 de junio de 1989).

En ella se incluyen las normas a seguir entre empresa-trabajador para establecer unas garantías

de seguridad y salud.

Dentro de la directiva marco existen una serie de directivas específicas, todas ellas referidas

obviamente a puntos sobre seguridad y salud en el trabajo, pudiéndose clasificar en:

n Colectivos especiales de trabajadores: trabajadoras embarazadas, trabajos temporales,

trabajos menores, etc.

n Lugares de trabajo: lugares generales y específicos como obras puntuales, minas, pesca, etc.

n Agentes contaminantes: físicos, químicos, biológicos, etc.

n Otras directivas: equipos de trabajo, pantallas de visualización, manipulación de cargas, etc.

7. Organismos públicos relacionados con la seguridad y salud en el trabajo

Deben existir distintas herramientas ejecutivas y legislativas que den soporte a toda la red que

envuelve la seguridad y salud en el trabajo. Serán distintas instituciones y organismos de carácter

público quienes desempeñen unas funciones y ofrezcan unos servicios dentro del área de

prevención.

Aun existiendo organismos internacionales y otros un poco más específicos, se van a dar a

conocer principalmente, organismos de carácter autonómico y nacional, ya que son al fin y al cabo

los directamente responsables sobre el trabajador y la empresa, y los que adoptarían cualquier

directiva o consenso proveniente de otro organismo.

7.1. Organismos nacionales

Organismos nacionales existentes, al amparo de la seguridad y salud en el trabajo:

Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT)

Es el órgano científico-técnico especializado de la Administración General del Estado que tiene

como misión el análisis y estudio de las condiciones de seguridad y salud en el trabajo, así como la

promoción y apoyo a la mejora de las mismas.

A su vez, el INSHT está compuesto por distintos órganos: Dirección, Consejo y Centros Nacionales

del Instituto.

Se encuentra adscrito al Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales a través de la Secretaría General

de Empleo

Le corresponden las funciones de asesoramiento técnico, promoción y desarrollo de actividades

de formación, información, investigación, estudio y divulgación del desarrollo de programas de

cooperación internacional, etc., contando con la colaboración, en su caso, de los órganos técnicos de

las comunidades autónomas en la materia.

Concretamente, son dos líneas de actuación principales las que posee:

n Análisis y estudio de las condiciones de seguridad y salud en el trabajo.

n Promoción y apoyo a la mejora de las condiciones de seguridad y salud en el trabajo.

Logotipo del INSHT Inspección de Trabajo y Seguridad Social

Este organismo es el encargado de vigilar el cumplimiento de la normativa sobre prevención de

riesgos laborales, así como de las normas jurídico-técnicas que incidan en las condiciones de trabajo

en materia de prevención, proponiendo además, en su caso, la sanción que corresponda aplicar. Se

podrían resumir sus funciones en:

n Asesorar e informar a las empresas y a los trabajadores sobre la manera más efectiva

de cumplir las disposiciones cuya vigilancia tiene encomendada.

n Elaborar los informes solicitados por los juzgados de lo social.

n Informar a las autoridades laborales.

n Comprobar y favorecer el cumplimiento de las funciones asumidas por los servicios de

prevención.

n Ordenar la paralización de los trabajos en los que se advierta la existencia de riesgo

grave e inminente.

Administraciones públicas competentes en materia sanitaria

Según la LPRL, a las administraciones públicas les corresponden las siguientes funciones:

n El establecimiento de medios adecuados para la evaluación y control de las

actuaciones de carácter sanitario que se realicen en las empresas por los servicios de

prevención actuantes.

n La implantación de sistemas de información adecuados.

n La supervisión de la formación impartida en el ámbito sanitario.

n La elaboración y divulgación de estudios, investigaciones y estadísticas relacionados

con la salud de los trabajadores.

Comisión Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo

Es un órgano asesor de las administraciones públicas en la formulación de las políticas de

prevención. Está creado por la LPRL.

Esta comisión está integrada por un representante de cada una de las comunidades autónomas,

y por igual número de miembros de la Administración General del Estado y, paritariamente con todos

ellos, por representantes de las organizaciones sindicales y empresariales más representativas.

Otras administraciones públicas relacionadas con la seguridad y salud en el trabajo

En este apartado cabría únicamente destacar las competencias atribuidas al Ministerio de

Industria y Energía, en relación a la ordenación y seguridad industrial, regulados en la Ley 21/1992

de 16 de julio, de Industria.

Esta materia se concentra en varios artículos recogidos en dos capítulos:

n Capítulo I. Seguridad industrial. Basado en el objeto de la seguridad en sí y en la

prevención y limitación de riesgos en el entorno industrial. Además de promover la prevención

y limitación de riesgos, intenta regular la protección contra accidentes y siniestros capaces de

producir daños o perjuicios a las personas, flora, fauna, bienes o al medio ambiente derivados

de la actividad industrial.

n Capítulo II. Calidad industrial. En donde a través de sus artículos se habla de

infraestructura de la calidad, de su promoción, del registro de establecimientos industriales y

sus fines, de los procesos de comunicaciones de datos entre empresas, agentes y

colaboradores de administraciones públicas, así como de infracciones y sanciones.

7.2. Organismos de carácter autonómico

La Constitución española, en su artículo 149.1.7, reserva al Estado la competencia exclusiva en

materia de legislación laboral.

No obstante, existen comunidades autónomas que tienen transferidas las competencias en

materia de ejecución de legislación laboral, por lo que dispondrán de la potestad sancionadora que

se efectuará de acuerdo con su regulación propia, a propuesta de la Inspección de Trabajo y

Seguridad Social.

Los órganos de dichas comunidades con competencias desarrollan funciones como la

investigación de accidentes, la formación y el asesoramiento técnico en estas materias y constituyen,

junto con la Inspección de Trabajo, los órganos de la administración que mantienen una relación más

directa con los trabajadores y las empresas.

Las sanciones por incumplimiento de la normativa sobre prevención de riesgos laborales son

impuestas por las autoridades laborales competentes a propuesta de la Inspección de Trabajo y

Seguridad Social.

Ejercicios de repaso y autoevaluación

1. Ordene la frase para formar la definición de salud, dada por la Organización Mundial de la Salud.

El completo estado ausencia de bienestar la mera y no enfermedad físico, mental y social.

2. ¿A través de qué dos tipos de actividades lleva a cabo su misión principal el I.N.S.H.T?

3. Complete la siguiente frase:

Para desempeñar un puesto de_________en plenas__________________________ , es requisito indis-pensable mantener unos niveles de ________ que permitan mantener al __________en el más alto nivel de ________físico, __________ y .

4. Relacione cada concepto con su significado:

a. Riesgo.b. Subestándar.c. Peligro.d. Accidente.e. Incidente.

1. Son los hechos realizados sin seguir la norma correcta.2. Posibilidad de sufrir un accidente o una enfermedad laboral.

3. Suceso que es provocado por una acción repentina que da lugar a una lesión corporal.4. Cuando se puede frenar el hecho que va a provocar el accidente, se produce un incidente.5. Es la situación anormal que puede producir accidentes no solo en las personas, si no en dispositivos materiales.

5. Indique si las siguientes afirmaciones son verdaderas o falsas.

El trabajo puede influir en la salud tanto positiva como negativamente.

o Verdaderoo Falso

El empresario ha de ser consciente de que debe invertir en seguridad, y ello provocará un aumento de los rendimientos.

o Verdaderoo Falso

Trabajo y salud pueden desarrollarse sin interrelacionarse.

o Verdaderoo Falso

Se asume que los medios materiales, instalaciones y equipos de la empresa son fuente de riesgos.

o Verdaderoo Falso

6. Relacione los siguientes factores según sean físicos, mecánicos, biológicos, personales o socio-empresariales:

· Acústicos.· Psicosociales.· Radiaciones.· Mecánicos.· Adecuacionales.· Eléctricos.· Culturales.· Agentes líquidos.· Aerosoles sólidos o líquidos.· Agentes sólidos.· Bacterias.· Gases y vapores.· Virus.· Atmosféricos.· Vibraciones.

· Parásitos.· Fisiológicos.· Hongos.· Psicológicos.· Formativos.· Ópticos

7. Busque distintos tipos de conceptos estudiados en el capítulo:

R I E S G O O V

M A R C O R Ñ A

R A C I G O A D

V A R I T E D U

C A L I M O M L

T E I N S H T A

P R L A K E T S

8. Identifique los procesos que faltan en el estudio de cada riesgo:

9. Señale la afirmación correcta en relación a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.

a. Está compuesta por 6 capítulos y 54 artículos.b. La reforma más importante de la ley implicó su integración en el tejido empresarial y data de 1995.c. La ley recoge todas las actuaciones y acciones que se dispongan en materia de prevención.d. Su fundamento se basa en las normativas aplicables a empresarios.

10. ¿Podría destacar alguna diferenciación entre accidente y enfermedad profesional? ¿Qué consecuencias acarrearía la enfermedad?

TEMA 2 Riesgos generales y su prevención

1. Introducción

En este capítulo se podrán estudiar los riesgos de todas las circunstancias que intervengan en una

instalación. Se comenzará por describir los riesgos en el manejo de herramientas y equipos, así como

los derivados de la manipulación de sistemas e instalaciones en general.

Posteriormente se explicarán los riesgos originados en el almacenamiento y transporte de

cargas, además de los derivados de exposiciones a agentes físicos, químicos y fuego, muy

presentes en los almacenes de materiales de instalaciones.

Terminados de estudiar los riesgos físicos se hablará sobre aquellos derivados de la carga del

trabajo, como fatiga mental, insatisfacción laboral, etc.

Finalmente se hará un recorrido por los medios de protección individual y colectiva de los

trabajadores.

2. Riesgos en el manejo de herramientas y equipos

Las herramientas y los equipos utilizados en cualquier tipo de instalación son los utensilios

simples, cuyo funcionamiento es accionado única y exclusivamente por el esfuerzo físico del hombre,

sin considerar en este conjunto al equipamiento accionado por energía eléctrica o por medios

mecánicos.

Por tanto, los riesgos derivados del uso de herramientas y equipos en instalaciones de telefonía

son:

n Proyecciones de partículas hacia los ojos, sobre todo con el uso del taladro cuando se

realizan agujeros en la pared o techo para canalizaciones de tubo rígido o canaletas, o para la

fijación de tomas de voz.

n Cortes y pinchazos, principalmente en el trabajo con cableado en el momento de su

crimpado o con la retirada del aislante para pelarlo.

n Golpes y caídas de las herramientas. Esta circunstancia es continua, sobre todo

cuando se requiere de canalización de telefonía sobre techo, y el trabajo se está desarrollando

en altura.

También en el momento del trabajo de acondicionamiento de la canalización, ya que se necesitará realizar cortes con segueta para adecuar la misma a la orografía que presente el local.

n Explosión o incendio (chispas en ambientes explosivos o inflamables). Las centrales de

telefonía pueden no tener una buena conexión a tierra

o disponer de una mala alimentación eléctrica, por lo que se pueden generar chispazos (malos

contactos eléctricos que deriven en incendios

oexplosiones).

Para atenuar o eliminar cada uno de estos riesgos se deberán adoptar las siguientes medidas preventivas:

n En cada trabajo se utilizará el equipamiento adecuado, empleándolo solo para la

función que fue diseñado. Es decir, no se utilizarán llaves fijas como martillos, destornilladores

como palancas, navajas como destornilladores, etc.

n Cada usuario debe comprobar el buen estado de sus equipos y herramientas antes de

su uso, inspeccionando cuidadosamente mangos, filos, zonas de ajuste, partes móviles,

cortantes y susceptibles de proyección, y será responsable de la conservación tanto de las

herramientas que tenga encomendadas como de las que utilice ocasionalmente. Solo así es

posible el control, cuidado y conservación del equipamiento empleado en las instalaciones.

n Las herramientas se han de mantener limpias y en buenas condiciones, evitando

utilizarlas con mangos flojos, mal ajustados y astillados, sobre todo en martillos convencionales

o de goma, tan empleados en las canalizaciones.

n Ningún equipo se debe llevar en los bolsillos. Se deberán usar las cajas adecuadas en

cada caso para su transporte.

n Cuando una canalización o tirada de cable sea por techo e implique trabajos en

altura, las herramientas se transportarán en cintos portaherramientas, a fin de tener las

manos libres. Uno de los principales peligros de los trabajos en altura y que se tiene en muy

poca consideración son las caídas de las herramientas y la posibilidad de originar daños a

terceros.

n Las herramientas de corte, como crimpadoras de presión o impacto, pelacables, etc.,

se mantendrán afiladas y con el corte protegido o tapado mediante tapabocas de caucho,

plástico o cuero.

n Las herramientas y los equipos deberán estar ordenados adecuadamente, tanto

durante su uso como en su almacenamiento, procurando no mezclar las que sean de diferentes

características.

ImportanteEsto además de seguridad ahorrará en eficacia y tiempo de ejecución de las instalaciones.

n En caso de duda sobre la utilización correcta de una determinada herramienta o equipo se

debe preguntar al superior inmediato antes de usarla.

Son dos las normativas que velan por la seguridad en el trabajo relacionadas con el uso de herramientas y equipos:

Real Decreto 1215/1997, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridady salud para la utilización por los trabajadores de equipos y herramientas de trabajo.

Real Decreto 1644/2008, de 10 de octubre, por el que se establecen las normas para la comercialización y puesta en servicio de las máquinas.

3. Riesgos en la manipulación de sistemas e instalaciones

Un sistema, entendido en instalaciones como un elemento con algún tipo de componente

mecánico y/o eléctrico, generará diversos peligros diferentes a los de las herramientas simples

estudiadas hasta ahora.

Además, debido al componente electro-mecánico de los sistemas e instalaciones, estos deben

poseer protecciones adicionales con unos determinados requisitos:

n Deben proporcionar una protección efectiva al operario y a terceras personas.

n Las fijaciones y enclavamientos utilizados para que los sistemas queden inmóviles, deben ser

difíciles de retirar, desarreglar o burlar.

n Deben ser cómodos y no ocasionar molestias al operario.

n Finalmente, y de suma importancia, es que el medio de protección no introduzca en el

sistema nuevos riesgos.

Todo sistema en una instalación conllevará unos riesgos, agravados además, por el citado

componente electro-mecánico de los mismos. Este originará no solo riesgos eléctricos y mecánicos,

sino también térmicos, vibraciones, etc. derivados de los primeros. Concretamente se podrían

clasificar en:

n Peligro mecánico. Son los causados por los posibles elementos físicos que pudieran integrar la

instalación o el sistema:

· Elementos móviles (cuchillas, carros, etc.).

· Elementos de transmisión (ejes, poleas, etc.).

· Proyección de elementos de la máquina por rotura (taladro).

· Proyección del material trabajado.

n Peligro eléctrico. Además del peligro de incendio que pudiera generar un mal contacto eléctrico,

habría que considerar el peligro por choque eléctrico o quemadura por contacto con partes en

tensión (contactos directos en tomas de corriente de centralitas defectuosas), o acciden-

talmente en tensión (contacto indirecto en centralitas de telefonía con mala puesta a tierra), o

aislamiento no adecuado.

n Peligro térmico. Quemaduras por contacto con objetos o materiales calientes, principalmente al

terminar de trabajar con el taladro, ya que la broca que soporta se habrá calentado por

rozamiento.

n Peligros producidos por la exposición al ruido. Muchos sistemas son ruidosos y pueden causar

pérdida de la agudeza auditiva, fatiga, e interferencia con la comunicación oral y con señales

acústicas.

n Peligros producidos por la exposición a vibraciones. Las vibraciones muy intensas pueden dar

lugar a trastorno musculares.

n Peligro por mal diseño de los sistemas e instalaciones. La inadecuación de los mismos a las

características y aptitudes humanas puede ser origen de efectos fisiológicos derivados de

posturas incómodas, esfuerzos excesivos o repetitivitos.

Al igual que con las herramientas simples, se podrán considerar una serie de medidas

preventivas para minimizar o anular los riesgos que se pueden resumir en:

n Para realizar trabajos de reparación, mantenimiento o limpieza de un sistema o instalación se

debe consultar antes el libro de instrucciones que los acompaña.

n Se deben adquirir sistemas seguros, e instalarlos, utilizarlos y mantenerlos adecuadamente,

siguiendo las instrucciones del fabricante.

n La certificación de un sistema (marcado CE) es el testimonio por parte del fabricante de que

este cumple con los mínimos requisitos legales y técnicos en materia de seguridad de los

estados miembros de la Unión Europea.

Marcado CE

Son 2 las normativas que velan por la seguridad en el trabajo, relacionadas con el uso de sistemas, instalaciones y maquinaria en general:

* Real Decreto 1644/2008, de 10 de octubre, por el que se establecen las normas para la comercialización y puesta en servicio de las máquinas.

* Real Decreto 1849/2000, de 10 de noviembre, por el que se derogan diferentes disposiciones en materia de normalización y homologación de productos industriales.

4. Riesgos en el almacenamiento y transporte de cargas

Un trabajo indirecto del instalador es el correcto almacenamiento y transporte de todo el material

necesario en cualquier instalación de redes de telefonía.

Con respecto al almacenamiento, la correcta disposición de los tubos, canaletas, cableado,

centralitas, tornillería, etc. evitará, en gran medida, los riesgos provocados por desprendimientos,

corrimientos, caídas, etc., con las graves consecuencias que se pueden generar.

Además, al igual que ocurría con las herramientas, la disposición de forma ordenada de todo

material provocará agilidad, rapidez y efectividad en las instalaciones, independientemente de los

factores de seguridad ya mencionados.

Las medidas preventivas relacionadas con el almacenamiento de cargas son las siguientes:

n Retirar de la zona de trabajo el equipamiento inutilizado.

n Almacenar debidamente los objetos en sentido vertical sobre el nivel del suelo de manera que

no se descompensen.

n No superar la carga de seguridad de bastidores, repisas o suelos.

n Proteger los objetos de la humedad y el calor.

n Utilizar escaleras para llegar a las repisas superiores. No subir a los bastidores.

n No apoyar materiales pesados en paredes estructurales.

n Calzar los objetos que puedan rodar.

Por otra parte, en relación al transporte de cargas, los equipos destinados al movimiento y

levantamiento de las mismas deberán ser diseñados para utilizarse en condiciones aceptables de

seguridad.

El peligro más frecuente de estos equipos es el mal funcionamiento de algunos de sus elementos, lo

que puede originar roturas con posibilidad de consecuencias graves, ya sea por caída de objetos,

caída de altura, golpes o aprisionamientos

Existen multitud de dispositivos que pueden ayudar en el transporte de materiales necesarios

en instalaciones, siendo algunos de ellos:

n Aparatos.

· Plataformas.

· Elevadoras.

· Montacargas.

· Cintas.

| 51

n Elevadores.

· Grúas.

· Aparejos.

n Elementos auxiliares.

· Cadenas.

· Cabestrillos.

· Ganchos.

· Horquillas.

Las medidas preventivas en la utilización de cada uno de ellos se podrían resumir en:

n Utilizar los equipos adecuados a la función que se va a realizar.

n Revisar los equipos periódicamente.

n Delimitar zonas de circulación de materiales y personas. Estas zonas deben estar libres de

obstáculos y bien iluminadas.

n En la elevación y descenso de cargas:

· Hacerlo lentamente, evitar arranques o paradas bruscas.

· Al manejar la máquina hay que situarse en una posición desde la que se controle tanto la

zona de carga como de descarga.

· No dejar cargas suspendidas.

· No trasladar cargas por encima de personas o puestos de trabajo. � Prohibir que las personas permanezcan debajo de las cargas

5. Riesgos asociados al medio de trabajo

Los riesgos asociados al medio de trabajo se van a estudiar en dos bloques. En uno se

expondrán los riesgos presentes en el entorno ambiental de los trabajadores (químicos, biológicos y

físicos), y en otro, se estudiará el más común en las instalaciones de telefonía: el fuego.

5.1. Exposición a agentes físicos, químicos o biológicos

Estos agentes son considerados como factores de riesgos higiénicos, siendo la higiene laboral la

encargada de prevenir los riesgos generados por ellos. Se estudiarán por separado cada uno de los

agentes.

Agentes físicos

Los agentes físicos se pueden agrupar según los aspectos contaminantes que los originan, por lo

que se considerarán atendiendo a las siguientes clasificaciones:

Contaminantes mecánicos: ruidos y vibraciones

Dentro del sector industrial en el que se encuentra las instalaciones de telefonía, el ruido puede ser uno de los agentes contaminantes de mayor presencia, debido a la utilización de

maquinaria y/o transportes en cualquiera de sus procesos.

Señal indicadora de entorno industrial ruidoso

El trabajo con herramientas mecanizadas (fuentes productoras de ruido) en las instalaciones

hará que el trabajador esté continuamente expuesto a las molestas y perjudiciales ondas

sonoras que proyectan, produciéndole daños de diversa índole, si la exposición es continuada:

· Pérdida de audición, temporal o definitiva (daño físico).

· Aceleración del ritmo respiratorio, ansiedad, fatiga, trastornos del sueño (daños

psicológicos).

Ante esto, es lógico que se deban mostrar una serie de medidas preventivas para paliar, en la

medida de lo posible, estos daños:

· El control del ruido se debe gestionar desde el origen. Es decir, ha de estar presente tanto

en la edificación de cada local, como en la maquinaria usada en cada proceso industrial.

· Para cada puesto de trabajo será necesario un estudio sonoro indicando las posibles

fuentes de ruido, niveles y elementos de protección necesarios ante los mismos.

En el primer caso, cualquier edificación debe estar preparada para la absorción y no propagación auditiva. En el segundo, cada fabricante ha de cumplir con las exigencias máximas de emisiones sonoras para sus dispositivos

El otro agente físico-mecánico objeto de estudio son las vibraciones.

Estas son movimientos oscilatorios de cualquier cuerpo con respecto a un punto centrado

o de referencia. Cualquier vibración, de cualquier maquinaria, puede ser transmitida al

trabajador que esté haciendo uso de ella y al igual que los ruidos, una exposición continuada

puede originar daños de distinta tipología:

� Daños en articulaciones, trastornos gástricos, mareos, etc.

� Daños en sistema nervioso, y por lo tanto afecciones psicológicas.

Para estos problemas existen otra serie de medidas preventivas:

· Mantenimiento continuado en la maquinaria que pueda generar las vibraciones

(engrasado, control de engranajes, etc.).

· Empleo de material aislante, situado entre operario y maquinaria con el fin de que

absorba las vibraciones.

· Uso de guantes, botas o cualquier otra protección individual que atenúe el efecto

vibrador.

Contaminantes térmicos: calor y frío· La exposición a temperaturas extremas de calor o frío producirán una serie de daños físicos que conviene tener controlados: golpe de calor, síncope térmico, deshidratación, hipotermia, congelación, etc.· El exceso de temperatura provocará un incremento del ritmo cardiaco y de la sudoración, mientras que la disminución de la misma hará que el flujo sanguíneo disminuya provocando temblores.· Para la lucha contra estas consecuencias habrá que proporcionar unas condiciones ambientales de trabajo óptimas tanto a nivel general (temperatura ambiental del espacio de trabajo), como individual (uso de ropa y abrigo adecuados).

Contaminantes en base a radiaciones: ionizantes y no ionizantes

La clasificación en base a contaminantes radiados hace referencia a las ondas electromagnéticas

que la maquinaria o elementos industriales pudieran desprender. Las radiaciones ionizantes son las que

al chocar con cualquier materia son capaces de destruir átomos y moléculas, como son los rayos X,

gamma, partículas alfa, etc.

Sin embargo, las radiaciones no ionizantes no disponen de la suficiente energía como para causar

graves daños, aunque en determinadas zonas del cuerpo más sensibles (ojos, mucosa, etc.) si

podrían producir algunas lesiones.

Tanto para unas como para otras existen una serie de equipamientos de protección que se

estudiarán más adelante.

Agentes químicos

Los agentes químicos entran dentro del grupo de contaminantes que se caracterizan por

ocasionar daños en la salud al contactar con los individuos, siendo la vía respiratoria, digestiva y la

piel las principales vías de penetración.

Los daños generados en las personas son las intoxicaciones, tanto agudas (a corto plazo) como

crónicas, teniendo los siguientes efectos:

n Corrosivos: actuación destructiva donde contacte el tóxico.

n Neumoconióticos: alteraciones pulmonares.

n Asfixiantes: alteraciones respiratorias por pérdida de oxígeno.

n Narcóticos: atenuación de la actividad del sistema nervioso central.

n Sistémicos: daños en órganos o sistemas específicos del cuerpo.

Medidas preventivas que se aconsejan:

n Sustituir en la medida de lo posible los productos a usar por sustancias químicas similares

que no sean tóxicas.

n Intentar eliminar o modificar acciones de los procesos industriales que impliquen el contacto

químico, para evitar la posible reacción química que dé lugar al peligro.

n Aislar todos los procesos en donde se estén dando reacciones químicas, de forma que no

compartan ambiente con las personas.

Las centralitas de telefonía y los teléfonos fijos podrían ser un foco de agentes tóxicos, ya que entre sus circuitos (concretamente en los microprocesadores, pero depende del fabricante), se encuentran sustancias tóxicas. Por tanto, si se manipula en la circuitería interna de estos dispositivos electrónicos se debería tener especial cuidado con las sustancias que pudieran desprenderse, sobre todo si se trata de equipamiento muy antiguo.

Agentes biológicos

Los agentes biológicos son los contaminantes en forma de microorganismos (bacterias, virus,

hogos) que están presentes en pelos, plumas, madera, polen, etc., y que pueden transmitir

enfermedades como tuberculosis, legionela, tétanos, alergias, etc.

Comparten las mismas vías de penetración que los químicos: respiratoria, digestiva y piel.

Las medidas preventivas que los atenúan se pueden clasificar en tres bloques, dependiendo del foco de actuación:

1. Medidas sobre el foco de contaminación. Serían las medidas destinadas a eliminar el agente que origina el daño, mediante la sustitución del componente o proceso que lo provoca.

2. Medidas sobre el medio de difusión. En este caso lo que se evitaría es la propagación del contaminante, manteniendo una limpieza del entorno, con ventilación y sin ningún tipo de residuo.

3. Medidas sobre el receptor. El último grupo corresponde a las medidas que se pueden adoptar para el posible receptor de las enfermedades, mediante vacunación, campañas de sensibilización y formación, aportándole equipos de protección adecuados, etc.

5.2. El fuego

Es lógico dedicar un apartado exclusivamente al fuego dada su peligrosidad. No obstante, son

siempre tres los factores necesarios y simultáneos para que se origine el fuego:

n Combustible: el elemento que es susceptible de arder.

n Comburente: la sustancia que provoca la combustión.

n Calor: el foco que proporciona el calor suficiente para que el fuego se produzca.

Además es preciso mencionar los tipos de incendios existentes dependiendo de la forma en que

son originados:

n Clase A. Fuego seco. Producido por telas, papeles, tejidos, etc.

n Clase B. Fuego graso. Producidos por líquidos inflamables.n Clase C. Fuego eléctrico. Cuyo origen se basa en malos contactos eléctricos en cualquier tipo de

maquinaria accionada por energía eléctrica.

n Case D. Fuegos especiales. Serían los producidos por reacciones químicas y/ gases

combustibles.

Para evitar que se produzca el fuego se pueden considerar las siguientes medidas preventivas:

n Almacenamiento adecuado de productos inflamables y combustibles.

n Correcta limpieza de zonas en donde se hayan vertido sustancias inflamables.

n Total prohibición de fumar.

n Aislar y/o alejar las fuentes de calor.

Dado que los orígenes y los tipos de fuego son distintos, sus medios de extinción también lo

serán. Entre estos destacan:

n Sofocación: se pretende eliminar el oxígeno del aire que está en contacto con el fuego.

n Enfriamiento: por el que se busca disminuir la temperatura de la fuente de calor que lo

provoca.

n Combustión: consistiría en eliminar o aislar el combustible que pudiera generar el fuego.

n Dispersión: si el combustible no pudiera ser eliminado en su totalidad se podría atenuar en la

medida de lo posible, para así bajar la temperatura, y por tanto, la intensidad del fuego.

6. Riesgos derivados de la carga de trabajo

En un segundo bloque se podrían considerar los riesgos no relacionados directamente con las

tareas profesionales propias de un trabajo, sino derivados de ellas debido a la carga física y mental

que suponen. Se estudiarán tres grupos diferentes de riesgos, dependiendo de la presión que se

deriva de cada uno de ellos.

6.1. Fatiga física

Es consecuencia de todo el trabajo físico que conllevan algunas profesiones. Se debe analizar

la carga soportada. Concretamente la carga física comprende:

n Esfuerzos físicos: implican un consumo elevado de energía, apareciendo la correspondiente

fatiga si este esfuerzo es prolongado.

n Postura de trabajo: el adoptar posturas correctas en los puestos de trabajo influirá directamente

en lo tedioso y/o pesado que este pueda resultar.

n Manipulación de cargas: este hecho puede ser el que provoque mayor número de lesiones,

debido a movimientos incorrectos y forzados. Es por esto que existe una serie de

recomendaciones para realizarlo correctamente:

· Empleo de ayudas mecánicas o de compañeros, siempre que se pueda.

· Planear el itinerario que se va a seguir al transportar la carga de forma manual (para

identificar obstáculos).

· Para elevar cargas desde el suelo hay que separar los pies unos 60 cm, doblar cadera

y rodillas, y estando en cuclillas, elevar la carga junto con el resto del cuerpo.

Nunca se debe hacer el esfuerzo tirando de la columna/espalda directamente

6.2. Fatiga mental

La fatiga mental se deriva de la actividad mental que necesite una persona para desarrollar su

trabajo.

Al igual que los esfuerzos físicos pueden ocasionar daños, o fatigar el cuello o la espalda de un

trabajador, los esfuerzos mentales pueden debilitar la capacidad cognitiva del mismo.

Las causas que pueden exigir una elevada concentración del trabajador, y consecuentemente la

fatiga mental, son:

n Demasiada cantidad de información recibida.

n Complejidad del trabajo exigido.

n Imposición de finalización de trabajos en muy poco periodo de tiempo.

n Poco descanso entre la realización de los trabajos.

Las propias exigencias del trabajo, o las circunstancias personales del trabajador pueden hacer que el tiempo dedicado para descansar la mente no sea efectivo, existiendo la posibilidad de ocasionar fatiga mental crónica que puede derivar en cuadros de estrés.

6.3. Insatisfacción laboral

La insatisfacción laboral aparece cuando el trabajador no se siente recompensado en

comparación a los niveles de fatiga (física o mental) a los que está siendo expuesto.

Este hecho repercute tanto en la persona (estados de alegría, entusiasmo, motivación, etc.),

como en la empresa (baja productividad, absentismo, etc.).

Para evitar que los trabajadores se sientan insatisfechos se podrían seguir los siguientes

consejos:

n Adecuar cargas físicas y mentales a la capacidad de cada trabajador.

n Dosificar la cantidad de información que se le pudiera trasladar al trabajador.

n Intentar trabajar mediante previa planificación para que el factor tiempo no influya en la

carga mental.

n Otorgar interés a las tareas que se le pudieran encomendar.

n Proporcionar descansos coherentes.

n Proporcionar entornos de trabajo confortables.

6.4. Aplicación práctica sobre identificación de riesgos

Usted es instalador de redes telefónicas y se dispone a acometer una instalación compuesta por

una centralita y cinco extensiones. ¿A qué riesgos cree que está siendo expuesto?

Solución

En toda instalación industrial existe un 90% de riesgos comunes, ya que en todas se comparten

tareas parecidas y con equipamiento de características similares, por tanto, en el caso de

instalaciones de telefónicas se estaría expuesto a:

. Riesgos derivados del manejo de herramientas:

· Proyecciones de partículas en los ojos, al taladrar la pared para fijar las

canalizaciones.

· Cortes y/o pinchazos al trabajar con el cableado, sobre todo en las fases de crimpado

· Cualquier golpe o caída de los martillos necesarios para tapar las canaletas

. Riesgos en la manipulación de sistemas:

· Sistemas móviles: cortes con las cuchillas necesarias en el pelado del cable para su

crimpado.

· Proyección de elementos de maquinaria: el uso de un taladro en mal estado puede

provocar el desprendimiento de alguna de sus piezas e impactar contra el instalador.

· Peligro eléctrico: las centralitas están alimentadas a 220 V, y un mal contacto o mala

alimentación pueden desembocar en descargas, quemaduras o incendios si se está cerca

de líquidos o sustancias inflamables.

· Peligro térmico: al intentar manipular la broca del taladro justo después de la finalización

del trabajo.

. Riesgos en el almacenamiento y transporte de cargas:

· El tener todas las herramientas necesarias para la instalación de forma ordenada

contribuirá a una instalación rápida y efectiva.

· El transporte de las cargas necesarias como canalización, cableado, centralita, etc. de

forma incorrecta o con aparatos inapropiados podría causar lesiones graves de columna.

Por último, un instalador quedará expuesto a todos los riesgos derivados de la carga de trabajo,

tanto física como mental.

7. La protección de la seguridad y salud de los trabajadores

Para paliar toda la serie de daños estudiados hasta ahora (principalmente los daños físicos

directos) existen una serie de medidas específicas en materia de prevención de riesgos que se

deberían adoptar. Estas medidas se mostrarán

La señalización

Tiene como objetivo alertar de una forma rápida y directa sobre cualquier situación de peligro,

para que el trabajador, al verla u oírla, reaccione según las instrucciones previas que se le han

debido dar.

Para que la señalización cumpla con su función ha de reunir una serie de características:

n Debe de atraer la atención de los trabajadores de una forma clara y rápida.

n Los mensajes de peligros deben estar expuestos de forma clara.

n Debe mostrar consejos del modo de actuación según el peligro.

n Debe estar fabricada de materiales resistentes a condiciones industriales.

Además, debido a que los peligros que se pueden dar son muy variados existen señalizaciones

de todo tipo, y clasificadas por colores.

Los planes de emergencia

Es el otro modo de protección individual. Los planes velan por una organización y planificación

adecuada en caso de que se produzcan determinados peligros. Normalmente, los planes de

emergencia están destinados a controlar al personal en situaciones de:

n Fuego.

n Derrames de líquidos inflamados.

n Explosiones.

n Escapes de gases tóxicos.

n Vertido de líquidos nocivos.

n Fenómenos naturales.

En la ejecución de todo plan de emergencias, los trabajadores han de estar calmados para poder seguir las indicaciones correctamente. Estados de ansiedad solo provocarán los mismos efectos en los demás trabajadores, y la imposibilidad de ejecutar el plan correctamente

7.2. La protección individual

Está destinada a proteger al trabajador de forma individual, en base a una serie de equipos y

complementos que el usuario debe de adoptar y llevar en su cuerpo. Estos equipos, también

conocidos como EPI (Equipos de Protección Individual) no evitan los riesgos, sino que sirven para

atenuar los daños en caso de que se produzcan. Existe una directiva que regula su uso,

concretamente la Directiva 89/686/CEE del R.D. 773/97, que añade también las características y

homologaciones que deben tener cada uno de ellos para asegurar que la protección sea efectiva.

Existen EPI casi para todas las zonas del cuerpo clasificados según el tipo de protección

aportada, es decir, parcial o integral:

. Los medios parciales protegen:

· El cráneo mediante cascos.

· Cara y ojos a través de gafas o caretas enteras.

· Oídos, con el uso de orejeras, tapones o cascos anti-ruidos.

· Manos mediante guantes.

· Pies, con calzado apropiado.

· Vías respiratorias usando máscaras y mascarillas.

. Los medios integrales son:

· Ropa de trabajo en general (monos, chaquetas, chalecos, etc.).

EPI que se podrían necesitar en instalaciones de telefonía

CASOImagine que usted es el gerente de una empresa de instalaciones de telefonía, y se encuentra preocupado por las protecciones o consejos colectivos que le podría dar a su plantilla en situaciones de emergencia.

¿Cómo podría transmitirles lo que tendrían que hacer en cada situación?

SOLUCIÓN

Una de las actuaciones más aconsejables que se pueden llevar a cabo y que podrían ser la representación más real de la condición de peligro, serían los simulacros. Mediante ellos se representa la situación de peligro y se ensaya como debería actuar cada grupo de trabajadores.

Para que estas actuaciones, en una situación de emergencia, puedan ser las correctas, sería conveniente hacer los ensayos una vez al año como mínimo (según las distintas posibilidades de situaciones de emergencia). Mediante la realización de estos simulacros se conseguirán hábitos de actuaciones según el tipo de emergencia, y se mantendrán actualizados los procesos a seguir en cada caso.

8. Resumen

En este capítulo se ha hecho hincapié en materia de prevención de riesgos laborales orientados a

la instalación de redes de telefonía.

Se ha incidido en todos los riesgos que pueden derivarse de estos tipos de instalaciones, y de las

instalaciones industriales en general.

Concretamente se han enumerado uno a uno todos los riesgos procedentes de cualquier foco de

peligro en una instalación, comenzando por el manejo de herramientas, siguiendo con la

manipulación de sistemas en general, insistiendo en el correcto almacenado y transporte de cargas,

y finalmente, como riesgos directos de las instalaciones, se han contemplado los derivados de las

exposiciones a agentes físicos, químicos y fuego.

Además se han estudiado una serie de riesgos trasversales para todo tipo de trabajos,

concretamente los riesgos originados por cargas físicas y mentales de trabajo, ocasionando las

consecuentes insatisfacciones laborales, estrés, etc.

Por último se han dado una serie de consejos sobre los distintos modos de protección para hacer

frente, en mayor o menor medida, a los riesgos directos físicos (no mentales) a los que el

trabajador está expuesto, mediante la descripción de los distintos tipos de equipos de protección

individual (EPI) y colectiva.