Lema del curso 2013/14

Con frecuencia nuestra realidad es dura.

Incluso, muy dura.

Es necesario no quedarnos de brazos cruzados.

Podemos ser sillas…; ni sienten ni padecen…

O ser como esponjas, que se dejan penetrar por el agua que

tienen cerca.

Nada ni nadie debe alejarnos de nuestro mayor deseo.

Ser felices.

Ni debemos hacer que los otros no cumplan su deseo de ser

felices.

Muchas veces deseamos cambiar el mundo

(incluso el más cercano)

Y no podemos: no

tenemos poder

económico o político para

hacerlo.

Pero sí podemos cambiar

nuestro mundo más cercano.

Siendo ejemplos de esperanza.

De positividad.

Enseñando con nuestro ejemplo que otro mundo sí es posible.

Mirando al futuro con un

positivismo que sea

contagioso.

El Reino de los Cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su

campo. (Mt 13, 24)

Sembrar es un gesto sencillo,

minúsculo, cotidiano.

Es un gesto pequeño, como hacer cosas cotidianas que

conduzcan a…

más amabilidad a tu alrededor…

más sensibilidad a tu alrededor…

más respeto a tu alrededor…

más cariño a tu

alrededor…

más solidaridad a tu alrededor…

Pequeños gestos que dicen, aunque no lo parezca, que es posible hacer tu mundo cotidiano un poco mejor.

¿Qué puedes sembrar tú ahora mismo a tu alrededor?

Seguro que tienes amigos, una familia, un equipo deportivo,

unos vecinos, unos compañeros.

Y seguro que hoy puedes hacer algo MUY CONCRETO por ellos,

para hacerles hoy la vida un poco mejor.

Puede ser un mensaje, un gesto, una palabra…

Fíjate y piensa qué puede necesitar esa persona que

tienes al lado…

S. Marcelino Champagnat (1789- 1840) también fue

un sembrador.

Tuvo un sueño muy concreto: ayudar desde la escuela a los niños y niñas más pobres y

necesitados.

Era la Francia de finales del s. XVIII.

Hoy, la obra marista quiere ser un ejemplo de esperanza para

los más jóvenes.

Desde la solidaridad…

Desde sus escuelas, centros educativos y universidades.

Desde su ONG.

Hoy, pequeños gestos de esperanza que tú puedes

hacer…

Plantar un árbol.

Reciclar.

Ayudar. Sin esperar nada a cambio.

Acompañar a alguien.

Ser un buen amigo.

Disfrutar de la naturaleza.

Conocer a Jesús de Nazaret.

Ser solidario y ayudar a los que son más necesitados que tú.

Aprender a quererte y sacar lo mejor

de ti.

Ayudar a tu familia.