HOAC.es • Nº 166 • diciembre 2015 • III Época • 0,75€

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Nuestro voto en las elecciones generales del 20 dediciembre, servirá para elegir al próximo Gobiernodel país. Votar es un ejercicio de libertad, un de-

recho fruto de las luchas libradas por generaciones an-teriores. Es una forma de participación democrática que repercute enla organización social, económica y política. El voto requiere una deci-sión informada, fruto de la deliberación, que en el caso de las personascristianas, necesariamente ha de estar cribada por el tamiz de la fe.

La reflexión ofrecida por la HOAC (en www.hoac.es) recoge criteriosesenciales que pueden ayudar a discernir, si las propuestas de los par-tidos políticos nos acercan al horizonte de humanidad y felicidad quecontiene el mensaje evangélico. Para ello, subraya la importancia deprestar atención a aquellas medidas que avancen en: Defender los de-rechos sociales, como garantía para construir una vida personal y socialplenamente humana. El derecho a un trabajo, a una vivienda, a la sani-dad, a la educación... deben orientarse preferentemente a conseguir elbienestar de quienes se han visto sacudidos por la crisis. Erradicar lapobreza y la desigualdad, priorizando actuaciones en favor de las per-

sonas empobrecidas, respondiendo a las necesidades so-ciales básicas. Recuperar el sentido humano del trabajo,con medidas que reconozcan el valor del trabajo más alládel empleo y que promuevan el trabajo decente. Defen-

der la vida en todas sus etapas, en el marco de una cultura de respetoy protección de la vida, en especial en situaciones de mayor debilidad.Cuidar el medioambiente, avanzando hacia un modelo de consumoque sea expresión de nuestra responsabilidad hacia las generacionesfuturas. Fomentar la participación de la ciudadanía, facilitando ámbi-tos que eduquen en la responsabilidad solidaria y constructiva. Exigir entodos los ámbitos de representación pública una ética personal de-mostrable con la transparencia de sus gestiones y patrimonio; dondeel diálogo sea la base de la regeneración democrática.

Nuestra responsabilidad ciudadana va más allá del día de la votación.Es una tarea constante que aspira a situar en el centro de toda actividadpolítica a la persona, en una sociedad más justa y así «vencer las causasestructurales de las desigualdades y de la pobreza», como pide el papaFrancisco (Iglesia, servidora de los pobres. n. 2).

así lo vemos

El consumo que transforma

Monica Rossi y Francisco Cámara,militantes en política.

la calle

EE l último informe de la Red Europeade Lucha contra la Pobreza y la Ex-clusión Social en el Estado Español

(EAPN) muestra que en 2014 las condicionesde vida de la población han empeorado drásti-camente. Ese año se han registrado las cifrasmás altas de pobreza, desigualdad y privaciónmaterial severa, desde el inicio de la crisis (ver«Sabias qué», pág. 7).A mediados de este año, la fundación Fo-essa, capitaneada por Cáritas y participadapor la HOAC, alertaba que «en un momentoen que la sociedad española empieza a perci-bir que el empleo asalariado ha comenzado acrecer con fuerza, el aumento de los hogaressin ingresos muestra que la recuperación delempleo no está afectando a las familias espa-ñolas en peor situación». No debe olvidarseque la crisis ha supuesto el mayor deteriorode la renta de los colectivos más desfavoreci-dos en los últimos cuarenta años. Tanto Foessa como EAPN señalan el au-mento preocupante de la pobreza severa(menos del 30% de la renta mediana), perotambién de las situaciones de privación mate-rial y de los trabajadores pobres. Para la fun-dación que realiza los análisis y estudios quesostienen la línea de acción de Cáritas, «elagravamiento de la situaciones de desigual-dad y pobreza ha llevado a la sociedad espa-ñola a niveles estructurales de vulnerabili-dad, que difícilmente se invertirán de maneradrástica con un cambio, incluso prolongado,del ciclo económico».

Un antiguo economista jefe del Fondo Mo-netario Internacional, Olivier Blanchard, enuna entrevista al diario británico «The Tele-graph», citada por «Vozpopuli» afirmaba:«Cuando cierta gente habla del milagro espa-ñol, yo reacciono. Cuando tienes un 23% detasa de paro y un crecimiento del 3%, yo no lollamo milagro».La incógnita que debería preocuparnos no estanto saber quién ocupará la Moncloa o si laeconomía europea sorteará los nubarrones queaparecen en el horizonte, sino cómo transfor-mar el actual modelo español que en los perio-dos de recesión hace aumentar la pobreza ful-gurantemente y en los de bonanza no es capazde reducir las bolsas de pobreza y exclusión.

José Luis Palacios @jlpalas

La crisis persiste para los pobresNuestros gobernantes, inmersos en la contienda electoral, hablan de la recuperación de-tectada en las estadísticas. Sin embargo, parece claro que el fin de la crisis no ha llegadoa todos. Ni mucho menos a quienes peor lo pasan.SS u vida no ha sido fá-

cil. Todo un caminode escasez y de dolo-

rosas ausencias, algunastempranas. Pero también haexperimentado que «Diosaprieta pero no ahoga». Alcontrario, que es Él quien tehace vivir con sentido y es-peranza tanto sinsentido. Yes que el tiempo y los pla-nes de Dios no son los nues-tros. Esa experiencia lo haforjado. Por ello, él es mili-tante de la paciencia y de lacalma, de la tranquilidad,de los largos recorridos. Mi-litante que contagia, con suspalabras y sus silencios, pazy armonía. En su oración decada mañana camino deltrabajo va, paso a paso opedalada a pedalada, respi-rando al Dios que lo liberay al que ofrece el sinvivir desus compañeros. Es asícomo luego siembra entreellos la ternura del Dios dela vida. Así es también sucompromiso sindical, tran-quilo, paciente, sin ruido,pero profundamente radi-cal y valiente. Y es que mi-rar desde los ojos del CristoObrero la negociación delas condiciones de trabajono siempre es comprendido.Solo satisface a los que lotienen todo perdido. A losprecarios. Esa es su cruz ysu esperanza.

Teresa Jiménez Zamorano

con Diosen la vida obrera

Cruz y esperanza

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NAVIDAD 2015

P 02_P 02 19/11/2015 9:55 Página 1

LL a barbarie terrorista de París hapuesto en la puerta de nuestrascasas «la tercera guerra mundial

a trozos», de la que habla el papa Fran-cisco, y ha dejado en evidencia la inca-pacidad de las políticas para solucionarlos grandes problemas.

Bush, Blair y Aznar prometieron sal-varnos de las armas de destrucción masi-va que tenía el régimen de Iraq, pero re-sultó que las armas de destrucciónmasiva eran ellos. Ahora, el terrorismo,las guerras y la violencia asolan a toda lahumanidad.

El dinero dado a los bancos, para res-catarlos de sus estafas, hubiera sido sufi-ciente para erradicar el hambre en elmundo durante cincuenta años, perocada día siguen muriendo de hambre mi-les de criaturas.

A cambio, prometieron cambiar el ca-pitalismo; pero es el capitalismo el que

ha secuestrado a la democracia y cam-biado nuestra constitución para garanti-zarse nuestra sumisión.

Criticaron y amenazaron al gobernan-te húngaro por sus declaraciones xenó-fobas sobre los refugiados y prometieronacogerlos, ahora utilizan sus mismos ar-gumentos y quieren expulsarlos.

No sé cuántas cumbres sobre el cambioclimático se han celebrado ya, cuántaspromesas y acuerdos incumplidos. Perola destrucción del planeta ha continuadohasta, parece ser, un punto de no retor-no.

En España no hemos conseguido erra-dicar la pobreza ni eliminar la desigual-dad, y las distintas comunidades autóno-mas intentan sacar la mayor tajadaposible para «los suyos», no para los quemás lo necesitan. Estemos atentos a laspromesas electorales para el 20D.

Cuando los problemas eran «naciona-les» los gobiernos prometían el «bien delos nuestros»; ofrecían bienestar, no jus-ticia. Ahora, los problemas son globales,los «nuestros» son toda la humanidad yel mayor bienestar es la justicia, porquesi no hay solución para todos, no la haypara nadie.

A.A. Maestre

política en zapatillas

¡Votemos por la justicia!

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cultura

EE l 20 de diciembre celebramos elecciones generalespara elegir diputados/as y senadores/as. De ellas sal-drá un nuevo Gobierno de España. Son un hecho

importante. Mucho más en una situación de sufrimiento detantas personas y familias que pide conurgencia cambios en los objetivos socia-les y políticos, y en los medios para al-canzarlos. Cambios, ¿en qué sentido?Sobre todo en el que plantean nuestrosobispos en «Iglesia, servidora de los po-bres». Por ejemplo: «En este periodo decrisis se han acentuado las desigualda-des sociales, debilitando las bases de unasociedad justa. Esta realidad nos está se-ñalando la tarea: nuestro objetivo ha de ser vencer las cau-sas estructurales de las desigualdades y de la pobreza» (n. 2).«Aspectos como la lucha contra la pobreza, un ideal com-partido de justicia social y de solidaridad –que debería cen-trar nuestro proyecto común como nación–, se sacrifica enaras del crecimiento económico… Sin duda, es el modelomismo el que corresponde revisar» (n. 20). «La política eco-nómica debe estar al servicio del trabajo digno» (n. 32).

Pero la situación de los pobres y excluidos, la de tantasfamilias trabajadoras, nos pide algo más que decidir nues-tro voto mirando a ese cambio necesario. Nos pide vivirnosotros la política de otra manera. Hay una manera de vi-

vir la política, la que predomina ennuestra sociedad, que consiste en mi-rarla como lo que hacen otros (los«políticos», los partidos…). Necesita-mos otra manera de vivir la política: loque hacemos todos para construir lavida social. La política es cosa de todosy responde a la necesidad que tenemosde sentirnos los unos responsables delos otros y de aportar al bien común.

Por eso, tan importante o más que decidir qué hacemoscon nuestro voto es que nos preguntemos cómo queremosvivir, qué queremos hacer, qué queremos reivindicar, enqué nos comprometemos, cómo trabajamos con los otrospara construir una sociedad más humana… Solo así cam-biará la política hacia más humanidad, dignidad y justicia.

Francisco Porcar

HOACComisión PermanenteCoord. Francisco Porcar Rebollar

www.edicioneshoac.es @edicioneshoacUna aportación al diálogo desde la Doctrina Social de la Iglesia

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«Nuestro objetivo ha deser vencer las causas

estructurales de las desigualdades

y de la pobreza»

Manifestación contra la pobreza en Madrid (Foto: Efe)

La dignidadde la personay el bien común

LIBROCUADERNO PRÓXIMA NOVEDAD EDITORIAL

DICIEMBRE 2015

P 03_P 03 19/11/2015 9:58 Página 1

NN o me gusta que meexploten laboralmen-te. Aspiro a un trato

justo y a unas condiciones dig-nas. Lo mismo quiero para misfamiliares y amigos. También lotengo claro. Sin embargo, cuan-do compro en un centro comer-cial no me da por pensar si conmi compra estoy apoyando a unaempresa que explota a sus traba-jadores. Me resulta muy cómodopoder ir en domingo. No pasanada. Yo compro tranquilo.

No me gusta contribuir másde la cuenta con mi comporta-miento al cambio climático.Cambiarme de mi compañíaeléctrica convencional a otraque solo produce electricidad

mediante energías renovablescomo Som Energía me suponequince minutos. Estoy convenci-do de que así se contamina me-nos el planeta. Pero no lo hago.No encuentro el momento.

Como nos recuerda Carlos Ba-llesteros en su libro «Tu compraes tu voto», en las sociedadesdemocráticas donde los ciudada-nos ejercemos el poder votandocada cuatro años, no ocurre lomismo al ejercer nuestro podercomo consumidores. En el mer-cado votamos cada vez quecompramos. Con cada decisiónelegimos qué tipo de sociedadqueremos apoyar.

No es tan fácil. Acerca de loque hacen los políticos estamos

permanentemente informados.Acerca de las empresas única-mente nos llega su publicidad.Hay un abismo entre el produc-to que nos ofrecen y la realidadsocial y ambiental que esconde.No nos lo cuentan.

Es cierto que la creciente pre-sión por parte de personas y enti-dades concienciadas están llevan-do a las empresas a desarrollarestrategias de responsabilidad so-cial corporativa. No es suficiente.

El consumidor no cuenta conuna información veraz que lepermita desentrañar las comple-jas relaciones entre el consumoque realiza y sus consecuencias.

Resulta un esfuerzo titánicopara cada individuo tener que in-vestigar si la empresa que fabricael producto que queremos com-prar utiliza trabajo infantil, remu-nera justamente a sus trabajado-res o respeta al medioambiente.Ciertamente hay organizaciones

No me gustan las armas. No apoyaría a nadie que se dedicase a hacer negocio conla destrucción de seres humanos. Eso lo tengo claro. Sin embargo mi dinero se loentrego a un banco y no sabría decir si con él financia a empresas que se lucran conlas armas. Si se lo pregunto al director de la sucursal no me facilita dicha informa-ción. No pasa nada. Yo duermo tranquilo.

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«Ante el derrotismo de pensar queapenas sirve de algo, nos cabe sentir la

satisfacción de vernos en camino»

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la ventana del mes

El consumo que transforma

P 04-05 b_Economía par 19/11/2015 12:06 Página 4

no gubernamentales que realizanesta ardua labor cuya informa-ción podemos manejar. Pero nopueden investigar al número in-gente de marcas que existen.Además, nos haría falta gran can-tidad de tiempo para asimilar lainformación necesaria para poderrealizar cada decisión de comprade manera consciente de sus re-percusiones y consecuente connuestros principios.

Esta falta de transparencia de-sanima hasta al más aguerrido.Afortunadamente existen publi-caciones como la revista «Opcio-nes» que ayudan a desentrañarlas complejas relaciones entre lasociedad de consumo, el desa-rrollo humano y el deterioro me-dioambiental.

Nos podemos encontrar conotras dificultades para ayudar aconstruir el mundo que quere-mos mediante un consumo res-ponsable. Es más caro, es pocorealista, no hay una soluciónperfecta, es difícil encontrar al-ternativas, me expongo a quelos demás me vean como un bi-cho raro, me resulta incómodo,conocer lo que hay detrás mehace sentir frustrado y prefierono enterarme, no me fío dequien se presenta como respe-tuoso con el medioambiente, laeconomía alternativa no pagaimpuestos...

Cada uno tenemos las nues-tras que nos impiden ir cambian-

do el estilo de vidapara que cada vez separezca más a lo quepensamos. Así es lanaturaleza humana.Nos cuesta mucho al-terar hábitos y cos-tumbres.

Aunque ciertamen-te tampoco es tan difí-cil. Resulta fundamen-tal contar con unaclara motivación quete ayude a entendertu consumo como unelemento clave en laconstrucción de unasociedad más justa yen la preservación delmedioambiente. Des-de esta perspectivaconviene ser cons-ciente del punto delque partimos e inten-tar avanzar paso apaso, sin exageradosvoluntarismos quenos lleven a perder laalegría que supone ex-perimentar cada pe-queño triunfo. Así po-dremos ir dotando desentido a pequeños gestos coti-dianos de consumo que nos ayu-darán a descubrir un mayor sen-tido a nuestra vida. Ante elderrotismo de pensar que ape-nas sirve de algo, nos cabe sentirla satisfacción de vernos en ca-mino. La responsabilidad diluida

entre los millones de personasque habitamos el planeta se tor-na en la sensación de «¿por quéno habré hecho esto antes?»,cuando nos notamos capaces detransformar levemente nuestrocomportamiento.

Estas navidades voy a entraren la página web del mercadosocial más cercano a mi locali-dad y voy a ver las organizacio-nes proveedoras que lo forman.Así tendré ciertas garantías deque dichas entidades pretendenuna sociedad justa, libre, soste-nible, democrática y equitativa;que buscan una sostenibilidadintegral (económica, medioam-biental, humana y social); que

tratan de erradicar la discrimina-ción; que apuestan por relacio-nes de complementariedad, reci-procidad y confianza; que estáncomprometidas con el bienestarde sus trabajadores y que apues-tan por una gestión democráticay participativa.

Elegiré una cuyos productos oservicios me vengan bien y pro-baré a ver qué tal resulta el cam-bio. Tal vez, si todo va bien, meplantee otro cambio el mes queviene. Así, sin darme cuenta,quizás las navidades del año queviene mi vida se habrá transfor-mado por fuera y por dentro.

Jorge Blanco

Más información en la web:«Tu compra es tu voto»: bit.ly/tucompratuvotoBuscador de mercados sociales: bit.ly/buscaconsumojustoGuía de la Revista Opcions: bit.ly/GuíaOpcionsTransnacionales en Latinoamérica: bit.ly/observatoriodemultinacionalesCorporaciones mundiales: bit.ly/investigacioncorporaciones

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P 04-05 b_Economía par 19/11/2015 12:06 Página 5

¿Qué le decidió a participaren política? Tras la muerte de mi hijo, pa-sado un tiempo, Dios mepuso en este camino. IU mepropuso participar en elConsejo Local y después iren las listas. Acepté porqueera una mediación que mepermitía influir en la políticalocal.

¿Qué medida de promociónconsidera prioritaria?En un municipio no hay casimargen. No se puede ofrecerempleo directo pero desdelas competencias municipa-les es fundamental garanti-zar una vivienda digna, sumi-nistro vital y alimentación ala población más vulnerable.

¿Qué aporta su fe a su tareapolítica? Un criterio: la dignidad de lapersona es lo primero. Espe-ranza y una forma de enten-

der los servicios y la propiaacción como atención a losdemás. Un testimonio cre-yente en esta mediación quees IU de Huelva.

¿Qué le diría a quienes afir-man que el ejercicio de la po-lítica corrompe los ideales?Que no es cierto. La falta deideales es lo que ha permi-tido la corrupción.

¿Qué papel juega su equipode vida en la revisión de suresponsabilidad?Fundamental, con ellos com-parto la oración que funda-menta mi compromiso.

Hacer política intentando serfiel al Evangelio, ¿le ha su-puesto alguna dificultad? Dudas sobre determinadosplanteamientos para dar res-puesta desde la fe y no desdemi posición personal o de laorganización.

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¿quién es?

¿Qué le decidió a participaractivamente en política? La HOAC me hizo descubrirque nuestras vidas están muyafectadas por decisiones polí-ticas y que la dignidad de laspersonas se juega muchas ve-ces en ese ámbito. Sentí la ne-cesidad de desalojar a los queconfunden lo público con loprivado y lo usan para finesparticulares.

¿Qué medida de promociónsocial considera prioritaria enun municipio?Fomentar el empleo dignocon salarios justos, porque elhecho de tener trabajo nosiempre excluye de la exclu-sión.

¿Qué aporta su fe a su tareapolítica? Motivación. Después de tan-tos años, si no fuera por esa feya habría abandonado estecompromiso. Por supuesto,también los principios conque dirigir mis decisiones.

¿Qué le diría a quienes afir-man que el ejercicio de la po-

lítica corrompe los ideales? No tiene por qué si se es cons-ciente de estar prestando unservicio, se cree en lo públicocomo medio de redistribu-ción de riqueza, se concibe laresponsabilidad como unaetapa y no se hace de ella unmedio de vida.

¿Qué papel juega su equipode vida en la revisión de sucompromiso?Siempre que he tenido quetomar una decisión impor-tante he sentido la necesidadde dejarme aconsejar y guiarpor mi equipo. Creo que elEspíritu también habla a tra-vés de ellos.

Hacer política intentando serfiel al Evangelio, ¿le ha su-puesto alguna dificultad? Por supuesto, a veces es com-plicado realizar lo que pre-tendes desde criterios cristia-nos. Soy humano y tengo miscontradicciones.

Mónica Rossi Palomar, expresidenta de la AAVV El Higueraly trabajadora social. Concejala en el ayuntamiento de Huelvapor IU, casada con Eugenio, con quien tiene dos hijos: Sergio,y Jesús, fallecido a los 18 años, hace 2 años y medio.

Paco Cámara Hurtado, militante del PSPV en Cox (Alicante), te-niente alcalde en un gobierno de coalición, cooperante en la ONG«Azul en acción» y militante de la HOAC, casado, con dos hijos.

Entrevistamos a dos militantes de la HOAC que han optado también por compro-meterse activamente en el ruedo político.

«La falta de ideales es lo que ha permitido

la corrupción»

«Sentí lanecesidad

de desalojara los que

confundenlo público

con loprivado»

Yolanda Cañada@ycanyada

P 06_P 06 19/11/2015 12:45 Página 1

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IBAN ENTIDAD OFICINA DC Nº DE CUENTA

EE n este largo y envolvente añoelectoral, cansino pero importan-te, hay reacciones de todo tipo en

la gente: en unos desinterés, apatía, des-preocupación; en otros interés, apasiona-miento, preocupación. A lo largo del añose va teniendo la impresión de que algúntema ocupa todo, es el que más está en elalero más visible de los medios de comu-nicación. Un tema invade todo y otros te-mas importantes quedan en segundo pla-no o en ninguno.Por ejemplo, esto pasa con el tema de labuscada independencia de Cataluña. Esel tema presente las veinticuatro horasdel día, todo gira en torno a ello y da laimpresión que acongoja a todos.Sin restar importancia a la situación deCataluña, a muchos les gustaría que los te-mas importantes del sufrimiento social delas personas y de las familias y de su solu-ción (paro, desigualdades, familias sin re-cursos, desahucios, trabajo precario, vio-lencia de género…) estuvieran máspresentes, mejor atendidos y debatidos,no dejados a un lado, más expresamentetratados. La búsqueda de la justicia socialdebería ser la aspiración fundamental.Nadie puede ser indiferente a las clamo-rosas situaciones de pobreza y desigual-dad.En esta línea, Cáritas ha ofrecido 10propuestas para reflexionar, debatir y darrespuesta. Enunciamos algunas: 1. Ratifi-cación de la Carta Social Europea 2. Ga-rantía de ingresos para los hogares en si-

tuación de pobreza severa. 3. Garantizar elacceso a la salud a todas las personas. 4.Garantizar del derecho a una vivienda dig-na y adecuada. 5. Empleo digno y salariojusto. 6. Apuesta por la economía social ysolidaria en la contratación pública, etc.El papa Francisco, a principios de no-viembre, pide al Instituto Nacional dePrevisión Social de Italia, y buenamentepodemos pasárselo a todas las institucio-nes y organizaciones: ¡Nunca olvidar alhombre: éste es el imperativo! Amar yservir al hombre con conciencia, respon-sabilidad, disponibilidad. Trabajar para elque trabaja y no olvidar al que quisieratrabajar y no puede hacerlo. Y ello, nocomo solidaridad, sino como deber dejusticia y subsidiaridad. Sostener a losmás débiles, para que a nadie le falte ladignidad y la libertad de vivir una vidaauténticamente humana.De esto deberíamos estar hablando to-dos.

Gregorio Burgos

la mirada justa

Cosas importantes en las elecciones

El 29,2% de la población de nuestropaís se encontraba en 2014 en riesgo

de pobreza y exclusión, lo que quiere de-cir que más de 13,5 millones de personasmiran al futuro con angustia.

Es la cifra más alta desde que se tie-nen datos sobre la pobreza. Pero es

que además, el año 2014 es el que ha ex-perimentado una mayor subida de la po-breza desde el inicio de la crisis.

La juventud y la infancia han vistocomo aumentaban sus posibilidades

de caer bajo el umbral de la pobreza en2014 más que ningún otro grupo de edad.El índice de vulnerabilidad llegó al36,4% para los adultos de 16 a 29 años yal 31,9% para los menores de 16 años.

Cerca de 3,2 millones viven en pobre-za severa, con menos de 332 euros

mensuales para afrontar los gastos perso-nales. Son casi el 7% de las personas queviven en España, aunque las diferenciaspor comunidades son muy notables.

De los tres indicadores que se utilizanpara elaborar la tasa de riesgo de

pobreza y exclusión (desempleo, bajos in-gresos y carencias materiales), el que másha subido en 2014 ha sido el de privaciónmaterial, lo que significa que las condi-ciones de vida de estas personas han em-peorado drásticamente.

El número de trabajadores pobres si-gue aumentando. En 2013 suponían

el 11,7%, el año pasado ya eran el 14,2%.El incremento de la jornada parcial nodeseada en el segundo trimestre de 2015alcanzaba ya al 16% de los ocupados.

S i hablamos de desigualdad, hay quedecir que España es más desigual que

la media de los países europeos, casi dospuntos por encima. El 10% más rico po-see el equivalente a la mitad de todo elingreso de la población de España.

¿sabías que...?

Datos extraídos de bit.ly/EAPN2015

Desde el 1 de enero de 2016, se establece una única suscripción, denominada “normal” (antes “apoyo”) cuyo coste será de 11,50 € al año. Para resolver sus dudas, póngase en contacto con nosotros.

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P 07_P 07 19/11/2015 12:37 Página 1

evangelioen la calle

QQ uería hacer un «Evangelio en la calle» conesa idea del Dios enamorado de nuestrapequeñez y busco la homilía del papa

Francisco en la noche de la Navidad del 2014. ¡Québien! Resumo y adapto sin añadir nada. Así quemejor sería que firmara él. «Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño

envuelto en pañales y acostado en un pesebre»(Lucas 2,12). La «señal» es el amor con el que Jesúsasumió nuestra fragilidad, sufrimientos, angustias,anhelos y limitaciones. El mensaje no es otro que laternura de Dios: Dios nos mira con ojos llenos deafecto, acepta nuestra miseria, Dios enamorado denuestra pequeñez.En Navidad contemplamos al Niño Jesús apenas

nacido y acostado en un pesebre y nos invita areflexionar: lo más importante no es buscarlo, sinodejar que sea él quien me busque, quien meencuentre y me acaricie con cariño. Ésta es la pre-gunta que el Niño nos hace: ¿permito a Dios queme quiera?Y más aún: ¿tenemos el coraje de acoger con ter-

nura las situaciones difíciles y los problemas dequien está a nuestro lado? ¡Cuánta necesidad deternura y cercanía tiene el mundo de hoy!La respuesta del cristiano no puede ser más que

aquella que Dios da a nuestra pequeñez. La vidatiene que ser vivida con bondad, con mansedum-bre. Cuando nos damos cuenta de que Dios estáenamorado de nuestra pequeñez, que él mismo sehace pequeño para propiciar el encuentro con nos-otros, no podemos nada más que abrirle nuestrocorazón y suplicarle: «Señor, ayúdame a ser comotú, dame la gracia de la ternura en las circunstan-cias más duras de la vida».En los días de Navidad contemplemos el miste-

rio: allí «el pueblo que caminaba en tinieblas viouna luz grande» (Isaías 9,1). La vio la gente senci-lla, dispuesta a acoger el don de Dios. En cambio,no la vieron los arrogantes, los soberbios, los queestablecen las leyes según sus propios criterios per-sonales, los que adoptan actitudes de cerrazón. Miremos al misterio y recemos, pidiendo a la Vir-

gen Madre: «muéstranos a Jesús».Antonio Hernández-Carrillo

Navidad: enamorado de nuestra pequeñez

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166 • diciembre 2015

Edita: HOAC • Hermandad Obrera de Acción Católica l Dirección Abraham Canales • @otromundoesposi l Redactor jefe José Luis Palacios • @jlpalas l Maquetación Olga PardoContacto publicaciones@hoac.es • Calle Alfonso XI, 4-4º 28014 Madrid • Teléfono 917.014.080 • hoac.es l Depósito legal: M.40919–1996 l Suscripciones www.edicioneshoac.esImpreso en papel couché de 100gr/m2, ecológico, 100% libre de cloro y de otros compuestos sulfurosos. La tirada de este número es de 7.000 ejemplares. Licencia CC 4.0

Hace cincuenta años, la Asamblea General delas Naciones Unidas adoptó dos tratadosinternacionales que forman parte de los

derechos humanos universales: el Pacto Internacio-nal de Derechos Económicos Sociales y Culturales(PIDESC) y el Pacto Internacional de DerechosCiviles y Políticos (PIDCP). Muchos países los reco-nocen y defienden el Estado de Derecho como fun-damento de sociedades verdaderamente resistentes yestables. Sin embargo, queda mucho por hacer. Elaumento de la incitación al odio contra las religionesy minorías raciales, la justificación de violaciones delos derechos en nombre de la lucha contra el terroris-mo, la postergación reiterada del cumplimiento de losderechos económicos y sociales en el nombre de lascrisis económicas o de seguridad, y el hecho de norespetar el derecho a la privacidad en la era digitalson motivos de preocupación. El 10 de diciembre seconmemora la aprobación de la Declaración Univer-sal de Derechos Humanos. Buen momento paradefender los derechos y libertades de toda la huma-nidad.

Así va el mundo

Foto www.unfpa.org.co

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