Sonia Delaunay. Arte, diseño y moda · trayectoria para demostrar el carácter multidisciplinar de...
Transcript of Sonia Delaunay. Arte, diseño y moda · trayectoria para demostrar el carácter multidisciplinar de...
Sonia Delaunay. Arte, diseño y moda
Del 4 de julio al 15 de octubre de 2017
Comisaria: Marta Ruiz del Árbol
El Museo Thyssen-Bornemisza presenta Sonia Delaunay. Arte, diseño y moda, la primera
muestra en solitario en España de esta artista, con la que se pretende destacar no sólo su
importante papel como pintora de vanguardia, sino también la exitosa aplicación de su ideario
artístico a la vida cotidiana. Su obra puramente pictórica se exhibirá en las salas junto a libros y
escenografías teatrales, diseños publicitarios, de interior y de moda, telas y vestidos,
reuniendo más de 200 piezas procedentes de instituciones públicas como el Centro Pompidou,
la Biblioteca Nacional de Francia, el Museo de la Moda de París o el Museo Reina Sofía, y de
colecciones privadas. La exposición, que cuenta con la colaboración de la Comunidad de
Madrid, se une así a las tendencias historiográficas que han revisado recientemente su
trayectoria para demostrar el carácter multidisciplinar de su obra, que le permitía explorar
diversos soportes y técnicas más allá de la pintura.
Nacida en Ucrania en una modesta familia judía, Sonia Delaunay (1885-1979) fue acogida por
sus tíos maternos de San Petersburgo cuando era tan sólo una niña, de quienes recibió una
educación cosmopolita. Comenzó su formación artística en 1904 en Karlsruhe (Alemania) y dos
años después la continuó en París. Para no abandonar Francia, contrajo matrimonio de
conveniencia con el marchante alemán Wilhelm Uhde, en cuya galería expuso por primera vez
en 1908. Gracias a él conoció a artistas de vanguardia como Picasso, Braque y el propio Robert
Delaunay, con quien se casó en 1910, tras divorciarse de Uhde.
Imágenes, de izquierda a derecha: Sonia Delaunay: Philomène, 1907. Centre Pompidou, París. Musée national d'art moderne/Centre de création industrielle. En depósito desde el 18 de diciembre de 2006 en el Musée Fabre, Montpelllier. Figurines para el ballet Cleopatra, diseños para cuatro chales (detalle) 1918. Colección privada. Vestidos simultáneos (Tres mujeres, formas, colores), 1925. Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid. © Pracusa 2017633. Más información e imágenes: Museo Thyssen-Bornemisza – Oficina de Prensa: Con la colaboración de Paseo del Prado, 8. 28014 Madrid. Tel. +34 914203944 / +34 913600236. [email protected] http://www2.museothyssen.org/microsites/prensa/2017/Delaunay/index.html
A partir de entonces, el intercambio artístico entre ambos
sería constante, aunque, ya desde los comienzos de su
relación, Sonia se diferenciaría de su marido por compaginar
los pinceles con las agujas de bordar, la decoración de
interiores o el diseño de moda, convirtiéndose en una artista
multidisciplinar, interesada en plasmar el lenguaje
vanguardista sobre los más variados soportes, con vivos
colores y técnicas diversas que recuerdan sus orígenes rusos.
Hacia 1912, la pareja se orientó hacia la abstracción y
defendió los fundamentos de un nuevo arte que negaba los
medios tradicionales y reposaba sobre el poder del color, lo
que llevó a Robert Delaunay a desarrollar la teoría del
simultaneísmo, un neologismo extraído del tratado sobre el
contraste simultáneo de los colores de Eugène Chevreul, que
establece que las tensiones y las vibraciones ópticas que
genera la relación entre colores complementarios sugieren el
movimiento conforme al modelo rítmico de la danza y la música. Los Delaunay asociaban el
simultaneísmo a la vida moderna y al desarrollo urbano, y querían llevarlo a todos los ámbitos
posibles.
París era, para ellos, la ciudad simultánea por excelencia y se convirtió en su fuente de
inspiración, en el lugar en el que empezaron a analizar el impacto de la luz sobre los colores.
Pero fue en Madrid, en 1917, donde sus experimentos por trasladar el ideario del
simultaneísmo a la vida cotidiana dieron el paso definitivo a la escena pública. En la capital
española, Sonia no solo comenzó sus colaboraciones con las artes escénicas, sino que inauguró
una boutique en la que vendía sus creaciones de moda y de interiores. Esta etapa madrileña,
de la que se cumplen ahora 100 años, supuso para ella un momento de gran experimentación
y libertad que marcaría todo su desarrollo artístico posterior, a partir de la década de 1920 y ya
de regreso en París. La exposición quiere reivindicar esos años de Madrid como un hito
fundamental en su carrera, por lo que este periodo ocupa el capítulo central de la muestra,
con un recorrido organizado en cuatro apartados cronológicos que incluye también las etapas
inmediatamente anterior y posterior a su estancia en España.
Primeros años de París
A comienzos de la década de 1910, lo simultáneo
designa las actividades de Sonia Delaunay, que
pinta y confecciona objetos y prendas de vestir
que responden a esta nueva estética colorista: una
colcha de cuna para su hijo es el primer objeto
calificado como simultáneo, al que siguen una caja
de juguetes pintada, encuadernaciones de libros,
objetos cotidianos y vestidos cosidos a base de
trozos de tela. Sus experimentos vanguardistas se
mezclan con influencias de las artes populares
rusas.
Sonia Delaunay con túnica y sombrero de rafia bordada y sombrilla de Casa Sonia, Madrid, hacia 1920 (Atribuida a Zockoll) © Pracusa 2017633
Sonia Delaunay. El Bal Bullier, 1913. © Merzbacher Kunststiftung © Pracusa 2017633
Sus primeras creaciones revelan la búsqueda de un arte total e ilustran
su voluntad de conseguir que la estética del simultaneísmo llegue a la
cultura popular. El piso de los Delaunay, donde se reúnen los domingos
artistas e intelectuales, es el primer espacio donde se exhiben estas
creaciones simultáneas, como si fuera una galería de arte. Sonia se
reafirma en su intención de abordar sin distinción todos los soportes,
considerando equiparables y dignas de ser expuestas todas las
expresiones artísticas. Así lo hizo, por ejemplo, en el famoso Salón de
Otoño de Berlín de 1913, donde expuso pinturas, proyectos de carteles,
encuadernaciones y objetos domésticos junto a obras de Robert
Delaunay, Marc Chagall, Max Ernst, Lyonel Feininger, Franz Marc o Paul
Klee, entre otros.
En este contexto, en el que moda, pintura y vanguardia están
estrechamente ligadas, nace el “vestido simultáneo” como una forma de
acercar al público el nuevo lenguaje visual. Los Delaunay se visten con sus
creaciones y convierten salones de baile, como el parisino Bal Bullier, en
laboratorios en los que experimentar con el simultaneísmo, en un primer intento de renovar la
estética urbana a través del color. Con su provocadora asociación de color y
mezcla de tejidos, causan sensación y se convierten en “reformadores de la
manera de vestir”, según Apollinaire.
En esta época Sonia firma cuadros que están entre sus obras más
importantes, pero sobre todo expone, junto a la pintura de Robert, objetos
simultáneos. En la sala se mostrarán óleos como El Bal Bullier de la Colección
Merzbacher (1913), Contrastes simultáneos (1913) y Prismas eléctricos nº 41
(1913-1914), carteles publicitarios para las marcas Zénith y Dubonnet (1914) y
diseños de moda, incluyendo el vestido y el chaleco simultáneos, realizados
en patchwork en 1913. También se presentará un ejemplar de La prosa del
Transiberiano y de la pequeña Jehanne de Francia (1913), una de las obras
maestras de la vanguardia literaria y pictórica, compuesta a cuatro manos por
el poeta Blaise Cendrars y Sonia Delaunay, y en la que por vez primera se
funden poesía y pintura. Se trata de un desplegable vertical de dos metros de
largo que se lee a la vez que se contempla: a los versos libres de Cendrars
responden los dibujos de Delaunay, un entrelazado de formas y colores que
evoca el avance del viajero en un tren.
Primera estancia en Madrid y Portugal
La Primera Guerra Mundial estalla mientras la familia Delaunay se encuentra
de vacaciones en España por lo que, a finales de 1914, deciden instalarse en
Madrid. Les fascina la luz de la ciudad, que les lleva a alcanzar un momento
clave en sus investigaciones en torno al color. Aislados de la vanguardia,
buscan inspiración entre los maestros clásicos y Sonia se inscribe en 1915
como copista en el Museo del Prado. Sus lienzos y vestidos simultáneos para
el Bal Bullier dan paso a un interés por el arte popular, los cantantes y
bailarines de flamenco, donde se puede reconocer un cierto retorno a la
Sonia Delaunay y Blaise Cendrars. La prosa del Transiberiano y de la pequeña Jehanne de Francia, 1913. Colección privada. © Pracusa 2017633
Sonia Delaunay. Vestido simultáneo, 1913. Colección privada.
© Pracusa 2017633
figuración. En el verano de 1915, son invitados por un grupo
de artistas futuristas instalados en Vila do Conde, un
pequeño pueblo en el norte de Portugal, y deciden
trasladarse allí durante un tiempo. Aun así, Sonia sigue
inspirándose con frecuencia en España, como puede
apreciarse en obras como Gran flamenco (1915-1916) y
Pequeño flamenco (1916), que se expondrán en las salas
junto a varios dibujos, acuarelas y diseños realizados en esta
época.
Segunda estancia en Madrid y el arte total
Madrid es el corazón de la exposición. Su paso por la ciudad
supuso un gran giro en su carrera al conseguir poner en
práctica la idea de que el simultaneísmo llegara a todos los
ámbitos de la vida. Con el triunfo de la Revolución de Octubre en Rusia, en 1917, Sonia dejó de
recibir las rentas familiares que le habían permitido una estabilidad económica hasta entonces
y decide llevar a la esfera pública sus creaciones.
En la capital española, el matrimonio Delaunay coincidió con Serguéi Diághilev, refugiado
también en España, y Sonia empezó a colaborar en el diseño de escenografías y vestuario para
los Ballets Rusos, una relación que marcaría el inicio de la estrecha vinculación con el mundo
de las artes escénicas a lo largo de toda su carrera. En este capítulo se exhibirán algunos de sus
figurines y diseños de decorados para la representación del ballet ruso Cleopatra (1918), que
creó en Sitges y se estrenó en Londres, así como fotos de la reforma completa que realizó para
la conversión del antiguo Teatro Benavente de Madrid en un novedoso teatro-concert, y que
se inauguró como Petit Casino en 1919.
“Abro una Casa Sonia de decoración de interiores” -recordaba la artista en sus memorias- “En
las casas ricas, en los palacios históricos, mando a paseo los alambicados pastelones, los tonos
lúgubres, las mortuorias cursilerías”. La inauguración de este negocio, que también dedicó al
diseño de complementos y de moda, supone un hito en la carrera de la artista y es un
importante precedente de su intensa dedicación al diseño de interiores, tejidos y prendas de
vestir a partir de la década de 1920.
Recortes de periódicos y fotografías de la
época permiten reconstruir este periodo en
las salas y reivindicarlo como un momento
decisivo en su carrera, a la vez que se
acompañan de una selección de bocetos de
moda y una chaqueta de lino (1928), pintada
y bordada, que evoca el espíritu de lo que la
prensa madrileña dio a conocer como “el
estilo Sonia”.
En estos años en Madrid se relacionaron también con poetas vanguardistas, como Ramón
Gómez de la Serna o Guillermo de la Torre. Recién regresada a París en 1921 e imbuida por el
espíritu dadaísta, la artista decidió decorar las paredes de su casa con poemas de sus muchos
Sonia Delaunay. Cantantes de flamenco (Gran flamenco), 1915-1916. Museu Calouste Gulbenkian, Lisboa. Coleção Moderna. © Pracusa 2017633
Sonia Delaunay. Tres diseños: Traje nº 1540 (1919); Vestido simultáneo, ritmo sin fin, nº 510 (1923); Traje nº 1539 (1923), 1919-
1923. Colección privada © Pracusa 2017633
amigos poetas, como el mural “abanico-
poema” de Gómez de la Serna (1922). En su
deseo de rebasar los límites de las artes,
también diseñó “vestidos-poema”, de los que
se muestran dos bocetos.
Regreso a París
En 1921, los Delaunay regresan a París. La
experiencia en España anima a Sonia a vestir a
la mujer de la ciudad con los diseños de sus
cuadros, como si fueran tableaux vivants
(pinturas vivas), y poco después inaugura la
Boutique Simultané. En esos años colabora con
grupos dadaístas y surrealistas en la producción de proyectos teatrales y cinematográficos,
como en la película Le P’tit Parigot (1926), de Le Somptier. En 1925 participa con éxito en una
exposición de artes decorativas y comienza a trabajar para unos grandes almacenes
holandeses, Metz & Co, una relación comercial que mantendrá hasta la década de 1950.
En este capítulo se destacará su polifacética y versátil manera de enfocar el proceso artístico,
ya fuera en lienzos, tejidos, tapices, litografías, escenografías o incluso en encargos murales. Se
presentarán una chaqueta (1924), dos vestidos que nunca antes se han mostrado en una
exposición (1926), un traje de baño y un conjunto de sombrilla y bolso de playa (1928) junto a
varios de sus diseños previos, y el óleo Vestidos simultáneos (1925), en el que la vestimenta de
la figura central es similar al abrigo creado para la actriz Gloria Swanson ese mismo año y que
también podrá verse en la sala. Todo ello se complementará con fotografías de moda que hizo
la propia artista y un vídeo coloreado realizado también por ella para promocionar sus diseños
de 1925. Además, se dedicará un amplio apartado a sus diseños textiles para mostrar cómo era
el proceso creativo de las piezas, desde el dibujo sobre papel o cartulina al producto final,
pasando por la correspondencia que mantenía con los
almacenes Metz & Co, a los que enviaba muestras de
tela y pautas para la producción de sus creaciones.
En 1937 participará, junto a Robert Delaunay, en la
decoración de dos grandes pabellones de la Exposición
Universal de París, de los que la muestra presenta tres
bocetos. La artista evocará en el Pabellón del
Ferrocarril su viaje a la península ibérica,
demostrando, una vez más, la significativa huella que
esta época dejó en ella.
Después de fallecer su marido en 1941, Sonia Delaunay
continuó trabajando y colaborando en la promoción del arte abstracto. En 1964, tras la
donación de un centenar de obras suyas y de Robert, se convirtió en la primera mujer viva a la
que se le honraba con una exposición en el Museo del Louvre.
La muestra se cerrará con tres grandes composiciones abstractas de su etapa final, Ritmo
coloreado nº 694, Ritmo color y Mosaico horizontal.
Izquierda: Sonia Delaunay con uno de sus abrigos de lana bordada, c. 1925. Derecha: Sonia Delaunay. Abrigo para Gloria
Swanson, c. 1925. Colección privada. © Pracusa 2017633
Sonia Delaunay. Naturaleza muerta. Viajes lejanos, 1937. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid. Depósito temporal de D. Pedro y Dña. Ary Altamiranda, Panamá, 2010. © Pracusa 2017633
FICHA DE LA EXPOSICIÓN
Título: Sonia Delaunay. Arte, diseño y moda
Organizador: Museo Thyssen-Bornemisza
Con la colaboración de la Comunidad de Madrid
Sede y fechas: Madrid, Museo Thyssen-Bornemisza, del 4 de julio al 15 de octubre de 2017
Comisaria: Marta Ruiz del Árbol, conservadora de Pintura Moderna del Museo Thyssen-
Bornemisza
Número de obras: 207
Publicaciones: Catálogo con textos de Cécile Godefroy, Marta Ruiz del Árbol y Matteo de
Leeuw-de Monti y cronología de Diandra Guerrero; publicación digital en la app Quiosco
Thyssen
INFORMACIÓN PARA EL VISITANTE
Museo Thyssen-Bornemisza
Dirección: Paseo del Prado, 8. 28014, Madrid. Salas de exposiciones Moneo, planta -1
Horario:
Del 4 de julio al 3 de septiembre de 2017: De martes a sábados, de 10 a 22 horas; domingos de
10 a 19 horas
A partir del 4 de septiembre de 2017: De martes a viernes y domingos, de 10 a 19 horas;
sábados, de 10 a 21 horas
Entrada única: Colección permanente y exposiciones temporales:
- Entrada general: 12 €
- Entrada reducida: 8 € para mayores de 65 años, pensionistas, estudiantes previa
acreditación y familias numerosas
- Entrada gratuita: menores de 12 años y ciudadanos en situación legal de desempleo
Venta anticipada de entradas en taquillas, en la web del Museo y en el 91 791 13 70
Más información: www.museothyssen.org
Audio-guía, disponible en varios idiomas
INFORMACIÓN PARA PRENSA
http://www2.museothyssen.org/microsites/prensa/2017/Delaunay/index.html