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Temas del siglo XIX:

11. El antiguo rgimen.

11.1. La crisis de 1808. La Guerra de la Independencia y los comienzos de la revolucin liberal.

Carlos IV sucedi a su padre, Carlos III, en 1788. Su reinado estuvo condicionado por el estallido de la revolucin francesa (1789); hasta entonces la poltica exterior espaola haba estado marcada por la alianza con Francia (Pactos de familia) pero la revolucin oblig a Espaa a replantearse su actitud y tras una primera fase de neutralidad se inicia una contienda (1793) que finaliza con la Paz de Basilea en 1795. En 1796 se firm el primer Tratado de San Ildefonso.Por el cual Espaa adopt una poltica de colaboracin con Francia que la llev a la derrota de Trafalgar en 1805, lo que supuso el hundimiento de Espaa como potencia martima.

Cuando Carlos IV accedi al trono mantuvo como primer ministro, por recomendacin de su padre a Floridablanca, pero por influencia de la reina Mara Luisa de Parma, Manuel Godoy, un joven guardia de Corps ascendi al cargo de primer ministro, siendo el verdadero gobernante de Espaa de 1792 hasta el final del reinado, aunque durante un breve parntesis, 1798-1800, fue relevado de su cargo.En 1807 Godoy firm con Napolen el Tratado de Fontainebleau, en virtud del cual se permita a las tropas francesas su paso por territorio espaol para conquistar Portugal, pas aliado de Inglaterra. El objetivo era dividir Portugal en tres partes, de las cuales una sera un principado bajo el mando de Godoy.Con este pretexto Napolen dispuso sus tropas en distintas partes de Espaa. Godoy al comprender el peligro,intento trasladar a la familia real a Andaluca, pero en marzo de 1808 estall el motn de Aranjuez, lugar donde se encontraba la corte.El origen del motn estaba en el partido que se haba formado en torno al prncipe heredero, futuro Fernando VII, opuesto al excesivo poder y protagonismo de Godoy. Este partido foment el descontento entre grupos populares que fueron quienes protagonizaron el motn asaltando el palacio de Godoy.Carlos IV se vio obligado a destituir a Godoy y a abdicar a favor de su hijo Fernando. Napolen, entonces, logr atraer a la ciudad francesa de Bayona a Carlos IV y a Fernando VII, obligndoles a abdicar en l la corona y cedindosela a su vez a su hermano Jos Bonaparte, que con el nombre de Jos I se convirti as en rey de Espaa y promulg la Constitucin o Estatuto de Bayona, en realidad una carta otorgada, que pretenda modernizar las estructuras polticas espaolas tomando como modelo el sistema francs.El dos de mayo de 1808, cuando el resto de la familia real espaola pretenda abandonar el Palacio de Oriente, el pueblo madrileo se amotin, pocas horas despus el general Murat reprima la revuelta fusilando a centenares de personas como escarmiento.Al conocerse la noticia de las abdicaciones de Bayona y los sucesos de Madrid se extendi la insurreccin por todo el territorio espaol, quedando dividido en dos bandos, lo que hace de este conflicto no slo una guerra contra el invasor, sino tambin una guerra civil.Por un lado, los territorios ocupados por el ejrcito francs, que contaba con el apoyo de los afrancesados, entre los que estaban algunos reformistas ilustrados que pretendan una modernizacin pacfica y gradual.Por otro lado, estaba la resistencia que afirmaba luchar en nombre de Fernando VII, pero dentro de este bando estaban dos grupos ideolgicos: Los liberales, que pretendan establecer un nuevo tipo de monarqua. Los absolutistas, partidarios del antiguo rgimen y del retorno de Fernando VII como monarca absoluto.Para controlar la situacin, en las zonas no ocupadas se crearon juntas locales, que se integraron en juntas provinciales que asumieron la autoridad en nombre de Fernando VII. Con delegados de las juntas provinciales qued constituida, en septiembre de 1808, bajo la presidencia de Floridablanca, la Junta Central Suprema, que en 1810 traspas sus poderes a un Consejo de Regencia que se estableci en Cdiz y que convoc cortes generales que llevarn a cabo un conjunto de decretos y sobre todo, la Constitucin de 1812 lo que supone el primer intento de transformacin liberal, que se produjo en Espaa.En junio de 1808, con el objetivo de reprimir los levantamientos populares e instaurar el rgimen de Jos I, un ejrcito de 17000 hombres se adentr en Espaa confiando desplegarse en abanico y controlar as los puntos fundamentales del pas. Pero la inesperada resistencia de los espaoles desbarat en un primer momento los proyectos de Napolen.La resistencia contaba con la ayuda del ejrcito ingls y con la guerrilla, formada por antiguos soldados, voluntarios civiles e incluso bandoleros, que atacaban por sorpresa al enemigo con acciones rpidas, valindose de su conocimiento del terreno y la complicidad de la poblacin civil. Algunos dirigentes alcanzaron gran prestigio, como El Empecinado o Espoz y Mina.Hasta noviembre de 1808, la resistencia consigui algunas victorias como la de Bailn, y algunas ciudades cuya toma se prevea fcil, como Zaragoza o Gerona se resistieron a la ocupacin, producindose sitios o asedios que duraron varios meses.Jos I se vio obligado a abandonar Madrid y establecerse en Vitoria. Napolen decidi dirigirll mismo las operaciones en Espaa, donde permaneci unos pocos meses, al frente de un ejrcito de 250 000 hombres.Jos I regres a Madrid, mientras la Junta Central se refugiaba en Sevilla y luego en Cdiz. Slo algunas zonas quedaron libres.Pero la situacin cambi en la primavera de 1812, , Napolen necesitaba efectivos en el frente ruso, lo que facilit la victoria del general Wellington, al frente de tropas inglesas, portuguesas y espaolas, ayudadas por partidas de guerrilleros, que derrot a los franceses en Arapiles, los expuls de Andaluca y los presion hasta su retirada. En 1813 los derrot en la batalla de San Marcial, (Irn). A finales de 1813 se firm el tratado de Valenay, por el que Napolen reconoca a Fernando VII como rey de Espaa.

11.2. Las Cortes de Cdiz y la Constitucin de 1812.

Tras los acontecimientos de 1808 el gobierno de Espaa haba quedado en manos de un rey extranjero, Jos Bonaparte, y el pas estaba ocupado por un ejrcito invasor. Para controlar la situacin, en las zonas no ocupadas se crearon juntas locales, que se integraron en juntas provinciales que asumieron la autoridad en nombre de Fernando VII. Con delegados de las juntas provinciales qued constituida, en septiembre de 1808, bajo la presidencia de Floridablanca, la Junta Central Suprema, que en 1810 traspas sus poderes a un Consejo de Regencia que se estableci en Cdiz y que convoc cortes generales.

Desde el primer momento se tiene conciencia de que se parte de una situacin nueva, y que no se renen las tradicionales cortes estamentales, sino que se rene una sola asamblea, en representacin de la nacin, no del rey, aunque se reconoca como soberano legtimo a Fernando VII, y se le juraba fidelidad. Al mismo tiempo se le reconoca a las Cortes el poder constituyente, es decir el poder de formular una ley nica fundamental, una constitucin.Los diputados, elegidos por las ciudades, representaban tres grupos ideolgicos: Los liberales, que defendan la soberana nacional, no compartida con el rey, la divisin de poderes y la igualdad jurdica de los ciudadanos, desapareciendo los privilegios y el antiguo rgimen seorial. En el otro extremo estaban los defensores de la monarqua tradicional, los absolutistas, que queran la soberana exclusiva del rey, del que emanaran todos los poderes, y en general el mantenimiento del Antiguo Rgimen. Al grupo intermedio se les denomin los Jovellanistas, eran los herederos de la ilustracin y de la idea de hacer las reformas desde arriba. Defendan la idea de una soberana compartida entre el rey y las Cortes.La mayora de los diputados de Cdiz pertenecan al grupo de los liberales, pero no representaban realmente a la opinin mayoritaria del pueblo espaol.

Contenido de la Constitucin:a) El sistema poltico:- La Constitucin establece una monarqua parlamentaria- La Soberana reside exclusivamente en la Nacin. Este artculo es el ms revolucionario de todos y el que va a dividir posteriormente a los liberales, pues algunos preferan una soberana compartida entre la nacin y el rey.- Los tres poderes quedan separados: El legislativo queda en manos de unas cortes unicamerales (en posteriores constituciones se introducir una segunda cmara, el Senado) elegidas por sufragio indirecto, y masculino (votan varones cabezas de familia para elegir a unos electores, varones, mayores, que son los que eligen a los diputados, varones mayores de 25, y con un mnimo de renta, de tal manera que la burguesa se asegura el poder). Tena amplias atribuciones y estaba legislado perfectamente su funcionamiento en cuanto a su convocatoria, la periodicidad de las reuniones y la duracin de las sesiones, lo que aseguraba su independencia respecto al rey. El ejecutivo queda en manos del rey que elige a sus secretarios (ministros). Se acaba con el concepto patrimonial de la monarqua en el art. 2 donde se establece que la nacin espaola es libre e independiente, y no es patrimonio de ninguna familia ni persona. El rey es irresponsable, y son sus ministros los que responden ante la justicia. Adems, teniendo en cuenta la poca confianza que los liberales tenan en Fernando VII se incluyeron una serie de limitaciones a la libertad de accin del monarca sin el consentimiento de las Cortes, tales como ausentarse del reino, ceder la corona o ceder parte del territorio, establecer alianzas, o impedir la reunin de las Cortes. El judicial queda en manos de tribunales independientes.b) Derechos y Libertades: La constitucin no los recoge de forma sistemtica. En el art. 4 los cita sin concretar: la nacin est obligada a conservar y proteger por leyes sabia y justas la libertad civil, la propiedad y los dems derechos legtimos de todos los individuos que la componen. Sin embargo muchos derechos aparecen de forma salpicada en otros artculos:- Se establece la igualdad civil al imponer una ley igual para todos los ciudadanos, lo que pone fin al sistema de privilegios y a la sociedad estamental, aunque reconoce los fueros del ejrcito y la iglesia.- Reconoce el derecho al sufragio en las condiciones que ya hemos citado.- Aunque establece el derecho a la libertad de imprenta excluye a los textos religiosos.- No reconoce la libertad de culto, pues se reconoce como nica religin de la nacin espaola la catlica y prohbe el ejercicio de cualquier otra religin. Estos dos artculos fueron una concesin hecha a los diputados absolutistas para conseguir que la Constitucin fuera aprobada.- Se protege la propiedad individual, siguiendo las ideas del liberalismo econmico propias de la burguesa que defiende la igualdad civil pero no econmica, y que pretenda acabar con el sistema de propiedad del Antiguo Rgimen, y que la propiedad estuviera sometida a las leyes del libre mercado, lo que no ocurra en el caso de las propiedades comunales o de las propiedades amortizadas.- Inviolabilidad del domicilio- Derecho a la educacin

c) Por ltimo la Constitucin acababa con los restos del rgimen feudal todava vigentes aunque en muchos casos haban cado en desuso:-Se suprimen los seoros jurisdiccionales.- Abolicin de los gremios, que atentan contra la libertad econmica, pero que dejar indefensos a muchos trabajadores, protegidos por la estrecha reglamentacin gremial.- Abolicin de los diezmos- Abolicin de los mayorazgos, que hacan que la propiedad se acumulara en muy pocas manos- Abolicin de los derechos de la Mesta.

La Constitucin de 1812 es una constitucin tpicamente burguesa que acaba con el sistema poltico, social y econmico del Antiguo Rgimen para establecer otro de carcter liberal que asegura el control poltico, intelectual y econmico a la burguesa. Cuando regres Fernando VII todos los que estaban en contra de la constitucin se unieron al rey para acabar con ella. Su vigencia ser por ello muy limitada, dos aos entre 1812 y 1814, en los que no da tiempo prcticamente a imponerla, pues no hay que olvidar que Espaa estaba ocupada por los franceses; y tres aos durante el trienio constitucional (1820-23)

11.3. Fernando VII: Absolutismo y liberalismo. La emancipacin de la Amrica espaola.

Mientras Fernando VII permaneca prisionero en Francia el pueblo espaol, en nombre del rey haba redactado la Constitucin de 1812 que acababa con el sistema de Antiguo Rgimen y recortaba ampliamente los poderes del rey. Sin embargo la Constitucin no representaba la opinin de todos los espaoles, solo del grupo de diputados liberales mayoritarios en Cdiz. Los diputados absolutistas, la Iglesia, y buena parte del pueblo no aceptaban el nuevo rgimen, lo que condujo a la divisin de los espaoles en dos grupos, los absolutistas y los liberales.Cuando Fernando VII, tras su liberacin por el Tratado de Valenay, en 1814, llega a Valencia es recibido por un grupo de militares y diputados absolutistas (llamados serviles) que le entregan el Manifiesto de los Persas (un escrito redactado por 69 diputados) donde le animan para que vuelva a instaurar el Antiguo Rgimen. Fernando declar nula la Constitucin (decreto de 4 de Mayo) y todas las leyes de las Cortes de Cdiz, restaura las viejas instituciones, incluida la inquisicin; y comienza la persecucin de los liberales.Sin embargo la vuelta al Antiguo Rgimen, tal y como pretendan los ms conservadores, ya no era posible, y lo que hizo Fernando fue volver al sistema de 1808, un despotismo Ilustrado en el que el rey gobernaba con la ayuda de ministros. Eso provoc el descontento tanto de los absolutistas como de los liberales. El descontento de los liberales y delejrcitoo cristaliz en una serie de pronunciamientos (forma de rebelin en la que un jefe militar se pronuncia, es decir proclama por medio de un manifiesto sus propuestas polticas) militares (casi una veintena), la mayora de ellos fracasados, que intentaban acabar con el sistema poltico mediante las armas.En 1820 el coronel Rafael de Riego inicia un alzamiento en Cabezas de San Juan (Sevilla) en defensa de la Constitucin de 1812. Aunque en un primer momento no tiene mucho seguimiento, pronto se le unen parte de las tropas que iban a embarcar para sofocar la sublevacin americana., La rebelin se extiende por otras ciudades. Fernando VII se ve obligado a capitular y en marzo jura la Constitucin de 1812. La victoria de la Revolucin supuso la vuelta al rgimen de 1812 durante tres aos, en el llamado Trienio Constitucional (1820-23).Este periodo se caracteriza por la agitacin poltica constante y la oposicin al gobierno liberal. Por un lado estaba el rey, que utiliz todos los recursos disponibles para poner obstculos a las reformas liberales. Y comenz a pedir secretamente una intervencin extranjera. Adems se crean partidas guerrilleras organizadas por la aristocracia y el clero, incluso los absolutistas instalan la Regencia de Urgel, que pretenda actuar como gobierno legtimo mientras durara la cautividad del rey por los liberales, finalmente el ejrcito la disolvi.Por otro lado los propios liberales se dividieron en dos grupos enfrentados: los moderados, o doceaistas, dispuestos a introducir reformas en la constitucin que la hicieran ms conservadora y los radicales, exaltados o veinteaistas que la queran mantener y buscaban una poltica ms progresista.Ante el temor de que la Revolucin se extienda al resto de Europa los miembros de la Santa Alianza (Austria, Prusia, Rusia y Francia) se renen en el Congreso de Verona y encargan a Francia enviar un ejrcito, los 100.000 hijos de San Luis. El gobierno y las Cortes se refugian en Cdiz con el rey. El ejrcito francs apenas encontr resistencia. El 30 de septiembre de 1823 Fernando fue liberado y la constitucin fue nuevamente abolida finalizando el Trienio, comienza laDcada Ominosa, de 1823 a 1833, ao de la muerte de Fernando, se impuso nuevamente el rgimen absolutista y se inici una brutal represin contra los liberales. Sin embargo poco a poco el rgimen absolutista se moder, buscando cierta modernizacin. Esta vez no se restaur la inquisicin e incluso Fernando cont con algunos ministros reformistas. Los absolutistas ms radicales quedaron decepcionados y forman un partido, absolutistas radicales o apostlicos, en torno al hermano de Fernando, Carlos, el futuro heredero, con el apoyo de una iglesia recelosa de la prdida de su influencia.Pero en 1830 nace la primera hija de Fernando y M Cristina de Npoles, Isabel. Esto desencadena una lucha en la corte entre los partidarios de Don Carlos (hasta el momento nico heredero) y los de M Cristina y de su hija. Como los partidarios de Don Carlos estaban ya bien definidos (absolutistas radicales) la reina busca apoyos entre los liberales dirigidos por Cea Bermdez.Las leyes de Partidas, derogadas por la ley Slica en el XVIII, haban sido puestas de nuevo en vigor por Carlos IV en 1789 mediante una Pragmtica Sancin, votada en Cortes, pero no publicada, lo que le impeda su aplicacin. Esta confusa situacin hizo que tanto los partidarios de Carlos como los de Isabel se considerarn con legtimos derechos. Fernando public la Pragmtica Sancin pero eso no hizo que el partido carlista abandonara sus pretensiones. En 1833, el rey mora e Isabel era reconocida como heredera y su madre como regente, quien comenz a gobernar con los liberales. Los carlistas no aceptaron la situacin y pusieron en marcha una guerra civil.

Mientras tanto en Amrica haba culminado el proceso de emancipacin.La sublevacin en Iberoamrica ser dirigida por los criollos, descendientes de espaoles nacidos en Amrica, que apenas eran la quinta parte de la poblacin, aunque eran el grupo dominante; enriquecidos por el comercio y sus propiedades territoriales; estn descontentos de su situacin frente a Espaa, que segua manteniendo el monopolio poltico y econmico lo que les impeda el libre comercio. Las nuevas ideas ilustradas que se difunden en la segunda mitad del siglo XVIII avivaron el descontento y difundieron las ideas de libertad adems tenan el ejemplo de la Independencia de Estados Unidos, pas que les apoyaba decididamente. En 1823 el presidente Monroe, en un famoso discurso, sienta las bases de su poltica enunciada en la frase Amrica para los americanos (doctrina Monroe).Sin embargo fue la quiebra de la autoridad espaola lo que inici el proceso de la independencia iberoamericana. La derrota de Trafalgar (1805) puso en evidencia la incapacidad de Espaa como potencia colonial adems la flota espaola haba quedado prcticamente aniquilada. Los sucesos de 1808 en la pennsula iniciaron el proceso. En las colonias las autoridades (Virreyes) aceptaron a Jos I, pero el pueblo se mantuvo fiel a Fernando VII producindose un movimiento similar de juntas locales que asumieron el gobierno en nombre de Fernando VII. Pero cuando en 1810 la Junta Central suprema se disuelve dando paso al Consejo de Regencia, se inicia el proceso emancipador en Amrica que proclama la inexistencia de un gobierno en Espaa.Entre 1810 y 1814 surgen movimientos revolucionarios similares en las colonias: En las ciudades ms importantes se deponen a los Virreyes y a los Capitanes generales, empiezan las declaraciones de independencia, con el apoyo de EEUU y de Inglaterra, que mantiene un doble juego ya que ayuda a los peninsulares contra los franceses; Se convocan Congresos para elaborar Constituciones liberales propias de un rgimen republicano.En Buenos Aires los criollos deponen al Virrey y crean una junta, con el liderazgo de San Martn (1810) Los mismos sucesos se reproducen en 1811 en Nueva Granada con Bolvar, y en otras zonas (salvo en Per).Caso especial es el de Nueva Espaa ( Mjico), donde la explotacin de los indios y mestizos por los hacendados y propietarios de las minas se produjo un movimiento de tipo social. Los criollos se aliaron con los peninsulares para aplastar el movimiento.En 1814, tras el regreso de Fernando VII se mandan tropas (unos 10 000 hombres) al mando de Morillo para sofocar la sublevacin. Consiguen controlar todo el territorio salvo Ro de la Plata. Pero en 1816 nuevamente estalla la sublevacin: Bolvar conquista Venezuela y Colombia, y San Martn desde buenos Aires cruza los Andes y toma Chile. Morillo, acorralado, solicita urgentemente el envo de tropas desde Espaa, pero la sublevacin en 1820 de Riego lo impide. Las tropas de Bolvar desde el norte y las de San Martn desde el sur convergen en Per derrotando a las tropas espaolas en Ayacucho (1824). La prdida de Per pone fin a la guerra. Toda Sudamrica se independiza formndose repblicas que dejaban el poder en manos de la minora criolla.Cuando en 1820 en Espaa se impone un gobierno liberal en Nueva Espaa (Mjico) donde los propios criollos haban sofocado los intentos de sublevacin, los criollos optan por el independentismo. Tras un efmero rgimen monrquico (Agustn de Iturbide) en 1824 se proclama una Repblica.A partir de 1820 se consolidaron los nuevos pases americanos, aunque se dieron distintos proyectos de federacin al estilo estadounidense las tendencias regionalistas y las diferencias marcadas ya por los antiguos virreinatos acabaron imponindose. Por otro lado tambin comenz el proceso de influencia econmico y poltico de los EEUU en la zona.En Espaa las repercusiones fueron sobre todo econmicas:El comercio con Amrica, una de las principales actividades de la economa espaola se redujo en gran medida y afect especialmente a zonas como Catalua, que orientaba gran parte de su produccin a la exportacin a las colonias.Desapareci tambin una fuente importante de ingresos para la Hacienda Real.

Cuando termina el reinado de Fernando VII Espaa de su gran imperio colonial Espaa slo conservar las colonias de Cuba, Puerto Rico y Filipinas.

12. La construccin y consolidacin del Estado liberal.

12.1. El reinado de Isabel II. La oposicin al liberalismo [incluyendo cuestin sucesoria]: carlismo y guerra civil. La cuestin foral.

El origen del conflicto se remonta al reinado de Fernando VII, cuando en la corte los ms radicales absolutistas forman un grupo en torno a Don Carlos, hermano de Fernando, puesto que el monarca, a pesar de sus tres matrimonios hasta el momento no haba tenido hijos. En 1829 Fernando VII se casa con su cuarta mujer, M Cristina de Npoles. El ao siguiente, 1830, la reina dio a luz una nia, Isabel. Antes de la muerte de Fernando VII acaecida en 1833, se desencadena una lucha entre los partidarios de Don Carlos y los de M Cristina y su hija Isabel. Puesto que los partidarios de Don Carlos estaban ya bien definidos (absolutistas radicales) a la reina no le queda otro remedio que buscar apoyos entre los liberales ms moderados.El conflicto se justificaba por la confusin existente en Espaa en cuanto a la sucesin al trono. Las leyes de Partidas, vigentes en Castilla durante la Edad Media y bajo la monarqua de los Habsburgo, permitan el acceso al trono a las mujeres, aunque daban preferencia al varn, pero fueron derogadas por la ley Slica con la llegada de los Borbones a Espaa en el siglo XVIII. Sin embargo haban sido puestas de nuevo en vigor por Carlos IV en 1789 mediante una Pragmtica Sancin, votada en Cortes, pero no publicada, lo que le impeda entrar en vigor. Esta confusa situacin hizo que tanto los partidarios de Carlos como los de Isabel se considerarn con legtimos derechos. Fernando public la Pragmtica Sancin pero eso no hizo que el partido carlista cejara en sus pretensiones. En 1833, al la muerte del rey, Isabel era reconocida como heredera y su madre asuma la regencia. Los carlistas no aceptaron la situacin y para defender sus pretensiones desencadenaron una guerra civil.El carlismo, por tanto, era un movimiento poltico que no aceptaba los cambios que se haban producido en Espaa tras la entrada de las ideas ilustradas, la invasin napolenica y la revolucin liberal de Cdiz. Pretendan una vuelta al Antiguo Rgimen, al poder absoluto dado por Dios que deba ejercitarse para la Gloria de Dios y el esplendor de su Sagrada Religin; al control del Estado por parte de una aristocracia que acaparaba los altos cargos polticos, eclesisticos y militares; al control del pensamiento por parte de la Iglesia, etc. El gobierno de Fernando VII haba sido para ellos una decepcin pues haba continuado en la lnea de los dspotas ilustrados, contando, incluso, con algunos ilustrados para gobernar. La Iglesia apoyo al carlismo como forma de evitar la prdida de su poder poltico y de su control social.Por otro lado estaba el problema de los fueros. Tras la Guerra de Sucesin, con los Decretos de Nueva Planta tanto Aragn como Catalua haban perdido sus fueros y haban tenido que aceptar las leyes castellanas. Navarra y el Pas Vasco, en agradecimiento al apoyo dado al candidato Borbn, conservaron los suyos. El carlismo, al apoyar la restauracin de los fueros tradicionales, triunf en aquellas zonas donde exista una preocupacin por la cuestin foral, tanto por miedo a perder los fueros como en el caso de Navarra o el Pas Vasco, como por inters en recuperarlos, en Aragn y Catalua, especialmente en las zonas rurales, donde mayor era el descontento con las nuevas formas de vida que iban apareciendo en las ciudades ligadas a la industria y al comercio. Por su carcter rural, el carlismo no pudo conseguir el apoyo de las clases ilustradas que vean en el liberalismo un sistema poltico ms apropiado para sus intereses y su modo de vida. La mayora de las ciudades eran liberales (Bilbao, San Sebastin, Pamplona y Vitoria).

La Primera Guerra Carlista (1833-40) se desarroll principalmente en el Norte. En otras zonas de Espaa se formaron algunas partidas guerrilleras que actuaban casi como bandoleros asolando la regin donde actuaban, dirigidas por hombres como Cabrera en Aragn o el Cura Merino, hroe de la guerra de la Independencia.

El gobierno isabelino, carente de recursos, no fue capaz de enviar un ejrcito bien equipado al norte con rapidez. El retraso en el envo de tropas permiti al dirigente carlista, Zumalacrregui, militar de carrera y experto en la guerra de guerrillas, adiestrar un ejrcito de 20.000 hombres. Cuando las tropas isabelinas llegaron se vieron acosadas por constantes emboscadas y escaramuzas sin conseguir un enfrentamiento en campo abierto. En 1835 Zumalacrregui controlaba la mayor parte de las Provincias Vascongadas. Animado por esos xitos (y por la necesidad de conseguir dinero y apoyos internacionales), don Carlos le ordena en 1835 tomar Bilbao, a pesar de la opinin contraria de Zumalacrregui. La operacin comenz con xito, abrindose paso hacia Bilbao y venciendo al general liberal Espartero, pero poco despus Zumalacrregui era alcanzado por una bala enemiga muriendo das despus, lo que dejo a los carlistas sin su mejor general. El sitio de Bilbao fue levantado y durante los dos aos siguientes la guerra se mantuvo en una situacin de equilibrio entre los dos bandos.Para salir de esa situacin que perjudicaba ms a los carlistas que a los liberales, pues agotaba a la poblacin campesina que mantena a las tropas carlistas, Don Carlos decidi emprender una gran expedicin para salir de la base del Norte, aunque los militares ms expertos estaban en contra. La Expedicin Real de 1837 fue un fracaso: el ejrcito carlista cruz toda Catalua y Valencia llegando a la vista de Madrid. Los carlistas esperaban que el pueblo se sumara a su ejrcito, pero no ocurri as, y ante la falta de los efectivos suficientes para atacar la capital dieron la vuelta y retrocedieron a su base del Norte.

En 1838 el general Espartero, que diriga el ejrcito liberal, recibi por fin los recursos necesarios para contar con un ejrcito numeroso y bien equipado, iniciando una nueva campaa en el Norte. Mientras, en el bando carlista la situacin se haba ido haciendo ms difcil debido a los enfrentamientos entre los propios dirigentes que desembocaron en conspiraciones y traiciones. Don Carlos haba dado a Maroto el mando supremo de la regin Norte. En febrero de 1839 se desencaden una crisis entre Maroto y un grupo de de militares rivales, representantes de la faccin ms absolutista, que acab con el fusilamiento de seis de ellos. Maroto recibi el apoyo de sus hombres pero no el de Don Carlos. Finalmente, cansado y decepcionado por la incapacidad del pretendiente y las intrigas de su corte, inici las negociaciones de paz con Espartero.Finalmente, el 29 de agosto de 1839, Maroto firm el Convenio de Vergara que reconoca a Isabel como reina legtima y respetaba los fueros. Navarra, donde la cuestin foral era secundaria, y donde se luchaba por el trono y el altar no acepto este acuerdo. Para ellos Vergara fue la gran traicin, y se convirti en el centro de la resistencia en el Norte, pero, cuando los vascos renunciaron, Navarra no pudo seguir luchando sola. Don Carlos cruz la frontera francesa abandonando la lucha.El carlismo sigui conservando alguna fuerza en las provincias vascas y sobre todo en Navarra, y slo en algunos momentos de crisis volver a resurgir en las llamadas Segunda y Tercera Guerras Carlistas: en 1846 cuando cumple Isabel su mayora de edad, al fracasar el proyecto de unir en matrimonio a la reina con el heredero de Don Carlos, y tras la revolucin del 68 y la salida de Espaa de Isabel II, que termin con el regreso de Alfonso XII en 1875. Sin embargo el carlismo sigui vivo en la sociedad vasca, muy ligado a la cuestin foral, y en Navarra.

12.2. Isabel II (1833-1843): las Regencias.

La muerte de Fernando VII, en 1833, abri un largo periodo de transformacin en la vida espaola, dando lugar a nuevas estructuras polticas, econmicas, sociales y culturales. Durante el reinado de su hija, Isabel II, se produjo el paso definitivo del Antiguo Rgimen al liberalismo burgus. Se configur una monarqua constitucional inspirada en los principios del liberalismo poltico, se sentaron las bases de una economa capitalista y desapareci la vieja sociedad estamental, dando paso a una nueva sociedad de clases.Pero a diferencia de otros pases europeos, donde la burguesa era la base social y el ms firme apoyo del liberalismo, Espaa contaba con una burguesa escasa y dbil y la monarqua tuvo que apoyarse en el nico grupo capaz de defenderla de las amenazas del carlismo: los militares liberales.

Cuando Fernando VII muere en 1833, su viuda, Mara Cristina, se encarg de la regencia hasta que Isabel, nacida en 1833, alcanzase la mayora de edad. Pero los partidarios de Carlos Mara Isidro, procedentes del sector absolutista ms intransigente, no aceptaron la situacin y se alzaron en armas. Comenzando as la guerra civil, que no finalizar hasta 1839 con el Convenio de Vergara, aunque a lo largo del siglo habr nuevos levantamientos carlistas.Este conflicto tendr importantes consecuencias, adems de los elevados costes humanos: La inclinacin de la monarqua haca el liberalismo. El protagonismo poltico de los militares. Los generales o espadones, se acomodaron al frente de los partidos polticos. El recurso del pronunciamiento se convirti en la frmula habitual de instaurar cambios de gobierno durante todo el reinado. Los enormes gastos de guerra situaron a la monarqua ante serios apuros fiscales y condicionaron la orientacin de ciertas reformas como la desamortizacin de Mendizbal.

Por otro lado, el reinado de Isabel II se caracteriz por la alternancia en el gobierno de progresistas y moderados, en un clima de inestabilidad poltica acentuado por los continuos pronunciamientos militares.A comienzos del reinado surgieron los primeros partidos polticos como forma de canalizar las distintas corrientes del liberalismo: El partido moderado con el general Narvez a la cabeza, se apoyaba en los grandes terratenientes, la alta burguesa y la clase media alta. Defenda la soberana compartida entre el rey y las Cortes, dotar al monarca de amplios poderes y la limitacin de los derechos individuales de los ciudadanos. El partido progresista, encabezado por el general Espartero, militar de gran carisma popular, por su papel en la primera guerra carlista, tena su base social en la pequea y mediana burguesa y en general en las clases medias, empleados y artesanos que aspiraban a llevar las reformas lo ms lejos posible. Defendan la soberana nacional, representada en las Cortes, que deba limitar el poder del rey.Del ala izquierda del progresismo, surgirn durante la dcada de los 40 otras fuerzas polticas de tendencias democrtico-republicanas.

La minora de edad de Isabel II transcurrir bajo dos regencias, primero la de la reina Mara Cristina, su madre, (1833-1840) y despus la del general Baldomero Espartero (1840-1843)

La primera regencia: Mara Cristina, (1833-1840)Los tres primeros aos de regencia sirvieron para que los liberales moderados, algunos de ellos retornados del exilio, fueron afianzndose en la poltica. El principal instrumento fue el Estatuto real de 1834, no era una constitucin sino una carta otorgada, se centraba en la reforma de las Cortes, que pasaron a ser bicamerales, compuestas por Prceres designados por el rey y Procuradores elegibles, aunque para ser candidato era imprescindible disponer de cierto patrimonio.Ambas cmaras tenan una funcin ms consultiva que legislativa, pues eran convocadas, suspendidas y disueltas por el monarca y slo podan deliberar sobre asuntos planteados por el mismo. Adems la ley electoral estableca un sufragio electoral que reduca el nmero de votantes al 0,15% de la poblacin total.La guerra civil y la desastrosa situacin econmica provocaron ya en 1835 sublevaciones de las milicias urbanas, que exigen una ampliacin de las libertades polticas y del sufragio electoral y la entrega del poder a polticos progresistas.En 1836, una revuelta contra la regente, organizada por suboficiales del ejrcito (El motn del Palacio de la Granja) oblig a Mara Cristina a aceptar la puesta en vigor, de nuevo de la constitucin de 1812. Aunque inmediatamente redact una nueva constitucin: la Constitucin de 1837.Esta constitucin presenta semejanzas con la de Cdiz: Soberana nacional, reconocimiento de amplios derechos ciudadanos, la divisin de poderes (legislativo, judicial y ejecutivo, papel destacado de las Cortes y limitacin del poder del monarca. Aunque para atraerse el apoyo de los moderados recoga algunos aspectos del Estatuto Real: El poder del monarca de convocar y disolver las cortes y de vetar leyes. Cortes bicamerales con un Senado integrado por miembros de de designacin real y un Congreso de Diputados elegidos por sufragio directo, pero la nueva ley electoral mantuvo el sufragio censitario que no inclua ni al 5% de la poblacin.Con el nuevo marco constitucional se promulgaron algunas leyes progresistas como la supresin de pagar diezmos a la Iglesia, la eliminacin de aduanas interiores y la supresin de los gremios para favorecer el crecimiento de la industria.Adems se adoptaron medidas para liberalizar el mercado de la tierra: la supresin de los mayorazgos, la abolicin del rgimen seorial y las desamortizaciones es decir la expropiacin, por parte del Estado de las tierras eclesisticas y municipales para su posterior venta a particulares en pblica subasta.En 1835 se disolvieron las rdenes religiosas, salvo las consagradas a la enseanza o al cuidado de enfermos y sus fincas se declararon bienes nacionales.La desamortizacin de Mendizbal (ley de 1837) consisti en la venta por subasta de las tierras expropiadas a la Iglesia, por lo que se la conoce tambin como desamortizacin eclesistica. Sus objetivos eran sanear la Hacienda, financiar la guerra civil contra los carlistas y convertir a los nuevos propietarios en adeptos a la causa liberal, aunque provoc graves tensiones entre la Iglesia y el Estado liberal.

Finalizada la guerra carlista, un gobierno dirigido por el moderado Prez de Castro intent nuevamente limitar las reformas y la participacin de las clases medias urbanas, promulgando una ley de Ayuntamientos, que suprima el derecho de los ciudadanos a elegir a sus alcaldes. Los progresistas suscitaron un movimiento insurreccional que oblig a la regente a recurrir al general Espartero. La suspensin de dicha ley y la decisin de suspender las Cortes provocaron la renuncia de Mara Cristina, siendo asumida esta por Espartero.

Segunda regencia: General Espartero (1840-1843)El general Espartero gobern hasta 1843 de manera dictatorial, reprimiendo a los moderados y sin someterse al Parlamento.Se gan as el rechazo de todos: su poltica librecambista pona en peligro la industria catalana. Al movimiento cataln contra Espartero se uni la oposicin de los vascos que por su apoyo al Carlismo vean reordenados sus fueros. Algunos sectores liberales progresistas, que haban apoyado inicialmente a Espartero, se enfrentaron a sus formas autoritarias.En 1843 se inici una revuelta militar encabezada por Narvez que hizo caer al gobierno, Espartero se exili en Londres. No regres a Espaa hasta 1849.Las Cortes para evitar una nueva regencia, adelantaron la mayora de edad de Isabel II, que de esta forma fue coronada reina a los trece aos.

12.3. Isabel II (1843-1868): el reinado efectivo.

La muerte de Fernando VII, en 1833, abri un largo periodo de transformacin en la vida espaola, dando lugar a nuevas estructuras polticas, econmicas, sociales y culturales. Durante el reinado de su hija, Isabel II, se produjo el paso definitivo del Antiguo Rgimen al liberalismo burgus. Se configur una monarqua constitucional inspirada en los principios del liberalismo poltico, se sentaron las bases de una economa capitalista y desapareci la vieja sociedad estamental, dando paso a una nueva sociedad de clases.

La minora de edad de Isabel II transcurrir bajo dos regencias, primero la de la reina Mara Cristina, su madre, (1833-1840) y despus la del general Baldomero Espartero (1840-1843).En 1843 se inici una revuelta militar encabezada por Narvez que hizo caer al gobierno de Espartero que se exili en Londres. No regres a Espaa hasta 1849.Las Cortes para evitar una nueva regencia, adelantaron la mayora de edad de Isabel II, que de esta forma fue coronada reina a los trece aos.Educada por su madre, Mara Cristina, en un ambiente de desconfianza hacia los sectores progresistas del liberalismo, contrajo matrimonio en 1864 con su primo, el infante Francisco de Ass, cuando su matrimonio result ser un fracaso su conducta privada hizo que sus enemigos la acusaran constantemente de tener favoritos y de ser una mujer frvola lo que debilit su posicin poltica. A pesar de los rumores Isabel II conserv su popularidad como soberana hasta la dcada de los 60. Pero su parcialidad poltica a favor de los moderados coloc a la reina en una posicin cada vez ms debilitada. Cuando en 1868 estall la Revolucin Gloriosa, la reina que estaba en San Sebastin tuvo que cruzar a toda prisa la frontera e instalarse en Pars, ciudad en la que muri en 1904.

Tras la la cada de Espartero se inici la llamada Dcada moderada, (1844-1854):Isabel II encarg la formacin de gobierno al partido moderado, liderado por el general Narvez. El partido moderado apoyado por los sectores burgueses ms conservadores gobernar durante diez aos. Derog la Constitucin de 1837 y redact otra nueva: La Constitucin de 1845, en la que la Soberana nacional fue sustituida por la soberana conjunta del rey y las Cortes y se otorgaban ms poderes a la Corona como el nombramiento de ministros, la designacin de los miembros del Senado, y la disolucin de las Cortes y se recortaban los del Parlamento. Las Cortes siguieron siendo bicamerales (Congreso y Senado) y los diputados del Congreso seguan siendo elegidos por sufragio censitario que no llegaba al 1% de la poblacin. En este periodo se firm con la Santa Sede el Concordato de 1851, por el que quedaba zanjada la ruptura que se haba producido como consecuencia de la desamortizacin eclesistica, la Iglesia acept la desamortizacin y Espaa reconoca la confesionalidad catlica del Estado y reconoca su intervencin en la enseanza.Los moderados configuraron un rgimen basado en el centralismo poltico- administrativo. A ello responden: La creacin de la provincia como nueva demarcacin territorial. La ley de ayuntamientos de 1845, que reservaba a la Corona la designacin de los alcaldes de ciudades con 2000 o ms habitantes. La reforma del sistema tributario, de Alejandro Mon, que implant un sistema de impuestos ms equitativo. La creacin del Banco de Espaa. La creacin de la Guardia Civil por el duque de Ahumada en 1844, con el que se pretenda resolver el problema de la seguridad de los caminos y de las vas frreas.

Pero las divisiones internas del partido moderado y las denuncias de corrupcin y escndalos financieros, relacionados en ocasiones con la propia familia real y miembros destacados del gobierno hicieron que las clases populares dieran su apoyo a un pronunciamiento liberal de carcter progresista, liderado por el general Leopoldo ODonnell, en junio de 1854 en las cercanas de Madrid en los cuarteles de Viclvaro, por lo que se le denomina: La Vicalvarada, la declaracin de intenciones por medio del Manifiesto de Manzanares, redactado por Cnovas del Castillo, determin la movilizacin de los grupos progresistas.Aunque el movimiento no pretenda destronar a la reina sino forzarla a admitir las reformas democrticas interrumpidas en 1844.En medio de la confusin general, la reina decidi llamar a Espartero, comenzando as el:Bienio progresista (1854-1856). Volvieron a adoptarse medidas radicales como en la poca de la regencia de Espartero; Los jesuitas fueron expulsados bajo la acusacin de conspirar con los antiliberales y se prohibieron las procesiones y las manifestaciones externas del culto catlico. Se elabor un texto constitucional en 1856 que, aunque aprobado por las Cortes no lleg a ser promulgado. Un hecho relevante fue la Ley de Desamortizacin General de 1855, elaborada por Pascual Madoz, que vena a completar la obra de Mendizbal. Afectaba sobre todo al clero secular y a los bienes municipales. Esto, junto con las medidas anteriormente nombradas, suscit la ruptura con la Iglesia, mientras que la medida de desamortizar los bienes municipales, encontr una fuerte oposicin no slo de los moderados, sino tambin de algunos diputados progresistas. Se establecieron tambin leyes relacionadas con la banca, la minera y la ms destacable: la ley general de Ferrocarriles de 1855.

Pero las presiones de la Corona y la Iglesia provocaron la reaccin de los liberales moderados que provocaron la cada de Espartero y la vuelta de los moderados al poder.Comienza as la:Segunda Dcada liberal conservadora (1856-1868)En este periodo se sucedieron los gobiernos de los generales Narvez y ODonnell: Bienio moderado de Narvez (1856-1858). Gobierno de la Unin liberal de O'Donnell. (1854-1863) Gobiernos moderados de Narvez y Gonzlez Bravo (1863-1868)Este periodo estuvo caracterizado por el predominio de tres sectores sociales: los terratenientes, los militares conservadores y la Iglesia. Se paraliz la desamortizacin, se le reconocieron a la Iglesia muchas prerrogativas.

El periodo de mayor prosperidad coincidi con el Gobierno de la Unin liberal de O'Donnell., este gobierno se benefici de una poca de buenas cosechas y de expansin comercial, gracias a las bases coloniales de Cuba y Filipinas. En este periodo tambin se inici una activa poltica exterior. Se enviaron tropas a Cochinchina (hoy parte de Vietnam), se hicieron expediciones militares al norte de frica, lo que acab en una guerra abierta contra el Sultn, se ocup militarmente Santo Domingo, aunque despus se perdi, etc.;Paralelamente crecan en Espaa las aspiraciones polticas de mayor libertad y derechos civiles. Se desarrollaba el partido demcrata y apareca el republicanismo, al tiempo que se creaban las primeras organizaciones obreras y se producan agitaciones entre el campesinado jornalero, que en ocasiones fueron duramente reprimidas por la Guardia civil.En 1864 volvi Narvez al gobierno, entregando el Ministerio de Gobernacin a Gonzlez Bravo.Tras la destitucin de los profesores universitarios republicanos Castelar y Sanz del Ro, y las protestas estudiantiles que siguieron, el ejrcito actu con gran violencia (Noche de San Daniel). Hubo nuevos pronunciamientos progresistas que llevaron a una dura represin y los fusilamientos del cuartel de San Gil.La reina se desprestigiaba da a da y esto llev a una alianza entre progresistas y demcratas, que firmaron un pacto en la ciudad belga de Ostende, 1866, que inclua el acuerdo para destronar a Isabel II. (Pactos de Ostende)

Dos aos despus, en septiembre de 1868 la armada espaola atracada en Cdiz y dirigida por el almirante Topete se sublev, con el apoyo de los generales Prim y Serrano. Comenz as la Revolucin Gloriosa.El movimiento se extendi con levantamientos populares que ocuparon las plazas de sus localidades al grito de Mueran los borbones y se organizaron juntas revolucionarias locales. Serrano venci al ejrcito gubernamental en Alcolea, Crdoba, e Isabel II hua a Francia. La revolucin haba triunfado.

12.4. El Sexenio democrtico (1868-1874): Intentos democratizadores. La revolucin, el reinado de Amadeo I y la Primera Repblica.

El desprestigio del rgimen de Isabel II llev a una alianza entre progresistas y demcratas, que firmaron un pacto en la ciudad belga de Ostende, 1866, que inclua el acuerdo para destronar a Isabel II. (Pactos de Ostende)

Dos aos despus, en septiembre de 1868 la armada espaola atracada en Cdiz y dirigida por el almirante Topete se sublev, con el apoyo de los generales Prim y Serrano. Comenz as la Revolucin Gloriosa. El movimiento se extendi con levantamientos populares que ocuparon las plazas de sus localidades al grito de Mueran los borbones y se organizaron juntas revolucionarias locales. Serrano venci al ejrcito gubernamental en Alcolea, Crdoba, e Isabel II hua a Francia. La revolucin haba triunfado.En un primer momento el poder poltico fue ejercido por la Junta Revolucionaria de Madrid, que confi el poder al general Serrano quien tom medidas para estabilizar la revolucin como la convocatoria de Cortes constituyentes. Las elecciones dieron la mayora a la coalicin de unionistas, progresistas y demcratas. Elegidas por sufragio universal, (masculino) confirmaron en su cargo a Serrano y comenzaron a elaborar un nuevo texto constitucional.La Constitucin de 1869Es considerada la primera Constitucin democrtica de la historia de Espaa, destaca por sus siguientes caractersticas: Incluye una amplia declaracin de derechos: ,sufragio universal masculino libertad de imprenta, derechos de reunin y asociacin, la inviolabilidad de la correspondencia Reconoce la soberana nacional, de la que emanan los dems poderes. La divisin de poderes. Con gran protagonismo de las Cortes que no slo legislan sino que tambin controlan al gobierno. La forma de gobierno ser la monarqua, aunque el poder del rey est limitado.Una vez aprobada (Sancionada) la Constitucin, el general Serrano fue nombrado regente y el general Prim se convirti en jefe de gobierno.Era preciso encontrar un candidato para el trono espaol, se barajaron varios nombres, Prim puso como condicin que deba ser demcrata y no Borbn. Finalmente propuso a Amadeo de Saboya, duque de Aosta e hijo de Vctor Manuel, rey de Italia. Gracias a las gestiones llevadas a cabo por Prim, Amadeo acept el trono de Espaa. El nuevo monarca tuvo que hacer frente a una difcil situacin. El principal apoyo del rey, el general Prim fue asesinado en un atentado poco antes de que el rey llegase a Espaa. El rey se encontr con la abierta oposicin de los republicanos, de los carlistas que se levantaron en armas en mayo de 1872, desencadenando la tercera guerra carlista y de los partidarios del prncipe Alfonso, el hijo de Isabel II.Tuvo que apoyarse en dos grupos polticos muy distintos: El Partido constitucional, liderado por Prxedes Mateo Sagasta, ms conservador y partidarios de detener los avances democrticos. El partido Radical, de Ruiz Zorrilla, en el que se encuadraron progresistas y demcratas, partidarios de reformas audaces.Adems tuvo que enfrentarse a otros dos graves problemas, aparte de la Guerra carlista:La agitacin social ligada al desarrollo del movimiento obrero que lleg a alcanzar un alto nivel de organizacin, gracias a la libertad de asociacin.La guerra de los Diez Aos (1868-1878) en Cuba.En tales circunstancias, y tras dos aos de reinado, el 11 de febrero de 1873, Amadeo presentaba el acta de abdicacin a la Corona espaola, regresando a Italia. Ese mismo da, Congreso y Senado, en sesin conjunta proclamaban la Repblica.

La Primera Repblica transcurri entre el 11 de febrero de 1873 y el 3 de enero de 1874. En tan corto espacio de tiempo se sucedieron cuatro presidentes. Adems el contexto en el que se desarroll era muy problemtico.

Estanislao Figueras fue el primer presidente de la Repblica, en su mandato el desorden aument: intentos de golpe de Estado, constante actividad del movimiento obrero se celebraron elecciones a Cortes Constituyentes, en las que triunfaron los republicanos federalistas, aunque nunca se lleg a promulgar una Constitucin republicana. En junio abandon el cargo y le sucedi: Francisco Pi y Margall, que tena el propsito de instaurar una repblica federal, pero de forma ordenada, sin embargo el proyecto no se realiz sobre todo porque hubo que atender a otros graves problemas, la guerra carlista, alentada por el pretendiente Carlos VII y la insurreccin cantonal promovida por los republicanos federales ms exaltados. La rebelin comenz en julio con la proclamacin del cantn de Cartagena, el movimiento se extendi y se organizaron cantones por toda la Pennsula, en especial por Levante y Andaluca. Estos hechos le obligaron a dimitir y le sucedi: Nicols Salmern, con l la Repblica dio un giro conservador, con el apoyo de generales monrquicos. Los cantonalistas proclamaron entonces un gobierno provisional de la Federacin espaola en Cartagena y declararon la guerra a Madrid. Salmern emple a fondo la fuerza militar y fueron cayendo uno a uno los diferentes focos, a mediados de agosto la insurreccin estaba prcticamente sofocada, slo el cantn de Cartagena resisti hasta enero de 1874.Resulta difcil establecer la ideologa y las pretensiones de los distintos focos cantonalistas, parece que se trataba de impulsar una revolucin social con mtodos radicales, apoyndose en una mezcla ideolgica: republicanismo, federalismo, socialismo utpico y anarquismo.Salmern dimitira en septiembre por negarse a confirmar dos penas de muerte impuestas por la autoridad militar. Le sucedi Emilio Castelar que actu con firmeza: aplic la pena de muerte, llam al ejrcito para imponer el orden, reforz el poder del Estado y suprimi el principio federal. Para poder llevar esto a cabo solicit a las Cortes, y estas se lo concedieron, poderes especiales para gobernar por decreto durante tres meses. Cuando las Cortes se volvieron a reunir, el 2 de enero de 1874, el gobierno fue sometido a un voto de confianza y lo perdi.

La posibilidad de que el poder recayera de nuevo sobre los federalistas radicales ofreci el pretexto para el golpe de estado de Pava, capitn general de Madrid, que al da siguiente invadi el hemiciclo del Congreso y disolvi las Cortes.Tras el golpe de Pava, la junta de Capitanes Generales nombr jefe de gobierno al general Serrano, que mantuvo las formas republicanas pero aplic una poltica represiva con un claro protagonismo del ejrcito.La inestabilidad del periodo provoc un viraje de la burguesa a posiciones conservadoras y el fracaso de la repblica despert el deseo de de una restauracin monrquica.Los partidarios de la restauracin borbnica haban emprendido una activa labor diplomtica con el fin de lograr apoyos internacionales para el hijo de Isabel II, el futuro Alfonso XII, frente a otros posibles candidatos. El principal defensor de la candidatura del prncipe fue Cnovas del Castillo, que intentaba que la vuelta a la monarqua fuera el resultado del deseo del pueblo espaol y no de un nuevo pronunciamiento militar. Para ello haba hecho firmar a Alfonso el Manifiesto de Sandhurst nombre de la localidad inglesa donde estudiaba- en el que expona al pueblo espaol sus propsitos conciliadores. Sin embargo y en contra del parecer de Cnovas, el 29 de diciembre de 1874, el general Arsenio Martnez Campos proclam rey a Alfonso XII, tras un pronunciamiento en Sagunto, la monarqua borbnica haba sido restaurada mediante un golpe militar.

12.5. Reinado de Alfonso XII: el sistema canovista y la Constitucin de 1876.

La inestabilidad del periodo anterior (1868-74) provoc un viraje de la burguesa a posiciones conservadoras y el fracaso de la I repblica despert el deseo de de una restauracin monrquica.

Los partidarios de la restauracin borbnica haban emprendido una activa labor diplomtica con el fin de lograr apoyos internacionales para el hijo de Isabel II, el futuro Alfonso XII, frente a otros posibles candidatos. El principal defensor de la candidatura del prncipe fue Cnovas del Castillo, que intentaba que la vuelta a la monarqua fuera el resultado del deseo del pueblo espaol y no de un nuevo pronunciamiento militar. Para ello haba hecho firmar a Alfonso el Manifiesto de Sandhurst nombre de la localidad inglesa donde estudiaba- en el que expona al pueblo espaol sus propsitos conciliadores. Sin embargo y en contra del parecer de Cnovas, el 29 de diciembre de 1874, el general Arsenio Martnez Campos proclam rey a Alfonso XII, tras un pronunciamiento en Sagunto, la monarqua borbnica haba sido restaurada mediante un golpe militar.

En enero de 1875 Alfonso XII llega a Espaa inicindose la Restauracin, periodo que se extiende hasta 1902 en que su hijo, Alfonso XIII, alcanza la mayora de edad.

Al rgimen poltico de la Restauracin se le denomina Sistema Canovista ya que fue Cnovas del Castillo su creador tomando como modelo el sistema britnico: consista en una monarqua parlamentaria en la que dos partidos se turnaran pacficamente en el poder. Sin embargo, este fue un falso rgimen parlamentario ya que los dos partidos turnantes, liberales y conservadores, slo representaban los intereses de la burguesa, quedando los dems grupos fuera del juego poltico, y porque las mayoras parlamentarias eran artificialmente creadas gracias a la prctica comn del fraude electoral.

El sistema Canovista se basaba en el turno pacfico de partidos pero dentro de un rgimen bipartidista, solo dos partidos, el conservador y el liberal, entran en el juego en un primer momento. El resto de los partidos (republicanos, socialistas o nacionalistas) formaban la oposicin al sistema.

El Partido Conservador. Fue creado por el propio Cnovas. Integraba a los miembros del antiguo partido moderado y de la Unin Liberal. Partidario de una monarqua parlamentaria que fuera controlada por una oligarqua financiera (sufragio restringido), con libertades limitadas (prensa, asociacin, ctedra), apoyo a la iglesia y un proteccionismo econmico. El Partido Liberal. Lo forma Sagasta en 1880, aglutinando a los progresistas y radicales. Difera muy poco del conservador, ya que representaba los intereses de la misma clase social, la burguesa, aunque su base social era ms amplia. Defendan la soberana nacional, el sufragio universal, unas libertades ms amplias, incluida la de asociacin y culto, eran anticlericales y defendan el librecambismo (A. Smith).

La alternancia pacfica en el poder de los dos partidos se convirti en cambios de gobierno pactados de antemano entre ellos. Una vez acordado el cambio de gobierno, se convocaban elecciones y se amaaban para que arrojaran resultados favorables al nuevo partido era la prctica del caciquismo.Los dos partidos tenan su propia red organizada para asegurarse los resultados electorales adecuados. En Madrid estaba la oligarqua integrada por altos cargos polticos y personajes influyentes. En las capitales de provincias la figura clave era el gobernador civil. Y en las comarcas, pueblos y aldeas estaban los caciques locales, con poder econmico e influencias.Cuando un partido consideraba que le haba llegado el turno de gobernar o de pasar a la oposicin lo pactaba con el otro partido y con el rey. El rey, entonces disolva las Cortes y convocaba elecciones. Desde Madrid los oligarcas transmitan instrucciones a los gobernadores civiles de cada provincia, estos elaboraban la lista de los candidatos que haban de salir elegidos en cada localidad los encasillados- y se lo comunicaban a los caciques locales que se encargaban de la manipulacin directa de los resultados electorales utilizando distintos procedimientos: actitudes protectores haca los electores, amenazas, extorsiones, el cambio de urnas o pucherazo

Este sistema fue regulado por la Constitucin de 1876, la de mayor vigencia de nuestra historia pues se mantendr hasta 1923, en que Primo de Rivera la suspende. En general mantiene el carcter de la constitucin moderada de 1845 pero incluyendo algunos avances de la de 1869. Pero lo ms caracterstico de ella es su carcter ambiguo, que deja la regulacin de muchas cuestiones fundamentales a decretos posteriores, pues Cnovas quera evitar que cada cambio de gobierno supusiera un cambio constitucional como haba ocurrido en poca de Isabel:

El Rgimen Poltico era una Monarqua Parlamentaria en la que la soberana estaba compartida por el rey y las cortes,:- El ejecutivo quedaba en manos del rey, que nombra sus ministros al margen de las mayoras parlamentarias.- El legislativo quedaba en manos de unas cortes bicamerales. El Senado se forma con miembros designados por el Rey, por lo que no haba una autentica separacin de poderes. El Congreso se formaba con diputados elegidos por sufragio, que en los primeros aos es censitario pero que en 1890 se convierte en universal masculino gracias a la ley electoral de Sagasta.- El judicial queda en manos de los jueces.

La declaracin de Derechos es ambigua pues en general los derechos se regulan por decretos posteriores que los conservadores tienden a limitar y los liberales a ampliar.- Los derechos sociales tardan en reconocerse pero en 1883 Sagasta elabora la ley de asociaciones lo que permite la organizacin del movimiento sindical.- La libertad de expresin, opinin, imprenta, ctedra,...se va a mantener con ms o menos limitaciones segn los momentos.- No se permite el culto pblico de los no catlicos, no habiendo total libertad religiosa.

El reinado de Alfonso XII, interrumpido por su temprana muerte a los 28 aos de edad, representa la fase de consolidacin del sistema canovista.El gobierno lo ejerci bsicamente el Partido Conservador, salvo de 1881 a 1884 en que, con el primer gobierno del Partido liberal, se inici la prctica del turnismo.Durante el periodo se acab con el tradicional protagonismo de los militares y con la prctica del pronunciamiento; se liquidaron las dos guerras heredadas del periodo anterior, la carlista y la de Cuba; e incluso se disfrut de una buena coyuntura econmica internacional, que favoreci la consolidacin del deficiente capitalismo espaol.Tras la temprana muerte de Alfonso XII, Mara Cristina de Habsburgo, su viuda asumi la regencia hasta la mayora de edad del futuro Alfonso XIII, del que estaba embarazada a la muerte de su esposo.

12.6. La Regencia de Mara Cristina de Habsburgo y el turno de partidos. La oposicin al sistema. Regionalismo y nacionalismo.

Tras la muerte de Alfonso XII (1885), Mara Cristina de Habsburgo, su viuda, asumi la regencia hasta la mayora de edad del futuro Alfonso XIII, (1902) del que estaba embarazada a la muerte de su esposo.

Esta etapa comenz con un gobierno del Partido liberal de Sagasta (1885-1890) que otorg al sistema una orientacin ms progresista mediante la promulgacin de una serie de leyes como la ley de Asociaciones (1887), la ley de Jurado (1888) o la ley del Sufragio Universal (1890).A Partir de 1890 Cnovas y Sagasta de turnaron en el poder. Pero en 1897 Cnovas muri vctima de un atentado y el rgimen sufri un duro golpe. Aunque la verdadera crisis se produjo a raz de la prdida de las ltimas colonias espaolas en 1898.El rgimen poltico de este periodo contino siendo el ideado por Cnovas del Castillo tomando como modelo el sistema britnico: consista en una monarqua parlamentaria en la que dos partidos se turnaban pacficamente en el poder.El sistema Canovista se basaba en el turno de partidos pero dentro de un rgimen bipartidista, solo dos partidos, el conservador y el liberal, entran en el juego en un primer momento. El resto de los partidos (republicanos, socialistas o nacionalistas) formaban la oposicin al sistema. El Partido Conservador. Fue creado por el propio Cnovas. Integraba a los miembros del antiguo partido moderado y de la Unin Liberal. Partidario de una monarqua parlamentaria que fuera controlada por una oligarqua financiera (sufragio restringido), con libertades limitadas (prensa, asociacin, ctedra), apoyo a la iglesia y un proteccionismo econmico. El Partido Liberal. Lo forma Sagasta en 1880, aglutinando a los progresistas y radicales. Difera muy poco del conservador, ya que representaba los intereses de la misma clase social, la burguesa, aunque su base social era ms amplia. Defendan la soberana nacional, el sufragio universal, unas libertades ms amplias, incluida la de asociacin y culto, eran anticlericales y defendan el librecambismo (A. Smith).La alternancia en el poder de los dos partidos se convirti en cambios de gobierno pactados de antemano entre ellos. Una vez acordado el cambio de gobierno, se convocaban elecciones y se amaaban para que arrojaran resultados favorables al nuevo partido era la prctica del caciquismo.Los dos partidos tenan su propia red organizada para asegurarse los resultados electorales adecuados. En Madrid estaba la oligarqua integrada por altos cargos polticos y personajes influyentes. En las capitales de provincias la figura clave era el gobernador civil. Y en las comarcas, pueblos y aldeas estaban los caciques locales, con poder econmico e influencias.Cuando un partido consideraba que le haba llegado el turno de gobernar o de pasar a la oposicin lo pactaba con el otro partido. La regente, entonces disolva las Cortes y convocaba elecciones. Desde Madrid los oligarcas transmitan instrucciones a los gobernadores civiles de cada provincia, estos elaboraban la lista de los candidatos que haban de salir elegidos en cada localidad los encasillados- y se lo comunicaban a los caciques locales que se encargaban de la manipulacin directa de los resultados electorales utilizando distintos procedimientos: actitudes protectores haca los electores, amenazas, extorsiones, el cambio de urnas o pucherazo

Los dems partidos constituan la oposicin al sistema.Durante los primeros aos de la Restauracin tienen poco protagonismo, pero poco a poco, a medida que la corrupcin era ms evidente el descontento creci en la sociedad espaola y los partidos de oposicin fueron ganando fuerza provocando la crisis del sistema canovista, especialmente a partir de 1898.

Despus del fracaso de la I Repblica los partidos republicanos retrocedieron y perdieron gran parte de su base social que empez a seguir a los partidos obreros y a los partidos nacionalistas; el ms representativo fue el Partido Republicano Progresista, heredero de la I Repblica, al que pertenecan hombres como Salmern o Ruiz Zorrilla. Posteriormente se dividieron, algunos optaron por la va del catalanismo (Salmern), otros por el regeneracionismo (Melquades lvarez) y otros por la va de la accin revolucionaria (Ruiz Zorrilla y Lerroux).Los partidos obreros se organizan legalmente a partir de la promulgacin de Ley de Asociacin . Desde la ruptura de la AIT en 1872 el movimiento obrero estaba escindido en dos grandes corrientes ideolgicas, los socialistas marxistas y los anarquistas de Bakunin. En Espaa el partido socialista ms importante era el PSOE, fundado en 1879 por Pablo Iglesias, que segua la corriente marxista que defenda el fin de la sociedad capitalista y de la propiedad privada de los medios de produccin mediante la revolucin obrera para establecer una dictadura del proletariado. Sin embargo poco a poco el PSOE evolucion hacia posiciones reformistas (socialdemocracia) presentando candidatos en las elecciones. En 1888 P. Iglesias fund el sindicato UGT, que centro su luchar en la mejora de las condiciones de trabajo (salario mnimo, jornada de 8 h., descanso dominical, prohibicin del trabajo infantil). Los Anarquistas, por su propia naturaleza, carecan de una nica doctrina, pero tenan en comn el rechazo de toda forma de organizacin estatal. En Espaa vamos a encontrar dos corrientes: En Andaluca el anarquismo de Bakunin, que propugnaban la formacin de comunidades autnomas, autogestionadas, sin una autoridad ni propiedad privada y en Catalua el anarcosindicalismo que quera mantener los sindicatos como nica forma de organizacin social. La CNT fundada en 1911 fue el ms importante sindicato anarquista.

Regionalismo y Nacionalismo:

Desde la Guerra de la Independencia aparece en Espaa una tendencia revolucionaria de carcter centrfugo, denominada federalismo o cantonalismo segn el momento, y que pona el acento ms en la cuestin del autogobierno y el desarrollo de las libertades que en el desarrollo cultural de una nacionalidad. A partir de mediados del siglo XIX en toda Europa se desarrolla un sentimiento nacionalista, entendiendo la nacin como una entidad con vida propia, con una forma de ser y de pensar, con unas manifestaciones culturales, una historia comn y unos lmites territoriales que no coincidiran con las fronteras polticas, creadas artificialmente. En este sentido el nacionalismo poda ser, polticamente, tanto de signo conservador como revolucionario, segn el modelo de estado que defendieran.Durante los ltimos aos del XIX en Espaa aparece el movimiento nacionalista en Catalua y el Pas Vasco regiones donde exista una diferenciacin lingstica sobre la que va a cimentarse el sentimiento nacionalista.

Es en Catalua donde se inicia este movimiento. Su primer impulsor fue Valenti Almirall, procedente del partido republicano federal de Pi y Margall. Pretenda agrupar a todos aquellos que, independientemente de sus tendencias polticas, propugnaban la autonoma catalana y el desarrollo de la cultura catalana (Renaixena). El movimiento poltico pronto va a escindirse en dos grandes corrientes una conservadora cuyo partido ms representativo fue La Lliga, y otra republicana y revolucionaria, cuyo partido ms representativo ser Esquerra Republicana (fundada en 1931).

El nacionalismo vasco: fue ms tardo y hasta la II Repblica fue muy minoritario. En 1895 Sabino Arana fund el partido nacionalista vasco (PNV), muy conservador en sus planteamientos, y que parta de la reivindicacin foral y del catolicismo ms radical (Dios y Leyes Viejas). Era independentista y no se planteaba una forma de gobierno pues buscaba el mantenimiento de la raza y la nacin vasca en cuanto a lengua, tradiciones, cultura...

Desde el desastre de 1998 el aparente equilibrio poltico, ideado por Cnovas, se vi ensombrecido por la emergencia poltica y social de las organizaciones obreras, el republicanismo y el ascenso del nacionalismoEn 1902 Alfonso XIII accedi al trono, cumplidos los 16 aos, sustituyendo a su madre y comenz la segunda etapa de la Restauracin.

12.7. Guerra colonial y crisis de 1898.

Durante el reinado de Fernando VII (1808-33) la mayor parte de las colonias espaolas en Amrica haban obtenido la independencia formndose una serie de repblicas independientes gobernadas por una minora, descendientes de espaoles, los criollos. Tras el movimiento independentista Espaa solo posea como colonias en Amrica las islas de Cuba y Puerto Rico, que junto con las Filipinas en Asia, constituan los ltimos restos del gran Imperio Espaol de la poca de los Austrias. En 1823 el presidente norteamericano Monroe haba respaldado este movimiento de independencia en un famoso discurso donde, mediante la frase Amrica para los americanos formul la poltica de su pas respecto al resto de los territorios del continente, que fueron considerados como territorios de inters para Estados Unidos.

Desde mediados del siglo XIX la economa cubana tena mayores relaciones comerciales con EEUU que con Espaa, a pesar de que se mantena el monopolio comercial tradicional. Exista en la isla un movimiento que solicitaba una liberalizacin econmica y una mayor autonoma en lo poltico. El estallido de la Revolucin de 1868 en Espaa alent este movimiento, pero lo nico que se ofreci desde Espaa fueron unas medidas liberalizadoras que los independentistas cubanos, criollos y mestizos, consideraron insuficientes y exigieron constituirse en una Repblica independiente. Pero los espaoles residentes en la isla, que se beneficiaban de la situacin de monopolio, se negaban a aceptar cualquier medida liberalizadora y exigan a Madrid una poltica ms dura frente a los independentistas. El conflicto degener en una guerra de diez aos, la llamada Guerra Grande (1868-78) que concluy con la Paz de Zanjn (1878) firmada por el general Martnez Campos tras conseguir la pacificacin de la isla. Espaa, adems de conceder el indulto a los insurgentes, se comprometa a permitir cierta intervencin de los cubanos en el gobierno interior de la isla. Algunos lderes del independentismo, como Maceo, rechazaron la Paz y siguieron trabajando por la independencia desde el exilio con el apoyo ms o menos encubierto de Estados Unidos, pero la calma se mantuvo en Cuba hasta 1895.

Pero la paz solo fue una tregua porque en la isla la sociedad segua estando dividida entre los espaoles, que queran la unidad, el monopolio y el proteccionismo; los criollos, que queran la autonoma dentro de la soberana espaola y el libre cambio; y los mestizos que queran la independencia de Espaa. Cualquier intento de reforma en uno u otro sentido chocaba con los intereses de algn sector de la sociedad espaola: as Maura, ministro de Ultramar en 1892, present un proyecto de autonoma de Cuba y Puerto Rico que pusiera a los criollos de parte de Espaa, pero el presidente del gobierno, Cnovas, presionado por los hombres del partido conservador, no sac adelante el proyecto.

Ante esta situacin en 1895 la guerra vuelve a estallar. Estar dirigida por Jos Mart, idelogo y lder del independentismo cubano, deportado en Espaa durante el anterior conflicto, tras el cual se haba trasladado a EEUU donde fund el Partido Revolucionario Cubano y entr en contacto con otros lderes del independentismo cubano como Gmez y Maceo. Tras su muerte en un enfrentamiento con los espaoles ese mismo ao, la guerra va a continuar dirigida por Gmez y Maceo (este ltimo muere en 1896 en un enfrentamiento). Estos van a optar por una tctica de guerrillas en las zonas rurales evitando el enfrentamiento con el ejrcito espaol, muy superior. Nuevamente fue enviado Martnez Campos a sofocar la rebelin, pero ante su fracaso fue sustituido por Weyler, que lleva a cabo una dursima represin que logra reducir la guerrilla. Cnovas aprovecha esta mejor posicin para introducir algunas reformas, pero ya insuficientes (1897).Este mismo Cnovas es asesinado y Sagasta asume el gobierno, el cual decide conceder la autonoma en Cuba. Pero el clima de tensin en la isla aument por la oposicin de los espaoles residentes en Cuba a estas medidas. Es entonces cuando EEUU decide intervenir directamente en Cuba enviando al acorazado Maine para, segn ellos, proteger los intereses de los residentes americanos. Cuando el Maine fue volado, sin que se sepa hasta el da de hoy que sucedi, se desat una violenta campaa de prensa a favor de una guerra con Espaa. El presidente americano McKinley exigi a Espaa la entrega de la isla previo pago de 300 millones de dlares. Ante la negativa de Espaa Estados Unidos declar finalmente la guerra en 1898.

En Espaa tanto la opinin pblica como la mayora de los almirantes ignoraron el hecho cierto de que la escuadra americana era muy superior a la espaola, y se lanzaron a esta guerra con un optimismo inconsciente. El gobierno, ms consciente de la realidad, no poda entregar la isla, considerada por la mayora de los espaoles como una parte de la nacin, sin luchar. El Almirante Cervera, encargado de dirigir la flota, denunci pblicamente este hecho, pero atacado de cobarde y traidor, se dirigi a Cuba convencido de que la destruccin esperaba a la flota.As fue. La flota espaola era aniquilada en Santiago de Cuba, mientras tropas estadounidenses invaden Cuba y Puerto Rico.El otro escenario colonial fueron las Islas Filipinas, donde tambin haban aparecido movimientos de carcter independentista y donde tambin los norteamericanos se presentaron como sus libertadores.En Filipinas la escuadra fue destruida en una hora aunque la ciudad de Manila resisti unos meses). Espaa, ante el desastre, pidi la paz. Por el Tratado de Pars (10 de diciembre de 1898) Espaa perda Cuba, Puerto Rico y Filipinas, que de forma ms o menos velada, pasaron a depender de EEUU.

En el mbito econmico aunque se perdieron los mercados coloniales, la industria nacional se recuper pronto y la repatriacin de los capitales americanos permiti un gran desarrollo de la banca espaola.

Pero en el mbito ideolgico el desastre supuso un terrible desencanto y levant las voces de los regeneracionistas, corriente poltica que consideraba el sistema de la Restauracin como un sistema viciado y enfermo. Existan dentro de esta ideologa dos tendencias: un regeneracionismo crtico dentro del sistema, representado por Silvela o Maura, ministros del Partido conservador, que aceptaban la validez general del sistema pero criticaban los aspectos ms negativos y un regeneracionismo fuera del sistema con figuras como Joaqun Costa que criticaban el sistema en su totalidad.

Tambin el desencanto fue reflejado en la actitud pesimista de los intelectuales de la llamada generacin del 98.

13. Transformaciones econmicas y cambios sociales en el siglo XIX.

13.1. Transformaciones econmicas. Proceso de desamortizacin y cambios agrarios. Las peculiaridades de la incorporacin de Espaa a la revolucin industrial. Modernizacin de las infraestructuras: El impacto del ferrocarril.

La economa espaola en el siglo XIX puede calificarse como dual, debido a la persistencia de estructuras econmicas arcaicas junto a focos aislados de desarrollo. Aunque tambin en otros pases europeos se da esta dualidad en los comienzos de la industrializacin, lo ms caracterstico del caso de Espaa fue la lentitud de los cambios.

La agricultura sigui siendo la actividad econmica ms importante; (unos dos tercios de la poblacin activa estaba empleada en ella) Pero la desigual distribucin de la tierra, la ausencia de innovaciones tecnolgicas y los bajos rendimientos agrcolas hacan necesario adoptar medidas en el sector agrcola.Una de estas medidas ser la desamortizacin:La propiedad de la tierra en Espaa estaba en gran medida en manos de la nobleza y la Iglesia. La nobleza, gracias a la institucin del mayorazgo no poda enajenar (vender o transmitir) sus propiedades, ni dividirlas, sino que deba transmitirlas ntegras al primognito. Debido a esto, la tierra quedaba inmovilizada y convertida en tierra de manos muertas. Tambin los municipios eran propietarios de tierras que tenan su origen en concesiones reales. Solan ser bosques o terrenos ridos que se dividan en tierras de aprovechamiento comn y en tierras de propios que eran arrendadas a particulares. Como resultado de lo anterior la cantidad de tierra a la que se poda acceder era escasa y cara.Como solucin a este problema surgieron las desamortizaciones: que consistan en la expropiacin, por parte del Estado de las tierras eclesisticas y municipales para su venta a particulares en subasta pblica. En compensacin por el patrimonio confiscado a la Iglesia, el Estado se haca cargo de los gastos del culto y el clero. Por otro lado en 1836 se suprimieron los mayorazgos.Aunque hubo algunos intentos de desamortizacin a fines del siglo XVIII, el verdadero proceso de desamortizacin se desarroll a partir de 1837, en dos fases, a cada una de las cuales se las conoce por el nombre del ministro que la puso en marcha. La desamortizacin de Mendizbal (ley de 1837): Se inici debido a la crtica situacin del pas. Fundamentalmente se buscaba sanear la Hacienda, financiar la guerra civil y ganar adeptos para la causa liberal. Consista en la venta por subasta de las tierras expropiadas a la Iglesia, por lo que se la conoce tambin como desamortizacin eclesistica. La desamortizacin de Madoz (1855-1867): se inici durante el bienio progresista e inclua las tierras de la Iglesia an no vendidas y las de las propiedades municipales. La situacin fiscal y poltica no era tan grave, por lo que se pretenda no slo reducir la deuda pblica, si no tambin crear infraestructuras para modernizar la economa, con los ingresos obtenidos.

A consecuencias de las desamortizaciones se pusieron en cultivo grandes extensiones de tierra, aunque esta expansin de superficie estuvo acompaada de un aumento de la deforestacin. Pero las familias ms poderosas conservaron intactos sus patrimonios. Aunque hubo pequeos y medianos compradores locales, los principales compradores fueron las clases medias urbanas que se enriquecieron y diversificaron sus patrimonios.La roturacin de la propiedad municipal empobreci a los ayuntamientos y asent a campesinos empobrecidos sobre tierras no aptas para el cultivo. En definitiva no favoreci al campesino y cre una oligarqua agraria que ejercera el poder poltico y econmico durante largo tiempoPor otro lado slo a partir de los aos 70 del siglo XIX se advierte un descendimiento de la agricultura tradicional, representada en el trigo y el surgimiento de una agricultura ms moderna basada en el cultivo de frutales y productos de regado en el litoral mediterrneo.Pero la agricultura segua siendo un sector atrasado lo que le impidi desempear un papel en la formacin de capitales y por tanto en la industrializacin.La Revolucin industrial espaola fue tarda e incompleta. Se inici a partir de 1840, en el reinado de Isabel II, coincidiendo con una fase de expansin de la economa mundial y con una relativa estabilidad poltica.Adems del escaso papel de la agricultura hay que sealar otros factores del retraso: La inexistencia de una burguesa financiera emprendedora .la burguesa prefera inversiones a corto plazo o en sectores industriales que generen dinero rpido, como el ferrocarril, antes que en sectores industriales bsicos como la siderurgia. La dependencia tcnica o financiera del exterior. El capital extranjero aprovech la buena coyuntura para invertir en Espaa, primero el inversor franco-belga y despus el ingls. Escasez de carbn y materias primas. Falta de coherencia en las polticas econmicas de los partidos polticos.

A pesar de estos factores se intent transformar las viejas estructuras econmicas en otras nuevas basadas en el desarrollo del comercio y la industria, pero los resultados no se correspondieron con los objetivos.Catalua fue la nica zona donde la industrializacin se origin a partir de capitales autctonos, aunque predomin la empresa de tamao mediano. El sector algodonero fue el ms dinmico. La proteccin arancelaria la puso a salvo de la competencia inglesa y le permiti, tras la prdida del mercado colonial, orientar su produccin al mercado nacional.La inexistencia de buen carbn y de demanda suficiente explica el desarrollo dificultoso de la industria siderrgica cuya localizacin fue cambiado a lo largo del siglo XIX:Primero se desarroll la industria en torno a Mlaga, sobre todo en el apogeo de las guerras carlistas que impedan la explotacin de las minas del norte. Se basaba en la explotacin del hierro.Despus entre los aos 60 y 80 se dio la etapa asturiana, basada en la riqueza de carbn de la zona, aunque no era de gran calidad.Pero el verdadero despegue de la siderurgia se inici a finales de siglo en torno a Bilbao. Bilbao exportaba hierro y compraba carbn gals, ms caro, pero de mejor calidad y ms rentable.En cuanto a la minera alcanz su apogeo en el ltimo cuarto de siglo. Espaa era rica en reservas de hierro, plomo, cobre, zinc y mercurio. Aunque fueron sobre todo compaas extranjeras las que se hicieron cargo de la explotacin minera. Es importante en este desarrollo la ley de bases sobre minas de 1868.En cuanto al comercio, aument considerablemente en volumen a lo largo del siglo XIX. La poltica proteccionista se mantuvo con altibajos durante todo el siglo. Exceptuando durante el sexenio democrtico con el Arancel Figuerola. Hay que destacar tambin la reforma de la Hacienda pblica de Mon-Santilln en 1845 y la implantacin de la peseta como moneda oficial en 1868.La revolucin de los transportes lleg con el Ferrocarril.La primera lnea se construy en 1848: Barcelona-Matar, pero la fiebre constructora se desencaden a partir de la ley general de Ferrocarriles de 1855. Las causas hay que atribuirlas al apoyo estatal, al flujo masivo de capital y tecnologa extranjeros, sobre todo franceses y a la aportacin de capitales nacionales, especialmente en Catalua, Pas Vasco y Valencia. En 1868 se haban construido 4 803 kilmetros y fijado el trazado de las grandes lneas nacionales. Entre las compaas ferroviarias las ms importantes eran la de Madrid-Zaragoza (M.Z.A) y la del Ferrocarril del Norte.El ferrocarril abri el camino a la integracin real del mercado espaol, permitiendo un u intenso trfico de ideas, viajeros y mercancas. El ferrocarril actu como una poderosa palanca de desarrollo econmico.

13.2. Transformaciones sociales. Crecimiento demogrfico. De la sociedad estamental a la sociedad de clases. Gnesis y desarrollo del movimiento obrero en Espaa.

Durante siglos la sociedad espaola vivi condicionada por una estructura social estamental que apenas experimenta modificaciones. En el siglo XIX, sobre todo a partir de 1833 (muerte de Fernando VII) se sentaron las bases de una nueva sociedad donde en teora todos los individuos son iguales ante la ley. La sociedad deja de dividirse en estamentos cerrados, con derechos y obligaciones diferentes, y se estructura en una sociedad de clases, donde el criterio de divisin de la poblacin es fundamentalmente el nivel de renta.

Est poblacin experiment a partir de 1833 un notable crecimiento demogrfico. Entre 1833 y 1857 la poblacin aument en 3.200.000 habitantes, gracias a las mejoras realizadas en la alimentacin (extensin de cultivos, incorporacin de la patata a la dieta), avances de la medicina preventiva (vacunacin), y la introduccin de medidas higinicas.Al concluir el tercer cuarto del siglo XIX, Espaa mantena altas las tasas de natalidad (36 por 1000) y de mortalidad (30,4 por 1000). Fundamentalmente porque el crecimiento demogrfico no se acompa de un paralelo desarrollo econmico. Siguen producindose crisis de subsistencia y hambrunas, que explican la alta mortalidad junto a las epidemias (sarampin, tifus, tuberculosis)La poblacin tena una distribucin desequilibrada con un alto contraste entre la periferia litoral, muy poblada y el centro peninsular escasamente poblado.En este momento se inicia tambin el xodo rural, las ciudades sedes de un incipiente desarrollo industrial se convierten en un foco de atraccin para la poblacin rural. Pero ser durante los aos de la Restauracin cuando el xodo rural se intensifique, sobre todo dirigido a las capitales de provincia, a los ncleos industriales de Catalua y el Pas Vasco y a las grandes ciudades. (Madrid y Barcelona sobrepasarn los 500 000 habitantes). Hay que destacar la emigracin a Amrica, procedente sobre todo de Galicia, Asturias y Canarias, se estima que entre 1880 y 1914, un milln de espaoles cruzaron el Atlntico.Los aos finales del siglo XIX y primeros del XX supusieron una disminucin de la tasa de mortalidad, aunque la de natalidad se mantendr en torno al 30 por mil hasta la primera guerra mundial. Esto supone un gran crecimiento demogrfico; en 1900 la poblacin espaola se estima en 18, 6 millones que se convierten en algo ms de 23 millones a finales del reinado de Alfonso XIII.

Como ya se ha dicho esta poblacin experiment importantes cambios sociales como consecuencia de las nuevas estructuras polticas y econmicas que dejan atrs el Antiguo Rgimen:La nobleza desapareci como categora en los censos oficiales, pero no perdi su lugar predominante en la estructura social. Result beneficiada por la desamortizacin, pero la abolicin de los mayorazgos hizo que algunas familias sufrieran una profunda dispersin, algunos nobles pasaron a al mundo de los negocios y de las finanzas. Otros permanecieron vinculados al campo. Adems el desarrollo de Madrid como hizo surgir un nuevo tipo de cortesano que resida en la capital pero tena establecidas las bases latifundistas en Andaluca, Extremadura o Castilla , aunque muchos eran liberales en poltica desde el punto de vista religioso y social eran conservadores.Junto a la nobleza se sita una alta burguesa vinculada al proceso de modernizacin econmica, Con una poderosa situacin econmica defenda el liberalismo poltico ( a travs del sufragio censitario y la defensa de la propiedad privada), y el progresismo cultural, mientras que comparta con la nobleza sus gustos y estilo de vida, juntas rigen la vida social: organizan suntuosas fiestas, asisten a la pera, a los teatros y a los hipdromos y establecen su domicilio en los ensanches de las ciudades o en los barrios residenciales.Pero aunque la alta burguesa se encuentra en su momento de esplendor la presin del movimiento obrero les hace sentirse inseguros por lo que acabar buscando el apoyo del ejrcito.El ejrcito ser uno de los grupos sociales ms importantes de la vida espaola en el siglo XIX, cuyos generales y oficiales formarn parte de las clases medias e incluso de las clases altas.Con una importancia numrica restringida se sitan las clases medias que adems del ejrcito estaba formada por la pequea burguesa: pequeos empresarios, comerciantes, agricultores medios, funcionarios y profesionales liberales; Era mucho ms plural que la clase alta en cuanto a posturas polticas, aunque en general era partidaria de reformas moderadas que no pusieran en peligro su estabilidad. Se reunan en Liceos, ateneos y casinos. Y asisten a los toros y a la zarzuelaPero la gran mayora de la poblacin espaola perteneca a las clases bajas. El mantenimiento de formas anacrnicas de propiedad (latifundismo y minifundismo) y de sistemas de produccin arcaicos hizo que la vida del campesinado espaol fuera muy dura y el mundo rural siguiera anclado en el pasado. A mediados de siglo cerca del 55 por ciento de la poblacin agraria era jornalera, otro 11 por ciento era arrendataria y un 34 por ciento era propietaria. Las medidas adoptadas por el liberalismo apenas van a beneficiarlos. Los conflictos agrarios se manifestaron en ocasiones de forma violenta pero las agitaciones eran duramente reprimidas lo que explica el rpido desarrollo de las doctrinas comunistas y anarquistas en zonas agrcolas.Aunque la mayora de la poblacin espaola segua siendo campesina el principal cambio social del siglo XIX fue la aparicin de la clase obrera industrial. El incipiente desarrollo de la industria hizo afluir a las ciudades a miles de trabajadores agrcolas en paro. El resultado fue el crecimiento de los barrios obreros, carentes de las condiciones higinicas adecuadas y formados por barracas y chabolas construidas precipitadamente. El trabajo en las fbricas implicaba jornadas de 12 a 14 horas. Con salarios bajos, paro y explotacin infantil. El analfabetismo igual que en el campo era general.Los primeros intentos de asociacin obrera fueron las sociedades de ayuda mutua, al principio slo queran defender sus salarios. Pero fueron prohibidas en 1844. En 1855 estall en Barcelona una huelga general en defensa del derecho de asociacin, Dos obreros fueron enviados a Madrid para exponer sus quejas a los diputados respaldados por 33 000 firmas. Pero la las leyes aprobadas por las Cortes eran decepcionantes y defendan los intereses patronales. Los obreros comprendieron que los liberales, incluidos los progresistas, no iban a defender su causa por lo que se alinearon con los partidos demcratas y republicanos. A partir de 1863 los obreros comenzaron a movilizarse de nuevo, pero ahora abiertamente politizados. La revolucin de 1868 despert las esperanzas obreras y campesinas que creyeron que con ella comenzara el proceso de reformas sociales que esperaban. Pero la llegada de la Restauracin provocaron la separacin definitiva del movimiento obrero respecto a los partidos demcratas y republicanos.A partir de la promulgacin de Ley de Asociaciones de 1887 los partidos obreros se organizan legalmente.El movimiento obrero internacional estaba escindido en dos grandes corrientes ideolgicas, los socialistas marxistas y los anarquistas de Bakunin. En Espaa el partido socialista ms importante era el PSOE, fundado en 1879 por Pablo Iglesias, que segua la corriente marxista que defenda el fin de la sociedad capitalista mediante la revolucin obrera para establecer una dictadura del proletariado. Sin embargo poco a poco el PSOE evolucion hacia posiciones reformistas (socialdemocracia) presentando candidatos en las elecciones. En 1888 P. Iglesias fund el sindicato UGT, quecentro su luchar en la mejora de las condiciones de trabajo (salario mnimo, jornada de 8 h., descanso dominical, prohibicin del trabajo infantil). Los Anarquistas, carecan de una nica doctrina, pero tenan en comn el rechazo de toda forma de organizacin estatal. En Espaa vamos a encontrar dos corrientes: En Andaluca el anarquismo de Bakunin, que propugnaban la formacin de comunidades autogestionadas, sin propiedad privada y en Catalua el anarcosindicalismo que quera mantener los sindicatos como forma de organizacin social. La CNT fundada en 1911 fue el ms importante sindicato anarquista.

El principio del siglo XX estar caracterizado socialmente por el crecimiento de las organizaciones obreras y por su capacidad de movilizacin

13.3. Transformaciones culturales. Cambio en las mentalidades