Situacion del Mercado laboral
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¿QUÉ PASO EN LA ECONOMÍA?
SITUACION DEL MERCADO LABORAL DISTRIBUCION SALARIAL Y TRABAJO DOMESTICO
Por DARIO MARTINEZ Estudiante de Economía de la Universidad de Buenos Aires
La mitad de casi 24 millones de personas que tienen
ingresos gana menos de $ 3.000 por mes. O, lo que
es lo mismo, menos de $ 100 por día, según datos
del INDEC del IV Trimestre de 2012 proyectados a
todo el país. Son casi 12 millones de personas que
trabajan, en blanco o en negro, en relación de de-
pendencia, por su cuenta, como profesionales, perci-
ben jubilaciones o pensiones, planes sociales o viven
de una renta. Agrega el organismo, el 58,1% de la
población percibe algún ingreso y el 41,9% son per-
sonas sin ingresos -en su mayoría chicos o adoles-
centes- que dependen de sus familias.
En el norte del país los ingresos son menores, dado
que en Posadas (Misiones), Resistencia (Chaco), Co-
rrientes, Santiago del Estero o San Juan, la mitad
percibe menos de $ 2.000. Por el contrario, en Tierra
del Fuego la mitad percibe menos de $ 8.000, pero
el costo de vida es superior. En la Ciudad de Buenos
Aires, la mitad percibe menos de $ 4.200.
Una parte de este segmento de ingresos tan bajos
son asalariados informales, cuentapropistas, subocu-
pados, jubilados o pensionados con el haber mínimo
o cobran algún plan de empleo. El INDEC reconoce
que más de una tercera parte de los asalariados está
en negro; en tanto que 3 de cada 4 jubilados o pen-
sionados a fines del año pasado cobraba la mínima
de $ 1.879 y las pensiones no contributivas ronda-
ban los $ 1.300.
Este jueves, la presidente Cristina Kirchner anunció
en un acto en Casa Rosada la promulgación de las
leyes de contrato de trabajo para el personal de ca-
sas particulares y la que castiga a quienes promue-
ven el trabajo infantil. Entre otros puntos, la ley que
regula el trabajo de personal doméstico prohíbe la
contratación de menores de 16 años, y para quienes
tengan menos de 18 años se exigirá un certificado
médico con una limitación de jornada laboral de seis
horas diarias. Para los mayores de 18, la jornada de
trabajo no podrá superar las 8 horas diarias y las 48
semanales.
En la comparación entre el régimen anterior y el ac-
tual hay notorias diferencias. Antes, no se contem-
plaba la situación laboral de aquellas empleadas
domésticas que tuvieran una antigüedad inferior
al mes, las cuatro horas diarias y que cumplieran
labores cuatro días a la semana, mientras que desde
esta semana no hay tiempo mínimo para tener
amparo legal. También se deberá fijar la modalidad
de la contratación: por tiempo indeterminado,
plazo fijo, eventual, a tiempo parcial. Asimismo, el
tiempo de prueba se reduce de 90 días a un máximo
de 30. La edad mínima para tomar empleadas
domésticas se eleva de 14 a 16 (con retiro) y a
18 (sin retiro).
En cuanto a la jornada laboral, se estipuló 8 horas
diarias o 48 semanales, aunque permite una dis-
tribución desigual con un máximo 9 horas diarias. El
descanso semanal pasa de 24 horas a 35 horas, a
partir del sábado a las 13, y el domingo. Sobre el
descanso, debe ser de al menos 12 horas para
personal con retiro y de 9 horas –con recargo en
caso de interrupción– más descanso compensatorio
para el personal sin retiro.
A su vez se estipularon tres ítems que no estaban
contemplados: lugar y plazo del pago de las re-
muneraciones (para el personal mensual, el cuarto
día hábil del mes; para el personal por hora o día,
al finalizar cada jornada; semanalmente según lo
convenido, siempre en efectivo y en el lugar de tra-
bajo), recibo de sueldo (establece formalidades y
contenido y doble ejemplar) y horas extras (50%
de recargo si se tratare de días comunes, y 100%
los sábados después de las 13, domingos y feria-
dos).
Por último, se establece un régimen de licencias,
vacaciones pagas e indemnización por antigüedad.
OPINIÓN — Por DARIO MARTINEZ
Los datos publicados por el INDEC obligan a prestar
atención sobre el nivel de salarios nominales en las
grandes ciudades de nuestro país, considerando las
diferentes actividades económicas que definen sus
propios salarios y relaciones laborales.
Al utilizar los últimos microdatos disponibles de la
EPH (Encuesta Permanente de Hoga-
res) del segundo trimestre de 2012,
puede extraerse que 6.109.486 perso-
nas ocupadas percibían un ingreso
hasta $3.000. En cuanto a la distribu-
ción de casos según su remuneración,
los salarios más representativos eran
de $2.000 y $3.000, 12,8% y 15,6%
del total de individuos ocupados, res-
pectivamente. Dichos valores ponen
de manifiesto la magnitud de perso-
nas, cualquiera sea su relación labo-
ral, que se encontraban en salarios
insuficientes para sostener el costo de vida.
Observando este breve panorama de hace un año
atrás aproximadamente, la situación actual no es
muy alentadora dado que prácticamente se ha du-
plicado la cantidad de personas ocupadas con un
salario menor a $3.000, sin desconocer hoy día
esas personas forman parte del mercado de trabajo
a pesar de los vaivenes de nuestra economía nacio-
nal.
Respecto a la nueva ley que regula el trabajo
doméstico, es un hecho fundamental que tiende a
equiparar derechos y situar a este tipo de activida-
des laborales en un umbral acorde a la importancia
otorgada por las familias que contratan personal
doméstico para las distintas tareas en el hogar, in-
cluyendo el cuidado de niños y de adultos mayores.
Desde hace 20 años el sector servicios continúa
ganando espacio en el mercado laboral. Sin dudas,
la mayor inserción de la mujer hizo que aumentara
el requerimiento del personal doméstico con el ob-
jeto de cuidar a sus hijos y de realizar tareas
domésticas en la vivienda. Dada esta situación,
también hay posturas acerca del rol del empleador
que a su vez es un trabajador en relación de de-
pendencia, por ejemplo. En consecuencia, la nueva
ley genera certezas e incertidumbre a unos y a
otros, por ello será fundamental llevar a cabo el
monitoreo necesario que impida comportamientos
arbitrarios en la implementación de dicha normati-
va.
“(…) Desde
hace 20 años
el sector
servicios
continúa
ganando
espacio en el
mercado
laboral(…)”