EL RETRATO FOTOGRÁFICO

¿Qué es el retrato fotográfico?

El retrato fotográfico es un género donde se reúnen toda una serie de iniciativas artísticas que giran en torno a la idea de mostrar las cualidades físicas o morales de las personas que aparecen en las imágenes fotográficas.

Su práctica se encuentra ya en los inicios de la fotografía donde destaca la labor realizada por los fotógrafos ambulantes, los fotógrafos comerciales de los estudios parisinos, los primeros retratos psicológicos, el retrato popular presentado por la fotografía academicista, así como la obra documental de David Octavius Hill.

La clave del retrato fotográficoEn la fotografía intervienen diversos aspectos como son: los aspectos técnicos (iluminación y objetivos), formales (espontaneidad, expresión) y estéticos (fondos y maquillaje). Pero la clave de una buena fotografía está en la expresión ya que con ella reflejamos lo que queremos transmitir en ese instante, es decir, inmortalizamos el momento y lo guardamos como una imagen en la cual se transmiten sensaciones.

Planos fotográficos1. PLANO GENERAL O PLANO LARGO.

Los Planos Largos o planos generales son los que ofrecen un mayor ángulo de cobertura de la escena. Su función es poner sobre la mesa una situación en que lo importante es la escena en su conjunto y no un detalle en particular.

El Gran plano general o Plano general largo (P.G.L.) muestra un gran escenario o una multitud. La persona no está o bien queda diluida en el entorno, lejana, perdida, pequeña, masificada. Tiene un valor descriptivo y puede adquirir un valor dramático cuando se pretende destacar la soledad o la pequeñez del hombre enfrente del medio.

Se da así más relevancia al contexto que

a las figuras que se toman o se gravan.

2. PLANO GENERAL CORTO.

El Plano General Corto se centra en los individuos restando importancia al entorno. Aún se puede intuir la situación en la que están los sujetos, pero es ya mucho más secundario.

3. PLANO GENERAL CONJUNTO.

El Plano General Conjunto reduce el campo visual y encierra los personajes en una zona más restringida, de forma que puede ir individualizando cada objeto o sujeto de forma más precisa.

Cuando se fotografían a personas, ese tipo de plano alcanza a capturar la figura

completa ajustada a los bordes de la imagen.

                              4. PLANO ENTERO.

Los pies y la cabeza de la figura humana limitan prácticamente con los bordes inferior y superior del cuadro de la imagen.

                                              

5. PLANO MEDIO O DE CINTURA.

Como su nombre lo indica, es el plano intermedio por excelencia. Se produce a la altura de la cintura, y empieza a ser considerado un plano de retrato.

Con el plano medio cedemos más importancia todavía a los aspectos emocionales del sujeto. En esta ocasión cortamos a los personajes por encima de la cintura. En este plano influirá el hecho de hacer la fotografía en formato vertical u horizontal. Eligiendo el primer caso, el personaje ocupará la gran mayoría de la escena y el fondo pasará desapercibido.

6. PLANO MEDIO CORTO.

Plano medio corto encuadre de una figura humana cuya línea inferior se encuentra a la altura de las axilas. Es mucho más subjetivo y directo que los anteriores. Los personajes pueden llegar a ocupar la pantalla con un tercio de su cuerpo, y permite una identificación emocional del espectador con los actores.

Se llama plano medio corto si la toma se hace desde la altura del busto a la parte superior de la cabeza.

7. PLANO AMERICANO.

Es un plano americano si el corte de realiza aproximadamente, a la altura de las rodillas.

Tiene su origen con las películas del oeste, y no fue hasta entonces cuando se comenzó a hablar de este plano como tal. Apareció porque se requería un tipo de plano medio que capturase al sujeto con desperdicio del fondo pero que permitiese ver el desenfunde del revolver.

8 EL PRIMER PLANO.

El primer plano es el perfecto para el retrato del rostro.

Agranda el detalle y miniaturiza el conjunto de la escena, eliminando de una vez por toda la importancia del fondo.

Es tremendamente útil recurrir a encuadres verticales, reservando los horizontales para cuando tomemos imágenes en las que el rostro se acompaña con gestos de las manos o queramos jugar con el aire de la imagen.

9. PRIMERÍSIMO PRIMER PLANO.

La cabeza llena aproximadamente la pantalla.

El primerísimo primer plano suele caracterizarse por la desaparición de la parte superior de la cabeza y la fijación del límite inferior en la barbilla del personaje. La carga emotiva se acentúa y la atención en el personaje es prácticamente total.

10. PLANO DE DETALLE.

El Plano Detalle es el plano más cercano.

Como ocurría con otro tipo de planos, el contexto de la escena definirá que se trate de un plano detalle o no. De esta forma, una imagen de la Torre Eiffel puede ser un primer plano de la torre o un plano detalle de la ciudad. Este tipo de planos son difíciles de emplear con acierto, ya que pueden confundir al espectador al no dar referencia alguna ni del entorno ni siquiera, del propio sujeto. Los detalles se agrandan al máximo y la carga emocional alcanza su punto álgido.

El plano detalle suele confundirse con el concepto de foto macro, y no es lo mismo. Como su nombre indica, el plano detalle muestra un pequeño detalle que, en un plano "normal" pasaría desapercibido.

Elementos para una buena fotografía

La elección del fondo no se debe dejar al azar. Lo ideal es que el fondo ofrezca ligeros matices y variantes de color al modelo. Se trata de captar esas ligeras diferencias para que la imagen tenga más riqueza de color. Observe también cómo el color del fondo se funde con el de la figura principal y evite los cortes secos. El fondo debe de tener el protagonismo que usted desea que tenga. Un fondo suave y homogéneo centra la atención del cuadro en la persona retratada mientras que un fondo con mucho colorido y formas resta protagonismo a la figura principal, concediéndoselo al fondo. Una fotografía con un fondo agradable y acorde con la figura protagonista facilitará en gran medida la correcta transición de foto a retrato.La postura y mirada son muy importantes. Los defectos más habituales que hay en las fotografías son las sombras y la distribución no lineal de la luz en el rostro. Estos aspectos pueden ser corregidos por un buen retratista.El color de la figura principal a retratar es otro factor relevante a la hora de elegir una buena fotografía para pintar un retrato. Si la fotografía se ve artificial, el retrato se verá artificial. No la elija a menos que desee que esa característica se refleje también en el retrato pintado. Una de las mejores recomendaciones es elegir una fotografía con un motivo sencillo, con pocos elementos y formas simples. Uno debe tener en cuenta que lo que importa en un retrato no es capturar los detalles extremos sino realizar una buena interpretación del color, las formas y el alma de la figura. La sencillez de la foto facilita mucho la pintura de un retrato a partir de una foto y sitúa el énfasis del retrato en la persona o personas retratadas.

Cuando haya elegido una fotografía, obsérvela como si se tratara de un cuadro que Ud mismo fuera a pintar. Esto le ayudará a constatar si la organización de los elementos de la foto en el plano son los correctos. Imagínese haciendo un par de esbozos de ese tema. ¿Dejaría usted los elementos tal y como los ve en la foto? ¿Podría mejorarse la disposición de estos elementos de algún modo? ¿Es posible hallar o hacer una toma mejor que ayude a convertir esta foto en el retrato que le gustaría tener?

Algunos pintores coinciden en que la mejor distancia al modelo a representar es de unos dos metros y medio aproximadamente, aunque esto no puede tomarse como regla general.

Depende, también del tamaño, amplitud del modelo y el tamaño de la obra. Las mejores fotos son aquellas que nos permiten ver el modelo todo a la vez, abarcarlo con una sola mirada. La distancia al modelo está, en cierta medida, condicionada por la necesidad de verlo como un conjunto.

El estudio de la incidencia de la luz en la foto que servirá como modelo para el retrato es también importante. Es necesario elegir una foto en la que la luz del rostro incida de manera clara y natural. Esto dará énfasis a la figura principal del retrato. No olvide que en todo cuadro debe existir un centro de interés máximo o punto principal al que estarán supeditados los demás elementos de la obra. ¿Es la luminosidad del rostro de la foto la adecuada para favorecer este propósito o hace que su rostro se pierda en “un mar de fondo”?

Todos los motivos expuestos para encontrar una fotografía adecuada para pintar un buen retrato son motivos técnicos que nos ayudan mucho a la hora de obtener un resultado final óptimo en su retrato. Pero encontrar una fotografía que cumpla todos estos requisitos no es tarea sencilla. Por otro lado, está el factor emocional que puede llevarle a usted a elegir una fotografía que aunque técnicamente no sea la más apropiada, si lo es por lo que representa o por el valor sentimental que tiene para usted. Si este es su caso, no se preocupe tanto por los aspectos técnicos expuestos y comunique aquellos aspectos de la fotografía que le gustaría quedaran bien reflejados en su retrato. Con sus instrucciones, un buen retratista sabrá sacar a esa fotografía que es importante para usted el máximo provecho y conseguirá darle a su retrato una dimensión que va más allá de lo que usted podía imaginar.

1. Vamos a pedirles a nuestros alumnos, que con ayuda de un mayor realicen varias fotos de

diferentes planos y que después las traigan en un pen drive, para verlas en clase y comentarlas.

2. Una vez que hayan realizado la actividad anterior y hayan trabajado con los distintos planos, comprobaremos si se los han aprendido. La

profesora pondrá en un powerpoint distintas fotografías en diversos planos y ellos tendrán

que identificarlos.

Actividades propuestas para este tema