SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de...

7
Boletín de la Sociedad Argentina de Botánica Volumen XV, 1 (Enero 1973), págs. 106-112 SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL DE TROPAEOLUM TUBEROSUM R. P. POR JORGE FERNANDEZ Luego de siete años de búsquedas trabajosas, puedo finalmente in¬ formar de la existencia de una interesante tropaeolácea bajo cultivo en algunas áreas de la Puna argentina y en las serranías algo más cálidas directamente ubicadas al este de la quebrada de Humahuaca: me estoy refiriendo al añu ( Tropaeolum tuberosum ) , vegetal de tubérculos comes¬ tibles, notablemente vinculado al derrotero seguido pot las migraciones' humanas que en el pasado se explayaron por toda Sudamérica y que par¬ cialmente ingresaran también en territorio argentino. De esta manera creo justificar sobradamente el pensamiento mantenido por el Ing. Lo¬ renzo R. Parodi, quien estaba convencido no sólo de la posibilidad de su ingreso en nuestro país, varios milenios atrás, juntamente con otras raíces y tubérculos comestibles, sino que además sustentaba la esperanza de que subsistieran en la actualidad pequeños centros de cultivo entre los nativos del Noroeste. Desafortunadamente no pudo hallar nunca prue¬ bas concluyentes al respecto, por lo que me solicitó que en mis viajes por las montañas y selvas del trópico salto-jujeño procurara encontrar algún rastro de su cultivo. Su lamentada desaparición nos priva de la monografía definitiva que él, con toda seguridad, podría habernos brin¬ dado y para la cual me dijo contar con numerosos materiales , de manera que el presente ensayo solamente debe ser considerado como la idea acertada del exclusivo patrimonio de aquel sabio botánico, a quien sólo la brevedad del tiempo y de la vida impidieran concretar. La presencia de Tropaeolum tuberosum R. et P. bajo cultivo en la¬ titud tan meridional (23° 30'), en algunos casos por encima de los 3.500 metros de altura y soportando temperaturas y condiciones edá- ficas extremadamente rigurosas, plantea una serie de interrogantes, vincu¬ lados en primer lugar a la dinámica de las plantas cultivadas, y luego a la evolución cultural de remotos asentamientos humanos registrados en el área, evolución que tan relacionada está con el conocimiento de las plantas útiles. La señalada presencia de este vegetal, pues, constituye un interesante motivo de investigación fitogeográfica y ecológica, pero divulgación de una

Transcript of SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de...

Page 1: SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y de la papa, y donde otros vegetales secundarios

Boletín de la Sociedad Argentina de Botánica

Volumen XV, N° 1 (Enero 1973), págs. 106-112

SOBRE LA DISPERSION MERIDIONALDE TROPAEOLUM TUBEROSUM R. P.

POR JORGE FERNANDEZ

Luego de siete años de búsquedas trabajosas, puedo finalmente in¬formar de la existencia de una interesante tropaeolácea bajo cultivo enalgunas áreas de la Puna argentina y en las serranías algo más cálidasdirectamente ubicadas al este de la quebrada de Humahuaca: me estoyrefiriendo al añu ( Tropaeolum tuberosum ), vegetal de tubérculos comes¬tibles, notablemente vinculado al derrotero seguido pot las migraciones'humanas que en el pasado se explayaron por toda Sudamérica y que par¬cialmente ingresaran también en territorio argentino. De esta maneracreo justificar sobradamente el pensamiento mantenido por el Ing. Lo¬renzo R. Parodi, quien estaba convencido no sólo de la posibilidad desu ingreso en nuestro país, varios milenios atrás, juntamente con otrasraíces y tubérculos comestibles, sino que además sustentaba la esperanzade que subsistieran en la actualidad pequeños centros de cultivo entrelos nativos del Noroeste. Desafortunadamente no pudo hallar nunca prue¬bas concluyentes al respecto, por lo que me solicitó que en mis viajespor las montañas y selvas del trópico salto-jujeño procurara encontraralgún rastro de su cultivo. Su lamentada desaparición nos priva de lamonografía definitiva que él, con toda seguridad, podría habernos brin¬dado —y para la cual me dijo contar con numerosos materiales—, demanera que el presente ensayo solamente debe ser considerado como la

idea acertada del exclusivo patrimonio de aquel sabiobotánico, a quien sólo la brevedad del tiempo y de la vida impidieranconcretar.

La presencia de Tropaeolum tuberosum R. et P. bajo cultivo en la¬titud tan meridional (23° 30'), en algunos casos por encima de los3.500 metros de altura y soportando temperaturas y condiciones edá-ficas extremadamente rigurosas, plantea una serie de interrogantes, vincu¬lados en primer lugar a la dinámica de las plantas cultivadas, y luegoa la evolución cultural de remotos asentamientos humanos registradosen el área, evolución que tan relacionada está con el conocimiento delas plantas útiles. La señalada presencia de este vegetal, pues, constituyeun interesante motivo de investigación fitogeográfica y ecológica, pero

divulgación de una

Page 2: SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y de la papa, y donde otros vegetales secundarios

J. FERNáNDEZ, La dispersión meridional de Tropaeolura tuberosum 107

también —y en no escasa medida— se presta para interesantísimas con¬sideraciones etnológicas. Bajo este último punto de vista, las plantascultivadas constituyen verdaderas piezas arqueológicas vivientes, que tantocomo la cerámica o los tejidos pueden emplearse como elementos diagnós-

¿a V\!

f/>

y

:,-i)

Tropaeolum tuberosum cultivado como adorno en un jardín de la localidad de Tres

Cruces (3693 m sobre el mar). Epoca de floración iniciada a fines de febrero y

terminada a fines de marzo.

ticos en el estudio de la dispersión y procesos de diferenciación de las cul¬turas humanas. Procuremos ver, entonces, a qué conclusiones y cono¬cimientos nuevos podemos arribar partiendo de la discrepante presenciadel añu en latitud tan meridional, aplicando razonamientos y métodosbotánicos y arqueológicos, coincidentes en sus miras en este caso par¬ticular.

Page 3: SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y de la papa, y donde otros vegetales secundarios

BOLETíN DE LA SOCIEDAD ARGENTINA DE BOTáNICA, XV (1), 1973108

Cuando los conquistadores españoles se concedieron un respiro en sulargo batallar, y observaron con ojos más comprensivos el vasto y dife¬rente mundo que los rodeaba, encontraron que los aborígenes americanosposeían una economía fundamentalmente basada en la agricultura, la queademás de reconocer como elementos principales a la papa y al maíz, in¬cluía un sustrato de plantas accesorias, pero importantes para la alimenta¬ción humana, como algunos seudocereales (quinoa), raíces carnosas co¬mestibles y una serie de tubérculos pertenecientes a varios géneros botá¬nicos. Entre estos últimos debe citarse la oca ( Oxalis tuberosa ), el ullucu( Ullucus tuberosas) y el añu (Tropaeolum tuberosum). Noticias acercade su cultivo fueron recogidas por algunos cronistas tardíos, como el P.Cobo y el Inca Garcilaso de la Vega, que escribió en Europa, un tantoalejado de los centros de información directa. No cabe duda alguna en el

'ní, 'V

bv - hiVIII

h $nú;

Tubérculos de T. tuberosum. Cosechados a fines de abril

sentido de que los aborígenes americanos conocían de antiguo esta planta,empleándola en la alimentación. He aquí lo que dice Garcilaso Inca conrespecto a ella, luego de pasar revista al conjunto de vegetales cultivadosy aprovechados por sus antepasados: “Otra hay semejante a ésta en eltalle, mas no en el gusto —dice, luego de haberse referido a la oca—;antes contraria, porque toca en amargo, y no se puede comer sino cocida,llamada añus”. . .

El cultivo de esta planta parece extenderse desde Colombia (donde sele da el nombre de cubio) y Ecuador hacia el sur; ignoramos si entra enVenezuela. Según Sauer (1950), en los Andes Centrales, donde su cul¬tivo es más intenso, recibe los nombres de añu, isaña y mashiia. En laArgentina la hemos oído llamar añu, isañu y, menos frecuentemente, li-sañu y oca susaña. Según Bukasov (1930), existiría motivos para poderdistinguir dos especies de añu cultivado: el de Colombia y el peruano.

Page 4: SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y de la papa, y donde otros vegetales secundarios

J. FERNáNDEZ, La dispersión meridional de Tropaeolum tuberosum 109

Cultivos intensos se hacen todavía en Bolivia, donde aún desempeña unpapel de cierta importancia en la alimentación de los nativos quienes, se¬gún Weddell (en Bois, 1927-28, 1: 78-79), preparan un chuño especialllamado por ellos tatacha. Que el cultivo precolombino de esta planta esremoto, queda comprobado arqueológicamente, pues el añu aparece repre¬sentado en numerosas piezas del arte ceramista tihuanacota (Yacovlev yHerrera, 1934). La bibliografía moderna sobre el añu no es ni abundanteni frecuente: las obras que tratan sobre el conjunto de la vieja agriculturaamericana, impresionan un tanto por su volumen, pero en cuanto se entraa buscar información detallada acerca de determinada especie particular

—con la sola excepción de la papa y del maíz—, se ve al tratadista cons¬treñido a la repetición de algunas generalidades. A juzgar por la biblio¬grafía a nuestro alcance, solamente se han ocupado de él, con poca exten¬sión, el citado Weddell (1927-28), Hodge (1951), Sauer (1950),Bukasov (1930), Yacovleff y Herrera (1934) y Herrera (1938). En laArgentina ha sido citado numerosas veces por Parodi, e igualmente hayuna referencia a él en el trabajo de Dawson (1960). Pero todos los auto¬res que de alguna u otra manera se han ocupado del añu, coinciden enque su límite meridional de cultivo alcanza solamente a Bolivia. Por su¬puesto que su cultivo en la Argentina no responde a una necesidad pri¬mordial, es decir, no constituye una fuente necesaria de recursos para laalimentación. En la zona netamente desfavorable de la Puna argentina,se lo cultiva solamente con,fines ornamentales o seudo-medicinales, aunqueno es posible decir lo mismo respecto a los cultivos que todavía se hacenen las zonas algo más aptas de la cordillera Oriental' argentino-boliviana.Para comprender mejor los lincamientos a veces un tanto caprichosos quegobiernan la dispersión de estos cultígenos, hay que adentrarse tambiénen las ideas que las mentes primitivas mantienen acerca de ellos. El sím¬bolo sexual que aún sobrevive en la siembra de la oca (Oxahs tuberosa),y la serie de poco divulgados ritos con que se rodea su cosecha, afincadoscon extraordinaria fuerza en la vivencia folklórica de nuestros nativos, seconstituyen en los elementos básicos de la permanencia de su cultivo, quede otra manera hubiera sido eliminado por especies vegetales mucho másútiles y dé mayor rendimiento1.

Pero así como la oca constituye el sustrato telúrico coadyuvante a lapotencia masculina; el añu constituye su contrapartida, su antítesis. ¿Porqué se mantiene su cultivo, entonces? Veamos lo qye dice el ya citadoInca Garcilaso de la. Vega, refiriéndose a este cultígeno: ..“dicen losindios que comida es contraria a la potencia generativa; para que no leshiciese daño, los que se preciaban de galanes tomaban en la mano unavarilla o un palillo mientras la comían, y comida así decían que perdía suvirtud y no dañaba. Yo les oí la razón y algunas veces vi el hecho, aunquedaban a entender que lo hacían más por vía de donaire que no por darcrédito a la burlería de sus mayores.”

Otro escritor antiguo que se refiere a las propiedades antiafrodisíacas

Page 5: SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y de la papa, y donde otros vegetales secundarios

110 BOLETíN DE LA SOCIEDAD ARGENTINA DE BOTáNICA, XV (1), 1973

60° 65°Tapiza

Tari ja

c ao,*

óoV en,Talina

8wCOI

sfi> \ \\

'iCatalina

fWí o

O A y/\Calahoyo

La .OuiacaJ 'SZ

YaviA0 \

oPumahuasi P°

>° iA

inco*íada OA©

>eV»

A ©(O

ddíDA °/Truya•<

& A TbMCruces

O23

/ El Tabacal/

II1\

úP 8/ \Lag.dejGuayata HuacaleraI

o°\ <ó

os7 OAlloara

;..U/ O§¿PGrandes . o

.Salinos8 <b'

Vo\

p°'

24

Nev.deChwil6200\

PJujuy

ÓBoli via/.L /V i / \

«I

"7A Centros de cultivo de T. Tuberosum. J-*/ Li }

S ''j.'/so —

\

______/ Croquis de

ubicación

0 10 40 Km. \.)

f

Page 6: SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y de la papa, y donde otros vegetales secundarios

J. FERNáNDEZ, La dispersión meridional de Tropaeolum tuberosum 111

del añu, es el P. Cobo, quien afirma que los ejércitos del Inca, durantesus largas campañas, debían emplear el añu en su alimentación, a fin deque los soldados no olvidaran a sus lejanas esposas: evidentemente, seme¬jante imposición obligaría a efectuar plantaciones de esta planta en re¬motas regiones, que por el sur muy bien podrían extenderse hasta el ríoMaulé en Chile.

Resumiendo, diremos que el cultivo del añu en la Argentina, aunquealgo más extendido algunas décadas atrás, sobrevive ahora solamente enalgunos nichos etnológicos. Hasta aquí, lo que el auxilio antropológicopuede brindarnos, pero veremos que el botánico puede aún extraer infor¬maciones sumamente útiles. En efecto, hacen falta aquí controles múlti¬ples. Pues, aunque el cultivo de esta planta quede medianamente bienexplicado mediante la supervivencias de ciertos atavismos etnológicos,falta ver si aún no serán posibles otras explicaciones. Es sintomático quelos cultivos de añu en la Argentina, en cierta manera sólo un relicto, coin¬cidan geográficamente no sólo con otras especies de importancia relativa,como el ullucu y la oca, sino que también coincide con el mayor centrode diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y dela papa, y donde otros vegetales secundarios en importancia, así como lapapa misma, presenta especies silvestres, no domesticadas, que tienen allíun centro de dispersión importante.

Hasta ahora, ha sido un verdadero problema señalar la probable rutaingresión de los conocimientos agrícolas en nuestro territorio. Cuando

más, sólo era posible afirmar que tales conocimientos no se habían veri¬ficado endógenamente en el actual territorio argentino, y que eran el re¬bultada —juntamente con las especies vegetales cultivables— de unaimportación, o de una introducción; al efecto se señalaba el vecino terri¬torio boliviano como punto de procedencia de aquellos conocimientos yde tales vegetales. Más tarde se indicó al territorio del Norte Grande deChile, otro importante centro receptor de agricultura en el pasado, comoprobable centro difusor hacia la Argentina de los conocimientos agrícolas.Tal difusión desde el norte chileno al norte argentino sería aceptable deno mediar la tremenda barrera desértica que se interpone entre ambasáreas geográficas; de manera que si fuera posible determinar la existenciade otra ruta más propicia y efectiva, no restaría otra alternativa que acep¬tarla.

Paso a formalizar una pregunta que conceptúo importantísima para la•dilucidación de esta cuestión: ¿por qué causas, las agrupaciones humanas •

que habitan ahora la cordillera oriental en su descenso a las planicies delChaco, prosiguen cultivando vegetales de rendimiento menor, menos pa-latables, e incluso de menor poder alimenticio, como lo son el añu, la ocay el ullucu —cuando no la ajipa {Pachyrrizus ahipa ) y la achira ( Canna

pudiendo, quizá con los mismos trabajos, o con menos, cultivarmagníficas especies o variedades de maíz y papa? En- buena hora acep¬temos la explicación etnológica o folklórica poco antes expresada, corres-

Page 7: SOBRE LA DISPERSION MERIDIONAL TROPAEOLUM TUBEROSUM … · de diferenciación y de producción de especies o variedades del maíz y de la papa, y donde otros vegetales secundarios

BOLETíN DE LA SOCIEDAD ARGENTINA DE BOTáNICA, XV (1), 1973112

ponde al botánico hallar una explicación menos subjetiva. Y, efectiva¬mente, ella existe, si aceptamos que estos tubérculos constituyen el sus¬trato de la primera agricultura americana, de la agricultura más vieja, queen su camino de ingreso a la Argentina coincidió con una agricultura másmoderna, fundamentada por la papa y el maíz.

Creo que el ullucu, la oca y el añu son relictos de esa agricultura pri¬mordial, estructurada sobre malezas domesticadas o, como en el caso- delañu, sobre plantas trepadoras. El presente trabajo sólo tiene por finalidadobtener el reconocimiento de la botánica argentina hacia el añu, como es¬pecie cultivada fuera de su habitat específico; mientras tanto, dejo ali¬neados los interrogantes que su presencia sugiere, hasta que la discusiónde otros interesantes planteos observados en los Andes subtropicales deloriente jujeño me dé la oportunidad de proseguir con su discusión y des¬arrollo.

AGRADECIMIENTOS

El autor desea agradecer al Dr. Angel L. Cabrera la determinación bo¬tánica de algunos ejemplares de tropaeoláceas procedentes de la provinciade Jujuy, y a la Dra. Elena Ancibor los dibujos tomados del natural queilustran la presente nota.

BIBLIOGRAFIA

BUKASOV, S. M., 1939. The origin of potato species. Physis XVIII: 43-46.COBO, BERNABé, 1891. Historia del Nuevo Mundo. Edición de Sevilla.GARCILASO DE LA VEGA, 1943. Comentarios Reales de los Incas. Edic. Emecé, Bs.

Aires.HERRERA, F. L., 1938. Precursores de los estudios botánicos en el Dto. del Cuzco.

Revista del Museo Nacional, VII (1 ) : 53-130, Lima.HODGE, W. H., 1951. Three Native Tuber Foods of the High Andes. Economic

Botany, 5 (2): 185-201.PARODI, L. R., 1966. La agricultura aborigen argentina. Edit. Univ. de Buenos Aires,

Eudeba.SAUER, C. O., 1950. Cultivated Plants of South and Central America. Smithsonian

Institution Bulletin, Hadbook of South American Indians, 143: 187-543.YACOVLEFF, E. y HERRERA, F. L., 1934. El Mundo vegetal de los Antiguos Peruanos.

Revista del Museo Nacional, III: 1-102 y' 243-321, Lima.