TALLER 1 COMPRENSIÓN LECTORA€¦ · Mira de un lado a otro y dice con una voz llena de orgullo:...
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Sala cuna y Escuela de párvulos Las Araucarias ---- 2020 TALLER 1 COMPRENSIÓN LECTORA “La lectura nos abre las puertas del mundo que te atrevas a imaginar” NOMBRE NIÑO O NIÑA: ____________________________ NIVEL: _______________________
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Sala cuna y Escuela de párvulos Las Araucarias ---- 2020
TALLER 1
COMPRENSIÓN
LECTORA
“La lectura nos abre las puertas del mundo que te atrevas
a imaginar”
NOMBRE NIÑO O NIÑA: ____________________________
NIVEL: _______________________
Sala cuna y Escuela de párvulos Las Araucarias ---- 2020
Indicaciones generales para fomentar la lectura y
comprensión lectora en los niños y niñas
Con los cuentos que se presentan a continuación buscamos potenciar y desarrollar el
lenguaje oral e iniciarse con las primeras herramientas en la comprensión lectora,
incorporando así mismo la conciencia fonológica a partir de la percepción de que las
palabras están formadas por sonidos (fonemas y silabas).
Con la finalidad de potenciar y desarrollar progresivamente en los niños y niñas dichas
habilidades es que las siguientes indicaciones deberán ser las mínimas para lograr los
objetivos antes planteados.
Preparar un ambiente grato, donde los niños puedan estar cómodos, tranquilos y
con una buena audición.
Leer el cuento con mucha expresión, utilizando las inflexiones de voz para darle
énfasis a los diferentes personajes y situaciones.
Una vez leído, hacer las preguntas sugeridas en el texto permitiendo a los niños y
niñas razonar, preguntar, acotar, imaginar y deducir
Luego de ello los niños y niñas deberán realizar la actividad de la siguiente página.
Explicar con palabras simples el significado de algunos conceptos nuevos para los
niños y niñas.
Para potenciar el desarrollo del lenguaje y la incorporación de nuevas palabras,
deberá aprenderse el nombre de cada personaje. (chancho- avestruz- conejo, etc)
Incorporar elementos y/ materiales para hacer del cuento una instancia lúdica y
entretenida (títeres, papeles, dibujos, disfraces, etc.)
Podrás reemplazar los materiales a utilizar por lo que tengas disponible.
Son 13 cuentos que deberán trabajar en complemento con las actividades que
enviaremos de otros ámbitos, considerando que durante la jornada los niños y
niñas realizan 2 actividades dirigidas.
Una vez terminado el cuadernillo deberá ser enviado de regreso al
establecimiento, siempre y cuando hayamos pasado la cuarentena.
En la última página podrás escribir cualquier observaciones que sea importante
considerar cuando revisemos los cuadernillos.
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El avestrucito es un Rey
Un día, el avestrucito jugaba a las escondidas con su mama avestruz.
-¿Dónde se ha metido este chiquilín?- Dice mamá avestruz.
-Estoy aquí- grita él bebe avestruz. La cabeza metida en la arena justo al lado
de su madre.
-¿Dónde? Yo no te veo – responde haciéndose la sorprendida.
-Por aquí mamá- grita el avestrucito y saca su cabeza de la arena.- Ahora es
tu turno- dijo él enseguida.
La mamá esconde su cabeza en la arena.
-Aquí estoy- dice ella.
-¿Dónde aquí?- grita aún el avestrucito que daba vueltas alrededor de su
madre, entreteniéndose en hacer huellas en la arena.
-Cucú- exclamó la mamá sacando la cabeza fuera de la arena.
Ella mira alrededor y ¡qué ve!
Un león corriendo a toda velocidad
para devorarla.
-Rápido; escóndete hijito- grita espantada.
El hunde la cabeza en la arena y su madre hace lo mismo.
El león llega con su gran boca abierta, llena de dientes. Se detiene al lado
de ellos y dice:
-¡Qué animal tan raro! ¡Sin cabeza, sin ojos…. Brr! Debe ser un fantasma
para meterles miedo a los leones.
De repente una voz atorada se hace oír; parece salir de la arena.
-Listo mamá, ¡el león está muerto de miedo!
-¡Socorro!- grita el león arrancándose hacia el desierto, corriendo tan
rápido como había venido
La avestruz mamá, saca la cabeza de la arena.
Mira de un lado a otro y dice con una voz llena de orgullo:
-¡hijito mío, ahora tu eres el Rey!
-¿y por qué?- pregunto el avestrucito. -Porque has hecho huir al león, al rey de los animales.
Preguntas sobre el cuento:
1.- ¿A qué jugaban la mama avestruz y su hijito?
2.-has jugado a las escondidas con tu mamá?, ¿Te gustó o te gustaría hacerlo?
3.- ¿Qué conoces tú del avestruz como animal?
4.- ¿Qué animal se les acerco de repente?
5.- ¿Qué intenciones traía?
6.- ¿Por qué se asustó el león?
7.- ¿Por qué se asustó el león?
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8.- ¿Por qué la mamá avestruz le dijo a su hijito que ahora era él, el Rey?
RELLENA CON PLUMAS EL CUERPO DEL AVESTRUZ
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Manguera, el elefante
En la selva vivía un elefantito llamado
manguera, le llamaban así, porque soñaba con ser
bombero.
Desde muy pequeño este elefantito
manejaba su trompa como una verdadera manguera.
Regaba las flores y los árboles, bañaba a los pajaritos y
a las mariposas e incluso, en períodos de mucho calor
refrescaba a sus amigos permitiéndoles para por el
chorros que lanzaba su trompa.
Cierto día sucedió algo terrible: Dos tigrecitos jugaban
en medio de la selva. Jugaban con algo muy peligroso.
¡Jugaban con fósforos!
De pronto se oyó gritar a los pequeños tigres. -¡Socorro! ¡Fuego!
Sí, en la selva había incendio, las llamas iban creciendo, creciendo…
Pero, por suerte cerca de ahí estaba manguera; quien rápidamente corrió al rio y volvió
con la trompa llena de agua; quien rápidamente corrió al río y volvió con la trompa llena
de agua; sin perder un segundo echó el chorro sobre las llamas.
Cuando el fuego se apagó, los animales que habían escapado asustados
regresaron y agradecieron mucho al elefantito.
¡Qué feliz se sentía manguera!
¡Al fin era un verdadero bombero!
Preguntas sobre el cuento:
1.- ¿Por qué el elefantito se llamaba Manguera?
2.- ¿Para que usaba él su trompa?
3.- ¿Qué sucedió un día en la selva?
4.- ¿Qué hizo Manguera?
5.- ¿Por qué se sentía tan feliz Manguera?
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PINTAR CON TEMPERA USANDO EL DEDO INDICE
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El sol dormilón
Una mañana el sol no se despertó, se
quedó acostado detrás de la montaña.
A medio día todo estaba oscuro. Las flores
aún no se abrían, los animales del bosque que estaban
en pijama y todo el mundo tenía frío.
La rana dijo: -Yo voy a despertar al sol.
Croac, Croac, Croac, Croac, abre los ojos flojo!
Pero el sol no se despertó.
El león dijo:
-Yo sí que rujo fuerte, hago temblar a todos los animales. Yo lo despertaré: ¡Grr, Grr,
Grr, Vamos sol despiértate, vístete hay que ir a trabajar!
Pero el sol no se despertó.
Todos los animales gritaron a la vez: ¡Sol, sol despiértate! Pero el sol no se
despertó.
Entonces el gallo se paró sobre el techo de una casa y cantó muy fuerte y largo
rato: -¡Cocorocooooo, Quiquiriquiiiiiiiiiiiiii!
Y el sol comenzó a despertarse y a subir muy alto en el cielo. Y de ahí en adelante, cada
vez que el gallo canta, el sol se levanta rápidamente, pues teme enfermarse de los oídos
con ese canto tan fuerte.
Así se pone sus ropas brillantes y parte de viaje a por el cielo.
Preguntas sobre el cuento: 1.- ¿Qué sucedía que estaba todo oscuro?
2.- ¿Por qué las flores no se abrían?
3.- ¿Quiénes trataron de despertar al sol?
4.- ¿Cuál Fue el único que tuvo éxito?
5.- ¿Has escuchado cantar al gallo?
6.- ¿Por qué el sol es tan importante en nuestras vidas?
(Averigua a qué hora canta)
7.- ¿Por qué el sol es tan importante en nuestras vidas?
8.- ¿Por dónde sale y por donde se esconde el sol?
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RAZGA PEDACITOS DE PAPEL Y PEGALOS EN LOS RAYOS DEL SOL
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El Osito que quería patinar
Así comienza este cuento. Estaba un día el osito con su mamá y le dijo entre furfuños:
-Todos Los otros osos tienen patines y van al estanque a patinar. Yo quiero ser igual que ellos.
-Pero si tu tienes patines, yo te compré, -Le dijo a su madre.- Falta simplemente que tú aprendas a
usarlos.
-Yo ya sé patinar – afirma el osito.
-¿Es verdad?- pregunta impresionada la mamá
-¡Sí!- le respondió osito con entusiasmo y partieron los dos hacia el estanque helado.
Mamá osa le ajustó los patines como se debe, el osito se paró y plum al suelo… Mamá osa lo levantó, él
cayó y cayó nuevamente.
-Si yo tuviera un casco, todo sería mejor- dice osito.
-¿El del abuelo que era bombero te serviría?
-Claro que sí-, Contesta osito, besando a su mamá.
Mamá osa se va entonces a buscar el casco de bombero del abuelo y vuelve corriendo.
Pero el osito con casco, igual se cae. ¡Qué de cabezazos se da osito en el hielo!
La foca acaba de pasar la cabeza por un hoyo perforado en el hielo.
Mira extrañada y dice:
-¡Ah, con que esto era! Yo me decía que no podía ser, escuchaba sonar campanas, pero es solamente
osito que aprende a patinar.
Preguntas sobre el cuento
1.- ¿Que quería hacer el osito?
2.- ¿Dónde fue con su mamá?
3.- ¿Cómo tiene que estar el agua en el estanque para que se pueda patinar?
4.- ¿Por qué quería un casco para patinar?
Te invito a tratar de patinar imaginando que lo haces sobre hielo.
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RELLENAR EL OSO CON ALGODON
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El sapito Silvestre
El sapito Silvestre cumplió hoy tres años. Su papá le dijo que ya estaba
en edad de aprender a nadar.
Pero Silvestre le tenía horror al agua, horror a bañarse, ni siquiera
quería tomar agua, él prefería la leche.
Su mamá estaba preocupada, no era posible tener un hijo sapito y
que no supiera nadar.
-¡Serás la vergüenza de tu padre!- le decía.
Entonces ese día el papá dijo: -Hoy iremos toda la familia nadar al lago, Silvestre es un sapo, nació en un
lago, por lo tanto debe nadar.
Así partieron todos llevando canastos llenos de frutas, huevos, quesos y pastelitos.
Silvestre vio que su papá llevaba una caja con papel de regalo y una gran cinta roja.
-¡Seguramente es para mí!- Pensó Silvestre. Cuando llegaron al lugar donde iban a nadar, la mamá dijo:
-Silvestre, toma este regalo y feliz cumpleaños
Silvestre abrió el paquete muy emocionado:
-¡Oh, pero si es una precioso traje de baño!
El lago estaba cerca, se sentía el olor del agua y las hierbas del
campo.
Silvestre se puso su traje de baño. Su papá lo llamó y le dijo:
-¡Mira Silvestre, en el agua hay un pececito rojo que te mira y dice
que quiere jugar contigo!
-¿Jugar conmigo? ¡Me encanta jugar! Y sin darse cuenta, dio un brinco y se hundió en el agua.
Silvestre había aprendido a nadar.
Silvestre era un verdadero sapito.
Preguntas sobre el cuento
1.- ¿Por qué estaba preocupada la mamá de Silvestre?
2.- ¿Por qué el papá decidió hacer un paseo?
3.- ¿A dónde fueron?
4.- ¿Cómo aprendió Silvestre a nadar?
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RELLENA CON PAPEL CELOFAN
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Don Ratón busca esposa
Había un ratón muy pretencioso que decidió
casarse con la
hija del ser más poderoso del mundo.
-Seguramente no hay nadie más poderoso que
el sol, - pensó
el ratón.
Se dirigió a él y le pregunto: -¿Eres el más poderoso de la tierra?-
-No, dijo el sol, cuando la nube me oculta de nada sirve mi luz.
El ratón fue a la nube y le dijo:
-Tú eres la más poderosa ¿me puedes concederá tu hija por esposa?
-El viento es más fuerte que yo, me toma en sus brazos y me lleva donde quiere,- respondió la
nube.
-Entonces iré a ver al viento- contesto el ratón. Y fue a ver al viento pero éste le dijo:
-La montaña es tan fuerte que no me deja pasar.
Se dirigió el ratón a la montaña y le preguntó:
-Montaña, tú eres la más fuerte ¿quieres que me case con tu hija? -Hay alguien más fuerte que yo- contesto la montaña.
-¿Quién puede ser? Preguntó extrañado el ratón.
-Es una ratona –contesto la montaña.
-Te estás burlando de mí –gritó el ratón.
-Nada de eso, -dijo la montaña muy seria.
Acércate y lo veras tú mismo. Una ratona ha hecho su nido debajo de mí y con sus patitas me
está rompiendo lentamente…
Y así fue que el ratón escogió a una ratoncita de compañera.
Preguntas sobre el cuento:
1. ¿Por qué se dice en el cuento que el ratón es muy pretencioso?
2. ¿Quién era más poderoso que el sol?
3. ¿Quién era más poderoso que la nube?
4. ¿Quién era más poderoso que el viento?
5. ¿Quién era más poderoso que la montaña?
6. ¿Cuál Hubieras pensado tú que era el más poderoso?
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PINTA EL RATON CON LAPIZ
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El burrito Pimpino
Pimpino era un burrito pequeño y bondadoso
que vivía en el bosque rodeado de muchos amigos.
Había sólo uno que no era su amigo, es decir, era su enemigo
y también el de todos los animalitos del bosque, era el lobo
Malón.
Un día Malón se fue de viaje. Todos en el bosque cantaron y
bailaron de alegría.
Al fin podrían respirar tranquilos, aunque fuese por un
tiempo corto. En vista de la tranquilidad, Pimpino decidió
hacer un paseo a la laguna donde vivían sus amigos los patos.
El día pasó alegremente y Pimpino aprovechó de practicar su
deporte favorito… La pesca. Cuando el sol comenzaba a esconderse en la laguna, resolvió volver, pero
camino a casa se encontró con Malón quien había regresado pues había olvidado la maleta.
El burrito quiso correr, pero ya era tarde.
Solo tenía tiempo para pensar en algo que pudiera salvar su vida. Y escondido en unas matas de
vendó a toda prisa una de sus patas traseras.
-¿Qué te ocurre Pampino? –le dijo el lobo.
-¡Tenía tantas ganas de comerte, pero no esperaba verte cojeando!
-¡Ay señor lobo!- tengo clavada una espina en mi patita.
Si me quiere comer sáquemela con sus dientes, sino usted puede enterrársela en su estómago. El lobo
Malón Lo pensó seriamente y encontró que Pimpino tenía razón y le dijo:
-Está bien, levanta tu pata, con mis dientes te sacare esa espina y luego sí que te como.
El burrito aprovechó el momento que el lobo le quitaba la espina para darle una gran patada de burro,
tan fuerte, que el Malón no le quedó un solo diente en su boca.
El lobo lloró amargamente y se fue del bosque para nunca más regresar.
Preguntas sobre el cuento:
1. ¿Quién era Pimpino?
2. ¿Dónde vivía?
3. ¿Quiénes eras sus amigos?
4. ¿Cómo se sintieron los animalitos cuando Malón se fue?
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RELLENA CON PUNTOS EL BURRO, UTILIZANDO PLUMON
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El chanchito goloso
A los 3 meses Ponchi era un precioso chanchito rosado,
suave como el terciopelo, con orejitas muy paradas y con su
colita enroscad como un sacacorchos.
Era gordo como jamás había habido otro igual en la granja,
era una verdadera bolita de grasa. Tal vez si uno lo hubiera
dejado en un cerro con pendiente muy parada… hubiera
rodado hasta abajo. Era también gritón y llorón. Cuando
tenía hambre chillaba tan fuerte que parecía que alguien lo
quería matar y los oídos de quienes estaban a su alrededor
parecían explotar.
Así, para que no gritara de esa manera y mantenerlo calladito le daban a cada momento una deliciosa
mamadera llena de leche.
Ponchi creció y continuó siendo muy regalón. El único problema era que cada vez se ponía más y más
mañoso. No le gustaba la comida que comen los chanchos y siempre quedaba con hambre.
Un día, mal aconsejado pos su amigo perro, planeó un asalto al gallinero donde había deliciosos y
frescos huevitos. Pero no contó allí con la presencia de los gallos. Esos guerreros terribles, cubiertos de
plumas brillantes y en la cabeza una cresta muy roja y en los talones unas puntas que hacían mucho
daño.
Y así nuestro pobre chanchito goloso sólo alcanzó a probar dos o tres huevitos cuando sintió sobre él
mil picotazos, que dolían terriblemente, en su hocico, en si cola, en todas partes.
Pobre Ponchi, ni él recuerda como salió de allí. Solo sabe que juró ¡nunca más ser un chancho mañoso!
Y muy seguro que al gallinero, a menos que lo inviten, no volvería jamás.
Preguntas sobre el cuento:
1. ¿Cómo era Ponchi?
2. ¿Estaba bien que le dieran mamadera a Ponchi cada vez que él lo pedía?
3. ¿Qué le pasó a Ponchi cuando creció?
4. ¿Es bueno ser mañoso?, ¿Qué problemas trae esto?
5. ¿Tienes tú ganas de crecer?, ¿Eres igual a cuando eras guagua?
6. ¿Qué lección aprendió Ponchi después del susto que pasó en el gallinero?
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PINTA CON TEMPERA UTILIZANDO PINCEL
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La gallina trabajadora
Un día estaba mamá gallina escarbando la tierra
cuando encontró un granito de trigo.
¿Qué suerte!-Pensó, lo sembraré. Y llamó a todos sus
amigos de la granja: Don Pato Patudo, don Chancho
Chanchudo y Don Gato Gatudo.
-¿Me ayudarán a sembrar esta semilla?- preguntó la
gallinita.
-A mí me duelen las patas, señora- dijo Don Pato
-A mí, La cintura-dijo Don Chanco
-Y yo, si no fuera por el sueño que tengo, le ayudaría
con mucho gusto, -agregó Don Gato.
La gallinita que era muy trabajadora, preparó la
tierra y sembró la semilla. Pasaron los días hasta que
al fin nació una linda plantita. Todas las tardes la
gallinita la regaba. Sólo sus pollitos la ayudaban. Mientras ellos trabajaban, los amigos
jugaban y dormían. Pasó el tiempo y de la planta brotaron doradas espigas. La gallinita
molió los granos y con la harina amasó una rica torta.
Cuando comenzó a salir del horno el delicioso olor de la masa cocida, el pato, el chancho
y el gato corrieron a la casa de la gallina.
-Ah, con que ahora se acuerdan de venir, pues ya no los necesito;- y les cerró la puerta
en sus narices.
Y doña Gallina y sus pollitos, se comieron felices hasta el último pedazo de la torta. Era
un premio todo su esfuerzo y trabajo.
Preguntas sobre el cuento:
1. ¿Dónde sucedía este cuento?
2. ¿Cómo actuó la gallina?
3. ¿Cómo se portaron los amigos de la gallina?
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RELLENA CON TROZOS DE LANA PICADA
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El sombrero
Teresa está en el parque. Acaba de entrar un sombrero. –Buenos
días- le dice el sombrero, -yo he perdido mi cabeza ¿Quién me
puede ayudar?
Teresa muy extrañada, le pregunta: -¿Y por qué necesitas tú una
cabeza?
El sombrero le responde casi enojado: -Lógicamente que yo necesito una cabeza, sin cabeza yo no
puedo pensar, sin cabeza yo no sé a dónde ir, sin cabeza… ¡yo no soy nadie!
-Tienes razón, yo te ayudare a buscar tu cabeza. ¿Cómo es ella? ¿Es redonda u ovalada? ¿Es pelada o
peluda? ¿Es grande o chica?... ¿tiene moño?
Pero el sombrero de nada se recuerda. Está desesperado y tiene ganas de llorar. Salen Teresa y el
sombrero en busca de la cabeza. Recorren todo el parque mirando y buscando, pero nada. Nadie busca
un sombrero.
De repente un recuerdo vino a la memoria del sombrero y dice: -
Escucha teresa, ahora tengo algún recuerdo. Mi cabeza no paraba de
decir “Cuando yo vea a Teresa le prestaré mi osito regalón y mi
pelota”.
Apenas el sombrero hubo pronunciado estas palabras, Teresa exclamó:
-¡Es Sofía, mi amiga Sofía! Estoy segura. Ella Siempre me presta su
pelota y su osito regalón.
Corren a casa de Sofía y la encuentran llorando, porque había perdido
su lindo sombrero nuevo. Teresa la abraza y le cuenta la historia al
tiempo que le pone el sombrero en su cabeza.
Volvieron felices a jugas al parque, esta vez con más cuidado con el
fuerte viento que soplaba, quién había sido el culpable de la pena de
Sofía y del sombrero.
Preguntas sobre el cuento:
1. ¿Qué le sucedió al sombrero?
2. ¿Quién lo ayudó a buscar?
3. ¿Qué recuerdo vino a la memoria del sombrero?
4. ¿Cómo supo Teresa que era Sofía la dueña del sombrero?
5. ¿Cómo termina el cuento?
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RELLENA UTILIZANDO PAÑO LENCI EN TROCITOS PEQUEÑO
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Pelitos de plata
Pelitos de plata, el pequeño conejito, amaneció de muy buen humor hoy día; se estira
con todas sus fuerzas a la entrada del bosque grita…
-¡Yupiiiii!
El bosque le responde… -¡Yupiiii! Pelitos de plata se asusta y corre donde su mamá. –
Mamá, Cuando yo grito hay alguien en el bosque que me responde ¿Sabes tú quién es?
-Es el eco, -le explica riendo si madre- no tengas miedo.
-Ah bueno, -dice pleitos de ´plata y vuelve a partir a pequeños saltos. Se sienta
nuevamente a la entrada del bosque y grita lo más fuerte que puede:
-¡Yo soy gigante!
El bosque responde:
-¡Gigante!!!
Pelitos de plata nuevamente grita:
-¡Yo soy un gigante!
Y en ese momento sale de la cueva el gran oso Martín muy enojado y dice:
-¿Quién se atreve a despertarme? ¿Quién no me deja dormir?
Mira furioso al conejito y avanzando hacia él le dice:
-¡tú Fuiste, mono chico, especie de comedor de repollo!
-¡No he sido yo! ¡No he sido yo!- se disculpa tiritando el conejito. –Es el eco, prueba tú
mismo y veras
El oso da vuelta hacia el bosque y grita con una voz que parece
un trueno:
-¿Quién se atrevió a despertar a Marín?
El bosque responde:
-¡Martíííín!
-Tú ves, -le dice pelitos de plata, -más encima se burla de ti.
-¡Esto sí que es una insolencia!- Gritó el oso furioso –y se fue
corriendo al bosque para buscar al eco para pegarle.
Preguntas sobre del cuento:
¿Dónde vivía Pelitos de plata?
¿Quién le contestaba al conejito, desde dentro del bosque?
¿Has escuchado alguna vez un eco?
¿Por qué se enojó tanto el oso Martín?
¿Crees tú que el oso Martín va a poder pegarle al eco? ¿Por qué?
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RELLENA CON TROCITOS DE PAPEL DE DIARIO EL CUERPO DEL CONEJO Y LUEGO PINTA CON
TEMPERA UTILIZANDO TU DEDO INDICE
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Yukulilí y su muñeca nueva
Había una vez una niñita que se llamaba Yukulilí. Ella vivía con su
familia en una casa de paja en una hermosa isla en los mares de la
Polinesia.
Todas las mañanas la mamá de Yukulilí limpiaba la casa, lavaba la
ropa de orillas del mar y preparaba ricos mariscos y pescados para
comer, mientras el papá se subía en altas palmeras para coger
grandes cocos, o bien salía en su canoa a pescar con un arpón.
Mientras tanto Yukulilí se entretenía jugando con su compañera
muñeca de madera que su papá le había hecho. La bañaba en una
gran concha de mar, le daba de comer moldecitos de arena y le ponía
sobre su cabeza unas coronitas hechas con flores de colores.
También le había construido una pequeña casita de arena adornada
con algas marinas.
Cuando llegaba la noche Yukulilí se iba a la cama con su muñeca, la abrazaba fuertemente y ambas se
dormían profundamente.
Una mañana llegó a la isla un gran barco francés; el capitán del barco venía a comprar cocos para
llevarlos a su país.
Uno de los marinos vio a Yukulilí que jugaba en la arena, se acercó y le dijo: -Niñita, tengo una sorpresa
para ti. Le entregó una muñeca hermosa y grande de porcelana que él había comprado en países
lejanos.
La muñeca tenia pelo natural, grandes ojos azules y vestidos muy elegantes. Yukulilí jugó feliz toda la
mañana con su nueva muñeca pero cuando quiso bañarla vio que no cabía en la concha de mar y que
no podía mojarla porque el agua le hacía mal. Tampoco podía darle moldecitos de arena, porque ésta
se le pagaba en su pelo. No cabía en la casita. Tenía que cuidarla mucho porque era demasiado fina.
Cuando se puso el sol en el horizonte, el barco se fue y Yukulilí entró a su casa, dejó se nueva muñeca
sobre una silla y se fue a acostar con su muñequita de madera. La abrazó fuertemente y se quedaron
ambas dormidas profundamente.
Preguntas sobre el cuento:
1. ¿Quién era Yukulilí? ¿Dónde vivía y con quién?
2. ¿Cuál era su juego preferido?
3. ¿A qué venía el barco?
4. ¿Por qué Yukulilí prefirió su muñequita de madera?
5. ¿Cuál hubieras preferido tú y por qué?
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PEGA UNA A UNA TIRAS DE LANA EN LA FALDA DE YUKULILÍ
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El sueño de Aníbal
Había una vez un niño que se llamaba Aníbal se conformaba con
apretar su naricita contra las vidrieras de la juguetería y contemplar
todos los hermosos juguetes que allí se vendían. Pero había un juguete
que a él le parecía el más lindo de todos: un osito de felpa.
Tenía ojitos verdes y el cuerpecito naranja y peludo. Colocado en medio
de la vidriera parecía que le sonreía cada vez que lo iba a mirar.
Sucedió una noche que Aníbal tuvo un sueño muy hermoso… El oso de
la juguetería vino a buscarlo y lo llevó al bosque. Allí estaban reunidos
todos los animales en una gran fiesta, porque era el cumpleaños de
Lito, un viejo y sabio león a quién nadie le temía, pues jamás se enojaba. Al llegar, estaban cantando y
comiendo una gran torta de crema y chocolate.
Mientras Aníbal saboreaba su rica porción de torta, Lito se acercó para conversar con él y preguntarle
cosas de la ciudad. El niño le contó como era su barrio y las calles.
El simpático león le preguntó:
-¿Cuál es tu paseo preferido?
Aníbal le dijo que lo que más le gustaba era ir a la juguetería para contemplar a través de la vidriera
todas las hermosas cosas que allí había, pero que él no podía comprarlas, pues era muy pobre.
Listo sintió mucha pena por el pequeño niño y le dijo:
-Aníbal, tú me gustas porque eres bueno y por eso te regalo esta nuez. Deberás ponerla en un
macetero con tierra y regarla.
De pronto rin! rin!... era el reloj que lo llamaba para ir a la escuela.
El niño se despertó ¡oh… qué sorpresa! En su mesita de velador encontró una nuez
Entonces recordó lo que le había dicho Lito, el león bueno y la plantó y la regó.
Por fin, después de varios días… ¡Qué maravilla! Apareció una plantita y luego esta plantita creció y se
convirtió en un gran árbol que dio nueces, muchas nueces.
Aníbal las vendió y seguro que todos sabemos a dónde fue a pasear y ¡que se compró allí!
Preguntas sobre el cuento:
1. ¿Quién era Aníbal?
2. ¿Cuál era su paseo preferido?
3. ¿Cuál era el juguete que a él más le gustaba?
4. ¿Cuál fue el sueño de Aníbal?
5. ¿Qué le regaló el león?
6. ¿Quién o qué despertó al niño?
7. ¿Cómo aprovechó él, el sueño que había tenido?
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PINTA EL NIÑO CON LAPICES DE COLORES Y LIUEGO BUSCA EN UNA REVISTA TU JUGUETE
FAVORITO Y PEGALO JUNTO AL NIÑO.
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OBSERVACIONES:
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