SILENCIO SEPTIEMBRE 2021
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Sevilla | Septiembre 2021 | Número 156
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EDITASecretaría de la PrimitivaHermandad de losNazarenos de Sevilla.C/Alfonso XII, 3. 41001 - [email protected]
HERMANO MAYOREduardo del Rey Tirado
COLABORADORESEduardo del Rey Tirado Rvdo. P. Adrián Ríos BailónHortilio Pereda ArmayorIsabel Mª García ParrillaMarisa Cotolí SuárezRafael Roblas CarideSoledad GómezCésar Hornero MéndezAntonio Hernández LázaroRvdo. P. Pablo Colón PeralesMartín Carlos Palomo GarcíaRafael Ruibérriz de Torres Fernández
FOTOGRAFÍARafael Alcázar OteroFernando Solano VázquezJosé Miguel García GálvezIsabel Mª García ParrillaLuis Romero RuizArchivo de la ArchicofradíaJosé Cruz MartínJosé Antonio Cortada TenorioRafael Roblas CarideJuan José Caravaca SilvaPaula RamírezSoledad GómezFernandMartín C. Palomo GarcíaAntonio Entrena AznarteAntonio J. García CruzJosé Manuel Morán
Portada: Luis García Ridao (se reproduce la orla que tradicionalmente servía de portada del boletín hasta comienzos de los años noventa)
Convocatoria del Triduo:Jose Manuel Ruiz Cortés
Fotografías Centrales:José Miguel García Gálvez (Señor)Luis Romero Ruiz (Virgen)
Contraportada:Antonio del Junco
DISEÑO E IMPRESIÓNGráficas San Antonio
TIRADA 3000 ejemplares
DEPÓSITO LEGAL SE-104-1984
© Todos los derechos reservados.La Hermandad no comparte ne-cesariamente las opiniones ver-tidas por los colaboradores ni se responsabiliza de ellas.
Sumario
3. CARTA DEL HERMANO MAYOR. Eduardo del Rey Tirado.
4. LA MIRADA. De la oración a la Santa Cruz. Rvdo. P. Adrián Ríos Bailón
6. DESDE EL ATRIO.
14. DIPUTACIÓN DE CULTOS.
19. FORMACIÓN.
22. AVISOS.
23. CONVOCATORIA DE CABILDO.
25. CONVOCATORIA DEL TRIDUO A LA SANTA CRUZ.
28. CARIDAD. Marisa Cotolí Suárez
30. CANTERA NAZARENA.
32. COLABORACIÓN. Y le llevé tus ojos. Soledad Gómez
34. RESEÑAS. César Hornero Méndez
36. COLABORACIÓN. Los dieguinos y el fuego purificador.
Antonio Hernández Lázaro
38. COLABORACIÓN. Plegaria de la cera blanca. Pablo Colón Perales
40. GLORIA NAZARENORUM. Martín Carlos Palomo García.
42. POESÍA. Rafael Roblas Caride.
44. GLORIA NAZARENORUM. La novena saetilla de El Silencio y el origen de lo que
hoy llamamos música de capilla. Rafael Ruibérriz de Torres Fernández.
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“Así lo creo, así lo prometo, así lo espero”
CLlegamos a septiembre y parece que la vacuna va frenando paulatinamente al Covid, lo que invita a confiar en una
progresiva recuperación del pulso cotidiano en los trabajos, negocios, actividad económi-ca, social, cultural, la vida ordinaria en su-ma. Sin embargo, el virus todavía sigue en-tre nosotros causando muertes, ingresos de gravedad y mucho sufrimiento, poniendo a prueba la entrega admirable de los profesio-nales sanitarios y obligándonos a ser cons-cientes de ello y a actuar con responsabili-dad y prudencia en todos nuestros ámbitos.
Iniciamos, pues, el nuevo curso inten-tando recuperarnos interiormente y recobrar poco a poco lo que la pandemia ha trasto-cado en todo este tiempo, nuestras rutinas, costumbres, encuentros, ritos… Y así, un año más, somos convocados a los cultos en honor a la Santa Cruz en Jerusalén. Una oportunidad providencial para reencontrar-nos con nosotros mismos, con Dios y con los hermanos, para centrarnos en lo esencial y re-centrar nuestra vida en la Cruz. La pande-mia ha puesto en crisis muchas cosas fuera y dentro de nosotros, acaso replanteando nuestras prioridades, y estos días nos ayu-darán a reflexionar sobre ello.
Estamos en un tiempo convulso y des-concertante, huérfano de referencias claras y sólidas (quizás nos suceda también per-sonalmente). Por eso es más necesario cada vez reafirmar nuestra fe y dar testimonio de ella. Un reto que no es fácil, porque a los obs-táculos habituales se suman los que nos toca vivir hoy en una realidad totalmente distinta de la que conocíamos, y aún más alborota-da por planteamientos líquidos, con falta de referentes, desprecio a valores que se daban por incuestionables y un rechazo frontal a Dios. Frente a ello, debemos presentar, aun-que choque, la firmeza de unas convicciones cimentadas en la fe y en una opción de vida que intenta ser acorde con ella, alzando la Santa Cruz en medio de la tormenta como faro de vida y esperanza para el mundo.
Todo esto convierte el día de la Fiesta Principal de Instituto en un momento es-pecial porque, un año más, volveremos a protestar nuestra fe en Jesús Nazareno y en
su Iglesia, expresando públicamente ese compromiso de vida personal y comunitaria que significa ser Nazarenos, imitadores de Jesús Nazareno. Y como genuinas señas de identidad, timbre de gloria de la historia de la Archicofra-día y redoblado compromiso, renovaremos como desde hace siglos el voto de sangre formulado en 1615 en defensa del misterio de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María, y el voto en defensa de la Vida proclamado en 2009.
Nos toca hacer lo que debemos hacer como institución. Lo primero, poner a nuestros sagrados Titulares en el cen-tro de todo cuanto se haga en la vida de la Archicofradía. Y a partir de ahí, con ilusión y responsabilidad, seguir traba-jando en el cumplimiento de nuestros fines y en el encuen-tro entre los hermanos, avivando progresivamente la vida de Hermandad según nuestro calendario de actividades (cultos, ciclo de formación, retiro de Adviento, etc), con-forme las circunstancias lo permitan en cada momento. Respetando este contexto, quiero animar a los hermanos que podáis y aún no hayáis hecho, a ir a la Hermandad, ayudando así a seguir recuperando el trato, el encuentro, el compartir nuestra vida de Hermandad.
Participemos en los próximos cultos a la Santa Cruz en Jerusalén, en la iglesia o a través del canal YouTube corpo-rativo, con agradecimiento a Jesús Nazareno por el don de la fe, por nuestra Hermandad, y por poder reunirnos para celebrarlos. Y con la conciencia de vivir tiempos recios que exigen convicción y fortaleza en la fe, coherencia, valentía, pasión y generosidad.
Afrontemos todo ello con esperanza, como un tiempo de gracia donde el Señor nos llama a dar testimonio de Él en medio de tantas dificultades y de nuestras propias fragi-lidades. Que María Santísima de la Concepción nos enseñe a guardar y meditar en el corazón, a luz de esa fe que pro-clamaremos, todo cuanto nos sucede, para así mejor servir a Jesús Nazareno y a nuestros hermanos, especialmente los más vulnerables y necesitados.■
Carta del Hermano Mayor
Eduardo del Rey Tirado
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A De la oración a la Santa Cruz
El artículo sexto de nuestras Reglas nos exhorta a cele-brar cada año, dentro de los días comprendidos entre la festividad litúrgica de la Exaltación de la Santa Cruz
y el 29 de septiembre, la Fiesta Principal de Instituto en ho-nor de la Santísima Cruz. Esta solemnidad ocupa un puesto principal dentro del calendario de cultos internos de la Archi-cofradía, tan solo superado en importancia, según el orden de disposición en las Reglas, por la Estación de Penitencia.
Somos por tanto nazarenos de Sevilla que veneramos a la Santa Cruz en Jerusalén, lo que significa que debe tener un lugar en nuestro corazón, junto a la devoción a Jesús Nazare-no y María Santísima de la Concepción. Puede que el hecho de no ser una imagen sagrada, sino más bien un “patíbulo” o “lugar del sacrificio”, no inspire ni mueva a la oración. Por este motivo se hace necesario comprender su significa-do para poder considerar el valor salvífico que alcanza para nuestra fe.
En la oración que se lee cada día del Triduo a la Santa Cruz escuchamos: “Cruz Santísima de Jesús que nos recuer-das la agonía y muerte que en ti padeció nuestro Redentor, Dios y Hombre verdadero. Recibe con nuestra adoración los más fervientes votos de nuestras almas, en homenaje y re-paración por los ultrajes e insultos que te hace centro de la impiedad de los que de nuevo te crucifican”
La Santa Cruz nos hace referencia directa al sufrimiento que Jesús Nazareno, Dios y Hombre verdadero, padeció por cada uno de nosotros clavado en ella. En clara alusión al Siervo Sufriente profetizado en Isaías y descrito en sus cuatro cánticos (Is. 42, 1-9; 49,1-7; 50,4-11; 53) la Cruz nos muestra el amor extremo, oblativo, que Dios nos tiene hasta el punto de asumir en su Hijo las consecuencias de nuestro pecado.
Hoy la Cruz sigue siendo causa de persecución, tal y como podemos comprobar. Sigue incomodando a aquellos que pretenden relegar la fe al ámbito privado para que no se haga visible este signo cristiano en medio de la sociedad. En primer lugar, sabemos por la Fundación Ayuda a la Igle-sia Necesitada que muchos hermanos nuestros están sien-do martirizados en distintos países por causa exclusiva de su fe. Los testimonios que nos llegan a través de los medios de comunicación social nos facilitan el conocimiento de esta realidad que atraviesan cristianos en distintos lugares del mundo.
Pero no tenemos que irnos muy lejos para ver el creciente interés de muchos políticos, incluso de signos contrarios, por hacer desaparecer la Cruz de lugares públicos. Terminada la persecución de las llamadas Cruces de los Caídos, por moti-vos ideológicos según la argu-mentación de sus ejecutores de entonces, ahora se abre la veda a cualquier Cruz, podríamos decir que en defensa de una neutralidad religiosa que no re-coge ni siquiera la Constitución Española. Nuestra Carta Magna que reconoce un Estado acon-fesional de mayoría católica (El art. 16 hace una mención espe-cial a la Iglesia Católica).
Por eso en esta primera parte de la oración de nuestro Triduo, menciona otro fin de nuestros cultos en honor de la Santa Cruz: reparar “los ultrajes e insultos que te hace centro de la impiedad de los que de nue-vo te crucifican”. Cobra actua-lidad esta intención de nuestro Triduo. Necesitamos reparar con nuestra oración y testimo-nio, que se expresa con nuestra participación en los cultos en-tre otras cosas, las ofensas que Jesús Nazareno sigue sufriendo no solo con nuestros pecados personales, sino con esta per-secución que sigue viviendo, a modo de animadversión, por parte de una minoría ideolo-gizada que pretende crear opi-nión mayoritaria, y que se bene-ficia de la espiral de silencio que
Rvdo. P. Adrián Ríos Bailón
Director Espiritual de la Archicofradía
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se genera entre muchos católicos por miedo a la incomprensión y el rechazo.
La oración de nuestro Triduo a la Santa Cruz en Jerusalén con-tinúa: “Cruz Bendita, glorioso emblema de la muerte de Jesús. Tú eres el Altar Sacrosanto donde fue inmolada la víctima Divina; la fuente inagotable de Gracia que brotó del Sagrado Corazón de Jesús; la Cátedra de la Celestial sabiduría proclamada al morir nuestro Divino Maestro, clavado se haya en ti el quirógrafo del de-creto de muerte contra nosotros y a tus pies yace la muerte abatida y el infierno encadenado”.
El altar donde se celebra el Santo Sacrificio cada día es sím-bolo de la Cruz del Señor, fuente por tanto de la gracia recibida del Costado abierto del Redentor. Los Santos Padres de la Iglesia interpretaron desde los primeros siglos como fuente de los Sacra-mentos el agua y la sangre que brotaron de la herida provocada por la lanzada del Señor. Agua como fuente del Bautismo, y Sangre para la Eucaristía.
También la Santa Cruz es cá-tedra donde el Maestro nos ense-ña a amar. No hay mayor sabidu-ría que la expresada en la Cruz, aunque San Pablo la proclame consciente de que es “escándalo para los judíos y necedad para los gentiles” (1 Cor 1, 23). Esa sabiduría se encarna en el amor extremo que Jesús nos tiene. Un amor capaz de dar la vida libre-mente (Jn 10, 18).
La Cruz es, como reza la ora-ción glosada, signo del triunfo de la muerte, pues siendo su patíbu-lo, es puerta para la Vida Eterna: Hoy estarás conmigo en el Paraí-so (Lc, 23, 43). La muerte corpo-
ral no tiene la última palabra desde Cristo, pues Él atraviesa el umbral de la Cruz para inaugurar el Cielo y prepararnos una morada donde Dios nos espera lleno de misericordia al final de nuestra peregrinación por este mundo. Éste es el fun-damente de la esperanza cristiana.
El último tramo de la oración nos invita precisamente a aclamar: “Cruz Triunfadora de todos los enemigos, ábrenos los tesoros de la misericordia y acoge nuestras plegarias y ex-piaciones, para obtener con ellas la conversión de los impíos, el perdón de los pecadores, la fortaleza de los justos. Mués-trate todavía a nuestra mirada con la Divina Sangre y derra-ma sobre nosotros tus Bendiciones”.
El carey y plata que reviste la Santa Cruz que porta Jesús Nazareno, fruto de una devoción de siglos, no puede eclipsar la crueldad del martirio del Señor al que adoramos cada vier-nes su Cinco Llagas. Su sangre fue tan real como el sufrimien-to que padeció por nosotros, para expiar nuestros pecados y resarcir nuestra culpa. Y es pecado mayor no dolerse por este destino del Varón de Dolores y no apreciar su amor extremo para devolvernos a la comunión divina.
San Ignacio nos presenta como segundo modo de orar la consideración de las oraciones que normalmente pronun-ciamos vocalmente pero no reparamos en su verdadero sig-nificado. Es deseo de vuestro director espiritual que la glosa de la oración del Triduo a la Santa Cruz en Jerusalén sea de provecho para aquellos que participen en estos cultos y la es-cuchen cada día antes de comenzar la Santa Misa. ■
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Desde el Atrio
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Varios momentos de la pasada veneración a Jesús Nazareno
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Altar extraordinario a San José durante su festividad, en el año especialmente dedicado a su Patronazgo sobre la Iglesia. Abajo, Libro de Reglas del siglo XVII y Simpecado cedidos por la Archicofradía a la Exposición “In nomine Dei”.
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Vistas del Triduo Doloroso en honor a María Santísima de la Concepción.
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Distintos momentos de los cultos de Semana Santa organizados por nuestra Archicofradía.
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En la página anterior, vista general del Altar durante el pasado Triduo Eucarístico. Y arriba, detalle del mismo.Entrega de recuerdos a los hermanos que han recibido durante este año y el anterior la Primera Comunión.
Abajo, entrega de dos dactilopinturas de nuestro Titulares por parte de su autor, don Antonio Menchén Peñuela.
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S Historia de unos cultos históricos
Ante la situación ocasionada por la crisis sanitaria derivada de la pan-demia por COVID-19 y dadas las
previsiones de su evolución, ya en torno al mes de noviembre del pasado año se rumoreaba sobre una posible suspensión de las estaciones de penitencia del año si-guiente; rumor que, poco después, se con-virtió en anuncio de la noticia.
Martes, 29 de diciembre de 2020. La página web del Arzobispado de Sevilla y los medios digitales locales hacen públi-co el Decreto del Sr. Arzobispo de Sevilla, fechado ese mismo día, que suspendía los actos y celebraciones organizados por pa-rroquias, hermandades y cofradías, aso-ciaciones de fieles u otros grupos eclesia-les de carácter externo y en general todos aquellos en los que se pudiera hacer uso de la vía pública, hasta que no se tome otra decisión al respecto. En otras pala-bras, quedaban suspendidas las estacio-nes de penitencia de 2021.
El Sr. Arzobispo en su disposición reco-mendaba “seguir los subsidios litúrgicos que ofrecerán las delegaciones diocesa-nas de Liturgia y de Hermandades y Co-fradías”, a la vez que instaba a a vivir con hondura e intensidad renovadas las cele-braciones litúrgicas de la Semana Santa, y, especialmente, las del Triduo Sacro, para concluir con el ruego a las herman-dades y cofradías de que dispusieran de ejercicios de piedad para sus hermanos en el día en el que les corresponda celebrar sus estaciones de penitencia, así como para el citado Triduo Sacro.
Pasadas las celebraciones de la Na-vidad, el 25 de enero se hacía público el documento conjunto de ambas Dele-gaciones diocesanas dirigido a las Her-mandades de la Archidiócesis por el que se determinaba las indicaciones a seguir con motivo de la Cuaresma y de la Sema-
na Santa de 2021. De las indicaciones a ob-servar sobresalían, la celebración en todo lo posible de los cultos de reglas, siempre cumpliendo las instrucciones sanitarias; el fomento de la celebración comunita-ria del sacramento de la penitencia, con posterior confesión individual; la sustitu-ción de la estación de penitencia por una celebración de la Palabra, o el rezo de un ejercicio piadoso; y la participación, en la Parroquia, para quien quedaban especial-mente reservadas según las indicaciones, de las celebraciones del Domingo de Ra-mos y del Triduo Pascual.
Hortilio Pereda Armayor
Diputado de Cultos
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Llegado este momento, se plantea en seno de Cabildo qué acciones se pueden acometer para que se concilie el cumpli-miento de lo preceptuado en nuestras Re-glas con, por una parte, el Decreto del Sr. Arzobispo y las indicaciones de ambas De-legaciones Diocesanas, así como, de otro lado, con las restricciones a la movilidad imperantes y los aforamientos impuestos en los templos.
En un primer análisis, resultaba claro que el Triduo Doloroso a María Santísima de la Concepción y el Acto de la Reconci-liación, con la celebración comunitaria del Sacramento de la Penitencia y la posterior confesión individual, no solo no corrían peligro, sino que se nos instaba a llevarlos a cabo. Como así se hizo, contando con la asistencia y participación de nuestros her-manos, que en todos los días ocuparon el máximo aforo permitido en nuestra Real Iglesia.
Pero nuestra Estación de Penitencia a la Santa Iglesia Catedral, para adorar en ella a Nuestro Señor presente en la Eucaristía, definido en la regla novena como el más im-portante acto de culto y razón fundamental de la constitución de la Archicofradía, este año, tampoco podría realizarse. Pero es que, por imperativo de las restricciones a la movilidad impuestas, de igual manera resultaba imposible sustituirla, a la hora en que la Cofradía debiera encontrarse en la calle, por una de las recomendaciones indicadas, bien un acto de la Palabra, bien el rezo de un ejercicio piadoso.
En este contexto, va ganando cuerpo la idea de intentar celebrar los Santos Oficios en nuestra Real Iglesia, pues se aúnan diferentes sentimientos. A saber. Como quiera que el espacio de nuestra Real Iglesia se ve muy mermado duran-te la Semana Santa, por estar expuestos tanto los Pasos, como el Altar de Insig-nias, la Misa de Palmas, del Domingo de Ramos, no es tradicionalmente un acto de culto en la Archicofradía; pero, dado que en las circunstancias concurrentes este año se dispondría de todo el espacio, resulta la ocasión perfecta para asistir
de manera corporativa a tan importante Eucaristía. De otro lado, por la jornada en que realizamos nuestra Estación de Penitencia y por cuanto conlleva su pre-paración y organización, la Santa Misa in Cœna Domini y la posterior vigilia de adoración al Santísimo Sacramento, no se pueden celebrar en nuestra Real Igle-sia; sería esta una ocasión para sí poder hacerlo. Por otra parte, la adoración de la Santa Cruz, parte central de la liturgia de la Celebración de la Pasión del Señor, que tampoco se hace en nuestra Real Iglesia, podría tener lugar este año y qué mejor ocasión que adorar a la Santa Cruz en Jerusalén, Titular de nuestra Archico-fradía, en tan piadoso culto.
No obstante tan buenos anhelos, de su materialización, nos separaba una indi-cación venida desde el Arzobispado: las Hermandades tendrían que unirse a sus respectivas parroquias para la celebración de la Misa del Domingo de Ramos y del Tri-duo Sacro.
Y para obviar dicha instrucción y lograr que se pudieran llevar a cabo en nuestra Real Iglesia tales cultos, el Rvdo. Sr. Director Espiritual, Ntro. Hno. D. Adrián Ríos, y el Sr. Hermano Mayor entablaron diferentes conversaciones, tanto con la Parroquia, como con las Delegaciones Diocesanas de Liturgia y de Hermandades y Cofradías, a fin de obtener las debidas autorizaciones. Con-versaciones que a principios del mes de febrero dieron su fruto, obteniendo la Archicofradía la pertinente autorización para las celebraciones en la Real Iglesia de San Antonio Abad del Domingo de Ra-mos, Jueves Santo y Viernes Santo; que-dando excluida la correspondiente a la Vigilia Pascual, al mantenerse la instruc-ción de que la Archicofradía se uniese a la Parroquia para su celebración.
Comenzaba entonces un nuevo reto: desde que en los años sesenta del pasado siglo la Real Iglesia de San Antonio Abad fuese, temporalmente, templo parroquial no se habían celebrado los Santos Oficios en la misma.
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De la misma manera que la Herman-dad cuida hasta el más mínimo detalle en su Estación de Penitencia, la de este año, que se iba a celebrar de manera tan espe-cial por medio de los Santos Oficios, debía ser cuidada con mayor esmero, dedica-ción y respeto. La liturgia del Domingo de Ramos y del Triduo Sacro es muy especial, rica en simbolismos y poco conocida por los fieles. Su preparación, para no incurrir en ningún error, exigía conocerla bien. Por ello, desde el mismo momento en que se contó con la autorización, se iniciaron los trabajos necesarios con el Rvdo. Sr. Di-rector Espiritual y con ntro. hno. D. Félix Quijada por los Sres. Mayordomos, Prios-tes y Diputado de Cultos, ayudados por los Sres. Consiliarios y bajo la presidencia del Sr. Hermano Mayor.
En las reuniones preparatorias, que se celebraron entre los meses de febrero y marzo, se estudió y explicó la liturgia co-rrespondiente a cada celebración, según lo establecido en el Misal Romano; se pre-pararon y cuidaron las diversas Lecturas, así como el cometido de los acólitos y de los servidores del Altar; se trabajó con la Coral en la más apropiada selección mu-sical, que estuvo a cargo de D. Fernando Caro; se revisó y cuidó hasta el más míni-mo detalle del montaje y exorno de los al-tares, donde entronizar a nuestros Sagra-dos Titulares, en función de las exigencias litúrgicas de cada uno de los días, moti-vando hasta tres cambios en la misma se-mana, así como del altar efímero donde se debía reservar a Su Divina Majestad tras la celebración del Jueves Santo; se analizó y determinó la operativa precisa para lograr el mayor de los aforos posibles, la difu-sión más óptima de las celebraciones por el canal de YouTube de la Archicofradía así como la mejor calidad en la retransmi-sión, que permitiera llegar al mayor nú-mero posible de hermanos; y, se acordó la edición de una obra, breve y sencilla, que facilitara a los fieles la oración personal y la meditación en su rato de adoración al Santísimo Sacramento.
Y aún quedaba otro flanco por cubrir. Si ya de por sí es difícil encontrar sacerdo-
tes, cuyo ejercicio ministerial y la atención a las obligaciones pastorales que tienen encomendadas les permitan contar con disponibilidad para ocuparse voluntaria-mente de otras celebraciones, encontrar alguno que pudiera oficiar el Domingo de Ramos, el Jueves Santo y el Viernes Santo parecía, en principio, todavía más difícil. Pero no fue así. Bastaron apenas un par de conversaciones y la difusión por los ca-nales oficiales de la Archicofradía de que se iban a celebrar los Santos Oficios en nuestra Real Iglesia para que se ofrecie-ran varios sacerdotes hermanos.
Y así llegamos al Domingo de Ramos. En este día, la Iglesia recuerda la entrada de Nuestro Señor en Jerusalén para con-sumar su misterio pascual. Por esta razón, en la misa principal del día se hace me-moria de la entrada del Señor por medio de una procesión que se inicia fuera de la iglesia. Sin embargo, por las medidas de salud pública adoptadas para este año, tal procesión no fue posible realizarla; en su lugar, se sustituyó por el acto de la bendición de las palmas y la lectura del Evangelio en el Atrio, para posteriormente dirigirse en procesión al Altar.
La celebración de este día corrió a car-go de Ntro. hno. Rvdo. Sr. D. Manuel An-selmo Tomé Ríos, S.D.B.
El Sacerdote, con capa pluvial, acom-pañado del acólito instituido y de los acó-litos turiferarios, se dirigió al Atrio, junto a la hornacina de San Judas Tadeo, para desde allí introducir la celebración, con la invocación inicial, el saludo, la monición introductoria y la bendición de las palmas y de los ramos de olivo. Tras ello, el Sa-cerdote proclamó el Evangelio e hizo una breve homilía.
Finalizado el rito inicial, comenzó la procesión de entrada hacia el Altar for-mada por acólito con incienso, acólito con Cruz alzada, Sres. Hermano Mayor, Consiliarios y el Sacerdote con palmas, y el acólito instituido. Tras colocar la Cruz alzada, junto al Altar, y las palmas al pie del presbiterio, el Sacerdote prosiguió la celebración solemne de la Santa Misa.
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En la tarde del Jueves Santo, el Rvdo. Sr. D. Leonardo Javier Giacosa, Vicario Pa-rroquial de San Juan Pablo II, de Dos Her-manas, presidió la Santa Misa in Cœna Domini, concelebrando ntro. hno. Rvdo. Sr. D. Emilio Ruiz. De la liturgia del día tuvo que suprimirse el lavatorio de pies, siguiendo así las indicaciones recibidas y como consecuencia de las medidas de salud pública impuestas por la autoridad sanitaria.
Tras la celebración de la Santa Misa, el Santísimo fue trasladado al Monumento, magníficamente preparado al efecto por los Sres. Priostes en el Altar de la Capilla, en solemne procesión iniciada por el Sr. Diputado Mayor de Gobierno, acólito con Cruz alzada, acólitos ceriferarios, herma-nos con cirios, acólito turiferario, Sacer-dote concelebrante y el Sacerdote ofician-te, que portaba al Santísimo y lo cubría con el paño humeral.
Cuando la procesión llegó al lugar de la reserva, el Sacerdote depositó el Copón sobre el altar, lo incensó y, tras el canto del Tantum ergo y un breve rato de ora-ción, colocó el Santísimo en el taberná-culo y lo cerró. Tras ello, el Sacerdote le entregó al Sr. Hermano Mayor la llave del Sagrario para su custodia, dando así carta de naturaleza a lo que ocurre en nuestras anuales Estaciones de Penitencia, donde el Sr. Hermano Mayor porta en el pecho colgada la llave del Sagrario de la Real Iglesia de San Antonio Abad.
Finalizada la celebración, la Capilla se convirtió en lugar de adoración personal a Jesús Sacramentado, hasta la hora de cie-rre determinada por las autoridades sani-tarias. Durante todo el tiempo, y para un mayor aprovechamiento espiritual de los fieles que acudieron a la Capilla, el Rvdo. Sr. D. Leonardo Javier Giacosa se dispuso a oír en confesión y administrar el Sa-cramento de la Reconciliación a cuantos quisieron acercarse a recibir el perdón. Y para facilitar el rato de oración personal y la meditación durante la adoración al Santísimo Sacramento, se distribuyeron ejemplares de la obra editada por la Ar-
chicofradía, que contenía diversas oracio-nes y textos adecuados para la meditación ante el Santísimo.
La Capilla fue reabierta de nuevo en la mañana del Viernes Santo, permaneciendo así hasta el mediodía.
En la tarde del Viernes Santo tuvo lu-gar la celebración de la Pasión del Señor, celebrada por el Sr. Director Espiritual de la Archicofradía, ntro. hno. Rvdo. Sr. D. Adrián Ríos, y concelebrada por ntros. hnos. Rvdos. Sres. D. Andrés Ybarra y D. Emilio Ruiz.
La liturgia del día, conforme indica el Misal Romano, consta de tres partes: litur-gia de la Palabra, adoración de la Cruz y sagrada comunión.
La primera parte se inició, con el altar desnudo por completo, con las luces de la Iglesia y de la Capilla apagadas, y los Sa-cerdotes celebrantes dirigiéndose en silen-cio al Altar. Tras hacer la reverencia al mis-
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mo, se postraron rostro en tierra para orar en silencio unos minutos. De la liturgia de la Palabra lo más destacable fue, sin duda alguna, que la proclamación de la Pasión del Señor según San Juan no fue leída, sino cantada a tres voces, por D. Fernan-do Caro, ntro. hno. D. Juan Caravaca y el Rvdo. Sr. Director Espiritual.
La segunda parte de la liturgia del día está dedicada a la adoración de la Cruz. En esta parte se concentró el momento más emotivo, pues los hermanos asisten-tes a esta celebración pudieron adorar a la Santa Cruz de Jerusalén, Titular de nues-tra Archicofradía.
Tras su adoración, se inició la tercera y última parte de la liturgia, con el encendi-do de las luces de la Iglesia y de la Capilla y la preparación del Altar.
Finalizada la celebración del día, y tratándose de un viernes, aunque no a la hora acostumbrada, la Archicofradía realizó un solemne Ejercicio de las Cinco Llagas en honra, memoria y veneración de Ntro. Padre Jesús Nazareno, dirigido en esta ocasión por el Sr. Hermano Mayor, que, tratándose del día en que nos encon-trábamos, fue vivido con una mayor inten-sidad espiritual y recogimiento por todos los fieles asistentes.
Quiero terminar este artículo, en pri-mer lugar, destacando la asistencia de nuestros hermanos a estos Cultos tan especiales, ocupando en su totalidad, todos y cada uno de los días, el aforo establecido; y que se ha visto muy incre-mentada gracias a las retransmisiones de las celebraciones por el canal de You-Tube de la Archicofradía, que sirvieron para acercar a nuestra Real Iglesia a los hermanos impedidos y a cuantos no pu-dieron acudir físicamente, haciéndoles partícipes de los Cultos y pudiendo apro-vecharse espiritualmente de los mismos, especialmente, mediante la Comunión espiritual que se ha realizado en todos ellos. En segundo lugar, con un agrade-cimiento a todos los hermanos que han hecho posible que las celebraciones del Domingo de Ramos, Jueves Santo y Vier-nes Santo hayan alcanzado tan elevados niveles de solemnidad, personificados en el personal que ayudó a mantener el aforo, el personal encargado de las re-transmisiones, el coro, los lectores, los acólitos, el acólito instituido, y los sa-cerdotes celebrantes. Y, en tercer lugar, hacer un público reconocimiento a la labor desarrollada para la celebración de estos históricos Cultos por los Sres. Priostes y su equipo de colaboradores; por los Sres. Mayordomos; por los Sres. Consiliarios; por ntro. hno. D. Félix Qui-jada; por el Sr. Director Espiritual, ntro. hno. Rvdo. Sr. D. Adrián Ríos; y por el Sr. Hermano Mayor. ■
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Isabel Mª García Parrilla
Diputada de Formación
Crónica de las Noches Nazarenas de la Cuaresma de 2021
En la pasada Cuaresma volvieron a celebrarse las tradicionales “Noches Nazarenas”, tras el paréntesis del
año 2020, aunque por necesidades de pro-gramación y de horarios se desarrollaron
en sábado, con un aforo limitado y siendo retransmitidas en directo por el canal de Youtube de la Archicofradía.
Así, el sábado 20 de febrero, el conocido cofrade y experto en cerámica cofradiera, don Martín Carlos Palomo García, disertó sobre “Retablos cerámicos y azulejos en la Hermandad del Silencio”. En la sesión, ilustrada con numerosas imágenes, hizo un detallado análisis del amplio catálogo de obras cerámicas que la Hermandad atesora en sus dependencias, deteniéndose espe-cialmente en los retablos de nuestros Titu-lares, el de Jesús Nazareno del año 1921, del que cumplía un siglo de su hechura, y el de María Santísima de la Concepción, situado en la calle Alfonso XII.
Nuestro hermano y periodista don José Joaquín León Morgado, en ese momento Her-mano Mayor de la Hermandad de la Soledad de San Lorenzo, tuvo a su cargo la segunda se-sión, el sábado 20 de marzo, bajo el título “El Silencio en el tiempo de los ruidos”. En sus palabras, este hermano ahondó en la necesi-dad e importancia del silencio en su más am-plio sentido, tanto en la estación de peniten-cia del Viernes Santo como en la vida real. ■
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La nueva Aula mariana “Vázquez de Leca” nos acercó a la Virgen en el mes de mayo
La nueva iniciativa de formación de la Archico-fradía, denominada “Aula mariana Vázquez de Leca”, comenzó su andadura en el pasado mes
de mayo a través de dos encuentros, uno cultural, otro espiritual, relacionados con la devoción a la In-maculada Concepción de María.
El primero de ellos se desarrolló el viernes 7 de mayo, y estuvo a cargo del doctor don Juan Montero Delgado, Catedrático de Literatura Española de la Universidad de Sevilla, quien bajo el título “Francis-co Pacheco y su Apacible coloquio (1620): reflexiones en torno a un documento del inmaculismo sevilla-no”, analizó y comentó la edición de esta obra que la Archicofradía publicó en el mes de diciembre pasa-do, y que estuvo a la venta al final de la conferencia.
Por otro lado, el viernes 28 de mayo, nues-tro hermano sacerdote don Pablo Colón Pera-les disertó sobre “María en un tiempo herido. Una mirada ignaciana”, una reflexión pausada y amorosa hacia la Santísima Virgen en este mo-mento de pandemia mundial y de acercamiento a la voluntad de Dios en momentos de aflicción. Tuvo como escenario el bello atrio de San Anto-nio Abad en una agradable noche primaveral. ■ Jo
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Este año 2021 el ciclo formativo de la Ar-chicofradía “Viernes con Jesús Nazare-no” continuará acercándonos a la Pa-
labra de Dios, en concreto a los Evangelios, desarrollando y profundizando en la misma temática de los cursos precedentes.
Al igual que en años anteriores, y a lo lar-go de tres sesiones que comenzarán el viernes 8 de octubre, nos acercaremos al proceso de definición de los evangelios canónicos y apó-crifos, así como nos adentraremos en el cono-cimiento de los dos canónicos más antiguos: el de San Marcos y el de San Mateo.
Las ponencias, con los títulos y en las fe-chas abajo indicadas en el recuadro inferior, serán impartidas por el sacerdote francisca-no fray Alfonso García Araya, especialista en Sagrada Escritura, profesor en la facultad de Teología San Isidoro de Sevilla. ■
Viernes con Jesús NazarenoIntroducción al Nuevo Testamento III
Ponente: Rvdo. P. Fray Alfonso García Araya, O.F.M.Profesor de la Facultad de Teología San Isidoro de Sevilla
VIERNES 8 OCTUBRE, 21 HORAS- Los evangelios canónicos y los evangelios apócrifos
VIERNES 22 OCTUBRE, 21 HORAS- El evangelio según San Marcos
VIERNES 12 NOVIEMBRE, 21 HORAS- El evangelio según San Mateo
Real Iglesia de San Antonio Abad
Diputación de FormaciónArchicofradía de Jesús Nazareno
Sevilla, 2021
El primer ciclo del Aula de Formación Mariana “Vázquez de Leca” nos acercó a la Virgen en el mes de mayo
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Avisos
Misa de San Antonio María Claret
El próximo domingo día 24 de octu-bre, a las 20,00 horas se celebrará
-Dios mediante-, en nuestra Real Igle-sia de San Antonio Abad, Santa Misa en honor del que fuera nuestro her-mano San Antonio María Claret, con motivo de su festividad litúrgica.
Este santo, que fue recibido como hermano de la Archicofradía en 1862, fundó la Congregación de los Misione-ros Hijos del Inmaculado Corazón de María, cuyos miembros tienen condi-ción de hermanos de nuestra Corpo-ración. Asimismo, fue Arzobispo de Cuba y confesor de la reina Isabel II. ■
Lotería de NavidadTal y como viene siendo costumbre, la Archicofradía participará en el tradicional sorteo de
Lotería de Navidad del próximo 22 de diciembre con el número 14785. Como en años ante-riores, también se pone a disposición de los hermanos y devotos el número 28759. Los déci-mos pueden adquirirse en la sala de recuerdos del atrio, dentro del horario acostumbrado. ■
Solemnes Honras Fúnebres por los
hermanos difuntos
Según se dispone en las Reglas, la Primitiva Hermandad de los
Nazarenos de Sevilla, Archicofra-día Pontificia y Real de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santa Cruz en Jerusalén y María Santísima de la Concepción celebrará - Dios mediante- el próximo martes día 2 de noviembre -conmemoración litúrgica de los Fieles Difuntos- a las 20,00 horas, solemnes Honras Fúnebres por todos los hermanos y hermanas difuntos, con especial recuerdo a los fallecidos durante este último ejercicio. Rogamos a nuestros hermanos una oración por nuestros difuntos. ■
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CABILDO GENERAL ORDINARIO DE CUENTAS
De orden del Sr. Hermano Mayor, por acuerdo de Cabildo de Señores Oficiales de esta fecha, y en cumplimiento de la Regla 84ª, así como por lo dispuesto en las
Normas Diocesanas para las HH. y CC. de fecha 29 de junio de 2016, se cita por la presente y con la obligación de concurrir a él (Regla 49ª), a todos los hermanos que, cumplidos los dieciocho años de edad y con un año de antigüedad al día que se se-ñala, al CABILDO GENERAL ORDINARIO DE CUENTAS que tendrá lugar (D.m.) en la Real Iglesia de S. Antonio Abad el 28 de octubre de 2021, a las 20,00 horas en primera citación y media hora después en segunda y última, dando comienzo con el rezo de las preces impetratorias de la Divina Gracia y con el siguiente:
ORDEN DEL DÍA1º. Lectura y aprobación, si procede, del acta del Cabildo General anterior.2º. Lectura de la Memoria Informativa del Ejercicio de 2020/21.3º. Presentación y aprobación, si procede, de las Cuentas del Ejercicio de
2020/21.4º. Presentación y aprobación, si procede, del Presupuesto Económico para el
Ejercicio de 2021/22.5º. Informe del Sr. Hermano Mayor.6º. Ruegos y preguntas.
Se finalizará con el rezo de un Padrenuestro por el alma de nuestros hermanos di-funtos.
Y para que sirva de citación a Vuesas Mercedes, expido, firmo y sello la presente, con el Visto Bueno del Sr. Hermano Mayor, en la Ciudad de Sevilla, a seis días del mes de septiembre del año dos mil veintiuno de Nuestro Señor.
Para dar cumplimiento a la Regla 151ª, durante la semana anterior al Cabildo Gene-ral de Cuentas, los Sres. Mayordomos pondrán a disposición de todos los hermanos los datos contables del ejercicio últimamente cerrado.
(Está el sello de la Archicofradía)
VºBºSr. Hermano Mayor
Fdo. y Rbcdo. Eduardo del Rey TiradoSr. Secretario
Joaquín R. Hernández Sánchez
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La Primitiva Hermandad de los Nazarenos de SevillaArchicofradía Pontificia y Real de
Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santa Cruz en Jerusalén y María Santísima de la Concepción
Fundada en 1340, establecida canónicamente en la Real Iglesia de San Antonio Abad en su capilla de Jesús Nazareno desde 1579, en la collación del Apóstol San Andrés de la ciudad de Sevilla, incorporada para el goce de sus gracias y privilegios a las Órdenes y Familias Religiosas de los Capuchinos, Cartujos, Clérigos Menores, Compañía de Jesús, Franciscanos, Trapenses, Hospitalarios de San Juan de Dios, Congregación Prima-Primaria de la Anunciación, de Roma, y a la de los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, y agregada a las Basílicas de la Santa Cruz en Jerusalén, San Juan de Letrán y Santa María la Mayor de Roma, y a las de San Salvador y la del Santo Sepulcro de Jerusalén, celebrará:
SOLEMNE TRIDUOEN HONOR, GLORIA Y VENERACIÓN A LA
SANTA CRUZ EN JERUSALÉNDurante los días 23, 24 y 25 de septiembre de 2021,
dando comienzo a las 20:00 horas con el siguiente ordenEJERCICIO DEL TRIDUO, BENDICIÓN EUCARÍSTICA, RESERVA DE SU DIVINA MAJESTAD
Y SANTA MISA,
Siendo el Orador Sagrado
N.H. el Rvdo. P. José Antonio Lamarca(Misionero Hijo del Inmaculado Corazón de María)
Párroco de la Parroquia de San Antonio María Claret, de Sevilla
El domingo 26 de septiembre, celebrará esta Primitiva Hermandad, a las 12 de la mañana, tras la bendición del pan, su
FIESTA PRINCIPAL DE INSTITUTOen la que ocupará la Sagrada Cátedra el mismo orador sagrado.
Al ofertorio de la Santa Misa, la Archicofradía hará pública Protestación de Fe y renovará el Voto de Sangre en defensa de la Inmaculada
Concepción de la Santísima Virgen Maríaverdad que esta Primitiva Hermandad de los Nazarenos ha creído, proclamado y defendido, desde el 29 de septiembre de 1615, así
como Defender el Derecho a la Vida, de conformidad a lo aprobado por el Cabildo General de 23 de Mayo de 2009.
A la terminación de la Santa Misa se cantarán las Letanías Lauretanas en honor y gloria de la CONCEPCIÓN INMACULADA DE MARÍA, mientras se da a la pública veneración de los fieles la SAGRADA RELIQUIA DEL SANTO LIGNUM CRUCIS, que la Hermandad custodia con su correspondiente auténtica, y venera como
preciadísima joya.
A.M.D.G. et B.M.V. SEVILLA 2021
Que la actual Junta de Gobierno presenta al Cabildo General Ordinario de Cuentas de la Pri-mitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla, Archicofradía Pontificia y Real de N. P. Jesús Na-zareno, Sta. Cruz en Jerusalén y María Santísima de la Concepción.
Tal como prescriben nuestras Reglas y en cumpli-miento de la centésima octogésima cuarta (nº 184), la Secretaría de la Hermandad, en colaboración con la Junta de Gobierno, ha elaborado para su presen-tación y lectura en este Cabildo General Ordinario de Cuentas, en el día de hoy, 29 de octubre de 2020 (ahora 10 de junio de 2021, previa aprobación por el de Señores Oficiales, del pasado día 14 de octubre de 2020, la memoria informativa de la Archicofradía desde el 1 de octubre 2019 hasta el 30 de septiembre de 2020.
1.- CULTOS DE REGLAS
• El miércoles 24 de octubre, festividad litúrgica de San Antonio María Claret, celebró la Archicofra-día Solemne Misa en honor de nuestro Hermano Santo por el Rvdo. Padre Claretiano D. José Luis González Izquierdo CMF.
• El día 2 de noviembre, Conmemoración de los Fieles Difuntos, se ofició Santa Misa de Réquiem por todos NN. HH. Difuntos de la Hermandad, y especialmente por los fallecidos durante el últi-mo ejercicio por el Rvdo. Padre D. José Laguna Pbro Capellán Castrense.
• Los días 5, 6 y 7 de diciembre de 2019 tuvo lugar el Solemne Triduo Glorioso en Honor, Gloria y Veneración de su amadísima titular la Santísi-ma Virgen María en el misterio de su Inmacula-da Concepción, ocupando la sagrada cátedra el Muy Iltre. Sr. D. José Luis de la Mata Calvo, Pbro. Canónigo Archivero y Bibliotecario de la S.M.P.I. Catedral de Sevilla y Vicario parroquial del Sa-grario El día 8 de diciembre, festividad de la Pura y Limpia Concepción de Santa María, Patrona de España, la Archicofradía celebró Solemne
Función, ocupando la sagrada cátedra Nuestro Hermano Rvdo. P. D. Juan José Gutiérrez Galeote, SDB. Director de la Casa Salesiana de Ntra. Sra. del Carmen, de Utrera (Sevilla). A la finalización de la Santa Misa, se dio a la pública veneración de hermanos y fieles, la sagrada reliquia del hilo del velo de la Santísima Virgen, que la Herman-dad custodia con su correspondiente auténtica, y venera como preciadísima joya. Lamentable-mente Nuestro Hermano fallecería a los pocos meses tras una grave enfermedad. Conste en esta Memoria el sentimiento de pesar de la Junta de Gobierno y de toda la Archicofradía.
• El día 27 de diciembre de 2019, Festividad de San Juan Evangelista patrón de la juventud, se celebró Santa Misa, oficiada por el Rvdo. Padre D. Gonzalo Salvador Fernández Copete, Párroco de Sta. María de la Asunción de Guadalcanal y de Sta. María de las Nieves de Alanís. El aparta-do musical este año estuvo a cargo de la Escola-nía Cristo de las Penas de la Hermandad de la Estrella.
• El día 17 de enero de 2020, con motivo de la fes-tividad litúrgica de San Antonio Abad se ofició Solemne Eucaristía, oficiando el Rvdo. Padre D. Manuel Moreno Rodríguez Pbro.
• Los días 28, 29, 30 y 31 de enero y 1 de febrero de 2020 esta Archicofradía celebró Solemne Quina-rio a Ntro. Padre Jesús Nazareno, ocupando la sagrada cátedra el Rvdo. Padre Fray Francisco Jaén Toscano, Carmelita Descalzo del Convento del Santo Ángel de Sevilla. El domingo día 2 de febrero se celebró Solemne Función a cargo del Rvdo. Padre D. Leonardo Sánchez Acevedo S.D.B Adjunto de la Delegación Diocesana de Pastoral de Juventud y adscrito a la Parroquia del Espíritu Santo de Mairena del Aljarafe.
• Los días 1, 2 y 3 de abril se consagró Solemne Tri-duo Doloroso a María Stma. de la Concepción. Junto al Acto Comunitario de Reconciliación fue-ron los primeros cultos de Reglas afectados por la
La Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla,Archicofradía Pontificia y Real de
Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santa Cruz en Jerusalény María Santísima de la ConcepciónMEMORIA DEL EJERCICIO 2019-2020
declaración del estado de alarma del 14 de marzo a causa de la pandemia por Covid-19. Por ello, se tuvo que oficiar con las limitaciones impuestas por el Gobierno de la nación y la Archidiócesis de Sevilla. El Triduo cuyo orden fue; rezo del Ejer-cicio del Triduo, lectura del Evangelio del día y reflexión para finalizar con el canto de la salve, estuvo a cargo del Director Espiritual de la Archi-cofradía, nuestro hermano Rvdo. Padre D. Adrián Ríos Bailón Pbro,. Emitiéndose los tres días a tra-vés del Canal de You Tube de la Hermandad. El Domingo de Pascua de Resurrección, día 12 de abril, esta Primitiva Hermandad no puedo cele-brar la Solemne Misa del Azahar, emitiéndose la lectura del Evangelio del día y una reflexión a cargo del Director espiritual.
• Los días 8, 9 y 10 de junio esta Archicofradía con-sagró Solemne Triduo Eucarístico, ya de nuevo presencialmente, ocupando la sagrada cátedra el Rvdo. Sr. D. Andrés Pablo Guija Rodríguez, Pbro, Delegado Diocesano de la Pastoral Universitaria, Rector de la Capilla de la Universidad y Director Espiritual de la Hermandad de Los Estudiantes.
• Los días 24, 25 y 26 de septiembre se dedicó So-lemne Triduo a la Sta. Cruz en Jerusalén, ocupan-do la sagrada cátedra Nuestro Hermano el Muy Ilustre Sr. D. Adrián Río Bailón Canónigo de la S.M. Iglesia Catedral de Sevilla, Párroco de San Juan Pablo II y Director espiritual de esta Archico-fradía. El domingo día 27 de septiembre, a las 12 de la mañana y ocupando la Sagrada Cátedra el Excmo. y Rvdo. D. Juan José Asenjo Pelegrina Ar-zobispo de Sevilla, tras la tradicional bendición del pan, celebró su Fiesta Principal de Instituto. Al ofertorio de la Santa Misa, la Archicofradía hizo pública Protestación de Fe y renovó el Voto de Sangre en defensa de la Inmaculada Con-cepción de la Santísima Virgen María, verdad que esta Primitiva Hermandad de los Nazarenos ha creído, proclamado y defendido, desde el 29 de septiembre de 1615. Así como Defender el Derecho a la Vida, de conformidad a lo apro-bado por el Cabildo General de 23 de mayo de 2009. Este año, a efectos de cumplir con las disposiciones establecidas por el Arzobispado para la celebración de cultos, de modo excep-cional, en nombre de toda la Archicofradía, la Protestación de Fe y renovación del Voto de Sangre, así como el Voto de Defender el Dere-cho a la Vida la realizaron el Hermano Mayor, Consiliarios y Director Espiritual. Así mismo, la tradicional pública veneración de los fieles, a la Sagrada Reliquia del Santo Lignum Crucis, que la Hermandad custodia con su correspon-diente auténtica, y venera como preciadísima joya, al terminar la Santa Misa no puedo reali-zarse por los mismos motivos, por lo que se optó por ofrecérsela a todos los fieles en la bendición final. Reseñar también, por decisión de la Jun-
ta de Gobierno, que este año, debido al afora-miento de la Real Iglesia de San Antonio Abad y permitir la asistencia del mayor número de her-manos, no se cursaron las invitaciones, como es tradicional al Consejo General de HH y CC. de Sevilla, a las Hermandades de la Madrugada y feligresía y otras corporaciones con las que se mantienen tradicionales vínculos afectivos de nuestra ciudad, con las que nos disculpamos explicándole los motivos.
2.- OTROS CULTOS DE REGLAS Y CELEBRACIONES LITÚRGICAS.
• Los días 8 y 9 de diciembre de 2019 esta Archico-fradía expuso en devoto y filial Besamanos la Sa-grada Imagen de María Stma. de la Concepción. Como es habitual fueron muchos los fieles que se acercaron a San Antonio Abad para mostrarle su fervor y devoción y poder contemplar nueva-mente el excelente montaje que, en este año, los priostes han dedicado a nuestra Sagrada Titular.
• El día 6 de marzo de 2020 primer viernes del mes, y durante todo el día siguiente, la Archicofradía expuso en devoto y filial Besapiés la Sagrada Imagen de su Dulcísimo Titular, Nuestro Padre Jesús Nazareno, en la Real Iglesia de San Antonio Abad. Besapiés que en su apertura transcurrió con normalidad, hasta que a primera hora de la tarde se publicó un comunicado del Arzobispado que recomendaba evitar “los besos y también el tacto de las sagradas imágenes”, para garantizar la salud de los asistentes. Lo que obligó a tomar la decisión de prohibir desde ese momento el contacto físico de los fieles con la Sagrada Ima-gen. tuvo que suspenderse el acto del Besapié por los hermanos y devotos, no así la veneración que se desarrolló durante el resto del día y todo el día siguiente.
• El día 31 marzo de 2020, en pleno estado de alar-ma, decretado por el Gobierno de la nación que obligaba el confinamiento de toda la población, el Solemne Acto Litúrgico del Sacramento de la Reconciliación tuvo que suspenderse, siendo sustituido por la emisión de una grabación de un acto penitencial, dirigido por nuestro Director Es-piritual.
• Los días 15, 16 y 17 de junio de 2020 La Archicofra-día acogió en nuestra Real Iglesia el tradicional Jubileo Permanente Circular con exposición de Su Divina Majestad, organizándose diversos tur-nos de vela, guardándose siempre el aforamiento de la Real Iglesia y la distancia de seguridad en-tre los fieles.
• Conforme señalan y ordenan nuestra Santas Re-glas se han oficiado las prescritas Misas de Ré-quiem por los NN. HH. Difuntos fallecidos duran-te el ejercicio.
• Todos los viernes de año, se realizó el Ejercicio de las Cinco Llagas en honra, memoria y vene-ración de N. P. Jesús Nazareno, excepto aquellos que coincidían con otros cultos de Reglas. Ade-más, todos los sábados y vísperas de festivida-des de precepto marianas, tras la Eucaristía de las 8 de la tarde, se cantó Salve Solemne a Ma-ría Stma. de la Concepción. Cultos que duran-te todo el tiempo que duró el confinamiento y cierre de la Real Iglesia, se emitieron grabados cada viernes y sábado a través del Canal Oficial de You Tube de la Archicofradía.
Para finalizar y que quede constancia, todos los días del año, salvo durante el periodo de confina-miento, por la tarde quedó expuesto en Ntra. Real Iglesia el Stmo. Sacramento para su adoración. Como la celebración diaria de la Sta. Misa a las 13 y 20 horas y los domingos y festivos también a las 12 horas.
3.-PRIOSTIA
Lógicamente la labor de la Priostía no se ha limi-tado al cumplimiento de las reglas centésima vigési-ma novena (nº129) y centésima trigésima (nº130) en todo lo concerniente a la organización de los cultos señalados más arriba. No obstante, a partir de la declaración del estado de alarma, se ha tenido que realizar un gran esfuerzo para adaptar los cultos, así como, el día a día de la Real Iglesia de San Antonio Abad, Capilla y distintas dependencias de la her-mandad, y por supuesto todas las actividades pro-pias de la priostía, al periodo excepcional en que nos encontramos y las limitaciones impuestas. Periodo, en que las circunstancias debido a una epidemia, ha dificultado o imposibilitado, en ocasiones, realizar lo que indican nuestras Reglas, mantener nuestras costumbres y realizar lo que nos enseñaron nuestros antecesores.
Una vez más, destacar durante este ejercicio a pesar de las excepcionales circunstancias que he-mos y seguimos viviendo, los magníficos altares montados por la priostía en los cultos celebrados en honor de Nuestros Sagrados Titulares.
Comenzamos el ejercicio celebrando todos nues-tros cultos de regla, de forma tradicional, acorde a nuestras costumbres, hasta que llego el Besapié del Señor como ya se ha reseñado.
Los días siguientes al Besapié, las autoridades sanitarias decretaron el Estado de Confinamiento, prohibiéndose el desplazamiento de cualquier per-sona desde sus domicilios a cualquier destino, salvo estricta necesidad.
En esos días, de dudas ante el desarrollo de los acontecimientos, y previo al confinamiento, la prios-tía organizo su labor, para que los Titulares, todos los enseres, nuestro templo, estuvieran de la forma más segura y protegidas posible, ante la incertidum-
bre de desconocer la duración de este confinamien-to, y asumiendo que no habría salida procesional esta Semana Santa del año de 2020.
Sin embargo, la Hermandad, siendo conocedora de las horas difíciles a nivel personal y espiritual, por las que pasaban muchos hermanos y devotos, en es-tas fechas de Cuaresma y Semana Santa, y emplean-do medios alternativos, consiguió celebrar el Triduo Doloroso y el acto piadoso la Madrugada de Viernes Santo, haciendo llegar a sus hermanos, estos cultos, a través de ceremonias, en las que se proclamó el Evangelio del día, seguido de una meditación a car-go del Director Espiritual, y terminaba cada día con el canto de la Salve. Todas grabadas previamente y emitidas por internet, a través del canal YouTube de la Hermandad, en las fechas determinadas.
Finalizado el confinamiento, los siguientes cul-tos, se pudieron realizar de forma ya presencial siendo el primero el Triduo al Santísimo Sacra-mento, en donde la priostía puso especial cariño, ya que era un momento de alegría y esperanza, en donde los hermanos y fieles podían volver a encon-trarse con sus Sagrados Titulares, si bien con las li-mitaciones de aforo, horarios y movilidad vigentes, garantizándose en todo momento la seguridad de los hermanos y fieles, de forma que, se cumplieran con las normas promulgadas por las autoridades sanitarias, y así poder comenzar a celebrar los Mi-sas diarias, y el Ejercicio de las Cinco Llagas, para lo cual se creó un protocolo de actuación y protec-ción, tanto para los sacerdotes y empleados como para los fieles y asistente al templo, con el afora-miento de todas las dependencias, se habilitaron espacios nuevos para cultos, como la Fiesta Princi-pal de Instituto, y se reforzó la limpieza de mobilia-rio y elementos de culto.
Con respecto a la mejora del ámbito patrimonial de la Archicofradía reseñar durante este ejercicio la confección de una nueva tablazón para el paso de palio de María Santísima de la Concepción.
En el apartado de donaciones El Señor estrenó en noviembre de 2019 unas Potencias nuevas, de plata de ley sobredorada, donada por una familia perte-neciente a la Hermandad. Estas Potencias fueron diseñadas a semejanzas de unas antiguas del Señor, y de las cuales la Hermandad solo conservaba una.
4.- ESTACIÓN DE PENITENCIA. DIPUTADO MAYOR DE GOBIERNO.
A raíz de la declaración de estado de alarma, según RD del 14 de marzo y la declaración conjunta del Alcalde, Arzobispo y el presidente del Consejo de Hermandades y Cofradía de Sevilla declarando la “suspensión de los desfiles procesionales” no se pudo efectuar su anual Estación de Penitencia a la Santa Iglesia Catedral en la madrugada del viernes Santo, día 10 de abril de 2020, para adorar en ella al Stmo. Sacramento Eucarístico.
A partir de ese momento, todos los pasos que desde tiempos inmemoriales se realizan para cum-plir con el fin primordial que marcan las Reglas se paralizaron y ya solo quedaron en la memoria de cada uno de los hermanos y hermanas de la Archi-cofradía: el cabildo de diputados canastillas y Jun-ta de disciplina; los días de reparto de la papeleta de sitio, momento de encuentro de muchos herma-nos con su Hermandad; ensayos de costaleros; los montajes de los pasos de nuestros Sagrados Titu-lares; la cita anual en la mañana del Jueves Santo en el Atrio de San Antonio Abad; revestir el hábito nazareno y, tras postrarnos ante nuestros Sagrados Titulares esperar en el atrio el fervorín del Herma-no Mayor y la lectura de la cofradía para responder una vez más “está”.
5.- CENSORES
Los Censores han tenido como día específico de atención a los hermanos y al público en general to-dos los lunes del año, en horario de 19:30 a 21:00, con la excepción de los días de Navidad y Cuares-ma y los meses de verano, a los que hay que añadir todo el periodo del estado de alarma. No obstante, destacar que por parte de los Censores durante todo este periodo se ha mantenido el contacto con todas aquellas personas interesándose pertenecer a la Ar-chicofradía, u otros asuntos, a través del correo elec-trónico o por vía telefónica.
Durante este ejercicio, las solicitudes entregadas han sido 89, recogiéndose 63 de estas.
En la línea de lo que viene siendo tradicional en la Hermandad y conforme a lo establecido en las Re-glas, se ha organizado un ciclo específico de forma-ción para los aspirantes a pertenecer a la Archicofra-día. Ciclo de formación que, a desarrollarse durante los primeros meses del ejercicio, no se vio afectado por los efectos de la pandemia Se ha seguido el mis-mo modelo implantado en cursos pasados: un ciclo de cinco charlas, con la siguiente estructura temáti-ca: Jesucristo, Iglesia, Sacramentos y Hermandad. A este último punto se dedican las dos últimas sesio-nes en las que han intervenido, además de uno de los Censores, el Director Espiritual, el Hermano Ma-yor y el Diputado Mayor de Gobierno. La impartición de las tres primeras charlas ha corrido por cuenta de un equipo de hermanos comprometidos con esta ini-ciativa formativa dirigida a quienes desean ingresar en la nómina de la Hermandad.
En concreto, se ha realizado un ciclo completo de cinco charlas los lunes; 16 de septiembre, 7 de oc-tubre, 4 y 25 de noviembre de 2019 y 20 de enero de 2020. También de forma extraordinaria, para aspi-rantes que viven lejos de Sevilla capital o con dificul-tades acreditadas para asistir al ciclo en las fechas previstas, se realizó de forma sintética una sesión en la mañana del sábado 14 de diciembre de 2019. (de 10:00 a 14:00 horas).
Durante este ejercicio y conforme prescriben las Reglas se ha propuesto al Cabildo de Sres. Oficiales la incorporación a la Archicofradía de 86 aspirantes mayores de catorce años, y 31 menores de edad.
Dado el número de aspirantes que se han incor-porado a la Archicofradía durante este ejercicio, se realizaron dos Juras de Hermanos en nuestra Real Iglesia, los viernes 7 y 14 de febrero de 2020. Tam-bién tuvo lugar la Jura que todos los años se realiza de los hermanos que, perteneciendo a la Archicofra-día, cumplen catorce años antes de la estación de penitencia. Dicha jura, en esta ocasión y por motivo de darle la relevancia que tiene este acto, y que no se vea afectado por otros actos que tienen lugar el sá-bado de Pasión, se trasladó al sábado 15 de febrero.
6.- MAYORDOMÍA.
Como prescriben las reglas, centésima vigésima primera y centésima vigésima segunda (nº 121 y 122) al inicio del presente ejercicio la Mayordomía giró la inspección técnica de incidencias a todas nuestras dependencias sin ninguna importante de mención ni urgencia. No obstante, constituye una de las me-tas más importantes de la actual Junta de Gobierno el mantenimiento y la conservación de los edificios y los diversos enseres artísticos, procesionales y de culto de la Hermandad y en la medida de lo posible incrementar y mejorar este notable legado material con nuevas aportaciones, restauraciones y reformas de nuestro valioso patrimonio. Sin duda guiados por esta noble finalidad y con el mayor respeto debido a nuestras tradiciones, manteniendo siempre el esti-lo singular y propio de la Archicofradía, durante el ejercicio de esta memoria, la Mayordomía, contando con el respaldo de la actual Junta de Gobierno y de todos los hermanos, ha hecho posible las realizacio-nes siguientes que brevemente se anotan:
En primer lugar, con motivo de la exposición “Montañés, maestro de maestros” organizada por el Museo de Bellas Artes de Sevilla con motivo del 450 aniversario del nacimiento del imaginero, se cedie-ron las imágenes de la Virgen María y San José obras de tan insigne imaginero.
La aplicación del Real Decreto del Gobierno de la nación de la subida del salario mínimo profesional al personal de la Hermandad.
Nuevamente, la presentación durante este ejer-cicio ante la Agencia Tributaria del modelo 182, de modo que este año, aquellos hermanos que lo han deseado han podido desgravarse la cuota anual en la declaración de la renta.
La restauración de la corona de salida de María Santísima de la Concepción.
Ante la suspensión de la Estación de Penitencia, a efecto que aquellos hermanos y hermanas que lo deseasen, pudieran hacer entrega del Sobre de Ca-ridad, como cada Madrugada se creó en la web una Urna Virtual.
En cuanto a obras, reparaciones y trabajos de mantenimiento en las dependencias de la Herman-dad, a los trabajos de pintura, limpieza de puertas del templo, revisión de aires acondicionados etc, re-señar los trabajos de adaptación de los cuartos de aseo de la planta baja de la hermandad para el uso de hermanos y hermanas y la limpieza (retirada de escombros) de toda la bóveda de la Real Iglesia.
7.- SECRETARIA
CENSO
A 30 de septiembre de 2020 la nómina de la Ar-chicofradía está integrada por 3825 hermanos. Así como por 24 hermanos honorarios. Las altas han sido 118 y las bajas 34
BOLETINES
Durante este ejercicio las publicaciones de la Ar-chicofradía han comprendido tres boletines. Los co-rrespondientes al Triduo Glorioso a María Santísima de la Concepción (nº 151) con motivo de la festividad de la Inmaculada Concepción, en diciembre de 2018, el de Cuaresma 2019 (nº 152) y el Boletín editado con motivo de la festividad de la Santa Cruz, en septiembre (nº 153)
Y dos hojas informativas. La primera en el mes de enero con motivo de la celebración del Quinario a Nuestro Padre Jesús Nazareno y la segunda en el mes de junio correspondiente al Triduo Eucarístico, distribuida de forma digital.
Debido a la suspensión de la Estación de Peni-tencia, con la intención que los hermanos se sintie-ran cerca de la Hermandad, durante los días de la Semana Santa se editó en formato digital un Boletín Extraordinario que se distribuyó a través de los ca-nales de información de la Archicofradía.
Quede aquí también recogida en esta memoria el agradecimiento a todos cuantos han colaborado con sus textos y fotografías, a la composición de los boletines y hojas informativas, esperando que en el futuro sea ésta aún más intensa y generalizada a todos los hermanos.
LIBROS OFICIALES, ARCHIVO Y MEDIOS DE COMUNICACIÓN.
Se han mantenido al día los libros oficiales de la Archicofradía, especialmente numeroso el de entra-das y salidas de correspondencia, así como la base de datos de hermanos.
La excepcional situación de pandemia mundial también ha repercutido en el funcionamiento del archivo de nuestra Hermandad. No obstante, hasta el pasado mes de marzo se atendieron todas aque-llas peticiones de consultas presenciales que se reci-bieron, procurándose satisfacer durante la etapa de confinamiento la mayor parte de los requerimientos remitidos al correo electrónico de la Archicofradía.
Por último, hay que concluir que, durante el periodo estival, se aprovechó para desarrollar las tareas de mantenimiento y actualización que todo archivo corporativo necesita con el fin de preservar sus fondos en óptimas condiciones de conservación.
También, se ha continuado la entrega de nuevos fondos fotográficos relacionados con la Archicofra-día, procedentes de colecciones y fotografías de her-manos y particulares.
Respecto a los medios de comunicación, al in-cremento del número de hermanos y de personas en general, de conocer los cultos y actos de la Herman-dad, a través de la aplicación de listas de difusión de Whatsaap, destacar al notable aumento de sus-criptores del Canal de You Tube somos más de 1560, el papel desarrollado durante el estado de alarma, con la emisión de los cultos de cuaresma y Semana Santa.
Para finalizar, al igual que el grupo de Whatsaap, el número de seguidores en Twitter, sigue creciendo con más de 14.700 seguidores en la actualidad.
CABILDOS
En cuanto a los cabildos que prescriben las Re-glas, se han celebrado los siguientes cabildos:
3 Cabildos Generales Ordinarios: el de Cuentas y Elecciones el día 25 de octubre de 2019 y el de Salida e Iniciativas el día 8 de marzo de 2020.
10 Cabildos Ordinarios de la Junta de Gobierno y dos extraordinarios; el primero el martes 12 de no-viembre de 2019 de toma de posesión de la nueva Junta de Gobierno y el segundo, el 12 de marzo de 2020 para analizar y medidas a tomar respecto a los próximos culto y actos ante la evolución de la pan-demia.
Como singularidad reseñar que este ejercicio de-bido a las restricciones a la movilidad y horarios seis Cabildos de Oficiales se celebraron a través de video-conferencia y los cuatro restantes a efectos de man-tener las distancias de seguridad se celebraron en la real Iglesia y adelantando la hora de celebración.
El Cabildo de Diputados Canastilla convocado para el 12 de marzo fue suspendido por el Cabildo Extraordinario de la Junta de Gobierno anteriormen-te citado. Ante la suspensión de la Estación de Peni-tencia la Junta de Disciplina no se celebró.
8.- FORMACIÓN Y NOCHES NAZARENAS
Junto con los Cultos y la Caridad, la Formación es otro de los pilares básicos de la vida de Hermandad.
El curso se inició con la tercera edición del ciclo for-mativo “VIERNES CON JESÚS NAZARENO”, que ver-só sobre “Introducción al Nuevo Testamento”, de la mano del Rvdo. P. Fray Alfonso García Araya, O.F.M.,
Profesor de Sagrada Escritura en el Centro de Estu-dios Teológicos de Sevilla.
La primera sesión, bajo el título “Importancia de la Palabra de Dios en la vida del creyente”, supuso una introducción general a la temática del ciclo.
En la segunda sesión, el viernes 8 de noviembre, nos adentramos en el mundo religioso judío en el que se desenvolvió Jesús y sus discípulos, con sus prescripciones, fiestas y tradiciones,
Y en la última sesión del ciclo, el 22 de noviem-bre, nos adentraría en el contexto histórico en que se desarrolló el Nuevo Testamento en el pueblo judío del siglo I, que nos relata la vida terrenal de Jesús Nazareno, desde su Encarnación hasta la Ascensión, así como el nacimiento
Las tres sesiones fueron muy participativas por parte de los hermanos, registrándose una buena asistencia de los mismos. Al término de todas ellas, nos reunimos en unas pequeñas convivencias frater-nales en nuestras dependencias.
Siguiendo con la iniciativa de realizar Conviven-cias formativas en distintas Hermandades filiales para conocer su historia, patrimonio y devoción na-zarena, el sábado 18 de enero de 2020 la celebramos en la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Utrera (Sevilla).
La jornada se desarrolló en la capilla de San Bartolomé, sede canónica de la hermandad, donde realizamos una ofrenda floral a los sagrados titu-lares de la corporación anfitriona, Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de las Angustias. Posteriormente tuvimos una ponencia sobre la tra-yectoria histórica y devocional de esta corporación nazarena, a lo que siguió, con carácter excepcional la subida de los presentes al camarín del retablo de Nuestro Padre Jesús Nazareno para venerar a la sa-grada imagen.
Con posterioridad compartimos todos los cofra-des nazarenos un excelente almuerzo finalizando con el tradicional intercambio de recuerdos de la visita.
Por último, concluimos la jornada con la visita al Santuario de Nuestra Señora de Consolación, Patro-na de Utrera, donde realizamos una ofrenda floral a la Santísima Virgen.
El sábado 22 de febrero, y organizado conjunta-mente por las Diputaciones de Caridad, Formación y Juventud de la Archicofradía, tuvo lugar una visita al hospital de la Santa Caridad que congregó a un nu-trido grupo de hermanos encabezados por nuestro Hermano Mayor.
Las tradicionales Noches Nazarenas, que celebra la Archicofradía los viernes de Cuaresma como citas de acercamiento a lo mejor de nuestra historia y es-piritualidad cofrade, fueron preparadas en tiempo
y forma por esta Diputación, conforme al siguiente programa: viernes 13 de marzo, conferencia sobre “Retablos cerámicos y azulejos en la Hermandad del Silencio”, a cargo de D. Martín Carlos Palomo García, experto en cerámica cofradiera; y viernes 27 de mar-zo, disertación sobre “El Silencio en el tiempo de los ruidos”, a cargo de N. H. D. José Joaquín León Mor-gado, periodista, consejero editorial del Grupo Joly.
Sin embargo, la suspensión de todas las activi-dades corporativas el jueves 12 de marzo por la evo-lución de la pandemia del coronavirus, que llevó a la declaración del estado de alarma el sábado 14, motivó la no celebración de ninguna de ellas y las actividades programadas por esta diputación duran-te el resto del ejercicio.
9.- JUVENTUD NAZARENA Y CONCEPCIONISTA
Un año más la Juventud Nazarena ha estado ac-tiva y colaborando con las diversas iniciativas que la Hermandad y sus diputaciones han venido realizan-do a lo largo del ejercicio, y especialmente por medio de las diversas actividades organizadas por la propia Diputación de Juventud.
El sábado 21 de diciembre: la Casa Hermandad se llenó con los hermanos más pequeños, con motivo de la convivencia de Navidad, que contó con la pre-sencia del Cartero Real, al cual le pudieron entregar sus cartas a los Reyes Magos.
El viernes 27 de diciembre, se celebró la Eucaris-tía en honor de San Juan Evangelista, ya reseñada.
El primer viernes de marzo, con motivo del Be-sapiés a Jesús Nazareno, tuvo lugar un año más la Vigilia de Oración ante la Imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Posteriormente tuvo lugar la tradi-cional Convivencia de Cuaresma.
Para finalizar, el segundo día del Besapiés a Je-sús Nazareno, el sábado 7 de marzo tuvo lugar la convivencia infantil “Un día en la Hermandad” en la que los más pequeños conocieron de primera mano las tareas que se realizan esos días de cara a la inmi-nente Estación de Penitencia, así como los diferen-tes sitios y distribución de la cofradía.
10.- CARIDAD
El titulo segundo de nuestros estatutos, en su re-gla 5ª, punto tercero, establece como fin primordial de nuestra Archicofradía el ejercicio de la caridad por medio de obras asistenciales dirigiéndolas co-munitariamente, y haciendo llegar sus beneficios a los hermanos necesitados en particular, y a todo el prójimo que lo precise en general. Por este moti-vo y aún más en los tiempos actuales la Caridad ha continuado desempeñado durante este ejercicio un destacado papel.
Un ejercicio que será recordado de una manera singular en la memoria de todos cuantos lo vivimos y, de igual manera, quedará marcado en los anales de
nuestra Archicofradía como aquel en que sufrimos el inicio de la pandemia provocada por el Covid-19.
A la declaración del estado de alarma en nues-tro país el pasado 14 de marzo -que provocó el con-finamiento total de toda la población durante dos meses- unida a la crisis sanitaria provocada por la pandemia, se le ha unido una crisis económica cu-yas consecuencias son aún impredecibles pero cu-yos efectos más inmediatos se han hecho patentes en las personas más vulnerables.
Así pues, el ejercicio de la caridad que se recoge entre los fines primordiales de nuestra Archicofra-día, se ha ejecutado por medio de obras asistencia-les dedicadas de un modo particular a los hermanos y, de un modo general, al prójimo con necesidades. Durante el primer trimestre del ejercicio las acti-vidades programadas se pudieron desarrollar con normalidad y con la acostumbrada participación de hermanos y hermanas que forman parte del equipo de esta diputación; así participamos en la campaña de recogida de alimentos organizada por el Banco de Alimentos durante el primer fin de semana del mes de diciembre con motivo de la campaña de Navidad. De igual forma, tuvo lugar la instalación y exposi-ción en nuestra casa de hermandad del Belén reali-zado en corcho por los usuarios de la Asociación Au-tismo Sevilla, así como la organización y celebración -junto con la Diputación de Juventud- de la visita del Cartero Real a la Archicofradía, jornada en la que los niños del Hogar de Nazaret hicieron entrega de sus cartas dirigidas a SS.MM los Reyes Magos y que la diputación hizo realidad.
Pero la declaración del estado de alarma provo-có la suspensión repentina del resto de actos que estaban programados para el ejercicio, como las cuestaciones que diversas entidades organizan en nuestra ciudad y que cuentan con la participación anual de los miembros del grupo de caridad o los ac-tos previstos para la Cuaresma, VII Convivencia en el atrio de nuestra iglesia; el reparto de las papeletas destinadas a labores de caridad; la celebración de la merienda que, una vez al mes, se comparte con los mayores acogidos en el Hospital de la Santa Caridad. Y, al mismo tiempo, la situación provocaba el cierre de nuestra Casa Hermandad. En tales circunstan-cias, desde ese momento, se hizo necesaria prestar la atención a los hermanos, fieles y devotos en gene-ral, a través del uso de la tecnología de la informa-ción y comunicación (TIC), habilitándose a tal efecto una dirección de correo electrónico específica para tal menester [email protected].
A pesar de los inconvenientes derivados de la si-tuación comentada, se ha continuado con la realiza-ción de las actividades asistenciales. Fundamental es, sin duda, la que se mantiene con la Fundación Casco Antiguo que gestiona el economato de las hermandades de dicho entorno donde familias con escasos recursos pueden adquirir los productos bá-
sicos para sus necesidades más elementales - con la ayuda de los carnets que sufragan dichas herman-dades – y que, en este período, además, ha visto in-crementar su demandada de manera progresiva.
A continuación, se detallan sucintamente las ac-tividades desarrolladas en el ejercicio 2019/2020, las cuales han supuesto es destino de un total de 33.256 €:
• Se han sufragado 158 carnets del Economato de la Fundación Casco-Antiguo destinados al abasteci-miento de familias necesitadas. De igual forma, se sufraga mensualmente con el abastecimiento a un convento de clausura de la ciudad.
• Se han concedido ayudas económicas de forma directa para cubrir diferentes necesidades: vi-vienda habitual; suministros básicos; enseres de primera necesidad; estudios básicos.
• Colaboración con diversas entidades para la cele-bración de la Navidad y Reyes Magos
• Atención inmediata para cubrir necesidades bá-sicas realizadas por el Centro Al Alba
• Colaboraciones económicas: con la bolsa de cari-dad de la Hermandad del Santísimo Sacramento, Ntra. Sra. De la Candelaria Madre de Dios (Barria-da de Los Pajaritos); PARROQUIA JESUS OBRE-RO (Polígono Sur); PARROQUIA SANTA TERESA (Los Pajaritos); HOGAR DE NAZARET; CENTRO CLARÁ; ASOCIACIÓN AUTISMO SEVILLA; PRO-YECTO HOMBRE SEVILLA; FUNDACIÓN SAN PE-LAYO; ASOCIACIÓN REDMADRE SEVILLA; HER-MANDAD DE LA SANTA CARIDAD; ASOCIACIÓN ESPAÑOLA CONTRA EL CANCER.
Recogida de alimentos y productos higiene en la sala de recuerdos del atrio que han ha supuesto la entrega de 14 cajas a la Asociación RedMadre Sevi-lla y al comedor de San Juan de Dios, sito en calle Misericordia.
11.- REPRESENTACIONES CORPORATIVAS Y HERMANDADES.
La correcta proyección corporativa exterior de la Archicofradía en la ciudad de Sevilla, ha estado siempre muy advertida por la nueva Junta de Gobier-no desde la toma de posesión. En este sentido, sería prolijo reseñar en la síntesis de esta memoria, todas las asistencias corporativas de que el Sr. Hermano Mayor, los Sres. Consiliarios, y los Sres. Oficiales de la Junta, han acudido en nombre de esta Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla, si bien en este ejercicio especial 2019-2020 con un protagonista que nunca nos podríamos haber imaginado.
Comenzó el ejercicio con el Cabildo General de Elecciones donde fue elegida la nueva Junta de Go-bierno para el trienio 2019-2022.
A partir de la toma de posesión y como quizás el hecho más importante, después de muchos años de
empeño y gestiones, el 13 de marzo la Junta de Go-bierno Local del Ayuntamiento de Sevilla aprobó la cesión a la Archicofradía del edificio, que fuera sede del área de cultura para el desarrollo del proyec-to presentado por la Hermandad, y que había sido previamente aprobado como de utilidad pública en diciembre de 2019. Tras la paralización de todos los procesos administrativo por la declaración del esta-do de alarma el 17 de junio se formalizó la cesión, comenzándose a trabajar en el desarrollo de las tres líneas de actuación y el proyecto para la consiguien-te adecuación de espacios.
En otro orden de cosas, al comienzo de año y en relación con la organización de La Madrugada, nue-vamente se iniciaron las reuniones y contactos de los Hermanos Mayores junto al Delegado del Día, para dar una solución definitiva a la jornada. Se mantu-vieron dos reuniones de trabajo sin que se llegara a un acuerdo, cuando se declaró el estado de alarma y se suspendieron las Estaciones de Penitencia.
Respecto a la presencia corporativa de la Archi-cofradía en la Funciones Principales o Cultos desta-cados de todas y cada una de las Hermandades de la Madrugada, de la collación de San Andrés após-tol y aquellas otras con las que se mantienen lazos históricos fraternales como de La Buena Muerte (Los Estudiantes) y la Archicofradía del Inmaculado Corazón de María (Claret), estuvimos presentes en aquellas cuya Funciones Principales y Cultos desta-cados se celebraron antes de la declaración del esta-do de alarma.
Las tradicionales reuniones del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla (los plenos de Hermandades de penitencia y asambleas genera-les), y el Cabildo de Toma de Horas fueron suspendi-das. No así el Vía Crucis de la Pía Unión en la Casa de Pilatos, que pudo celebrarse, como la asamblea ex-traordinaria de Hermanos Mayores convocada por el Consejo de Hermandades el 26 de mayo, para tratar la devolución del importe de los abonos de palcos y sillas.
Solo pudimos recibir en nuestra Real Iglesia el tradicional Vía Crucis de la Hermandad del Santo Entierro la tarde del 8 de marzo.
Siguiendo el orden establecido, este 2020 nos co-rrespondió celebrar la convivencia de Cuaresma de las Hermandades de La Madrugada, que tuvo lugar el martes 21 de enero, con la celebración de la Santa Misa a cargo del Rvdo. Padre D. Ignacio Jiménez Sán-chez Dalp para después tener un rato de convivencia en el atrio de San Antonio Abad.
Para finalizar, dejar constancia en esta memo-ria que en el mes de febrero el Excmo. Rvdmo. Sr. Arzobispo de Sevilla nombró a N.H. Rvdo. Padre D. Adrián Ríos Bailón nuevo Director Espiritual de la Archicofradía, tras la renuncia presentada por N.H. Rvdo. Padre D. José Antonio Parrilla Sarmiento, que durante los últimos catorce años ha venido desem-
peñando este cargo con generosa dedicación y servi-cio a la Hermandad.
Respecto a las Hermandades Filiales y Agrega-das, lamentablemente tras ejercicios anteriores con la presencia de la Archicofradía en las Funciones So-lemnes de varias Hermandades Filiales y Agregadas, y recibir las visitas de estas a San Antonio Abad, los efectos tan temprano de la pandemia han impedido que durante este ejercicio hayamos podido seguir in-crementando nuestras relaciones.
12.- EPÍLOGO Y CODA
Con la lectura de la memoria de este ejercicio de 2019-2020 cumple la actual Junta de Gobierno casi su primer año de mandato al frente de la Archicofra-día, por lo que esta memoria es la primera que esta Junta de Gobierno presenta a la consideración de sus hermanos; por lo que el Cabildo de Sres. Oficiales, presidido por su Hermano Mayor, NHD. Eduardo del Rey Tirado, quiere agradecer vivamente y en primer lugar la Providencia que, en todo momento, nues-tros Sagrados Titulares se han dignado concedernos durante este primer ejercicio. Ejercicio muy difícil, interrumpido a partir de la Cuaresma, debido a la ac-tual pandemia que sufre el mundo, que ha impedido desarrollar algunos de los proyectos que se planteó al comienzo de este ejercicio. Y, en segundo lugar, desea expresar la satisfacción de haber contado siempre con la ejemplar colaboración, disposición y comprensión de los hermanos y hermanas de esta Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla.
Por último, implorar a N. P. Jesús Nazareno, siempre por la mediación universal de Su Inmacu-lada y Bendita Madre, para que siga amparando y protegiendo a esta Su Archicofradía de la Santa Cruz en Jerusalén, y asimismo a todos sus hermanos y hermanas, máximo en estos tiempos, en la confian-za cierta de que las distintas actuaciones materiales, reformas, actos y cultos reseñados en esta memoria y los que en un futuro inmediato se puedan acome-ter por los primitivos nazarenos concepcionistas de Sevilla hayan servido únicamente a la mayor gloria de Nuestro Padre Jesús Nazareno y de María Stma. de la Concepción.
En la ciudad de Sevilla a treinta días del mes de septiembre del año de Señor de dos mil veinte
La Secretaria de la Hermandad.
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Firma de convenio con las Hermanas Oblatas
La Congregación Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor nació en España el 2 de febrero de 1870. Los fundadores,
Antonia Mª de Oviedo (de padre sevillano) y José Mª Benito Serra, tras descubrir la rea-lidad de la mujer que ejercía la prostitución contra su voluntad, y su exclusión social, abrieron las puertas a la igualdad y a la jus-ticia, ofreciendo espacios de acogida, cuida-do, formación y promoción para el empleo.
Desde entonces hasta hoy, el objetivo principal de esta Congregación es favo-recer la autonomía, la inclusión social e independencia de la mujer en contexto de desigualdad social y explotación, junto a la denuncia de situaciones injustas y la defensa de los derechos de la mujer.
Actualmente la Congregación de Her-manas Oblatas del Stmo. Redentor se halla presente en 15 países de Europa, América, Asia y África, respondiendo a las urgencias y desafíos que demanda la si-tuación de la mujer, a través de diferentes Proyectos, siendo dos de ellos el Centro de Día Al alba y el Recurso Residencial Obla-tas Híspalis, ubicados ambos en Sevilla y a los que esta Hermandad ayuda.
Fue en el año 1961, cuando la Congre-gación se hizo presente en esta ciudad hispalense. La primera comunidad de re-ligiosas, llegaron a la capital el 25 de no-viembre del mencionado año, un día se-ñalado para la ciudad, dado que el cauce del río Tamarguillo se había desbordado, a consecuencia de los 300 litros de agua por metro cuadrado, que cayeron en un corto espacio de tiempo.
A pesar de ello, las hermanas oblatas abrieron las puertas de su primera casa en la calle Manuel Siurot y posteriormente en Marqués de Nervión. Desde esa fecha has-ta 1987, la Congregación acogió y atendió en Sevilla a 1247 menores, entre niñas y adolescentes, en situación de riesgo, por estar en contexto de prostitución o en si-tuación de desestructuración familiar y social. Posteriormente y durante cuatro años más acogió y acompañó a madres gestantes solteras.
Tras esta experiencia y el deseo de con-tinuar actualizando el carisma, la Con-gregación decide dar un nuevo giro en la Misión y trasladarse a vivir al Barrio Ala-meda-San Luis, comenzando a desarrollar
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un nuevo Proyecto Social de escucha a las mujeres que ejercían la prostitución en las calles y casas de cita de la citada zona.
El 25 de enero del año 2000, la peque-ña casa, a petición de las mujeres, dejó de ser vivienda de la comunidad, para con-vertirse en lugar de acogida, encuentro y formación, un espacio, en definitiva, de oportunidad y de alternativa a la situación de vulnerabilidad y precariedad en la que se encontraban muchas mujeres.
Seis años más tarde, ante la creciente demanda de formación y empleo digno, las Oblatas inauguraron el Centro de Día Al alba para atender a mujeres en situación de desigualdad social, desplegándose dife-rentes áreas de atención a nivel personal, social, educativo y laboral.
Desde entonces hasta el presente, este Centro desarrolla fundamentalmente su intervención en dos vertientes: Impulsar el empoderamiento, la autonomía y el empleo, y trabajar por la sensibilización y la transformación social, denunciando si-tuaciones de injusticia social que afecten a las mujeres.
En el área de intervención directa se escucha y acompaña a las mujeres en sus procesos de empoderamiento y en sus ca-minos para alcanzar sus sueños.
En el área de formación, se avanza en propuestas formativas que favorezcan el empleo, teniendo en cuenta los requisitos actuales para acceder a éste, fundamental-mente en el sector servicios.
En el Proyecto de Emprendimiento so-cial, se están dando pasos hacia la contra-tación de personal, la profesionalización y la buena calidad en la producción. Este Proyecto, con dos marcas registradas: Sumak Kausay y miTEA, se centra en el diseño y fabricación de productos artesa-nales, personalizados y de valor añadido, donde se unen la habilidad de las mujeres trabajadoras con las técnicas más avanza-das de sublimación, chapado, costura y bordado.
En el Recurso Residencial de Acogida Temporal Oblatas Híspalis, abierto des-de hace tres años, se acoge a mujeres en
situación de extrema vulnerabilidad por violencia de género y explotación sexual.
Y en el área de sensibilización social e incidencia política, se participa activa-mente en diferentes foros, redes, plata-formas, comisiones y mesas, a nivel local, autonómico, nacional y europeo, en pro de los derechos humanos de las mujeres.
Detrás del trabajo y esfuerzo constan-te, el compromiso social y solidario, la resiliencia y el empoderamiento, hay mu-chos nombres, entre ellos, el de esta Her-mandad, que da lo mejor de sí misma para hacer posible la vida.
Gracias al apoyo de la Hermandad po-demos seguir impulsando los valores de la dignidad humana, la justicia social, y la solidaridad como ideario de un Proyecto que espera acompañar y seguir ayudando a más mujeres en la ciudad de Sevilla.
Este año, la concesión de la Medalla de la Ciudad, otorgada por el Ayuntamiento de Sevilla, es un estímulo que nos hace sentir parte comprometida con el buen hacer, pero el mayor regalo es constatar que las mujeres creen en ellas mismas y son protagonistas de sus vidas. Un rega-lo abrazado por Quienes más nos aman: Jesús Nazareno y María Santísima de la Concepción. Ellos nos siguen sostenien-do e invitando a cuidar y alentar la vida con hilos de acogida, ternura, constancia y esperanza. ■
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Paula
Paula tiene siete años y es hermana. Ríe, habla fuerte, va y viene de
aquí para allá mientras sos-tiene en su pequeña mano el móvil de la madre. Algunos adultos que están cerca de nosotros la miran con cier-to desagrado, molestos por el alboroto. ¿Te gusta esta fotografía? Sí, Paula, te ha quedado muy chula, pero procura que la próxima vez le salga la cara entera al Señor. ¿A qué hora termina el Besa-piés? ¿Por qué están esos na-zarenos allá en lo alto? ¿Por dónde se sube ahí?
Los ojos de Paula, abier-tos de par en par, se beben el mundo. Están descubriendo un nuevo universo, una nue-va galaxia. Indiscriminada-mente van y vienen –como ella misma por la iglesia– sin sucesión de continuidad. Desde el farol de plata a los bancos. Desde el pan de oro del altar a las potencias de Jesús Nazareno. Desde el mo-rado de los lirios a su mano abrazando la cruz. Paula, in-tenta fotografiar la cara del Señor. ¿Esta te gusta? ¿Por qué tiene tanta sangre? ¿Por qué la cruz no es de made-ra? ¿Por qué llora la Virgen? ¿Quién está a su lado? Al-guien a nuestro alrededor sisea pidiendo un poco de silencio.
La tarde de marzo se des-vanece aletargada entre pre-guntas. Fuera, la lluvia arre-cia. Dentro, Paula sigue a lo
suyo y ahora enfoca con el móvil el altar, mira por la pantalla y aprieta con su dedo el botón. Click. Ya está. ¿Te gusta esta? ¿Cuándo viene el cura? A las siete, Paula. A las siete viene y empezará la misa. Pues voy a ir a decirle a mi padre que nos quedamos, ¿vale?... pero, ¿puedo ver los nazarenos desde cerca? Claro que sí. Son de madera. Vamos al coro, ¿quieres? ¿Y quié-nes son? Son hermanos antiguos, Paula. Fueron im-portantes hace muchos siglos, antes de que ni tú ni yo naciéramos. A lo mejor, cuando crezcas y seas tan importante como ellos lo fueron, le ponen a una de estas tablas tu cara, ¿te imaginas? Bueno, de acuerdo, pero que no me pongan bigote, ¿vale? ¡Vaya!, al móvil de mamá se le ha agotado la batería. Vamos a bajar para que lo conecte.
La lluvia ha cesado hace un rato. Los minutos caen desde la espadaña. Acaban de dar las seis. Paula, nos vamos. Ha hablado su padre y Paula me mira un tanto
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entristecida. Adiós. Mañana vengo de nuevo, ¿vale? Sí, Paula, pero no olvides man-darme las fotos que has he-cho. Quiero publicarlas en el boletín. Su pequeña mano agita el aire despidiéndose mientras esboza –ahora sí– algo parecido a una sonrisa debajo de la mascarilla.
Me quedo solo ante el im-ponente Nazareno. Observo su rostro ennegrecido emer-giendo entre la niebla densa del incienso. Una silenciosa voz resbala desde el tornasol del púlpito cayendo estrepi-tosamente sobre el mármol de la iglesia. Dejad que los niños se acerquen a mí. De-teniendo la mirada sobre los ojos del Señor reconozco en ellos un certero relámpago, un extraño escalofrío con lejano aire de familia, un re-moto brillo de eterno agrade-cimiento. Sabed que todo lo que hagáis a uno de estos pe-
queños también lo estáis haciendo conmigo. De golpe han caído sobre mí más de veinte siglos de complicada Teología y recuerdo aquellas catequesis de mi infancia. Solo entrarán en el Reino de los Cielos aquellos limpios de corazón que retengan en sus ojos el brillo de la mira-da de los niños. La misma mirada de Paula.
Alguien sisea a mis espaldas. Silencio. Lo miro y sonrío. Y Jesús me sonríe a mí desde lo alto de su dora-da peana. ■
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Soledad Gómez
Y le llevé tus ojos
Muchas veces en nuestras vidas no nos damos cuenta de que los hombres somos unas marionetas en manos de
Dios. Tampoco parecemos tener presente que exista la ¿causalidad? o la ¿casualidad? Solo Dios sabe el motivo por el que un hombre sevi-llano –añorante de su ciudad y nacido al lado de la muralla, de alma y botonadura morada y dotado con un corazón muy creyente– le dijo desde México un día de pandemia a esta fotó-grafa, al yo comentarle que iba a fotografiar al Dulcísimo Nazareno: “Voy cada Domingo de Ramos a contemplarlo y no le he podido ver bien los ojos”. Yo, que iba a tener el privilegio de fotografiar a Jesús Nazareno, de sumergir-me en esa mirada introspectiva, cargada de dolor y de sufrimiento psicológico, le contesté simplemente: “David, si puedo, le fotografío los ojos y te los mando”. Su respuesta entu-siasta: “¡Sííí, por favor!, si puedes…”.
Imaginaos lo que es llegar a San Antonio Abad con una idea fija en la cabeza y mil dudas rondando alrededor: ¿cómo fotografío sus ojos si solo tengo un 300 mm.?… Por mucho que me acerque… Inicié mi pequeño ritual. Prime-ro, montar el trípode y medir la luz. Después, rezar, cerrar los ojos y pedir permiso: “Señor, ¿puedo fotografiarte?”. Mi paz dura solo unos segundos. Abro los ojos y ya es escudriñar án-gulos, rasgos, detalles…. Una mano consola-dora con un pañuelo. Una grieta en una boca reseca y rota… Y los ojos de mi Señor, el Dul-císimo Nazareno. “No estás lo suficientemente cerca de Mí, Soledad. Acércate, Soledad, y llé-vaselos lejos. Que no te importe el océano. Yo te ayudaré, pero acércate Soledad”.
¿Cómo, en estos tiempos de pandemia –con distancias, con mascarillas, con espa-cios acotados–, iba a poder acercarme hasta tener la distancia suficiente para cumplir con este encargo? Confié y me atreví a abordar a un miembro de la Junta de Gobierno y le ex-pliqué con cuatro frases atropelladas que te-nía que fotografiar los ojos del Nazareno, que era un encargo para alguien lejano; que ya le explicaría. “La sacristía”, me contestó.
Me vi poniendo las patas del trípode –mis particulares zancos– bajo los ojos dulces y
misericordiosos de Jesús. Otra vez cerré los ojos y otra vez pedí permiso: “¿Me dejas?”. Me acerqué, miré por el visor…. y allí estaban esos ojos, ojos del Hijo de Dios, invitándome a ha-cer un leve click en el disparador. No disparé. Volví a mirarlo… Si pudiera congelar lo que veía en ese momento… Una pantallita de unos 4 centímetros enmarcando la grandiosidad de los ojos del Hijo de Dios. Me retiré, cerré los ojos y disparé.
Luego, me acerqué a ver si, en esa panta-llita…. ¡Síííí, allí estaban!: ojos de la Misericor-dia. Me sentí muy feliz. Lo miré ya a los ojos, sin cámara. Le sonreí y le finalmente me dirigí a Él: “Gracias, Señor, porque, entre los cirios morados de nuestros pecados que te rodean, me has dejado un huequecito para acercarme, fotografiar tus ojos y llevarlos hasta México, a fin de que mi amigo y hermano David no ten-ga que esperar a otro Domingo de Ramos para contemplarlos. Le has salido al encuentro, como siempre haces”.
Una vez en casa, le envié la foto a David y lloró al ver tus ojos. Estuvimos hablando de ti un rato más. Promesa cumplida. Tú sabrás por qué. David, sin yo saberlo, se sometió a una intervención quirúrgica unos pocos días des-pués. Seguro que tuvo presente tus ojos, Se-ñor. Salió bien y está deseando oler el incienso en el que vas envuelto cada Madrugada.
Como contraprestación, esta fotógrafa tuvo la enorme dicha y el privilegio de verte cerqui-ta, de mirarte y de mirarme dentro. Cuando vuelvas a caminar por Sevilla, te buscaré los ojos, aunque ya de otra manera. Será una mi-rada compartida. No puedo olvidar la alegría de que una vez fueron solo para mi alma.
Gracias por la paz que me diste, gracias porque la promesa fue cumplida y le llevé a David tus ojos, gracias… y a tu servicio siem-pre, Dulcísimo Nazareno. Por último, solo me resta agradecerle a la Junta de Gobierno las facilidades que me dan siempre para realizar mi trabajo dentro de San Antonio Abad y la oportunidad de poder compartir esta viven-cia interior con todos los Primitivos Nazare-nos de Sevilla. Él os lo recompense también, hermanos. ■
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César Hornero Méndez
(A propósito de Los doce grados del silencio, de María Amada de Jesús, José J. de Olañeta ed., Palma de Mallorca, 2020)
“Esta palabra: silencio… ¡qué bonita es!”
De este modo –que puede parecer un tanto naif– concluye la escue-ta introducción con la que María
Amada de Jesús, una monja carmelita francesa del siglo XIX, inicia su breve texto Los doces grados del silencio, una pequeña joya publicada en 2020 por José J. de Olañeta, editor, en su conocida co-lección “Los pequeños libros de la sabi-duría”. Su autora, desde su propia viven-cia y su experiencia, presenta el silencio como el mejor modo para encontrarse con Dios. El texto, que tiene mucho de testimonio personal, aunque esto no se explicite en ningún momento, es muy breve, de apenas unas páginas, y cons-tituye, como decimos, una pequeña joya, un autentico regalo para quienes lo lean
y lo mediten, ofrecido por una persona sencilla, que comprendió que el silencio era el mejor instrumento para aproximar-se a Dios y vivir unido a Él. Es, en defini-tiva, una suerte de prontuario, construido de modo gradual y progresivo para mos-trar la eficacia del silencio como herra-mienta preciosa para el cristiano.
Este texto nace sin duda, como se apun-taba, de la propia experiencia de la auto-ra, Dorothée Quoniam, que en la orden del Carmelo adoptará el nombre de María Amada de Jesús. De ello, de ese origen en la vida de su autora, se da cumplida cuen-ta en la excelente introducción de Edith Stein –la conocida discípula de Husserl, convertida al cristianismo y ella misma monja carmelita, fallecida en el campo de concentración de Auschtwitz en 1942– que se incluye oportunamente en el volumen. Stein relata muy bien la breve y dura peri-pecia vital de María Amada de Jesús, que morirá con treinta y cinco años (nace en Rozel, Normandía, en 1839, y fallece en París, en 1874), tiempo suficiente, sin em-bargo, para conocer una pobreza extrema, unas duras condiciones de vida, que in-cluirán el fallecimiento temprano y sucesi-vo de sus padres y de sus hermanos. Desde pequeña se apreciará en ella una especial sensibilidad religiosa, que anticipaba el casi misticismo que alcanzará en sus últi-mos años. Con una decidida vocación por ingresar en el Carmelo, surgida en sus años de infancia, no tendrá fácil pertenecer a la orden por diversas circunstancias (en-tre ellas su delicada salud), consiguiendo por fin convertirse en postulante en 1859. Como destaca Stein, en la pequeña biogra-fía que nos regala de la autora, la vida mo-nástica se correspondía a la perfección con las inclinaciones más profundas de Do-rothée, apareciendo desde el inicio de ésta su predilección por los momentos de sole-
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dad y silencio. Así, relata como una herma-na que la observó en una ocasión, sola en su celda, durante el momento de silencio del mediodía, con actitud de parecer estar escuchando algo, le preguntó más tarde que hacía en esa posición; su respuesta fue sencilla: estaba escuchando el silencio. De ahí surgió justamente este texto, Los doce grados del silencio, de su propósito de po-ner por escrito para esta hermana lo que éste le había revelado.
El resto de la existencia de María Ama-da de Jesús, después de profesar en 1861, estuvo consagrada a la vida monacal, en el Convento de la Avenida de Saxe en París, llegando a estar al frente de la formación de las novicias a partir de 1871, en sus últi-mos años. También hay que reseñar en ese periodo, como algo que acredita en ella, a pesar de su falta de formación académica, una cierta pulsión intelectual, que dedi-case varios años (y mucho esfuerzo) a re-batir –ese fue su propósito– la impactante entonces obra de Ernest Renan, Vida de Jesús, publicada en 1863. Como es sabido, en este libro, que tanta repercusión tuvo, se negaba la condición divina de Cristo, algo contra lo que se alzaron muchas vo-ces, entre ellas la de esta humilde carmeli-ta (en 1869, verá la luz su libro Jésus-Christ est le Fils de Dieu).
Con estos antecedentes, Los doces gra-dos del silencio es un texto, dentro de su sencillez, de una admirable profundidad. Mediante doce breves pasajes, la auto-ra trata de mostrar como el silencio es el mejor camino para la unión con Dios. Y lo hace, como ya se ha apuntado, de un modo progresivo, ubicando además su práctica, la del silencio, en la vida cotidiana. De ahí que los primeros grados resulten tan reco-nocibles y accesibles: “Hablar poco con las criaturas y mucho con Dios”, “Silencio en el trabajo, en los movimientos”, “Silencio de la imaginación”, “Silencio de la memo-ria” o “Silencio ante las criaturas”. Tras estos pasos, toca el turno del silencio que debe presidir la vida interior del sujeto: “Si-lencio del corazón”, “Silencio de la natura-leza, del amor propio”, “Silencio del espíri-tu”, “Silencio del juicio” y el “Silencio de la Ra
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voluntad”. Todo ello debe conducir, como conclusión, al “Silencio con uno mismo”, ese que considera como el más difícil y, sin embargo, esencial, señala, “para unirse con Dios con tanta perfección como pue-da una pobre criatura que, con la gracia, a menudo llega allí, pero se detiene en ese nivel, al no comprenderlo, y al practicarlo aun menos”. Este silencio, que no duda en describir como “el silencio de la nada” y que considera más heroico que el silencio de la muerte, es el que hace posible el de-finitivo duodécimo grado: el “Silencio con Dios”. Este se presenta como ese estado al que debe aspirar todo cristiano, en tanto que supone la unión del alma con Dios, tanto como adherirse a éste, es decir, como describe finalmente, tanto como “exponer-se ante Él, ofrecerse a Él, ignorarse ante Él, adorarlo, amarlo, escucharlo, oírlo, des-cansar en Él”.
Quienes entiendan, como sucede en nuestra Archicofradía desde hace siglos, que la práctica del silencio, en medio del mundo, es necesaria para el cristiano, se reconocerán en este libro y encontrarán en él, lo más precioso que ofrece sin duda: un inmejorable modo de hacerlo efectivo en nuestra propia vida. ■
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Antonio Hernández Lázaro
Los dieguinos y el fuego purificador
San Diego de Alcalá, a quien está dedicada la fachada que la her-mandad del Silencio tiene en
la calle Alfonso XII, nació en el seno de una familia modesta en San Nico-lás del Puerto, localidad de la Sierra Norte de Sevilla, a finales del siglo XIV. Muy joven se hizo ermitaño en la capilla de San Nicolás de Bari, en su pueblo, y luego se hizo fraile fran-ciscano, viajando como misionero a Lanzarote, Fuerteventura y Sanlúcar de Barrameda, y como peregrino a Roma, para finalmente recluirse en el convento de Santa María de Jesús, en Alcalá de Henares, donde murió en 1463. Fue canonizado en 1588. Su figura aparece vinculada al fuego purificador, en su significación sim-bólica, seguramente desde antes de su canonización. Uno de los milagros que se le atribuyen es el de haber he-cho que un niño apareciera fuera de un horno encendido, en el que se ha-bía dormido.1
A san Diego, sin esperar a su ca-nonización, se le dedico en Sevilla el convento que la Orden de Frailes Me-nores Descalzos de San Francisco em-pezó a construir en 1580 con fondos del cabildo, en terrenos del concejo extramuros de la ciudad, en el área de Tablada. La iglesia se terminó en 1592. Era un sitio incómodo, a expensas de las riadas por su cercanía al Guadal-quivir, al Guadaira, al Tamarguillo y, sobre todo, al Tagarete. Ya avanzado el siglo XVIII, los frailes dieguinos, cansados de estos peligros, pidieron a Carlos III el traslado al antiguo no-viciado de San Luis de los Franceses, aprovechando que este lugar había
quedado vacío tras la expulsión de los jesuitas. En 1784, los frailes abandonaron San Diego y se instala-ron en San Luis. Esto supuso la progresiva decadencia del convento de San Diego, que fue entregado a un in-dustrial inglés para el curtido de pieles. Tras la riada de 1796, todos estos terrenos se vendieron al duque de Montpensier, y en 1892 María Luisa de Borbón los donó al ayuntamiento de la ciudad.
Hoy integran el parque que en su nombre rinde homenaje a María Luisa, estando ocupado el lugar del convento por el Casino de la Exposición, el teatro Lope de Vega, parte de la avenida de María Luisa y la glorieta de San Diego, que conserva el nombre del santo como una reliquia. En 1814, Pío VII restauró la Compañía de Jesús, por lo que, poco tiempo después, los dieguinos tuvieron que marcharse del noviciado de San Luis de los Franceses, pasando a residir provi-sionalmente en la casa del mayorazgo de los marque-ses de la Granja, en la calle Imperial, hasta que pu-dieron ubicarse, en 1819, en la iglesia de San Antonio Abad. La hermandad del Silencio tuvo que cederles el lugar por virtud de Real Orden de 21 de julio de 1817.2
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1.- Vid. epígrafe San Diego de Alcalá en https://www.elpandelospobres.com, consultada el 26-01-2021.2.- Matilde Fernández Rojas, Patrimonio artístico de los conventos masculinos desamortizados en Sevilla du-rante el siglo XIX. Trinitarios, franciscanos, mercedarios, cartujos, jerónimos, mínimos, clérigos menores, her-manos obregones y filipenses. Secretariado de Publicaciones de la Diputación de Sevilla, 2009, pp. 127-129.
Detalle del plano de Olavide, en el que se aprecia el convento de San Diego, en el centro, y un poco más arriba el quemadero, como un pequeño rectángulo blanco. El edificio que se aprecia abajo a la izquierda es la Fábrica de Tabacos, actual Universidad
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Ante el convento franciscano de San Diego hacían estación las horribles procesiones en las que los reos condenados a relajación por la Inquisición eran con-ducidos desde la plaza de San Francisco, donde te-nían lugar los autos de fe, hasta el quemadero, que tomó también el nombre de San Diego. Este patíbu-lo era una mesa cuadrada, cóncava en el centro, de piedra y ladrillo, con estatuas de cuatro profetas en las esquinas, de yeso, huecas, para el fuego lento de los impenitentes. En el camino, frailes franciscanos y dominicos, con gran perseverancia, conminaban a los reos a confesarse para evitar ser quemados vivos.3 En la Edad Moderna, la cristiandad estaba convenci-da de que el fuego inquisitorial era esencial para la victoria purificadora sobre el mal de la herejía, y en el tema de la Inquisición, a diferencia de lo que ocurría en relación con la Inmaculada Concepción, estaban muy unidas las dos órdenes mendicantes. En 1809, finalmente, el quemadero de San Diego fue derriba-do. Mucho duró. Sus cimientos están bajo la estatua del Cid.
La figura de san Diego siempre ha sido icono del fuego purificador. También se dedicó a este santo sevillano el quemadero de la capital de Nueva Espa-ña, la actual México D.F., situado, no casualmente, «cercano al Convento de San Diego, al sur de la Ala-
meda».4 Pero cabe también aquí, en relación con san Diego y el fuego, la referencia a una curiosa costumbre que subsiste desde el siglo XVII en la localidad mexicana de Nunkiní, de la que es patrón precisamente san Die-go de Alcalá. Se trata de la explosión ritual de U’Dzul-li’Kaak, el Caballero de Fuego, una práctica que renueva el agradecimiento al santo por el final de una epidemia de viruela atribuida a un castigo del cielo por haber tra-bajado los lugareños para los espa-ñoles.5 La explosión del Caballero de Fuego, vestido como un español, con la viruela significada en tres cuartos de kilo de pólvora, repartidos en la ca-beza, en el interior del tronco y en los genitales, recrea una victoria sobre la enfermedad, interpretada como triunfo del fuego sobre el mal. Es otra forma de entender, plasmar y esceni-ficar el fuego purificador. Tras la ex-plosión del muñeco, los lugareños se abalanzan sobre los restos para guar-darlos como reliquias. En realidad, en aquellas tierras del Nuevo Mundo, son paralelas y complementarias las dos figuras del Caballero de Fuego y del propio san Diego, que comparten atribuciones y características devo-cionales.6
Considerando la significación simbólica ígnea de la figura de san Diego, así como el hecho de que la Inquisición fuera un ámbito de con-cordia entre las dos órdenes mendi-cantes, no debe resultarnos ya tan sorprendente la presencia de la Cruz de Calatrava blanca y negra dominica junto a las Cinco Llagas franciscanas en la fachada de la iglesia del Silen-cio a la calle Alfonso XII. ■
3.- Vid epígrafe De la Inquisición sevillana en el siglo XVI en https://personal.us.es, consultada el 26-01-2021. Vid. art. La Santa Inquisición en Sevilla. Historia, organización y proceso, en https://arteyculturaenlabetica.com, consultada el 26-01-2021. Vid. art. de Lourdes Morales Farfán Sevilla (IX): siglo XVI, el Renacimiento en Sevilla (II) pub. el 15-07-2020 en https://www.unaventanadesdemadrid.com, consultada el 26-01-2021.4.- Vid art. de María Luisa Rodríguez-Sala, Cárcel del Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición, extraíble en pdf de www.archivos.juridicas.unam.mx, consultada el 24-01-2021.5.- Vid art. de Pedro Suárez Chi U-Dzuli Noh Ka’ak, en https://www.calkini.net, consultada el 24-01-2021.6.- Vid art. de David de Ángel García El santo patrono y el caballero de fuego: miradas etnográficas sobre dos entidades poderosas de Nunkiní, Campeche, pub.en http://www.scielo.org.mx, consultada el 24-01-2021.
Detalle de la fachada de la calle Alfonso XII de la iglesia de San Antonio Abad
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Pablo Colón Perales, Pbro.
Plegaria de la cera blanca
La Estación, así, la Estación,podría proponersecomo una perfecta metáfora de la vida. Es un itinerario personal y anónimo.Siendo pública su manifestación de Fepresentando a Jesús Nazareno a la ciudad.Tiene sus tiempos, como una peregrinación.
Como cuando te esperamos siempre,seguimos tu luz Inmaculada,Madre, detrás del Abrazoy pasamos de la clausura de San Antonio Abada la vorágine de la noche santa en la ciudad.
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Plata del Monumento Eucarístico y luz de tu palio. Camino confiado y silente. Como la palabra particular –en el silencio–que esa Noche tiene tu Hijo el Nazarenopara cada uno de nosotros.
Como ciertamente desamparadospodemos sentirnos en la viday acudimos al recuerdo del crepitarde la luz de la cera que no se apaga,entre nuestras manos.
Porque con tu caminar confiado, abriendo surcos de luz, nos enseñas a ser conducidos por Él. A dejarnos llevar por Él.Pareciera que cuando por fin irrumpes, rompimiento inmaculado de luz, nos dices a todos tus hermanos: “Haced lo que él os diga”.
En la vocación a cada uno de nosotros confiada. En nuestras travesías erradas y en nuestras búsquedas. Siempre bajo tu amparo. Como cuando arría tu luz. Una penúltima salve. Alguien al que te hemos confiado. Una personal acción de gracias.
Déjanos ser siempre acompañadospor la misma confianzacon la que despedimos el Abrazo de tu Hijo desde el atrio. Antes de salir a la vida y a la ciudad... Confortados como los discípulos de Emaús que han compartido mesa y ahora, sí, lo han reconocido.
Las tres palabras que edificaron tu seguimiento. Como las tres florecillas de azaharque pintadas enmarcan tu retablo cerámico,cuando no podíamos verte en aquellos días tan difíciles. Cree, confía, espera, hijo mío. ■
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Martín Carlos Palomo García
El retablo cerámico de Jesús Nazareno cumple 100 años
En el presente año 2021 se cumple el centenario de la ejecución del retablo de azulejos de Nuestro Pa-
dre Jesús Nazareno, que se descubrió en el lateral derecho de la puerta de la iglesia de San Antonio Abad, por donde efectúa su salida la cofradía. Original-mente, según consta en el Diccionario Histórico de las calles de Sevilla, desde su apertura en 1868 la calle se denomi-nó Riego, en 1935 General Riego y un año más tarde General Moscardó, hasta 1997 en que es rotulada como calle de “El Silencio”, en reconocimiento a la Hermandad.
Fue el cuarto retablo encargado por una hermandad de penitencia sevillana para la fachada de su templo de residen-cia, tras los del Gran Poder en San Loren-zo (1912), la Esperanza Macarena en San Gil (1914) y la Amargura (1918). Si bien 1921 es la fecha que aparece junto a la firma de la obra, que corresponde al ce-ramista José Macías y Macías (1879-1963), quien lo pintara en la prestigiosa fábrica
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1.- PALOMERO PÁRAMO, Jesús. Ciudad de Retablos, Sevilla, 1987, págs. 60-61. Datos extraídos del Archi-vo de la Hermandad.
Retablo cerámico de Jesús Nazareno, antes de ser desmontado en 1994, con el farol primitivo y el limosnero
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Detalle de la firma de Manuel y Rodríguez y Pérez de Tudela en la zona inferior del retablo de Ntro. P. Jesús Nazareno
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trianera de Manuel Rodríguez y Pérez de Tudela, su bendición no consta hasta el domingo 9 de marzo de1924 coincidiendo con el final de la novena del Señor, sien-do donado por doña Emilia Osborne, viu-da de Ybarra, que costeó las doscientas pesetas que importó, según factura de 22 de abril de 19211. No es de extrañar la de-mora de dos años desde que fuera termi-nado a su bendición, pues la colocación de este tipo de obras suele acarrear diver-sas gestiones y permisos.
Se cubrió por un original tejaroz de madera a dos aguas, rematado por una cruz de cerrajería artística, de cuyo ángu-lo superior pende un farol para la ilumi-nación nocturna del Señor. Dicho tejaroz fue diseñado y costeado por los artistas Joaquín Castilla y Cayetano González.
Sobre una peña, con sendas construc-ciones de la ciudad de Jerusalén al fondo y abundante celaje, aparece el Nazareno con túnica lisa y con la cruz a cuestas,
Antiguo limosnero, retirado en las obras de 1994
Primer plano del retablo de Ntro. P. Jesús Nazareno, tras su recolocación en 1994
arbórea y no la de carey, como la porta habitualmente en Semana Santa. En la Cuaresma de 2011 la imagen del Señor se dispuso en su altar con la cruz al igual que aparece en el retablo, citándose pe-riodísticamente la estampa como “El Cristo de los azulejos”.
El conjunto fue remozado durante las obras de reforma del templo llevadas a cabo por la Hermandad en 1994. Llegó a desmontarse completamente, así como el tejaroz, con la particularidad de que al montarlo se colocaron mal tres azule-jos de la túnica, a la vez que se retiró el limosnero en azulejos. También se susti-tuyó el farol antiguo por otro de moderna factura.
Finalmente debemos recordar cómo el espacio urbano de la calle El Silencio, cuyo foco devocional lo constituye la centenaria representación de Jesús Na-zareno en la fachada de la iglesia, ape-nas cuenta con 150 años, y fue realidad gracias a la magnificencia de la herma-na doña Gertrudis Zuazo, que impidió el derribo del templo en 1868 por la Junta Revolucionaria a cambio de ceder parte del antiguo claustro conventual para la apertura de la calle donde inicia y culmi-na su ejemplar estación de penitencia la Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla. ■
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La Cruz que veis a mi lado–la que abrazo con dulzura–hunde su huella en la oscurasombra de un tiempo pasado.¿Tiempo perdido o ganadoen los relojes de arena?Vuelvo a la noche serenade mi antigua penitencia:¡Bendita sea la herenciade mi estirpe nazarena!
Rafael Roblas Caride
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Rafael Ruibérriz de Torres Fernández
La novena saetilla de El Silencio y el origen de lo que hoy llamamos música de capilla
Las capillas musica-les eran conjuntos musicales que, ya
desde la Edad Media, adscritos a catedrales y otras instituciones reli-giosas, se encargaban de poner música en la li-turgia. Incluso, las casas señoriales más notorias disponían de su propia capilla musical. En un primer momento estaban formadas sólo por canto-res, pero poco a poco se fueron adhiriendo instru-mentos, siendo el prime-ro de ellos el órgano.
La literatura para ór-gano nos ha legado in-finidad de ejemplos de versillos escritos desde finales de la Edad Me-dia. Los versos o versillos son breves piezas, a ve-ces agrupadas en series (juegos de versos), que los organistas utilizaban para reemplazar al coro en el canto de versos y versículos de salmos y otros cantos litúrgicos.
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Por ejemplo, si el coro cantaba los versos impares de un salmo, el organista interpretaba estas piezas en el turno de los versos pares, empleando la práctica alternatim. En un mismo canto, los versos del organista debían ser interpretados siempre en un mismo tono para ayudar al coro a mantener siempre el tono correcto. Esta práctica no sólo propiciaba variedad tímbrica, sino que además evitaba el cansancio de los cantores en piezas que, por lo general, eran muy largas.
La aparición desde mediados del siglo XVI de los ins-trumentos de viento (chirimías, bajones, sacabuches, cornetos, etc.) en las capillas musicales de las catedrales, en su conjunto llamados grupo o copla de ministriles, tra-jo consigo la aparición de los nuevos versos instrumen-tales. Como los instrumentos de viento se pueden tocar fácilmente mientras se camina, los ministriles, además de tocar durante la liturgia interna y en los desplaza-mientos de los caperos (autoridades religiosas), también solemnizaban las procesiones que se celebraban fuera de los templos. El cometido principal de los ministriles en las procesiones era precisamente la interpretación de versos instrumentales durante el trascurso de la comiti-va, como sucedía con los versillos organísticos, siempre en un mismo tono salmódico y en alternatim con el coro, ya fuese de canto gregoriano o de polifonía.
En el Quinientos, la Semana Santa se caracterizó por su sencillez y austeridad, y prueba de ello es que en 1567 los sacerdotes del Asilo de San Pedro, «con su música formada de cantores», entonaron salmos penitenciales delante de las andas de las imágenes de Nuestra Señora y San Juan Evangelista de la Hermandad de El Silencio, mientras los nazarenos iban «cantando en tono bajo los
Rafael Ruibérriz de Torres (www.rafaelruiberrizdetorres.com) se inició en la música como “niño seise” de la Catedral de Sevilla. Es flautista en la Orquesta Barro-ca de Sevilla y gestor cultural en la Asociación de Amigos de la misma orquesta. Fue director de la Banda de Música Nuestra Señora del Sol de 2010 a 2016 y forma parte, junto a sus primos, de la Capilla Musical San Telmo (www.capillamusicalsantelmo.com), que este año cumple veinte años de existencia.
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salmos». Por el contrario, durante el siglo XVII y hasta mediados del XVIII las cofradías, influenciadas por la gran revolución artística de los grandes excesos decora-tivos, tendieron a la búsqueda del esplendor y al carác-ter festivo en su forma externa. En este periodo barroco, sin embargo, las capillas musicales y sus ministriles (por lo general chirimías y bajones) siguieron manteniendo las estructuras formales del siglo anterior, si bien sus repertorios de breves versos, como se observa en los tan-tísimos conservados para órgano de Cabanilles, Elías o Nebra, sí fueron adaptándose a los nuevos lenguajes es-tilísticos.
En este contexto, podemos imaginarnos a los cantores e instrumentistas de la capilla musical de la Parroquia de San Miguel de Sevilla empleando la práctica alternatim en el canto de los salmos en sus salidas procesionales de 1720 que hicieron, según sabemos por Francisco Sen-ra, con las hermandades de El Silencio (actualmente La Amargura), El Traspaso, El Rosario, San Isidro o la En-carnación de Triana.
Nueve años más tarde, en 1729, el oboe accede a la nómina de la capilla musical de la catedral hispalense y convivirá durante algunos años con su antecesora, la chirimía. El fagot, por su parte, lo hará en 1766, coexis-
tiendo del mismo modo con su antecesor el bajón hasta mediados del siglo XIX. Las investigaciones del musicólogo Héctor Eu-logio Santos corroboran que, hasta bien entrado el siglo XIX, los ministriles seguían interpretando en alternatim breves piezas o versos, a veces denomina-dos canciones o marchas, y que los instrumentos que los interpretaban po-dían ser cualquiera de los que integraban la sección de viento de la capilla musical. Del siglo XVI, en Zaragoza, se encuentran ejemplos de composicio-nes para chirimías y, de 1751, en Palencia, existe un interesante juego de piezas para dos oboes y
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baxo (bajón o fagot) para las «funciones de Procesiones y de otros intermedios según costumbre antigua» escri-tos por Antonio Rodríguez de Hita. En diferentes institu-ciones religiosas catalanas también existen versos para cuatro chirimías; marchas para dos clarinetes, dos trom-pas, un clarín y un fagot; y dos tocatas para dos flautas y un fagot. Los versos instrumentales llegaron incluso a instituirse como una tradición local en Nueva España a finales del siglo XVIII, como afirma la musicóloga Jazmín Rincón, e incluso existen casos de versos que no son más que arreglos de piezas de grandes compositores como Haydn o Mozart.
Volviendo a la práctica musical en la archicofradía de El Silencio, sabemos por las investigaciones de Senra que, al menos desde 1779, la «Capilla Musical de la Igle-
sia Colegial del Salvador del Mundo de esta Ciudad» participó en sus cultos y estaciones de penitencia; que un tal Francisco de Paula Solís fue profesor de música, voz de contralto, oboe y violín de esta ca-pilla musical desde 1783; que éste emitió recibos a la Hermandad desde 1796 a 1808 por su participación, acompañado habitual-mente de otros dos músi-cos, en diferentes cultos; y que no sólo ingresó como hermano el 13 de marzo de 1800, sino que además ostentó el privilegio de no tener que pagar la cuota anual.
El único manuscrito anterior al siglo XX que recopila las ocho conocidí-simas canciones para dos oboes y bajo de la Herman-dad de El Silencio, agrupa y numera las piezas en dos juegos de cuatro canciones y señala en cada una de las partes instrumentales el apellido Solís. Con todo lo expuesto, es tan probable que Francisco de Paula So-lís sea el autor de las piezas como que el uso originario de estos dos juegos de can-ciones fuese el de alternar los versos de los salmos cantados durante la cofra-día, es decir, que se trate de versos instrumentales. Y es que, además, ambos juegos de canciones parece que siguen aquel principio de ayudar al coro a man-tener el tono, porque, per-mítame el lector que entre en tecnicismos, todas las canciones están en la me-nor y, para colmo, el hecho de que todas finalicen en So
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mi nos confirma que están escritas en el cuarto tono salmódico.
Desde el último tercio del siglo XVIII, y hasta la mitad del siglo XIX, las hermandades y cofradías de Sevilla fueron víctimas de una profunda crisis. Sin embargo, el hecho de que la Hermandad de El Silencio fuese la que más veces salió en procesión durante este periodo, re-fleja su arraigo y fortaleza. Aunque las capillas musi-cales también entraron en un periodo de decadencia motivado, en parte, por las desamortizaciones que se sucedieron desde co-mienzos del siglo XIX y, en parte, por la irrupción de las bandas de música en los cortejos procesiona-les de la Semana Santa, la Hermandad de El Silencio, probablemente influencia-da como todas por el cos-tumbrismo decimonónico, consciente de su paisaje sonoro y de su particular estética tan afín a la de las primeras cofradías del siglo XVI, se mantuvo fir-me en el acompañamiento musical de los, aún deno-minados en algunas insti-tuciones religiosas, minis-triles, donde el clarinete ya tenía espacio propio. Algunas reseñas manus-critas en las partituras conservadas manifiestan el valor que la herman-dad daba a sus canciones y el importante papel que jugaba la música en su es-tética. En 1865 se entrega una “copia de seguridad” del juego de piezas indi-cando que «se toca en la
Cofradía desde tiempo inmemorial» y en 1869 se entrega otra «por si se pierde».
Nos encontramos en pleno Romanticismo, y a partir de la segunda mitad del siglo XIX, favorecida en parte por el gran impulso de los Montpensier, comenzará una nueva etapa de auge para las hermandades, que conver-tirán sus salidas procesionales en una puesta en escena cargada de estampas pintorescas. Stephen Bonsal, co-rresponsal de la revista norteamericana The Century Ma-gazine, destacó en 1898 el importante papel que jugaba la música en la cofradía de El Silencio y, en particular, la primera canción envuelta ya en una leyenda: «Una extra-ña y monótona música medieval llena el aire con un soni-do pintoresco, aunque no carente de armonía. Se trata de una marcha fúnebre que fue compuesta para esta cofra-día hace cuatrocientos años. Además, no puede desfilar al ritmo de ninguna otra más que de esta extraña mezcla de música instrumental, en la cual prevalecen los hoy en día poco comunes sonidos del fagot, el oboe y el clarine-te. La música de esta marcha es religiosamente conserva-da en la Iglesia de San Antonio Abad, donde el organista me contó, mientras yo me ocupaba en transcribirla, que él creía que databa del tiempo de las Cruzadas, aunque, desafortunadamente, esta opinión no estaba basada en datos históricos, sino que se trataba de una mera tradi-ción transmitida de un organista a otro».
De esta época, en la que, como hemos podido leer, el clarinete y el oboe ya venían sustituyéndose libremente, existe en el archivo de El Silencio gran cantidad de co-pias manuscritas de la primera de las canciones del pri-mer juego. No cabe duda de que estos versos o canciones ya habían dejado de estar al servicio, en alternatim, del canto de los salmos y que el primero de ellos acabó sien-do el único de los ocho que se interpretaba, convirtién-dose en sello y emblema de la Hermandad.
Inmersos ya en el fenómeno regeneracionista y en el regionalismo andaluz, esta pieza icónica se convertirá en el modelo clásico a seguir para recuperar con recreacio-nes pseudo-históricas el sonido antiguo de las ya extin-guidas capillas musicales y de ese modo irán aparecien-do en estos años piezas de Manuel Font Fernández de la Herranz o Vicente Gómez-Zarzuela Pérez. Así, muchas de las cofradías que se fundan o que vuelven a salir por esos años incorporarán esta estética neo intentando conser-var así una supuesta y ancestral tradición. Como apunta el historiador del arte Jesús Rojas-Marcos, esto dará pie a la creación de un género, el de la música de capilla, «que se ha reinventado a sí mismo, que ha sido aceptado y que es requerido porque ha logrado encontrar durante el siglo XX una significación y un significado». «Ha ad-quirido carta de naturaleza y, como tal, ha dado sentido
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a un colectivo social que lo ha aprehendido y lo ha trans-mitido generación tras generación».
No sabemos cuándo se produjo el hipérbaton que fosilizó la denominación de este nuevo género, música de capilla, que alteró el orden de las palabras que de-nominan al conjunto del que proviene la música que interpreta, capilla musical, pero sí sabemos que dos de sus grandes impulsores fueron los hermanos Antonio y Diego Pantión, ambos profesores del Conservatorio de Música y vinculados a la Hermandad de El Silencio. El primero, que afirmaba que El Silencio es la hermandad que «con cuatro notas nos hace ver nuestra Semana San-ta en su estado primitivo», compuso algunos de los más bellos ejemplos contemporáneos de este nuevo género. El segundo, líder de una capilla musical independiente que participaba con voces y orquesta en numerosos cul-tos de hermandades, recopiló y revisó los dos juegos de cuatro canciones de El Silencio, probablemente para que
las interpretara la sección de viento de su conjunto, numerándolas de la uno a la ocho y adjudicándoles el nombre de “saeta”, que ha perdurado hasta hoy día.
LA 9ª SAETILLA DE EL SILENCIO,
“LA NAPOLITANA”
En una visita que reali-cé hace ya muchos años al archivo de la Hermandad de El Silencio para analizar las fuentes de las hoy cono-cidas como “ocho saetillas del Silencio”, despertaron en mí un particular interés tres pequeñas partituras muy antiguas. Por sus ca-racterísticas, por su dura-ción y por su instrumenta-ción (dos partituras estaban escritas para sendos instru-mentos agudos y una para bajo) no cabía la menor duda de que se trataba de una pieza suelta para el gé-nero que tratamos, música de capilla, popularmente conocido también como “los pitos”. Están escritas sobre una partitura recicla-da (hay fragmentos de otra música vocal) y, tal y como sucede con las emblemáti-cas ocho canciones, las par-tes de oboe tienen un agu-jero en el centro del papel para colocarlo entre dos de los cuerpos del instrumento y poder leer la música cami-nando. Eso sí, a diferencia de las partituras de las ocho canciones, éstas muestran pocas señales de uso.
Este hallazgo podría ser considerado por muchos como una de esas sonadas recuperaciones históricas, sin embargo, la falta de
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atención que ha recibido esta desconocida pieza está más que justificada. La calidad de su contenido (no entramos a juzgar la inspiración del autor sino su conocimiento de la téc-nica en el arte de la compo-sición) es tan cuestionable como lo es tantísima músi-ca que ha quedado y que-dará relegada al olvido.
No cabe duda de que esta pieza, tal y como sigue ocurriendo en la música de la Semana Santa (nihil no-vum sub sole), fue elabora-da por un mero aficionado. No obstante, por tratarse de una simpática muestra -probablemente decimo-nónica- de un género tan particular, he tenido a bien divulgarla, por supuesto, recurriendo antes a aque-llo que el autor debió ha-ber hecho en su día (y de-berían hacer muchos): una corrección de la mano de un experto. No sólo por la cátedra de armonía que lo avala, sino también por su extensa y aclamada obra (parte de ella encargada por la propia Hermandad de El Silencio), he conta-do con el compositor Juan Antonio Pedrosa para la corrección y el enriqueci-miento de esta antigua y anónima “novena” saeti-lla -o verso, o canción, o marcha- que bien podría titularse (y esto es para los entendidos), dadas las cla-ras intenciones del autor, como “la napolitana”.
En la edición digital de este artículo pueden juz-gar por ustedes mismos el sonido original de esta saetilla y el arreglo elabo-
rado por Juan Antonio Pedrosa interpretados por la Capi-lla Musical San Telmo.
“LA AMERICANA”, ¿LA 10ª SAETILLA DE EL SILENCIO?
Stephen Bonsal, en su crónica Holy Week in Seville de 1898 para la revista norteamericana The Century Magazi-ne incluyó en el artículo las partituras de dos breves pie-zas que él mismo transcribió con la ayuda del organista de San Antonio Abad. Una de ellas se corresponde con la emblemática primera saetilla o canción de Francisco de Paula Solís, pero la otra, con aire de gavotte y, en mi opi-nión, de las más bellas, inspiradas y creativas que exis-ten de esté género, no se corresponde con ninguna de las otras. Si Bonsal también la transcribió, ¿no es más que probable que se interpretara por entonces en la cofradía de El Silencio? ■
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Boletín de La Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla, Archicofradía Pontificia y Real de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santa Cruz en Jerusalén y
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